Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
e incorporarse a ella.
El Ser social: Conciencia que tiene cada individuo sobre la importancia que
tiene el hecho de pertenecer a una sociedad. Es capaz de adoptar normas,
valores, costumbres e ideas, funciones y roles sociales. Es la capacidad del
individuo para incorporarse a una sociedad ya establecida e incorporarse a
ella.
Un ser individual es aquel que toma decisiones propias, basadas por su propio
conocimiento o experiencia, no guiado por alguien más y sin guiar a otros,
mientras que un ser social es aquel ser individual, que se trasciende y convive
e interactuar con otros semejantes dentro de una sociedad
Recordemos que la individualidad de una persona, consiste en ser un humano
único, tanto en la dimensión física como mental, siendo esto una característica
natural innata, es decir, cuando alguien te diga que eres único o única, no te
esta mintiendo, en verdad no hay alguien igual que tú, en el mundo entero.
Además, la toma de decisiones, desde la individualidad de la persona, se
realizan con base en su conocimiento y experiencia y aunque en la vida real, si
puede ser influenciado por otros, la decisión final, la toma el individuo solo
(en condiciones de libertad, claro).
Ahora, en el caso de un ser social, debemos considerar que por fuerza parte de
un ser individual, ya que, como decía el filósofo griego, Aristóteles, el ser
humano es un ser social por naturaleza y esto lo podemos comprobar todos los
días de manera cotidiana en prácticamente cualquier entorno, desde los grupos
de amigos en las escuelas, los equipos de trabajo o las grandes multitudes
celebrando algo, las personas siempre buscan acercarse a otras, quizá como
reflejo instintivo de nuestros antepasados, que hace miles de años siempre
buscaban formar parte de un tribu, en busca de protección y compañía
Podemos notar que, en realidad, ambos seres son lo mismo, porque el ser
social, parte del ser individual, para convivir y establecer relaciones, con otras
personas dentro de una sociedad, sin perder su individualidad intrínseca, que
es propia del ser humano, pero dispuesto a recibir y dar influencias y
sentimientos con otros seres sociales.