Está en la página 1de 32

Juan Guillermo Durán Mantilla

La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel.


Una opción actual del derecho natural desde el
comunitarismo*
Human bodily nature by michael sandel.
A present sample of the natural law from communitarianism

Juan Guillermo Durán Mantilla**


Universidad Santo Tomás, Bogotá

Resumen
Pretendemos en este artículo de reflexión estudiar en Michael Sandel -concretamente en su obra
JUSTICIA ¿Hacemos lo que debemos? (Debate, Bogotá, 2011) -, su idea de naturaleza corporal
humana; ciertamente la idea de naturaleza corpórea en el hombre es inescindible de su parte
racional, e incluso de su componente espiritual al menos si nos atenemos a una idea tripartita de
hombre: cuerpo (materia), alma (razón neuronal), y espíritu (lo intangible del hombre): por eso
ocuparnos de la naturaleza corpórea humana es ya introducirse en el mundo integral del hombre.
Dado que trabajo en el Grupo de investigación San Raimundo de Peñafort de la Universidad
Santo Tomás - Bogotá, la idea de naturaleza humana, hoy tan discutida -no así, por ejemplo, el de
naturaleza cósmica-, es tratar de desentrañar en alguna medida ese concepto, claro está que desde
lo corpóreo tal como lo acabo de enunciar; la idea de naturaleza humana corpórea en un autor de
actualidad como Michael Sandel, no solo en el mundo anglosajón sino también en el latinoame-
ricano, resulta por eso de gran interés para el Grupo mencionado y para la academia tomasina en
general.
Quizá su aporte mayor es desde el punto de vista comunitarista: existe en las comunidades una
valoración por la naturaleza humana corpórea.
Palabras clave: Naturaleza, cuerpo, hombre, derecho natural, comunitarismo.

Recepción del Articulo: 5 de mayo de 2014


Aprobación del Articulo: 2 de septiembre de 2014
* Este artículo es producto del proyecto de investigación “Neodemocracia” el cual está adscrito al grupo de
investigación San Raimundo de Peñafort del Centro de Investigaciones de la Facultad de Derecho de la
Universidad Santo Tomás – Bogotá. El mencionado proyecto fue financiado con recursos económicos de la
Universidad Santo Tomas (Sede Bogotá)
** Doctor en Derecho por la Universidad de Navarra - España. Profesor en la Universidad Santo Tomás-
Bogotá, en el Doctorado de Derecho y en pregrado en la cátedra de Filosof ía del Derecho. El Autor incluye
en este trabajo a su alumna en Investigación Asistida, Jessica Acuña por sus aportes Correo Electrónico:
natanaelernesto@hotmail.com

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 105
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

Abstract
The goal with this reflection article is to study Michael Sandel’s idea of human bodily nature. This
idea is not able to be separate from its sensible part and its spiritual component, even more if we
stay to the tripartite notion of the Man: body, soul and spirit.
That is why the study of human bodily nature means the complete Man’s world. Research group
of San Raimundo de Peñafort Santo Tomás University-Bogotá tries to unravel that concept since
the human bodily nature perspective as we said. This idea of Michael Sandel is really important in
the present not only in Anglo Saxon’s world but in Latin America as well, specially in this academic
group.
Perhaps his greatest contribution is from the communitarian point of view: exists in communi-
ties an assessment by the corporeal human nature.
Keywords: Nature, body, Man, natural law, communitarian.

Introducción el desarrollo de este artículo he utilizado el


método deductivo (partir de la noción formal
Tratar de la naturaleza humana ha apasio- de naturaleza humana corpórea, e inductivo
nado a los pensadores de todos los tiempos; (desentrañando los temas relacionados con
por solo poner unos ejemplos, Tomás de ese concepto a lo largo de la obra Justicia de
Aquino dijo que lo natural humano estaba Sandel).
compuesto básicamente por “tendencias” o
“instintos”; y en tiempos más recientes pode-
I. La idea de naturaleza humana es
mos ver la preocupación por la naturaleza
humana en autores como J. Maritain con su problemática
obra sobre humanismo integral, y E. Stein al La idea de naturaleza humana no es simple;
tratar en uno de sus libros acerca de la estruc- presenta varias significaciones (como suelen
tura de la persona humana. tener las palabras en general y sobre todo
Conocer lo que piensa M. Sandel acerca de aquellas de más alto impacto en la vida
este tópico resulta interesante para un grupo humana: Dios, hombre, libertad, derecho…).
de investigación de la Universidad Santo En este artículo de reflexión quisiera tratar
Tomás, Bogotá: el Raimundo de Peñafort, que la idea de naturaleza corpórea humana en
tiene como línea de investigación el funda- un filósofo de actualidad: Michael Sandel,
mento del derecho: ¿Es la naturaleza humana quien nos puede dar luces al respecto. Para
el fundamento del derecho? Creemos que sí y ello recurriré a su obra Justicia, obra que nos
ello se verá en alguna medida en este escrito. sirve de punto de apoyo para conocer su pen-
samiento al respecto.
Con este estudio pretendo no sólo conocer
a este autor en el punto referido, sino tam- En el Grupo de Investigación Raimundo
bién proponer una especie de guía de reseña de Peñafort, de la Universidad Santo Tomás
de autores que pueda servir de instrumento (de Bogotá), tratar un tema como éste resulta
de análisis de libros para los estudiantes. Para de importancia, no le es ajeno, es pertinente,

106 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

sigue su línea de trabajo tanto en pregrado como lo que es más característico de algo:
como en posgrado (la naturaleza corpórea “…la naturaleza es aquello merced a lo cual
humana como fundamento del derecho). un ser es lo que es y no otro ser” (Sancho,
Para empezar nos puede servir de impulso Hervada, Compendio, 1980, p. 56); es simi-
una noticia de prensa1 reciente: lar al principio de identidad, formulado
por la filosofía clásica. También podemos
“La sexóloga brasileña Falvia Dos Santos decir que naturaleza, siguiendo lo anterior,
habla con desparpajo de las relaciones de equivale a forma y que se utiliza, aun incons-
pareja, del sexo y del amor. Con esa misma
cientemente, en el lenguaje corriente. Así las
naturalidad aborda su tercer libro, Poliamor,
cosas, todo parece simple, al menos concep-
más allá de la infidelidad, en el que plantea
que es casi imposible la monogamia y que lo tualmente, no sólo en campo de la definición
importante en una pareja es la lealtad… No general de naturaleza, sino en campo de
estamos hechos para la monogamia. Nos la la naturaleza humana; pero sabemos que
inculcan como opción única y válida pero a nivel de teorizaciones, de ideologías, así
lo que vemos en la realidad es una cantidad como en la praxis jurídico-política, la cues-
cada vez mayor de personas que son infieles, tión resulta mucho más compleja.
que sufren, que hacen sufrir por asumir un
compromiso que va contra la naturaleza” Por naturaleza también se suele entender
(negrilla mía) (El Tiempo, 8 de enero de el mundo cósmico, físico, acepción muy en
2014, p. 2). boga hoy y que recibe un uso más o menos
estandarizado y por cierto bastante defen-
Al contrario de esta postura de Dos Santos, dido por todos (aunque no siempre en la
encontramos, por ejemplo, la visión cristiana realidad de los hechos: basta ver la descom-
de la naturaleza humana en materia sexual: posición climática del planeta tierra a causa
defiende la monogamia2. de políticas interesadas prioritariamente en
Lo anterior muestra lo dispar del tema, al la ganancia capitalista/neoliberal). A esta
menos en el campo moral, y que incide tam- acepción no recurro directamente en este
bién en el terreno jurídico3. escrito, pero es muy de tener en cuenta, pues
Si acudimos al simple uso de la palabra los estudios ecológicos actuales nos dicen
“naturaleza”, encontramos que se entiende que el mundo físico, cósmico, material, no
es ajeno a nosotros los seres humanos: el ser
de la naturaleza física está emparentado con
1
La prensa no se considera en el ambiente nosotros y nosotros con él (Boff, 2008, La
académico una fuente de primera línea; sin opción, pp. 24 ss.).
embargo la utilizo ya que la prensa escrita posee
hoy en día grandes equipos investigativos que no Pero si del ser humano se trata, tal como
se pueden soslayar. he anotado, el término naturaleza se vuelve
2
Remito para esto, entre muchas fuentes posibles, más gaseoso y complejo; es lo que sucede
a la Encíclica del Papa Pío XI “Casti connubi”,
en el caso de la sexóloga Dos Santos, por un
1930.
3
Desde luego este tema es espinoso: el de las
lado, y lo que entiende el mundo cristiano de
relaciones moral y derecho; no es este el lugar ella, por otro.
para tratarlo pero lo menciono por ser un tema
recurrente en el campo de la filosof ía del derecho.

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 107
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

II. Algo de historia acerca de la de Aquino no entendió tales derechos natu-


idea de naturaleza humana rales en un sentido absolutamente pétreo: los
especialmente en el terreno derechos naturales para él deben adaptarse
circunstancial e históricamente, aunque sin
del derecho natural destruir su núcleo esencial5.
No sobra decir algunas pocas cosas sobre Todavía en la Ilustración en el siglo XVII,
la naturaleza, ante todo relacionadas con el algunos autores aceptan la existencia de un
derecho natural en algunos pensadores, antes derecho natural: el de conservar la vida en
de abordar a Sandel directamente. caso de ser atacada, según Hobbes6, y el de
Aristóteles en la antigüedad (s. IV a. de propiedad, en tres expresiones o modalida-
C.) comprendió la existencia de un derecho des: posesión, libertad, y vida, según Locke
natural como un derecho universal (Aristóte- (Locke, Segundo tratado, 2006, p. 124).
les, Ética a Nicómaco, 1981, pp. 58 ss.); en tal Ya en época del contrato social, el dere-
sentido la naturaleza humana sería igual para cho natural clásico empieza a olvidarse, y
todos, y de ella se engendra una justicia, cosa comienza el reinado del iuspositivismo, al
que, admirablemente a pesar del paso de 24 menos moderado: casi todo el derecho será
siglos, se replicó en 1948 con la Declaración el resultado paulatino en el tiempo de dicho
Universal de los Derechos Humanos después contrato social (debería, a mi juicio, llamarse
de las atrocidades del nazismo conocidas por contrato político).
toda la humanidad4.
La Iglesia Católica como institución, será
Cicerón en Roma, en el siglo I antes de principalmente, sin desconocer a algunos
Cristo igualmente entendió la existencia de un autores laicos7, quien defienda, tiempo
derecho natural común a todos los hombres,
basado en una naturaleza humana transversal
a todo ser humano. El derecho romano en 5
Cfr. Sancho, Hervada, o.c., pp. 204-205; esta
general no fue distinto a esta postura. adaptabilidad histórica también la encontramos
en Aristóteles en su Ética a Nicómaco al tratar
Santo Tomás de Aquino en el siglo XIII de la justicia (o el derecho); tal amoldamiento,
entendió a su turno la existencia de una “ley llamado equidad, es uno de los aspectos más
natural” en el hombre, expresada en cuatro importantes del derecho natural clásico, y sin
tendencias: la de conservación de la vida, la embargo desconocido por muchos tratadistas
modernos al tratar de él.
de propagación de la especie, la de asociación, 6
Cf. T. Hobbes, Leviatán, tomo I, Losada, Buenos
y la de la búsqueda de la verdad, en especial Aires, 2004, p. 132. Hobbes en Leviatán contempla
sobre Dios (Sancho, Hervada, Compendio, el concepto de leyes naturales, distinto al de ius
1980, p. 200). Ese sería el origen –tal ley natu- naturale; las leyes naturales son las que podrían
ral- de los derechos fundamentales a la vida, a llamarse “virtudes”, como la prudencia (cf. cap.
XXVI, num. 4º).
formar una familia, a asociarse, y a la libertad 7
Entre esos autores laicos cabe destacar a Michel
conciencia y de cultos. Desde luego Tomás
Villey, Miguel Sancho Izquierdo, Javier Hervada,
Sergio Cotta, Francesco D’ Agostino …;
Francesco D’Agostino, por ejemplo, en su obra
4
La idea de derechos humanos universales no es Filosof ía del derecho, destaca como derechos
pacífica o unánime universalmente. naturales universales, el respeto por los padres,

108 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

después, la existencia del derecho natural, tomando “decisiones”, ante todo en el campo
especialmente desde 1891 con la encíclica político –aunque también personalmente-,
Rerum novarum, del Papa León XIII, hasta mediante el debate en la polis. Es tanto como
nuestros días. decir que la naturaleza humana corpórea no
Lo anterior muestra que la existencia de un es un concepto férreo, sino sujeto a discusión
derecho natural, un derecho básico, un dere- racional. Esa idea se encontrará en toda su
cho común a los hombres por el mero hecho obra.
de ser hombres, es una intuición de al menos Sandel inicia con un ejemplo concreto de
24 siglos de antigüedad, un “patrimonio de la naturaleza corpórea del hombre8: el de la
la humanidad” podría decirse en expresión VIDA HUMANA (biológica, corpórea, que
ya común hoy en día, que debe, a mi juicio, es lo que aquí estamos tratando de seguir
reflexionarse, respetarse, valorarse, dialo- puntualmente); es el caso ficticio de qué debe
garse, so pena de desconocer el concepto de hacer quien maneja un tren y ve que hay cinco
humanidad, de tradición, de cultura, pues la personas en la vía a las que puede arrollar con
creación u origen del hombre no empieza con el tren porque se ha quedado sin frenos; pero
cada uno de nosotros sino que nos debemos en seguida ve una vía alterna a la que puede
a un pasado. desviarse para no arrollar a los cinco y en la
hay solo un hombre al que también puede
III. Sandel y su idea de naturaleza arrollar; lo que está en juego en ese ejemplo
son: ó cinco vidas humanas, ó una sola vida
humana corpórea
humana: ¿Qué opción tomar?
Entremos a ver cómo trata Sandel, en su libro
También supone Sandel un caso imagi-
JUSTICIA, la idea de naturaleza humana
nario similar: Hay un espectador mirando la
corpórea. Debo aclarar de entrada que dicha
escena del tren desde un puente y ve que hay
terminología –naturaleza humana corpórea,
un hombre gordo que también está junto a
es mía, no de Sandel-. Para ello haré un
él en el puente, y piensa: si lo empujo podría
seguimiento capítulo por capítulo del libro
detener al tren al caer con sus muchas carnes
fijándome sólo en los temas polémicos que
sobre la carrilera y así evitar la muerte de
dicho autor expone.

1. Capítulo primero: “Hacer lo que es


debido” 8
La naturaleza corpórea humana no es
independiente al espíritu o alma; para verlo
Para Sandel lo más “natural”, primero, o podemos recurrir a lo que el médico Claudio
propio del hombre, en este capítulo, es “la Aldunate, del programa “Salud emocional”, de
reflexión moral”, el tener que encontrarnos Fox Life, dice, y que la prensa escrita recogió con
el titular siguiente: “Lo que afecta a la psiquis,
ante “dilemas morales” que debemos resolver afecta al cuerpo”; y en el subtítulo se dice además:
“Sin salud mental no hay salud total pues cuerpo y
mente van ligados. Inviértale tiempo a su psiquis;
el precepto de no hacer con los demás lo que su cuerpo se lo agradecerá” (El Tiempo, 9 de
no se quiere para sí, la prohibición del incesto, abril de 2014, p. 2.). Desde luego, aquí tomamos
y el rechazo del canibalismo (cf. Filosof ía del como equivalentes, en sentido muy general y no
derecho, pp. 242 y ss.). filosófico, psiquis y alma-espíritu.

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 109
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

cinco a cambio de uno solo: Qué hacer, ¿lo en Afganistán; se encuentra con unos pocos
empuja o no? cabreros que pueden informar del paradero
Para afrontar estos dilemas, Sandel cita del terrorista: ¿los sueltan vivos o los matan si
tres posturas éticas relevantes para resolver no revelan dónde está? (pp. 31-37).
este caso acerca de la mera vida biológica (lo El comandante de la brigada se dejó llevar
que aquí llamamos natura corpórea humana): en este caso de su “alma cristiana” y no mató
la utilitarista del bienestar, la libertaria indi- a los cabreros, pero de ello se arrepintió
vidual, y la de la virtud o ética de lo bueno9. después, ya que a la hora y media de haberse
Aquí se ve, pues, cómo la vida humana bio- encontrado a los cabreros llegaron 180 taliba-
lógica, un concepto aparentemente pacífico nes y atacaron al comando y varios murieron
o estable, está sujeto a discusión, no es tan (p. 36).
obvio. Mirando hacia atrás, el comandante (de
Dice nuestro autor que, desde la óptica apellido Lutrell) cree que ha debido eliminar
utilitarista del bienestar, se resolvería este a los cabreros para haber evitado la muerte
caso recurriendo al criterio de que hay “salvar de muchos de sus hombres (con lo cual de
a tantos cuanto sea posible” (p. 34); por tanto virtuoso –por su alma cristiana-, pasó a una
la salida sería arrollar al hombre solo para ética del utilitarismo: la que sostiene que
salvar a los otros cinco; desde la óptica de la es preferible salvar a muchos en lugar de a
teoría de la libertad individualista, el criterio pocos) (pp. 36-37).
para resolver esta tesitura sería la de que ¿Quién triunfa al final de estos dos debates:
“está mal matar a un inocente aun por una el utilitarismo, el liberalismo individualista, la
buena causa” (p. 34), por tanto, la salida sería virtud? Creemos que la posición ganadora,
la opuesta: no habría que arrollar al hombre en general, es en estos casos esgrimidos por
solo; y acerca de qué diría la ética de la virtud Sandel, el utilitarismo; se podría expresar
para este caso, Sandel no expone posición así: el mayor número de vidas que puedan
alguna (lo cual no deja de sorprender un salvarse, prefiere a las pocas vidas que queden
poco, aunque ya sabemos que lo nuclear en a salvo; ¿es el eco de aquel viejo principio
Sandel en este capítulo –lo dijimos ya atrás- que dice que “el bien general prima sobre
es decirnos que en el mundo personal y en el particular”?; es algo así como que Sandel
el político debemos recurrir al debate, a la deja a cada quien la decisión al respecto,
reflexión crítica de las posturas éticas). pero siempre y cuando vaya precedida de
Trae además el caso real -también una reflexión concienzuda, tal como he dicho
relacionado con la VIDA CORPÓREA desde el inicio.
HUMANA- de los cabreros afganos: una Como vemos, en los dilemas morales, en
brigada estadounidense busca a Bin Laden la reflexión moral, según Sandel ya aparece
en estas primeras páginas el problema de
9
Cf. M. Sandel, o.c., pp. 29-31. En adelante, las la vida humana corpórea. Pero en Sandel
páginas de la obra de Sandel las citaré entre no se avizora que lo “primero” sea esa vida
paréntesis a continuación del texto que comente humana corpórea en sí, sino el tener que
salvo cuando vayan seguidas de algún comentario,
“resolver dilemas morales” en las distintas
caso en el que la haré a pie de página.

110 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

circunstancias, mediante un debate racional; en los ejemplos anotados (el del tren que se
es tanto como decir que no debemos ser queda sin frenos y el de la brigada que busca
acríticos o dogmáticos con nuestros propios a Bim Laden), lo realmente central en Sandel
principios o creencias éticas, sino que, desde es la necesidad de resolver dilemas mora-
luego valorando lo humano natural corpóreo les sobre todo en relación con los demás,
como es la vida, tomar conciencia reflexiva de tomando como referentes éticos al menos
ella en una discusión racional. tres escuelas: la que privilegia el bienestar, la
que pone el acento en la libertad individual,
Es tan importante para Sandel la reflexión
y la que enfatiza en la virtud personal. Dicho
moral -“natural” en la vida personal y ante
de otra manera: “por encima” del concepto
todo en la vida de la polis-, que ella es el
de “naturaleza” corpórea humana (que, tal
“inicio” o el comienzo de la filosofía10.
como dije al comienzo de estas reflexiones,
Es de anotar que junto al tema de la vida hoy en día es discutido), Sandel ubica la dis-
humana biológica, Sandel trae a continuación puta, el razonamiento, la argumentación, la
otro tema relacionado con la naturaleza reflexión, el debate, entre las distintas visio-
corpórea humana: el del MATRIMONIO nes filosófico-éticas.
DE PERSONAS DEL MISMO SEXO (p. 41).
Pero Sandel lo plantea sin más, lo enuncia, 2. Capítulo segundo:
sin entrar a debatirlo, y sin traer a colación la “El principio de la máxima felicidad.
respuesta de las tres visiones éticas menciona- El utilitarismo”
das; la tarea, podríamos decir, nos compete a
En este capítulo encontramos el caso del
nosotros sus lectores, tomando como puntos
CANIBALISMO, de la antropofagia (tema,
de referencia las éticas expuestas: la del
por tanto, relacionado con nuestro objeto
bienestar, la de la libertad, y la de la virtud;
de estudio: la natura corpórea humana). No
tal es propósito de Sandel como lo he venido
sobra decir de mi parte –ante un caso tan
diciendo; el auto-debate y el hetero-debate de
llamativo como este del canibalismo- que el
la ética.
hombre es capaz de cualquier cosa; la ética
A manera de síntesis de este capítulo, nace justamente pare dar una respuesta ante
aunque la referencia a la vida humana aparece ese tipo de posibilidades humanas.
Ocurrió en Alemania (tengamos en cuenta
10
Cf. p. 39. Dice textualmente Sandel: “Sentir la
fuerza de esa confusión (se está refiriendo a los
que se trata de un país desarrollado; no se trata
dilemas morales), y la presión por despejarla, es de un país “salvaje”, lo cual ya dice mucho de
el impulso que nos lleva a la filosof ía”. Por cierto este caso); alguien se ofreció para ser comido,
esta idea me parece muy interesante en la medida y no faltaron los demandantes para comer su
en que, al menos para mí, el inicio de la filosof ía cuerpo11; uno de ellos, finalmente, se comió al
siempre lo había entendido en la pregunta ¿qué
es?, es decir, ¿qué la da consistencia a toda la
oferente de su cuerpo; en primera instancia
realidad que nos circunda?: es la cuestión de que
la filosof ía se ocupa por la totalidad, lo universal 11
No se trata de una necesidad de sobrevivencia,
(cfr. M. García Morente, Lecciones preliminares como el que ocurrió, por ejemplo, con los
de filosof ía, p. 12; en el mismo sentido podemos sobrevivientes de los Andes en los años 70s del
ver a José Ortega y Gasset en su obra: ¿Qué es la siglo XX, cuando un avión cayó en esa cordillera
filosof ía?, p. 73). suramericana, murieron unos pasajeros, otros

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 111
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

el caníbal no fue condenado penalmente por corpórea); es un neo-epicureísmo, un hedo-


no existir tipificado el delito, pero luego sí fue nismo (propios de los griegos, pero resurgido
condenado a una alta pena por considerarse en el siglo XIX con Bentham); así pues, para
que la conducta caníbal atentaba contra Bentham lo natural humano no es la “virtud”
“valores primigenios”12. (tan propia de aristotélicos, estoicos, y cris-
¿Tal canibalismo va en contravía de la tianos, que la sitúan por encima del mero
naturaleza humana? ¿Se opone el ser humano placer físico), sino lo “instintivo”; una especie
por naturaleza a la antropofagia? ¿El respeto de naturaleza primitiva, meramente animal13.
al cuerpo humano es un derecho natural que Desde luego la postura benthamiana se pone
impide ser comido? Tal parece, si nos atene- en conflicto concretamente con el cristia-
mos, al menos, a lo que Francesco D’Agostino nismo, para el que “la cruz” de Cristo es una
recoge en una obra suya; en efecto, allí leemos especie de naturaleza elevada, depurada, muy
que entre las “normas universales”, además por encima de las solas pasiones naturales, de
de la prohibición del incesto, del honrar a los los meros deseos carnales.
padres, y de la ley de la reciprocidad, existe Además, Sandel recuerda que la utilidad
como norma universal el rechazo del cani- según Bentham es la utilidad del grupo, la
balismo; leamos sus propias palabras: “Un cual prevalece sobre lo individual humano;
ejemplo de extremo interés… es el del tabú piénsese en los ejemplos que trae a colación
del canibalismo… el tabú de la antropofagia Sandel para explicar esto: el gozar del espec-
es considerado universal… El resultado del táculo de los romanos (placer físico), estaba
trabajo de Arens es que el tabú de la antropo- por encima del dolor y la vida (biológica) de
fagia es una norma efectivamente universal…” los primeros cristianos (p. 49); o también
(D’Agostino, Filosofía, 2007, pp. 247-248). siguiendo a Bentham, la tortura (cuerpo) está
Y el mismo Sandel deja la impresión de por encima de una bomba que puede aniqui-
que también es contrario a tal canibalismo: lar a muchos (pp. 49-50).
¿una impronta en él de tipo “iusnaturalista”? Y ya entrados en la posición del propio
En este mismo capítulo Sandel trae a Sandel, éste se opone al ejemplo de la tortura
colación a Jeremías Bentham, padre del aun en el caso de salvar muchas vidas si se
utilitarismo; basado en una cuestión natu- trata de un inocente o incluso de un terro-
ral humana -y por qué no decirlo, propia rista14. Así vamos viendo cómo se aleja del
de todo ser viviente-dice Bentham que el utilitarismo de Bentham.
hombre rechaza el DOLOR FÍSICO y está a
favor del PLACER FÍSICO (vuelve a surgir
nuestro objeto de estudio: la natura humana 13
El cristianismo siempre ha superpuesto el esfuerzo
humano, en aras de valores superiores, por
encima de lo meramente natural a primera vista;
sobrevivieron, y éstos, por necesidad de vivir, aquí se da una elevación de la naturaleza humana,
comieron de los cadáveres de los muertos. la pecadora; de esto trata muy claramente san
12
Dejamos al lector el debate de derecho penal Pablo en su Epístola a los romanos.
según el cual la sanción está por encima del 14
Cf. p. 51. Esta postura ilustra –de paso- la
principio de que no hay pena sin ley penal que la solución sandeliana para el caso del tren del
tipifique. capítulo primero antes visto.

112 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

Pero, además, volviendo al utilitarismo último es lo que se desprende de Sandel, pues


benthamiano, éste traduce todo a valor destaca a John Stuart Mill sobre Bentham, en
monetario (pp. 53 y ss.): ¿esto no es en alguna cuanto que los “deseos” e “impulsos” están
medida ir contra la naturaleza del hombre en por debajo del llamado “carácter” (¿podrá
quien hay valores irreductibles a dinero?15 traducirse por virtud?: creemos que sí) (p. 64);
En este orden de ideas, la empresa de por eso no es correcto decir que John Stuart
tabaco, Philip Morris, con tal de vender ciga- Mill es una mera continuación de Bentham, o
rrillos en la República Checa, hizo un estudio una especie de Bentham II17.
que la favorecía: era menos lo que la República De esa manera Mill es más próximo al tra-
Checa gastaba en SALUD (cuerpo), que los dicional concepto aristotélico de virtud, por
ingresos económicos que ganaba por la venta cuanto tal “carácter” muestra una naturaleza
de tabaco; y menos incluso lo que gastaba en humana más elaborada o virtuosa. Lo ante-
salud que lo que se ahorraba con los muertos rior se corrobora de alguna manera con el
por tabaco. principio de Mill de que uno es libre de hacer
Todo eso es utilitarismo en lo monetario lo que quiera siempre que no perjudique a los
(p. 54). Y Sandel se opone a ese reduccionismo demás (pp. 61-62). También se corrobora tal
económico, diciendo que el análisis moral del predilección de la naturaleza virtuosa cuando
tabaquismo debe tener en cuenta tanto lo dice que hay placeres más elevados que otros,
propiamente fiscal como la salud pública y el con base, no en la “intensidad física” del
bienestar humano (cuerpo)16. placer, sino en su “calidad”18.

Pero este segundo capítulo trae más 3. Capítulo tercero: “¿Somos nuestros
historias en torno al principio utilitarista propios dueños? El libertarismo”
de privilegiar los “costes” (o costos como
Lo que extraeré de este capítulo, por supuesto,
decimos en Colombia) sobre los beneficios
tendrá que ver con el cuerpo humano; no
humanos en su más alto sentido; ¿qué hacer
perdamos de vista nuestro objeto de estudio,
entonces? ¿Todo es economía? ¿Se debe
no sin advertir que el cuerpo humano no
perder un poco económicamente para ganar
puede entenderse totalmente separado de su
en otros valores estrictamente humanos? Esto
espíritu tal como ya dije atrás.
Los “libertarios” se oponen a las leyes
15
Precisamente Michael Sandel acaba de publicar que protegen a las personas del daño que
un libro que tiene como idea central la de que el puedan hacerse a sí mismas en su cuerpo (p.
mercado no puede comprarlo, que no todo tiene
precio monetario; efectivamente -digo yo-, hay
73); tampoco es del agrado de los libertarios
cosas que no lo tienen: vgr. la vida, la conciencia las leyes que prohíben la “prostitución de
humana.
16
Cf. p. 54. Aquí se pone de presente, en Sandel,
una tesis que he defendido: todo reduccionismo
17
Cf. pp. 64, 68. Es uno de los aportes más
es pernicioso; tal reduccionismo es característico interesantes de Sandel en esta obra que
de la Modernidad, la cual empezó por hacer estudiamos.
reduccionismos como el de la sola razón 18
Cf. p. 66. ¿No es el carácter una aproximación
(Descartes), o el de la sola materia (Marx), o el de también a la escala de valores de M. Scheler? (cf.
la sola política (Hobbes). M. García Morente, o. c., p. 381).

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 113
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

adultos” (cuerpo), y no son adversos tampoco siguiendo- que el libertarismo no es que


a las “prácticas homosexuales” (cuerpo), al acepte una libertad “ilimitada”, pues cree que
“aborto” (cuerpo), a los “derechos de los gays” el Estado tiene algunas obligaciones o debe-
(en lo que tiene que ver con el cuerpo), y a los res sobre los individuos: obligar a cumplir
“derechos reproductivos” (cuerpo) (p. 74). los contratos, proteger del robo, mantener la
Por el contrario, sigue diciendo Sandel, paz (p. 73). ¿Qué decir de esta postura ética?
los “conservadores”, no apoyan el “aborto” Nuestro deber es pensar estas cosas, en su
(cuerpo) (p. 74). fundamento moral, no lo olvidemos, según
Sandel.
Vemos ahí dos posiciones éticas encontra-
das: una liberal, otra conservadora, en materia Sigamos. Sandel, apoya el libertarismo
del cuerpo humano. El libertario defiende el como fuente de los derechos fundamentales,
dominio de cada uno sobre sí mismo en su y tal vez por eso rechaza las leyes que castigan
cuerpo; el conservador sostiene lo contrario; el “adulterio” (cuerpo), apoya la libertad para
¿quién tiene la mayor proximidad a la verdad “vender órganos” (cuerpo), y apoya también el
moral? “suicidio asistido” (cuerpo); vamos así viendo
cómo toma posiciones éticas, y no solamente
Un “trabajo forzado” (cuerpo) (p. 80),
invita al debate ético; pero a continuación
seguirá diciendo un libertario, no me deja
de esta tomas suyas de postura éticas afirma
elegir, por tanto es rechazable moralmente.
que debe tenerse “prudencia” en ese tipo de
Si yo tengo dos riñones (cuerpo), no se me
casos19.
puede obligar a “donar” uno al que lo necesita
(p. 81), sigue diciendo. Es por ello que al “vender riñones” se
requiere prudencia –sigue diciendo nuestro
De otra parte, ¿se puede gravar tribu-
autor- ya que el propósito del comprador
tariamente más a Michael Jordan para dar
puede ser otro distinto a salvar la vida (p.
“alimentos a los hambrientos”? (cuerpo). Un
86); y se requiere prudencia también porque
libertario dirá que no, que eso atenta contra
al vender riñones se arriesga la vida solo por
la libertad individual (pp. 77 y ss.).
darle estudio al hijo de quien los vende (p.
Sandel trae después una “objeción” a ese 86). Ello demostraría, según Sandel, que el
libertarismo diciendo, en el caso concreto derecho al propio cuerpo no es ilimitado tal
de Jordan, que éste posee dotes naturales como lo sostienen los libertarios (p. 86).
por encima, o al menos junto, a su libertad
(p. 83), dejando entrever con ello –se me A continuación de estas consideraciones
ocurre a mí-, que la libertad debe ser mirada nos lleva al tema del “suicidio asistido”
en equilibrio con otros factores (en este (cuerpo), practicado por el doctor Jack
caso con lo natural), y, por tanto, el gran Kevorkian (p. 87). Dice que a primera vista
basquetbolista Jordan podría ser gravado con dicho suicidio asistido es una expresión del
mayores impuestos en aras de dar de comer
a hambrientos excluidos injustamente por la 19
Cfr. pp. 84-85. No sobra decir que el método
sociedad. sandeliano en la materia que estamos viendo –la
moral y más concretamente la ética política- es
Llegados a este punto debo decir en honor dialéctico, tal como lo deja ver al comienzo de su
a los libertarios -ajustado al texto que estoy obra (cfr. p. 41).

114 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

libertarismo moral. Sin embargo, Sandel dice que no es obligatorio pero sí remunerado ese
que el apoyo a dicha práctica no es sólo “desde servicio militar?
la libertad” sino también desde la “dignidad” Al examinar qué servicio militar es mejor:
y la “compasión” (pp. 87-88). si el obligatorio, el sustituto, o el profesional,
Termina Sandel este capítulo con el tema Sandel recuerda que para un libertario el
del “canibalismo pactado” (cuerpo) (p. 88). servicio militar es una forma de “esclavitud”
Para él el canibalismo pactado es una forma (cuerpo), pero además, peligrosa porque
“extrema” (¿imprudente?) de suicidio asistido expone la vida (cuerpo) (p. 95). Sandel está
(p. 89), ya que no está de por medio la compa- de acuerdo en principio con esta postura,
sión, sino el ser dueño absoluto de sí mismo. la de que es una forma de esclavitud, con el
En este último caso recuerda la historia agravante de que esas vidas expuestas son
punitiva del caso en Alemania: primero se ante todo las de de los menos favorecidos
dijo que por ser pactado no ameritaba pena económicamente (pp. 97-99).
alguna; después se dijo que no era un asesi- El contrapeso al servicio militar obliga-
nato sino máximo un suicidio asistido que torio es que tal servicio es expresión de una
tenía por pena unos años de cárcel; después virtud cívica (aunque algunos plantean que el
se condenó a cadena perpetua al asesino por servicio al país podría bien realizarse a través
la gravedad del caso. de otras actividades; aunque esto puede
Ello muestra que existe una conciencia considerarse un tanto utópico en la medida
de rechazo al canibalismo así sea pactado; en que existen guerras, digo yo); pero además
¿no coincide esa conciencia con lo que de eso –el servicio militar como expresión de
D’Agostino dice en el sentido de que la huma- virtud cívica- Sandel trae a colación el argu-
nidad rechaza esta práctica? (Cf. D’Agostino, mento de David M. Kennedy (pp. 102-103),
o.c., 2007, p. 247). según el cual al ser el servicio militar algo
profesional y voluntario, ello ha disminuido
4. Capítulo cuarto: “Ayuda de pago. su número de integrantes, razón por la cual,
Mercado y moral” por ejemplo en Estados Unidos, ir a la guerra
es menos probable.
Aparece de entrada nuevamente la vida
biológica humana (cuerpo), a raíz del tema Sandel también apoya el servicio militar
de la tasación de la vida humana (precio como lo concibe Juan Jacobo Rousseau, para
monetario) para eximirse del “servicio militar quien es asunto de supervivencia del Estado
obligatorio” (pp. 90-92). (p. 103). Pero Sandel va más lejos al decir: el
servicio militar, volviendo de alguna manera
Hoy en día el servicio militar en Estados al libertarismo, se apoya en la libertad más
Unidos no es obligatorio, es profesional, vital del ser humano: por ejemplo la Legión
voluntario, pero los contribuyentes financian Extranjera en Francia y el mismo E.U., con-
ese servicio por arriesgar sus “vidas” (cuerpo) sideran que el servicio militar, no es asunto
por el país, debido a las guerras (p. 92). ¿No es sólo de virtud cívica, sino asunto de querer, de
eso también tasar la vida humana corporal de subsistencia, de trabajo (como cualquier otro
otro? ¿No es ponerle precio a la vida corporal trabajo) de personas que no son ciudadanos
humana, cuando se va a la guerra, a pesar de

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 115
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

ni franceses ni estadounidenses, sino eso, fueron los del libertarismo y los del utili-
extranjeras (p. 105); lo anterior lleva a pensar tarismo, es decir, sobrevalorar la libertad
cómo el trabajo se vuelve incluso superior al contractual (libertarismo) y el bienestar
patriotismo (digo yo). general (utilitarismo); pero… ¿en qué puede
A continuación Sandel aborda otro caso tener razón la segunda instancia? La obje-
de naturaleza corporal humana: el de las ción de la falta de consentimiento pleno se
madres sustitutas (pp. 108 y ss.) a cambio refiere a que el consentimiento debe estar
de una retribución económica. El caso que libre de presiones indebidas (por ejemplo la
expone es el siguiente: una pareja de casados necesidad de dinero) y debe estar provisto de
quiere tener un hijo, pero la esposa, por sufrir buena información (p. 113). Y respecto de la
esclerosis, corre riesgos para su salud si lo segunda objeción, esto es, la de que hay casos
tiene: entonces contrata otro vientre por una que el dinero no puede comprar, se basa en
paga económica, pero, al dar a luz el hijo con que tratar a los niños como mercancías los
semen del marido, la madre sustituta se niega degrada, no los valora.
a entregar el hijo de su propio vientre. ¿Qué Hay cosas, dice Sandel, que se pueden
hacer en ese caso?; el primer argumento es valorar económicamente (por el uso, la
el de que “trato es trato”, y se debe cumplir; fabricación, etc.), pero cosas que no, como el
pero en seguida vienen dos objeciones: a) es ser humano, pues el ser humano es digno de
un contrato “sui generis”, donde se saben las respeto, no un objeto cualquiera que se usa
cosas al principio, pero no se sabe qué pasa (p. 114); una cosa es el respeto, y otra el uso,
al momento del parto; b) un niño no es una dice nuestro autor. Y citando a la filósofa Eli-
mercancía (p. 109). zabeth Anderson, dice Sandel que hay bienes
Dice nuestro autor que el juez que conoció de diferente naturaleza (p. 115). Pero además,
este caso falló a favor del argumento de que cita el argumento de que hay “normas supe-
trato es trato y se debe cumplir. En grado riores” que existen para el hombre como lo
de apelación al Tribunal Supremo de New es la libertad: los seres humanos somos libres
Jersey, se determinó -por el contrario al juez -no simples objetos-, por lo que las personas
de primera instancia-, que el contrato inicial somos seres humanos, y los objetos son obje-
era inválido, y dejó la educación en manos de tos (pp. 115-116). Norma superior es también
la pareja, y la madre sustituta con derecho aquella que está marcada por fines y propó-
de visita. Además, el Tribunal Supremo dijo sitos: recuerda que Anderson afirma que la
que el contrato no fue válido por no haber un maternidad busca (fin) la relación emocional
consentimiento pleno, y, que por tanto, supo- con el hijo (p. 116), y si no se protege esa
nía la venta de un niño: “Hay cosas –en una norma parental se termina protegiendo una
sociedad civilizada- que el dinero no puede norma comercial.
comprar” (p. 111). Finalmente, Sandel dice que la “subroga-
Dicho lo anterior, entra Sandel a evaluar, ción de vientre y óvulo” se ha extendido a la
cuál de los dos jueces tiene la razón, si el de fecundación in vitro pasada a vientre sustituto
primera instancia o el Tribunal Supremo. (sin óvulo), sin la vinculación estrecha que
Respecto a la primera instancia, dice Sandel produce el óvulo. Tal facilidad ha producido
que los criterios que se tuvieron en cuenta más alquileres y sobre todo en países pobres

116 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

(para obtener una ganancia) (pp. 116 y ss.), y en que seamos dueños de nosotros mismos
esas madres gestantes instrumentalizan sus (como los libertarios radicales), o en que
cuerpos y su capacidad reproductiva (p. 120). nuestras vidas y libertades sean don de Dios
Para Sandel, pues, ¡hay cosas que no se (Locke), sino en que somos seres racionales,
pueden comprar! merecedores de dignidad y respeto21.
Termina Sandel esta especie de introduc-
5. Capítulo quinto: “Lo que cuenta es ción al capítulo quinto recordando que hasta
el motivo. Inmanuel Kant”. el momento se han visto dos teorías de lo
Sandel empieza diciendo que si se cree en los justo: la utilitarista y la libertaria, y que más
derechos humanos como universales, enton- adelante traerá a colación la postura moral
ces no se puede ser utilitarista (por cuanto aristotélica, basada en la virtud. Dice que
el utilitarismo solo acepta el criterio de la Kant no comparte ni la teoría utilitarista ni la
mayoría, no de la universalidad)20. aristotélica, y comparte, sí, la libertaria pero
haciendo de la libertad algo más exigente,
Por el contrario a los utilitaristas, dice más elevado (p. 124).
Sandel, los libertarios pueden aceptar esos
derechos como universales, ya que todo ser Antes de abordar esa libertad “exigente”
humano es dueño de su vida (cuerpo), de su kantiana que se acaba de mencionar, Sandel
trabajo y de su persona (p. 121). Ahora bien, recuerda el enfrentamiento kantiano al
recuerda, los libertarios no son la perfecta res- utilitarismo: lo ataca porque los derechos
puesta a la pregunta de cuál es el fundamento humanos no pueden –según Kant- basarse en
moral de los derechos humanos universales,
por cuanto, como se vio, aceptan el caniba-
lismo pactado (cuerpo), o el venderse a sí
mismo como esclavo (cuerpo), si se es libre 21
Cfr. p. 122. Ese es el fundamento supremo de la
de aceptarla (p. 122). moral, según Kant, porque es, esa racionalidad,
común a todos los hombres, así como en
Pero por otra parte, dice, un liberal como
que somos autónomos, independientemente
Locke, no acepta el derecho ilimitado a ser de nuestra creencia en Dios. Pero ante eso
dueño de sí mismo (como sostienen los liber- nos podemos preguntar: ¿de dónde viene la
tarios), con el problema de que fundamenta racionalidad humana? El mismo Kant llega a
el derecho humano universal en Dios, lo aceptar por vía racional la existencia de Dios,
claro está que en el plano puramente moral,
cual lleva a preguntarse a su turno por cuál
como lo recuerda García Morente (Cfr. Lecciones
sería el fundamento de esos derechos para preliminares de filosof ía, p. 308 y ss.). Y si vamos
los no religiosos (p. 122). Para responder ese al existencialismo abierto a la trascendencia
interrogante, Sandel recurre a Kant, quien (Kierkegaard, etc.),… ¿no cabe la vuelta a un
no basa los derechos humanos universales Dios creador de todos los hombres, como en la
Antigüedad y como en la pre-modernidad, que
también lo aceptaban? Desde el punto de vista
20
Al respecto podemos citar también el libro de las Constituciones Políticas, la aceptación de
“Utilitarismo y derechos naturales”, de Herbert Dios es notoria; es decir, es más amplia que lo
L. A. Hart, en el que recuerda la negación de puramente filosófico, y por eso, el Preámbulo de
los derechos naturales por parte del utilitarismo muchas Constituciones Políticas laicas, como la
benthamiano. colombiana, invoca a Dios.

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 117
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

el placer (corporal), como dice el utilitarismo, por conciencia del deber (pp. 132-133) (el
ni en la mayoría22 también utilitarista. ejemplo de conservar la vida es del mismo
Entremos pues al tema anunciado, el de Kant).
la libertad exigente kantiana; para el filósofo Y… ¿cuál es el fundamento de la liber-
de Königsberg la libertad está más allá de la tad en Kant? Respuesta: la razón pura (p.
naturaleza (cuerpo) (p. 127) y de lo social; 133); después de diferenciar el imperativo
la libertad es autonomía, con lo que se hipotético (condicionado) y el imperativo
matricula en la separación entre ser y deber categórico (no condicionado), dice que en
ser23; Kant está ubicado en el deber ser; para este último, el categórico, radica la esencia
Kant la naturaleza/ser perturba la libertad, la racional moral (pp. 137-139), cuyas expre-
limita; y lo mismo podría decirse de lo social. siones más elevadas son: 1.- universaliza
No debe mirarse lo de fuera –lo social- sino a tu máxima, y, 2.- trata a las personas como
la persona “en sí”, pues la persona es “fin en sí fines (pp. 139-142). Y es precisamente en la
misma” (p. 129). máxima de tratarse a sí mismo y a los demás
Mirando a la persona en sí, adentro, lo como fin, no como medio, donde Sandel trae
primordial en Kant es la intención, el motivo, a colación una referencia corporal humana
no las consecuencias de la acción (p. 129). Sin diciendo: “Lo interesante ahí es darse cuenta
embargo, la intención debe seguir a lo que es de que tanto el “asesinato” (cuerpo), como el
debido, y lo debido, según Kant, son los prin- “suicidio” (cuerpo), no se compadecen con el
cipios puros (pp. 130-132) (no los resultados; principio categórico, y por la misma razón”
con lo cual Kant pasa a ser un rigorista moral, (p. 141); y sigue diciendo en la misma línea:
el de la elevada libertad según Sandel, el de la “Para Kant, el suicidio está mal por la misma
pura intención). razón que está mal el asesinato. Ambos tratan
A continuación trae la diferencia kantiana a las personas como cosas y no respetan a la
entre deber (por principios) e inclinación, por humanidad como un fin en sí misma” (p. 142).
ejemplo la de “conservar la vida” (cuerpo); Asesinato (cuerpo) y suicidio (cuerpo),
claro está que a veces deber e inclinación se pues, no respetan a la humanidad propia ni
confunden, pero lo importante ante todo es a la humanidad del otro. Esto es capital para
ser “consciente” de las cosas, en este caso, de fundamentar los derechos humanos univer-
mantener la vida, de no suicidarse (cuerpo), sales, y por eso dice: “Actuar libremente, es
decir, autónomamente, y actuar moralmente,
22
Podríamos decir que Kant en eso sigue a conforme al imperativo categórico, son una y
Aristóteles quien tampoco se reduce al placer la misma cosa” (p. 143).
corporal como fundamento de la ética; y un
pensador actual como Joseph Ratzinger coincide El punto referente a la preguntas a Kant
a su vez con Kant en lo concerniente a que las que formula nuestro autor en este capítulo,
mayorías no tienen la última palabra político- sin duda son muy recomendables para el
moral (cfr. J. Ratzinger, Verdad, valores, poder, lector de este escrito; son de una lógica muy
pp. 81 y ss.).
atractiva que ayudan a entender la moral
23
Remito a mi artículo: Llamado de la naturaleza,
Novum Ius, Universidad Católica de Colombia, kantiana; pero, en relación con nuestro
2011, pp. 81 y ss. tema –la naturaleza corpórea humana-, sólo

118 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

la cuarta pregunta a Kant guarda relación, ya y conocer las leyes… de todas sus acciones.
que Sandel trata de que el libre albedrío, o la Puede verse primero a sí mismo en cuanto
moral, incluso la kantiana, aun en el caso de pertenece al mundo sensible, sujeto a las leyes
que la ciencia llegara a afirmar que nuestro de la naturaleza (heteronomía); y en segundo
“cerebro” no es libre (porque está atado a la lugar, en cuanto pertenece al mundo inteligi-
ble, sujeto a leyes que, al ser independientes
corporeidad), la respuesta de Sandel es:
de la naturaleza, no son empíricas sino que
“…el libre albedrío no es de ese tipo de se fundamentan solo en la razón” (p. 146).
cosas que la ciencia puede probar o refutar.
Tampoco lo es la moral. Es verdad que los ¿Dónde se adscribe Sandel? ¿En el aristo-
seres humanos habitamos en el reino de la télicotomismo ó en Kant? Creo que en Kant,
naturaleza (podemos decir cuerpo, siguiendo a juzgar por las siguientes palabras de Sandel:
nuestra terminología). Todo lo que podamos “En cuanto ser natural, pertenezco al mundo
hacer se podrá describir desde un punto de sensible. Mis actos están determinados por
vista físico o biológico… pero, sigue diciendo las leyes de la naturaleza y las regularidades
de este autor, Kant dice que no podemos de la causa y el efecto. Este es el aspecto de la
evitar entendernos a nosotros mismos con- actuación humana que la física, la biología y
forme a ambos puntos de vista, el del reino la neurociencia pueden describir. En cuanto
de la física y la biología, y el del ‘inteligible’ ser racional habito en un mundo inteligible.
reino de la capacidad de actuar humana” (p. Ahí, al ser independiente de las leyes de la
146). naturaleza, soy capaz de ser autónomo, de
actuar conforme a una ley que me doy a mí
¿Lo anterior no muestra –sólo la ciencia
mismo” (p. 147).
demuestra- que la concepción kantiana de
libertad es, efectivamente, como dice Sandel, Sandel, pues, es kantiano ciento por ciento
altísima, purísima, elevada, espiritual, no en este punto.
condicionada por la naturaleza corpórea? A nuestro juicio este problema es múltiple:
Creo que sí. ¿Cómo independizo el mundo inteligible de
El problema de lo anterior es que pare- las leyes naturales? Claro está que frente a la
ciera ver Kant en la naturaleza corpórea una dificultad anterior de la separación natura y
especie de “adversario” o al menos un ser ratio, Kant y Sandel, no están demasiado lejos
“anónimo”, lo cual contradice, por ejemplo, la del realismo filosófico pues las dos versiones
posición aristotélica o tomista de la bondad del imperativo categórico, es decir, “universa-
del cuerpo, y sobre todo, la co-dependencia liza tu máxima” y, “trata a las personas como
de las dos realidades, esto es, cuerpo y alma, fines”, no son diferentes a los postulados
ya que ellos conciben al hombre como una morales de la tradición pre-moderna (cris-
unidad corporo-espiritual. He ahí el pro- tiana). En el fondo pensamos que coinciden.
blema kantiano a nuestro parecer, pues Kant La novedad kantiana es haber llegado al
independiza la razón respecto de cuerpo; mismo punto moral de una manera pura-
veamos las propias palabras de Kant a este mente racional, desde el pensamiento propio,
respecto, recogidas por Sandel: y no desde otros referentes. Esto no deja
“Un ser racional… tiene dos puntos de vista de ser un tanto misterioso y enigmático. El
desde los que puede contemplarse a sí mismo problema será que Kant –como Sandel- deja

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 119
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

de lado el “empirismo”, mientras que la pre- Así las cosas, ¿no se parecen estas palabras
modernidad lo admite en cierto grado: lo que de Sandel a las de Tomás de Aquino y en
conocemos comienza en los sentidos, dirá la general de los realistas? ¿No coinciden en sus
pre-modernidad, influyendo a la libertad y a conclusiones, así sus caminos y referentes
la moralidad conjuntamente. sean distintos?
Después de estas consideraciones al hilo de Ahora bien, si Kant rechaza el sexo
nuestra lectura, volvamos a Kant y a Sandel en informal, es apenas lógico que rechace la
el punto de la libertad kantiana en el terreno “prostitución” (cuerpo), tal como Sandel lo
del “sexo” (cuerpo) (p. 149). Sandel dice que recuerda (pp. 150-151).
Kant fue en este punto “conservador” (lo
Finalmente, frente al rigorismo o purita-
cual vuelve a mostrar la cercanía entre Kant
nismo sexual de Kant, Sandel dice que
y la pre-modernidad antes anotada), al grado
de concebir al sexo sólo desde dentro de la “…quizá esté equivocado el pensar que no
formalidad marido-mujer (p. 149) (también puede haber uniones así –perfectas- fuera
como la pre-modernidad cristiana). del matrimonio o que en las relaciones
sexuales fuera del matrimonio no hay nada
Sandel afirma que esta postura de Kant
más que gratificación sexual” (pp. 151-152);
muestra que no somos dueños de nosotros
pero, en seguida Sandel salva el principio de
mismos (la postura propia del libertarismo Kant según el cual lo que éste quiere decir es
radical); y eso es precisamente lo que concibe que hay una gran diferencia “entre una ética
la pre-modernidad: no somos dueños de del consentimiento sin límites y una ética
nosotros mismos por la libertad absoluta sino del respeto a la autonomía y dignidad de las
que estamos condicionados por el cuerpo. Lo personas” (p. 152).
dice Sandel en las siguientes palabras:
“En los debates actuales sobre la moral sexual, 6. Capítulo sexto. “En defensa de
quienes se refieren al derecho a la autonomía la igualdad. John Rawls”
sostienen que los individuos deben ser libres
A propósito del contrato social “ficticio”,
de escoger por sí mismos el uso que hagan
de John Rawls, Sandel se pregunta si todo
de sus cuerpos. Pero por autonomía Kant no
entendía eso. Paradójicamente, el concepto contrato es “justo” por ser contrato, es
de autonomía de Kant impone ciertos límites decir, por el mero acuerdo de voluntades
a la manera en que nos tratemos a nosotros contratantes, ó, si es justo por otras razones
mismos. Pues, recuerda, ser autónomo, es “anteriores” al mismo contrato, por ejemplo,
estar gobernado por una ley que me doy a mí por una Constitución Política; pero que sea
mismo, el imperativo categórico. Y el impe- la Constitución previa al contrato, deja el
rativo categórico requiere que trate a todas siguiente interrogante: ¿y qué hace justa a su
las personas (incluido yo mismo) con respeto, turno a la Constitución Política?
como un fin, no como un simple medio. Así,
para Kant, actuar autónomamente requiere Cita a este respecto a la Constitución
que nos tratemos a nosotros mismos con Política de E.U. de 1787 en la que se acep-
respeto y que no nos convirtamos a nosotros taba la “esclavitud” (cuerpo). ¿Dónde está la
mismos en objetos. No podemos usar el justicia de esa Constitución? (p. 164). ¿En la
cuerpo como nos apetezca” (p. 150). Constitución Política? Parece que no.

120 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

Es más, en la Constitución mencionada el ser del deber ser en el derecho). ¿O es que


no se permitió la participación política de la existe por el contrario a una justicia aquí y
“mujer” (cuerpo) (p. 164); así las cosas sos- ahora una justicia perenne, una fórmula de
tiene: “No hay garantía alguna de que ningún la misma que sea única? Eso iría en contra
contrato social o convención constituyente, del hic et nunc de la justicia que acaba de
por representativa que sea, produzca unos mencionarse.
términos equitativos para regir la coopera- En este tema nos encontramos con el de la
ción social” (p. 164). igualdad rawlsiana. Para eso se hizo la ante-
De esa manera nos preguntamos con rior introducción acerca de las fuentes de la
Sandel: ¿cuál es, entonces, la “fuente” de la justicia.
justicia? Porque como dice el mismo Sandel, Se contrapone a la igualdad, el tema de las
“A quienes creen que la moral empieza y ter- “castas”24, es decir, la desigualdad por naci-
mina en el consentimiento quizás les parezca miento (cuerpo) (pp. 175 y ss.). Frente a ellas
esa (la falta de garantía del mero consenti- –las castas-, se ensalza la ideología libertaria
miento) una aseveración chirriante” (p. 164). de igualdad de oportunidades, de educación
Y se sigue preguntando nuestro autor: libre, del mercado libre. Empero, ni siquiera
¿Bastan, como ingredientes del consenti- esa meritocracia basada en la educación es
miento, la autonomía y la reciprocidad? perfectamente justa: “Aunque trabajase a la
¿Serán éstas la fuente de lo justo? ¿Somos perfección en eliminar la influencia de las
plenamente autónomos siempre? ¿Siempre contingencias sociales”, escribe Rawls, el
se da la reciprocidad? (p. 166). sistema meritocrático “seguiría permitiendo
que la distribución de la renta y del patri-
Parece que no. monio esté determinado por la distribución
Es más, me puedo preguntar también: ¿son natural de capacidades y aptitudes” (p. 177).
la autonomía y la reciprocidad la fuente de lo Ahora bien, ni lo social (tipo castas), ni lo na-
justo? Porque yo autónomamente puedo ser tural, es justo; es, según Rawls, arbitrario (es,
injusto y puede también haber una recipro- creo, la crítica a lo natural de la filosofía pri-
cidad perversa, luego, ni la autonomía ni la
mitiva a que hice referencia):
reciprocidad, parecen ser fuentes de justicia.
Llegados a este punto recuerdo a Kelsen “Desde un punto de vista moral, las con-
cuando decía que la justicia no es una tingencias sociales y el azar natural son
igualmente arbitrarios” (p. 177).
respuesta definitiva (H. Kelsen, Qué es la
justicia, 2001, p. 8); y recuerdo también a Así, vemos en Rawls una diferencia entre
Benedicto XVI cuando dice que la justicia lo “natural físico” y la “moral”. La pregunta
es algo que debe responderse “aquí y ahora”
(Benedicto XVI, Deus, 2005, No. 28) (por
cierto, ¿no coinciden aquí, de alguna manera, 24
Algo similar a las castas fue la filosof ía primitiva,
Kelsen y Benedicto XVI? Sí; en otros puntos que consideró que lo “natural” es que el fuerte
natural era superior al débil natural. Lo anterior
disienten desde luego; por ejemplo, Bene-
se superó con un concepto de igualdad metaf ísico
dicto XVI criticó radicalmente a Kelsen en su (cfr. M. Beuchot, Filosof ía del derecho,
Discurso al Bundestag, en 2011, por separar hermenéutica y analogía, 2006, p. 16).

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 121
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

es entonces: ¿Cómo lograr esa igualdad “impuesta” (totalitarismo de Estado), desde


moral, más allá del azar natural, más allá luego tomando las medidas necesarias para
del mercado libre, más allá de la igualdad de disminuir la desigualdad como lo dice Rawls,
oportunidades, más allá de las oportunidades recurriendo a la idea de que se justifican
educativas? ciertas desigualdades siempre que sea para
Para responder, empieza Sandel recor- beneficiar a los desfavorecidos25. El resumen
dando que existe una “posibilidad igualadora”, de todo lo anterior es que si la igualdad fuera
a la que llama una “pesadilla igualitaria”; impuesta se terminaría negando la libertad.
contra ella, Rawls admite “el principio de dife- Igualmente habla Rawls de que no todo
rencia”, sin lastrar a quienes poseen (p. 179); es “mérito”; por ejemplo, lo deseable es el
(¿tal es el “principio de proporcionalidad”, de ingreso de etnias y razas desfavorecidas a la
Aristóteles, y que también Giovanni Sartori universidad así sus notas académicas no sean
defiende? (G. Sartori, Qué es la democracia, las mejores (p. 184); por eso Sandel dice:
1994, pp. 175 ss.): Creo que sí. “Rawls sostiene que la justicia distributiva
El “principio de diferencia” consiste en que no consiste en premiar la virtud o el mereci-
“solo se permitirán las desigualdades sociales miento moral. Por el contrario, consiste en
y económicas que reporten algún beneficio a que se satisfagan las expectativas legítimas
quienes estén en la sociedad en posición más que se producen una vez que se han instau-
desfavorable” (p. 174). rado las reglas del juego…” (p. 185).
Es tanto como decir, creo, que las castas “Reglas de juego”, pues, igual a “contrato
valen siempre que se favorezca a los más social”. Pero aun así, seguimos con la misma
pobres; pero parece que la realidad no es así pregunta: el contrato social… ¿cuándo o
en los regímenes de castas. cómo alcanza su más elevada justicia? He ahí
la cuestión. Joseph Ratzinger a este respecto
Ese “principio de diferencia”, pues, sería el
dice que hay una justicia pre-contractual,
elemento que controlaría el nacimiento des-
un sustrato de humanidad pre-estatal (J.
igual (castas) y las aptitudes naturales (p. 180).
Ratzinger, Verdad, 2005, pp. 38 ss.). ¿Es esta
Ese principio sería el elemento propiamente
moral (no natural o meramente instintivo), posición de Ratzinger la posición de Rawls?
fuente de la justicia (más allá de lo natural y Exactamente no; puede haber puntos de con-
de otros factores). tacto y puntos de diferenciación; pero no es
éste el espacio para entrar en esas semejanzas
Trae Sandel a continuación de este “antí- y diferencias entre uno y otro autor.
doto” –el principio de diferencia-, algunas
objeciones contra él; no creemos que valga Al contrario del criterio de Rawls, está el de
la pena detenerse en ellas para no recargar Milton Friedman, el vocero del “laissez faire”
esta reseña; simplemente me reduzco a decir del Gobierno Reagan, para quien “la vida no
que frente al “igualitarismo total”, la llamada es justa. Se siente la tentación de creer que el
también “pesadilla igualitaria”, vale una Estado puede certificar lo que la naturaleza
“cierta desigualdad” llamada el “principio de
diferencia”; lo cierto es que parece más desea-
ble una cierta desigualdad a una igualdad 25
Vgr. la estratificación de los servicios públicos.

122 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

ha engendrado…” (p. 189), y todos debemos Lo anterior como marco conceptual del
aprender a vivir así (p. 188). caso de este capítulo: el de la Universidad de
Recuerda una vez más Sandel una idea de Texas en Estados Unidos, la cual aplicando
Rawls famosa (frente a Friedman): la de que esta política –la acción afirmativa-, dejó
“la manera en que son las cosas no determina por fuera de sus aulas a Cheryl Hopwood
la manera en que deberían ser” (p. 189), en aras de recibir en ellas a estudiantes
palabras que nos expresan de alguna manera pertenecientes a minorías, así sus puntajes
que la moral está por encima de lo natural de exámenes académicos fueran similares a
desigual e inhumano. los de Hopwood, quien, finalmente, llevó su
caso a un Tribunal Federal por considerarse
Concluye Sandel este capítulo con estas víctima de discriminación.
palabras:
En este capítulo se mencionan otros casos
“Sea válida o no en última instancia esta similares: el caso Bakke, en 1978, en el que el
teoría de la justicia –la de Rawls- representa Tribunal Supremo de E.U. aceptó la acción
la defensa más atractiva de una sociedad
afirmativa (p. 191), y otro caso en el 2003 en
más igual que la filosofía política haya pro-
el que el Tribunal Supremo estableció que la
ducido jamás en Estados Unidos” (p. 189).
raza (cuerpo) se podía usar como factor “a
La naturaleza corpórea humana, para el tener en cuenta en las admisiones” académi-
caso las castas que es el ejemplo trabajado cas (p. 191).
por Sandel, es superada por el “principio de
Anota Sandel que contrariamente a la
diferencia”, frente al igualitarismo; en últi-
acción afirmativa, mediante referendos en
mas: sí a las diferencias cuando favorecen a
California, Whasington y Michigan, se han
los desfavorecidos según las reglas de juego
prohibido “preferencias raciales” en la educa-
pre-establecidas.
ción pública y el empleo (p. 192).
Así, la natura –por lo menos cierta
Así las cosas, ¿por cuál tesis optar: por
consideración de la naturaleza humana- es
la acción afirmativa que da preferencias a
superada por la moral política: la reflexión
minorías como las mencionadas, ó, por la
moral es lo más importante, tal como dijo
prohibición a las mismas? ¿Debe primar la
Sandel al comienzo del libro bajo estudio.
solidaridad ó el esfuerzo y el mérito? Es el
7. Capítulo 7: “Argumentos sobre la interrogante que deja a reflexión Sandel.
acción afirmativa” De mi parte creo que debe buscarse un
La acción afirmativa se puede definir como la equilibrio: es decir, algo de asistencialismo
política que da preferencia a los aspirantes a -acción afirmativa-, y algo de meritocracia;
alguna posición, sobre todo académica –pero pero… ¿cómo medir ese “algo”? He ahí el
que cabría aplicar a otras posiciones- que punto a dilucidar.
pertenecen a minorías (p. 190); ahí entran, Sigamos. El problema en E.U., sigue
por ejemplo, las minorías raciales y étnicas diciendo Sandel, es que en la Constitución
(cuerpo), o los afroamericanos y estadou- Política está consagrado el derecho a la “igual-
nidenses de origen mexicano (cuerpo) (pp. dad” (p. 192). Para resolver este problema, va,
190-191). a continuación, a exponer las razones morales

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 123
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

a favor de la acción afirmativa (en vez de su Sandel opone una objeción a este argu-
prohibición); ellas son: mento: rara vez beneficia al que realmente
ha sufrido una discriminación, y rara vez
1.- Corregir los exámenes estandarizados.
también, la paga quien la ha ocasionado
2.- Compensar injusticias del pasado. (p. 193). Hopwood, siguiendo con la obje-
3.- Promover la diversidad (p. 192). ción anterior, ¿por qué tiene que pagar los
platos rotos causados por otros de su raza?
1. Corregir exámenes estandarizados:
(p. 193) Y, como dice Sandel además: ¿la
Sandel trae a cuento el caso de Martin cuestión de la compensación, es individual
Luther King Jr. quien a pesar de su ó colectiva? Para el contexto que venimos
examen mediocre para ingresar a los viendo se trata de algo colectivo.
estudios de Teología en la Universidad
de Boston, fue, sin embargo, admitido (p. 3.
“Promover la diversidad”. Este
192); dice que fue admitido por “suerte”: argumento sostiene que “un alumnado
¿existía en ese tiempo la teoría de la acción racial mixto es deseable porque así los
afirmativa? No lo dice, sólo dice que fue estudiantes aprenden más unos de otros
admitido “por suerte” (p. 192). Añade que que si todos tuviesen orígenes similares”
(p. 195). Se añade, que “preparar a las
los negros e hispanoamericanos (cuerpo)
minorías desfavorecidas para que asuman
puntúan académicamente menos que los
puestos destacados en cargos públicos
blancos aun si se tiene en cuenta que esos
y profesionales clave contribuye al pro-
negros e hispanos sean de clases sociales
pósito cívico de la universidad y al bien
altas. Pero, sigue diciendo: “sea cual sea
común” (p. 195).
la causa de esa brecha, el uso de los test
estandarizados para predecir el éxito Frente a la bondad de los dos argumentos
académico requiere que se interpreten últimos, se esgrimen a su vez dos objeciones:
las puntuaciones a la luz del trasfondo una dice que la acción afirmativa no conduce
familiar, social, cultural y educativo (pp. a una sociedad más plural porque daña la
192-193), es decir, de una manera “inte- autoestima, aumenta la conciencia racial, e
gral”, podríamos decir de nuestra parte. incrementa la tensión racial y étnica (p. 196);
y otra que dice que la acción afirmativa no
[Como se ve, Sandel en todos los capítulos
logra el propósito de elevar el nivel educacio-
hasta ahora analizados, ha traído el tema
nal (p. 196).
de la “natura” (sin ese nombre, nombre
que es nuestro a efectos de este análisis), Trae después Sandel la pregunta de si la
de una manera concreta, puntual, de casos acción afirmativa viola derechos humanos;
–no in genere-, y con una argumentación para algunos, Hopwood fue violada en sus
moral sólida; y su postura, lo he dicho, derechos, y, por tanto, violación es violación26.
es que el debate en esos casos -y segura-
mente en otros similares- debe estar por 26
A este respecto podríamos decir que lo se busca
encima de todo]. con la acción afirmativa es un beneficio integral y
no solo el aspecto académico. Es lo que sostiene
2. “Compensar injusticias del pasado”. Sandel mismo: “…nadie tiene el derecho a que
Es de fácil comprensión; sin embargo solo se le considere conforme a un determinado

124 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

Dice a este respecto que no se trata de las cualidades que usted podía ofrecer” (p.
cualquier “misión” que tenga determinada 204); y: “Da la casualidad de que usted tiene
universidad para admitir la acción afirmativa, las características que la sociedad necesita
pues dicha misión debe ser justa (pp. 199 y en estos momentos…”27. ¿Cómo no recordar
206), trátese de negros o de judíos o de quien entonces aquí el principio orteguiano de que
sea en materia de minorías. Por eso concluye: “yo soy yo y mis circunstancias”?
“Y a menos que la persecución de esos pro-
pósitos viole de alguna forma los derechos 8. Capítulo 8: “¿Qué se merece cada
de quienes salen perdiendo, los solicitantes cual? Aristóteles”
decepcionados no pueden aseverar legítima- Para explicar la idea de “fin” en Aristóteles,
mente que se les haya tratado sin equidad” (p. Sandel se refiere a la belleza física (cuerpo):
201). ¿es justo discriminar –ese es el verbo que
Como se ve, es más un asunto de “equidad” utiliza nuestro autor (p. 213) -, por razones de
que de derechos individuales en sí mismos belleza física, tratándose de situaciones distin-
considerados; se trata en últimas, de ver el tas a belleza física misma, como por ejemplo
derecho como una realidad “relacional”, acceder a tocar la flauta? La respuesta, según
tal como dice Kaufmann (Cf. A. Kaufmann, Aristóteles, es: no; y es no, porque la justicia
Filosofía del derecho, 1999, p. 93), es decir, de es teleológica28, depende del fin concreto que
unos con otros. se persiga en cada caso (p. 212), que, en el
ejemplo de tocar la flauta, nada tiene que ver
Sigue Sandel tratando en este capítulo de
con la belleza física, sino que el fin de la flauta
la acción afirmativa, pero digámoslo así, “vol-
es producir música (p. 214).
teándola”; dice: ¿cabe para blancos? A simple
ojo la respuesta es fácil sin trasladamos la Una segunda situación que trae Sandel en
acción afirmativa, vgr., a África. La respuesta este capítulo, es la relacionada con la natura-
es, pues, un sí rotundo. leza física cósmica:
Me parece finalmente muy interesante “En el mundo antiguo, el pensamiento
a efectos de entender la natura corpórea teleológico contaba más que hoy. Platón y
humana que nos ocupa, la importancia que Aristóteles pensaban que el fuego se alza
le da Sandel a las “circunstancias”: para ello porque hace por dirigirse al cielo, su hogar
por naturaleza, y que las piedras caen
pueden verse sus cartas imaginarias en cuanto
porque ansían acercarse a la tierra adonde
habla de la acción afirmativa inscrita en tales
pertenecen. Entender la naturaleza y nuestro
circunstancias (pp. 204-205): “No es culpa lugar en ella, equivalía a captar su propósito,
nuestra que cuando se nos presentó diese la su significado esencial” (p. 215).
casualidad de que la sociedad ya no necesitase
27
P. 205. Sobre la importancia de las circunstancias
conjunto de criterios” (cfr. p. 198). Y también se puede ver el tratamiento que le da a éstas
el punto de vista de Dworkin, para quien cada Aristóteles en el capítulo de la justicia de su ética
Universidad define autónomamente su misión nicomaquea al tratar de la equidad.
(cfr. p. 198). Y es el parecer también de Rawls 28
Aunque Sandel advierte más adelante que el
para quien no se trata de merecimientos morales telos, el fin, “como suele ocurrir… no es evidente
–como el de Hopwood- (cfr. p. 198). sino discutible” (p. 216).

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 125
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

De nuestra parte nos preguntamos: ¿No las leyes de la física” (p. 215), encerrada en
es el hombre también parte de esa naturaleza sí misma, carente de fines, y que peor aún,
cósmica, tal como lo vimos al comienzo digo yo, después el hombre moderno dispuso
sustentados en Leonardo Boff? ¿No tiene esa a su dominio, a su antojo, y por eso mal-
naturaleza corpórea humana un significado, trató la naturaleza cósmica; de ahí la actual
un fin, un propósito? ¿No nos toca descu- catástrofe climática, por ejemplo. Por eso,
brirlo, y una vez descubierto, respetarlo? Para concluye: “como hemos prescindido de los
el hombre de hoy esto está oscuro, no parece razonamientos teleológicos en las ciencias,
estar en tónica humano-ecológica, parece que estamos también inclinados a rechazarlos en
todo se reduce a “cultura”29, a “ideología de la política y en la moral” (p. 216).
género”; son reliquias, pienso, del idealismo
Aparece después el tema de la esclavitud
de la Modernidad.
(¿cuerpo?) (pp. 227 y ss.), la cual, recuerda
Por cierto, creemos a estas alturas de Sandel, Aristóteles defiende con el llamado
nuestro estudio, que es la posición de Sandel “argumento de la concordancia”, argumento
mismo, aunque de manera moderada; la que dice que en la sociedad las personas deben
vemos desde el inicio de su libro cuando realizar el papel que desempeñen mejor para
decía que todo se reducía a debate moral, a realizar su naturaleza. Además, para Aristóte-
sociedad, a democracia; ¿qué queda de “pura” les la esclavitud es necesaria “porque alguien
naturaleza (corpórea podemos decir) en tendrá que ocuparse de las tareas domésticas
Sandel? Creemos que poco. Tal vez en con-
si los ciudadanos tienen que pasar mucho
cordancia con D´Agostino, considera que es
tiempo en la Asamblea deliberando sobre el
sólo de derecho natural –según su concepción
bien común. La polis requiere una división
clásica- el rechazo al canibalismo, tal como
del trabajo” (p. 228).
vimos atrás; de resto casi nada, repito. Cier-
tamente, además, hoy en día la traducción del Sandel en seguida trae a colación a los
viejo derecho natural son los derechos huma- críticos de ese argumento de Aristóteles,
nos, pero éstos en buena proporción están desde Kant hasta Rawls, quienes, fundados
sujetos hoy también al debate democrático, al en la libertad personal, dicen que las personas
contrato social de cada momento. Del “yo soy deben desempeñarse en lo que “elijan”; en
yo y mis circunstancias”, de Ortega y Gasset, tal sentido la esclavitud aristotélica, fundada
nos hemos quedado en las puras circuns- en la naturaleza humana (social, podemos
tancias sin referencia a un “yo” permanente, decir, más que corporal), sería incorrecta
natural, más allá del tiempo y del espacio, con (p. 228). Por eso puse entre paréntesis y con
un sustrato físico indisponible. interrogantes la palabra cuerpo –después de
Toda esta intuición conclusiva nuestra esclavitud-, para desmentir que la esclavitud
comenzó, como dice el mismo Sandel, con sea un tema corporal solamente, tal como
la ciencia moderna, mecanicista, “regida por creemos, aunque ciertamente ella ha tenido
connotaciones corporales a lo largo de la
historia: referirse a los negros, etc.
29
Es en alguna manera la posición de Spengler
(cfr. L. Suárez, Grandes interpretaciones de la Desde luego, hoy en día los argumentos de
historia, 1981, pp. 165 y ss. Aristóteles no nos convencen dada nuestra

126 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

adhesión suprema a la libertad, aunque, como misma (vida corpórea humana), y al Estado
dice Rawls, la libertad debe moverse en un de Israel.
marco equitativo (p. 230).
Menciona también a Japón, que ha sido
Finalmente en el capítulo aparece el caso más reacio a pedir perdón por sus atrocidades
de Casey Martin, golfista, discapacitado durante la guerra, así como porque en los años
(cuerpo), a quien le fue le fue negado utilizar 30s y 40s del siglo XX, miles de coreanas y de
el cochecito del golf para desplazarse por los otras mujeres jóvenes asiáticas fueron forza-
campos en que se juega este deporte; por tal das a la esclavitud sexual (cuerpo), y porque
motivo, acudió a los Tribunales basado en la los japoneses abusaban de ellas (pp. 236-237).
Ley de Estadounidenses con Discapacidad Desde los años 90s algo se ha hecho: un fondo
(1990), diciendo que lo importante era no privado ofreció compensaciones económicas
alterar lo esencial de la actividad golfística a las víctimas y algunos dirigentes japoneses
(pp. 230 y ss.). Contra ese argumento vinieron expresaron un perdón limitado (p. 237), pero
los argumentos de célebres golfistas, quienes en el año 2007 el Primer Ministro japonés
testificaron que ir a pie de hoyo en hoyo era Shinzo Abe aseveró que el ejército japonés no
esencial al golf, y que de no ser así, le daba era responsable de aquella prostitución, por
ventajas a Martin. En este caso, pues, estaba lo que el Congreso de Estados Unidos emitió
de presente Aristóteles en el sentido de que lo una Resolución instando al gobierno japonés
justo se refiere al “fin” de la actividad. a reconocer formalmente esa esclavitud
La sentencia decidió que Martin podía uti- sexual y a pedir perdón (p. 237).
lizar el cochecito del golf dado que el fin del
Otro tanto sucede con las injusticias contra
golf son los lanzamientos, el menor número
aborígenes. En Australia ha habido fuertes
de golpes a la bola, y que, además, las energías
debates acerca de las obligaciones del Estado
que se gastaban caminando eran mínimas.
para con los aborígenes en los años que van de
Queda presente entonces que tratándose 1910 a 1970, debido a que los niños aborígenes
de la naturaleza corpórea humana ésta no se racialmente mixtos (cuerpo) se les separaba
entiende por sí sola sino en razón de su fin, a la fuerza de sus madres y se entregaban a
fin que es tarea del hombre descubrir, así sea familias blancas de acogida, buscando que
una tarea ardua, como dice Sandel. esos niños se asimilaran a la sociedad blanca
y se acelerara la desaparición de su cultura
9. Capítulo 9: “¿Qué nos debemos (aborigen) (p. 237). Se recuerda que en el año
los unos a los otros? Los dilemas 2008, Kevin Ruud, Primer Ministro, presentó
de la lealtad” una disculpa oficial a los aborígenes, y aunque
Se refiere este capítulo al tema de “pedir no les ofreció compensaciones, les prometió
perdón”, sobre todo en público, por injusti- tomar medidas socio-económicas a su favor
cias históricas (p. 236). (p. 238).
Comienza Sandel por las reparaciones, Sandel también trae a cuento que en E.U.
en forma de indemnizaciones, por parte de Ronald Reagan, en 1988, ofreció disculpas
Alemania debido sus desmanes en la segunda mediante una Ley, a los estadounidenses de
guerra mundial, a los supervivientes de la origen japonés por su confinamiento (cuerpo)

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 127
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

durante la segunda guerra mundial en campos 243); de Kant, que “Ser libre es ser autónomo,
de internamiento en la Costa Oeste, además y ser autónomo es estar gobernado por una
de una indemnización a los internados que ley que me doy a mí mismo” (p. 243); y de
todavía vivían (p. 238). Rawls, que “adaptó la concepción kantiana de
la autonomía de lo que uno es en sí mismo, y
También en E.U., Sandel menciona que
su teoría de la justicia bebió de ella” (p. 243); y
está pendiente la petición de perdón a los
es así como concluye con estas palabras:
herederos de los esclavos (cuerpo), donde
existe un movimiento a favor de la reparación “Si al pensar en la justicia hemos de abstraer-
a los negros (cuerpo) así como iniciativas nos de nuestras identidades particulares,
legislativas para crear una Comisión que estu- costará defender que los alemanes de hoy
tienen alguna obligación especial de pagar
die tales reparaciones a los afroamericanos
reparaciones por el holocausto o que los
(cuerpo); el asunto, continúa diciendo, es
estadounidenses de esta generación la tienen
que la mayoría de los negros quieren esa de enmendar la injusticia de la esclavitud y
reparación, pero la mayoría de los blancos no la segregación. ¿Por qué? Porque una vez que
(p. 238); sin embargo, algunos Estados de ese he dejado aparte mi identidad de alemán
país sí les han presentado disculpas: Virginia, o de estadounidense, y concibo que en mí
Alabama, Maryland, Carolina del Norte, New mismo soy libre e independiente, no hay base
Jersey, Florida; igualmente, la Cámara de alguna para que se diga que mi obligación de
Representantes aprobó una resolución en la remediar esas injusticias históricas es mayor
que se pedía perdón a los afroamericanos por que la de cualquier otro” (p. 244).
la esclavitud y la segregación racial del pasado Parece poderoso el argumento, pero yo
(pp. 238-239). creo que Sandel solo toma en cuenta “el velo
A continuación de estos casos, Sandel de ignorancia” de Rawls (dejar aparte las
esgrime razones en pro y en contra de esas identidades), pues pertenecemos también
peticiones de perdón (p. 239): (además de ser libres e independientes) a una
comunidad de antepasados y que igualmente
Nuestro autor le da importancia especial
se proyecta al futuro.
al argumento de que uno no debe pedir
perdón de lo que no ha hecho (p. 240); así lo Pero sigamos. Junto a esa libertad indi-
demuestra con las siguientes palabras: “Los vidual Sandel recuerda el llamado “Estado
críticos de las peticiones de perdón perciben neutral” (que propicia esa libertad individual)
correctamente lo que está en juego moral” en materia moral y religiosa (pp. 244-247), tal
(p. 241); también al manifestarse proclive por como sostienen Kant y Rawls, para preservar
el llamado “individualismo moral” cuando esa libertad: “Por lo tanto, el ser que elije
dice: “La idea de que mis responsabilidades libremente por lo que en sí mismo es y el
se limitan a lo que yo mismo me impongo es Estado neutral, van de la mano” (p. 245).
liberadora” (p. 242); y añade que la filosofía De esa manera, Sandel parece mostrar
política actual está a favor de ese individua- inicialmente sus preferencias, y es así, como
lismo moral desde Locke, pasando por Kant, estando en alguna medida a favor de Kant y
hasta Rawls (p. 243); de Locke recuerda que Rawls, se aleja de Aristóteles en esta materia
“somos seres libres e independientes” (p. al decir:

128 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

“Kant y Rawls rechazan la teleología de Hasta aquí podemos leer la argumentación


Aristóteles porque no parece dejar sitio para inicial a favor de esa libertad individual; pero
que escojamos nuestro bien. Es fácil ver que la Sandel a continuación, creo que autocorri-
teleología de Aristóteles engendra esa inquie- giéndose, dando un timonazo respecto a lo
tud. Para él, la justicia consiste en que haya anterior, en una especie de auto-dialéctica, de
una concordancia entre lo que se asigna a las auto-debate con él mismo, va a afirmar: “no
personas y los fines o bienes apropiados a su creo que la libertad de elegir –ni siquiera la
naturaleza. Pero nos inclinamos a considerar libertad de elegir en condiciones equitativas
que la justicia tiene que ver con la elección, sea un fundamento adecuado para una socie-
no con la concordancia” (p. 247). dad justa… Ahora intentaré explicar por qué”
Así, pues, Sandel no comulga con la idea (p. 252):
de una naturaleza humana que podría decirse 1.- Exigencias de la comunidad. Sandel plan-
es “integral” –la de la concordancia aristo- tea que junto a la libertad, se encuentra la
télica-, sino que está alineado con la “pura comunidad, las obligaciones, la solidaridad,
elección” –la kantiana-; más claras son sus la lealtad, la memoria histórica, la fe religiosa
propias palabras al respecto cuando afirma: (p. 250), y que a esos críticos del liberalismo
rawlsiano se les llamará por ello “comuni-
“El debate sobre la prioridad de lo que es
taristas” (entre los que se cuenta Sandel) (p.
debido sobre lo que se tenga por un bien es
251).
en última instancia un debate sobre el signi-
ficado de la libertad humana” (p. 247). Nada Sandel se pregunta: ¿cómo “conciliar”
dice sobre la verdad como condición para libertad y comunidad? (p. 251). Para respon-
ser libres –al estilo de lo que Cristo dijo: “La der esta cuestión recurre a A. MacIntyre,
verdad os hará libres”-, sino que todo es “pura para quien cada uno es heredero “del pasado
elección”. de mi familia, de mi ciudad, de mi tribu, de
mi nación…” (p. 252); es lo que denomina
Por eso también Sandel dice, en línea con
“narrativa” y por eso no se puede ser indivi-
lo que viene diciendo, que en materia de justi-
dualista ni negar las responsabilidades ante la
cia no se trata de “fines” –teleología-, sino de
esclavitud del pasado (p. 253) o negar la res-
“capacidad de escoger” (p. 247); es, pues, por
ponsabilidad alemana nazi con los judíos (p.
lo que se ve, la priorización de la libertad30.
253). En ambos casos se “Presupone errónea-
mente que ´lo que cada uno es en sí mismo
resulta separable de sus papeles y situaciones
30
Cómo no recordar las posturas de la Corte
Constitucional colombiana, la cual desde 1991
sociales e históricas´” (p. 253).
privilegió los derechos humanos llamados 2.- “Obligaciones más allá del consenti-
objetivos, al considerar por ejemplo la vida en sí miento”. Serían la “naturales” (nuestro tema
como valor supremo cuando rechazó el aborto,
de alguna manera; es decir, el derecho natu-
y luego, a partir de 1997, con la sentencia que
ral) (p. 254), a diferencia de las puramente
admitió la eutanasia, privilegió la libertad. Aquí
nos topamos también, aunque en otro plano “contractuales”: “Nadie diría que tengo
de ideas, con lo que Rodolfo Arango llama
sociedades bien ordenadas y sociedades no bien
ordenadas, y en esa línea, Colombia sería una no sino la igualdad (cfr. R. Arango, Democracia
bien ordenada, que debe priorizar, no la libertad, social, 2012, pp. 203 y ss.).

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 129
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

el deber de no matarte (cuerpo, decimos c) El siguiente ejemplo de sentimiento de


nosotros en este artículo) solo porque he solidaridad por la comunidad es el rescate
prometido que no lo haría” (p. 254) (aquí por parte de Israel de judíos etíopes, que
Sandel da a entender que admite deberes y padecían hambre (cuerpo) y se hallaban en
derechos naturales, al más puro estilo del Sudán; lo hace Israel porque son hermanos
iusnaturalismo clásico). Al terminar este de raza (cuerpo), más allá de otras posibles
capítulo volverá con el tema de las obliga- consideraciones (pp. 258-259).
ciones que van más allá de lo puramente
contractual; se apoyará incluso en Kant y Pasa luego Sandel a desarrollar el tema
Rawls, para quienes “lo que es debido pre- del patriotismo, sobre el cual, dice, puede
cede a qué se tenga por un bien” (p. 274); haber dos posturas: por una parte es natural,
“ese es el motivo de que se conciba la jus- y, por otra, es inconveniente por estimular
ticia tras el velo de la ignorancia” (p. 274) la guerra (versus el cuerpo); cita a Rousseau,
(y, no olvidemos, el subtítulo de este libro decidido defensor del patriotismo, como
que estamos analizando es, precisamente: virtud que nos lleva a conmiserarnos de los
¿hacemos lo que es debido?). más cercanos (p. 259); Sandel de su parte
3.- La solidaridad y el “sentimiento” de ser dice que “Los países dan más a su pueblo que
parte de una comunidad: a los extranjeros.

a) Arranca con el ejemplo hipotético de Los ciudadanos de Estados Unidos, por


estar ante dos niños que se están ahogando ejemplo, pueden optar a muchas prestaciones
(vida corpórea humana); uno de ellos es hijo públicas –la educación pública, el seguro
y el otro no: ¿a quién se tratará de salvar pri- de desempleo, la formación profesional, las
mero?: pues al hijo, obviamente; es lo que pensiones de la seguridad social, Medicare
se entiende como “sentimiento familiar” (p. (la sanidad para jubilados –cuerpo-), etc.-, y
256); ante eso se contra-argumenta –dice los extranjeros no” (p. 260). Todo lo anterior
Sandel- que ese sentimiento no es natural sería un patriotismo natural, no antinatural e
sino consentido, surgido del contrato de inconveniente.
paternidad, ante lo cual propone otro ejem-
plo: se está ante dos ancianas necesitadas Sigue Sandel con el tema de la “solidaridad
de cuidado (cuerpo), una de las cuales es comunitaria”, trayendo a colación el tema de
mi madre y la otra no; pues bien, tener a la “vigilancia fronteriza”: ¿por qué se hace
alguien de mamá no es algo contractual tal vigilancia? Igualmente por la comunidad
sino natural, y lo que nace ahí en ese caso (pp. 260-262); miremos sus propias palabras:
es cuidar de la madre propia (pp. 258-259). “Pero como el accidente de dónde se haya
nacido (cuerpo) no es fundamento para un
b) Después trae Sandel el caso de un piloto
de la Resistencia Francesa, a quien se le
derecho, cuesta ver cómo se podrían justifi-
encomienda bombardear (vidas corporales) car las restricciones a la inmigración (cuerpo,
a su pueblo, ocupado por los nazis. El piloto movilidad) por la razón de que preservan la
se niega a hacerlo por ser su pueblo natal prosperidad… Desde el punto de vista de la
y no tanto por otras razones: ¿no es esto ayuda a los más desfavorecidos, cabe argu-
también un sentimiento de solidaridad con mentar a favor de la inmigración libre…”
la comunidad? (pp. 257-258). (pp. 262-263). Pero, ¿ello es así?, dice Sandel

130 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

que no del todo, pues “… tenemos obligación hermano bajo la razón de favorecer al Estado:
especial hacia el bienestar de nuestros con- “los hermanos son los hermanos” (pp. 269-
ciudadanos en virtud de la vida en común y 271). Pero diferente a la anterior, es la historia
de la historia que compartimos” (p. 263). de otros dos hermanos (también vínculos
Remata Sandel diciendo que es difícil de sangre, cuerpo), uno de los cuales delató
explicar esas obligaciones remitiéndose al al otro, el famoso “Unabomber”, quien
puro consentimiento (p. 265); queda, enton- mató a varias personas e hirió a otras con
ces, espacio para algo más que la libertad: cartas-bomba; a ese hermano delator le ator-
el sentimiento comunitario. Y añade que mentaba que su hermano delatado fuera a la
todo lo anterior –mas otras consideracio- pena de muerte, por lo cual siempre luchó,
nes que no vienen al caso por no referirse a pesar de su delación, contra esa pena, y el
exactamente al cuerpo, que es nuestro dinero recibido por la recompensa delatoria,
tema puntual-, para algunos, puede ser un lo donó a familias de los asesinados por su
“egoísmo colectivo”, o un “prejuicio a favor hermano (pp. 271-272). ¿Por qué delató a su
de los congéneres”, pero, aun admitiendo hermano? “Supongo que cabe decir que me
casos exagerados, dice, “Enmendar las malas sentía obligado. Que muriera otra persona
acciones que mi país cometió en el pasado es cuando yo tenía la posibilidad de impedirlo…
una manera de reafirmar mi vinculación con no podía vivir con esa idea” (p. 272).
él” (p. 266). Como se ve en esta última parte del capí-
La moraleja en este punto la expresa tulo, cada caso es cada caso; en todos existen
Sandel así: argumentos a favor y argumentos en contra;
se trata de pensar, de reflexionar, de debatir
“Con el sentimiento de hacer parte de la
dichos argumentos; es la tesis, como he afir-
comunidad viene la responsabilidad. No
mado, de Sandel en este libro.
podrá sentirse realmente orgulloso de su país
y de su pasado si no se está dispuesto a reco-
nocer responsabilidad alguna en proyectar 10. Capítulo 10: “La justicia y el bien
su historia hasta el presente y descargar el común”
fardo moral que pueda arrastrar consigo”
Tratándose del candidato a la Presidencia de
(p. 267).
los Estados Unidos, J.F. Kennedy, éste mani-
El comunitarismo de Sandel continúa festó que si llegara a ser Presidente se regiría
en este capítulo al rememorar la acción del por su conciencia (no por la oficialidad reli-
militar estadounidense Robert Lee, quien giosa), en materias varias, incluido el control
se opuso a atacar (cuerpo) a su Estado natal de la natalidad (cuerpo) (p. 277).
(Virginia) en nombre de la Unión (p. 268). Barak Obama dijo lo contrario de Kennedy,
Y un par de casos más relacionados con esto es, dijo que lo religioso sí había orientado
el cuerpo –y la lealtad que nos ocupa en este sus ideas políticas, pero lo dijo después de
capítulo-: la historia de los hermanos Bulger, reconocer que en el pasado se había equivo-
William y Whithey, el primero un político, cado al decir que lo que había dicho era como
y el segundo un asesino (vínculos de sangre, lo que había dicho Kennedy, esto es, que lo
cuerpo); pues bien, William nunca delató a su religioso era algo de la pura conciencia y en

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 131
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

tal sentido había defendido el derecho a restringiendo legalmente “la pornografía


abortar (cuerpo) (p. 278). (cuerpo), el aborto (cuerpo) y la homosexuali-
Ahora, prosigue Sandel, problemas como dad (cuerpo)” (p. 283).
el racismo (cuerpo), la no tenencia de un Posteriormente Obama, como se ha dicho,
seguro médico (cuerpo), requerirán que cam- se sumó a la corriente de la defensa de la moral
biemos en nuestro corazón y en la cabeza y lo religioso en el terreno político al decir:
(p. 279). Con ello comienza poniendo de “no podremos, como progresistas, abandonar
presente algo que es propio de su comuni- el terreno del discurso religioso” (p. 284). Es la
tarismo: que lo religioso y lo moral sí tienen línea de Sandel cuando éste afirma:
que tenerse en cuenta en el debate político,
tal como lo sostiene el Presidente Obama. “Que Obama dijere que los progresistas deben
abrazar una forma de razón pública más
Prosigue diciendo que la idea de J.F. Ken- abarcadora y más amistosa con la fe refleja
nedy imperó en los años 60s y 70s del siglo un instinto políticamente sensato. También
XX; tanto republicanos como demócratas es una buena filosofía política. El intento de
la aceptaron, aunque cada uno a su manera: desligar los argumentos sobre la justicia y
los republicanos decían que la “neutralidad” los derechos de los argumentos sobre la vida
valía para lo económico, mientras que los buena es un error por dos razones: en primer
demócratas decían que valía para lo social lugar, no siempre se pueden zanjar las cues-
tiones referentes a la justicia y a los derechos,
y lo cultural; precisamente los segundos -de
sin resolver cuestiones morales sustantivas; y
cara a nuestro tema- defendían la susodicha
en segundo lugar, incluso cuando es posible,
neutralidad diciendo que “En vez de restrin- puede que no sea deseable” (p. 284).
gir el aborto o las relaciones homosexuales,
el Estado debía ser neutral en esas cuestiones Pasa Sandel luego a tratar un tema direc-
morales” (p. 280). tamente relacionado con nuestro objeto de
Sigue diciendo nuestro autor: la idea de estudio: el aborto y las células madre embrio-
la neutralidad fue defendida por Rawls, narias (pp. 284 y ss.).
mientras los comunitaristas decían lo con- Respecto al primer punto, el aborto,
trario (pp. 280-281). Rawls en 1993 aceptó empieza diciendo que unos dicen que debe
la poderosa influencia de la comunidad, de prohibirse porque elimina una vida humana
la solidaridad, de los afectos, de las devocio- inocente (p. 285), pero otros dicen que se trata
nes, pero que, como ciudadanos, esos casos de un tema moral y religioso donde el Estado
debían dejarse aparte en virtud del plura- debe ser neutral (p. 285).
lismo de hoy y de la tolerancia (p. 281).
Sandel parece tomar partido al decir que
Los demócratas norteamericanos siguie- los segundos (los neutrales), no resuelven el
ron esa línea rawlsiana de la neutralidad fondo del problema, “Pues, si es cierto que el
aunque con algunas excepciones como la feto en desarrollo es moralmente equivalente
de oponerse a la guerra (cuerpo) de Estados a un niño, el aborto será moralmente equiva-
Unidos en Vietnam en los años 70s del siglo lente al infanticidio. Y pocos sostendrán que
XX; a la anterior línea demócrata se enfrentó el Estado tiene que dejar a los padres que deci-
a su vez el Presidente Ronald Reagan, dan si van a matar o no a sus hijos” (p. 285).

132 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

Pero, agrega, decir eso no quiere decir afi- Pasa después Sandel a tratar otro tema
liarse a la prohibición del aborto, sólo significa directamente relacionado con lo corporal
“…reconocer que la neutralidad y la libertad humano: el matrimonio de personas del
de elección no son razones suficientes para mismo sexo (cuerpo) (pág. 287 y ss.), sobre el
aceptar el derecho a abortar” (p. 285). cual Sandel dice de entrada, lo que ya ha dicho
Respecto al tema de las células madre antes: que este tema tampoco es tratable sin
embrionarias, dice que ocurre lo mismo que tener en cuenta lo moral y religioso (p. 287);
con el aborto (p. 285), pues unos dicen que en efecto, dice, el matrimonio “…depende de
esas células embrionarias humanas son per- cierta concepción del telos del matrimonio…”
sonas humanas y lo son desde la concepción y (p. 287), y añade, “y, como nos recuerda
acabarlas equivale a matar a un niño (p. 286), Aristóteles, discutir sobre el propósito de una
mientras que los adversarios de esa postura institución social equivale a discutir sobre las
sostienen que se trata de células que ayuda- virtudes que honra y recompensa” (p. 287).
rían a evitar enfermedades y la ciencia no Dice Sandel que el Estado puede tener tres
debería ser estorbada por razones ideológicas posturas frente al matrimonio: reconocerlo
(p. 286). Sandel a este respecto vuelve a tomar para heterosexuales; reconocerlo para homo-
posición diciendo: sexuales (además de para heterosexuales); y
no reconocerlo en ningún caso (p. 287); pero,
“Pocos dirán que tendría que ser legal extraer
más allá de los detalles que Sandel aborda,
órganos de niños de cinco años para que
se prosiga con investigaciones que podrían éste vuelve a afirmar:
salvar vidas” (p. 286).
“Así que, cuando observamos de cerca el
En definitiva, sostiene que argumento a favor del matrimonio entre per-
sonas del mismo sexo, vemos que no descansa
“En lo que se refiere al aborto y a la investiga- en las ideas de no discriminación y libertad
ción con células madre embrionarias, no es de elección. Para decidir quiénes deben poder
posible resolver la cuestión legal sin abordar optar al matrimonio, hemos de pensar en el
la cuestión moral y religiosa de fondo” (p. propósito del matrimonio y las virtudes que
286). honra. Y esto nos lleva a un terreno moral
disputado, donde no podemos permanecer
¿Qué significa lo anterior para mí? Que neutrales entre concepciones contrapuestas
puede haber ley que permita el aborto y la de la vida buena” (p. 294).
investigación con células madre embrionarias,
pero la moral y la religión deben ser tenidas Lo anterior lo basa Sandel en buena medida
en cuenta en el debate político-jurídico, en una sentencia de Margareth Marshall,
por lo que cada quien que esté involucrado del año 2003, a propósito de un matrimonio
en dichos temas, debe, si lo afectan moral y entre personas del mismo sexo, en la que
religiosamente esas materias, tomar posición Marshalll pone de presente las divergencias
personal y pronunciarse públicamente y que morales y religiosas frente al matrimonio (p.
sea tenida en cuenta su objeción de concien- 291) (aunque Marshall finalmente toma su
cia –si ganan las mayorías opuestas- por la decisión sobre el punto de la elección de la
misma legalidad. pareja más que sobre lo elegido (p. 291).

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 133
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

Pero el punto, vuelve Sandel a decirlo para la moral, la religiosa…, todas participan en
sustentar su argumento, es que hay mucho en el contrato social y éste a su vez afectará al
juego, de carácter moral, en el matrimonio, derecho a su medida.
y por eso el Estado sólo admite -por ejem- ¡Eso, por cierto, es comunitarismo!
plo- el matrimonio de dos personas y no las Porque Sandel nos trae no sólo pedagógica
uniones polígamas (p. 292) (cuerpo). Por eso, y divulgativamente –es su primer aporte- las
dice, Marshall misma afirma en su fallo: “El posturas respecto a temas candentes del
matrimonio civil es, a la vez, un compromiso cuerpo humano, sino ante todo –y este es
hondamente personal con otro ser humano su segundo gran aporte-, la postura comuni-
y una celebración muy pública de los ideales tarista del debate: ¡a la comunidad le afecta
de reciprocidad, compañerismo, intimidad, lo atinente al cuerpo humano!: su historia
fidelidad, y familia” (p. 293), poniendo pues comunitaria (respecto a los judíos, a los japo-
de relieve, lo moral del matrimonio. neses, a los norteamericanos…); pertenecer
Y a propósito de si el matrimonio es esen- a una comunidad política en su sentido más
cialmente procreativo (telos del matrimonio), general es trascendental en la consideración
dice Marshall que no, que lo esencial es el del cuerpo humano y el cuerpo humano es
compromiso (otro telos), por lo cual se pone trascendental para la comunidad política
aún más de presente el debate moral del . ¡Ya no cabe el mero individualismo, ni la
matrimonio (p. 293). mera consideración de la libertad propia;
es necesario tener una mirada comunitaria,
Visión panorámica y conclusiva colectiva, solidaria!; ¡hay que salir de los
egos –tan propios de los tiempos presentes- y
Al terminar este estudio, lo primero que transportarse a lo común, en un equilibrio
salta a la vista es la importancia del cuerpo difícil pero deseable!
humano. ¡Cuántos temas lo afectan! Sandel
El derecho natural del cuerpo del hombre
nos recorre por cantidad de problemas
–en expresión clásica pero no utilizada por
atinentes al cuerpo humano mostrando su
Sandel, sólo por nosotros aquí- , entonces,
trascendencia. Es un elemento, un compo-
no es tan fácil a primera vista a pesar de
nente del ser humano demasiado visible a la
este nombre (“natural”), es, por el contra-
inteligencia espontánea. Ya no cabe reducir
rio, objeto de múltiples visiones y debates,
al hombre a sola razón como pretendió el
pero siempre contando con el cuerpo como
racionalismo y aún lo pretende en sus últimos
elemento capital del ser humano. No cabe
bastiones.
despreciarlo aunque tampoco endiosarlo.
Por ser trascendental, lo que lo afecte
Los casos tratados en el libro Justicia, son
debe ser objeto de debate, de reflexión, de
candentes, sangrantes, y frente a ellos puede
pluralismo, de democracia; la comunidad
existir un rechazo casi que instintivo, un repu-
no puede ser ajena a él; todas las opiniones,
dio de lo notoriamente injusto31 (canibalismo,
posiciones, posturas, tienen que participar en
el debate acerca de él; y todas son atendibles
y respetables. Ninguna debe quedar, pues,
31
Ver, A. Kaufmann, Filosof ía del derecho, p.
93; allí trata de la tercera vía iusfilosófica como
por fuera de la reflexión política: la filosófica, una alternativa jurídica que se opone a lo

134 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474
Juan Guillermo Durán Mantilla

esclavitud, trabajo forzado, madres sustitutas tal como se dijo atrás; no solo caben las
con retribución económica, maltrato a las discusiones filosóficas; también deben caber
minorías raciales, niños aborígenes separados las religiosas y las morales; eso es comunita-
de sus madres, confinamiento, exclusión rismo; de ellas no cabe prescindir en la polis;
de los negros, racismo…); y puede también si se prescinde se empobrece el debate polí-
existir un tratamiento de menos rechazo en tico; incluir ese par de perspectivas (la moral
otros casos (derechos reproductivos, suicidio y la religiosa), al estilo de Barack Obama -y a
asistido, fecundación in vitro…), aunque diferencia de John Rawls-, es, por el contrario,
pasados, ¡todos los casos que se presenten: enriquecer la política, y de paso al derecho
los más rechazables y los menos notorios de que se derive de ella. Esa presencia de moral
rechazo!, por el filtro del debate. y religión, implica, a mi juicio, la presencia de
Lo que quizá más me ha llamado la la “objeción de conciencia”; creo que Sandel
atención, y que considero una posición la fortifica, sin decirlo literalmente. Es solo
aproximada al derecho natural, es el comuni- mi intuición. Pero ello ameritaría un espacio
tarismo de Sandel, el papel de la comunidad, aparte que sólo enuncio.
del sentimiento cultural, de la tradición colec- ¿Pero ellas –la moral y la religión- llevan a
tiva; la comunidad, por decirlo así, hace una la pelea inevitable, como dice Rawls y por eso
especie de peaje en lo propiamente corpóreo; deben ser separadas de la vida política como
es el aporte más valioso que encuentro en esta afirma éste? ¿Se trata acaso del menor “roce”
obra. Es, en otras palabras, un derecho natu- posible en la política? Habrá confrontación;
ral basado en el argumento de humanidad, de es ineludible el debate (Sandel trae a cuento
comunidad, de lo que los hombres cultural- a los conservadores, a los libertarios, a los
mente han construido pausadamente a través utilitaristas, a Aristóteles, a Kant, a Rawls…),
del proceso del tiempo en la sociedad en que pero qué más da, debe darse la dialéctica
viven, sin quedarse en individualismos malsa- en la política, aunque desde luego, sin caer
nos. La defensa de lo corporal se da “a través” en la violencia, en la exclusión, en la discri-
de la fuerza de la comunidad, de sus debates, minación; todo debe ser dentro del marco
de sus argumentaciones colectivas, oyéndose democrático.
todos sin exclusiones y arrogancias contra Desde el comienzo del análisis del libro
el otro. Lo corporal no aparece en primera vimos que la idea central de Sandel era
instancia sino después de la vida comunitaria. precisamente el debate -uno de los ejes de
Lo social convive con lo individual. la democracia-. ¿”Cómo” debatir? Quizá
Sandel es comunitarista. Esto significa que deba echarse mano, entonces, por ejemplo,
Sandel es amigo de la presencia de posicio- de autores como Zagrebelzky para quien
nes morales y religiosas en la vida política, el debate debe hacerse con “lealtad”32. Pero
queda igualmente para otro lugar el trata-
miento de este punto.
notoriamente injusto. No construye el derecho
ante todo sobre lo justo sino a partir del rechazo
de lo injusto evitable a cualquier mirada; en este
sentido se encuentra también Amartya Sen, en su
obra “La idea de la justicia”, 2010, pp. 11 y ss. 32
Cfr. G. Zagrebelsky, El derecho dúctil, p. 14-15.

Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474 135
La naturaleza humana corpórea en Michael Sandel. Una opción actual del derecho natural

Referencias bibliográficas Hervada, Javier, Sancho Miguel, Com-


pendio de derecho natural, tomo I, EUNSA,
Aldanute, Claudio, Lo que afecta a la psi- Pamplona, España, 1980.
quis afecta al cuerpo, El Tiempo, debes hacer,
9 abril 2014. Hobbes, Thomas, Leviatán, tomo I, Losada,
Buenos Aires, 2007.
Arango, Rodolfo, Democracia social, Fon-
tamara, México, 2012. Kaufmann, Arthur, Filosofía del derecho,
Universidad Externado de Colombia, Bogotá,
Aristóteles, Ética a Nicómaco, Porrúa, 1999.
México, 1981.
Kelsen, Hans, ¿Qué es la justicia?, Fonta-
Benedicto XVI, Deus caritas, est, Editorial mara, México, 2001.
San Pablo, Bogotá, 2005.
Locke, John, Segundo tratado sobre el
Beuchot, Mauricio, Filosofía del derecho, gobierno civil, Tecnos, Madrid, 2006.
hermenéutica y analogía, Universidad Santo
Tomás, Bogotá, 2006. Ortega y Gasset, José, ¿Qué es filosofía?,
Austral, Madrid, 2007.
Boff, Leonardo, La opción tierra, Sal
Terrae, Santander, España, 2008. Pío XI, Casti connubi, Santa Sede, 1930.

D´Agostini, Francesco, Filosofía del Ratzinger, Joseph, Verdad, valores, poder,


derecho, Temis, Universidad de La Sabana, Rialp, Madrid, 2005.
Bogotá, 2007. Sartori, Giovanni, ¿Qué es la democracia?,
Durán Mantilla, Juan Guillermo, Llamado Altamir, Bogotá, 1994.
de la naturaleza, Novum Ius, Universidad Sen, Amartya, La idea de la justicia,
Católica de Colombia, julio-diciembre de Taurus, Bogotá, 2010.
2011.
Suárez, Luis, Grandes interpretaciones de
García Morente, Manuel, Lecciones preli- la historia, NT, Eunsa, Pamplona, España,
minares de filosofía, Diana, México, 1952. 1981.
Hart, Herbert, Utilitarismo y derechos Zagrebelsky, Gustavo, El derecho dúctil,
naturales, Universidad Externado de Colom- Editorial Trotta, Torino, Italia, 2005.
bia, Bogotá, 2003.

136 Verba Iuris 33 • enero - junio 2015 • pp. 105-136 • Bogotá D.C. Colombia • ISSN: 0121-3474

También podría gustarte