Está en la página 1de 3

LA MODA (Elementos para una reflexión)

Author(s): Margarita Rivière


Source: El Ciervo, Año 19, No. 192 (FEBRERO DE 1970), pp. 12-13
Published by: Ciervo 96, S.A.
Stable URL: http://www.jstor.org/stable/40805065
Accessed: 07-11-2015 14:43 UTC

Your use of the JSTOR archive indicates your acceptance of the Terms & Conditions of Use, available at http://www.jstor.org/page/
info/about/policies/terms.jsp

JSTOR is a not-for-profit service that helps scholars, researchers, and students discover, use, and build upon a wide range of content
in a trusted digital archive. We use information technology and tools to increase productivity and facilitate new forms of scholarship.
For more information about JSTOR, please contact support@jstor.org.

Ciervo 96, S.A. is collaborating with JSTOR to digitize, preserve and extend access to El Ciervo.

http://www.jstor.org

This content downloaded from 130.56.64.29 on Sat, 07 Nov 2015 14:43:17 UTC
All use subject to JSTOR Terms and Conditions
necesidad; la religion dictará Ias normas de
moral referidasa Ia moda, limitandoel alcance
EL CICERONE de esta; el status vendra indicado por una u
otra actitud hacia Ia moda; y finalmente, Ia
economia en la actualidad condiciona hasta tal
punto Ia moda que esta ha pasado de ser un

LA MODA
privilegio de determinada clase social - Alta
Costura- a convertirseen uno de los produc-
tos de consumo - Confección, «Prêt à porter»-
más interesantes del mercado general, puesto
que Ias leyes mismas de Ia moda - cambio

(Elementospara una reflexion)


continuo- crean las necesidades para su de-
manda y consumo: Ia moda es pues, economi-
camente, un producto inagotable en ganâncias
para sus promotores,que adernas tiene Ia ven-
taja de que ha de ser renovado constantemen-
La Moda y las modas perio», en la Francia de Napoleon I, compren- te. Para ello los productores de moda utilizan
dería toda una serie de acontecimientos cultu- toda clase de recursos a fin de aumentar Ias
En 1969 se empezaba a conocer en Espana, rales, de modas profundamentemarcadas por necesidades estéticas dei público: difusión en
apoyado por la aplicación de libros y artículos Ia influencia clásico-griega: desde Ia arquitec- revistas especializadas, promoción en cine, te-
periodísticos, el «movimiento camp». El tura, Ias estatuas de Cánovas, los cuadros de levision, desfiles, etc., que desarrollarán la
«camp», a través de una actitud de recupera- David, a los vestidos-túnica de Paulina Bona- capacidad de compra apelando a una serie de
ción Nevada a cabo por una «elite» intelec- parte. Igualmente, después de Ia segunda Gue- motivaciones del consumidor.
tual, promovia una nueva sensibilidad: Ia re- rra Mundial, JulietteGreco y su sweater negro
valorización de una serie de «ex-valores» es- imponían desde Ias caves de Saint-Germain- El público
téticos perdidos en una inmediata proximidad. des-Près, una moda sóbria, estricta y pesimista,
Así, muchas de Ias cosas consideradas de «mal que recogía esteticamente los postulados de «El sentimento de ir a la Moda proporciona
gusto», se han convertido en «camp». Si re- Ia filosofia existencial a Ia par que servia de a los hombres y a las mujeres una seguridad
pasamos los artículos aparecidos en las publi- baluarte a una nueva moral, Ia de Ia emancipa-
que la religion no podria darles». La cita es de
caciones espanolas, que, en cualquier caso, ción femenina. Oscar Wilde. Si pensamos que la moda es un
son una buena medida de Ia actualidad, nos (Ύ en la actualidad? Actualmente - Ia Moda, indice de integración o de no-integración al
daremos cuenta de que el momento cumbre ambiciosa, Io abarca todo- hay dos tendências grupo, a la sociedad en definitivaveremos que,
dei «camp» en Espana fue entre septiembre claras: por un lado una moda nostálgica y como médio de integración,la moda proporcio-
y noviembre dei pasado ano. Ahora el fenó- reaccionária - entre Ias que se incluye el na una cierta medida de seguridad, de identi-
meno «camp», como moda, ya «va de baja», ficación, de «formarparte de». Pêro no solo se
por Io menos aparentemente, sin que haya sigue Ia moda como uso dei vestido, sino que
tenido hasta el momento una repercusión po- ello formaparte de todo un sistema general de
pular; aunque, ^quién sabe?, todavia Ia puede «modos», usos y costumbres que harán dei
tener. hombre y de la mujer un «adaptado» - o un
El «camp» ha sido una moda más y un típi-
«inadaptado» - a Ia sociedad. De esta situación
co fenómeno de moda: ha relanzado unos ob- ai «uniforme», a Ia uniformidadsocial, hay un
jetos, unas actitudes y unos personajes; y ha paso.
puesto una vez más de relieve la tension entre Sin embargo, el paso decisivo a la uniformi-
«elite» y «masa», entre «highbrow» y «low- dad es difícil, si no imposible, por Io menos en
brow», entre «actores» y «espectadores» y Ia actualidad. Hay otro factor importante y
quizás entre «promotores» y «consumidores». aparentemente contrarioai interior: Ia necesi-
La moda «camp» ha intentado invadir todos dad de afirmación personal como individua-
los terrenos de Ia cultura: de Ia literatura ai lidad; en otras palabras, la búsqueda de Ia di-
Margarita
cine, de Ia filosofia a la investigacion,del pe- Rivière ferenciación y la originalidad cuyo caso extre-
riodismo a Ia política. mo seria el exhibicionismo o el ««snob». En
Y, naturalmente,también Ia Moda, Ia Moda cierto sentido, y como dice Eugênio Trias, el
con mayúsculas, Ia dei vestido. El vestido «snob» es un ser sacrificado: su única ley con-
«camp» ha consistido en una vuelta a Ia esté- siste en «no hacer Io que todos hacen», o sea,
tica de los anos 30-40 en la vanguardia de Ia diferenciarseai máximo de los demás, no acep-
Moda. De esta Moda, «Ia calle», «el consumi- Cuatro anos corresponsalde «Marie Claire»
tar el uniforme.Hay que reconocer que pese a
dor», solo ha cogido ciertos detalles: el ma- en Espana. Dibujantede Modas. Eetudiantede
Periodismo.Colaboracionesen diversasrevistas
ai evidente dependência dei «snob» a Ia masa
quillaje de ojos lángidos a Io Harlow, Ia mele- - esta le dicta Io que «no» debe hacer- su
na «Garbo» y el largo de Ia falda. Pêro Io especializadas. Prémio Internacionalde Pos-
necesidad de originalidad y diferenciación le
importantees que esta Moda ha sido reflejo, ters,1968. PrémioBrunetReportaje,1969
conducen a aceptar integrarse - todo Io más
expresión y símbolo de Ias modas «camp» im- pronto y rapidamente posible- en las nuevas
perantes en otros terrenos. modas, de Ias que es uno de sus «motores» in-
Esto ha ocurrido siempre: Ia Moda ha sido
«camp» - de atuendos românticos y exóticos: dispensables.
expresión de Ias diferentes modas imperantes la maxifalda de 1970, Ias telas de terciopelo, La moda de hoy juega con estos dos concep-
en un momento determinado, es decir, expre- el pelo largo masculino... Y por otra parte una tos, mejor dicho, utiliza el deseo de «ser ori-
sión de un estado de cosas en la sociedad. De tendência funcional-futurista,que parte dei ginal» para alcanzar Ia seguridad dentro de Ia
ahí su importância; de ahí Io apasionante de «tailleur» de Coco Chanel - Ia «grande Made- moda, y para ello pone ai servido dei consumi-
su estúdio. moiselle»- y que continua hasta la imposición dor una variada gama de «formas-modas-a-
Así, Io que se ha Mamadodespués «estilo im- de la minifalda y el género de punto, la aboli- gogó» que le proporcionarán Ia seguridad de
ción de la corbata y de las tradicionales prendas saberse original e integrarsea Ia vez, prepara-
interioresfemeninas. do para el trote de Ia sociedad dei bienestar.
Se tratará pues, si intentamos una posible Así, si el uniforme implicaba seguridad, es-
descodificación de la moda de 1970, de con- tancamiento y conformidad ante una moda
siderar una serie de factores que condicionan dada, y el «snob representaba - en niveles
la aparición de estas dos tendências. ideales- el gusto por el cambio, Ia diferencia-
ción y el «no-conformismo»ante una moda po-
pular, Ia moda actual asume en eterna pirueta
Una situación Ia paradoja de ser «el conformismodei no-con-
formismo».
El clima, el sexo, la edad, el trabajo, la reli- Podría hablarse igualmente de otro tipo de
gion, el status social y la economia son los pri- motivaciones: deseo de aparentar,deseo de pa-
meros y los más importantes condicionantes sar inadvertido,curiosidad, narcisismoy el ero-
externos de la moda. La moda dependerá del tismode Ia categoria de «tabu», particularmen-
clima en la medida en que haga frio o calor, te en la moda femenina; recordemos el «es-
llueva o nieve; dependerá del sexo, pese a las cândalo» producidopor el lanzamiento en 1965
modernas modas «unificadoras» como el «uni- por André Courrèges de Ia minifalda,hoy acep-
sex» - o «cosex» en version espanola- , y con tada.
el sexo aparecerá una finalidad erótica de Ia
moda que no podemos pasar por alto: el eterno Un proceso suicida
juego de «esconder» y «ensenar», de «misté-
rio» y «desenvoltura»; Ia edad indicará igual- La misma paradoja antes citada está implí-

!■■■■■«
^■grualjbo ^^PPfVtli^^^^^^H mente unas determinadas características de Ia cita en la propia dinâmica de Ia moda: Ia moda
moda; el trabajo condicionará gran parte de de ayer es fea y ridícula - está superada- ; Ia
Ia indumentáriade modo que se adapte a cada de manana, tal como se anuncia, es absurda

12 - EL CIERVO

This content downloaded from 130.56.64.29 on Sat, 07 Nov 2015 14:43:17 UTC
All use subject to JSTOR Terms and Conditions
tivaciones dei público que sigue Ia moda, y
se han iniciado algunos de los rasgos funda-
mentales como el cambio de estilo, costum-
bres, y a Ia larga civilización. Pero nada hemos
dicho todavia de como, donde, quién, lanza Ias
modas, y este es un punto importante si nos
interesa conocer mejor Ia naturaleza de Ia
moda.
En general puede habfarse de três tipos
distintos de «actores-promotores» de Ias mo-
das actuales: el «creador», el «personality-
actor», y el «industrial».
El «creador» de moda corresponde ai perso-
naje que encuentra en la moda un médio de
expresar su imaginación creadora, elevando así
Ia moda a Ia categoria de arte. A este tipo co-
rresponden algunos de los «modistos» de Ia
Alta Costura y siguen dos distintos caminos
en la búsqueda de su propia expresión artísti-
ca: 1.°, el «creador»-innovador-funcional-futu-
rista, como pudo serio Chanel en los anos 40
con Ia introdueción del pantalon femenino,
André Courrèges en los 60 -la minifalda- , y
Paco Rabanne quizá, de cara al futuro- incor-
poración del plástico y el metal como nuevos
«materiales»- .Y 2.°, el «creador» reaccionário,
que busca inspiraciónen el pasado: tal el «new
look» de Dior en 1948, que pretendia resucitar
una nueva «Belle Epoque» que hiciera olvidar
los horroresde la guerra, y más recientemente
El «Vogue» inglêslanza una moda que juega a «camp» Yves Saint-Laurent con el lanzamiento de la «Hippies». Cuando la «anti-moda»es una moda
maxifalda, inspirándoseen la época romântica,
- todavia no proporciona más que Ia inseguri- y la tendência «camp» lanzada desde Londres hechura - forma- . Así la moda se convierte
hace très anos, cuyo produeto más claro es el en un mercado que hay que conquistar, y que,
dad y los únicos que la aceptan son los
«snobs» - ; solo Ia de hoy está bien - se acep-
estilo «Twiggy». por supuesto, está sujeto a unas leyes económi-
El «personality-actor»,adernas de ser uno de cas.
ta- ; parece una decision irrevocable, pero...
los médios «clásicos» de propagaciónde modas, Los países más adelantados en estas cuestio-
Io que ahora es ayer ha sido un dia hoy, y Io
es particularmente importante en la sociedad nes, como Francia y Estados Unidos, tienen
futuro no tardará en ser presente.
de masas: se trata de personajes que por su montada una perfecta organización que com-
Si, porque Ia moda no es más que cambio por
amor ai cambio: un hecho que apenas ha na- prestigio - social, artístico, político, etc.. - prende disenadores de telas, de formas y ten-
eido ya tiene que morir,ser sustituido por otro despiertan Ia curiosidad popular convirtiéndose dências, investigadoresen ambos campos - Ia
en «modelos a imitar». Tal es el caso de multi- Alta Costura es considerada como «laborató-
hecho en un proceso sin fin. La moda fue la rio»- , proceso automatizado de produeción,
tud de artistas de Ia pantalla, desde Rodolfo
de ayer, es la de hoy,será la de manana, siem-
Valentino a BrigitteBardot,de fenómenos mu- lanzamiento propagandísticoa través de agen-
pre distinta - nueva. sicaels como Elvis Presleyy los Beatles - sobre cias especializadas y finalmente una red co-
De esta forma encontramos la principal ca- mercial perfecta.
todo los Beatles.
racterística de la moda: dinamismo-cambio,
Pero quien verdaderamente lanza las modas
opuesto a todo Io estable y duradero: estilo en la actualidad es el «industrial». No por su
costumbre, civilización; pero, en contraparti- La liberación mediante Ia moda:
da, la moda es constructor de nuevos estilos, capacidad artística - se sirve del «creador» el mito de Ia anti-moda
para ello- , ni por su influencia personal
costumbresy, a la larga,civilizaciones. dQué es - aprovecha la popularidad de los famosos con
un estilo sino Io que permanece a través de Esto que acabamos de describir configura
este fin- , sino por su capacidad de «producir»
varias modas sucesivas? En un plano estético una situación específica: Ia de Ia moda «ofi-
moda y lanzarla al mercado que la consumirá,
esto es evidente; pero, <· en cuanto a la cos- cial», ya sea Alta Costura o «Prêt à porter»,
es decir, consumirá Ia tela - matéria- y la
tumbre y la civilización? Un solo ejemplo: en lanzada por una «elite» específica todos los
el siglo XIX, desde nuestras bisabuelas - páli- anos en otono y en primavera desde las capi-
das como palomas- a los artistas, y natural- BIBLIOGRAFIA tales de Ia moda: Paris, Londres, Nueva York
mente los «snobs» - palidez de cadáver- , se Moda «camp»: y Roma, y que es aceptada, después de unos
hacía gala de «aspecto de enfermo», tan a la Contra la interpretation,de SUSAN SONTAG. Seix momentos de tension y duda, por una mayoría.
moda como los médicos que cuidaban estas y Barrai.Ensayo.Ver cap. «Notassobreel Camp». Pero he aqui que nos encontramos en la se-
imaginarias enfermedades; igualmente era de Artículos:«Más notas sobre el "camp"»: EUOUJNIO gunda mitad dei siglo XX con una serie de mo-
«buen tono» jugar a «los depravados», aun TRÍAS, en Tele/eXprés (17 de septiembrede
vimientos juveniles, más o menos intelectuali-
siendo un personaje decente y vulgar. Por el 1969.) zados, desde los «beatniks» al fenómeno «hip-
contrario,en el siglo XX se exhibirá una salud «Sintomasde banalización»: EUGÊNIO TRIAS, en pie», que no solo se niega ha seguir esta moda
insolente, los dos sexos tostarán su piei al sol, Destino,num. 1673. que les es dada o impuesta, sino que por otra
e incluso, cuando esto sea imposible por causas «CulturCamp y Cultur Kampf»: MANUEL VÁZ- parte mantienen posturas de resistência pasiva
naturales, toda clase de productos-de «belle- QUE MONTALBÁN, en Triunfo. - £o activa?- ante esta sociedad de consumo
za» - proporcionaránla «bonne mine» necesa- MODA y de «moral burguesa»: los «beatniks» protes-
ria. A esto se anade la moda «desenvuelta y PsicologiaSocial, de JEAN STOETZEL* Marfil,1966. tan, con sus barbas descuidadas, contra la mo-
deportiva» para hombresy mujeres que corres- (Ver capítulo: «Los fenómenos colectivos de da y la moral recibida por Ias gentes bien afei- φ
moda».)
ponde a un cierto aspecto «simpático y no muy tadas, de pulcros cuellos y punos y de correctas
Sociologie de la Mode, de RENE ΚΟΙΝΚί. fétite
inteligente», a un «keep smiling» y a un «gla- Bibl. Payot. Paris, 1969. corbatas, por las que son tratados de «salvajes».
mour» que ostentan desde el hombre político a Principlesof sociology,de HERBERT sraiNU&K.
Los «hippies», con sus atuendos de colores chi-
la «pin-up» en la primera mitad de este siglo. (Ver capítulo: «La autoridadde la etiqueta»,ins- Ilones y sus estrafalarios adornos, provocan el
(Es interesante notar que cuando este aspecto titucionesceremoniales.) escândalo de más de un bienpensante y discreto
de hombres y mujeres sanos, deportivosy son- Philosophieder Mode, de G. SIMMEL. Berlin,l^UD. ciudadano. Es la «anti-moda», que actua como
rientes empieza a decaer entre los «vanguar- Introdueciónal psicoanálisisy Totem y tabu, de revulsivo,no solo sobre la «moda oficial», sino
distas» extranjeros que vuelven a un cierto SIGMUND FREUD. sobre una serie de costumbres establecidas,
The psychologyof Clothes,de J. C. FLÜGEL. Lon-
«primitivismo», en nuestro pais se lanza un una forma de protesta o «contestación» con la
dres, 1950.
slogan como «Viva deportivamente») . The natureof Culture,de A. L. jlruubilk. cnica- que los jóvenes - una nueva y evidente pola-
As? serían rasgos fundamentales de la mo- ridad- se enfrentana los mayores. Pero, pode-
go, 1952. (Ver: «Order in changes of fashion»,
da: el cambio, el dinamismo, la fugacidad con- «Three Centuries of women dress fashions», mos preguntarnos,«-estahostilidad hacia Ia mo-
siguiente, una permanente renovación interna, «A quantitativeanalysis».) da oficial supone una liberación de Ia tirania
un alcanec ilimitado de sus propios y variables Systèmede la Mode, de ROLAND BARTitta. semi, de Ia moda? <;Es solo una extravagância de los
postulados, una capacidad «motora» de la so- Paris, 1967. extravagantes jóvenes o puede ser realmente
ciedad. Finalmente, en si misma, la moda im- un Camino de renovación? Quizá sea pronto
plica una actitud de obligatoriedad general. Nota a Ia Bibliografia todavia para apreciar en toda su extension este
La poça bibliografiaespecíficasobre el tema fenómeno de la «anti-moda»; sin embargo, hay
de la moda que ha llegado a nuestropais hace algo cierto: los mecanismos de Ia moda han
Los actores de Ia moda en la sociedad que remitamosla mayorpartede esta seleccióna asimilado ya el desafio propuesto y ha nacido
de masas autores y publicaciones extranjeras.Incluímos, la «nueva moda» de la «anti-moda» - la terri-
sin embargo,très obras de caráctergeneralpu-
ble paradoja.
Hemos visto los limites de la moda, del cli- a introducir
blicadas en Espana, que contribuirán
ma a la economia, así como una serie de mo- el tema. Margarita Rivière
EL CIERVO- 13

This content downloaded from 130.56.64.29 on Sat, 07 Nov 2015 14:43:17 UTC
All use subject to JSTOR Terms and Conditions

También podría gustarte