Es pertinente clarificar que toda estrategia de intervención terapéutica de la psicoterapia
existencial se entiende y se aplica de mejor forma si se le concibe a partir de la intencionalidad y sentido experiencial de la persona con la que se esta trabajando. De esta forma, toda estrategia se debe aplicar teniendo en cuenta y apuntando a la vivencia concreta y orientación de los deseos, la voluntad y las decesiones de la vida diaria (De Castro, 2013)
1. El deseo. Percatarse de los propios deseos, vivenciarlos y experimentarlos como
propios. Tomar conciencia de la propia realidad interna y externa para poder hacer “algo” al respecto, pero ahora en un nivel consciente, en una dirección autodirigida. 2. La voluntad. Integra e incorpora el deseo en un nivel superior de conciencia, donde la persona, al saberse y sentirse dueña de sus deseos, tiene la capacidad de apropiarse del rumbo o dirección de estos en la acción 3. Intencionalidad y sentido. La intencionalidad es la estructura que da sentido a la experiencia (May, 1990) la intencionalidad se debe entender y analizar desde la vivencia de los propios deseos y de la forma de utilizar la voluntad para relacionarse con dichos deseos. 4. La decisión y la responsabilidad. Implica que el ser humano afirma su centro de valores haciéndose responsable de las consecuencias de dicha decisión. Según May son la expresión de la conciencia en el ser humano que lucha por su integración y madurez.