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Un análisis sobre el poema de Ser

Adalberto Carranza Ramos

Podemos preguntarnos de donde surge la metafísica tradicional y no


podremos dar respuesta concreta si no hemos leído el poema de Parménides, ya
que aquí se encuentra dicha respuesta. Este texto trata de un análisis personal
sobre algunos fragmentos del poema de Ser de Parménides, dichos fragmentos
analizados van del numero uno al numero ocho.

Fragmento 11

En este primer fragmento podemos encontrar la narración de Parménides el


cual cuenta de una manera muy profunda y poética pero más que nada como con
un tinte de mito o leyenda, su viaje para con la diosa Dike, la diosa de la verdad. Va
narrando cada detalle desde su llegada al sitio, que no es para humanos ya que
hablamos de algo divino, y cómo algunas doncellas lo conducen al encuentro con
la diosa. Una vez con ella ésta lo recibe con un saludo del todo amable que dentro
de este saludo parece que le cuenta un poco el porqué de ese viaje. Para encontrar
el significado de este proemio debemos tener en cuenta la postura de Parménides
respecto a Heráclito y su filosofía. Quiero imaginarme que al hacer este poema y
teniendo este proemio quiso resaltar que no fue el de la intención de tener
revelaciones sino la misma deidad lo escogió para que le fuese revelado lo que más
adelante dirá en los siguientes fragmentos.

Fragmento 22

En este fragmento la diosa Dike le manifiesta que lo que ha escuchado lo


siga considerando ya que es la única vía de indagación, es decir una vía con la cual
puede llegar a conocer y entender el mundo. Tomaré primero lo último del párrafo,

1
Parménides, Poema de Ser. Fragmento 1.
2
Ibid. Frag. 2
que “ni decirlo podrías en palabras”. Me es complicado expresar las ideas que trata
este fragmento, pero dice que lo que es, no es posible no ser y que lo que no es,
necesariamente debe no ser. Es decir, lo que es ya tiene existencia, pero lo que no
es no puede siquiera ser pensado porque no es. Si se piensa en que algo no es
entonces automáticamente ya se le está dando un ser, por tanto, lo que es es y lo
que no es no es.

Fragmento 33

En este fragmento habla del pensar y el ser son una misma cosa, como dice
tal fragmento “pues lo mismo es inteligir (pensar) y ser”. Pero aquí tenemos que
expresar qué es el pensar y cómo está relacionado con el ser. No podemos
quedarnos sólo con esta afirmación porque quedan dudas al aire, por ejemplo, si
ser y pensar es lo mismo, ¿un ser que no piensa entonces no es? O, ¿el pensar
rige al ser o el ser rige al pensar? A como yo lo entiendo y conforme está ordenado
el pensar está precedido por el ser, es decir, primero tienes que ser para poder
pensar porque, ¿cómo podrías pensar si no eres? Si volvemos al fragmento anterior
si el ser es entonces existe el pensar como uno solo, pero si el ser no es pues es
imposible pensar ya que no es.

Fragmento 4 4

Este fragmento ya nos viene mencionando al nous (es decir, alma) y nos dice que
lo ausente esta siempre presente en el alma en cuanto que el ente no se preocupa
por indagar en el ente.

Fragmento 55

Este fragmento, corto, por cierto, nos habla de un retorno, un camino que nos
lleva a la meta, pero esa meta es la misma salida. Creo yo que la idea es que todo
vuelve a su lugar de origen. A la diosa no le preocupa por donde empezar ya que
ahí mismo es donde ha de volver. Parménides tiene una influencia de la doctrina

3
Ibid. Frag. 3
4
Ibid. Frag. 4
5
Ibid. Frag. 5
pitagórica, dicha doctrina tiene la idea de que el alma una vez superado el ciclo en
la tierra, vuelve a retornar, pero en cualquier otra cosa, un humano, un animal, una
planta, etc. Hasta que el alma esté purificada es entonces que ya vuelve a lo divino.
Es por ello que considero que la idea aquí es que todo va por un ciclo. El alma sale
de lo divino, cumple ciertos ciclos de vida y retorna al final a lo divino.

Fragmento 66

Aquí la diosa le dice a Parménides que se aparte de aquellos que lleguen a


afirmar que lo que es y lo que no es son lo mismo ya que esto no es posible.
Menciona a estas personas con ciertos adjetivos que no mencionaré. Es importante
este fragmento porque ya nos va acercando a la metafísica de Parménides. Nos
dice que es necesario decir y pensar que el ente es pero que la nada no es. Esos
dos conceptos metafísicos son de vital importancia para el estudio del ser. Y
volvemos al segundo fragmento, lo que es es y lo que no es no es.

Fragmento 77

Seguimos aquí con la afirmación del ser, es decir, que es y que no puede no
ser. Pero le hace la invitación de que discierna esto que le está diciendo con
insistencia. También al principio de este fragmento la diosa le dice algo muy
importante y que se puede tomar como una advertencia: no podrá dominar ser un
no ente. Debe quedar claro la idea de que ser y no ser no puede ser lo mismo.

Fragmento 88

El segundo fragmento más largo de este poema, nos habla que lo que es no
puede tener un principio ya que se basaría en un origen del no ser por lo cual no es
posible ya que nunca fue y no se puede ser desde la nada. De igual manera, deja
claro que es o no es. Sólo hay dos vías, una que no tiene un camino, es impensable
y otra que es verdadera y genuina. El camino del error y el camino de la verdad.
Más aparte da una serie de frases referentes al ser, que nada es sin el ente; es

6
Ibid. Frag. 6
7
Ibid. Frag. 7
8
Ibid. Frag. 8
inmóvil; no tiene principio, etc. Esto es el logos que la diosa le da a Parménides,
tomándolo como digno de confiar y más llegado a la verdad.

Estos fragmentos a pesar de tener una gramática muy poética y para quien
no tiene mucha interacción con la literatura puede resultar difícil de entender, tiene
una profunda significación sobre el ser. Muchas cosas de este poema son principios
fundamentales de la metafísica, es aquí donde Parménides da pie al estudio
metafísico. Quiero resaltar sólo una cosa que en lo personal es lo fundamental de
este poema, lo que es es y lo que no es no puede ser. Así pues, este poema
contiene aspectos importantes sobre el ser y que da pauta para un estudio más
profundo del mismo.

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