UNIVERSIDAD MICHOACANA DE SAN NICOLÁS DE HIDALGO

FACULTAD DE DERECHO Y CIENCIAS SOCIALES

SISTEMA ABIERTO

DERECHO INTERNACIONAL PRIVADO

REPORTE DE LECTURA

EL ALMA DE LA TOGA

ALUMNO: IGNACIO HERNÁNDEZ TREJO

MAESTRO: M.D. VICENTE LUIS COCA ALVAREZ

SECCIÓN 48

4º AÑO

Morelia, Michoacán a 22 de octubre del 2022.

 ÍNDICE

Introducción

Contenido

Concusión

Bibliografía
 Introducción

El libro “El alma de la toga” trata de la ética del abogado escrito por Ángel Ossorio,
español jurista, Ex Decano del Colegio de Madrid y político. Esta escrito a
principios del siglo XX con referencias de la época y desde la perspectiva
española y algunos puntos de reflexión de Argentina, en este se describe la
vocación de la profesión donde licenciado puede ser cualquiera, pero abogado
solo aquel apasionado del buen consejo jurídico y dar pelea en cada tribunal, el
conocimiento en si no te da lo suficiente para ser un buen abogado se requiere de
más que eso, ser bueno, prudente, tener una buena disposición psicológica.
 Contenido

Para el autor el hombre debe sentirse fuerte y seguro de sí mismo, esa fuerza y
seguridad no la da nadie, fuera de nosotros está el doctrinarismo que siembra
duda, el sensualismo que seduce, la critica que desorienta, el adversario que
desconcierta, la injusticia que enfurece, estas sensaciones no deben agobiarnos
ya que nos distraen de la tarea de la justicia humana determinada por el carácter
de la persona donde el alma es la base del desarrollo, el abogado debe sentir la
fuerza del interior que le hace superar el medio ambiente o de plano no se pude
ser abogado.

La justicia para el abogado debe de encontrarse dentro de la formación como

persona del mismo, desde el punto de vista de Ossorio las enseñanzas cristianas
doblegaron el rígido sistema de derecho romano donde la ley tacita termina por
hacerse valer sin más razones o sensaciones, más esto bajo una humanización
cristiana debería ser diferente, el derecho sirve a la humanidad no la rige y es así
que se sugiere que el abogado intervenga en favor de la razón y o que es mejor
en materia de justicia más que de leyes ya muchas veces lo que se requiere no
está escrito.

Incluso se hace mención de Henry Bordeaux donde este describe la enseñanza de

su mentor Mr. Romeaux quien establece que aquellos escritores que cuadraron
repertorios de jurisprudencia no se basaron en libros si no que razonaron sobre
realidades. (1)

Incluso se plantea el hecho que más que hacer consulta a lo que la ley dice hay
que entender ¿quién desea asistencia?, ¿Qué se propone esa persona?, ¿a quién
daña su propósito? realmente ¿Dónde está la justicia?, en realidad no se pueden
buscar soluciones en la ley contrarias a las que nos determina nuestro
convencimiento, se requiere estar del lado de lo justo no de lo legal, dígase
entonces el aforismo

(1) Ossorio, Pag. 25

summun jus summa injuria, (2) lo bueno, prudente, legal y cordial no está en la
gaceta.

La moral en el abogado depende de tiempo, lugar ya que lo que es moral en una

época o espacio ya puede no serle en otro, más en derecho se manifiestan
algunos puntos que son específicos de área y deben ser considerados al momento
de terminar el actuar moral de cada caso, 1, la moralidad intrínseca del negocio
(actuar aun con los errores de la profesión de buena fe), 2, pugna entre moral y ley
(si no se encuentra argumentos hay que revisar nuestro juicio e incluso vulnerar la
ley), 3, moralidad de la causa e inmoralidad de los medios inevitables para
sostenerla (hay que sostener el fin bueno con los medios malos), 4, licitud o ilicitud
de los razonamientos (no caben las alteraciones pero si las innovaciones y las
audacia), 5, oposición entre interés del letrado y cliente (se actúa para los demás
no para sí mismo), la moral tiene características de género y de especie

El secreto profesional del oficio de la abogacía se encuentra en ocasiones

variadas con muchas aristas dependiendo de la información misma y como esta le
llega al litigante, un secreto que determina la inocencia de otra persona no debe
ser guardado en cuanto a moral se refiere aunque pone en entredicho ese secreto
profesional, y una verdad que determina la culpabilidad de mi cliente no puede ni
debe pasarse por alto incluso ni el caso puede ser considerado, al final delatar a
alguien que ha cometido un crimen grave se considera debe pagar violando
incluso este secreto, recordar siempre que el abogado debe servir a la sociedad
una función social.

Recordar que las leyes de España y Argentina censuran la falta de ética del
abogado, así como descuido dígase si este por accidente narra algún hecho
donde él se viere involucrado como representante, 156 del Código argentino y en
el 365 del español donde determina lo siguiente “abuso malicioso… o negligencia
o ignorancia perjudique a su cliente o descubrirá sus secretos…” en México en el
CCF
 (2) Enciclopedia jurídica, 2020, Suma derecho – Suma justicia, a mayor justicia
– mayor daño, dígase de al aplicar la ley al pie de la letra en ocasiones
resulta injusto.

en su artículo 2590, (3) y el 90 del CFPC en su artículo 90 lo manifiesta. (4)

El argumento de la moralidad se manifiesta en cada capítulo donde se hace

mención a la triquiñuela o chicana para hacer valedero un proceso y ganar para
bien un caso porque es justo y usarle conviene. Entonces usarle para alargar un
caso procede, no hay mejor situación que buscar el bien en el fondo, el llevar a
cabo la chicana en casos más graves queda de cada quien y para qué fin se usa.

Según Gómez Masia, su uso puede ser para favorecer la inequidad o perseguirle
entonces podemos usarle 2 de cada 100 mientras se persiga este motivo, pero en
regularidad favorece la perturbación de molestar al litigante adverso.

Se pretende se use de manera adecuada, si es dolosa para fines de lucro o de

ventaja debe ser denunciada y castigada siempre que se identifique ordenando el
cambio de estrategia y sancionando al letrado.

De la mencionada obligación están exentos los ascendientes, descendientes,

cónyuges y personas que deban guardar secreto profesional, en los casos en que
se trate de probar contra la parte con la que estén relacionados.

Cuando se trabaja en esta profesión la sensibilidad se va perdiendo y

deshumanizando en razón de la cantidad de trabajo acumulado, las deshoras en
que noticias llegan para tratar asuntos de clientes con problemas que resolver o
resoluciones que dificultan un proceso, menciona el autor “hay que preparar la
batalla con pasión y recibir imperterito la noticia del resultado, tener ardor y no
tener amor propio, amar y no preocuparse por el destino del objeto amado” (5), un
poco dramático pero buen consejo.

(3) CCF art. 2590. El procurador o abogado que revele a la parte contraria los
secretos de su poderdante o cliente, o le suministre documentos o datos que lo
perjudiquen, será responsable de todos los daños y perjuicios, quedando, además,
sujeto a lo que para estos casos dispone el Código Penal.
 (4) CFPC art. 90. Los terceros están obligados, en todo tiempo, a prestar auxilio a los
tribunales, en las averiguaciones de la verdad. Deben, sin demora, exhibir
documentos y cosas que tengan en su poder, cuando para ello fueren requeridos.

Se maneja un acercamiento al cliente con bastante empatía más no un

desdoblamiento sobre su caso y persona, es decir yo no soy mi cliente, soy un
abogado con facultades irrenunciables que defiende y simpatiza con la causa de él
hasta ahí.

Ángel Majorana menciona "el abogado se compenetra con el cliente de tal

manera, que pierde toda su postura personal" (6). Ossorio encuentra bien renunciar
a los intereses, al bienestar, al goce, para entregarse al bien del otro; matar el
sensualismo en servicio del deber o el ideal. Eso es abogacía. “Defender sin
cobrar, defender a quien nos ofendió, defender a costa de perder amigos y
protectores, defender afrontando la injuria y la impopularidad.” (7)

Todos los abogados tienen un libre albedrio y no deben sobajarse bajo ningún
acontecimiento ya sea monetario, al trabajar bajo salario para empresa que
designe lo que a este convenga, aunque contradiga la ética del letrado o bien el
amor de la mujer que desvié la atención del mismo, la familia que siempre tiene
una buena opinión sobre cada caso y además espera tener la razón mejor que
el mismo abogado, que decir de la política que ha visto en la abogacía un potente
detonador de una carrera alejada de su origen, como menciona Mr Raymon
Poincaré “el Abogado no depende más que de sí mismo. Es el hombre libre, en
toda la extensión de la palabra. Solo pesan sobre él servidumbres voluntarias;
ninguna  autoridad 

exterior detiene su actividad individual, a nadie da cuenta de sus opiniones, de sus

palabras ni de sus actos.” (8)

El trabajo de un abogado se estima como un placer no como un deber, el trabajo

comenta el autor debe de realizarse por las mañanas ya que en estas se
manifiesta la frescura del día y el de nuestro trabajo dando nuestras primicias y no
en la noche conceder nuestros residuos, es importante dejar ver desde nuestro
trabajo lo bueno que se llega a ser bajo la idea de tener presencia en el tribunal,
tener una buena oratoria y lo mejor ser directo y recto, se litiga lo necesario no lo
que necesito.

(5) Ossorio, Pag.87

(6) Ossorio , Pag. 91
(7) Ossorio ,Pag. 92
(8) Ossorio, Pag. 103

Dígase de esta manera hay que trabajar con gusto, este debe ser una válvula de
expansión de anhelos espirituales, el trabajo es liberación, exaltación,
engrandecimiento.

El poder de la palabra escrita y hablada es muy grande y este tiene su influencia

en dos líneas la escrita debe envolver a juez y la hablada te puede ganar un caso,
aunque no tengas la razón. La palabra enardece turbas, inicia revoluciones, se
doma y avergüenza, vale más media hora de platica que seis meses de cartas.
“Abominen de la palabra los tiranos porque les condena, los malvados porque les
descubre y los necios porque no la entienden. Pero nosotros, que buscamos la
convicción con las armas del razonamiento, ¿cómo hemos de desconfiar de
su eficacia?” (9)

Son algunas cualidades las que debe maneja un abogado en su oratoria: debe ser
breve, eso le encanta al juez, hay que resumir lo más que se pueda, hay que ser
diáfano, hablar claramente para que entienda desde el portero del edificio hasta el
juez del estrado, hay que dar preferencia a los hechos, hay que ser cortes con el
adversario la cortesía desenfadada o el desenfado cortes, hay que manejar un
léxico que se eleve al modo de sea entendido por cualquier patán y debe la
oratoria producirse con sencillez.

Un abogado debe amar la justicia sobre todas las cosas y sentirse cuidador de
ella, ya que la justicia es material de la libertad, no se puede llegar a ser abogado,
juez fiscal sin el orgullo de estar desempeñando las funciones más nobles e
importantes para la humanidad, es arma del abogado el buen uso de la palabra
con el estilo de ser historiador, novelista y dialéctico.

Historiador al narrar los hechos exponiendo lo preciso, sin complicaciones

atractivo al juez, novelista hay que evidenciar los hechos y maximizar con los
antecedentes del juzgado si es divorcio hay engaño por amor o se es un patán o
se es casquivana de profesión, si es robo por necesidad o se es un ladrón de
profesión, se debe mostrar al estrado lo antipático del sujeto. Se hace importante
no solo mencionar el hecho sino como sucedió además de buscar a toda costa
atraer al juez hacia mi

(9) Ossorio, Pag. 118

lado.

Dialéctico, se debe ser escueto y tajante para encuadrar la atención del juzgador y
poner cuadricula en a su pensamiento, al escribir hay que considerar las
características del juez conócele trayectoria e incluso debilidades si este es corto
de alcances meterle argumentos en la cabeza, si es discreto y agudo limitarse lo
indispensable, si sus ideas políticas non son conocidas hay que procurar no
herirlas.

A la redacción de un caso se requiere ser fresco nadie es igual en escritura, hay

que ser espontaneo, colocar razonamientos, ejemplos, especialmente toscos y
puntiagudos. No hay que dejar de lado la veracidad de los hechos ya que hay un
rival que nos desmentirá y buscará que con eso se pierda todo caso, por supuesto
claro para que el juez lea aun sin ganas. Creativo, plasmar ironía, el relieve de un
personaje ridículo, invocar una agudeza, permitiendo un descanso al lector, usar la
gracia que dios nos dio ya que esta nos pertenece y es conveniente aplicarle.

Es muy importante saber que lo que uso en un caso, en un tiempo y un lugar no

es regla, en derecho no hay ciencia, ni principio seguro o fijo, lo fue ayer era
magnifico hoy es detestable, dígase del ladrón que ayer era juzgado y ahorcado,
después se buscó auxilio psicológico y hoy hasta apoyo pedagógico ya que su
formación no fue la adecuada, o el padre que no se le era bien visto la patria
potestad y ahora es un derecho inalienable, los cambios de leyes por la revolución
industrial el llamado riesgo profesional se debe estar siempre al día de los
cambios en la sociedad y sus necesidades.
Una cosa que sucede entre la relación abogado y juez es la desconfianza, el juez
cree a todas luces que el abogado le mentira para ganar a toda costa y el abogado
pensará que el juez le tiene algo de desconfianza y mala leche por lo que vera de
afectar su caso a como dé lugar, entonces dónde queda esta relación, es
conveniente la posibilidad de conocerse mejor durante y antes del proceso para
determinar en si el actuar de ambos y que esto mejore e proceso en sí.

Las leyes utilizadas día a día no siempre tienen la razón de su aplicación, se es

necesario que cuando estas no son justas deben de flexibilizarse a manera de
encontrar justicia en los hechos, los jueces deben ser intérpretes de la justica a
través de la ley e inspiradores de su evolución, los abogados deben promover lo
mismo.

El arte es el complemento del abogado esta profesión se nutre constantemente de

lecturas específicas que desarrollan el criterio y desenvuelven el alma, una revista
nacional y una extranjera son básicas, conocer y tener al menos el 50 porciento de
los libros de la materia publicados en tu país y novelas históricas, versos, crónicas,
sociología política, lectura que amplíe el horizonte y mantenga viva la flexibilidad
del lenguaje.

En el medio de los letrados existe más una cordial felicitación que una
descalificación a diferencias de otras profesiones como la médica donde todos se
dan con todo desde la formación misma, aquí el abogado felicita y reconoce en su
adversario teniendo entre si un cúmulo de casos y trabajos pendientes atraen
nuestra atención antes de cualquier beneplácito autoinflingido.

Hay una costumbre que acredita la delicadeza de nuestra educación. Después de

sentenciado un pleito, jamás el victorioso recuerda su triunfo al derrotado. Por el
contrario, el vencido es quien suele suscitar el tema felicitando a su adversario -
incluso públicamente - y ponderando sus cualidades de talento, elocuencia y
sugestión, a las que, y no a la justicia de su causa, atribuye el éxito logrado.

Las clases no implican desnivel personal sino diferenciación en el cumplimiento de

los deberes sociales.
Un despacho regularmente se genera en la asociación de 2 o más compañeros,
pero es por el autor mal visto ya que nunca en esta profesión se reconoce el
trabajo de ambos y siempre luciría uno sobre otro empañándose la labor de
alguno, el anuncio no va con la profesión nadie puede decir que es honrado y
trabajador y que funcione atractivo como abogado, más aquí entra la exhibición
donde esta refleja en si las cualidades del letrado y determina su calidad, por
último no vale la pena hablar del compañero para hacerse de un nombre.

En la abogacía, la especialización toca los límites del absurdo. En realidad, no se

puede ser especialista en un tema sin tener conocimiento al menos de otra área,
además de conocer a tu cliente lo mejor posible. Simplemente no se puede ser
especialista en una sola cosa, porque en la abogacía como en muchas otras
profesiones, en un solo caso, gran parte de las veces, se necesita de varias
materias de Derecho. Nuestro campo de acción es el alma, y esta no tiene
casilleros. “Para el abogado no debe haber más que dos clases de asuntos: unos
en que hay razón y otros en que no la hay.” (10)

No exageremos en nuestra práctica, que la hipérbole no nos llene de halagos y

exageraciones, hay que ser asertivos y examinar el caso para actuar de acuerdo a
lo requerido.

Existe entre la materia del derecho y la política un hilo muy delgado donde el autor
determina que es la política quien necesita de abogados y acude a ella para la
restructuración del tejido social donde las guerras no tienen ya eco, el bogado
determina el camino de las reglas que organizan a la sociedad que conducen el
cómo las economías se ordenen desde las reglas de los países para el beneficio
de estos. Más aquellos que de política es la carrera rara vez suele llevar una vida
de abogados por lo que su práctica se convierte en nula.

Existen casos donde el autor maneja la defensa propia explicando la existencia de

casos muy simples que pueden llevarse por cualquier persona, más determina que
se pone en jaque la legitimidad de la profesión, el juez debería distinguir el caso
que pudiera tener esa libertad de defensa siempre y cuando nunca dañe a
terceros.
El dinero no debe de ser el motor del abogado ya que la avaricia deja fuera de
conciencia y objetividad al letrado, dejar que cada quien ejerza lo suyo, y ser
consejero, más no socio o petrimetres (viejos verdes), “El mundo nos utiliza y
respeta mientras tengamos la condición de amianto*” (11)

(10)Ossiris Pag. 203

(11)Ossiris Pag. 237,

El abogado debe conocer a su pasante y orientar en su práctica, debe recibirse

con un “lee ese escrito y dime quien tiene la razón” o bien “revisa eso y dime que
se te ocurre para defender zutano”, con esto se marca la vida de este para seguir
una buena carrera, aunque para la época solo el 10 % estudia con gusto e interés
además de que solo 9 % triunfara en profesiones jurídicas y solo el 1% será
abogado.

La defensoría de personas de escasos recursos no debe de utilizarse de ninguna

manera como propaganda, ni desdeñarse con una poca o nula atención de parte
de los juzgados o letrados sobre la falta de recursos, es cierto que todas las partes
suelen dejar a su suerte a estos, por lo que se propone algunas sanciones a
quienes lucren con esta condición.

La vestimenta es representativa de cada profesión y título de este libro, la toga por

si misma sin duda representa justicia, y para quien la porta freno e ilusión, para
quien la contempla diferenciación y respeto.

Freno ya que impone a un comportamiento adecuado en todo sentido sobre la

profesión, ilusión ya que nos hace sentir diferentes a los demás y genera
confianza en sí mismo.

La diferenciación que proyecta distingue al que la usa de quienes solo asisten a

una corte, además de generar un respeto a esta misma persona generando
imagen de sabiduría y bondad tal ve justica.
La mujer juega un papel importante al lado del letrado generando en casa un
ambiente agradable para la permanencia de este, interesarse es agradable
siempre que se llegue solo a confidente y a tener un alto grado de comprensión,
otro papel que debe destacarse y guardarse ampliamente es el respeto que se
debe de tener a la mujer que asiste en busca de auxilio y consejo a un letrado, no
abusar de ninguna manera de la posición que guarda la profesión pidiendo a la
mujer algún acto poco leal ni tampoco caer en la insinuación de alguna que se
encontrase deslumbrada por el mismo abogado. Hay que ver a toda mujer con la
moral y autoridad que la madre da a cada hijo y con ese respeto buscar reposo del
alma.

Qué se requiere para un procedimiento judicial, oralidad: la justicia debe ser

sustanciada por la palabra, esta permite responder dudas a instante refleja
situaciones de ánimo, hablando se entiende la gente, da economía de tiempo, de
publicidad al proceso, toda la población puede tener acceso al proceso a través de
este elemento y garantiza el entendimiento de magistrados y jueces que al leer
puedan o no entender algunas cosas del caso.

Los casos deben ser lo más sencillos posibles para que dentro del proceso se
aclaren y terminen estos lo antes posible, así sencillo, y lo más eficaces posibles
para dar al pueblo justica y libertad.

Decálogo del abogado:

1º. No pases por encima de un estado de tu conciencia.

2º. No afectes una convicción que no tengas.

3º. No te rindas ante la popularidad ni adules a la tiranía.

4º. Piensa siempre que tú eres para el cliente y no el cliente para ti.

5º. No procures nunca en los tribunales ser más que los magistrados, pero no
consientas ser menos.

6º. Ten fe en la razón, que es lo que en general prevalece.

7º. Pon la moral por encima de las leyes.

8º. Aprecia como el mejor de los textos el sentido común.

9º. Procura la paz como el mayor de los triunfos.

10º. Busca siempre la justicia por el cambio de la sinceridad y sin otras armas que
las de tu saber.

Conclusión.

El autor descubre un perfil ideal del abogado, aunque un poco desfasado de la

época con diferencia de 100 años lo que compromete un poco el tiempo que hoy
se vive, y el lugar ya que describe la situación de España y menciona a Argentina,
aunque se rescatan muchos valores que al parecer no estaban bien cimentados y
ahora siguen haciendo falta.

El ser abogado da un estatus en México ha tenido en mucho tiempo ese

reconocimiento, de hecho a la fecha se exige el a la sociedad alabanzas por quien
lo ostenta aunque no realice labor alguna de carácter litigante, en este país la
moral y la cultura del esfuerzo son necesariamente una cualidad de la población
se ve a alguien honesto como alguien torpe y a una persona que se esfuerza
como alguien crecido y fuera de su realidad, en suma se habla de trabajar y verse
satisfecho con lo que hay cuando este país ofrece un sinfín de oportunidades para
hacer lo contrario.

Volviendo a la parte moral incluso el secreto profesional dista mucho de ser

aunque en la ley está plasmado y se utiliza por sistema e artilugio del engaño y la
mentira con tal de ganar un caso y poder alardear de este con la intención de
presentar resultados para otros casos por venir y clientes por satisfacer aunque no
sean honestas o leales sus intenciones.
Las relaciones con los clientes pueden y deberían ser con un poco de los que los
médicos nombran una ficha médica en este caso sería una ficha de antecedentes
para conocer al cliente saber de su problema, pero igual entender de donde nace
este y hacia donde podemos dirigirle básicamente tener identidad y empatía para
poder dar un mejor servicio.

La labor de un abogado debe ser por gusto como todo trabajo, si haces o que te
gusta nunca trabajaras en tu vida, entonces hay que saber que se quiere al
momento de decidir profesión, mostrar un libre albedrio al practicar la abogacía y
dar los mejores resultados por el bien de una sociedad justa y equilibrada.

Nunca debe uno dejar de prepararse ya que las leyes suelen ir detrás de
desarrollo de la sociedad y ahora de la ciencia, las nuevas minorías exigen por
separado reconocimiento y la oportunidad de explayarse plenamente, por lo que
hay que aunque a veces se camine contario a la ley buscar justicia social, estar
preparado no solo en el área social y de leyes sino en el área cultural, saber de
pintura , música, literatura para enriquecer así mi léxico y mejorar mi actuar con la
gente y ampliar mi visión del mundo para la mejora de la práctica y la clase.

Trabajar juntos en un despacho suele ser productivo dice el autor destructivo, yo

creo que es más bien de aprendizaje día a día esta profesión recibe a nuevos
abogados con ideas frescas y centradas que orientan a mejorar las leyes de cada
nación.

El uso de la palabra es básico y su estimulación ye entrenamiento dará resultados

amplios en favor de los procesos dígase los resultados esperados en favor de mi
cliente,

Atender y ayudar a pasantes no en este país nadie enseña de a gratis, si quieres

crecer deber empezar desde abajo y esperar pescar algo antes de cumplir con tu
servicio o pasar de noche los primeros años de litigio y con un error tras otro.

En México no hay empatía con la clase más desfavorecida, es pobre por tonto
puede hacer algo, lo que se desconoce es el origen de la pobreza y el motivo de
su permanencia, nadie ayuda a nadie in obtener algo a cambio, y aunque existen
grupo de apoyo y programas, siempre al menos favorecido llevara la mayor
parte en contra con cualquier cosa que haga.

La vestimenta es un representativo, el habito hace al monje si queremos ser

tratados como abogados debemos parecerle, usar las armas requeridas para
implantar justicia y acoger las relaciones laborales no solo de confidencia con el
sexo femenino la idea de la mujer en casa y buen confidente ya no existe, hoy la
mujer muestra una superioridad que se permite verse y que hay de admirarse y
copiar lo más ampliamente posible.

Para ser abogado debe ser creo si honesto, letrado, culto, organizado y sobre todo
con un amplia imagen de la estabilidad y justica social para hacer de este país un
México de oportunidades y buena convivencia.

Bibliografía

 Cámara de Diputados, Código Civil Federal, 02, DOF 07-06-2021, PAG.

248
 Cámara de Diputados, Código Federal de Procedimientos Civiles, 05, DOF
07-06-2021, PAG. 38
 Enciclopedia jurídica 2020. http://www.enciclopedia-juridica.com/d/summun-
jus-summa-injuria/summun-jus-summa-injuria.htm
 Ossorio, Ángel, (S/F), El alma de la toga, Praxis, México.