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Pero a mediados del siglo XIX (Diecinueve) tusco los cimientos religiosos,
políticos, sociales y culturales con su teoría de la evolución de las especies.
Estamos seguros que así como nuestro grupo nos gusto esta teoría a ustedes
les va a encantar saldrán con interés para seguir investigando sobre este
tema.
Objetivos
Objetivo General:
Objetivo Especifico:
II-Conocer la vida del científico ingles su trabajo, sus teorías y sus problemas
sociales al plantear esta teoría.
-Trabajo grupal.
-Investigación documental.
-Encuesta.
-Lecturas de comprensión.
-Investigación en internet.
Creacionismo
El creacionismo es la creencia religiosa que el Universo y la vida se originaron
"de actos concretos de creación divina". Para los creacionistas de la Tierra
joven, esto incluye una interpretación bíblica literal de la narrativa de
creación del Génesis y el rechazo de la teoría científica de
la evolución.Mientras la historia del pensamiento evolutivo se desarrollaba a
partir del siglo XVIII, varias posturas apuntaron en reconciliar las religiones
brahmánicas y el Génesis con la biología y otras ciencias desarrolladas en la
cultura Occidental. Aquellos que sostenían que las especies se habían creado
por separado (como Philip Gosse en 1857) eran llamados comúnmente
"partidarios de la creación" pero también "creacionistas", como se lee en la
correspondencia privada entre Charles Darwin y sus amigos. Mientras
la controversia creación-evolución se desarrollaba, el término "anti-
evolucionistas" se hizo común. En 1929 en los Estados Unidos, el término
"creacionismo" se asoció originalmente con el fundamentalismo cristiano,
específicamente con su rechazo de la evolución humana y la creencia en
una Tierra joven (con una edad entre 5700 y 10 000 años). No obstante, este
uso estuvo disputado por otros grupos, como los creacionistas de la Tierra
vieja y los creacionistas evolutivos, quienes albergan conceptos diferentes de
creación, como la aceptación de la edad de la Tierra y la evolución biológica
entendida por la comunidad científica.
Hoy, la Afiliación Científica Estadounidense, una organización religiosa
prominente en los EE.UU., reconoce que existen diferentes opiniones entre
los creacionistas respecto al método de creación, mientras que reconocen
la unidad en la creencia brahmánica de que Dios "creó el universo”. Desde los
años 1920, el creacionismo literalista en Estados Unidos ha disputado
las teorías científicas, como la evolución, la que proviene de observaciones
naturales del Universo y la vida. Los creacionistas literalistascreen que la
evolución no puede explicar adecuadamente
la historia, diversidad y complejidad de la vida en la Tierra. Los creacionistas
fundamentalistas de la fe cristiana usualmente basan su creencia en una
lectura literal de la narrativa de creación del Génesis. Otras religiones o
comparten el mito de creación del Génesis o tienen diferentes mitos de
creación conducidos por deidades, a la vez que los miembros de una misma
religión varían en su aceptación de los descubrimientos científicos.
Cuando la investigación científica produce evidencia empírica y conclusiones
teóricas que contradicen una interpretación creacionista literal de las
escrituras, los creacionistas de la Tierra joven a menudo rechazan las
conclusiones de la investigación, sus teorías científicas subyacentes o su
metodología. Ésta tendencia ha llevado a una controversia política y
teológica. Las ramas pseudocientíficas del creacionismo incluyen la ciencia de
la creación, la geología diluviana y el inteligente, así como subconjuntos de
la pseudoarqueología.Los creacionistas generalmente rechazan el consenso
científico sobre la evolución y el antepasado común, la historia geológica de
la Tierra, la formación del sistema Solar y el origen del Universo.
La evolución teísta, también conocida como creacionismo evolutivo, es un
intento de reconciliar la religión con los hallazgos científicos sobre la edad de
la Tierra y la evolución. El término cubre una gama de posturas, como la
del creacionismo de la Tierra vieja.
Además de su hermano, cinco años mayor que él, Charles tuvo tres hermanas
también mayores y una hermana menor. Tras la muerte de su madre en
1817, su educación transcurrió en una escuela local; en su vejez recordaría su
experiencia allí como lo peor que pudo sucederle a su desarrollo intelectual.
Ya desde la infancia dio muestras de un gusto por la historia natural que él
consideró innato y, en especial, de una gran afición por coleccionar cosas
(conchas, sellos, monedas o minerales), el tipo de pasión «que le lleva a uno
a convertirse en un naturalista sistemático, en un experto, o en un avaro».
Vocación y formación
Más que de los estudios académicos que se vio obligado a cursar, Darwin
extrajo provecho en Cambridge de su asistencia voluntaria a las clases del
botánico y entomólogo John Henslow, cuya amistad le reportó «un beneficio
inestimable» y que tuvo una intervención directa en dos acontecimientos
que determinaron su futuro: la expedición a Gales y, sobre todo, el viaje del
Beagle. Al término de sus estudios en abril de 1831, el reverendo Henslow lo
convenció de que profundizase en la geología, materia por la que las clases
recibidas en Edimburgo le habían hecho concebir verdadera aversión, y le
presentó a Adam Sedgwick, fundador del sistema cambriano, quien inició
precisamente sus estudios sobre el mismo en una expedición al norte de
Gales realizada en abril de ese mismo año en compañía de Darwin (treinta
años más tarde, Henslow se vería obligado a defender al discípulo común
ante las violentas críticas dirigidas por Sedgwick a las ideas evolucionistas).
Selección natural
La selección natural es un fenómeno de la evolución que se define como la
reproducción diferencial de los genotipos de una población biológica. La
formulación clásica de la selección natural establece que las condiciones de
un medio ambiente favorecen o dificultan, es decir, seleccionan la
reproducción de los organismos vivos según sean sus peculiaridades. La
selección natural fue propuesta por Darwin como medio para explicar la
evolución biológica. Esta explicación parte de tres premisas; la primera de
ellas el rasgo sujeto a selección debe ser heredable. La segunda sostiene que
debe existir variabilidad del rasgo entre los individuos de una población. La
tercera premisa aduce que la variabilidad del rasgo debe dar lugar a
diferencias en la supervivencia o éxito reproductor, haciendo que algunas
características de nueva aparición se puedan extender en la población. La
acumulación de estos cambios a lo largo de las generaciones produciría todos
los fenómenos evolutivos.
En su forma no inicial, la teoría de la evolución por selección
natural constituye el gran aporte1 de Charles Darwin (e,
independientemente, por Alfred Russel Wallace), fue posteriormente
reformulada en la actual teoría de la evolución, la síntesis moderna.
En biología evolutiva se la suele considerar la principal causa del origen de las
especies y de su adaptación al medio.
La selección natural puede ser expresada como la siguiente ley general,
tomada de la conclusión de El origen de las especies:
Existen organismos que se reproducen y la progenie hereda características de
sus progenitores, existen variaciones de características si el medio ambiente
no admite a todos los miembros de una población en crecimiento. Entonces
aquellos miembros de la población con características menos adaptadas
(según lo determine su medio ambiente) morirán con mayor probabilidad.
Entonces aquellos miembros con características mejor adaptadas
sobrevivirán más probablemente.
Darwin, El origen de las especies
El resultado de la repetición de este esquema a lo largo del tiempo es la
evolución de las especies.
En la teoría moderna
En la teoría sintética la selección natural no es la única causa de evolución,
aunque sí la que tiene un papel más destacado. El concepto de selección
natural se define ahora de un modo más preciso: como la reproducción
diferencial de los genotipos en una población. Desde el momento en que
existen diferencias en éxito reproductivo de las distintas variantes genéticas,
existe la selección natural. Por ejemplo: si los individuos más verdosos en una
población de insectos-hoja aportan unos tres descendientes a la siguiente
generación, y los individuos marrones aportan como media 1,5
descendientes, está habiendo selección a favor de los verdes. Las diferencias
en éxito reproductivo pueden ocurrir por diversas causas (diferente
fertilidad, riesgo de muerte por depredadores, atractivo sexual, capacidad
para explotar los recursos alimenticios, etc.).
Figuras importantes del síntesis, y los tres fundadores de la genética de las
poblaciones, fueron Ronald Fisher, quién escribió The Genetical Theory of
Natural Selection en 1930, J.B.S. Haldane, quién introdujo el concepto del
«costo» de la selección natural, y Sewall Wright, quién elucidó sobre la
selección y la adaptación,
Generalmente, existe una correlación entre la eficacia reproductiva de los
portadores de un genotipo y la adaptación al medio que éste les otorga. Por
tanto, los rasgos que confieren ventajas adaptativas comúnmente son
seleccionados a favor y propagados en las poblaciones (en algunos casos, un
genotipo podría otorgar éxito reproductivo sin aportar mayor adaptación al
medio, y sería seleccionado igualmente). La teoría de la selección natural
aportó por primera vez una explicación científica satisfactoria para múltiples
enigmas científicos del mundo biológico, especialmente el de la "apariencia
de diseño" que existe en los seres vivos. Permitió, por tanto, que la Biología
pudiera prescindir de los elementos divinos y sobrenaturales y se convirtiera
así en una auténtica ciencia.
Hoy en día, la evolución por selección natural se estudia en diversos tipos de
organismos, mediante experimentos de laboratorio y de campo, y se
desarrollan métodos para averiguar qué genes han estado recientemente
sometidos a la acción de la selección natural y con qué intensidad.
Aptitud
Artículo principal: Aptitud biológica
El concepto de aptitud es clave en la selección natural. A grandes rasgos, los
individuos que son más aptos tienen mayor potencial de supervivencia,
similar a la popular frase «supervivencia del más apto». Sin embargo, y como
ocurre con el término selección natural, el significado preciso es más
sutil. Richard Darwin lo evita totalmente en sus últimos libros, aunque dedica un
capítulo de su libro El fenotipo extendido a discutir sobre los distintos
sentidos en que el término se usa. La teoría evolutiva moderna define la
aptitud no sobre la base de cuánto vive el organismo, sino sobre la base de
cuánto se reproduce. Si un organismo vive la mitad que otros de su especie,
pero en comparación con el resto, el doble de sus descendientes llegan a la
edad adulta; entonces sus genes sobrevivirán y se propagarán a la siguiente
generación.
Aunque la selección natural opera sobre los individuos, los efectos del azar
hacen que la aptitud sólo pueda ser definida en promedio para los individuos
de una población. La aptitud de un determinado genotipo corresponde al
efecto medio sobre todos los individuos con ese genotipo. Los genotipos de
muy baja aptitud causan que sus portadores tenga muy poca —o ninguna—
descendencia en promedio. Se pueden citar como ejemplos
muchas enfermedades genéticas humanas, como la fibrosis quística.
Como la aptitud es una cantidad promediada, es también posible que una
mutación favorable que se dé en un individuo no llega a propagarse al grupo
si el individuo fallece antes de la edad adulta por otros motivos. La aptitud
depende totalmente del entorno. Condiciones como la anemia de células
falciformes son muy inaptas en la población humana general. Sin embargo, la
anemia de células falciformes confiere al portador inmunidad a la malaria por
lo que su aptitud en entornos con altas tasas de infección de malaria es muy
alta.
Tipos de selección natural
La selección natural puede actuar sobre cualquier rasgo fenotípico heredable
y cualquier aspecto del entorno puede producir presión selectiva, esto
incluye la selección sexual y la competición con miembros tanto de la misma
como de otra especie. Sin embargo, esto no implica que la selección natural
siga siempre una dirección y que resulte en evolución adaptativa. La
selección natural produce a menudo el mantenimiento del statu
quo mediante la eliminación de las variantes menos aptas.
La unidad de selección puede ser el individuo u otro nivel dentro de la
jerarquía de organización biológica como los genes, las células y los grupos
familiares. La cuestión sobre si la selección natural actual a nivel de grupo (o
especie) para producir adaptaciones que benefician a un grupo mayor, sin
vínculos familiares, suscita aún un tenue debate. Así mismo, existe un cierto
debate sobre si la selección a nivel molecular anterior a mutaciones genéticas
y a la fertilización del zigoto debe considerarse selección natural
convencional puesto que tradicionalmente se ha llamado selección natural a
una fuerza exterior y ambiental que actúa sobre un fenotipo después del
nacimiento. Algunas revistas científicas distinguen entre selección natural y
selección genética llamando informalmente a la selección de mutaciones
como preselección.
La selección a otros niveles, como el gen, puede resultar en una mejora para
el gen y al mismo tiempo en un perjuicio para el individuo portador del gen.
Este proceso se denomina conflicto intragenómico. En conjunto, el efecto
combinado de todas las presiones a los distintos niveles (gen, individuo,
grupo) es lo que determina la aptitud de un individuo y por tanto el resultado
de la selección natural.
La selección natural ocurre en cada etapa de la vida de un individuo. Un
organismo ha de sobrevivir hasta la edad adulta para poder reproducirse. La
selección de aquellos que alcanzan la etapa adulta es llamada selección de
viabilidad. En muchas especies los adultos han de competir entre sí para
conseguir parejas sexuales. Este mecanismo se denomina selección sexual y
el éxito en la misma determina quienes serán los padres de la siguiente
generación. Cuando los individuos pueden reproducirse en más de una
ocasión, la supervivencia en la edad adulta aumenta la descendencia. A este
proceso se le llama selección de supervivencia.
La fecundidad, tanto de machos como de hembras, puede verse limitada por
la "selección de fecundidad". Así, la viabilidad de los gametos producidos
variara. Los conflictos intragenómicos derivan en selección genética.
Finalmente, la unión de algunas combinaciones de óvulos y esperma será
estadísticamente más compatible que otras. A esto se le llama selección por
compatibilidad.
Existen 4 Tipos a veces considerados 3 de selección natural, clasificados
según los individuos que sobreviven en cada tipo de selección, es decir, según
cuántos sobrevivan:
Selección estabilizadora
Selección direccional
Selección disruptiva o Selección balanceada
Selección sexual
Selección sexual
Artículo principal: Selección sexual
Es útil diferenciar entre selección ecológica y selección sexual. La selección
ecológica se refiere a cualquier mecanismo de selección como resultado del
entorno. Por otra parte, la selección sexual se refiere específicamente a la
competición por la pareja sexual.
La selección sexual puede ser intrasexual, que es el caso de competición
entre individuos del mismo sexo en una población, o intersexual, que es
cuando un sexo controla el acceso a la reproducción mediante la elección de
pareja dentro de la población. Normalmente, la selección intrasexual se da
en forma de competición entre machos y la intersexual como elección por
parte de las hembras de los mejores machos, debido al mayor coste que para
las hembras generalmente conlleva la cría. Sin embargo, algunas especies
presentan los papeles sexuales cambiados y es el macho el que se muestra
más selectivo a la hora de escoger pareja. El ejemplo más conocido es el de
ciertos peces de la familia Syngnathidae. También se han encontrado
ejemplos similares en anfibios y pájaros.
Algunas características presentes sólo en uno de los dos sexos en especies
concretas se pueden explicar a través de la presión ejercida por el otro sexo
en su elección de pareja. Por ejemplo, el extravagante plumaje de algunos
pájaros macho como el pavo real. Así mismo, la agresión entre miembros del
mismo sexo se asocia en ocasiones con características muy distintivas como
los cuernos del ciervo, que sirven para pelear con otros ciervos. En general, la
selección intersexual se asocia con el dimorfismo sexual, que incluye diferencias
en el tamaño del cuerpo de los machos y las hembras.
Ejemplos de selección natural
Un ejemplo muy conocido de selección natural es el desarrollo de resistencia
a antibióticos en microorganismos. Desde el descubrimiento de
la penicilina en 1928 por Alexander Fleming, los antibióticos se han usado
para combatir las enfermedades de origen bacteriano. Las poblaciones
naturales de bacterias contienen una gran variación en su acervo génico,
principalmente como resultado de mutaciones. Cuando se enfrentan a un
antibiótico, la mayoría mueren enseguida. Sin embargo, algunas tienen
mutaciones que las hacen menos débiles a ese antibiótico concreto. Si el
enfrentamiento con el antibiótico es corto, algunos de estos individuos
sobrevivirán al tratamiento. Esta selección eliminadora de individuos poco
aptos de una población es la selección natural.
Las bacterias supervivientes se reproducirán formando la siguiente
generación. Debido a la eliminación de los individuos mal adaptados en la
generación pasada, la población contendrá más bacterias que tienen cierto
grado de resistencia antibiótica. Al mismo tiempo, surgen nuevas mutaciones
de las cuales algunas pueden añadir más resistencia a la bacteria portadora
del gen mutante. Las mutaciones espontáneas son poco frecuentes y las
ventajosas son aún más infrecuentes. Sin embargo, las poblaciones de
bacterias son lo bastante numerosas para que algunos individuos contengan
mutaciones beneficiosas. Si una nueva mutación reduce la susceptibilidad al
antibiótico, los individuos que la porten tienen más probabilidad de
sobrevivir al antibiótico y reproducirse.
Con tiempo y exposición al antibiótico suficientes, acaba apareciendo una
población de bacterias resistentes al antibiótico. Esta nueva población de
bacterias resistentes está adaptada óptimamente al entorno en que
evolucionó. Sin embargo, ha dejado de estar adaptada óptimamente al
antiguo entorno en el que no había antibiótico. El resultado de la selección
natural en este caso son dos poblaciones que están adaptadas de forma
óptima a su ambiente específico pero que están inadaptadas en cierto grado
al otro ambiente.
El uso extendido y el abuso de antibióticos ha traído consigo un incremento
de la resistencia de los microbios, hasta el punto de que el estafilococo áureo
MRSA está considerado una amenaza para la salud debido a su relativa
invulnerabilidad a las medicinas existentes. Las estrategias de tratamiento
incluyen el uso de antibióticos más potentes. Sin embargo, han aparecido
nuevas ramificaciones del MRSA son resistentes incluso a estas medicinas.
Esto es un ejemplo de un campaña armamentística evolutiva, en la que las
bacterias evolucionan hacia formas más resistentes y los investigadores
médicos desarrollan nuevos antibióticos. Una situación similar ocurre con las
plantas e insectos resistentes a los pesticidas. Las carreras armamentísticas
ocurren también sin intervención humana. Un caso bien documentado es la
difusión de cierto gen en la mariposa Hypolimnas bolina que protege a los
machos frente a la muerte ocasionada por la bacteria Wolbachia. Se sabe que
este gen se ha desarrollado tan sólo desde el año 2002.
Evolución por selección natural
Un requisito para que la selección natural conduzca a evolución adaptiva,
nuevos rasgos y especiación, es la presencia de variación genética heredable
que comporte diferencias de aptitud (es decir, que la variación genética
resulte en individuos más y menos aptos para sus circunstancias). La
variación genética es el resultado de mutaciones, recombinaciones y
alteraciones en el cariotipo (número, forma, tamaño y organización interna
de los cromosomas). Cualquiera de estos cambios puede tener un efecto que
sea muy ventajoso o desventajoso, pero en general los efectos grandes son
poco comunes. Los cambios en el material genético solían considerarse
neutrales o cuasineutrales porque ocurrían en el ADN no codificante o
resultaban en sustituciones sinónimas (la proteína sintetizada por el gen
mutado era a efectos prácticos la misma que la del gen sin mutar). Sin
embargo, estudios recientes han demostrado que muchas mutaciones en el
DNA no codificante sí tienen efectos perniciosos. La tasa de mutación y el
efecto en el individuo dependen del organismo concreto, sin embargo, a
partir de datos basados en análisis sobre humanos se considera que la
mayoría de las mutaciones son ligeramente perjudiciales.
Por definición, los individuos más aptos tienen más probabilidad de
contribuir con descendientes a la siguiente generación, mientras que los
menos aptos tendrán menos descendientes o morirán antes de alcanzar la
edad adulta. Como resultado, los alelos que en promedio conllevan mejor
adaptación (aptitud) son más abundantes en la siguiente generación,
mientras que los alelos que tienden a perjudicar a los individuos portadores,
también tienden a desaparecer. Si las presiones selectivas -temperatura,
abundancia de agua y cualquier otra condición del entorno- se mantienen
relativamente constantes, los alelos beneficiosos se propagan por la
población transformándose en los dominantes (en el sentido de más
abundantes) y los alelos perniciosos desaparecen. En cada generación
aparecen nuevas mutaciones y recombinaciones que producen un nuevo
espectro de fenotipos. Por lo tanto, cada nueva generación se enriquece con
la abundancia de alelos que contribuyen a los rasgos que fueron
anteriormente favorecidos por la selección natural, mejorando así
gradualmente estos rasgos durante generaciones sucesivas.
Algunas mutaciones ocurren en los genes reguladores. Estos cambios pueden
tener un gran efecto en el fenotipo del individuo porque estos genes se
encargan de regular la función de muchos otros genes. La mayoría -aunque
no todas- las mutaciones en los genes reguladores producen zigotos
inviables. Ejemplos de mutaciones en los genes reguladores en el
hombre que no son letales ocurren en los genes HOX, que pueden causar la
formación de una costilla en las cervicales o de múltiples dedos. Cuando estas
mutaciones resultan en una mejora de la aptitud, la selección natural las
favorecerá y se esparcirán en la población.
Los rasgos establecidos no son inmutables. Rasgos que son muy efectivos en
un ambiente determinado pueden volverse poco efectivos si las condiciones
cambian. Si la presión selectiva sobre un rasgo desaparece, éste tiende a
adquirir más variaciones y a deteriorarse, incluso transformándose en
un vestigio. En muchas ocasiones la estructura vestigial puede mantener
cierta funcionalidad limitada o ser la base de otros rasgos ventajosos
(fenómeno conocido como pre adaptación). Por ejemplo, el ojo es un órgano
vestigial del topo pero que todavía aporta cierta funcionalidad para
percibir la duración del día y la noche.13
Procesos evolutivos y la selección natural
Transferencia horizontal de genes, y selección natural
Si un organismo obtiene nuevo material genético no proveniente de sus
padres (ancestros), una vez insertado el material genético en el organismo;
ya sea mediante transferencia horizontal de genes, por procesos tales
como elemento virales endógenos, simbiogénesis, etc.; a través de sucesivas
generaciones, esta nuevas secuencias igualmente pueden sufrir
mutaciones aleatorias del mismo modo que el resto del genoma, por lo que
la selección natural podrá actuar del mismo modo sobre ellas. Un ejemplo de
ello es que, entre los genes involucrados en el desarrollo de
la placenta humana, está involucrado un gen, el de la sincitina, cuyo origen es
un elemento viral endógeno.
Epigenética, y selección natural
Del mismo modo, aunque el proceso epigenético no implican un cambio en la
secuencia de nucleótidos del ADN, sino que consisten en un cambio en
la expresión de los genes; la selección natural igualmente, a partir del
resultado biológico de dicha expresión de genes, actuará sobre el proceso
exigentico y sobre el organismo que lo sufre.
Especiación
Artículo principal: Especiación
La especiación es el proceso por el que una especie se escinde en dos
especies diferentes. La especiación requiere apareamiento selectivo, el cual
conlleva un flujo genético reducido. El apareamiento selectivo puede ser el
resultado de:
1. Aislamiento geográfico 2. Aislamiento etológico (de comportamiento) 3.
Aislamiento temporal
Por ejemplo, un cambio en el entorno físico (aislamiento geográfico por una
barrera externa, como un río o una montaña) correspondería al caso 1. Un
cambio en el camuflaje sería un ejemplo del caso 2. Finalmente un cambio en
la época de celo se correspondería con el caso 3.
Con el tiempo, estos subgrupos aislados divergen radicalmente
convirtiéndose en especies diferentes, bien por diferencias en la presión
selectiva, bien porque aparecen mutaciones distintas en cada grupo o bien
por el llamado efecto fundador. Según este efecto, uno de los subgrupos
podría haber comenzado ya con algún alelo beneficioso de forma fortuita. Un
mecanismo de especiación menos conocido es el de hibridación. Está bien
documentado en plantas y ocasionalmente se observa en grupos con
abundantes especies como los cíclidos. Este tipo de mecanismo podría
reflejar un tipo de cambio evolutivo conocido como equilibrio puntuado, que
sugiere que el cambio evolutivo, y en particular la especiación, ocurren
normalmente de forma rápida después de largos periodos estáticos (sin
apenas cambios).
Los cambios genéticos dentro de cada grupo acarrean incompatibilidad genética
entre los genomas de los dos subgrupos. Con lo que el flujo génico se reduce
todavía más. El flujo génico cesa completamente cuando las mutaciones
distintivas de cada grupo quedan fijadas. Tan sólo con dos mutaciones (una
en cada subgrupo) puede llegar a producirse la especiación. Basta con que
estas mutaciones tengan un efecto neutral o positivo cuando ocurren aisladas y
uno negativo cuando ocurran juntas. A partir de ahí, la fijación de estos genes
en cada subgrupo conduce a dos poblaciones reproductivas aisladas, que
según el concepto biológico de especie, son en efecto dos especies
diferentes.
Posibles excepciones
Según Ernst Mayr, la selección natural podría tener una acción diferente o
limitada en los siguientes casos:
Detractores de la evolución
En el año 1859 Charles Darwin publicó su libro titulado “El Origen de las
Especies”, en el cual planteaba la teoría de la evolución de las especies
mediante la selección natural y adaptación a condiciones del entorno como
forma de lograr la supervivencia de las diferentes especies animales,
incluidos los seres humanos, pero Darwin debió soportar las mofas y las
duras críticas a su teoría evolucionista, críticas sustentadas en criterios
religiosos y en supuestos criterios científicos que luego quedaron invalidados,
pues la biología moderna admite que Darwin tenía la razón.
´La evolución es falsa pues no se rige por leyes fundamentales como lo hacen
la física o la química´
´Todas las maravillosas criaturas del planeta no pueden ser obra de las
mutaciones, sin control ni guía´
Los vasos deferentes ("Vas deferens) son los conductos que llevan el semen
desde los testículos hasta el pene, no hace falta ser muy observador para
darse cuenta de algo muy extraño: el conducto da un enorme rodeo
subiendo hacia arriba, rodeando la uretra y volviendo a bajar hacia su
objetivo cuando lo "natural" sería ir por un trayecto recto desde el testículo
al pene. Esto es muy difícil de explicar (si no imposible) desde el punto de
vista de un diseño inteligente: ¿Para que el diseñador iba a dar ese ridículo
rodeo? Sin embargo, la evolución lo explica de una forma muy sencilla y
natural: hace millones de años, los testículos de los mamíferos estaban
dentro del abdomen (puntos discontinuos en el dibujo) y fueron
progresivamente bajando hasta situarse fuera de él, el proceso evolutivo
simplemente aprovechó el conducto ya existente y fue añadiendo conducto a
medida que los testículos se desplazaban hacia abajo. Otro ejemplo de esto
incluso más espectacular lo constituye el nervio laríngeo de la jirafa:
Por supuesto existen innumerables experimentos de este tipo con todo tipo
de animales y microorganismos que muestran claramente ante nuestros ojos
y en un intervalo de tiempo muy corto como la selección natural modifica los
organismos vivos para adaptarlos al entorno en el que viven.
nos indica que tiene que haber existido, esto es una prueba muy fuerte a
favor de la evolución ya que un solo fósil datado en una fecha fuera de lo que
nos dice la teoría podría servir para refutarla y esto jamás ha sucedido.
Muchas otras especies conservan aún vestigios de sus "vidas pasadas": las
hormigas reina conservan sus alas de insectos voladores (el resto de
hormigas perdieron sus alas debido a que eran un estorbo bajo tierra)
aunque solo las usan 1 vez en su vida para buscar un "nido" y luego se las
arrancan a mordiscos (quizás la evolución se las acabe quitando
definitivamente), las gallinas y los avestruces mantienen las alas que
demuestran su pasado en el aire aunque ya no las usen, etc.
Una vez más, sin la evolución en la mano, todo esto no tiene sentido, a no ser
que se crea que el diseñador es un bromista (o un sádico) que gusta poner a
los animales (y a las personas) órganos que no usan para nada
Otra prueba clara es que todos los seres vivos, ya sean animales, plantas,
hongos o virus tienen la misma estructura general en su ADN y el mecanismo
por el que éste se codifica para fabricar las proteínas de la vida es el mismo
en todos los seres vivos, lo que cambia es el código escrito en cada gen
individual. Pero hay más, si analizamos cada gen individualmente y lo
comparamos con el mismo gen de otra especie, podemos establecer un
"árbol" de grados de semejanza entre las distintas especies. Si la evolución es
cierta, lo que cabría esperar es que por ejemplo, para un gen concreto el
grado de parentesco entre el hombre y el mono sea mayor que el de el
hombre y la rana, pues bien, lo que los genetistas han encontrado
comparando cientos de especies distintas es que, los grados de parentesco
entre las distintas especies varían según un patrón concreto: el patrón
marcado por el árbol genealógico de la vida que los científicos ya tenían
prácticamente establecido, el que realmente ocurrió: el árbol genealógico de
la evolución de las especies de este planeta.
El hecho de que la evolución haya ido transformando los seres vivos a lo largo
de millones de años produciendo la enorme variedad de animales que vemos
en la actualidad a partir de un antepasado común es uno de los fenómenos
más sorprendentes que un amante de la ciencia puede llegar a descubrir.
Aún así existe otro hecho incluso más sorprendente: una de esas especies
(quizás alguna más aunque en menor grado) en algún momento de los
últimos 3 millones años consiguió adquirir una complejidad cerebral y un
grado de interacción con el medio ambiente tal que lograron la emergencia
de la consciencia, o sea la capacidad de ser conscientes de su propia
existencia. Esta capacidad, junto con la capacidad del lenguaje y el desarrollo
de capacidades cognitivas elevadas consiguieron lo que probablemente es la
máxima expresión de la capacidad de adaptación: un organismo capaz de
entender las leyes naturales que producen los cambios en el entorno y capaz
de modificarlo para adaptarlo a sus necesidades.
Los seres humanos somos capaces de conseguir cosas increíbles, nuestras
capacidades cognitivas superiores nos diferencian enormemente de
cualquier otra especie, sin embargo, como es evidente (o debería serlo)
nuestros cuerpos y nuestros cerebros conservan los vestigios de nuestro
pasado evolutivo. Existen muchos ejemplos de esto: aunque nuestro cerebro
moderno (el neocortex) "frena" nuestros instintos primarios (producidos
Críticas religiosas
Aunque no existen teorías científicas alternativas, sí hay oposición desde
puntos de vista religiosos o metafísicos, a través del creacionismo.
Particularmente algunos grupos cristianos, principalmente protestantes, e
islámicos se oponen, con diversas estrategias, a una teoría que consideran
que declara innecesaria la existencia de Dios. Entre otras estrategias han
intentado crear alternativas aparentemente creíbles científicamente para
demostrar la veracidad del relato de la creación en las Escrituras, o al menos
la existencia de un creador inteligente que, en sucesivos impulsos, pusiera en
marcha y encauzara la evolución natural (Diseño Inteligente). Ninguno de
estos desarrollos ha conseguido entre los científicos la credibilidad buscada,
pero sí una gran influencia política en Estados Unidos, donde la mayoría de la
población declara no creer cierta la teoría científica de la evolución y sí la
exactitud del relato bíblico del Génesis.
Apoyándose en esa influencia entre el público, proponen que las ideas
creacionistas sean enseñadas en los cursos de ciencia escolares en pie de
igualdad con la teoría vigente. Sin embargo, el "diseño inteligente" no sólo no
ha tenido buena acogida en la comunidad científica, sino que tampoco ha
sido apoyado por la justicia de los Estados Unidos, que dictaminó que
era "inconstitucional la enseñanza del diseño inteligente en las escuelas por
ser un "argumento religioso" y que "es una redenominación del creacionismo,
no una teoría científica".13 En esta opinión tiene el máximo peso que los
promotores del Diseño Inteligente hayan declarado en más de una ocasión,
por ejemplo en el documento conocido como Estrategia de la cuña, que su
intención es desacreditar aquellas explicaciones de la realidad natural que,
como el darwinismo, prescinden de Dios; y que la verdad de que hay un Dios
personal que creó el mundo es una verdad a priori que no se puede discutir o
investigar, lo que entra en contradicción con el concepto mismo de ciencia.
Así, en contraste a las objeciones iniciales a la evolución que eran o
estrictamente científicas (postulados científicos actualmente obsoletos) o
explícitamente religiosas (creacionismo clásico); las objeciones de origen más
recientes frecuentemente desdibujan esta distinción; y son más bien sólo de
origen dogmático, tratadas de mostrar erróneamente como postulados
científicos. Movimientos tales como la autollamada ciencia creacionista o
creacionismo científico, apoyada en el Diseño inteligente, se destaca por
atacar las bases científicas de la evolución, por un lado, y, por otro,
argumentan que habría una mayor cantidad de evidencias científicas que
respaldarían el diseño de la vida por un Dios o por un ente inteligente.
Referente a muchos de los argumentos que están directamente en contra de
la evolución, incluyendo objeciones a las evidencias evolutivas, a la
metodología, a su plausibilidad, su moralidad y su aceptación científica; la
comunidad científica indica que estos argumentos han sido rechazados por
la biología y por disciplinas relacionadas, y no son aceptadas por la
comunidad científica en general; debido principalmente al carácter no
científico y dogmático de estas objeciones.14
Algunas religiones como el catolicismo han reconciliado parcialmente sus
creencias con la evolución mediante un pensamiento de tipo pro-evolución
teísta. Sin embargo grupos más fundamentalistas en otras religiones
(principalmente protestantes) siguen oponiéndose frontalmente a la
enseñanza y la divulgación de la evolución.
Objeciones a la moralidad de la evolución
Otras de las comunes objeciones al evolucionismo se basan en que la
evolución lleva a resultados objetables; incluyendo más creencias,
comportamientos y eventos. Se argumenta mediante un falacia
de Argumento ad consequentiam, que la enseñanza del evolucionismo
degrada los valores morales. Los grupos que promueven tales objeciones
justifican su hostilidad sin base científica alguna porque, como dicen,
fomenta la irreligión y el ateísmo. Los movimientos creacionistasanti-
evolución aún utilizan el Darwinismo social para tratar de desacreditar la
teoría de la evolución establecida por la Síntesis evolutiva moderna.
En tanto, la evolución es aceptada en la comunidad científica,
independientemente de la susceptibilidad de algunos grupos religiosos, a tal
punto de considerarse un hecho científico por el etólogo Richard Dawkins;
puesto que la evolución humana se basa en una serie de pruebas que la
acreditan y, desde el descubrimiento de ADN, la evolución biológica se
asentó como una realidad objetiva con credibilidad suficientemente
empírica.
La evolución plantea que los humanos no son diferentes de los animales
Darwin reconoció temprano que el aspecto más controvertido de la teoría
evolutiva es su aplicación a los seres humanos. Específicamente, muchos
objetaron la idea de que todas las diferentes formas de vida, incluyendo a los
seres humanos, surgieron mediante un proceso natural sin la necesidad de
una intervención sobrenatural que le otorgue una diferencia frente a los
demás seres vivos; descubrimiento que hizo que el grupo más ortodoxo de la
población religiosa reaccionara en forma sensible.