Mundo ILUSTRACI

guayo
C O N L I B E R T A D N I O T T E N D O N I T E M O

Año I • Num. H.
Montevideo, 2« de linero de I«I9
5 c e n t s , el ejemplar
 C
• arrearon lencla Ilefjdade Eiladoa Unldoi el 2 i del coirlenle en «I • F a c i l i c . Fccord ce cantidad en un tolo di». 30 000 kllog. Avaluación 100.000 F « " > * '°

Hundo Uruguayo
S e m a n a r i o ¿luetrado
A p a r e c e loe miJrColeí
E d i t a d o p o r IB A g e n c i a • P u b l i c i d a d • t
Capurre y C.*,
C«H« J u a n C . G i m t i . l i o e . — M o n t e v . d e o
P r e c i o dal e j e m p l a r
• J* l u K n p . ' i ú n a n u a l • 3 . W oro
S n t i eitraniero. Suicripción anual. • 3 . 0 0 •
L o » r e p o r t e n 7 f o t o g r a b a d t la C a p i t a l •« h a -
llan m u n i d o i da u n a c r e d e n c i a l e n f o r m a , l a cual
deba е ж ! | | п е en t o d o a l o * ««o».
L o a o r i g í n a l e * n o t e d e v u e l v e n , «ean o n o p u -
bltcadoa.
L a i colaboraciones n o
a u n q u e ae p u b l i q u e n .
4onletldco. 24 de Enero de i"Mi
¡VOTAS SEMANALES
La Liga tic Naciones
humanidad está cansada de lu-
char; desde la época troglodítica en
que el homhre tenía que defenderse
de las fieras y del mismo homhre,
para ser dueño de su comida, de sn
mujer y aun de MIS hijos; la huma-
nidad ha venido desde entonces gue-
rreando permanentemente; en oca-
siones con una crudeza tal que se
llegó a la liquidación final de píle-
nlos enteros, destrucción de c i u d a -
des que desaparecieron para dar lu-
gar a otras bajo el imperio de otros
gobernantes y pueblos de raza dis-
tinta. Cada siglo, la humanidad ha
ganado algo en su mejoramiento es-
piritual y material. Esta última gue-
rra ha sido tan colosal, tan enorme
la destrucción, que los " hombres
caudillos " se han sentido tocados
en lo más hondo del corazón, y en
un supremo pensamiento, ahora, tra-
tan de estrecharse todos ellos, cada
uno representando a un pueblo de
distinta raza, para llegar finalmente
a un acuerdo de ideas tal. que haga
en el futuro imposible el aconteci-
miento de nuevas guerras. Para lo-
grar tan magno pensamiento se lle-
gará a la " I.iga de Naciones ", don-
de estarán representados en primer
término todas aquéllas que con las
armas en la mano defendieron el
derecho, y en segundo término
aquéllas otras que. sin participar en
la contienda, pusiéronse de lado de
los que luchaban por los más nobles
ideales; y, por último, se dará re-
presentación en esta conferencia a
lodos los países que bajo el nombre
de *' neutrales' permanecieron a la
expectativa.
Claro está que en el transcurso
de la discusión de este importantí-
simo problema, en más de un mo-
mento se llegará a situaciones a g r i a s
entre los componentes de la con-
ferencia; pero, al final, todos uni-
dos y satisfechos, habrán dado al
mundo el mejor fruto de ideas prác-
ticas que ha producido la humani-
dad en provecho de todos. Sí, en
provecho de todos, puesto que aqué-
llos que no quieran formar en el
concierto de esta liga se les tratará
en una forma tal que haga impoten-
te al Kstado que se quiera colocar
fuera de la órbita, quedado 1 no-
ble de la ¡dea que se persigue, se
puede considerar criminal; y como
bien dijo León Bourgeois en una de
las conferencias de propaganda a fa-
vor de ta idea de ta liga, " l a nación
que no quiera colocarse dentro de la
razón y el derecho, siendo un miem-
bro de esta liga, y quiera campar por
sus respetos, se le aislará, y, sin sa-
car la espada, valiéndose en lo po-
sible por medidas de orden diplo-
mático y jurídico se la colocará, a
la nación disidente, en una situa-
ción insostenible, privándosele de
materias primas, suspensión de cam-
bios, interrupción de transportes por
mar y tierra, embargo de buques
mercantes, bloqueo pacífico, e t c
Term na el señor Bourgeois, di-
ciendo : es preciso que esta fuerza
internacional de las naciones jnidas
sea tan fuerte que obligue a todo re-
belde a cumplir sus desift.nos; y para
cumplir tan bello programa que todos
consientan en U. limitación de arma-
1
mentos. '
Nosotros agregaremos algo m á s :
un país filibustero que se sienta in-
cómodo en un ambiente pacífico y
quiera revolucionar a todos por una
cuestió» pequeña o grande con al-
gún vecino, y que no acepte la in-
tervención justiciera de todos los
otros para el arreglo de la contien-
da todavía pacifica, no merece ni
existir: y así como en la vida a los
locos se les aisla o se les enchaleca,
para reducirlos a la impotencia, y
a los criminales se les encierra o
% 0.05 se les ejecuta, nosotros creemos
que con todo un pueblo que se des-
orbita se dehe ser más radical, y ya
que no es capaz de ser sensato, nos
parece que de tenerse en cuenta
nuestro pensamiento, podiriamos: que
se reparta el país insurgente entre los
iiadae. n o te pagan, pacíficos vecinos que sean capaces de
incorporarlo por la buena via al dere-
cho, la razón y la justicia:
A pequeñas causas, grandes efectos
Ningún año como el presente ha
sentido tanto Montevideo la ausen-
cia de forasteros, y, si muchos vinie-
ron, se fueron a los dos o tres días
desesperados, aburridos y renegando
por la falta de alguna comodidad en
ésta que debía ser gran ciudad de
turismo; la bella "tacita de p l a t a "
como se ha dado en decir que nos
Maman por todos los barrios de
América.
Sabido es que los forasteros vie-
nen atraídos por la excelencia de
nuestras playas, donde las azuladas
aguas del Atlántico en estrecha pro-
miscuidad con las del Rio de ta Pla-
ta, besan los gentiles cuerpos de las
hermosas bañistas norteñas y uru-
guayas, pero ¡oh desitu-ici: I tanta»
bellezas se fatigan, se desesperan v
huyen por fin como tas golondri-
nas, hacia otras playas más ama-
bles ron tos viajeros, donde sea po-
sible bañarse y luego permanecer a
la sombra, acostados o sentados so-
bre la blanda arena, gozando de los
heltos espectáculos de las playas, de
las playas donde se disfruta de al-
guna «comodidad. No con intuíanlos
con las de Montevideo, donde los
bañistas de la ptaya Ramírez, por
ejemplo, deben ir a tomar sus ba-
ños de madrugada y disparar al asito
o al hotel tan pfOntO pica el sol, sí
no quieren achicharrarse, pues que-
da convertirla en un verdadero hor-
no, " o a s i s " , según han de creer las
autoridades edilicías.
Se nos argumentará (pie para eso i " La lucha contra la mosca delie
están las carpas, ;vava un recurso (i* . . . Distribuyendo por separado
ser científicamente conducida y reali- carteles gráficos e impresos ilustrati-
ese de estar metido bajo un toldo, zarse durante las distintas ha.-es bioló-
j n t a poco hace sentir también el vos ••obre el mismo asunto.
gicas del insecto, es decir, en su estasio
rigor del calort de huevo, de larva y al estado adulto
Teníamos en Ramírez una terraza,
reja de madera, que permitía gozar
de cierta comodidad, y que tenía la
virtud de reunir a todos tos vera-
neantes, haciendo olvidar la falla
de otros mejores; mala era, pero
constituía un refugio, siquiera, con-
tra el sol. Hoy n o ; con el pre-J
texto de un gran proyecto se sacó
1
la tal terraza y nos quedamos con 7* El Consejo Nacional de Higiene
la perspectiva de que en mi futuro proporcionará cien pesos mensuales de
posible seremos dueños dt esplén- 2.* Se nombrará una Comisión espe-
cia! que se encargará de proyectar la sus rentas propias a la Comisión espe-
didas comodidades. Kntre tanto segui- cial para gastos de Secretaria y de pro-
mos drt'iltendonos y ahunyentando a organización de esa lucha, sometién-
dola oportunamente a la aprobación d-.d paganda.
los forasteros que añidieron a " M o n -
tevideo, ciudad de turismo". •. Consejo como así mismo las medidas
que estimen mis convenientes para el
La obligación de nuestros ediles, mejor resultado de su cometido .
seria encontrar la forma de hacer,
aunque sea provisorio, un reparo
contra el sol. Con tan poca cosa
creemos se prestarla un favor a la
población que acude a Ramírez.
**• viní" _ _ M V
Don Juan Manuel.
8." Se solicitarán de los Poderes Pú-
blicos arbitren los demás recursos ne-
cesarios para conducir efiícanicnte 1J
lucha contra la mosca, en todo el te*
¿ L e gusta a Vd. m
X Esta Comisión hará la propa-
ganda educativa del pueblo, por todos
rritorio de la República.
Este pedido se hará cada vez que la
Mundo Uruguayo?
¿Desea Vd.
su triunfo?
Al hacer compras
cite sus anuncios.
 agua en algunos días, sólo a! amanecer Montevideo con o b r a s de las m , R

VELANDO POR EL BIEN
Un poco de escoba
t"« vecino del paraje comprendido
entre I» calle P a r a g u a y y el Palacio
Legislativo, nos ha manifestado que
a esa altura de la ciudad h a y u n ver-
dadero desaseo en las calles, pudién-
dose observar montones de desper-
dicios. Como el caso no es único, n-
mucho menos, estamos seguros de
que d o se nos ha engañado. La es-
coba municipal n o se muestra muy
activa, salvo en la parte central de
nuestra urbe. F.speramos, en conse-
cuencia, que los barrenderos no se
olviden de lo» barrios apartados y
que loa atiendan con la escrupulosi-
dad míe merecen. Por de pronto, les
aeñalamos hoy un radio donde pue-
den ejercer sus funciones.
Las playas
El trabajo tic señalar deficiencias
es uno de los más cómodos y fáci-
les. Fl curioso las encuentra en t o -
das partes, sobre todo si lo acom-
paña \tn afán crítico e Irónico. P o r
nue-lra parte, renunciamos a toda
ironía y casi diríamos, a toda critica,
con lo que ganamos espacio y tal ver
eficacia. Estamos en la playa. F.l
oído y la vista se entretienen en
descubrir lo bueno y lo n u l o . Kl oitlo
comienrn por notar que casi no h a y
mú«ici rn r! Parque Urbano. Se ha
confiado demasiado en la nrmonía de
las olas y en los cantos de los árbo-
les. Pero para el que los oye todos
los días. n<> H suficiente. Kl oído de-
searía escuriTur música instrumental,
especialmente si fuera buena, sin
que por eso se halle dispuesto a r e -
nunciar a la mediocre. Ese poco de
música que *c escucha a veces en la
playa Ramlre7, solo sirve para ha-
cdrnos recordar que nllí no hay mú-
sico. Sería, pues, necesario que se
c o n t r a t a r a n algunas bandas que t o -
casen en el Parque U r b a n o y en la
Playa liamirer.
Nos conformaremos por hoy con
hacer una observación m á s . P.n la
arena sólo es posible quedarse de
madrugada y d u r a n t e el crepúsculo.
F.l sol es el únirn que p u d d a la pla-
ya d u r a n t e la mañana y la tarde y
domina de tal modo, que nadie le
anima a acercarse a sus claros y a r -
dientes dominios.
Para darse un baño de mar. ,es
preciso disfrutar antes y despuís de
un gran baño de sudor. Cuando exis-
PUBLICO
cultor que se encargue de modclar
la herma recordatoria, sólo podra
gastar con ese fin, la modcstl-ima
cantidad de mil pesos. Vale decir que
cada habitante del país, si este tu-
viese nada más que un millón de ha-
bitantes, sólo ha contribuido a este
homenaje con la cantidad de un nu-
lísimo I Es indudable que Florencio
Sánchez no escribió sus obras para
que luego el «país agradecido le le-
vantara un monumento. Demasia-
do inteligente, demasiado bohemio,
magníficamente desinteresado, sus
dramas y comedias nacían en su es-
píritu vagabundo, libres y espontá-
neos y eran escritos por la bella ne-
cesidad de ser generoso y entregar
a todos el tesoro de su genio, abun-
dante y pródigo como la fruta de un
gran árbol. Notemos que sus com-
patriotas no ban tenido ese gran des-
prendimiento de artista y que no han
sabido como su más admirable dra-
maturgo, sorprender con un gesto de
generosidad, poniendo en la mano
llena de amor y de veneración el
óbolo digno y ennoblecido, mediante
el cual quedase eternizado por el
mármol o por el bronce la figura
de aquel escritor que triunfó con SU
obra hecha de todo su dolor y de
toda su a l e x i a de hombre. Floren-
cio no se sorprenderla del resultado
de la colecta, pues conocía muy bien
el espíritu de sus semejantes y sabría
sonreír, acaso con un poco de aujar-
gurn, no por él" y por su obra, pues
conocía todo' l a méri' de creador
del teatro nacional, sin. p'<r !<•« de-
más, por los que han contribuido a
jn monrnnf • ' " e*^i un nvlésimn.' I »•*
cualquier f\ odo, nos parece injusto,
absurdo, inaceptable, que en una ciu-
dad tan abundante de fortunas como
es la d r Montevideo, se dedique a la
memoria de uno de nuestros espíri-
tus superiores un recuerdo tan pe-
queño. Bfl verdad que a él habrán
contribuido lo'•. hombres de más rla-
ra conciencia y mayor capacidad de
juicio, pero los monumentos no los
deben levantar unos cuantos hom-
bres de selección, sino el pq en-
tero. Creemos por eso que aun hay
tiempo para evitar la afrenta y que
nuestros compatriotas se encuen-
t r a n en condiciones de reaccionar.
Rasta Con que cada uno piense algu-
nos instantes cu lo que quiere ha-
cerse y medite un poco en la grave
responsabilidad que entre todos se
reparte. Si en estos instantes se hi-
ciese un movimiento uacional en el
sentido indicado, precedido de una
propaganda que sólo consista en ha-
cer recordar el valor de la obra de
Florencio, podríamos conseguir que
el monumojito a erigirse en la ca-
pital como homenaje al gran dra-
maturgo uruguayo fuese digno de su
propia significación. Los periodistas
podrían comentar y serían secunda-
dos por todos los literatos, escul-
tores y pintores. No debemos olvi-
dar que en esa forma, nos daríamos
y durante las horas de la noche? ¿Es
posible que un servicio que se retri-
buye tan bien, sea atendido tan mal?
La dcscon íormid.d se puede , apreciar
en todas partes y esa situación incó-
moda, que tanto se extrema en los días
de gran calor, está pidiendo a gritos
una solución definitiva. F.l asunto me-
rece Ser meditado seriamente, por
cuanto el defecto señalado afecta fe
gran parte de la población y en algo
que no puede ser sustiuido. Además,
la escasez de agua i¡o es cosa de este
año. No toma desapercibido a nadie.
La deficiencia del servicio se ha hecho
notar desde hace bastante tiempo, lo
inficiente como para que los pie deben
evitar ese mal, ya lo hubieran inten-
tado, cuando menos, corrigiendo en su
mejor forma posible la situación ac-
tual. Y en estas cosas, no está demás
decirlo, no puede disculparse ninguna
negligencia.
El Museo de Bellas Artes
Hace aún poco tiempo visitamos,
acompañados por varios pintores y
escultores nacionales, los salones del
Museo de Bellas Artes, corroborando
la insuficiencia de los mismos para
|fe perfecta apreciación de las obras
allí existentes. La Dirección se ha
esmerado en la colocación de cua-
dros y esculturas, pero a pesar del
esfuerzo inteligente que se ha hecho,
no se ha llegado a satisfacer el buen
deseo que inspiró al señor Laporte.
Y es que el edificio no responde al
objeto a que ha sido dedicado. Eso,
en cuanto al edificio. Respecto a las
adquisiciones, debemos alabar en
primer término el afán demostrado
en la colección de reproducciones de
esculturas griegas y romanas, asi
como en la del renacimiento, arte
gótico y moderno. Dentro de los es-
casos medios con que m e n t a el Mn-
seo. se ha hecho bastante y sabemos
que existe el propósito de adquirir
nuevas reproducciones, a fin de com-
pletar los períodos más significati-
vos de las artes plásticas. Kn la últi-
ma visita que hicimos al Museo,
uno de nuestros acompañantes, nos
advirtió la ausencia de obras m o -
dernas y nos hacía observar que se-
ría bastante fácil enriquecer las sa-
las de pintura y escultura con la
labor de los artistas contemporá-
neos. Muchas obras podrían adqui-
rirse a precios poco elevados, pues
en Furopa es difícil imponer la fir-
ma y hay muchos artistas notables,
que se ven precisados a vender sus
creaciones por poco dinero. N a t u r a l
mente que para esto, se necesita en-
viar en la época de las exposiciones
a una persona de grandes conoci-
mientos y sagaz penetración. Un
verdadero catador de belleza, que
sepa descubrir entre los pintores y
escultores nuevos a los que más t a r -
de »' más temprano han de triunfar
definitivamente.
Como el Museo no se hace para
hoy, sino que para todos los tiem-
famosos a r t i s t a s . La idea es sin du-
da muy buena y con ella se habrá
logrado una vcx m á s , ampliar uno
de los más poderosos medios educa-
tivos de los pueblos.
Una pnxcd de avisos
Vamos por la calle Agraciada y
nos detenemos ante el Palacio Le-
gislativo. De p r o n t o giramos sobre
los talones y nos encontramos ante
una gran pared de avisos. Mirando
por las rendijas, nos sorprendemos
ante un magnífico edificio. F.n él está
instalada la mueblería Giorcllo, casa
industrial que honra a nuestra ciu-
dad. F.l local ha sido construido con
objeto de que en él se instale una
exposición de muehles, atrayendo en
esa forma al público interesado en
la adquisición de los mismos. La
exposición está permanentemente
abierta y a causa de los avisos de
que informamos más arriba, pierde
sin duda ta presencia de gran can-
tidad de visitantes. Como se ve, el
perjuicio no puede ser más mani-
fiesto. La gran pared d'e anuncios
parece un disfraz. Pero la compa-
ración no es absurda, por cuanto
imaginamos que el dueño del esta-
blecimiento no está de acuerdo con
esa careta ríe lata que han colocado
frente a su establecimiento. Kse ex-
t r a ñ o camouflage debe desaparecer.
P a r a no perjudicar a nadie, podría
buscársele o t r a colocación más ade-
cuada, aún dentro del mismo te-
rreno donde está. Esta opinión se
basa en una simple cuestión de buen
gusto, que las autoridades munici-
pales podrían tomar en cuenta. Tal
vez la solución n o sea difícil y todo
se arregle sin perjudicar al edificio
del señor Giorcllo, a los avisos y a
la estética.
WPOMURIQS i.tMHIIs

tía aún la terrassr, era fácil resguar-
darse del s o l ; pero «hora nadie ROÍ
lo ataja. Hay que ir n bañarse cuan-
do el sol sale y cuando se pone. Cree-
mos que fue una bella iniciativa la
de suprimir la terrasse de Ramírez,
pues en esa forma sr le devolvió a
la playa la natural armonía de su
gran línea curva. Pero aquel gran
maderamen, prestaba sus buenos ser-
vicios y éstoi no ban sido substitui-
dos hasta la fecha. Como todas las
personas n o pueden ir a la arena en
las horas en que el sol se lo permi-
ta, se hace Imprescindible buscar al-
gún medio de proporcionar un po-
co de sombra fresca y agradable al
veraneante.
F.n estas observaciones respecto a
las playas, hemos coincidido con los
órganos de la prenia montevideana,
y esa misma unanimidad de crite-
rios, refuerza más el valor de nues-
tros comentarios.
Fl monumento a Florencio Sánchez
La Comisión encargada de la sus*
cripcíón para e! monumento a Flo-
rencio Sánchez, acaba de llamar a
concurso a los escultores, para que
de acuerdo con las condicional e i -
tipuladas, presenten sus proyectoa da
hermas, a fin de consagrar la memo-
ria de nuestro primer dramaturgo.
Cuando no» enteramos de este lla-
mado a concurso, no pudimos me*
nos que lamentar el fracaso de t a n
pobló Iniciativa. S n efecto, el e s -
j. GRANARA a tía.
a nosotros mismos una bella lección
pos, la producción contemporánea
de espiritualidad y de cultura y que que se adquiera ahora, será valorada
en torno al nomhre glorioso de Flo-
poco a poco, y dentro de algunos
rencio nos uniríamos en uno de esos años, sin gastar mucho, podrá contar
afectos puros, destinados a educar
nuestras almas en un sentimiento de
cordialidad y de n o b l e » . •
L a i aguas corrientes
PIANOLA-PIANOS
NTI.l.WVAY - W1CHKK - N T ICC K - YHTKÜUI)
Un el momento actual, pablar sobre
lai aguas corrientes, no es llover sobre
mojado, p i m hay momentos muy nu-
merosos y muy largos, en que las caflr- Laa cualidades exclu- fe de lot otros Instrumen-
rias están completamente secas 1.i« ins- sivas
talaciones con que cuenta nuestra capi tos, tocador*» automá-
tal. no responden al gran consumo de "METROSTYLE"
ticos. La opinión de
aRua, que por otra parte, proporcio- y "THEMO DIST"
natmente al que se realira en otras eaiii- los m i s famosos músi-
han hecho de la PIA-
tales. es poco mas que pequeño Se trata cos del mundo, ci uná-
enmo puede comprenderse de Inme- NOLA» el instrumen-
diato, de un problema aerio. que exige to más musical y artís- nime en Justificar la
en el más breve plaao una solución que
satisfaga plenamente a los habitantes tico, no p u d l t n d o i t superioridad de la PIA-
de nuestra capital. No es el momento comparar con ninguno N O L A , it n ti II it
de entrar en largas apreciaciones para
demostrar la importancia del agua para
toda clase de aplicaciones, pues nadie
hay que no este plenamente enterado
de ello. Pero no debemos callar las
serias razones de higiene, q j e no es
H O W A R D Si HOBBS
posible olvidar nunca, y que son las
que mayormente pesan en nuestro áni-
mo, ante un hecho como el que hem<s 25 d e Mayo 5 8 2 - 5 8 « Montevideo
anotado. ¿Qué limpíete podrá h a c e r a
en c e n í donde s ó b puede contarte con
 PSICOGRAMAS
CtfMlsl sari BUIDO UKUQMYQ cribiráto
Sin iluda, hay "leyes" en loa fenó­
menos s o c a l e s (aunque habría que
estar mucho tiempo e x p l i c a n d o en
qué s e n t i d o ) ; pero decir que, por­
que hay leyes sociales, n o se puedo
reformar la sociedad, es como decir
que, porque hay leyes de gravita­
ción, resistencia de materiales, etc..
no se puede reformar la arquitec­
tura.
Ufl argumento en favor de utopias
que parezcan irrealizables, es que la
organización social actual parece una
utopia, — de absurdo, de sufrimien­
to, de desigualdad, t a n irracional e
iHtrr.m'mi/. — y, sin embargo, hasta
eso ha podido realizarse.
Cuando un escritor es mala perso­
na, me parece menos bello lo que
escribe. Esto sería a b s u r d o ; pero
quiero creer que percibo lo que la
falta de honradez, de sinceridad, de
entusiasmo, etc., producen de efec­
tivamente mal escrito y menos be­
llo en las o b r a s . . •
Como ciertos escritores no tienen
los (renos de la sinceridad, de la pro­
bidad intelectual, del respeto a la
verdad, y demás que inhiben la in-
mensa parte de lo que se piensa,
stilo necesitan, para escribir, que se
leí ocurra algo inteligente y origi-
nal: y. e t o [es tan fácilI
Nunca entenderán, ciertos imita-
dores de tendeneia's en moda (que
se creen innovadores y atrevidísi-
mos), que. si bien la primera mujer
que i c pusiera en el sombrero algo
inusitado: un sapo, o un reloj, seria
oriainat (fnera cual fuera el valor
de tal originalidad). — la segunda ya
seria m a s plagiaría, más imitadora,
más lin personalidad ni independen-
cia, que las que, después de cien
millones de otras, se ponen pájaros
o flores.
Hay modos de no ser personal, cada
vez mal lut¡1es y menos reconocibles.
Kl vulgar, grueso: imitar a alguien.
Después, la imitación difusa, de mu*
chos, de lo que anda por a h í . . Pero,
todavía: sin imitar propiamente, #n-
trarlt al público por la brecha abierta
por otros (utilizando sentimientos que
otros crearon, o la destrucción o con-
moción, por otros, de sentimientos e
ideas, etc, etc.).
• volvieron reflejadas de auuel Norte le-
Loa falsos reformadores, y quie-
nes los admiran, tío entienden que,
al verdadero reformador, debe serle
tan ajeno el propósito (consciente)"
de violar lo establecido, como el de
eumplírlo.
Leyendo a un escritor; Su geniali-
dad, es indiscutible Hasta ahora, la ha
ejercitado, y la ha lucido. ¿Cuándo la
empleará?
Muchísimos son liberales para t o -
das las libertades ya adquiridas,, y
formidables conservadores para las
que IttQ hay que adquirir.
I.i- patrias podrían ser como las
cubierta» de tai crisálidas, — y ha-
rían posible la evolución, preserve-
raudo cierto* sentimientos destinado',
a eclosión futura. Dos torpezas: con-
f e r i r la envoltura como si debiera
ser eterna, y confederarla como cosa
mala y despreciable porque no está
destinada a ser eterna.
"Sociología". — La culpa no es de
ciertos nobles utopistas, ni de los teo-
rizaííori-s de amplia envergadura; ni
menos de [ni inventigadores pacientes
y concienzudos, que trabajan con la
noción seria de lo insuficiente y provi-
sional de su Larca. Pero, es una ciencia
nueva: como las instituciones recién
fundadas, ofrece facilidades excepcio-
nales, y no es extraño q u e j a s aprove- la sublimidad, en la acción, en el pen-
chen otros ciencistas de categoría me-
nos selecta Piénsese que es " ocasión
ú*ícq"!, poder adquirir notoriedad es-
novelas sin necesidad de que
8МП b e l i t i m bi.-n escritas.
" Fedaaopla". — Al ver tanta arti-
ficiosidad y tanto absurdo en Pedago-
gia, se siente la impresión de que. en
esa ciencia, tiene que asJar el buen sen-
tido, romo sale el sol.
I M f l'edaaogia. — Si se descubriera
la verdad absoluta. también la pondrían
en textos, y en programas. — y se exa-
minaría sobre ella Al cabo de algún
tiempo, sería terrible.
Cuando analizamos algunas de
nuestras pequeñas vanidades (como
las que tienen que ver con la ha-
bilidad en tos juegos, el vestido, la
apariencia fisica, etc., etc.). percibi-
mos sin trabajo su ridiculez, y, en
verdad, nos sería bastante fácil cu-
i a r t a s ; pero nos detenemos, porque
cierto instinto nos hace sentir peli-
gro, — para o t r a s vanidades más
grandes, que excitan y sostienen la
vida, y que son atacables por las
mismas razones y sentimientos que
las chicas.
I.os autodidactas: muy buenos pa-
ra genios; pero, para simples talen-
tos, suelen resultar imposibles.
Una cosa es admirar un libro, y
otra es leerlo.
l.a* Matemáticas, para el pensa-
miento humano: el mejor servidor, y
el peor amo.
" Pensamientos" de Marco Aurelio. ta a analizar los actos esenciales,
— El libro más desconsolador que exis-
te. "Vemos, ya en la vida, cuan desarma-
do estS el virtuoso, para actuar. Paro,
en este libro, lo vemos desarmado para
razonar, para fundar su virtud...
(Leyendo a Млгео Aurelio, se me
ocurrió que, lin duda, él no escribió
sus pensamientos, para que-la posteri- con tan copioso bagaje histórico, con
dad los leyera; pero que ya hay atgo
de poco Intimo, literateado y no ab-
solutamente verdad verdadera, en es-
cribirlos de modo que fusdan ser leí-
dos por ta posteridad I
Vn aspecto de ¡a gloria de Ibsen
Ciertas mauifestacíoens del pensnmxn-
io y dr la vida de los países claros (de
mis costumbres, de su ciencia, etc ), leí
jano y vago, у но las reconocieron,
viéndolas tan misteriosas y profundas,
como pasó mucho tiempo con Ii luz
1 cinérea de la tuna, que es la luz dr la
tierra que nos vuelve, pero obten recula
y poetizada.
Une " vale más una cabeza bien
hecha que una toen llena", es evi-
dente. Pero, dejar, por eso, vacías
las cabezas, es un mal razonamiento.
Espanta pensar cuan breve y fá-
cil es hacer una confusión, y qué
cantidad de tiempo, de trabajo y de
atención se necesitan para desha-
cerla. Para aclarar un paralogismo>
que se formula en una linea, se ne-
cesitan mucho* párrafos, o capítu-
los, o libros.
Enredar un ovillo de hilo, es cues-
tión de un momento; desenredarlo,
larguísima tarea (cuando es posible).
I.os que rehuyen del libre examen,
tjgsj como ser personas que se resistie-
ran a ver, de cada paisaje un objeto,
más de una tola reproducción, basán-
dose en que. por ejemplo, varias foto-
grafías de un lugar, tomadas de distin-
tos momentos y por distintos operado-
res, se contradirían, o causarían con-
fusión.
S'obtes productos humanos ; tan su-
periores a la humanidad I El heroísmo,
samiento, en el arte, resultan de exa-
oTÍutioues parciales.... No se desea-
ría tal vez una humanidad que hiciera
más; pero s i . . . qje lo hiciera más
PROFECÍA DE DOSTOIEWSKI
jr.ás digna de lo qui h a c a . , . .
"¿Recuerda usted aquel versículo
del F.vangrl-.i.. "quien empare la es-
A medida epte no* hacemos mis adul- pada nvirira por la e s p a d a " ? ; N o I
tos y estamos mis de vuelta, van que- L o qne la espada ha forjado no p o -
dahdo. para nosotros, menos cosas y dra subsistir. Y ellos gritan i " La
hombres rtttetahles; pero lo 'espe- joven /rlcmanla ". Todo lo contra-
tamos m i s r i o : es una nación que ha agotado
Carlos V a i Ferrtira. sus fuerzas, pues se confía a la idea
de lucha, de sangre, de violencia: no
tiene la menor noei-'m de lot triun-
LA E P O P E Y A D E , A R T I G A S fos espirituales y se ríe de ellos con
una brutalidad soldadesca. ¡ N o ! Es
l.a revista España " que se edita
en Madrid, publica la siguiente no- una nación muerta, una nación sin
ta bibliográfica sobre la " Epopeya porvenir, ereedme ¡ pasada la frime-
de Artigas", de Juan Zorrilla de ra b o r r a d u r a de triunfo, pi -testará
San Martín: aun, querrá un porvenir mejor y su
espada caerá sobre ella misma.
"Conocido es el origen del monu-
mental libro de! doctor Juan Zorri- " El pueblo sahe leer y escribir,
lla de San Martin, relevante porto* pero es inculto en grade* sumo, es-
nalidatl literaria uruguaya, sobre Ar-
túpido, ciego y guiado por los inte-
tigas, el héroe nacional del l ' r u g i n v reses más bajos. "
El gobierno de Hatlle y Urdóiiez
tCarta de Dostoiewski a Maikof,
acordó erigir a Artigas un monu- fechada en Dresdcn. a S de Febrero
mento en piedra o bro ice y otro
de i«7i).
monumento en letros. Para nquét.
abrió un concurso que dio por r e -
sultado la adopción del proyecto del
escultor Angelo Zanelli. Para éste,
lior decreto, rogó a Zorrilla de San
Martin que escribiese una memoria
sobre Artigas.
Y Zorrilla de San Martín no es-
cribió una* memoria, sino i r * histo-
ria colosal en dos tomos.
El gobierno de Hatlle p .-'de su A^u.i y Crerru, blanquean,
trabajo con 5.000 pesos. Xo es mucho.
rttotf lia aparecido, editada en и м Ы х а cotia,
я » r t n u o r a n «I
Piarcelona por la Casa Gilí, la se-
gunda edición de " l.a epopeya de
gastándole toda ипрюгцал.
Artigas". I.os españoles cultos lic- H A M M E R L Y
hera u apresurarse a adquirir esta
obra maestra, uñé* de los más pro- C s E R R i T O , В О 7
fundos, documentados y amenos es-
tudios que han sido hechos acerca
de la independencia de la América
del Sml.
Zorrilla de San Martín no se limi-
militares y políticos, del gran Arti-
gas, el calumniado fundador de la
independencia uruguaya, vletuna de
su hado y también de la incompren-
sión de sus contemporáneos. Todo
el proolema de la manumisión sud-
americana y de la creación de sus C R E M A ¡j
nacionalidades independientes es es-
tudiado en su libro con tal acierto,
una serenidad tan admirable, que di-
fícilmente se podrá encontrar defec-
D E Я. Л A
tos de trascendencia en el trabajo del
rininenie escritor de Montevideo.
[МатШоаа p«R« et tasta L
Desde hace algún tiempo en Es- i.» » y «i haaabrt fitia
parta aparecen ediciones ríe libros ro-
tativos a la historia de " nuestra '• i , . у .
| Л | | 1
America". Illanco Fomhona. editor nm. Km I-I яе*г«|<> |,nrn |мпмг-
de bibliotecas americanistas de pri- VSR y «hh'IIIR 1 ndollri 1 meule
» itaar as lea *п.»-. i, juven­
mer orden, ha hecho y luce mucho tini r h t m t t o n ta] rostro
y bueno en esos respectos. Ahora,
la publicación en Harcrlnna de una
nueva y bien presentada edición de
" L a epopeya de Artigas", completa DROQURRt A Y F A R M A C I A
esa labor de aproximación intelec-
tual ibero - americana. " DEMARCHI'*
Artigas fué una figura extraordi- ROCH, C A P D E V I L L E òr С(л.
naria. Descendía de zaragozanos. De-
C R R R I T O -ile A L 4 4
bemos los españoles considerarlo
como una gloria propia- • •. — V.". Y C E R R I ГО B 1 Q . irU/.AlNGÛ
'ir'
T
По d.-h.-n fallar
en el looador de una
dama elegante,
lìemlllmosmues
l'I Iras gralls.aquieii'
' lo solicite.
mu s pione
К 1N<ÓN. 4 « Л
•OITUIDCO

A u t o p s i a d e Zoilo
En un articulo publicado en " Kl T c -
Irxrafo", en *u sección Eormm, que es
como decir Campo neutral o Solicitadas
encontramos un articulo que tira a ser
de tesis preceptiva y filosófica. I«o
titula " 1 . a resurrección de Zoilo*. Lo
que quiere significar que reaparece en
nuestros día* el criticastro famoso, pe-
dante pero lapidor
Muy malo es el zuilismo, esc siste-
ma de criticar al santo ñn<To. Más eo>a
prave es teorizar sobre la critica, es-
cribiendo mal y pensando con aymltf
de toda cla^e de incongruencias.
I>emosl reñíoslo. Dice^ a! principio,
el autor a que nos referimos:
El crítico eleva y resuelve el pensa-
miento exteriorizado, el sentido pro-
fundo inaccesible a las hteligen, ias me-
dianas, la concepción legítima, para arro
far en ellos la luz de su discernimiento,
coordinar las ideas confusas y exponer
al fallo de los lectores, un todo hetero-
géneo de donde surgirá la belleza del
conjunto, a plena verdad, a plena be-
Ilesa o falsedad
Galimatías puro.
iQ*ié será eso de "resuelve los pen-
samientos"?
¿Qué será eso de " a r r o j a r en ellos
— ellos, aqui. haco las veces de inteli-
gencias medianas — la luz de su dis-
cernimiento''?
¿Qué será eso de "coordinar las
ideas confusas " . . .
Manicomio se llama esta clase de
figuras
У en otra parte:
... "el critica (que casi siempre es
un escritor fracasado)"....
Vea. usted, señor articulista: el crí-Salto, que se firma Psiquis — ¿no será
tico sí rscrÜVe sus críticas, es escritor una señorita? — puhlica un articulo.
de hecho Pero el que quiere criticar a
los críticos e incurre en tan alarman-
tes galimatías como las transcriptas no
no sólo no es crítico sino que tampoco
re escritor. .Мяо с . sin embargo: un
fracasado
í n discurso....
...pronunciado por el doctor Migurl
Perea. en San José, en este mes de
enero, con motivo de la colocación de r* Si no comprendemos mal. con el sis-
la piedra fundamental de una capilla.
piedra que ka de scnir de base al
nuet'o templo— son las palabras de
" l ^ j s principios" de aqiii'Ha ciudad
l-'sia hase de aquella capilla, o de
aquel templo, o de aquella iglesia —
¡quién s»be lo que será al finí — es
una singular piedra tipo baúl, cofre u
otro armatoste Q M
t se cierra, que se que la madre va graduando los cuida-
abre, y que a lo mejor, contiene algo
adentro..
El acta que tu abam.u de firmar y
que hemos encerrado en esta piedra...
— leyó el señor Perca.
¿Se trata de un descubrimiento in-
dustrial? Porque si para la construc-
ción dr muebles pudiéramos emplear
la piedra...
N D Í debe ser un error. Aqui no hay asimismo, para meterse a desenvolver
piedra que pueda guardar en t inte-
rior nada. ' • bajo de ella donde, cual-
quier dia. encontraremos " e l acta qnr
acibaróos «le f i r m a r "
De todos modos, es una monada el
lapsus. Mayores lo cometen otros,
sin ningún adoquín consagratorio. y,
no obstante, se quedan serenísimos, y
frescos No por tan pequeña co*a va
n enterrar el señor Perea su rsprraura
de escribir buenos discursos. Porque
las esperanzas no se entierrau. ¡Son
algo tan hermoso! ¡tan incorpóreo! V
así se lo decimos al doctor Perea para
alentarl». para infundirle alguna ani-
mación Kl cree, a buen seguro, en lo
que significa lo que escribe V él. en
su discurso de la piedra, leyó a su pú-
blico p í o :
Murió hace poca una esperanza. .
No, doctor. F.l adagio corriente, que
usted debe haber oído. BO admite
BARRACA DEL FERROCARRIL
J O S É R A M O N
Ш! a E ; ni i j i M
que muera la esperanza. I.a realidad
Del público HERNIAS. QUEBRADURAS
Curación r a d i c a l huí o p e r a
tampoco nos muestra esta clase de
muerte. ¡Se va una ilusión, huye; una Firmado por Passer by hemos reci- mediante nuestro tratamien-
ilusión muere* Tero una esperanza no bido para esta sección un recorte de to. A l i v i o I n s t a n t a nco y cu-
riñere jamás. " E l P a í s " , de fecha 2 0 de Enero, que ración p r o n t a 7 a c h u r a BTN
Y, si no. apelamos a las piedra:. í , j c reza a s i : pellffro ni molcBtlft; pidan
sean capaces de encerrar discursos. Vna rodada. — " E n el transcurso folletoa con certlttcadoa de
¡One hablen eU:sI curación gratta j consultai
del premio Diamant rodó el caballo
t o d o s l o a d í a s d e •• a S p , t n
Aristócrta TI., que era piloteado por
el jockey L. Detuchi. Este no sufrió PORTA Hermanos
más que las consecuencias de un gran BUENOS AIREA 4 0 4 - TELÉFONO: URUGUAYA 2 6 0 0 , CENTRAL
revolcón. Nos alegramos.
U n a v i g a d e la c a s a M O N T P . V I O H O
Ahora dice Passer by:
Nosotros tenemos en nuestra casa, Este cronisia de pistas le debe algo
como la ciudad de Ginebra tenia su fi- seguramente a Deluchi. cuando se ale-
lósofo — Juan Jaeoho —al primer ciu- gra tanto por que este estuvo a punto
dadano del suhurbio llamado Malvín. de " h a c e r el catre con el espinazo",
Dibuja, escribe y hace otra porción de Queda complacido Passer by, por el M U R E R . A V A G E N C I A G E N E R A L
cosas prodigiosas, llena; de buena gra- momento. Y lo felicitamos por su fi- D E P Ü B L I O A C I O N B S
cia. gura de " h a c e r el c a t r e " . . .
Hemos nombrado a Mario Radaelb. Pero la frase no tiene premio. S i i B c r l p c I o n y v e n t a d e n 11 m e r OB s u e l -
que entra a aparecer ahora con el ñan- tos de revista* y dlarloa naolonalea y
dnbay en el ojo por aquello de que lo extranjreros.
que es justo es j u s t o . . . Sepamos estar en nuestros días, en-
Bn el número antrrinr^de MuNno tre los rezagados: ¡los roles cambian
U n r r . U A Y O « i su artículo " C a r t a s de tan rápidamente en el mundo! Son casi FONSECfl
siempre estos pretendidos rezagados
Montevideo a los montevideanos" dice
que fundan lo que los emprendedores Calle Buenos Aires, 722
el muy donoso Mario:
El león fué inagurado al compás de comprometen. (Ernesto Renán).
Marsetlesa y del Himno de Garibaldi.
No, Mario: los nacionalistas uru-
guayos 1 1 0 quieren saber nada con Ga-
ribaldi ni con el himno. Acuérdate de
que el insigne Reylo llamábale bando-
lero. Lo de la Marsellcsa puede pasar CUANDO E^> BUEÍ10 E>
71 r e f l e x i o n a r llaman
F.11 " L a Democracia'*, de R"jcha.
ríe fecha 20 de Enero, un señor del
1
' Ideas *', en el que se dice ' ' algo sobre
1
enseñanza' fsobre la enseñ*iza)
Si mal no recuerdo — comienza —
en algunas escuelas de Montevideo rige,
para la distribución de cargos, el sis-
tema rotatorio, esto es. que un maestro
pasa sucesivamente de una clase a otra,
lo cual significa tjue el niño desde stt
entrada a lo escuela hasta su salida, es-
tarla bajo los cuidados dr un mismo
maestro.
tema rotatorio no se encontrará a la
salida de la escuela el niño con el mis-
mo maestro, salvo que el niño siga al
maestro a cada cambio, o que el maes-
siga al niím .año tras año. ¿No es así?
Psiquis, en otra parte de sus
" Ideas", escribe:
Con la misma dulzura y paciencia
das hacia el hiio, desde que aún está en
embrión, así el maestro debe desen-
volver la inteliaencía y el corazón del
educando, moldeándolo en sus ideas,
gustos y sentimientos...-
¿Cómo pueden las buenas madrecitas
desenvolver la inteligencia del embrión
y educar su corazón? Bastante trabajo
dan los hijos, desde que naeéti. Y aún
el corazón y la inteligencia del que 1 1 0
es va embrión, hav que esp.'rar un rato
Psiquis termina a i í :
Al exponer esto, no hay e» mí la
idea de imponer mi humildísima opi-
nión; pero tantas veces lo he reflexio-
nado, y como de todo corazón lo deseo,
tampoco puedo callar.
¿No puede callar? No importa: ha-
ble Pero usted que dice que reflexiona,
reflexione un poco m á s . . Si puede.
NACARINA L E P A
( 1 ) El autor de este trabajo puede
I -:i't -• .1 íi ¡1 .• 11 • i- Ulti Vf| r\ A -11» o 1»
Crema N A C A1 R I N A 1 1 L • \ y la adoptarla pasar a cobrar el premio.
para • 1 • Ra lo mejor qua hay para (2) No se aceptan trabajos que ha-
el eulta Kn vanta: yan sido publicados en otras revistas
CASA CAUBARRCRE o que sean plagios. — (3) Los trabajos deben traer un lema, — (4) Se han
y toda butm farmaci*. aceptado los siguientes trabajos que se publicarán por orden. Lemas : Sonia
Petrosk&e, Pesca milagrosa, Tres sirvientas, M. M. Cantamas. - 5 otros
aceptados se publicarán más adelante.
Artículos de Construcción, Maderas, Postes, Pickets, Alambres
Leñas do Quebracho Colorado y Ñandubay al
P I C A R D O flVENIbfl Qral. R O N b E f l U , 2 0 4 2
 LA YUNTA
(CUENTO >
En el pago era proverbial la amis-
ta<l <|ur desde pequeños unía a Ba-
silio y Kudecindo. Cuando gurisc*
habían sido cantaradas inseparables.
Juntos habían robado nidos y fruta*
a todos los vecinos de la comarca y
habían de tal manera colaborad <
en las diabluras de la edad que loi
conocían por "la y u n t a " a caifsa de
su indestructible camaradería. No se
podía nombrar a Basilio sin recor-
dar a Rudecindo y viceversa. *'La
y u n t a " traía aterrada a toda la ve-
cindad que todos los días tenia que
lamentar o un caballo fino rabo-
neado, o una oveja sacrificada, o un
chico lastimado al cual un pial cer-
tero daba de bruces contra la tierra.
De noche encendían una vela en el
interior de una ciscara de saiuliu
hueca a la que hacían cuatro aguie-
ros circulares y asustaban a las vie-
jas sencillas y supersticiosas que al
ver aparecer la terrorífica visión se
santiguaban rápidamente y se escon-
dían en los ranchos a rezar por tas
animas de los difuntos conocidos.
Aparte de esas travesuras propias
de la edad, eran servicíales y agra-
decidos, y más de un viajero tuvo
ocasión de premiar la ayuda tic los
pequeños en trances apurados y di-
fíciles.
**
Transcurrió la infancia y llenaron
a mayores. La amistad prosiguió con
la misma intensidad de siempre. No
sr debilitó ni un día, ni por nin-
g ú n motivo. Ku todas partes, en las
pistas, en las carreras, en los bailes,
en las yerras, la yunta aparecía co-
mo una sola persona con dos cuer-
pos. Los padres, de familias desuni-
das, los señalaban como ejemplo a
sus hijos, y muchos los envidiaban
rn silencio y hacían esfueriOI inúti-
les para separarlos. Asi crecieron rn
medio de la monotonía dr la vida de
c a m p o : asi se hicieron hombres for-
males, y se cataron, y tuvieron hi-
jos, sin que jamás una sola nube
empañara la unión de aqurtlas dos
almas
iio eran compa-
sa» 4
ñeros. Lo eran en todo menos en
política. Uno era blanco y el otro
colorado, sin saber por qué. sin ex-
plicárselo, sin intentar siquiera ave-
riguarlo, arrastrados instintivamente
uno hacia un lado y vi otro hacia el
opuesto. En tiempos de pa/ jamás
una palabra, ni una alusión por mí-
nima que íur>e. A veres, eso sí. re-
cuerdo» de campamento entenebre-
cidos por 1« separación forzada, pe-
ro pintoresco • y agradable*, que lle-
naban gran parte de MSJ vidas co-
n o que constituían su única novedad-
Charlaban los compadres, pues lo
eran también uno del dtfo. sin mez-
clar jamas sus opiniones de hande
a fus largas conversaciones. Pero lle-
gada la revolución, te separaban,
uno por un lado, otro por el otro,
a cumplir con lo que creían su de-
ber ineludible. Entonces, abando-
nando todo, amistad, mujeres, hijos,
intereses, sin dudar ni un minuto si-
quiera, montados en el pingo más
resistente, llevando su repuesto,
rumbeaban con sus partidarios, lle-
nos de entusiasmo, a hacer prodi-
4
gios de valor sobre las cuchillas de
la patria.
**
Un atardecer en que e s u b a n pla-
ticando pacíficamente en casa de Ku-
decindo, recibieron la noticia de que
la guerra entre los dos partidos es-
taba por estallar. Instantáneamente
se pusieron serios y como obede-
ciendo a una consigna se levanta-
ron. De amigos se sentían repenti-
namente convertidos en enemigos.
Nada los sorprendió; en sus cerebros
rudimentarios, aquello era perfecta-
mente natural y hubiera sido incon-
cebible resistirse. No cruzó por en-
tre ellos el viento de la tragedia.
No. Pero después de levantarse se
miraron de hito en hito, con una luz
extraña en las pupilas. Un silencio
penoso se interpuso entre ambos y
permanecieron un momento indeci-
sos, como aturdidos, como olvidados
di las palabras.
- - T e n e m o s guerra, pues — dijo al
fin Basilio.
— Así parece — c o n t e s t ó l e Kude-
cindo.
Y tenemos que ir. - •
— Iremos, compadre-..
Nada más. Se acercaron algo cohi-
bidos, como en guardia el uno con-
tra el otro. Se alargaron las manos
y se las estrecharon. Después Basi-
lio salió. Al llegar a la puerta del
rancho se volvió y dijo:
Hasta la vuelta, compadre.
— Hasta la vuelta, pues, si Dios
quiere.
**
Aquella mañana los ejércitos se
encontraron. La acción se inició iría
r indecisa. Los adversarios se tan-
traban y se median sin decidirse nin-
guno a emplearse a fondo, temiendo
cia medio día, en contacto todas las
lineas, el fuego se hizo intenso y
destructor. Las guerrillas se entre-
veraron llegando a relucir los faco-
nes y a prlrarsr como antaño. Cer-
ca de una Colina, dos grupos de gi-
netes lanzado el uno contra el otro
no por estrategia sino par ver <|uirn
destruía a f|uien, se encontraron ru-
da y clamorosamente. Las lanzas co-
menzaron su juego y el entrevero co-
losal levantó nubes de polvo. Los gi-
nctrs. al galope caracoleante de los
cahatlos esquivaban ágiles los gol-
pes mortales y contestaban con ener-
gía. Kn un momento, se hallaron
frente a frente dos divisas antagó-
nica*. Un mismo grito dominó el es-
truendo del combate:
— I Compadre!
, Compadre 1
Eran Basilio y Rudecindo, magni-
fico* sobre los caballos sudorosos c
impacientes, las lanzas bajas, los
ojos llenos de chispas. Eran dos ene-
migos mortales que no perdonarían
golpe y tratarían de niatar>r, inca-
paces de contrariar U fuerza qut
daba á >u> brazos ímpetus homicida-..
Aquel reconocimiento mutuo no
amenguo su ferocidad. Caballero*
bárbaro» y heroicos, juguetes de
energía- «bscuras. no tenían en la
retina nada más que la imagen del
enemigo vencido y ensangrentado,
aunque fuera su ptopásr hermano. Y
así sa f mpvyó aquel duelo eotre lo)
dos compadras, duelo a muerte, sin
piedad y sin descanso. Sus cuerpv*
bajaban, aubiau, se inclinaban. »e
enderezaban. *c retorcían, se acos-
taban sobre el lomo de los caballa*.
La* lanzas, hambrientas de herir,
perdían sus golpes en el vacío o da-
ban donde no debian. Cada golpe
perdido era un grito de triunfo y
otro de rabia, un azuzamiento y una
por la pérdida de su natural, he ahí
toda mi moral. (Diderot).
blasfemia. El combate hervía alrede-
dor de ellos como un cataclismo so-
noro, como una visión monstruosa, «Juien es dueño de! soldado es due-
en medio de una nube de polvo que ño de las finanzas. (.Diderot).
enronquecía las gargantas secas y
bajo la azul impasibilidad drt cielo
indiferente. 1.a tolerancia absoluta y perfecta es
casi una íiinmera entre un rmnistro, el
La lucha no terminó. Una oleada
de ginetes pasó entre ellos como
sacerdote y rl particular. (Diderot).
un turbión y los separó violentamen-
te para no volver a unirlos ya. Y en Si el 'diccionario de nuestra lengua
ambos quedó el mismo despecho, la llegara a ser períecto', será la obra de
misma cólera reconcentrada e impo- un solo hombre. (Diderot).
tente, ta mistna palpitación del ins-
tinto insatisfecho. Ambos después de Los hombres son niños viejos, y
buscarse tan empeñosa como vana- cuando la procesión de San Sulpicio
mente, cuando llegó la hora del des- pase bajo nuestras ventanas me siento
canso, envueltos en sus ponchos, so- niño a pesar mío. (Diderot).
bre el duro apero las cabezas, pen-
saron lo mismo: l.os viajes hacen experimentar me-
— Lástima g r a n d e . . . nos «curiosidad por las ccr s que se van
Y después, con orgullo: a ver. que pena por las cosa* que se
— Habia sido guapo mi compa- dejan. (Alfonso k a r r ) .
dre!...
* 4 s Los verdadero, sabios son cultos,
jiorqur saben lo (pie nos debemos reci-
Concluida la guerra volvieron al procatn. nte. y son modestos, poque
pago. Kudecindo llegó primero, de- la conciencia de lo que les falta les
sastroso, flaco, pobre, pero magni- impide demostrar vanclad por lo que
fico y orgulloso como un paladín tienen. (J. T. Rousseau).
antiguo que volviera de un épico
combate. Se apeó frente a su rancho,
y después de ahra/ar a su mujer y Las grandes obras se ejecutan, no
besar a sus hijos hizo la pregunta por la pureza, sino \ : la perseverancia
que le (picniaba los labios: t.lohns..n)?
— i \ mi compadre Basilio? Escribid un libro, narrad una histo-
Le contestaron que no sabían na- ria, para retener l -s niños en la tierra,
tía de el, que no había vuelto toda- el'os no soñaron más que con el océano
vía. Lienu de angustia, nervioso y
apesadumbrado, subió a caballo de (DirkenO.
nuevo sin gustar casi el cimarrón
que 1c alargo su compañera, y se El bienestar de una sociedad de-
pende de su seguridad, de su "bertad
dirigió al rancho de su compadre.
Allí confirmo lo que se le habia di- y de su poder ( D i d e o t ) .
cho: no se tenían noticias de Basi-
lio. Después de mucho esperar vol- Cuánto más sr reflexiona, más se
apercibe que toda la filosofía se re-
vió a su casa malhumorado y pen-
sativo. sume rn buen humor. (Ernesto Renán).
Asi siguió durante varios días. In-
tianquilo, vagaba «Ir pulpería en pul-
pería, indagando a .udos los que
volvían de la guerra por la suerte
de su compadre. Algunos habíanle
visto, hacía ya algún tiempo, pero
la mayoría nada acertaban a decir- Las——
le. Todas las noche*, después de un
largo peregrinaje volvía lamentable-
mente triste a su rancho, a susjnrar
•Ir ufT modo que daba lástima, y a
Pinturas I
pasearse agitado por congojas pro-
fundas hasta que el alba teñía la
obscuridad con sus pr i turras pali-
jen Pasta
deces.
**
Una mañanita en qur Rudecindo
estaba tomando mate sentado junio
al fogón, solitario y silencioso co-
mo siempre, sintió detenerse ungfa-
ballo i r r u i r a la puerta de la ro-
cina. Sumido en sus meditaciones no
hizo mayor caso de aquel episodio
tan vulgar. Siguió con los ojos perdi-
dos en rl vacio y la tristeza viva en
el corazón. De repente alguien entró
Como estaba dr espaldas a la puerta
no pudo ver qmrn era. pero algo hi-
zo que lo adivinara. Una inmensa
alrgria lo paralizó, y hasta tuvo mie-
do «le movrrsc temiendo roniprr la
alucinación, si lo era. Pero una voz
conocida y alegre lo hizo volver:
-Huenos dias, compadre: ¡tanto
lirinpo I - . .
— Buenos dias, Basilio, ¿qué le
pasó?
Se estrecharon la mam» con efu-
sión, largamente. Después se separa-
ron y Rudecindo empujando un ban-
co con el píe hasta cerca del fogón,
le dijo alargándole el mate lleno:
— Un cimarrón mañanero, com-
padre
Y en ta azulada y vaga claridad
de la mañana, dentro de ta cocina
no se oyó más que el ruido de lo*
labios sobre la bombilla.
Alberto LASPLACLS.
Kebrero de ioi8.
PENSAMIENTOS
Ordinarianjeric la grandeza de ca-
rácter" resuI'a de! balance natural de
mucha* cualidades opuesta*. < Didervt |
Todo lo que no se honorífica más
en una monarquía uo es otra cose que
una patente de esclavitud (Diderot).
La tierra absorbe por igual el vicio
y ta virtud. Es preciso estar -Unfecho

(¿arias desde Montevideo a l o s m o n t e v i d e a n o s
Carta lV*La tapera
L l e g a m o s , el f i l ó s o f o malvinense y
yo a mi punto s i t u a d o sobre el meri-
d i a n o del -.; n o l e j o s del Capricornio
de P r o p i o s , en marcha hacia m i s r e -
m o t a s regiones.
Al e n f r e n t a r u n a tapera o m á s e x a c -
tamente, un c u a r t o d e tapera, arrimada
c o m o es costumbre de toda tapera bien
educada, al t r o n c o d e un ombú, el f i l ó -
s o f o se d e t u v o y con v o z patética m e
dijo:
— - E n esta tapera v i v i ó s u s últimos^
a ñ o s un g e n i o i g n o r a d o que en o t r o s
t i e m p o s brilló en el cielo de l o s c a m -
balacheros c o m o estrella de primera
magnitud.
Los amigos W llamábamos "Salo-
m ó n el G r a n d e " , para d i f e i c n c i a r l o del
muy m a n o s e a d o S a l o m ó n de la Biblia.
E n aquellos t i e m p o s l e j a n o s en q u e
el c o m e r c i o nacional se p o o í a rápida-
mente a la altura del e x t r a n j e r o , n o
pasaba m e s sin que alguna n o v e d a d
importada se g e n e r a l i z a s e entre n o s -
otros.
«io iaiolcntc.
A l g u n o s de l o s m i s raros a d e l a n t o s e u -
de S a l o m ó n
s o s p e c h o s o s , pero la inclusión del nc^ro
entre la mercadería d e s t r u y ó toda h o s -
tilidad, y las c o m p a ñ í a s pagaron. T a m -
bién influyeron a dar realce al a c t o los
llantos y gritos de dolor d e S a l o m ó n ,
quien sólo los interrumpió para contar
la plata.
La noticia c o r r i ó c o m o r e g u e r o de
pólvora entre los h o n r a d o s c o m e r c i a n -
tes de la plaza. M u c h o s dependientes
blancos fueron d e s p e d i d o s y substitui-
d o s con negros. A l g u n a s casas de c o m e r -
c i o llegaron a o f r e c e r a é s t o s , s u e l d o s
inverosímiles. L o s n e g r o s que s ó l o h a -
bitaban suburbios, invadieron e n t o n c e s
el centro de la ciudad, d e s p a r r a m á n -
d o s e en t o d o s l o s n e g o c i o s y u s a n d o
por la calle un lujo insolente. S e les
encontraba en todas partes, a t a v i a d o s
c o n sedas, con plumas, con cintas d e
v i v o s colores. A l g u n o s llevaban sendas
levitas, galeras de felpa y g u a n t e s , b a s -
tón, m o n ó c u l o , hrillantes y pañuclitos
con iuicales, p e r f u m a d o s al patchuli.
C o n tanto n e g r o debía f o r z o s a m e n t e
producirse alguna desgracia. Tres o
cuatro incendios se declararon al poco
t i e m p o , casi simultáneamente, en diver-
sos puntos de la ciudad y e n t o u o s
ellos, p o r rara coincidencia, se halló
carbonizado algún n e g r o d e los q u e
trabajaban en la casa.
L a s c o m p a ñ í a s d& s e g u r o s apelaron
a s u s a c o s t u m b r a d o s m a l o s recursos
para n o p a g a r ; pero la presencia de
los n e g r o s carbonizados fué la m e j o r
prueba de inocencia v tuvieron q u e p a -
r
tirso c o m o posible la culpabilidad de
varios n e g r o s carbonizados.
La alarma q u e esto p r o d u j o se d e s -
vaneció ante un c a s o inesperado. E n
un incendio de buenas proporciones se.
encontraron d o s n e g r o s carbonizados
en vez de u n o , y f u e fácil d e m o s t r a r
que n o era posible suponerles i n t e n -
ciones d e l i c t u o s a s a los d o s , al m i s m o
tiempo.
Entonces hubo incendios c o n tres,
con cuatro y hasta con s e i s v í c t i m a s ;
pero la suspicacia d e los j u e c e s iba en
a u m e n t o , y y a s e preveía c e r c a n o el
día en q u e ni diez c a r b o n i z a d o s basta-
rían para d e m o s t r a r la i n o c e n c i a del
caso, frente a las d e s h o n e s t a s triqui-
ñuelas de las c o m p a ñ í a s de s e g u r o s .
A todo esto, las c o s a s se a g r a v a r o n
m á s aún con lo q u e s e l l a m ó e l é x o d o
de los negros. U n o a u n o , p o r parejas,
por familias, Ids n e g r o s e m p r e n d i e r o n
la e m i g r a c i ó n hacía el " b a r r i o de l o s
n e g r o s ' ' , cerca de la q u e m a , e n el B u -
c e o y pronto n o q u e d a r o n en la capital
n e g r o s ni para remedio.
Inútilmente se publicaban n o v e d o s o s
a v i s o s en l o s d i a r i o s ; inútilmente a g e n -
t e s bien p a g a d o s llevaban a v i v a v o z
y con las palabras más insinuantes,
ofertas f a b u l o s a s a l o s c x - e m p l e a d o s .
para q u e v o l v i e r a n a ocupar su puesto.
. . . e m p r e n d i e r o n la e m i g r a c i ó n
N a r i c e s c o n f o r m a d a s con un
frngmento DE esternón
H a c e algún tiempo en una de las
s e s i o n e s de la A s o c i a c i ó n Quirúr-
g i c a de L o n d r e s , el p r o f e s o r K o e n i g
h i z o la d e s c r i p c i ó n d e u n n u e v o m é -
t o d o d e r e p a r a c i ó n d e la n a r i z e n
los c a s o s d e pérdida total o parcial
de esta i m p o r t a n t e parte del rostro
humano.
A n t e s d e e n t r a r p r o p i a m e n t e en
materia declaró que las narices re-
p a r a d a s c o n p o r c i o n e s de piel e x -
traída de los brazos, del r o s t r o o de
otras r e g i o n e s del paciente carecían
d e la c o n s i s t e n c i a n e c e s a r i a . P o r e s -
ta r a z ó n - n o h a b í a a h o r r a d o d e s v e l o s
h a s t a dar c o n una s u b s t a n c i a que
o f r e c i e r a el g r a d o d e s o l i d e z i n d i s -
pensable.
Realizadas algunas tentativas
a m p l i a n d o el c a r t í l a g o d e l p a b e l l ó n
auricular, sin que le satisficieran los
Resultados obtenidos, e n t r e g ó s e c o n
m á s a f á n a la b u s c a d e u n m a t e r i a l
que ofreciera todas las condiciones
requeridas. D e s p u é s de un buen n ú -
mero de ensayos, halló finalmente lo
q u e biífccaba. E r a un f r a g m e n t o d e
e s t e r n ó n al q u e s e a d h e r í a n d o s i n -
significantes partes de costilla. Con
d i c h o f r a g m e n t o se f o r m a el e s q u e -
l e t o de la nariz q u e ha d e substituir
o reparar, a m p a r a n d o c o n este pro-
c e d i m i e n t o la c a r n e q u e s e d e b e
amoldar, lo que resulta s u m a m e n t e

ropeos, e n c o n t r a n d o t e r r e n o fértil, s e gar. d i f í c i l e m p l e a n d o l o s m é t o d o s a la

extendían aquí c o n una exuberancia
antes insospechada.
C u a n d o s e introdujo, por e j e m p l o , la
m o d a de cerrar el inventario de fin de
a ñ o c o n u n i n c e n d i o , se e x t e n d i ó con
tal e n t u s i a s m o esta sencilla práctica,
que las c o m p a ñ í a s de s e g u r o s se p u s i e -
ron a b u s c a r el m o d o de n o pagar ni
los c a s o s m e j o r preparados.
T o d o s l o s s i s t e m a s clásicos del m a -
nual del p e r f e c t o incendiario, d e s d e la
vela q u e se o l v i d ó prendida al reguero
de aserrín, tuvieron q u e d e s e c h a r s e UNO
tras otro, y h u b o q u e buscar n o v e d a d e s
D e s d e e s c día el n e g r o carbonizado
sentó jurisprudencia. C u a n d o se l l e -
vaba un c a s o de incendio ante el juez
éste p r e g u n t a b a : " , ; se ha q u e m a d o a l -
gún n e g r o ? " Y c o m o la contestación
era inva. jaldemente afirmativa, la s e n -
tencia obligaba a pagar.
Establecido e s e principio, los incen-
dios m e n u d e a r o n de tal m o d o y la m o r -
tandad de n e g r o s fue tan g r a n d e q u e e s -
tos concluyerpn por darse cuenta de la
H a s t a se cita el c a s o d e d o s m a z o r q u e -
sazón en uso.
ros q u e l o s cazaban a lazo y l o s traían
e m p a q u e t a d o s . ¡ P e r o éstas han de s e r Con una pequeña parte ¿el ester-
exageraciones!... n ó n s e f i g u r a la p u n t a tic l a n a r i z
y la t e r n i l l a n a s a l , s i e n d o l a s d o s
Asi t e r m i n ó de dar frutos el i n v e n t o
alas s o s t e n i d a s por las l i g a m e n t o s de
de " S a l o m ó n el G r a n d e " , por falta de
las costillas. Esta " rhinoplastia " ha
materia i » r i t n a . . . .
9
s i d o r e p e t i d a s v e c e s c o r o n a d a por el
éxito.
Mario Rodada.
i M M M M M M \ ï \ \ \ \ \ \ \ \ \ \ î \ M \ \ \ \ '. \ \ \ \ M \ \ M \ \ •' I
«•••oaK>9«i»«co«ooa>o*a)tt««

en el c a m p o i l i m i t a d o de la invención.
I.a lucha q u e e n t o n c e s se e n t a b l ó e n -
irc el c o m e r c i o nacional y las c o m p a -
ñías de s e g u r o s e x t r a n j e r a s , a s u m i ó un
carácter eminentemente patriótico, y
llegó a c r e e r s e q u e E N varias o c a s i o n e s
el m i s m í s i m o g o b i e r n o intervino e n f a -
vor del d e s a r r o l l o de la n u e v a i n d u s -
tria, c o m o c u a n d o s e h i z o el tratado
de arbitraje c o n Haití.
P e r o , es s a b i d o c u i u raros BOU LOS
i n v e n t o s o r i g i n a l e s en este ramo de la
ciencia, a u n c u a n d o se d i s p o n g a d e r e -
cursos modernos, c o m o en nuestros
días de c o r t o s circuitos y e x p l o s i o n e s
de g a s . L o s c o m e r c i a n t e s de e n t o n c e s ,
l i m i t a d o s en los m e d i o s y en l o s c o n o -
c i m i e n t o s , se vieron pronto acorralados
por l a s sutiles d e d u c c i o n e s q u e los s a -
bios a l e m a n e s c o n t r a t a d o s por las com-
pañías c o m o peritos, y lo q u e pareció
por un m o m e n t o inagotable y creciente
m e d i o d e p r o g r e s o y enriquecimiento
del país, se v o l v i ó otra v e z fuente d e
d o l o r o s a s erogaciones-
L a s c o m p o ñ i a s de s e g u r o s se afir-
m a r o n de tal m o d o que discutían la
mala fe del a s e g u r a d o hasta para p a -
gar s e g u r o s contra el g r a n i z o .
A s í las cosas, fué cuando Salomón
t u v o la idea genial que debía i n m o r t a -
lizarlo. C ó m o se p r o d u j o en su cerebro
la primera chispa, si f u é pura i m p r o v i -
sación o influyeron e n él lecturas, e j e m -
plos históricos o exóticas costumbres,
aún n o es t i e m p o d e aclararlo. S ó l o las
i n v e s t i g a c i o n e s impareiak» de los s a -
PARQUE HOTEL
Fr. t la P i a ' > Rai
del U r t f l a M P A R Q U 3 U R 3 A N O
E l H o t e l m i i Iujo»o y c o n f o r t e b l í
de ' ' . l A i p r e f e r i d o p o r el C u e r -
po D i p l o m á t i c o y p o r l a m i * aelecti
I« t a n t c n c i a o b l i g a b a a p a g a r
CASINO e o c t e d a d . E a t n a r a d o i c r v i o o d* R a e
t a u r a n t a la c a r f e . G r a n b o d e g a . C o
MONTEVIDEO URUGUAY ciña iclecta. B a r americano. Cancha
cosa y se v o l v i ó difícil m a n t e n e r l o s en
de T . n n i í . H e r m o e o i t a r d i n e » . G r a n
el e m p l e o .
F u é e n t o n c e s c u a n d o a falta d e un r r a z a * t r e n t a a l mar. S a l o n e i d e b i l l a r e e . C a r p • e n l a p l a y a . T e l e f o n e a d i r e c t o * coi
• A i r e a . R o t a r , » ( R . A . ) y C o l o n i a ( R . O ) C>fi( ata Telegrafica Internacional. Servici'
n e g r o adecuado, u n a l m a c e n e r o de la
il d a A u t o m ó v i l ce d e a d e el P u e r t o y E a t a c i o n l• al H o t e l . C a l e f a c c i ó n e n l o d o * la* d a
b'níón t u v o la desgracia de q u e se le •n la t e m p o r a d a da I n v i a m o ,
ici*» y h a b i t a d o lee d e l H o t e l . G r a n d e e r a b a l
carbonizara un d e p e n d i e n t e blanco. L a s
«I !.° da A b r i l i I 3 0 da N o v i e m b r e . T a r i f a » lata* . Fam.lú
c o m p a m a * de s e g u r o que nada podían
ya contra las c o s t u m b r e s establecidas
respecto a n e g r o s discutieron este c a s o
n u e v o que s o l o s e diferenciaba por el c o -
lor, y, c o n tal d e ganarlo r e c o n o c i e r o n I I I I 1 I I lI I M , I ím riIM IíM J M íM I I M í M / I I I I i I I I \ »
t e r m i n a n t e m e n t e q u e si u n n e g r o c a r -
U x i i í a d o debe s e r declarado m ó t e n t e
de toda idea delictuosa, n o pasa lo m i s -
m o con un b l a n c o picaro cuya c a r b o n i -
zación sí bien descarga al propietario, N O E I 3 U N A G R A S A C O M Ú N
acusa e n c a m b i o a la victima m i s m a
c o m o c a u s a n t e v o l u n t a r i o del i n c e n d i o No se confunda el aceite No-Fluido con las grasas j aceites fluidos comu-
del que l u e g o u o l o g r ó escapar.
E s t e pleito, g a n a d o p o r la c o m p a ñ í a
nes. Están superior a estos como la maquinaria moderna lo es a la antigua
de s e g u r o s , tuvo como consecuencia
T RflDt '. M A «t K RtCIS'ERtD IM
reafirmar el buen c o n c e p t o q u e s e tenía
de los n e g r o s , c u y a e s c a s e z era alar-
mante.
' A b u n d a b a n e n t o n c e s e n l o s diarios
a v i s o s c o m o é s t e : — "Ca&a de c o m e r -
cio seria, d e s e a emplear a nn m o r e n o ,
como sereno o dependiente; poco h o -
rario y m u c h o s u e l d o . T a m b i é n s e le
NON UNITED M A T t S PATENT o m e t

bios futuro* podrán .1 - ¿;.r,l • S a l o -
m ó n tenía un progresista cambalache,
ubicado estratéfiearneiKe ea el «•ase»
M o l i n o lx> atendía un d e p e n d i e n t e n e -
g r o q u e n o tabía leer ni escribii, y g a -
naba sin e m b a r g o .un s u e l d e m u y a h *
U n a manajia, el cambalache de S a l o -
m ó n apareció q u e i n a d o c o n n e g r o y
t o d o . L o s peritos d e l a s c o m p a ñ í a » d e
seguros encontraron a l g u n o s v e s t i g i o s
dará c a f é c o n leche y m a s a m o r r a por S t Kaoo d» los scatto», m i n e r a l e s m j « tino» c o n d e n s a d * * a u n a
la t a r d e , D i r i g i r o f e r t a s etc o eonsiatonoia «feble]* El No r e f l u i d o 011 h a c a la m i s m a c p t r a o o n
r e m e e i t e : «*) " S e necesita m o r e n i t o qua 1« g r a a a . p e r o efe un m o d a m i » limpio, ó t i c a ; y e c o n ó m i c o -
No «o e n d u r e o e . Nunca s a l p . c » al m d e s p e r d i c i e . No a t a c a l o *
para c o m p a ñ í a , t r a t o c a r i ñ o s o , c o m o -
rwwmáüc*». - R e c o m e n d a m o s m e d i t a r o b r o t a n t a » ventaje»
en familia y m u y buen s u e l d e . Eacribir
etc.".
ÚNICOS « n i Del Castlilo & Morales
L o peor del e a t o es q u e las c o m p a -
MEKCKDEÉ» 8 4 2
ñías de s e g u r o , a fuerxa de b u s c a r l e la
vuelta, l o g r a r o n c o m p l i c a r d e tal m o d o Os venta en toda casa del ramo
algunos procesos que, comenzó a admt'
 LOS EFECTOS
L l é v a l e al príncipe
Natziwíll de Schlappopsky
U n a voz d e s d e e l s a l o n c o m e d o r : « A q u i e s t o y »
¿ Kn q u e p a r t e d e l m u n d o
e s t á el p a r a í s o t e r r e n a l ?
I-lace u n o s a ñ o s un miembro tic la
Comisión Geológica de los lisiado*
Unirlos, creyó descubrir que el e m -
plazamiento tan discutido del Pa-
raíso Terrenal se bailaba rn la Isla
de Luzón. Lo» norteamericanos se
llenaron de regocijo con la noticia,
Pa/mU dkl A f n c * C*nb-.I
puesto que con la adquisición de las
islas Filipinas, se hablan anexado
nada turno» que el Jardín del Edén.
Mas !!•• duró mucho su alegría.
El profesor .. :i>tack en una
memoria que sometió a la Sociedad
Antropológica de Berlín, afirmó que
el Paraíso estaba en Australia, ba-
sando bu teoría en una serie in-,
terminable de argumentos tan pesa-
dos como artificiosos, con los cuales
n o queremos fatigar la atención de
nuestro, lectores.
N'i ta I s l a d e Luzón ni la Anstra-
lia s e c u e n t a n eotre los tugares más
e x t r a o r d i n a r i o s donde, tanto los sa-
b i o s como loe teólogos pretendían
Que hubiera podido haber existido
el Edén.
Ya t i P a d r e Feijóo escribió que
h u b o quien colocara et Paraíso T e -
r r e n a l en ta Luna: quien en ta cum-
b r e de la montaña más próxima a
EN UN
¡ £ 1 p r í n c i p e N a t z i v i l l de S c h l a p p o p s k y !
tac- satélite, como si tal montaña en
r e a l i d a d existiera: otros decían que
había q u e situarlo debajo del Polo
Ártico; otros debajo del Antartico;
buho quien lo ubicara en ta lila de
Ccylán, y basta quien tuvo la ocu-
rrencia de pretender que ta prime-
ara pareja humana perdió la inocen-
cia en un jardín de delicias situado
en Klandet o en Andalucía. Pero
aún hay más. | neito que a H lista
de Peijóo puédese agregar ' ' . e o r i a
de lo» que supusieron que tu man-
sión primitiva de los fundadores del
linaje humano se hallaba debajo de
la tierra.
Más lógicos son los etnógrafos y
viajeros que presumían que el Pa-
raíso Terrenal estuviese en las Islas
Canarias, en el Atlántico, en el cen-
t r o del África o en el Iniprrio del
Preste Juan de las ludia*, que "se
suponía hallarle eti la Ktiopía.
Pocos problema» seguramente ha-
brá habido, en cuya solución más
empeño demostraron tanto filósofo»
contó teólogos, como este de la dr-
il rumiación del sitio riondr se ha-
llaba el Paraíso, sin que faltaran
quienes t o m o Orígenes, Pilón, loa
Selenriauos y otros — cortaran por
lo sano, afirmando que el Paraíso
• a l u n a r a w t u a d o al f ¿ i « n .
DE LA
HOTEL EUROPEO
¡ E l p r í n c i p e N a t : i vili d e
El mozo
mitica rxistió y que es pura alegoria
elianto referente a elio «lice la Ili-
Mia. Mas no cs posible que un hotn-
bre tati exacto y tan poco dado a
alegorizar etimo era Moises, r u t r a -
se en tantos pormennres al descrt-
bir et jartlin del Eden, si éste no
hubiera existido real y material-
mente, g el Océano Indico, señalando entre
La mayorla de loi teòlogo» y de
tos sabios inclinale a errer que el
Parai so rstaba n i la Me so poi a mia
elitre el Tigris, el Eufrate», el Ara-
rla y el Kasis. identÌfic.-«sido csos rios
con li,, i u.iti,. (pie babbi la l'o-
blia ; otros opinai! que se cncontra-
ba en la Siria, cerca dr Damasio, no
]< los del paraje donde tic urti sus
nacirntes los rio» Jordan, Chryso-
rroas y Oronte», no faltando quie-
tici aseguraran que debìa cmplasar-
se en las ci rcanlas del lago tir Cctie-
sarrth, ticiido el Jorti,01 r) lag') que
1u ita fi a ba. Pero |«i qur a las elaraa
aparece e» que torta* eia» teoria*
IInquean por malquicr lado que sr
las Mirti tanto por la dificullad dr
identificar tos rio» por s u r uonihrrt.
conto por las alterarionei que ha »u-
ffrldo la superficie de la ticrra sohrc
tritio cri aquellas regione» del Asia.
Una de tas mas curiosa» suposi-
ha p i . i . m . i lo
GUERRA
Schlappopsky!
de servicio i ¡ G r a d a s , es para m i !
ciones al respecto de que tenemos
conocimiento, es la de! famoso ge-
neral (iordon, et héroe dr Khartum,
que era a la par notable político,
gran militar y teólogo consumado.
El general Cordón tenia la firme
convicción de que el Paraíso debia
hallarse en In» islas Seychelles en
las del grupo a la denominada Pras-
lin, que dista treinta y sirte kiló-
metros de ta de Mabré. Para ello
hizo remontar el Kufratrs y el Ti-
gris hacía sus nacientes y dijo que
sólo suponiendo que los ríos corrie-
ran para arriba podría encontrar en-
tre ello» un valle central, y como
entramóos desembocan en el golfo
Pérsico, y t i Génesis represa que
lo» cuatro rio» que le regaban afluían
at Edén y no que de él salieran. Una
isla situada cu el Océano Indico,
bies podría corresponder, en opinión
de Cordón, a la descripción bíblica.
Kn corroboración citaba como argu-
mento curioso que en dichas isla»
e x i s t í a n trea arboles raros: uno dr
ellos es el magnifico Laodiee Sey-
chellaran peculiar únicamente a la
I •' 1 de Praslin, y que Cordón iden-
tifica con et árbol de la ciencia.
Campea también en dicha isla el Ar-
tocarpus cincisa. o árbol del pan,
que por sus condiciones alimenticias
podría ser el árbol de la vida.
|uí
 CHARLAS
Los apellidos alemanes
Margarita Fischer. una de las más
gentiles actrices que figuran en las pe¿
liculas norteamericanas, acaba de " d c s -
alemanizar su apellido, suprimiéndole
la letra c. La ocurrencia no deja de
tener su poco de trascendencia inter-
nacional y lingüistica sobre todo sí el
procedimiento se generalizara. Sin em-
bargo, no todos los apellidos pueden
ser "desgermanizados'', y más de uno
quedaría sin él, a fuerza de suprimirle
letras. Por otra parte, la supresión de
LUCHAS A CABALLO
Nuevo deporte usado e n los campamentos
Las luchas a caballo constituyen
un atrayente deporte que ha adqui-
rido tiran popularidad en los cam-
pamentos canadienses de caballería.
Adrmás dt- ser un pasatiempo que
excita en sumo grado el interés de
los jinetes que a él se dedican, no
cabe duda de que tan vigoroso ejer-
cicio contribuye al perfecto entrena-
miento de la tropa. Las regla» de!
juego son comparativamente senci-
llas. Dos teams compuestos cada uno
de diez hombres, montados en pe-
to, se alinean en dos filas que se
sitúan frente a frente a cada extre-
mo del " fíeld ". lanzándose a
señal dada cada " t e a m " contra una
oponente. Es vencedor el " t e a msu *
LAVATORIOS
BAÑOS
BlbETS
TOHALLEROS
PERCHAS
PORTA
DE BIÓGRAFO
letras es la más inocente de las supre-
siones. Habría que comenzar por el
espritu y eso es más difícil.
Mi«i NELLIE BRIERCLIFFE
j o v e n i inte l í j e n t e
l i y C h a t t e r t o n . i n l a r e p r e s e n t a c i ó n de « T h e
B o y » , b r i l l a n t e c m e d í a q u e se m a n t u v o l a r g o
HABANOS
ti del T e a t r o A d c l p h i . g r a c i a s
c u a l i d a d * * de l a i n t é r p r e t e .
canadienses.
Romeo y Julieta • Hoyo de Monterrey
Por Larrañaga
Ramón Aliones • Calixtro López
Champagne MQMQPQLE
Sucesor: F E R N A N D O G A R C Í A
Gasa Central: Cerrito, 4 1 7 - 4 1 9 Sucursal: Sarandi, 6 3 2
R LA INFANTIL
689 - SftRrtNDI - 689
OUEIROLO y Cía.
B**"aTaT***aa^**w S^SSV*'^
que consigue desmontar a todos los
jinetes que actúan en el " t e a m "
contraria, Cuando un luchador se
ve forzado a tocar tierra queda de
inmediato fuera de juego. ^
Se da con frecuencia el caso de
que en el curso de la lucha, cuando
la victoria se inclina hacia uno de
los bandos, a veces hasta seis jinetes
concentren sus esfuerzos c o n t r a u n o
solo de los adversarios que aún per-
manece montado para conseguir d e -
rribarlo del caballo. l*os luchadores
combaten desnudos de medio cuer-
po hasta ta cintura, llevando trajes
de montar y medias y calzando bo-
tas bajas.
io filis ! P C a m i l a s n Calzones para ninas de 4 - 1 2 anos . . S 0.60 — 0.80
3 4 0 barritas para Bebés , 0.80 — 3 . —
Uelanlajes de percal, «arios colores. 2 - 8 . . . . » Q.30 — 1.20
Coliade para niños del 1 7 - 3 2 » I J n — 1.80
2 5 DE AGOSTO Blusas para señoriles, desde > o.60 - 5. —
Vestidos y abrigos de seda pera ninas > 4.S0
3 4 4 Sombreros de poja marineros 1.26
VASOS Tra|«s de brln para niños 11 2 a S años . . . . 1.85 — 2.00
Etc., etc. Sombreros adornados para señoriles y ninas S O.50 — 1.- — 2.50
MONTEVIDEO
 Sr. Ángel M. Oyuela y Sra., Stas. Solía y Elisa Howengard
Sra. y Sta. de Nocettí y Sta. de Crotla. y Sr. C. Aldao.

E N EL PJR A IX)

Banquete ofrecido por el Sr. J. Lun Poner de León y su eipoia a un grupo de lamillas argentinas.

EL ULTIMO BATLE DE "ENTERE NOUS"

' de Torres Insasgarat. Sra. y 5>a. de rerea ...

AIooso Criado, S. Urburu y Perea Lacordeile.
 UNA
Inauguramos ht$ una nueva sección
de carácter gráfico, en la que publicare-
mos impresiones recibidas en los prin-
cipales establecimientos industriales de!
país. Con ella nos proponemos hacer
justicia ü !r»s creadores «le la riqueza
nacional y a los que perfeccionan la téc-
nica de nuestras industrias Hemos co-
menzado por el magnifico estableci-
miento de Ángel Ginrello c lujos, de
cuya importancia dan una idea clara
las fotografías que ilustran esta breve,
crónica.
La ca.a Giorcllo figura entre las más
grandes del pais y ocupa la extensión
comprendida entre las calles Rondeau.
Guatemala. Cuareim y Panamá. Sobre
la superficie indicada se elevan cuatro
pisos amplios y cómodos y un entre-
suelo Luz y aire, y elegancia de lincas,
caracterizan la vasta instalación. Los
talleres pueden considerarse modelos
Sección armadores de nlla
VISITA INTERESANTE
gia de 400 caballos tic fuerza y me-
diante la cual se ponen en movimiento
ciento cuarenta y siete máquitris, t| j„
c s
tipos más modernos. La complicada
técnica de esa instalación, está a cargó
de la inteligente dirección de mío ,| . (
los señores Giorcllo. A parte de la sec-
ción máquinas existen las de aserra-
dero, tornería, afiladores, ebanistería,
tapierria, escultura, marmolería, mecá-
nica, colchonería, costura y bordado,
cardados, sillería, lustre, barí.izado, es-
malte, fabricación de barnices, estam-
pados y embaladores. Tiene además
este establecimiento, una cablera que
o (1
produce 3 5 " k'K c vapor por hora,
mediante la cual se obtiene calor para
8 estufas destinadas a secar las maderas
antes de labrarlas. La capacidad de la
fábrica cs tal, que pueden trabajar có-
modamente Roo operarios. Los actuales
V h t a « i t . - n o r d«l M t a b h c t m t t o t o de A S V . •; G I O R E L L O • H I J O S llegan al número de 460. Como detalle
BJili-cio • t p r c i a m c n t c consti- i •, p a r * l a f a b r i c a c i ó n de m u c M c x
Parte del personal saliendo de los talleres
 ELEVACIÓN En mi pecho se hace m á s intensa la "i r n~r T m i i i i i i i i u m m B u u s j p j i
O h tú l, hermano m í o , [calma
que deslizas tus p a s o ;
c o m o u n a sombra
y llegan c o m o en una cabalgata del alma
la* nobles amazonas invictas del amor. n ni S¡ Extracto de
Extracto Matlta
¡Ir Mal a Montevideana
MnnfPuirioan9
¡¡i'lIHIUiK
por l o s largos caminos, líalo V.duardo Ptrotti.
indiferente a las cosas
que a tu lado palpitan, Es el más sano y eficaz estimulante
y no ven tus dos ojos
y que nunca un instante de la leche materna " Hgfl
has pensado en la esencia gznry/#«tr«jwwrjmiwisTwitiiffll
que constante te anima,
di:
encont rándote solo
con tu fria conciencia
d o n d e t o d o e s silencio,
y n o turba un m o m e n t o Oe "El libro de la noche"
un humano latido,
¿no h a s prestado atención Bajo el ciclo estrellado m e está dando
a u n a v o z susurrante la noche su a m i s t a d ;
que te hablara en secreto, y m e interrumpen con palabras llenas
de vanidad.
y q u e apenas h, oyeras,
c o m o un eco lejano
que del alma saliera? A n u n c i a n : A tu puerta
un hombre se acercó.
T u verso admira y conocerte q u i e r e . . .
H e contestado: N o . ¡ D i e z veces no I
Si y o n o canto para que me admiren,
si es grave confusión 1
Si y o canto n o más c o m o quien bebe,
para aturdir un poco el corazón I

ble contestado: N o , que el viaje siga

el caminante que a mi puerta está,
pues quienquiera q u e sea, y o le juro
que lo conozco ya.

D é j - i m c con el c i e l o ; estoy bascando

la paz, la f é . . .
Cuando halle l o que busco, cierto, a

ìÉkA
Hermano,
en un instante de duda,
de ansiedad de inquietudes,
los hombres lo daré.

Más litiy que puedo darle al visitante,

y él m i s m o ijue tacrá I

Que siga, pues. N o s conocemos ya I

l todos

Dolor I . . . dolor I . . . dolor 1 . . . ¡ Estoy

1 cansado 1
^

Cervecería Hontev'deana

C«ll» S»nt* Fé. was

I Gs el mejor alimento

S
H
pera

y de angustia suprema,
y o h e sentido esa v o z
que en mi aitna se a'berga;
tenia una vaga expresión
c o m o algo q u e de lejos viniera,
me hablaba m u y quedo,
y era tan en secreto,
que n o parecía
— del alma saliera; —
venía de algo que hay más adentro.
Y me ha dicho verdades tan hondas,
y m e ha abierto senderos inmensos,
que he sentido elevarme a los c i e l o s . . .
Y h e sabido que la esencia divina
que anima en l a s cosas e t e r n a s ;
y mi alma ha llegado a los planos
tan profundos y altos,
que l o s o j o s humanos n o llegan;
y h e palpado c o n suma evidencia
la Grandeza que todos t e n e m o s ;
y he sentido un lenguaje divino,
un ritmo inefable,
un acorde sublime
que vibra en los aires celestes
y mudas las cosas informes expresan,
que he adqnirido una super-videncía
y he sentido elevarme a los c i e l o s . . .
Juan De Cregorio.
Arturo CapdcvUa.
NOCTURNO
La enferma luna bajo la frot.da
Sus notas blancas clava cu l césped;
D t un viejo sauce cuelgan las ramas
.Qufl se retratan en la corriente.
El parque ríe c o n su v o z t e n u e ;
H a y en las plantas polvos de nácar.
Y i"? lago, espejo de las estrellas,
Semeja un manto d e - f i n a plata.
En él, un cisne, 'a superficie
Cruza y se pierde bajo la sombra
Del viejo puente que sobre el agua
Proyecta el arco de negra comba.
El cielo muestra su maravilla
De astroj errantes, (pie en el vacio,
¡forman sus luces, palabras, f r a s e s . . .
Que en el misterio ticjicn sus ritmos.
*
expende en toda
— i l » M««
nnssurMiuiiiiiiiiiruainwfiiuS
1**1 jardín está triste. La mas roja — Desfilan recuerdos truncos, c a -
de las flores idílicas deshoja l l a d a m e n t e . . . — S o b r e el n o c t u r n a l
su ilusión en la tarde que se a l e j a . . f o n d o d e mi t r i s t e z a , — c o n g e s t o s
de dolor y d e p e r e z a . . . — l e n t a -
Vanólo Ruij D.
m<
— Era un idilio de s i l e n c i o y de
s o m b r a . — l i l l a - • • - - ( L a primera, la
FRAGMENTO sola, la q u e nunca s e n o m b r a — s i n
l á g r i m a s ) . . . — Ella — callaba. — Y o
— Es u n a n o c h e tranquila y c o m ú n
a su lado, l e n t a m e n t e - - c a m i n a b a • - •
COSÍO mi vída. — c o n un p o c o de luna
— S o b r e el f o n d o s e d o s o d e un c i e -
y un t i b i o a l i e n t o — d e v i e n t o — q u e
lo u l t r a m a r i n o — diluido en e s f u m a -
se a r r a s t r a y s e queja e n la c a l l e
das a c u a r e l a s - - de libro c h i n o —
dormida - - •
b o r d a el b o s c a j e — fino — r a m a j e .
—Con pasos indecisos y lentos, con
— En la quietud n o c t u r n a s e a l z a n
gestos vagos y mudos pasan bo-
v o c e s r e m o t a s . . . — Es la m o n t a ñ a
r r o s a s l a s h o r a s u n a s a o t r a s igua-
l e s — r o z a n d o a p e n a s el s u e l o , l o s - - q u e llora, lenta, sobre d o s n o t a s
1 — e n c u a t r o rústicas flautas d e
á g i l e s pies d e s n u d o s 1 Perfuman
c a ñ a . •.
mis r e c u e r d o s , s u s r o s a l e s !
— S o l l o z ó l e j a n o el c a n t o d e e s a
— ¡ P e r f u m e 1 ; Alma del c a m p o !
flauta m i s t e r i o s a - - c o m o un l l a n t o
; E f l u v i o d e jardín — a l i e n t o d e m o n -
t a ñ a ! — ¡ M i s t e r i o s i l e n c i ó s e ..que o n - — c o m o un l l a n t o — c o m o un l l a n t o
de \ iolnii . en l.i noche .deliciosa
dula e n la c a m p a ñ a — c u a n d o el v i e n -
t o a c a r i c i a l a s l l a n u r a s s i n fin !• - - . k.

La c . i i M i q . i t . i del recuerdo Los limoneros y los naranjos

(De. "I.m horas sn«i>eiiit*5' i Abren sus broches anacarados,
Cuando el esplín m e invade Heno mi Y al breve paso, la brisa suave
[pina y f u m o . . . Deja en el aire perfumes v a g o s . . . .
D e c o d o s en la mesa, b i . o la luz i n -
[cierta, Los surtidores remedan himnos
Incomprensibles para las almas.
mi vista se pasea del balcón a la puerta
(Jue n o comprenden esc lenguaje
y sigue las volutas blanquecinas del
Ihum )
LJue hablan los novios en voz muy
[baja. . Marca de Calidad
g 9 m o r c o
B2SI2B ° cuando
Ven. (pie la noche sabe de amore.-.
Sabe la dicha de nuestras a l m a s ;
compre libros en blonco. ::
Y asi muy juntos q u e nos encuentren
Las s u a \ e s , tenues, luces del a l b a ! . . .
J u n o A Roías. tendrá mejor articulo.

ronaultc nuestros precios para la

Al deleite inactivo la u a / b u l i c a sumo
del cerebro en reboso y d e la entraña
[muerta...
E n f j g t c s el ,-ccuctdo p a y e * que de*-
- Se me a f l o j a uji d J v n o VJJO sacro
y se «deva en las tenues c a s a l e s 4el
Eaumo
P e U a d o d e vi siane* y d ec:icanUn
[sutiles
J aire poetiza l o s difusos perfiles
de las c o s a s que fueron en un tiempo
[mejor
LA TARDE AZUL
1.a tarde azul deslié en la glorieta
I confección de libros especíales. Ho se
•arrepentirá. :: :: :: :: -
todo un júbilo blanco en semitono
que a través d e m i s sueños d e poeta
tiene la laxitud de un a b a n d o n o . . .
. KA. *BARRE1RO Y R A M O S
B A R K KI pi o foCU.. Sacuorff
la ciar? giuía d e Iqs u i c l i j ó i e s ;
está alegre al jardín y el simulacra , ' Libreril i Papalini : J. C. Gomei i 2 5 ila Mljl
de un bucólica idflío hacen d o s f l o r o
Talleres Gráficos : Bartolome Mitre, 1467
H a y palor d e crepúsculo e n el cielo
La fuente es .un cuitato violoncelo
emitiendo al azul su eterna q u e j a ;
 La rnajer de mi 'deal
PRBÍMH « W S . ^
¿Mi ideal de mujer? Era éste
Encontrar sobre la tierra la perfec-
ción de todas las virtudes y adorarla
en silencio para no perturbarla por la
confesión de nuestras debilidades.
; Encontré mi ideal... pero ! no
pude permanecer callado; había algo
dentro de mi pecho que era más fuerte
que mi voluntad; era mi corazón hen-
chido de amor, por mi pequeña Mary.
Cartitos 19
Es una joven de 15 a 16 años.-qua
veo todos los días po- la calle Sarandi,
de 1 M a 2 !í Hs rubia, elefante, en-
cantadora, y de luto, y ya me tiene me-
dio loco. Estoy enamorado de verdad.
¿Si leyeras estas lineas, rubia, y su-
pieras quien te las «-scribe?...
Hu-bi-o.
La mujer de mi ideal, es una moro-
chita de unos 16 abriles que sea her-
mosa hasta el prodigio, cariñosa al
extremo y decidida hasta la temeridad.
Morocho.
Mi ideal es una rubia de ojos como
el ciclo, ní gorda >ii DiquítS, que me
quiera mucho, y que me liagn feliz.
Carlitos.
Mi ideiu lo constituye una joven h ' -
lia como Perla W'liitc y que leal El
'Mundo 11 Uruguayo'' * '
A. Morendo,
Mi sueño, puede que se transforme
en realidad. Uusco a una joven de 12
o 15 años, que sea morocha, y un poco
K'.rtlita pero que no se pase de los 50
kilos, y que sea una mujer ideal para
rl hogar de 2 pichoneaos.
Si alguna joven que lee estas líneas
está conforme con mi sueño, que cou-á>
teste a
El Chmpplil.i
Mi ideal lo constituye una chica ru-
bia, de hermosos ojos verdes, regular
estatura delgada, de 16 a 17 años; está
de luto, la" veo muy a menudo en Sa-
randi y vive en la calle que lleva el
nombre del fundador del Manicomio.
Coquito.
¿La mujer de mi ideal? Ella es mo-
rocha, de ojos negros, de baja estatu-
ra, gruesa, simpátic». de dulce mirada.
¿Do esti. y . . . ? ¿Seré yo el hombre
de su ensueño?
A. S.
L; mu.icr de mi ideal tiene que ser
una joven de 17 a 22 fios. con 50 mil
a
pesos, que le guste viajar.
/. Huso».
D i l m e a p]ui 1 U Su Son.4 Pc-ro^rf
El h<>«iibrc de mi ensueño
E s un joven que conocí en casa
una a m i g a : Mimase Aldo. •>•• p^rtt es
elefante: de cabellos castaños, ojos
grande», verdes, dt un mirar penetran-
ta. N 0 posa* riqueaxi, pero su mayor
tesoro lo encierra en su alma c a n d o r o -
sa y noble. ¿ S e r é d e su a g r a d o ?
Inquieta.
Es aquél cuya salud corporal le ba-
ga bella la vida y cuya salud cspin.'nal
haga que la ame.
Es aquel cuya educación sirva pa.a
tener un elevado concepto de la mujer y
cuyos sentimientos nobles lo distinguen
de la vulgaridad Existirá?
Duda impía.
Mi ideal es un joven morocho de :8
años qu_- con su franqueza y cariño ha
sabido conquistar el corazón de quien
tanto Ic a m a .
Dora.
Es una excelente persona, que usa
lentes verdes.
Al no poderlo olvidar, comprendí mi
gran error.
Coeur repenti.
¿Para qué forjarnos un ideal? ¿Aca-
so el amor se busca? No; el verdadero
amor es espontáneo. Entonces, para
que luego amemos con toda nuestra
alma a un ser totalmente distinto al
que soñamos?
María Celia.
Amo en silencio a un simpático jo-
de 17 a 18 Abriles, delgado, cabellp
castaño obscuro y ojos soñad o R) s; vis-
te de negro, usa en el sombrero cinta
verdt. Su apellido empieza con P -
es un digno concurrente del " I r i s * .
¡Si supiera cuánto 1c amoi
Marocha de la Aguada.
El ideal por mi f .'jado lo constituye
un joven «le 18 a ¿¿ años morocho,
con ideasé>nuy superiores en el con-
ccplo del hogar; que lo considere c o m o
único templo donde pueda mirar la di-
cha y el progreso,
Rosa de thé.
Mi idea! es un joven de regular ea-
tatura. de cabello castaño, ojos grises.
Sus iniciales son: L. A. y*R. es em-
pleado en el lliógrafu del P^so Mo-
lino.
Si llegara a leer estas lincas que
conteste u b'attima.
El joven que constituye mi ensueño es
ni rubio ni morocllo, de regular esta-
tura, de 2i años de edad, muy simpá-
tico pero ele un carácter incomprensi-
ble, pues yo creo no haya señorita que
lo comprenda, Cuino me ha pasado a mí.
Criolla Desafortunada.
El lioéjibre de mi ensueño lo consti-
tuye un joven afecto a todos los sports
sobre todo al box, pues yo soy, muy
partidaria de éste; asi podemos medir
nuestras fuerzas en un ring. Aspiracio-
nes de
Beba.
Ha despertado mi sensible alma y
ha hecho nacer en ella u.i volcán de
pasión, un joven de regular estatura,
delgado, de o j o s grandes y melancóli-
cos, que consecutivamente pasa por la
calle Pedernal, y al dirigir la visual
hacia mi m e veo envuelta p j r la ola de
una eterna felicidad.
M argot.
El hombre de mi ensueño es un jo-
ven de unos 20 años, alto, delgado y
rubio. Lo conoei el Carnaval pasado y
desde entonces lo amo en silencio. Nos
hemos encontrado en reuniones; mu
rhas vecei, nos hablamos, p e r o . . . Si
lee eita página que ae acuerde del 11
de Febrero de íQtS.
Z r. T.
Deseo que mi elegido tenga un
alma elevada y genesos*. un coraaón
grande, capaz de perdonar todos m i s
errores, que sepa quererme mucho co-
mo y o l o querré a é l : que? sea
carácter dulce y franco; h o n r a d o m u y
honrado. únira-aipiración para vivir
de tranquilo!. Amor
E s un joven s t f t o p e r o « t a p á u ' c o al
que vi d u r a n ' c la última m i t i g a t r a n -
viaria. Y - miraba c r e o q u e c o n *¡m-
patía y y o n o le c o r r e s p o n d í a .
¿ C o n t e s t a r á é: a
La tecinita
Esquelas
Para Fc-Ju-Mar:
El jazmín que nos hahló "ile amor,
ya no tiene perfume; se secó; tu alma
creo que no recuerda la mía. ¿Verdad.'
Al...
A mal ctiueado:
Impulsada por una gran curiosidad
te ruego me hagas conocer por medio
de esta página tus iniciales. Quizá fue-
ran ellas un bien para ti y para mí,
porque es muy probable que Hi ignores
algunas circunstancias. ¿Me mandarás
tus iniciales? Te lo pide una
Maestra Normal.
A Romeo :
Creo ser tu " J u l i e t a " . Pero envía-
me datos de la chica que tu aludes para
cerciorarme de que soy la que puede
darte un lenitivo a tu dolorida alma
Contesta el próximo número a
X V.
f Elena C . P. Azul. J. F. de M , R. V.
Cuando miro el cielo purísimo, surge
el recuerdo de una hermosa rubia d i -
. vina, a quien quiero con apasionado
" cariño y en quien cifraba todas mis
esperanzas....
Es simpática, virtuosa: y de una
bondad infinita... no me ama como
(
v
. yo deseo. Y sin embargo, yo la amo
con todos los impulsos de mi primer
amor...
Mi único anhelo es que no olvide
que en lo íntimo de mi alma, llevo gra-
bados sus ojos.
Luis Alberto.
A Korneo :
Eres tan simpático que demuestras
tener un alma angelical...
V tan bueno pareces como una espe-
ranza que, acariciara el conazón.
Julieta.
Para M
Mace algún tiempo me mira, ha ve-
nido por casa pero diré que dudo un
poquito de su sinceridad ; no vastante
me agrada : ; Querrá contestar a la que
vio desde el tranvia al atardecer del
dia de Reyes? Creeré entonce en su
simpatia.
"Boa Blanca"
me sirvió itftrP
\ tilla Si señar, w tínico atte
s:rT'' iiijtn.
Chocolate Media Luna
£V scHciftametitr àctìciosth
do un
fea?
M. L. L.
Contestando
No puede publicarse su poema. Es
muy extenso.
Henry.
Le publicamos sólo este original
cuarteto:
" P u l s a n d o la lira por primera vez
Con el entusiasmo loco, de mí edad
temprana
Siéntome inspirado al pisar en la es-
l cal era
El décimo octavo escalón de mi exis-
tencia human-*
Tire ta lira al suelo antes de llegar
al décimo noveno escalón 1
F. de F. ¿ ¿
Prosiga su labor literaria y trate dr
ser más original y cuide la forma.
J. B.. Jote, Blanca. IL A. M., E C,
No se publicarán sus colaboraciones.
M. R. C.
A su poema " I n s e n s i b l e "
Llámele usted " Inservible".
R. C. M
Por el momento no sabríamos como
utilizar sus servicios,
o
Uruguayita.
Envíe sus traducciones y notas de
viaje. Sí son buenas, serán publicadas.
M. R. D .
Se publicará.
Gualberto A.
La fotografía aparecerá en ' ' Mundo
Uruguaya .
A una aliada.
Su dibujo se publicará Sin compro-
miso, puede enviar más. Lo que resulte
mejor para todos.
A. V. Montevideo.
Usted dice:: " T ú boca es un es-
Icándalo b e r m e j o " . . .
" Y ella con su perfume todo aloca"
CortTO ve su soneto es peligroso...
¿Usted no tiene miedo de esa boca?
se
 RUBAIYAT la copa... Aquello»
trago matinal, son independientes de
que b e b e n et amor. Bebe vino a La luz de la luna.
¡Oh. pálida luna! q u e ' n o s buscará
la Mezquita y libres de l a Sinagoga. mañana y no nos hallará más.
Loi primeros reflejoi del sol des- la amada, han gastado mi dinero y
garran la bruma que cuhre el rostro No os dejen p o s r e r por U t r i s t e z a No* borrarán del sendero del amor
arruinado tu crédito; toda la raza ni q u e p e r e z o s a s i n q u i e t u d e s d i s t r a i -
de la rosa. Despertaos, alegres bebe- Ьшпяпа est¿ comprometida a) cielo divino, y el destino inflexible nos
dores, y llenad las copas. g a n v u e s t r o s días. Ñ o a b a n d o n é i s el destruirá bajo so» talones. ;Or>, co-
o al infierno: pero ¡quién fué j a - libro, l o s l a b i o s de la amada y lo»
inas al cielo? ¡quién jamás vino al pera 1 la de la dulce cara, sacude esa
De todos los que han partido n í n - , infierno ? pereza y llena otra vez mi copa, pues
guno ha vuelto. ¡ E s éste, acaso, el ta tierra bien p r o n t o o s Volverá a s u yo me volveré polvo.
momento de la oración o de la sú- Tanta generosidad, al empezar,
plica? Id y arrojad polvo a la faz tanta ternura ¿ p o r q u é ? El h a b e r - Porque una vez al caer la tarde vi
del cielo y unios con una doncella El c a m i n o q u e hacia Él te c o n d u c e a un hombre que solitario «obre la
me regalado c o n d e l e i t e s y c a r i c i a s
«le pálida cara y negros ojos. e s e s c a b r o s o . Si q u i e r e s l l e g a r a la terraza de su casa marrhaba incons-
¡por qué? Pero ahora tu único d e - m o r a d a de D i o s , deja a u n l a d o t u
s e o es desgarrar mi corazón. ¡Qué cientemente sobre el polvo, y ese
familia, sepárate valientemente de polvo, en »u místico lenguaje, le di-
Y ahora que las sombras pasan, le hice y o ? Otra v e z a u n . . . ¡ p o r a q u e l l a de o j o s n e g r o s y a b a n d o n a a j o : — No seas cruel, que, como a mí,
llenad las copas. El día nacerá blan- qué ? tus a m i g o s , q u e el c a m i n o es l a r g o a ti también te marcharán encima.
co y limpio como la nieve, el vino os
y n e c e s a r i o e s viajar s i n o h s t á c u l o s .
enseñará el color del rubí ¡ tomad Cuenta mis virtudes una por u n a
dos hojas de áloe y alegrad la re- y perdona mis pecados diez por diez. Tú sembraste «te tentaciones este
unión : haced una lira de una y una Mi venilla n o fué de n i n g ú n b e n e - camino de mi vida, y ahora que mi
Perdona t o d o s mis pecado* del pa- ficio para la e s f e r a c e t e s i e ; mi p a r -
antorcha de la otra. sado que D i o s los tiene en su me- mano sostiene la copa y me persi-
tida n o d i s m i n u i r á t u b e l l e z a ni tu gue et deseo de ídolos parecidos a
moria y no dejes que el más l e v e e s p l e n d o r , y, sin e m b a r g o , j a m á s he
¡Oh. t ú ! cuya mejilla tiene el co- soplo a t i c e ta l l a m a de tu r e n c o r . las hurie*. me llamas pecador. Tú
s a b i d o el p o r q u é de e s a v e n i d a ni el sabia*, desde el primer día de mi exis-
lor de las rosas silvestres; cuyo ros- pOT q u é de e s a p a r t i d a .
tro muestra las suaves líneas de los tencia que yo sería malo; si yo no
S e dice que el jardín del Edén e n - bebiera, tu ciencia ;oh. señor! seria
ídolos chinos, cuya mirada hace que canta a las h u r í e s : y o d i g o q u e el
el rey de Babilonia dance y se mueva X o s o y s i e m p r e d u e ñ o d e mi v o - nula.
jugo de la uva y los labios d e la luntad, p e r o . . . ¡ q u é p u e d o h a c e r ? Y
como peón, un arfil.uma torre o una amada son tos únicos deleites; elige
reina - • - sufro por mis acciones, p e r o - . . ¡ q u é • • • haz que te traigan ?ino color
esto que es para ti como dinero c o n - puedo hacer? Pienso con sinceridad
tante y deja para otros ta promesa Me rosa antes que el destino doble-
que m e p e r d o n a r é i s , y m e a r r e p i e n t o gue tu cabeaa! Pobre idiota • • ¡pien-
. . . l e v á n t a t e , dame vino. ¿Es és- del cielo. q u e h a y á i s v i s t o m i s p e c a d o s , pero...
te, acaso, el momento de las palabras sa* que ere» un tesoro que te saca-
¡qué puado hacer? rán de la tierra de*pués de haberte
vanas? Esta noche, tu pequeña boca Bebe vino y juega con tos bucles
ha llenado todos mis deseos. Dame enterrado! ,
de tu amada, que dormirás largo ¡ Q u é i n t e r é s p u e d e t e n e r para mi
vino color de rosa como tus mejillas. tiempo en el polvo, sin un cámara-
Mis votos de arrepentimiento son tan lo q u e tú i n e tligas d e l p a s a d o ? P o r Khayyam, si tú bebes, sé feliz. Si
da. un amigo, ni una amiga; piensa la v e n t a n a e n t r e a b i e r t a s e v e q u e , e n
enmarañados como tus cabellos. bien y no olvides que los tulipanes reposa* con una de suaves mejillas
la s o m b r a d e l jardín, la p r i m a v e r a cual tulipanes, sé feliz. Ya que et fin
marchitos, no florecerán ya más. a c a r i c i a s u a v e m e n t e tos p é t a l o s d e
Hoy tú n o tienes et poder del ma- tle todo es que tu serás malo, ima-
una r o s a , c o m o un r o s t r o tlutce y gínate que no existes- . y se feliz.
ñana, y la ansiedad que ese día pue- Aquello que la pluma escrihió n o querido^N'atla dr l o q u e tú m e d i g a s
da causarte es inútil: no pierdas es- se cambiará j a m á s : desolarse e s del p a s a d o t i e n e e n c a n t o s para mí.
te momento pues tú no sabes el va- caer en una profunda tristeza, pues Una noche, la última det Kam.i-
Sé feliz hoy, n o b a b l e s d e l a^er. dán ( i ) , encoutréme soto en el taller
lor de los días que te quedan. «a sufriendo ni aun se añade u n a gota
más a ta angustia. de un alfarero rodeado de vasos y
OpU la m i s m a i n d i f e r e n c i a q u e c o - j a r r a » ; todas hallábanse silenciosas
¡ H a s t a cuándo continuaremos sien- rren tas a g u a s p o r l o s § í o s y p a s a el mostrando profundas grietas en la
do esclavos de los problemas coti- N o a c u s e s al cielo d e l bien o del
v i e n t o d e l d e s i e r t o , a s í un n u e v o día reseca arcilla.
dianos? ¿Qué importa vivir un a ñ o mal de la Naturaleza, ni por la feli- se ha itlo de mi e x i s t e n c i a . H a y dos
o u.i día en este mundo? Llenad de cidad o por la desgracia q u e n o s d í a s p o r l o s cnale's mi c o r a z ó n ja-
vino esa copa antes que nuestros l'n rayo de tuna, entrando furtiva-
guarda el destino, porque según la m á s ha l a n g u i d e c i d o ; e s e o^e 00 ha mente por la puerta entreabierta,
cuerpos se vuelvan polvo y esc pol- sabiduría, ese cielo es mil veces más llegado aún, ese que ya pasó.
vo se transforme en vasos y vasijas. los despertó, y lo* vaso* empezaron
impotente que tú. a c a n l a r : " Ramadán, Ramadán ha
Mi v e n i d a n o f u é para mi el día de concluido-.. ¡entratl, alegre» com-
Porque ayer vi a un alfarero, que A q u é l para quien el fruto* de la la c r e a c i ó n . Mi partida e s el o b j e t o pradores, entrad y llenad nuestras
en su bazar amasaba violentamente verdad jamás ha q u e r i d o m a d u r a r , de u n a s e n t e n c i a q u e y o i g n o r o , y resecas formas con el liquido rubil".
la húmeda arcilla, y é s t a , en su m í s - e s porque*SUI p i e s no e s l á n firmes ¡ b e de p r e o c u p a r m e por e l l o ? L e -
tico lenguaje, le dijo: - Trátame en el camino. T o d o aquel que b a j a v á n t a t e , ccine
vauíatc, i ñ e tu
tu ccintura
i n t u r a ágil,
ágil, ccopera,
opera, Extendí mi mano y tomé at azar
blandamente, que yo cutuo tú tam- sacudido la rama que sostiene el fru- yV ayúdatm*
avúdame a :i ahogar
a l i . m n r las
l . a miserias
iii¡^..-¡-. uno de lo» vaso», y este me dijo: —
bién he tenido vida. to tic la sabiduría, sabe que boy es de este mundo. Yo fui una vez un cariñoso amante
como ayer, y ayer como el primer que se inclinaba al besar una cara
Yo dormía, despertóme la sabidu- día tic la creación. He aquí la estación cuantío la tie- querida, y esta asa que tú tienes en
ría y me dijo: — Despiértate, u t a rra se adorna con las brisas prima- la mano fué un brazo que se enlaza-
jamás durante el sueño ha florecido Pon un límite a tus deseos por tas verales y la esperanza separa el velo ba al cuello de la bien amada.
para alguno la rosa de la felicidad... cusas mundanas y vive contento. que cubre las nubes. Las mamas de
¡ p o r qué abandonarte a ese herma- Evita todo aquello que te conduzca Moisés blanquean en las tiernas ra- Ya que nuestra estadía en este
no de la muerte ? i Bebe v i n o ! . . que al bien o al mal en este suelo, toma mas, y el aliento de Jesús se exhala mundo no r» permanente, ¡por que
para dormir tienes s i g l o s . . . la copa y juega con los bucles de tu de ta tierra. privarnos det vino y tle las caricias
amadfi POrOJie- • • ; cuan pronto t o - tle la amada? ¡Hasta cuándo ¡oh fi-
. . . bebe vino, que es la vida eter- do pasa!--- t cuan pocos «lias n o s ;Oh corazón! Ya que en este mun- \tsofol discutirás lobre ta creación
na, y lo Vínico que resta de tu ju- quedan 1 do hasta la misma verdad es una hi- y ta eternidad? Kl dia que yo ya no
ventud pasada. Ya estamos en la es- pótesis, ¡por qué esa inquietud? . • • e x i s t a . . . ¡que me importará que es-
tación de las rosas, del vino y de Sed prudente*, pues ta fortuna es ; por qué esos disgustos? Abandona te mundo sea viejo o nuevo?
los compañeros alegres; sé feliz un incierta; tened cuidado; la dagu del tu cuerpo al destino y adáptala; I las
instante-., ese instante*es tu vida. destino es acerada ; no os fiéis, que circunstancias, pues aquello que está Aqui concluyen tas Rubaiyat «le
las dulces almendras que la Fortuna eicrito no se borrará porque asi tú C.hiaz de-din Padt Ornar ebn lbraim
Dame vino entonces; este reme- os brinda, llevan veneno consigo. lo quieras. al Khayyam.
dio paru mi corazón herido, buen ¡Dio» tenga misericordia tle él!
compañero para aquellos a quienes Te daré un consejo, si escucharlo Esa sabiduría que rueda por tos
caminos del cielo en busca de ta fe- Ornar - el - Khayynm.
el amor ha e n g a ñ a d o ; mi espíritu quieres; por la gracia de Dios, aban-
prefiere la embriaguez y sus menti- dona ese ropaje de hipocresía y óye- licidad, le dice cien veces por día: Trait. ti* (XjueirQg Mvaejo Sartas Pala.
ras, a la bóveda del cielo, que es sim- me : la villa futura no t i ene fin, el Comprende en este mismo instante
plemente el cráneo del mundo. mundo no es sino un soplo. de tu existencia que no eres como
esas hierbas que renacen con la pri-
Porque sabemos que la bóveda ce- mavera después tle haberse marchi-
No sigas la huella de tas Tradicio- tado.
leste, bajo ta cual vivimos, no es sino nes, deja sus mandamientos ; no re-
una linterna mágica, el Sol es ta lla- huses a nadie lo poco que tú poseas;
ma, el Universo la lámpara; nos- no calumnies ni aflijas el corazón de Porque, tj bien se mira, la vida
otros, pobres sombras que vienen y ninguno, que yo te garantizo el mun- no es más que un inmenso tablero
do futuro; m a s . . . lleva vino contigo. de ajedrez, cuyos cuadro* blanco*
son tos días, y los negros las noche*
Una jarra de vino y lo* tahit y en el cual el Destino juega con
Unas gotas de vino rubi, un peda- 1
II) " R u b s i " »• «I n o m b r * de ш c u a r t e t a o
re4on4<ll* m la c u a l r i m a n al p r i m e r o , • • f u n d o
zo de pan, un libro de yersoí . . y
t ú ; en un lugar solitario, vale más
¡mucho m á s ! que el imperio de un
tos hombres romo con piezas: loa
mueve de aqui para allá, y uno por
uno van a parar al estuche de la
nada.
F
Г Cuarto • a r t o , d a t a n d o libra al t a r e e r o - " S f u b a i - sultán.
Tal* *• al p l u r a l da r e d o n d i l l a * O c u a r t e t a » q u e
Ya que !• • • esclavos de la inteli-
A p*aar da q u e lo* m e n u i c n f o e á r a b e » o per- ¡ Ay de aquellos corazones donde gencia y de la* vanas suscepiihíli-
• a* n o n o * • u m i n i a t r a n t i n o u n a v a f e b i o g r a f í e la pasión no existe! Que no sienten datlns han muerto en la mitad de sus
de O m . r i i K h t Y i i m p o J a m »a e r a e r . a ¡ u l f é r
por a l g u n o * de aua p r o p i o * libro», q u e *I a e t r ó - el hechizo del amor, que es la ale- querella* sobre el ser o no ser, y
n o m o y p o e t a n a n o p r o b a b l e m e n t e e n et a n o * l i gría de la juventud- El día de tu exis- que al final de tantos argumentos
4* la « g i r e ( 1 0 4 0 d a l a a r a cristiana*. S u c u n a tencia que pasa* sin amar es el más te encuentra* tan ignorante como al
1u4 la e n t o n c e * c e l e b r a e t u d a d 4a N i a b a p u r q u a -
P*r *u m u a u a. t e t r a * y a r t e l , r m a k i a b e « a r e -
n o m b r a c o n В а * 4 а 4 el C a i r a .
inútil de tu vida. principio, deja ta compañía de los
sabios - • - Planchas y Calentadores
O r n a r - r J - K J i a T T a m m u r i ó entra lo» afto* l i l i Para aquel que baya injertado en
T H l í , y la* p c r i e n n m e * a u t o r í c e o s * p a r e c e n
*»aj-urer qu< la m u a f l a d e l ( r a n po«ta o c u r r í » an su corazón la semilla del amor, no . . . Ve tu, el simple, y elige al zu- ELÉCTRICOS
*n 11; l. « в l e m i t c a * c u d a « da N t t b a p u r . *i«ado hay un soto día en su vida que sea mo de ta uva. que los sabio», al ali- PRECIOS R f C D U C I D O S
»u c o n e u a l o « a l o * u l t t m o a a n o * l a a m i s t a d , la*
inútil. Ya busque la aprobación de mentar su» simas con viejas creen-
" o r « * y e l r m o , c o t a * t o d a * q u e «I c a n t a r e a l a
Dio», ya U alegría de >u corazón y ría» — que ion cual racimos secos —
* > " a d e l fértil y t r s n q u .:. »*П« 4« a t a e b a a e n e l
j o r a , A o . M , C\MI» d a loa c a n t a r e * peraa* q u e vacíe la copa. han concluido por hacer sus vidas 05СЛН PN
I TOS 8 Cia.
Pueda en or f u l l a c e r t a 4e a l t a r d a d o e ' u i p o a t a a tan agria» como racimos verdes.
Como P i r d o u a i . A bul S a i . E * a d i . P a n i J - í m 18 de JULIO esq. P j r a g i u y
A l i a r , y t a n t o a «trata, p o r lo c u a l s a d r í a J ; ta Durante la primavera a la orilla de
*аЛе M r l ' . m i i a el P a r n a a o P a r * * . P l w e U d a r o Puesto que ninguno puede asegu-
n o m b r a 4 « | c a n t o r de l e * " R u b a т а » " e r a C b i a i un río o sobre el verde césped de un
• 4 - u n A t ul Pe4> O r n a r e b n I S . i b . m - al - campo, con algunos amigos y una rarte un mañana, haz ahora la feli-
Abaj-vam. amiga bella como una hurí, traedme cidad de tu corazón enfermo de
 M O D A S
E n t o s d U s .1. Iluvi - - Aunque
nuesíVas mujeres tienen la costumbre
de salir poco los día- d- llnvia y de no
baccr para esas salidas un gran derro-
che de elegancia, consideramos nece-
sario una pequeña crónica que las
oriente acerca de la tendencia que hay
en Europa de vestii esmeradamente y
con api opiada corrección, aún mismo
en los días en que el diluvio parecería
que se hubiese desencadenado.
Aquí, en nuestro pais. una de las
costumbres que eonscrvamos de nues-
tras abuelas, con mayor fidelidad, es
la de dedicar al hogar todo el tiempo
de los días lluviosos. Cuando las pri-
meras gotas de una ligera llovizna hu-
medece las calles, nuestras mujeres
aplazan sus salidas: y las valiente^, las
más aventuradas, las que imperiosa-
mente, por algún motivo tienen que
salir, lo hacen de la manera menos lu-
cida, con algún vestido pasado de moda
y dejando ía coquetería y la elegancia
de los días de sol, en casa-
En las grandes ciudades de Europa,
ya sea por hábito, ya por necesidad,
las mujeres prescinden absolutamente
de los caprichos del tiempo para sus
salidas y las calles no pierden nunca
su animación, ni las mujeres su elegan-
cia.
Recuerdo que. hace ya largos años,
en unas grandes carreras de Long-
chatnp, bajo una incesante lluvia, des-
filaron las mujeres más encantadoras
de París, las más bellas, las más dis- .
tinguidas, sin perder ninguno de sus
atractivos, envueltas en sus amplios ca-
potes que no dejaban lucir su toilette,
sino sus diminutos zapatos y tus m e - ,
dias de seda. Entones, uno de los más
autorizados ' ' croniqueurs'' de modas,
describió con gracia y espiritualidad
los capotes, los zapatos y las medias
que habían tenido más éxito en eac
Grand-Prix de Otoño.
Y -por hoy vamos a indicar a nues-
tras lectoras algunos trajes apropiados,
para que empiecen a ser mujeres más
modernas y para qur en las primeras
lluvias, bauticen su elegancia.
La figura primera que acompaña a
esta cróniA*. es un capote impermeable
forrado de escocés, con el gorro y la
caña de las hotas haciendo juego
El tegundn, m grueso jersey de lana,
puede ser color marino o cobre. L a
toca o d e lana.
1.a elección 'le un bonito paraguas
Cim puño d e marfil, c o m o s e usan
ahora, completa m u y bien el c o n j u n t o .
Nescelb.
Hasta el 31 de Enero
20% de
Eleyancla Norteamericana
Rebaja
Ofrecemos con este des-
cuento toda la m e r c a d e r í a
de verano, todo de última
m o d a y recién recibido ::
Uestldoe
Elegantes
de U a l l e
palma, Bozzoy Cía. Я Ъ Н д о в de H a b a r -
d i n a , m o d e l a s nove­
modelas desde d o s o s , f o r r a d a s en
S 14 25 de MAYO y J. C. GÓMEZ
eeda desde S 2 5 .
Ни eclana de distintos juegos. Y es otra NUEVAS MODAS MASCULINAS
m e n t a t i l * de m o d a e n N o r t e A m i n a . C o m o
c e b e «oponerme, n a d a p u e d e e te (tifie m » e x ó t i c o de las modas que imperan por snobis-
Y .'T.iy. 11 • p a r * q u e lee u - m i caaadera* con-
mo, puesto que es preciso demostrar
s i g a n q u e • ( a d m i r e >ui e n c a n t o * .
que poseemos porcelanas maravillosas,
El adorno de las mesas. — E l s n o - restos de juegos regios que pertene-
b i s m o ha decretado m u c h a s • u n i d a s ; cieron a nuestros abuelos.
una de ellas ha sido la abolición d e l o s El refinamiento moderno tiene tam-
manteles. L - moda quiere q u e ahora se bién su encanto fuera del lujo y por
t i n g a n magnificas m e s a s que hayan per- eso triunfan también las porcelanas
tenecido a l o s antepasados o bien m e s a s rústicas, los objetos de madera, los gra-
de m u s c o q u e fungan s i g l o s y sn leyen- bados, el hierro esmaltado con los cua-
d a ; mesas que hayan figurado en algún les un artista puede hacer una deco-
raciún alegre y novedosa. Presentamos
hoy algunos bellos y origínales mode-
los de esta fantasía.
El río Colorado de los Establos
Unidos, corre ahora a más de mil
metros más abajo de la superficie
donde empezó a correr.
La mayor parte de las m a d e r a s
castillo avñon.d de la Edad Media o que se importan en el Uruguay, p r o -
que hayan tenido ptJr dueño algún gran ceden de los puertos de Mobile. P e n -
principe de Florencia o duque de Flan- üácola y Galveston, en los Estados
des. \ como es natural, es preciso lucir Unidos.
GtQJ muebles gloriosos para que el
dueño de casa relate su historia a los ' •>
atónitos invitados. Son piexas (pie siem- El brazo de mar que separa la isla
pre acaban por convencer que se posee de Ceylán del De kan, está cruzado
una «ran fortuna o que se pertenece a por el m á s g r a n d e de los puentes
conocidos.
una gran familia y se pensaría que ta Naturalmente. PW sabemos ¡o que diría
una aberración cubrirlas. Y es p u eso I'etronio de este caballero, que se viste
que lus manteles han desaparecido Echarrapunhja, en la vertiente Sur
del Himalaya, es el lugar del mundo de frac con una camisa de pechera fle-
Las mesas de ahora sólo lucen una xible, un extravagante cuello de puntJ.
pequeña cárpela debajo <l-j cada cu- donde llueve m á s a b u n d a n t e m e n t e ,
pues cacti u metros de agua por me- una corbata blanca con ribetes negros
bierto y el centro haciendo juego. Pero y un fantástico chalfco de seda que le
esas carpetas y esos centros son de ex- t r o cuadrado en el término de seis
meses. Hasta recordar, para darse sale por debajo del frac
traordinaria riqueza. Pe hacen de los
más bellos encajes y en combinaciones una idea de esta cifra, que, en el
Uruguay sólo\:acn •>•>• milímetros en El último r e y á r a b e que estuvo
preciosas. Allí se hermanan los encajes un a ñ o .
de Venecia, de Irlanda, el íilet. el pimío en España, llevaba el nombre de
de Milán y el Richclicu y en fin todas Mulhascn. que l o recuerda al pico
Lai delicadeza de la aguja. Uno de los Los gersers de la región de L e - más alto de l a s Sierras Nevadas.
adornos más bellos y de mayor sun- llcwtonc, en el Parque Nacional de
tuosidad para una mesa, son los can- los Estados Unidos, pierden altura Mistral es el nombre de un vienta
delabros de plata repujada Sus panta- a medida que t r a n s c u r r e el tiempo a helado que sopla con gran fuerz3
llitas de tonos suaves y uniformes, oe causa del mayor ensanchamiento del hacia el Sur, procedente de los Mon-
jan filtrar una luz encantadora. A me- cráter. tes Cevenes.
nudo los centros de mesa son una
pieza de plata de verdadero valor y que
hace juego con los candelabros.
Otras veces se pone un grupo de Sas-
se o una estatuita de Sevres. o bien
DORMITORIOS I COMEDORES
un jarrón con flores o uno de esos DE ROBLE ^ s * * " DE ROBLE
Í Í 1 4V. M S c o i Ju Y i - ^
platos modernos que son de esmalte o
porcelana oscura o chinesca, con pie
de bronce o de madera: unas veces cu-
biertos de flores, otras veces de frutas.
En fin, hay infinidad de variantes, que
se resuelven según el gusto, el arte, la
riqueza o el ingenio de la dueña de
$ 45 л » . i8 а» ятю $ 45
casa.
Otra dr las mas caprichosas modas,
de nuestra época, es la de presentar en J
UEGOS DE SAL
A I ES С R IT 0 R I
una m i s m a mesa de tí p i e t a i de p o r -
 El hogar moderno
La» cosas de campo. — A m e n u d o
la coquetería > el arte d e una mujer
le ponen a prueba al instalar una casa
de campo. Allí es preciso armarse d e
ingenio, p u e s t o que el lujo queda siem-
pre desterrado y la distinción consiste
Únicamente en la sencillez y podríamos
decir, e n la " i n g e n u i d a d " d e sus ob-
jetos.
I,a tarca d e hacer u n a casa sencilla
es sin duda alguna la más difícil: por-
que en las casas d e ahora el l u j o mu-
chas veces engaña y a las personas
poco experimentadas ¡es hac; parecer
bello lo que sólo ha sido costoso.
Las verdaderas casas de campo, con
sus grandes ventanas, con s u s escaleras
rústicas y sus vigas al descubierto,#>se
prestan admirablemente para hacer en
ellas una decoración artística L o s
muebles simples, l a s paredes cubiertas
por papel de forro y en los halls c u -
biertas únicamente de cal. destacando
sus maderas oscuras; COJOQ telas de
tapicería las alegr.es cretonas y para
Se tiene el «jamón 15 días en esta
preparación, sacándolo después para p o -
nerlo al humo, donde debe quedar lo
m e n o s ao días, pero puede quedar has-
ta un año sin echarse a perder, cuando
están bien salados.
Después se cocina en agua con t r u -
car rubia, pimienta, unas h o j a s de lau-
rel y una botella de cerveza. Una vez
cocido, se le saca el cuero y se le echa
por encima azúcar, quemándolo con
un fierro.
Para economizar el > b ó n . — El
lavado de las telas d.- lana blanca exige
una jabonada m u y espesa. Si queda
algo en ella, después de haberla e m -
pleado, n o hay que desperdiciarla E s
preciso dejarla enfriar v cuando el ja-
bón «0 ha convertido en una especie de
gelatina, se le coinca sobre un plato
a ln espera del nuevo lavado.
Para emplearlo nuevamente, sólo
será necesario eolornrlo ene-mi» d-1
fuego con algunas gotas de agua, hasta
oue se vuelva nuevamente líquido. Pue-
de también hacerse derretir esta gela-
tina directamente en el agua caliente
que debe usarse para lavar.
l'n descubrimiento prodigioso. —
H a c e ya algunos a ñ o s un m e d i e n d e
la m a r i n a francesa, el d o c t o r B a r t h e
de S a n d f o r t v i ó s e o b l i g a d o en p l e n a
j u v e n t u d a a b a n d o n a r l o s servicios
del Estado a causa d e tos e n t e l e s
reumatismos que padecía. Había to-
m a d o e n D a x b a ñ o s d e b a r r o nue l o
habían a l i v i a d o y t u v o la idea de en-
sayar la continuación d e ese t r a t a -
miento en París por medio de baños
naturales transportados. F r n r n s ó . . .
P e r o n o s e da por vene irlo. Piensa
oue todos l o s beneficios de e s e reme-
dio intransportable podrían realizar-
se c o n a y u d a d e un b a r r o a r t i f i c i a l
del cual h a b r í a q u e e n c o n t r a r la f ó r -
mula. Busca. •. ( j p o r qué no?l y
cree haberlo e n c o n t r a d o . S u p r o d u c -
t o es una mezcla d o n d e s e ronbinan
paráflaaa y la resina de ámbar fun-
Labores femenina*
Cubierta de caja. También la
lencería ha acaparado esta clase de
bibelots. Antes sólo se forraban las ca-
jas con telas de seda. raso, moaré, ter-
ciopelo, etc., y ahora agradan más, fo-
rrarlas con tela blanca adornada con
encaje y bordarla como cualquiera otra
labor de lencería.
El grabado que acompaña a esta nota
puede calcarse en linón de hilo blanc\
y bordándose las hojas sencillamenf
a cordoncillo bastante rellenado y los
círculos a la inglesa. Los cuadros ríe
encaje son tan sencillos como el bor
dado.
Solamente cuando está la caja arma-
da puede darse una exacta cuenta de
lo bonito que resulta este facilísimo
trabajo, que lucirá mucho si se forra
con ras*o de eolor. en un t i . n o pálido,
la tapa de la caja.
Receta» de cocina
Pastel de patata. - ^ S e asan la» pe>
tatas al horno, se pelan y se reducen
a masa, esta masa se deslíe en seis
yemas de luirvo por cada medio kilo
de masa y 100 gramns de*azu-ae en
polvo. S e amasa torio junto y se añade
ta cascara d e un limón rallarlo, el zumo
del limón y la clara de los huevos. H e -
cho esto, se pone en una tartera ligera-
mente untada ron manteca, se mete en
el horno a fuego suave y cuando forma
corteza y toma color, puede servirse.
• LEN1 ES
ANTEOJOS
INSTITUTO ÓPTICO í 11VIO
¡Ida. liral. Hondeau, 1511
Licor de chocolate
1 kilo de azúcar.
1 litro de alcohol de 40 grado*.
3 onzas de chocolate rallado.
,1 lazas ríe agua y una barrita de vai-
nilla.
S e tiene esta mezcla durante 10 o 12
días, teniendo el 1 uidado de revolverla
una v e z al día Después se mezcla con
almíbar y se filtra por medio de un
papel adecuado.
Propiedades de algunas legumbres.
El tomate tan apreciado en nuestros
días, fué antiguamente considerado co-
mo un veneno de los más peligrosos ;
su ácido y agradahle sabor esttmqla
el aparato dige tivo, perezoso por lo
regular, durante los calores del estío.
El tomate preparado en conserva re"
sulta de gran utilidad -en el invierno
y tiene la ventaja d - ser asi más diges-
tivo y menos ácido que fresco.
Las ensaladas ríe legumbres tienen
las propiedades dulcs o excitantes dr-
ías sustancias con que están adereza-
das, y »11 crudeza luiré que sean de di
flcil y mala digestión ; deben sazo-
narse con aceite de oliva, que es el má-.
nutritivo, con sal e*. buena proporción,
pues en gran dosis irrita nvicho, y con
vinagre mezclado con agua, que es re-
frescante y facilita la digestión.

cortinas las trasparentes y claras m u -

selinas; las grandes lámparas forradas
de géneto con bonitas pantallas h a -
ciendo juego; los muebles pintados o
ahumados; las alfombras ríe ruen.a y
Completando el Conjunto esos mil pe-
queños objetos, como ser: porcelanas,
grabados, almohadones • flores, colo-
cadas con arte.
Las figuras que presentamos dan una
idea de la armonía y el confort que
reina en esas casas sencillas a la par
que encantadoras-
Para almidonar las blusas blancas.
Para medio litro de agua, se toma un
puñadito de almidón. Se hace disolver
primeramente en agua fría y luego se
pone a cocer con un pequeño trozo de
cera virgen, bien blanca.
Hay que tener cuidado de no sumer-
gir las blusas en esja preparación, sino
cuando estén completamente secas. Kl
mismo engrudo conviene para las cor-
tinas blancas. La cera bis vuelve lus-
trosos e impide que se adhiera a ellos
al polvo, que es el enemigo de toda mu-
jer pr dija.
Preparación especial para salar Ja-
m o n e s , — 5a toma el jamón (.otán-
dolo muy bien con salitre y después
con sal pisada- Una vez hecho esto, se
echa en U salmuera preparada a prue-
ba de huevo (esto es, poniendo l a can-
tidad necesaria para cubrir éste y
echando poco a poco la sal, revolvién-
dolo para que se disuelva. Ge conoce
cuando está suficientemente salado,
echando un huevo que subirá flotando
a la superficie. « médica y al público.
didas, mantenidas a u n a temperatura
determinada alrededor de la parte
enferma. Después de algunos tanteos
o b s e r v ó s o b r e él m i s m o mejorías que
p a r e c í a n serias y se apresuró a ha-
cer conocer a algunos colegas esos
felfas r e s u l t a d o s . Se le r i e r o n . . .
LA CENTRAL
658 - SARANDI - 6 6 4
E s necesario vivir. T.a Compañía de
ferrocarriles a Dedenpatto tiene ne-
c e s i d a d d e un m é d i c o . Se dirige al in-
ventor d e la "Ambrina" (es el nom-
LIQUIDAMOS
bre que da a su producto^ y helo
ahí e n v i a j e . . . Parte después para
la China llevando en su maleta una
provisión de " A m b r i n a " . Estallaron
' Comparen nuestros precios
en esa época, revoluciones sangrien-
tas, batallas, incendios de ciudndes.
F.ntre los heridos chinos hay quema-
dos. El doctor Raz-the de Sandfort
Vean nuestros vidrieras
se acuerda que antiguamente Ambro-
sio Paré curaba las q u e m a d u r a s de-
rramando aceite c a l i e n t e . P o n e un
pedazo de "Ambrina*' al fuego y de
esta cera derretida embadurna la piel
quemada. El chino que gritaba se
calma. Al rato no sufre absolutamen-
te nada y d e s p u é s de algunos días
toda infección ha desaparecido,
j Quién f a | más asombrado? jEl
chino? Sin duda, p e r o también el
doctor Bartbe de Sandfort quien
confiesa que no esneraba semejante
milagro. Vuelto a Francia hizo nue-
vas experiencias que hicieron sen-
sación. Algunos años después cuan-
do la guerra estalló y cientos y míles
de quemados por la explosión de
obuses requerían sus cuidados, el
Gobierno Francés estableció hospi-
tales especiales para el tratamiento
de las quemaduras, por la "Ambri-
na" cuyos resultados extraordinarios 20.ÌM -Umita llob. en J»r«cy 2IS1S • Шона « 1 voile (le hilo vainilla
sorprendieron al mundo entero. Hoy de hilo, con bordado»», i та шл ,1» y bordada a m i n o J ]20
este notable producto se ha difun-
dido por t o d o s los países prestando urocilla, j Dotonea . . I ЦМ
invalorables servicios a la ciencia

L? Vino D b M E S A -
MEJOR..
C A R L p S
Y
5 A P E L L I
на?
D E C O M E N D A Ù O U R U q U A Y 1352
 DEPORTES
La Escuela d e Natación
D « a día rn f o n n a paulatina, pero
segura — la natación c o m o sport s e v a
imponiendo de una manera concluycnte.
y n o podría ser <lc otro modo.
H a y e n el cultivo de"este deporte
atractivas harto sobradas para los
sportmen d e verdad. E s la p áctica del
sport p o r el sport m i s m o que e x c l u y e
puede decirre, toda tentativa d e profe-
sionalismo y d e venalidad.
Ofrece, a s u s cultores, c o m o única
recompensa la noble J elevada satisfac-
Las monturas para lentes y anteojos en
C a r e y y símil oarey,
se pueden confeccionar desde la simpl-
carrera a nado hasta la ;c obacia Ade- son los modelos de m o d a ,
más es un deporte útil y necesario que i m p e r a n por s e r muy prácticos
cuya práctica, en determinados momc:i-
y a la v e z muy elegantes
Hoy podemos
ofrecerle 35 ti-
pos diferentes.
Visite la Casa.
Pida precios.
Sección Óptica.

tos de la vida puede prestar invalora- Casa PABLO FERRANDO

Bn loi «lio (I profetor.
ción moral d e clasificarse v e n c e d o r ;
c o m o único s e ñ u e l o : el goce puro que
se experimenta al salir airoso d e una
lucha difícil e n la que h a y q u e poner
de si n o sólo energía y voluntad sino
también inteligencia y coraron.
Vi siquiera cuentan los ganadores, en
la gran mayoría de las veces, con e l
aplauso del público alentador y sin-
cero, q u e l o s constriñe a emprender
n u e v a s luchas y a tentar n u e v o s triun-
fos.
bles servicios.
I„a Comisión Nacional de E. Eísica
ha instalado una chata para la ense-
ñanza de la natación bajo la dirección
del señor Alejandro Panigatti.
En la referida escuela hay actual-
mente más de 600 inscriptos que con-
curren asiduamente a recoger las pro-
vechosas lecciones que dicta Amador
Franco, antiguo campeón, q u j actual-
675 - Sarandí- 681
PENSAMIENTOS
P.refíero más luchar contra un león
(pie contra mil ratas. (Voltaire).
Es necesario no servirse nunca de pa-
labras que sean, más grandes que las
cosas. (Erancisco Sarcey).
El coraje tiene el valor del cloro en a la libertad general. (Diderot.)
tiempo de epidemia. (J. Claretie).
I.os primeros accidentes de la vida
desaparecen, como los detalles del pai- la muerte total de su cerebro, es la dul-
saje se borran ante los ojos, del que
lo contempla desde lo alto de una mon-
taña. (Gcoige Sand )
Montevideo
1.a contemplación de las cosas bellas
nos pone siempre tristes |>or al^nri
tiempo. (G. Elaubert).
Un hombre que se arruina es el único
que trata de pedir prestado. ( E Et. J.
Goncourt).
e/Toda dispensa es una infracción a
la ley, y todo privilegio es un atentado
I.o que es más de temer para un
hombre de letras, no es el abatimiento,
ce imbecilidad, el insensible reblande-
cimiento de su talento. ( E . de Gon-
court).

Creer en la fatalidad es cc/er en nos- Inventar, es querer morir a fuego

otros mismos. (George Sand). lento, copiar es vivir. (Balzac).

mente se dedica a difundir el deporte

S*lto át\ " ci,'. '" iftctuido daidc «I último
Sin embargo tiene grandes atractivos
por la diversidad de " n ú m e r o s " que
(pie otrora le diera justa fama.
Desde su instalación hasta la fecha Conversando
luibo necesidad de efectuar muchas re-
formas a fin de dotar a la Escuela de
todos los elementos de higiene y con-
con un mono sabio
fort. — Hoy nada falta en ella. —
Hay instalados alrededor de cíen casi-
lleros para guardar la ropa.
Las fotograbas que publicamos ha-
blan respecto a la dependencia de la
Comisión de Educación Física, más elo-
cuentemente que nosotros.

Motocicleta empleada e n el transporte

de pianos y armoniums
Un comerciante en instrumentos
de música que reside en una a p a r -
tada región del Oeste en los Esta-
dos Unidos, ha tenido la idea de
valerse de una motocicleta dotada de
" s i d e - c a r " p a r a el t r a n s p o r t e d e
píanos, armoniums y fonógrafos al
domicilio de sus respectivos compra-
dores. El chassis del pequeño coche
se halla provisto d e una plataforma
a la que se amarra el instrumento
que se desea t r a n s p o r t a r , colocado
en posición vertical. Según asegura
el buen comerciante hasta ahora no
se le ha p r e s e n t a d o ninguna sería
dificultad para la traslación de cual-
quier clase de peso con un sistema Diga señor Mono, ¿por qué sus congéneres
de t r a n s p o r t e t a n inusitado.
no hablan y en cambio imitan tan bien todas
las acciones?
Porque lo hacen automáticamente, tonta-
ROBES MANTEAU*: mente, como algunos hombres, que proceden
«sin ton ni son».
Hallándose de compras e n Euroqa
¿Y qué deben hacer los hombres para
uno d e nuestros Socios, para e l I n
verno d e I9J9, participamos a nuestra no proceder «sin ton ni son?»
clienieU q u e Vestirse en la
INICIAMOS LA LIQUIDACIÓN DE MODELOS
U . T . 2»1» C e n t r a l
B m é . Mitre 1368 - MONTEVIDEO
»
Casa Cantalupo
 Tienda "NUEVA SIRENA"
SARANDI, BARTOLOMÉ MITRE y .BACACAY
C. PFEIFF & Cía.

DE LA
* [M

Vestido tusor puro hilo rica calidad muy ele-

N." I — Vestido roilf hilo combinado en do» tonos
gante S 16 50
BordaHo S 12 50
Sombrero de la misma lela • 2 25
Sombrero Rustik Novedid . . . 3 9C

Vestido de niña, voile, cuello y puños seda

Traje catadora, casimir inglés, de 8 a M años, $ 6 60 de 2 a 12 años
aumentando 0 50 por edad aumentando 9 0,50 por edad
Sombreros de paja forma bolero. . . . $ 1 50 Capellnes, rico broderle, de 2 a 10 años, - 2.50
Traje de varón combinación, de zcphlr,
colores surtidos, de 2 a 10 años, todas las
edades » 1 60
Sombreros Galatea rayada todas las medidas 0.85

Impresión y fotograbados de los

fa
Talleres Gráfico* B a r r c i r o & ^ -