Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
OBJETIVOS .................................................................................................................................... 11
Gran parte del valor de las empresas reside en su capacidad de innovar y manejar
información que genere conocimiento y beneficios. Las que logran situarse en mejor
posición son las que tienen más posibilidades de sobrevivir y garantizar su crecimiento.
Las inversiones en Tecnologías de Información (TI) han recibido una fuerte atención por su papel
estratégico. Sobre todo con sistemas como ERPs, que ya son parte normal de la cadena de
integración y generación de información. Las empresas se están dando cuenta de que su activo
más importante y menos reconocido es la información que generan y obtienen. La forma en que
se obtiene, manipula y usa esta información es la que puede definir su éxito.
Las empresas empiezan a apostar de forma decidida por herramientas mixtas que fusionan
aplicaciones de inteligencia de negocio con big data para la mejora de los procesos de gestión
masiva de datos y sistemas de información. La estrategia de la información esta basada en
tres factores clave: análisis, supervisión y planificación.
Las aplicaciones tradicionales de BI generan reportes con información histórica de tal forma que
se obtiene una radiografía de lo que había sucedido no de lo que podría suceder.
Ejemplo
Haciendo una analogía de lo que los sistemas tradicionales proponen es como viajar
Motivación.
Necesidades a cubrir.
Reforzar las capacidades de gestión de los directivos con herramientas que les ayuden a
mejorar su proceso de gestión de la información.
Si se buscan soluciones que ayuden al Proceso de Toma de Decisiones, la tecnología big data
permite mejorar los procesos operando un cambio cultural y metodológico.
¿Cómo y con qué periodicidad debe fluir la información? ¿Quién y cómo asigna
responsabilidades?
¿Cómo se gestionan?
Si queremos que el sistema implantado sea algo más que una mera herramienta en función
de las características del usuario deberemos plantearnos una estrategia de implantación,
cuyo principal objetivo será acomodarla a los cambios surgidos durante la fase de
desarrollo. Deberá incluir un Plan Director que determine quién va accediendo, a qué y con
qué seguimiento.
La Estrategia de Implantación debe estar supeditada a los objetivos iniciales del proyecto. Entre
ellos se encuentra la formación sobre el Modelo de Gestión de la Información Analítica y de la
Toma de Decisiones decidido (común a toda la organización) y sobre las Soluciones y
Herramientas implementadas (a cada usuario en función de lo que vaya a utilizar). Además hay
que considerar los siguientes aspectos:
Puesta en marcha del sistema en Producción, es decir, arranque del Proceso de Gestión
desde el punto de vista tecnológico y organizativo.
Establecimiento de los parámetros sobre personas, procesos y áreas para medir el grado
de cumplimiento de objetivos, la gestión de datos y analíticas y métricas necesarias desde
el punto de vista metodológico.
Para asegurarse que el sistema implantado cumple con los objetivos y genera un cambio en el
modelo de gestión de la información hay que crear un Modelo de Seguimiento de la
Implantación ajustado a los sistemas definidos en la fase de definición estratégica del proyecto:
Calendario de implantación.
Objetivos de cumplimiento.
Fijación de hitos.
Formación.
Proyecto de implantación
Para que un sistema de BI Analytics tenga éxito hay que tratarlo como una herramienta
de visualización, reporting y gestión de la data que facilite el acceso a la
información existente. El Proyecto de Implantación de un Sistema de Gestión de la
Información y la Toma de Decisiones debe contemplarse como un proceso integral:
Formando sobre los objetivos perseguidos, los cambios necesarios y, en último lugar, en
las herramientas y soluciones seleccionadas.
Planteamiento estratégico.
Gestión de competencias.
Gestión de la calidad.
Big Data y BI son dos tecnologías que sirven para analizar datos y ayudar en el proceso
de toma de decisiones aunque difieran tanto en la forma de hacerlo como en el tipo de
datos que analizan.
Una solución Big Data difiere en muchos aspectos del BI aunque se complementen y
necesiten. Las principales diferencias son:
Las soluciones de Big Data llevan las funciones de proceso a los datos en lugar de los
datos a las funciones. Al estar el análisis centrado en torno al dato permite manejar
cantidades más grandes de información de forma más ágil.
Big Data puede analizar datos en diferentes formatos tanto estructurados como no
estructurados. El volumen de datos no estructurados (aquellos no almacenados en una
base de datos tradicional) está creciendo a niveles muy superiores que los estructurados.
Su análisis conlleva distintos retos y herramientas específicas que permiten un análisis
global de distintas fuentes de información.
Los datos procesados por las soluciones de Big Data pueden ser históricos o provenir de
fuentes en tiempo real. Con ellos las empresas pueden tomar decisiones que afectan a sus
negocios de forma ágil y eficaz.