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Interamericano de
Desarrollo
División de Educación
(SCL/EDU)
Marco Conceptual e
Indicadores
Eugenio Severin C.
Febrero / 2010
Tecnologías de La Información y La
Comunicación (TICs) en Educación
Eugenio Severin C.
Las “Notas técnicas” abarcan una amplia gama de prácticas óptimas, evaluaciones de proyectos, lecciones
aprendidas, estudios de caso, notas metodológicas y otros documentos de carácter técnico, que no son
documentos oficiales del Banco. La información y las opiniones que se presentan en estas publicaciones
son exclusivamente de los autores y no expresan ni implican el aval del Banco Interamericano de
Desarrollo, de su Directorio Ejecutivo ni de los países que representan.
Este documento puede reproducirse libremente a condición de que se indique que es una publicación del
Banco Interamericano de Desarrollo.
Tecnologías de La Información y La Comunicación (TICs) en Educación
Eugenio Severin C.
Banco Interamericano de Desarrollo
División de Educación
Resumen
Este trabajo es parte de la iniciativa que el BID está impulsando junto a otros
organismos internacionales para desarrollar un Marco e Indicadores comunes que apoye la
toma de decisiones en los países.
1
I. Introducción
Las mediciones disponibles hasta ahora, por lo tanto, no son concluyentes para
iluminar la toma de decisiones respecto de qué hacer y cómo hacerlo, en beneficio de la
mejora de la calidad educativa 1 . La falta de claridad respecto de este mapa de opciones y
de los ámbitos que se verán impactados por estas intervenciones es un obstáculo para el
desarrollo de proyectos exitosos de incorporación de TICs en el ámbito educativo.
Es muy probable que esta falta de instrumentos sea la consecuencia natural del
desarrollo incipiente de este proceso. Si consideramos que la computación personal tiene
una existencia de apenas unos 30 años, que los primeros computadores que llegaron a las
escuelas sólo lo hicieron hace unos 20 años (y destinados originalmente a fortalecer la
formación de programadores que alimentaran a la naciente industria), parece lógico que
aún tengamos muchas preguntas sin responder respecto de la forma en que las TICs
pueden producir su mejor aporte a la mejora de la calidad educativa.
1
El ejercicio para establecer un “mapa de conocimiento” desarrollado por el InfoDev del Banco Mundial (Michael
Trucano, 2005) mostró cómo, más allá de las grandes inversiones que se han hecho en muchos países para
introducir las TICs en los sistemas educativos, los datos que apoyen la convicción respecto de su papel para
mejorar la educación son limitados y debatibles.
2
acciones del pasado, ahora con apoyo de computadores y otros dispositivos tecnológicos. El
resultado predecible de ello es que el impacto en los resultados sea bastante limitado.
Al poner el centro en los aprendizajes, hay que considerar que los resultados esperados
pueden ser de distinto orden. Es necesario considerar en primer término:
• las mejoras en el compromiso e involucramiento de los estudiantes con el proceso de
aprendizaje, reflejado en su participación y permanencia en dicho proceso;
• los cambios en las prácticas de enseñanza y aprendizaje, de estudiantes, docentes,
escuelas y comunidades.
Dichos cambios y mejoras tienen una relación directa y necesaria para la producción de
impactos efectivos en el mejoramiento de:
• los aprendizajes cognitivos (curriculares);
• el desarrollo de competencias no-cognitivas o “competencias del siglo XXI”
incluyendo la adquisición de destrezas en el propio manejo de Tecnologías de la
Información y la Comunicación 2 .
El marco propuesto identifica cinco insumos (Inputs) que debieran ser considerados en un
sistema educativo o en cada proyecto específico , así como los procesos y productos en los
que se verá reflejada la intervención planificada por el proyecto y aquellos que, aún no
2
En el caso de estudiantes provenientes de familias de bajos ingresos, la flexibilidad de las escuelas es aún
menor; las escuelas más acomodadas atraen a los mejores maestros, relegando a los menos preparados a las
escuelas de zonas pobres y remotas. […] En consecuencia, estos sistemas perpetúan las inequidad social,
pierden a excelentes estudiantes víctimas del aburrimiento, aumentan el costo de la educación a través de las
altas tasas de abandono y repetición, y traspasan el costo de capacitar a sus graduados a los empleadores o a
otros sistemas.” (Wadi D. Haddad & Alexandra Drexler, 2002 )
3
formando parte directa de una intervención, pueden afectar o verse afectados por el
desarrollo del proyecto.
3
El World Summits on the Information Society (WSIS) concluye que “Se debe elaborar un plan realista de
evaluación de resultados y establecimiento de referencias (tanto cualitativas como cuantitativas) en el plano
internacional, a través de indicadores estadísticos comparables y resultados de investigación, para dar
seguimiento a la aplicación de los objetivos y metas del presente Plan de Acción, teniendo en cuenta las
circunstancias de cada país”(WSIS, 2005).
4
II. Marco Conceptual
El Marco Conceptual para el Diseño, Implementación Monitoreo y Evaluación de proyectos TICs en Educación es presentado en
la siguiente figura:
5
Como se muestra en la figura, el Marco considera los siguientes elementos:
• Los aprendizajes de los estudiantes, como objetivo final de cada intervención. Los
estudiantes deben ser considerados los beneficiarios directos y últimos de toda
iniciativa de uso de TICs en educación (TIC-EDU).
• Las Salidas (Resultados e Impactos) en los aprendizajes esperados de los
estudiantes y en las condiciones que lo permiten, como Salida del proyecto, medidos
en sentido amplio y a través de distintas variables integradas.
• Los Insumos, se refiere tanto a las líneas de acción que considera el proyecto.
• Los Procesos o Productos, que corresponden a los elementos que se verán
modificados por el proyecto y en los cuales debiera evidenciarse las consecuencias
de la intervención propuesta.
• Las Etapas de Desarrollo que la incorporación de las TICs en los procesos y sistemas
educativos presenta, lo que se relaciona con el tipo de insumos y procesos y se
manifiesta en los resultados e impactos que pueden esperarse.
• El Proceso de Seguimiento y Evaluación del proyecto, incluyendo las fuentes de datos
e información que serán consideradas.
Los aprendizajes de los estudiantes son el fin y propósito de la acción de los sistemas
educativos y han de serlo también en el caso de la incorporación de TICs en los procesos
educacionales.
En cada proyecto específico, los estudiantes son los beneficiarios directos y últimos, por
lo que los resultados esperados tienen que relacionarse con aquellos aprendizajes que el
proyecto se propone explícitamente impactar o aquellos que indirectamente serán
impactados por la acción del proyecto. El impacto del proyecto (positivo, nulo o negativo) y
su efectividad, dependerán de la evidencia de cambio que pueda mostrar en los
aprendizajes de los estudiantes y sus condiciones. La relación entre el impacto esperado y el
real, definirá el éxito de una iniciativa específica.
6
2. Salidas
Resultados
El uso de las TICs implica la expectativa razonable de que ellas permitirán una modificación
sustantiva de las prácticas de enseñanza por parte de los docentes, y de las prácticas de
aprendizaje de los estudiantes.
Las oportunidades de acceso y construcción del conocimiento que ofrecen las TICs
implican, para su aprovechamiento eficaz e integral, el desarrollo de nuevas prácticas de
gestión educativa, el despliegue de nuevas estrategias y metodologías pedagógicas. La
literatura documenta abundantemente que allí donde las tecnologías simplemente han sido
incorporadas como nuevas herramientas para hacer lo mismo de siempre, los impactos
educativos son escasos o nulos.
Parte de los componentes fundamentales de los procesos educativos tienen que ver con el
compromiso de los estudiantes. Su participación y permanencia en los procesos, aunque
parezca obvio decirlo, es condición necesaria para su éxito. Aún más, las motivaciones de
los estudiantes y su entusiasmo para ser parte de dichos procesos genera impactos
positivos, no sólo en los posibles resultados de aprendizaje y desarrollo de determinadas
competencias, sino en el clima de aprendizaje, en las expectativas de los actores y en los
resultados de promoción de los estudiantes de un nivel a otro.
7
aplicados, pueden dar información importante respecto del efecto alcanzado por los
proyectos TIC-EDU.
Impacto
El primer ámbito en donde deben buscarse impactos de los proyectos TIC-EDU, es en los
aprendizajes cognitivos, normalmente asociados a las materias o asignaturas en que se
subdividen los contenidos curriculares, o bien en metas de aprendizaje o competencias
esperadas.
Lo que resulta evidente es que la expectativa razonable de los países y las personas
es que la incorporación de las TICs, generalmente un proceso complejo y costoso, repercuta
en mejoras evidentes en lo que los estudiantes aprenden, y eso requiere ser corroborado
empíricamente.
Es bastante común señalar que el impacto de la introducción de las TICs en los procesos
educativos se da en el desarrollo de nuevas o mejores competencias y habilidades por parte
de los estudiantes. Dichas competencias han sido descritas como “habilidades de nivel
superior” o “competencias del s.XXI” por la importancia que tiene su desarrollo en el
contexto de desempeño de las personas en la sociedad del conocimiento.
4
Cf.: E-learning Nordic (2006), SITES (2006), ImpaCT2 (2002), OECD PISA (2003-2006), World Bank -
Colombia (2009).
8
La iniciativa más ambiciosa para definir estas competencias y proponer instrumentos para
medirlas, es la alianza de cinco prestigiosas universidades que ha sido respaldada por Cisco,
Intel y Microsoft: Transforming Education: Assessing and Teaching 21st Century Skills 5 .
Ellos ya han propuesto un Marco de Trabajo que define las competencias esperadas y están
terminando el desarrollo de instrumentos que permitan su medición.
A nivel de borrador, este grupo internacional ha propuesto un marco que incorpora las
siguientes 10 competencias agrupadas en cuatro categorías:
Ways of Thinking
• Creativity and innovation
• Critical thinking, problem solving, decision making
• Learning to learn, metacognition
Ways of Working
• Communication
• Collaboration (teamwork)
Tools for Working
• Information literacy (includes research on sources, evidence, biases, etc.)
• ICT literacy
Living in the World
• Citizenship – local and global
• Life and career
• Personal & social responsibility – including cultural awareness and competence 6
5
http://www.atc21s.org
6
Draft White Paper 1 Defining 21st century skills Marilyn Binkley, Ola Erstad, Joan Herman, Senta Raizen,
Martin Ripley with Mike Rumble, January 2010.
9
3. Etapas de Desarrollo
Es evidente que el tipo de proyectos a desarrollar o evaluar, así como los impactos esperables
de cada intervención, estarán fuertemente determinados por el grado de maduración respecto
del uso de TICs en el contexto educativo en el que dicho proyecto se aplicará7 .
De este modo, el análisis del conjunto de indicadores asociados a los dominios debe
permitir determinar el grado de maduración que el proyecto tiene (Irrupción, Aplicación,
Integración, Transformación) y por lo tanto, informar los impactos esperables para los
indicadores de resultados. Por ejemplo, se pueden describir genéricamente estas etapas
para cada dominio que considera el Marco Conceptual en los términos del cuadro 3:
7
“Los países que se presentan en las etapas iniciales de incorporación de las TIC a la educación tienen
necesidades de evaluación distintas de aquellos que ya cuentan con una larga tradición de uso. Por
ejemplo, en un comienzo es importante que los docentes y los alumnos tengan acceso a software y
hardware y que hayan adquirido competencias básicas en informática. En el caso de países en etapas más
avanzadas, otras consideraciones tales como la gestión de las innovaciones pedagógicas, cambios
curriculares y organizacionales en las escuelas, apoyo sostenible y la permanente capacitación del
personal cobran mayor importancia.” (“Manual para la Producción de Estadísticas sobre la Economía de la
Información”, UNCTAD, 2008)
10
Emergencia Aplicación Integración Transformación
Infraestructura PCs aislados para procesos Laboratorios de Redes de computadores en Diversas plataformas de
de administración, acceso computación, acceso a laboratorios y en las salas comunicación y aprendizaje
restringido de estudiantes y Internet banda ancha. de clases, uso con otros disponibles, servicios de
docentes a equipos. Profesor o administrativo dispositivos (cámaras, comunicación y colaboración
preparado para prestar escáneres, etc.). Acceso basados en la web, sistemas
apoyo técnico. permanente a equipos para autogestionados de
estudiantes y docentes. aprendizaje. Personal local
Redes inalámbricas. Personal altamente especializado
local especializado para para soporte y desarrollo de
soporte. soluciones.
Contenidos Currículo no considera Currículo considera el Currículo contempla uso de Currículo incorpora integral
explícitamente el uso de desarrollo básico de TICs de manera transversal. mente el uso de TICs como
TICs. Aplicaciones de competencias TICs. Portales Contenidos y aplicaciones estrategia de construcción
ofimática y juegos educativos con acceso a educativas enriquecidas y de conocimiento. Opciones
educativos. CDs o software recursos digitales que adaptadas a las prácticas avanzadas para el desarrollo
local con contenido apoyan el currículo. específicas. Aplicaciones de contenidos y la
educativo (enciclopedias). Servicios de correo básicas para la creación de colaboración entre diversos
Pedagogía centrada en el electrónico y búsquedas contenido y reconstrucción actores. Plataformas para la
docente. web disponibles. Pedagogía de objetos de enseñanza y experimentación y la
centrada en el docente. aprendizaje. Pedagogía publicación de rercursos.
centrada en los estudiantes, Pedagogía centrada en los
colaborativa. estudiantes: pensamiento
crítico, colaborativa,
experiencial.
Recursos Formación según intereses Formación general en TICs Formación inicial y en Redes de aprendizaje entre
Humanos individuales. No hay apoyo mediante programas de servicio asociada al currículo pares, sistema de formación
pedagógico para la capacitación para docentes y a usos educativos de TICs permanente
integración de TICs. en servicio. No hay apoyo en el aula. Formación de autogestionados. Redes de
pedagógico local para la personal local para el apoyo pares y colaboración en
integración de TICs. en la integración pedagógica línea.
de las TICs
Gestión Visión reactiva, basada en Visión pragmática basada en Visión holística que busca Visión proactiva de
intereses individuales. la adopción de nuevas integrar los procesos innovación, que busca
Gestión tradicional de la tecnologías. Gestión mediante la incorporación de generar desarrollos que
información con sistemas informática de algunos tecnologías. Sistema permitan nuevos y mejores
aislados. Participación de la sistemas, pero informáticos complejos e sistemas de información,
comunidad nula o dosconectados entre sí. interconectados para el registro y comunicación.
accidental. Involucramiento parcial y registro y la comunicación Comunidad activa en la
aislado de la comunidad crítica del sistema. búsqueda de soluciones y en
organizada. Incorporación regular de la la construcción colaborativa
comunidad en los procesos de conocimiento compartido.
formales y en las
comunicaciones.
Políticas Desarrollo casuístico y Desarrollo limitado de planes Desarrollo de políticas TICs Desarrollo de Planes y
experimental de iniciativas TICs, basados en decisiones amplias e integrales, que Políticas Educativas que
TICs aisladas. Sin políticas centralizadas y abracan el conjunto de consideran integralmente las
ni presupuestos asignados concentradas. Políticas dominios con niveles TICs entre sus estrategias y
en el largo plazo. No hay parciales y genéricas, que similares de profundidad, componentes, dejando
ajustes al marco legal ni se consideran algunos permitiendo algunos amplios espacios para su
consideran incentivos componentes y en diversos espacios flexibles para inclusión específica en
específicos. grados de profundidad. adaptaciones específicas contexto. Presupuestos de
Presupuestos de corto plazo según contexto. largo plazo inclusivos. Marco
(asociados a proyectos Presupuestos de mediano legal completamente
puntuales). Ajustes plazo garantizados. Ajustes ajustado a nuevos
genéricos e indirectos del legales que faciliten la requerimientos. Incentivos
marco legal incorporación de TICs y su asociados a los logros de
(telecomunicaciones y uso educativo. Sistemas de aprendizaje generales del
planes educativos). incentivos integrados a sistema.
Este cuadro opera en la práctica como una rúbrica para la lectura de los indicadores
presentes en un sistema o proyecto, lo que permite conocer la etapa de maduración o
desarrollo en que se encuentra.
11
La lectura de esta rúbrica, una vez aplicada a cada sistema o proyecto, podría aportar
criterios para la toma de decisiones respecto de los dominios en que se encuentran mayores
o menores avances, por lo tanto, del tipo de prioridades que podrían conducir el desarrollo
de nuevas acciones.
Involucramient Actitud pasiva de los Actitud pasiva de los Actitud activa de los Actitud proactiva y
o Estudiantes estudiantes respecto de estudiantes respecto de estudiantes respecto de autónoma respecto del
los aprendizajes. los aprendizajes. los aprendizajes. aprendizaje permanente a
Expectativas bajas o Expectativas moderadas Expectativas altas lo largo de toda la vida.
moderadas respecto del respecto del impacto de la respecto de sus Expectativas altas
impacto de los estudios en escuela en su vida futura, aprendizajes y sus logros respecto de su futuro y del
su vida futura. generan motivaciones por personales, aunque no papel que la educación
fuera de ella. explícitamente conectado tiene para ello.
con su experiencia escolar.
Resultados No hay Bajo impacto Mediano impacto Alto impacto
Aprendizaje
Hasta ahora, no pocas veces, se ha esperado que inversiones muy acotadas y parciales en
TICs, que implican cambios muy aislados de algunos insumos, puedan traducirse
rápidamente en resultados de aprendizaje o desarrollo de nuevas y mejores habilidades y
competencias en los estudiantes. La lectura de este marco nos permite reconocer que el
logro de impactos importantes es el resultado de un proceso de desarrollo que requiere
12
visión amplia, implementación integral y tiempo de maduración, para ir mostrando
verdadero impacto.
4. Insumos
Los dominios o tipos de insumo que, según nuestra propuesta, debieran considerar el diseño
y la evaluación de un proyecto son cinco:
4.1 Infraestructura:
a. Física: asociado a la provisión o disposición de infraestructura necesaria para
la habilitación del uso y acceso a las TICs: Conexión eléctrica, redes de
comunicaciones, salas, bibliotecas, mobiliario, etc.
b. Equipamiento: Corresponde al conjunto de dispositivos provistos, incluyendo
computadores, proyectores, impresoras, periféricos y accesorios, y las
condiciones asociadas a su adquisición y uso (garantía, soporte, niveles de
servicio, otros).
c. Conectividad: La importancia de Internet y del acceso a la red en condiciones
que permitan su uso en ambientes educativos, se ha transformado, y seguirá
crecientemente siendo un desafío de los proyectos TICs, por lo que debe
considerarse de manera especial. El ancho de banda, la estabilidad de la
conexión, las tecnologías que optimicen el tráfico y provean filtros que
protejan la privacidad y los contenidos a los que acceden los estudiantes, así
como la estructuración de redes locales sólidas, seguras y accesibles, son
parte de esta preocupación.
d. Soporte Técnico: la administración, mantención y reparación del equipamiento
dispuesto, así como las actividades destinadas a la resolución de problemas y
dudas técnicas por parte de los usuarios participantes del proyecto.
4.2 Contenidos
a. Currículo TICs: desarrollo curricular para la implementación y/o adaptación de
los contenidos acerca de las TICs y acerca de otras materias mediante el uso
transversal de las TICs.
b. Recursos Educativos Digitales: Material digital destinado a la enseñanza y
aprendizaje con uso de medios tecnológicos. Incluye software educativo,
recursos digitales, enciclopedias, manuales, textos escolares, libros, guías,
videos, imágenes, hipertextos, etc.
c. Plataformas de Distribución, Aplicaciones y Servicios: desarrollos o
incorporación de software o iniciativas de apoyo para el desempeño de los
13
procesos de enseñanza y aprendizaje, incluyendo aplicaciones de
productividad, simuladores, modeladores, etc. Incluye los mecanismos y
medios a través de los cuales serán distribuidos los contenidos digitales a los
distintos usuarios de los sistemas educativos, considerando diversos
contextos y los modelos posibles de uso.
4.4 Gestión
a. Administración: estructuras y estrategias para la gestión y administración de
los sistemas y de los proyectos en todos los niveles que se hayan considerado
(país, región, escuela, departamento), así como la relación con otros actores
institucionales relacionados con el proyecto (financistas, aliados estratégicos,
etc.)
b. Sistemas de Información: desarrollos destinados a apoyar la implementación
de sistemas de gestión e información educacional a nivel de escuela, región, o
país, así como aquellos que permitan dar seguimiento a los proyectos
educativos y sus actores, incluyendo la gestión curricular y pedagógica.
4.5 Políticas
a. Planificación: Prioridad de mediano y largo plazo del proyecto o del ámbito en
el contexto de otras iniciativas, planes, proyectos o acciones desarrolladas,
14
incluyendo la visibilidad o grado de identificación que tienen los líderes
educativos con el logro de sus objetivos.
b. Presupuesto: Presupuesto de largo plazo considerado para la continuidad
operativa y el desarrollo de iniciativas complementarias necesarias para el
logro de los impactos esperados.
c. Marco Legal: Acciones destinadas a ajustar y adecuar las normas disponibles
con el fin de impulsar y mejorar el impacto de la iniciativa y minimizar sus
riesgos. Incluye las medidas destinadas a mejorar la protección y seguridad
de los menores de edad, las regulaciones de las industrias asociadas, el
resguardo de los derechos de autor, etc.
d. Incentivos: Planes y Programas para destacar (positiva o negativamente)
compromiso y los resultados esperados en el proyecto por parte de sus
participantes.
5. Procesos y Productos
5.1 Infraestructura
a. Distribución y Especificaciones técnicas
Referencia específica de las características técnicas del equipamiento.
Condiciones y características de conectividad.
b. Proceso de Implementación
Logística, localización y distribución del equipamiento. Forma concreta en que el
equipamiento fue seleccionado, adquirido, distribuido e integrado en los espacios
previstos. Incluye la referencia a las inversiones realizadas y necesarias para su
éxito: salas, edificios, etc. También los calendarios y sistemas dispuestos para el
acceso de los usuarios a los equipos y las formas de su disponibilidad.
c. Mesa de Ayuda
Sistemas dispuestos para apoyar a los usuarios directos o indirectos en caso de
dificultades técnicas o pedagógicas. Presenta además las tasas de consulta, los
15
tiempos de respuesta, los mecanismos utilizados, las dificultades más
recurrentes, las respuestas mejor valoradas y otros indicadores que permitan
conocer del apoyo con que cuentan los usuarios.
5.2 Recursos
a. Desarrollo Curricular
Trabajo que se desarrolla para conectar el currículo o las metas de aprendizaje
con los objetivos asociados al uso de las TICs en la educación. Incluye la
incorporación de las TICs en el currículo en los diferentes niveles educativos, su
inclusión como destreza o contenido transversal o vertical, las metas de
aprendizaje propuestas específicamente en su manejo por parte de los actores.
b. Organización de los aprendizajes
Las formas en que se estructuran y organizan las actividades de aprendizaje
(didáctica), incluyendo la forma en que se desarrolla el currículo (aislado por áreas
temáticas o integradamente), la horas y la frecuencia de uso para las diferentes
áreas temáticas, la(s) aproximación(es) pedagógica(s) predominante(s) a nivel
institucional y las estrategias para la gestión del conocimiento.
c. Disponibilidad de los Recursos
La facilidad y oportunidad de acceso a los recursos educativos que tienen los
beneficiarios directos o indirectos, así como, cuando sea posible, da cuenta de su
pertinencia y calidad, respecto de los objetivos propuestos.
d. Acceso y Uso
Determinación de los tiempos, las formas y las conductas que los diferentes
actores que forman parte del grupo objetivo del proyecto (directa y/o
indirectamente) tienen en el acceso y en el uso general y educativo de los
equipos y recursos dispuestos.
16
c. Modelos en Uso Educativo
Características de la formación específica a la que acceden los actores
involucrados para sacar partido de las TICs en contextos educativos.
d. Sistemas de Apoyo Educativo
Mecanismos destinados a motivar, acompañar y respaldar el trabajo de los
actores involucrados en el proyecto, tales como tutorías o ayudantías para los
docentes, planes de soporte, personal o en línea, recursos de formación y
comunicación entre pares, guías para las familias, etc.
e. Inclusión de la comunidad
Presenta las acciones desplegadas para difundir e instalar la iniciativa en su
contexto de desarrollo, la inducción que se entrega a participantes directos o
indirectos y las acciones de comunicación con los involucrados que facilitan la
legitimación del proyecto. Describe la forma en que el proyecto considera o
impacta en el involucramiento de la comunidad para el logro de los objetivos
propuestos, en particular en relación a las familias de los estudiantes.
5.4 Gestión
a. Organización de las Escuelas
Presenta la forma en que se organiza la provisión educativa en la institución
escolar, las horas de dedicación de los docentes, los sistemas destinados a
ordenar y supervisar el funcionamiento en relación a la incorporación de TICs.
b. Modelos de Administración y Gestión
Da cuenta de los sistemas y mecanismos con que cuenta la escuela y/o el
sistema educativo, o que el proyecto impacta o modifica, y que permiten dar
conducción y seguimiento a las acciones contempladas para el cumplimiento de
los objetivos de aprendizaje propuestos. Su marco institucional.
c. Uso de los Sistemas
La facilidad y oportunidad de acceso a los sistemas de gestión o información que
tienen los beneficiarios directos o indirectos, así como, cuando sea posible, da
cuenta de su pertinencia y calidad, respecto de los objetivos de aprendizaje
propuestos.
5.5 Sustentabilidad
a. Planes Nacionales (sub-nacionales)
Presenta la existencia o no de Planes que sustenten y describan integralmente la
introducción de TICs en los sistemas educativos, las conecten entre sí y con el
17
con el resto de las metas y políticas educativas, así como con las estrategias de
desarrollo.
b. Asignación Presupuestaria
Describe las fuentes y los procedimientos por los cuales se han financiado las
operaciones propias del proyecto y también aquellas relacionadas con él. Da
cuenta de las dificultades en los procedimientos y proyecta las formas en que
debe desenvolverse financieramente el proyecto en el futuro. También los
ingresos y los gastos en los que incurre el proyecto, distinguiendo aquellos que
son recurrentes y que por tanto son condición para la sustentabilidad futura. Da
cuenta de los mecanismos utilizados para asegurar el financiamiento permanente
de la iniciativa en el largo plazo y para ejecutar el gasto, y la forma en que el
proyecto prevé solventarlos en el futuro. Incluye, por ejemplo, la evaluación de
costos totales de apropiamiento.
c. Prioridad y Visibilidad
Presenta la posición de las autoridades y responsables en torno al proyecto y sus
objetivos, la forma que en que estas se identifican con ellos, los promueven y los
visibilizan en su actuación pública.
d. Iniciativas Legales
Descripción de las normativas que regulan aspectos asociados a la
implementación del proyecto.
e. Programas de Incentivos
Presenta los programas o sistemas de incentivos asociados a los beneficiarios del
proyecto, en relación con el cumplimiento de los objetivos propuestos.
6. Evaluación
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podrá medir el avance de los sistemas o el impacto de las acciones del proyecto, una vez
que estas se vayan implementando.
La línea de Base debiera considerar, en el nivel de los sistemas, un conjunto amplio de
indicadores, que permita diagnosticar con la mayor precisión el estado de la
incorporación de las TICs en ellos.
A nivel de proyectos, se pueden seleccionar aquellos indicadores que afectan a los
objetivos explícitos del proyecto, incluyendo aquellos asociados a los aprendizajes de los
estudiantes. Igualmente es recomendable considerar, en la medida que sea posible, los
datos para todos los procesos, por cuanto esto permitirá encontrar potenciales impactos
no esperados.
A nivel de los proyectos, corresponde al diseño de los datos relevantes que permitirán que
en las etapas intermedias de implementación, sea posible evaluar progresos e informar a
los gestores de la situación de avance de los objetivos propuestos. Esto con el objeto de
posibilitar una acción temprana de corrección o aprendizaje, según sea necesario.
En esta línea, se debe considerar los impactos en todos los ámbitos, procesos y productos,
no sólo en aquellos en los que explícitamente el proyecto ha desarrollado acciones.
La evaluación es un proceso clave de todo proyecto, debe considerarse desde el inicio del
diseño como un componente fundamental y se debe procurar, siempre que sea posible,
que sea desarrollada por un ente externo a los ejecutores directos o indirectos del
proyecto, de manera de ganar en objetividad e imparcialidad. En la medida de lo posible,
19
es recomendable preferir métodos experimentales de evaluación que complementen las
otras fuentes de datos y den más solidez y confiabilidad a los resultados.
1. Presentación General
Para efectos de ordenar los indicadores, asociándolos a la propuesta del marco, hemos
considerado la necesidad de contar con Indicadores de Insumos y Procesos (Entrada), e
Indicadores de Resultados e impacto (Salida), según el tipo de dato que busca describir y su
ámbito de aplicación.
20
La propuesta metodológica para la aplicación de los indicadores en el contexto de este
marco conceptual y de sus indicadores asociados, está compuesta por los cinco momentos:
21
1.4 Seguimiento y Monitoreo
La propuesta metodológica es que para el nivel de sistemas, el levantamiento tenga
una periodicidad regular, adecuada a la disponibilidad de datos en cada nivel, lo que se
relacionará con el desarrollo específico para cada plan o proyecto, que considerará el
levantamiento de datos:
o Antes de iniciar el proyecto: construcción de la línea base
o Medición de medio-término: levantamiento intermedio, durante la aplicación
del proyecto. Permite conocer de impactos en el mediano plazo y tomar
medidas si así fuera necesario.
o Medición de fin de proyecto: levantamiento de información al terminar la
intervención. Permite cuantificar el cambio en los indicadores durante el
período de implementación del proyecto. En esta oportunidad se conoce el
estado de todos los indicadores de insumos, estos entregan información
tanto del impacto asociable al proyecto como de los cambios observados en
la situación global del sistema donde se llevó a cabo la intervención.
También se deben definir los indicadores de proceso que deberá reportar el proyecto. El
reporte de estos indicadores será de suma utilidad para el ejecutor, ya que le permitirá
llevar un control estrecho de la implementación del proyecto, hacer sugerencias y, de
ser necesario, proponer medidas remediales.
22
propuesta que aquí presentamos, se propone que en términos de Impacto, se considere
la forma en que los resultados del proyecto han permitido modificar los indicadores del
sistema en el que se inserta, y que fueron establecidos en la definición de los
indicadores generales y en la selección de los indicadores específicos, pertinentes a la
acción del proyecto.
2. Propuesta de Indicadores
Tal como indica la metodología sugerida en la sección anterior, en esta sección se presenta
una primera propuesta de indicadores para el diseño, implementación, seguimiento y
evaluación de impacto de un proyecto de TIC para educación. En coherencia con ello, los
indicadores se agrupan en dos secciones, donde la primera se refiere a los de insumos y
resultados y la segunda a los de procesos o plan para el gerenciamiento del proyecto.
8
En el Anexo 1 del presente documento se presentan cuadros que detallan los indicadores UNESCO que fueron
incorporados en el presente documento. En el Anexo 2 se describen los indicadores que han sido desarrollados
por el BID y que complementan los anteriores.
23
2.1 Indicadores de Insumos
24
Insumos Indicadores de Insumos Identificador
del Indicador
Proporción de colegios con conexión de banda ancha y ancho de
banda promedio, por área geográfica. I04
Contenidos
Curriculo y TICs Porcentaje de grados que imparten cursos de conocimientos
básicos de informática según se prescriben en el currículo (por ED11
naturaleza de la enseñanza, por tipo y por niveles CINE 1-3)
25
Insumos Indicadores de Insumos Identificador
del Indicador
Tasa promedio de clases que incorporan el uso de TICs como
instrumento de experimentación y construcción de contenidos, I13
respecto del total anual de clases.
Proporción de escuelas con innovaciones curriculares para el uso
de TICs con fines educativos I14
26
Insumos Indicadores de Insumos Identificador
del Indicador
Recursos Humanos
Formación Proporción media del currículum de la formación inicial de
Docente docentes dedicada a la adaptación curricular de las TIC I24
27
Insumos Indicadores de Insumos Identificador
del Indicador
Relación Coordinadores TIC en las escuelas y número de
escuelas que ofrecen enseñanza asistida por TIC (niveles CINE ED12
1-3)
Porcentaje de profesores que participan en redes de colaboración
para la implementación de TICs en la educación. I34
Gestión
Administración Porcentaje de escuelas con proyectos formales de incorporación
de TICs en los procesos educativos I35
Políticas
Planificación Existencia de un Plan Nacional para la incorporación y desarrollo
de las TICs en la educación I46
28
Insumos Indicadores de Insumos Identificador
del Indicador
Porcentaje del gasto gubernamental (corriente) total destinado al
gasto corriente en TIC en educación (niveles CINE 1-3, nivel 4 y ED21
niveles 5 y 6)
Porcentaje del gasto gubernamental (de capital) total destinado
al gasto de capital en TIC en educación (niveles CINE 1-3, nivel ED22
4 y niveles 5 y 6)
Gasto público (corriente) promedio en TIC en educación por
estudiante (niveles CINE 1-3, nivel 4 y niveles 5 y 6) ED55
Resultados
1. Cambios Prácticas Porcentaje de docentes certificados
en las prácticas pedagógicas que utilizan recursos TIC para enseñar
(por género y tipo de establecimiento) Encuesta ED40
(niveles CINE 1-3)
29
Impactos a medir Indicadores Instrumento Identificador
30
Impactos a medir Indicadores Instrumento Identificador
31
Impactos a medir Indicadores Instrumento Identificador
32
Impactos a medir Indicadores Instrumento Identificador
IV. Conclusiones
en el Banco Interamericano de Desarrollo, como la de otros expertos en la implementación de
proyectos TICs en Educación.
Tomando en cuenta que cada proyecto TIC en educación desarrolla diferentes líneas
de acción, el marco y el set de indicadores asociados tienen un carácter general, que
permita revisar la diversas variables disponibles, al modo de un mapa, para seleccionar
aquellas en las que el proyecto intervendrá directa o indirectamente y aquellas que podrían
afectar o verse afectadas por él.
Una buena evaluación permitirá comparar los resultados obtenidos por un proyecto
TICs en educación con otros proyectos, TICS o no, de manera de considerar la eficiencia en
la inversión realizada.
En todo caso, debe considerarse este documento como una primera versión de un
marco conceptual e indicadores, que debiera ir mejorando incrementalmente con su
aplicación en el desarrollo de nuevos proyectos, y actualizarse permanentemente, como
parte de su condición asociada a procesos y productos que por su esencia están en
constante y veloz cambio.
33
V. Referencias
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review of studies of ICT impact on schools in Europe, 2006.
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34
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WORLD BANK (2004). Monitoring and Evaluation: Some Tools, Methods and Approaches.
http://www.worldbank.org/oed/oed_approach.html.
35
VI. Anexos
Siguiendo la metodología propuesta por UNESCO, hemos desarrollado para cada indicador
propuesto una ficha en que se define el indicador, se explica su propósito, el método de
acopio, la fórmula de cálculo y las fuentes posibles de datos.
Dichos anexos pueden ser solicitados directamente a la División de Educación del Banco
Interamericano de Desarrollo.
36
R
EJE ESUM
CU EN
TIV
O
iii
Contenido
Prefacio
Lista de recuadros
Lista de gráficos
Lista de cuadros
Reconocimientos
4. Recableado institucional
Referencias
Índice
iv
¿Un mito o un sueño hecho
realidad?
“Si lo construyes, llegarán”
En la conocida novela Shoeless Joe (Kinsella, 1982) —basada en
la vida de Joe “Descalzo” Jackson y que sirvió de inspiración para
la película Campo de sueños— Roy, el protagonista, interpretado
por Kevin Costner, está obsesionado con una voz que le dice que
si construye un campo de béisbol en medio de un maizal en Iowa,
donde vive, vendrá su jugador favorito del más allá. Roy sigue
al pie de la letra lo que le dice la voz y finalmente el campo se
vuelve una especie de túnel del tiempo por el que llegan a jugar los
fantasmas de las grandes leyendas del béisbol norteamericano. En
cierto modo, la expansión de las tecnologías de la información y las
comunicaciones (TIC) es análoga al comportamiento del protagonista
de la novela de Kinsella1. En el caso de los países en desarrollo en
particular, implícitamente se ha considerado que a medida que
éstos vayan adoptando tales tecnologías, sus sociedades se verán
rápidamente recompensadas con una productividad más alta y un
mayor bienestar. Es en razón a esta lógica que las expectativas
puestas en estas nuevas tecnologías se han disparado. Las TIC
ofrecen alternativas nuevas e innovadoras a los países en desarrollo.
Para citar algunos ejemplos que son cada vez más comunes: en
Argentina, los habitantes de La Plata pueden participar directamente
1 Para efectos de este libro, se considera que las TIC constituyen la aplicación de
tecnologías tradicionales y modernas de comunicaciones y computación a la
creación, gestión y uso de la información. Esta definición abarca el equipo y los
servicios que facilitan la captura, procesamiento, despliegue y transmisión de
información por medios electrónicos, e incluye informática, Internet, servicios
de telecomunicaciones electrónicas y de visualización y otros servicios afines,
así como el equipo audiovisual que se emplea para ello.
1
en los proyectos públicos que emprende el gobierno local a través
de páginas web; en Perú, los campesinos pobres de Cajamarca
pueden emplear Internet para mejorar sus tratamientos médicos;
en Colombia, los trabajadores en las zonas cafeteras pueden recibir
y efectuar pagos electrónicos; en Paraguay se puede monitorear
fácilmente la transparencia de las elecciones nacionales por medio
de teléfonos celulares e Internet; en México, las empresas utilizan
herramientas informáticas para invitar a la gente a que recicle sus
desechos; en Bolivia se envía a las personas mensajes de texto para
recordarles que deben ahorrar; en Haití, tras el terremoto de 2010,
los equipos de rescate emplearon TIC en sus operaciones de socorro
y recuperación. Durante los últimos 20 años, la penetración de la
telefonía celular se ha expandido más rápidamente en los países en
desarrollo que en los países desarrollados, y a un ritmo vertiginoso.
Similarmente, las tasas de aumento de usuarios de Internet per
cápita también fueron más elevadas en los primeros. Mientras que
han tenido que transcurrir cerca de 100 años para que el servicio
telefónico alcance una masa crítica de usuarios en el mundo, y unos
50 años en el caso de la televisión, la telefonía celular e Internet han
logrado alcanzar una masa crítica en solo 15 años (Kenny, 2006).
Sin embargo, a pesar del acceso instantáneo a mercados
remotos, el empoderamiento político, el diagnóstico médico virtual
y otras mejoras, al día de hoy no es claro si las TIC han logrado
propiciar un verdadero desarrollo económico en América Latina
y en otras regiones. En gran mayoría, la evidencia existente está
basada en anécdotas que describen casos exitosos, pero que aportan
muy poca evidencia científica en cuanto al vínculo entre las TIC y
los supuestos aumentos de productividad y bienestar resultantes.
Si bien las evaluaciones de este vínculo son mínimas tanto a nivel
macroeconómico como microeconómico, en este último caso la
evidencia empírica es particularmente escasa2.
2
¿El genio de la lámpara de Aladino?
Existen buenas razones para esperar un desarrollo económico
significativo resultante del uso de las tecnologías de la información
y las comunicaciones. La manera más obvia en que estas
tecnologías pueden coadyuvar al logro de mejoras económicas es
incrementando la cantidad y calidad de la información disponible o,
más precisamente y en términos económicos, reduciendo problemas
de información asimétrica e imperfecta en los mercados. Esto puede
ser de utilidad en las tareas de búsqueda y coordinación, lo que a su
vez puede dotar a los mercados de mayor eficiencia. Los particulares
y las empresas pueden utilizar las TIC para buscar precios de
productos, conseguir empleo, encontrar compradores potenciales
de sus productos, prepararse para las inclemencias del clima y
los desastres naturales, conectarse con colegas y mantenerse en
contacto con amigos y familiares (Aker y Mbiti, 2010).
Más aún, aducen algunos, las tecnologías de la información
y las comunicaciones más recientes permiten que un país salte
etapas de desarrollo y que múltiples agentes transmitan y
compartan información de inmediato, sin que haya necesidad de
desplazamiento físico de datos o de las personas. En términos más
abstractos, las TIC permiten desacoplar la información de otros
factores que previamente estaban integrados (Evans y Wurster,
1997). A diferencia de las típicas innovaciones tecnológicas del
pasado, las TIC también incrementan el contenido de conocimiento
de los bienes y servicios e introduce, entre otras cosas, productos,
3
usos y medios de subsistencia previamente desconocidos (Torero
y von Braun, 2006). Como resultado de externalidades de redes,
las TIC tienen la capacidad de ayudar a crear sectores de actividad
totalmente nuevos y, de esa manera, generar empleos vinculados
directa e indirectamente a estas nuevas actividades. Por ejemplo,
en el sector de la telefonía móvil ha surgido una amplia variedad de
empresas y oportunidades de emprendimiento, muchas de ellas en el
sector informal. Varios de estos nuevos empleos están directamente
relacionados con la estrategia de incremento de la telefonía móvil
de las empresas. Muchas compañías de telefonía móvil, por ejemplo,
se han asociado con establecimientos formales e informales de
toda la región de América Latina y el Caribe para vender tarjetas
telefónicas prepagadas en pequeñas denominaciones (Aker y Mbiti,
2010). Por último, las TIC desempeñan una función en el desarrollo
de políticas públicas al ampliar la gama de posibilidades y las
maneras de ponerlas en práctica. Por ejemplo, las políticas de alivio
de la pobreza pueden focalizarse mucho mejor con herramientas de
TIC, produciendo así menos desperdicio, más eficiencia y mayores
rendimientos (véase el capítulo 8). Otro ejemplo que se puede
destacar es que a través de estas nuevas tecnologías se puede dotar
de mayor eficacia a las políticas públicas que se enfocan en la mujer.
Si bien las TIC parecen ser muy promisorias, pueden no ser
la panacea como los formuladores de política tienden a creer. En
primer lugar, es muy difícil prestar servicios en red en zonas con
baja densidad de población como son las zonas rurales y los pueblos
pequeños, que es donde vive una buena parte de la población
latinoamericana. Los problemas relacionados con el costo y la
complejidad del acceso físico a las TIC no son siquiera los obstáculos
más serios para su mayor utilización (Kenny, 2006). La falta de
capital humano es un problema tanto o más grave. El analfabetismo
también plantea un gran problema para las TIC, sobre todo en lo que
se refiere al uso de Internet.
Las barreras idiomáticas constituyen otro impedimento. Una
proporción muy amplia de la población de América Latina, y la
4
mayoría de los pobres, no saben leer en inglés, el idioma de
Internet3, ni mucho menos escribirlo. (Para muchos latinoamericanos
que viven en zonas rurales, la lengua materna es un idioma
minoritario como el quechua o el aymara, ni siquiera el español, el
portugués o el francés.)
Más aún, un gran porcentaje de la población de América
Latina y el Caribe apenas obtiene ingresos de subsistencia, por
lo que recurre menos a las transacciones de mercado; es dudoso
que para ellos las TIC sean particularmente útiles. Por último, las
barreras institucionales como son las leyes y reglamentos también
desempeñan un papel importante en el desarrollo de aplicaciones de
TIC en la región y son difíciles de ajustar.
Aunque es crítico tener en cuenta sus limitaciones, es
igualmente importante entender que aun en determinadas TIC
no todas las aplicaciones y tecnologías son iguales. Algunas han
demostrado ser más útiles que otras y han tenido un mayor impacto
en el corto plazo. Junto a las “viejas” TIC —como la radio y la
televisión—, las “nuevas” —como la telefonía móvil— han demostrado
ser valiosísimas para las sociedades de los países en desarrollo,
independientemente de su ámbito de aplicación.
3 El idioma de alrededor del 80% de los sitios Web del mundo es el inglés (Kenny,
2006).
5
Hay que tener todo en cuenta
En este libro se adopta una postura agnóstica sobre el posible
vínculo entre las TIC y su impacto económico, con énfasis en el
posible beneficio a individuos, y se enfoca en la aplicación de
métodos rigurosos de investigación para estudiar el tema. Al evaluar
sus efectos, tanto en América Latina y el Caribe como en otras
regiones, se tropieza con el problema crucial de la falta de datos
fiables que permitan aislar el papel específico que desempeña una
herramienta particular de las TIC. Aunque en los últimos años se han
hecho algunos avances en materia de recolección de datos, como
se ilustra en el capítulo 2, en general persiste este impedimento
fundamental. Si se quiere entender cabalmente qué pueden lograr las
TIC, no es posible basarse en casos aparentemente exitosos pero no
comprobados científicamente y que en ocasiones terminan por ser
no tan exitosos, porque resultan muy costosos o tienen aplicación
muy limitada (Kenny, 2006). De hecho, muchos proyectos que
incluyen componentes relacionados con las TIC han contado con el
apoyo amplio de organismos multilaterales, agencias bilaterales de
asistencia y organizaciones no gubernamentales (ONG), sin que en
realidad se haya hecho una evaluación rigurosa de sus repercusiones.
Una manera sencilla de ilustrar una evaluación adecuada del
extraordinario potencial que pueden tener las TIC como aporte
al desarrollo económico es comparando las nuevas herramientas
y aplicaciones con la primera tecnología de la información y las
comunicaciones del mundo: el servicio postal. Chong et al. (2010)
llevaron a cabo un ejercicio simple en el que enviaron desde Estados
Unidos 347 cartas a direcciones inexistentes en 107 países. A
continuación midieron el porcentaje de cartas devueltas dentro de
los 90 días de la fecha de envío y el tiempo que transcurrió para
que las cartas fueran devueltas al remitente (véanse los gráficos 1.1
y 1.2). Los autores determinaron que el índice de éxito de enviar
tres cartas a cualquier país de América Latina y el Caribe es más
6
GRÁFICO 1 Eficiencia del servicio postal: Porcentaje de cartas
devueltas dentro de los 90 días de la fecha de envío
Mejor posible
Argentina
Belice
Bolivia
Chile
Colombia
Costa Rica
Ecuador
El Salvador
México
Paraguay
Brasil
Cuba
Guatemala
Perú
Suriname
Uruguay
Rep. Dominicana
Venezuela
Honduras
Nicaragua
Panamá
0 50 100
Tasa de éxito
7
GRÁFICO 2 El caso de la TIC tradicional: Devolución al servicio
postal remitente (en días)
Venezuela 196
Bolivia 143
Brasil 127
Paraguay 96
Guatemala 78
Costa Rica 72
Cuba 72
Argentina 69
Suriname 69
Chile 62
Uruguay 57
Colombia 54
Perú 51
México 49
Rep. Dominicana 47
Belice 43
El Salvador 40
Ecuador 33
8
El segundo se refiere a los costos y beneficios de emplear la nueva
tecnología en comparación con la vieja. Por consiguiente, en este
sencillo ejemplo habría que considerar los costos fijos que supone
la instalación de la nueva tecnología y las redes conexas, así como
el costo de la entrega de correspondencia internacional de primera
clase, que es de US$0,98, en relación con el costo de la transmisión
electrónica de información, incluido el de mantenimiento. Existe
la imperiosa necesidad de realizar una evaluación adecuada que
permita determinar si se están aprovechando o derrochando los
recursos. En algunas ocasiones es difícil obtener este tipo de
información. En otras, los responsables por la toma de decisiones
depositan una fe ciega en la nueva tecnología y suponen que los
beneficios compensarán con creces los costos. Sin embargo, aun si
los beneficios superan los costos, puede que la tecnología no tenga
todos los efectos deseados.
El ejemplo sencillo que se describió más arriba ilustra
perfectamente lo que se trata de hacer en este libro. El objetivo es
evaluar el impacto de las TIC cuando se tienen en cuenta variables
significativas de los resultados en el contexto adecuado. Este
ejercicio aparentemente simple, no solo permite comprender mejor
el potencial de las nuevas herramientas de las TIC con respecto a
las viejas, sino que también ayuda a ilustrar el objetivo y el método
de los capítulos subsiguientes. En la próxima sección se describe el
enfoque metodológico básico de la presente publicación.
9
El costo de un poste de luz
Un conocido chiste en economía relata la historia de un borracho que
regresa a casa después de una noche de juerga. Cuando se da cuenta
de que se le perdieron las llaves se pone a gatear en el pavimento y
a tentar con las manos exactamente debajo de un poste de luz. Se
le acerca entonces un policía y le pregunta que qué está haciendo.
“Perdí mis llaves en la otra cuadra”, explica el borracho. “¿Y por qué
las está buscando debajo del poste?”, le pregunta el policía. Y el
borracho le responde: “Pues porque aquí hay luz”.
Este chiste ilustra la gran escasez de datos que aqueja a
la economía: son muchas las zonas oscuras donde la luz de la
investigación no alumbra. Y los datos son aún más escasos en el área
de economía del desarrollo. La falta de información adecuada para
comprender mejor los problemas básicos en economía del desarrollo
ha sido un problema recurrente durante varias décadas. En este
libro se busca evitar este problema al “instalar un nuevo poste de
luz”, basado en un amplio conjunto de experimentos de campo—en
realidad se trata de proyectos reales que se pusieron a prueba en
varios países de América Latina y el Caribe. Tales experimentos
son aleatorios, es decir, experimentos en los cuales se forman
grupos de tratamiento y de control en forma aleatoria. Esta forma de
asignación garantiza que, al igual que en los experimentos clínicos,
los grupos de tratamiento y de control tiendan a presentar idénticas
características (Bruhn y McKenzie, 2009). Este tipo de experimentos
se emplea cada vez con mayor frecuencia en la investigación
empírica formal de economía del desarrollo. Se trata de un enfoque
relativamente novedoso para la investigación empírica en ciencias
sociales que ayuda a arrojar luz sobre temas que previamente no se
examinaban porque no existían datos. Los experimentos aleatorios
controlados (EAC) facilitan a los investigadores descubrir datos
nuevos, y de esta manera ofrecen enfoques novedosos e innovadores
para estudiar una amplia gama de aplicaciones. En pocas palabras,
10
los investigadores pueden evitar hacer estudios empíricos solamente
allí donde haya luz. Ahora el problema radica en el costo del poste de
luz. Algunos sostienen que los experimentos aleatorios controlados
son muy costosos. Y lo son. Aun así, la cuestión no es cuánto cuesta
un experimento de campo sino —como se señaló previamente— cuál
es el rendimiento de la inversión. Desde esta óptica —que es la
correcta— no cabe duda que los experimentos de campo justifican
su valor. Después de todo, el sector privado los ha utilizado
ampliamente, y hoy quizás más que nunca.
11
De Red Lobster a los experimentos
de campo
No obstante sus bondades, se puede aducir que los experimentos
aleatorios tienen poco uso práctico en el mundo real. Sin embargo,
el sector privado ya los está empleando con mucha frecuencia y
con muy buenos resultados. Por ejemplo, en los últimos 20 años
Capital One se ha convertido en la emisora de tarjetas de crédito
más grande del mundo, en gran medida debido al intenso uso
de métodos experimentales (Pearlstein, 2010). La empresa ha
desarrollado un elaborado sistema con el fin de evaluar el impacto
de nuevos productos utilizando tácticas de mercadotecnia con el
fin de aumentar el número de clientes en los Estados Unidos. Otras
empresas que también utilizan evaluación experimental son Google,
e-Bay, y Amazon —que llevan a cabo con frecuencia experimentos
en tiempo real— y TD Bank de Canadá, empresa que se asegura que
toda iniciativa importante se evalúe experimentalmente.
Otras empresas utilizan programas informáticos especiales
para simular evaluaciones experimentales (Pearlstein, 2010).
Al aprovechar la riqueza de datos que ya existen en los sistemas
informáticos de una compañía, esos programas permiten poner a
prueba el impacto de un nuevo producto o de una nueva táctica
comparando los resultados con los de un grupo de control o
“placebo”. La popular cadena norteamericana de restaurantes
de mariscos Red Lobster, por ejemplo, empleó un programa
informático de evaluación experimental en tiempo real para poner
a prueba nueve planes de remodelación de sus establecimientos,
combinando opciones de bajo, medio y alto costo para el diseño
de interiores y exteriores. La combinación ganadora incrementó
las ventas en 8%, con una inversión en TIC por valor de US$200
millones. De manera similar, la empresa de alimentos Kraft puede
ahora predecir qué productos van a ser exitosos en qué mercados
12
y con qué consumidores, y desglosa la información por tamaño del
establecimiento, época del año y tipo de empaque y promoción.
Family Dollar Stores, famosa cadena de almacenes norteamericana
de venta al detal, realizó experimentos aleatorios antes de instalar
unidades de refrigeración en sus 6.800 tiendas, que hasta ese
momento solo habían vendido productos secos. Con base en una
pequeña prueba de solo algunas decenas de almacenes, la empresa
determinó que el impacto iba mucho más allá de lo que reportaban
las ganancias obtenidas mediante la venta de leche, huevos y pizzas
congeladas. En realidad el efecto más grande en las utilidades
provino del mayor volumen de ventas de sus productos secos
tradicionales (Pearlstein, 2010).
La razón por la cual al sector privado los experimentos de
campo le son tan atractivos es la misma razón que ha llevado a los
académicos y a los responsables por la formulación de políticas a
interesarse tanto en ellos. Estos experimentos —y en particular los
experimentos aleatorios controlados— permiten a los investigadores
detectar si el cambio en un parámetro afecta o no a una variable
de resultado. Es decir, pueden producir evidencias acerca de
la dirección de la causalidad entre dos variables. Aunque esto
suena sencillo, se ha convertido en un problema persistente en la
investigación empresarial y académica durante decenios, dado que
correlación no equivale a causalidad, y esta diferencia puede tener
implicaciones en materia de estrategias y políticas.
Otra razón por la cual los experimentos aleatorios controlados
se están convirtiendo en un método generalizado de conducción
de pruebas es que ayudan a identificar la variable específica
que puede haber producido el resultado particular que se está
investigando. Este tipo de experimentos ayuda a aislar un
resultado particular de los distintos factores que pudieron haberlo
causado. Por consiguiente, este método puede tener muchos
usos en aplicaciones pertinentes a las políticas. Por ejemplo,
en el ámbito de la educación, el método puede focalizarse para
13
comprender mejor programas como “Una computadora portátil
por estudiante”, y especialmente el efecto que tienen en las zonas
rurales y en los sectores pobres. Con respecto a la salud, pueden
realizarse evaluaciones pertinentes y serias del impacto del
diagnóstico electrónico, la educación en salud y las historias clínicas
electrónicas. En finanzas —un ámbito en el que se han aplicado los
experimentos aleatorios controlados de manera más generalizada—,
es posible someter a prueba los esfuerzos desplegados para emplear
mensajes de texto a fin de recordar a la población que debe ahorrar,
por ejemplo. En materia de medio ambiente, se pueden evaluar
campañas de reciclaje basadas en información obtenida por medio
de las TIC. En desarrollo institucional, se pueden poner a prueba
los pasos para monitorear una votación y determinar con mayor
precisión el papel que desempeña ese monitoreo en la defensa de la
democracia y en la reducción de la corrupción al mínimo.
14
¿Para qué molestarse con botes
salvavidas si no caben todos?
En este libro se adopta un enfoque microeconómico en torno a un
grupo de proyectos relacionados con las TIC en América Latina.
Actualmente existen decenas de iniciativas en la región y es
prácticamente imposible evaluarlas todas. Esto no significa, sin
embargo, que no se deba hacer el esfuerzo por determinar qué
impacto tienen algunas de ellas.
En este ejercicio microeconómico se trata de evaluar el impacto
de estas TIC —herramientas para formular políticas específicas—en
casos pertinentes. Si bien en los estudios que aparecen en el libro
se examinan las evidencias empíricas formales obtenidas en los
últimos años en América Latina y en otras regiones, se le asigna una
importancia particular a la producción de nuevas evidencias sobre
el papel que desempeñan las TIC en el desarrollo de la región. Las
razones son bastante claras.
En primer lugar, prácticamente no existe evidencia sobre la
función que desempeñan las TIC en el impacto socioeconómico de los
países en desarrollo en general, y mucho menos en el caso de América
Latina y el Caribe. Segundo, la mayoría de los estudios que existen
están sesgados y tienden a enfocarse solo en los resultados positivos.
Como explica Ravallion (2008, p. 26): “A menudo es difícil publicar
un documento académico que presente efectos imprevistos, negativos
o ambiguos”. En general, se asume que el proyecto tendrá efectos
positivos, razón principal por la que fue originalmente financiado.
Así pues, hay un sesgo tendiente a confirmar este supuesto previo
lo que hará que nuestro conocimiento también se sesgue a favor de
identificar efectos positivos. Es muy fácil confirmar que estudios
con efectos negativos o con falta de impacto rara vez se registran
en los trabajos que figuran en publicaciones académicas. Ravallion
continúa afirmando que “los investigadores tienden a esforzarse
15
más por lograr hallazgos positivos o por lo menos resultados
congruentes con expectativas convencionales o teorías estándar,
con el fin de aumentar las probabilidades de que se publique su
trabajo. Si se recolectan 20 indicadores de resultado, existen buenas
probabilidades de que por lo menos uno de ellos presente efectos
estadísticamente significativos del proyecto, aun cuando el resto
de indicadores haya mostrado ningún impacto. Un investigador
deseoso de que se publique su trabajo podría verse tentado a notificar
resultados únicamente para el indicador significativo” (2008, p. 27).
En este libro, además de repasar ampliamente la literatura
existente sobre el tema, se trata de evitar el posible sesgo que
describe Ravallion seleccionando los proyectos relacionados con las
TIC con base en la frecuencia con que fueron citados en la prensa de la
mayoría de la región. Fue así como se compiló una lista de los tipos
más comunes de iniciativas relacionadas con las TIC en la región, y se
las clasificó teniendo en cuenta la diversidad geográfica, la diversidad
sectorial y, hasta cierto punto, el carácter innovador del proyecto.
Se seleccionaron 46 iniciativas. Algunas de ellas cuentan con el
patrocinio gubernamental y estaban por comenzar; otras son proyectos
diseñados y ejecutados específicamente para este fin; otras son el
resultado de asociaciones directas con ONG en diferentes países,
mientras que otras más son producto de alianzas con instituciones
especializadas sin fines de lucro, investigadores académicos y
universidades. La mayoría de los proyectos —41 de ellos— fueron
concebidos inicialmente como ejercicios experimentales (en general
experimentos aleatorios controlados) o cuasi experimentales. Para el
resto se emplearon métodos econométricos tradicionales.
Cabe aclarar que este no es un libro sobre innovaciones en
materia de TIC per se sino sobre la aplicación de esas innovaciones
al desarrollo, y sobre la evaluación de su funcionamiento. En un
campo en el que casi no se han realizado investigaciones serias
sobre el tema, este es el enfoque más sensato.
En el gráfico 3 se muestra la distribución por sectores de los
experimentos aleatorios controlados que se seleccionaron para la
16
GRÁFICO 3 Distribución de experimentos aleatorios controlados
con componentes de TIC (porcentaje)
Pobreza y Educación: 18
empleo : 18
Medio
ambiente: 14
Instituciones: 20
Finanzas: 12
Salud: 18
17
introducen elementos de TIC. Un 18% corresponde a proyectos
relacionados con la salud que contienen un elemento de TIC;
estos abarcan desde el uso de herramientas informáticas para dar
instrucción a los adolescentes sobre temas de educación sexual en
Bogotá, hasta el uso de Internet para incentivar a las personas a que
se comprometan a adoptar hábitos sanos en materia de tabaquismo,
control del peso y ejercicio. Un 14% de los proyectos tiene un
componente vinculado con el medio ambiente; estos van desde una
comparación de métodos viejos y nuevos de difusión de las TIC para
enseñar a la población a reciclar basura y materiales de desecho en
México, hasta el uso de TIC para estudiar la degradación del medio
ambiente en Brasil. Otro 18% de las iniciativas está relacionado con
pobreza y empleo; estos abarcan desde el uso de teléfonos móviles
para averiguar precios en Honduras y Colombia, hasta el uso de
métodos de TIC para llevar registro del ciclo de producción de los
hatos ganaderos en Argentina. Por último, el 12% restante de los
proyectos está constituido por iniciativas vinculadas con finanzas
e incluye el uso de mensajes de texto para invitar a la población
a ahorrar, así como la creación de mecanismos innovadores para
promover la banca electrónica.
Si bien los 41 estudios representan el universo original de
experimentos aleatorios controlados, no se pudieron analizar
plenamente algunas de las iniciativas por razones que estaban
fuera del control de los investigadores a cargo. Así pues, cinco
de los proyectos fueron descartados por completo. Aunque
esta experiencia destaca la dificultad que entraña el diseño y la
ejecución de experimentos de campo, también reafirma plenamente
la importancia de realizarlos pues se aprendieron lecciones muy
valiosas de cada uno de los experimentos fallidos. En uno de los
casos, por ejemplo, pese al interés de todas las partes en seguir
adelante con la iniciativa, y tras numerosos intentos, no fue
posible conseguir el número deseado de participantes porque
carecían de las aptitudes informáticas mínimas para beneficiarse
del programa. Como se demuestra repetidas veces en este libro, la
18
Cuadro 1 Experimientos aleatorios controlados (EAC) y
su impacto sectorial
Percentaje
Vínculo con TIC
Fuerte Parcial Mínimo
Finanzas 60 40 0
Instituciones 50 38 13
Salud 38 38 25
Educación 14 57 29
Medio ambiente 17 33 50
Pobreza y empleo 57 29 14
Promedio 39 39 22
Fuente: Cálculos de los autores.
19
Políticas sectoriales de las TIC
De estos hallazgos se desprenden claras implicaciones de política.
Los gobiernos que aplican políticas económicas adecuadas pueden
aprovechar las ventajas de las herramientas de las TIC para el
desarrollo. Estas ayudan a corregir fallas del mercado provocadas
por problemas de coordinación e información asimétrica. El gran
riesgo radica en que se espere demasiado de ellas. Este libro, aunque
no es exhaustivo, se centra en los ámbitos básicos en los que se han
empleado más comúnmente herramientas de TIC o allí donde puedan
tener una importancia vital para el diseño de políticas públicas en la
región. Una de las conclusiones principales de este estudio es que
las TIC, si bien son potencialmente muy útiles, no son una panacea.
Los responsables por la formulación de políticas pueden haber(se)
creado demasiadas expectativas, hasta el punto en que si las TIC
no satisfacen dichas expectativas, éstos pueden desilusionarse o
sentirse presionados por sus electores a no reconocer el verdadero
potencial de las TIC para mejorar la vida de la población de América
Latina y el Caribe, y en últimas perder el interés en ellas como
herramientas para el desarrollo.
20
actividades que desempeñan las instituciones financieras han sido
realizadas tradicionalmente por sus sucursales. Aun así, el costo de
abrir una sucursal en lugares con escasa población o donde imperan
condiciones geográficas o de seguridad difíciles es tan oneroso
que supera el beneficio de incluir más personas en las líneas de
actividades de la institución. Y es aquí donde la tecnología puede
desempeñar un papel crucial. Las TIC cuentan definitivamente con
el potencial de reducir los costos de la ampliación de los servicios
financieros y ampliar los beneficios de la inclusión financiera, sobre
todo entre la población más pobre.
Los hogares pueden tener acceso a los servicios financieros
mediante varios tipos de mejoras tecnológicas. El desarrollo
de Internet ha permitido a muchas familias en todo el mundo
aprovechar beneficios de la banca en línea como son el pago
de las facturas de los servicios públicos y las transferencias de
dinero. La conducción de operaciones bancarias por medio del
teléfono celular es un mecanismo muy difundido y en expansión
en el mundo financiero. Este puede ayudar a reducir la exclusión
financiera, ya que ofrece servicios a grupos de bajos ingresos que
tienen acceso a teléfono móvil pero no a servicios financieros. Las
TIC también pueden ser una herramienta muy útil para brindar
información y ayudar a las personas a tomar mejores decisiones
financieras. Por ejemplo, se pueden realizar campañas de
educación financiera con ayuda de las TIC, o enviar recordatorios
a las personas para que ahorren dinero y así puedan alcanzar sus
metas. Los gobiernos también pueden aprovechar las mejoras de la
tecnología identificando nuevas maneras de diseñar programas de
subsidios para los sectores pobres. Estas actividades respaldadas
por el gobierno pueden ayudar a los pobres a superar las barreras
tradicionales al acceso al sistema financiero. Más allá de las fronteras
nacionales, las TIC agilizan y abaratan los envíos de remesas de los
trabajadores migrantes a sus familias en el país de origen, mejorando
así el bienestar de los hogares que las reciben.
21
No obstante los enormes beneficios relacionados con estas
nuevas tecnologías financieras, hasta la fecha América Latina y el
Caribe se ha quedado a la zaga del resto del mundo en desarrollo.
Todavía queda un largo camino por recorrer antes de que los hogares
más pobres de la región cuenten con los medios para adquirir
una computadora y sus propios servicios de Internet. En lo que
respecta a la reglamentación, aun cuando no hay nada que prohíba
explícitamente la prestación de estos nuevos tipos de servicios
financieros, existen obstáculos regulatorios que afectan la manera
en que se prestan los servicios de banca móvil. Entre los principales
problemas relacionados con la búsqueda de socios potenciales
figuran la dificultad de definir un modelo de negocios sostenible
con pagos por montos reducidos, la incertidumbre sobre el marco
normativo de los países, y la necesidad de contar con corresponsales
no bancarios suficientemente fiables. Con todo, en la región se han
lanzado numerosos proyectos piloto que apuntan a obtener lo que ya
lograron los países de Asia y África hace unos años en el campo de
las transacciones financieras electrónicas. América Latina y el Caribe
tienen la ventaja de que pueden aprovechar estas enseñanzas.
22
para mejorar la calidad de las instituciones. En el caso particular
de América Latina, las evidencias más recientes demuestran que
las TIC se están convirtiendo en instrumentos eficaces no solo para
mejorar la eficiencia del sector público sino también para ayudar a la
población a exigir que el gobierno rinda cuentas.
Uno de los principales resultados de la revolución de las TIC
es la difusión más rápida y más transparente de información. En
la esfera política, la diseminación de información puede afectar el
comportamiento político y las decisiones electorales, lo cual es de
suma importancia teniendo en cuenta el hecho de que un electorado
más informado y políticamente activo ofrece más incentivos para
que el gobierno responda mejor a las necesidades de la ciudadanía.
Además, los nuevos canales de información también pueden
afectar la manera en que la gente percibe sus sociedades y adapta
su propio comportamiento. Esto tiene importantes implicaciones
para la política pública, sobre todo en los países en desarrollo.
En sociedades donde el índice de alfabetización es relativamente
bajo y la circulación de periódicos limitada, las nuevas formas de
comunicación pueden desempeñar un papel crucial en la difusión de
las ideas. A la hora de formular las políticas, las autoridades pueden
utilizar estos canales para transmitir importantes mensajes sociales
y económicos. De ahí que las TIC puedan emplearse efectivamente
como herramientas de política pública.
23
significativos de recursos humanos, equipos y programas
informáticos e infraestructura. En esta etapa, es posible que no sea
factible y/o eficiente en función de los costos que América Latina y
otras regiones en desarrollo reproduzcan las soluciones adoptadas
por los países desarrollados. Lo que necesita la región es adaptar
soluciones de acuerdo con las prioridades de salud de cada país,
el desarrollo de sus sistemas de salud pública y la infraestructura
nacional actual de TIC.
Una de las prioridades de la región en esta etapa es realizar
pilotos y llevar a cabo más intervenciones sanitarias integrales
relacionadas con las TIC en la atención de enfermedades crónicas.
La telemedicina se ha implementado con relativo éxito y parece ser
una intervención muy promisoria para reducir costos y mejorar la
atención de los pacientes en lugares apartados.
En muchos sistemas de salud de la región, la siguiente etapa
de innovación en materia de TIC es el uso de historias clínicas
electrónicas. Esto permitirá que los sistemas sanitarios aprovechen
todos los beneficios de innovaciones adicionales como son los
sistemas de vigilancia y seguimiento de pacientes con enfermedades
crónicas, la telemedicina y los sistemas de vigilancia epidemiológica
por medio de TIC. La evaluación cuidadosa y la divulgación de los
resultados de estas experiencias pioneras en la región son cruciales
para reproducir las experiencias exitosas y aprender de los errores.
Aunque en general se considera que los sistemas de salud
electrónicos son una innovación de bajo costo para mejorar el
desempeño del sistema mismo, su aplicación ha sido lenta, incluso
en los países desarrollados. La adopción limitada de TIC por parte de
los prestadores de servicios de salud, sobre todo de los hospitales
y las aseguradoras en Estados Unidos, puede explicarse por una
confluencia de factores: la efectividad no comprobada de las TIC en
función de los costos para determinados proveedores, debido a la
estructura subyacente fragmentada de la prestación de servicios de
salud y de su financiamiento; el alto riesgo financiero que conlleva
la adopción de nuevas tecnologías; los costos y la dificultad del
24
cambio conductual necesario para la adopción de la tecnología; las
pérdidas temporales de eficiencia y los errores médicos que podrían
cometerse durante la transición, así como cuestiones jurídicas
importantes como la obtención de licencias y los temas atinentes a
la responsabilidad civil, la negligencia médica, la confidencialidad y
el cumplimiento de las normas de aseguramiento. Estas inquietudes
destacan el importante papel que le atañe al gobierno para lanzar
a escala piloto y poner en práctica cuanto antes muchas de estas
innovaciones observando criterios estrictos basados en evidencias
concretas.
Muchos países de la región todavía no han superado
problemas básicos en el sector de la salud. Y aunque se está en
mora de realizar una evaluación seria de los costos y beneficios
de varias innovaciones sanitarias, es posible que muchas de ellas
absorban demasiados recursos en comparación con lo que se gasta
actualmente en salud pública en la región. El riesgo es que estas
innovaciones —sobre todo las que tienen efectos de red— puedan
ser menos eficaces cuando se ponen en práctica en sistemas
fragmentados que padecen problemas de cobertura, equidad,
prestación de servicios y financiamiento. Por consiguiente, los
responsables por la formulación de políticas deben equilibrar
la implementación gradual de las innovaciones sanitarias con
la reforma continua de todo el sector, a fin de que se puedan
materializar plenamente sus beneficios.
25
programas alternativos en los que se obtienen buenos resultados.
Dada su irreversibilidad debido a los elevados costos iniciales, al
desconocimiento de sus repercusiones y a la limitada capacidad
de los gobiernos para gestionar estas intervenciones complejas,
sería razonable proceder gradualmente con estas iniciativas. Si los
planificadores proceden a dar pequeños pasos en lugar de grandes
saltos, podrán aprender de la experiencia, evaluar los resultados
generados y modificar decisiones a la luz de la nueva información.
Los estudios realizados para este libro demuestran que, en
el mejor de los casos, un mayor acceso a las computadoras en
las escuelas por sí solo produce pocos resultados. Los insumos
complementarios, a saber, equipos y programas informáticos
adecuados, electricidad, capacitación de docentes y respaldo técnico
y pedagógico son fundamentales. No obstante, una y otra vez los
países tienden a concentrar todos los recursos en un solo objetivo y
se dedican a distribuir computadoras. Si se elabora un presupuesto
para adquirir todos los insumos complementarios requeridos se
reducirá el desperdicio de recursos y, mejor aún, se creará una
oportunidad extraordinaria para mejorar la calidad de la educación.
Por otra parte, ciertas aplicaciones de las TIC pueden producir
resultados sumamente positivos. Parecería razonable entonces que
los gobiernos canalicen el limitado acceso a las computadoras hacia
estos usos más promisorios. En particular, dedicar una o dos horas
por semana a capacitar a los alumnos en TIC puede ser óptimo,
dada la evidencia que existe sobre los efectos significativos que
tiene el desarrollo de destrezas en materia de TIC y las mejoras
salariales que eventualmente pueden lograr en el mercado laboral
los trabajadores que las adquieren. Además, la instrucción asistida
por computadora ha demostrado que tiene un gran potencial
para acelerar el aprendizaje de las matemáticas, un resultado
deseable si se tiene en cuenta el bajísimo nivel de rendimiento
escolar en esta materia dentro de la región. En asignaturas como
matemáticas e idiomas en aquellos programas en los que se pueden
usar computadoras para apoyar las prácticas de enseñanza, la
26
capacitación de los docentes es crucial, además de la instrucción
asistida por la informática. En consecuencia, deberá darse prioridad
a la planificación cuidadosa de los componentes y contar con fondos
suficientes para financiar insumos complementarios esenciales como
es la capacitación de los maestros.
Si bien en varias investigaciones se ha demostrado los efectos
nulos del acceso a computadoras en la escuela en materia de logro
educativo, en otras se ha comprobado que un mayor acceso a las
computadoras en el hogar puede tener consecuencias negativas.
En otros estudios se ha mostrado que estos efectos negativos se
concentran en aquellos estudiantes con menor supervisión de los
adultos. Las intervenciones dirigidas a incrementar el acceso a la
informática en el hogar deberán tener en cuenta seriamente estas
consideraciones y poner en práctica mecanismos para asegurar
su uso adecuado. Será necesario dotar a las computadoras de
programas interactivos y educativos, y organizar competencias para
estimular su uso. Asimismo, se deberá bloquear todo contenido
sexual y violento.
27
beneficios deben sopesarse contra los costos ecológicos de las
TIC, especialmente en lo que se refiere al consumo de electricidad
y a la eliminación de desechos electrónicos. Los estudios sobre
cada tecnología ayudan a cuantificar su potencial para mitigar
directamente las amenazas al medio ambiente, pero se requiere
más investigación para entender las contraprestaciones que allí se
producen, sobre todo a nivel agregado.
Asimismo, no hay evidencia empírica clara que muestre
el impacto que tiene la creación y compilación de información
obtenida a través de las TIC sobre la política de medio ambiente,
las actividades de las empresas u otros agentes, o los resultados
ambientales. En los ámbitos nacional y regional se han invertido
cuantiosos recursos para desarrollar sistemas de vigilancia apoyados
en TIC, principalmente para hacer seguimiento al cambio climático,
la deforestación y la vida silvestre, así como en las tareas de
auxilio cuando se producen desastres naturales. La tarea de evaluar
rigurosamente las consecuencias de tales inversiones en el medio
ambiente con un enfoque estadístico es realmente formidable, pero
puede realizarse mejor si se cuenta con la documentación y análisis
cuidadosos acerca de la difusión y usos de la información generada
por estos sistemas.
A nivel micro, la información producida por las TIC también
puede ser de utilidad para resolver problemas ambientales
localizados. Determinar si estos esfuerzos resuelven o mitigan
tales problemas será de vital importancia para los responsables
por la formulación de políticas, para quienes se ocupan de temas
ambientales y para aquellos funcionarios cuya tarea consiste en
compilar la información sobre el medio ambiente local.
Los resultados de varios experimentos aleatorios controlados
recientes, diseñados con el propósito de determinar la eficacia
de las campañas de información a través de TIC para fomentar
comportamientos ecológicos, ofrecen poca evidencia sobre la
eficacia de esa estrategia. El uso de Internet para instar a los
individuos a que reduzcan su huella ambiental tampoco parece ser
28
una estrategia viable, ya sea debido a la ineficacia de este medio o
al acceso todavía limitado a Internet en muchas partes de América
Latina.
Por lo tanto, la utilización de las TIC para fomentar cambios de
comportamiento debe asumir un papel más directo. Actualmente
están surgiendo nuevas maneras de emplear las TIC para influir
en las decisiones de los individuos; tal es el caso de la tecnología
de chips inteligentes que facilita, por ejemplo, el reembolso de
préstamos para adquirir vehículos que funcionan con gas natural, la
cual se considera muy promisoria.
A nivel nacional, los distintos actores podrán ampliar el impacto
ecológico de las TIC adoptando políticas que alienten a particulares
y a empresas a emplear tecnologías que ya hayan probado tener
impactos positivos en el medio ambiente. Además, los gobiernos
deberán considerar el efecto multiplicador de las TIC para crear
sistemas más eficientes de recopilación de información y de
comunicaciones, lo cual puede permitir una respuesta más rápida
y eficiente en el caso de desastres naturales y otros incidentes
ecológicos.
29
Si no son la panacea, entonces,
¿qué hacer?
Ser sensatos y reconocer que las TIC no son un fin en sí mismo. Dado
que América Latina y el Caribe está todavía rezagada en materia
de penetración de TIC, las autoridades se ven tentadas a “llenarse”
de equipos y programas informáticos relacionados con ellas, con el
objetivo declarado de ponerse a la par de otros países para reducir la
brecha digital. En este libro se demuestra que esta no es la política
correcta. Las TIC son un medio para llegar a un fin y no lo contrario.
Las políticas deben ser sensatas y congruentes con la realidad del
panorama nacional. Al formularlas, es menester cuidarse de las
modas pasajeras, internalizar las consideraciones costo-beneficio,
y especialmente tener en cuenta los costos de oportunidad. Lo más
nuevo no es necesariamente lo mejor.
30
de ciertas medidas (y tipos) de uso, en lugar simplemente de ofrecer
más acceso.
31
informático, por ejemplo para traducir del castellano al quechua
—por decir algo—, conlleva altos costos fijos que se distribuyen
entre el número de computadoras en que se va a utilizar. En los
programas pequeños, la producción de software especializado no es
económicamente viable, pero si se expanden aumenta radicalmente
la rentabilidad de la inversión en el mismo. Por ejemplo, si se trata
de un programa que ha distribuido un millón de computadoras
portátiles en un país, es perfectamente aceptable gastar US$10 por
computadora en software (es una parte ínfima del costo total de la
adquisición). Esto representa una cifra de US$10 millones, lo cual
evidentemente constituye un presupuesto suficiente para financiar el
desarrollo de programas informáticos sofisticados.
Esta ecuación de costo-beneficio es similar a la creación de
una vacuna. Su producción implica altos costos fijos y el resultado
final es incierto. Una vez desarrollada la vacuna, se requieren
numerosos experimentos para verificar su eficacia. Pero cuando ya
se ha producido y probado, los costos marginales de utilizarla son
insignificantes. Los países podrían aunar recursos para desarrollar
(y probar) diferentes programas informáticos y producir un
inventario gratuito de software ya probado. ¿Cómo pueden ponerse
de acuerdo para financiar estas actividades? La solución puede
estar en las instituciones multilaterales, cuyo mandato consiste
en financiar actividades para promover el desarrollo de toda la
región. ¿Qué mejor asignación de fondos que contribuir a producir
ciertos bienes públicos que serán de utilidad para la mayoría de sus
miembros?
32
el denominado escalamiento. Cuando un programa piloto se ejecuta
a mayor escala pueden cambiar muchas cosas: los insumos para la
intervención, los resultados y la intervención misma. El impacto real
del escalamiento puede diferir de los resultados del ensayo porque
la composición socioeconómica de la participación en el programa
varía con la escala. Los resultados del ensayo podrían sobreestimar o
subestimar el impacto cuando se trabaja a mayor escala.
Por todas estas razones, los responsables por la formulación de
políticas no deben conformarse con evaluaciones limitadas de las
TIC. Deberán replicarse los experimentos aleatorios a largo plazo en
diferentes contextos y escalas para determinar consistentemente qué
funciona y qué no funciona. Esto reviste particular importancia tanto
para evaluar su efectividad en el desarrollo como para asegurar la
fiabilidad de las aplicaciones de las políticas. Una crítica común que
se hace a los experimentos aleatorios controlados es que tienen poca
validez fuera del ejercicio específico en el que se llevan a cabo. Sin
embargo, su réplica en diferentes contextos y escalas contribuirá en
gran medida a mejorar su aplicabilidad general y su efectividad en el
desarrollo.
33
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FILIALES DEL FCE DONDE EL LIBRO ESTÁ DISPONIBLE PARA LA
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35
Propósitos y Representaciones
Ene. - Jun. 2017, Vol. 5, Nº 1: pp. 325 - 347 ISSN 2307-7999
http://dx.doi.org/10.20511/pyr2017.v5n1.149 e-ISSN 2310-4635
Artículos de revisión
Ronald M. Hernandez
Universidad San Ignacio de Loyola, Lima, Perú.
Recibido 06-01-17
Aprobado 10-03-17
Resumen
Summary
This paper sets out the main challenges and provides an overview of the future
of ICTs and their connection with education. It begins with a description of
the so-called knowledge-based society and how its evolution, an offspring of
technology, has encompassed different areas, paving the way for innovation
in education and prompting generation of new knowledge. It also outlines
the importance of each educational agent (teacher-student) and their role in
transforming the teaching-learning process.
Propósitos y Representaciones
Ene. - Jun. 2017, Vol. 5, Nº 1: pp. 325 - 347
326 http://dx.doi.org/10.20511/pyr2017.v5n1.149
Ronald M. HeRnandez
Introducción
Propósitos y Representaciones
Ene. - Jun. 2017, Vol. 5, Nº 1: pp. 325 - 347
http://dx.doi.org/10.20511/pyr2017.v5n1.149 327
Impacto de las tIc en la educacIón: Retos y peRspectIvas
Para Rodríguez (2003), la era del progreso donde una sociedad enfocaba
su progreso, a través del capital y el trabajo, se ha dejado de lado; la aparición
y competitivo que puede llegar a transformarse una sociedad depende de la
adquisición, transmisión y aplicación del conocimiento, es a partir de estas
concepciones que aunado a la ventaja tecnológica, aparecen los procesos
formativos en las escuelas.
Propósitos y Representaciones
Ene. - Jun. 2017, Vol. 5, Nº 1: pp. 325 - 347
328 http://dx.doi.org/10.20511/pyr2017.v5n1.149
Ronald M. HeRnandez
Dentro de los roles que asumen cada agente educativo, los estudiantes
actuales, utilizan las herramientas tecnológicas para facilitar el aprendizaje;
esta evolución surgió desde las primeras concepciones con la calculadora, el
televisor, la grabadora, entre otras; sin embargo, el progreso ha sido tal que
los recurso tecnológicos se han convertido en recursos educativos, donde la
Propósitos y Representaciones
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http://dx.doi.org/10.20511/pyr2017.v5n1.149 329
Impacto de las tIc en la educacIón: Retos y peRspectIvas
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Propósitos y Representaciones
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http://dx.doi.org/10.20511/pyr2017.v5n1.149 331
Impacto de las tIc en la educacIón: Retos y peRspectIvas
Propósitos y Representaciones
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332 http://dx.doi.org/10.20511/pyr2017.v5n1.149
Ronald M. HeRnandez
Conclusiones
Propósitos y Representaciones
Ene. - Jun. 2017, Vol. 5, Nº 1: pp. 325 - 347
http://dx.doi.org/10.20511/pyr2017.v5n1.149 333
Impacto de las tIc en la educacIón: Retos y peRspectIvas
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