Está en la página 1de 3

EJERCICIO DE SÍNTESIS Nº 2

(Curso 4 / 11.12.2022)

I. Panorámica general:

1. La quinta sesión estuvo dedicada al tema de la resiliencia como recurso en


contexto pastoral de cuidado y acompañamiento y como un proceso complejo de
orden comunitario. Se presenta el rol de la resiliencia como una forma de reforzar
las competencias y recursos de las comunidades, y a partir de ello buscar el modo
de mitigar los riesgos a que se ve expuesta. Se hace énfasis en lo dinámico del
proceso de resiliencia y en los dos elementos esenciales para ello: la interacción de
la persona y su entorno.

2. La sexta clase tuvo como temática los factores de resiliencia, en continuidad


con la clase 5. Así, la profesora hizo referencia al análisis para identificar los
factores de riesgo y los factores de protección. Se hace énfasis en que las
comunidades resilientes son aquellas capaces de dimensionar sus recursos como
también reflexionar sobre sus potencialidades y debilidades. En cuanto a los
factores de riesgos, se trató en tres niveles: personal, familiar y comunitario.

3. La séptima clase trató sobre el concepto del perdón y reconciliación en el


contexto del acompañamiento de las víctimas. Se nos presenta esta iniciativa como
un cambio necesario para el tránsito de una cultura del odio y resentimiento a una
cultura del perdón y reconciliación. Se presentó la forma de acogida y tratamiento
de las víctimas enfatizando lo sanador del perdón en sus vidas.

4. En la octava sesión vimos por una parte la relevancia del cuidado y


autocuidado de los agentes y equipos de prevención, es decir, de quienes se
desempeñan en tareas altruistas, y por otro, el costo emocional asociado al
desempeño de las diferentes tareas vinculadas al ámbito del abuso sexual, tales
como prevención, reparación, justicia, etcétera. Se estudió en específico la noción
de traumatización vicaria y desgaste laboral (burn out); y los factores de protección
y cuidado en las personas y equipos.

II. Temáticas:

1. Proceso de resiliencia. Entender el proceso de la resiliencia en el contexto


del acompañamiento, ayuda precisamente al refuerzo de las competencias y
recursos de la comunidad para que sea lo más eficaz posible. Así, y como
consecuencia de lo anterior será posible aminorar o minimizar los riesgos. La
resiliencia presenta el desafío de analizar y discriminar sobre los factores de ponen
en riesgo y en los factores de protección, sea a nivel personal, familiar y
comunitario, siempre en el entendido que la resiliencia es un proceso dinámico.

2. El rol del tutor o facilitador de resiliencia: En el contexto de los terceros


activos, el “Tutor de resiliencia” puede ser una persona, lugar, acontecimiento,
animal u objeto que provoca un renacer del desarrollo, después de acontecimiento
potencialmente traumático. Se trata de una persona que encuentra a otra y que
asume para esta, un punto de cambio en su existencia. Sea que fueren tutores
implícitos, es decir, que tienen una formación específica y no son conscientes de su
rol, o tutores explícitos, que son aquellos profesionales que deciden crear un
vínculo de apoyo y acompañamiento con quien vive una situación de adversidad.
Ellos se caracterizan por la presencia, amor incondicional, plasticidad y diálogo
empático.

3. Daño y perdón: Se nos presentó la complejidad de la relación entre daño y


perdón. Por tanto, es necesario dentro de la construcción de ambientes eclesiales
sanos, tratar correctamente el tema del perdón de la víctima. En efecto, como se
nos enseñó, “instar” a perdonar puede resultar en una nueva forma de agresión,
pues para la víctima, perdonar al ofensor puede ir contra su propia experiencia y
sentimiento y, además, tener la consecuencia indeseable de hacer como que “nada
ha pasado”, “encubrir”, y permitir que el ofensor se desligue de su responsabilidad.
Instar a perdonar antes del pronunciamiento de la justicia, es no comprender la
profundidad del daño y una forma de revictimizar a quien se siente incapaz de
perdonar.

4. Uso y abuso del autocuidado: El acompañamiento de la víctima es un


elemento esencial dentro del proceso de construcción de ambientes sanos. Por ello,
el rol del autocuidado es fundamental. Así, esta temática nos enseña la necesidad de
dotar de bordes y contenido al concepto de autocuidado. En efecto, si se logra una
correcta aplicación, no solo se brinda una mejor atención a la víctima, sino que el
equipo colaborador se fortalece. La profesora nos indicó las inadvertencias que
pueden cometer los equipos, tales como, minimizarlo como si fuera un simple
estrés, o bien, sobredimensionarlo con la necesidad de internación clínica.
Ciertamente que la compasión y empatía son radicales en el acompañamiento, pero
deben manejarse con un criterio de protección eficaz al otro. Por eso, incluso para
los agentes, se requiere que la comunidad esté pendiente de su integridad física y
psíquica.

5. Costos emocionales asociados al trabajo de acompañamiento de


víctimas: Dentro del proceso de acompañamiento de las víctimas, es posible que
los agentes que colaboran en esta tarea, puedan resultar a su vez dañados. Se nos
hizo presente la traumatización vicaria que puede sufrir un colaborador o el
desgaste laboral. Así, si se toma en consideración este riesgo se puede mejorar la
gestión de los agentes, como así también se garantiza una mejor terapia a la
víctima. Esta temática nos ayuda a comprender que todo está relacionado y que
una forma de proteger a los colaboradores es precisamente prevenir riesgos tales
como la impotencia e insegurización respecto al propio rol, deseo de “salvar al
otro”, riesgo de sobreproteger a la víctima, sobreinvolucración y dificultad de
desconectarse, etcétera.
III. Texto preparatorio:

El texto preparatorio elegido es “Cuidar a los que cuidan: Desgaste profesional y


cuidado de los equipos que trabajan con violencia”, de Ana María Arón y María
Teresa Llanos.

El texto hace referencia al fenómeno al que se enfrentan las personas y equipos que
trabajan con víctimas de abuso, ya que están expuestos a un nivel de desgaste
profesional, que puede desembocar en un agotamiento profesional o burnout y ser
causa de trastornos psicológicos graves, del abandono de la profesión o del campo
de trabajo.

Las autoras señalan que el trabajo en estas áreas se describe como una profesión de
alto riesgo, es decir, que implica estar expuesto en mayor grado a las consecuencias
de desgaste y agotamiento profesional, lo que implica que para trabajar en estas
áreas en importante tomar precauciones.

El trabajo menciona conceptos que se han delimitado y que son fundamentales para
comprender el fenómeno de burnout en profesionales que trabajan con violencia.
Los conceptos son la contaminación temática, la traumatización vicaria y la
traumatización de los equipos.

De la lectura del texto es posible reflexionar sobre la complejidad del tratamiento


del abuso, no tan solo a nivel pastoral, sino que también profesional. Es relevante
considerar esta temática porque, salvo en un contexto de investigadores, es
absolutamen te desconocido, y el hecho de invisibilizar los efectos colaterales en
las personas que trabajan en el acompañamiento, puede ser un foco de retroceso y,
tal como lo señalan las autoras, como una causa de abandono a las propias víctimas.

IV. Comentarios:

Esta parte del curso, que nos adentra en el ámbito más externo y a la vez más
personal de la construcción de ambientes sanos y bien tratantes, me pareció el
corolario natural de todo lo aprendido. En efecto, como parte necesaria a las
temáticas anteriormente tratadas, se encuentra la regulación normativa de las
conductas externas punibles, tanto a nivel canónico como civil, y el aspecto más
humano y cristiano, como es la participación concreta en el acompañamiento de las
víctimas. No me había detenido nunca a reflexionar sobre la resiliencia como un
proceso complejo en el acompañamiento de las víctimas. Desde esa perspectiva, se
abrió un flanco que tampoco vislumbré en el proceso de generar ambientes
eclesiales sanos, como es la preocupación por las personas que a su vez trabajan
con víctimas de abuso y violencia, es decir, nosotros mismos. Siempre me enfoqué
únicamente en la víctima y cómo estructurar elementos necesarios para un ambiente
de protección, pero nunca en los que acompañan en esta tarea. El curso en esta
parte me dejó perplejo por la variedad de aspectos en los que nunca reparé.

Camilo Cortés B.

También podría gustarte