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UNIVERSIDAD NACIONAL DE TRUJILLO

FACULTAD DE INGENIERÍA

ESCUELA DE INGENIERÍA QUÍMICA

INFORME DE LA PRIMERA UNIDAD DE ÉTICA, CONVIVENCIA


HUMANA Y CIUDADANÍA: ÉTICA DE LA RESPONSABILIDAD

Grupo:

● Los Socráticos

Alumnos:

● Coronado Plasencia, Josue


● Gutiérrez Carbajal, Cielo
● Garcia Verde, Miguel
● Carbajal Oliaga, Alejandro
● De la Cruz Cueva, José

Docente:

❖ Arias Salazar, Matilde Gundena

Curso:

❖ Ética, convivencia humana y ciudadanía


ÉTICA DE LA RESPONSABILIDAD
(propuesta ética de Hans Jonas)
Antecedentes:
Desde el principio de los tiempos, en el nacimiento del ser humano, existió en él tres
principales funciones y objetivos. Estos tres eran simples: alimentarse, descansar y
reproducirse, por lo que no tomó mucho tiempo para que, luego de cumplir con estos
tres principios, evolucionara y junto con este paso, aparecieran nuevas y múltiples
tareas que cumplir: nuevas responsabilidades.

El contexto fue fundamental para esto, apareció la necesidad de agruparse y convivir


armoniosamente ya que el clima no permitía moverse fácilmente a la población, así
que tendrían que asentarse en un lugar por una cantidad de tiempo indeterminada.
Apareció la necesidad de guardar alimento ante la escasez del mismo, para así
repartirlo a la familia y preservar la especia. Así fue como poco a poco fueron
apareciendo variadas y múltiples responsabilidades que cumplir, a las cuales el
hombre tuvo que adaptarse conforme pasaba el tiempo.

Según el profesor y filósofo alemán Robert Spaemann, para nuestros predecesores


existía la simple regla comprobada de abstenerse, en caso de duda, de una acción
incorrecta. Esto es algo que nos evidencia una suerte de ética en nuestros antepasados
y fue así que seguimos evolucionando hasta llegar a nuestra sociedad actual.

Por ejemplo, años atrás el adiestramiento militar consistía en lograr que el soldado
realizara su parte sin conocer muy bien o lo mínimo posible el plan general, hoy se
busca en la guerra moderna, no que “sea una pieza de un engranaje de una máquina de
precisión”, sino que sea capaz de resolver tareas de manera individual, adaptándose a
circunstancias tremendamente cambiantes; para ello debe ser muy competente,
viviendo a la vez, un fuerte sentido de la responsabilidad.

Los cuatro factores que hacen que, en nuestra cultura, el principio de responsabilidad
esté adquiriendo un significado moral creciente son:

1. Complejidad creciente de las relaciones sociales.

2. Diferenciación de los diversos subsistemas sociales.

3. Capacidad creciente de la ciencia en el predecir las consecuencias a largo plazo del


obrar humano.

4. La rápida variación de los límites de la condición humana.


Aunque, entrando con el tema a tratar en sí y dando un vistazo a la realidad actual de
la sociedad mundial, tenemos otro ejemplo: la trabajadora de una empresa de limpieza
no tiene ya más la responsabilidad que poseían un tiempo las amas de llaves de una
hacienda o casa privada, ya que la primera se limita a una tarea en particular, mientras
que la segunda abarca muchas de ellas. Y es que aquí es donde están los espacios sin
ocupar, lo que requiere una correcta coordinación para ocupar dichos campos y
tiempos, para lo cual, es fundamental que el sujeto esté informado sobre los fines del
trabajo y también de la competencia para lograrlos.

Y esto sucede así porque los humanos, ya sea desde una perspectiva teológica o
filosófica, no somos perfectos. Esto no es algo malo, no es una puerta que nos guíe a
un camino desastroso, sino todo lo contrario, es una puerta de entrada a la
responsabilidad. Si no fuésemos imperfectos no habría necesidad de una ética dada
por la Torá, o menos aún esta última. La imperfección promueve un sentido ético,
porque esa imperfección siempre está ahí, al borde del abismo.

“Los hombres son finitos. De acuerdo con su esencia, no son tan buenos como para
desdeñar lo imperfecto, pues carecen de lo absolutamente perfecto, y si lo tuvieran
no lo soportarían. Los hombres necesitan descargarse de lo absoluto y para ello
necesitan lo imperfecto”.

-Odo Marquard

Hans Jonas:
Nació en Alemania cursó sus estudios en filosofía, fue discípulo de Heidegger y de
Rudolf Bultmann,su familia fue destruida durante la segunda guerra mundial.
En 1945 ,motivado por su clara oposición al régimen hitleriano.

Fue a Canadá ,se desempeñó como investigador ,en EU como catedrático .


Publicó su segundo trabajo en el que planteó una relación necesaria del hombre con la
naturaleza,falleció en febrero de 1993 pero trasciende en su último y más célebre
trabajo ,Ética de la Responsabilidad.

Habiendo defendido la íntima y necesaria relación entre la humanidad y la naturaleza


en sentido ecológico, el autor expresa la necesidad de esbozar una nueva ética para
nuestra época.

El objetivo es presentar los pilares ,para enfrentar el Ser Humano y la tecnología y


para las cuales los esquemas éticos a la vez parecían no ofrecer resistencia .
La civilización tecnológica
El imponente avance tecnológico, no ha sido acompañado por adelanto en términos
éticos ni jurídicos. El riesgo de alterar el entorno hasta tal punto que peligre nuestro
propio bienestar o incluso la supervivencia de la especie.

Jonas afirma que el poder humano ,exige una nueva regulación ética que lo contenga
y así favorezca la preservación del medio ambiente.

Enfoque antropológico
La Ética de Jonas es antropológica, pues no tendría sentido sin referencias al ser
humano. El autor explica que la ética tradicional sólo contemplaba comportamientos
contemporáneos y de allí que no se previeron los efectos futuros de la conducta
humana .

En la propuesta de Jonas, la preocupación por la ecología se esgrime ante todo como


una preocupación por el Ser Humano .

Una ética no religiosa

Jonas afirma que el utópico moderno, ejemplificados por prolongar la vida de modo
indefinido ,exige una mayor sabiduría moral ,pero destaca a su vez que el hombre
moderno niega su objeto .El objetivo pareciera intento por la recuperación de la Ética
que la modernidad habría puesto en jaque .

La heurística del miedo


La tecnología y la técnica conlleva una reflexión necesaria ,Jonas proponer al miedo
como un método para aumentar el conocimiento ético, como un motor y guía para
alcanzar la sabiduría suficiente para garantizar su eficacia.
La heurística del miedo .

Defensa de la metafísica
Sostiene que la religión no siempre "se encuentra a disposición", pero también que no
se encuentra totalmente determinado por la ciencia positiva.CONTRADICCIÓN .
En síntesis, "Con fe o sin ella ,la pregunta por un posible deber-ser será(...)tarea de un
juicio independiente "

El escenario bioético contemporáneo.- Hacia la bioética global

La bioética contemporánea.- Al principio, el término bioética era casi sinónimo


de ética de la investigación y ética clínica
Bioética global.- establecer un puente entre las ciencias biológicas, las ciencias
sociales y las humanidad.

Por conocimientos empíricos de todas las ciencias, para favorecer la supervivencia de


la especie humana.

Consideraciones de cierre

Los dilemas por la Bioética contemporánea, incluso las "utopías modernas" tales
como el control de la conducta humana o la manipulación genética- más cercanas y
factibles la vigencia de proponer un protocolo de actuación al servicio del hombre y
su entorno .En este contexto ,el carácter antropológico de la etica jonasiana del
hombre ,incluyendo al mundo extrahumano como una preocupación prioritaria.
La obra se refiere a las atrocidades cometidas y a los riesgos ecológicos del siglo
pasado ,pone de manifiesto profundizar el objeto de estudio de la Bioética y la
búsqueda de respuestas para los dilemas de nuestros tiempos.

MAX WEBER
Una cuestión ideológica es aquella que se expone en los discursos políticos que dan
respuesta a los actos violentos que ponen esta obra forma parte del acervo de la
Biblioteca Jurídica Virtual del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM en
peligro la seguridad de las personas y su entorno. En Europa y Estados Unidos de
América, por ejemplo, la reacción política a los actos terroristas se ha centrado, sobre
todo y desde un lenguaje bélico, en defender la seguridad de la nación.

Esto supuso que “el poder político impusiera en favor de sus propios intereses la
seguridad pública” (Weber, 1993: 667).

En México, por su parte, la respuesta a los elevados índices de inseguridad por la


violencia y la delincuencia organizada ha venido acompañada también de un discurso
en términos bélicos al declarar, por ejemplo, “la guerra contra el narcotráfico”. Esta
primera acción política, la del discurso, no se agota en este plano, por el contrario, es
este uso desproporcionado o hiperbólico del lenguaje el que lleva a establecer
medidas jurídicas que, en no pocas ocasiones, son de igual manera desproporcionadas
para el fin que persiguen.
Esto es, por un lado, que la garantía y salvaguarda de la seguridad no debería llevar
necesariamente a una restricción del ejercicio de las libertades; por el otro, que esto
tampoco se ha de entender como inacción en el ámbito de la seguridad, sino en su
garantía efectiva, pues sin ésta tampoco se puede ejercer la libertad.

Así pues, “se alude con ello a todo lo que tiene que ver con las relaciones de
dominación dentro de la asociación política (del Estado), y cuyo mantenimiento,
desplazamiento o transformación pueden producir, impedir o fomentar, oponiéndose
a aquellas personas, cosas o procesos que nada tienen que ver en esto” (Weber,
1993: 44).

Los nuevos escenarios de riesgo a los que se enfrentan las sociedades contemporáneas
precisan de una reflexión sosegada y objetiva para garantizar la seguridad,
“reflexionar sobre qué nos produce un temor razonable es una buena guía para la
elaboración de leyes” (Nussbaum, 2014: 387).

Sin embargo, se ha observado que las medidas jurídicas que se han adoptado como
respuesta a los actos de terrorismo, por ejemplo, no siempre responden al interés
general, en tanto que pueden llegar a ser desproporcionadas, lo que a su vez va en
detrimento de la democracia al restringir, más allá de una intervención puntual, el
ámbito de las libertades y la convivencia entre iguales.

A partir de esta obra forma parte del acervo de la Biblioteca Jurídica Virtual del
Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM:

“LA ÉTICA DE LA RESPONSABILIDAD DE WEBER”

95 atentados terroristas del 11 de septiembre de 2001, en Estados Unidos algunos


discursos políticos se han instalado en esta lógica que legitima la restricción de
libertades ante una situación de excepcional emergencia para garantizar la seguridad.
“Las decisiones judiciales tienen, en este caso, un impacto relevante en cuanto a la
configuración del régimen jurídico del terrorismo, que busca una articulación entre
libertad y seguridad” (Tenorio, 2009).

Así, también en París, a raíz de los actos terroristas de noviembre de 2015, una de las
primeras medidas fue reformar la Constitución para declarar un estado de emergencia
por tres meses.
En este contexto, se señaló a su vez la necesidad de acelerar la creación de un
Registro de Nombres de Pasajeros, que estaba prevista desde 2011 en la directiva
mediante la cual se regula la transmisión de datos por parte de las compañías aéreas a
los Estados de la Unión Europea.

Otra de las medidas se centró en el Acuerdo Schengen, que prevé la libre circulación
de las personas en la Unión Europea, con el objetivo de realizar excepcionalmente
controles en las fronteras internas.
Esta medida se adoptó con carácter provisional en un periodo de dos años; sin
embargo, en 2017, cuando se suman nuevos actos terroristas como el de la Rambla de
Barcelona, se plantea la necesidad de ampliar este control excepcional de fronteras de
dos a cuatro años.2 Una excepción prevista en el Código de fronteras Schengen, la del
control de fronteras en caso de actuación urgente, que poco a poco se va convirtiendo
en regla.

No hay que olvidar, que “en la «seguridad jurídica» creada por la codificación
suele existir un fuerte interés político” (Weber, 1993: 632).
REFERENCIAS ACADÉMICO - BIBLIOGRÁFICAS -
LINKOGRÁFICAS

● Arias, M. (2022) “La persona en la perspectiva de la ética”. Ética, convivencia humana y


ciudadanía (Teoría 3). Universidad Nacional de Trujillo.
● Paniagua, C. (1999) “Consciencia, Cientificismo y Multideterminismo en Psicoanálisis”.
Rev. Asoc. Esp. Neuropsiq., 2000, vol XX, n.o 76, pp. 67-78. Extraído de:
https://scielo.isciii.es/pdf/neuropsiq/n76/n76a05.pdf
● (2016) “La ciencia ratifica una teoría de Platón más de 2.000 años después”. Extraído de:
https://www.lavanguardia.com/vida/20160624/402732065376/ciencia-ratifica-teoria-
platon.html
● Smith, A. (2013) “LA TEORIA DE LOS SENTIMIENTOS MORALES”. ALIANZA EDITORIAL.
Extraído de: https://www.casadellibro.com/libro-la-teoria-de-los-sentimientos-morales/
9788420676661/2196485
● Ariza, S. (2017) “El concepto de libertad en la República de Platón”. ANPOF. Extraído de:
https://anpof.org/periodicos/archai-as-origens-do-pensamento-ocidental/leitura/420/21548
● Real, O. (2015) “Síntesis y reflexión en los juicios: la teoría del juicio en Kant”. Universitat
Autònoma de Barcelona. Departament de Filosofia (pág. 381). Extraído de:
https://www.tdx.cat/handle/10803/310600#page=1
● Islas, S. “KANT HOY”. Universidad Autónoma Metropolitana. Extraído de:
https://www.uam.mx/difusion/revista/dic2004/islas.pdf

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