Karl Marx fue un economista clásico que intento analizar la verdadera naturaleza del sistema capitalista. Mostrando asi la relación salarial es solo una apariencia para ocultar la explotación; la cual es la esencia. Intento poner de manifestó las leyes del movimiento de la economía capitalista, asi lo escribió en el libro “El capital”. Las leyes en el pensamiento de Marx no son absolutas, sino son tendencias generales que hay que comprobar con la realidad y que se pueden contradecir. Marx situó la relación de capital entre capital y puso de manifiesto el carácter anárquico y las contradicciones internas de ese modo de producción Predijo crisis periódicas de sobreacumulación y sobreproducción y destacó las necesidades contrapuestas del capital: la voluntad de abaratar el factor trabajo para generar más plusvalía y la exigencia de aumentar los salarios reales para sostener la demanda. Si esta se cumplía conduciría a una crisis de demanda, que hoy llamaríamos keynesiana Marx, propugnó la transformación revolucionaria de la sociedad y considero su teoría como un instrumento operativo para tal fin. Definió los elementos básicos del capitalismo: la relación salarial, la relación mercantil y un tipo determinado de organización del trabajo. Puso de manifiesto que el objetivo principal de los propietarios de los medios de producción es el de acumular riqueza en forma de valor de cambio EL capitalismo tiene dinámica propia, de la que carecían los modos de producción precapitalistas Esa acumulación de excedente (plusvalía) es la que conduce a los capitalistas a competir entre sí. Efectos de competencia Inter capitalista: - La concentración y centralización del capital, lo que genera a su vez, agrupación y toma de conciencia de los trabajadores - Un crecimiento anárquico, sin ninguna coordinación que genera desproporcionalidad entre sectores y crisis periódicas de sobreproducción en unas industrias respecto de otras - Una tendencia a la baja de la tasa de ganancia, bien por intensificación del capital (aumento de la composición orgánica del capital), creando un ejercito industrias de reserva y una brecha creciente entre capacidad productiva y consumo. Creada por aumento del coste laboral por unidad de producto. El salario oscilaba en torno al nivel de subsistencia. - Tendencia al subconsumo, dadas las ansias de acumular de los capitalistas y la escasa capacidad de compra de los asalariados Marx pensaba que la composición orgánica del capital tenía a crecer a medida que se registraba la acumulación. Los factores de tal incremento son, en su enfoque, la competencia inter- capitalista intensificada que genera la introducción de métodos más productivos. El desarrollo de las fuerzas productivas, que provoca obsolescencia de los bienes de equipo y una cada vez mayor rotación del capital. La tasa de ganancia presentaba una tendencia a la baja, aunque existían diversas contratendencias que limitaban el alcance de ese descenso: - La reducción del valor unitaria de los bienes de capital, a causa del progreso técnico en la sección correspondiente, lo que limita el crecimiento del capital constante - El aumento de la plusvalía absoluta (disminución de salarios, aumento de la duración del trabajo, incremento de la intensidad) o relativa (crecimiento de la productividad laboral por hora) - La concentración y centralización del capital, que elimina la competencia y permite fijar precios de monopolio. - La intervención del Estado, que, mediante por ejemplo nacionalizaciones, puede desvalorizar una parte del capital - El comercio exterior, en el caso de que permita abaratar la adquisición de elementos del capital constante. La tendencia al subconsumo, de importancia menor, se trataba del resultado de la distribución parcial a los asalariados de las ganancias de productividad. Actualmente el crecimiento de la productividad laboral supera al de los salarios monetarios. Para Marx la acumulación de capital procedía en un estrecho filo de navaja entre dos crisis potenciales: - La crisis de rentabilidad: provocada por la caída de la tasa de ganancia, y que haría bajar la inversión, deteniendo el proceso de acumulación - La crisis de sobreproducción o de realización: debido a la contención de salarios, y que resultaría en mercancías no vendidas y reducción de la inversión de capital. La dinámica del capitalismo se ve limitada por dos riesgos: - El aumento de empleo hasta la plena utilización de los recursos humanos disponibles provoca un crecimiento de los salarios; disminuyen las tasas de plusvalía y de ganancia y la inversión - Si se contiene el crecimiento de los salarios para mantener el nivel de beneficios, el resultado es una crisis de insuficiencia de demanda (de sobreproducción). La posibilidad formal de la crisis se debe a la contradicción entre el carácter social de la producción y la apropiación privada de la plusvalía La lucha competitiva entre capitalistas, junto con su interés común por contener los salarios en proporción del capital total, generan métodos ahorradores de trabajo, con las consecuencias inevitables de: - La insuficiencia de demanda por la contención de los salarios. - El deterioro de la rentabilidad por aumento de la composición del capital. - La agrupación de los trabajadores y toma de conciencia de su propia explotación, como resultado de la concentración y centralización del capital. Marx infravaloró la posibilidad misma de un incremento de la productividad laboral suficiente, tanto para contener el crecimiento de la composición del capital, como para adecuarse al aumento de los costes laborales, para evitar una caída de la tasa de plusvalía Tampoco tuvo suficientemente en cuenta que tal incremento de la producción por empleado podría trasladarse a los salarios reales 4.2. Marx y las áreas atrasadas En la primera etapa Manifiesto comunista y El capital; Marx nos dice que el colonialismo era necesario tanto para la aparición y el desarrollo del capitalismo en Europa como para superar las tendencias al estancamiento de las sociedades precapitalistas en las áreas La expansión ultramarina y el saqueo colonial constituyeron la vertiente externa de la acumulación originaria de capital en Europa. Tal acumulación primitiva era definida como la disponibilidad de un excedente de origen interno (revolución agrícola) y externo (explotación de los recursos minerales y de metales preciosos de los nuevos territorios). Las colonias, en el pensamiento marxista, eran entendidas como un termostato del capitalismo en el centro. Representaban fuentes de productos primarios a bajo precio y mercados de exportación para las manufacturas de las metrópolis y suponían una contra tendencia al descenso de la tasa de ganancia Marx aborrecía la opresión colonial de los pueblos de las áreas atrasadas, pero consideraba que el colonialismo era un paso fundamental positivo Algunos autores han intentado ver en el Marx de aquella época un partidario de la teoría de las etapas, esto es, en un rostowiano avant la lettre. Marx dice que «el país industrialmente más avanzado no hace sino mostrar al más atrasado la imagen de su propio futuro» En una segunda etapa, Marx vio el colonialismo como un obstáculo para la industrialización de las áreas atrasadas y empezó a apoyar las luchas por la independencia y se manifestó partidario de que las colonias establecieran aranceles a sus importaciones de manufacturas Marx comenzó igualmente a percibir la singularidad del capitalismo atrasado, como producto histórico del colonialismo y ya no como un simple retraso. Ahora sabemos que un país capitalista atrasado es un país en subdesarrollo.