CAPITULO SEXTO

PARA QUE NO VUELVA NUNCA MÁS

Para alivor es necesario sacor

a la luz, sO. así pvedensonor las heni
nuestra histono, yo no queremos que
dos, yo sutrimos en corne propia
se repitan estos
hech0s. Una inmediata atención a los que quedamos
también es necesorio
atectodos, recuperor nuestros bienes perdidos,
recordor a los mvertos, los que
realizor octos o celebrociones pora
Yes muy necesarno la desopon
fueron masacrados en esta violencio. más
ción de las fuerzosclandestinas, como la G2, paramilitores, yo no
armos. Testimonio 0569.
Asesinato (guerilla). Mujer, qeqchí. lo Logu-
na. Cobón sep/81

Remhi no sólo habla-

Los personas que dieron sutestimonio al Proyecto
sus demondos y
volo-
ron de sus experiencias
de violencia, también plantearon vido
la
la destrucción y el desprecio por
raciones sobre el qué hacer para que
deberían de tomorse en
demandos sociales y aspiraciones
no se repitan. Estas
social en Guatemola. Las vo
cualquier trabajo de
reconstrucción
cuenta para
hablan del respeto a los derechos
humanos,
de las victimas y sobrevivientes lo
la lucha contra la impunidad, de paz y.
ces

del valor de la verdad, de lo justicia y de reparación

de lo importancia de las formas
los cambios sociales necesarios,
social

DERECHOS HUMANOS U
1. VERDAD, JUSTICIA Y
derechos humanos
La defensa de los

El valor de la conciencia
vislumbra en los testimonios que
la vida se
El valor del respeto por contra la
caracterizaron las acciones ejercidas
describen las crueldades que
la identidad sino, sobre todo,
un
no sólo el daño a
población; en ellos subyace el reco-
humana. Más allá de lo formal,
estuerzo de afirmación de la dignidad un
derechos tiene, pora los poblaciones atectadas,
nocimiento de los propios de la responsabi-
sentido de afirmación individual y
colectivoa, y una conciencia
lidad de las autoridades por su respeto.

TOMO1 - 129
 Esperamos que hoyo mayor opoyo para tener una vida como perso
nas, que no se viole los derechos de coda uno de nosotros porque
tenemos uno identidod como
personos, tenemos ese derecho. Tam-
bién espero que quede plosmodo en un popel pora que las outorida
des tomen cortas en el asunto y que los derechos humonos sean respe-
tados. Caso 6009, Aldea Jolomor, Huehuetenango, 1993.
Desde la perspectiva de muchas de las personas atectadas, el conoci-
miento de los propios derechos de carácter individual y colectivo, es un instru-
mento importante para evitar que la violencia contra la
gente
se repita.
Hablar de la verdad, conocer sus derechos personalesy tener más
copocidad para saber qué es Derechos Humonos a de nivel comuni
dades ypueblos indígenas. Caso 1642, Aldea Chicoj, Cohabón, Alta
Verapaz, 1980.
El respeto a los derechos humanos es una condición básica para la
reintegroción social. En un clima de polarización y división como consecuencia
de la guerra y represión político, el respeto a los derechos humanos tiene un
corácter de reconstrucción de la convivencia social en las comunidades. Los
consecuencias de la división y polarizoción extrema y la ideologización a que
ha sido sometida una parte importante de la población, hacen del conocimien-
to y respeto mutuos un valor a rescatar por encima de autoridades o grupos
dominantes. Dado el papel qve cumplieron las acusaciones de «guerrilleros»
en los atoques a la población civil, la educación y medidos efectivas parael
cumplimiento de los derechos humanos deberían tener como objetivo central la
superación de los prejuicios y promover actitudes sociales de apertura y solida-
ridad.
Organizarse para defender la vida
La defensa de los derechos humanos requiere mecanismos efectivos
por parte del gobierno y autoridades. Muchos sobrevivientes ven en la organi-
zación colectiva un meconismo útil para exigir su cumplimiento. Además, para
defenderse de los amenazos a la vido, la organizoción de la gente es vista
como una necesidad pora hacer frente a la pobrezo y las condiciones materia-
les precorias.
Estomos dispueslos a seguir luchondo, a que se nos escuche, a que
seomos libres, que se nos vea como genes no como animales. Noso-
tros somos humanos, somos genles, somos personas que pensamos,
130 TOMO
pero ellos quién sobe como lo piensan. Construir una nueva Guate-
mala y estar dentro de un pals realmenle democrático y que el Ejército
sea castigodo por los hechos que ha cometido...en lo sociedad mos
pobre, en el pueblo pobre compesino, luchodor
por su tierra, por su
comida, por sus hijos Coso 7386, Caserio Almolongo, Tquisate,
Escuintla, 1981
Quc nos respelen nuestro derecho como gualemullecos que somos,
porque cuando hoblamos, cuondo
hocemos alguno manilestación por
alguna cosa, es porque realmente lo necesitomos, por eso lo hace-
lenemos correleras, no tenemos
mos; no tenemos energío eléctnico, no
muchos cosas nos hacen fallo,
agua potoble, no tenemos escuelos,
pues. Caso 7727, Coserío Palob, Nebaj, Quiché, 1982.
Sin embargo, aún muchas personas tienen que superar dos obstáculos
claves para replantearse la participación en grupos organizados. Uno: en va
rios lugores la palabra orgonización suscito el recverdo de
sus propias expe-
riencias posadas de violencia. Dos: la criminalización de que fue objeto cuol
hace del miedo
quier organización social que no estuviera bajo control militar,
un desafío aún actual.
Que la comunidad yo no se deje engañor que se organice en uno
buena orgonizoción para lograr lo que necesitomos, porque
no es
un autobús, la
justo que el rico coma y el pobre no. Si necesitamos
comunidodse junte para lograrlo. Quiero hacer esto cuando llegveo
Guatemala, pero la gente puede creer qve soy de lo gvemilla porque
hoblo de organización. lengo que saber decido en mi pueblo. Coso
8390 (Asesinato y persecución) Concepción Huisto, Huehuetenango,
1979-80.
Bueno, yo pienso qué se deberio hacer pora evitor se repita. lo
esto
que yo pienso es organizor en los orgonizociones populares y
conocer
cudl es nuestro derecho como personas, cuól es nuestro compromiso y
también dejar el miedo por un lodo, porqve el miedo es lo que más
nos afecto. Porque o través del miedo nos hemos dejodo callor pero
en este tiempo se nos estó obriendo este espocio de hablar Entonces
este mie-
paro mí es olgo más importante que nosotros vomos a dejor
do, para que sólo así se puede logror este respelo de los unos a los
otros. Caso 2692 (Amenazas por negarse a porticipor en las PAC) La
Puerta, Chinique, Quiché, 1982.
TOMOI- 131
 Esas demandas y esfuerzos de
reconstrucción organizativa deberían el conocimiento de la verdod
acompoñorse de meconismos locales
y regionales que garanticen la libre aso- tad de asimilar esos hechos traumáticos, pero
ciación y fomenten tomiliaresa salir de la confusión.
reconstrucción del tejido social Duede ayudar a los
dancio con tormas tradicionoles de orgonizotivo en concor Para ello, lo verdad no puede quedarse en el ámbito privado, sino que
organización
poder interlocUción de la comunidad sea reconocido
de populor o
indigeno,y Cuyo ditundirse en la sociedad y dorse un reconocimiento público de los
las diferentes ins- tiene que
por
toncios del Estodo. hechos por porte de los autoridodes.
en la elobo-
Lo recolección de los testimonios tiene un valor importante
oyude a lo gente a buscar un sentido a lo
Respeto contra discniminación ración de una memorio colectiva que
recuerdo como torma de reconocer que
Lo reivindicación del
respeto a los derechos humanos sucedido ya otirmar su dignidod: el
esfuerzos de la gente por afimar su es parte de los ocurrió, tue injusto y que no se debe repetir 27
que
noción social hacia
dignidad. En un contexto de grave discrimi eso
los poblaciones indigenas, la
reivindicoción del respeto a la
persona está en muchas ocasiones teñida del sé
Al estor grabando esto me siento tranquila porque qve
este testimo-
respeto a una identidad colecti nosotros los que sufrimos
va. Las retferencias ol
diólogo intercultural son frecuentes entre los testimonios. nio que estoy dondo es poro bien de todos
Mucho gente indigena ha visto en los esas tormentos. Nos sentimos
contentos. o entiendo que es un bien
ataques a lo pobloción civil, y nuestros demds hermanos lo pensarán así, lo
mente en la política de tierra
arrasada en contra de las comunidades especial. para nosotros, todos
también. Caso
nas, una muestra de la continuidad campesi- sentirán y todos oquellos que dieron sus testimonios
del desprecio histórico 1982.
que han sufrido por 6029 (Asesinato) San Froncisco, Huehuetenango,
parte de los sectores dominantes. Sin
ción de los más pobres forma emborgo, la lucha contra la discrimina
parte de una demanda de respeto más global y
que no tiene sólo un carácter étnico.
El valor social de la verdod
de las atrocidodes
El esclarecimiento de los hechos y el reconocimiento
Que esto situoción no se vuelva a
repefir Creo que tol vez en base a contra la población civil por parte
del Ejército y las demás fuerzas son, por
desorrollo, educoción pora nosotros, para todos los civdodanos
a una
víctimas y para la memoria de toda la sociedod.
de Guatemolo. Pero que realmente tanto, un primer paso pdra las
respeten nuestros derechos como también para oquellos que no
indigenas, porque soy indigena y tengo mis derechos y tengo voz para La verdad tiene un valor social muy importante
una sociedad sometido a lo
decir algo. Caso 2176, Aldea Salquil, Nebaj, Quiché, 1980. fueron directamente afectados por las pérdidas. En
informativa el aislamiento social durante años, el
censura, la manipulación y
hechos de violencia atrocidades puede contribuir
o ou-
conocimiento de los y
historio y
Que se conozca la verdad mentar el nivel de conciencia sobre lo sucedido (conocer su propio
evitar las versiones falseadas de la realidad), promover
la sanción social a los
a las víctimas.
perpetradores y asumir la necesidad de reparación
De la verdad a la memoria
El conocimiento de la verdad es una día el Ejército voa reconocer todo lo que ho
pate consustancial del proyecto Lo que espero es que un sólo pobres
REMHI y de las motivaciones de la gente para dar su testimonio. En un contexto hecho y que no sigan, verdod, violando la ley, da cólero,
Coso 0785 (Asesinatos) Cuarto Pueblo, kcón, Quiché, 1991.
social en el que la denuncia fue criminalizada y las víctimas tuvieron seguimos.
que guar
dor silencio para no
poner en peligro su vido, la necesidad de conocer la
verdod y hocerlo público se ha mantenido latente en lo memoria de la
gente. verdad puede ser pues-
Pora los personos que dieron su testimonio, el reconocimienio de la verdad Sin embargo, también el papel reparador de la los
de justicia. Si al conocimiento de
es
el primer poso pora la
digniticación de las víctimas y sobrevivientes. fo en entredicho, si no va acompañado verdad puede convertirse en un
Muchos personas tienen todavío un grado de contusión hechos le sigue el silencio y la impunidad, la
importante so0 las demandos de cono-
bre los hechos concretos que vivieron sus
familiares, otros no saben dónde insulto para las víctimas. En los testimonios onalizados,
asociadas las demandas de justicia.
estón o se pregunton aún en la actuolidad Cimiento de la verdad están a
por qué murió. Es probable que
algunos de esos preguntos sigan sin lener respuesta debido a la enorme difticul-
27 Jodelet, 1992.

132 TOMO TOMOI- 133

 La demanda de Recuperar el sentido de la autoridad
justicia contra la impunidad y contra
justicio incluyen la lucha
Las demandas de
muchas ocasiones hon caminado juntas. El primer poso
El deseo de justicio estó muy presente en los testimonios. Para las victi. la corrupción que en

con ellos deberío ser la destitución de los corgos

militares o civiles
mas y sobrevivientes, el impocto de la violencia en sus vidas lo de sus fomilias para acobor contra la pobla
comunidades ha dejado
y han tenido responsabilidodes importantes en lo violencia
y un profundo sentimiento de injusticia, que
no sólo por el
incluyendo a quienes han participodo en los estructuras de inteligen-
dolor de lo pérdido, sino por el mantenimiento de las ción civil,
condiciones de impuni cambios en los responsables de esos estructuras
militores que
dod hasta la octualidad. cia militar. Sin
en las atrocidades cometidos, se mantendrá la
tienen graves responsabilidades
coacción hocio la sociedad y otras estructuros
Cambiar las relaciones de poder impunidad, dado su poder de del conflicto
la red de complicidades que hon tejido en los años
En primer lugar, la demanda de del Estado, y
justicia tiene que ver con una destituciones son pasos que pueden oyudor a superar
reodecuación de las relaciones de poder en el ámbito local en la armado. Además, dichas
la muerte de sus seres queridos.
de nuevas formas de violencia. Sin sanción
y prevención los sentimientos de humillación e injusticia por
social la posibilidad de que se
reproduzcan hechos de violencia es mucho mayor, dodo que se
rompen las
normas sociales básicas de convivencia.
Además, la posición de ventoja sociol a nunca queremos más amas, ya
no bombardeos, ya
queremos más
que han sacado muchos victimarios aumenta el sentimiento de más secuestros, osesinatos,más impu-
nunca

ticia de las víctimas y sobrevivientes

profunda injus- no más masacres, yo no

la destitución de los altos

que han tenido que vivir todos estos años nidod, yo no queremos más comupción,
con la humillación del silencio estón involucrodos en estos hechos songrientos,
y su falta de poder. corgos militores que sus dere-
Esa posición de poder se
mantiene en muchos lugares -incluso una vez miles miles de víctimos ofrendaron sus vidas paro exigir
que y
finalizodo el conflicto armado, familia. Caso 1885 (Asesinato de
el caso de muchos ex-comisionados
como en chos y detender lo suyo y de su
militaressupone un riesgo de nueva violencia y genero miedo a que se repita Comisionodo la gverillo) Cobán, Alta Verapaz, 1983.
por
la represión. En la perspectiva de los víctimas, lo
justicio opera ahí como una
forma de reajustor las relaciones sociales y la gestión del
poder en la sociedad. misma violencia ejercida contro la
Los cambios en las relaciones de poder y la
cuestionado el sentido de la autoridad como un poder al servicio de la
Que elgobiermo hoga una justicia cabol, porque tombién que lo haga población ha además la
en la cuhura maya. Pero
retiror estas gentes malas, pues es su responsobilidod. Porque si estas comunidad, tol como es entendido especialmente sociales de
represión politica supuso una alteración del valor de las leyes y nomas
gentes que hicieron todos los daños siguen todavía en su responsabi tiene que
idod puede ser que lo represión vuelvo. Coso 1271, Pueblo Chojul, convivencia. Lo justicia que hobitualmente es ejercida por las autoridodes,
volverse ahora contra los que la han ejercido de modo injusto, para poder salvoguardor
Quiché, 1985.
el sentido mismo de la autoridad centroda en la comunidod.

vwelva suceder y paro que los

Sin emborgo, a pesar de que trecuentemente tiende a pensarse que los Qve estos hechos de violencio no a
entre
deseos de justicia de las víctimas responden a un atón revanchista, en los testi- santas autoridades no vuelvona hacer eso injusticio, porque
sea al campesina
monios no se encuentran demandas de venganza o pena de muerte. ellos hablan decidido terminar a los trobajodores, o
1983.
do más Caso 1316, Aldea Parroxtut, Sacapulas, Quiché,
bien.
Pues que no hoya vengonzo, porque por la vengonzo se empiezon otra
vez los violociones, por un pedozo de tierro. Coso 7442, Plon de entonces reajustar las reglas
Sánchez, Bojo Veropoz, 1982. Restaurar el sentido de la ley quiere decir
relaciones comunitarias rotas por la vio-
de convivencia social y restablecer las
entre los sobrevivientes
Ojoló que se busquen unas leyes paro dor un su por de costigos, lencia. Si bien esa perspectiva estó muy generalizada
porque quilor lo vido yo creo que no sale, digo yo, costigo sí. Un reparación por lo sucedido), la justicia supone tombién
(la sanción social como
están amenazados.
Costigo si, porque quilor la vida yo creo que no. Entonces yo nos volve-
un elemento de prevención
sin el cual el presente y el futuro
mos osesinos otra vez. Caso 1274, Pueblo Chojul, Quiché, 1982.

TOMOI- 135
134 TOMOI
 Yo deseo que hoya uno ley que haya una justitia que costigue a los Justicia para el futuro
de
aulpobles, que castigue a los que han hecho mal. Que hoyo esa ley que
Lo justicia tiene tombién importoncio pora que los propios outores
castigue paro que no vuean o suceder estos cosas, porque si las cosas que cambior su condición. En ausencia del
reconocimiento
hon hecho, violencio que ho desoparecido o nuestros hemanos se quedo lasotrocidades puedan
o
asi, quere cecr qve no eNste una k que no existe una justicio, entonces lo de los hechos y
sin ponerse o disposición de lo sanción social
n u n c a von a tener

entrentarse con su pasodo, reconstruir su identidod y replon

seguirón haciendo sin ningún temor sin ninguno peno, ellos tendhán todo la lo posibilidad de sociedad.
libertod para hacer lo relaciones con los victimos y la
que quieron. Coso 5910 (Desaparición forzodo) tear sus

Soyaxché, Petén, 1988.

ha hecho una cosa es mejor que se le
pensar que si
uno
Hay que sea costigoda yno matoda. Si
castigue, dependiendo de su delito, que
a otro, serío lo ley la que
error o hayo malodo
Acabar con la impunidad se ha comeido un gron
Coso 9524 (victimario) Huehuetenango, 1980-82.
Los deseos de justicia no son tampoco ingenuos. Algunas personas están muy
vo investigor.
a
conscientes de la dificutod
voluntad
de tener justicio en los condiciones actuales. Lo fota de
politica y poder Ejército hacen ver a mucha gente la necesidad de que
el del
esos deseos de justicia se expresen de una manera organizada para que puedan ser personas destacan
el valor de lo justicio para las nuevas gene-
Algunas
una realidad. Sin un sentido ético claro de condena de los atrocidades cometidos,
rociones.
conducto habitual
de convertirse en un potrón de
la violencia corre el riesgo
el tuturo de la sociedad.
con impacto en los jóvenes y
b
diroque vao depender estverzo
cel delpveblo
poro poder erjuiciarlos
en algún futuro corto o lorgo, verdod, es lo única esperanza, nada
hechores
hayo procesos en contro de los
o
más que tal vez un dío se temine para siempre. Coso 7336 (Asesina lo que queremos es que
lástima darñor o
to) Patzün, Chimaltenango, 1984. responsables para que prueben, yo que no les dio
haya una justicia legal, que se investigve to
a
nuestros familias, que
ellos están conlentos y
dos los responsables de estos mórtires porque
dos tres cosos, mujeres, caros, tiendos. Coso 5339,
Entre las dificultades percibidas se encuentra la ineficacia y comupción del siste- tronquilos con o
1982.
Masacre Plan de Sánchez, Rabinal, Baja Verapaz,
ma judicial. Los demandas de funcionamiento de las leyes frente a la arbitrariedad del
poder de coacción suponen la reforma del sistema de justicio y la remoción de los juveces
y fiscales comuptos, o que hayan tenido participoción en lo impunidod. o menudo
Dentro de las menciones genéricas a Dios (9%) se incluyen
Frente a los modelos de seguridod basados en el incremento del control social lo mayor porte de loas
reterencias a la justicia, por lo que no son una disyuntiva
y los nuevas formas de militarización de la vido cotidiano, algunas personas ponen de hacen referencia a la «justicio de Dios»,
veces. Sin embargo, olgunos testimonios
relieve cómo es necesaria lo renovación de los aparotos de seguridaod y un cambio en Es dificil
o aceptación de los hechos.
o partir de un sentimiento de resignación
sUs modelos para evitor nuevos fomos de violencia provenientes de la concentración
saber si esa apelacióna la divina» supone una forma de diferir el
«justicia
del poder. si implica
deseo de justicia, si constituye una forma de impotencia aprendido,
o

una superación de sus deseos de justicia en la actualidad.

Loidealserio que esta ley fuese costigodo, porque de nado nos sive levarlos
o un tnibunal b comypción en Guatemala codo dío estó peor y gona el que
donde está hocien
tiene más dinero. Siyo tengoyle pogo a un buen abogodo incluso al que me Quisiera ver al menos los huesos. Pienso que estó
cosos a Dios. No pido
do las exhumaciones FAMDEGUA. Le dejo las
vo ojuxgor entonces
voyasolirbeneficiodayo, pero siyo no lengo dinerono El
justicio. Coso 9925 (Desaparición forzado) Chal,
Petén, 1981.
voy a logror eso y queda libre. Qve luviera más auloridodes, más drásticas,
mós competenles, porque ahora se estó poniendo más outoridod, digamos opliquen la jus-
más policios, pero lodo ese dinero se estó perdiendo porque son los policios Tenemos un sólo Dios y nvestra dignidad; quiero que no es bueno.
sin ley
ticia sobre los responsables, porque si seguimos
los que estón más bien hociendo esas cosas. Siempre la prensa dice que los Alta Veropoz, 1981.
Caso 0577 (Asesinato) San Pedro Chicoj, Cahobón,
policíos motoron, robaron carros. Caso 3077 (Secuestro y torturo
Solomó, Bojo Veropaz, 1982.

TOMOI 137
136 TOMOI
 Las reterencias al
perdón son escasas en los testimonios. La mayor par rizodo de los PAC. Lo demando de desmilitarizoción supone la confiscación,
te de los personas reivindica
primero el conocimiento público de los hechos y el destrucción o eliminación del comercio de ormos en los comunidades.
costigo a los responsobles. El perdón como actitud voluntaria de reconciliación
con los otensores sólo se
acepta como consecuencia del reconocimiento de la Yo entregamos los armas (PACy que nos acostumbremos a vivir como
otenso, a justicia y reparación
soci antes, que sir ormas podiamos vivir los padres nos enseñaron a sem-
brar y no a manejar armas Ojalá que no vuelvan a amar a la comu-
Yo pienso que hocer un llamado nidod, porque los ormas dar temor Caso 4687, Aldec Guantajau
las victimas de esta siluoción desde
a
años otrás, no desde el oño 83 sino años atrós, Quiché, 1982.
para contribuir oa legor
a uno
justicio, porque yo no me oy aquedar
o
perdonar: perdono al
callada... Eso que yo voy
ver que algunos de ellos estén detrás de la
rejo, eso
quede cloro. Ni oquí ni en ningún lugar voy a
que Para la gente la desmilitarización empiezo por la disolución de las es
que se quede así, es imposible. Caso 2155
perdonar
Tactic, Alta Verapoz, 1983.
(Desaporiciones forzadas) tructuras militares como los comisionados y las PAC, que produjeron uno alte
ración global de las relaciones en la comunidod, en las que los valores y for-
mas de poder pasaron a estor directamente influidas por las armos y el control
del Ejército.
2. AFRONTAR LAS CAUSAS
Pora que se eviten esos hechos de iolencia que sucedieron y que
Cambios sociales para la p a siguen sucediendo, lo primero es qve las autoridodes hogan cumplr
lo ley, qve se recojan tantas amas que andan pora ambo y paro
Un abajo, que son las que han hecho la violencio, y que los comisionados
segundo gran
grupo de los reivindicaciones incluidos en los testimo- miltares terminen, porque son los que han hecho tanto darño al pue
nios tiene que las demandas de cambio social. Muchos sobrevivientes
ver con
blo de Guatemola. Caso 6456 (Asesinoto) Morales, lzobal, 1968.
son conscientes de
que si no se entrentan algunas de las causas del contlicto y
se demuestra una voluntad
verdadera de llevar a cabo los compromisos, es Para evitar que se repitan estos hechos de violencio es necesario que
muy probable que la violencia vuelva a reproducirse. Entre los demandas de se eliminen las patrullos civiles, los soldodos, los militores que han
carácter social destacan tres: la desmilitarización, la tenencia de la tierra la hecho tantos masacres, que se fimen los acuerdos de paz y qve lo
y
libertad para reconstruir su cofidianidad. lglesia Católca siga apoyando este proceso de paz. Coso 4789, Ma
sacre Finca La Estrella, Chajul, Quiché, 1981.
Desmiliarizar la vida aotidiana
Lo primera demanda respecto al Ejército tiene que ver con la disminu-
ción de su presencia las comunidades y combio El reclutamiento torzoso se convirtió en una amenazo permanente para
en un globol en su modo de
relacionorse con la población. los jóvenes que fueron obligados y muchas veces secuestrodos para participar
en el Ejército. El peso que esta militarización ho tenido en la experiencia de la
Por eso nosofros buscomos una solución y el gobiemo lambién tiene
que buscor solución o nosotros pora que su Ejército no nos vengao gente ha sido enorme. Por eso, las exigencias de desmilitarización incluyen el
disminuir la presión sobre los jóvenes y tener alternativas frente al reclutamiento
molestor o donde estamos, que lo retire. Yo no queremos más guerra.
obligatorio que sean útiles y asumidas por la comunidad. El proceso de recons-
Coso 0717, Senococh, Uspontón, Quiché, 1988
trucción social de lo post-guerra deberío disminuir el papel del Ejército en lo
sociedad y avonzor hocio una desmilitorización efectiva.
En los testimonios se recogen frecuentes referencias al
poder de las Pora que esto no vuelvo a ocurri, pienso que lodos los cosas salen
armas y etecto destructivo en la comunidod, yo fuera en un momento como
su

parte del sistema de comisionodos militares, después con la presencia de la orgonizándonos, concientizóndonos. Puede regresor ese hiempo si no
hay comprensión entre nosotros, pero si comprendemos la nece-
guerrilla o posteriormente por la acción durante quince años del control milita- una

138 TOMO I TOMOI- 139

 Desmovilizoción y cambios en el Ejército
sidod que hemos vivido como gente pobre, como
guoatemaltecos, cree- combios especificos en el Ejército se incluyen
mos que esto ya no sería lo mismo fal vez.
Nosotros estomos de ocver Entre las demandos de 5oldo-
do en prestor un servicio pero ya no al Ejército, sino la comunidad: la desmovilizoción de los cuerpos militares, oficiales y
a
bósicamente tres: desmantelamiento de los opirgtos
pueden ser maestros ollabetizodores, promolores de salud. Coso 2297, en los atrocidades;
el
Aldea Bueno Vista, Santo Ano Huista, dos más implicados Disminur su poder de cooc
Huehuetenango, 1981. moral a las victmas.
clandestinos, y la reparocion dominio de los oparatos dei
Estado
sociedod su
respecto a la y
ción castrense las personas, pero tambien sustitur I iergr.

requiere
destituciones
y cambios en la copacidod de control dei Ejercito
Cambios en el poder local militor por la democracia y
el poder
La desmilitorización supone cambios quía y los leyes. Pero los combios no sólo
en el poder local, incluyendo la de la sociedad, del gobierno y
revalorizoción del popel de las autoridades civiles y tradicionales. Las deman- por parte cuerpos de seguridad. Los
las estructuras formales del Ejército y
das de reconstrucción y participación comunitaria en el deben darse en conexiones deben ser investigados y desmantela
poder local plantean sus
aparatos de inteligencia y clandestinos. El mantenimiento de esas estructuros
un reconocimiento
real del protagonismo de la comunidad, de las estructuras y dos como entes represivos futuro.
sistemds propios de todavío una omenozo para el
participación. paralelas de poder constituye

muchos que hacían estas masocres

De entre los soldados depende: hoy
Pora que no se repiton estos hechos, se debe
trabojor en poz, primero e r a n obusivos. A los
responsables
con la familia, después con la comunidad. rabajor con los otros sí que
que que porque les obligaban, paro
doron en Guatemala, que no salieron al refugio, luchar retirarlos y que pusieran o olros nuevos
por ivir feli- del Ejército habrío qve los mii
me parece mal que
ces, como ero antes de lo violencia. Conocer los derechos de la democrocio y respeto. Tombién
perso que haya dinero del pueblo. Mejor que Irabo
sueldo,
no-humana, recuperar el valor de la outonidod civil, v que el gobiemo tares retirodos tengon un
Masacre Caserio
Coso los campesinos. Caso 1280,
se
comprometa cumplir ley y
a la lo Constitución. 0977, Mo jen, como trabajamos
1980.
socre Santa Mario Tzejó, Ixcán, Quiché, 1981. Palob, Nebaj, Quiché,

Guotemala
la desmilitarización de
Muchas personas demondan que los combios sólo formales,
no sean La toma de medidas eficaces para internacional. Oficializar
supervisión
sino que supongan una ruptura con los volores impuestos por la guerra, entre implica para las víctimas
una conveniente
es parte de los expecta
los que destaca lo arbitrariedad, el autoritarismo y la discriminación social. Esta muchas de estas demandas de la gente
y dar cuerpo a en instancias como
lo
sus familias ponen
perspectiva es importante para el futuro, dado que pueden darse nuevos for- tivas que muchos sobrevivientes y
mas de poder bosadas en el autoritarismo sin una estructura militar formal. Los Comisión de Esclarecimiento Histórico.
recién formados Comités de Desorrollo, en los que se han convertido las PAC
en
algunas zonas del poís, corren el riesgo de funcionar como un nuevo meca inmediota desoctivoción de
nismo de control social a partir de lo gestión de las oyudos y los proyectos de a no más armas, lo que se necesito e s la
tombién es necesorio presen-
desarrollo, y muestran los intentos de mantener las mismas estructuras con ofro los oparatos clandestinos delgobierno y
mundo entero paro
nombre. tarlo ala Comisión de la Verdody ante los ojos del
con nosotros, los
sean de qué es lo qve estó pasondo
que testigos
lo que queremos ohora es que exista una persona que nos oriente y derechos. Caso 568,
pobres, la discriminación y lo violación nuestros
nos conduzcan ol bien común, siempre acó en mi aldea Najiilaboj, y
Cobán, Alta Verapaz, 1981.
que nos levante o todos a rechozor cualquier engañoy que nuestros
niños distruten de uno vido mejor lo que queremos ohora es que
tomen en cuenta nuestras peticiones y no estar sujetos al autoritarismo
yo lo que elos pretenden hacer Caso 10684 (Asesinato) San Cristó El deseo de libertad del fin del
relacionan con las demandas
bal Veropoz, Alta Verapoz, 1982. Las aspiraciones de libertad se han vivido
En los casos de poblaciones que
control militar de la vida cotidiana. Aldeas Mode
como las
concentración y control militar total,
de
en condiciones

TOMOI - 141

140 TOMO I
 Las expectativas de la pax
lo, o en las más numerosas que han sufrido otras formas de militarización
como los PAC, la gente quiere tener libertad para moverse, comerciar y reorgo-
nizor con autonomía su vida. Los expectativas del proceso de poz implican demandos de mejoi
disminuc on de las desigual
socioeconómicos poro las poblaciones pobres, la
Ccambios en el gobicino y los Sisternos de eprescntación po
dodes sociales, y
Yo no queremos que seamos
amorrados, que seomos encerrodos en los ncccsidodes de lo gene. A pesar de que
los corrales, litica poro que tengan en cuento
queremos vivir en libertod, queremos estor en poz. lesti- los testimonios tueron recogidos
ontes de la tirma de la poz, i'gunos declorontes
monio Colectivo, San Lucas Chiocol, Son Cristóbal
Veropoz, Ala
odvierten ya del peligro que convierta sólo en un proceso de
de se desmovilizocion
Veropoz. concreton combios
o desactivación del contlicto armado, si no se
socioeconómicos y legales que arranquen algunas de las roíces de lo pobrezo.
En los testimonios las demandas de libertad Demandas a la URNG
aparecen relacionadas con
lo posibilidad de expresión de su identidad y cultura. En
parte, eso incluye la Existen demandas explicitas a lo URNG. Pora los familiares de los per
libertod para celebración de ritos, de ceremonias y de expresión de las propias
sonas guerrilla, y de los que no se aclaroron las cousos de su
asesinadas por la
creencias, pero también tiene que ver con las condiciones de trabajo. Para muerte o paradero en la actualidod, las demandos tienen que
incluso sU
ver

muchas personas, la reivindicoción de mejores condiciones en las fincas tiene de los hechosy el reconocimiento de lo memoria
con la investigación pública
relación con los salarios o las prestaciones económicas, así como con un cam- con que se desorrolloron
bio en el régimen de vido sujeto a las directrices de sus de sus familiares. Dadas las estrategias de contusión
patronos. Detrás de muchas occiones armados duronte los años 80, las demandas
de aclaración y
esos demandas de mayor libertad en el trobajo y modo de producción existe
también la reivindicación de su propia identidod como campesinos y no como verdad sobre los asesinatos presuntamente cometidos por la guerrillo implicon
a los distintos actores armados.
mozos de una finca.

anlo con las tuerzos

La solución de la tierro lo iomilio quiere que s e investigue el hecho,
armodas como con el tG} en visto de que los úlimos nunco ocloraron
Las medidas de verdod, justicio o desmilitarización tienen que ir acom- Con las fuerzas
o desmintieron lo que decía el comunicado oparecido.
poñadas de ofras de carácter socioeconómico que desactiven algunas de los
armados del Estodo, porque los ometrallamientos posteriores fveron
raíces del conflicto. Desde la perspectiva de muchas víctimas, sólo se solucio- identiticodos, porque era un método de occión contro los personos
nará la violencia cuando se resuelvan los problemas de la tenencia de la tierra que oyudobon a las comunidodes y porque es responsobilidod del
y las condiciones de vido de la gente. Estodo oclorar la sitvación y nunca lo hizo. Caso 3338 (Secuestro y
Pues pora mí lerminar con todo . ncio, digamos que tienen desoparición forzado) Chiantlo, Huehuetenango, 1981.
fuerzo, los que uson amas como el Ejército, lo que me doy cuenta es
que de sus ormos viene todo esa matonzo, o que fueron reducidos los
Ofras demoandas explicitos tienen que ver con las de
soldodos. Yporo que no hoya violencio, para que se lermine deliniti-
explicociones
su
vamente el problema es cuando se reparton las rerros a los pobres, y comportamiento con la gente. Especiolmente en el áreo rural, las promesas de
alli ya no habrá más violencio niproblemos. Coso 6629, Finca Sapalau, combios sociales o defensa frente al Ejército que realizó la
Cobón, Alto Veropoz, 1981.
se guerrillo vieron
frustradas por el desarrollo de la guerra y por la percepción de un falto de
Lo mejor distribución de las tierras constituye no sólo una torma de Comportomiento consistente por parte de la misma. Alguna gente que involucró
se

reporación sino sobre todo de prevención de nuevos problemas y contlictos en la guerra o que vio en la guerillo una oportunidad pora mejorr su situa
socioles. abondonado por la falto de respuesta en los momentos
Ción, se sintió después
de mayor crisis.

Deseo vvir en paz, que estos hechos de violencio no se repilan nuevo

Deseomos que la guerillo no engañe mos
mente pora nuestros hijos.

TOMOI- 143
142 TOMOI
 a la de
genteporque no fue cierto lo que dijeron, no nos detendieron ante ellos estón delendiendo lo que tenlamos perdido. A través
esaos

los soldodos. Todos los muertos son inocentes, es Ahorila

población civil, pero autoridodes nosotros ya nos sentimos personas con ánimo.
los guerrilleros huyen, no se paron ante educar a nuestros
el jército,
sino que dejano
lo debemos tomor en cventa que lodos valemos igual,
pobloción ante el Ejército. El Ejército y las PAC fueron los osesinos de no como se crió esa gente que

todos. Por eso no deseomos que esto vuelvo, que se tirme lo hijos, dorles buen consejo, buena idea,
poz por- se metió o eso
olítica malo, destruclora. Que lengan cuidado para
que los que sutrimos somos nosotros
los pobres. Coso 2454 Coso 2300 (Desaparición forzoda)
(Asesino vivir, paro lormarse en este mundo.
to y tierra
arrosado) Chipal, Son Juon Cotzal, Quiché, Nentón, Huehuetenango, 1982.
1982
Que loguerrilla reconozca sus errores, que se ocuerde de los volantes
que repartíon y decíon: la guerila estó unida con el pueblo,
jomás
será vencido' y eso no era cierto. El Ejército debe reconocer sus erores
El papel de la iglesia
a la búsqueda de la verdod
cuando se presentabo de civil paro investigar y luego
castigaba con la La Iglesia aporece en los testimonios ligada humanos. A
muerte, había engaño. Coso 8008, Los Angeles, Ixcán, Quiché, 1981. educativo respecto a los derechos pesar de que
y con
un papel
estor condicionodas hacio una moyor complacen
estas declaraciones puedan
los testimonios han sido recogidos por personas y
cia con la lglesia, dado que
con ello, su presencia
institucional la confianza
y
los ojos del mundo. la presencia intemocional estructuras que tienen que ver
sociales pueden tener en ello, implica uno demando para
A pesor de que muchasveces el Ejército y el gobiemo trataron de des-
prestigiar internacionalmente las demandos y denuncias interpuestas por gru-
que muchos
sectores
activa en la detensa de los
derechos de la gente.
que se mantengo
pos de derechos humanos, para las víctimas y tamiliares el conocimiento inter
nocional sigue un popel disuasorio preventivo. seria lucho poor
teniendo
Lo posibilidad de presionor al gobierno y las instituciones del Estado
Pora que esto n o se repito, n o vuelva

loda la
a suceder, uno

hemandad, de loda la humanidod

porte de la lglesio, de
estamos personos en la tiema que
Dios nos regaló, no
poro supervisar el cumplimiento de los acuerdos con las poblaciones afectadas porque oquí
libros dice Dios que nos dio la vido y
sólo
por lo guerra (retorno, etc.) ha estodo relacionoda con lo capacidad de los s o m o s animoles y según los
1981.
derecho a quiBarla. Coso 9513 (Tortura) Huehuetenango,
victimas y grupos de apoyo de hacer visible su sufrimiento más allá de sus éltiene
fronteras. La dependencia del gobieno respecto a los tratados, leyes y meca-
nismos internacionales de control de la situación de los derechos humanos, así
un desofio paro la lglesia
como su necesidad de restablecer sus relaciones económicos con oftros países, Los expectativas depositadas en ella suponen
ha operado en parte como un factor fovorable al combio. A pesar de la resis- en Guatemala. Tanto en lo que respecta
a su compromiso con la gente como a
con poder, los testimonio[
de
tencia de una parte importante de los sectores económicos, políticos y militares, la propia visión de la lglesia como institución
material de reflexión para su acción social.
la presión y presencia internacional ha supuesto un foctor de apoyo a los ex REMHI ofrecen también un

pectotivas de paz y de respeto a los derechos humanos de la gente.

Por eso, el mantenimiento de la presencia de instituciones internaciona- Bueno, yo creo que nuestra religión, la lglesia Católica tiene un gron
les de derechos humanos, y su supervisión del cumplimiento de los acuerdos, compromiso con todos esos hechos de religión,
violencio. En la vamos

es una demanda frecuente en los testimonios que se retieren a la presencia a regreso, no ol Antiguo lestomento,
sino al Cristo que tuvo uno túni-
su cobe
internacional. co, ol Cristo que dijo: hasta
los pójaros tienen donde recostor

del Hombre tiene donde. Si tenemos uno religión en

Mós que una evaluación concreto de dicho presencio, el hijo no
los testimonios za y

nvestro corazón, sincero, creo yo que podriomos

domina, los poderes
se refieren al papel que globalmente ha ejercido en la restitución de condicio- nuesro Dios, es el dine
económicos y los poderes politicos. Pero hoy,
nes de convivencia sociol y respeto. Cuando ese papel ha sintonizado clara- económico. Yyo me hice esto pregun
mente con la experiencia previa, valores o expectativas de las comunidades, la ro, eselpoderpolitico, elpoder
tenemos este mundo? Caso 5444 (Asesi-
ta: si hoy religión, ipor qué
evoluación de su presencia es muy positiva. noto) Guatemala, 1979.

Grocios a estos señores que han pensado formar una auloridad pora
delender nuestros volores. Nosolros debemos apoyarlos, entender que

TOMOI - 145
144 TOMO I
 Entre esas expectativas se encuentra también la
moria. Algunas familias y comunidades afectadas devolución de la me- Una tercera demanda tiene que ver con las propuestas de reparacion
el
por la violencia consideran social tantoa los sobrevivientes como
los fornas de memoria colectiva de las
que trabajo de búsqueda de la verdad no debería terminar en la elaboración victimas y exhumaciones.
de un intorme, sino que tiene que volver a donde nació Las formas de reparación no pueden devolver lo vida
ni recuperar las
y apoyor mediante la
enormes pérdidas sociales y culturales. Sin embargo, el Estado tiene lo oblig
producción de materiales, entre otras cosas, el papel de la memoria como
Crimenes de
instrumento de reconstrucción social. ción de o'recer as viclimas y sobreviv..ntes de ias atrocidades y
a

i compensar algunas de
esas pérdidas
Leso Humanidad, medidas que ayuden
Las
y que las poblaciones
otectadas por lo violencia puedan vivir con dignidad.
Al dar mi testimonio me siento desahogodo
porque ya dije todo lo que asesinadas o desapa-
he sutrido, grocios a ustedes que vienen a visitanos, a recibir nuestro demandos de reparación de lo dignidad de los personas
con la clariicoción de
testimonie, osi nos desahogomos porque nos encontromos muy opri- recidas parten del reconocimiento de los hechos, siguen
la
su destino, y se concretan en
la búsqueda de sus restos, la exhumación y
midos, gracios a Dios con esto nos desahogamos. Ojald que nos die-
familiares de carácter cultu-
inhumación posterior siguiendo los ritos públicos y
ran un libro pora que quede como historia, paro que nuestros hijos se demanda se incluye
ral y religioso. Las distintas medidas de «reparación» cuya
den cuento del sufrimiento de nosotros. Caso 7462, Masacre Aldea sobrevivientes tienen que ver con: compensaciones
Chichupoc, Baja Verapoz, 1982. en los testimonios de los
becas y programas de estudio, c o n m e -
económicas o proyectos de desarrollo,
atención psicosocial a las víctimas o
moraciones y monumentos, y proyectos de

3. REPARACIÓN Y RESARCIMIENTO sobrevivientes.

Quitornos esa tristezo que tenemos, tal vez hayo alguna manero, algu-
lenemos que volvemos a unir y exigir nuestros derechos. Lo que yo Jal vez hayo
alienfo para poder quitor esto tristeza.
exijo ahora es que elgobiemo me pague los daños. Nosotros vivimos no palabra de malo nosotros tenemos
algun método pora oyudornos a quitarlo qve
a ravés de nuestros coches, gollinas, pves no tenemos oro negocio. Caso 3907, Nebaj, Quiché, 1980.
Tombien el pueblo exige lo que ho perdido, porque sólo de eso vivi-
de estos grondes inistezos.
mos. El Ejército quiere terminor con nosotros
porque no quiere que
nos superemos. Nuestros obuelos decíon que es un deber del gobier cuenta tanto los
no ayudor pero entroron los malos gobiemos y ya no nos ayudaron. El valor de las ayudas tiene que evaluarse teniendo en
beneticios prácticos que pueda suponer c o m o la importancia de
la dignidad de
Caso 3909, Aldea Xemal, Quiché, 1980.
vistas como un susti-
la gente. Las medidas de reparación tampoco pueden ser
tuto de las demandas de Verdad y Justicia. Por otro lado,
muchas veces la

gestión de las ayudas puede provocar nuevos problemas y divisiones comunita

rias si no se establecen claramente los criterios de reparación.
cubrir la globolidod Las ceremonias y la sepultura siguiendo las tradiciones religiosas y cul
28 Según lo Comisión de Derechos Humonos de la ONU, lo reparación debe al derecho
los medidos individuoles relativas de
de perjuicios que sufrió lo vícimo; comprendiendo furales tienen un valorpara el proceso de duelo. Lo participación
importante
como se encon-
restitución, que liendan o poner o las víctimas en uno situación parecido o
indicador importante de la calidad del trabajo y el
o
lo ontes de los violaciones (empleo, propiedades, retorno al poís, etc.) medidas de indemni-
trobon
la comunidad puede ser un

Zación se retieren o los compensociones económicos por los daños sufridos, medidas de readop acompañamiento que las comunidades demandan. El trato de los restos a las
pautas y creencias culturales, así como una informoción clara el proceso,
toción se entienden oquellas destinadas a cubrir los gostos de atención
simbólico tales como e l
salud o juridico,
deberían formar parte del carácter reparador de las exhumaciones.
sobre
medidos de reporoción de corócter generol de tipo las decloraciones oficiolesreconocimientoo
rehobilitando
público de su responsobilidod por parte del Estado;
monumentos y homenojes o los victi
victimos en su dignidod; las ceremonias conmemorafivas,

mos; lo inclusión en los manuoles de historio de

lo norroción fiel de las violaciones de gravedad
excepcionol cometidos. El derecho de reparación incluye
también los gorantias que o se de 29 Por ello, las occiones de reparación deberían tener en cuenta lo los
participoción de que pobla-
tales como disolver los grupos
seguirán cometiendo las violociones a los derechos de la gente,
excepcionales, legislativos ofros, que
ciones afectadas, su copacidad de decisión, y criterios cloros basodos en
la equidod
rion guior los posos de los distintos medidos de reporación, yo sean éstas de carácter económico
debe
ormados paro-eslaloles; de dispositivos
la eliminación
los ogenles
tovorezcon las violociones; y los medidos odministrativas u otras que conciernen o
o psicosocial.
del Eslado que hon tenido responsobilidodes en los violaciones y olrocidodes.

TOMOI- 147
146 TOMO I
 loprimero que queremos es que nos apoyen paro darle su aistiana
a esoshemmanos que está en ese lugar están meidos en ese sepuftura
do. Ylo segundo nuestro comunidod estó olidoda lugorabandona
totalmente por el Gobier
no, tenemos comunicaciones, caminos; no lenemos nada
no
reconocido por
elgobiemo, nos tene abandonados... Cuondo se dé trómte queremos que
vengon autoridades naciono.es e intemacionales para venficar los hechos,
queremos la verdodero justhicia. Coso 560, Cobán, Alta Veropoz, 1981.

Pero las demandas de investigación sobre el destino de sus

familiores,
exhumaciones, etc. también estó ligada a las necesidades de reconstruir la vida por
parte de los familiores. A pesar de la convición de su muerte, muchos familiares se
entrentan a las trabas burocráticas que les obligan a realizar nuevos estuerzos, pasar por
nuevas humillaciones o enfrentor gastos provocados por la represión
sufrida.

Serno bueno que le digamos a las leyes qve les digon a las de la Municipoi-
dod que se pierda, que se boe el nombre de los muertos, para que queden
ibres yya no tengamos problemas. Queremos que se vayo con los leyes pora
que se pierdan las nombres, se recojan los muertos, que se recojon sus hvesos
de los muertos, eso es lo que pensarnos. Coso 10514, Mosacre Sawachil,
Alta Verapaz, 1980.

El valor de la memoria como reparación va más allá de la reconstrucción de los

hechos, constituye un juicio moral que descalifico éticomente a los perpetrodores. los
conmemoraciones y ceremonias pemiten darle al recuerdo un sentidoyreconocimien
to público. Ademós de reconstruir el pasado, el valor de la memoria coledtiva tiene un
corócder de movilización social, dado que ayuda a los sobrevivientes a salir del silencio
y digniticar a sus familiares. Esas celebraciones y conmemorociones no deberían ser
sólo un recuerdo del dolog, también son una memoro de lo solidaridod.
Muchos familiares reafirman el valor de la memoria colectiva transmitido a las
nuevas generaciones como una foma de aprendizaje, y la importancia de difundirlo
mediante actos públicos, la publicación de los resultados, a edición de materiales peda-
gógicos y actividades comunitarias.

Ojolá que quede escrito todo esto pora que estos niñios pegquefños de ahoro lo
sepan algÚn dio y tratar de evitor que vuelvo a ocumir esto. Hoce 15 años que
desenlemamos a todos uestros muertos y hasta oahora no se ha tomado
como un cementerio, pero nosotros sabemos que ahí están y así es como lo
queremos. Caso 11418 (Asesinatos) Caserio El Limonar, Jacaltenango,
Huehuetenango, 1982.

148 TOMOI