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Universidad Gerardo Barrios

Módulo V - Curso Propedéutico

Educación Emocional
A inicios del siglo pasado luego de que Alfred Binet inventará el primer sistema de
medición del coeficiente intelectual, algo de eso todavía persiste hasta la actualidad.  No
obstante, con el tiempo la conceptualización de coeficiente intelectual se fue quedando
limitada para explicar la naturaleza del ser humano.
Entonces emerge el concepto de Inteligencia Emocional, como esa respuesta a esas
situaciones para las cuales el CI es insuficiente, el CE vino a complementar a través del
trabajo en equipo, la convivencia, el conocimiento de sí mismo, motivación y empatía
con los otros.

Educación emocional

Clasi cación de la Emocionalidad

Componentes de la educación emocional

El aprendizaje del control emocional


Glosario de términos

Recursos complementarios
Lección 1 de 6

Educación emocional
Universidad Gerardo Barrios

¿Por qué es importante la educación emocional?


La Comisión para la educación de la UNESCO solicita un informe Delors (1997) en donde se establezca el
estado actual y proyección de la educación. De este mismo documento surge lo que serían los pilares
de la educación actual a través de un documento que se llama “La Educación encierra un tesoro” es
conocido como el informe Delors, quien era el presidente de dicha comisión y en donde establece los
cuatro pilares fundamentales en donde se deben situar la educación. 

La Comisión considera las políticas educativas como un


proceso permanente de enriquecimiento de los
conocimientos, de la capacidad técnica, pero también, y
quizás, sobre todo, como una estructuración privilegiada de
la persona y de las relaciones entre individuos, entre grupos
y entre naciones (UNESCO, 1997).

Estos cuatro pilares se convirtieron inmediatamente en el eje transversal del quehacer educativo,
porque dictamina el ejercicio del aprendizaje enseñanza y hacia donde tiene que orientarse. En
resumen, se considera que: 

Aprender a conocer, es decir, adquirir los instrumentos de la comprensión; aprender a hacer, para
poder influir sobre el propio entorno; aprender a vivir juntos, para participar y cooperar con los demás
en todas las actividades humanas; aprender a ser, como proceso fundamental que recoge elementos
de los tres anteriores”. (Blasco Guiral, 2002).

 Algo que es importante hasta ahora en todos los sistemas tradicionales es el énfasis en el conocer,
muy por el contrario, este enfoque trasciende un enfoque bien técnico y metodológico marcado hasta
entonces. En este sentido la educación emocional viene a rellenar dos de los objetivos de manera muy
directa aprendiendo a vivir y a ser, pero también solo se pueden cumplir sin desarrollar el aprendiendo
a conocer cómo funciona y también los proceso que implican cambios de comportamiento no sólo se
aprenden mediante un mero repaso conceptual, sino que tiene que llevarse a una especie de vivencia
para que puedan ser efectivos y es donde entra en juego el aprender a hacer. 

La inteligencia emocional si bien quien la catapultó al estrato público y la popularizó fue Daniel
Goleman, pero antes de él, unos psicólogos americanos Peter Salovey y John Mayer quienes
introdujeron el concepto en 1990. 

En este modelo Mayer y Salovey (1887) mencionan que la Inteligencia Emocional tiene cuatro
habilidades básicas y (Fernández Berrocal, 2005) las menciona como:

La habilidad para percibir, valorar y expresar emociones con exactitud, la habilidad para acceder y/o
generar sentimientos que faciliten el pensamiento; la habilidad para comprender emociones y el
conocimiento emocional y la habilidad para regular las emociones promoviendo un crecimiento
emocional e intelectual. (p. 19(3), 63-93)

En esta definición de Mayer y Solevey se ponen en cuestión el tema de la conciencia emocional, la


regulación emocional, la empatía, el tacto en la expresión emocional ante las demás personas y la
motivación que viene dada por esa generación de pensamientos, orientado a procurar el propio
bienestar.  

Ahora bien, en vista de lo anterior que indicadores son los que demandan y justifican una educación
emocional: 

1. Analfabetismo emocional (Goleman, 1995), que desemboca con frecuencia en un conjunto de


comportamientos des adaptativos (Bisquerra Alzina, 2009), a eso se le añade situaciones de
violencia, Bullying, trastornos mentales, consumo de alcohol, depresión, ansiedad. Cada vez se
vuelve más común ver a conductores que se bajan de su carro para darse a golpes con otro
conductor, o una señora que se sube a un parabrisas de un taxi en plena marcha aún a riesgo de
perder su vida por perseguir a su esposo y quizás uno de los casos más conocidos el de la señora
en San Salvador que luego de que el bus pego en la parte trasera de su vehículo, la señora se bajó
a discutir. Al no llegar a un acuerdo con el sujeto, el motorista se subió al bus, siguió su marcha y
ella se puso en frente siendo arrollada y muriendo en el instante. Este tipo de cosas pone de
manifiesto cuanta necesidad se tiene de educación emocional, porque no interesa ser bachilleres,
licenciados, ingenieros, doctores, másteres, PhD, o lo que sea y si se analfabetismo en temas
emocionales. 

2. Las repercusiones que tiene la educación emocional en los procesos de enseñanza, muchos de las
deserciones y problemas que ocurren dentro de las escuelas, instituciones, universidades y
entornos educativos tienen que ver con educación emocional. Estudiantes que no saben cómo
manejarlas y maestros que no han aprendido y no saben cómo gestionar dichas emociones. El
estudiante no sólo es un ser que pone a disposición sus conocimientos, ahí también se juegan
actitudes, estados emocionales que son inevitables sobre el día a día del estudiante y situaciones
propias de esa relación docente estudiante que demandan educación emocional día a día. 

3. Las nuevas demandas sociales a partir de los cambios que se han generado por las relaciones
mediadas por las tecnologías, más participación de la mujer en todos los espacios, las estructuras
familiares monoparentales y todos los cambios que han surgido y ocurren de manera vertiginosa,
entonces se hace necesario y apremiante el dominio de alfabetización emocional básica para vivir
en una sociedad actual. En este punto es interesante destacar sobre las tecnologías a diarios se
puede apreciar personas peleando, discutiendo y complicándose la vida por cosas irrelevantes en
las plataformas sociales como Facebook, Instagram y ese tipo de cosas. 

4. Finalmente, por años hubo un enfoque ambivalente entre razón y emoción, pero las recientes
investigaciones han roto esa dicotomía, en donde la emoción se sitúa en la como parte del a
emoción en la génesis y expresión de la adaptación humana al medio ambiente, es parte de su
evolución, adaptación y desarrollo. 

Bases neuroanatomías. ¿Dónde reside la IE?

El tema de las emociones no es antojadizo. Las emociones también tienen una base neurobiológica y,
por lo tanto, comprender esto es importante para explicar su influencia en la vida humana.

Como bien se dijo las emociones son parte del desarrollo evolutivo del ser humano, los centros
emocionales dicen algunos investigadores que están arraigados de manera más profunda que las la
parte racional del neocórtex que está en la parte superior del cerebro, sino que esta región emocional
se sitúa en una parte más profunda de tallo cerebral, estas estructura y ramificaciones se han asociado
de manera directa a una parte pequeña parecida a una almendra en el cerebro llamada “amígdala” y
que se extiende de manera extendida en sus ramificaciones hasta el centro ejecutivo situado en el
lóbulo prefrontal donde se desarrollan muchas funciones ejecutivas. 

Con respecto a esta diferenciación y especialización del cerebro y como se almacenan información en
cada una de las partes del cerebro (Goleman, La práctica de la inteligencia emocional, 1998), señala que:

De igual modo la amígdala, por su parte, es el lugar en el que


se almacenan las emociones que nos suscita una
determinada experiencia. De este modo, toda experiencia
que haya despertado en nosotros una determinada reacción
emocional —por más sutil que ésta sea— parece quedar
codificada en la amígdala. (p. 35)

Estos registros subyacen en lo profundo del tallo cerebral en donde se encuentra ubicada la amígdala y
es ahí mismo donde se registran cada una de esas experiencias y reacciones emocionales. 

El tallo encefálico, es, por tanto, es la región más primitiva del cerebro en todas las especies y que se
halla en la parte superior de la medula espinal. Las funciones que regula están asociadas al respirar, el
metabolismo y reacciones vitales básicas para la sobrevivencia, es decir, aquellas funciones que
aseguran su adaptación y afrontamiento del ambiente. De esta base emocional surgirían
posteriormente la parte racional del cerebro en la escala evolutiva, es decir, de la parte emocional
surgiría la parte racional y por ello, lo intrínsecamente relacionado entre pensamiento y sentimiento. 

De acuerdo con (Goleman, Inteligencia Emocional, 1995) en sus investigaciones sugiere que:
La raíz más primitiva de nuestra vida emocional radica en el sentido del olfato o, más precisamente, en
el lóbulo olfatorio, ese conglomerado celular que se ocupa de registrar y analizar los olores. En aquellos
tiempos remotos el olfato fue un órgano sensorial clave para la supervivencia, porque cada entidad
viva, ya sea alimento, veneno, pareja sexual, predador o presa, posee una identificación molecular
característica que puede ser transportada por el viento. (p. 12)

 Este proceso por supuesto no es al azar o de manera fortuita, sino que ocurre a través de todo un
proceso evolutivo en donde fue recubriendo el tallo encefálico. En estos estratos que se fueron
recubriendo se alojan las capacidades para diferenciar los olores, distinguir las presas, la parte sexual y
distinguir el veneno, en fin, aquellas cosas necesarias para su subsistencia. De acuerdo con (Goleman,
Inteligencia Emocional, 1995) estos estratos que cubrieron el tallo encefálico se formaron como una
especie de anillo alrededor y “a esta parte del cerebro que envuelve y rodea al tallo encefálico se le
denominó sistema «límbico», un término derivado del latín limbus, que significa «anillo». Este nuevo
territorio neural agregó las emociones propiamente dichas al repertorio de respuestas del cerebro”.

Cada vez que se tiene un ataque de rabia o se está a punto de estallar, cuando en ese momento de
amor idiotizados, cuando se llega a estar con mucha intensidad asustados, son señales que es el
sistema límbico quien está actuando. Ahora bien, esto permitió que se desarrollaran dos herramientas
que iban a ser determinantes en el sistema evolutivo como lo son la memoria y el aprendizaje. Así, por
ejemplo, si una fruta le hizo daño al hombre primitivo no la volvía a comer. Este proceso de memoria y
aprendizaje permitió replantearse las respuestas automáticas y espontaneas por racionales y más
pensantes. Dentro de este proceso si comer un alimento o no, ahí se encuentra presente el bulbo
olfatorio. Incluso ahora cuando algo parece demasiado extraño o que genera malestar por lo que se
recurre a expresiones como “esto me huele mal” o expresiones similares, y quizás la explicación no está
del todo alejada al olfato y el sistema límbico de por medio. 

En la medida que el hombre como especie fue evolucionando en esa media el córtex se fue
especializando y surgió el neocórtex (sentimiento y coordinación), este se mas grande en el homo
sapiens a diferencia de todas las especies, aquí se procesan los pensamientos y procesa la información
que envían los sentidos, a esto se suma que agrego al sentimiento a la reflexión sobre el mismo ya
sean estas ideas, símbolos, imágenes o cualquier otra expresión sentimental que se genere en el sujeto.
El desarrollo como civilización se debe mucho a la influencia del neocórtex para planificar y la inversión
en artes, ciencia, etc. Este desarrollo del neocórtex facilitó matizar la vida y las respuestas a la misma,
aumentar las neuronas y la actividad neuronal, por lo tanto, tener sentimientos sobre los sentimientos
y con base a esa diferencia de los animales inferiores emitir una gran cantidad de respuestas y
reacciones ante las demandas que se presentan en el día a día. Si bien es cierto, el neocórtex permitió
esa evolución a racionalizar la emoción, pero también en el fondo subyace un cerebro emocional de
donde se origina y lo que explica muchas de las contradicciones emocionales. 

Para finalizar, la próxima vez que tenga un arranque de rabia incontenible o actúe como si no estuviera
pensando posiblemente se deba a un secuestro de la amígdala que en ese momento esta
predominando. La única opción que queda es hacer un cortocircuito a dicho secuestro para reaccionar
a tiempo antes que otra cosa pase. Justo de eso se desarrollará en los próximos apartados. 

C O NT I NU E

Inteligencia intrapersonal 
El concepto de inteligencia como CI ha sido cuestionado por diversos autores como bien se ha dicho
hasta ahora. Uno de estos autores que se cuestionó la inteligencia como se había conocido de forma
tradicional fue Howard Gardner quien desarrolló su teoría de las Inteligencias Múltiples, en este nuevo
enfoque planteado el autor no como un único componente hacia la rapidez o los conocimientos con su
capacidad de memorización o repetición.

En lugar de eso, planteó una serie de factores asociados a la misma que amplían las habilidades del
estudiante en diversas áreas que pueden ser musicales, lingüísticas, numéricas, naturalista, espacial,
kinestésica, interpersonal e intrapersonal. 
La inteligencia intrapersonal está completamente asociada a la conciencia de sí mismo. Este tipo de
inteligencia hace énfasis en el conocimiento de los propios comportamientos, capacidades,
sentimientos, deseos a través de la autoevaluación y la introspección sobre sí mismo. Conocerse a sí
mismo es conocer los propios recursos y saber cuándo utilizarlos, así como conocer sus propias
limitaciones y potencialidades. De acuerdo con Gardner la Inteligencia interpersonal “se define como la
capacidad para comprender a las demás personas, mejorando las relaciones humanas” (Gardner, 1994).

La inteligencia intrapersonal ayuda a la persona a conocerse a sí misma en su interioridad y


manifestaciones propias de su mundo interior, pero esta inteligencia no sólo permite conocerse a sí
misma, sino que facilita la interacción hacia los demás, la aceptación y diversidad de lo que les rodea en
el entorno y las diferencias de estos. Citando a Goleman,  (González, 2013) dice:

Ambas inteligencias son importantes para el desarrollo


equilibrado de la persona, pues del conocimiento que esta
tenga de sí misma dependen las relaciones que entabla con
los demás. Gardner (1999) plantea que ese conocimiento
contribuye al fortalecimiento de las actitudes necesarias
para el logro de las metas. (p. 370)  

Inteligencia interpersonal 
Al otro extremo de la inteligencia intrapersonal, se encuentra una que es igual de importante y
complementaria. No hay mucho que decir que no aparezca implícita en el referido “interpersonal”, pero
se refiere a esa capacidad manifiesta que tienen las personas de llevarse bien con los demás, conectar
con los sentimientos de otros, ser empático, aprender a entablar amistades, conservarlas y gestionar
sus relaciones de manera efectiva.

Sin duda alguna, aprender a relacionarse con otros es aprender a no sólo entablar relaciones, sino
aprender a hacer amigos, aprender a disculparse, actuar con asertividad y saber lidiar con los conflictos
en las relaciones. 

En una convivencia social demanda habilidades sociales y relacionales capaces de adaptarse a las
demandas del entorno. Las redes sociales, los conflictos generacionales, la diversidad de personas,
razas, géneros y tantos otros desafíos que presenta el entorno se vuelve necesario aprender a convivir
con las personas. Del mismo modo al moverse en diferentes ambientes, religiones, idiosincrasias,
nacionalidades, cosmovisiones tan diversas de ver la vida que en un mundo cosmopolita como el de
ahora cada vez se hace más necesario aprender a llevarse bien, a ser tolerantes, a ser abiertos y a
construir puentes en una sociedad cada vez más dividida.  

Aprender a convivir debería ser un imperativo de formación para todos, aprender a desarrollar esta
inteligencia interpersonal que incluya saber escuchar, aprender cómo iniciar una conversación, saber
cuándo y cómo formular una pregunta, ser agradecido y aprender a expresarlo, cómo presentarse y
presentar a otras personas y saber cuándo y cómo realizar un cumplido. Alguna vez al ser invitado a
algún evento algún amigo o conocido y en el camino se ha encontrado con sus amigos y les ha
saludado, pero se te mantuvo al margen como si fueses invisible sin decir algo como: “Por cierto, quiero
que conozcas a Luis, es mi amigo y vino conmigo al evento”; o personas que no saben decir algo tan
sencillo como “En verdad aprecio mucho el esfuerzo que hiciste y valoro lo que hiciste por mi”; y en
última instancia personas que se enojan y vuelven como si tal nada creyendo que la gente olvida las
ofensas sin aprender a decir: “disculpa, creo que estaba un poco molesto y me he pasado un poco”. Es
importante decir aquí que tener inteligencia interpersonal no es no discutir, sino hacerlo
asertivamente.  El propósito en educación emocional no es probar quien tiene la razón sino llegar a un
acuerdo en común que sea favorable para ambas partes. 

Clasificación de los fenómenos afectivos


En el año 2015 Pixar presentó un regalo una de las producciones animadas más exitosas no solo por su
producción técnica sino porque trata sobre uno de los temas tan necesarios y urgentes en la sociedad
de hoy “manejo de las emociones” mediante la película Inside Out (Intensamente/ Del revés). A través
de una niña de 11 años que tiene que enfrentar la mudanza de su familia a otro Estado. El guionista ha
ofrecido un viaje a través de las 5 emociones básicas universales que son: tristeza, alegría, desagrado,
furia y temor. Mediante una historia muy didáctica el director ofrece un viaje a través de las emociones
de la protagonista para conocer cómo funcionan las emociones. A estas 5 emociones que presenta la
película y añadiendo la “sorpresa” son las 6 emociones que por ahora la comunidad científica en
general reconocen como las 6 emociones básicas y se dice que a través de estudios realizados son las
emociones que en cualquier cultura se manifiestan de forma similar. 

En palabras de otro autor se tiene que: “los antropólogos y etólogos han observado la manifestación
de las emociones en diferentes razas y culturas y han comprobado las formas similares de
comunicación y expresión emocional: parece haber expresiones emocionales universales inscritas en el
patrimonio genético de la humanidad (Rosselló, 1996)” (Bisquerra Alzina, 2009).

Se le recomienda realizar la actividad 1: 

Actividad 1.docx
15.4 KB

Este simple ejercicio sirve para ir más allá de esa creencia que las emociones son buenas o malas, como
una clasificación bien simplista y descontextualizada. Las emociones fueron como bien se dijo las
herramientas a través de las cuales el hombre primitivo aprendió a sobrevivir en los diferentes
ambientes y las que han permitido llegar como especie. Negar las emociones, es negar la humanidad
que subyace en las raíces de las manifestaciones emocionales. Este ejercicio permite situar las
emociones básicas desde su funcionamiento, así por ejemplo el miedo puede ser que me limite pero
también facilitar la huida que garantice la supervivencia cuando experimenta una sensación de peligro
real o aparente y de igual modo, la tristeza aunque me limita a no hacer nada quizás y genera algunos
sentimientos negativos, también permite pensar y hacer reflexiones sobre la vida y las propias
acciones en momentos cruciales de nuestra vida para salir fortalecidos de dichas crisis.

Hasta este momento es importante destacar que:

Las emociones han sido determinantes en la vida y permiten manejarse emocionalmente a través
del diario vivir. 

La clasificación de emociones positivas y negativas, no se trata tanto si las emociones como tal
sino por el grado de bienestar o malestar que producen en las personas. 

Todas las emociones son válidas, por eso hay que aprender a asumirlas, aceptarlas y canalizarlas
apropiadamente. 

No se pueden negar o suprimir con drogas o alcohol, porque siempre buscan la forma de emerger
y causar problemas mucho más grandes. 
Algo importante es que las emociones juegan un papel importante en la toma de decisiones ya sea en
las decisiones simples como en las decisiones que requieren actividad de la corteza cerebral. Así, por
ejemplo, si al caminar por una calle y encontrar una persona que aparentemente está en persecución
siguiendo, la persona que se siente perseguida lo que busca hacer es refugiarse. Las emociones
inmediatamente se activan a través de las emociones de temor mecanismos de huida para la
protección, al igual que el hombre primitivo cuando se encontraba con un animal tenía que decidir en
fracción de segundos si dicho animal era la presa o él era la cena del animal enfrente. Esa decisión no
requiere mayor procesamiento en la corteza cerebral así que es primitiva y emocional. Pero, aunque en
la toma de decisiones está asociada la corteza prefrontal y los procesos de planificación en procesos
que requieren más pensamiento y complejidad también están asociados las emociones y son
predominantes, por ejemplo, en la elección de estudios, la profesión que se ha de escoger, casarse,
tener hijos, comprar o las elecciones partidarias son las emociones las que terminan predominando.
Entonces, aunque hay procesos mentales como percepción, memoria, razonamiento, creatividad y
muchos más, las agencias de publicidad siguen apelando al cerebro reptiliano y sus emociones básicas
sobre la felicidad a través de una coca cola. 

¿Cómo se producen las emociones? 


Los cambios en el estado de ánimo (emociones) no son más que respuestas a los estímulos internos o
externos que experimenta el individuo como bien se ha venido diciendo. La amígdala siendo un
conjunto de núcleos de neuronas localizada en los lóbulos temporales, esta a su vez forma parte del
sistema límbico y es responsable del 

estado de ánimo. La amígdala procura responder a los estímulos externos o internos a través de
respuestas adaptativas, y se encarga a su vez del procesamiento y almacenamiento de estímulos
emocionales.   

Considerando los postulados de Goleman (Goleman, Inteligencia Emocional, 1995) hacía referencia al
término de “secuestro emocional” refiriéndose a ese secuestro de la amígdala, que no es más que una
especie de interruptor que estimula esas emociones que se presentan en estallidos de
comportamientos emocionales con alta intensidad y con alta ceguera de razonamiento. En el área de la
amígdala es donde se guardan y manejan las emociones, y procura proporcionar respuestas
adaptativas o adecuadas a las demandas del ambiente.  
Las emociones tienen un carácter universal, es decir, que están presentes en todos los seres humanos
de todas las culturas. También es importante destacar que son primitivas en el ser humano y están
asociadas a comportamientos manifiestos generalmente y vienen acompañadas de una activación
fisiológica diferente la cual tiene un origen neuroanatómico. 

Las alteraciones emocionales y la salud


Desde hace rato las emociones al tener un origen biológico también están asociadas a consecuencias
para la salud, al combinar esos elementos biológicos con elementos cognitivos los resultados pueden
ser tanto positivos como negativos. En cuanto a los resultados positivos, investigaciones realizadas
han encontrado que las emociones positivas son útiles en el campo de la salud en tanto que previenen
enfermedades y reducen la ansiedad. Al respecto se puede mencionar que:

Como consecuencia de que las emociones positivas son algo más que la mera ausencia de emociones
negativas (Lyubomirsky et al., 2005), es importante enfatizar que las primeras son útiles en el campo de
la salud en tanto que previenen enfermedades y reducen la ansiedad. Una explicación de este suceso
es la que expone Fredrickson et al. (2003), según la cual las emociones positivas hacen desaparecer los
efectos fisiológicos que anteriormente habían sido generados por las emociones negativas. Otro
estudio que muestra los mencionados beneficios es el realizado por Aspinwal, Richter y Hoffman
(2001), el cual muestra que las personas que se consideran felices asimilan mejor los riesgos a la salud,
y, por tanto, experimentan un menor desgaste del sistema cardiovascular (Fredrickson y Levenson,
1998) y, en consecuencia, gozan de una mejor salud. (Barragán Estrada, 2014)

Por otra parte, en la investigación realizada por  (Piqueras Rodríguez, 2009), se explica las implicaciones
que tiene de forma negativa en la salud como consecuencia del mal manejo de estas, ya que, citando a
Cano-Vindel y Miguel-Tobal, menciona que:

“Afirmar que las emociones influyen sobre la salud-enfermedad a través de su relación con diversos
sistemas fisiológicos que forman el proceso “salud-enfermedad”, en especial cuando se convierten en
trastornos clínicos, así como por medio de sus propiedades motivacionales para modificar las
conductas “saludables” (ejercicio físico moderado, dieta equilibrada, descanso, ocio, etc.) y “no
saludables” (abuso de alcohol, tabaco, sedentarismo) (Cano-Vindel & Miguel-Tobal, 2001)” y además
que “el sufrimiento de estados emocionales negativos persistentes puede afectar al funcionamiento del
sistema inmunológico, del sistema endocrino-metabólico y, en general, de todas las funciones
fisiológicas (Martín, 2005; Ramos et al., 2006)”. (p. 16(2),85-112)

Referencias bibliográficas 

Barragán Estrada, A. R. (2014). PSICOLOGÍA DE LAS EMOCIONES POSITIVAS: GENERALIDADES Y


BENEFICIOS. Enseñanza e Investigación en Psicología, 19(1),103-118.

Blasco Guiral, J. L. (2002). Educación Emocional. Valencia: Generalitat Valenciana.

Goleman, D. (1995). Inteligencia Emocional. México: Editorial Kairós.

Goleman, D. (1998). La practica de la inteligencia emocional. Madrid: Editorial Kairós. S.A. .

González, L. G. (2013). Estimación de la inteligencia interpersonal e intrapersonal según el género y


la ubicación geográfica. Psicogente, 16(30), 368-378.

Piqueras Rodríguez, J. A. (2009). EMOCIONES NEGATIVAS Y SU IMPACTO EN LA SALUD MENTAL Y


FÍSICA. Suma Psicológica, 16(2),85-112.

UNESCO. (1997). La Educación: encierra un tesoro. México.


Lección 2 de 6

Clasificación de la Emocionalidad
Universidad Gerardo Barrios

“La emoción es un estado complejo del organismo caracterizado por una excitación o perturbación
que predispone la acción” (Bisquerra Alzina, 2009). Las emociones se generan como respuesta a un
acontecimiento externo o interno. En el siguiente esquema se aprecia los elementos básicos de la
emoción. 
Modelo de la emoción. Fuente: Docente Autor de Contenido con base en (Bisquerra Alzina,
2009)

En el esquema se refiere a un acontecimiento como desencadenante, lo cual es seguido por una


valoración la cual está acompañado de una respuesta neurofisiológica, comportamental y cognitiva, lo
cual al final hace una predisposición a la acción. 

La emoción con respecto a su clasificación (Piqueras Rodríguez, 2009) recoge los elementos que la
componen y se puede categorizar de acuerdo a su valencia emocional como: 

1) las condiciones que evocan la emoción, 2) las consecuencias adaptativas de la emoción o 3) la


experiencia subjetiva de la emoción. Así, en primer lugar, la ira puede verse como negativa debido a las
condiciones que evocan la emoción, ya que suele ser evocada por acontecimientos aversivos.

 Con respecto a la clasificación anterior, el número 1 hace referencia a las consecuencias de esta y con
base a esa se realiza su evaluación, o también en la numero dos “consecuencia adaptativa” depende del
resultado de cada condición particular, y finalmente, en la 3 hace referencia a que la situación
emocional tiene que ver con el grado de subjetividad de la persona que la procesa. 

De acuerdo con (Bisquerra Alzina, 2009) con respecto a su capacidad de adaptación y debido a que las
emociones no son ni buenas ni malas, sino que se valoran por su reacción, establece la siguiente
clasificación:

1. Emociones negativas: son el resultado de una evaluación desfavorable (incongruencia) respecto a


los propios objetivos. Se refieren a diversas formas de amenaza, frustración o retraso de un
objetivo o conflicto entre objetivos. Incluyen miedo, ira, ansiedad, tristeza, culpa, vergüenza,
envidia, celos, asco, etc. 

2. Emociones positivas: son el resultado de una evaluación favorable (congruencia) respecto al logro
de objetivos o acercarse a ellos. Incluyen alegría, estar orgulloso, amor, afecto, alivio, felicidad. 

3. Emociones ambiguas (borderline): su estatus es equívoco. Incluyen sorpresa, esperanza,


compasión y emociones estéticas. 
Las emociones ambiguas se asemejan de acuerdo con algunos autores a las positivas por el tiempo de
duración y a las negativas en cuanto las implicaciones de recursos para manejarlas y capacidad de
afrontamiento. Es muy importante aclarar que emociones negativas no se refiere precisamente a que
sean malas, porque decir malas generalmente se asocia con culpa, por lo tanto, hay que evitar
confundir emociones negativas con la maldad de una persona. Todas las emociones son válidas y
legítimas, y se debe aprender a asumirlas. La maldad son acciones que son el resultado de un
comportamiento durante o después de una emoción, pero no de la emoción en sí misma.

Emociones negativas
Entre las emociones básicas el miedo, la ira y el asco están asociadas a emociones negativas por la
experiencia afectiva desagradable o negativa y una alta activación fisiológica. Estas emociones de
acuerdo con su frecuencia, intensidad, adecuación y contexto puede que se vuelvan patológicas
provocando un desajuste en la personalidad provocando alteraciones en salud mental o física con
trastornos cardiovasculares o de algún otro tipo. 

De acuerdo con los enfoques actuales sobre el estrés y los estresores por ejemplo no sólo se limita a los
eventos en sí mismos, sino la valoración o perspectiva que la persona tiene de los mismos, las
emociones que experimenta sobre los mismos y los esfuerzos desde el enfoque cognitivo y
comportamentales que la persona tiene para afrontar los estresores. En el caso del miedo-ansiedad es
“una respuesta del organismo que se desencadena ante una situación de amenaza o peligro físico o
psíquico, cuyo objeto es dotar al organismo de energía para anularlo o contrarrestarlo mediante una
respuesta (conducta de huida o de agresión; Sandín & Chorot, 1995)” (Piqueras Rodríguez, 2009).

La depresión es un estado emocional asociado a emociones negativas provocado por una profunda
sensación de tristeza intensa y difícil que puede durar mucho tiempo, esta puede ser causada por
diversas razones y a la vez afecta la persona en todas sus fases provocando trastornos de
concentración, sueño, sentimientos de culpa, inutilidad, así como algunos otros asociados a la
disminución de deseo sexual, pensamientos catastróficos y automáticos sobre sí mismo, y puede
involucrar pensamientos suicidas. De igual manera sentimientos asociadas a pensamientos de
ansiedad o similares se pueden considerar emociones negativas por la sensación desagradable que
produce. 

Emociones positivas
Como bien se mencionó las emociones positivas están asociadas a una valencia de placer y bienestar,
están enfocadas en tiempo y espacio, facilita la utilización de herramientas y recursos para afrontar las
situaciones, y también permite desarrollar fortalezas y virtudes que produzcan felicidad. 

Entre las emociones positivas se encuentran asociadas a la alegría, el interés, el amor, la satisfacción,
optimismo y demás emociones que producen resultados agradables, y que a la larga producen una
satisfacción de logro y favorece pensamientos positivos, con ello permite el desarrollo de recursos
personales que contribuye a largo plazo a transformar a la persona y se repite el espiral de acuerdo con
el siguiente modelo. 
Efectos de las emociones positivas. Fuente: Docente Autor de Contenido con base en
(Barragán Estrada, 2014).

Estados afectivos morales


El carácter es uno de los elementos centrales de la personalidad del sujeto. El carácter también es parte
de la inteligencia emocional a través de la disciplina y el autocontrol, y, por supuesto, la capacidad de
aceptarse y motivarse así mismo. Se necesita estar motivado para iniciar cada mañana, levantarse
cuando se siente triste o capacidad de iniciar después de fracasar en algún proyecto, o para
mantenerse en el mismo. 

En el caso de las instituciones tienen una gran labor en el desarrollo y formación del carácter, a través
de la formación de empatía, motivación y habilidades sociales, esto permite un mayor compromiso con
los valores cívicos y morales. Por lo tanto, no basta sólo con el aprendizaje conceptual, sino ofrecer una
verdadera práctica de la vivencia de esos valores. En ese sentido, es un imperativo para la escuela la
enseñanza de valores morales y cívicos, enseñar ciudadanía y habilidades emocionales que permitan la
convivencia. 

El desarrollo moral de los seres humanos también está influenciado por las emociones y de manera
particular a través de la empatía y las habilidades sociales. De acuerdo con este enfoque las personas
pasan por una serie de fases que son de carácter universal las cuales fueron planteadas por Kohlberg
(Barra Almagiá, 1987). Entre los niveles que se mencionan son:
Nivel preconvencional: egocentrismo

En esta etapa que oscila entre los 5 a los 11 años involucra dos fases, por una parte, obediencia y miedo
al castigo y, por otra parte, individualismo e intercambio. 
Al principio el niño no sabe lo que está bien o mal, hasta que un padre, maestro o un adulto le pone
límites y establecen normas. Los niños tratan de adaptarse, pero es más por miedo al castigo. Y un poco
más tarde de 10 a 11 años, los niños, niñas y adolescentes ya no son tan egocéntricos y empiecen a
reconocer el valor de otros y en esta etapa los niños a través de los juegos entienden cómo funciona el
tema de reglas, se busca hacer lo correcto y se espera que los demás hagan lo propio, a través de un
enfoque de diente por diente que funciona en los juegos. 

Nivel convencional: deseo de aceptación



A partir de este nivel se desarrollan relaciones y expectativas interpersonales de los 11 años en adelante
y de los 16 a los 17 años un sistema social y conciencia de normas sociales. Este nivel está claramente
definido por la adolescencia, la convivencia entre iguales se caracteriza en la primera parte por aquello
de “hago lo que tú me haces”, en este periodo siempre se da el conflicto entre lo que esperan mis
padres y maestros, así como lo que esperan sus amigos de ellos. En la última etapa se menciona que
se ha de mantener el orden social porque es valioso en sí mismo. Se actúa bien, no por miedo, ni por
egoísmo, ni por quedar bien, sino por responsabilidad, por el deber de cumplir con la propia
obligación. Según Kohlberg éste es el estadio en el que se encuentra la mayoría poblacional. (Barra
Almagiá, 1987) 

Nivel postconvencional: grandes principios morales



Durante esta etapa el contrato social y derechos individuales, se relaciona con los derechos
individuales, los derechos humanos y el compromiso porque las personas ejerzan sus derechos. Y en la
última etapa, lo justo es seguir los principios éticos y universales de justicia e igualdad. Se ha
trascendido la visión egocéntrica y ahora la visión ya no es “sobre mi grupo” ahora es “La humanidad es
mi familia” o sea “mi raza” es el género humano. 
La empatía
La empatía es uno de los aspectos básicos de la inteligencia emocional. Entre los ejemplos que
demuestran cómo se manifiesta la empatía desde los primeros meses es cuando un niño escucha llorar
a otro niño se muestra lo que se llama “un llanto solidario”, es decir, el niño escucha llorar a otro e inicia
a llorar de igual modo. Algunas investigaciones llevadas a cabo con los más pequeños (Goleman,
Inteligencia Emocional, 1995), demuestran que la empatía es innata, y que se manifiesta mucho antes
de que los individuos puedan desarrollar las habilidades cognitivas necesarias para asumir una
perspectiva social diferente a la propia. 

La empatía es fundamental en la inteligencia emocional, es lo que permite conectar con las otras
personas y comprender sus puntos de vista, situarse para ver el punto de vista de la otra persona y
aprender a respetar el punto de vista del otro. 

Referencias bibliográficas 

Barra Almagiá, E. (1987). El desarrollo moral: una introduccion a la teoria de kohlberg. Revista
Latinoamericana de Psicología, 19(1),7-18.

Barragán Estrada, A. R. (2014). PSICOLOGÍA DE LAS EMOCIONES POSITIVAS: GENERALIDADES Y


BENEFICIOS. Enseñanza e Investigación en Psicología, 19(1),103-118.

Bisquerra Alzina, R. (2009). Psicopedagogía de las emociones. Madrid: Editorial Sintesis S. A.

Goleman, D. (1995). Inteligencia Emocional. México: Editorial Kairós.

Piqueras Rodríguez, J. A. (2009). EMOCIONES NEGATIVAS Y SU IMPACTO EN LA SALUD MENTAL Y


FÍSICA. Suma Psicológica, 16(2),85-112.
Lección 3 de 6

Componentes de la educación emocional


Universidad Gerardo Barrios

A continuación, se plantean una serie de componentes sobre inteligencia emocional desde la


perspectiva de Daniel Goleman, la cual plantea 5 componentes para la inteligencia emocional:

Autoconciencia

Autorregulación

Automotivación

Empatía

Habilidades sociales

Autoconciencia
Autoconocimiento Emocional es la comprensión de los estados emociones tanto propios como de los
otros. La conciencia emocional permite conocerse a sí mismo y saber que emociones se están
experimentando, la relación entre los sentimientos, pensamientos, palabras y acciones, como los
sentimientos influyen en su rendimiento y sobre los valores y objetivos. 

Dentro de esta competencia (Bisquerra Alzina, 2009) incluye las siguientes micro competencias: 

Toma de conciencia de las propias emociones: es la capacidad para percibir, identificar y etiquetar
las emociones propias. 

Dar nombre a las emociones: se refiere al uso de un vocabulario emocional adecuado para
designar las emocionales que se experimentan. 

Comprensión de las emociones de los demás: es la capacidad para percibir las emociones de otras
personas, así como de implicarse en sus vivencias emocionales por medio de la empatía. 

Tomar conciencia de la interacción entre emoción, cognición y comportamiento: hace referencia a


que la emoción, cognición y conducta están en constante interacción, y que “los estados
emocionales inciden en el comportamiento y éstos en la emoción; ambos pueden regularse por la
cognición”. 

Autocontrol
El autocontrol no es otra cosa que aprender a gestionar, regular o controlar la vida emocional y que
esta funcione adecuadamente a la socialización y el éxito en las interacciones con las personas. El
enfoque de la regulación emocional no es suprimir emociones, sino como gestionarlas
adecuadamente. Esa capacidad para calmarse, hacer un alto y calmarse a sí mismo es un verdadero
arte y de eso se trata el autocontrol como tal.

Las personas dotadas de autocontrol según (Goleman, La practica de la inteligencia emocional, 1998)
son capaces de:

Se gobiernan adecuadamente sus sentimientos impulsivos y sus emociones conflictivas.

Permanecen equilibrados, positivos e imperturbables aun en los momentos más críticos.

Piensan con claridad y permanecen concentrados a pesar de las presiones.


Hay en internet un experimento muy famoso que todos se debería de ver en algún momento de la
vida que se llama el test de Mashmellow y aparece entre los recursos de este módulo puede ser
visualizado al final.  El Test de Malvavisco fue liderado por Walter Mischel de la Universidad Stanford
con un grupo de niños preescolares. Este experimento es interesante porque se le presenta a los niños
un malvavisco y se le dice que si él puede esperar 15 minutos a que regrese el encargado del proyecto
tendrá un malvavisco adicional de lo contrario, si se lo ha comido no se le dará nada. Sirve para evaluar
el autocontrol en los niños y niñas del experimento. Goleman hace referencia a esto y comentan que el
seguimiento que se les dio a los niños de forma posterior cuando ya eran jóvenes fue lo interesante, ya
que, quienes se habían demorado la gratificación es quienes ahora se mantenían sanos, libre de
drogas, buenos hábitos de estudio no habían salido embarazadas, etc. 

Esta competencia también está conformada por microcompetencias, según (Bisquerra Alzina, 2009)
son las siguientes: 

Expresión emocional apropiada: es la capacidad para expresar las emociones de forma apropiada.

 Regulación de emociones y sentimientos: se refiere a la regulación emocional, lo cual implica


saber y aceptar que las emociones deben ser reguladas; esta microcompetencia incluye:
regulación de la impulsividad, tolerancia a la frustración, capacidad para diferir recompensas
inmediatas a favor de otras más a largo plazo. 

Habilidades de afrontamiento: se refiera a la “habilidad para afrontar retos y situaciones de


conflicto, con las emociones que generan. Esto implica estrategias de autorregulación para
gestionar la intensidad y la duración de los estados emocionales”.

Competencia para autogenerar emociones positivas: hace referencia a la capacidad para crear
emociones que generen bienestar y disfrute de la vida, como por ejemplo la alegría, el amor. 

Sin duda alguna, el tema de autocontrol es uno de los talones de Aquiles de todos los seres humanos,
porque aprender a gestionar un momento de rabia y cólera en el momento adecuado. Cuantas
personas pueden parecer muy serenas y en un arrebato pierden los cables como se dice popularmente
y mandan todo a la basura, se pelean, cometen asesinatos o cosas similares. Para no ir muy lejos en un
momento de cólera se puede perder el control, perder una amistad o el trabajo por gritarle al jefe. Hay
muchos casos famosos al respecto y uno de ellos es “el mordisco de Mike Tyson a la oreja de Evander
Holyfield durante el combate por el título de los pesos pesados de 1997, le costó tres millones de
dólares —la penalización máxima que permitía su bolsa de treinta millones de dólares— y un año de
suspensión” (Goleman, La práctica de la inteligencia emocional, 1998).
Automotivación
Aprender a ver lo bueno de la vida, a salir adelante con buena actitud y positivismo, optimismo y
decisión es una característica propia de la inteligencia emocional. Y como tal, no sólo se trata de que las
persona sean motivadas por una entidad externa sino aprender a que la persona se motive a sí
misma. 

Los trabajadores "estrella" se caracterizan por tres competencias motivacionales fundamentales,


según(Goleman, La práctica de la inteligencia emocional, 1998), se mencionan las siguientes:

El impulso que lleva a


Logro
mejorar o descollar.

La capacidad de asumir la
Compromiso visión y los objetivos de la
organización o el grupo.
Competencias que
movilizan a las personas
Iniciativa y optimismo para aprovechar las
oportunidades y superar
los contratiempos.

En todas las instituciones o empresas las personas capaces de gestionar su motivación son un oasis no
sólo para sí mismos, sino también para sus colegas. La motivación le facilita desarrollar actividades de
proactividad, disfrutar su trabajo y ser un ente no sólo productivo sino también que aprenda a
disfrutar lo que hace. En las empresas este tipo de empleados son necesarios que se pongan metas no
sólo empresariales sino también personales de crecimiento en la empresa y son capaces de
comprometerse. Es decir, aquellos empleados que son capaces de comprometerse con una causa,
ponerse la camiseta y disfrutar lo que hacen. 

Una forma de estimular la motivación es escribir en una página cuáles son tus metas a corto, mediano
y largo plazo y que te motiva a lograrlas y compartir con personas que sean importantes en la vida de
la persona que la escribe.  

Habilidades Sociales
Las habilidades sociales hacen referencia a la capacidad de relacionarse de manera positiva y asertiva
con las demás personas. Más concretamente hace referencia a:
Iniciar, mantener y finalizar una conversación.

Escuchar.

Hacer un cumplido.

Expresar gratitud.

Expresar aprobación.

Pedir ayuda.

Dar instrucciones.

Expresar afecto.

Formular una queja.

Persuadir a los demás.

Expresar rabia o enfado.

Responder a los sentimientos de los demás.

Responder a una queja o enfado.

Negociar.

Responder a la manipulación.

Disculparse. 

Referencias bibliográficas 

Bisquerra Alzina, R. (2009). Psicopedagogía de las emociones. Madrid: Editorial Sintesis S. A.

Goleman, D. (1998). La practica de la inteligencia emocional. Madrid: Editorial Kairós. S.A. .

Davis, M., & Mckay, M. y. (2002). Técnicas de autocontrol emocional. Barcelona: Ediciones Martinez
Roca S. A. de C. V.
Lección 4 de 6

El aprendizaje del control emocional


Universidad Gerardo Barrios

Como bien se ha mencionado el aprendizaje del control emocional está relacionado con los objetivos
de formación de un ser humano que aprenda a ser y a convivir. Aprendiendo a ser conociendo sus
emociones, regulándose a sí mismo y su autoestima. Pero también aprendiendo a convivir que
desarrolle empatía, habilidades para relacionarse con las otras personas y capacidad de resolver
conflictos.

¿Por qué hay que “gobernar” las emociones?


Una de las consignas que ha circulado desde hace mucho tiempo es que generalmente, la mayoría de
superdotados fracasan en la vida. Esto está asociado porque hay mucha gente que se destacó en su
educación media o universitaria, tenían los mejores lugares y aspiraban a los mejores CUM honoríficos,
entre otras pretensiones propias de los niños nerd, pero al salir de la escuela o la universidad, su
desempeño no es tan exitoso como fueron en sus estudios. Eso significa que el CI no lo es todo en la
vida. 

Las empresas como tal prefieren a estudiantes promedios pero que aprendan a comunicarse, a tener
empatía, que aprendan como trabajar en equipos y que tengan buena actitud. Un estudiante puede
ser un genio para números, para notas y para cosas técnicas, pero sino sabe trabajar en equipo y
llevarse bien con los otros, entonces de nada sirve. 

Aprender a gobernar las emociones se necesita más que un Coeficiente Intelectual superior, se
necesitan habilidades emocionales para aprender a subsistir en un mundo en el que la relación con los
otros es clave para el éxito propio y para el bienestar de sí mismo de igual modo.   Como bien diría una
frase atribuida a Aristóteles “Cualquiera puede enfadarse, eso es algo muy sencillo. Pero enfadarse con
la persona adecuada, en el grado exacto, en el momento oportuno, con el propósito justo y del modo
correcto, eso, ciertamente, no resulta tan sencillo”.

No hay una técnica única para trabajar las emociones, pero a continuación se explorarán una variedad
de técnicas y estrategias para desarrollar la educación emocional mediante actividades sencillas, pero
de gran valor para empezar a educar las emociones. 

Las estrategias de afrontamiento emocional


Aprender a lidiar con las emociones y lidiar en los momentos de más tensión es un verdadero arte.
Sobre esto se puede decir que “El afrontamiento es entendido como un esfuerzo cognitivo y
conductual orientado a manejar, reducir, minimizar, dominar o tolerar las demandas externas e
internas que aparecen y generan estrés” (Solis Manrique, 2006). Entre las estrategias se pueden
mencionar:

Resolver problemas de manera efectiva.

Actuar con asertividad ante una situación. 

Aprender a pedir ayuda cuando sea necesario.

Aprender a relajarse y tranquilizarse.


El aprendizaje de estrategias adecuadas para gestionar las emociones es la clave para tener éxito en la
vida y en las relaciones sociales en el día a día. 

Se le recomienda realizar actividad:

Actividad 3.docx
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Técnicas psicológicas para el aprendizaje emocional


Como se puede aprender a practicar inteligencia emocional si nunca se desarrolló en ninguna de las
etapas de la vida. Pues la única forma de aprender es haciéndolo, hacer un proceso de aprendizaje y
desaprender formas no adecuadas que se han aprendido a lo largo del desarrollo.

Entre estas técnicas se encuentran:

Pensamientos positivos. 

Resolución de conflictos.

Visualización. 
Los pensamientos positivos es el primer ingrediente y de los más importantes para tener una
adecuada inteligencia emocional. Cualquier persona puede decir “Voy en el tráfico y entonces que…
¿practico pensamientos positivos?”, ¿es así de mágico? Bueno, el hecho es que estresarse, gritar o
enfadarse tampoco va a resolver el problema. Entonces las personas tienen dos opciones para vivir su
vida o con pensamientos positivos o quejándose de todo y de todos enfermando o sintiéndose mal y
resentidos cada vez más. 

Se le recomienda realizar actividad:

Actividad 2.docx
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Técnicas mentales para la superación de alteraciones emocionales


Las técnicas mentales de superación de alteraciones emocionales son aquellas que se refieren a el
control que se puede ejercer desde la mente. Desde el nacimiento de los enfoques cognitivos algo que
han heredado es que al cambiar la forma de pensar se puede cambiar la forma de sentir y, por lo tanto,
la forma de vivir. En este sentido las técnicas pueden estar orientadas a:

Técnicas de respiración.

Técnicas de relajación.

técnicas de mindfulness.

En definitiva, aquellas técnicas cognitivas conductuales orientadas a la detección del pensamiento,


cambio de paradigmas y entrenamiento de pensamientos positivos. 

Se le recomienda realizar actividad:


Actividad 4.docx
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Referencias bibliográficas 

Solis Manrique, C. y. (2006). Estilos y Estrategias de Afrontamiento en adolescentes. . Revista de


Psiquiatria y Salud Mental Hermilio Valdizan, 33-39.

Davis, M., & Mckay, M. y. (2002). Técnicas de autocontrol emocional. Barcelona: Ediciones Martinez
Roca S. A. de C. V.

Bisquerra Alzina, R. (2009). Psicopedagogía de las emociones. Madrid: Editorial Sintesis S. A.


Lección 5 de 6

Glosario de términos
Universidad Gerardo Barrios

1. Autoconocimiento Emocional. La comprensión de los propios estados 4. Emoción: es una


emocionales y los de los otros, es la base para el establecimiento de reacción neurológica
relaciones sociales. Muchas conductas antisociales y agresivas tienen como cuya función es
fondo una inadecuada formación emocional. ayudarnos a
sobrevivir.
Dependiendo de
2. Autocontrol emocional. Aprender a gestionar la propia vida emocional es
cómo percibimos la
un factor decisivo de socialización, y un proceso que tiene su origen en la
realidad, la amígdala,
primera infancia. No se trata de reprimirlas, sino de equilibrarlas. La capacidad
situada en el sistema
de tranquilizarse uno mismo es una habilidad que se adquiere como
límbico del cerebro,
resultado de la acción mediadora de los demás.
accionará una
emoción u otra, que
nos llevará a
3. Bienestar: el bienestar es una de las condiciones que ayudan a lograr un comportarnos de
adecuado funcionamiento de la persona dentro de su contexto social, una forma u otra. 
familiar, laboral y personal. De acuerdo con Seligman (2002), el bienestar y la
felicidad forman un binomio inseparable. Por lo tanto, cuando aumenta este
5. Emociones
sentido de bienestar subjetivo, la persona se vuelve más creativa y su
básicas: Alegría,
personalidad refleja una actitud rozagante. Posteriormente, esta
enfado, tristeza, asco,
combinación generará como resultado una motivación interna para actuar
miedo y sorpresa.
sobre un fin previamente establecido. De acuerdo con la perspectiva
empírica, el bienestar se entiende como un juicio cognitivo global que resulta
6. Empatía. Es la
de la combinación de la satisfacción con la vida y el balance generado por la
capacidad de
frecuencia de afecto positivo y negativo. De hecho, son estos tres
ponerse en el lugar
componentes los que por consenso utilizan los investigadores en el campo de
del otro, es una
la psicología positiva cuando definen operativamente dicho término (Diener,
mediador importante
Sandvik y Pavot, 1991; Lyubomirsky, Tkach y Dimatteo, 2006).  Educación
de las relaciones
Emocional es un proceso educativo, continuo y permanente, que pretende
interpersonales que
potenciar el desarrollo emocional como complemento indispensable del
motiva la conducta
desarrollo cognitivo, constituyendo ambos los elementos esenciales del
prosocial e impulsa el
desarrollo de la personalidad integral. Para ello se propone el desarrollo de
desarrollo moral. Y es
conocimientos y habilidades sobre las emociones con el objetivo de capacitar
que la inteligencia
al individuo para afrontar mejor los retos que se le plantean en su vida
sola no basta si no se
cotidiana. Todo ello tiene como finalidad aumentar el bienestar personal y
da también un
social (Bisquerra 2000, p. 243).
segundo elemento
esencial para la
relación justa y
humana: la moral.

7. Habilidades
sociales y de
comunicación.
Habilidades para
interaccionar con el
grupo, para hacer
amigos/as, para pedir
favores, para hacer y
aceptar
cumplidos...Las
habilidades sociales
sirven para mejorar la
calidad de las
relaciones que el
niño/a establece con
los demás, además
de influir en la
asimilación de
normas y roles
sociales. Unas
relaciones sociales
positivas son una de
las mayores fuentes
de autoestima y
bienestar personal.

8. Sentimiento: Este
no existiría sin la
emociona, pero es un
paso más allá, es el
resultado de lo que
pensamos a partir de
haber sentido la
emoción
Lección 6 de 6

Recursos complementarios
Universidad Gerardo Barrios

Recurso Título Cita referencial


Video Conoce tus emociones. (Docter, 2015)
Intensamente
Video  Educación emocional (Compartir, 2019)
Video El test del malvavisco: (Media, 2009)
experimento para explicar
el autocontrol.

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