Está en la página 1de 6

Filosofía política y contemporánea Capítulo 3: Igualdad Liberal.

1. El proyecto de Rawls.
a) Intuicionismo y utilitarismo

Rawls critica que la filosofía política se encontraba en dos extremos: el utilitarismo y el


intuicionismo. El intuicionismo constituye una alternativa insatisfactoria al utilitarismo, aun
cuando hayan instituciones contrarias al utilitarismo, necesitamos una teoría que de sentido a
las instituciones. El intuicionismo nunca fue más allá de las instituciones iniciales para mostrar
cómo están relacionadas entre sí, ni para ofrecer principios que le diesen una estructura.

Existen muchos tipos de intuicionismo que pueden distinguirse por el grado de generalidad de
sus principios, que logre algún compromiso entre ellos y sea de naturaleza más general. Sin
embargo, la aproximación utilitarista no ofrece ningún tipo de criterio para el caso de conflicto
de principios específicos e irreductibles, por eso es necesario buscar en la teoría política. Rawls
se propone desarrollar una teoría política que estructure nuestras distintas instituciones. La
importancia de Rawls es que los filósofos posteriores explican sus teorías contrastándola con
las de Rawls.

b) Los principios de justicia.

Idea de justicia de Rawls: reparto igual de los bienes sociales. Tratamos a las personas como
iguales no con la eliminación de todo tipo de desigualdades, sino solo aquellas que perjudican
a alguien. Esta concepción de justicia no es completa, los distintos bienes que pueden ser
distribuidos por este principio pueden entrar en conflicto. Rawls para solucionar el problema,
descompone la concepción general en tres partes, de acuerdo al principio de “prioridad
lexicológica”. El primer principio es: “Cada persona ha de tener un derecho igual al más amplio
y total sistema de libertades básicas, compatible con un sistema similar de libertades para
todo”. Segundo principio: “las desigualdades económicas y sociales tienen que estructurarse
de manera que redunden en un mayor beneficio para los más desventajadas y que los cargos y
funciones sean asequibles para todos en igualdad de oportunidades”. De acuerdo a estos
principios algunos principios son más importantes que otros. Estos dos principios configuran la
respuesta de Rawls a la cuestión de la justicia.

El texto se centra en el segundo principio: “principio de la diferencia”. Rawls tiene dos


argumentos a favor de sus principios de justicia: el primero es el de oponer su teoría a aquella
que toma por ideología predominante respecto a la justicia distributiva, esto es igualdad de
oportunidad. El segundo es un cierto Estado pre social en que la gente tenga que elegir que
principios van a regulas la sociedad, elegirían sus principios.

2. El argumento intuitivo a favor de la igualdad de oportunidades:

La justificación de la distribución se basa en la igualdad de oportunidades. Se aceptan las


desigualdades solo si hubo una competencia equitativa para la adjudicación de funciones y
situaciones que llevaron a tener esos beneficios. El problema de Rawls es que aunque exige
igualdad de oportunidades en la asignación de situaciones, niega a una porción mayor de los
recursos sociales en esas situaciones. Las personas solo pueden reclamar una porción mayor
de recursos en caso que de ese modo se van a beneficiar los que tienen una porción menor. La
idea de igualdad de recursos a algunos les parece equitativa, porque asegura que el destino de
las personas está determinado por sus elecciones y no por sus circunstancias.
La idea de igualdad de oportunidades es: que es justo que los individuos tengan porciones
desiguales de bienes sociales, en la medida en que dichas desigualdades hayan sido ganadas y
merecidas por los individuos, esto es en la medida que sean resultado de sus acciones y
decisiones. Sin embargo, se pasa por alto que hay cualidades naturales (raza, posición social)
que influyen y que podrían considerarse injustas. Las cualidades naturales y las circunstancias
sociales son cuestiones de pura suerte y las pretensiones morales de las personas no debiesen
depender de ese puro azar. Ambas son arbitrarias. La visión predominante solo reconoce las
diferencias en las circunstancias sociales e ignora las cualidades naturales. Este es un límite
arbitrario con respecto a la aplicación de la intuición central.

Nadie merece beneficiarse de sus capacidades naturales, pero no es injusto permitir que tales
beneficios cuando resulten ventajosos para aquellos menos afortunados en la lotería natural.
Este es el primer argumento de Rawls para su teoría de porciones equitativas. El principio de
diferencia dice que todas las desigualdades deben redundar en beneficio de los que están
peor, pero no explica los casos en que alguien que no tiene grandes cualidades naturales pero
que a base de su esfuerzo haya asegurado ingresos mayores que otro, por ejemplo.

3. El argumento del contrato social.

El segundo argumento de Rawls es el del “contrato social” acerca del tipo de moralidad política
que la gente elegiría si tuviera que fundar la sociedad a partir de una situación original. Este es
el principal argumento de Rawls, pero parece poco sólido porque presupone un estado natural
anterior a toda autoridad política que pueda exigir obediencia a los demás, es difícil pensar
que en esta situación que un contrato pueda darle a una autoridad tales poderes y
responsabilidad. Podemos decir de un cierto acuerdo que es el contrato que la gente hubiese
firmado en un estado natural, y por lo tanto es un cuerdo hipotético. Según Dworkin no
deberíamos pensar en el contrato social como un acuerdo real e hipotético sino como un
medio para identificar las implicaciones de ciertas premisas morales relativas a la igualdad
moral de las personas.

La idea de estado natural para conformar la idea de igualdad moral de los individuos, esta idea
contiene la pretensión de que todos nacemos libres e iguales y nadie nos puede subordinar.
Para explicar que las personas puedas ser gobernadas está la idea de que los individuos
aceptarían ceder ciertos poderes al Estado, si este los protege de las incertezas y carencias. El
argumento contractual se combina con el argumento intuitivo, porque las incertidumbres de
un estado natural afectan a todos, pero hay gente con más recursos que no va a aceptar el
contrato social a menos que este conserve sus ventajas naturales, esto no resulta equitativo
desde la óptica de Rawls. Por eso Rawls desarrolla una interpretación conocida como la
posición original donde la gente se encuentra tras un “velo de la ignorancia” donde nadie
conoce su lugar en la sociedad ni cuáles son sus capacidades naturales, esto asegura que las
circunstancias sociales o naturales no darán a nadie ventajas ni desventajas al escoger los
principios ya que no son capaces de precisar que principios van a favorecer su condición
particular,

El contrato social de Rawls es una manera de conformar una cierta concepción de la igualdad
y de extraer las consecuencias de dicha concepción para la justa regulación de las instituciones
sociales. La premisa del argumento es la igualdad, para criticarlo es necesario probar que no
representa una concepción adecuada de la igualdad.

¿Cómo resultan elegidos los principios de justicia? Aunque no sabemos qué situación
ocuparemos en la sociedad, existen ciertos bienes que sí querremos o necesitaremos para vivir
una buena vida, en la teoría de Rawls son los “bienes primarios”. Existen dos tipos de bienes
primarios: los bienes primarios sociales (ingresos, riqueza, oportunidades, poderes, derechos y
libertades) y bienes primarios naturales (aptitudes naturales como la salud). En la elección de
estos principios de justicia las personas que se haya tras el velo de la ignorancia, tratan de
asegurar el mejor acceso posible a los bienes sociales primarios distribuidos por instituciones
sociales, es decir los bienes sociales primarios. El presupuesto del propio interés racional,
combinado con el celo de la ignorancia logra el mismo propósito que la bondad porque
cualquier rol de la persona en la sociedad me podría tocar a mí.

Existen muchos principios diferentes que podían elegir. Podrían elegir un principio utilitarista
que impela a las instituciones sociales a distribuir sus bienes sociales primarios de tal suerte
que se incremente al máximo la utilidad en la sociedad, el problema es que algunas personas
tengan menos en favor de un bien mayor de las demás. Si supiéramos cuáles serían las
probabilidades de vernos desventajados en una sociedad utilitarista, tendríamos las
condiciones para saber si arriesgarnos, pero el velo de la ignorancia excluye esa información.
En estos casos Rawls dice que una elección racional es maximizar lo que recibiría en caso de
nacer en la peor posición. Rawls concluye que las personas en la situación original elegirían el
principio de la diferencia, las personas.

a) La convergencia de los dos argumentos.

Antes de determinar qué principios no resultarían elegidos en la situación original,


necesitamos saber qué descripción de la situación original aceptar. Tras afirmar que la
situación original debería conformar la idea de que las personas son seres morales iguales,
además comprobar si los principios que serían elegidos armonizan con nuestras convicciones
relevantes. El argumento intuitivo y del contrato, no son independientes, pues están
generados por el mismo conjunto de intuiciones relevantes.

Relativo al instrumento del contrato, en primer lugar, la situación original nos proporciona una
vía para conformar nuestras intuiciones, en la misma medida en que los primeros teóricos
invocaban el estado natural para configurar la idea de igualdad natural. En segundo lugar
aunque nos dice que el argumento de la igualdad de equitativa de oportunidades no es
suficiente no nos dice que más se necesita y la estratagema del contrato puede contribuir a
precisar más nuestras intuiciones. En tercer lugar, el contrato ofrece una perspectiva a partir
de la cual podemos poner a prueba intuiciones opuestas.

Hay dos teorías una que utiliza el estratagema del contrato, la otra dice que hay que ponerse
en el lugar del otro. Mientras la teoría del contrato ven a cada persona en la sociedad como un
posible receptor futuro de su propio bien, en la que hay que ponerse en el lugar del otro ven a
cada persona en la sociedad como tino de los componentes de su propio bien. Existe una falta
de lógica en ambas teorías para de finir la idea de igualdad moral: el concepto del velo de la
ignorancia intenta configurar la idea de que las demás personas importan en y por sí mismas
no sólo como componente de nuestro propio bien, pero lo hace por medio de la imposición de
una perspectiva a partir de la cual el bien de los demás es simplemente un componente de
nuestro propio bien.

Rawls ha encontrado una alternativa sistemática al utilitarismo que está en armonía con
nuestras intuiciones, entonces la suya resulta ser una teoría muy recursiva, en ningún modo
debilitada por la interdependencia entre el argumento intuitivo y el argumento contractual.

b) Problemas internos
Una de las intuiciones centrales de Rawls se refiere a la dsitinción entre elecciones y
circunstancias. Rawls critica la teoría de la igualdad de oportunidades pues le da demasiada
importancia a nuestras aptitudes naturales, pero al mismo Rawls apenas considera la
influencia de nuestras decisiones.

A. La compensación por las desigualdades naturales.

Rawls dice que la pretensión de la gente de bienes sociales no debería depender de sus
cualidades naturales, para él el principio de diferencia es el mejor principio para garantizar que
las asignaciones naturales no tengan una influencia injusta. Sin embargo, el destino de la
gente se puede ver influenciado por factores arbitrarios porque no tiene en cuenta la posesión
de bienes primarios naturales en la determinación de quien está peor. Si dos personas tienen
los mismos bienes sociales primarias ambas se encontrarían bien situadas, pero no considera
que alguna de ellas pueda tener problemas de salud u otra desventaja natural. El argumento
intuitivo nos dice los bienes primarios naturales son igual de importantes que los bienes
sociales y sería incorrecto decir que una persona resulte favorecida o desfavorecida por esta
posición pues es parte del azar. El principio de diferencia asegura que los mejores dotados no
obtienen más bienes sociales sólo debido al lugar arbitrario que ocupan en la distribución de
asignaciones naturales y que los menos favorecidos no se encuentran privados de bienes
sociales solo por su situación, pero esto no resuelve el problema de una persona enferma que
va tener que soportar mayores costes aun teniendo los mismos bienes sociales, más que
eliminar esa barrera el principio solo lo tolera.

La posición de Rawls era que las desiguladades naturales y sociales son igualmente de
inmerecidas por lo que es “incierto”. Del mismo modo que las desigualdades sociales deberían
ser compensadas y las desigualdades naturales no deberían influir en la distribución. Peros si
decimos que ambas son inciertas ambas deberían compensarse, pero Rawls no lo plantea así.

B. Subvencionar las elecciones de la gente

Por lo común sentimos que los costes no elegidos tienen sobre nosotros una pretensión mayor
que los elegidos voluntariamente. Rawls solo permite la desigualdad si beneficia al menos
favorecidos, si alguien con las mismas condiciones obtiene más renta, por ejemplo, el gobierno
le quitará su excedente hasta igualar la renta con la otra persona de su misma condición. Rawls
defiende el principio de diferencia diciendo que contrarresta las desigualdades de las
contingencias naturales y sociales. Cuando las desigualdades en ingresos son el resultado de
las elecciones y no las circunstancias, el principio de diferencia crea, más que elimina, la
injusticia. Sería injusto pedir que alguien pague por los costes de mis elecciones. Pero el
principio de diferencia no hace ninguna distinción entre desigualdades elegidas y no elegidas,
por lo tanto un resultado posible de este principio es hacer que algunas personas paguen por
las elecciones de otras.

4. Dworkin y la igualdad de recursos.

Dworkin acepta que el objetivo de ser “sensible a la ambición” e “insensible a las cualidades”
motiva el principio de diferencia de Rawls, pero plantea otra teoría con un esquema
distributivo diferente.

a) Pagar por las propias elecciones: la subasta sensible a la ambición.

Con la base que todos los individuos tiene idénticas aptitudes naturales, Dworkin propone que
todos los recursos de la sociedad están a remate en una subasta, en la cual todos participan.
Cada uno tiene un poder de compra idéntico para hacer ofertas por aquellos recursos para
satisfacer sus planes de vida. Por tanto no tendrían los mismos bienes que otro, por lo que si
los hubiese querido habría hecho una mejor oferta. A esto Dworkin lo llama “test de la
envidia” si lo satisface las personas son tratas con igual consideración, sus diferencias serían
sus diferentes ambiciones de lo que le da valor a su vida. En estos casos los tres objetivos de la
teoría de Rwls quedarían satisfechos: respetar la igualdad moral de las personas, reducir los
efectos de las desventajas moralmente arbitrarias y aceptar la responsabilidad por nuestras
elecciones.

b) Compensar las desventajas naturales: el esquema del seguro.

En el mundo real, la subasta no podrá satisfacer el test de la envidia, porque algunas


diferencias entre personas no resultarán elegidas (situación del minusválido que está en
desventaja en la subasta) Dworkin postula que para esas personas que necesitan costes extras
para estar en igualdad, pagar esos costes antes de la subasta. La compensación anterior a la
subasta aseguraría que cada persona sea iguyalmente capaz de elegir su plan de vida. Sin
embargo esto no funcionaría, porque ninguna cantidad de bienes sociales compensará algunas
desventajas naturales (por ejemplo una enfermedad incurable) Una plena igualdad en las
circunstancias no parece realizable.

Uno de los objetivos de igualar las circunstancias era que cada persona actuase de acuerdo a
sus planes de vida, pero nuestras circunstancias afectan a nuestra capacidad para lograr
nuestras ambiciones. Dadas estas dificultades la negativa de Rawls a compensar las
desventajas naturales tiene sentido. Al incluir las desventajas naturales en el indicador que
determina a los menos favorecidos parece crearse un problema insoluble. Para la teoría de
Dworkin, a la igual que la de Rawls, debemos suponer que las personas están tras un velo de la
ignorancia y que son susceptibles a tener una desventaja natural. Todas las personas están
propensas a sufrir unas desventajas, pero podrían comprar “un seguro” que las prevenga de
estas, de tal manera que nadie acaba en una posición privilegiada en la compra del seguro. El
sistema de seguro vendría a hacer una desventaja contra aquellas que tienen mayores
cualidades y que por tanto deberían pagar ese seguro sin necesitarlo.

c) Los equivalentes en el mundo real: impuestos y redistribución.

¿Cómo aplicar el modelo del seguro al mundo real? En primer lugar no existe forma de medir
cuales son las ventajas y desventajas reales de la gente. Personas con iguales talentos pueden
terminar teniendo grados diferentes de habilidades, o incluso desarrollarlas más esto resulta
difícil de medir. Además resulta imposible determinar antes de la subasta qué es lo que debe
contar como una ventaja natural, esto depende del tipo de habilidades que valoren las
personas, lo que depende a la vez de los objetivos que tengan para sus vidas. Dworkin da la
respuesta de grabar a los más “ricos” aunque lo hayan conseguido con esfuerzo en favor de los
más “pobres” aunque hubiesen llegado a esa situación por sus decisiones. Un segundo
problema es que en el mundo real carecemos de información completa, de suerte que el test
de la envidia puede no cumplirse cuando ocurren hechos inesperados.

Lo anterior serían causas de desviación respecto del ideal de una distribución. Lo ideal es el
destino de las personas esté determinado por las elecciones que hacen desde un punto de
vista justo y equitativo. Pero esto es impracticable porque hay personas que por las
circunstancias naturales se ven desfavorecidas, pero también podría resultar costear el
resultado de sus elecciones. Dworkin argumenta que una distribución justa debe identificar
qué aspectos de la posición económica de alguien deriva de sus ventajas y cuales de las
ventajas y desventajas no son una cuestión de lección.

La teoría de Dworkin pretende ser más sensible a la ambición y menos sensible a las cualidades
personales que el principio de diferencia de Rawls. En consecuencia el igualitarismo de Rawls
supone una reacción contra el utilitarismo y lo mismo es cierto respecto a la relación entre
Dworkin y Rawls.

5. La política de la igualdad liberal.

Una forma de describir el panorama político es decir que los liberales buscan un compromiso
entre los liberalistas por la derecha que creen en la libertad, y los marxistas por la izquierda
que creen en la igualdad.se propicia el estado de bienestar para alcanzar la mejor realización
práctica de las demandas de la igualdad. Dworkin expone sus ideas como si el resultado de la
puesta en práctica de su concepción de Justicia fuese el incremento del nivel de las
transferencias de ingreso. Las personas no elegirían incorporarse a relaciones sociales que les
nieguen oportunidades o les sometan a relaciones de dominación o degradación. Los liberales
debieran asegurar que nadie tuviese el poder para establecer relaciones de dominación.

También podría gustarte