Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
LA CULTURA EN LA INDEPENDENCIA
¿QUÉ MÚSICA Y QUÉ DANZAS BAILABAN EN LA ÉPOCA DE LA
INDEPENDENCIA SEGÚN LA ESTRATIFICACIÓN SOCIAL?
DOCENTE
ESTHER JULIA APONTE MONDRAGÓN
TABLA DE CONTENIDO
INTRODUCCIÓN.................................................................................................1
PLANTEAMIENTO DE OBJETIVOS..................................................................2
PREGUNTAS DERIVADAS.................................................................................3
HIPÓTESIS..........................................................................................................4
DESARROLLO ARGUMENTATIVO....................................................................5
CONCLUSIONES..............................................................................................11
BIBLIOGRAFÍA..................................................................................................12
INTRODUCCIÓN
La Institución Educativa INEM Julián Motta Salas de Neiva, está ubicado en la carrera
1 n. º 2—26 del barrio Cándido, con 3400 estudiantes, ciento cuarenta docentes y
liderado por el especialista Ismael Efrén Benavides Reyes, rector de la institución.
Ofrece una educación formal desde pre—escolar hasta la media académica y técnica,
con una formación integral humanística proyectada hacia el desarrollo social y
económico del país.
Para nosotros fue muy bueno participar porque, además de conocer el pasado, nos
permitió aprender a investigar, a la integración y un mejor conocimiento entre los
miembros del grupo. El nombre que le asignamos al grupo fue Exploradores sociales,
elaboramos un logo que fue plasmado en un botón que nos enorgullece portar. Nos
apoyamos en autores de la historia social, metodologías de enfoque local y nacional,
complementándola con la historia geográfica y la Internet. Fueron experiencias gratas
porque, no sólo investigamos, sino que también visitamos museos, la biblioteca del
colegio y la departamental.
Observamos videos, una de las formas amenas de contar la historia, lo cual nos animó a
continuar en este proyecto. Además, hemos escuchado algunas obras musicales y hasta
intentamos bailar las danzas de esa época. El proceso de investigación se enmarca en el
enfoque metodológico de la pregunta para llegar al descubrimiento de los contenidos, de
formas, de ritmos de bailes, en el caso del tema escogido. Esto nos muestra cómo era la
cotidianidad de esa época y nos acerca al tipo de investigación acción y la investigación
participativa involucrándonos en la producción del conocimiento. Es un proceso de
aprendizaje propio, donde se va generando la dinámica de la integración, el diálogo, el
análisis y nos convertimos en parte del proceso. Se pudo trazar un paralelo y confrontar
lo que se bailaba hace doscientos años con lo que se baila hoy. De esta manera, nos
dimos cuenta que vivimos en un mundo cambiante donde todo va evolucionando.
Objetivos
——Desarrollar un proyecto de investigación que nos permita conocer y analizar los bailes
y danzas durante la época de la Independencia, teniendo en cuenta la estratificación
social, para luego relacionarla con el momento actual.
PREGUNTAS DERIVADAS
— ¿Cuándo y cómo entraron la música y los bailes de hace doscientos años a nuestro
territorio? ¿Dónde estaban sus orígenes?
— ¿Qué diferencia había entre la música y los bailes de una clase social a otra?
— ¿Las clases altas participaban de los bailes y fiestas de las clases bajas?
— ¿De los bailes de las contradanzas, cuáles eran las más significativas y quiénes las
bailaban?
Existen muchos vacíos en torno de estos temas, por esta razón es necesario indagar más
sobre nuestros bailes y música hace doscientos años ya que son parte de nuestro
patrimonio cultural y contribuyen con el fortalecimiento de la identidad y el amor por
nuestra patria.
Hipótesis
¿Qué música, danzas se bailó durante la Independencia de acuerdo con las clases
sociales?
—Teniendo en cuenta las fuentes consultadas, tanto las escritas como orales, visuales y a
través de la Internet, sobre los bailes y música de la época de la Independencia, se puede
entender que eran muy alegres, tanto para las clases altas como para las clases bajas.
—Los ritmos musicales y danzas, tenían origen en los países europeos, (para los criollos y
españoles), y en las raíces africanas en el caso de la clase negra y se mezclaron con los
de los indígenas
—Se evidenciaba la división de clases sociales, ya que en los grandes salones elitistas de
baile, las clases bajas no tenían acceso, pero los señores criollos o españoles buscaban la
forma de visitar las casas o sitios donde bailaban las clases bajas, indígenas y negros.
—Los bailes y música, que al parecer entraron por la costa atlántica, eran llamados bundes,
que eran bailes de Andalucía (España). Se trataba de una especie de bullicio y se
acompañaba con coplas.
—Además de los fandangos o bundes, también bailaban contradanzas. Sus orígenes eran de
Escocia, era una danza rustica aldeana que luego pasó a Inglaterra, después a Francia,
España, posteriormente a América. Allí fue asimilada por los negros del Pacífico al
observar a sus amos bailarlas en sus fiestas.
—La música y las danzas de la época de la Independencia que se impusieron, fueron las
más alegres, como las contradanzas. Entre ellas la Vencedora y la Libertadora, ésta
última compuesta para Simón Bolívar, porque el momento ameritaba estar de fiesta, de
celebraciones.
DESARROLLO ARGUMENTATIVO
Las danzas y la música eran alegres, con mucha cadencia y en parejas, en grupos
cogidos de la mano o abrazados. Se utilizaban vestidos de colores vivos y algunos
venían acompañados de elementos como velas o pañuelos. Existía gran diferencia entre
los bailes y música de las clases altas y las clases populares. Para los criollos y
españoles, sus danzas eran elegantes valses, fandangos y contradanzas utilizaban
vestidos finos y elegantes con adornos traídos de Europa. Dichos bailes los realizaban
entre ellos y las clases populares no tenían derecho a participar, sólo podían observar de
lejos. Las clases bajas, como mestizos, indígenas y negros, bailaban cumbias, mapalés,
porros, currulaos y joropos entre otros.
La música y los bailes entran a nuestro país desde la época de la Colonia por la
influencia europea y la influencia africana. Estos ritmos y bailes se mezclaron con los
indígenas y, en la época de la Independencia, escogieron los más alegres dentro de las
clases sociales. La música indígena era tocada por ellos y, casi en su mayoría, era de
percusión. La música de las clases altas (criolla y española) era interpretada por bandas
marciales y sus integrantes eran seleccionados más por su físico, que por su aptitud para
la música.
En las clases altas bailaban los señores con sus señoras, en grandes salones o en casas
de familia vestidas elegantemente y demostrando todas sus habilidades y destrezas. Éste
es el caso de Simón Bolívar, gran bailarín al cual dejaban siempre en la mitad del salón.
Las bandas musicales estaban integradas por criollos a los que, por este hecho, se les
daba credibilidad en sus habilidades como músicos. Mientras que en el caso de los
indígenas, negros, mulatos, zambos, y pardos, ellos se reunían en las casas y en las
calles a bailar ritmos propios o con influencia de ritmos africanos y hasta los bailes de
los españoles. Se utilizaban instrumentos sencillos de percusión como tambores,
violines y triángulos, participaban tanto mujeres como hombres, sus vestidos eran
vistosos y los hombres bailaban sin camisa en algunas ocasiones y las mujeres faldas de
colores vivos.
En primer lugar, estaban las clases altas conformadas por los españoles o peninsulares,
la Iglesia ocupaba un lugar destacado en la escala social desde la época de la Conquista
y la Colonia. En segundo lugar, estaban los criollos, que eran hijos de españoles nacidos
en América, los mestizos que eran la mezcla de indígenas con blancos era el grupo
mayoritario en nuestro territorio. Dentro de los mestizos aparecen los pardos, que tenían
algunos beneficios económicos, los mulatos que eran unión interracial entre blancos y
negros, era un grupo social rebelde, el cuarterón era la unión entre el mulato y negro, y
el zambo de menor presencia, mezcla del indígena y el negro.
Según el obispo de Cartagena, Molleda, y el gobernador, los bailes como los bundes
comúnmente se hacían de noche, en las calles, patios o plazas o en los campos. A éstos
concurrían indios, mestizos, mulatos, negros y zambos y otros de clase inferior. Todos
en un sólo montón, sin orden, hombres y mujeres, unos se tocan y otros bailan y todos
cantan versos. Se hacían indecentes movimientos y, en los intermedios, no cesan de
tomar aguardiente y otras bebidas fuertes como el guarapo y la chicha, hasta el
amanecer. Se baila en ciertas ocasiones como las vísperas de fiestas o en la fiesta de la
Candelaria en Cartagena
No existían escuelas de baile propiamente dichas. Según los relatos de la época las
jóvenes interpretaban de acuerdo a su cultura y su temperamento con la elegancia
natural que brotaba espontáneamente en el ambiente. Por ejemplo, las momposinas
tocaban el arpa muy bien, con mucha habilidad, lo mismo para el baile donde
demostraban destreza y, por el hecho de ser criollos, se daba por hecho que ya sabían
música y danzas.
Las clases altas españoles y criollos utilizaban vestidos largos de telas finas, pañuelos
para secase el sudor, peines de carey, todo esto lo traían de Europa. Igual los caballeros,
sus vestidos eran elegantes. Para el resto de las clases bajas, utilizaban palos se
disfrazaban simulando el episodio de la Conquista y para la cumbia, utilizaban velas en
la mano derecha, los vestidos eran pollerines de colores.
¿Las clases altas participaban de los bailes y fiestas de las clases populares?
Sí, a las fiestas de las clases bajas los caballeros asistían en forma clandestina y bailaban
con las mestizas o mulatas pero ellas, no podían hacer lo mismo en las fiestas de las
clases altas. Para interpretar algunas piezas musicales sí asistían las pardas y pardos,
éstos eran mestizos con cierta posición social. Ellos se vestían muy bien. Las fiestas las
clasificaban de alto nivel donde sólo asistían los blancos de Castilla, los caballeros,
amenizados por la banda del regimiento. Los bailes de segunda categoría era donde
podían participar la banda del régimen de milicias blancas, y bailaban pardas y pardos.
Y a los bailes de tercera categoría asistían las bandas de las milicias pardas y bailaban
las negras libres, los caballeros blancos sí podían asistir a todos los bailes y fiestas de
todas las clases sociales.
La música y los bailes de los salones de la élite o clases altas, estaba al margen de los
acontecimientos e intervenciones tanto, de la Iglesia como de las leyes. No era lo mismo
para mestizos, negros, mulatos y zambos, para ellos sí había toda clase de prohibiciones,
intolerancia y moralismos, ellos tenían el gusto por bailar bundes y fandangos. El
obispo Molleda de Cartagena, le pidió a la Corona que no permitiera la práctica de estos
bailes, el gobernador ordenó que los bundes y fandangos sólo se redujeran a una rueda.
En un lado los hombres y en otro las mujeres, y los cantos y coplas eran a semejanza,
como las que se ejecutaban en Vizcaya, Galicia y en otras partes del reino. Finalmente,
el gobernador y el obispo entraron en contradicción porque la cultura sonora de la costa
Atlántica se impuso y cuando se les pidió a los párrocos que les oficiaran misa con
Tedeum para celebrar la independencia, éste se negó y dijo que más bien debieran pedir
perdón por tantas ofensas y por la ira. Finalmente celebró una misa sin ningún
significado.
¿Existe alguna diferencia entre los bailes de la costa y los del interior del país?
Evidentemente los bailes y la música de la costa Atlántica eran más vivas, más ruidosas,
tenían un sentido carnavalesco, allí celebraban varias fiestas importantes, como el
carnaval de Barranquilla, el cual se inicio desde el siglo XIX. Algunos estudiosos dicen
que lo trajeron los negros de África, pero otros sostienen que lo trajeron de los países
latinos, también están las fiestas de la Candelaria en Cartagena, eran disfrutadas por
todas las clases sociales con mucho alborozo donde tomaban bailaban y cantaban.
Mientras que en resto del país los bailes y la música, en el caso del altiplano
cundiboyacense y regiones del Cauca y Nariño, eran un poco más apagados. Entre sus
bailes tenían contradanzas, bambucos, pasillos en el caso de la vencedora y la
libertadora. Las dos contradanzas preferidas por el ejercito libertador se ejecutaba en los
grandes salones y bailadas por las clases altas, ésta música tenía un carácter ceremonial.
Un ejemplo de esos bailes es la polonesa, un baile de origen europeo que parecía una
procesión: estos bailes propiciaban los encuentros de tipo amoroso. Simón Bolívar y
Sucre encontraron sus grandes amores al compás de estas danzas polacas. Se bailaron
valses de origen vienés, los que posteriormente se convirtieron en valses criollos. En la
zona llanera, según el observador Edovar André, se escuchaban tonadas y cantos
mestizos, como el galerón, el baile del zumba. El zumba es una variedad de joropo, su
origen es de carácter festivo y satírico, fue asimilado a vocal e instrumental y
coreográfico y pasajes. La danza del torbellino es la del de más fuerte ancestro indígena,
el joropo mexicano, que con su zapateo flamenco, arabescos, y voz no tenía punto de
comparación con los aires de los indígenas, inicialmente se le conocía como el baile del
guarapo como tonada y danza. El galerón, baile de procedencia de Venezuela, es canto
de vaquería, ejecutaban las figuras del joropo, se le llamó araguato, las coplas eran de
letra ambigua.
Las contradanzas eran unos bailes muy alegres. Era la contradanza española la más
popular de los bailes extranjeros que llegaron al país. Según Carrasquilla, en toda
celebración de matrimonios siempre estaba presente, le conocían como el baile apartado
en el que no había abrazos. Era un baile que gozaba de gran aceptación, sobre todo en la
costa donde primero llegó. Las más significativas fueron La vencedora y La libertadora,
la primera una danza de gran plasticidad, se bailaba de modo vigoroso y ágil, ocupaba
un lugar semejante a ritmos como la marsellesa, la bayamesa y la borinqueña de la
época de los conflictos en Francia. Ésta llegó a Centroamérica y después a nuestro país
entrando por la costa y de allí que los costeños dicen que tenía relación con el porro.
Este baile y esta música se identificaban con el movimiento histórico de la época
republicana, alcanzó el estatus de himno nacional, pero esta idea no prospero porque la
contradanza tenía cualidades tropicales y además no era marcial sino bailable y, sobre
todo, alegre y sensual, por lo tanto, no podía convertirse en himno.