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Actividades sugeridas:

 Canciones.
 Expresiones faciales exageradas frente a distintas situaciones.
 Imitación de sus expresiones, gestos, señalamientos
 Modelado de señalamientos, promover imitación (aprender a elegir y señalar)
 Gestos sociales.
 Juego simbólico: Modelado e imitación, gestos.
 Consignas simples: “dame más juguetes para Luis”.
 Unidades de vocabulario pequeñas, de a poco crecientes (por categorías, por ej:
juegos de té, animales, compras del supermercado).
 Material de cosas de la casa: agrupa por categorías, consignas, inferencias
 Utilizar variedad de palabras: sustantivos, verbos, adjetivos, pronombres.
 Utilizar material como:
– Libros con imágenes sencillas
– Fotos familiares
– Juegos para seleccionar y nombrar imágenes.
– Preguntas simples .
1. Simón dice
Este juego fomenta que los niños desarrollen la comprensión y les ayudará a iniciarse en el
manejo de sencillas órdenes. Organiza pequeños juegos en los que ellos tendrán
que ejecutar la orden que des. Una actividad para los más pequeños es que reconozcan
formas y colores. Tienen que colocarlos, a  medida que tú las menciones, en el plato
correspondiente. También podéis hacer otras dinámicas como tocar las diferentes partes del
cuerpo según se vayan nombrando.  
2. La repetición
Repetir es aprender. Por eso es tan importante que los niños aprendan una y otra vez cómo
deben decir las cosas. Una sencilla técnica de juegos para hablar es reproducir canciones
de dedos como El dedo que tenía hambre, The little pig went to market, Cinco
lobitos  o Toc toc, ¿quién es?
3. Aprender canciones
Las canciones son un buen sistema para que los niños aprendan palabras y
construcciones gramaticales. Ellos, sin darse cuenta, memorizan las letras. Aprovecha el
gusto por la música de tus hijos para que mejoren su lenguaje.
4. Adivina quién es
Con estos sencillos juegos para hablar puedes incitar a los niños a que hagan descripciones
completas de personajes que conozcan. Pueden ser los protagonistas de sus libros, dibujos
animados o miembros de la familia. Podemos hacer que los niños hagan preguntas que
nosotros contestaremos con un simple sí o no hasta que adivinen en el personaje. Otra
opción es que nosotros apuntemos una cualidad que ellos tendrán que describir con una
frase completa. Por ejemplo, si nosotros decimos pelo el niño tendrá que hacer una frase
completa en la que explique el color, longitud y forma del cabello del personaje.
5. Cesta de cuentos
Las historias son una excelente herramienta para que los niños mejoran su lenguaje y
además repasen conceptos aprendidos. Si queremos fomentar el conocimiento de la fauna
añadamos en nuestra caja figuritas de animales con las que ellos tengan que crear una
historia. También podemos poner otros objetos como conchas, trozos de tela y pequeños
elementos cotidianos con los que ellos deberán construir una narración.

1. Empieza con el nombre de los objetos


Debemos iniciar por un vocabulario relacionado con el entorno inmediato del niño, lo cual
implica, no sólo añadir nuevas palabras, sino profundizar en el significo de las que ya van
adquiriendo. La recomendación es hacerlo de manera natural y con simples preguntas. Por
ejemplo se puede empezar con la cocina y lo que hay dentro de ella: vamos a hacer una
ensalada de frutas, ¿qué frutas tenemos en la cocina? De esta manera, hacemos que el
menor responda al nombrarlas, agruparlas y categorizar las palabras progresivamente por
“familias” o “clases” semánticas.
2. Sigue con las acciones
Otro ejercicio interesante es reforzar las acciones a través del juego, aprovechando el
espacio y los objetos que tengamos en casa. Por ejemplo, podemos decirle al niño:
“Juguemos a correr, dar vueltas, a escondernos. O vamos a cocinar, hacer un postre,
pintar”. Ugaz señala la importancia de la acción y la puesta en práctica para reforzarla.
3. Aprende las cualidades de las cosas
Así como es importante enseñarle las acciones (verbos) y los nombres de los objetos,
también es necesario que aprendan las características de ellos (adjetivos). Siguiendo el
ejemplo: “Una vez que el niño ya empezó a clasificar e identificar las frutas y verduras, es
importante comenzar a desarrollar sus características, como colores, sabores y formas. Para
ello, es importante que experimenten e identifiquen las características, como probar el sabor
de las frutas y decir sus características, si les gustó o no les gustó”. Se pueden usar
canciones, adivinanzas o rimas.
4. Realiza juegos onomatopéyicos
En el caso de los niños más pequeños, que todavía no pueden pronunciar bien las palabras,
se recomienda utilizar estos tipos de juegos que permiten imitar los sonidos de los animales
y de las cosas, asociados a imágenes, títeres y objetos. De esta manera, vamos preparando
el niño para que aprenda nuevos fonemas. Se recomienda no hablar al niño en diminutivos
para evitar que aprenda mal las palabras.
5. Refuerza el desarrollo morfosintáctico
En el caso de que el niño sea más grande, Ugaz recomienda reforzar y reflexionar en forma
consciente sobre la combinación de las palabras que conforman la estructura de las frases y
oraciones. Esto contribuye a fortalecer la comprensión y producción del mensaje. Por
ejemplo, que el niño exprese una frase u oración correcta. Además, es importante reforzarle
los tiempos verbales y las pausas. Además, enseñarle que primero habla uno y luego la otra
persona, o viceversa; y que esto permitirá realizar una buena conversación, donde ambos
lados se escuchan, muestran empatía y respeto. Para ello, podemos jugar a hacer chistes,
canciones compartidas y análisis de cuentos o lecturas.

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