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Licenciado
Francisco Javier López Castillo
Trabajo Asignado
TAREA 3 Análisis de video Los Paradigmas
Asignatura
Teoría de la Comunicación II
Alumno
Abraham David Vallejo Hércules
No. De cuenta
20070008472
Fecha
31 de enero del 2023
Introducción
Un grupo de científico encerró a cinco monos en una jaula mientras son estudiados. En
el centro de la misma se instalaron una gran escalera con un racimo de plátanos. Los
monos los identifican de inmediato y quieren tomar cada uno su porción.
Cada vez que un mono tomaba un plátano, los científicos lanzaban agua helada sobre
los que quedan esperando en el suelo.
El experimento empieza cuando los científicos cambian a uno de los monos por otro
que jamás ha estado en esa jaula. Por lógica lo primero que va hacer el mono es
intentar tomar un plátano del racimo. Es aquí cuando los demás monos impiden que el
nuevo integrante agarre la fruta y le propinan una golpiza como a sus otros
compañeros.
El mono confundido no sabrá muy bien por qué está pasando eso, pero empezará a
comprender que eso no debe hacer por algún motivo. Entonces es sustituido un nuevo
mono. Increíblemente el mono anterior participa en los golpes, aunque sigue sin saber
por qué era hecho de la golpiza al mono que intenta subir a la escalera y coger un
plátano.
Estos cambios de los monos de repetía periódicamente hasta que tan solo queda un
mono sin sustituir. En conclusión, este último mono, también es sustituido. Cuál es el
resultado o la situación que nos deja este estudio: se encuentra un grupo de 5 monos
que, aunque nunca han recibido ningún baño de agua helada como castigo por tomar
un plátano, actuaba de la misma forma tal y cual lo hacia el resto del grupo.
En todo caso si se pudiera interrogar a cualquier mono del grupo de porque era la
acción de golpear al mono que desea tomar un plátano la respuesta sin dudarlo
sería no sé, porque es la forma de cómo han estado haciendo las cosas.
Podemos decir que este estudio no tiene nada que ver con nosotros, pero estamos
equivocados. Con este experimento se demostró que los monos realmente estaban
viviendo con un miedo transmitido, pero que jamás habían conocido las razones del por
qué se les golpeaba cuando intentaban agarrar un plátano.