Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Mensaje - Acceso Directo
Mensaje - Acceso Directo
La obra de Jesús es como un puente que nos da la entrada a presentarnos directamente con
Dios. Jesús es nuestro acceso directo.
Y este Jesús, nuestro Cristo (salvador) es un ejemplo, un modelo a seguir para cada uno de
sus hijos.
“Pues Dios los llamó a hacer lo bueno, aunque eso signifique que tengan que sufrir, tal como
Cristo sufrió por ustedes. Él es su ejemplo, y deben seguir sus pasos.”
1° Pedro 2:21 NTV
“Es cierto, vine del Padre al mundo y ahora dejaré el mundo y volveré al Padre.”
Juan 16:28 NTV
“Pues ni aun el Hijo del Hombre vino para que le sirvan, sino para servir a otros y para dar su
vida en rescate por muchos.”
Mateo 20:28 NTV
Servir a Dios es crear caminos o puentes, para que otras personas accedan y conozcan mejor
a Dios, y de una manera mas rápida de lo que me tomó a mí.
Y aquí radica la gran diferencia entre hacer cosas en la iglesia o servir a Dios. Que, si no
tenemos en nuestra mente este concepto de servicio, solo seremos personas que hacen
cosas.
En este sentido, tenemos tan aprendido que nuestra responsabilidad como cristianos es
predicar y contarles a las personas sobre Jesús. Pero esto queda solo como un conocimiento
lógico e idealista dentro de nuestro interior, pero no practicado. Algo que solo decimos o
pensamos pero que, en la práctica, está muy lejos de la realidad.
Así que el Señor dice: «Este pueblo dice que me pertenece; me honra con sus labios, pero su
corazón está lejos de mí. Y la adoración que me dirige no es más que reglas humanas,
aprendidas de memoria.
Isaías 29:13 NTV
“¡Mira hasta dónde has caído! Vuélvete a mí y haz las obras que hacías al principio. Si no te
arrepientes, vendré y quitaré tu candelabro de su lugar entre las iglesias.”
Apocalipsis 2:5 NTV
El que quiera cambiar esto en su vida mire, observe sus decisiones y vuelva, ¿a qué? a
presentarse ante Dios
“14 Por lo tanto, ya que tenemos un gran Sumo Sacerdote que entró en el cielo, Jesús el Hijo
de Dios, aferrémonos a lo que creemos. 15 Nuestro Sumo Sacerdote comprende nuestras
debilidades, porque enfrentó todas y cada una de las pruebas que enfrentamos nosotros, sin
embargo, él nunca pecó. 16 Así que acerquémonos con toda confianza al trono de la gracia
de nuestro Dios. Allí recibiremos su misericordia y encontraremos la gracia que nos ayudará
cuando más la necesitemos.”
Hebreos 4:14 – 16 NTV