Está en la página 1de 447

1

CC7 {Camren Fanfic. Traducción} by camrenofficial


Lauren y Camila son dos prometedores talentos futbolísticos del país. Las dos chicas juegan para la
selección estadounidense de la categoría U-17 y su meta es ganar el campeonato del mundo en
Costa Rica.

Su conexión en el campo es evidente pero.. ¿Qué pasa cuando los sentimientos que ocurren fuera
del campo entran en juego?

AUTORA: Jazmin (en Wattpad @moviegeek120 )

=================

Capitulo 1

Estaba corriendo por el campo como una loca, pero ese era mi trabajo como mediocampista
central. Si mis compañeros me veían tocando mi barriga ellos iban a hacer lo mismo. Pero si lo
daba todo, ellos harían lo mismo. Ajusté rápidamente mis pantalones cortos después de ser
abordada por Dinah cerca de la línea de medio campo. Ella me ayudó a ponerme de pie antes de
ver a Camila corriendo por la línea lateral izquierda. Con una precisión perfecta, incliné la pelota
para que la chica más joven la recibiera.

Camila, o CC7 como algunas de nosotras la llamábamos, en referencia a CR7 (Cristiano Ronaldo),
fue de lejos una de las futbolistas jóvenes más talentosas del país. Todas los éramos. Después de
todo, estábamos en el Campeonato Mundial Sub-17 y estábamos jugando para ser el equipo
número uno. Pero Camila era la pequeña estrella debido a su impecable técnica y su destreza por
la aplicación de los trucos más difíciles en el juego. No mencionando que era increíblemente
rápida. Tan rápida, que tuve problemas para mantenerme al día con ella cuando corrí hacia la
meta.

“! Camz!" grité, porque no había nadie alrededor y tenía una oportunidad perfecta para anotar si
ella me pasaba el balón.

Pero la chica que llevaba el número 7 en su espalda estaba tratando de botar a varios defensores
que estaban en su camino y finalmente perdió la pelota. Suspiré con frustración. Esta no era la
primera vez que ella había hecho eso hoy y no estaba segura de por qué estaba siendo tan
egoísta. Por lo general, hemos jugado juntas y nadie habría tenido una oportunidad de quitarnos
el balón. Entendíamos las jugadas del otro sin mucha comunicación. Siempre supe lo que ella
pensaba, hacia donde iba a correr o lo que iba a hacer y viceversa. Por alguna razón, Camila se
mostró inflexible acerca de no querer jugar conmigo.

Me mordí la lengua durante un buen rato hasta que ella lo hizo otra vez; y otra vez. Corrí hacia el
lado izquierdo del campo, tenía que enfrentarla.

2
"¿Qué está pasando contigo hoy? ¿Por qué no me pasaste la pelota?" Le pregunté con severidad y
obviamente enojada.

"Nada." La otra morena simplemente se dio la vuelta y quiso salir corriendo, de vuelta a su
posición, pero agarré su muñeca.

“! Quítame tus putas manos de encima!" Replicó Camila y me sorprendí por su fuerte reacción.

"¿Cuál es tu problema?" le solté la muñeca pero no podía creer porque ella estaba enojada
cuando yo tenía muchísimas razones para estar enojada con ella.

"Tú eres mi puto problema." Exclamó en un tono que yo sólo había oído cuando se dirigía a
nuestros oponentes o tal vez al árbitro, pero no cuando se trataba de mí.

“! Cuida tu boca, Cabello! ¡Sigo siendo el puto capitán de este equipo!" Dije entre dientes y sentí
mis ojos verdes casi ardiendo de furia ahora.

"¿Qué vas hacer, eh? ¿Mandarme a la banca?" espetó, a sabiendas de que el quipo la necesitaba
para el próximo martes más que nunca y nuestro entrenador jamás la mandaría a la banca.

"¿Te sientes toda alta y poderosa hoy?" le respondí y sentí de pronto como empujó mi hombro tan
fuerte que me caí en la hierba verde. Me quedé muy sorprendida, pero mis impulsos eran más
rápidos que mi cerebro tratando de procesar porque ella me había hecho eso. En una fracción de
segundo, me levanté de un salto y quise enfrentarla, pero varios compañeros del equipo me
sostuvieron hacia atrás y alejaron a Camila.

"¿Qué están haciendo?" oí a Normani, nuestra centrocampista defensivo, gritar en aparente


desconcierto. "Cálmense. ¿Ambas quieren estar expulsadas para la final de mañana? ¡Tengan su
cabeza en el juego! ¡Está es casi nuestra última práctica!"

Mi pecho subía y bajaba mientras miraba a Dinah hablar con Camila tratando de calmar a la chica
de dieciséis años de edad. Había visto a Camila enojada antes. El riesgo de no jugar en la final de
mañana ni siquiera era una opción para mí. Así que, me aguanté y terminé la práctica ignorando al
centrocampista izquierdo. Nunca había gritado. Como el capitán, por lo general siempre me
preocupaba que todo el mundo estuviera tranquilo y sin tensión. Se suponía que debía ser un
modelo a seguir. Tenía que asegurarme que las cosas no se fueran de las manos.

Después de la práctica, volvimos a nuestro hotel y decidí que las cosas se enfriaran durante unas
horas antes de dirigirme a la habitación de Camia. Ella estaba compartiendo la habitación con
Dinah, como siempre. Ambas fueron a la misma escuela y habían jugado juntas desde una edad
muy temprana. Sin embargo, su amistad era beneficiosa para nuestro juego. Al igual que mi
amistad con Camila había sido buena para nuestro equipo hasta hoy. En realidad, ella había estado
ignorándome por un par de días, pero no me lo tome como algo personal. Supuse que eran los
nervios. Estaba concentrada en ganar el Campeonato de todos modos y no quería ningún tipo de
drama. Fue por eso que tenía que hablar con ella. Llamé a su puerta.

3
"Hey." Saludé cuando ella abrió y suspiró. "No estoy aquí por una segunda ronda. ¿Podemos
hablar?".

Camila simplemente abrió la puerta y me dejó entrar sin decir nada más.

"Mira," comencé cuando llegué a la mitad de su habitación del hotel. "Lo siento si estaba siendo
dura contigo hoy. Pero estabas cometiendo errores innecesarios y tenemos que eliminar a ese
equipo mañana porque Alemania nos va a patear el trasero si no mejoramos nuestro juego. No fue
personal. Pero como capitana-"

"Sé que eres el capitán, por el amor de Dios." Camila rodó los ojos cuando me interrumpió. "Pero
también pensé que eras mi amiga."

"Yo soy tu amiga." Dije de inmediato y estaba más que confundida sobre por qué ella estaba tan a
la defensiva y distante.

"¿Entonces por qué hay gente diciendo que estás hablando mierda sobre mí?" ella se cruzó de
brazos.

"!¿Qué?! ¿Quién dice eso?" estaba más que sorprendida al escuchar eso.

"Muchas personas me han dicho que tienes un crush en mí." Camila dejó escapar.

Sentí que mis ojos casi saltaron de sus órbitas mientras mi corazón dio un vuelco. Mi boca se secó
cuando escuché a la jugadora ser tan contundente sobre algo que había oído. Quería contestar de
inmediato, pero nada salió de mi boca por unos segundos.

"Oye, Lauren," su voz se suavizó sólo un poquito. "No soy homofóbica ni nada, pero no estoy
interesada en... eso. Y no quiero que la gente piense que hay algo entre nosotras cuando sólo
somos amigas."

"Lo sé." Me las arreglé para formar palabras y sonreí lo mejor que pude. "No tienes que
preocuparte. Probablemente dije algo estúpido en el vestidor. Ya sabes cómo hablamos allí y las
chicas probablemente hicieron un gran drama. No estoy enamorada de ti." Me reí casualmente y
vi como sus rasgos faciales tensos se suavizaron poco a poco. "Yo tampoco quiero que ningún
rumor este dando vueltas, pero tampoco quiero ningún tipo de tensión extraña entre nosotras
antes del partido más importante de nuestras carreras hasta el momento."

"¿Estamos bien?" le pregunté con otra sonrisa y le tendí la mano para estrechar nuestras manos,
para manifestar nuestra tregua.

"Estamos bien." La mediocampista izquierda finalmente devolvió la sonrisa y estrechó mi mano.

"Muy bien, duerme un poco. Te necesitamos mañana." Le di unas palabras de alientos antes de
salir de la habitación del hotel.

4
Mi corazón todavía latía erráticamente mientras caminaba por el pasillo vacío. La verdad era que
yo tenía un crush en Camila. Yo tenía uno desde que la había visto por primera vez. ¿Cómo no
tener un crush en ella? Ella era hermosa, y una de las mejores jugadoras de nuestra generación. El
talento era definitivamente una cualidad atractiva pero ella tenía aspectos tan diferentes por los
cuales me gustaba. Era muy apasionada por el fútbol y realmente pensaba que se veía muy
caliente cuando peleaba con alguien. Bueno, a excepción de hoy, cuando peleó conmigo. Camila
no era muy habladora. Sus caminos misteriosos eran otra ventaja en mi libro. Tenía buenas
habilidades de comunicación y podía destrozar su tendencia a ser tranquila y reservada.

Pero sólo nos veíamos una a la otra por unas pocas semanas cuando teníamos campeonatos o
practicas antes de volver a nuestras propias vidas. Ella vivía en California y yo en Miami. A pesar
que nos manteníamos en contacto la mayor parte del tiempo, sabía que sólo había una pequeña
posibilidad de su deseo de profundizar nuestra amistad. Ella ya tenía a Dinah y obviamente no
estaba buscando algo más en una niña. Mi decepción no era tan grande, porque siempre había
sospechado que ella era heterosexual. Nunca lo dijo abiertamente, pero mi "gaydar" no me estaba
fallando una vez más.

Sin embargo, estaba un poco sorprendida por su reacción. Ella parecía casi ofendida ante la
posibilidad de que yo tuviera sentimientos por ella. ¿No debería ser eso halagador? No de una
manera egocéntrica, pero por lo general la gente no se enojaba cuando alguien estaba atraído
amorosamente hacia ellos, ¿No? No quería pensar que Camila era ligeramente homofóbica pero
sus acciones de hoy realmente me confundieron. Lo mejor era ignorar todo y centrarse en lo que
era importante. Y así lo hice.

No fue sino hasta unos minutos antes de la final real para el Campeonato Sub-17 cuando miré a la
chica delgada en el vestidor. Todavía llevaba sus auriculares, sus ojos estaban cerrados y estaba
tratando de enfocarse como todos los demás. Su ritual previo al partido era siempre el mismo; la
música. Ella no hablaba con nadie, ni siquiera con Dinah, sino únicamente escuchaba las canciones
de su lista de reproducción.

Sus piernas estaban tan bien expuestas gracias a que sus pantalones eran bastante cortos y tenía
que admitir que se veía muy caliente en su jersey. La cinta roja siempre hacia juego con sus botas.
Ella definitivamente no era tan musculosa como algunas otras jugadoras, pero su cuerpo delgado
la compensaba en velocidad y agilidad. Francamente, me gustaba que fuera delgada, pero aún con
curvas en los lugares correctos. Esos pantalones cortos acentuaban su trasero lo cual era evidente
entre las chicas. Les gustaba burlarse de ella porque Camila siempre se ruborizaba cuando alguien
mencionaba su trasero.

Mi adoración hacia ella llegó a un abrupto final cuando nos llamaron para salir al aire libre del
terreno. El Campeonato era en Costa Rica y algunas chicas habían tenido problemas con el clima al
principio. Afortunadamente, yo estaba acostumbrada al calor como un nativo de Miami y no me
molestó demasiado el sol brillando al entrar en la arena. Por ahora habíamos jugado varios
partidos y todo el mundo se había adaptado a las condiciones climáticas.

5
El partido estuvo a punto de un borrón. Yo estaba en "modo de juego" y fue como golpear un
interruptor cuando todo lo demás desapareció. Lo único que importaba era lo que estaba
sucediendo en esos 90 minutos en el campo. La mayoría de las veces, apenas recordaba las cosas
cuando estaba en el campo.

Fue un partido difícil. Alemania era un rival muy fuerte y su defensa no estaba dando el brazo a
torcer en absoluto. Camila estaba tratando todos los trucos posibles, pero se enfrentó a dos
defensores. Obviamente trató de hacer su deber y controlar el lado izquierdo.

Tuve que cambiar mi juego, porque cada vez que estaba tratando de encontrar un espacio, alguien
se me tiraba encima o me atacó de alguna forma. La cantidad de veces que caí sobre el pasto fue
asombrosa. Sabía que estaban tratando de frustrar mi trabajo de la distribución de la pelota y la
creación de nuestro juego. No fue hasta una falta ciertamente brutal hasta que reaccioné.
Sintiendo el maletero del defensa alemán el que aplastó con su zapato mi pie derecho. Grité de
dolor y caí sobre la superficie.

"!Cuidado!" escuché la voz familiar de Camila mientras empujaba a la defensora rubia que fue
responsable de la falta que me tenía en el suelo. El árbitro intervino rápidamente, ordenando el
escenario lo cual me recordó a nuestra práctica de ayer. Sólo que ahora, Camila estaba llegando a
mi defensa.

"¿No te das cuenta? Ella la abordó por atrás con sus piernas, eso merece una tarjeta roja." Mi
compañera de equipo discutía con el árbitro.

"Cálmate." El hombre habló con firmeza pero vi los ojos marrones de Camila llenarse de rabia una
vez más.

"¿Cómo no puedes enviarla fuera por hacer eso? ¿Estás ciego?"

"Eso es todo, te lo advertí." El hombre de la camisa amarilla sacó una tarjeta del mismo color y se
la mostró a la chica furiosamente negando con la cabeza. Ella se alejó, pero se acercó a mí ahora.

"¿Estás bien?" preguntó y sonaba realmente preocupada mientras daba un primer vistazo a mi
pantorrilla expuesta. Había varios rasguños ensangrentados en él y sabía que los moretones serían
intensos en unas pocas horas más. Nuestro doctor ya estaba tocando mi pantorrilla antes de que
pudiera contestar.

"Sí, estoy bien. Sin embargo, deja de pelear. Si te mandan fuera estamos jodidas." Le advertí y
asintió.

Me tomó un par minutos, pero estaba de vuelta a la normalidad. El juego pasó a ser una pelea
real. Nadie se resquebrajaba aunque todas estábamos corriendo, abordando y peleando más que
nunca. Si no hubiese estado jugando, me hubiera gustado ver el partido. Al menos estábamos
dando a la audiencia un buen partido. Después de una hora, Alemania anotó. Vi que los ánimos
bajaron pero Normani y yo teníamos la motivación de todo el mundo y terminamos empatando el

6
juego a pocos minutos después. Camila envió un pase y Dinah cabeceó el balón a la perfección.
Hicieron una especie de danza para celebrar el logro de Dinah y la asistencia de Camila mientras yo
sólo la abracé brevemente. Esto no había terminado.

Estábamos en tiempo de descuento. Sólo un minuto para terminar y Camila se movía hábilmente
contra la defensa de lado izquierdo. Se las arregló para liberarse y comenzó a correr a una
increíble velocidad hacia la aérea. Yo estaba haciendo lo mismo, pero para el centro. Mis ojos
estaban fijos en mi compañera y supuse que apuntaría hacia el arquero. No lo hizo. En cambio, ella
hizo todo lo contrario de lo que había hecho en la práctica de ayer y me pasó el balón. Sólo tuve
que patear con precisión la pelota hacia el arco.

Creo que lo siguiente que supe es que todas mis compañeras animadas estaban corriendo hacia mí
y me botaron al suelo. ¡Hemos ganado! ¡Éramos oficialmente las campeonas del Campeonato Sub-
17! No pude creerlo hasta que escuché el silbato final. No podía procesar todo lo que estaba
pasando ya que todas las chicas cantaban y bailaban a mí alrededor. Enterré mi cara entre mis
manos, y sentí mi corazón latir fuertemente contra mi pecho. Poco a poco, me levanté y sentí mis
piernas inestables.

De repente, alguien tiró de mi camiseta por atrás y sentí como Camila me envolvía en un fuerte
abrazo. Su cuerpo delgado estaba presionando fuertemente el mío y me sonrió de oreja a oreja.

"Lo hicimos." Dijo y su voz sonaba temblorosa como si estuviera a punto de llorar.

"Lo has hecho." Le di la espalda y ella se apartó con una mirada confusa en su rostro.

"En realidad tú anotaste ese gol." Su sonrisa me daba todo tipo de sentimientos que no necesitaba
en estos momentos.

"Pero tú me diste me pasaste la pelota. Y ayudaste en el primer gol. De todos modos, tú lo hiciste
hoy." Reiteré y la sonrisa en sus labios era más suave ahora.

"Hacemos un buen equipo, ¿no?" Camila se mordió el labio inferior y me tragué la ligera extraña
sensación que estalló en esos momentos. Su mano estaba todavía persistente en mi brazo y la
movió sutilmente. ¿Estaba acariciando mi brazo? Los orbes marrones se centraron en mi boca
durante una fracción de segundo y fruncí mis cejas con sorpresa.

"!!!SOMOS LAS CAMPEONAS!!!" Dinah gritó y nos dio un abrazo a ambas, interrumpiendo el
momento que hizo que mi pulso se acelerara aún más. Todo el mundo se nos unió y la celebración
y fiesta comenzó.

Pasaron varias horas más tarde, cuando regresamos al hotel. Después de todas las ceremonias y
entrevistas, habíamos ido a cenar y celebrar. Mi pantorrilla todavía me dolía, pero no me podía
importarme menos después de esa noche increíble. Estaba caminando hacia mi habitación del
hotel para conseguir por lo menos un par de horas de sueño antes de viajar para volver a casa.

7
"Oh, mierda." Suspiré cuando se me cayó la llave pero luego oí unos pasos que se acercaban. Miré
a mi lado para ver a Camila que se acercaba. No habíamos hablado en toda la noche desde que
dejamos el terreno del juego. Ella había estado ocupada con Dinah y con otras mientras yo me
divertía conmigo misma. No era consiente, pero una parte de mi estaba ansiosa cuando la miré
detenidamente. Su cabello estaba fluyendo violentamente. Sus jeans negros eran muy ajustados y
su camiseta blanca era muy escotada, que, además, descaradamente dejaba ver sus abdominales.

"¿Necesitas ayuda?" me preguntó con voz ronca gracias al canto y gritos durante la celebración de
la noche.

"No, estoy bien." Le dije con indiferencia, ya que quería saltar sobre ella en estos momentos.
Jesús, nunca me había sentido así antes.

"No puedo creer que todo haya terminado. Todas esas semanas de preparación y luego los juegos
reales... y mañana estamos de vuelta a casa." Camila sonaba pensativa y me reuní con los ojos
marrones con cuidado.

"¿Estás triste por irte?"

"Un poco." Admitió mientras se inclinaba contra mi puerta. "Estar en casa está bien. Supongo.
Pero esto es por lo que vivo, ¿Sabes? La adrenalina, la emoción... pueden ser adictivas."

"Sí, ya sé lo que quieres decir." Estuve de acuerdo en voz baja y me encantó ver a la futbolista
apasionada ser tan abierta conmigo. Ella sonrió y supe que se sentía comprendida. Ahí estaba de
nuevo. Esa tensión. Ambas nos quedamos en silencio, tranquilas, y no estaba segura de lo que la
más joven estaba pensando, pero ella me estaba causando un dolor de cabeza con sus señales
contradictorias. Yo la recordaba diciendo que no estaba interesada y yo no quería hacer las cosas
más incómodas entre nosotras.

"Yo... uhm... necesito dormir un poco." Rompí nuestro contacto visual y aclaré la garganta con
suavidad.

"Claro, por supuesto." La centrocampista izquierda asintió con la cabeza mientras yo abría la
puerta.

"Buenas no-" fue todo lo que dije cuando sentí un par de labios muy suaves que se estrellaron con
los míos. Me pilló desprevenida cuando las manos de Camila se aferraron al cuello de mi chaqueta
de cuero y casi con rabia me besó. Esto no era lo que me esperaba; ¡En absoluto! La mezcla de
ternura en sus labios y aspereza de su beso me dejaba mareada. No podía respirar, pensar o hacer
nada. Justo cuando me disponía a reciprocar, ella rompió el ataque violento en mis labios y jadeó
pesadamente. Los ojos oscuros miraban hacia abajo y no miraban mis ojos confusos.

"Vete a la mierda, Lauren." Susurró en un tono completamente ilegible antes de empujarme


contra el marco de la puerta y salir corriendo.

8
Me quedé allí durante un par de segundos en un trance. ¿Eso acaba de suceder? ¿Qué demonios
estaba sucediendo con Camila? Un minuto ella me alejaba, luego me besaba y luego me empujaba
de nuevo. Había tanta confusión en mí que decidí que las cosas se debían enfriar hasta mañana.
Estaba segura que teníamos que hablar y arreglar las cosas. A estas alturas, era obvio que había
algo entre nosotras, ¿No? Tal vez ella estaba asustada, pero estaba convencida que teníamos que
hablar mañana y ver dónde las cosas nos llevaban. Seguí sonriendo como una niña gorda en una
tienda de luces cada vez que pensaba en los maravillosos labios de Camila contra los míos.

La mañana siguiente fue dura para todos. Desafortunadamente, Camila usó sus auriculares
durante toda la mañana y no me miraba. Ella era inaccesible a veces. Estábamos descendiendo del
bus mientras caminaba delante de mí con sus bolsos en sus manos. La seguí con mi propio bolso
colgado en mi hombro. ¡Ella me estaba volviendo completamente loca! Estábamos en el maldito
aeropuerto y ella todavía no me tomaba en cuenta. No me pude resistir más y me acerqué. Estaba
apoyada contra la pared con su teléfono en la mano.

"¿Podemos hablar?" le pregunté determinante y vi como levantaba su vista para mirarme, por
primera vez en el día.

"¿Sobre qué?"

"Sobre lo de anoche."

"No sé lo que estás hablando." Dijo Camila con indiferencia y eso alimentó mi ira. ¿Quién
demonios se creía que era?

"Estoy hablando del hecho que me besaste." Dije entre dientes y vi sus ojos muy abiertos por el
horror.

"Te importaría calmarte, nos pueden escuchar." Entró en pánico.

"Podemos hablar aquí delante de todo el mundo o podemos hablar en privado. Tu elección." No di
marcha atrás y la vi apretar la mandíbula. Caminó adelante y terminamos en el baño de mujeres,
por alguna razón antes de que ella se sacara los audífonos. Su postura me recordó la última vez
que habíamos hablado así. Brazos cruzados y todo lo relacionado con su incomodidad.

"¿Y?" preguntó con voz molesta.

"Tú dime. Tú fuiste la que me besaste anoche después de que enloqueciste acerca de que yo
estaba enamorada de ti." Dije directo al grano.

"Escucha, tú estabas desesperada por ese beso y yo fui curiosa. ¿No podemos llamar lo que pasó
ganancia-ganancia y olvidarnos de eso?" la menor dijo con tal arrogancia que sentí ganas de
golpearla.

"¿Eres realmente tan vanidosa o simplemente una idiota?" escupí mientras ella rodaba los ojos.

9
"No te hagas la ofendida. Te gustó y yo tuve curiosidad, ¿Qué hay de malo en eso?" realmente
quería patearle el trasero por hablar así.

"¿Tuviste curiosidad, eh? ¿Me estás diciendo que no te gustó?" me reí entre dientes porque ella
estaba más incomoda a medida que pasaban los segundos.

"No me gustó." Contestó Camila.

"Tonterías." Grité cuando vi que sus rasgos faciales cada vez estaban más inseguros. "Yo sé lo que
sentí. ¡Me besaste como si significara algo más y lo sabes!"

"Sigue soñando." Se burló.

"¿De qué estás tan jodidamente asustada?" espeté a su renuencia a admitir el hecho que disfrutó
el beso. Yo no le estaba pidiendo que fuera mi novia ni nada. Lo menos que podía decir es que le
gustó.

"!No soy gay!" exclamó.

"!Nunca dije que lo eras, por el amor de Dios! El hecho que te gustó besarme no te convierte en
una lesbiana." Dije frustrada y no podía evitar la sensación de que Camila tenía algún tipo de
problema con su sexualidad. ¿Por qué enloquecía si no había nada de lo cual preocuparse?

"!El hecho de que quieres meterme en mis bragas no significa que te dejaré hacerlo!".

"!Oh Dios mío! ¿Te estás escuchando a ti misma? No me meteré en tus bragas. TÚ ME besaste."
Quería dejarlo claro. "Me gustas, ¿Ok? No te dije nada porque no sabía si te gustaban las chicas
por eso nunca dije nada. Y estaba bien siendo sólo tu amiga, era sólo un enamoramiento inocente.
Tenía un crush en ti no de manera pervertida o sexual como tú piensas. Pensé que eras hermosa y
me gustaba estar cerca de ti. Pero ahora mismo, no sé qué mierda vi en ti."

Con eso me volví sobre mis talones y abandoné el baño público porque honestamente tuve
suficiente con Camila y su comportamiento de superioridad. No iba a dejarla que me tratara como
una mierda.

Había suficientes chicas que querían mi compañía, ¿No? Todo esto pasará, me dije a mí misma
cuando me reuní con las otras chicas. Por mucho que dijera que no me importara, sentí un dolor
en mi pecho durante todo el vuelo de vuelta a casa.

Mi teléfono estaba a tope cuando tomé la oportunidad de tener un descanso de mi tarea. Ponerse
al día con la escuela después de haber estado fuera durante los torneos era un infierno. No pude
creerle a mis ojos cuando leí el mensaje.

10
"Hey, ¿Cómo estás?" - Camila.

Durante varios minutos pensé si debía o no responder. No habíamos hablado desde esa horrible
pelea en el aeropuerto y, sinceramente, no tenía muchas ganas de verla o hablar con ella. Pero no
podía contenerme y pensé que tal vez debía hacerlo por el equipo. No quería que la tensión
afectara al equipo. Eso me pareció una excusa suficiente para responder.

"Bien."

No le haría las cosas fáciles, eso era seguro.

C: ¿Llegaste a casa bien?

L: Sí, hace una semana.

C: ¿No me harás las cosas fáciles, verdad?

L: No. Me dijiste algunas cosas bastante feas.

C: Lo sé. Y lo siento, de verdad.

L: ...

C: ¿Qué?

L: Me gustaría una explicación de ¿Por qué me trataste como una basura?

C: ¿No puedo decir solamente que lo siento y que tú me perdones?

L: No eres muy buena en ese tipo de cosas.

C: ¿Hablando con la gente?

L: Pidiendo disculpas pero sí, en eso también.

C: Tuve algunos problemas en casa y estaba tan enojada con todo el mundo. No se trataba de ti.
Estoy realmente arrepentida por haber descargado mi ira sobre ti y te ofendí en el proceso. Esa
fue la última cosa que quería hacer. ¿Mejor?

L: Mucho mejor.

C: ¿Amigas?

L: ¿No estás asustada de que podría saltar sobre ti y quitarte la ropa porque estoy locamente
enamorada de ti? -.-

C: Fui una idiota, ¿Qué más quieres saber?

L: La verdad.

11
C: ¿?

L: ¿Por qué me besaste? Honestamente.

Seguí mirando mi teléfono pero tomó más tiempo que antes, hasta que recibí una respuesta.

C: Estaba diciendo la verdad. Tenía curiosidad y tú parecías una buena opción.

L: Wow, gracias por considerarme.

C: ¿Por qué eres tan dura conmigo?

C: ¿Lauren?

C: ¿Holaaaaaaaaa?

C: No estaba tratando de herir tus sentimientos.

C: ¿Por qué no contestas?

L: Debido a que estás diciendo que habrías besado a cualquier persona esa noche pero yo fui una
"buena opción"

C: Yo no habría besado a nadie.

L: Sí, guárdatelo. Entendí el mensaje.

C: Me gustó mucho el beso.

Dejé mi teléfono en ese momento. ¡¿Qué?!

L: Si sólo estás tratando de confundirme, entonces estás haciendo un trabajo impecable, debo
decir.

C: Es bueno saber que no soy la única confundida.

L: ¿Estás diciendo lo que creo que estás diciendo?

C: Idk, no puedo leer tu mente.

L: ¿Te gustó el beso y por eso estás confundida?

C: No quiero engañarte. Te besé y además, herí tus sentimientos. No voy a hacerlo de nuevo,
porque no sé lo que siento. Lo que sí sé, es que no quiero que esto se interponga en nuestra
amistad. Simplemente quería decir que lo siento.

L: Disculpas aceptadas.

C: ¿Amigas? :)

12
L: Ya veremos. Tienes que demostrarme que no serás una gilipollas la próxima vez que nos
veamos.

C: Bootcamp en dos meses, ¿No?

L: Sip.

C: Hecho.

L: Hecho.

Los próximos meses pasaron como dos días para ser honesta. Justo cuando me había puesto al día
con todo mi trabajo en la escuela, ya estaba de vuelta en bootcamp para la Sub-17 por última vez.
Pronto tendría 18 años en tan sólo un par de semanas por lo que esta sería mi despedida a este
capítulo de mi vida. Después de eso, solo me quedaba rezar para poder entrar en el equipo de
mujeres estadounidenses. Hasta entonces, quería disfrutar mi tiempo con las chicas que pase gran
parte de mi tiempo. Definitivamente fue agridulce pensar en eso.

"Lauren, esta es tu llave del hotel." Nuestro director de equipo me entregó la tarjeta antes de
mirar a su alrededor. "¿Dónde está Normani?" preguntó porque él sabía que siempre
compartíamos habitación y quería darle una segunda llave.

"En realidad, yo dormiré con Lauren ahora."

Mis ojos miraron hacia arriba en un estado de shock cuando escuché la voz de Camila.
¿Empezamos de nuevo? ¿Ella quería ser mi compañera de cuarto después de lo ocurrido en Costa
Rica?

"Genial, es bueno cambiar las cosas." Nuestro entrenador elogió la decisión de la chica más joven.

"Sólo si eso está bien contigo, Normani." Camila le pidió a mi amiga más cercana quien había
hecho su camino hasta nosotros.

"Bien por mí. Eso significa que puedo escuchar a Beyoncé con Dinah todo el día sin que Lauren
pueda gritarme." Normani le dio los cinco a Dinah y consiguieron las llaves de su habitación. Yo
todavía estaba impresionada por la situación, y no estaba segura de qué pensar en este momento.

Nosotras sólo dejamos nuestras maletas y no hablamos en absoluto antes de prepararse para el
primer día de práctica. Fue muy agotador, por eso se le llamaba "bootcamp", ¿Verdad? Cuando
estaba en casa, siempre trataba de mantenerme en forma, pero nunca sufría tanto cuando
hacíamos este tipo de formación. Cada fibra de mi cuerpo me dolía cuando volví a la habitación
del hotel y Camila entró en la habitación poco después.

"Oh Dios mío, él sólo se dedicó a patear mi trasero." La chica ojos marrones se refirió a nuestro
preparador físico y asentí con la cabeza. "¿Quieres acompañarme a un baño de hielo?".

13
"¿Qué?" pregunté con desconcierto y la vi mirándome como si no hubiera sugerido lo del baño.

"¿Un baño de hielo para nuestras piernas? ¿Así no tendremos que soportar el dolor mañana?
¿Nunca has hecho eso?" respondió ella realmente sorprendida.

"No, no soy muy buena con el frío." Admití.

"Vamos, me lo agradecerás mañana."

La seguí hasta el baño donde ella llenó la bañera con agua fría. Desapareció por unos pocos
minutos para traer con un poco de hielo y regresó con los cubos necesarios. Todavía estaba reacia
sobre esto, pero Camila ya se estaba sacando los calcetines y las botas. No estaba en mi naturaleza
acobardarme, pero la posibilidad de sumergir mis piernas en esa agua helada no era atractivo en
absoluto. La californiana mojó sus pies y contuvo la respiración.

"A la mierda." Dijo entre dientes, pero me sonrió después. "No es tan malo una vez que estás
dentro. Has la prueba. Siempre puedes salir si es demasiado."

Tomé una respiración profunda y desnudé mis piernas de la ropa innecesaria a excepción de mis
pantalones cortos. La otra chica ya estaba de rodillas en el agua, con las piernas completamente
cubiertas por el agua. Poco a poco entré, sentí una onda de choque de ondulación a través de mi
cuerpo cuando el agua fría flotó alrededor de mis músculos tensos.

"Por Dios... ¿Por qué.... Haces esto?" casi me estremecí, pero tuve que aguantarme, sin
retroceder.

"Porque así puedo estar de vuelta a la normalidad cuando todos los demás se estarán quejando
mañana." Sonrió con aires de suficiencia.

"Siempre me he preguntado por qué nunca parecías tener dolor a pesar de que entrenabas
muchísimo más que otros jugadores."

"Ahora ya sabes mi secreto." Me guiñó un ojo y sentí mi corazón latir de una manera muy extraña.

"Sin embargo, contéstame esta pregunta. ¿Por qué quisiste ser mi compañera de cuarto?" le
pregunté con más seriedad.

"Tengo que demostrarte que no soy un gilipollas, ¿Recuerdas?" aludió a nuestros mensajes de
texto y el trato que hicimos. "¿Cómo lo estoy haciendo hasta ahora?" su sonrisa se suavizó, y por
primera vez en mucho tiempo vi un lado más dulce en ella. Mi corazón se agitó de nuevo. Mierda.

"No estoy segura si torturándome con agua helada es el camino correcto para ganarte mi amistad
de nuevo." Me burlé y la vi rodear los ojos. Me tiró un poco de agua en mi cara y sin duda me
tomo desprevenida al principio.

"!Para! Lo digo en serio." Le dije, pero no pude ocultar una risita. "Te ahogaré aquí mismo si lo
haces otra vez."

14
"Estoy tan asustada." Se burló de mí y de repente me empujó suavemente por el hombro, así que
me caí y me sumergí por completo. Sólo mi cabeza no estaba siendo sumergida por el agua helada.
Quería gritar, pero mis pulmones se congelaron al parecer mientras todo lo que oí fue la risita
adorable de Camila.

"Estás muerta." Mis labios temblaron un poco cuando me levanté para botar a la morena, pero
ella saltó de la bañera de forma rápida. Me estaba riendo ahora, a pesar de que si otra persona me
hubiera hecho eso yo la podría haber asesinada pero ella era Camila. La chica delgada salió
corriendo del baño, pero yo la seguí.

"Ok, ok, ¿Tregua?" Camila ofreció ahora que ella sabía que yo tenía el sartén por el mango. No se
podía negar que yo era mucho más fuerte que ella. Ella era más rápida, pero con la fuerza que yo
tenía, podría haberla arrastrado nuevamente al baño si quería. Su sonrisa era amplia y no podía
recordar haberla visto tan alegre y tonta... nunca. Ella estaba feliz cuando ganábamos pero esta
vez no era así. Sentí como si hubiese visto una luz nueva en ella.

"Aquí." Levantó una gran toalla como si estuviera agitando una bandera blanca simbólicamente.

"Ok, tregua." Estuve de acuerdo. "Pero necesito esa toalla ahora porque seriamente si no me la
pasas me congelaré."

Camila se acercó con un poco de vacilación, pero luego sonrió cuando se dio cuenta que estaba
aceptando su oferta de paz de verdad. Ella puso la toalla alrededor de mis hombros, y no pude
contenerme; admiré todos sus rasgos faciales. Su mirada se bajó mientras ajustaba el tejido
esponjoso que abrazaba mi cuerpo tembloroso.

"Estás temblando." Se dio cuenta y sonaba realmente preocupada ahora. Los orbes morrones se
levantaron para mirarme a los ojos y en ese momento sentí que iba a dar un ataque al corazón.
Sus delgados dedos se clavaron en la toalla y la apretó con fuerza como si necesitara algo para
sostenerse. Me tragué el nudo de la garganta cuando la maldita tensión entre nosotras empeoró.
Después de que ella me había besado, yo había asumido que todo había terminado, pero estaba
equivocada. Terriblemente equivocada.

Ella estaba temblando. No estaba segura de qué hacer cuando sus ojos se centraron en mis labios
por un segundo, pero dispararon hacia arriba nuevamente. Instintivamente pasé mi lengua por
mis labios resecos para humedecerlos. Vi algo en sus ojos que nunca había visto antes; miedo. ¿El
miedo a lo que posiblemente podía sentir? ¿O miedo de que yo hiciera algo que ella no quería
hacer?

Estaba al punto de colapsar a estas alturas. Poco a poco la vi inclinándose, conteniendo la


respiración y decidí darle un beso muy suave en su mejilla en vez de sus labios temblorosos. La
joven respiró de nuevo y pareció relajarse. Mis labios tocaron su piel caliente de nuevo y con
mucho cuidado hice un sendero hasta sus labios. Cuando llegué a la comisura de boca, inhalé
profundamente y sentí a Camila aliviarse nuevamente.

15
"Está bien." Le susurré para disminuir un poco el miedo de la otra chica.

Apenas un segundo después, mis labios apretaron los suyos; llenos de ternura y afecto. Era todo lo
contrario a lo que Camila había hecho en Costa Rica. Básicamente había asaltado mi boca con la
suya. No es que me estaba quejando, pero sabía que esto tenía un enfoque diferente esta vez.

Sus labios eran maravillosamente suaves. La forma que su labio inferior parecía encajar
perfectamente entre los míos estaba haciendo girar mi cabeza. Hubo una reacción muy sutil por
parte de ella, pero sentí un poco de presión. Mi mano se levantó para unirse a la de ella y sentí el
aflojamiento de su agarre. Aunque no quería que terminara, no podía ir más lejos sin saber que yo
no estaba forzando la situación de ninguna manera.

Así que rompí el beso suave después de unos segundos que parecieron horas para mí. Camila
estaba casi jadeando y me aferré a su mano, antes de encontrarme con los ojos marrones. Estaban
llenos de confusión, pero también de ternura.

"Lauren... yo..." tartamudeó y sentí que mi corazón latía más rápido que la vez cuando yo había
hecho el gol decisivo para ganar el Campeonato Mundial. "... Yo no quiero... uhm... no puedo..."

Ella no estaba diciendo cosas con mucho sentido, pero quise darle tiempo para que fuera capaz de
forma una frase coherente. Su suspiro de frustración era una señal de ella tratando de hacerlo.

"Yo no sé lo que siento y..." susurró suave y genuinamente. ".... No quiero engañarte. A menos
que... estés bien con mantener esto entre nosotras de manera casual mientras que pueda resolver
las cosas."

En ese momento habría aceptado cualquier cosa si eso significaba que iba a besarla de nuevo.
Probablemente no debí ser tan rápida en convertirme vulnerable, pero no podía luchar contra eso.
Fuese lo que fuese lo que me atrajo hacia la mediocampista izquierda, era más fuerte que la razón
y la racionalidad.

"Ok." Me oí decir antes de que ella sonriera levemente.

"¿Estás segura?" suspiró ella, pero yo no estaba de humor para hablar más. Simplemente asentí y
me incliné de nuevo, atrapando sus labios entre los míos. Hubo una reacción más fuerte ahora.
Ella devolvió el beso. Vacilante al principio, así que seguí con los movimientos simples y tímidos
hasta que la sentí más cómoda. Apliqué mis labios contra los suyos de un modo casto fue más
emocionante de lo que jamás habría imaginado, pero tal vez era la anticipación, o la acumulación
que hizo eso más intenso.

Después de un tiempo de los besos suaves, incliné mi cabeza ligeramente y separé mis labios para
succionar su labio inferior. La más joven se quedó sin aliento. Abrí los ojos para asegurarme que
no estaba haciendo algo contra su voluntad, pero ella fue la que se inclinó ahora para mantener la
conexión de nuestras bocas. Sus labios se abrieron un poquito así que tomé la oportunidad y
deslicé mi lengua entre ellos, separándolos para explorar más.

16
Sus manos se posaron en mis hombros, como si estuviera lista para alejarme en un momento
dado, cuando las cosas podían ir demasiado lejos para ella. Eso no era algo tan malo. De esa
manera ella tenía el control sobre lo que estaba pasando y yo no quería que ella se sintiera
impotente en la situación. La próxima vez que me dio cierta ventaja, dejé que me lengua tocara la
suya dentro de la calidez de su boca y la oí gemir en voz baja.

Y así fue como todas las noches durante esas dos semanas terminaron. Camila y yo fingiendo ser
perfectamente cordial y amistosas frente a todos los demás. Pero tan pronto como volvíamos a
nuestra habitación, una de nosotras se metía en la cama de la otra en algún momento para iniciar
una sesión que podía durar hasta horas. Estaba perdidamente enamorada de ella y ambas
estábamos conscientes de ello. Sólo que Camila nunca hablaba. Ella me besaba con locura durante
toda la noche sin decirme lo que yo significaba para ella. Estaba demasiado asustada de perder el
cariño recién descubierto para pedir una respuesta definitiva. Ella quería tiempo para resolver las
cosas y yo le di tiempo.

Le di todo de mí durante esas dos semanas y antes de que supiera lo que estaba pasando,
teníamos que volver a casa una vez más. Esta vez no tenía idea cuando la iba a ver de nuevo, ya
que esta sería mi última vez en Sub-17. Traté de actuar como si no estuviera tan afectada por ello,
pero realmente eso me estaba desgarrando a su merced. Esencialmente, yo le había dado mi
corazón en bandeja de plata y ella pudo hacer lo que quiso. Y yo se lo permití. Esa última parte me
enfureció más ante su falta de voluntad de hablar conmigo.

Ella me había estado ignorando toda la mañana hasta que tuvimos que decir adiós en el
aeropuerto para tomar nuestros vuelos. Sus nervios se estaban mostrando por la forma en que
mordía su labio inferior.

"No puedo creer que haya terminado ya." Dijo con voz baja y yo tenía una sensación que no sólo
se estaba refiriendo al bootcamp.

"Lo sé. Realmente voy a extrañar esto." Le confesé al intentar leer sus ojos oscuros que evitan
cada mirada que le di.

"Te llamaran del equipo femenino y te vas a olvidar de todo esto muy fácil." Camila sonrió a
medias.

"Dudo mucho que llegué a olvidar todo esto." Casi me susurré a mí misma y esquivé sus ojos
ahora, para variar. La oí respirar hondo.

"Es tu cumpleaños número 18 la semana que viene, ¿No? ¿Puedo... tener algún tiempo para
pensar hasta entonces?" preguntó y nuestros ojos finalmente se reunieron en un breve momento
que hizo a mi corazón bombear como un loco.

17
"Claro." Respondí casualmente, pero realmente quería gritarle lo idiota que era. No había manera
que ella sintiera algo por mí. Muchas veces sus ojos brillaron cuando me abrazaba y dormía toda la
noche conmigo, cuando podría haber dormido en su propia cama; me besó con tanta ternura y
pasión; temblaba cada vez que yo había acariciado las partes más inocentes de su cuerpo que
debía de haber causado una reacción tan grande.

Pero me callé. En cambio ella me abrazó brevemente y oí su vuelo ser llamado por los altavoces.

"Te llamaré." Dijo Camila.

Asentí con la cabeza. Pero, de nuevo, mi instinto me dijo que no iba a recibir ninguna llamada.

Y no recibí ninguna llamada.

Lo había logrado. Finalmente era parte de USWNT. A los 18 años yo era sin duda una novata, pero
no era la única. Mi mejor amiga y compañera centrocampista, Normani, también había recibido
una llamada, luego del campeonato, de parte del más prestigioso y exitoso equipo de fútbol
femenino. Nunca había estado tan orgullosa de llevar una camiseta. Desafortunadamente, había
algo que me causo más que molestias de lo que hubiera querido.

Camila había sido llamada también. No me sorprendió, ya que era la mejor jugadora de cualquier
equipo de juventud, pero no podía manejar la idea de volver a verla después de que ella me había
decepcionado nuevamente. Después de nuestra "aventura" nunca me intentó buscar. Ninguna
llamada de teléfono, ni siquiera un mensaje de texto. Ni siquiera tuvo la decencia de decir que no
estaba interesada. Sólo pensar en ella me volvía loco, pero quería ser profesional y no quería tener
el drama en nuestro camino. En este punto, debería haber sabido que ella jugaba así. Había sido
mi culpa en confiar en ella después de todo lo que sucedió en Costa Rica.

No la había visto en todo el día. Normani estaba desempacando y estábamos obviamente alojando
juntas cuando no puede contenerlo más.

"¿Dónde está Camila? No la he visto." Le pregunté casualmente porque nadie sabía realmente lo
que había pasado entre nosotras y tenía la intención de que siguiera siendo así.

"¿No has oído?" Normani exclamó sorprendida y se volvió hacia mí sentándose en mi cama. "Ella
paró."

"¿Qué?" me reí porque pensé que estaba bromeando, pero mi mejor amiga no se inmutó. "¿Qué
quieres decir con que 'ella paró'?"

"Ella no va a venir. Al parecer, ella dejó de jugar." Me informó mientras mi corazón se hundió. A
pesar de que me había dicho a mí misma que no quería verla, una parte de mí estaba
decepcionada. Pero el shock superó cualquier otra emoción.

18
"Pero... eso es un locura. A ella le encanta esto. ¿Sabes por qué ya no jugara?".

"No." Normani negó con la cabeza. "Dinah sólo dijo que Camila quería concentrarse en otras
cosas, pero era obvio que no quería decir nada más, así que no le hice más preguntas."

Me quedé completamente estupefacta. No era así como ya había esperado que las cosas
terminaran. No debería preocuparme en este momento. No había ningún motivo racional porque
sentirme molesta por eso. En todo caso, debí haber estado feliz de no verla nunca más. Esa fue mi
forma de salir de drama que había querido evitar.

¿Entonces por qué mi corazón dolía de esa manera horriblemente dolorosa? ¿Por qué no podía
dejar de pensar en ella? Habían pasado meses desde nuestro último encuentro ciertamente
intenso, pero quería saber sobre ella.

¿Qué demonios estaba haciendo aquí? No podía creer que realmente había volado a California
después de mi primer campeonato con la USWNT para ver a Camila. Esto era una estupidez. ¿Por
qué me iba a someter a otro rechazo? ¿No había aprendido la lección? Ella no estaba interesada
en mí.

Al parecer no. Porque ahí estaba yo. De pie frente a su casa y recogiendo el coraje para finalmente
tocar el timbre. Habían pasado varios minutos antes de tocar el timbre. Conseguir su dirección no
fue tan difícil, pero me sorprendí al ver a un joven parado en la puerta. Por lo que yo sabía, Camila
no tenía hermanos.

"Hey." Parecía tan confundido pero sonrió cortésmente. "¿Puedo ayudarte?".

"Uhm... estoy buscando a Camila Cabello." Le expliqué y vi como sonrió el chico rubio.

"¿Te refieres a Camila Mahone?" sonrió, pero yo estaba tan confundida como para creer eso.

"No, estoy bastante segura que su apellido es Cabello. Tal vez tengo la dirección equivocada."
Murmuré y casi me di la vuelta.

"!Espera!" la voz masculina me detuvo. "!¿Camila?! ¡Hay alguien en la puerta esperando por ti!".

Simplemente me quedé allí y me pregunté qué estaba pasando antes que mis ojos se encontraron
con unos ojos marrones, exudando una descarga absoluta cuando Camila me vio.

"Lauren." Se quedó sin aliento.

"Ah, sí, ahora me acuerdo. Tú jugaste fútbol con ella. Te vi en algunas fotos. Soy Austin." El chico
se presentó. "Soy el esposo de Camila desde hace una semana."

19
Quería desmayarme. En ese mismo momento.

¿Su marido? ¡¿Su marido?! ¿Qué diablos estaba pasando? Alguien había arrancado mi corazón, lo
pisoteó y violentamente lo empujó de nuevo a mi pecho. O al menos eso sentí cuando me quedé
en un estado de parálisis completa.

"Cariño, ¿Puedes darnos un segundo?" la voz de Camila me devolvió a la realidad. Esto era la
realidad, ¿No? ¿No es una pesadilla?

"Claro, un placer conocerte." Austin lanzó una sonrisa mientras yo estaba tratando de no vomitar.
Me sentía enferma. En realidad enferma del estómago. Hasta ahora no me había dado cuenta de
lo mucho que estaba enamorada de ella. ¡Qué idiota era!

"Supongo que no me queda más que darte las felicitaciones." Le dije pasiva-agresivamente
mientras la más joven cerraba la puerta. "¿Es por eso que dejaste de jugar?".

"Estoy embarazada."

Oh, ahora quería desmayarme.

"¿Qué?" fue todo lo que fui capaz de decir y mis ojos bajaron a su vientre donde no se notaba
ningún bulto. Pero ella estaba usando un suéter grande por lo que noté. Todavía estaba tratando
de procesar.

"Realmente mi barriga no está grande, pero tengo cuatro meses de embarazo." Camila dijo
mientras yo estaba luchando contra no mirarla.

"No sé qué decir..." respondí con sinceridad. "Quiero decir, la última vez que te vi... estabas
tratando de averiguar lo que sentías por mí y ahora estás casada y embarazada. Yo sólo..." me
callé mientras mi cabeza daba vueltas por la extraña situación. Esto no era el escenario para lo que
había estado preparado.

"Austin y yo salimos por un par de años. Estábamos pasando por algunas momentos difíciles
cuando... tú pasaste." La escuché decir alguna información que dolió y mucho. Ella nunca había
mencionado un novio y ahora tenía un maldito marido.

"Así que todo lo que pasó fue para tu comodidad." Concluí con amargura.

"Sinceramente no quería aprovecharme de la situación." Camila intentó justificar sus acciones.

"Ahórrate el discurso, Camila." Espeté. "Sabías lo que sentía durante todo ese tiempo y aun así
seguiste adelante. Ni siquiera tuviste la decencia de decirme que estabas jugando conmigo pero
me hiciste sentir que había una gota de esperanza cuando sabías que nunca hubo esperanza."

"Siempre he sido sincera contigo y te dije que necesitaba tiempo." Su voz se volvió furiosa
también.

20
"Sí, me dijiste un montón de cosas. Me dijiste que me llamarías." Repliqué.

"¿Y qué querías que te dijera, Lauren? ¿Qué yo estaba de vuelta con mi novio? ¿Qué estaba
embarazada de él? ¿De verdad querías escuchar eso?".

No le respondí. Mi corazón latía y vi que los ojos oscuros me estaban mirando con furia, no con las
tantas emociones que alguna vez yo vi reflejados en ellos. No quería pelear. No había nada por
qué luchar. Había perdido y las dos lo sabíamos. Su rostro se suavizó cuando se dio cuenta que
estaba sufriendo también.

"¿Nunca te gusté, no?" sacudí la cabeza con incredulidad ante mi propia estupidez.

"Me gustas, Lauren." Respondió ella, pero claramente lo quiso decir de una manera platónica.

"Sabes que eso no es lo que quise decir."

"Lo siento." Sonaba apologética ahora y mucho más sincera. "Eres una persona maravillosa y estoy
segura que encontrarás a alguien-".

"No necesito de ese discurso ahora." Exhalé pero poco a poco recuperé la compostura. Lenta pero
seguramente me di cuenta que todo esto había terminado. No importa lo mucho que yo quería
estar enojada con ella, yo también tenía la culpa de mi situación, incluso más. Ella había sido
honesta... hasta cierto punto.

"¿Estás tomando un descanso del fútbol debido al... bebé?" cambié de tema.

"No, estoy harta." Respondió con calma.

"Pero, ¿Por qué? Amas el fútbol." Obviamente no podía entender su decisión.

"Por qué amo más a mi familia."

Eso fue todo. Cada argumento no era válido después de esa respuesta. Ella tenía 17 años, era
talentosa y se merecía mucho más en mi opinión pero ¿Quién era yo para juzgarla? Esa era su
vida. No estaba segura que era lo que me dolía más; que nunca conseguiría la oportunidad de
estar realmente con ella o que el mundo nunca tendría la oportunidad de ver lo talentosa que ella
era.

"¿No más CC7 entonces?" sonreí suavemente y ella hizo lo mismo.

"Me temo que no." Camila bajó la mirada y por una fracción de segundo, sólo por un pequeño
momento, creí detectar algo de tristeza en sus ojos cuando lo dijo. Pero tal vez eso era sólo una
ilusión. Este, obviamente, no era mi lugar de decir nada. Todo lo que pasó entre nosotras fue tan
exagerado en mi cabeza, cuando en realidad, ella nunca se sintió de la misma manera. Por lo difícil
que pareciera, tenía que dejarla ir.

21
"Nosotros te vamos a extrañar." Utilicé la palabra "nosotros" porque no podía confesar que yo la
echaría de menos. "Dentro y fuera de la cancha."

"Los extrañaré también." Susurró en voz baja y me dejó preguntándome si me extrañaría a mí o


sólo al equipo. Probablemente nunca lo sabría.

"Supongo que eso es todo." Tomé una respiración profunda.

"Sí, supongo que sí." La de ojos marrones estuvo de acuerdo.

"Bueno, te deseo toda la suerte a ti y a tu familia también." Dije con cierta torpeza, porque no
tenía la experiencia de decirle palabras de aliento a una mujer embarazada.

"Gracias." Se rió suavemente mientras me sonrojé ligeramente. "Cuídate, Lauren."

"Tú también." Le di una última mirada y rompí nuestro contacto visual antes de decir algo
estúpido de nuevo. Afortunadamente, el taxi todavía estaba esperándome y bajé las escaleras del
porche.

"Lauren." Oí decir a Camila con inesperada urgencia y volteé a verla allí de pie. Sus labios se
separaron, pero se volvieron a cerrar rápidamente antes de que ella negara con la cabeza.

"Nada... sólo que... olvídalo." Rió nerviosamente y me quedé preguntándome que fue lo que quiso
decirme. Pero tuve que dejar de pensar en ella. Y tenía que empezar ahora mismo. Así que sonreí
educadamente y me dirigí de nuevo al taxi. La joven seguía de pie en el porche cuando le dije al
taxista que me llevara al aeropuerto de inmediato.

Una parte de mí quería salir del taxi, correr dónde Camila y forzarla a decir lo que quiso decir
antes. Teniendo en cuenta nuestra historia, estaba bastante segura que no debía hacer eso y
decidí darle un descanso. Ella había hecho su elección; repetidamente. Y su opción no fui yo.

================

Capitulo 2

Estaba disfrutando unos de los días más hermosos y de buen tiempo desde que me había mudado
aquí. La costa este era conocida por su maravilloso clima y tuve algunos problemas para
adaptarme a la lluvia y frío al principio. Como nativa de Miami, estaba acostumbrada a algo
completamente diferente, pero mi carrera era algo mucho más importante.

22
Sin embargo, hoy era el día más soleado que habíamos tenido en el año. El cálido día de primavera
hizo que todos abandonaran sus hogares, parecía que el parque estaba lleno de gente de todas las
edades, disfrutando el sol. Estaba pateando la pelota casualmente con mi amiga y compañera de
equipo Kristie mientras ella seguía parloteando sobre sus problemas con los chicos. Ella tenía
absolutamente el peor gusto en hombres, pero yo era una buena amiga y la escuchaba incluso
cuando quisiera patearle el rostro con la pelota por hacer tan malas elecciones de hombres.

"Quiero decir, ¿Puedes creer que ni siquiera me llamó después que salimos?" la rubia dijo
mientras me pasaba la pelota con su pie derecho.

"Conozco esa sensación." Respondí en voz baja y recibí el balón con habilidad.

"Oh, por favor, Lauren." Se burló. "Tú eres la que nunca llama a esas pobres chicas después de que
las seduces completamente."

"Yo no seduzco a nadie." Me defendí, pero sonreí mientras seguía haciendo los pequeños trucos
con ninguna dificultad.

"Sí, claro. Como tú no vas por la vida diciendo 'Soy un deportista profesional e inteligente'."
Intentó burlarse de mí y me miró de una manera extraña. Rodeé mis ojos verdes.

"Yo no hago eso en absoluto. Por Dios, espero que no, porque dudo mucho que alguien caiga con
lo que acabas de decir." Bromeé.

"¿Cuántas niñas de primer año se abran enganchado contigo y ni siquiera las has llamado?" mi
amiga y compañera de cuarto cuestionó sabiendo la respuesta. Dejé caer la pelota y traté de
pensar al menos en alguna persona con la que me haya mantenido en contacto.

"Eso es lo que pensé." Kristie rió y negó con la cabeza.

"!Llamé a Jessica!" Me acordé con orgullo antes de pasar la pelota para que esta llegara hasta ella
por el verde césped del parque.

"Esa fue una llamada borracha, no con un signo de interés real." Espetó ella, y me reí un poco.

"Eso es cierto." Admití. "Pero valió la pena." Agregué y la vi rodar los ojos.

"Pero espera, tengo curiosidad. ¿Quién nunca te devolvió las llamadas alguna vez?" la otra
jugadora trajo de vuelta el tema original de la discusión.

"Esa es... una historia de la que no quiero hablar ahora." suspiré, porque el simple recuerdo de lo
que había ocurrido hace más de tres años todavía me causaba cierta confusión interna.

23
"Oh wow, ella realmente te jodió." Ella parecía sorprendida antes de que yo le disparara una
mirada. "¿Ella es la razón por la cual tienes problemas con el compromiso?".

"Escucha, Dr. Phil " dije sin expresión mientras ella puso los ojos una vez más. "Nadie me jodió,
¿De acuerdo? Estoy muy contenta con el transcurso de las cosas y no necesito de una relación
para sentirme completa."

"¿No quieres tener a alguien para abrazar por la noche o ver películas de terror y hacer ese tipo de
cosas?" la más joven sonaba genuinamente preocupada ahora.

"¿Para qué? Así ellos pueden salir corriendo y yo volveré a dónde estaba antes, ¿Con un corazón
roto y el ego mallugado? Soy una estudiante universitaria de 21 años de edad, por amor de Dios.
¿Por qué todo el mundo me jode con la idea de una relación? Las chicas saben lo que reciben
cuando se enganchan conmigo. No son tontas, la gente de la universidad habla y es bien sabido
que a mí sólo me gusta pasar un buen rato, nada más. Si no pueden manejar la situación de
mierda, entonces nadie las está obligando a engancharse. Además, con la mayoría de las chicas
con las engancho con directas, sólo quieren ser capaces de decir que se follaron a una chica una
vez, mientras estaban en la universidad." Terminé mi pequeña diatriba y me di cuenta cuán
amarga y enojada había sonado. Mi amiga ni siquiera había traído a la chica que me había roto el
corazón de unos años, pero el dolor aún persistía en alguna parte y sólo en raras ocasiones salía a
la superficie.

"Wow... ella realmente te jodió." Kristie reiteró antes de que le lanzara la pelota hacia su dirección
con fuerza, golpeándola en el muslo.

"!Ay!" se quejó.

"Vete a la mierda." No pude evitar sonreír ligeramente mientras ella caminaba hacia mí con los
brazos abiertos. "Aléjate de mí."

"Oh ven aquí, cosa amargada hastiada." Habló con dulzura para molestarme aún más.

"Sé que necesitas un poco de amor."

"No necesito amor, estoy bien." La miré, pero ella me abrazó de todos modos haciéndome reír
aunque yo no quería.

"Me encantaría saber más acerca de tu misteriosa chica que alguna vez derritió tu corazón negro,"
Kristie se echó para atrás y habló de forma dramática. "pero tengo que irme. A diferencia de ti, yo
no he renunciado a la idea del verdadero amor y tal vez mi cita de esta noche sea mi verdadero
amor."

"No hay ninguna persona para otra, no hay destino y todas esas tonterías. Y no tengo un corazón
negro." Protesté y casi hice un puchero ante sus palabras.

24
"Voy a necesitar una prueba ya que desde los tres años que te conozco, no ha habido nadie por el
cual has tenido sentimientos. Algo malo hay allí, pero voy a llegar al fondo de eso." Me guiñó un
ojo y dio un beso platónico en mi mejilla para decir adiós.

"!No tengo un corazón negro!" grité mientras ella se alejaba con su pelota. Ella no respondió, sino
simplemente hizo un gesto sin volverse. La gente de mí alrededor se dio la vuelta por mis palabras
y sentí mis mejillas ardiendo de vergüenza. Sonreí torpemente antes de abandonar el parque
también.

Siempre corría de vuelta a casa y el parque era parte de mi rutina habitual de todos modos. El
agua y el paisaje idílico ayudaban a despejar mi mente. Claro, yo era un deportista y disfrutaba de
los deportes, por diversas razones. Pero una de las razones más importantes por la que corría es
que me sentía en paz; así me aislaba de mi sinapsis de fusilamiento constante en mi cerebro que
causaba tantos pensamientos innecesarios cuando estaba sola. Estaba bien cuando podía
centrarme en la tonificación de mi cuerpo durante un juego o incluso en una simple carrera y así
mis pensamientos devoradores no me consumían.

Al doblar una esquina, llegué a la pequeña zona de juegos que siempre pasaba y estaba llena de
niños corriendo por todos lados, incluso más de lo habitual. Mis ojos se posaron en una joven que
parecía muy familiar. Estaba leyendo un libro y sentada en una banca, no muy lejos. Eso no podía
ser... no podía ser ella...

La morena levantó la vista y mi corazón se detuvo cuando me di cuenta que ¡Era Camila! Antes de
que supiera lo que estaba pasando, me tropecé con mis propios pies y el aterrizaje de la caída
fuerte fue en mi rodilla derecha.

"Mierda." Susurré y me senté mientras observaba los arañazos sangrientos contra mi piel.

"Oh, Dios mío, ¿Estás bien?" mis ojos se abrieron de golpe cuando escuché la voz que me había
causado la mayor angustia en mi vida cuando era más joven. Mi mirada se levantó lentamente y
no podía creer que era ella. El latido irregular de mi corazón no se debió al esfuerzo físico realizado
anteriormente, sino a la chica que estaba de pie junto a mí. No podía hablar por alguna razón y la
quedé mirando con incredulidad. ¿Quizás me golpeé la cabeza y no la rodilla? ¿Era esta una
alucinación?

"Se ve bastante desagradable." Mi ex compañera de equipo de inclinó y le dio un vistazo a mi


rodilla. "Tengo algunas cosas en mi bolsa para limpiar tu herida, bueno, si es que ¿Quieres?"

Finalmente me tragué el nudo de la garganta cuando me encontré con sus ojos de nuevo y me di
cuenta que esto era la realidad.

"Estoy bien. No tienes que hacer eso. Es sólo un rasguño." Respondí y me levanté un poco para
comprobar que estaba bien.

25
"¿Estás segura? Puedo ayudar, no es un problema." Camila sonrió tímidamente. No estaba segura
de cómo me veía, pero sentía como si estaba viendo a un fantasma. Un hermoso fantasma. Ella no
había cambiado en absoluto. Tal vez estaba un poco más adulta y no tan inocente, pero más...
sexy. Bueno, ella siempre había sido sexy. Me di una bofeteada internamente cuando me di
cuenta lo que estaba pensando.

"Sí, estoy segura." Le respondí y sacudí mi rodilla para hacer otra cosa y no mirarla o decir algo
estúpido. Inflexible, los ojos marrones miraron directamente los míos y me hicieron ver un cambio
en ella. Ella parecía bastante cansada con los círculos oscuros bajo los orbes oscuros que exudaban
tanta tristeza por alguna razón. Esta no era la chica enojada que conocí hace varios años. Había
algo diferente en ella, pero tal vez me estaba imaginando cosas.

"No pareces muy sorprendida de verme." Terminé de hablar aunque me hubiese gustado salir
corriendo.

"Sé que juegas para Boston Breakers, así que me preguntaba cuando era que te volvería a ver."
Explicó y me sonrió débilmente. Me quedé muy sorprendida al saber que ella estaba al corriente
de mí o del fútbol. En nuestro último encuentra ella había dicho que estaba harta del deporte.

"Por lo tanto, estás viviendo aquí, o ¿Simplemente estás de visita?" pregunté con curiosidad.

"No, nos mudamos aquí hace seis meses."

Nos. Repetí esa palabra en mi cabeza y se vino a la cabeza el hecho que ella estaba casada. Mis
ojos instintivamente se posaron en su mano, pero no vi un anillo de bodas. Fruncí el ceño
involuntariamente.

"Nosotros no estamos juntos." Camila dijo de repente y me miró para capturar mis ojos.

"Lo siento, no quise mirar-" me disculpé rápidamente, pero todavía estaba tratando de procesar lo
que me acababa de decir.

"No, está bien." Sonrió a medias y pasó la mano por su pelo oscuro. ¿Eso significaba que se
divorció? ¿O se estaba divorciando? ¿O simplemente estaban separados? La cabeza me daba
vueltas. No sólo me bastó con la conversación que tuve con Kristie; ella no estaba ni cerca a la
versión que me imaginé. Siempre me la imaginé viviendo en California con su perfecto marido y
sus hijos perfectos, viviendo su vida perfecta. La mujer joven en frente de mí, no era lo que
esperaba en absoluto.

"!Mami!"

La voz aguda interrumpió el hilo de mis pensamientos y vi a una niña con el pelo castaño claro, casi
corriendo hacia nosotros. Bueno, ella era un poco pequeña para realmente correr rápido debido a
su edad. Entonces me di cuenta lo que Camila había querido decir con "Nos mudamos aquí". Ella
no estaba hablando de Austin, ella estaba hablando de su hija. La niña que se acercaba hacia

26
nosotras tenía un asombroso parecido con Camila excepto por el cabello más claro, obviamente,
heredado de su padre. Estaba congelada cuando vi a Camila arrodillándose.

"¿Qué pasa, cariño?" preguntó y sentí como mi corazón explotó debido a su interacción.

"Tengo sed." La niña estaba respirando pesadamente mientras Camila sacaba una botella de agua
de su bolso y utilizó un pañuelo de papel para limpiar el sudor del rostro de su hija.

"No tienes que correr como una loca todo el tiempo, ¿Sabes?" la joven madre sonrió
ampliamente, obviamente divertida con el agotamiento de la pequeña.

"Soy más rápida que los niños... es divertido." La niña de tres años de edad respondió después de
tomar unos grandes tragos de agua y caminar de regreso a la zona de juegos. Camila sacudió un
poco la cabeza y se levantó. Sentí mi corazón aletear molesto en mi pecho, algo que no había
sentido hace años.

"De tal palo, tal astilla ¿Eh? " se me escapó en voz más baja de lo que pretendía y la chica de ojos
marrones sonrió de oreja a oreja.

"Sí, supongo." Dijo en un susurro y nuestros ojos conectados por un segundo me recordaron a la
forma en que ella me había mirado durante nuestra pequeña "aventura", como me gustaba
llamarlo. La sensibilidad en los grandes ojos marrones era demasiado familiar, pero no podía hacer
eso nuevo.

Así que, desvié mi mirada y respiré hondo para recuperar el control de la situación. Una parte de
mí quería preguntar acerca de su hija, su vida y simplemente todo lo que estaba pasando, pero no
pude. El miedo que me hizo vulnerable ante ella era muy grande.

"Fue bueno verte de nuevo. Pero me tengo que ir." dije con rapidez y la vi mordiéndose su labio
inferior.

"Claro, no quiero retenerte. Fue agradable verte, Lauren." Me dio la espalda y la forma en que dijo
mi nombre fue demasiado para mí.

"Uhm... nos vemos... tal vez." Añadí con torpeza y me di la vuelta para continuar con mi carrera.

"Espera" Camila causó un déjá vu por su grito urgente que me detuvo en seco. No era la misma
urgencia cuando estaba de pie en el porche hace tres años, pero estuvo cerca.

"¿Sí?" le pregunté y enarqué una ceja.

"¿Quieres tomar un café algún día? Ya sabes... ¿Para ponernos al día?" preguntó y oí el
nerviosismo en su voz. Tragué un poco porque sabía que tenía que declinar. Ella había roto mi
corazón en mil pedazos y no quería recordarlo cada vez que la miraba. Entonces, ¿Por qué tenía
una tentación tan grande de aceptar su oferta?

27
"Claro." Le respondí, tan casualmente para no revelar lo tan angustiada que estaba. "No tengo mi
teléfono conmigo."

"Entonces dame tu número y podemos arreglar algo." Me ofreció su teléfono con una sonrisa y
escribí los dígitos en la pantalla antes de devolvérselo.

"Gracias. Te llamaré pronto." Dijo Camila y mi mente se quedó en blanco por un segundo.

"Sí, he oído eso antes." Deslicé mi vista y vi que los orbes oscuros se llenaron de culpa. "Lo siento,
no fue mi intención." Quería rectificar la situación, pero ella me interrumpió con suavidad.

"No, te llamaré esta vez. Lo prometo." Enfatizó, pero aún había una parte en mí que no le creía.
Sonreí y asentí amablemente pero no estaba segura de qué pensar. Con toda honestidad, no
esperaba que me llamara en absoluto.

Para mi sorpresa, lo hizo.

******************************************

Estaba sentada en mi mesa de siempre en el pequeño restaurante. Aunque no quería, estaba


nerviosa como el infierno. En realidad, Camila me había llamado para reunirnos y le sugerí
encontrarnos para tomar un café. Se suponía que el entorno familiar tenía que calmarme y lo hizo
pero un poco de ansiedad se quedó. Hace apenas unos minutos que ella había llamado de nuevo y
quiso cancelar debido a que su niñera dijo que no podía ayudarla en último minuto. Le propuse
traer a Lara, su hija ya que sabía su nombre ahora, con ella. Al principio, ella actuó vacilante y
supuse que no quería molestarme con la pequeña pero le aseguré que todo estaba bien.

Más minutos pasaron hasta que vi la abertura de la puerta y a Camila caminando con Lara en sus
brazos. Se veía tan lindas. Detente, Lauren. Me dije a mí misma mientras se acercaban a la mesa.

"Hey." La recibí con una sonrisa.

"Hola, perdón por llegar tarde." La más joven se disculpó al instante pero me encogí de hombros.

"No hay problema." Me di la vuelta y la vi sentarse con su hija sentada en el regazo.

"Lara, ella es una amiga. Su nombre es Lauren." Explicó Camila y mi sonrisa se amplió cuando miré
a la pequeña con más atención. Sus ojos no eran marrones, eran avellana y ella era increíblemente
adorable.

"Yo la conozco. Tú la ves en la televisión." La voz aguda respondió y sentí mi corazón perder el
ritmo antes de levantar la vista. Las mejillas sonrojadas de Camila eran de un color rojo oscuro y se
rió nerviosamente.

28
"Sí, yo veo mucho fútbol." Señaló y yo no estaba tan segura qué decir. "Nunca he estado aquí
antes." Camila desvió mirando a su alrededor antes de tomar el menú para distraer la atención de
su estado nervioso.

"¿En serio? Vengo aquí todos los domingos. Los panqueques son increíble." Sonreí y vi a Lara
ahora saltando en el regazo de su madre.

"¿Puedo pedir panqueques, por favor?" la niña rogó y vi a Camila mirar el menú. Sus ojos
parecieron comprobar los precios antes de tragar.

"Tal vez en otro momento, cariño." Dijo en voz muy baja la mujer de ojos marrones, me sorprendí
ante la idea de que ella no tenía suficiente dinero para pagar la comida de aquí. Nunca había
sabido mucho sobre los antecedentes de Camila, pero no podía soportar la idea de la madre
soltera luchar con problemas financieros a pesar de que eso no debería importarme mucho.

"Sabes Lara, quiero pedir panqueques pero no me los puedo comer todos yo sola. ¿Quieres comer
conmigo?" me dirigí a la pequeña y ella asintió frenéticamente.

"Lauren, no tienes que-" Camila intentó interponer.

"Insisto en que Lara tiene que probar los panqueques ¿Ok? Fue mi idea venir aquí y no voy a dejar
que te vayas a menos que pruebes un bocado ese plato celestial." Exageré para crear más
emoción en la joven y los ojos color avellana estaban casi brillantes.

"¿Lo de siempre?" oí otra vez ahora y vi a la camarera de pie junto a la mesa.

"Síp." Le respondí, simplemente porque era obvio que ella sabía lo que yo pedía todos los
domingos.

"¿Y qué desea pedir usted?" se dirigió a Camila.

"Quiero un chocolate caliente para ella," Mi ex compañera de equipo acarició el cabello de Lara. "
y yo quiero el café más fuerte que tengas."

"¿Con azúcar o crema?" Ally preguntó con indiferencia.

"No sólo... fuerte." Camila se rió un poco.

"¿Te gustaría en una taza o en una jeringa?" la camarera bromeó. Disfrutaba de su humor, tanto
como la comida, la cual era la razón por la que siempre venía aquí.

"Confía en mí, si eso fuera legal te dejaría insertarlo en mi café en este mismo momento." Bromeó
Camila y Ally sonrió ligeramente.

"Me gusta ella." La mujer con el pequeño bloc de notas me miró y asintió con la cabeza en
dirección a la joven. Ahora era yo la que estaba sonrojada pero lo cubrí respondiendo con rapidez.

29
"¿Te gusta otro ser humano? Le avisaré a todos los medios de comunicación." Me reí entre dientes
antes de que Ally girara sobre sus talones y se alejara para hacer nuestra orden.

"Un lugar interesante el que escogiste." Camila sonrió y mostró esa sonrisa implacable que
siempre me había descolocado. Me reí suavemente y la vi hacer lo mismo antes de que notara los
círculos oscuros bajo sus ojos. Suspiré lentamente, no quería entrometerme pero era tan obvio
que acabé preguntando de todos modos.

"¿Por qué pediste un café fuerte? ¿Larga noche?" Escondí mi preocupación.

"Sólo he tenido algunos turnos locos en el trabajo." Respondió ella y fruncí las cejas.

"¿Turnos? ¿Qué haces?"

"Uhm... nada." La más joven se retorció incómodamente. "Es vergonzoso."

"¿Qué? ¿Por qué?" pregunté un poco sorprendida de que ella se sintiera avergonzada de hablar
sobre su trabajo.

"Porque prefiero que me recuerdes como la pequeña estrella de fútbol que era en ese entonces."
La triste sonrisa en sus labios me rompió el corazón un poco.

"Nunca te juzgaría, Camila. Espero que lo recuerdes." Le dije con sinceridad. "Estoy segura que
estás haciendo todo lo posible para mantener a Lara."

Las paredes de la otra chica parecieron romperse cuando escuchó mi respuesta y la vi luchar sobre
si debía decirme o no.

"Yo... trabajo en un pequeño restaurante como este." Reveló. "En realidad, no es tan elegante
como este. Nuestros clientes no son deportistas profesionales. Más bien nuestros clientes son
camioneros... y bien ya te puedes imaginar el resto."

"¿Y por qué eso es vergonzoso?" le pregunté en voz baja cuando los orbes oscuros se llenaron de
tristeza.

"No sé." Susurró, pero sostuvo la mirada durante un par de segundos antes que Ally interrumpiera
para traernos nuestras bebidas calientes. Camila tomó su café y el chocolate caliente para Lara
mientras que yo tomé mi leche de soja.

"Oh Wow, esto está demasiado fuerte." Camila exhaló después de tomar un sorbo de su café. "Tal
vez necesito un poco de crema." Agregó, y lo alejó hacia mi lado. Por desgracia, ella estaba
comportándose un poco torpe y accidentalmente derribó su copa en el proceso. El fluido caliente
se extendió sobre la mesa y manchó mi camisa blanca.

"!Oh, Dios mío!" la otra morena exclamó y se levantó rápidamente con Lara. "!Lo siento mucho!"

30
Sus manos agarraron unas servilletas mientras que yo me había puesto de pie por reflejo también.
Parte del café había tocado mi estómago debajo de la tela y me quemó, pero no demasiado.

"Está bien." Quise calmarla, pero ella limpiaba la camisa con la esperanza de quitar la mancha del
líquido marrón.

"!Lo siento mucho! Soy una idiota." Camila seguía limpiando y me di cuenta un poco del temblor
de su voz. Cogí suavemente su muñeca para detenerla.

"Camila, mírame." Le dije con calma y ella hizo lo que quería. "Todo está bien, no te preocupes. No
está mal." Añadí con una sonrisa suave, pero detecté la humedad de sus ojos.

"Estoy tan cansada..." dijo la madre joven, me di cuenta de que era verdad. Se veía tan agotada.
Más aún ahora que estaba cerca. Ella estaba al borde, pero, obviamente, no quería romperse
delante de su hija y trató de superarlo.

Ally se acercó y quiso limpiar.

"¿Podrías mirarla por un momento?" le pregunté a la camarera y señalé a Lara que estaba
bastante impresionada con la situación. "¿Lara? ¿Puedes esperarnos unos minutos y quedarte
aquí con Ally? Tu madre y yo volveremos en un momento, ¿Vale?".

"¿Puedo comer panqueques?" la niña de tres años tenía otras prioridades.

"Sí, todos los panqueques que quieras." Le aseguré antes guiar a Camila al baño. Parecía que
necesitaba un minuto para recuperarse y no puede evitar preocuparme por ella. No importa el
daño que me había causado en el pasado, ¿Tal vez podríamos ser amigas? Quería ayudarla en todo
lo que pudiera. La ex centrocampista izquierda pareció recuperar la compostura rápidamente
después de lavarse la cara y tomar unas cuantas respiraciones profundas en el baño grande de
mujeres. Estaba apoyada contra el fregadero, mientras yo estaba haciendo lo mismo contra la
pared de enfrente de ella.

"Perdón por esto." La voz baja llenó la habitación vacía.

"No tienes que pedir disculpas." Quería dejar en claro. "Pero tengo que admitir que estoy
preocupada. ¿Puedo preguntar por qué te mudaste aquí? O ¿Qué pasó con Austin?".

No esperaba que ella respondiera. Nunca había sido una persona muy abierta con su vida privada.
Y tal vez, yo estaba sobrepasando los límites.

"Austin no estaba tomando en serio la parte de fidelidad." Camila habló de repente y me tomó por
sorpresa. "Él es un hombre guapo y fue a la universidad, así que pensé que fue un desliz, pero no
fue así. Por mucho que yo quise que las cosas funcionaran

31
simplemente nunca fue así. Cuando les dije a mis padres que quería el divorcio, me dieron un
ultimátum; me quedaba con Austin o tenía que buscar otro lugar para quedarme."

Mi mandíbula casi se cayó cuando oí eso, pero me mantuve en silencio para seguir escuchándola.

"Mis padres son muy religiosos. Para ellos, no sólo se trata de ir a la iglesia todos los domingos.
Ellos se lo pueden tomar muy en serio. Así que, mi embarazo no fue precisamente fácil para ellos.
Pero pensaron que todo estaría bien si me casaba con Austin lo más pronto posible." Dijo la de
ojos marrones y sentí que por fin entendía por qué Camila parecía tan enojada siempre.

"No tenía ni idea, Camila. Lo siento." Le dije sencilla pero genuinamente antes que por fin
levantara su vista por primera vez desde que había comenzado a contar su historia.

"¿Te puedes imaginar lo que hubieran hecho si les decía que me había enamorado de una chica?"

Sentí mi corazón bombear rápidamente cuando esas palabras salieron de su boca, pero allí estaba
mi cerebro, poniendo fin a cualquier sentimiento idiota que quiso resurgir. No, eso no iba a
suceder. Me dije a mí misma. Era obvio lo que Camila dijo implícitamente pero no podía decir nada
en ese momento.

"¿Lauren? ¿Escuchaste lo que dije?" preguntó con voz baja.

"Sí." Exhalé profundamente. "Pero tengo dificultades para creer si te soy honesta; teniendo en
cuenta nuestra historia."

"Realmente no puedo culparte, ¿Puedo?" sonaba casi desesperada, mientras yo estaba un la


pérdida de palabras una vez más. "Me siento muy mal por la forma en que te traté en ese
entonces. Lo siento mucho."

"Ya no estoy enojada contigo, Camila." Dije en voz baja.

"Sí, estás enojada." Ella no estuvo de acuerdo, pero su tono era de entendimiento y no de
reproche. "Y tienes toda la razón de estarlo. Me sorprende que accedieras a juntarte conmigo. Es
claro para mí que todavía estás enojada y no me lo dices porque sientes lástima por mí."

"Eso no es-"

"No me malinterpretes." Me interrumpió con una leve sonrisa. "Me alegro que sientas lástima por
mí porque no creo que pueda soportarlo si me estuvieras gritando ahora mismo, si te soy honesta.
Y sí, sé lo patético que eso suena." La más joven suspiró.

"No eres patética, Camila." Intervine rápidamente. "Y no estoy segura si la palabra enojada es la
correcta. Es más como... mucho sucedió desde ese entonces y ya no soy la misma persona que era
antes."

"Yo tampoco." Dijo la otra morena en su baja pero ronca voz con una pequeña sonrisa.

32
"Lo sé, pero..." tuve que parar de nuevo y tratar de encontrar las palabras adecuadas. No eran tan
mala, en el ámbito de comunicación por lo general, pero ella me ponía tan jodidamente nerviosa
con la intensidad que me miraba. "... No sé si puedo ser tu amiga y no convertirme en la misma
persona que fui antes. Yo no quiero ser ella. ¿Eso tiene sentido?".

Dolía como el infierno ser ella, añadí en mi cabeza.

"Sí, tiene sentido." Camila asintió con una sonrisa que no alcanzó sus ojos.

De repente, la puerta se abrió de golpe y Ally estaba de pie en la puerta con Lara. La niña estaba
llorando y la camarera parecía muy agobiada. Sus habilidades sociales no eran las mejores y me
podía imaginar lo asustada que estaba. Camila al instante corrió hacía su hija y la levantó.

"Cariño, ¿Qué pasa?" la joven madre besó la mejilla de la pequeña amorosamente y le limpió las
lágrimas.

"Quiero ir a casa..." Lara sollozó. "Estás triste aquí."

Estaba impresionada de lo perceptiva que era la pequeña de los más impresionantes ojos color
avellana. Al parecer, ella había notado que Camila estaba a punto de llorar antes y me sentí muy
culpable por hacerla esperar.

"Mami no está triste, ¿Ok?" Camila habló suavemente y dio un beso en las mejillas sonrojadas de
Lara. "¿Estás segura de qué quieres ir a casa? ¿Qué pasa con los panqueques?".

"Quiero ir a casa." La niña de pelo claro insistió.

"Eso está bien." Intervine y miré a Ally. "Estoy segura de que puedes guardar los panqueques para
llevar, ¿No?".

"Claro." Dijo Ally y salió lo más rápido que pudo.

"Lauren, lo siento, pero creo que tenemos que irnos." Camila sonaba avergonzada pero no estaba
segura de por qué. Yo era la que debería sentirse mal. Y me sentía mal. Mi conciencia culpable me
estaba comiendo cuando vi a la niña angustiada en sus brazos.

"Por supuesto." Asentí inmediatamente y seguí hablando antes de que supiera lo que estaba
haciendo. "Hay una gran fiesta en el campus este fin de semana antes de las vacaciones de
primavera. Invité a un montón de gente de la Sub-17 y todos irán. Espero que puedas ir, estoy
segura que todos estarán felices de verte."

Camila parecía insegura, pero también un poco emocionada. No estaba haciendo un buen trabajo
en mi plan de no involucrarse demasiado. Hace apenas un minuto que había intentado hacerle
saber que no estaba dispuesta a ser su amiga, y aquí estaba, invitándola a una fiesta, incluso
cuando traté de disimularlo con el hecho de que las otras chicas querían verla.

33
"Depende de si tengo turno en el trabajo y si puedo encontrar a alguien que pueda cuidar de Lara,
pero voy a ver lo que puedo hacer." Respondió, y eso fue todo lo que pude esperar en este punto.

"Ok, entonces te mandaré un mensaje de los detalles por si acaso."

"Bueno, muchas gracias... por todo." Añadió Camila, pero no estaba muy segura de lo que quiso
decir. ¿El café? ¿La invitación a la fiesta?

"No hay problema." Respondí casualmente, aunque no tenía ni la menor idea del por qué me
estaba dando las gracias.

"Nos vemos."

"Sí, adiós." Respiré cuando mi ex compañera salió del baño y dejó la cena poco después. Tomé una
respiración profunda y reproduje lo que acababa de suceder.

¿Qué diablos había hecho? ¿Por qué la invite a una fiesta después de todo? ¿Estaba realmente
sólo compadeciéndome de ella o me estaba engañando a mí misma en mi negación de que estaba
teniendo un pequeño plan?

Quería golpear mi cabeza contra la pared en este momento.

"Lento, carajo, Lauren. Vas a emborracharte en 20 minutos si sigues bebiendo así." Kristie me
regañó cuando tomé un buen trago de mi vaso rojo.

"Puedo manejarlo." rodeé mis ojos.

"¿Por qué estás nerviosa de todos modos? Todos tus viejos amigos están aquí." Comentó mi
amiga, pero yo no le había contado de una invitación en particular, porque no estaba segura si
Camila iba a aparecer.

"No estoy nerviosa." Trate de reír pero di otro sorbo y vi a la rubia levantar las cejas.

"Lo que tú digas." Levantó sus manos defensivamente cuando Normani se unió a nosotras. Todas
las personas que había invitado habían aparecido. Había un grupo de chicas de cuatros chicas que
yo y Normani habíamos jugado en la selección Sub-17 que se encontraban cerca. Todas estábamos
charlando mientras la fiesta estaba en la gran habitación de la residencia. Era el último día antes
de las vacaciones de primavera y todo el mundo estaba dispuesto a dejarse llevar.

El equipo estaba sonando a todo volumen por los altavoces cuando escuché la letra que me
recordó a una cierta morena que yo estaba subconscientemente esperando.

34
[The Vapors - Jhene Aiko]

"You've been on my mind

I've been trying to let it go

I've been trying to find

Something as incredible

As you and I

But that's a never

No feeling can compare to you

You just gotta let me know"

Por supuesto, Camila tuvo que aparecer ¡Ahora! Casi me atraganté con mi bebida cuando mis ojos
miraron a la chica de 20 años de edad, mirando a su alrededor y escuchando el coro de la canción
que estaba sonando simultáneamente.

"Can I hit it again?"

Llevaba un vestido negro corto que abrazaba su cuerpo delgado en todos los lugares correctos.
Por el amor de Dios, ¡¿Estaba tratando de matarme?! No era la única que la estaba mirando
porque me di cuenta que varios chicos miraban a la muchacha atractiva, que no era una
estudiante del campus. Llevaba el pelo ondulado y un cintillo negro que me recordaba a las bandas
que solía llevar en su cabeza durante los juegos o las prácticas. Los ojos marrones vagaron por la
habitación inquisitivamente antes de que me viera y sonriera.

Mientras ella caminaba hacia nosotras, sentí mi ritmo cardiaco duplicarse una vez más. Tomé un
buen trago para calmarme, pero eso era más fácil de decir que hacer. Cuanto más se acercaba,
más difícil era no hacer caso de lo increíblemente sexy que se veía. Llevaba maquillaje que no
había visto de la última vez que nos vimos. Los labios rosa con un brillo y los cálidos ojos castaños
se acentuaron a la perfección rímel y delineador de ojos.

"¿Mis ojos me engañan o lo que veo es a CC7?" Normani exclamó con alegría y choqueada, así
como tiró de nuestra ex compañera de equipo en un abrazo.

"¿CC7?" Kristie me miró inquisitivamente.

No tuve tiempo de responder porque Camila me estaba mirando, aparentemente insegura de


cómo saludarme. El alcohol definitivamente ayudó y le sonreí dándole un abrazo.

35
"Hey, lo hiciste."

Hablé.

"Sí, no podía rechazar la invitación tentadora." Respondió ella, y parecía un poco nerviosa.

"¿Tú la invitaste?" Normani me preguntó con incredulidad.

"¿Puede alguien presentarme, por favor?" Kristie sonaba molesta porque obviamente no estaba
acostumbrada a ser ignorada. Ok, fue grosero de mi parte no presentarla de inmediato, pero ella
estaba siendo un poco dramática.

"Camila, ella es Kristie. Ella también juega para Boston Breakers." Le expliqué. "Kristie, ella es
Camila. Ella es... una vieja amiga."

"Me pareces familiar." La rubia dijo agitando la mano de la morena. "Camila... espera, eres Camila
Cabello, ¿Verdad? También jugaste para la selección Sub-17. Solía verte todo el tiempo, ¡Eras
increíble! ¿Ya no juegas?".

Miré a Camila ansiosa porque no quería hacerla sentir incómoda, pero mi ex compañera de cuarto
era muy curiosa.

"No, tuve un bebé y me enfoqué en la maternidad." Camila respondió sorprendentemente casual


y sonrió ampliamente.

"Oh, eso tiene sentido entonces." Kristie respondió con una sonrisa sincera, pero no pudo dejar de
preguntar. "¿Qué edad tiene él o ella?".

"Ella tiene tres años." La de ojos marrones respondió de buena gana y se veía orgullosa. "Es
nuestra primera noche separadas de hecho. Ella está teniendo su primera fiesta de pijamas en
casa de un amigo y creo que estoy teniendo un poco de dificultad lidiando con eso."

"Aww, la ansiedad de la separación." Dijo Kristie llena de cariño.

"Bueno, tal vez un trago ayudara." Intervine deteniendo a mi amiga que la estaba abrumando con
tantas preguntas.

"No he tomado desde... antes de mi embarazo." Camila se echó a reír y no pude evitar unirme.

"Muy bien, entonces probablemente debes tomar las cosas con calma. Una cerveza, ¿Tal vez?" le
sugerí.

"¿Qué estás bebiendo?" preguntó ella con curiosidad mirando mi vaso.

"Algo con una gran cantidad de vodka, eso es seguro." Admití porque no sabía lo que estaba
tomando.

"Voy a tomar lo que estás tomando."

36
"Uh, ¿Estás segura?" no quería ser una aguafiestas, pero esa no sería una buena opción para una
primera copa en años.

"Dale a la chica un maldito trago." Kristie golpeó mi brazo. "No eres tan indecisa cuando juegas a
la camarera con las chicas de primer año." Agregó sugestivamente y vi la boca de Camila
retorciéndose ligeramente. Sus ojos miraban el suelo por un momento y casi parecía molesta
antes de forzar una sonrisa.

"Así que, Lauren es bastante encantadora, ¿Eh?" mi pulsó se aceleró al escuchar las palabras de
Camila que sonaban indiferentes.

"No tienes ni idea." Kristie se burló. "Vivíamos juntas en un dormitorio aquí y-".

"Creo que eso es suficiente." Interrumpí su pequeña charla porque aparte de Camila y yo nadie
sabía lo que había pasado entre nosotras. Ni siquiera le había dicho a Normani pero no quería que
la ex jugadora de fútbol supiera acerca de mi camino en estos días. Nadie sospecharía que a ella le
importaba, pero una parte de mí no quería correr el riesgo de la posibilidad de herir sus
sentimientos, aunque dudaba que ella alguna vez sintiera algo por mí.

Acabé pasándole una bebida a Camila antes de que se uniera a los demás quienes parecían
encantados de ver a nuestra ex superestrella. Probablemente fue lo mejor darle un poco de
espacio y yo decidí estar con otras personas así la más joven tenía toda la atención de las chicas de
la ex Sub-17. Mientras todos se divertían, mi trabajo estaba hecho. A veces me sentía como su
capitán y me encantó verlas juntas.

No fue hasta más tarde esa noche, cuando Camila se acercó a mí, obviamente borracha mientras
que yo estaba intoxicada también. Le di una mirada rápida.

"Así que, ¿Te estás divirtiendo?" preguntó alegremente con un vaso rojo en su mano.

"¿No se supone que yo debería preguntar eso ya que tú eres la invitada?" sonreí, mientras que
Camila se mordió el labio inferior.

"Si de verdad quieres ser un anfitrión, deberías mostrarme tu antiguo dormitorio."

"¿Hablas en serio?" pregunté, porque no podía entender por qué era tan especial un dormitorio
para ella.

"Por favor, no he ido a la universidad y tal vez pueda vivir esa experiencia a través de ti por un
momento." Suplicó con una mueca que era absolutamente irresistible.

"Bueno, estás de suerte" le expliqué. "Kristie aún vive en ese dormitorio y tengo una llave. Estoy
segura de que a ella no le importa si visitamos mi antigua habitación. Está justo al otro lado de la
sala, en realidad."

37
El rostro de Camila se iluminó al instante cuando hice un gesto hacia la puerta para que me
siguiera. Nos abrimos paso hacia la otra habitación que había vivido durante casi dos años antes
obtener mi propio departamento. Por mucho que me encantara Kristie, me encantaba más mi
independencia y en un momento dado tuve la experiencia universitaria. Al menos en este
departamento.

Abrí la puerta, ambas entramos y volví a cerrarla. Camila miró a su alrededor y tengo que admitir
que sentí un poco de nostalgia al estar allí.

"¿Aquí es donde pasó toda la magia?" la chica de ojos marrones me sonrió y mis cejas se elevaron
de forma coqueta.

"Tal vez." Le contesté sonriendo y de pie a su lado, mirando las fotos en el muro de Kristie.

Las dos estábamos tranquilas y todo lo que oía era la respiración irregular de Camila. Mi corazón
estaba comenzando a aletear horriblemente contra mi pecho cada vez que sentía la tensión entre
nosotras. Este era un territorio muy peligroso para nosotras. Ahora dándome cuenta de nuestra
situación, estando solas por primera vez en la noche, me pregunté si ella había hecho esto a
propósito. Tragué ligeramente y lamenté no tener mi vaso rojo entre mis manos porque lo había
dejado en la otra habitación.

No lo vi, pero lo sentí. Ella me estaba mirando antes de que mi corazón se detuvo un segundo. La
chica joven se había apoyado y presionado sus labios contra mi cuello. Mis ojos se cerraron
instintivamente cuando ella lo hizo de nuevo, tan sólo una pulgada más alta. Todos y cada uno de
sus besos parecían quemar mi piel. Sentí como si estuviera en contacto con el fuego lo cual era
patético teniendo en cuenta que ella no estaba haciendo mucho. Todo esto me recordó a nuestro
tiempo durante los entrenamientos y campeonatos.

Sin embargo, no podía moverme. La muchacha delgada se movía sutilmente y con gracia, estando
de pie justo en frente de mí ahora. Sus labios estaban a pocos centímetros de los míos y
conscientemente sentí mi pecho agitado, las respiraciones cortas saliendo de mí como si acabara
de correr a través de todo el campo de fútbol. Olí el alcohol en su aliento, pero el mío
probablemente era mucho peor. Ella no estaba borracha y yo lo sabía, pero mi cerebro me dio una
excusa de por qué ella estaba haciendo esto.

Ella se inclinó mucho más cerca, su labio inferior rozó el mío por una fracción de segundo antes de
que me apartara lo suficientemente para evitar un beso. Abrí los ojos y miré a la piscina de ternura
de color marrón que hizo que mi corazón se inflamara.

"No puedo." Susurré con voz temblorosa y de repente mi pulgar tocó sus labios entreabiertos.
Claramente, no estaba pensando y simplemente actúe gracias a mis impulsos pero tomó de todo
mi esfuerzo para no ceder de nuevo. "Si te beso ahora mismo... lo voy a hacer una y otra vez." Le
confesé mientras que mis ojos verdes se centraron en mi dedo acariciando el contorno de su boca.
"No puedo tener un encuentro casual como los viejos tiempos, otra vez. Ya no se trata sólo de un
encuentro contigo."

38
"No quiero que esto sea una cosa de una sola vez." Camila respondió sin dudar en voz baja.

"No es así de simple, Camila." Exhalé con frustración porque no podía dar mi brazo a torcer.

"¿Por qué?" continuó hablando en susurro, nuestros labios seguían dolorosamente cerca mientras
ella acariciaba mi brazo haciéndome las cosas más difíciles para mí.

"Porque... hay cosas que debemos tener en cuenta." Traté de reunir mis pensamientos y darles
sentidos cuando mi cerebro quería explotar en este punto.

"¿Estás hablando acerca de que soy mamá?" su voz se hizo más firme y ahora ella estaba
retrocediendo.

"Eso es sin duda una cosa en la que hay que pensar." Le di la espalda, sin tener idea de lo que
estaba diciendo. La única cosa que quería era matar a las mariposas invadiendo mi estómago.

"¿Y crees que no he considerado eso?" los ojos de Camila se llenaron de ira, haciéndola parecer
una adolescente que tenía un fuerte temperamento. "¿Crees que sólo salgo con las personas
cuando me da la gana y dejo que ellos conozcan a Lara? ¿Qué clase de madre crees que soy?".

"Nunca dije o quise decir eso." Quería detenerla antes que las cosas se salieran aún más de
control, pero ella estaba llevando las cosas muy lejos.

"Espera." Le dije por alguna razón, y en un rápido reflejo, la agarré por la muñeca logrando
voltearla.

"Te deseo, Lauren." Camila de repente soltó y me sorprendió su confesión abierta. "No en una
especie de 'sólo un encuentro'. Ya no soy esa adolescente asustada. Tienes razón, mi vida no es
simple y hay que tener en cuenta que vengo con un paquete incluido, pero me gustaría darnos una
oportunidad. Si no deseas eso entonces está bien, simplemente, no te culpo después de todo lo
que te hice pasar, o teniendo en cuenta mis circunstancias." Su tono era más suave y sus ojos
brillaban gracias a las lágrimas que eran difíciles de ver. "Pero si crees que puedes perdonarme y...
darnos una verdadera oportunidad debido a que ya estoy cansada de jugar. Ya no tienes que
perseguirme más. Estoy aquí, ahora mismo. Soy tuya y me puedes tomar." Ella jadeaba
ligeramente.

Las palabras de Camila me sacudieron más que cualquier otra cosa en mi vida. Ella hablaba con
tanta sinceridad y afecto al mismo tiempo mientras que yo no podía controlar lo que se evocaba
contra mi voluntad. Una lágrima rodó por su mejilla y vi lo grave que era la situación.

Ella dijo esas cosas en serio y eso me mató. Había una posibilidad real de reparar mi corazón de
todo el daño que ella había causado. Pero también existía la posibilidad que ella lo rompiera, una
vez más. Y que el daño esta vez fuera irreparable. Estaba congelada; total y absolutamente
abrumada por todo lo que había dicho Camila. Los orbes marrones me miraron con expectación,
pero como no encontré el coraje para responder, la angustia se hizo presente en ellos.

39
Asintió con la cabeza muy sutilmente, aparentemente admitiendo su derrota y liberó su muñeca
de mi mano. Me dio una última sonrisa triste antes de salir de la habitación.

¿No debería sentirse fantástico? Le había roto el corazón de la misma forma que ella había roto el
mío. Esta vez fue la revancha. Karma, si se quiere decir. ¿Entonces por qué mi corazón dolía de la
al igual que hace tres años atrás?

"¿Qué estás haciendo?" la voz de Katie apareció de repente y pensé que mi cabeza iba a explotar
ya que no había podido repasar toda la mierda que había sucedido. "¿Y qué estaba haciendo
Camila aquí contigo? Ella acaba de salir como si alguien la estuviera persiguiendo. Espera...
¿Lauren Jauregui finalmente fracasó en su arte de seducción?".

"No exactamente." Murmuré y suspiré pesadamente. "¿Podemos parar de hablar de Camila, por
favor?".

"¿Por qué?" la rubia insistió y se quedó sin aliento. "!Oh, Dios mío, es ella! ¡Ella fue la que te jodió
una vez!, ¿No es así?".

"No exactamente." Murmuré y suspiré pesadamente. "¿Podemos parar de hablar de Camila, por
favor?".

"¿Por qué?" la rubia insistió y se quedó sin aliento. "!Oh, Dios mío, es ella! ¡Ella fue la que te jodió
una vez!, ¿No es así?".

Miré a mi amiga y no estaba segura de cómo responder ya que todavía no tenía claro lo que había
pasado hace un par de segundos.

"Como tú sabes, estoy completamente metida en el lado de los chicos, pero Camila es muy sexy,
así que puedo entender-"

"!Cállate!" la interrumpí y mi ira comenzó a surgir. "!Cállate de una puta vez! ¡¿Ok?! No entiendes
una mierda. Camila no es especial. No es más que una vieja amiga con la que salí alguna vez. Dame
un puto descanso, ¡Ella no significa nada para mí!".

Kristie se sorprendió ya que no estaba acostumbrada a verme así. Siempre era la chica calmada y
relajada a la cual le importaba una mierda el tiempo. Mi arrebato emocional obviamente la tomó
por sorpresa. Ninguna de las dos habló, y finalmente tuve tiempo para pensar. Esto era tan típico.
Había dejado a Camila dictar mis sentimientos una vez más y odiaba eso.

Enterré mi cara en mis manos y sacudí mi cabeza en mi propia estupidez. El hecho de que estaba
tan emocional fue lo que empeoro todas las cosas. Incluso cuando Kristie bromeó acerca de mi
corazón negro en el parque, estaba contenta no sintiendo nada pero ahora que lo pensaba eso me
dolió. Sentí que mi amiga me abrazó para reconfortarme sin decir nada más. Aunque me
avergonzaba de mi reacción, me sentí agradecida de que me prestara su hombro para llorar,
metafórica y literalmente.

40
******************************************

Mis compañeros de equipo y yo estábamos practicando después de nuestra corrida de cada


práctica cuando Kristie me empujó juguetonamente haciendo que me cayera. Empujé su brazo
ligeramente y me encantaba que a veces podíamos ser torpes, pero también serias cuando era
importante. Desde mi pequeño desglose hace más de una semana, todo iba de maravilla y no se
había mencionado nada acerca de esa noche. Al parecer, ella había entendido que mi ex
compañera de equipo era un tema delicado.

"Señoritas, acérquense." Nuestro entrenador nos llamó y corrimos hasta que todos los demás
estuvieron de pie alrededor del hombre mayor. "Tengo un anuncio que hacer. Tenemos un talento
prometedor aquí el día de hoy y va a hacer un par de audiciones con nos nosotros antes de que se
decida lo que vamos hacer. Ella no ha jugado por un tiempo, pero creo que lo hará bien. Por favor,
sean cordiales hoy. Ah, ahí está. Señoritas, den la bienvenida a Camila Cabello."

Me quedé boquiabierta cuando vi a la morena acercarse en su uniforme del equipo. Esto era
broma, ¿Verdad? ¿Ella estaba tratando de entrar en Boston Breakers? ¡En mí puto equipo! Estaba
estupefacta y simplemente miré a la más joven que estaba más cerca.

"CC7 está de vuelta." Oí a otra jugadora detrás mí susurrar y quise correr fuera de la cancha en ese
mismo instante.

=================

Capitulo 3
Camila corría por el lado izquierdo del campo; sus pies rápidos estaban manejando perfectamente
la pelota y dribló al primer defensor. Parecía imposible, pero ella era aún más rápida de lo que
había sido en la Sub-17. Incluso nuestra defensora más experimentada no podía detenerla y fue
parte de la lista de las personas que no se le podían atravesar en su camino.

Si no estuviera tan enojada con ella, sin duda le temería como todos los demás. Todas mis
compañeras observaron el talento de la joven que con habilidad hizo su camino hacia la meta
antes de que ella le pasara el balón a nuestro delantero para que hiciera el golpe.

"!Buen trabajo!" nuestro entrenador gritó desde la banca y quería golpear a alguien en estos
momentos.

Este era mi terreno. Mi equipo. ¿Quién demonios Camila se creía que era? Ella no podía bailar el
vals de nuevo en mi vida y reclamar lo único que significa más que cualquier otra cosa en mi vida.
Si ya no podía disfrutar del fútbol ¿Qué era lo que me esperaba? Mi enojo fue alimentado por mis
compañeros de equipo aplaudiendo y animando a la novata en sus impresionantes esfuerzos. Ella

41
sería parte del equipo. No había ninguna duda en mi mente acerca de eso. Era demasiado buena y
cualquiera sería un idiota si no la incluía en el juego, a pesar de que necesitaba un poco de
entrenamiento.

La práctica del partido continuó y la próxima vez que la novata a prueba tuvo la pelota, corrí y
traté de detenerla por primera vez, a pesar de que ese no era mi trabajo. La conocía mejor que los
otros. Hubo al menos una posibilidad de anticiparme en su próximo movimiento para obstruirle el
paso. Ella dudó un poco y me fui sobre ella, pero de alguna manera se las arregló para pasar la
pelota encima de mí. Sus habilidades eran una locura para alguien que no había jugado en años.
Pero yo estaba furiosa y terminé yéndome hacia su espalda para que no pudiera pasar.

Camila cayó al suelo y oí a algunos jugadores jadear a causa de mi falta.

"!Lauren, tranquilízate! La podrías haber lastimado." Nuestro capitán corrió hacia la chica más
joven que se sentó con dolor. Me miró con una mezcla de incredulidad y enojo.

"Ya no estamos en los años de la Sub-17. Si ella no puede manejar un bloqueo entonces no
debería postular para las grandes ligas." Escupí y sentí unos ojos marrones penetrantes mirarme.
Se puso de pie rápidamente y sabía que ella estaba cerca de soplar un fusible pero se contuvo.
Alguien tiró de mi camiseta y me di cuenta que era Kristie arrastrándome hacia atrás.

"Detente." La rubia regañó, pero oí que el entrenador que gritó mi nombre. Eso no era bueno.
Corrí hacia el hombre de pelo gris y vino a mi memoria un caso similar de hace unos años.

"¿Tenemos un problema, Lauren?" preguntó con firmeza.

"No, entrenador."

"¿Estás segura? ¿Quieres explicarme entonces por qué casi rompiste el tobillo de tu ex compañera
de equipo?".

"Fue... un accidente. Me demoré un poco en el bloqueo." Mentí porque yo podría haberla dejado
pasar, pero saqué mi frustración de manera peligrosa.

"No sé lo que está pasando hoy contigo pero tienes que detenerte.

Parte de la razón por la que quiero que ella se una a nosotros es porque sé cómo ustedes juegan
juntas. Nos vendría bien la magia que ustedes dos tenían en aquel entonces." Mi entrenador
explicó y yo quería gritar cuando habló de nuestra "magia en el juego". "¿Hay alguna razón por la
que no debería considerar a Camila en este equipo?".

"No." Dije en voz baja después de un poco de vacilación.

"Está bien. A las duchas, hemos terminado de todos modos."

Agarré mi botella de agua y me dirigí a los vestuarios. Este día sólo tenía que terminar. En este
punto no sabía con quién estaba más enojada; con Camila por venir aquí o por preocuparme tanto

42
al respecto. Tomé mi lugar de siempre y me senté en el banco mientras todos los demás llegaban.
Mis ojos se centraron en la joven madre que estaba charlando con algunos jugadores. Sin
embargo, me di cuenta de un poco cojera en su andar antes de que sentara y se encontrara con mi
mirada.

Si las miradas mataran, ya estaría muerta. Tragué saliva antes de esquivar sus ojos y sacar mi
teléfono para distraerme. No pasó mucho tiempo antes de que mis ojos verdes vagaran de nuevo
hacia la chica que había intentado besarme no hace mucho tiempo, en un intento de redefinir
nuestra relación. Sólo la memoria de ella estando tan cerca me causó un dolor de cabeza, pero
nada comparado con lo que estaba viendo. Camila se había quitado el jersey y mis labios se
separaron sin querer cuando mis ojos se centraron en la parte superior de su cuerpo casi desnudo.
Ella estaba usando un sostén deportivo de color rosa y se rió de algo que un jugador había dicho.
Su estómago era plano, no tanto como solía ser, pero la piel bronceada se veía tan perfectamente
firme y suave al mismo tiempo.

"Estás mirando fijamente." Oí a Kristie susurrar a mi lado y rompí la fijación. Mis mejillas se
sonrojaron cuando me di cuenta que mi amiga tenía razón y aclaré mi garganta. ¡Pillada! Metí mis
zapatos a mi bolso y me puse mis zapatillas deportivas.

"¿A dónde vas? ¿No te vas a duchar?" preguntó la rubia confundida.

"No, me ducharé en casa." Le expliqué y me fui del vestidor tan pronto como pude.

Una cosa era tener a Camila conmigo en el terreno de juego, pero ¡No podía compartir una
maldita ducha con ella! La mera idea me causó palpitaciones en el corazón. La visión de ella hace
un momento había sido más que suficiente para quemarme y odiaba esa sensación extraña de ira
mezclada con el deseo que me envolvió. Fue como hace tres años y tenía que poner fin a eso lo
más rápido que podía. De lo contrario, la tensión sexual extraña entre nosotras podía sacar lo
mejor de mí en algún momento.

*****************************************************************************

Estaba sentada en la gran mesa en el restaurante del hotel de New York después de que el equipo
había ganado un partido muy importante. Y ya que estábamos en The Big Apple, decidimos
celebrarlo con una cena y unas copas después. Por lo general, nos íbamos el mismo día, pero
gracias a este triunfo excepcional merecíamos una noche extra. Mi meta había sido hacer un gol
de los dos que nos habían conseguido los tres puntos que necesitábamos para recuperar la
primera posición en la liga.

43
La única cosa que me molestaba de esta noche fue la persona que se sentó a mi lado. Camila no
había podido jugar hoy a causa de un par de papeleos que necesitaba terminar pero ella era parte
del equipo. Durante toda la semana había entrenado con nosotros y supe desde la primera
práctica que ella sería parte del equipo. El anuncio de que se le había ofrecido un contrato no fue
demasiado sorprendente para mí.

Nunca habría elegido sentarme a su lado, pero mis compañeras habían organizado a la perfección
así que ese era el único asiento libre cuando yo había llegado. Todo el mundo se dio cuenta de la
tensión entre nosotras. No la estaba abordando pero no estábamos hablando entre sí en absoluto.
Ni una sola palabra a excepción de las pocas indicaciones en la cancha de juego si la
necesitábamos.

Esta noche no fue diferente. Excepto por una cosa; su proximidad estaba causando algunos
pensamientos inquietantes. La más joven jamás se había vestido de esa forma, pero desde que nos
habíamos vuelto a encontrar, ¡Ella me estaba tratando de matar! La corta falda negra acentuaba
sus largas piernas a un punto que debía ser ilegal verse tan sexy. Llevaba un top rojo sin tirantes
que acentuaba firmemente la parte superior se su cuerpo con una chaqueta negra sobre ella. Tuve
problemas para concentrarme en cualquier otra cosa.

Para mantener mis pensamientos para mí, traté de beber para calmar mis nervios.
Desafortunadamente, causó efecto contrario cuando sólo me volví más desinhibida. Las dos
estábamos escuchando a Kristie, que estaba sentada enfrente de nosotras, cuando ya no me pude
contener nunca más.

Mi mano derecha vagó hacia un lado y se puso suavemente sobre la rodilla de Camila. Sentí los
músculos debajo de mis dedos tensados. Pero ella no hizo nada más. Ella no me estaba
deteniendo. Así que, dejé mi mano descansar allí un tiempo y fingí que nada estaba pasando
debajo de la mesa mientras la rubia seguía parloteando. Con el tiempo, me sentí más valiente y
dibujé pequeños círculos en el muslo de la otra centrocampista. La falda corta me dio una gran
cantidad de piel expuesta para trabajar y me encantó cuan suave y lisa se sentía su piel.

Sin embargo, no hubo ninguna reacción de ella. La única cosa que noté fue que su respiración se
escuchaba un poco más desigual que antes. Simplemente usando un toque muy ligero de mis
dedos, me arrastré al interior de su muslo lentamente, subiendo y bajando de manera constante y
empujando hacia arriba la tela de su falda con cada movimiento. Mis dedos se mantenían
acariciando el interior de su muslo, tan sólo a una pulgada de su centro por un buen tiempo para
crear más tensión.

Yo, obviamente, no estaba pensando y el valor del líquido estaba jugando un factor decisivo, pero
no podía negar que estaba en el borde de mi asiento también. Era difícil mantener una cara seria,
pero lo hice sorprendentemente bien, ya que nadie se dio cuenta. Decidí llegar a mi objetivo y
finalmente moví mi mano de nuevo. Mi dedo medio empujó la delgada tela de sus bragas a un
lado, pero Camila se sacudió repentinamente.

44
Aparentemente ella se sorprendió por ese movimiento repentino y al instante retiré mi mano.
Camila fingió una tos para desviar su comportamiento extraño.

"¿Estás bien?" Kristie preguntó preocupada.

"Sí... sólo... nada." Camila tartamudeaba y me miró por primera vez. Sus mejillas estaban ardiendo
y me sentí un poco petulante por haberle causado esa reacción.

Por el resto de la noche, volvimos a nuestro viejo patrón y nos ignoramos mutuamente, mientras
pasábamos tiempo con nuestras otras compañeras de equipo. Estaba cansada y me di por rendida
cuando entré al pasillo para llegar a mi habitación del hotel.

"Lauren, espera." Oí una voz familiar llamando detrás de mí y quise salir corriendo. Tal vez podía
llegar a mi habitación antes de que ella me pudiera atajar, pensé, con la esperanza de ignorar la
conversación.

"Hey, detente un segundo." Estaba equivocada cuando Camila se paró frente a mí. "Creo que
tenemos que hablar."

"No lo creo." Le di la espalda y quise caminar lejos de ella, pero me detuvo poniendo su mano en
mi hombro.

"¿Sólo vas ignorarme después de lo ocurrido en la cena?" sonaba confundida.

"No te hagas ilusiones, sólo estaba... teniendo un poco de diversión." Tenía que terminar con esto
lo más rápido que podía, porque estaba a punto de perder el control.

"¿En serio?" se burló molesta. "Entonces, ¿Siempre tratas de meterle dedos a tus compañeras
debajo de la mesa?"

Mis ojos se abrieron ante sus palabras contundentes y mis nervios definitivamente estaban a
punto de estallar.

"Tal vez." Fingí indiferencia pero sentí los orbes marrones mirarme fijamente.

"Entonces debería empezar a creer lo que la gente dice acerca de tu reputación." De repente
escupió y me hizo mirarla a los ojos.

"¿Cuál sería mi reputación?" me olvidé de mis nervios y me puse furiosa.

"¿Tengo que explicártelo?"

"¿Me estás llamando puta?" no podía creer lo que me estaba diciendo, pero vi que su rostro se
suavizo inmediatamente. Ella estaba tan molesta como yo y una parte de mí sabía que no lo decía
en serio. Fue sólo un intento de obtener una reacción de mi parte.

45
"No." Susurró suavemente, y de repente, sentí su mano acariciar mi mejilla suavemente. Tragué
fuertemente ante la caricia inesperada. Ella se acercó más, pero le agarré su muñeca para sacar su
mano de mi cara.

"Por favor, no lo hagas." Le dije con voz temblorosa para que dejara de tentarme. El momento que
habíamos compartido en la habitación anterior había sido bastante malo, pero ahora la tensión
era insoportable. No sería capaz de abstenerme más si ella seguía haciendo eso.

"Sólo dame un beso." Camila suspiró e hizo que mi corazón saltara a otro ritmo. Ella estaba tan
jodidamente cerca ahora que sentía su respiración en mis labios. En un movimiento repentino,
agarré el cuello de su chaqueta y la empujé contra la pared. Los ojos marrones estaban muy
abiertos y en estado de shock, pero también expectantes.

"Te odio." Dije en voz baja con el mayor temblor en mi voz. Esas dos palabras necesitaban salir,
porque de lo contrario, diría dos palabras que cambiarían todo. Dos palabras que no le había dicho
a nadie, nunca. Pero quería decirlas en este momento y eso me asustó como la mierda. "Te odio,
¿Me oyes?" seguí adelante, pero ella no se veía alterada o amenazada. "Odio la forma en que me
haces sentir. ¡Lo que más odio es que no puedo hacer nada al respecto!".

"Lauren-" habló cariñosamente como su mano acarició una de mis mejillas y se acercó para darme
un beso. Volví un poco la cabeza para esquivarla en un intento de resistir. Sus labios no se
detuvieron, aunque me besó en mi mejilla en su lugar. Ella no se daba por rendida y me hizo mirar
su cara. Dios, sus labios casi tocaban los míos antes de alejarme otra vez. "No te voy a hacer daño
otra vez." Su voz ronca apareció en nuestra lucha antes de que me diera por vencida.

Sus labios gruesos se conectaron con los míos y podría haber jurado que mi corazón había hecho
explosión. Eso fue todo. No podía detenerme. Había tanta tensión acumulada junto con agresión,
que casi que necesitaba algún tipo de liberación. La empujé contra la pared, mientras que con
avidez besaba sus labios suaves, probablemente no era la mejor idea, pero yo estaba más allá de
la razón ahora. Mordí su labio inferior, y oí a la más joven jadear repetidamente cuando devoré
sus labios dispuestos.

"Espera..." dijo y gemí porque no podía creer que quería detenerse en serio en este momento
después de haber iniciado todo. "¿Quieres ir a mi habitación?".

Oh, pensé y vi a Camila que parecía tan insegura. Debía decir que no, lo sabía. Pero acepté de
todos modos. Nos dirigimos a su habitación del hotel de forma rápida y la agarré con firmeza,
presionando su cuerpo contra el mío mientras la guiaba hacia su cama. La más joven estaba
temblando, pero, obviamente, disfruté de mi enfoque. Básicamente arranqué toda su ropa hasta
que quedó sólo en ropa interior y la ayudé a desnudarme también.

Acostadas en la cama, empujé sus piernas delgadas para abrirlas y me acomodé entre ellas sin
dudarlo. Elegí un nuevo lugar para mis labios y comencé a explorar su cuello cuando ella habló de
nuevo.

46
"Uhm... yo no he hecho esto... por un tiempo." Su voz entrecortada llamó mi atención, así que la
enfrenté. "... y nunca he hecho esto con otra chica."

"¿Quieres...? ¿Quieres que me detenga?" pregunté horrorizada de que yo podría haberla


empujada a hacer algo que ella no quería.

"No. Dios no." Se rió con suavidad pero con nerviosismo. "Es que... quizá puede ser que no sea
muy buena en eso."

Finalmente salí de mi lujuria y del hambre y de la tensión que había causado esto en primer lugar.
Esto no era más que una salida con una chica al azar y no podía fingir que lo era. La joven madre
debajo de mí estaba obviamente nerviosa por tener intimidad con alguien después de haber
tenido prioridades diferentes por un tiempo. El cálido color marrón de sus ojos emanaba
entusiasmo, algunos nervios pero mucho cariño. Estaba a punto de caer por ella de nuevo.

"Ni siquiera pienses en ese tipo de cosas." Le respondí en un susurro y acaricié su mejilla con
amor. "Sólo relájate y si no quieres hacer esto en cualquier momento, sólo dime."

"Quiero." Reiteró con una sonrisa sincera. "Te quiero a ti."

Correspondí la sonrisa y coloqué un tierno beso en sus labios. Esto era muy diferente de la vez
anterior, se sentía más significativa. Cambié mi enfoque y decidí tomar las cosas con calma. No
había manera en el infierno que yo hiciera algo si ella no se sentía cómoda. Así que nos quedamos
en un ritmo de sólo besos y explorar cuidadosamente del otro sólo con nuestras manos.

"Jesús, eres tan cuidadosa." Camila murmuró con una risita adorable contra mis labios y no pude
ocultar una sonrisita. Tomé una respiración profunda y pasé mi mano por su pelo mientras la
miraba fijamente a los ojos.

"Eres hermosa." Le dije con sinceridad y de todo corazón. La sonrisa de la mediocampista


izquierda se suavizó y me dio otro beso.

"Hazme el amor, Lauren." Sus palabras hicieron eco en mi mente, pero no tenía tiempo para seguir
pensando más. Por lo general, me reía de las personas que utilizaban palabras como 'hacer el
amor el uno al otro', pero por primera vez entendí por qué alguien podría usar esas expresiones.

Podrían haber sido minutos u horas, pero llegué a un punto de besar y adorar a cada centímetro
de su piel. Había salido con bastante chicas y sabía lo que les gustaba. La expectación, la
acumulación y la sensualidad que quizás le podría haber ofrecido a otra chica haciéndolo especial.
Aunque siempre trataba de complacer en la cama, esto estaba por encima y más allá de cualquier
otra cosa.

Y aparentemente lo que estaba haciendo fue muy apreciado. Camila estaba jadeando,
retorciéndose y gimiendo de principio a fin. Parecía que no estaba acostumbrada a la cantidad de
juegos previos que hice con ella. A pesar de que esa era la última cosa que quería pensar, no pude

47
evitar preguntarme si Austin era un amante de mierda. La forma en que ella reaccionaba ante mí,
parecía ser una posibilidad. La idea de superarlo y sacarlo fuera del agua sólo alimentó mi fuego.

Había estado prestando un montón de atención a sus pechos turgentes y seguí probando las
partes sensibles de su cuerpo. Mis labios se cerraron en sus pezones erectos en varias ocasiones,
mientras que dejaba que mi lengua los saboreara. Lento pero seguro, dejé mi mano vagar dentro
de sus bragas y la oí jadear en busca de aire. Ella estaba cerca y no perdí tiempo. Dos dedos
entraron en el calor húmedo entre sus piernas mientras que el talón de mi mano masajeó la
pequeña protuberancia de lujuria al mismo tiempo.

"Lauren... no puedo." Sonaba como si se estuviera ahogando y todo su cuerpo estalló en un


montón de estremecimientos antes de relajarse.

Dios, ella se veía tan linda y sexy al mismo tiempo que no estaba segura de si quería seguir
adelante o simplemente besarla sin sentido toda la noche. Fui por otro pináculo de excitación y le
quité sus bragas, y bajé lentamente. Mis ojos miraron cuando llegué a su núcleo y se conectaron
con sus orbes oscuros.

"¿Esto está bien?" pregunté con cuidado y la vi asentir. Se veía un poco ansiosa, pero sostuve
nuestro contacto visual mientras muy lentamente dejé que mi lengua pasara por sus pliegues
húmedos.

"Oh Dios." Los ojos de Camila se pusieron blancos, mientras arqueaba su espalda. Satisfecha, pero
también sorprendida por su reacción, seguí adelante con movimientos suaves. Se trataba de la
cantidad de placer y la mayor parte del tiempo; menos era más. Esta no era una estudiante de
primer año borracha que necesitaba un poco de estimulación fuerte, ella era una madre soltera
muy inexperta en este tipo de intimidad con otra chica. Siempre teniendo eso en mi cabeza,
escuché atentamente y vi sus reacciones para asegurarme de que se estaba divirtiendo y no sólo
para calmarme.

De esta manera, me tomé mi tiempo y complací a mi vieja o nueva compañera de equipo hasta
que ella había llegado a su clímax no sólo una vez o dos veces. Yo también estaba más que
satisfecha después de que ella había decidido ser más valiente. La instruí con amor para que
utilizara su mano de manera correcta para darme la mayor cantidad de placer que ella había
experimentado en un principio. Ella era una estudiante rápida y con muchas ganas de
corresponder.

Las dos estábamos jadeando cuando dejé algunos besos suaves sobre su clavícula. Saqué mi
cuerpo fuera de ella para que no tuviera que soportar mi cuerpo y vi esos ojos marrones
rezumando ternura. Sin dudarlo me incliné y la besé por enésima vez esa noche. Ella abrió los
labios y profundicé el beso inclinando la cabeza para cepillar mi lengua contra la de ella. Sus
manos se movían de arriba abajo por m espina dorsal de manera constante a medida que
intercambiábamos besos sensuales hasta que tuvimos que parar para respirar.

48
"Wow..." Camila exhaló. La besé en la mejilla para ocultar el hecho de que estaba sonrojada.
Rodando suavemente, descansé en mi espalda y respiré muy profundo para dejar que las cosas se
tranquilizaran un minuto.

La dicha de la situación se disolvió dándome más tiempo para pensar. ¿Cómo podía estar segura
de que esto era diferente de lo que habíamos hecho hace tres años? ¿Quién dijo que Camila no
me daría la espalda nuevamente? El hecho de que habíamos tenido sexo, no significaba que a ella
realmente le importara. En aquel entonces, había estado tan convencida de que ella estaba
sintiendo lo mismo durante las dos semanas de bootcamp, sólo para descubrir que estaba con
otra persona. Tal vez no sería tan drástico en esta ocasión pero entré en pánico.

Me senté y empecé a recopilar mis ropas para vestirme rápidamente.

"¿Qué...? ¿A dónde vas?" la voz ronca sonaba sorprendida pero amable como me vestí a toda
prisa.

"Volveré a mi habitación." Le respondí, tan casualmente como pude y me puse mis pantalones
negros.

"No tienes que... quiero decir, te puedes quedar aquí si quieres." Me ofreció en voz baja. Ya estaba
casi lista y sólo me puse mi camisa.

"Está bien." Le dije y me paré del borde de la cama para hacer mi salida. Mirarla fue un gran error.
Ella sostenía las sábanas para cubrirse mientras se sentaba en la cama desordenada. Quería volver
a la cama con ella y quedarme, pero mi corazón estaba corriendo en ansiedad y me di cuenta que
estaba jodida.

"¿Hice algo mal?" cuestionó llena de incertidumbre.

"No." Le respondí rápidamente. "No confundamos esto con algo que no es."

"Me temo que no entiendo." La de ojos marrones devolvió. "¿En serio estás tratando de decirme
que esto no significa nada para ti?".

"Fue... muy divertido." Me mató ser tan dura, pero no veía otra salida porque ella se daría cuenta
todo. Era mejor si creía que fue sólo una cosa de una noche.

"¿Divertido?" preguntó y la cantidad de daño tras esas letras fue asombroso. Sus ojos se llenaron
de lágrimas.

"Estabas desesperada y yo tenía curiosidad." Repetí las misma palabras que ella alguna vez me
había dicho. Esto fue, con mucho, la cosa más horrible que le había hecho a alguien. Todo mi
pecho dolió cuando vi el rostro de Camila. Sus labios se abrieron en estado de shock ante la
angustia que se hizo cargo en forma de lágrimas que la azotaron al instante.

49
"Wow." Suspiró. "La venganza es una perra, ¿Eh?" su voz temblaba mientras que yo estaba
congelada. "¿En qué estamos ahora, Lauren? ¿Has terminado de castigarme? ¿Conseguiste tu
venganza?" cada vez su enojo iba creciendo con las preguntas. "¿Eh? ¿Sobre qué tenías
curiosidad? ¡¿Cómo yo era en la cama?! ¿O si me podías seducir ya que no me había acostado con
nadie hace mucho tiempo?".

"Camila-" quería detenerla pero ella me interrumpió.

"!Vete a la mierda!" gritó y me fui de la habitación lo más rápido que pude.

Al salir de la habitación del hotel, me paré frente a la puerta y quedé mirando el picaporte. Tuve la
tentación de volver, disculparme y decirle que sólo tenía miedo de caer en ella de nuevo. ¿A quién
estaba engañando? Ya me había enamorada de ella, pero no podía admitirlo ante mí misma o ella.
Suspirando profundamente, me di la vuelta y decidí no volver a entrar.

********************************************************************************

"Ni siquiera estás viendo el partido." La voz masculina a mi lado me sacó de mis pensamientos.

Luis me miró y tuve que admitir que tenía razón. Había invitado a mi amigo a ver un partido de
fútbol por televisión, pero me quedé en la deriva. Había pasado casi una semana desde esa noche
en New York. Las cosas entre Camila y yo estaban peor que nunca. Durante toda la semana, no me
había mirado; ni una sola vez. No es que yo la culpaba, pero me sentía tan increíblemente mal por
lo que le había hecho la semana pasada. Mi mente seguía reviviendo ese momento en su
habitación cuando me había comportado como la perra más grande de la vida. Esa mirada en sus
ojos se había incrustado para siempre en mi cerebro.

"Lo siento." Me disculpé, pero suspiré en voz alta.

"¿Quieres decirme lo que te molesta?" el brasileño con una beca de fútbol me preguntó.
"¿Problemas de chicas?".

"Sin ánimo de ofender, pero eres la última persona con la que hablaría si necesito asesoramiento
en ese departamento." Me burlé y vi que levantó una ceja.

"¿Por qué? ¡Soy muy bueno con las chicas!" protestó de inmediato.

"Sí, eres muy bueno obteniéndolas, pero no creo que ese sea mi problema." Admití.

"Tal vez estás subestimando mi conocimiento" el otro estudiante universitario comentó en tono
de broma arrogante. Sonreí un poco, pero luego froté mis sienes con frustración. "Vamos, Lauren.
Ponme a prueba. No sólo soy una cara bonita a pesar de que esa es la única razón por la que pasas
tiempo conmigo." Bromeó con claridad de hacerme sentir mejor.

50
"¿Te has... sentido culpable alguna vez por salir sólo una noche con una chica?" le pregunté con
cuidado porque no estaba segura si quería que alguien supiera de mi tensa relación con Camila.

"No." Contestó sin dudarlo. "He salido con chicas que tenían novios, pero yo no era el único en la
relación, así que no me importó."

"No es eso." Exhalé profundamente antes de encontrar valor para hablar. "Hay una chica con la
que tuve... una cosa hace unos años. Terminó de mala manera porque me engatusó y luego
básicamente me aplastó. La encontré de nuevo hace un poco y quizás le hice lo mismo que ella me
hizo a mí, pero un nivel totalmente distinto. Y me siento como una mierda desde entonces."

"¿Ella se merecía lo que le hiciste?" Expresó Luis con cautela.

"No. Nadie se merecía eso." Admití mi comportamiento horrible.

"Bueno, entonces te sugiero que le digas eso." Respondió con calma. "Dile lo mucho que lo sientes
con la misma sinceridad que lo dijiste ahora. Ella puede aceptar tu disculpa o no, pero al menos lo
intentarás. Si es cierto lo que dijiste entonces ella se equivocó una vez también. Ella podría ser más
indulgente de lo que piensas. E incluso si no lo es, hazlo de todos modos. Nunca te he visto tan
deprimida y odio verte así para ser honesto."

Me quedé muy sorprendida al oírlo hablar tan genuinamente porque normalmente hablábamos
de fútbol o chicas. Técnicamente, estábamos hablando de chicas, pero era diferente.

"¿Desde cuándo eres tan perspicaz?" bromeé.

"Te lo dije, me estabas subestimando. Todo lo que tienes que hacer es abrir tus sentimientos."

"Eso es más fácil decirlo que hacerlo." Murmuré, porque ese era mi problema en general. Nunca
podía abrirme ante nadie, a veces porque me enterraba en la mayoría de mis emociones.

"De verdad te gusta." Señaló Luis, y quise estar en desacuerdo, pero de alguna manera no podía.

"No lo sé. Incluso si fuera así, no estoy segura si estoy dispuesta a meterme en una relación de
todos modos." Dije con sinceridad. "Uno siempre termina herido al final."

"No puedes ir por la vida sin hacerte daño, Lauren. ¿Qué clase de vida sería esa? Ya sabes, Kahlil
Gibran dijo: la más profunda tristeza está en lo más profundo de tu ser, más la alegría que no
puedes contener."

Mis ojos se abrieron cuando lo escuché decir algo tan filosófico y vi una sonrisa satisfecha en su
rostro.

"Ahora estás presumiendo." Reí suavemente y oí que él hizo lo mismo. "Pero en serio, ahora
entiendo porque las chicas se enamoran de toda tu mierda."

51
"¿Estás lista para experimentar con el lado heterosexual? Porque estoy a tus servicios." Rió entre
dientes.

"Ew, no gracias." Me dio una palmada en el brazo y rodé mis ojos. "Pero gracias por escucharme y
por el consejo. En realidad lo podría aceptar."

"No hay problema." Me mostró su mejor sonrisa que utilizaba para seducir a las chicas.

"De verdad jamás saldrías conmigo si es lo que lo intento, ¿Verdad?" le pregunté con toda
curiosidad a pesar de que eso nunca iba a suceder. Era tan raro pensar eso porque era casi como
mi hermano.

"Nah, eso sería como salir con mi hermana." Dijo, pero lo observé con atención.

"Mientes." Me di cuenta de su pequeña sonrisa. "!Lo harías, pervertido!"

"!Claro que sí, lo haría! ¿Te has visto, mujer?" se rió antes de que le lanzara una almohada en la
cara. Los chicos son chicos. Gracias a Dios no tengo que lidiar con ellos en ese sentido. No es que
mi historial romántico fuera admirable. De hecho, era lamentable. La única persona con la que
realmente había albergado mis sentimientos probablemente nunca más hablaría conmigo. Con el
fin de averiguar lo que estaba pasando, necesitaba hablar con ella.

*******************************************************************************

Estaba nerviosa de no creer cuando me paré enfrente a la puerta del departamento que
supuestamente pertenecía a Camila. Después de hablar con Luis, decidí tomar su consejo y tratar
de remandar todo lo que no era irreparable en este punto. Mis nervios me estaban matando
porque no era buena hablando sobre mis sentimientos. Estaba tan acostumbrada a apagarlos,
excepto tal vez las emociones que sentía durante el fútbol. Mi plan era hablar las cosas con mi
compañera era bastante ambicioso teniendo en cuenta mi incapacidad para abrirme desde que
ella me había roto el corazón.

Pero tomé una respiración muy profunda y llamé a la puerta. El barrio no era el mejor pero
recordé vívidamente cómo Camila había descrito su vida y su trabajo como vergonzoso o incluso
patético. No quería compadecerme de ella, pero era tan empática con la joven madre que
probablemente su estilo de vida mejoraría después de haber firmado contrato con Boston
Breakers.

La puerta se abrió y vi a la morena que mi miraba con incredulidad antes de que tratara de cerrar
la puerta inmediatamente. Puse mi mano sobre ella para no obtener un portazo en la cara.

"Sólo quiero hablar." Le expliqué y ella de mala gana abrió la puerta.

"Hiciste tu punto bastante claro." Respondió la voz molesta.

52
"Por favor, sólo escúchame." Estaba sorprendentemente tranquila y ella no protestó de nuevo.

"¿Puedo entrar un momento?" me sentía un poco rara al estar de pie en el pasillo y hablando con
ella sobre eso.

"No." Camila dijo en un tono indiferente.

"Ok, entonces..." inhalé profundamente y traté de reunir coraje para ser honesta. Los brazos de
Camila se cruzaron y todo su lenguaje corporal la mostró a la defensiva. Había un nudo en la
garganta que me bloqueó y no pude hablar por un rato y empecé nerviosamente a juguetear
porque no sabía por dónde empezar.

"¿Sabes qué? Olvídalo." La más joven casi empujó la puerta para cerrarla, una vez más, pero
finalmente empecé a formar mis palabras.

"Realmente lo siento por lo que hice en New York." Empecé con sinceridad y vi que ella
lentamente abrió para escuchar. "Tenías razón lo que dijiste en la cena. Estaba enojada contigo. Y
me enojé mucho más cuando tú repentinamente te uniste al equipo, porque realmente nunca
supe lidiar con lo que pasó hace tres años. Pero de repente estabas en todas partes y sentí que
nuevamente tenía 17. Nunca lo dije o se lo admití a nadie, ni siquiera mí misma, pero... yo tenía
sentimientos muy fuertes hacia ti."

Tomé un pequeño respiro para mirarla y su rostro ya no estaba tenso como antes. El ambiente se
sentía catártica parar que aclarara las cosas y decir cómo habían sido, incluso si ella no me
perdonaba.

"Tú realmente me hiciste daño." Seguí en voz baja y me sentí un poco avergonzada de hablar de
mis sentimientos. "Ahora, entiendo que tú también pasaste por muchas cosas, pero en ese
momento yo no lo entendía. Todo el dolor y la ira volvieron a surgir junto con lo demás. Tengo que
reconocer que una parte de mí quería hacerte daño al igual como tú me habías herido. Pero esa
noche... no fue acerca de la revancha, te lo prometo. En todo caso, deseo nunca haber llevado las
cosas tan lejos porque no me gusta la idea de arruinar cualquier oportunidad de ser amigas."

Mi corazón estaba latiendo casi fuera de mi pecho cuando le di mi versión de cómo me había
sentido últimamente, a pesar de haber dejado fuera la parte que aún tenía sentimientos por ella.
Esa parte era irrelevante ahora de todos modos.

Mi corazón estaba latiendo casi fuera de mi pecho cuando le di mi versión de cómo me había
sentido últimamente, a pesar de haber dejado fuera la parte que aún tenía sentimientos por ella.
Esa parte era irrelevante ahora de todos modos.

"Lo siento mucho." Camila dijo de pronto y me quedé muy sorprendida al oír eso. "Por lo que hice
en ese entonces y yo no fui exactamente inocente con lo que sucedió la semana pasada. Estaba
forzando las cosas cuando sabía que tú no te sentías de la misma manera."

53
Me siento de la misma manera, me dije a mí misma, pero no me atreví a decírselo. El temor de
cometer errores era demasiado grande. Sin mencionar que yo no estaba segura de estar en una
relación con alguien por el cual me preocupaba profundamente. Tarde o temprano echaría a
perder las cosas.

"¿Puedo preguntarte algo, Lauren?" ella habló de nuevo, mientras yo permanecí en silencio. "¿Por
qué lo hiciste sino fue por venganza? ¿Sólo se trató de sexo?".

Mi pulso se aceleró cuando detecté la vulnerabilidad en su voz. No estaba segura si yo sabía la


respuesta. Obviamente no sólo se trató de sexo porque yo no podría haber salido con alguien con
quien tenía un historial no muy fácil. Se había sentido correcto en el momento. Los recuerdos
comenzaron a inundar mi cerebro, pero al instante les puse fin.

"No dormí contigo por despecho." Le dije porque esa era la verdad. "Me tomó por sorpresa al
igual que ti. No sé cómo sucedió, pero sólo... pasó. Honestamente, nunca quise que las cosas
tomaran una escalada en la forma que lo hicieron."

No estaba respondiendo a su pregunta, pero era lo mejor que podía hacer. Ella parecía satisfecha
con la conversación hasta el momento. Una parte de mí esperaba que ella me gritara o incluso
darme una cachetada. No la hubiera culpado.

"¿Crees que hay una posibilidad de que podamos pasar esto y ser amigas?" pregunté con mucho
cuidado y tragué suave ante la triste sonrisa que ella medio.

"Definitivamente, podemos seguir adelante y no guardar ningún rencor. Como he dicho, no soy la
inocente en este asunto." La voz ronca alivió mi ansiedad. "Pero no puedo ser tu amiga." Continuó
más tranquila y se mordió el labio inferior. "Tal vez tú no sabes por qué hiciste lo que hiciste... y
está bien que quieras salir con alguien y ser amigos después de todo, pero yo no puedo. Dormí
contigo por una razón."

Mi corazón dio un vuelco. Estaba tan tentada de decir que tuve una razón. La razón era que una
parte de mí siempre la había amado. Y por primera vez dormí con alguien y no fue sólo por lo
físico. Claro, el sexo siempre era emocional hasta un cierto punto, pero esa noche con Camila
había sido diferente a todo lo que jamás había experimentado. Todo fue acerca de los
sentimientos. Y eso me asustó más que nada. Si alguna vez me daban la experiencia de cómo era
estar con ella, no estaba segura de si iba a sobrevivir a perderla de nuevo. Estaba demasiado
asustada para averiguarlo y me mantuve en silencio otra vez.

Los orbes marrones emanaban algún tipo de esperanza de que yo tal vez pudiera reciprocar sus
palabras, pero no pude.

"!Panqueques!" una voz aguda interrumpió nuestro concurso de miradas y vi que Lara estaba pie
junto a Camila.

54
"Uhm..." necesité de unos segundos para recuperar mi compostura, pero sonreí. "Lo siento, no
tengo panqueques en este momento."

"No." Camila se rió suavemente. "Tú eres panqueques." Agregó y yo estaba más confundida que
antes. "Ella te llama panqueques porque no puede recordar tu nombre."

"Oh." Dije, pero no pude ocultar una sonrisa cuando la pequeña me miró. Esa fue probablemente
una de las cosas más lindas que había oído en mi vida, pero estaba reacia a hacer o decir algo
teniendo en cuenta las circunstancias.

"¿Puedes ver una película con nosotros?" la niña de ojos color avellana preguntó y mis ojos se
conectaron con Camila al instante.

"Cariño, ella tiene otras cosas que hacer. Quizás en otro momento, ¿De acuerdo?" la jugadora de
fútbol intervino rápidamente.

"!Por favor! ¡Poooooor faaaavooooooor, panqueques!" Lara se quejó, se acercó a mí y me agarró


la mano para arrastrarme adentro.

"Lara, no creo que este es el mejor momento." Dije con cuidado a pesar de que me rompía el
corazón no cumplir su deseo.

"Mamiiiiiiiiiiii, por favor." Ella seguía lloriqueando y Camila suspiró cuando sentí sus pequeños
dedos celebrar con los míos que eran demasiados grandes.

"¿Tienes otros planes?" la de ojos marrones, de pronto me preguntó y yo tragué saliva mientras
sacudí mi cabeza.

Lo siguiente que supe, fue que entré en el departamento de Camila. Al parecer, ella tampoco pudo
negar el deseo de su hija. Había un montón de cajas alrededor y la chica de 20 años relevó que se
estaban mudando a un lugar más grande. No tenía mucho sentido que siguiera allí ahora que se le
había ofrecido un contrato y probablemente podía permitirse algo más adecuado para ella y Lara.
Me sentí aún más culpable por estar enojada con ella por formar parte del equipo. Ahora ella era
capaz de proveer para ella y su niña sin problemas financieros.

Tan pronto como Lara no estaba escuchando, la morena explicó que la niña de tres años
probablemente se quedaría dormida en unos minutos y yo era libre para irme. Asentí con la
cabeza, pero en secreto la esperanza de que Lara no se quedara dormida con tanta rapidez la
disfruté debido a que disfrutaba de su presencia y la de Camila más de lo que quería.

Pasaron unos minutos y yo estaba sentada en el sofá, Lara junto a mí y luego Camila. Estábamos
viendo dibujos animados y no podía detener a mi corazón que aleteaba fuertemente. Lara se rió
con alegría cuando los personajes de los dibujos animados hicieron algo obviamente estúpido,
pero pensé que mi pecho iba a estallar cada vez que escuchara su risa incontrolable. De vez en
cuando, miré a mi compañera de equipo y parecía más cómoda ahora conmigo aquí.

55
No era consciente, pero Lara se había acurrucado a mi lado en algún momento y yo había
comenzado a acariciar el pelo de color marrón claro con mucha suavidad. Mis ojos estaban
enfocados en la pantalla y fue puramente instintivo lo que hice. Tenía el pelo tan sedoso y suave y
realmente no noté lo cariñosa que era con la pequeña que apenas conocía, pero obviamente eso
me gustó.

La próxima vez que eché un vistazo a Camila, vi que los ojos marrones estaban mirando mi mano
que acariciaba el cabello de Lara. Ella levantó la vista y se encontró con mi mirada, llena de cariño
y ternura. Mis labios formaron inmediatamente una suave sonrisa y ella hizo lo mismo. Dios, esto
se sentía demasiado bien.

Realmente podría acostumbrarme a esto, pensé. La idea de compromiso todavía me asustaba y yo


definitivamente no estaba lista para tener una familia... ¿O lo era? No era cualquier familia. Era
Camila y Lara.

¡¿Qué demonios estaba pensado?! ¡Sólo tenía 21 años! Me cerebro me decía que era una locura,
incluso para dar con ese tipo de pensamientos, pero mi corazón sólo quería inclinarse, besar a
Camila y decirle que quería lo mismo que ella quería.

El fuerte golpe en la puerta interrumpió nuestro pequeño momento. Probablemente era mejor
así.

Camila parecía sorprendida, pero se excusó para ir a responder al llamado, mientras que Lara
seguía dormida. Oí pasos que se acercaban.

"Tú no puedes aparecer así." La voz airada de Camila apareció y mi corazón cayó en picada cuando
vi a Austin entrando con ella.

"Quería verte." El joven habló con urgencia, pero luego fijó su mirada en su hija que estaba
conmigo. "Vamos a hablar por un minuto, ¿De acuerdo? Lara está siendo cuidada y estoy segura
de que a tu amiga no le importa mirarla por unos minutos."

Mi cabeza estaba a punto de estallar cuando los vi discutir y la chica de ojos marrones me miró
claramente abrumada por la situación.

"No me importa mirarla por unos minutos." De repente dije antes de que pudiera detenerme. Una
parte de mí sólo quería quedarse para asegurarse de que Austin se iría en algún momento. No era
mi lugar, pero me sentía la protectora de ellas dos ya. No hubo tiempo para Camila para protestar
ante su ex esposo ya que la llevó a otra habitación. Respiré hondo, intentando centrarme en mí
misma e internalizar que esto no debía molestarme.

Mis ojos se abrieron de golpe cuando escuché las voces llenando mis oídos. Me volví hacia un lado
para ver que un baby-phone estaba en la mesa. La otra parte del teléfono probablemente estaba
en la otra pieza y así tuve oportunidad de escuchar la conversación. Por un segundo, quise
apagarlo y darles su privacidad, pero no me pude aguantarme y escuché.

56
C: En serio, ¿Qué estás haciendo aquí?

A: Estoy aquí para llevarme a ti y a Lara a casa conmigo.

C: Es una broma, ¿Verdad? No hay manera en el infierno que yo vaya a algún lado contigo.

A: Bebé-

C: No me llames así. Siempre he odiado que me llames así de todos modos.

A: Mira, cometí un error.

C: No, dormir con alguien más es un error. ¡Dormir con la mitad de las chicas de tu universidad es
imperdonable!

A: ¡No estaba pensando! No estaba preparado para ser un esposo o un padre y actuar como tal.

C: ¿Y tú crees que yo estaba lista para ser mamá? Pero crecí y me di cuenta de que había cosas
más importantes que yo.

A: Lo sé y lo siento mucho, ¿Cómo puedo arreglar las cosas?

C: Eso es simple, no puedes.

A: No tienes idea de cuánto te extrañé. A las dos.

C: Es curioso, porque no hemos sabido nada de ti desde que nos mudamos aquí. ¿Tienes alguna
idea de cuan difíciles las cosas han sido? El crear excusas cada vez que Lara preguntaba por ti fue
probablemente lo peor de todo. Así que discúlpame si estoy teniendo un tiempo difícil de creer
que estás dispuesto a luchar por ella.

Su voz sonaba temblorosa.

A: Estoy aquí ahora. Quiero pelear por las dos. Por favor, dame otra oportunidad. ¿No crees que le
debes a Lara la oportunidad de ser una familia de nuevo? Una oportunidad más, eso es todo lo
que pido.

Hubo un silencio y mi corazón latía sin control.

A: Te amo, Camila. Siempre lo he hecho. Eres mi único y verdadero amor, mi primer amor.

Hubo un silencio pero la voz de Austin sonaba más tranquila y me imaginaba que estaban más
cerca ahora.

C: Austin... no-

A: Sólo un beso. Te extrañé mucho, bebé.

57
No hubo respuesta por parte de Camila y sólo me pude imaginar lo que estaban haciendo. El
simple pensamiento de él besándola me hizo furiosa pero sabía que era mi culpa. Apagué el
teléfono, porque no quería oír nada más.

Esto era lo que yo quería, ¿No? Le podría haber dicho a Camila como me sentía y tal vez las cosas
podrían haber sido diferentes. O, le podría haber dicho y ella seguiría con Austin en el otro
extremo; no como si eso no hubiera ocurrido antes. Lara se estaba moviendo cuando la puerta se
abrió y los dos salieron. La pequeña estaba frotando sus ojos adormilados antes de que ella los
viera.

"!Papi!" ella gritó y se acercó a él tan rápido como pudo. Había un dolor agudo en mi pecho que
quería ignorar, pero se sentía como si alguien me estuviera acuchillando.

"Mírate, niña bonita." Austin se reunió con ella a mitad de camino y la levantó.

Ya había visto lo suficiente. Estaba claro que no era parte de eso y me levanté rápidamente.
Forzando una sonrisa, tan sólo podría haber salido corriendo pero Camila me acompañó hasta la
puerta.

"Gracias, Lauren." La más joven parecía angustiada todavía.

"¿Por qué me das las gracias?" pregunté confundida.

"Por esta noche." Respondió ella aún más críptica. ¿Qué quiso decir? ¿Por haber cuidado de Lara
mientras ella se besaba con Austin? ¿O por disculparme y hacerme sentir una idiota una vez más?

Simplemente asentí y me alejé. ¿Qué otra cosa podía decir realmente? Ella tenía a su familia de
nuevo y yo sólo era la tonta que no había aprendido la lección. Por lo menos estaba aliviada de no
haberle dicho nada; a pesar de que dolía saber que no podía confiar en sus sentimientos.

****************************************************************************

"No puedo esperar a emborracharme, festejar y olvidarme de todo por unos pocos días." Le dije a
Kristie llena de emoción.

Estábamos en el aeropuerto con otros compañeros y amigos para volar a mi ciudad natal y pasar
las vacaciones de primavera allí. Después de mi conversación con Camila, hace dos días, no pude
dejar de pensar en cualquier otra cosa y este viaje era el remedio perfecto para el dolor. Tuvimos
unos días de descanso y las vacaciones de primavera eran la fiesta más grande del año. Estar de
vuelta en Miami sería el bálsamo adicional que necesitaba para mi alma.

"Estoy muy emocionada también. Creo que podría salir con Luis." La rubia dijo con indiferencia he
hice un sonido como si estuviera vomitando.

58
"Por favor, no lo hagas. Esa es una visual que realmente no necesito."

"Normalmente no hago eso, pero las vacaciones de primavera es la única época del año en que no
estoy un buscando a Mr. Right para Mr. Right Now." Ella me guiñó un ojo.

"Él ha intentado de meterse en tus pantalones por años. No le des la satisfacción." Intenté darle
un ángulo diferente.

"Oh, confía en mí. Él obtendrá una satisfacción." Dijo sugestivamente y yo rodé los ojos.

Pero lo que vi después hizo que mis ojos casi se salieran de sus órbitas. Camila caminaba hacia
nosotras con una maleta.

"¿Me estás jodiendo?" susurré en tono entrecortado. No podía escapar de ella, ¿Podía? ¡Ella
estaba en todas partes! "¿Qué está haciendo aquí?" le pregunté a Kristie en estado de shock.

"¿No lo sabías? Ella llamó a última hora y Mel la invitó porque se sentía mal. Al parecer, su hija
está pasando la semana con su padre y Camila estaba sola." Mi ex compañera de cuarto me
informó.

Perfecto. Malditamente perfecto. Quería unos días para mí donde no pudiera verla, y allí estaba
ella, una vez más. Tal vez se trataba de una retribución kármica por lo que yo le había hecho en
New York. De todas maneras, ¿Nosotras siempre estábamos retribuyéndonos cosas, no? Suspiré
profundamente y me recordé a mí misma que no tenía que pasar tiempo con ella si no quería.
Había bastantes otras personas en este viaje. Por no hablar de mi familia y amigos que estaban en
casa. Pensé que lo mejor era ignorarla lo más que podía.

Si las cosas fueran así de fácil.

Capitulo 4
Se suponía que esta sería mi escapada perfecta. Un tiempo lejos de todo el estrés de Boston para
concentrarme en la diversión sin complicaciones; Vacaciones de Primavera en mi ciudad natal.
Miami era conocido por sus fiestas escandalosas y estaba emocionada de estar de vuelta. Mis
compañeras estarían allí para un montón de diversión. Pero había una cosa que me molestó este
año. Algunos de mis dramas que me había seguido en forma de una muy atractiva compañera de
equipo con la cual había salido no hace muy poco.

Estaba acostada en la piscina del hotel tomando sol para obtener un bronceado mientras Camila
estaba sentada en el otro extremo de la piscina. Sus pies estaban colgando en el agua y se reía
histéricamente de algo que Mel estaba diciendo. Gracias a Dios llevaba las gafas de sol negras para
que nadie se pudiera dar cuenta que estaba fijamente mirando a la joven. Debería estar molesta
con ella, pero ¡No podía dejar de mirarla! Esto era tan desesperante que tomé un gran sorbo de mi
bebida.

59
¿Por qué ella si quiera estaba aquí? Habíamos llegado hace un par de horas y todo lo que sabía era
que Lara estaba con Austin y nuestra capitana Mel había invitado a Camila porque la joven madre
estaba sola. De todos modos, ¿Por qué estaba sola? ¿No pudo quedarse con su pequeña familia
perfecta? Sinceramente, no comprendo por qué ella quiso unirse a nuestro viaje cuando había
vuelto con Austin.

"!Hey! ¿No te vas a unir a la piscina con nosotros?" , Luis estaba empapado y cayó en la tumbona
de sol junto a mí.

"Tal vez más tarde" , murmuré e inhalé profundamente.

"¿Qué pasa contigo? Has estado emocionada por este viaje toda la semana y ahora que estamos
aquí, no estás disfrutando de ello" , mi amigo se dio cuenta muy rápidamente de que algo estaba
mal.

"No pasa nada, sólo estoy cansada" , mentí porque no quería explicarle por qué no estaba
pasando un buen rato.

"Entonces toma una siesta o algo porque necesito a mi mujer-voladora" , sonrió y me di vuelta
para dirigirme a él.

"¿Quién es la afortunada?" , sonreí.

"La nueva chica de tu equipo. Camila, ¿No?" , señaló a la morena y sentí que mi pulsó se aceleraba
al instante. Obviamente, él no sabía nada de mi historia con la californiana, pero no estaba segura
de si quería que lo supiera. "Ella es muy sexy" , agregó y alimentó ese sentimiento extraño de los
celos, cuando yo no debería estar celosa en absoluto.

"No creo que debas meterte allí" , le dije lo más tranquila posible.

"Oh, pero quiero" , Luis me guiñó un ojo y vi sus ojos llenos de deseo mientras veía a Camila y por
alguna razón me estaba volviendo loca.

"Ella tiene un hijo y un marido" , espeté y el brasileño me miró en estado de shock.

"Oh" , él estaba claramente desconcertado. "Entonces realmente no debería meterme allí."

Me mantuve en silencio, con la esperanza de que la conversación llegara a su fin. Técnicamente no


estaba mintiendo. No estaba segura de sí Austin era el marido o ex marido de Camila en este
punto. Lo único que sabía era que Camila había dicho que no estaban juntos. Eso podría significar
que seguían casados pero no juntos. Y después de lo que había ocurrido en su departamento,
estaba bastante segura de que estaban juntos de nuevo de todos modos.

"¿Lauren?" , oí una voz desconocida llamarme y miré hacia arriba.

"¿Emily?" , mi voz casi se quebró porque estaba muy sorprendida.

60
La chica con el pelo rubio oscuro y ojos verdes azulados estaba mostrando sus dientes en una
perfecta sonrisa. Tuve problemas para concentrarme en otra cosa que no fuera en su cuerpo
perfecto antes de mirarla a la cara. Ella estaba usando un bikini, lo cual era normal teniendo en
cuenta que estábamos en una zona de piscina, pero ¡Su cuerpo era cualquier cosa menos normal!
Era de otro mundo. La tela azul sólo cubría el mínimo de piel necesaria, pero que no dejaba mucho
a la imaginación. Tragué un poco, por lo general no me ponía tan fácilmente nerviosa.

"Oye, dame un abrazo" , la rubia dijo alegremente y yo hice lo que me dijo.

"Hola, ¿Cómo estás?" , pregunté casualmente y la abracé ligeramente. La chica me abrazó de una
manera más estrecha de lo que esperaba y levanté una ceja cuando inadvertidamente sentí un
cuerpo perfecto presionándose contra el mío.

"Estoy bien, ¿Cómo estás? Escuché que estás viviendo en la costa este, ¿También?" , ella
respondió echándose para atrás y yo esperaba que no se diera cuenta de mis mejillas sonrojadas.

"Sí, vivo en Boston. Voy a la universidad y juego fútbol. ¿Sigues en la NYU?" , le pregunté con
curiosidad, porque eso fue lo último que había oído hablar de ella.

"No, me gradúe el año pasado, pero todavía estoy en New York. Estoy modelando por el tiempo
que pueda y luego ya veremos" , la chica un poco más alta dijo y yo asentí. Ella era sin duda una de
las personas más perfectas físicamente que había conocido, aun así, su carrera como modelo, no
fue una sorpresa para mí en absoluto. Quería decir algo, pero de pronto sentí que me quitaba las
gafas de sol. Mis labios formaron una pequeña sonrisa sin darme cuenta.

"Ah, ahí están" , dijo con voz ronca mientras mis ojos verdes se encontraron con los de ella. "No
deberías usar gafas de sol. Esos ojos no deben ser ocultados, nunca."

¿Estaba coqueteando conmigo? ¿En serio? Estaba tan acostumbrada a ser yo la que coqueteaba y
seducir, por lo que no sabía cómo actuar en el otro extremo. Por no mencionar que nunca había
sido golpeada por alguien tan jodidamente impresionante.

"!Emily! ¡Vamos!" , alguien llamó a la modelo y yo seguía congelada cuando ella se rió un poco.

"¿Vas a estar en la fiesta en la playa esta noche?" , preguntó y me entregó mis gafas de sol.

"Sí" respondí con sencillez.

"Perfecto, te veré entonces. Y no con gafas de sol" , dio un guiño final antes de alejarse.

Mi mirada la siguió por un momento y mis ojos se centraron en su parte trasera que apenas estaba
cubierta. Ella probablemente sabía que la estaba mirando. Las chicas siempre sabían que yo hacía
eso por la forma en que ella balanceaba sus caderas con cada paso, estaba bastante segura que lo
estaba haciendo a propósito. Sonreí para mí misma y no podía creer lo que acababa de suceder.

61
"Pon a esa señora-erección lejos, Lauren" , la voz de Luis me volvió a la realidad y le lancé una
mirada antes de volverme a sentar. "¿Quién demonios era ella?"

"Ella es Emily Ginzburg" , exhalé e intenté ordenar mis pensamientos. "Fuimos juntas a la escuela
secundaria. Sin embargo, es dos años mayor que yo. Sus padres son increíblemente ricos. Ella era
como la abeja reina, si se puede decir."

"Fuiste a una escuela privada. ¿No era todo el mundo rico allí?" , mi amigo intervino.

"Los que tenían una beca como yo no lo éramos pero la mayoría sí" , estuve de acuerdo. "Pero no
como ella. Ella realmente es rica. Por supuesto, ella era la capitana de las porristas, salía con los
jugadores de fútbol y así sucesivamente. Conoces a ese tipo de chicas. Cada escuela tiene una."

"Y tú tenías un crush en ella" , declaró Luis.

"Toda la escuela tenía un crush en ella. Quiero decir, ¿La has visto?" , me reí suavemente. "Pero
ella era inabordable y... bueno, heterosexual. Por lo tanto, no estoy segura que ha pasado."

"Ella estaba coqueteando contigo" , confirmó mis sospechas y no pude evitar sonreír.

"Entonces no era parte de mi imaginación" , dije en voz baja.

"Definitivamente no. Maldita sea, cómo es que la chica de tus fantasías coquetea contigo y mi
objeto de deseo es una mujer casada" , se burló y por primera vez me acordé de Camila. Desde
que Emily había aparecido, ésta había sido

la primera vez que mi nueva compañera de equipo no dominaba mis pensamientos.

Dejé que mis ojos vagaran por la piscina y vi que la morena me miró a los ojos. Ella ya no se estaba
riendo. Diablos, ni siquiera estaba sonriendo. Por alguna razón, parecía molesta y sentí que mi
frecuencia cardiaca se duplicó cuando la miré de lejos. Era diferente de lo que sentí cuando estaba
hablando con Emily. Más intenso y confuso. Pero también doloroso porque sabía que las cosas
nunca iban a funcionar.

Así que miré hacia otro lado y traté de centrarme en mi bronceado. Mi única esperanza en este
punto es que Camila no fuera a la fiesta en la playa, pero como iban las cosas últimamente, las
posibilidades eran casi inexistentes.

********************************************************************************

"¿Quién es la víctima?"

"¿Qué?" , le pregunté a Kristie confundida ante su pregunta.

62
"Te ves extremadamente sexy esta noche y supongo que hay una razón para ello. Entonces, ¿A
quién estás tratando de impresionar?" , mi ex compañera de cuarto me miró con complicidad.
"Llevas tus shorts favoritos y tu camiseta de Rolling Stones que siempre ocupas cuando estás
tratando de dar una imagen de chica ruda. Y llevas más maquillaje de lo habitual. Lápiz de labios
rojo, ojos acentuados y arreglaste tu pelo. Definitivamente algo está pasando."

"No sé si debo sentirme alagada o asustada en estos momentos" , le respondí y ella rodó los ojos.

"No es.... uhm... Camila, ¿Verdad?" , Kristie preguntó con cautela y mencionó a la morena por
primera vez desde mi pequeño arrebato en la habitación de la fiesta.

"No" , respondí con calma. "Te dije que eso fue hace años."

Ella no tenía que saber acerca de mi reciente noche con Camila. Nadie tenía que saber. Tal vez
sería capaz de olvidar eso pronto. No hablar de aquello conduciría a no pensar en ello, ¿No? Los
recuerdos de nuestra noche juntas seguían muy vivos en mi cabeza y no disminuían. La suavidad
de sus labios carnosos, con la ternura y pasión con la que ella me había besado, la vacilación con la
que exploró mi cuerpo, el amor en esos cálidos ojos marrones... sí, ¡Definitivamente tenía que
olvidarme de eso!

De repente, sentí un par de manos tapándome los ojos por detrás.

"No llevas gafas de sol" , escuché a alguien decir con admiración antes de abrir los ojos y ver a
Emily sonriéndome.

"Oye, viniste" , le dije y ella se rió suavemente.

"Sí, te dije que vendría" , dijo y se dio cuenta de mi compañera de equipo al lado de mí. "Hola, soy
Emily" , ella le tendió la mano con cortesía.

"Encantada de conocerte. Soy Kristie" , la otra rubia se presentó.

"Kristie juega fútbol conmigo y es una buena amiga mía" , le explique más. "Emily y yo fuimos
juntas a la secundaria."

"¿En serio?" , Kristie sonrió. "He estado esperando conocer a alguien de su antigua escuela por
siglos para saber si ella siempre ha sido tan encantadora."

"¿Lauren es encantadora?" , Emily preguntó con curiosidad y sonrió de una manera que hizo que
mi corazón se desbocara.

"¿Ella no era así en la escuela?" ,Kristie obviamente estaba sorprendida.

"No, no en realidad. Al menos no cuando yo estaba allí" , respondió la modelo. "Ella estaba muy
enfocada en el fútbol y era algo inaccesible."

"¿Yo era inaccesible? Mira quién habla" , bromeé un poco.

63
"Sí, lo eras" , ella sonrió más ampliamente como comenzamos a hablar el uno del otro. "Tú sólo
hablabas y pasabas el rato con tus compañeros de equipo. Nunca te había visto en ninguna fiesta
porque estabas tan dedicada a ser una deportista. Tú eras un poco... intimidante."

"¿Hablas en serio?" , me reí porque yo no podía creer que ella pensara eso de mí en ese entonces.
"Tú eras la intimidante. Quiero decir, ¿Te has mirado en el espejo?"

"Eres una encantadora" Emily le sonrió a Kristie.

"Te lo dije" , mi compañera de equipo dijo encogiéndose de hombros.

"No, en serio. Tú eras la capitana de las porristas, jefa de todos los comités de mierda que había,
una estudiante ejemplar y te veías de esa manera. Por no hablar que eras dos años mayor, así que
nunca pensé que me habías notado o si quiera conocerme" , admití.

"Me di cuenta de ti" , Emily respondió más bien en voz baja y se mordió el labio inferior casi
seductoramente. Tragué fuertemente porque eso se sintió tan extraño y tan bien.

"Uhm... creo que me iré para allá... porque... ya sabes" , dijo Kristie no muy sutilmente en su
intento de darme un poco de tiempo a solas con la ex animadora.

"Así que, ¿Deseas ir a buscar un trago?" , le pregunté y señalé en dirección a la pequeña barra que
era la fuente del valor líquido que necesitaba en estos momentos. Ella asintió con la cabeza.
Comenzamos a caminar y me di cuenta de que había un montón de gente en la fiesta. Nos
conseguí una copa y le entregué el cóctel que ella había querido comer antes de que tomáramos
nuestros primeros sorbos. Mi bebida era bastante fuerte, pero necesitaba un poco de relajación.
No es que me gustaba admitirlo, pero Emily me ponía nerviosa como el infierno y eso sucedía
pocas veces... en realidad nunca a excepción de una morena de la cual no quería acordarme.

"¿Por qué llevas una camiseta?" , la chica de pelo claro preguntó de repente.

"¿Esa es una pregunta estratégica?" , le respondí con una sonrisa.

"Estamos en la playa" , se encogió de hombros. Ella llevaba un par de pantalones cortos de color
rojo y un bikini negro, pero sin camisa. "Y yo te vi en la piscina. Por lo que puedo decir que no es
necesario que lleves una camisa."

"¿No debería usar gafas de sol y ahora no debería usar una camisa? Estoy viendo una temática
aquí" , me reí y ella estaba realmente reprimiendo una carcajada.

"Quizás estoy tratando de averiguar cuanta fuerza de voluntad tienes por si quiero ir a bañarme
desnuda más adelante" , dijo y mis ojos se abrieron ligeramente. Su mano agarró el dobladillo de
mi camisa y su ceja enarcada me demostró que me estaba desafiando. Jugué un poco y me saqué
la camisa en un movimiento rápido, ya que también llevaba un bikini debajo. Antes de que supiera
lo que estaba pasando, sentí un par de labios presionándose contra los míos. Respondí

64
instintivamente, pero estaba sorprendida de encontrar a mi ex crush besándome. Ella se apartó
rápidamente y sonrió con timidez.

"Ahora, tenemos que salir de aquí" se rió y pude sentir que me sonrojaba. "¿Quieres sentarte y tal
vez hablar un poco?"

"Sí, claro" casi tartamudeaba y traté de usar un mínimo de palabras para ocultarlo.

Nos sentamos en la arena y vimos las olas rompiendo en la orilla. Había muchas otras personas
alrededor, pero sinceramente, sólo me percaté de la chica mayor que estaba a mi lado.

"¿Debería tener miedo?" preguntó Emily de repente y volví mi cabeza en confusión absoluta.

"¿Por qué?"

"Tu ex" dijo y me dejó aún más estupefacta. "Ella sigue dándome esas miradas matadoras y me
temo que en realidad podría matarme esta noche."

"¿Qué ex?" le contesté aún sin comprender lo que quería decir.

"Esa linda morena" la otra chica asintió en una dirección diferente y seguí su movimiento, para
encontrarme con una par de ojos marrones que hicieron que mi corazón dejara de latir. De hecho,
Camila nos estaba mirando y no parecía contenta, en absoluto. Pero desvié la mirada rápidamente
y me dije que ese no era mi problema. Ella era la que tenía un novio o marido de todos modos.

"Ella no es mi ex" tomé un gran trago de mi bebida.

"Pero saliste con ella, ¿Verdad?" , agregó Emily y yo guardé silencio porque no quería mentir. "Una
chica mala" , la traviesa rubia regañó juguetonamente.

"No es así" , quería apaciguar a la chica junto a mí, pero me costó olvidar esos orbes marrones.

"A juzgar por la forma en que te mira, lo que pasó debe ser reciente" , la chica mayor siguió su
camino y sentí que quería una explicación de algún tipo.

"Fue una cosa de una noche. Ella está de vuelta con su novio y no quiero nada de ese drama" ,
traté de decir lo más convincente que pude. Al parecer funcionó porque Emily estaba sonriendo
genuinamente.

"Bien" , dijo en voz baja.

"¿Bien?" , pregunté, y no pude evitar sonreír de vuelta.

"Sí" , se rió ligeramente y se veía un poco nerviosa.

"¿Por qué?"

65
"Porque... me gustas" , confesó ella con sus mejillas volviéndose rojas. Se rió una vez más y me
agarró el brazo con un pequeño apretón. "¿Por qué me miras de esa manera?"

"¿Cómo?" , realmente no era consciente de lo que yo estaba diciendo.

"Como si no puedes creer que realmente estoy interesada en ti."

"Porque no puedo" , espeté también sonriendo. "Una parte de mí todavía piensa que esto es un
reto que tienes que cumplir o algo así."

"No que tu ego necesita más caricias según tu amiga Kristie" , habló con más seriedad y acarició
suavemente mi brazo. "Pero me gustas. Tú eres muy sexy y eso es una ventaja, pero estar en el
negocio en el que me encuentro, me doy cuenta de que eso no es tan importante como a la gente
le gusta pensar. Eres muy madura y tienes tu mierda junta, lo cual es raro para la gente de nuestra
edad. Me gustan las personas que tienen metas y trabaja muy duro por ellas. Y eres segura pero
no arrogante. Tengo que admitir que estaba un poco enamorada de ti en la escuela, pero tú eras
más joven y parecías interesada nada en que no sea el fútbol. Así que nunca hice un movimiento
en ese entonces, pero ahora... supongo que tengo curiosidad para ver donde las cosas podrían ir."

Estaba seriamente abrumada por lo que me dijo porque no estaba tan acostumbrada a que las
chicas fueran tan abiertas acerca de sus sentimientos. Bueno, yo nunca les di la oportunidad de ser
pero ese no era el punto. No estaba acostumbrada a ser querida en ese sentido. Claro, un montón
de chicas tenían la curiosidad de explorar su sexualidad y experimentar y usualmente era donde
me encontraban a mí. Algunos decían que era un pasa tiempo de las chicas que salían conmigo. No
era que me quejaba, pero esto era diferente.

"¿Te asuste?" , Emily apretó los labios con ansiedad.

"No" , negué con la cabeza y sonreí ligeramente. "Es que no estoy acostumbrada a esto, supongo."

"¿Crees que podrías acostumbrarte?" , ella se acercó más y su voz se convirtió en más un susurro.

"Creo que sí" , le dije en un susurro. Sentí que sus labios rozaron los míos, por segunda vez en la
noche. Tenían un sabor afrutado quizás debido a su brillo labial o a lo que estaba tomando. Fuera
de lo que fuese, sabían jodidamente fantásticos en este momento. ¡Mi cerebro no procesaba que
estaba besando a Emily Ginzburg! Puse mi mano en su barbilla y la acaricié suavemente
profundizando el beso. Ella jadeó en voz muy baja, pero inclinó la cabeza separando sus labios al
mismo tiempo.

No estaba segura de cuánto tiempo pasó, pero el beso terminó siendo un poquito fuera de
contexto. Fue inesperado, me sentí eufórica que esto haya tomado un giro tan positivo.
Terminamos hablando de los viejos tiempos, sino también de nuestras vidas en estos momentos y
tuvimos un buen rato. Estaba bebiendo, pero no mucho como solía hacerlo cuando me divertía en
las vacaciones de primavera. No era necesario y me gustó. No podía negar que me sentía muy
atraída por ella y no sólo físicamente.

66
Ella me pidió otra copa y no tuve ningún problema de darnos otra ronda. Después de todo, había
disfrutado de ser cuidadosa hasta cierto punto. Estaba esperando mis bebidas en el pequeño bar
cuando me di cuenta que alguien apareció junto a mí.

"Tú no pierdes el tiempo, ¿Verdad?"

Me volví hacia mi lado y vi a Camila. Su aliento olía a alcohol y tenía los ojos vidriosos. Sin duda ella
estaba borracha, pero no quería lidiar con ella o su drama en estos momentos.

"No hagamos esto por favor, está bien" , traté de desviar el tema porque sabía que esto sólo podía
terminar mal.

"La semana pasada fui yo, esta semana la rubia... ¿Quién sigue la próxima semana?" , casi se
atragantó con las palabras y respiró hondo para calmarse.

"¿Qué quieres de mí, Camila?" , espeté a pesar de mis esfuerzos. "Tú fuiste la que dijiste que no
querías ser mi amiga."

"No" , me dijo, y sus ojos parpadearon rápidamente por un momento.

"¿Entonces por qué te importa?" , me reí con amargura.

"¿Por lo menos la conoces? ¿O es sólo otro, polluelo al azar que llevarás a tu habitación del
hotel?" , la voz de la joven sonó herida.

"La conozco" , le respondí, aunque ella no se merecía una explicación en este punto. "Fuimos a la
secundaria juntas."

"Así que, ¿Te gusta?" , Camila se burló y al hacerlo me hizo furiosa.

"¿Es tan difícil de creer?"

"Sí, lo es" , ella dijo arrastrándome las palabras, una vez más, pero sentía el dolor punzante en mi
pecho que sólo ella podía causar. Hubo esa horrible voz en mi cabeza que me decía que tenía que
lastimarla porque ella me estaba haciendo daño.

"Bueno, sí, me gusta" , dije con más sinceridad y vi sus ojos más inseguros. "Tú sabes, siempre hay
una persona que es inalcanzable. Esa chica que no puedes tener. Ella es casi como una fantasía
porque no puedo creer que alguien sea tan impecable y perfecta. Ni siquiera te atreves a pensar
en estar con ellos debido a tu propia inferioridad, incluso en hipótesis, ya que eso dañaría su
perfección."

Los orbes marrones eran vulnerables y no en defensa, como antes. Estaban frenéticamente
flechando mis ojos verdes cuando sentí que mi boca se abría de nuevo.

"Eso es Emily para mí" , añadí, y tragué saliva cuando los ojos de Camila se llenaron de lágrimas.
Ella apretó sus labios y esquivó mis ojos por un momento.

67
"¿Qué te pasó?" , su voz tembló ligeramente cuando se encontró con mi mirada. "¿Qué pasó con
esa chica de la Sub-17? La chica que era tan... cuidadosa, suave y tierna conmigo" , continuó con
una sonrisa triste y no podía creer que estaba hablando de eso justo ahora. "¿Qué fue lo pasó que
te convirtió en una persona herida y enojada?"

"!Tú fuiste lo que me pasó!" , espeté de repente porque no podía soportarlo más. "¿Quién mierda
te crees para preguntarme esas cosas? ¡Me rompiste! Sí, yo era diferente ese entonces porque...
estaba enamorada de ti" , confesé por primera vez y sentí mi propia voz temblorosa. "Te serví mi
corazón en bandeja de plata y tú decidiste romperlo. Así que, perdóname si no estoy dispuesta a
repetir eso. ¡¿De dónde sacas valor para decirme toda esa mierda cuando sigues eligiendo a tu
precioso marido sobre mí?!"

"¿De qué estás hablando?" , ella intervino confundida.

"Sabes de lo que estoy hablando. Te oí a ti y Austin cuando estaban hablando mientras yo estaba
allí" , se me escapó.

"¿Qué?"

"Sé que no debí hacerlo, pero lo hice. Confía en mí, me hubiera gustado no escuchar" , suspiré
profundamente.

"Lauren, espera-" Camila me agarró del brazo ya que yo quería correr lejos.

"Ya basta, Camila. Para de... jugar conmigo, ¿De acuerdo? Sólo déjame ser" , agregué más
desesperada ahora y saqué su mano de mi brazo.

Esta vez, ella se mantuvo en silencio mientras yo me alejé. El dolor en mi pecho era exactamente
la razón por la que no quería hablar con ella. Cada conversación que teníamos era intensa al punto
de que siempre pensaba que iba a tener un ataque al corazón. Una parte de mí sabía que no debía
sentirme de esa manera por alguien que yo supuestamente no quería estar. Pero ¿Cuál era el
punto de querer a alguien cuando no puedes estar con ella? La persona inalcanzable, la chica de la
fantasía; en el fondo sabía que no había estado hablando de Emily cuando había dicho eso.

La rubia estaba de pie en la orilla, con los pies en el agua cuando regresé.

"¿Dónde están las bebidas?" , preguntó un poco confundida, pero yo tenía algo más en mente.
Puse mis brazos alrededor de su cintura y la atraje hacia mí.

"¿Por qué no te vas conmigo a mi habitación del hotel para tomar una copa?" , le susurré y me
incliné para darle un beso.

"Tranquilo, tigre" , Emily llevó uno de sus dedos a mis labios para evitar el beso. Ella fue la que se
inclinó ahora, pero sus labios terminaron junto a mi oído. "No soy ese tipo de chica" , suspiró ella
contra mi órgano de la audición y se liberó de mi abrazo.

68
"¿Podemos pasar el rato?" , dije inocentemente pero sonreí y comencé a caminar.

"Sabes tan bien como yo que no vamos a poder quitarnos las manos de encima. Por muy tentador
que sea, la expectativa es aún más divertida" , me dio la espalda y comenzó a caminar. "Te veré
mañana."

Y con eso ella se había ido. Volví a sentarme en la arena y enterré mi cara entre mis manos. Dios,
esta montaña rusa emocional simplemente no iba a terminar. Un minuto estaba feliz pasando el
rato con mi ex crush, al minuto siguiente Camila me llamó antes de quebrarme de nuevo. Este no
fue el tipo de viaje que me había imaginado, eso era seguro.

*******************************************************************************

Estaba en mi camino de regreso a la habitación del hotel cuando vi a Luis acercándose


rápidamente.

"Lauren, necesito tu ayuda" , jadeó y me preocupé porque se veía tan estresado.

"¿Qué pasa? ¿Estás bien?" , le pregunté, mientras él trataba de recuperar el aliento.

"Sí, estoy bien, pero se trata de Camila" , mi amigo empezó a explicar. "Ella perdió el control. La
encontré tirada en la playa, pero ella no me dejó ayudarla porque probablemente pensó que era
un canalla o algo así. Ella te conoce y no podemos dejarla dormir allí."

Esto era tan típico de todo lo que había sucedido últimamente. Cada vez que me calmaba y
trataba de arreglar todo lo que había pasado entre Camila y yo, había algo que me tiraba hacia
ella. Por mucho que quería rechazar la ayuda, yo no podría, por supuesto. Esto no era sobre mí o
nuestra lucha anterior. Ella podría estar en serios problemas si alguien la encontraba desmayada
en la playa.

Suspiré profundamente, pero seguí a mi amigo rápidamente. Realmente me rompió el corazón ver
a la joven tan borracha que ya no tenía coherencia. Su pelo era un desastre, y la copa de color rojo
junto a ella estaba vacía. Por un segundo tuve miedo de que estuviera inconsciente. Me agaché y
traté de sostenerla.

Camila abrió los ojos por un momento, sonrió, pero a la deriva. Jesús, ella realmente estaba
borracha. Luis y yo nos las arreglamos para tomarla en brazos y llevarla de vuelta a su habitación.
Ella no estaba compartiendo una habitación con nadie por desgracia. De otra forma, le podría
haber pedido que su compañero de cuarto la cuidara, pero en su lugar, puse el cuerpo inerte hacia
abajo suavemente, y su cabeza golpeó las almohadas. Tomando una respiración profunda,
comencé a debatir si debía o no quedarme, pero le dije a Luis que se podía ir antes de darle las
gracias. Salió un poco después y no pude contenerme, así que me senté en la orilla de la cama.

69
Ella se veía mucho más joven. Casi exactamente como la chica que había conocido en el fútbol
juvenil; una chica con mucho genio y un talento que hacía que todo el mundo le temiera. La chica
de la cual que me había enamorado desde la primera vez que la vi. Mi cerebro comenzó a llenarse
de recuerdos de la única vez que la había visto dormir en el bootcamp durante nuestra pequeña
'aventura'. Estaba confundida sobre lo que en realidad ella había sentido en ese entonces. Ella me
había dicho en nuestra cena que se había enamorado de mí, pero de ninguna manera le creí.

"Lauren..." , la voz ronca interrumpió mis pensamientos.

"Sí, soy yo. Estás en tu habitación" , le expliqué rápidamente porque no quería que ella pensara
que estaba en otro lugar.

"Tú... ¿Me cuidaste?" , una leve sonrisa apareció en los labios de mi compañera de equipo y yo
tragué.

"Trata de volver a dormir" , desvié su pregunta y traté de pararme.

Los delgados dedos de Camila agarraron mi muñeca de manera descuidada y vi que sus ojos se
abrieron perezosamente.

"Quédate" , suspiró ella, y la vulnerabilidad en su voz hizo que mi corazón latiera más rápido.

"No creo que sea una buena idea" , dije de vuelta, pero no me atreví a defenderme bien.

"Por favor" , suplicó. "Sólo... por un rato."

"Ok" , dije en apenas un susurro y sentí que sus dedos se apretaron en torno a mi muñeca. "Me
quedaré hasta que te duermas, pero luego me iré."

"Ok" , respondió y sentí que acariciaba mi muñeca continuamente pero ella estaba borracha y,
probablemente, se imaginó que yo era otra persona.

"Realmente debes ver la forma en que tomas. Es bastante obvio que no eres entrenada como
nosotros" , revelé con una sonrisa y la miré a los ojos con cuidado.

"Sólo... estaba tratando de adormecer el dolor" , la morena dijo de repente y elevé mis cejas.

"¿Qué dolor?" , pregunté en voz más baja. Suspiró en lugar de darme una respuesta y yo no estaba
segura si debía sorprenderme en este punto. Era asombroso que ella aún siguiera conversando
conmigo teniendo en cuenta su estado de embriaguez. Las dos nos quedamos en silencio por un
momento, pero no fue tan incómodo como yo había esperado después de nuestra pelea.

"¿Quisiste decirlo?" , Camila volvió a hablar y me dejó pensando a qué se refería. "¿Qué estabas...
enamorada de mí en ese entonces?"

Sentí un nudo en la garganta cuando me encontré con los orbes marrones mirándome. Ellos
estaban tratando de concentrarse intensamente pero vi lo difícil que era para ella concentrarse.

70
Aspiré profundamente y no pude contenerme. Mi mano libre, se levantó y suavemente rozó los
mechones de pelo desordenados en su cara. Todos sus rasgos faciales se relajaron con el contacto
suave de la punta de mis dedos.

"La única razón por la que te diré esto", susurré con sinceridad. "Es porque sé que no vas a
recordar nada en la mañana. Pero sí, yo estaba enamorada de ti" , le confesé con calma ya que
sabía que no iba a recordar esta conversación después de dormirse.

"Yo estaba enamorada de ti también" , dijo arrastrando las palabras y me sonrió suavemente en su
respuesta.

"Estás borracha" , no estaba siendo egoísta, pero sonreí a sabiendas de que ella estaba hablando
tonterías.

"Lo que significa que estoy diciendo la verdad, ¿No?" , respondió ella y elevé ligeramente una ceja
antes sus palabras.

"¿Entonces por qué volviste con Austin?" , no pude mantener mi boca cerrada, aunque este era el
peor momento para tener esta conversación.

"Porque yo estaba asustada... y Austin era la opción segura" , a Camila le costó responder
luchando con su estado de embriaguez.

"¿Es por eso que volviste con él otra vez?" , solté y vi que inclinó su cabeza inquisitivamente.

"¿Qué?" , ella parecía confundida y negué con la cabeza rápidamente.

"Olvídalo, no debería estar hablando contigo cuando claramente estás fuera de sí" , le dije.

"Amé a Austin", ella exhaló con fuerza. "En cierto modo, realmente lo hacía. Pero no fue nada
comparado con lo que tú me hiciste sentir. A veces me volvías tan enojada que quise golpearte" ,
la voz baja se rió. "Y me hiciste sentir tan especial con la forma que solías mirarme que hacías que
las ganas de besarte aumentaran y así nunca dejarte ir. Nunca me he sentido así por alguien. Es
tan intenso que no sé qué hacer conmigo misma..."

Y con eso se desmayó de nuevo. Sabía que no debía tomar sus palabras en serio. Ella había
perdido más allá de la creencia, pero no podía negar que mi corazón latía con la esperanza de que
había algo de verdad en sus palabras. Probablemente no. Suspiré de nuevo y dejé que mis dedos
rozaran su mejilla con ternura. La superficie tersa se sentía caliente y estaba ligeramente roja por
el sol. Sonreí por un segundo, pero mis ojos se abrieron con sorpresa cuando de repente ella
habló.

"Eres mía" , susurró con voz casi inaudible, con los ojos todavía cerrados. "La chica inalcanzable...
la fantasía... eres mía, Lauren."

71
Mi corazón pareció detenerse cuando oí las últimas palabras antes de que Camila se desmayara
por completo inmediatamente después. ¿No podía estar hablando en serio? Eso fue el alcohol
hablando. Repetí eso en mi cabeza, pero por alguna razón no pude evitar el tacto de mis dedos
con sus rasgos faciales antes de susurrar: "Eres mía, también."

********************************************************************************

Mi cabeza me estaba matando en la mañana siguiente. Estaba sentada en la gran mesa del
restaurante del hotel, pero no podía disfrutar del gran buffet porque sentía náuseas.
Definitivamente el alcohol había tomado el control de mi cuerpo en forma de resaca. Estaba
bebiendo mi café y tratando de no perder la cabeza.

Miré hacia arriba para encontrarme con Luis y Kristie que se unieron a mi mesa. Mis ojos verdes
los miraron fijamente mientras se sentaban.

"Uf, ustedes dos totalmente lo hicieron" , solté y vi que los dos sonrieron.

"Lo siento" , Kristie, obviamente, no lo sentía y negué con la cabeza con disgusto juguetón.

"Siento ganas de vomitar ya así que por favor no quiero detalles de cualquiera de ustedes dos,
para que quede claro" , dije y me froté la sien con suavidad.

"Pero quiero los detalles sobre Camila y tú" , Luis respondió bruscamente y sentí los ojos azules de
Kristie perforar a través de mí inmediatamente.

"¿Tú y Camila?" , preguntó y la emoción en su voz reforzó mi sospecha de que a ella le gustaba la
idea de la californiana y yo juntas.

"No, Luis y yo sólo la llevamos de vuelta a su habitación después que se perdió" , le expliqué, y vi
que mis amigos se miraron un poco. "No hay detalles. Se desmayó y me fui. Fin de la historia."

"Creo que es raro que ella este aquí" , el chico mayor dijo. "¿Por qué vino a este tipo de viaje si
tiene un hijo y un marido en casa?"

"Ella no tiene un marido" , Kristie soltó al instante.

"Lauren dijo que sí" , Luis dijo y ambos me miraron.

"Ella no está casada. Le pregunté. Ni siquiera lleva un anillo de bodas" , comentó la rubia como si
fuera tan obvio que Camila no estaba casada.

"No estaba muy segura de si ella todavía estaba casada o no" , no mentí porque no estaba segura
del estado en el que ella y Austin se encontraban.

72
"Parecías bastante segura ayer en la piscina cuando tomé interés por Camila y me dijiste que
retrocediera" , el brasileño intervino y me hizo mirarlo.

"Bueno, me equivoqué. Lo siento" , rodé mis ojos y me moví incómoda ante el tema.

"O tal vez estabas tratando de alejarme de ella porque secretamente quieres salir con la chica
nueva. ¿Miedo de un poco de competencia?" , Luis sonrió. Usualmente bromeaba con él, pero me
hizo furiosa la forma en que habló sobre Camila. Al mismo tiempo me daba miedo que fuera
averiguar que tenía, de hecho, un poco de historia con mi compañera de equipo.

"No estoy interesada en ella y además, ella no es un trozo de carne" , le dije de vuelta y lo vi
levantando las cejas.

"Uhhh, alguien ya se siente protectora" , mantuvo haciendo bromas, no sabiendo lo sensible que
ese tema era para mí. Kristie parecía preocupada.

"!Dios, si quieres a Camila entonces adelante y folla con ella, no me importa!" , dije de repente y
vio a mis dos amigos que parecían horrorizados de repente. Sus ojos estaban enfocados en algo
detrás de mí y me di vuelta rápidamente para ver a Camila de pie allí.

"Vete a la mierda" , me susurró, porque probablemente había oído la última parte y parecía
herida. Giró sobre sus talones antes de que fuera capaz de procesar la situación. Esto era tan
perfecto.

¿Por qué este tipo de cosas siempre me sucedían? Tragué saliva con dificultad y dude unos
segundos antes ponerme de pie y correr detrás de ella.

"!Camila! ¡Espera!" , dije en voz alta, pero ella seguía caminando hasta que la alcancé y traté de
agarrar su muñeca.

"No" , ella se liberó de mi mano de inmediato, pero no podía dejarla ir de esa manera.

"Sólo déjame explicarte, no es lo que parece ser" , traté de seguirla hasta que se dio la vuelta.

"Soy un idiota, ¿Sabes?" , se rió con amargura, pero sus ojos estaban llenos de rabia y dolor. "La
razón por la que vine fue para darte las gracias por cuidar de mí anoche. ¡Qué estúpido de mi
parte pensar que realmente te preocupabas por alguien que no fueras tú misma!"

"Lo siento, ¿Vale? Luis estaba hablando y yo... uhm... también, pero fue... un mal entendido" ,
balbuceé, porque no estaba segura de lo que estaba hablando.

"No hay ningún mal entendido, Lauren" , Camila jadeó con ira. “! Simplemente no te entiendo! Te
acuestas conmigo por diversión, ¿Verdad? Entonces te presentas en mi departamento y tratas a
Lara de la forma que tú lo haces. Pocos días más tarde, sales con otra chica justo en frente de mí y
me dices que ella es tu fantasía. ¿Para qué? ¿Sigues tratando de herirme? Pensé que habíamos
terminado con eso después de New York o ¿Era esa disculpa en mi departamento también parte

73
de tu plan para la venganza? Para colmo de males, cuidas de mí anoche y luego ¿Tratas de
ofrecerme a tu amigo?"

"!Yo no te estaba ofreciendo!" , le grité y traté de no concentrarme en todas las otras cosas que
había dicho antes.

"Entonces, ¿Qué estás haciendo? Porque realmente no lo entiendo. ¿Estoy leyendo mal los signos
o no me estás dando ninguno y yo soy la idiota aquí?" , su voz sonó desesperada y confundida.

"No estoy tratando de hacerte daño" , quería arreglar las cosas, pero ella negó con la cabeza.

"Sigue diciéndote eso" , espetó antes de que sus ojos se enfocaran en algo detrás de mí. "Tu novia
está esperando."

Me di la vuelta para ver a Emily acercándose a Kristie y Luis, Camila se alejó después de dar la
vuelta. Suspiré profundamente, esto hizo mi montaña rusa emocional fuera perfecta. Necesitaba
un minuto para ordenar mis pensamientos, porque todo era tan confuso en estos momentos.
¿Camila realmente estaba interesada por mí de esa manera? ¿Por qué se preocupaba tanto por
Emily y que 'signos' le estaba dando? Pero ella había regresado con Austin, ¿No? ¿Por qué yo era
el chico malo cuando ella estaba con alguien más?

Ninguna de esas preguntas sería contestada por mí de pie en el vestíbulo del hotel, así que regresé
con mis amigos. Emily me saludó con una gran sonrisa mientras me sentaba a su lado.

"Hey, ¿Cómo estás? Kristie dijo que estabas con resaca" , la de ojos verdes dijo y puso su mano en
mi muslo.

"He estado mejor, pero estoy segura que va a desaparecer en unas pocas horas" , le respondí y me
sentí confundida cuando miré a la impresionante modelo que causaba sentimientos en mí. Ellos
no eran tan fuertes como los de Camila pero estaban allí. Y ellos no me hacían daño.

"¿Alguna posibilidad que podamos salir hoy?" , preguntó casualmente pero suspiré ligeramente.

"Voy a pasar todo el día con mi familia, lo siento. No los he visto en mucho tiempo y
probablemente volveré muy tarde" , le expliqué mis planes y la vi hacer pucheros.

"¿Y mañana, entonces?"

"Mañana suena perfecto" , sonreí y sentí que su mano le dio un ligero apretón a mi muslo.

"¿Cuándo te vas de todos modos?"

"Pasado mañana, porque la práctica comienza de nuevo" , le dije y traté de concentrarme


únicamente en ella y no en el nudo del estómago que se agrandaba cada vez que pensaba en la
conversación con Camila hace unos minutos.

74
"Bueno, entonces tenemos que disfrutar" , susurró Emily e inesperadamente me besó en los
labios.

Correspondí con suavidad y no podía negar que se sentía bien. Si tan sólo no estuviera presente
esa sensación de molesta de culpabilidad que persistía en mí. Tal vez quería desaparecer en el
tiempo. No me había sentido atraída por una persona en mucho tiempo y si existía la posibilidad
de explorar más a fondo las cosas, estaba dispuesta a hacerlo. Inconscientemente me acordé de
las palabras de Camila de la noche anterior: Austin era la opción segura. ¿Emily era mi Austin?
Ignoré rápidamente ese pensamiento y sólo disfruté el afecto de la chica mayor sin ningún drama.

*******************************************************************************

Caminando detrás de Camila con nuestro equipaje me recordó a los viejos tiempos. El vuelo de
regreso a Boston había sido muy largo, pero me alegré de estar en casa; a pesar de que Miami era
mi hogar también. El viaje había sido nada parecido a lo que esperaba. Después del primer día
turbulento con Camila, pasé el segundo día con mi familia y el tercero con Emily. La modelo y yo
estábamos perfectamente, pero tomamos las cosas con calma. Yo nunca había estado en una
relación y no estaba segura de si estaba complemente lista. La chica mayor entendió mi duda
porque ella vivía en New York y yo en Boston. No estábamos demasiado lejos y tal vez no era tan
malo tener un poco de distancia. Pero por ahora, habíamos hecho planes para volver a vernos
pronto y tomar las cosas desde allí.

La morena que caminaba delante de mí con sus auriculares puesto no me había hablado después
de nuestra pelea en el desayuno. No estaba muy ansiosa por hacerlo, ya sea porque no sabía qué
decir. Siempre que intentábamos hacer las paces, la catástrofe se acercaba rápidamente.

Una parte de mí se sentía increíblemente culpable. Tal vez debería tratar de arreglar las cosas
antes de que el viaje se terminara para siempre. Aceleré mis pasos y casi la alcancé cuando sentí
que alguien me tiraba de mi brazo. Me di vuelta en confusión y vi que Kristie fue la que me impidió
de tener una charla con Camila.

"Sólo déjala ir" , dijo la de ojos azules y sentí que mi ritmo cardiaco se duplicó ante sus palabras.
"Tú eres mi amiga y te quiero, pero no estás siendo justa con ella."

"Yo... no sé lo que estás hablando" , tartamudeé con nerviosismo, pero me sentí atrapada.

"Mira, no sé lo qué está pasando entre ustedes" , mi amiga sonrió cálidamente. "Pero es obvio que
Camila siente algo por ti y tú no quieres corresponder a sus sentimientos. Elegiste a Emily y eso es
comprensible, pero tienes que dejar de traer a Camila de vuelta a tu vida. Si no quieres estar con
ella entonces déjala ir. Sólo terminarás hiriendo a ambas si sigues así. Sólo déjala ir."

Tenía el estómago hecho nudos una vez más cuando escuché a mi amiga más cercana decir cosas
tan sinceras. Al parecer, no era tan cuidadosa en mantenerlo en secreto como pensaba. Sus

75
palabras seguían en mi cabeza: 'Es obvio que Camila siente algo por ti' ¿Cómo fue eso obvio?
Todavía no estaba segura de lo que realmente la futbolista más joven en realidad sentía. Por lo
que sabía, estaba de vuelta con su ex-marido. A pesar de que quería estar enojada con mi amiga y
decirle que estaba equivocada, no podía. En el fondo, yo sabía que ella tenía razón.

Me di vuelta para ver a Camila que estaba más lejos. Mi corazón cayó en picada cuando me di
cuenta que Lara y Austin la estaban esperando. La niña se reía alegremente como Camila se inclinó
y la besó frenéticamente. Austin estaba de pie junto a ellas mirándolas al igual que yo. Camila
cogió a su hija y la abrazó con fuerza y por alguna razón sentía como si alguien había atravesado
mi pecho con un cuchillo. Me di cuenta a lo que me estaba dando por vencida.

Recordando las palabras de Kristie, ya había hecho mi elección. Podría haber sido más honesta y
haberle dicho a la chica de ojos marrones como me sentía, pero había elegido varias ocasiones
para no hacerlo. Y no podía culpar a nadie más que a mí misma ahora.

Déjala ir, repetí internamente.

=================

Capitulo 5

La multitud rugía cuando Camila estaba de pie junto al banquillo con el árbitro, a punto de ser
sustituida por primera vez. La mayoría de la gente en el estadio no la conocían pero cada
sustitución traía nueva esperanzas para los fans; sobre todo si se trataba de un jugador
completamente nuevo que no habían visto antes.

Sólo quedaban veinte minutos para el final y el juego estaba muy empatado: 1-1. The Portland
Thorns nos estaban dando un rato muy difícil en nuestro partido como dueñas de casa y su
defensa era muy difícil de pasar. Habíamos tratado en múltiples ocasiones marcar pero nuestro
atacante no pudo golpear la red con la pelota por alguna razón. Eso causó frustración. Moral bajó
en la segunda mitad del juego.

Eso cambió al instante como Camila tocó el balón por primera vez y mostró sus habilidades
descaradamente. La multitud estaba jadeando y aplaudiendo con sorpresa cuando la joven
jugadora pasó al primer defensor y sólo fue detenida por el oponente tirando de su camiseta, lo
cual nos dio un tiro libre. Sus primeros segundos en el terreno de juego ya estaban dando frutos y
los fans aplaudieron con admiración.

Camila y yo no necesariamente estábamos en un buen terreno desde que habíamos regresado de


las Vacaciones de Primavera. Volvimos a ser cordiales, pero nada más. Había pasado una semana y

76
no habíamos hablado en absoluto. Por mucho que me sintiera frustrada por nuestra situación,
todavía me sentía culpable por lo que había pasado en Miami, estaba tratando de seguir el
consejo de Kristie para no acercarme a la morena. Pero eso no quería decir que no estaba
impresionada con ella. Era evidente que ella estaba deseosa de hacer recuento de su tiempo y me
acordé de lo nerviosa que yo había estado en mi primer partido con la liga profesional.

Por desgracia, el tiro libre no sirvió de nada pero la nueva centrocampista izquierda estaba
causando caos en el estadio y en la defensa del otro equipo. Ella parecía imparable y no pasó
mucho tiempo hasta que se liberó en el lado izquierdo, envió la pelota hacia el otro lado y supe
exactamente donde iría a parar. Me coloqué a la perfección, me arriesgué a chutear la pelota, lo
cual funcionó y finalmente fue a parar en el fondo de la red. La pelota fue disparada con tanta
fuerza que ni siquiera el arquero pudo reaccionar antes de que esta aterrizara en la esquina
superior derecha.

Mis compañeros corrieron hacia mí para celebrar pero yo sabía que este logro no era sólo mío.
Camila había sido una pieza fundamental. Poco a poco me acerqué a ella y nos dimos los cinco en
una forma de decir 'gracias' aunque me hubiera gustado abrazarla al igual que lo haría con
cualquier persona. Ese fue el primer contacto que habíamos compartido en una semana. Desterré
esos pensamientos, volví al modo de juego, ya que era hora del 'Show de Camila'. Me sorprendí
sonriendo varias veces cuando ella mostraba un truco tras otro y tenía a todo el mundo a sus pies;
literalmente -un jugador quedó en ridículo cuando trató de quitarle el balón.

Ella siguió haciendo su jugada individual en el tiempo de descuento y marcó un gol en su primer
partido. Probablemente nunca olvidaría esa sonrisa en sus labios cuando la mostraron en la
pantalla del estadio justo después. Su agotamiento era visible después de haber jugado como loca,
pero la pura felicidad y satisfacción parecía valer más que cualquier otra cosa, mientras que todos
la felicitaron.

El juego había terminado y el entrenador le dijo a Camila, a nuestra capitana Mel y a mí que
debíamos hacer las entrevistas de los periodistas que esperaban en el costado del campo. Me
dirigí hacia ellos y vi a la nueva estrella de nuestro equipo tomando su lugar frente a los
micrófonos. Poco a poco, me puse a su lado para esperar mi turno, pero en realidad tenía
curiosidad por escuchar su charla. Se veía tan feliz; esa maldita sonrisa me estaba matando y eso
causó que mi corazón saltara en mi pecho.

Periodista: ¡Qué debut! Felicitaciones por tu primer juego, primera asistencia, primer gol y primera
victoria. ¿Cómo te sientes en este momento?

Camila: Muchas gracias. Sinceramente aún estoy tratando de procesarlo. Es abrumador jugar en
este tipo de atmósfera. El público fue increíble y realmente nos apoyó hasta el final. No sé qué
decir, estoy realmente en una pérdida de palabras.

77
Periodista: Parecías que no estabas nerviosa en absoluto teniendo en cuenta que fue tu primer
juego.

Camila: Definitivamente estaba nerviosa pero estaba aún más emocionada y concentrada. Estos
tres puntos son muy importantes y estaba convencida de que podíamos sacar una victoria y esa
fue mi única preocupación en el campo. Estoy mucho más nerviosa ahora hablando contigo.

Como si ella no fuera un encanto, con su talento, esa sonrisa tímida que estaba pegada
constantemente en ese hermoso rostro tenía a sus pies al reportero. Suspiré en silencio y no podía
negar que estaba tan enamorada de ella.

Periodista: Para la mayoría de la gente saliste de la nada, pero los fans más dedicados te conocen
desde hace unos años. Habías jugado con Lauren Jauregui en ese entonces también y parece que
aún tienen esa muy buena conexión con el otro en el campo. ¿Fue útil tener a un jugador conocido
en el campo?

Camila: Creo que es útil para cualquier persona jugar con ella, incluso si antes no lo habías hecho.
Ella es sin duda una fuerza impulsora en el equipo y, básicamente, lo puede hacer todo. Ella es la
mejor creadora de juego de mi generación, así que me siento muy afortunada de haber jugado con
ella en el pasado y también hacerlo ahora.

Tragué el nudo de mi garganta después de la última pregunta y la respuesta de la joven. Estaba


siendo diplomática y eso parecía grave, pero me sentí halagada ante sus elogios. Los reporteros le
agradecieron y sus ojos se conectaron con los míos por una fracción de segundo antes de que
cambiáramos de posiciones y yo estaba lista para contestar las preguntas.

Periodista: Fue un buen partido aunque una victoria difícil. ¿Cuál es tu opinión sobre ello? ¿Qué
salió mal en los primeros sesenta minutos?

Lauren: Nosotros no marcamos el segundo gol. Es tan simple como eso. Estábamos haciendo
nuestro mejor esfuerzo, pero no es fácil ganar contra The Thorns. Cada partido es clavo-
remordedor en esta temporada y creo que es un hecho de lo fuerte que son los equipos este año.
Afortunadamente, terminamos teniendo de vuelta nuestra atención y no las arreglamos para
encontrar nuevas formas de roer su defensa.

Periodista: Esas nuevas formas obviamente incluyen a Camila Cabello, la última incorporación a su
equipo. ¿Te sorprende de lo bien que lo hizo en su primer partido?

Lauren: La conozco desde las categorías inferiores y no me sorprende en absoluto para ser
honesta. No se puede negar que nosotras debíamos ganar hoy. Ella es el jugador más hábil y
talentoso que he tenido el placer jugar y no dudo de sus habilidades por un segundo.

Periodista: ¿Esa conexión que ustedes dos parecen tener es tan fácil como parece?

Lauren: Uhm... no sé... creo que es probablemente una mezcla de cosas. Obviamente hemos
estado practicando juntas últimamente y hay gameplays por los cuales hemos trabajado duro.

78
Pero... supongo... que es algo natural, al menos para mí. No estoy consciente de pensar en eso con
ella, pero siempre sé lo que va a hacer por alguna razón.

¡Jesús! Esa última pregunta me había lanzado por un lado que por el cual generalmente yo era
más elocuente o hablaba mejor en las entrevistas, motivo por el cual era elegida para hacerlas.
Fue extraño hablar de ella y 'nuestra conexión' como si ella no estuviera cerca. Y fue aún más
extraño hablar de ella, pero no hablar con ella. Por lo menos eso no estaba arruinando nuestro
juego al parecer.

Estaba lista con las preguntas y miré a la muchacha que usa el número siete en su nuevo jersey.
Ella estaba realmente sonriendo; muy débilmente, pero aun así fue una sonrisa. El alivio se
apoderó de mí y tuve la esperanza de podríamos superar nuestros problemas en algún momento.

********************************************************************************

Estábamos en una pequeña pizzería cerca del estadio donde nos gustaba celebrar después de
nuestros juegos. No era una verdadera fiesta o cualquier cosa, pero siempre era agradable
reunirnos después de un tiempo en el campo. Todo el mundo parecía estar pasando un buen rato,
pero el tema de la noche fue sin duda el impresionante debut de Camila. Todas mis compañeras
de equipo estaban todavía con temor y hablaron en repetidas ocasiones sobre diferentes
situaciones durante el juego donde la pequeña las había impresionado.

Me quedé tranquila pero las escuché a todas. Era mucho más agradable de ver las reacciones de
Camila. Ella estaba nerviosa y tímida o intentaba hacer bromas de autodesprecio. Fuera lo que
fuese, no sólo los fans y reporteros la amaban, todo el equipo la adoraba ahora aún más.
Definitivamente fue un gran cambio para nuestros días de Sub-17 en el cual ella siempre había
sido más bien templada e inaccesible en conjunto con un montón de arrogancia. Me gustó ver esa
versión mejorada de ella. Era más suave y genuina. Cogí mi corazón palpitante muchas veces
mientras la observaba.

Sin embargo, hubo una cosa que me causó dolor de cabeza. Austin estaba allí también. Él
simplemente estaba hablando con otras personas u orgulloso mostrando lo adorable que era Lara.
Pero no pude evitar esa sensación molesta de celos cada vez que los miraba. Por suerte, no era
muy cariñoso con Camila. En realidad, no era cariñoso con ella en absoluto. Si yo estuviera en su
posición, no sería capaz de contenerme. Me hubiese gustado besar esos labios carnosos en cada
oportunidad que tuviera. Tocar su piel caramelo. Mirar profundamente esos ojos color
chocolates... ¡Detente, Lauren!

Suspiré y me levanté para ir a buscar una bebida en el pequeño mostrador. Todo mi cuerpo se
tensó cuando sentí una mano en mi espalda baja. Elevé mis cejas y miré hacia mi lado para
encontrar a Austin sonriéndome.

79
"Deja que te compre algo para beber" , él claramente me pilló desprevenida y yo no sabía qué
estaba pasando.

"Gracias, pero puedo comprarme algo yo misma" , dije de vuelta con cierta frialdad y dejé que mis
ojos verdes vagaran hacia su mano porque el todavía seguía tocándome mi cintura. La retiró
lentamente.

"Sé que puedes, pero ¿Es lo que quieres hacer?" , el chico de pelo claro sonrió por alguna razón y
sentí que sus ojos me miraron de pies a cabeza. ¿Qué carajo?

"Lo que quiero es que dejes de mirarme como si quiera tuvieras alguna oportunidad" , escupí y sus
ojos se abrieron al instante.

"Luchadora, eso me gusta" , dijo, y yo estaba empezando a creer que esto se trataba de una
especie de pesadilla.

"¿Hablas en serio?" , pregunté totalmente desconcertada.

"Es sólo una bebida" , respondió él, pero ambos sabíamos que no sólo era una bebida.

"Dale a tu esposa una bebida" , le respondí rápidamente.

"Ex esposa" , respondió aún más rápido.

"Oh, Dios mío" , exhalé y me reí porque esto era increíble. "No sé cuál sea tu estatus oficial pero te
estás pasando de la raya. Por no hablar que no estoy interesada en ti o en cualquier otra criatura
masculina."

"Por supuesto" , se burló. "La chica más sexy del equipo es una lesbiana."

Casi lo golpeé, pero la última cosa que necesitaba era montar una escena. Mi relación con su ex
mujer era lo suficientemente complicada y abofetearlo no era una opción... por desgracia. Yo
estaba echando humo en el interior cuando él simplemente regresó a la mesa y tuve problemas
para contener mi ira.

Lo mejor era tomar un respiro y salir a tomar un poco de aire fresco. Mi corazón dio un vuelco
cuando vi a Camila salir un minuto después. Sonreí un poco insegura y ella asintió cortésmente.
Dios, esto era tan torpe. Una parte de mí sólo quería volver a entrar pero no pude contener por
tratar de entablar una conversación.

"Está agradable aquí" , dije, y quise golpearme a mí misma esta vez por ser tan cliché y hablar del
tiempo.

"Sí, estaba haciendo un poco de calor allí, así que quería un poco de aire fresco" , respondió
Camila y sonaba como si se estaba justificando. "¿Qué cosa te dijo Austin?"

80
Mis ojos se abrieron ante sus palabras y me sentí en una encrucijada. Dile la verdad y arriésgate a
otra pelea o miente y, posiblemente, tengan una conversación normal.

"Él... estaba... coqueteando... conmigo" , dije después de alguna dudas y me encontré con los
orbes marrones.

"Claro" , se rió y yo estaba estupefacta por su reacción. "Al menos tiene un buen gusto."

"¿Qué?" , espeté.

"Me preguntaba cuánto tiempo le tomaría hacer otro movimiento" , la otra morena me confundió
aún más con su tono indiferente.

"Lo siento, ¿Acabas de oír lo que te dije?" , pregunté, no sólo cuestionando su capacidad de
audición, sino también su cordura en este punto. "Él estaba a punto de engañarte otra vez."

"Él no puede engañarme" , respondió Camila aparentemente desconcertada.

"Estoy tan jodidamente pérdida" , murmuré porque realmente no entendía lo que estaba
pasando.

"Él no puede engañarme, porque no estamos juntos" , explicó y sentí mis labios separarse en
estado de shock genuino. Su rostro se suavizó cuando se dio cuenta de que estaba
verdaderamente sorprendida.

"Pero... tú... ¿Por qué él sigue aquí, entonces?" , le pregunté sin más pensar en ello.

"Quería quedarse por Lara y pasar algún rato con ella. Yo no me interpuse en su camino. Por
mucho que quiero que desaparezca, a veces, él siempre será el padre de Lara" , dije la joven
madre con calma. De hecho, esta fue la primera conversación que teníamos en un tiempo sin
gritos. Hasta ahora, todo bien.

"Pensé que estaban juntos de nuevo" , se me escapó y negué con la cabeza ligeramente mientras
procesaba.

"Tal vez deberías dejar de espiar y hacer hipótesis, sino sólo preguntarme" , la voz de la
centrocampista izquierda aún estaba blanda y vi una pequeña sonrisa en sus labios que hizo que
mi corazón se acelerara. "O mejor aún, créeme cuando te digo las cosas; no importa la borracha
que pueda estar."

Mi estómago se revolvió ante sus últimas palabras. Recordaba esa noche en Miami, ¡¿Dónde cuide
de ella?! Estaba intentando establecer una conversación, pero mi propia memoria estaba
nebulosa. La única cosa que me acordaba era Camila diciendo que había estado enamorada de mí
también y que yo era su chica... soñada. Tragué un poco ante la mera posibilidad de que sus
palabras fueran ciertas; y que ella las recordara.

81
"Hace un poco de frío, voy a entrar" , Camila volvió a hablar después de que había estado tan
tranquila e inmersa en mis propios pensamientos.

Estuve congelada durante algún momento a pesar de que la joven ya no estaba allí. Ella no estaba
con Austin. Y ella no había estado con Austin en todo este tiempo. La conversación en el
departamento había hecho una falsa impresión en mí después de todo, y me sentí como una idiota
por haber saltado a las conclusiones.

Sin embargo, eso no cambiaba nada... ¿No?

Mi teléfono sonó de repente en mis pantalones y saqué el dispositivo delgado. 'Emily' se leía en la
pantalla y sonreí al instante. La rubia y yo nos manteníamos en contacto y me iba a visitar la
próxima semana ya que no nos habíamos visto desde las vacaciones de primavera.

Maldita sea, todo esto era tan confuso. No podía negar que la ex animadora me hacía feliz y
definitivamente tenía sentimientos por ella, pero también Camila me provocaba cosas...

Suspirando con fuerza, contesté la llamada.

********************************************************************************

"¿Te has divertido hasta el momento?"

"Sí, es una mierda que sólo estaré aquí por el día" , Emily respondió y cerró los ojos con los míos.

Estábamos sentadas en el parque después de un largo día de paseo mostrándole la ciudad.


Obviamente, era difícil de impresionar a alguien en Boston cuando vivía en New York. A pesar de
que ella no era una 'verdadera neoyorquina' hice mi mayor esfuerzo para hacer el día especial. O a
lo mejor mis esfuerzos eran simplemente por el hecho que eran por ella.

Desafortunadamente, la modelo no podía quedarse por el tiempo previsto inicialmente debido a


que tenía que ir a España para hacer una importante sesión de fotos. Entendí las presiones de su
trabajo exigente pero había un poco de decepción ya que se iría en unas horas más. En este
momento, las cosas iban muy bien. No hubo torpeza, que era lo que siempre se esperaba de las
personas comenzaban a salir. Nosotras estábamos saliendo, ¿No? Estaba tan confundida con ese
tipo de cosas, que era lamentable lo inexperta que era.

"Bueno, la próxima vez tienes que quedarte más tiempo" , me devolvió una sonrisa y vi que se
había sentado un poco más derecha para disfrutar del sol.

"¿La próxima vez?" , sus cejas perfectamente depiladas se elevaron ligeramente.

"Sí, la próxima vez" , quise validar mi interés al repetir eso, aunque mi pulso se aceleró
inmediatamente. Mis ojos se centraron en los labios de color rosa que brillaban a causa del brillo
de labios y oh, quería darle un beso. Habíamos compartido una sesión de besos climatizados en

82
Miami, pero eso fue debido al calor del momento. Ahora, nos estábamos tomando las cosas con
calma y no estaba segura de lo significaría si me inclinaba y conectara nuestros labios.

"¿Y?" , su voz suave preguntó y sentí sus dedos dibujar patrones en mi antebrazo.

"¿Y?" , pregunté confundida.

"¿Qué piensas?" , la chica más mayor inclinó la cabeza ligeramente.

"¿Sobre qué?" , fruncí mis cejas y vi sus mejillas con rubor por alguna razón.

"¿Por qué siempre eres tan... ajena?" , se rió en voz baja y no pude contener una sonrisa. "¿Qué
piensas acerca de nosotros? Ya sabes... ¿Ves que esto va a alguna parte?"

Tragué un poco después de la pregunta y sentí que mi corazón se aceleraba porque por lo general
yo evitaba ese tipo de situaciones. Mis instintos me dijeron que corriera. La posibilidad de salir
dañada al final era una opción que cada vez que te has hecho vulnerable.

"Mira, Lauren" , Emily continuó ya que yo estaba teniendo un momento difícil para hablar. "Sé que
dije que debíamos tomar las cosas con calma y aún quiero hacer eso. Pero no quiero perder mi
tiempo si no estás interesada en algún tipo de compromiso en algún momento. No quiero
presionarte, de verdad que no. Eres tan difícil de leer, que siempre me pregunto qué está pasando
por tu cabeza. Si no estás lista para una relación, entonces puedes decírmelo y honestamente
entenderé. Podríamos seguir siendo amigas si quieres. Sólo necesito un pequeño pedazo de tu
mente."

"¿Cómo puedo ser amiga tuya cuando constantemente quiero arrancarte la ropa?" , dije de vuelta
con una sonrisa y ella elevó las cejas de nuevo. Esa era mi forma de lidiar con las cosas; ser
encantadora y tratar de ligar para salir de las situaciones, pero detecté un poco de decepción en
los ojos de color verde azulado.

"Bien este es el trato" , tomé una respiración profunda. "Nunca he estado en una relación" , le
confesé y vi que su rostro se suavizo aún más si eso era posible. "No sé cómo hacer las cosas. Por
lo general, salgo con las chicas cuando sé que no hay posibilidades de que quieran estar conmigo.
Seguro que suena horrible, pero no estoy jugando contigo, te lo prometo. Sólo estoy
malditamente desorientada. Por no hablar que no entiendo porque alguien que es tan perfecto
toma interés por una persona tan jodida como yo."

Exhalé en voz alta, esta había sido una de las conversaciones más honestas que jamás había tenido
con otra chica. No fue fácil, pero me sentí mejor al hacerle saber lo que estaba pasando. La rubia
sonrió después de mis palabras.

"¿Te imaginas tener una relación en algún momento... conmigo de preferencia?" , la ex animadora
se mordió el labio inferior por un segundo y ahora era yo la que sonreía.

83
"Sí" , le respondí con sinceridad, porque no podía negar que ella me hacía feliz. El hecho de que
ella era tan persistente, me ayudó para salir de mi caparazón.

"Bueno, me alegro" , ella sonrió y me apretó el brazo con suavidad. "Porque quiero que me
arranques la ropa... algún día." , añadió con una sonrisa.

"¿Y cuándo será eso?" , reí y el simple pensamiento de hacer eso me causó palpitaciones en el
corazón. Su cuerpo era para morirse y yo instintivamente me lamí los labios sin saber.

"La paciencia no es lo tuyo, ¿No?" , se rió, pero se inclinó más cerca.

"No, en absoluto" , confirmé, pero sentí su mano en mi mejilla mientras cerraba la distancia y
finalmente la besé.

Era diferente. Sabiendo que estábamos saliendo y de cara a una dirección que nunca había ido
antes, incluso ese simple beso se sintió más significativo. Una vez más, había un sabor afrutado en
sus labios y me di cuenta que debía de ser su brillo labial. Tenía sabor a fresa y a pesar de que
generalmente odiaba esa materia pegajosa en los labios de la mayoría de las chicas en estos días,
chupé su labio inferior para saborear más el sabor.

"Mmmm... ¿De verdad tienes que irte hoy?" , puse mala cara y acaricié su cuello, no realmente
consiente de lo cariñosa que estaba siendo. Esto definitivamente era nuevo, pero también
emocionante.

"Me temo que sí" , ella suspiró y enredo su mano en mi pelo grueso. Cogí su mano libre por la
muñeca y en broma la inmovilicé sobre la hierba. Ella me dio una sonrisa más grande debajo de
mí.

"Sabes que podría retenerte aquí si quisiera" , sonreí mientras me cernía sobre ella. "Soy mucho
más fuerte que tú."

"No todo el mundo puede ser un deportista profesional, lo siento", bromeó. "Pero tengo que
admitir que me gusta salir con un jugador de fútbol. Las chicas que juegan fútbol siempre tienen
los mejores traseros." , la rubia agregó con una risita para sí misma.

"¿Es eso cierto?" , me reí. "Salir con una supermodelo no está nada de mal, porque tienen el
mejor... todo."

"Descarada" , se burló, pero su mano en mi pelo me llevó por otro beso.

Por desgracia ese beso no fue igual que el anterior porque sentí que algo había golpeado mi
cabeza. Me sorprendí al principio, pero luego vi el pequeño balón rojo junto a mí. El parque estaba
lleno de gente, por el buen tiempo y supuse que alguien me había golpeado por accidente. Mi
corazón realmente se sintió en explosión cuando escuché una voz familiar, de tono alto.

"!Panqueques!"

84
Salí de encima de Emily al instante y me senté en la hierba verde cuando Lara sonrió con alegría
mientras yo recogía la pelota.

"Hey Lara" , saludé sonriente y quise entregarle el balón pero ella se acercó, echó sus bracitos
alrededor de mi cuello y de repente me abrazó. Mis ojos se abrieron de golpe, pero le correspondí
frotando suavemente su espalda. ¡Esta pequeñita sería mi muerte!

"¿Quieres jugar conmigo?" , preguntó después de liberarme de su abrazo apretado. No tuve


tiempo para responder cuando vi a Camila corriendo hacia nosotros. Mi ritmo cardíaco se duplicó
en una fracción de segundo.

"!Lo siento tanto!" , mi compañera de equipo resopló. "Se suponía que debía permanecer en la
zona de juegos, pero te debe haber visto y se fue."

"Está bien" , dije casualmente y tragué saliva cuando los ojos de Camila se centraron en la rubia
junto a mí. ¡Torpe! ¿Se suponía que debía presentarlas?

"Lara, no puedes salir corriendo de esa manera, ¿De acuerdo?" , la voz de la joven sonó más
estricta, pero también más preocupada de lo que jamás había oído. Era evidente que se había
asustado al darse cuenta que su hija había salido de la zona asignada.

"Lo siento" , susurró la niña. "Pero vi a panqueques y quería jugar con ella" , se justificó y no pude
evitar sonreír un poco. El hecho de que todavía me estaba llamando así hizo que mi corazón se
hinchara por alguna razón. "Juega con nosotras, ¿Por favoooooooor?"

"Lauren está ocupada" , la voz de la madre era más suave ahora que había recuperado a su hija.
"Lo siento por la interrupción."

"No hay necesidad de disculparse, ella es adorable" , Emily de repente tomó la palabra y me sentí
ansiosa por su interacción. La morena parecía no estar segura sobre qué decir.

"Gracias" , dijo Camila con una sonrisa que fue suficientemente amable, pero me encontré con los
orbes marrones justo después. Parecía herida... o triste, no estaba segura. Sus ojos se movían
entre Emily y yo por un momento antes de mirar hacia abajo. "Será mejor que nos vayamos a casa.
Nos vemos."

"Adiós" , dije en voz baja y vi a mi compañera de equipo, alejarse por un segundo. No había forma
de escapar de ella y esos sentimientos extraños comenzaban de a poco a acercarse de nuevo.

"Ella es incluso más linda de cerca" , Emily me hizo mirarla por esa afirmación. "Y tiene una niña
adorable. ¿Debo preocuparme?" , la modelo exudaba inseguridad.

"No, te dije que fue sólo una cosa de una noche" , traté de sonar tan convincente como me fue
posible, aunque mi corazón todavía latía erráticamente cuando pensaba en aquella noche en New
York y todas las otras veces que había estado tan cerca de Camila.

85
"Bueno. Entonces, ¿Dónde estábamos?" , la de pelo claro sonrió y me llevó por un beso más largo
y profundo.

********************************************************************************

Como cada sábado por la mañana, estaba sentada en el sofá de mi departamento y veía mis
canales deportivos favoritos. Siempre corría por la mañana temprano, volvía a la ducha y luego
disfrutaba un poco de mi cereal mientras veía a otras personas ejercitándose físicamente. Sería mi
turno mañana ya que había otro juego en Chicago. El viaje tomaría más tiempo de lo habitual, así
que disfrute del tiempo que tenía en casa para relajarme.

Estuve más que sorprendida al escuchar mi timbre de la puerta de repente. Probablemente era
Kristie con alguna nueva historia sobre su cita de anoche. No había oído hablar de ella desde
entonces. Vestía un par pantalones cortos y una pollera holgada con mi pelo en un moño
desordenado, pero no me importaba como me veía cuando estaba sola en casa de todos modos.
Caminando hacia la puerta, puse el plato de cereal en el mostrador de la cocina americana.

Al abrir la puerta, no vi a nadie en un principio. Mi mirada cayó y vi a la pequeña niña con los ojos
color avellana y pelo castaño claro mirándome. Estaba confundida por decir lo menos. Lara estaba
sosteniendo una bandeja con panqueques a pesar de que estos estaban envueltos.

"Te traje panqueques. Mamá y yo los hicimos" , la voz alta habló y pensé que mi corazón iba a
explotar en ese momento.

"Eso es muy amable de tu parte, gracias" , sonreí ampliamente y me agaché para estar a su nivel.
Me entregó la bandeja y me abrazó inmediatamente, al igual que en el parque hace unos días. Fue
entonces cuando mis ojos vagaron y vi a Camila aparecer con una tímida sonrisa en los labios.
Tragué un poco porque esto fue inesperado... ¡Muy inesperado! Lara me soltó y sonreí con
admiración antes ponerme de pie y hacer frente a mi compañera de equipo.

"Ella insistió que te trajéramos algunos después de que tú le diste los tuyos en el restaurante" ,
explicó y eso sonó como otra justificación.

"Eso es muy atento" , le contesté aún no muy segura de por qué mi corazón latía tan rápido.
"¿Quieres... quieres pasar un rato, o?"

"Oh no, no queremos molestarte-" , la más joven comenzó pero Lara ya estaba corriendo hacia mi
departamento. "O tal vez sólo por un minuto" , se rió suavemente mientras yo le sostenía la
puerta y la dejé entrar.

Fue extraño tenerla en mi departamento. No un montón de gente venía aquí desde que lo
consideraba como mi santuario. Sólo mis amigos más cercanos, como Kristie o Luis venían
regularmente para pasar el rato. Ni siquiera había traído a una chica porque este sitio se sentía

86
sagrado para mí. Fue la primera casa que había alquilado para mí, después de haber vivido en la
residencia de estudiantes.

Camila fue la primera persona con la que salía y que estaba aquí, me di cuenta. Ella entró y
claramente le echó un ojo a mi casa. Regresé a la cocina americana y dejé la bandeja con
panqueques. Lara estaba de pie junto a mí, con los brazos alzados y comprendí que quería que la
tomara. Y así lo hice antes de sentarla en el mostrador.

"Tu departamento es asombroso" , la de ojos marrones sonaba auténtica y un poco temerosa.


"Tienes un buen gusto para estas cosas por lo que parece."

"Bueno, eso espero, ya que estoy estudiando arquitectura" , le respondí con una sonrisa y vi sus
ojos muy abiertos.

"¿Quieres ser arquitecta?", sonaba un tanto sorprendida mientras desenvolvía los panqueques y
asentí.

"Sí, los estudios son muy exigentes, pero creo que valdrá la pena al final. Es difícil combinarlos con
el fútbol a veces, pero no siempre estaré en las canchas, así que quiero estar haciendo algo que
me encanta." , dije tranquilamente.

"¿Qué te gusta de la arquitectura?" , Camila preguntó genuinamente interesada y se acercó hacia


nosotras en la cocina.

"Es tanto la ciencia como una forma de arte" , le dije mientras ella tomó su lugar junto a mí. Yo
estaba entre Lara y ella y por alguna razón inexplicable eso se sentía cómodo. "Siempre me han
gustado las matemáticas y la ciencia, pero también materias creativas como las artes visuales. Así
que pensé, ¿Por qué no combinarlas y hacer algo realmente creativo en el sentido más de la
palabra? La creación de un hogar para otras personas, o la construcción de hospitales para las
personas necesitadas en los países más pobres del mundo... no lo sé hay muchas cosas que
puedes hacer. Y, obviamente, me gusta el diseño de interiores, así y puedo experimentar aquí en
mi casa."

Miré a mi lado y me encontré con los ojos de Camila los cuales estaban perforando a través de mí.
Mi pulso se aceleró de inmediato cuando los orbes marrones llenos de ternura fueron
acompañados con una sonrisa suave.

"¿Qué?" , pregunté en un susurro y un poco insegura de porque ella me miraba con tanta
intensidad.

"Nada" , ella rompió el contacto visual y sacudió la cabeza ligeramente. "Es sólo que... cada vez
que pienso que no puedes ser más perfecta, dices algo y revelas cosas así."

Tragué saliva sonoramente. ¿Ella pensaba que yo era perfecta? Yo estaba bastante alejada de eso
en mi opinión. ¿Por qué demonios iba a decir eso? ¿O incluso pensar eso? Mil palmas estaban un
poco sudorosas cuando me acordé de sus palabras borrachas en Miami; que yo era su 'chica de

87
ensueño'. No quería creerle, porque eso causaría mucho más caos en mi cabeza. Y yo estaba
bastante confundida con mis sentimientos hacia Emily y los de rejuvenecimiento hacia la morena
que estaba a mi lado.

"Prueba los panqueques" , Lara interrumpió mis pensamientos con su demanda impaciente.

"Sí, iré a buscar un poco de jarabe de chocolate primero" , necesitaba un poco de distancia por un
momento y no sentir a mi compañera de equipo, tan cerca de mí. Busqué en el gabinete el jarabe
de chocolate lo cual pareció una buena excusa. Volví para reunirme con la pequeña familia en el
mostrador, serví un poco de chocolate sobre los panqueques y di un bocado después.

"Mmmm... son perfectos. Gracias, Lara, por haberlos hecho" , sonreí y tragué el resto de la
deliciosa comida en mi boca. "¿Quieres?" , le pregunté a la niña y ella asintió frenéticamente. Pero
me sentía juguetona por alguna razón, sumergí mi dedo en el jarabe y manche con un poco de
chocolate la mejilla de la pequeña. "Sí, eso es todo lo que tendrás" , dije obviamente en broma y
ella se rió alegremente.

"Mami, mira lo que hizo" , la niña de tres años sonrió de oreja a oreja y antes de que supiera lo
que estaba pasando, sentí que Camila casi aplastaba toda mi cara con su mano llena de jarabe.
Estuve congelada por un momento cuando sentí el líquido pegajoso corriendo por mis mejillas y
escuché a Lara y Camila riéndose incontrolablemente. ¿Qué demonios? Limpié un poco mi cara,
pero me reí también.

"Esto es la guerra" , dije de broma mirando a mi compañera de equipo que tenía las mejillas
sonrojadas, de tanto reír. Agarré la botella de jarabe y me acerqué a ella agarrándola. Ella trató de
luchar y alejarse de mí, pero yo era más fuerte y rocié un poco del jarabe color marrón sobre su
cara, mientras escuchaba a Lara reír como una loca en el fondo.

"Lauren... ganas... me doy por vencida" , Camila jadeó en una mezcla de risas y de hecho jadeando
debido a nuestra pequeña lucha.

Sonreí con suficiencia y bajé la botella. Ahora que nuestra 'lucha' había terminado, sólo me di
cuenta de lo cerca que estábamos. Su espalda estaba presionada contra el mostrador y yo estaba
tan cerca que nuestros cuerpos casi se tocaban. La sonrisa en sus labios se desvaneció poco a poco
y fue reemplazada por una expresión bastante tierna. Su mano estaba envuelta alrededor de mi
muñeca, porque ella había intentado luchar para alejarme. La respiración irregular trajo recuerdos
de nuestra noche juntas en New York que había intentado reprimir con todas mis fuerzas.

Pero lo peor, lo peor de ello fueron esos ojos. Eso cálidos orbes marrones que me miraban como si
yo fuera la cosa más preciosa que jamás había visto. Bajaron y se centraron en mis labios lo que
hizo que mi corazón saltara a otro ritmo. Toda esta situación estaba mal, ¿Verdad? No debería
sentirme así cuando yo estaba saliendo con alguien más. El pensamiento de Emily me hizo de
alguna manera estar de vuelta a la realidad.

88
No importando lo tentador que era darle un beso, yo sabía que no estaba preparada para las
posibles consecuencias de hacerlo. Ni siquiera estaba segura de lo que sentía por la joven morena
y una parte de mí todavía estaba demasiada asustada para averiguarlo. Ella me miró a los ojos otra
vez y casi comenzó a inclinarse cuando di un paso atrás y aclaré mi garganta para detener la
tensión. Miré a Lara que estaba masticando un panqueque muy contenta.

Camila, por otro lado parecía un poco angustiada y arregló su ropa.

"¿Puedo lavarme tal vez?" , preguntó en voz baja.

"Oh, por supuesto, el baño está ahí" , señalé una puerta en el otro lado de la vivienda antes de que
ella tomara a Lara para limpiarla, así supuse. Ella esbozó una sonrisa antes de desaparecer con su
hija en mi cuarto de baño.

Tomé una respiración y pasé una mano por mi pelo. ¿Qué demonios estaba haciendo? Seguía
diciendo que Camila y yo podríamos ser amigas, pero cuando estábamos solas, terminábamos ya
sea gritando el uno al otro o casi acercándonos demasiado. El consejo de Kristie había sido bueno
hasta ahora, pero ahora que la joven estaba tomando la iniciativa, yo no estaba segura de qué
hacer. Tuve que dejarla en paz, pero ahora ella se presentaba en mi departamento y me hizo
cuestionarme de nuevo.

Mi teléfono vibró de repente y lo agarré para ver que Emily me había enviado una imagen y un
mensaje.

España es taaaan hermoso, pero me gustaría que estuvieras aquí :/ Ya te extraño, ¿Es malo decir
eso? ( http://instagram.com/p/mro1kbAQiX/ )

Mi estómago sintió un nudo cuando miré la imagen y leí las palabras en la pantalla. ¿Fue malo que
ella dijera eso? No, para nada. ¿Sería malo que yo estuviera tentada por besar a alguien más?
¡Claro que sí! Yo no era infiel y aunque Emily y yo todavía estuviéramos pensando las cosas, sentía
como si tenía un compromiso con ella y ella había sido la primera persona con la que me había
abierto después de haber sido agrietada por Camila. Me debía a mí misma explorar, no
importando cuánto protestara mi corazón diciendo que debía de darle una oportunidad a la
morena que estaba en mi baño para que me demostrara sus sentimientos.

Alejé mi teléfono tan pronto como Camila volvió con Lara. Se veían limpias y reí un poco, dándome
cuenta que seguía cubierta de jarabe. Agarrando algunas toallas de papel, quité la mayor parte del
chocolate lo mejor que pude.

"Tienes que echar un poco de agua para sacar el chocolate por completo" , la centrocampista
izquierda sonrió y se acercó a mí de nuevo.

"Probablemente voy a tomar una ducha de todos modos" , respondí casualmente.

89
"Aquí, déjame ayudar" , ella intervino, tomó los pañuelos de mi mano y los empapó con un poco
de agua debajo del fregadero. Quise protestar, pero ella ya estaba de pie frente a mí, limpiando
suavemente los fluidos pegajosos de mi cara.

Por el amor de Dios, este caos en mi cabeza y corazón nunca terminaría. Nunca me había sentido
en un maldito conflicto constante en mi vida. ¿Era posible tener sentimientos por dos personas al
mismo tiempo? Incluso si fuera así, yo no podía confiar en Camila; al menos no totalmente; al
menos no todavía. No la estaba mirando mientras ella limpiaba el resto del jarabe porque sabía
que sus ojos eran mi perdición. Probablemente fue sólo un minuto, pero se sentía como una
eternidad en que la joven estaba presionando el suave tejido contra mi piel varias veces, mientras
sus dedos rozaban accidentalmente mi cara varias veces.

"Creo que eso es todo" , susurró Camila y yo asentí antes de centrarme en Lara en vez de
distraerme con los latidos de mi corazón erráticos en mi pecho.

"¿Quieres venir a los juegos con nosotros?" , la niña me preguntó con una sonrisa suplicante.

"No puedo, lo siento" , me disculpé. Simplemente no podía hacerlo. No porque tuviese más
planes, sino porque no estaba segura de lo que haría si pasaba más tiempo con ellas hoy.

"Vamos a ir ahora de todos modos. Ella sólo quería venir a dejar los panqueques. Perdón por el
lío..." , la joven madre intervino y tomó la mano de Lara.

"Oh no, no te disculpes. Eres bienvenida en cualquier momento", le respondí y las seguí hasta la
puerta. Al abrir la puerta, me incliné para darle un abrazo a Lara y besar su mejilla pero ella
envolvió sus brazos alrededor de mí. Al instante sonreí y dejé un pequeño beso en su mejilla antes
de retroceder. Me puse de pie rápidamente y me encontré con los ojos marrones que había
evitado en los últimos minutos.

"Entonces, te veré mañana en el juego" , dijo Camila y yo asentí una vez más.

"Sí, nos vemos luego. Y diviértanse" , les sonreí suavemente.

"Adiós" , Lara se despidió alegremente antes de que empezaran a caminar por el pasillo.
Exhalando profundamente, las vi doblar por la esquina y me golpeé la frente en el marco de la
puerta.

En este punto, no estaba segura de qué esperar. ¿Qué Camila y yo encontráramos una forma de
ser amigas sin una tensión extraña? ¿Qué mis sentimientos por Emily podrían llegar a ser tan
fuertes que los de mi compañera de equipo podrían disminuir? ¿O que yo iba a encontrar la fuerza
para mantenerme realmente lejos de la morena y no mirar atrás?

Fuera lo que fuera, íbamos a Chicago mañana y nuestro último viaje en New York había sido
bastante agitado. Y la montaña rusa emocional continuaba, me dije a mí misma con otro suspiro.

=================

90
Capitulo 6
La impresionante actuación de Camila la semana pasada había convencido a nuestro entrenador
para que tuviera su comienzo en Chicago. Pero el partido de esta semana no podría ser más
diferente que el anterior. La chica de ojos marrones estaba aparentemente fuera de sí. Perdió casi
todos los balones. Su velocidad habitual se vio afectada por errores innecesarios que nunca hizo
antes. Si yo no la conociera, habría pensado que nunca había jugado fútbol en su vida. Yo estaba
preocupada porque el juego todavía estaba empatado a 0 - 0 y la necesitábamos para que nos
ayudara.

Para empeorar las cosas, vi a la vieja Camila de la Sub-17: templada, impetuosa e incontrolable a
veces. Ella había cometido más faltas en la primera mitad del juego que todos los demás jugadores
juntos. Y ella ya estaba amonestada. Más faltas y probablemente sería expulsada. No podía
explicar lo que había sucedido con ella en las últimas 24 horas, porque ayer por la mañana en mi
departamento, ella se había reído con alegría mientras manchaba mi cara con jarabe de chocolate.
Este fue un gran cambio.

Le pasé la pelota e hice una carrera para crear un poco de espacio, pero perdió el balón de nuevo
ante su defensor. Camila pateó la pantorrilla del rival imprudentemente y oí el pitido de denuncia
de irregularidades. Las cosas iban a causar un problema ahora. Vi varios jugadores de Chicago de
pie junto a la morena casi atacándola por su brutal falta. Pero al parecer mi compañera tenía
miedo y de repente empujó a otro jugador tirándolo al suelo. Corrí a distender la situación. Protegí
a la chica que llevaba la misma camiseta que yo, el estadio se estaba volviendo loco y así también
todo el mundo.

Mel, nuestro capitán, arrastró a Camila lejos mientras Kristie y yo tratábamos de apaciguar a los
otros jugadores. Pasaron unos segundos y fuimos con el árbitro, con la esperanza de mediar con él
ya que estaba sosteniendo una tarjeta y acercándose a mi compañera de equipo que llevaba el
número siete en su espalda.

"!Estás fuera!", dijo con severidad y levantó la tarjeta roja por lo que la centrocampista izquierda
tuvo que abandonar el terreno de juego de inmediato, no sólo por las incrustaciones, sino también
por empujar a otro jugador.

Vi la frustración en las caras de mis compañeros, pero miré a la morena caminar fuera en silencio.
¿Qué demonios le había pasado? Ella no había estado tan enojada últimamente y yo estaba
estupefacta por su repentino cambio de carácter. ¿La presión la estaba sobrepasando?

Fuera lo que fuera, no tenía tiempo para pensar en ello, porque tenía un juego que jugar. Un
partido que perdimos al final a 1-0. Jugar con un jugador fuera siempre era difícil y aunque
habíamos intentado todo lo posible, no fue suficiente y perdimos un gol en el minuto 83. Todo el

91
mundo estaba enojado; incluyendo nuestro entrenador. Estábamos sentados en los vestidores
mientras él nos gritaba por no haber estado concentradas lo suficiente. Mi corazón comenzó a
bombear más rápido cuando se dirigió a Camila, que estaba sentada en un rincón, sola.

"¿Y qué demonios pasó hoy contigo? Te di una oportunidad porque realmente te habías
entregado la semana pasada. Pero no pudiste hacer algo así hoy, ¡No importa lo bien que hayas
jugado la semana pasada! No hay espacio para un comportamiento egoísta en este equipo y no
permitiré que eso suceda de nuevo, Cabello. Si necesitas un día libre, me avisas y no te pondré en
el terreno de juego de mierda, para que dejes a tus compañeros de equipo pasando el rato allí.
Nunca más, ¿Entendido?"

Ella asintió con la cabeza y vi los ojos marrones que solían ser expresivos completamente en
blanco. Ellos de hecho me asustaron, pero tenía mucho miedo de acercarme a ella en este punto.

Volvimos al hotel y todo el mundo estaba todavía bajo el efecto de la derrota del partido. Había
visto a varios jugadores acercándose a Camila, diciéndole que no era culpa de ella y que no debía
de ser tan dura con ella misma. Pero su comportamiento individual había comenzado incluso antes
de ser expulsada. Todo había comenzado esta mañana cuando habíamos volado hasta aquí. Ella no
habló con nadie. Entendía que nuestra situación seguía siendo tensa, pero me pregunto porque
volvió a su forma inaccesible de antes.

Salí a la piscina del hotel para tomar algo de aire fresco cuando vi a mi compañera de equipo, que
tenía tarjeta roja sentada en el borde de la piscina. Sus pies colgaban en el agua y tuve que admitir
que se veía absolutamente impresionante. Las luces reflejaban su piel caramelo mientras que la
piscina era iluminada por debajo con una luz tenue. Tragué fuertemente cuando levantó la vista y
se fijó en mí. No hubo reacción. Ella sólo miró el agua otra vez y junté un poco de coraje para
caminar hacia ella.

"¿Puedo sentarme?", le pregunté con cuidado y señalé el lugar junto a ella.

"Es un país libre", fueron las primeras palabras que había oído de ella hoy y estaban llenas de
indiferencia que realmente me sentí de nuevo la Sub-17.

"No te preocupes", tomé una respiración profunda y me senté junto a ella, también sumergiendo
mis piernas en el agua. "No voy a preguntar si estás bien... porque es obvio que no lo estás", añadí
en voz baja y lentamente incliné mi cabeza hacia un lado. Sus ojos parecían vidriosos, pero no
estaba segura de sí era sólo por el reflejo del agua. "Sé que probablemente no quieres escuchar
esto ahora, pero puedes hablar conmigo si quieres", le ofrecí con sinceridad y no pude ocultar que
estaba preocupada por ella. "He estado queriendo disculparme contigo desde hace un tiempo por
lo que pasó en Miami. Y por sacar conclusiones con el asunto de Austin. Lo siento, Camila."

Mi voz tenía sinceridad mientras que mi tono todavía era suave. Se veía tan frágil que me daba
miedo decir algo equivocado y empujarla hacia el borde de nuevo. La última cosa que quería era
otra pelea a gritos. La miré fijamente, con sus ojos ahora definitivamente llenos de lágrimas
mientras que la chica empezó a desmoronarse ante mis propios ojos. Fue desgarrador verla así. Su

92
rostro estaba tenso, luchando contra las lágrimas acumuladas en sus zócalos y vi sus puños
apretando con fuerza.

"¿Camila?", susurré llena de preocupación antes de que ella pronto tomara la palabra.

"Yo sólo la extraño mucho", la voz de la joven casi se quebró.

"¿Quién? ¿Lara?", supuse, ya que podría ser una posibilidad desde que su hija estaba en casa con
Austin en Boston.

"No, Sofi", suspiró ella y fruncí las cejas.

"¿Quién es Sofi?", pregunté con cautela, ya que vi la primera lágrima escapándose de los ojos
marrones.

"Mi hermana", Camila inhaló profundamente para calmarse pero vi que ella estaba llegando a un
punto de no retorno en breve.

"Pensé que no tenías hermanos", me acordé de nuestro tiempo en el equipo juvenil donde ella
siempre me había dicho que era hija única.

"Ya no más", reveló y sentí mi corazón romperse como esas palabras llenas de agonía salieron de
sus labios. "Fue hoy hace cinco años. Todos estábamos en el coche y yo estaba quejándome por el
juego que habíamos perdido. Mi padre conducía de regreso a la escuela y yo lo distraje con mis
quejas constantes. Se pasó una luz roja y el camión se estrelló en el lado de Sofi del coche."

La chica de veinte años, tomó un respiro y vi sus orbes marrones fijos como si toda la experiencia
se estuviera reproduciendo frente a sus ojos. No era consciente, pero de repente me di cuenta de
que mi mano se había entrelazado con la de ella, desarmando sus puños y aferrándome a ella
como apoyo.

"Ella... ni siquiera... gritó ni nada", su expresión fue una mezcla de horror e incredulidad que yo
nunca había visto antes. Eso realmente envió un escalofrío por mi espalda. "Eso fue todo. Ella
básicamente murió allí... en mis brazos. Y no puedo recordar una sola cosa de ese día,
generalmente. Pera cada año, como hoy, todo vuelve. Trato de bloquearlo, pero no puedo... yo lo
veo tan claramente que pareciera como si no puedo respirar. Por lo general, me escondo en la
distancia y no hablo con nadie, pero desde que nació Lara... puedo manejarlo de alguna manera.
Una parte de mí piensa que Lara está aquí porque yo no habría sobrevivido de otra manera sin Sofi
y todo lo sucedido. Pero hoy... sin Lara o Sofi... no puedo funcionar o respirar porque esa imagen
en mi cabeza me está ahogando", la voz de Camila se hizo más frenética y peligrosamente cerca de
la histeria, mientras que las lágrimas corrían por sus mejillas sin inhibiciones.

"Camila...", respiré y me di cuenta de que mi voz temblaba.

"Ella tenía sólo seis años, Lauren", sollozó y se encontró con mi mirada por primera vez. Nunca me
había sentido tan ahogada en mi vida. La desesperación en la voz ronca me había causado tanta

93
agitación que no pude contenerme a mí misma, y me deslicé más cerca. Envolví mis brazos
alrededor del cuerpo más pequeño y la sentí temblar con sollozos desgarradores. Su mano apretó
mi camisa en un férreo control mientras le acariciaba el brazo con dulzura.

"Lo siento mucho", le susurré suavemente. "Está bien... puedes llorar y estar triste", añadí con el
mismo cuidado, porque yo no estaba segura de cómo eso en realidad ayudó.

Todo tenía mucho más sentido ahora. El por qué Camila había estado tan enojada. No era sólo por
la forma en que su familia religiosa la había criado, además, se sentía culpable. Culpable por
'causar' un accidente que terminó trágicamente con la vida de su hermana. Yo tenía dos hermanos
más pequeños que yo. Si yo hubiera estado en los zapatos de Camila, yo no estaba segura de
donde estaría. El hecho de que ella estaba persiguiendo su sueño, siempre por su propia familia y
hacer todo lo posible para darle una vida mejor a su hija, fue aún más admirable para mí después
de oír eso.

Sólo la estaba sosteniendo entre mis brazos, con la esperanza de crear una especie de consuelo
mientras ella lentamente se calmó. En este momento no me importaba lo cariñosa que me estaba
comportando. No se trataba de eso en este momento. Acaricié con ternura su pelo castaño sedoso
y le froté la espalda. Su respiración se hizo más lenta y los sollozos eran más tranquilos hasta que
casi habían desaparecido. Ella todavía estaba descansando su cabeza en mi pecho. En realidad,
estaba en mi cuello. Su respiración golpeó mi piel sensible y sentí piel de gallina aunque no quería
sentirme así. No podía negar que me gustaba ser su protectora.

De repente, por error de juicio, sentí mis labios presionando suavemente contra su cien besando
la piel caliente. Mi respiración se detuvo en la parte posterior de mi garganta cuando me di cuenta
de lo que estaba haciendo. Se sentía tan natural hacer eso. Yo había hecho eso mucho durante
nuestro tiempo juntas en bootcamp; nuestra pequeña 'aventura'. Era mi pequeño pedazo personal
de afecto que había compartido sólo con ella. Ella no reaccionó a excepción de un pequeño
suspiro; ¿De placer o frustración? No estaba segura, pero me alegré de que lo haya hecho.

Nos quedamos abrazadas por un par de minutos, probablemente, hasta escuché a alguien entrar
en la zona de piscina. Camila casi dio un salto y se limpió las lágrimas cuando Kristie apareció.

"Oh, lo siento, yo no sabía", nuestra compañera de equipo miró sorprendida antes que Camila
interrumpió evidentemente nerviosa.

"No, está bien", su voz era entrecortada. "Yo me iba a mi habitación de todos modos. Buenas
noches", murmuró y se fue en un par de segundos, dejándome atrás aún más confusa. Me tragué
el nudo de la garganta mientas mi amiga reclamó el asiento de al lado.

"Ya sé lo que vas a decir, pero yo sólo quería asegurarme de que estaba bien después del partido",
le dije inmediatamente cuando Kristie me miró a los ojos.

94
"No tienes que justificarte, Lauren", ella habló en voz baja. "No estoy aquí para juzgar. Es bastante
obvio que ambas se preocupan por el otro, y si encontraron una forma de ser amigas, entonces yo
no veo nada malo en ello. Yo sólo estaba tratando de ver las cosas por ti después de Miami."

"Lo sé", suspiré profundamente y traté de procesar lo que acababa de suceder.

"¿Ella está bien?", preguntó la rubia con cuidado.

"No, no hoy", dije con la verdad, pero sin revelar demasiado para no romper la confianza de
Camila después de que ella había confiado en mí.

"Estoy preocupada por ella", mi compañera de equipo expresó con preocupación genuina al tomar
una respiración profunda.

"Yo también", le confesé en un susurro.

Me sentí bastante mal por la forma en que la había tratado en New York y luego toda esa mierda
que pasó en Miami. Ahora que sabía más de ella, me sentía aún peor. Yo le había hecho daño
últimamente después que Camila había sufrido lo suficiente durante su vida. Nadie se merecía lo
que le había pasado y yo no debí empeorar las cosas. A pesar de que no lo estaba haciendo a
propósito; yo la había tratado bastante mal y lo lamenté tanto después de lo que acababa de
descubrir.

El hecho de que ella confió en mí con esto y me había dejado consolarla causó que mi corazón
revoloteara y un dolor de cabeza al mismo tiempo. Tal vez ella había sido sincera todo el tiempo.
Quizás Camila realmente sentía algo por mí. Después de todo, ella no había vuelto con Austin. Sin
embargo, yo no estaba segura de si eso era una cosa tan buena. No cambió el hecho de que
estaba empezando a sentir algo por Emily o que no podía confiar en mi compañera de equipo con
el corazón; no ahora y quizás nunca. Esa comprensión no era nueva, pero era aún más conflictiva
después de esta noche.

********************************************************************************

"Así que, ¿Es así como seduces a todas las chicas?", preguntó Emily un poco sin aliento después de
nuestra sesión de besos. "¿Llevarlas a una cena de lujo y luego traerlas de vuelta a tu
departamento elegante para demostrarles lo buena que eres?"

"En realidad, no", le sonreí a la chica mayor que estaba debajo de mí en el sofá. La modelo había
regresado de España y se trasladó en un avión para Boston un día después para verme antes de
regresar a New York. Ella estaba haciendo todo lo posible para pasar tiempo conmigo y yo quería
corresponderle al hacer las cosas adecuadas. Y después de esa noche tan confusa y emocional en
Chicago hace unos días, necesitaba verla para asegurarme de que no estaba tomando la decisión
equivocada.

95
"¿Estás segura?", la rubia levantó una ceja para demostrar que todavía no me estaba creyendo.

"Positivo", reiteré. "En realidad, eres la primera chica a la que he sacado a cenar... o incluso
invitarla a mi departamento", me di cuenta. Camila había estado aquí, pero no por invitación.

"Espera, ¿Estás diciendo que nunca has traído a una chica aquí?", sonaba asombrada.

"No estés tan sorprendida", me reí y toqué sus delicados rasgos faciales.

"Y ¿Qué quieres decir con que jamás has sacado a una chica a cenar? ¿Estás diciendo que esta es
tu primera cita?", su voz tenía aún más sorpresa y sentí mis mejillas sonrojándose ante la
constatación de que ella tenía razón.

"Algo así...", confesé mientras sus ojos verdes azulados se agrandaron. Pero antes de que tuviera
la respuesta, cruzó sus brazos alrededor de mi cuello y me atrajo hacia sí. Sus labios se
encontraron con los míos y se instalaron en ritmo cómodo para bailar con los míos. Ella era un
excelente besador. El sabor fresa de sus labios había desaparecido por ahora, pero eso no
importaba. Disfruté capturando sus labios con apenas brillo labial con sabor a fruta entre los míos.

Eché la cabeza ligeramente hacia adelante, separé mis labios y sacudí mi lengua contra su labio
inferior. Ella me concedió el acceso y no vaciló en profundizar el beso, dejando que mi lengua
explorara su boca. La oí gemir de placer cuando mi mano acarició sus costados lentamente. Dios,
ella era malditamente sexy. Su cuerpo era obviamente para morirse y yo no podía esperar a ver
más. Nuestros besos fueron más acalorados con todo y sentí la lujuria tomando el control.

Profundizando un poco, dejé un rastro de besos suaves en el cuello antes de aplicar más presión.
Mi lengua dibujó pequeños patrones sobre la piel tibia antes que mis labios chuparan con más
ganas. Otro gemido. Gutural ahora y me sentí más valiente en este punto. Esto era lo que yo sabía.
Yo tenía la experiencia suficiente cuando se trataba de este lado de las cosas. Era este mi campo
de especialidad, ¿No?

Mi mano se deslizó por debajo de su camisa y sentí la suavidad de la piel de su estómago. El


contorno de sus músculos abdominales no eran tan marcados como los míos, pero me gustaban
los cuerpos no tan musculosos y blandos. Poco a poco exploré más de su piel antes que mi mano
se deslizara más abajo tratando de desabrochar sus pantalones.

"Espera...", jadeó de repente y retiró mi mano y mis labios al instante. Yo estaba un poco
sorprendida, pero sobre todo horrorizada ante la mera posibilidad de haberla asustado. Las dos
estábamos respirando pesadamente y me sentí aliviada cuando acarició mi mejilla. "¿Por qué estás
tan desesperada por dormir conmigo?", preguntó Emily no de reproche, pero realmente curiosa.

Estaba sorprendida ante la pregunta y traté de dar con una respuesta rápida para ocultar mi
estado nervioso.

"Porque... me siento atraída hacia ti", le respondí lentamente. "¿Eso es malo?", mi voz sonó con
inseguridad.

96
"No, me siento atraída hacia ti también", ella sonrió y se mordió el labio inferior por un segundo.
"No me malinterpretes; me gusta el sexo tanto como la chica de al lado y estoy segura que va a ser
increíble cuando lleguemos allí, pero... ¿Por qué la prisa?"

"Bueno, tal vez eso es lo único que sé hacer", solté y vi que sus cejas se elevaron aún más. "Quiero
decir, no de una manera arrogante", rápidamente comenté mientras mis mejillas estaban
ardiendo. "¿No es obvio que no soy muy experimentada con todas las cosas acerca de las citas? No
sé cómo... demostrar que me importas, supongo."

"Lauren, no tienes que dormir conmigo para probarme que te gusto", la rubia dijo con calma y
alivió mi tensión. "Y creo que lo estás haciendo bien en esa 'materia de citas' sacándome a un
hermoso restaurante, pasear por la ciudad, mientras me tomas mi mano o besándome como tú lo
haces. No seas tan dura contigo misma. Me pregunto si esas cosas no son suficientes para ti y es
por eso que estás tan ansiosa por dar el siguiente paso."

"No", intervine de inmediato y vi destellar esa sonrisa digna de un comercial de pasta dental. "Es
suficiente, más que suficiente. Sólo pensé que eso no sería suficiente para ti, ya no sé qué más te
puedo te ofrecer, realmente."

"¿De verdad crees que no eres idónea o simplemente estás tratando de hacerme sentir mal por lo
que voy a terminar durmiendo contigo de todos modos?", ella sonrió y supe que me estaba
tomando el pelo.

"¿De verdad crees que no eres idónea o simplemente estás tratando de hacerme sentir mal por lo
que voy a terminar durmiendo contigo de todos modos?", ella sonrió y supe que me estaba
tomando el pelo.

"Depende", respiré. "¿Funciona?", mis labios formaron una amplia sonrisa mientras levantaba una
ceja.

"Eres linda, ¿Lo sabes?", la chica más mayor puso sus brazos alrededor de mi cuello de nuevo.

"No es una palabra con la que mucha gente me asocia", dije con la verdad.

"¿Con qué palabra entonces las personas te asocian?"

"No lo sé. Aunque, puede ser dedicada o ambiciosa tal vez", pensé en voz alta mientras ella con su
pulgar acariciaba mi barbilla ligeramente.

"Creo que eres linda", repitió y mi corazón se agitó un poco ante la tierna expresión en los ojos
claros.

"Eres muy linda también", le susurré cariñosamente y quise besarla cuando ella presionó su dedo
índice contra sus labios.

"¿Bastante linda para ser tu novia?"

97
Casi me atraganté con el enorme nudo en mi garganta. Oh, esto fue todo. Estábamos a punto de
ser oficial. No estaba segura de por qué eso me asustó tanto.

"Respira, Lauren", Emily sonaba como si se estaba riendo, pero también un poco preocupada. "No
tienes que decir nada. Sólo estaba tratando de-"

"¿Emily?", la interrumpí y ella parecía confundida por el cambio.

"¿Sí?"

"¿Quieres ser mi novia?", le pregunté a pesar de que mi corazón latía con fuerza en mi pecho.
Todo su rostro se iluminó. Sus manos ahuecaron mi cara y me atrajo hacia un beso que fue una
respuesta suficiente.

No tenía idea de lo que estaba haciendo, pero creía que ella me hacía feliz y confiaba lo suficiente
en ella como para explorar. Si esto terminaba mal yo probablemente nunca más intentaría de
nuevo, pero tenía que intentarlo. Esto ahora iba bien y yo en realidad estaba encantada de estar
con alguien más que sólo por una noche. El hecho de que ella no estaba durmiendo conmigo me
gustó por alguna razón. Si tuviera que empezar por alguna parte, me gustaría empezar por aquí.
Me sentía cómoda con ella y aunque eso me asustó, también me gustó la idea de tener una novia.

********************************************************************************

Estaba en mi camino a casa después de un largo día de clases cuando reconocí a Luis entre la
multitud de estudiantes en el campus. Estaba hablando con alguien, pero no pude ver quién. Una
parte de mi sólo quería volver a mi departamento y relajarse, pero él me vio y me saludó con la
mano. Sonriendo de vuelta, me dirigí hacia él cuando mis labios se abrieron en leve shock después
de ver a su compañía.

Era Camila.

"Hey", dije con vacilación después de haber llegado junto a los dos.

"Hola", Camila dijo con tranquilidad, pero sonrió cortésmente. Ella parecía estar mejor después de
esa noche emocional en Chicago. Nos habíamos visto durante la práctica, pero no estábamos
realmente hablando todavía. Era extraño, pero lidié con ello ya que pensé que eso era aceptable.

"¿Qué pasa?", Luis sonrió y yo estaba tratando de procesar lo que estaba pasando.

"No mucho", respondí y no pude mantener mi boca cerrada. "¿Qué están haciendo? Quiero decir,
¿Cómo ustedes dos se conocieron?"

"Me encontré con ella la cafetería y nos pusimos a hablar", el brasileño comenzó a explicar
mientras yo sentí esa sensación molesta de celos. "Camila dijo que nunca había visto el campus y
me ofrecí para mostrarle los alrededores."

98
"¿Estás pensando en ir a la universidad?", le pregunté a mi compañera de equipo con cuidado.

"Todavía no, pero tal vez cuando Lara esté comenzando kindergarten", la morena respondió.

"Le dije que tiene que venir aquí, si es que ella decide entrar", Luis mostró su mejor sonrisa y sentí
la necesidad repentina de golpearlo o algo.

"Él ha sido muy convincente y un gran guía turístico, así que podría considerarlo", añadió Camila y
verlos sonriéndose el uno al otro logró ponerme extremadamente furiosa.

"Estoy segura que lo es", murmuré para mí misma.

"Oh, todavía veremos el partido esta noche, ¿No?", el chico mayor preguntó, y quise cancelar
nuestros planes, pero tal vez no era una mala idea juntarnos y preguntarle qué demonios estaba
haciendo con Camila.

"Sí, claro. Me tengo que ir, pero te veré más tarde y a ti en la práctica de mañana", dije tan
casualmente como pude antes de alejarme. Dándose la vuelta, vi a Luis poniendo una mano en la
espalda baja de Camila mientras la guiaba en una dirección diferente. Sí, definitivamente tenía que
hablar con él.

********************************************************************************

Unas horas más tarde, mi amigo había venido a ver un partido de fútbol porque tenía un televisor
de pantalla plana enorme y disfrutábamos viendo deportes juntos. Sin embargo, yo estaba
distraída después de haberlo visto con Camila. Durante toda la noche, luché conmigo misma sobre
si preguntarle o no. Tomé una respiración profunda y hablé mientras estábamos en el sofá.

"Entonces, ¿Qué está pasando entre tú y Camila?", mi voz tenía más preocupación de lo que
pretendía.

"Todavía nada", dijo con una sonrisa maliciosa y se encontró con mi mirada.

"Sabes, nunca me meto en tus asuntos, pero ella no es una chica con la que puedas salir y luego
dejarla", continué y casi reí internamente ante la ironía de yo diciendo eso. ¿No era eso
exactamente lo que había hecho con ella en New York?

"¿Por qué?", él preguntó comiendo algunas palomitas.

"Porque ella tiene un niño y está... en busca de algo más estable y comprometedor", respondí
mientras trataba de mantener la calma.

"¿Quién dice que yo no puedo darle eso?", respondió Luis de repente y sentí que mi pulso se
aceleraba.

99
"¿Tú?", pregunté con escepticismo. "Sin ánimo de ofender, pero no eres exactamente conocido
por ser alguien estable en las relaciones."

"¿Y qué? Tampoco lo eras tú, pero ahora estás con Emily y eres feliz. Tal vez debería ponerme los
pantalones y por lo menos darme una oportunidad", mi amigo me sorprendió por completo con
esa respuesta.

"¿Estás... hablando en serio? ¿Por qué Camila, sin embargo?", mi voz se hizo más frenética
inadvertidamente.

"¿Por qué no?", frunció el ceño y se enderezó para mirarme. "¿Cuál es tu problema con ella de
todos modos?"

"Nada", protesté rápidamente.

"En primer lugar, me dijiste que ella estaba casada cuando traté de acercarme a ella en Miami y
ahora estás comportándote como su protectora", claramente estaba confundido por mi
comportamiento. "¿Por qué estás contra la idea de ella y yo juntos? ¿No soy lo suficientemente
bueno para tus amigas? No te importo cuando salí con Kristie de todos modos."

"Mira, no me importa con quien sales pero sé que Camila está lidiando con un montón de cosas
y...", suspiré, porque él tenía razón. Me importaba demasiado el asunto. O le decía por qué me
molestaba tanto o yo no tendría el derecho para decirle qué hacer.

"¿Y qué?", su voz se suavizó. "Si hay algo entre ustedes dos, entonces no me meteré allí, ya lo
sabes. Tú eres mi preferida", añadió con una sonrisa y yo rodé los ojos porque odiaba cuando él
trataba de coquetear conmigo.

"No pasa nada entre nosotras", exhalé lentamente y no estaba segura de si eso era mentira o no
en este momento. Luis parecía complacido y volvió a mirar la pantalla.

¿Por qué fue tan difícil para mí admitir que tenía un pasado con Camila? Si le decía a Luis, él no
haría nada para perseguirla pero yo era un idiota y me mantuve en silencio, por supuesto. La idea
de mi amigo saliendo con la chica de ojos marrones me estaba causando náuseas. Yo había estado
bromeando acerca de Luis y Kristie porque no me importó mucho. Pero Camila era una historia
diferente.

Sin embargo, ¿Por qué? Debería estar feliz por amigo que estaba lo suficientemente interesado en
alguien de forma seria después de que yo había encontrado a alguien también. El pensamiento de
Luis y Camila... me mató. Me mató casi tanto como ella y Austin. Por mal que sonara, tenía una
especie de esperanza de que los ojos de Luis vagaran rápidamente y encontraran a un nuevo
objetivo. Conociéndolo, eso no era muy irrealista.

********************************************************************************

100
Me estaba poniendo los calcetines y no estaba particularmente escuchando a nadie en el ruidoso
vestuario antes de la práctica. Siempre era ruidoso como el infierno antes de entrar en el campo
para entrenar. Todo el mundo se estaba riendo y bromeando, pero esos eran algunos de mis
momentos favoritos.

Revolví en mi bolso, buscando mi camiseta, pero tuve un rato difícil buscándola. Por lo general,
nunca me olvidaba de nada y estaría fuera de lugar si en realidad se me había olvidado mi
camiseta. Por otro lado, había estado muy confundida después de que Luis había dejado mi
departamento. Quizás no empaqué todas mis cosas para la práctica después de todo.

Las voces de mí alrededor se habían calmado y me di cuenta de que alguien tenía toda la atención.
Mis ojos se centraron en Camila que sonreía ampliamente y mencionó una canción. Todo el
mundo se echó a reír y yo no tenía idea de lo que estaba pasando hasta que Mel habló.

"!Eso es perfecto! ¿Cuál sería mi canción?", nuestro capitán le preguntó a la más joven del equipo
y la cara de la centrocampista izquierda se enfocó. Me di cuenta rápidamente de lo que estaban
haciendo. Dado que Camila era una maestra en la música y siempre estaba escuchando algo con
sus auriculares, al parecer le habían pedido que nombrara una canción para describir a cada
jugador.

Para mi sorpresa, Camila fue rápida y precisa. Algunas de sus opciones de canciones eran más de
carácter de burla o simplemente bromas, pero algunas de ellas eran casi exactas a un punto en el
que me dio miedo. Disfruté viéndolas a todas hasta que Kristie hizo que mi corazón dejara de latir.

"¿Cuál es la canción de Lauren?", mi amiga preguntó y yo tragué al instante.

"Heart's a Mess de Gotye", Camila respondió sin dudarlo en absoluto. De hecho, fue tan rápida
que se hizo evidente que no había pensado en eso con su cabeza. Ella había pensado eso mucho
antes, al parecer. Como si esa canción le recordaba a mí.

Mis ojos se encontraron con los de ella y vi que se sentía un poco avergonzada ahora. Había oído
la canción antes, pero hasta el punto de que no era capaz de recordarla. El título lo decía todo sin
embargo. No estaba segura de si debía sentirme ofendida por el título o halagada porque ella
tuviera una canción para mí. Afortunadamente, alguien le preguntó por su canción y yo estaba de
vuelta a la búsqueda de mi jersey. En mi cabeza, traté de recordar la canción que Camila había
elegido para mí, pero no pude. Después de un rato, encontré mi deseada ropa y di la vuelta para
salir del vestuario cuando Camila repentinamente estaba de pie justo en frente de mí. Casi me
tropecé con ella y mi corazón se sacudió en mi pecho.

"Lo siento", le dije con nerviosismo, pero ella sonrió a pesar de que parecía nerviosa.

"No hay problema", dije de vuelta en silencio y la vi juguetear un poco. "En realidad, yo sólo quería
decir gracias", la más joven continuó como yo elevé una ceja. "Por lo que pasó en Chicago. Sé que
probablemente estabas muy abrumada y lo siento por ser un total desastre-"

101
"No hay necesidad de disculparse o darme las gracias", la interrumpí con suavidad y los orbes
marrones se centraron en mis ojos con esa ternura que causaba sentimientos contradictorios.

"No hacía falta que me consolaras considerando... todo", ella vaciló y yo estaba definitivamente
más ansiosa ahora. "Pero lo hiciste y yo sólo quería decir gracias", dijo en voz baja y reiteró
mientras seguía mirándome profundamente a los ojos.

"De nada", dije en voz baja, sin saber por qué hablaba en voz baja, pero sonreí suavemente con la
esperanza de que el aleteo en mi pecho se desvaneciera.

Tuve que mirar hacia otro lado, porque la forma en que ella me estaba mirando me hizo sentir
como si estuviera buscando algo en mi esencia. Una parte de mí tenía miedo de que pudiera ver
algo en ella que no quería. Algo que estaba tratando de reprimir fuertemente, porque sabía que
no había manera de que íbamos a funcionar después de todo lo que había sucedido. Aun así, sentí
que mi corazón latía como loco cada vez que ella estaba cerca.

Mis pies querían dar un paso atrás cuando sentí algo inesperado, que mi aliento realmente se
enganchó en la parte posterior de mi garganta. Camila se había inclinado hacia adelante con
rapidez y sus labios suaves dieron un pequeño beso de gratitud en mis mejillas coloradas. Estaba
congelada. El roce de esos labios maravillosos hizo que mi piel se erizara. Me hizo débil a un punto
en el que pensé que no podía moverme. Fue un gesto tan simple, pero me provocó un alboroto
internamente.

Antes de darme cuenta, Camila ya se había ido y yo todavía estaba pegada en el lugar. Sacudiendo
el estúpido pensamiento que surgió, me uní a todos los demás que estaban fuera.

La práctica fue rutinaria y todos trabajamos duro. Empezamos tranquilamente, pero poco a poco
nos convertimos más ambiciosas en nuestros entrenamientos y la práctica siempre terminaba con
un pequeño juego. Antes, nos reuníamos todos en un círculo y estirábamos. Era similar a lo que
pasaba en el vestuario, porque la mayoría de nosotras estábamos hablando durante ese tiempo
para aflojar los músculos acortados.

"¿Han oído hablar de las nuevas noticias?", sentí un brazo a mi alrededor y miré hacia mi lado para
encontrarme a Mel sonriéndome. "Lauren finalmente está en una relación", nuestro capitán
sonrió y todo el mundo rió y silbó como mis mejillas se pusieron rojas. La burla definitivamente era
parte de este equipo. "He asechado a tu novia en las redes sociales y tengo que decir que no
puedo culparte por renunciar a tu vida de soltera después de verla."

"No pretendas que estabas soltera por elección antes de conocer a Tom", le respondí y los demás
rieron de nuevo ante mi comentario sarcástico.

"!Cuidado, Jauregui!" , ella me miró juguetonamente. "No todos podemos ser seductores como tú.
Pero sólo estoy jugando contigo. Estoy feliz de que finalmente hayas conocido a alguien."

"¿Quién te dijo eso de todos modos?", le pregunté perpleja.

102
"¿Quién crees?", Mel se burló y señaló a Kristie.

"Muchas gracias, Kristie", dije sin expresión y vi a mi amiga rodar los ojos. Mi propia mirada vagó
hacia el único jugador del equipo que era más joven que yo. Camila estaba de pie a unos metros
de mí y su sonrisa parecía un poco forzada. No tenía tiempo para analizar aún más la situación
porque nuestro entrenador nos dijo que nos teníamos que preparar para nuestro partido de
práctica.

Casi una hora más tarde, la práctica había terminado y me limpié la frente sudorosa con la mano.
No había nada más gratificante que ese sentimiento después de la práctica. Me sentía llena de
energía y al mismo tiempo cansada pero a veces no quería dejar el terreno de juego en absoluto.
Hoy fue uno de esos días y me quedé más tiempo en el campo. Me sentí en paz allí. Todos los
demás ya se encontraban en los vestidores o duchas cuando vi una cara familiar.

Jesús, ¡Estaba en todas partes! Lara sonreía ampliamente mientras ella estaba sosteniendo la
mano de una mujer mayor. Supuse que era su niñera. Ya había oído decir a Camila que una mujer
mayor se hacía cargo de Lara mientras ella estaba en la práctica. Esa sensación ambigua hacia
Camila parecía traducirse hacia su hija también. Una parte de mí quería salir corriendo porque no
quería profundizar nuestra relación aún más para evitar más caos. Pero la otra parte de mí, la
parte más grande de mí, no pudo resistirse a hacer muecas cuando la niña soltó la mano de su
niñera y corrió hacia mí.

"Hey", le dije alegremente y Lara alzó sus brazos, casi corriendo ahora. Por un segundo, me dio
miedo que se cayera y caminé hacia ella a mitad de camino antes de agacharme y tomarla. Ella se
reía con alegría en cuanto la levanté del suelo con rapidez y di un leve giro con ella.

"Voy a volar", se rió, pero echó los brazos a mi cuello y me saludó con un abrazo apretado. El
apego que la pequeña sentía por mí hizo que mi corazón entrara en explosión. Froté suavemente
su espalda y la sostuve entre mis brazos hasta que ella se echó hacia atrás parar mirarme.

"¿Te gusta volar?", le pregunté y la levanté un poco más alto por encima de mi cabeza y ella
asintió con la cabeza.

"Pero yo quiero jugar contigo", me interrumpió y fruncí las cejas ligeramente.

"¿Qué es lo que quieres jugar?"

"Fútbol", dijo y mis ojos se abrieron porque ella era muy joven para eso, ¿No? "Al igual que tú y
mamá." Mi boca se secó cuando escuché eso. Tú y mamá. ¿Por qué ese sonido fue tan bueno e
hizo que todo mi cuerpo se llenara de esa sensación inexplicable de calor?

"Bueno, entonces vamos a ver lo que tienes, Mini Cabello", sonreí y la dejé en el suelo. Dando un
paso atrás, pateé la pelota de fútbol con la cual había estado practicando con mucho cuidado
hacia su dirección. "¿Puedes golpearla con el pie de nuevo hacia mí?", le pregunté, y la niña de
tres años, se concentró intensamente. La expresión tensa en el rostro fue lo más entrañable que

103
jamás había visto. Ella estaba arrugando su nariz y sus ojos miraron fijamente la pelota en frente
de ella. ¿Había algo más adorable?

Estaba muy sorprendida de ver su pequeño pie patear la pelota con una fuerza suficiente para que
esta rodara sobre la hierba verde.

"!Sí! ¡Ahí lo tienes!", la animé y aplaudí impresionada. El objeto redondo aterrizó más en el lado
derecho, pero lo cogí y me puse en la misma posición anterior para lanzarlo. Repetí el paso y esta
vez Lara pateó la pelota sin detenerla.

"!Wow, eres mejor que yo!" , seguí animándola y fingí no ser capaz de alcanzar el balón. "Serás tan
buena como tu madre algún día."

"¿Es mamá buena en el fútbol?", Lara preguntó con curiosidad y yo asentí.

"La mejor", sonreí mientras le pasaba la pelota una vez más.

"¿En serio?", los ojos de la niña estaban muy abiertos llenos de adoración y orgullo ahora.

"Sí, tu mamá es la mejor jugadora en el equipo. Tal vez incluso del país o en el mundo entero", dije
y aunque mi voz sonó exagerada para demostrar emoción, mis palabras no estaban lejos de la
verdad. Camila necesitaba un poco de práctica para ponerse en forma y veía el futuro más
prometedor para ella.

"Woooow", Lara respiró. "¿Te gusta mi mami?"

Me detuve en seco durante un segundo antes de que me diera cuenta que estaba hablando con
una niña de tres años de edad, y no debería estar nerviosa por algo tan simple como eso.

"Sí, eso creo."

"¿Te gusto?", ella siguió su camino y me encontré con los ojos de color avellana, con una gran
sonrisa.

"Por supuesto", respondí sinceramente.

"Siempre dices 'no' cuando te pido que vengas a jugar con nosotros", su rostro estaba cayendo
ligeramente y sentí que mi corazón también lo hizo un poco.

"La próxima vez que me veas, voy a jugar contigo", le dije sin pensar demasiado en ello y vi que su
rostro se iluminó de nuevo.

"¿De verdad?", la niña de pelo más claro golpeó la pelota con nueva energía y se echó a reír
porque me tiré al suelo, ahora con impresión, porque no pude alcanzar la pelota; a propósito, pero
ella saltó hacia arriba y abajo como si hubiera marcado un gol.

104
"Sí, lo prometo", sonreí, me levanté y corrí hacia ella antes de tomarla una vez más. Fue
puramente instintivo y nunca habría pensado que tenía esos instintos, pero me encontré besando
la mejilla de la pequeña. Giré de nuevo, haciendo que 'volara', pero luego me centré en algo... o
alguien. Paré bruscamente, cuando vi a Camila de pie junto a la banca mirándonos. No estaba
segura de cuánto tiempo había estado allí, pero sentí un gran nudo en mi garganta.

"Tu mamá está lista, probablemente deberías irte", mi voz casi temblaba porque me sentía
reventada. Yo no estaba tratando de confundirla o hacer las cosas más difíciles entre nosotras,
pero ¿Qué iba a hacer cuando Lara era tan jodidamente adorable?

"Nos vemos, panqueques", Lara se despidió después de un abrazo más y corrió hacia su madre.
Tomé una respiración profunda y vi a los ojos marrones mirando con más atención después que su
hija había llegado a su lado. Por alguna estúpida razón, levanté mi mano y la agité sutilmente. Ella
al parecer sonrió y asintió levemente antes de tomar la mano de la niña y dejar el campo.

Si no la conociera mejor, hubiera jurado que Lara estaba tratando de ponerme una trampa con su
madre. Ella siempre aparecía de la nada y me mantenía conectada con la centrocampista
izquierda. Ahora, le había prometido, jugar con ella la próxima vez que nos encontráramos. Tal vez
se olvidaría de eso, pero por el camino que iban las cosas, estaba segura de que no tomaría mucho
tiempo hasta que me reuniera con la pequeña familia de dos integrantes; deliberadamente o no.

Conduciendo de vuelta a casa más tarde esa noche, no pude contenerme, y puse la canción que
Camila había elegido para mí. Escuchando la letra, sentí que reflejaba bastante y a la perfección mi
situación. Pero también me hizo preguntarme si la joven se sentía tan desesperada conmigo como
el cantante. ¿Realmente pensaba en mí mientras esa canción sonaba en sus auriculares? Suspiré
profundamente sólo al pensar en esa posibilidad con la voz de Gotye llenando mis oídos.

Pick apart(Desmenuza)

The pieces of your heart(Los pedazos de tu corazón)

And let me peer inside(Y déjame mirar dentro)

Let me in(Déjame entrar)

Where only your thoughts have been(Dónde sólo tus pensamientos han estado)

Let me occupy your mind(Déjame ocupar tu mente)

As you do mine(Como tú lo haces con la mía)

Your heart's a mess(Tú corazón es un desastre)

You won't admit to it(Tú no lo admitirás)

It makes no sense(No tiene ningún sentido)

105
But I'm desperate to connect(Pero estoy desesperado por conectar)

You can't live like this(Tú no puedes vivir así)

You have lost(Has perdido)

Too much love(Demasiado amor)

To fear, doubt and distrust(Por temer, dudar y desconfiar)

(It's not enough)(No es suficiente)

You just threw away the key(Tú sólo tiraste la llave)

To your heart(De tu corazón)

You don't get burned(No te quemas)

('Cause nothing gets through) (Porque nada puede penetrarte)

It makes it easier(Lo hace más fácil)

(Easier on you)(Más fácil para ti)

But that much more difficult for me(Pero es mucho más difícil para mí)

To make you see... (El hacerte ver...)

Love ain't fair (El amor no es justo)

So there you are (Así que ahí tienes)

My love (Mi amor)

Your heart's a mess (Tu corazón es un desastre)

You won't admit to it (Tú no lo admitirás)

It makes no sense (No tiene ningún sentido)

But I'm desperate to connect (Pero estoy desesperado por conectar)

And you, you can't live like this(Y tú, tú no puedes vivir así)

Your heart's a mess(Tu corazón es un desastre)

You won't admit to it(Tú no lo admitirás)

It makes no sense(No tiene ningún sentido)

But i'm desperate to connect(Pero estoy desesperado por conectar)

106
And you, you can't live like this (Y tú, tú no puedes vivir así)

Love ain't safe (El amor no es seguro)

You won't get hurt if you stay chaste (No te harás daño si te mantienes pura)

So you can wait (Así que puedes esperar)

But I don't wanna waste my love (Pero no quiero desperdiciar mi amor)

=================

Capitulo 7

El estadio estaba lleno y el canto de la multitud siempre me daba fuerzas. No importa cuántas
veces estuvieran en el campo, la energía de nuestros fans era increíble. Estábamos jugando contra
Washington Spirit y hasta ahora el juego estaba empatado 0-0. Pero tan sólo llevábamos media
hora de juego por lo que no había ninguna razón para entrar en pánico. Habíamos creado algunas
tácticas y tenía la sensación que el próximo tiempo sería adecuado usarlas.

Había ganado la pelota justo a tiempo e inmediatamente vi a Camila corriendo por el lado
izquierdo. Fue instintivo, casi, pero yo sabía dónde ella iría. Así que envié un pase largo porque yo
sabía que la jugadora izquierda podría alcanzarlo. Me anticipé por el lado y corrí hacia el arco, pero
más por el centro. Era increíble, pero la más joven del equipo logró alcanzar el balón, levantó la
vista y me vio correr. Su pase fue perfectamente calculado y todo lo que yo tenía que hacer era
patear el balón en la red, cuando lo hice escuché que todo el estado se volvió loco.

No se podía negar que jugábamos bien juntas. Nuestra relación fuera de la cancha estaba
mejorando, y me sentí aliviada de ser incluso más activa en el equipo, ahora que Camila estaba
aquí. Corrí hacia ella tras el gol y la abracé rápidamente-nada demasiado quisquilloso, pero no
quería ser sospechosa ya porque estábamos funcionando bien. La charla emocional de Chicago
había roto algunas paredes. Habíamos sido capaces de ser amables y cordial sin gritarnos el uno al
otro. No era como si fuéramos amigas, pero tal vez podríamos llegar a hacerlo.

Sin embargo, ese primer gol fue sólo el comienzo. La próxima vez que me liberé de mi oponente, vi
a Camila liberándose de su propia defensa y le pasé el balón para que ella sólo golpeara la red.
Sólo era ella contra el arquero y no tuvo ningún problema de golpear el balón contra el fondo de la
red: 2-0. Esta vez, la de ojos marrones se acercó a mí y me abrazó para darme las gracias por la
asistencia. Ella sonreía mucho más ampliamente ahora y nuestros compañeros de equipo nos
motivaron para seguir adelante.

Lo hicimos. Lo que siguió sólo puede ser descrito como mi mejor juego con The Boston Breakers
hasta el momento. Camila y yo jugamos como locas; bailando alrededor de los defensores,
esquivándolos por todo el campo, utilizando nuestras estrategias perfeccionadas casi humillando

107
al otro equipo porque se vieron imponentes frente a nuestras actuaciones. Me las arreglé para
anotar dos goles más. Uno fue un tiro rasante que Camila me había enviado y el otro básicamente
fue un tiro de 20 yardas en el tiempo de descuento para terminar el juego en 4-0.

El estadio estaba a nuestros pies y yo definitivamente estaba en lo más alto cuando me fui del
campo para hacer algunas entrevistas. Traté de ser objetiva y tranquila, pero no podía borrar esa
estúpida sonrisa de mi cara. Por supuesto, le di las gracias a todos mis compañeros y
especialmente a Camila que había asistido tres de mis goles. Me tardé más de lo habitual, porque
le firmé algunos autógrafos a unos fans después de haber estado lista con los periodistas. De esa
manera, la mayoría de mis compañeros se habían ido de los vestidores cuando llegué. En realidad,
sólo quedaba una compañera restante: Camila.

Ella estaba empacando su bolso y se dio cuenta que había llegado. Para mi sorpresa, me mostró
una sonrisa perfecta y tomó la palabra.

"Jugaste como en el infierno, buen juego", me felicitó y tomé una respiración profunda, pero me
senté en el banquillo.

"No podría haberlo hecho sin ti", dije de vuelta y vi que su sonrisa se suavizó. "Este fue mi primera
tripleta y tú me ayudaste. Creo que eso dice mucho sobre lo increíble que jugaste también."

"Cada vez que estoy por ahí, todavía no puedo creer que esta sea mi vida", reveló y la miré con
más atención. "Quiero decir, hace apenas unas semanas, no estaba segura de cómo iba a pagar mi
alquiler, porque no estaba haciendo suficiente dinero en el restaurante. Y ahora que estoy
haciendo lo que me gusta y puedo prever a Lara y sin tener que preocuparme... A veces tengo
miedo que voy a despertar y todo será sólo un sueño."

"Te puedo garantizar que esto no es un sueño", le respondí también sonriendo suavemente. "Yo
sé que fui un poco dura contigo la primera vez que te uniste al equipo, pero estoy muy contenta
que seas parte de nosotros."

Los ojos marrones parecieron aliviados como ella suspiró en voz baja.

"Gracias, eso significa mucho", contestó después de unos segundos y yo me había quitado las
zapatillas. Me levanté y me sentí valiente después que nos llevábamos bien dentro y fuera del
campo. Lentamente caminé hacia ella, tomé una respiración profunda.

"Sé que esto es mucho pedir después de todo lo que pasó entre nosotras en las últimas semanas",
empecé con calma y sostuve su mirada. "Pero quiero que seamos amigas. Después de todo, somos
compañeras de equipo y podemos dejarlo así si quieres, pero... tal vez podríamos empezar de
nuevo y ¿Realmente ser amigas?"

Tragué saliva lentamente mientras miré esas esferas marrones que hicieron que mi ritmo cardíaco
se acelerara al instante. Ella todavía me ponía nerviosa, pero no hasta el punto donde me sentía
en explosión cada vez que nos quedábamos solas. Estábamos completamente solas ahora y estaba

108
bien. De acuerdo, tal vez mi corazón aleteaba un poco, pero esperaba que eso desapareciera con
el tiempo... ¿No?

La más joven bajó la mirada y se mordió el labio inferior por unos segundos antes de mirarme a los
ojos una vez más. Se veía bastante nerviosa o insegura. Sentí como si esta era mi última
oportunidad de mantener algún tipo de relación con ella. Si ella me volvía a rechazar, sabía que
todo se terminaría y tendría que aceptar mi derrota de que ella no quería ser mi amiga.

"¿Tú y Emily están oficialmente juntas?", Camila sorprendentemente preguntó y se mordió el labio
inferior de nuevo. Su voz era tranquila y llena de incertidumbre. Los orbes marrones me evitaban
brevemente hasta que aspiré de nuevo antes de responder.

"Sí, lo somos", le contesté con sinceridad, porque no había ninguna razón para mentir. No estaba
segura de por qué me estaba preguntando eso, pero una parte de mí sabía por qué. Ella asintió
con la cabeza ligeramente y sonrió, pero la sonrisa no llegó a sus ojos.

"Estoy feliz por ti", dijo y no esperé que ella se haya dado por vencida tan fácil. "Y me gustaría
empezar de nuevo también", agregó la morena sorprendentemente y me hizo elevar una ceja.

"¿En serio?", espeté.

"Claro, yo no creo que haya alguna razón para que continuemos en esta rareza...", la
centrocampista izquierda respondió de forma casual. "Amigas", me ofreció su mano y yo estaba
realmente sorprendida de que ella haya accedido a mi petición. Sin dudarlo, estreché su mano y
cerramos el trato con una suave sonrisa de ambos lados. "Pero me tengo que ir ahora. Lara está
esperando."

"Por supuesto", solté su mano a pesar de que su tacto se sintió demasiado bien. "Dile que le dije
'Hola'."

"Lo haré", dijo Camila suavemente. "Nos vemos en la práctica entonces."

"Sí, adiós", le contesté antes de que ella dejara el vestidor.

Exhalando profundamente, no podía creer que esto realmente estaba pasando. ¿Éramos amigas
ahora? Por un lado, estaba emocionada por el giro positivo que nuestra relación había tomado.
Por otro lado, sentí esa horrible sensación de decepción... o incluso arrepentimiento. No quería,
pero me preguntaba si había tomado la decisión correcta al no darle crédito a los sentimientos de
Camila. Sacudiendo la cabeza, me recordé a mí misma que había tomado esa decisión por una
razón y me debía a mí misma explorar mi relación con Emily. Confié en ella y no podía confiar en
mi compañera de equipo de esa manera.

********************************************************************************

109
Me estaba secando el sudor de la frente durante nuestro pequeño descanso. La práctica era mi
parte favorita del día, pero hoy fue un poco diferente. Emily venía a visitarme y yo estaba más que
emocionada por mi novia que por otra cosa. Siempre dije que era mi turno de ir a New York, pero
de alguna manera se las arregló para hacer planes para visitarme. Estaba lejos de ser pobre pero
Emily tenía más dinero que yo. Al parecer, a ella no le importaba gasta su dinero para venir a
verme. Y no me importó porque realmente amaba estar cerca de ella.

Ella no tenía que venir hasta más tarde y yo planeaba sorprenderla con un poco de mi comida.
Tenía un par de horas para prepararme; o al menos eso era lo que yo pensaba. Casi me atraganté
con el agua, cuando vi a la chica más mayor acercándose a nosotros por las líneas laterales. ¿Por
qué estaba aquí antes de tiempo? ¿Y qué estaba haciendo ella aquí?

"Ve y saluda a tu novia", Mel se burló de mí y obviamente todos se habían dado cuenta de la
presencia de la joven impresionante. Ella definitivamente no era tímida para mostrar ese cuerpo
perfectamente esculpido. Los tacones altos la hacían parecer aún más alta y el par de pantalones
cortos de color rosa acentuaban sus piernas largas que parecían interminables. Por no mencionar
su lindo trasero. La blusa blanca no estaba abotonada hasta el final y revelaba bastante escote y
tengo que admitir que tuve un tiempo difícil para no enfocarme allí. Mis ojos vagaron más arriba
para ver a su sonrisa saludándome.

Tomé un segundo para enfocarme. Corrí por la cancha y no pude evitar sonreír también.

"¿Qué estás haciendo aquí? Pensé que habíamos acordado que te recogería en la estación de tren
a las cinco", le confesé con sorpresa.

"Encantada de verte", ella sonrió y me reí suavemente. "Mi sesión fotográfica se adelantó así que
tomé un tren. Ven aquí", se inclinó para darme un beso, pero me aparté.

"Estoy sudando", le expliqué mi vacilación.

"¿Y qué?", frunció el ceño y agarró el cuello de mi camiseta para tirarme hacia ella. Esta vez no
protesté y sentí los labios de la chica presionando los míos. Estaban muy ansiosos y yo correspondí
de la misma manera a pesar de que estaba un poco sorprendida. Su lengua rozó mi labio inferior,
mientras que sus dedos perfectamente arreglados acariciaron mi cuello seductoramente. Oí
algunos aullidos detrás de mí y Emily se echó a reír rompiendo el beso después de que todos mis
compañeros de equipo se estaban burlando de mí, por supuesto.

"Lo siento", la chica de pelo rubio oscuro se rió entre dientes. "Creo que te ves tan sexy en esta
camiseta y toda sudorosa y jadeante", dijo con voz ronca mientras yo levanté mis cejas, porque su
mano se deslizó por debajo de mi camiseta para rastrear mis abdominales. "Tus músculos son
abultados y apretados... lo que hace que quiera arrepentirme de 'tomar las cosas con calma' que
estamos tratando de llevar."

"Estoy a favor de acelerar las cosas", sonreír y no podía creer Emily Ginzburg, la chica más cotizada
de la secundaria en ese entonces, me estaba diciendo esas cosas a mí.

110
"Oh, ya sé que quieres", rió suavemente y retiró su mano con un fuerte suspiro. "Pero, ¿Dónde
está la diversión en eso? La expectación hace que valga la pena."

"Va a valer la pena no importando cuándo", dije con aires de suficiencia en vez de convencerla
para acelerar las cosas. Sus cejas perfectamente depiladas se elevaron juguetonamente.

"No me malinterpretes, sé lo que estás tratando de hacer, pero creo aún no es tiempo para
avanzar hasta allí", Emily respondió y puse mala cara. "No hagas eso, no es justo", la chica de pelo
claro apuntó mis labios fruncidos.

"!JAUREGUI!", el director del equipo de repente gritó y me hizo temblar por un momento. "!Ven
aquí! El descanso terminó. Tu novia estará allí cuando la práctica haya terminado, ¡Vamos!"

Me excusé y me uní de nuevo a los otros jugadores en el campo. La práctica terminó tiempo
después. Emily y yo disfrutamos de nuestro tiempo paseando por la ciudad. Le hablé de mis planes
de cocinar y terminamos consiguiendo todas las cosas que necesitábamos para la comida. Sin
embargo, cocinar era mi trabajo. La comida cubana que logré hacer hizo delirar a mi novia.

Terminamos con caricias en el sofá y abrazadas siempre tratando de pasar al siguiente nivel. La
chica mayor debajo de mí definitivamente ya no se estaba frenando tanto como antes. Sus manos
eran más agresivas ante la exploración de mi cuerpo. Descansé mi cuerpo entre sus piernas
mientras acariciaba sus costados. Mis labios se movían hábilmente con los de ella. Yo estaba un
poco sin aliento gracias a nuestra sesión de besos de horas.

Mi mano se detuvo varias veces a sus lados hasta que sutilmente acariciaba la tela que cubría su
pecho. Ella gimió en voz baja pero fue como música para mis oídos y seguí mi camino lentamente.
Desde que la blusa ya estaba relevando mucho, sólo había que desabrochar algunos botones.
Empujé la tela blanca hacia un lado, exploré la cálida piel de su vientre plano. Rodeando su
ombligo y acariciando suavemente la superficie sedosa lo que causaba que la respiración de Emily
fuera más errática.

Pero no le di ninguna oportunidad de protestar. Mis labios mantenían los suyos ocupados porque
si apenas tuvo tiempo para respirar, y mucho menos tendría de hablar. Descubrí algo muy
conveniente en mi caso y desabroché su sujetador en un rápido movimiento. Ella abrió la boca y se
liberó de mis labios hinchados que estaban cubriendo los suyos.

"Lauren...", trató que sonara como un regaño, pero en realidad no tuvo éxito.

"¿Mmm?", le respondí con inocencia y comencé a correr hacia un lado la tela que cubría su pecho
lentamente.

"No creo que- oh Dios", Emily gimió de sorpresa porque había ahuecado su pecho
inesperadamente.

111
"No puedes usar una blusa así, un sostén que se puede abrir tan fácilmente y esperar que yo no
haga nada al respecto", susurré contra su cuello y chupé su piel caliente.

"Jesús", respiró y me agarró del hombro. Su resistencia se estaba desmoronando y aunque a veces
no me gustaba mi reputación como la 'seductora' cuando se trataba de chicas, sabía cómo
conseguir lo que quería. Y lo que quería era ella; ¡Muchísimo! Estaba frustrada sexualmente
porque tenía una novia que esfuma sexualidad, pero que no me permitía más que besos. Claro,
me encantaba besar, pero no podía contenerme cuando ella hacía esas cosas debajo de mí y era
tan natural para mí hacer eso.

Acaricié la suave piel de su pecho causando que la rubia liberara un gemido desde lo profundo de
su garganta. Pasé mi lengua contra su piel y le mordí el cuello. Ella estaba temblando de
excitación, y yo sabía que estaba haciendo un buen trabajo cuando eso sucedió. Retiré mi boca y
le di una primera mirada a su pecho expuesto delante de mí. Los senos de buen tamaño me
estaban llenando con toda clase de lujuria y los ahuequé con mayor firmeza, sintiendo que Emily
se estremecía.

"Dios, eres tan sexy", dije lascivamente ya que sabía que a la mayoría de las chicas les gustaba ser
halagadas incluso cuando me decían que no. Era superficial, pero me había enterado que este tipo
de confesiones desinhibidas de admiración por sus cuerpos eran muy bien recibidas. Me sumergí
inmediatamente y chupé el pezón erecto de color rosa.

"A la mierda", Emily se quedó sin aliento una vez más antes de que chupara aún más y seguí
masajeando su pecho firme. El poder que sentí al hacer eso sólo estaba alimentando mi propia
lujuria y estaba más cachonda que nunca, no podía negarlo. Todo en ella era precioso y sentí a la
pequeña seductora en mí querer reclamar lo suyo finalmente. Acoplando mi lengua, hice un
círculo en el bulto sensible y luego lo mordí rápidamente.

Decidí tomar un nivel superior y puse mis piernas entre las de ella, a propósito empujando mi
muslo contra su centro. Ella gimió de nuevo, pero fue más fuerte ahora. No importa lo duro que
ella estaba luchando, yo sabía que su centro estaba palpitando y empujé nuevamente mi muslo
contra su centro como encerré el duro pezón entre mis labios ansiosos. Su mano se había movido
hacia mi pelo, agarrando con fuerza mis mechones gruesos en la desesperación y yo sabía que
estaba haciendo un mejor trabajo.

Pero entonces sonó el maldito timbre.

Su mano me sacó de su pecho rápidamente a pesar de que yo había tratado de parecer


imperturbable.

"Salvada por la campana", jadeó con un temblor perceptible en su voz.

"Estoy segura que no es tan importante", le dije y quise besar los labios color rosa, pero ella me
cubrió la boca con su mano.

112
"No, no... tienes que abrir la puerta", respondió ella con una sonrisa y suspiré ruidosamente.
Quienquiera que estaba en la puerta, ¡Quería matarlo ahora mismo! Pero me levanté y me ajusté
rápidamente la ropa antes de caminar hasta la puerta de mi departamento. Abrí y encontré a Luis
de pie allí.

"!Tenías razón!", exclamó de pronto y se precipitó en mi departamento antes de que pudiera


protestar. Cerré la puerta y corrí tras él, pero él ya estaba en la sala de estar. Emily estaba de pie
allí, acababa de terminar de abotonarse la blusa. El pelo de la chica estaba bastante desordenado,
con las mejillas encendidas y no había que ser un genio para adivinar lo que habíamos estado
haciendo.

"Oh, mierda", mi amigo suspiró con una sonrisa. "Maldita sea, me olvidé de que Emily estaba aquí
hoy. Lo siento, no fue mi intención... de interrumpir."

"No, está bien", la chica más mayor intervino y le lanzó una mirada. "Siento que nunca paso
tiempo con los amigos de Lauren. Estoy seguro que no le importa si te quedas un rato."

"No, siéntate", me di por vencida y observé que el brasileño se acercaba a Emily antes de reclamar
la silla junto al sofá. "¿Y? Por mucho que me encanta escuchar que tengo la razón, tengo
curiosidad sobre ¿A qué te refieres?", le pregunté y me senté al lado de Emily.

"Camila", dijo con un suspiro y sentí mi pulso por las nubes. Oh no, esto era malo. Luis no tenía ni
idea acerca de lo mío con Camila. Y no estaba segura de lo que iba a decir. Teniendo en cuenta que
Emily sabía sólo de mí noche en New York con mi compañera de equipo, esto podría ser
complicado. Me quedé inmóvil por un segundo, pero Luis continuó.

"La llevé a almorzar y tuvimos un muy buen rato. O al menos eso pensé. Así que traté de besarla y
ella me rechazó totalmente", reveló y eso hizo que mi corazón saltara por alguna razón.

"¿Dijo por qué?", la rubia preguntó de repente.

"Ella dijo que había alguien más", Luis respondió y se me secó la boca. ¡Mierda! "¿Quieres
escuchar la mejor parte? ¡Es otra chica!"

Joder, eso se mantuvo haciendo eco en mi cabeza y ¡Tenía que poner fin a eso! ¿De verdad Camila
había rechazado a Luis porque sentía algo por mí? Mi corazón estaba acelerado, pero no había
palabras que salieran de mis labios a pesar de que debería de haberle puesto fin a la conversación.

"¿Sabes quién es?", Emily parecía demasiado curiosa y fulminé con la mirada a Luis, pero él no me
miraba.

"No", el chico negó con la cabeza y suspiré con alivio. "Al parecer, es una chica con la cual
trabajaba en un restaurante", su voz no paraba y me quedé muy sorprendida. "Ni siquiera sabía
que había trabajado en un restaurante. Ella dijo que habían salido antes, pero ella no había
querido presionar las cosas por varias razones. Ahora que ella estaba más estabilizada y algo había
terminado, ella quería darse una oportunidad."

113
Mi mandíbula casi cayó ante sus palabras. ¿Varias razones? ¿Algo había terminado? ¿Camila
estaba hablando de mí? Y ¿Cuándo mierda ella tuvo el tiempo para conseguir a otra persona?
Primero Austin, luego Luis y ¿Ahora otra chica? Yo estaba más que desconcertada. Austin y Luis
habían sido falsa alarma, pero esto me trastornaba más de lo que quería. No tenía ningún derecho
para pensar de esa manera, pero me molestó que yo no fuera la única mujer en la vida de Camila.
¿Cuán estúpido sonaba eso?

Y al parecer, yo no era la única en esta ciudad que estaba detrás de ella. El punto era que Camila
no tenía ningún interés por volver con Austin o empezar algo nuevo con Luis. Pero si estaba lista
para seguir adelante con esa chica que había conocido antes. Mi mente corría desenfrenadamente
con las especulaciones e ideas de la supuesta chica; como era o cual era su personalidad.

"Lo siento" Emily me sacó de mis pensamientos con su compasión por mi amigo.

"Está bien. Supongo que el universo me está diciendo que aún no es tiempo para tener algo serio
con una chica todavía", se rió entre dientes, pero me agité ante la nueva noticia. Me decía a mí
misma que quería ser amiga de Camila y empezar de nuevo, pero el hecho de que ella estaba
dispuesta a seguir adelante realmente... me molestaba más de lo que quería admitir.

********************************************************************************

"Quince minutos, dos personas, una bola por cada pareja. Pónganse cómodas con la pelota y
calienten un poco", nuestro entrenador instruyó.

Por lo general, yo siempre hacia los ejercicios de calentamiento con Kristie pero tenía algo
diferente en mente. Con la bola a mis pies, se la pasé precisamente a la más joven del equipo y
señalé que quería que ella fuera mi pareja. Los orbes marrones familiares me miraron
sorprendidos al parecer antes de asentir con la cabeza suavemente. Su pase fue tan preciso, pero
un poco más lúdico ya que utilizó la parte exterior de su pie. Hicimos algunos ejercicios de rutina
como nuestro entrenador quería antes de que finalmente obtuve el valor para hablar.

Habíamos hecho las paces. En realidad, más que eso. Estábamos tratando de ser amigas. Pero
desde que yo había oído hablar de la otra chica misteriosa que Camila, posiblemente, estaba
viendo, no pude dejar de pensar en ella.

"Me olvidé por completo de preguntar, pero ¿Cómo va la mudanza?", quería entablar una
conversación informal ya que éramos amigas, ¿No?

"Oh, ya está hecha ya", Camila respondió mientras hacía malabares con el balón con mucha
habilidad. "Quiero decir, la mayor parte. El departamento viejo ya no está y nos mudamos al
nuevo. Sólo tengo que terminar de desempacar algunas cajas."

114
"Eso fue rápido", le comenté porque me acordé de haber estado en su departamento una noche
antes que Austin había aparecido.

"Sí, por mucho que no me gustara que Austin estuviera aquí personalmente, fue de gran ayuda
para mover las cosas pesadas", la más joven explicó con una pequeña sonrisa y me reí sutilmente.
"Lo único malo es que el nuevo departamento es mucho más grande y se ve vacío. No tengo
tantos muebles para llenarlo, supongo."

"No necesitas necesariamente muebles", respondí mientras continuábamos pasando la pelota el


uno al otro. "A veces es la distribución de las cosas que ya tienes puede marcar la diferencia."

"Lo siento, señorita-voy-a-ser-arquitecta", se burló de mí y me reí suavemente. "No todo el mundo


tiene un buen ojo para esas cosas."

"Te diré algo", quería hacer una sugerencia. "¿Por qué no voy algún día y le echo un vistazo?
Podría hacer algunos bocetos de cómo podría verse y tal vez reorganizar algunas cosas si quieres."

"Oh, no, no tienes que hacer eso", la centrocampista izquierda interrumpió rápidamente.

"No me importa", le dije con sinceridad y sonreí. "En realidad, me encanta hacerlo. Es cómo
practicar para lo real algún día. Y tengo muchas fotos y pinturas guardadas que te puedo dar si
quieres porque ya no tengo suficiente espacio. Vamos, será divertido. Y si no te gustan mis
sugerencias, aún puedes dejarlo cómo está así de... aburrido."

"No es aburrido", protestó ella después de mi burla, pero detecté esa sonrisita en sus labios de
inmediato. "¿De verdad no te importa?"

"No, para eso están los amigos, ¿No?", le respondí y correspondí la sonrisa con delicadeza. Ella
asintió con la cabeza una vez más, y, básicamente, estuvo de acuerdo con mi plan. No estaba
segura de por qué estaba tan interesada en ser su amiga, pero no había nada malo en eso.
Teníamos historia pero quien dijo que no podíamos seguir adelante y empezar de nuevo. Esto iba
bien hasta ahora.

Los siguientes ejercicios requirieron más atención y nuestra conversación terminó ahí. Nunca
hicimos un plan sobre cuándo debería ir y yo probablemente estaba demasiado ansiosa para que
eso ocurriera. Pero no pude contenerme. La práctica había terminado y vi a Camila dejar los
vestidores para irse a casa cuando agarré mi bolso rápidamente y corrí tras ella. Casi me tropecé
en el camino porque me apuré mucho. Estaba doblando en una esquina cuando me reuní con ella,
pero ella no estaba sola.

"Camila", había gritado antes de llegar hasta donde ella, pero mi aliento se enganchó en la parte
posterior de mi garganta cuando me paré frente a ella, que estaba junto a otra mujer de cabellos
claros que tenía a Lara en sus brazos. Fue sólo una corazonada, pero sentía que la mujer con el
pelo castaño claro era la chica misteriosa de Camila. Ella era hermosa y no lo que yo esperaba.
Tenía el pelo recogido en un moño informal, llevaba un par de gafas de última moda, una camiseta

115
simple blanca, pantalones vaqueros rasgados y Converse. Para ser honesta, me recordaba mí
misma. Eso me molestó aún más porque me imaginaba que la otra persona sería menos...
amenazante.

"¿Está todo bien?", Camila preguntó preocupada y me sentí ruborizada después de haberla
perseguido.

"Um, sí, lo siento", me reí nerviosamente y aclaré la garganta. "Sólo me preguntaba... ¿Si podría ir
mañana para las cosas del departamento? No tengo clases."

"Oh, lo siento. Ya tengo planes", la más joven sonó genuinamente avergonzada mientras que la
aún sin nombre, me miraba con desprecio. Me reuní con los ojos marrones, poco antes de
centrarme en Lara. Esta fue la primera vez que la pequeña de tres años, no me prestaba atención.
Ella estaba jugando con el pelo de la chica misteriosa y eso me puso más celosa de lo que quería
admitir.

"!Ari nos llevará de camping!", la voz aguda de pronto exclamó con alegría después de las palabras
de su madre.

"No vamos a acampar, princesa. Sólo iremos de picnic", 'Ari' respondió y le hizo cosquillas a la
pequeña en sus brazos, por lo que la sensación molesta de envidia alcanzó proporciones
desconocidas.

"Lauren, ella es Ariana. Solíamos trabajar juntas", Camila decidió presentarnos después de todo. "Y
Ariana, ella es Lauren. Ella es una de mis compañeras de equipo."

"Encantada de conocerte",dije con cortesía pero Ariana no me correspondió y en su lugar se


centró en Lara. ¿Cuál era su problema? "Bueno, entonces no quiero retenerlas. Te veré en la
práctica", me dirigí a Camila de nuevo.

"Sí, arreglaremos algo en otro momento", sonrió y traté de imitar su movimiento, aunque no
estaba segura de lo convincente que fui.

Dieron media vuelta y comenzaron a caminar mientras yo las miré por un momento. Ariana puso
su brazo libre alrededor de la cintura de Camila y habría jurado que había hecho eso para
molestarme. ¿Cómo fui tan ciega? No todo se trataba de mí. Yo había rechazado la idea de que
Camila tenía sentimientos genuinos por mí y por lo tanto la rechacé en repetidas ocasiones. Sin
embargo, verla con otra persona fue más duro de lo que pensé. Austin y Luis habían sido
diferentes. No eran una cosa real pero ver el vínculo evidente entre las dos jóvenes me estaba
causando una confusión interna.

Oí a Lara riéndose como loca porque Ariana le hacía cosquillas otra vez y rodé mis ojos porque
estaba molesta conmigo misma. ¿Por qué estaba haciendo esto un problema? Ella siguió adelante
y yo también. Era cosa de tiempo y probablemente necesitaba un poco espacio para procesar.

116
Estaba en mi camino hacia la última práctica de nuestro juego en Kansas el sábado. Antes de que
incluso llegara al vestuario, el entrenador me llamó y me dijo que tenía que hacer algo antes de
reunirme a la práctica. Estaba más que asombrada cuando me ordenó participar en un segmento
del canal de Youtube de Boston Breakers. A pesar de que conocía el canal, nunca me habían
pedido que hiciera algo para ellos. Tal vez me sentía un poco halagada, pero también no
preparada.

Haciendo mi camino hacia la habitación designada, casi me quedé sin aliento cuando vi a Camila ya
sentada en el sofá delante de la cámara. Oh Dios, gemí internamente. Como si mi extraño
encuentro con ella y Ariana no había sido suficiente. Me acerqué a ella lentamente y rápidamente
el entrevistador y el pequeño equipo de producción nos comenzó a instruir.

"Hemos tenido una gran cantidad de solicitudes en línea para hacer algo como esto con ustedes
dos ya que son las más jóvenes de equipo", el hombre de pelo oscuro explicó mientras tomaba
asiento junto a mí compañera de equipo. "Los fans tienen curiosidad y queremos hacer un
segmento con las dos ¿Si eso está bien?"

"Claro", dije tan casualmente como pude, aunque estaba bastante nerviosa.

"¿Por qué no?", Camila intervino y ambas tuvimos unos minutos para prepararnos. Si lo hubiera
sabido me habría vestido un poco mejor, pero lo que tenía estaba bien. Llevábamos pollerón del
equipo, pero tenía que reconocer que Camila se veía magnífica en el color azul marino. Detente
Lauren, me regañé. Me desaté la cola de caballo y dejé que mi pelo fluyera con más naturalidad
cuando cogí a la centrocampista observándome. Nuestros ojos se encontraron por un segundo y
sonreí suavemente mientras que la sonrisa de sus labios era tímida. ¿Estaba sonrojada?

"Muy bien, ¿Estamos preparados para empezar?", el entrevistador preguntó y ambas asentimos
mientras la cámara estaba encendida.

Entrevistador: Bueno, entonces vamos a empezar así. Dado que las dos son las más novatas del
equipo, ¿Pueden tal vez presentarse muy rápido?

Lauren: Hola, soy Lauren Jauregui. Tengo 21 años y esta es mi segunda temporada con The Boston
Breakers. Soy originaria de Miami y soy volante central.

Camila: Hola, soy Camila Cabello y tengo 20 años. Me mudé a Boston desde California y me uní a
The Boston Breakers hace sólo unas semanas... Oh, y soy centrocampista izquierda.

Entrevistador: Perfecto. Pensamos en este pequeño juego: ustedes dos obviamente, se conocen
muy bien en el campo, y queríamos ver lo bien que se conocen fuera de la cancha.

A la mierda con mi vida, fue todo lo que pensé cuando nos dijo eso. Bueno, nos conocíamos
bastante bien en un sentido bíblico, casi lo dije pero me golpeé internamente por eso. ¡No te
ruborices, Lauren!

E: ¿Hace cuánto tiempo se conocen?

117
L: Yo tenía dieciséis años cuando nos conocimos. Camila tenía quince años, por lo que
técnicamente hace cinco años. Pero nosotras no... quiero decir, no nos habíamos visto durante
mucho tiempo antes que ella se uniera a Breakers.

E: ¿Te acuerdas de lo que pensaron una de la otra? Como... ¿Las primeras impresiones?

L: Camila era una persona muy diferente en ese entonces. Ella no era muy sociable y me acuerdo
que las chicas pensaban que era arrogante o engreída. Pero yo definitivamente estaba muy
intrigada porque ella no era tan fácil de leer. Ella sólo hablaba con su amiga que tenía en casa

-Un grito para Dinah si estás viendo esto- pero más llegué a conocerla, nos llevamos bien y nos
hicimos amigas.

C: Para ser honesta, yo no me acuerdo. Al igual que Lauren dijo, yo era muy cerrada y apenas
notaba algo o a alguien, excepto por el balón. Sin embargo, lo que sí recuerdo es lo impresionada
que estaba con ella en el campo.

Era estúpido, pero me sentí un poco decepcionada de que ella no parecía recordar su primera
impresión de mí. Pero me callé y fingí indiferencia y no presente ninguna reacción.

E: Ok, vamos a empezar el juego. Les preguntaré a cada una de ustedes una pregunta acerca de la
otra persona y si la responden bien les daremos un punto. Tan simple como eso. El que tenga más
puntos al final gana. Tenemos las respuestas a partir de fuentes fiables por lo que no se
preocupen.

L: Soy muy competitiva, por lo que me tomaré esto en serio, Camila.

C: Eh, estoy temblando en mis zapatos. Dale.

L: Yo me encargo. No tienes ninguna oportunidad.

E: Lauren, empezaremos contigo. Primera pregunta: ¿Cuál es el número de la suerte de Camila?

L: Eso es fácil. Es el 7, duh.

E: Eso es correcto. Camila, ¿Cuál es el número de la suerte de Lauren?

C: Es el 8 aunque ella no lleva ese número en su camiseta más, fue su primer número y por eso ella
todavía lo considera su número de la suerte.

E: Eso también es correcto, estamos empatados. ¿Cuál es el equipo de fútbol favorito de Camila?

L: El Real Madrid. Ella es una gran madridista.

E: Es cierto, 2-1 para Lauren. La misma pregunta para ti Camila: ¿El equipo favorito de Lauren?

C: Manchester United.

118
E: Y estamos empatados de nuevo. ¿Jugador de fútbol favorito de todos los tiempos?

L: Uhm... bueno, hay un montón de jugadores que ella mencionó...

C: Yo sé tu jugador favorito. ¿Me dan un punto extra si contesto antes que ella?

L: ¡Espera, mujer! Estoy pensando... me iré con mi instinto y diré que es Maradona.

E: Correcto.

L: ¡Sí!

C: El de ella es Zidane. No hay duda. Ella nunca dejó de parlotear acerca de él.

L: Es un puto genio-Oh, Dios, lo siento.

C: ¿Ven a lo que nos tenemos que enfrentar todos los días?

El burlón estaba llegando a un punto en que era absolutamente normal. No parecía forzada, y por
primera vez en mucho tiempo sentí que éramos realmente amigas. Recordando viejos tiempos y
haciendo bromas entre sí frente a la cámara se sentía genial. No podía borrar esa sonrisa de mi
cara por alguna razón.

E: Eso está bien. Estamos empatados de nuevo 3-3. Lauren, ¿Cuánto calza Camila?

L: 8,5. Sé que es un hecho, porque ella olvidó sus zapatos una vez y tomó prestados los míos,
porque calzamos lo mismo.

C: Sí, eso es cierto. Sabía eso también.

E: Entonces cada una ganó un punto. Suficiente de preguntas de fútbol, haremos algunas más
profundas. Lauren, ¿La película favorita de Camila?

L: American Beauty.

Vi la cabeza de la joven volviéndose rápidamente y me miró con ojos sorprendidos.

C: ¿Cómo sabes eso?

L: Creo que fue en los campeonatos de la Sub-17. Había una bolsa de plástico a la deriva en el
viento, y me dijiste que te recordaba a esa escena de 'American Beauty' porque era tu película
favorita. Me burlé que eras un bicho raro como ese chico con la cámara en la película y estuviste
bastante molesta conmigo por unas horas.

Todavía estaba sonriendo mientras contaba la historia y vi que los ojos marrones me miraron
llenos de cariño. Ella pareció recordar y sacudió la cabeza ligeramente.

C: Dios mío, no puedo creer que recuerdes eso.

119
L: No te hagas ilusiones. Estoy tratando de ganar aquí.

Camila rodó los ojos, pero se unió a mi pequeña risa.

E: Estás por delante con un punto a menos que Camila sepa tu película favorita también.

C: El Indomable Will Hunting.

L: ¡Maldición!

Mis ojos cayeron al suelo porque recordé el momento que Camila había aludido. Había sido
durante nuestra 'aventura' en bootcamp. Nos habíamos acurrucado en la cama después de
habernos besado desde hace mucho rato y yo la había convencido que viera la película conmigo
en mi portátil. El recuerdo de su delgado y más pequeño cuerpo apoyado contra el mío, mientras
escuchaba su respiración suave, fue la causa de que mi corazón aleteara. Tragué un poco antes de
que me di cuenta que estuve fuera un poco.

E: ¿Cuál es la canción favorita de Camila?

L: ¡Eso no es justo! Ella escucha más música que cualquier otra persona. Probablemente no hay
una sola canción en este planeta que no haya escuchado.

C: Puedes renunciar a la pregunta.

L: Pff, el infierno no. Yo diré... 'The Scientist' de Coldplay ya que siempre ponías esa canción a
pesar de que siempre te decía era deprimente como la mier-oh, lo siento.

E: Bueno, le daré este punto a ella porque la respuesta era 'Anything' de Coldplay.

C: Eso es justo. Sé que siempre escuchabas 'Love Will Come Through' de Travis y mencionaste que
te gustaba mucho.

E: ¡Eso es correcto! Wow, realmente se conocen.

Si usted supiera, pensé, y no podía creer que mi compañera de equipo recordara muchos detalles.
Cuando había empezado diciendo que ni siquiera podía recordar su primera impresión de mí, yo
no había estado segura de que ella iba a contestar tantas preguntas correctamente. Estaba
extrañamente halagada y sentí que mi corazón aleteaba de esa manera extraña cada vez que ella
decía las respuestas correctas e incluso una explicación de por qué lo sabía.

E: Entonces ¡Es hora de decidir! Si Camila podría vivir en cualquier lugar del mundo, ¿Dónde sería?

L: Oh wow, eso es difícil. Yo creo que nunca hablamos de ello... ¿O lo hicimos?

Miré y me mordí el labio inferior. Esta fue la primera vez donde realmente no recordaba ninguna
conversación. ¡No podía perder ahora!

C: No diré ninguna palabra. Estabas tan arrogante al principio por lo que no recibirás pistas.

120
L: Muy bien, entonces diré... Madrid.

E: Y eso es... ¡Incorrecto!

L: Noooo, ¿Cuál era la respuesta?

C: New York

L: ¡A la mierda! Oh, lo siento... otra vez.

Ellos tendrían que utilizar una gran cantidad de pitidos por ahora. Definitivamente estaba
exagerando mi decepción por perder el punto, pero era divertido ser torpe y hacer bromas.

C: Creo que Lauren probablemente dijo Londres. Nosotros alguna vez hablamos y me acuerdo que
tú dijiste eso.

E: Eso es correcto, lo que significa que Camila gana 7-6. Felicitaciones.

Camila hizo una reverencia en broma, como si acabara de ganar algo muy importante, pero no
pude ocultar mi risa. Aplaudí, pero en tono de broma rodé los ojos antes que el entrevistador se
dirigiera a nosotras de nuevo.

E: Sé que se tienen que ir luego a la práctica, pero obtuvimos esta increíble pregunta en línea.
¿Podrían describir al otro en tres palabras para poner fin a esta especie de segmento?

Elevé una ceja y respiré hondo, tratando de enfocarme, pero también ser rápida.

L: Camila es cuidadosa, talentosa y... esta no es una palabra pero es una gran mamá.

Volví la cabeza un poco, vi los labios de mi compañera formar una sonrisa sincera ante mis últimas
palabras. Ella miró a la cámara y se tomó un poco de tiempo.

C: Lauren es amable, independiente y... heterogénea.

L: ¿Heterogénea? Eres una fanfarrona. No juegues con las grandes palabras. Ya ganaste, cielo.

C: No seas tan mal perdedor. ¿No conoces esa palabra? ¿Quieres que te la explique?

L: Cállate.

Le di un codazo a la ligera. Quería besar esa sonrisa petulante de su cara. Espera, ¿Espera? Besar
no era parte de ser amigas.

E: Eso fue increíble. Creo que a los fans les va a encantar. Pero ustedes tienen que volver a la
práctica porque le dije al entrenador que no las iba a retener mucho. Gracias por venir y estoy
seguro de que las veremos otra vez porque siento que este vídeo será muy popular.

121
Camila y yo le agradecimos al equipo de producción también, pero luego corrimos de vuelta a los
vestidores para cambiarnos. Durante todo el camino, no podía dejar de sonreír y mucho menos
dejar de mirarla. Me acordé de los celos que había sentido con Ariana y el pensamiento todavía
me mataba. Al llegar al vestuario, empezamos a cambiarnos, pero no nos habíamos dicho ninguna
palabra desde que nos estábamos apurando lo más rápido posible para evitar la pérdida de la
práctica. De repente, ella tomó la palabra cuando nos acercamos a la puerta para salir a la cancha.

"Eso fue divertido", dijo en voz baja y mostró esa sonrisa impecable de ella.

"Sí, tal vez las cosas no han cambiado tanto como pensamos."

Me sorprendió mi propia respuesta y nuestros ojos se encontraron en un vistazo rápido antes de


que ella mirara hacia otro lado. ¿Qué demonios estaba diciendo? ¿Que éramos esencialmente las
mismas personas que estaban todas las noches juntas por dos semanas? ¿Que posiblemente
nuestros sentimientos no habían cambiado? ¿Estaba finalmente reconociendo que Camila siquiera
había tenido sentimientos hacia mí en ese entonces? Estaba más que confundida, pero la otra
chica estaba liderando el camino y no se centró en mis palabras accidentales.

Era obvio que ella estaba siguiendo adelante y tenía que dejar de confundir nuestros intentos de
ser amigas con algo más. Esperaba seriamente que yo no siguiera haciendo el ridículo, pero las
posibilidades que teníamos eran bastantes escasas debido a mi comportamiento. Suspiré con
fuerza antes de seguir a mi compañera de equipo que estaba usando su número de la suerte en la
espalda.

=================

Capitulo 8
Camila's POV

Estaba empacando las últimas cosas para el juego de mañana en Kansas. Dado que el lugar estaba
bastante lejos, viajaríamos un día antes, así seríamos capaces de descansar lo suficiente antes del
partido. Los partidos como visitante eran difíciles para mí, sobre todo cuando me iba por más de
un día porque odiaba dejar a Lara. Estaba tan acostumbrada a pasar mis noches con ella y no
tenerla cerca todavía era un duro ajuste. Pero el precio que tenía que pagar era poder proveer
para nosotras y vivir mi sueño, al mismo tiempo.

Por mucho que me disgustara estar lejos, sabía que ella estaba en buenas manos. Ariana había
accedido a pasar la noche con Lara y cuidar de ella hasta que estuviera de vuelta mañana por la
tarde. Ella se había convertido en una gran amiga para mí cuando me había trasladado a Boston.
De hecho, ella fue la primera y casi no tenía ningún amigo aquí. Trabajando juntas en el
restaurante de mala muerte había sido una experiencia de unión. La aspirante a cantante había

122
sido mi salvadora cuando tuve que trabajar por horas impías o turnos porque a ella no le
importaba pasar tiempo con mi hija mientras yo estaba en el trabajo.

Después de un tiempo me di cuenta de que ella estaba posiblemente desarrollando sentimientos


hacia mí que excedían la amistad. Y Ariana era muy sencilla y honrada; lo cual me gustaba desde
que había tenido bastantes confusiones en mi vida. Le pregunté hace unos meses, y ella había
admitido que esperaba más que una amistad si yo estaba interesada también. En ese momento,
yo había declinado. Mi vida había sido un caos absoluto y yo estaba luchando financieramente y
emocionalmente. Yo no había estado segura de si era capaz de mantenerme en Boston con mis
limitados recursos.

Pero las cosas habían cambiado. Mucho había sucedido en las últimas semanas. Así que por ahora,
Ariana y yo estábamos tomando las cosas con calma para ver donde irían a parar pero yo ya no
estaba contra eso. Ella amaba a Lara y Lara la amaba. Éramos evidentemente amigas y ella era
hermosa. Sobre los ojos de los demás parecíamos una pareja perfecta. Si no fuera por el hecho de
que una cierta compañera de equipo aún sostenía un pedazo de mi corazón.

"¿Estás nerviosa?", Ariana apareció a mi lado mientras yo subía la cremallera de mi bolso.

"Sí, Kansas es un muy buen equipo y todavía me pongo nerviosa antes del juego y en la práctica
para ser honesta. Tengo que probarme a mí misma cada vez", le respondí y me encontré con su
mirada.

"¿Estás nerviosa por Lauren?", preguntó la morena de manera contundente y fruncí las cejas.

"¿Por qué yo tendría que estar nerviosa acerca de ella?", pregunté un poco confundida.

"Debido a que tú vas a pasar tiempo con ella otra vez... lejos", la chica más vieja parecía
preocupada ahora y respiré hondo. Ariana sabía todo acerca de mi historia con Lauren. Era
evidente que no le gustaba el volante central, sobre todo después de lo que había pasado en New
York. Siendo mi única confidente, tuve que decirle a alguien y aunque yo sabía que Ariana tenía
sentimientos platónicos hacia mí, ella seguía siendo una gran amiga. El hecho de que no le gustara
mi compañera de equipo fue más que nada debido a que ella sabía todos los detalles de nuestra
tumultuosa relación y no era por cuestión de celos... o al menos eso suponía.

"Te lo dije, somos amigas ahora. No hay nada de qué preocuparse", traté de tranquilizar a la chica
de pelo castaño claro.

"Supongo que no entiendo por qué quieres ser amiga de alguien que te ha tratado como una
mierda", su voz sonaba aún más preocupada.

"Ella es mi compañera de equipo y tenemos que llevarnos bien hasta cierto punto. Y no quiero
perder mi energía tratando de ignorarla cuando simplemente podemos seguir adelante", le
expliqué y la oí exhalar con fuerza. "Mira, ella no es tan mala como tú piensas que es."

123
"Tal vez", la chica se encogió de hombros. "Aunque quiero que sepas que no tienes que sentirte
obligada a ser su amiga. No tienes que sentirte mal por lo que pasó entre ustedes hace años. ¡Si
hay alguien que debe sentirse mal es ella!"

"Ni siquiera quiero pensar más en eso para ser honesta", le dije con un poco de frustración. "Se
acabó. Lo que sucedió entre nosotras en ese entonces o en las últimas semanas se terminó. No te
tiene que gustar, pero quiero ser su amiga. No por culpa pero me preocupo por ella como sólo
eso, como una amiga. Lo que necesito de ti es que al menos aceptes eso."

Ariana se acercó y tomó suavemente mi mano entre las suyas. Suspiró en silencio mientras que
nuestros dedos se entrelazaron antes de mirarme a los ojos de nuevo.

"Es sólo que no quiero que te hagan daño otra vez", habló en un susurro, y usó su otra mano para
meter un mechón de pelo detrás de mí oreja.

"Lo sé", respondí con una sonrisa suave y apreté su mano sutilmente. "Y te lo agradezco. Al igual
que te agradezco todo lo que has hecho por mí, pero tienes que confiar en mí."

"Sí, confío en ti", ella respondió rápidamente. "Es en ella en quien no fío. Pero si tú dices que son
amigas, entonces haré mi mejor esfuerzo y trataré de no preocuparme... simplemente no la dejes
entrar."

"Entrar en... ¿Qué?", le pregunté realmente confundida.

"No lo sé. Tiene que haber algo allí si ella pudo entrar en tus buenos sentimientos después de lo
que te ha hecho."

"Ella no entrara de nuevo o algo así", la tranquilicé y la vi sonriendo ahora también. Su mirada
cayó en mis labios y yo sabía que probablemente ella estaba dispuesta a sellar esto con un beso.
No nos habíamos besado todavía y aunque estuve tentada varias veces había un poco de
vacilación en mí al final. Una parte de mí tenía miedo de lo que sentía o no sentía. No intentarlo no
era una respuesta tampoco. Quería que eso pasara y se sintiera bien porque había mucha tensión
acumulada en mi interior. Sin embargo, los labios color rosa parecían tentadores y me incliné
antes de que nos interrumpieran.

"!Mami!", gritó Lara y corrió hacia el dormitorio, por lo que Ariana y yo saltamos ligeramente. "¿Te
vas ahora?"

"Sí, me tengo que ir", le contesté a mi hija y la levanté rápidamente.

"¿Vas a comportarte mientras no estoy?"

"Sí, pero te voy a extrañar", dijo la niña de tres años, haciéndome suspirar, porque de verdad no
quería irme.

124
"Te voy a extrañar más, cariño", besé su frente y tomé una respiración profunda. "No me iré por
mucho tiempo y Ariana cuidara muy bien de ti."

"Lo sé. Ari me prometió que voy a poder comer todo el helado que quisiera", la voz aguda chilló.

"Oh, ¿De verdad?", dije bromeando y miré a Ariana quien sonrió suavemente.

"Se suponía que no debías decirle", la otra chica se acercó y le hizo cosquillas a Lara, haciéndola
estremecer y reír descontroladamente en mis brazos. Verlas interactuar no era nuevo para mí,
pero todavía parecía increíble ver lo bien que se llevaban. Lara era muy abierta en general y a
veces eso me daba miedo, pero ella realmente amaba a Ariana. ¿Y a quién no le encantaría ver a
su hijo estar tan encantado con alguien que estaba tratando de tener algo contigo?

No pude contenerme, y me incliné para besar a Ariana en la mejilla. Ella me miró sorprendida al
principio por mi afecto inesperado pero sonrió ampliamente. Ya era hora de irse y yo estaba más
allá de la suerte por tener a alguien que se interesara por mí y sin señales mixtas o de confusión.
Sus señales eran claras y ella me trataba bien. Me debía a mí misma explorar cualquier
sentimiento que tenía por ella, incluso si no eran tan intensos como otros.

********************************************************************************

No fue un esfuerzo consciente, pero después de mi conversación con Ariana, traté de mantener
distancia cuando se trataba de Lauren. Tal vez eso no era justo después de que había aceptado ser
su amiga y estábamos haciendo progresos. Pero cada vez que estábamos lejos y solas, algo
sucedía. Y yo no quería que algo así fuera a pasar esta vez. Era mejor enfocarme en mí misma y en
el juego. Podríamos trabajar en nuestra amistad cuando estuviéramos de vuelta en Boston.

En Kansas, pasé la mayoría del tiempo sola ya que no quería que Lauren pensara que la estaba
ignorando a ella específicamente. Ella me preguntó si todo estaba bien y yo le había dicho que sí.
Desde entonces apenas estábamos interactuando pero quería que fuera de esa manera. Ella
estaba con Kristie y utilicé toda mi energía para concentrarme en el juego.

Desafortunadamente, esta nueva distancia se extendió en nuestro juego también. Me costó


mucho jugar con la nativa de Miami, lo cual eso no era un problema en absoluto antes. A pesar de
que no lo estaba haciendo a propósito, evité pasarle el balón lo que cual era perjudicial para
nuestro juego desde que ella era nuestro creador de juego. El juego estaba empatado 0-0. Ambos
equipos habían tenido oportunidades, pero de alguna manera ninguno había anotado. Tan sólo
quedaban minutos de juego y mi ambición finalmente superó mis emociones.

Empecé a atacar más que a defender así que trate de esquivar así Lauren tendría un poco de
espacio. Ella definitivamente estaba al acecho esperando que le pasara la pelota. Me liberé de los
defensores con una corrida rápida y controlé la pelota, lo cual nunca había sido un problema.

125
Mirando hacia arriba, vi a nuestro delantero cubierto, pero Lauren estaba de pie en el área con un
poco de espacio. Precisamente pasándole el balón, yo sabía que ella no iba a perder la
oportunidad. Ella siempre había sido buena en estas cosas; anotando a último minuto y
manteniendo la calma. Me recordó a las finales de la Sub-17.

Y tenía razón cuando la pelota fue a parar al fondo de la red y todo el equipo aplaudió como loco.
Definitivamente estaba aliviada de que al final habíamos sido capaces de anotar por lo menos un
gol y esperanzadamente ganar. Eso era lo de lo que se trataba al final.

Mi corazón saltó inadvertidamente cuando vi a mi compañera de equipo que recién había anotado
corriendo hacia mí con todos los demás. Ella estaba sonriendo de oreja a oreja y luego sentí que
me aplastó con un fuerte abrazo justo después. Era un partido importante y los tres puntos eran
cruciales. La alegría estaba justificada, pero odiaba esa sensación de aleteo en el pecho cuando
sentí el cuerpo tonificado presionándose contra el mío. No pude ocultar mi sonrisa y poner mis
brazos alrededor de ella por un segundo antes de que el resto del equipo saltara sobre nosotras.

No fue hasta que estábamos en el vestuario después del partido que Lauren se dirigió a mí con
más cautela en esta ocasión.

"¿Vas a venir a la fiesta de cumpleaños de Kristie el martes?",el volante central se paró frente a mí
mientras yo desataba mis zapatillas.

"!Tienes que ir, Camila!", la rubia de pronto intervino apremiantemente. "Vamos a ese nuevo club
que abrió sus puertas hace unas pocas semanas. Se supone que es un locura."

"Ni siquiera tengo 21. Probablemente no me dejaran entrar", le dije más bien tímidamente
mientras Kristie y Lauren se miraron.

"¿No tienes una identificación falsa?", Kristie parecía realmente sorprendida.

"Ella obviamente ha estado ocupada con otras cosas, por el amor de Dios", Lauren rodó sus ojos y
se rió suavemente por lo molesta que estaba ante la pregunta de la rubia.

"Lauren tiene razón. No he ido a la universidad y hasta ahora no he tenido la necesidad de tener
una", le expliqué más y me quité las zapatillas rápidamente.

"Conozco a la chica que trabaja en la puerta. Así que ella te puede dejar entrar si le digo", la chica
de los ojos verdes más impresionantes añadió y me miró expectante.

"Oh... no estoy segura de si quiero salir y dejar a Lara otra noche de nuevo", le respondí y vi a mis
dos compañeras de equipo asentir. Esa excusa fue mucho mejor al parecer. No era una excusa,
porque había algo de verdad en ello. Pero tampoco estaba segura de si quería estar cerca de la
otra morena, cuando el alcohol y la fiesta estaban involucrados. Esa combinación no había
terminado bien la última vez. Me sentí mal por Kristie que parecía muy ansiosa por mi asistencia.

126
"Está bien, no voy a obligarte, pero me encantaría que vinieras y simplemente así podamos
disfrutar de una noche de fiesta con las chicas", la chica pronto-a-ser-cumpleañera hizo un último
intento antes de entrar a las duchas.

"¿Quién se está quedando con Lara en este momento mientras estás aquí?", Lauren preguntó con
un dejo de vacilación antes de encontrarme con su mirada. Esos malditos orbes esmeraldas tenían
algún efecto hipnótico sobre mí a veces. Sentí que se me apretó la garganta y la boca se me secó a
pesar de que no estaba haciendo nada más que mirarme. Sin embargo, la expresión de sus ojos
hacía que mi corazón saltara. ¿Fue sólo en mi cabeza o ella me miraba más cariñosamente
últimamente?

"Ella está con Ariana", respondí después de tragar el nudo de la garganta.

"Claro", ella asintió con la cabeza y parecía inexplicablemente incómoda con mi respuesta. Sus
ojos se posaron en el suelo y una parte mí casi pensó que estaba celosa. "Bueno, entiendo que no
quieras dejar a Lara con demasiado frecuencia. Así no te sientas presionada a venir a la fiesta.
Kristie es sólo un poco cargante pero no tendrá nada contra a ti si no vas", la chica más mayor
continuó en voz baja. Estaba empezando a recordarme a la chica que había conocido en el equipo
juvenil. La expresión dura pareció disolverse lentamente mientras nos acercábamos más. Por
mucho que odiara admitirlo, me encantaba ver ese lado más auténtico y tierno de Lauren. Fue una
de las razones más importantes por las cuales me había enamorado de ella en ese entonces.

"Gracias", le respondí y simplemente sonreí. Ella hizo lo mismo antes de regresar a su lugar en el
camarín. Tomando otra respiración profunda, me recordé a mí misma de la situación en que yo
estaba. Estaba siguiendo adelante, me repetí internamente.

********************************************************************************

Era bastante patético pero desde que nació Lara, no nos separábamos mucho. Después de haber
llegado ayer de Kansas, no la había dejado sola por un solo segundo para recuperar el tiempo
perdido. A ella no pareció importarle tanto como a mí. ¿Cómo yo iba a ser más dependiente que
una niña de tres años? La pequeña estaba dormida tomando una siesta antes de que nos
fuéramos al parque a jugar. Tenía mucho tiempo para mí y mientras que yo probablemente
debería haber estado disfrutando, me aburrí después de 20 minutos. Como he dicho: patético.

Decidí desempacar las últimas cajas cuando oí el timbre de la puerta. Supuse que sería Ariana pero
ella estaba trabajando y decidimos reunirnos en el parque. ¿Tal vez ella había salido antes de
tiempo? Corrí a la puerta para que el timbre no sonara de nuevo y posiblemente despertara a
Lara. Abriendo la puerta rápidamente, me quedé boquiabierta.

Mis padres estaban de pie en el pasillo y sentía que mi corazón estaba teniendo una gran
zambullida. No los había visto en meses después de que prácticamente me habían corrido y mi
pulso se fue por las nubes con tan sólo mirarlos.

127
"Hola", mi padre habló mientras yo todavía estaba congelada. "¿No vas a invitarnos?", me hice a
un lado sin decir una palabra para permitirles entrar. El hombre mayor frotó mi brazo mientras
pasó frente a mí antes de que mi madre me diera un abrazo que no correspondí. No estaba segura
de lo que estaba pasando y necesitaba un momento para recuperarme del shock. Ellos
inspeccionaron el departamento antes de tomar asiento en la sala de estar.

"Camila, ¿Por qué no has desempacado todavía?", preguntó mi madre cuando me uní a ellos en la
sala y me senté en el otro extremo del sofá en forma de L.

"¿Es por eso que vinieron aquí? ¿Para seguir quejándose?", disparé el primer tiro porque sentía
una ira incontrolable.

"No estamos aquí para discutir", mi padre interfirió. "Queremos que tú y Lara vuelvan a casa con
nosotros."

"Es una broma, ¿Verdad?", mis ojos se abrieron con incredulidad. "¿Quieres que me mude de
nuevo con ustedes después que, básicamente, me echaron a la calle? De ninguna manera en el
infierno."

"Cuida tu lenguaje, Camila", la voz masculina me reprendió inmediatamente. "Es posible que
hayamos cometido algunos errores. Todos lo hacemos, pero creo que esto no es correcto. Tú y
Lara deberían volver a casa con nosotros. Austin dijo que estaba muy preocupado."

"¿Has hablado con Austin?", yo estaba más allá que enfadada. Ellos no hablaron conmigo, ¿Pero sí
con el chico que era tan responsable de mi situación si no más?

"Él es un buen hombre, Camila", dijo mi padre, y esto tenía que ser una broma.

"Oh, Dios mío", dije para mis adentros y sacudí la cabeza.

"Él vino aquí para llevarte a casa y luchar por ti."

"¿Lo apoyaste para que hiciera eso?", pregunté y miré a mi madre.

Sus ojos lo decían todo. "!Increíble! ¿Cómo pudiste perdonarlo después de todo lo que hizo? Si
estás tan metidas en tus creencias, entonces, ¿Qué pasa con la parte dónde él rompió sus votos y
me engañó varias veces?"

"Austin vino a nosotros y pidió perdón", el hombre respondió y detecté algún reproche en sus
palabras.

"Y yo no lo hice, eso es lo que estás diciendo", concluí.

"Podrías haber trabajado en las cosas antes de tomar la decisión de pedir el divorcio y..."

128
"¿Y qué? ¿Humillarme más?", mi voz sonó más dolida de lo que quería. "Confía en mí que nunca
olvidaré lo mucho que he hecho eso. Tus últimas palabras fueron que yo era una vergüenza para la
familia."

"Pero podemos arreglar eso si vuelves a casa con nosotros", siguió argumentando su punto, pero
fuimos interrumpidos de nuevo con otra llamado a la puerta. ¿Qué demonios estaba pasando
hoy? Me levanté inmediatamente y necesité algunos segundos para recuperar mi compostura.
Esto no iba a terminar bien.

Al llegar a la puerta una vez más, mi corazón dio un vuelco cuando vi a Lauren. ¡Hoy ha sido sin
duda un domingo rarísimo! Estaba sonriendo casi con timidez, mientras que vi que llevaba un
cuaderno de dibujo en una mano. Me quedé sin palabras.

"Hey", dijo la chica con más edad. "Pensé en darte una sorpresa y tal vez echar un vistazo a tu
departamento. Es audaz, lo sé, pero tenía muchas ideas y no podía dejar de pensar en ellas. ¿Es un
mal momento?"

Yo quería responder, pero las palabras no salían. En cambio sólo la miré y vi que sus ojos
demostraron más inseguridad con el pasar de los segundos. Fue sin duda audaz que haya venido y
no podía evitar la sensación de que ella estaba tratando de arreglar las cosas después de que yo
había estado distante los últimos días. Si ya no estuviera tan estresada, estaría encantada pero la
idea de mis padres era una distracción.

"¿Camila?", preguntó lentamente. "Lo siento, esto fue una estupidez. Debería haber llamado."

"No, no es eso", finalmente hablé y respiré profundamente. "¿Me puedes hacer un favor?"

"Um... seguro", dijo Lauren sin saber siquiera lo que estaba pensando.

"Entonces entra y... juega", tuve una idea y la vi siguiéndome en silencio. Mis padres parecían
confundidos cuando vieron a mi compañía y nos observaron con escepticismo. "Creo que es hora
que se vayan. Mi amiga y yo tenemos planes y creo que no tenemos nada más que discutir de
todos modos."

"Tenemos mucho que discutir, hija. Tu amiga puede volver en otro momento", la voz de mi padre
se llenó de ira y yo sabía que se había sentido despreciado, tan pronto como se levantó.

"Preferiría que se fueran porque no volveré a casa con ustedes y no quiero pelear sobre eso", dije
de vuelta mientras que él se acercó a hablar conmigo sin distancia entre nosotros.

"Escucha, este no es el ambiente adecuado para ti. La gente habla en casa y-"

"Eso es lo que te preocupa", me burlé y lo interrumpí. "Ustedes no se preocupan por mí o por


Lara. Todo lo que les importa es su reputación. Siento ofenderlos aún más, pero estoy feliz aquí."

129
"!No voy a aceptar eso, Camila! Y no me gusta la forma en me estás hablando y mucho menos
interrumpiéndome. Este no es el entorno adecuado para criar a un niño. Además, tú sólo estás
corriendo y persiguiendo una pelota-"

"¿Persiguiendo una pelota?", no podía dejar de interrumpirlo porque estaba tan desconcertada.
"¿Así lo llamas? ¡Yo lo llamo ganarse la vida y proveer a mi hija después de que mis propios padres
me echaron!"

"!No me levantes la voz! Tienes que respetarme", el hombre seguía aumentando su enojo.

"Bueno, entonces, tal vez usted deba hacer algo digno de respeto", oí de pronto a la joven junto a
mí hablar. Hasta ahora me había olvidado de que estaba siendo testigo de esto, pero ella sonaba
igual de enojada como yo. Miré a mi lado para ver sus ojos verdes ardiendo de furia y mirando
fijamente a mi padre.

"¿Perdón?", él estaba claramente sorprendido por mi amiga que salió a mi defensa. "¿Quién eres
tú para juzgarme a mí y a mi familia? Lo sé todo sobre ti y esas otras mujeres. Austin me lo dijo
todo. ¡Y es por eso que no quiero que Lara crezca en torno a estas... perversidades!"

"!¿Qué?!", exclamé en mezcla de sorpresa y vergüenza de que mis padres fueran tan cerrados de
mente. "¿Estás diciendo lo que creo que estás diciendo?"

"Sí, ¡No quiero que mi nieta crezca en torno a esas abominaciones!"

"¿Quién eres tú para darme consejos de crianza? Yo, obviamente, resulté ser la enorme decepción
así que tu crianza fue jodidamente una mierda", le respondí con más rabia que nunca había
sentido antes en toda mi vida antes de que sintiera una fuerte mano masculina pegarme con toda
su fuerza. No era la primera bofeteada que había recibido de él, pero sin duda fue la más fuerte.

"!Ya es suficiente!", oí a Lauren y sentí que dio un paso delante de mí para protegerme. "Te vas
ahora mismo o llamo a la policía, lo digo en serio."

Mi mejilla ardía y me sentía más humillada que nunca. El hecho de que mi compañera de equipo
tuvo que ver cómo era la mentalidad de mi padre, me hizo sentir aún más avergonzada. Por no
hablar de que me había golpeado justo en frente de ella. Me tomó un segundo, pero me di cuenta
de que Lauren estaba sosteniendo mi mano mientras seguía de pie delante de mí haciendo que
mis padres se fueran. Ni siquiera podía mirar a nadie y lo único que escuché fueron pisadas
dejando el departamento a toda prisa.

"Camila, ¿Estás bien?", su voz sonaba preocupada y casi con pánico lo cual me trajo de vuelta de
cualquier trance.

"Estoy... bien", apenas dije y no había notado que estaba a punto de llorar. Aun mirando el suelo,
sentí que la otra morena tocó muy suavemente mi mejilla.

130
"Está muy roja... ¿Te duele?", preguntó ella y por alguna razón sentí más lágrimas hinchando mis
ojos después de esas últimas palabras. La primera gota salada ya corría por mi mejilla adolorida
cuando levanté la mirada. Cuando me encontré con los orbes esmeraldas, me sentí tan impotente
ante la situación a pesar de que debería intentar de 'no dejarla entrar de nuevo'. Sus ojos tenían
tanto afecto y ternura que no pude evitarlo y la dejé entrar.

"Ni siquiera poder explicar con palabras lo mucho que duele", le dije, y claramente no estaba
hablando sólo sobre mi mejilla. Las expresiones faciales de Lauren cambiaron y por un momento
pensé que iba a llorar también. Los cálidos ojos verdes resplandecieron ligeramente, pero no pude
ver nada más porque ella me tomó entre sus brazos suavemente.

No quería, pero no pude detenerme y dejé que me consolara. Mi cuerpo parecía encajar
perfectamente con el de ella cuando apoyé la cabeza en su hombro. Sus manos con dulzura
estaban frotando mi espalda o acariciaban mi pelo, lo que parecía demasiado íntimo para un
abrazo entre amigos, pero no importaba en este momento. Todo lo que sentí fue alivio y
liberación de que alguien estaba allí para atraparme. Sin embargo, el hecho de que ese alguien era
Lauren lo hizo más especial. Apreté la tela de su camisa y deje caer las lágrimas, porque no había
ninguna razón para detenerlas más.

"Lo siento mucho, Camila", la oí susurrar, pero no pude responder debido a mis sollozos. "Me
hubiera gustado saber por lo que estabas pasando. Debe haber sido muy duro. No puedo ni
imaginarlo."

Sus palabras eran sinceras y, por primera vez, me sentí verdaderamente comprendida. Ella me
hizo sentir muy segura en este momento donde tenía la guardia. Me tomó un tiempo, pero me las
arreglé para calmarme y separarme a pesar de que ella me abrazaba con fuerza lo cual había sido
el único sentimiento más increíble que había tenido en mucho tiempo. Me sequé las últimas
lágrimas rápidamente y tomé una respiración profunda antes mirarla una vez más. Ella sonrió con
mucha suavidad, con la esperanza que yo estuviera mejor.

"Lo siento, yo no sé por qué decidí meterte en este lío", mi voz seguía siendo inestable, pero más o
menos estable.

"No, estoy feliz que lo hayas hecho", ella me sorprendió con esa respuesta. "Creo que tenía que
ver esto", añadió Lauren en voz más baja y fruncí las cejas.

"¿Qué? ¿Por qué?"

"Debido a que he hecho y dicho algunas cosas por las cuales realmente no estoy orgullosa
últimamente y... esto sólo me demostró que yo estaba muy mal por lo que te hice. Sé lo que
hicimos y estamos empezando de nuevo, pero creo que finalmente me di cuenta de que yo no era
la única que resultó herida en ese entonces. Crecer con tus padres debe haber sido muy duro y me
siento tan mal por contribuir a cualquier dolor en las últimas dos semanas. Yo realmente,
realmente me siento como el mayor gilipollas", me derribó por completo con esa confesión
honesta.

131
"No tienes que sentirte mal. Yo no te di la oportunidad de saber lo que estaba pasando en ese
entonces y lo que pasó últimamente, las cosas que nos trajeron aquí. Y me alegro de que estemos
aquí", dije silenciosa y no me di cuenta de que todavía estábamos tan cerca y, esencialmente,
estábamos mirando profundamente los ojos del otro.

"Me alegro de que estemos aquí también", susurró con una sonrisa que fui capaz de corresponder
ahora. Sentí mi corazón palpitar y bombear violentamente en mi pecho y la tentación de hacer
algo estúpido estaba allí. Pero no me rendí y rompí nuestro contacto visual.

"Iré a lavarme muy rápido", le dije y ella asintió con un leve suspiro.

Desaparecí en el baño y me miré en el espejo primero. ¡Gran error! Me veía como un desastre. Mi
mejilla seguía roja y tenía los ojos hinchados de tanto llorar. Sin embargo, el agua fría hizo
maravillas. Me dolió un poco en la parte dolorida de mi cara, pero use un poco de base para
ocultar el tono rojo. Me miré y me sentí mucho mejor después de unos minutos. No queriendo
dejar a Lauren sola por mucho tiempo, caminé de regreso a la sala antes de darme cuenta que ella
no estaba sola.

"Tu mamá se pone triste a veces como todos los demás. Pero ella está bien y va a estar bien, te lo
prometo", oí la voz de Lauren y miré desde la esquina. Mi compañera estaba sentada en el sofá
con Lara en su regazo. Esa imagen sólo causo otro alboroto en mi pecho. Al principio me sentí mal
porque Lara, obviamente había oído o visto algo por lo que ella sabía que yo estaba molesta. Pero
Lauren estaba haciendo un buen trabajo al calmarla al igual que lo había hecho por mí antes.

"Ella siempre está ahí para mí cuando estoy triste", la niña dijo cariñosamente y no pude dejar de
'espiarlas', ya que no se habían dado cuenta de mi presencia.

"Y ella sabe que tú siempre estarás allí para ella también", Lauren besó la mejilla de Lara, como si
estuviera acostumbrada a hacerlo.

"¿Qué es esto?", la más pequeña señaló el cuaderno de dibujo en la mesa de café.

"Ese es mi cuaderno de dibujo. ¿Te gusta dibujar?", la de ojos verdes preguntó con curiosidad y
Lara asintió frenéticamente.

"¿Eres buena en el dibujo?", mi hija preguntó y la admiración era obvia ya.

"Algo así", Lauren respondió humildemente pero yo sabía que ella era excelente si ella iba a ser
una arquitecta.

"¿Vas a dibujar algo para mamá para hacerla sentir mejor?"

"Claro, ¿Qué quieres que le dibuje?", el volante abrió su cuaderno de dibujo y sacó un lápiz de su
bolso. Colocó el papel blanco en su rodilla derecha, mientras Lara estaba sentada en la izquierda.
Yo nunca había visto algo más entrañable en mi vida. Me encantaba la forma en que Ariana y Lara

132
interactuaban pero la interacción entre Lauren y Lara era aún más especial por alguna razón. Su
conexión era fresca, pero se sentía como si tenían un vínculo desde hace mucho tiempo.

"Un conejito", Lara se rió y vi a Lauren elevar una ceja de esa manera típica de ella.

"¿A ella le gustan los conejitos?"

"Sí, siempre vemos Bugs Bunny juntas", la pequeña explicó con total naturalidad.

"Ah, claro", Lauren respondió con la misma seriedad y empezó a mover su mano en la hoja. Yo no
podía ver lo que estaba dibujando pero mirando los ojos de Lara llenos de adoración era todo lo
que quería ver de todos modos.

"Tienes que ayudarme aquí, Lara. No he visto a Bugs Bunny en mucho tiempo", el otro jugador se
rascó la cabeza con el lápiz por un segundo.

"Las orejas tienen que ser más grandes y tiene una zanahoria todo el tiempo", me hija se apresuró
a decir más detalles, y yo no podía borrar esa sonrisa mientras observaba a Lauren luchar con
claridad.

"Noooo", Lara se rió más fuerte. "!No, sus orejas son tan flexibles, panqueques!"

"Tienes unos estándares altos", Lauren se rió también, pero dio otro beso en la cabeza de la niña
antes de continuar dibujando. "¿Algo así?", le preguntó después de unos minutos de haberse
concentrado sólo en el papel.

"!Es muy bueno! Eres realmente buena en el dibujo", la niña de tres años reconoció con un breve
aplauso. "¿Vas a dibujar algo para mí también?"

"Todo lo que quieras", dijo la joven sin dudarlo, pero tuve que intervenir porque peligrosamente
estaba a punto de meterme a un nivel superior que no era bueno para cualquiera que estuviese
involucrado en algo así.

"¿Qué están haciendo?", pregunté inocentemente mientras caminaba hacia ellas.

"!Mira mamá! Panqueques hizo esto para ti", Lara tomó el papel del block de dibujo y corrió hacia
mí. Cuando me entregó el dibujo, me quedé muy sorprendida de ver lo bueno que era. Algunos
detalles no eran exactos porque ella no había visto la figura de la historieta en un largo tiempo.
Pero era innegable que Lauren tenía mucho talento. Sonreí ampliamente y vi a la chica de pie
junto al sofá.

"Wow, eso es increíble. Gracias a las dos", le dije y sentí un pequeño tirón en la pierna, lo que
indicaba que ella quería que la tomara en brazos. Lo hice y vi a mi compañera de equipo guardar
sus cosas por alguna razón.

"Probablemente debería irme", Lauren se sorprendió un poco cuando me acerqué a ella.

133
"No tienes que hacerlo", espeté, y nuestros ojos se encontraron de nuevo y por un momento se
creó esa extraña tensión entre nosotras.

"Creo que es mejor si lo hago. Lara dijo que quería ir al parque y ya le di una buena mirada al
departamento. Tal vez pasaré en algún otro momento para obtener más detalles... y avisaré
antes", aclaró, pero yo no quería que ella pensara que se estaba imponiendo.

"Eso es estupendo, Lauren", traté de apaciguarla mientras ella parecía más y más ansiosa.

"Te veré en la práctica de todo modos", la chica más mayor sonaba extrañamente nerviosa. ¿Me
estaba perdiendo algo? "Oh, espera, antes de que me olvide", añadió y sacó algo pequeño que
parecía un regalo. "Toma, esto es para ti", Lauren le entregó a Lara el presente envuelto.

"YAY, ¿Puedo abrirlo?", mi hija gritó en voz alta.

"Hazlo cuando me haya ido. No me gusta estar alrededor cuando la gente abre mis regalos por
alguna razón", la de ojos verdes declaró.

"Lara, ¿No estás olvidando algo?

"Gracias, Lauren", la niña de tres años, entendió al instante, pero extendió sus brazos de forma
inesperada. Al parecer, Lauren sabía qué hacer y acortó la distancia entre ellas. Lara abrazó a mi
amiga y la oí picotear la mejilla de la chica mayor antes de dejarla ir. No estaba segura de lo que
me estaba pasando en este punto, pero oírla decir finalmente el nombre de mi compañera de
equipo, me estaba volviendo malditamente loca.

"De nada", la morena dijo de vuelta rápidamente y cogió su bolso. "Te veré por ahí."

"Te acompaño a la puerta", le ofrecí pero ella estaba un paso por delante.

"No, está bien. Sé cuál es la salida. Abre el regalo y vayan... al parque", dijo Lauren y casi tropezó al
salir porque no podía salir lo suficientemente rápido como quería. La vi todavía desconcertada
¿Por qué estaba tratando de salir corriendo fuera de mi departamento? pero ella se había ido
antes de que me diera cuenta. El sonido del papel del presente no abierto no me permitió
sumergirme en mis pensamientos. Lara abrió el regalo y suspiré en voz baja.

"Mami, ¿Qué dice?", preguntó la voz aguda. Ella estaba sosteniendo una camiseta de Boston
Breakers. Sabía que no hacían camisetas en ese tamaño porque yo había preguntado antes.
Lauren obviamente había hecho algo especial para conseguirla. Mirando la parte posterior de la
tela, estaba segura de que el encargo debió de ser muy importante por el estampado.

"Dice 'Mini CC7' en la espalda", leí en voz baja.

"¿Qué es CC7?"

"Ese es un apodo que algunas personas tienen para mí y supongo que Lauren te ve como una
pequeña versión de mí",le expliqué más para que ella pudiera entender.

134
!Ella me dijo que era muy buena en el fútbol cuando jugamos juntas! ¡Ayúdame a ponérmela, por
favor!", ella se balanceó en mis brazos y necesité de un momento para digerir lo sucedido. Había
sido una tarde llena de acontecimientos, pero todo lo que oía era la voz de Ariana en mi cabeza:
No la dejes entrar de nuevo.

Dios, lo estaba intentando, pero ella no me estaba haciendo las cosas fáciles, ¿Verdad?

********************************************************************************

Tal vez esto se convertiría en un gran error, pero había decidido ir al a fiesta de cumpleaños de
Kristie, después de todo. Después de que Lauren había estado en mi departamento hace dos días,
estuvimos bien durante la práctica y no estaba segura de por qué ella estaba actuando tan
extraño. Pero no quería seguir pensando en ello. No se trataba de Lauren. Se trataba de Kristie y
tener una buena experiencia con todo el equipo.

Estaba nerviosa, pero también emocionada, ya que no tenía que preocuparme por nada. Lara
estaba durmiendo en casa de una amiga así que no estaba preocupada de que me fuera a echar de
menos. Fue en parte la razón por la que decidí asistir de todos modos. Yo no sabía que hacer
conmigo misma cuando la niña de tres años no estaba cerca.

Por lo tanto, había conseguido ciertas prendas ya que nunca había tenido la oportunidad de usar
algo así antes. Llevaba un vestido azul marino apretado que me hizo sentir más segura. Había
ondulado mi pelo y llevaba más maquillaje para sentirme como una chica de veinte años edad,
normal, que iba a salir con sus amigas; no una madre soltera. Sólo por una noche.

Cuando me acerqué a la chica que trabajaba la puerta, le dije mi nombre y de hecho estaba en la
lista de invitados. Recordando las palabras de Lauren, examiné a la chica rubia que trabajaba en el
club y no podía dejar de preguntarme cómo ellas dos se conocían entre sí. Ella probablemente era
una de las supuestas 'víctimas' de las formas de seducción de Lauren. Había conseguido un sabor
de esas formas en New York a pesar de que yo había iniciado para ser honesta. Sin embargo, lo
que ella me había hecho esa noche era bastante memorable en mí y no podía culpar a nadie por
haberme enamorada de ella, ¿Verdad?

¡Pero no se suponía que debía estar pensando en eso! Tratando de alejar esos pensamientos,
entré al club y tuve un rato difícil ya que no podía ver nada, y mucho menos a mis compañeras de
equipo. Estuve dando vueltas por un buen rato hasta que vi una cara familiar en la pista de baile.

Mi corazón empezó a bombear con fuerza cuando le di un primer vistazo a Lauren. Ella estaba
completamente vestida de negro. Era la primera vez que la veía con tacones. Los pantalones de
cuero acentuaban sus piernas perfectamente tonificadas mientras que su parte superior revelaba
bastante escote. Ella no estaba demasiado lejos y la vi mover sus caderas violentamente al
unísono con el ritmo. Mientas la canción seguía sonando, me di cuenta que llevaba un poco de

135
lápiz labial rojo que hacía juego con sus uñas pintadas del mismo tono. Nunca la había visto tan...
femenina. Tragué saliva ligeramente, ¡Necesitaba un trago!

Haciendo mi camino hacia el bar, bebí mi primer trago antes de pedir el segundo. Mi pulso seguía
proliferándose cada vez que me acordaba de la imagen de mi atractiva compañera de equipo pero
me había calmado lo suficiente para finalmente acercarme a las chicas. Todas gritaron y chillaron
cuando me acerqué y Kristie me abrazó por más tiempo de lo común. Ella ya estaba borracha,
pero eso era de esperarse. La felicité varias veces hasta que me soltó después de un tiempo.

"Viniste después de todo", oí una voz ronca a mi lado y vi a Lauren cerca.

"Um... sí, fue una decisión espontánea", casi tartamudeaba y la vi sonreír.

"Bueno, me alegro de que hayas venido", dijo con sinceridad antes de tomar un sorbo de su
bebida. Fue por casualidad, o tal vez no totalmente por accidente, pero mis ojos cayeron por un
momento y siguieron la gota de sudor que bajó por su cuello y luego escote. Mis mejillas ardían
cuando me di cuenta de que estaba mirando su pecho. Levantando los ojos, me encontré con los
orbes esmeraldas que, obviamente, me habían pillado. Me quería morir allí mismo, pero vi a
Lauren sonriendo al mismo tiempo. Ella estaba disfrutando esto.

"Victoria Secret", de repente dijo como se pasó una mano por su pelo grueso.

"¿Qué?", le pregunté confundida y había un ligero temblor en mi voz.

"El sostén que parece que te gustó tanto", Lauren se rió entre dientes y mis ojos se abrieron con
una mezcla de sorpresa y vergüenza.

"Yo no estaba- quiero decir... no fue mi intención...", balbuceé como una idiota y sentí que apretó
mi brazo suavemente.

"No estés tan nerviosa. No es nada que no hayas visto antes", siguió haciendo bromas y yo no
estaba segura de si estaba soñando o ella sólo estaba borracha como Kristie. Sus ojos vidriosos
indicaron que definitivamente estaba intoxicada y tenía que admitir que esta era una nueva faceta
de ella que nunca había visto antes. Empecé a entender por qué ella tenía cierta reputación de
incluso hacer a las chicas heterosexuales cuestionarse su sexualidad. Su sensualidad y encanto no
estaban en estado de extinción esta noche y tuve problemas para concentrarme en otra cosa que
no fuera en la belleza de pelo oscuro.

"¿Cuántos tragos has bebido?", pregunté después de unos segundos para recuperarme.

"Unos pocos", ella sonrió otra vez y me di cuenta de que estaba ebria con seguridad. Una parte de
mí estaba decepcionada de que Lauren tenía que beber mucho para estar cómoda a mí alrededor.
Bueno, tal vez eso no era tan malo, porque no estaba segura de si iba a ser capaz de manejar su
coquetería conmigo todo el tiempo.

136
"¿Unos pocos?", repetí, pero no pude ocultar una sonrisa. "¿Qué significa eso en una escala del 1
al 10 de embriaguez?"

"Mmmm... probablemente estoy a pocos menos de un trago para sacarte a bailar conmigo", mi
compañera de equipo me seguía mirando con esos ojos verdes, ¡Como si estuviera a punto de
saltar sobre mí!

"¿En serio?", me reí un poco nerviosa y di un gran trago de mi propia bebida. "No creo que puedas
manejar mis movimientos", obviamente bromeé.

"¿Eso es verdad?", esos labios rojos lascivos se fruncieron ligeramente antes de que pasara su
lengua sobre ellos. "Vamos a ver lo que tienes."

Ella elevó sus cejas desafiante y pude sentir mi corazón cerca de una explosión. Había otra
sensación prominente que me estaba causando una confusión interna. Nunca antes me había
sentido tan atraída físicamente por alguien y me estaba empezando a cuestionar mi cordura en
este momento porque tenía miedo de saltar realmente sobre ella. Austin era atractivo y pensé que
era lindo cuando nos conocimos, pero esto era completamente diferente a todo lo que había
sentido antes.

Los recuerdos de lo que había pasado en New York comenzaron a infiltrarse en mi cerebro una vez
más y mi boca se sintió completamente seca. Esto no era lo que había planeado, cuando yo había
venido aquí, pero ahora tenía que salir de ese lío. Mis palmas sudaban y odiaba admitirlo pero
Lauren elevó mi temperatura mirándome con esos ojos de desarme.

"!Camila!"

Las imágenes vívidas en mi cabeza fueron afortunadamente interrumpidas por alguien llamando
mi nombre. Me di la vuelta para ver a Ariana sonriéndome y caminando hacia mí. Ella había estado
trabajando en el restaurante, pero yo la había invitado a juntarse conmigo después de que su
turno hubiera terminado. Al parecer, ella había tomado mi oferta y me sentí aliviada y
decepcionada al mismo tiempo cuando la vi.

"Hey", la saludé con un beso en la mejilla y vi que Lauren había desaparecido en el ínterin.

"Hola, te ves increíble", mi antigua compañera de trabajo de inmediato me halagó y sentí mis
mejillas sonrojadas quemándose mucho más.

"Gracias, tú igual", dije de vuelta y miré su linda vestimenta. Ella estaba más tapada que de
costumbre, y aun así todavía tenía esa extraña sensación en mí. Era una mezcla de lujuria y deseo
que no era muy familiar para mí. No estaba acostumbrada a estar tan... ¿Cachonda? Dios, eso
sonaba horrible incluso en mi cabeza. Sentía como si Lauren me había dado una idea de algo que
ni siquiera yo sabía que existía. Yo sólo había estado con una persona aparte de ella. A pesar de
que la existencia de Lara podría indicar lo contrario, Austin no había sido el mejor amante. Claro,

137
no había sido experimentada antes, y no tenía con quien compararlo, pero lo que fuera que mi
compañera había despertado, no se estaba apaciguando.

Ariana y yo terminamos tomando unas copas compartiendo un buen rato. Hice un esfuerzo para
mantenerme alejada de Lauren. Yo estaba achispada y un poco borracha, pero no al punto de no
estar consciente de lo que estaba pasando. Observando a Lauren contoneándose en la pista de
baile una vez más me envió hacia el borde. Tomé la mano de Ariana y la arrastré hasta el baño de
mujeres conmigo.

"¿Qué estás haciendo?", se rió ella, evidentemente sorprendida cuando la acerqué hacia uno de
los retretes.

"No se hable más", dije, y tomé su cara entre mis manos. Vi sus ojos muy abiertos antes que
cerrara los míos y finalmente le di un beso. Este definitivamente no era el lugar más romántico,
pero en este punto estaba desesperada. El beso fue un poco descuidado al principio pero
apasionado. Sentía cada fibra de mi cuerpo con ganas de más y eso me sorprendió más que nada.
Apoyada contra la pared, me acerqué aún más a ella.

Sus labios se posaron en mi oreja y cuello mientras yo gemía en voz baja. Cual fuera mi control que
por lo general tenía, claramente ya no estaba. No estaba segura de por qué sucedió eso ¿Fue por
mis padres y esas ganas de rebelarme inconscientemente? ¿Fue por Lauren y el hecho de que ella,
fácilmente, me encendió? ¿Fue por la expectación acumulada entre Ariana y yo? Sinceramente, no
lo sabía. Todo lo que pensaba era que quería más. Mi mano se cerró alrededor de su muñeca y la
guié por todo mi cuerpo. Las dos nos quedamos sin aliento cuando llegó a la parte punzante entre
mis piernas.

"!Oh, Dios mío!", de repente oí a alguien gritar como la puerta se abrió y pensé que estaba
experimentando un ataque cardíaco. Ariana retrocedió instintivamente y me sentí aún más
humillada cuando me di cuenta que era Lauren la que nos había pillado. En mi prisa por comenzar
las cosas, aparentemente, se me había olvidado cerrar la puerta con seguro lo cual me causó un
momento muy incómodo.

"Yo... lo siento... yo no...", la de ojos verdes tartamudeó antes de encontrarse con mi mirada. El
corazón me dio otro golpe, porque ella parecía realmente herida. Eso fue una locura. Ella estaba
saliendo con alguien más. Alguien perfecto. No había manera de que ella estuviera celosa.
Entonces, ¿Por qué me estaba mirando de esa manera?

"Está bien... no estábamos... uhm...", traté de articular algo, pero no estaba segura de lo que
estaba diciendo.

"Sí, me iré...continúen...", ella cerró los ojos después de ese último comentario como si tuviera
alguna dolencia física. "Quiero decir, diviértanse... o no... sí, creo que tengo que ir a casa porque
creo que me voy a enfermar. Debido al alcohol", mi compañera de equipo divagó y su aclaración al
final me tenía preguntándome el por qué estaba diciendo eso. ¿La imagen de Ariana y yo le causó
malestares estomacales?

138
"¿Necesitas ayuda para llegar a casa?", Ariana intervino inesperadamente y eso hizo las cosas más
confusas para mí.

"!No! Estoy bien, pero gracias", Lauren dijo rápidamente y retrocedió. Me recordó a la vez que
había tratado de irse a toda prisa de mi departamento hace dos días. Antes de darme cuenta, ella
se había ido una vez más y me quedé preguntando por qué estaba actuando tan raro a veces.

Fuera cual fuera su razonamiento, hice un esfuerzo consciente para dejar de pensar en ella. Había
una parte de mí que no podía seguir adelante, y se quedó atrapada de nuevo en mis sentimientos
por Lauren. Tomé una respiración profunda y repetidamente me dije que tenía que dejarlo ir y
centrarme en la persona que estaba conmigo todavía y que estaba haciendo todo lo posible para
estar conmigo.

Ojalá las cosas fueran tan simples.

=================

Capitulo 9
Lauren's POV

Saliendo a tropezones del cuarto de baño en el club nocturno lleno de gente, había una muy vívida
imagen ocupando mi mente todavía. Haber pillado a Camila y Ariana, definitivamente estaba
clasificado en el lugar más alto de mi lista de momentos embarazosos-o incluso momentos
incómodos. Ahora, no estaba segura de por qué me sentía mal del estómago: por el alcohol o por
el hecho de que acababa de ver la mano de Ariana en las bragas de Camila. Sacudí la cabeza
rápidamente, tenía que salir de ahí.

Mi marca fue impecable como siempre. Tuve que usar el baño justo cuando mi compañera estaba
caliente y mucho con su nueva novia. Por no hablar de que esto tenía que suceder ahora; ahora
que yo había estado tan confusa los últimos días después de mí encuentro con Camila y sus
padres. Por alguna razón, ese día había despertado algo en mi cabeza. Sin embargo, parecía ser
todo para nada.

Vi a mi amiga y cumpleañera en el bar.

"Kristie", me dirigí a ella ligeramente sin aliento después de haber salido del cuarto de baño. "Me
iré, ¿De acuerdo? Fue muy divertido, pero estoy demasiada borracha y tengo la necesidad de
llegar a casa."

"¿Puedo ir contigo?", preguntó ella, sorprendentemente, mientras yo me quedé escéptica. "!Por


favor! Estoy tan borracha y tu departamento está a la vuelta de la esquina... por favor", dijo la de
ojos azules, arrastrando las palabras, pero suspiré porque no negaría su deseo, obviamente.

139
Kristie estaba, de hecho, más borracha que yo, pero nos las arreglamos para llegar a mi
departamento que no estaba muy lejos. Nos costó tres veces más llegar pero lo importante era
que estábamos a salvo. Y no pasó mucho tiempo para que mi amiga hiciera su camino hacia mi
habitación. Su cuerpo exhausto cayó sobre el colchón mientras yo la miraba fijamente.

"Así que, ¿Supongo que me quedo con el sofá entonces?", llegué a la conclusión, pero ella se sentó
rápidamente.

"No, ven aquí", la rubia dijo despreocupadamente. Por lo general, yo era una gran fan de dormir
fuera de casa, pero estaba tan cansada y la cama era mucho más cómoda que el sofá. Así que
tomé una decisión rápidamente, ya que a mi amiga no le importaba compartir la cama. Yo no
estaba segura de si ella se iba sentir cómoda estar aquí conmigo pero ella estaba más relajada de
lo que pensaba. No a todas las chicas les gustaba dormir en una cama con una lesbiana.

"Esta noche fue muy divertida", dijo arrastrando las palabras perezosamente cuando yo había
tomado mi lugar en el otro lado de la cama, ninguna de las dos molestándonos en cambiarnos.
Sólo nos sacamos los zapatos y nos tapamos. "¿Cierto? ¿Todo el mundo se divirtió?"

"Algunos más que otros", espeté.

"¿Qué quieres decir? ¿Qué no te has divertido?", Kristie sonaba ofendida.

"No, me lo pasé genial. Fue asombroso, pero...", vacilé y miré a mi amiga que me observaba
tranquilamente. "Sólo estoy diciendo que algunas personas tuvieron más diversión que otras."

"Corta el rollo misterioso, Lauren", ella sonrió. El alcohol en mi sistema me estaba tentando para
contarle lo que había visto y antes de darme cuenta, mis labios ya se movían.

"Puede que haya sorprendido a Camila teniendo extra diversión en el baño con su novia", le
confesé y vi los ojos de Kristie en shock.

"Wow", exhaló, pero sonó como si estuviera orgulloso de Camila lo cual me molestó aún más. "No
sabía que se tenía eso guardado. Sin embargo, bien por ella. Realmente tengo que echar un polvo
con urgencia también", el otro jugador de fútbol continuó como yo movía la cabeza ligeramente.
"No seas tan crítica, ¿Ok? ¡No todo el mundo tiene a una sexy modelo con quien follar!"

"Excepto que no estoy durmiendo con ella", murmuré y era obvio que mi yo-intoxicado tenía
menos inhibiciones que mi yo-sobrio.

"!¿Qué?! ¿Estás diciendo que no has dormido con Emily?", Kristie parecía tener algún tipo de
placer ante mi revelación.

"Ella quiere tomar las cosas con calma", mis mejillas se sonrojaron un poco antes de que mi amiga
se echara a reír. "¿Qué mierda te pasa? ¿Por qué eso es tan divertido?"

140
"Lo siento", ella seguía riendo. "!Es tan irónico! Cuando estabas soltera, tenías relaciones sexuales
todo el tiempo. Lo sé porque viví contigo lo suficiente. Pero ahora que tienes una novia, ¿No estás
teniendo relaciones sexuales en absoluto? Vamos, eso es un poco divertido."

"Me alegra que mi frustración sexual es al menos útil para tu entretenimiento", rodé mis ojos.

"¿Es por eso que te molesta lo de Camila y Ariana?", su voz fue grave, de repente. Tragué
fuertemente porque sentía sus ojos en mí.

"Puede ser en parte eso", le contesté con voz baja.

"Sabes que puedes hablar conmigo, ¿Verdad? No sé qué demonios está pasando entre tú y Camila
y no quiero entrometerme, pero... si quieres hablar de ello..."

Respiré hondo y miré al techo durante varios segundos. Una parte de mí realmente quería abrirse
porque sentía como si estuviera atrapada en mi cabeza. Y había una posibilidad de que Kristie ni
siquiera recordara esto mañana. No estaba segura de que fuera capaz de darme algún consejo en
cuanto a lo borracha que estaba pero necesitaba dejar salir algunas cosas de mi pecho. Si no podía
confiar en ella, ¿En quién más podría hacerlo?

"Me acosté con Camila", finalmente admití mientras exhalaba profundamente.

"!¿Qué?! ¿Cuándo?", la conmoción era evidente en la voz de mi amiga.

"En New York", dejé salir y la miré con cuidado para ver cuál era su reacción.

"Oh, Lauren", suspiró con simpatía. "Dijiste que nunca saldrías con una compañera de equipo."

"Y normalmente no lo haría", estuve de acuerdo rápidamente.

"Entonces, ¿Qué eso tan especial acerca de Camila?"

Esa fue una pregunta muy profunda. No estaba segura de cómo responder a eso.

"Es una larga historia", le dije, pero Kristie, me dio esa mirada de; 'será mejor que me digas o te
mataré con la mirada'. ¿Desde dónde suponía que iba a empezar? "Bueno, ya sabes que nos
conocimos en el equipo juvenil. Solía tener un enamoramiento en ella. Pero no era demasiado
grave hasta que ella se enteró. Las cosas se pusieron... complicadas. Tuvimos una pequeña
'aventura' durante nuestro último campamento de entrenamiento con ellos y... me enamoré
mucho de ella, para ser honesta. Pero nunca volví a saber nada de ella y decidí ir a verla al cabo de
unos meses. Resultó que ella estaba casada con Austin y embarazada en ese momento. Así que
está demás decir que estaba..."

"¿Acongojada?", la otra chica terminó la frase que yo no pude terminar por alguna razón.

"La siguiente vez que la vi estaba aquí en Boston hace un par de semanas. Había tanta tensión
reprimida y cosas sin terminar en New York. Le dije que lo que pasó no significó nada y de alguna

141
manera decidí que era mejor ser amigas. Ahora yo estoy con Emily y ella con Ariana", hice que mi
explicación fuera corta y no tan detallada pero Kristie entendió el punto o al menos eso suponía.

"Pero entonces... ¿Cuál es el problema? Quiero decir, ¿Las dos están felices con otra persona y
siguen siendo amigas?", cuestionó no comprendiendo y yo tenía miedo de admitir lo que había
estado sucediendo en mi cabeza los últimos días.

"Este fin de semana fui a la casa de Camila y sus padres estaban allí", continué hablando, al no ser
capaz de frenarme esta noche. "Digamos que sus padres no aceptan su estilo de vida. Fue horrible
y hubo una gran pelea. No sé por qué, pero... me hizo cuestionarme si había tomado la decisión
correcta al no darle una segunda oportunidad a Camila. Me di cuenta, de lo que ella había hecho
en el pasado no fue sobre mi o sobre hacerme daño. Ella no había tenido otra opción. Y luego,
básicamente, salí arrancando de su departamento, pero no podía dejar de pensar en eso lo cual
me hizo sentir increíblemente culpable. No he hablado con Emily desde entonces y sigo ignorando
sus llamadas. Es jodido, lo sé. Pero lo peor de todo es que yo pensé que iba a probar esas aguas
esta noche. Por eso me emborraché tan rápido y realmente coqueteé con Camila. Supongo que
quería ver si había algo más que tan sólo ese momento en su departamento."

Me sentí aliviada y culpable después de decir los pensamientos que habían dominado mi cerebro
últimamente. Era extraño ser tan brutalmente honesta pero me gustó que mi amiga no
interviniera y simplemente me dejara hablar.

"¿Y había algo?", preguntó ella en voz baja.

"¿Eso realmente importa después de lo que vi?", le respondí más triste de lo que quería. Había
algo entre Camila y yo. Y tal vez siempre estaría allí, pero tenía que aceptar que todo había
terminado. Yo había tenido mi oportunidad-múltiples oportunidades en realidad pero ella había
seguido adelante y probablemente era lo mejor.

"Lauren, ¿Puedo ser totalmente honesta contigo?", Kristie preguntó y yo asentí. "Creo que tienes
miedo."

"¿De qué?"

"De enamorarte de alguien más", ella se apoyó en un codo. "Estoy segura que tienes sentimientos
de sobra hacia Camila pero ¿Son realmente tan fuertes? Tuviste la oportunidad para estar con ella
y decidiste no hacerlo. Creo que hiciste esa elección por alguna razón y por lo tanto es la correcta.
Has encontrado a alguien a quien realmente le gustas en Emily. Ella incluso llegó a comprometerte
en una relación lo cual es impresionante. Si tú me preguntas, creo que tienes miedo de
enamorarte de ella. Debido a que estás empezando de nuevo y saliste bastante lastimada la última
vez. Si te enamoras de ella, hay una posibilidad de salir herida de nuevo por lo que quieres
arrancar. Arrancar de nuevo hacia Camila; ¡Que no está disponible! Y tú lo sabes... y tal vez esa es
la razón por la que crees que la quieres ahora. Por encima de todo, piensas que le estás haciendo a
ambas un favor al no estar con ninguna cuando en realidad estás siendo un cobarde. No quieres
estar con Emily porque no quieres hacerle daño en caso que tengas sentimientos por Camila; y a

142
Camila tampoco porque está feliz con Ariana. Ves, al final de la historia te quedarás sola sin la
posibilidad de hacerte daño."

Estaba estupefacta.

"Mira, no estoy tratando de presionarte para hacer una cosa o la otra, pero no quiero que pierdas
la oportunidad de algo que podría ser muy bueno para ti. Tal vez Emily y tú terminaran juntas el
resto de sus vidas, pero seamos honestas aquí, puede que no. Y eso está bien también. No todas
las relaciones tienen que ser cuidadosamente manejadas. Ella es una gran chica y si ella quiere
estar contigo entonces es su elección. Eso sí, no tomes todo tan en serio y disfruta el viaje."

Me sentía como si me hubieran dado un cheque de proporciones que no había conocido antes.
Aun así, no fui capaz de responder y simplemente miré a mi amiga, tratando de retener la
información que me había dado. Ella tenía razón, ¿Verdad?

"¿Estás enojada?", ella preguntó consternada.

"No, para nada", le contesté finalmente y salí de mis pensamientos. "Estoy un poco abrumada,
pero... no estoy enojada", añadí con una pequeña sonrisa.

"Te dije que tenías planes de especializarme en la psicología", dijo Kristie sonriendo con aires de
suficiencia.

"Tengo que admitir que estoy un poco sorprendida, porque siempre pensé que te gustaba la idea
de Camila y yo juntas", le hice saber.

"No se trata de Camila. Mierda, ¡La adoro! Y si realmente quieres estar con ella, entonces te voy a
apoyar al cien por cien pero... tengo la sensación de que no estás lista", mi amiga habló en un
susurro mientras suspiré de nuevo. "Uno nunca sabe lo que puede suceder en el futuro, pero no
me gustaría la idea de que arruines algo que podría ser realmente genial, con Emily, por algo que
ni siquiera tienes con Camila. ¿Eso tiene sentido?"

"Tiene mucho sentido", confirmé sumida en mis pensamientos. Ninguna de las dos habló por unos
momentos y me tomé el tiempo para analizar sus palabras. "Sabes que no le puedes decir a nadie
sobre esto, ¿Verdad? ¡Especialmente a nadie del equipo!"

"No lo haré, lo prometo", dijo sin dudarlo.

"Gracias", le dije con sinceridad. "No sólo por mantener esto entre nosotras, también por haber
hablado conmigo sobre esto. Es bueno saber que tengo un amigo que no me va a juzgar, pero
tampoco va a aceptar mi mierda al mismo tiempo."

"Wow, eso es lo más lindo que me has dicho, creo", mi compañera se echó a reír. "A excepción de
aquella vez cuando estabas totalmente borracha y me dijiste que tenía un buen trasero."

143
Le di un golpe con una de las almohadas y rodé mis ojos pero no pude contener una pequeña risa.
Ella era una gran amiga y no podía creer todo lo que me había dicho, pero estaba agradecida por
ello. Eso me tranquilizó un poco por ahora. No estaba segura de cuánto tiempo iba a durar pero
tenía una nueva perspectiva que había considerado. Tomar una decisión apresurada en este
momento sería catastrófico y necesitaba dormir primero. Tendría que ver como la cantidad de
palabras de Kristie me afectarían una vez sobria y así hacer frente a mis problemas de nuevo.

Estaba sentada en el gran vestíbulo del hotel con mi bolso entre mis piernas. Desplazándome a
través de mi lista de reproducción, mi pierna temblaba nerviosamente, aunque traté de mantener
la calma. Me encantaba el bootcamp de USWNT. Sí, era muy agotador y exigente, pero también
era un privilegio jugar para el equipo número uno del mundo. Y apreciaba cada vez que llamaban
para jugar. Jugar con el mejor sólo quería decir que me gustaría mejorar aún más. La ventaja fue
ver a mi amiga Normani.

Tan pronto como el mediocampista defensivo entró por la puerta, me saqué mis auriculares y corrí
hacia ella.

"Mani", grité y cambié mi faceta cool por un momento para demostrar mi verdadera alegría de
volver a verla.

"Hey", sonrió ampliamente y me abrazó con fuerza. Ella y yo éramos amigas desde hace años y las
únicas que habían hecho la transición desde la Sub-17 al equipo femenino-hasta ahora. Esta era la
primera vez que Camila estaría aquí también. Fue sin duda impresionante lo rápido que recibió
una invitación para unirse al bootcamp para los próximos días. Su talento era innegable y podía
entender que cualquier entrenador quería que jugara tan pronto como fuera posible. Mis
sentimientos confusos no estaban totalmente resueltos.

Mi charla con Kristie hace dos noches había sido de gran ayuda, pero quería concentrarme en el
fútbol en el bootcamp. La mejor manera de hacerlo era ponerse al día con mi mejor amiga y
compañera de cuarto por los próximos días. Normani y yo compartíamos habitación como siempre
y nos trajeron nuestras maletas. Era agradable estar lejos de Boston por un tiempo y dejar ese
entorno familiar. Tal vez eso ayudaría a aclarar aún más mi mente.

Después de aproximadamente una hora, decidí ir abajo y echar un vistazo al gimnasio. Normani
estaba tomando una siesta rápida antes de que se iniciara la primera sesión de entrenamiento.
Estaba cerrando la puerta de mi habitación del hotel cuando la vi caminando por el pasillo: Camila.
Mi corazón comenzó a aletear al instante y lo odié por eso. Ella sonrió cálidamente y tomé una
respiración profunda. No nos habíamos visto desde ese incidente en el baño. La imagen apareció
en mi cabeza de nuevo.

"Hey", mi compañera de equipo saludó con voz amable cuando estuvimos cara a cara.

"Hola", le contesté, e hice mi mayor esfuerzo para sonreír.

144
"Tenía la esperanza de que podríamos haber tomado el mismo vuelo, pero no te vi en el avión",
dijo Camila y tuve problemas para concentrarme, porque lo único que veía era su cuerpo pegado
contra la pared de baño.

"Eh... tomé un vuelo anterior y visité a un amigo en la ciudad esta mañana", le expliqué con la
mayor naturalidad. Ella asintió con la cabeza ligeramente y no quería hacer las cosas incómodas
pero joder, ¡Sí que eran raras!

"Mira Lauren", mi compañero de equipo inhaló cuidadosamente y buscó mi mirada. "Acerca de lo


que viste en la fiesta de Kristie... no quiero que las cosas sean raras. Fue bastante embarazoso y
tengo que admitir que todavía estoy muy mortificada-"

"Nosotras no tenemos que hablar de eso", la interrumpí apresuradamente y vi que abrió sus ojos
inquisitivamente. "Está bien, no hay nada raro. Olvidemos lo sucedido, ¿Ok?"

"Ok...", ella respondió bastante indecisa mientras seguía esquivando sus miradas. El silencio
incómodo siguió. "Y quería darte las gracias por la camiseta que le diste a Lara. Me olvidé por
completo de decir eso en el club."

Sí, bueno, estabas ocupada, pensé, pero no lo dije en voz alta. Era injustificado estar celosa y lo
sabía.

"No hay problema, me alegro de que le haya gustado", le respondí con reticencia como siempre.

"A ella le encantó. En realidad, la ha estado usando todos los días desde que se la diste. Así que, lo
siento si apesta cuando la veas", la joven madre trató de bromear mientras yo fruncí el ceño.

"¿Ella está aquí?", le pregunté sorprendida.

"Sí, no podía dejarla por unos cuantos días. Hablé con los entrenadores y me dijeron que estaba
bien", la chica de los más impresionantes ojos cafés, dijo en voz baja.

"Eso es... genial", casi tartamudeé y sentí que me miraba con más atención. No es que no me
agradaba Lara; al contrario. Pero quería salir de la confusión de Boston. La perspectiva de estar
con Camila era bastante difícil pero añadiendo a Lara era aún más difícil.

"Lauren, ¿Estás segura de que todo está bien? Quiero decir, si no es así te entiendo
perfectamente-"

"No, todo está bien. Pero me tengo que ir", la interrumpí una vez más y sentí la necesidad de huir
de la escena, como muchas veces en el último tiempo. Pasando junto a ella rápidamente, no le di
ninguna oportunidad de dirigirse a mí de nuevo y desaparecí lo más fugaz que pude.

Jesús, si esto era sólo el principio de estar cerca de ella en el campo de entrenamiento ¡Tenía que
juntar toda mi mierda muy rápido!

145
Mis piernas estaban ardiendo, el pecho agitado y cada centímetro de mi cuerpo estaba cubierto
de sudor. La primera sesión del entrenamiento fue brutal. Fue estrictamente una sesión de
gimnasio y gran cantidad de pruebas y puntuaciones. Haríamos exactamente el mismo
procedimiento en el último día de bootcamp para ver si la mejora era visible. Por mucho que me
encantaba estar en el campo de entrenamiento cuando no estaba allí, me acordé de lo mucho que
lo odiaba a veces cuando estaba entrenando. Sin embargo, no había duda en mente que no era la
única que sufría.

El calor fue otro factor que se añadía al agotamiento. Era increíble el calor en Arizona y al parecer
no estaba acostumbrada al clima. Los últimos tres años en Boston se habían caracterizado por un
clima más frío y lluvioso. Pero mis 'Miami-genes' pronto se adaptarían de nuevo.

Todo el mundo estaba abandonando el campo después de la práctica, cuando vi una cara familiar
acercándose rápidamente. Lara estaba corriendo hacia mí y mi cerebro estaba en sobrecarga.

"!Panqueques!", la voz aguda chilló.

"¿Panqueques?", Normani preguntó confundida y me miró con una ceja levantada.

"Es una larga historia...", murmuré y sentí el pulso por las nubes por alguna razón.

"Está bien, voy a la ducha. Hasta luego", mi amiga hizo un gesto pero yo planeaba unirme a ella
rápidamente.

"Hey Lara", saludé a la niña primero a pesar de que ella ya me había alcanzado.

"¿Quieres jugar conmigo?", preguntó ella al instante y vi sus brazos estirándose hacia mí, para
recogerla. Fue increíblemente difícil, pero resistí la tentación de sentirme demasiado cómodo con
la niña de nuevo y le acaricié el pelo un poco.

"Tengo ducharme, pequeña. Otra vez, ¿De acuerdo?"

Sus brazos cayeron rápidamente y mi corazón se desplomó cuando vi los ojos avellanas llenos de
lágrimas. ¡Mierda! Unos segundos después las lágrimas corrían por sus mejillas encendidas y me
sentí como el mayor gilipollas del mundo.

"Oh no, no, no", me puse de rodillas rápidamente con una voz casi presa del pánico. "No llores, lo
siento."

"Me prometiste que jugarías conmigo la próxima vez, pero nunca lo haces", dijo la niña de tres
años, sollozando y parecía como si hubiera arrancado mi corazón.

"Lo sé. ¡Lo siento! En serio, voy a jugar contigo. Lo que tú quieres", le respondí y limpié las gotas
saladas de su cara con mi pulgar. "Por favor, deja de llorar o voy a llorar también. Por favor", le
rogué y la vi asentir con la cabeza ligeramente.

"¿Podemos jugar fútbol de nuevo?", preguntó la voz levemente temblorosa.

146
"Sí, ¡Claro! Cualquier cosa que quieras", estaba más deseosa ahora y noté que ella al fin estaba
sonriendo. Me di cuenta de que llevaba puesta la camiseta que le había dado como regalo. Se
ajustaba perfectamente a ella y no pude evitar sonreír.

"He estado practicando con mamá en el parque", dijo la pequeña llena de orgullo y mi sonrisa se
amplió.

"Oh, ¿En serio? ¡Pero si tú eres buena ya! Ahora no tendré ninguna oportunidad", sonreí
suavemente y escuché su risa. Dios, se suponía que no debía de sentirme así de feliz al escuchar su
risa, ¿Verdad?

"Entonces vamos", exigió y buscó una pelota que encontró rápidamente. Vi que Camila nos vio
desde la banca y elevé mi pulgar para hacerle saber que iba a cuidar de Lara mientras ella se
duchaba.

La joven desapareció en el vestuario y yo me quedé con su hija. A pesar de que mis piernas
estaban en llamas, seguí pasando el balón con ligereza e incluso le mostré algunas pequeñas
técnicas para golpear el objeto redondo con mayor precisión. No iba a exagerar, pero ella era un
estudiante rápido.

Al ver como sus ojos se centraban en la pelota con tanta atención me recordó a Camila cada vez
que estaba en 'modo de juego'. La niña pequeña era lejos la cosa más adorable en esta tierra y
estaba contenta de que ella ya no estaba molesta, aunque eso significaba estar bajo el sol, pero
mis pies ya no resistían. No estaba segura de cuánto tiempo pasó, pero no podía aguantar más.

"Lara, ¡Eres demasiado buena! Estoy agotada. ¿Cómo aún tienes ganas de seguir jugando?", seguí
felicitándola antes de sentarme en el campo para relajarme.

"No estoy cansada en absoluto", la pequeña respondió con firmeza.

"Wow, tienes más energía que yo. Tengo que tomar una siesta", caí hacia atrás de manera
dramática quedando tirada en el pasto.

"Noooo, no puedes dormir aquí", se rió y oí sus pasos acercándose hasta que un par de manos
pequeñas me acariciaron la cara. "Despierta", Lara se mantuvo riendo.

"Está bien", murmuré y fingí tener mucho sueño, pero me senté. "Mírate", sonreí con cariño.
"Estás toda sudada también. Tu mamá me va a matar si te ve desordenada."

"No, no lo hará. Le gustas", la pequeña dijo despreocupadamente mientras yo limpiaba mi frente


sudorosa. Yo sabía que ella no estaba diciendo lo que yo quería pero no podía borrar esa estúpida
sonrisa de mi cara.

"No se lo digas, pero me gustas más que a ella", le susurré en secreto y su rostro se iluminó como
yo nunca había visto antes. Antes de darme cuenta, sus brazos se envolvieron alrededor de mi

147
cuello en un fuerte abrazo. Me caí hacia atrás de nuevo y tiré de ella conmigo, poniendo un brazo
alrededor de ella.

"Eres demasiado fuerte y me empujaste", me uní a sus risas y sentí el ligero peso de su cuerpo
descansando en la parte superior del mío. Ella no me soltaba y yo le acariciaba suavemente la
espalda. ¿Cómo alguien podía ser tan jodidamente adorable? Mis planes de mantenerme alejada
de Camila y/o Lara no estaban funcionando... ¡En absoluto! Ahí estaba yo, tirada en el césped con
la niña, encima de mí y escuchando su respiración desacelerada. Al parecer, yo no era la única
agotada después de todo. Su respiración se ralentizó tanto, que me pareció que estaba
genuinamente quedándose dormida.

Esperé unos minutos más y me senté muy despacio. Mirando hacia abajo, ella estaba escondida en
mi cuello todavía, pero mi sospecha se confirmó. Aunque no entendía como se había quedado
dormida en cuestión de un minuto, no quería despertarla. Así que me levante con cuidado e hice
mi mayor esfuerzo para avanzar lo más sutil posible. Acercándome a las líneas laterales del campo,
mi tiempo fue perfecto porque Camila salió recién duchada.

"¿Qué pasó?", la madre de la niña preguntó alarmada al principio, cuando se dio cuenta que
llevaba a su hija en brazos.

"Nada, está dormida", le expliqué rápidamente y vi su exhalación.

"Oh, lo siento", Camila suspiró y vi que abrió sus brazos para tomar a Lara, asumí. Cuando traté de
sacar el brazo de la pequeña de mi cuello, la niña se movió de repente.

"Nooo", ella hizo mohín. "Quiero que Lauren me lleve a la cama."

"Cariño, Lauren tiene que irse. No hagas esto más difícil, por favor", mi compañera de equipo
declaró y me di cuenta de que posiblemente estaba pensando que yo estaba molesta o algo así.

"Está bien, puedo llevarla a su habitación", le ofrecí y los ojos de Camila se agrandaron. "Quiero
decir, si eso está bien."

"Claro, si no te importa", la otra futbolista respondió y asintió levemente.

Resultó que estaban en el mismo piso que Normani y yo. Llevar a Lara en mis brazos era
extrañamente cómodo. Cuando llegamos a la habitación de Camila, vi a la joven madre tirando de
una manta de la cama para tapar a su hija. Así que hice lo que quería y dejé al pequeño cuerpo
descansando en el colchón antes que los ojos marrones lo tapara. Di unos pasos hacia atrás y sentí
mi corazón latir con fuerza en mi pecho.

"Gracias, Lauren. Pero te puedes ir si quieres. No quiero retenerte", Camila habló en voz baja y
noté un poco de inseguridad en su voz.

"No me estás molestando, Camila", dije en un susurro, pero esquive sus orbes marrones.

148
"Podrías haberme engañado antes", respondió rápidamente y ahora me miró a los ojos. Los orbes
profundos, cálidos y marrones causaron más disturbios en mi interior de los que necesitaba.

"Lo siento si estaba actuando raro antes. No era nada contra ti... acabo de tener una mañana
difícil", quería disminuir la rareza entre nosotras.

"Bueno, entonces me siento aliviada", sonrió de forma inesperada. "Todos tenemos días malos,
confía en mí."

"Eso es cierto, pero ¿Qué hay de ti?", quería compensar por haber actuado casi desagradable
antes. Era muy duro para mí no hablar con ella. Y no había nada de malo en hablar y tomar un
interés por mi amiga, ¿No? "¿Qué se siente estar en la lista? Yo estaba nerviosa como el infierno
mi primera vez con en el equipo femenino."

"Estoy nerviosa, emocionada, abrumada, feliz, estresada y básicamente cualquier otra emoción al
mismo tiempo", ella mostró esa sonrisa impecable suya.

"Suena bien", sonreí. "Se pone mejor después del primer o segundo día. Todo el mundo es muy
agradable y comprensible, así que no te preocupes demasiado. Lo más difícil para mí fueron los
pases rápidos, ya que todo era muy diferente que el equipo juvenil. Sin embargo, con tu velocidad,
dudo mucho que tengas problemas con eso."

"Yo no soy tan rápida", dijo Camila tímidamente y elevé una ceja juguetonamente.

"Oh, por favor. Los entrenadores dijeron que eras un monstruo por naturaleza, porque tu
velocidad es comparable a la de los atletas masculinos", simplemente repetí lo que nuestro
entrenador físico había dicho hace una hora. "Eres tan humilde ahora. ¿Qué pasó con CC7? Solías
ser una arrogante", bromeé un poco.

"¿Por qué? ¿Te gusta la versión arrogante?", ella bromeó antes de morderse el labio, que me
recordaba aún más a la Camila de ese entonces.

"Te aseguro que amaba esa versión en ese entonces", espeté, pero luego me di cuenta de lo que
había dicho. Su rostro se suavizó y el carácter lúdico de nuestra conversación se disolvió
rápidamente. Tragué saliva, eché otro vistazo a su labio inferior atrapado entre sus dientes y me
sonrojé ligeramente. Estar juntas en el campo de entrenamiento había traído algunos recuerdos,
pero tenía que parar antes que las cosas se pusieran raras otra vez. Y aludiendo a nuestra
'aventura' o a mis sentimientos por ella no me estaba ayudando.

"Uhm... pero apesto", cambie de tema torpemente y vi a la más joven levantar las cejas. "Quiero
decir, no me he duchado y probablemente debería hacerlo."

"Sí, deberías", asintió con una sonrisa divertida. "No quiero que te metas en problemas con
Normani por estar apestando la habitación."

149
"Eres muy amable", no pude dejar de tomarle el pelo al verla rodar los ojos. "Te veré mañana en la
práctica... o antes... tal vez." ¡¿Desde cuándo actuaba como una idiota tartamuda con las chicas?!

"Hasta luego", oí decir a Camila relajadamente y salí de la habitación poco después. Quería
golpearme por haber traído de vuelta nuestro pasado cuando entré a la habitación, pero los
recuerdos siguieron resurgiendo...

Muchos para recuperar toda mi mierda junta.

Estaba sentada en la cama, con la laptop en mi regazo cuando Camila salió de la ducha. Mis ojos se
levantaron fuera de la pantalla en frente de mí y vi a mi compañera en busca de una pollera.
Tragué saliva con dificultad. La chica más joven sólo llevaba pantalones cortos y un sujetador
deportivo, dejando al descubierto gran cantidad de piel. Era evidente que se sentía cómoda con su
cuerpo. Demonios, ¡Tenía toda la razón para estarlo!

Su pequeña figura hizo que mi corazón bombeara violentamente en mi pecho. En su piel caramelo
se notaban sus músculos abdominales suaves y definidos, sobresaliendo sutilmente. Tenía esa
cosa rara para que sus músculos no fueran prominentes en la cintura. Sus huesos de la cintura no
sobresalían porque tenía la cantidad justa de músculos para mostrar el revestimiento perfecto por
encima del dobladillo de sus pantalones cortos de fútbol.

Tan pronto como me di cuenta de lo que estaba haciendo, levanté mi mirada y me encontré con
los ojos de Camila. Me sonrojé de inmediato porque había captado mi mirada fija pero ella sonrió
y se puso su camiseta. Las cosas eran diferentes en estos últimos días, pero disfruté de eso. A
pesar de que no tenía ni idea de por dónde irían las cosas, estaba más que dispuesta a explorar la
nueva faceta de nuestra amistad/relación desde aquel beso en el primer día del campo de
entrenamiento.

Asentí con la cabeza hacia mi lado, ya que quería que se uniera a mí en la cama. Ella entendió y se
acercó así que me saqué los auriculares.

"¿Quieres ver una película conmigo?" le pregunté, mientras la morena se sentaba a mi lado. Sus
ojos se posaron en mi laptop. "Es mi favorita: Good Will Hunting."

"¿Se trata de una persona sin hogar?", su voz ronca se llenó con un ligero desdén.

"No, Robin Williams es en realidad un terapeuta", sonreí porque el personaje en la pantalla se veía
áspero.

"Pareciera que él mismo necesita de una terapia... y una ducha", Camila añadió sin inmutarse y a
veces me preguntaba por qué era tan... distante.

"¿Siempre tienes que ser tan petulante?"

150
"Yo no soy petulante", respondió ella si tener aún una gran emoción.

"Por supuesto que no", no pude resistir no burlarme de ella y a cambio conseguí una mirada
molesta. "No me extraña que las chicas piensen que eres arrogante."

"Me importa una mierda lo que piensen las demás niñas", la centrocampista izquierda se encogió
de hombros. "La mayoría de ellas nunca va a llegar más allá de los equipos juveniles de todos
modos."

Mis ojos se abrieron un poco, ya que sus palabras fueron bastante fuertes. Parecía que algo estaba
pasando con ella.

"No estoy hablando de ti, sabes eso ¿Cierto?" Camila agregó más preocupada y miró mis ojos
verdes con una ligera incertidumbre.

"¿Tengo que saberlo?"

"Lauren, si alguien va a entrar a los equipos femeninos serás tú", dijo genuinamente y más suave
lo que hizo que mi corazón revoloteara. Ella no era mentirosa y yo sabía que estaba siendo
sincera.

"Bueno, pienso lo mismo de ti", admití y vi que en sus labios se formó una pequeña sonrisa.

"Entonces esperemos que las dos logremos entrar."

"Exactamente", estuve de acuerdo y no podía apartar mis ojos de sus labios. Esos malditos labios
que había besado cada noche desde que estábamos aquí.

"Creo que deberíamos ver Good Will Hunting", la de ojos marrones me volvió a la realidad y me reí
suavemente. Ajusté el portátil de nuevo y subí el volumen de los altavoces lo suficientemente alto
para que las dos pudiéramos escuchar.

Recostada contra la cabecera de madera de la cama, mi corazón se detuvo por un momento


cuando sentí que Camila me abrazaba. Esto... era nuevo. A pesar de lo que habíamos hecho los
últimos días, no había habido ninguna caricia realmente. Por lo general, una de las dos comenzaba
el beso y nos manteníamos haciendo eso por un buen rato hasta que alguna de las dos volvía a su
respectiva cama.

Puse mi brazo alrededor de ella con cuidado y cada sinapsis en mi cuerpo se estaba disparando.
No era como si alguien lo sabía, pero no tenía mucha experiencia a pesar de tener dieciocho años.
Mi objetivo siempre ha sido el fútbol y no había un montón de chicas que me llamaran la atención
en la escuela para ser honesta. O tal vez estaba demasiado ocupada pensando en mi compañera
de la Sub-17. Lo cierto era que Camila había sido la segunda persona que me había besado. La
única otra experiencia que tuve fue una sesión de besos experimental con una amiga el año
pasado. Siempre supe que me gustaban las chicas, ¡Pero Camila lo confirmó!

151
Como no estaba segura de cuánto era el afecto necesario, poco a poco acaricié la parte superior
de su brazo con mis dedos mientras comenzaba la película. Su pelo todavía estaba un poco
húmedo, pero no me importaron las hebras húmedas sobre mi hombro. Eso era realmente
refrescante.

"He utilizado tu champú, espero que eso esté bien", la chica más joven de repente admitió
después de unos minutos.

"Claro. ¿Has olvidado el tuyo?" asumí y tuve problemas para concentrarme en la película. En
realidad no estaba concentrada en absoluto. Había visto esa película muchas veces, pero nunca
había tenido a la chica de mis sueños acurrucada conmigo-así que mis prioridades estaban
bastante claras.

"No."

"Pero entonces... ¿Por qué-?" pregunté confundida.

"Me gusta la forma en que tu pelo huele", hizo que mi corazón se agitara una vez más. ¡¿Ella sabía
cómo mi pelo olía?!

"¿En serio?" le pregunté con incredulidad.

"Sí."

Una vez más, no hubo gran emoción en su voz. Si no la conociera desde hace dos años, habría
pensado que era un maldito robot, pero el hecho de que lo haya dicho era suficiente. Expresar sus
sentimientos no era su punto fuerte-no hablaba de ellos, pero cada vez que lo hacía, me lo tomaba
en serio. Esa confesión significa mucho para mí por eso sola razón. Por no hablar que me estaba
halagando lo cual era muy raro en ella también.

Mi línea de pensamientos fueron interrumpidos cuando sentí un par de labios tocando mi cuello.
Cerré los ojos por instinto, mi respiración se detuvo en la parte posterior de mi garganta. Esta era
la primera vez que iniciaba algo. Y no era sólo un casto beso en los labios, como lo general. Sus
labios se separaron dejando lentamente otro beso en la zona caliente. Mis dedos agarraron su
brazo para tener algún tipo de apoyo.

¿Esto realmente estaba sucediendo? Sentí su lengua apenas rozando mi piel y un grito ahogado se
escapó de mi boca mientras sus labios plantaron más húmedos besos en mi cuello. Santa mierda,
¿Dónde aprendió como hacer eso? Al parecer, ella no era tan inexperta como yo. No es que lo
supiera pero ella nunca había mencionado a nadie. Tal vez no era más que un talento natural.
Fuera lo que fuese, lo disfruté inmensamente. La boca experta uso los dientes para raspar la piel
antes de chupar suavemente. Mis ojos aún estaban cerrados antes de darme cuenta que se había
detenido. Cuando los abrí, me encontré con los orbes marrones justo en frente de mí con una
sonrisa juguetona.

152
"¿Todavía quieres ver la película?" preguntó con aire de suficiencia y sentí mis mejillas arder. Su
labio inferior hinchado despareció bajo sus dientes.

"No, la verdad", sonreí con timidez, pero tomé su cara entre mis manos. Acercándola más, la
sensación del encuentro de nuestros labios me causó piel de gallina en todas partes. ¡Sus labios
eran tan jodidamente suaves y malditamente perfectos! Quería que esto nunca terminara y sabía
que no duraría mucho. Caímos en un ritmo cómodo de la danza de nuestros labios y el
intercambio de un tierno afecto.

No era mi primer bootcamp con ella, pero sin duda era mi favorito. Aunque no estábamos
hablando de algunas cosas y ella me había pedido tiempo para resolverlas, yo no podía dejar de
esperar a que ambas fuéramos llamadas a la selección femenina. De esa manera conseguiría verla
dentro de unos meses otra vez y tal vez el próximo bootcamp juntas sería aún mejor.

Jadeando y resoplando, levanté las pesas en el gimnasio del hotel hasta que estaba demasiado
cansada para continuar. Mis brazos se sentían como gelatina y traté de agitarlos para aflojar los
músculos. Ahora iba por algunos abdominales porque para eso porque no necesitaba mis piernas
o brazos. En realidad si los tenía que ocupar, pero a veces no me podía contener. Era tarde y
probablemente yo debería tener sueño después de un largo y duro primer día. Pero ahí estaba yo,
entrenando para distraerme de mis propios pensamientos y escapar de mi cabeza.

"¿Lauren?", oí una voz familiar y levanté mi vista para ver a Camila visiblemente sorprendida
mirándome. "¿Qué demonios estás haciendo aquí?", continuó con una mezcla de diversión y
sorpresa.

"Uhm... sólo estaba teniendo un poco de trabajo extra", contesté, pero me senté.

"!Estás loca!", la más joven casi se rió.

"En realidad prefiero el término 'dedicada'", respondí con una sonrisa socarrona y me levanté. Sus
ojos cayeron y me di cuenta que no llevaba una pollera, porque no esperaba a que nadie viniera. El
sujetador deportivo verde cubría todo lo necesario y de todos modos un montón de chicas lo
ocupan para entrenar. Pero no estaba preparada para que mi ex crush apareciera y me viera así.
Mis mejillas se sonrojaron, incluso más, pero dudaba que ella se diera cuenta. Sus orbes marrones
estaban fijos en mis abdominales definidos que probablemente estaban contraídos y abultados en
gran medida después de los abdominales. Ella levantó la vista rápidamente y tomé asiento en una
banca.

"¿Qué haces levantada todavía?" quise saber y usé una toalla para eliminar el sudor de mi cara y la
parte superior de mi cuerpo.

"No puedo dormir", se encogió de hombros.

153
"Puedes... sentarte", le ofrecí el asiento a mi lado y la vi sonreír suavemente. La joven se acercó y
me miró antes de continuar.

"Es raro estar aquí. Siento que acabo de hacer un nuevo hogar para Lara y yo en Boston y ahora
estoy viajando todo el tiempo por los partidos y bootcamp. Supongo que debo acostumbrarme."

"Lo entiendo", dije con entendimiento y la vi volver la cabeza para mirarme. "La mayoría de la
gente no sabe cómo ser nómada o cómo este estilo de vida es."

"No quiero parecer malagradecida", su voz tenía preocupación, pero la interrumpí con suavidad.

"No, lo sé, no te preocupes", traté de calmarla inmediatamente para ser recompensada con una
sonrisa deslumbrante. "Pero no estás solas, quiero decir, tienes a Lara... y... a mí", añadí
cuidadosamente.

Silencio. Era incómodo otra vez, ¿No? Debí mantener la boca cerrada, pero quería ofrecerle mi
amistad. Camila me miraba con tanta intensidad que mi pulso se aceleraba con cada segundo que
pasaba. Hubo una leve sonrisa en sus labios que poco a poco despareció cuando sus ojos se
movían entre mis labios y ojos. Esta tensión no se sentía cómoda como antes. Era similar a la
tensión de antes de habernos besado aquí hace años. Me tragué el nudo de la garganta, pero no
fui capaz de decir o hacer cualquier cosa, pero sí mirar profundamente el color marrón cálido de
su iris.

"¿Qué estamos haciendo, Lauren?" Camila de repente murmuró e hizo que mi corazón saltara de
un golpe por su voz ronca.

"Estamos hablando...", le respondí, insegura.

"¿Y eso es todo?" sonaba desesperada y esperanzada a la vez.

Yo estaba en una pérdida de palabras. Siempre había algo entre nosotras, pero no podía poner mi
dedo sobre la llaga. Las palabras de Kristie hicieron eco en mi cabeza. ¿Quería a Camila porque
sabía que no podía tenerla? No tuve tiempo para analizar más a fondo antes de que ella hablara
de nuevo.

"Creo que necesito que lo digas", mi compañera me hizo fruncir el ceño.

"Decir... ¿Qué?" yo tartamudeaba como una idiota porque no pude formar dos palabras
coherentemente.

"Que esto se ha acabado", Camila suspiró y pensé que mi corazón y mi cabeza iban a explotar de
forma simultánea. "Que no hay nada entre nosotras, tan sólo una amistad. Tengo que escucharlo
una vez y te prometo que no voy a mencionar nada de nuevo para que podamos seguir siendo
amigas", la desesperación en su voz creció. "Quiero seguir adelante, pero no creo que pueda a
menos que realmente lo digas. Porque... cada vez que te miro... se me olvida que se supone que
no debería sentirme de esta manera."

154
Si yo estaba en una pérdida de palabras antes, ¡Esto de seguro no ayudaría! Ella estaba tan
confundida como yo. ¿Estaba enviándole señales confusas? ¡Yo ni siquiera sabía qué mierda
estaba sintiendo! De que sentía algo por ella era obvio. ¿Pero era suficiente para que realmente
estuviéramos juntas? Si no era así, no quería perderla como a una amiga. No sobreviviríamos a
otra 'separación' a pesar de que nunca habíamos salido oficialmente. ¿Estaba dispuesta a correr
ese riesgo y dejarme caer por la única persona que había poseído y destrozado mi corazón?

"Lauren, tu teléfono sigue-", la voz de Normani apareció de la nada como Camila y yo nos
estremecimos fuertemente. "Oh, lo siento, no sabía que no estabas sola. ¿Interrumpo algo?"

"No", dijo Camila rápidamente, pero su voz era temblorosa. "Hemos terminado de todos modos",
agregó y la forma en que lo dijo, sonaba como si ella no sólo estaba hablando de nuestra
conversación.

"Ok, bueno, esta chica Emily sigue llamando sin parar y pensé que podría ser una emergencia", mi
mejor amiga me pasó mi celular cuando Camila se levantó.

"Bueno, me iré", aclaró su garganta.

"Me iré contigo", Normani ofreció, a continuación, volviéndose hacia mí. "Hasta luego, compañera
de cuarto."

"Buenas noches, Lauren", Camila se dirigió a mí y sonrió valientemente. Antes de darme cuenta
ambas se habían ido y yo no había pronunciado ninguna palabra. Enterré la cabeza entre mis
manos, tratando de mantener la calma, pero eso parecía imposible con toda la confusión que
había en mi cabeza. Por supuesto, Emily iba a seguir llamando. En cuanto a la pantalla, vi que
había dejado un mensaje de voz. No la podía ignorar por siempre, pero no estaba segura de qué
decir. Pero me decidí a escuchar su mensaje de todos modos y sentí que el corazón se me
acalambró por el sonido triste de su voz:

"Lauren, no sé lo que está pasando, pero estoy empezando a preocuparme. Sé que estás en el
campo de entrenamiento y tienes que concentrarte, pero... no has contestado mis llamadas o
mensajes en una semana. ¿He hecho algo mal? Lo siento si te he presionado mucho. Vamos a
hablar de ello. Por favor, sólo... llámame. Te echo de menos."

El mensaje de voz terminó con un suspiro alto y claro que correspondí suspirando profundamente.
¿En qué demonios me había metido? Emily realmente estaba pensando que ella tenía la culpa de
todo cuando yo era la estúpida que la había ignorado porque ¡Tenía miedo de engañarla! Seguí
mirando mi teléfono, preguntándome si debía llamarla. Sin embargo, ¿Qué iba a decir? Quizás que
la echaba de menos y eso no era una mentira. No se podía negar que tenía sentimientos por la
rubia y yo sabía que debía tomar una decisión en algún momento. Si no estaba completamente
comprometida con ella, entonces no podía arrastrarla. Pero qué si lo estaba... ¿Debía enamorarme
de ella como Kristie había dicho?

155
"A la mierda", susurré y gemí. El campamento de entrenamiento se estaba convirtiendo en un
drenaje más mental que físico.

=================

Capitulo 10
Apreté el botón y le envié el mensaje a Emily. No fue la mejor respuesta, pero no podía pensar en
otra cosa. Por lo general, era buena con las palabras, pero no tenía ni idea qué decirle en este
punto. Y eso era bastante patético teniendo en cuenta que había pasado horas pensando en mi
novia y la forma en cómo hacer las cosas bien. No quería hacerle daño. Por el amor de Dios, ella
me gustaba y tal vez sería capaz de amarla en un futuro.

Si tan sólo no existiera ese nudo extraño en mi estómago al pensar en la chica más joven y la única
persona de que me había enamorado hasta ahora. Mi conversación con Camila de la noche
anterior seguía dando vueltas en mi cabeza. La memoria de ella rogándome que dijera que todo
había terminado hizo que mi corazón latiera erráticamente. Incluso ahora en el desayuno de la
mañana siguiente, yo seguía mirando hacia el espacio y repitiendo sus palabras. Ella quería seguir
adelante, repetí en mi cabeza. Y probablemente debería dejarla ir. Pero ¿No lo había hecho ya? Yo
estaba tratando de ser su amiga sin envolverme mucho, pero eso era una línea muy fina.

"Hey Camila, siéntate con nosotras", oí a Normani de repente sacándome de mis pensamientos.
Dejé caer la cuchara como una idiota cuando levanté la vista y vi a mi compañera de equipo de
ojos marrones. Ella tomó la mano de Lara y usó la otra para llevar la bandeja con comida. Nuestros
ojos se encontraron por un segundo y pensé que el órgano bombeador en mi pecho realmente iba
a explotar.

"Buenos días", la voz ronca respondió con una sonrisa sorprendentemente relajada. La forma en
que su voz sonaba tan ronca por las mañanas no estaba ayudando a mi corazón a calmarse.

"Buenos días", le contesté, e hice mi mayor esfuerzo para sonreír también.

Camila tomó asiento enfrente de Normani con Lara en su regazo. La pequeña parecía adormilada y
no tan enérgica como siempre. Miré a la joven madre acariciando el cabello de su hija con cariño.
Sus finos dedos corrieron por las hebras color marrón claro con pericia, lo que hizo que la niña de
tres años, se relajara y cerrara sus ojos. A pesar de que las veía juntas, esa imagen de afecto
maternal causó una agitación interna si es que eso era posible en este momento. Sin duda, era
conmovedor lo cercanas que eran y cuán profundamente se preocupaba y amaba Camila a Lara.

"¿Lauren?"

"¿Qué?" pregunté confundida y me di cuenta que Camila y Normani me estaban mirando


inquisitivamente.

156
"¿Estás sorda o algo así?", Normani rió y yo no estaba segura de lo que quiso decir. "Camila acaba
de preguntar cómo te sentías después de la primer ronda de la práctica", explicó mi amiga y me
hizo comprender que había estado tan sumida en mis pensamientos que no me había dado cuenta
de lo que me estaban preguntando.

"Oh, lo siento", casi balbuceé e intenté recuperar mi compostura rápidamente. "Uhm, en realidad
me siento bien. Un poco de dolor aquí y allá, pero nada demasiado grave. ¿Qué hay de ti?"

"O eres algún tipo de robot o simplemente yo estoy muy fuera de forma", la más joven comentó
casi riendo y yo estaba asombrada de lo tan casual que estaba actuando después de lo de anoche.
"Tengo que admitir que nunca había estado tan dolorida. Me duele todo."

"Mamá, ¿Estás herida?" Lara habló inesperadamente y frunció sus pequeñas cejas, con la cabeza
aún apoyada en el pecho de su madre.

"No, cariño", Camila al instante apaciguó y dio un tierno beso en la frente de la niña mientras
seguía acariciándole el pelo. "Mamá está bien, sólo un poco agotada. Al igual que, ¿Cuándo juegas
mucho en el parque? A veces, los pies y las piernas duelen, ¿Verdad?"

"Sí", la respuesta amortiguadora llegó.

"Es algo parecido. Así que no es nada malo, no te preocupes", la izquierda-centrocampista explicó
y miré a Normani que parecía encariñada al igual que yo lo estaba. "Tienes que comer algo para
desayunar. ¿Quieres unos huevos revueltos?"

"Quiero panqueques", Lara levantó la cabeza del pecho de su madre por primera vez y me miró
con esa sonrisa adorable. No pude evitar sonreír también.

"Ellos no tienen panqueques, bebé. ¿Hay alguna otra cosa que quieras?"

"Yo quiero lo que Lauren está comiendo", la pequeña de ojos color avellana exigió y señaló mi
plato de fruta con yogurt.

"¿Futas?" Camila exclamó sorprendida. "Tú nunca quieres comer algo saludable, pero ahora que
Lauren está comiendo...típico", añadió con una amplia sonrisa y besó la mejilla de su hija
suavemente. "Vamos, vamos a buscar un poco de fruta entonces. Puedes elegir las que quieras."

Dejaron la mesa durante unos minutos y tuve algo de tiempo para calmarme. ¡Ver a Camila en su
lado como mamá era lo peor! No podía entender porque eso tenía un efecto en mí, pero ellas eran
tan malditamente adorables. Sin embargo, todo parecía como si nada hubiera cambiado entre
Camila y yo. Yo no estaba alucinando lo de anoche, ¿Verdad? El hecho de que la más joven estaba
tan a gusto me confundió más que antes, pero volvió a la mesa minutos después.

"Mira Lauren", la pequeña de pelo claro chilló emocionada y mostró el mismo desayuno, usando
mi nombre real.

157
"Mira, esa esa la razón por la que me gustas más", le guiñé un ojo. "Tiene un sabor muy bueno. Tal
vez no tan bueno como los panqueques, pero vamos, nada sabe tan bien como los panqueques."

"Sí, lo sé", Lara estuvo de acuerdo y asintió con la cabeza frenéticamente. Alcé la vista por un
momento y me encontré con dos orbes marrones mirándome con lo que parecía peligrosamente
cerca del afecto. Había un nudo en mi garganta del porte de un edificio antes que Normani
hablara.

"¿Qué harás después de la práctica, Camila? Tenemos una gran cantidad de tiempo libre hoy", la
joven mujer a mi lado le preguntó y ya tenía una idea de por dónde iba esto.

"En realidad nada. Yo sólo iba a descansar en mi habitación."

"¿Por qué no vienes conmigo y Lauren a la ciudad más tarde? Queríamos ir a explorar un poco",
Normani confirmó mi sospecha pero me mantuve estoicamente inmóvil.

"No lo sé", Camila vaciló pero siguió rebanando los pedazos de fruta antes de entregárselas a Lara.
"No quiero interrumpir."

"No vas a interrumpir nada", mi amiga sonaba casi ofendida. "Mira, eres la chica nueva y tratamos
de ponernos en tus zapatos. Al menos yo y Lauren nos teníamos una a la otra cuando nos unimos
a la selección nacional. Puedes haber llegado un poco tarde, pero aún eres una de nosotras, CC7",
añadió con una sonrisa y vi la cara de la jugadora de fútbol experta iluminarse visiblemente.

"¿Realmente no les importa si Lara y yo nos unimos?", se centró ahora en mí y yo negué con la
cabeza inmediatamente.

"No, por supuesto que no", le contesté, y me sorprendí de lo relajada que sonaba.

"Eso es muy amable de su parte, gracias", Camila expresó su gratitud.

"Maldita sea, tú realmente has cambiado", Normani espetó entre risas. "Eres tan amable ahora,
sin ofender."

"No te preocupes", Camila también se echó a reír y eso sólo causó un pequeño aleteo en mi
pecho. Oh Dios, estos sentimientos contradictorios me iban a matar uno de estos días. Me quedé
bastante tranquila, pero mis ojos seguían divagando entre mi compañera de equipo y su hija. Su
vínculo dinámico y aparente era demasiado lindo para manejarlo. Todos en el equipo ya estaban
enamorados de Lara después de un solo día. Pero no podía culparlos. Mis ojos se enfocaron en
otra persona que se acercó a nuestra mesa.

"Hey, espero no estar interrumpiendo", dijo Aaron cortésmente y se centró en Camila.

"No, está bien", ella respondió muy educadamente, pero parecía desconcertada.

"Soy Aaron Heifetz", se presentó formalmente a la última incorporación del equipo. "Trabajo para
el canal de Youtube ussoccer.com y siempre hago algunos vídeos para los fans."

158
"Sí, lo sé. Yo era una de esas fans veía esos vídeos", admitió con una sonrisa impecable.

"Bien, perfecto, entonces espero que digas que sí. Queríamos hacer un vídeo acerca de tu
incorporación en el equipo. No tienes que estar nerviosa. Nos gustaría hacerte algunas preguntas y
mostrar algunas imágenes tuyas durante la práctica. Y me preguntaba si está bien hacer parte a
Lara de esto porque ella es bastante adorable y los fans la amarían, eso es seguro. No será por
mucho tiempo, lo prometo."

Lara estaba masticando un pedazo de sandía y haciendo caso omiso al periodista que era casi
como otro compañero de equipo para nosotras. Él y el resto del personal eran muy profesionales,
pero también interactuaban con todos los jugadores. Tenerlos alrededor era muy divertido y
realmente disfrutaba de sus vídeos. Que Camila tuviera un segmento era una obviedad para mí.
Ella sin duda era uno de los talentos más prometedores, asombrosa, inteligente, encantadora y
tenía una historia siendo madre joven. ¿Quién no la amaría?

"Me encantaría", mi compañera de equipo estuvo de acuerdo con la proposición después de unos
segundos de vacilación.

"!Genial! te puedo garantizar que será perfecto", Aaron sonrió. "Así que arreglaremos todo para la
entrevista después de la práctica y te filmaremos durante ella. Ah, ¡Y antes de que se me olvide!
Lauren", se dirigió a mí de repente. "Nick grabó ese vídeo lindo de Lara jugando fútbol contigo
ayer después de la práctica. ¿Está bien si usamos un fragmento de eso?"

"Uhm..." estuve atónita por un momento porque no me había dado cuenta que alguien me había
estado observando cuando había estado jugando con la pequeña. "Sí, claro, si Camila está a gusto
con eso."

"!Perfecto! bueno, las dejaré tranquilas para que sigan comiendo, señoritas. Camila, hablaremos
más tarde sobre todos los detalles", el hombre dijo con emoción en su voz y se fue.

"Supongo que tendré que aceptar tu oferta de ver la ciudad en otra ocasión", Camila sonaba
apenada pero Normani no se dio por vencida.

"De ninguna manera. Te esperaremos hasta después de la entrevista y luego saldremos todos
juntos. Esas entrevistas no toman tanto tiempo. Todos las hicimos y es divertido, así que no te
preocupes. Lauren y yo te miraremos desde la banca y nos burlaremos de ti hasta que hayas
terminado", mi amiga bromeó ligeramente.

"Suena como un plan", Camila sonrió una vez más de esa manera perfecta y me miró a los ojos un
instante.

No sólo iba a estar con ella durante la práctica, ahora también íbamos a pasar tiempo juntas. No
estaba segura de cómo iban a ser las cosas pero ella parecía estar muy bien después de nuestra
última conversación. Tal vez estaba exagerando y no había sido tan grave como yo pensaba...
tampoco estaba segura de si me sentía aliviada o decepcionada.

159
********************************************************************************

Aaron: Ok, ¿Por qué no empezamos con una pequeña introducción? Sólo citando algunos hechos
acerca de ti misma, así obtenemos algo para abrir.

Camila: Bueno, tengo que ser capaz de hacer eso.

Estaba sentada en el vestíbulo del hotel, con Normani a mi lado mientras Camila estaba filmando
su entrevista. El equipo de Aaron había estado filmando todo día durante la práctica y ahora
estaban obteniendo un poco de información de mi compañera de equipo. Pude notar que la más
joven estaba nerviosa. Ella estaba jugando con sus dedos en su regazo y reajustó su pollera en
varias ocasiones. Normani había preguntado si deberíamos habernos ido, pero Camila parecía
estar bien con nuestra presencia durante la entrevista antes de nuestra exploración en la ciudad.

Desde el desayuno no había hablado con Camila. Nos enfocamos tanto en la práctica y nos fuimos
a nuestras habitaciones para ducharnos y prepararnos para después. El equipo había estado
instalado cuando yo había llegado y no podía entender lo que estaba pasando por su cabeza. Pero
por ahora no pude contenerme, así que vi su pequeño segmento para los fans de la USWNT.

C: Hola, soy Camila Cabello. Tengo veinte años y soy originaria de Anaheim, California. Esta
temporada me uní a The Boston Breakers y me llamaron para practicar con USWNT... y estoy muy
emocionada de estar aquí.

A: Bien, muy bien. Obviamente queremos saber ¿Cuáles son tus primeras impresiones? Tú jugaste
para la Sub-17, pero ser parte del equipo nacional es todo un logro en tan poco tiempo. ¿Podrías
darnos un resumen rápido de cómo evolucionaron las cosas?

C: Para ser honesta, creo que todavía estoy procesando. Jugué en la selección Sub-17 y luego me
llamaron para entrar al equipo femenino antes de cumplir dieciocho años. En ese momento tuve
que declinar y dejé de jugar porque estaba embarazada. Hace poco pensé que tenía que darme
otra oportunidad y antes de darme cuenta, firmé un contrato con Boston Breakers y tuve una
segunda oportunidad para demostrarme a mí misma aquí. Mi primera impresión es que yo nunca
había visto a tantos jugadores con talento y estoy tan asustada de cada uno de ellos. Espero poder
recoger pedacitos aquí y allá y mejorar. Ese es mi objetivo principal en este punto.

A: Dado que tú misma hablaste del asunto; tienes una pequeña hija adorable y ella está aquí
contigo en el bootcamp. ¿Cuán difícil es mantener una carrera exigente y un niño a la vez?

C: Ya sabes, algunas personas dicen que ser madre es un trabajo a tiempo completo. Para mí no es
un trabajo. Es mi vida. No hay un solo momento en que no piense en Lara primero. Al principio me
preocupaba pero de esta manera le puedo ofrecer un futuro mejor y esa es una de las principales
razones por las que empecé a jugar de nuevo. La programación es difícil pero ahora que ella es

160
pequeña, no puedo llevar conmigo por unos días y tengo grandes amigos que cuidan de ella
cuando yo no puedo.

A: ¿Qué es lo más sorprendente que has descubierto ahora que eres un jugador activo de este
nivel?

C: Uhm... en realidad hablé con Lauren sobre esto ayer y ella lo puso muy bien; se trata de un
estilo de vida muy nómada. Y eso es cierto. Eso puede traer soledad pero sinceramente estoy muy
feliz de tener a Lara conmigo.

La sonrisa de Camila era contagiosa y sentí que mi corazón saltó en mi pecho cuando me
mencionó. Lara estaba fuera la pantalla, sentada junto a Camila y dibujando algo. Así que, Camila
recordaba nuestra conversación de la noche anterior, pero optó por no abordarlo. Yo estaba más
allá del punto de la confusión.

A: Le pedimos a nuestros fans en Twitter que hicieran algunas preguntas y tuvimos una respuesta
abrumadora. La mayoría de ellos preguntaron ¿Por qué no tienes una cuenta de Twitter? ¿No
estás metida en los medios de comunicación social?

C: En realidad no tengo ni idea de cómo manejar esas cosas.

Tenía sus mejillas sonrojadas ligeramente en un estado nervioso y me encantó escuchar una risita
en medio.

C: Mi vida no era particularmente interesante, así que no había necesidad para compartir nada,
supongo. Quiero decir, mi vida sigue siendo bastante aburrida, pero tal vez le preguntaré a una de
las chicas para que me ayuden a hacerme una cuenta.

A: No puedes ser tan aburrida porque rara vez conseguimos muchas preguntas. Sin embargo, la
pregunta número uno era una muy personal. Tú, evidentemente, no tienes que responder, pero
todo el mundo parece estar curioso sobre si ¿Estás soltera?

C: Oh, wow. Uh... no estoy sola.

El tono rojizo de su rostro se hizo más evidente y su sonrisa era una mezcla de halago y timidez.
Suspiré en silencio ante el recordatorio de Ariana.

A: Ok, vamos a hacer una pregunta más antes de dejarte ir. Un fan del Reino Unido preguntó si
alguna vez has considerado la posibilidad de jugar en el extranjero. Cada vez son más los jugadores
que juegan por toda Europa para conseguir más experiencia y quieren saber si esa es una opción
para ti.

C: En este momento estoy definitivamente centrada en jugar con The Breakers. Me acabo de unir
al equipo y siento como si todavía tengo mucho que aprender. Y tengo que volver a estar en
forma. Pero nunca digas nunca. Me encantaría ir a Europa y tal vez vivir allí por un tiempo en el

161
futuro, pero por ahora, estoy muy contenta por estar dónde estoy y agradezco las oportunidades
que se me han dado aquí.

A: Bien, ¡Eso es increíble! Estuviste genial. Y si tenemos algunas preguntas más y necesitamos algo
de material extra, te lo haremos saber. Pero no quiero retenerte de tus amigos.

C: Muchas gracias, fue muy divertido. Y trataré de entender cómo funcionan las cosas con Twitter.

A: Bien, le puedes pedir ayuda a Lauren. Ella es muy activa en las redes sociales y, probablemente,
te puede enseñar un par de cosas.

C: Eso es bueno saberlo. Gracias a todos y tengan un buen día.

Camila y Lara se unieron a nosotras rápidamente después y hace un momento me di cuenta


realmente de lo bonita que ella estaba. Llevaba el pelo en una trenza y no llevaba maquillaje a
excepción de un poco de brillo en sus labios, pero se veía absolutamente increíble. Las piernas
delgadas sólo estaban cubiertas por un par de pantalones cortos de color rojo. Llevaba Vans rojas
y una simple pollera negra, pero santa mierda; ¡Ella estaba más sexy con el pasar de los minutos!
Comprendí la necesidad de llevar un par de pantalones cortos ya que yo llevaba un par parecido
de mezclilla, pero casi deseé que la más joven tuviera más ropa para así cubrir ese diabólicamente
atractivo cuerpo.

Gracias a Dios yo llevaba gafas de sol negras para que ella así no se diera cuenta de mi mirada fija
flagrante. En realidad no estábamos vestidas de forma diferente. Yo llevaba un par de Converse
blancas y una sencilla pollera blanca, además de pantalones cortos de mezclilla azul. Fue casual,
pero apropiado teniendo en cuenta el clima caliente y húmedo de fuera. Arizona era un estado
desértico de mierda, así que no me sorprendía. La única cosa que me sorprendió fue el cuerpo
delgado y bronceado de Camila lo cual me afectó cuando absolutamente no debería ser así.

Me levanté y las cuatros nos dirigimos al exterior. De pronto, antes de llegar al taxi, sentí que
alguien me sostuvo la muñeca y me dio vuelta rápidamente.

"¿Podemos hablar un segundo?", Camila preguntó nerviosamente y yo simplemente asentí con la


cabeza, incapaz de hablar debido a su mano tocando mi muñeca. "Quería disculparme por lo de
anoche. No sé qué me pasó, pero nunca debí haber dicho esas cosas", su voz continuó de una
manera incoherente y ella había soltado mi mano. "Estar contigo en el bootcamp me confundió un
poco y no quiero que las cosas sean raras entre nosotras. Sé que eres feliz con Emily y yo soy feliz
con Ariana. La última cosa que quiero es arruinar eso para ninguna de nosotras. Fue estúpido y yo
ni siquiera sé por qué dije esas cosas. Por favor, ¿Podemos olvidar lo que pasó?"

Me sentí completamente abrumada por su repentino arrebato y traté de retener la información.


Ella lo sentía y quería olvidar lo que había pasado. En realidad, nada había sucedido realmente,
pero nuestra conversación había sido un poco íntima para ser 'sólo amigas'. Su petición de que le
dijera que todo había acabado entre nosotras ya no tenía ningún significado. Pero ese no era mi

162
lugar de interferir cuando yo estaba con alguien más-no importa cuán distante Emily y yo
estábamos, ella seguía siendo mi novia y no podía fingir que ella no lo era.

Si ella quería que fuéramos amigas y olvidara sus palabras de la noche anterior, entonces tenía
que cumplir sus deseos. Ella estaba feliz y yo era última persona que quería complicar las cosas
para ella de nuevo.

"Claro, no te preocupes", respondí con una pequeña sonrisa y traté de sonar tan indiferente como
pude.

"Por lo tanto, ¿Seguimos siendo amigas?" sonaba casi sorprendida.

"Por supuesto", respondí y por un momento, tal vez una fracción de segundo, parecía que Camila
estuviese decepcionada de mi respuesta. ¿No era esto lo que ella quería?

"Ok, entonces vamos", ella asintió con la cabeza y comenzó a caminar por delante.

Normalmente analizaría durante la próxima hora sobre lo que esto significaba, pero quería
disfrutar del resto del día libre y tomé una decisión consciente para olvidarme de lo que había
ocurrido en las últimas 24 horas.

********************************************************************************

"Camila, han pasado horas. ¿Podemos irnos?"

"Deja de ser tan dramática, no han pasado horas."

Suspiré tranquilamente mientras mi compañera de equipo seguía buscando un CD que nadie había
oído hablar. Habíamos descubierto la pequeña tienda de música por accidente en nuestro
pequeño viaje de exploración por la ciudad. Por supuesto Camila quiso entrar, además, Normani
estaba al otro lado de la calle, comprando zapatos, mientras yo sostenía a Lara por lo que
parecieron horas. A la niña de tres años, no parecía importarle y tenía sus brazos cruzados
alrededor de mi cuello, mientras su mamá seguía buscando.

"Lara quiere un poco de helado y, literalmente, has mirado todos los CD de aquí... dos veces",
agregué y era obvio que le estaba tomando el pelo y no estaba realmente enojada.

"Entonces, sigan adelante y vayan a buscar un poco de helado. Las alcanzaré en un minuto",
Camila sugirió y leyó algún folleto de un CD.

"Me gustaría, pero Lara insiste en que tú debes venir con nosotras. Confía en mí, ya te hubiera
dejado aquí hace veinte minuto, si fuera por mí", respondí con una sonrisa y vi a la pequeña
haciendo lo mismo.

"Bueno, parece que mamá triunfa sobre todo", el centrocampista izquierdo respondió
rápidamente.

163
"¿Quién compra CD en estos días? Hay esta cosa llamada iTunes, ¿Sabes? Deberías probarlo", no
dejaba de molestarla, pero me acerqué a ella para ver lo que estaba mirando.

"Jaja, muy divertido", ella fingió que reía y se dio cuenta de mi broma. "Ninguno de estos CDs
están disponibles en iTunes o cualquier otro lugar de esa materia. Nunca he oído hablar de estas
bandas y de verdad que quiero comprar toda la tienda en este momento."

"Tu hija está muriendo de hambre y tú quieres comprar la música de un grupo de chicos barbudos
reprimidos. Por lo menos tus prioridades son claras", sonreí y vi a Lara con una amplia sonrisa a
pesar de que dudaba que entendiera todo el sarcasmo.

"Muerta de hambre, ¿Eh?" Camila se burló y se volvió hacia su lado, así estábamos frente a frente
con no mucho espacio en el medio. "Se ve que tú eres la que muere de hambre para llamar la
atención", ella levantó sus cejas desafiante.

"¿Es eso cierto?" reí entre dientes y casi me eché a reír ante su comentario ingenioso. "¿Qué pasa
si soy yo?" solté sin pensar y estaba completamente pérdida en nuestras bromas que mostraba un
cierto parecido a un peligroso coqueteo.

"Entonces debes de dejar de estar tan absorta en ti misma, porque a mí me encantan por montón
los grupos de barbudos reprimidos, más que tú", dijo la de ojos marrones y se mordió el labio
inferior para ocultar una sonrisa. Jesucristo, mi corazón latía tan rápido que tuve miedo que Lara
lo pudiera sentir.

"¿En serio?", cuestioné con escepticismo y no me di cuenta que cada vez estábamos más cerca,
como dos imanes que se sienten atraídos el uno al otro. "¿Crees que me quedaría bien una
barba?" bromeé y finalmente vi a Camila romper la cara de poker y reír.

"Claro, ¿Quién sería capaz de resistirse a eso? Luego de eso sin duda obtendrás mi atención",
respondió ella sin dejar de reír. "Eres tonta", su voz ronca más sonaba encariñada ahora, cuando
negó con la cabeza.

"¿Has oído eso, Lara? Tu mamá acaba de llamarme tonta. Creo que ella tiene que comprarnos un
helado un poco grande con crema extra para compensar el uso de esa palabra, ¿Verdad?" me
dirigí a la niña que todavía tenía en brazos.

"Sí, no estoy autorizada para decir eso", Lara simplemente rió y yo me centré en Camila. Ella
encontró mi mirada y al parecer ambas nos habíamos dado cuenta de lo cerca que estábamos. Sus
ojos se posaron en mis labios por un segundo y tragué saliva con dificultad.

"Ok, déjame comprar estos muy rápido y luego les compraré un poco de helado", la otra jugadora
de fútbol dejó de bromear y dio un paso atrás. Aclaré la garganta y asentí en silencio antes de que
ella se digiriera a la cajera.

164
Una media hora más tarde, Camila nos compró helados. Normani ahora sostenía a Lara mientras
disfrutábamos del placer frío y cremoso. Todas habían elegido algún tipo de helado con chocolate
y caramelo, mientras yo era la mujer en discordia. El helado de pistacho era mi favorito.

"Lauren tenía que dárselas de cool escogiendo algo extravagante de nuevo", Camila me dio un
codazo mientras estábamos caminando para conseguir un taxi.

"¿Eso significa que tengo tu atención ahora?", me referí a nuestras bromas en la tienda de música
y vi que en sus labios se formó una tierna sonrisa.

"No, eso significa que el helado tiene toda mi atención", bromeó una vez más.

"¿Quieres probar? Es muy bueno", le ofrecí y ella se detuvo para tomar un bocado al parecer.
También parando en seco, levanté el cono y ella se inclinó, sólo que ella no se lo esperaba, cuando
levanté mi mano aún más y luego unté toda la cosa en su cara. Se me cayó el cono porque me
estaba riendo por su reacción. Ella abrió los ojos por la sorpresa y todo lo que escuché fue la risa
incontrolable de Lara.

Camila se limpió un poco de helado de sus labios utilizando sus lengua antes de que fuera capaz de
hablar.

"Vas a pagar por esto", ella me miró, pero no pude tomarla en serio con todo el líquido pegajoso
en su cara.

"Esto es una venganza por cuando untaste mi cara con jarabe de chocolate en mi departamento,
¿Recuerdas?", le dije, en un intento para que no me hiciera lo mismo.

"!Oh, no, no!", la más joven negó con la cabeza. "Tú ya te vengaste con el jarabe si eso sirve para
refrescar tu memoria."

"Bueno, ¿Qué puedo decir? Estaba muerta de hambre por llamar tu atención", jugué inocente e
hice un puchero para molestarla más.

"Crees que eres tan inteligente, ¿Verdad?" se limpió el resto de la crema con un pañuelo que sacó
de su bolso. "Pero voy a tener que devolverte eso."

"Estoy temblando en mis zapatos."

"Me molestaste todo el tiempo en la tienda de música para que te comprara un helado y ahora ni
siquiera te lo comiste", comentó Camila y rodó los ojos.

"Entonces ¿Parece que me tendrás que comprar otro?" estaba obviamente bromeando y me
gustaba molestar a la otra chica que había estado en un modo tan tranquilo en los últimos días.

"Eres tan molesta, lo juro. Ni siquiera Lara es tan inmadura", ella estaba tratando de actuar
molesta, pero la vi en secreto sonreír mientras seguía limpiándose.

165
"No es mi culpa que seas tan torpe y básicamente hayas tropezado con mi cono", me reí tan
pronto como la vi abrir la boca en una expresión indignada. Ella se acercó y al parecer estaba
usando su propio cono como un arma ahora.

"No debes estar demasiado confiada ya que estás desarmada ahora", amenazó mientras yo di un
paso atrás.

"Vamos, no quieres arruinar tu delicioso helado", intenté por otro ángulo.

"Para tu suerte, tienes razón. No voy a desperdiciarlo en ti", ella se burló con arrogancia fingida.

"No se lo tomen a mal", Normani de repente interrumpió y nos hizo darnos cuenta que no
estábamos solas. "Pero no puedo decidir si suenan como un viejo matrimonio o como dos niños
caprichosos", mi amiga se echó a reír y, obviamente, no quiso hacernos daño con esa broma. Pero
ella rompió nuestro pequeño momento. Era tan fácil perdernos en nuestras bromas estúpidas y
realmente no podía recordar con quien más actuaba como una tonta. Una parte de mí sabía que
no siempre íbamos a estar tan cómodas pero el tipo de coqueteo entre ambas sucedía de forma
tan natural.

Normani involuntariamente puso fin a la 'lucha' entre Camila y yo. Todas seguimos hablando y
divirtiéndonos pero traté de no dejarme llevar de nuevo.

*******************************************************************************

Era la última práctica del bootcamp y yo estaba bombeando. Todo el mundo lo estaba. Habíamos
hecho pruebas y rutinas de ejercicios así obtendríamos nuestros resultados después en lo mucho
que habíamos mejorado en la última semana. Para terminar, estábamos jugando un pequeño
partido y la competitividad era tangible. No importa lo insignificante que parecían estos juegos,
todas queríamos ganar siempre.

Camila estaba en mi equipo y lo había hecho muy bien para su primer bootcamp. Los
entrenadores y jugadores estaban impresionados. Después de haber sido tan cercanos los dos
primeros días, ahora apenas habíamos hablado desde nuestra salida a la ciudad. No sabía porque
estaba tan distante, pero me sentí aliviada y no traté de interactuar con ella tampoco. Ella estaba
haciendo nuevos amigos en el equipo y eso era importante. No importa cuán confundida a veces
estaba, quería que ella tuviera éxito.

Justo antes de la práctica la había oído hablar por teléfono con Ariana; diciéndole lo mucho que la
extrañaba. Había caído en la cuenta de me había estado engañando a mí misma creyendo que lo
que me había dicho la primera noche tenía algún significado. Ella había estado confundida y
nostálgica. No había ninguna posibilidad para nosotras de tener algo más que una amistad y yo
estaba procesando lentamente ese pensamiento - incluso si doliese dejar esa pequeña chispa de
esperanza.

166
Estaba en modo de juego ahora. No melancólica o analizando ya que estaba en el campo de juego.
Normani me pasó el balón y yo estaba en busca de una apertura para crear más espacio. Camila
comenzó a correr por el lado izquierdo y estuve a punto de pasar la pelota cuando sentí un dolor
insoportable. No estaba segura de quién, pero alguien me había abordado abruptamente. Dejé
escapar un grito lo cual era muy fuera de mí, pero no pude evitarlo. Sentía como si mi tobillo se
había roto en dos.

Agarrando el césped verde donde estaba recostada, escuché varias voces, pero no podía
concentrarme en nada más que el dolor.

"Lauren, está bien. Todo va a estar bien", la voz de Camila se destacó y abrí los ojos para
encontrarme con unos orbes marrones familiares que se cernían sobre mí. Por alguna razón, al
verla me calmé y me sorprendí al sentir su mano acariciando mi brazo antes de arreglar algunos
pelos sueltos detrás de mi oreja. "Lo estás haciendo bien", sonrió alentadoramente cuando sentí al
equipo desatar mis cordones y sacar mi zapatilla. Empezaron a mover mi tobillo izquierdo
lentamente pero grité de nuevo.

"Ok, la sacaremos fuera del campo y la llevaremos al hospital. Necesitamos algunas radiografías",
dijo nuestro médico de cabecera y suspiré en voz alta. Hasta ahora no había sufrido una lesión
grande y estaba asustada de lo que podría suceder. ¿Qué pasa si mi tobillo estaba roto? ¿O si mis
ligamentos estaban desgarrados? ¡Eso significaría semanas de rehabilitación y posiblemente una
cirugía! Sentí las lágrimas hinchando mis ojos. La mezcla de dolor, miedo y decepción causó la
atípica reacción.

La primera lágrima rodó por mi mejilla, pero fue capturada inmediatamente por un pulgar. Vi a
Camila mirándome fijamente, pero más preocupada esta vez. Éste fue, por mucho, el peor final del
campo de entrenamiento, pero tal vez era la señal de que tenía que tomar las cosas con calma.
Había estado practicando como loca, incluso en mi tiempo libre.

Todos mis compañeros de equipo me estaban apoyando, pero lo último que vi fue a Lara agitando
su mano cuando estuve en la ambulancia. Ella me miró con ojos llorosos, pero sonreí para hacerla
sentir mejor antes de ver a Camila acercándose y las puertas de la ambulancia se cerraron. Tomé
una respiración profunda y recé para que mi tobillo no estuviera gravemente herido.

*******************************************************************************

De pie frente al departamento en New York, mis rodillas estaban realmente temblando. Había
tomado un vuelo desde Arizona a New York en lugar de Boston para ver a mi novia justo después
del bootcamp. Definitivamente era mi turno de hacer un esfuerzo; sobre todo después de que la
había evitado por un tiempo. Aun así, estaba nerviosa como el infierno mientras esperaba a que
abriera la puerta. No estaba segura de lo que iba a suceder o como nuestra conversación
terminaría pero necesitaba hablar. Mi corazón dio un vuelco cuando la rubia apareció.

"Hey", saludó con una sonrisa y sentí un gran nudo en mi garganta. "Pasa."

167
Simplemente asentí, comencé a caminar o cojear ligeramente hacia el interior dándole un primer
vistazo a su departamento. Era impresionante y mi corazón palpitaba arquitectónicamente. Ella
había mencionado que estaba interesada por el diseño de interiores, pero estaba impresionada
por lo perfecto que había arreglado y decorado todo.

"¿Estás bien? ¿Qué te pasó en el pie?", la chica más vieja al instante se dio cuenta e hizo un gesto
hacia el sofá donde nos sentamos.

"No es tan malo. Me torcí el tobillo y los ligamentos. Tomará aproximadamente dos o tres
semanas, pero no hay nada roto", le expliqué, y finalmente encontré el valor para hablar.

"¿Sucedió eso en el campo de entrenamiento?", preguntó ella preocupada y miré los ojos verdes
azulados por primera vez. Hubo un salto palpable en mi pecho y extrañamente estaba aliviada de
tener todavía esos sentimientos por ella. Parecían que eran incluso más fuertes ahora. Recordé a
Kristie diciéndome que no les estaba dando demasiado crédito y sentí que quizás estaba en lo
cierto.

"Sí, sucedió ayer durante la última práctica. Me quedé un día más para recuperarme un poco y
luego volé hasta aquí", le respondí con neutralidad, pero ese sentimiento no se extendía por todo
mi cuerpo cuando ella estaba tan cerca. "Pero no estoy aquí para aburrirte con mi estado de
salud."

"Lo sé", suspiró ella y sonaba nerviosa.

"Ni siquiera sé por dónde empezar", admití con la verdad y sin apartar los ojos de la modelo
sentada a mi lado. Enderecé un poco mi cuerpo hacia ella, tratando de encontrar las palabras
adecuadas, pero no pude.

"Sólo... se honesta", declaró Emily y respiró hondo. "¿Te has acostado con alguien más?"

"!¿Qué?!" exclamé sorprendida, ya que ella me sorprendió con esa pregunta. "!No! no lo hice.
¿Por qué...? ¿Por qué piensas eso?"

"No lo sé", suspiró con frustración o alivio, no estaba segura. "Dijiste que tenías miedo al
compromiso y pensé que quizás había ejercido presión sobre ti. Y entonces comenzaste a evitarme
así que pensé que quizás podrías haberte sentido culpable o algo así."

"Yo no hice nada, lo prometo", le dije más tranquila y la sentí relajarse.

"Pero entonces... ¿Por qué me evitaste de repente?" su voz sonaba preocupada, pero no de
reproche lo cual hizo que me sintiera más cómodo para hablar de mis sentimientos - lo cual no era
mi punto fuerte, obviamente.

"Creo que podría haber entrado en pánico", empecé poco a poco y tomé su mano. "Tienes razón
en decir que le tengo miedo al compromiso. Pero estoy aún más aterrada de lo que va a pasar
cuando esto continúe, porque...me gustas mucho más de lo que había planeado."

168
Inhalé profundamente, tomé suavemente su mano entre la mía y me di cuenta que sus rasgos
faciales se ablandaron. Yo sabía que no iba a ser fácil, pero tenía que seguir adelante como Camila
lo había hecho. Y yo tenía sentimientos genuinos por Emily los cuales ya no quería negar o
disminuir más. No importando lo aterrador que eso era.

"Y entiendo eso, Lauren. Realmente lo hago pero quiero saber si estás en esto o no", suspiró de
nuevo y pude sentir su desesperación. "Por un lado, no quiero presionarte, pero por otro lado, no
estoy interesada en tener algo informal. Me gustas mucho más de lo que planeé también, créeme.
Pero necesito que me necesites, así...aunque sea sólo un poco. Me encanta el hecho de que eres
autosuficiente e independiente, pero no me puedes apartar sólo porque estás asustada."

"Lo sé y lo siento mucho", le dije con sinceridad y le di un apretón suave como un reflejo de
demostrar mi determinación para que esto funcionara. "Yo no soy tan mala en estas cosas, pero
quiero ser mejor...contigo y para ti." Sus labios formaron una sonrisa vacilante antes que sus
dedos se entrelazaran con los míos.

"Tú eres mucho mejor de lo que piensas", Emily respondió en voz baja y su sonrisa se ensanchó
para mi alivio. "Pero no serás capaz de usar tu encanto dentro de mi buena tolerancia de nuevo",
añadió con una sonrisa.

"Lo sé, pero espero poder hacerlo porque no quiero comportarme como una idiota de nuevo", le
respondí ahora sonriendo.

"Tengo que admitir que tenía miedo porque pensé que ibas a romper conmigo", confesó y me
sentí horrible al ver incluso esa pequeña cantidad de dolor en sus ojos.

"¿Qué puedo hacer para compensarte por eso?" pregunté porque realmente mi conciencia
culpable me estaba comiendo.

"Tengo una idea", suspiró e inesperadamente se inclinó para besarme. Mis cejas se levantaron con
sorpresa pero exhalé profundamente en el beso antes de corresponder. Sus labios se sentían
celestiales y probé el brillo de labios fresa que me había perdido. Tomé su mejilla con mi mano
libre y la sentí profundizar el beso antes de alejarse rápidamente. Al abrir los ojos, estaba
confundida por sus movimientos bruscos y la vi pararse. Me ofreció su mano y fruncí las cejas.

"¿A dónde vamos?" expresé mi desconcierto, pero tomé su mano.

"Hacia mi dormitorio para que pueda hacer las paces contigo", dijo Emily con voz ronca...

=================

169
Capitulo 11
Sentí a Emily temblar y temblar como loca. Su cuerpo perfectamente formado convulsionó por
cuarta vez en éxtasis lujurioso. Mis labios viajaron hacia arriba y alcanzaron su ombligo. El
estómago le subía y bajaba rápidamente cuando la oír reír y jadear al mismo tiempo. Una de sus
manos estaba agarrando mi pelo mientras que la otra estaba en su frente.

"Mierda", ella resopló y tragó con dificultad. Sonreí levemente ante su reacción y sentí algunos
espasmos a través de su cuerpo. Haciendo mi camino más arriba, planté un montón de besos por
sobre su piel caliente antes de encontrarme con los labios suaves. Ella suspiró con cansancio y,
probablemente, con satisfacción. Sus manos se entrelazaron detrás de mi cuello, pero me acosté
al lado de ella, guiándola a unirse a mí. Ella lo hizo y necesité de un momento para que todo
fluyera.

"Eso fue increíble", Emily sonrió y dio un tierno beso en mi cuello mientras le acariciaba el brazo
con suavidad. "Casi me arrepiento de haber esperado tanto", agregó con una risa sin aliento.

"¿Sólo casi?" cuestioné con una pequeña sonrisa y sentí que tiró una manta sobre nosotras.

"Sin embargo, valió la pena, ¿Verdad?" mi ex amor de secundaria preguntó mientras nos
recuperábamos de nuestra sesión.

"Sí, absolutamente", acepté sin dudarlo y besé su frente.

Pero esa no era la verdad.

Sí, había sido increíble. Mejor que la mayoría de los encuentros sexuales de mi reconocido pasado
no tan inexperto. Era la primera vez que me había acostado con alguien después de Camila. Yo
sabía que estaba mal, pero no podía dejar de sentirme...decepcionada. Me encogí internamente
porque sonaba horrible, siquiera en mi cabeza. No era justo comparar y lo sabía. Y si no fuera por
mi compañera de equipo, de ojos marrones, estaba segura de que esto se habría sentido como el
máximo nivel de intimidad.

No era que Emily no había sido cariñosa y agradable, pero me acordé de los fuegos artificiales que
sentí tan pronto como Camila me había tocado de una manera esa noche en New York. Había
sentido en fuego, pero perfectamente contenida al mismo tiempo. La intensidad de esa noche fue
inigualable. Por primera vez, había sentido algo más allá del aspecto físico de dormir con alguien.
Era tan estúpido, pero tal vez ahí estaba la diferencia entre hacer el amor con alguien en lugar de
tener sexo.

Yo sabía que no estaba enamorada de Emily... ¡Todavía! Pero hasta ahora, no me había dado
cuenta plenamente de que todavía estaba enamorada de Camila, incluso esa noche en New York.
No había estado con ella sólo por tener ganas de estar con alguien de la manera más íntima
posible - no por venganza o diversión.

170
Y ahora que sabía cómo me sentía, estaba más que en conflicto acerca de cómo manejar las cosas
con Emily. Nos estábamos tomando las cosas con calma y todavía había una posibilidad de
enamorarme de ella. No todas las relaciones tenían que ser explosivas. Esa naturaleza intensa de
mis sentimientos por la centrocampista izquierda había causado muchos sentimientos negativos
en forma de corazones rotos y dolor. Una conexión más leve no era necesariamente una cosa
mala. Era cómodo y fácil. Camila fue mi primer amor y se supone que siempre eran los más
intensos. El primer corte es el más profundo; recordé una canción de Cat Stevens y quise
golpearme por ser tan cursi.

El acto de equilibrio entre darle a Emily una oportunidad real y no sentirme culpable por la
posibilidad de caer por ella me estaba matando. Pero lo intenté lo mejor que pude.

Por desgracia, no funcionó.

Por mucho que quería, no había duda que después de casi tres meses mis sentimientos nunca iban
a llegar a más. Ella me gustaba mucho y estaba sin duda atraída por ella, pero se hizo evidente
para mí porque no podía darle mi corazón totalmente. Todavía pertenecía a otra persona. Camila y
yo rara vez habíamos hablado desde el campo de entrenamiento en Arizona. Las dos estábamos
centradas en el fútbol y no había ninguna animosidad o rareza en absoluto. Era cordial, pero tuve
que distanciarme por lo menos para darle una justa posibilidad a mi relación con Emily. Y la tuve.

Había visto a la modelo rubia hace dos semanas para terminar las cosas. La ruptura no fue tan
mala como pensé inicialmente. Ella parecía estar en la misma página y la separación fue bastante
amigable. No pude evitar la sensación de que Emily sabía de mis sentimientos por otra persona
aunque no lo había dicho. Ella no estaba enojada, lo que lo hizo peor de alguna manera. Yo quería
asegurarme de que ella supiera lo mucho que la apreciaba. Ella me había mostrado que tuve la
oportunidad de comprometerme en una relación, en una a larga distancia, sin desmoronarse por
todas las presiones que me puse a mi misma. Había disfrutado de mi tiempo con ella y estaba más
que agradecida por haber tenido una maravillosa experiencia con ella.

Terminar con Emily fue difícil. Decirle a Camila como en realidad me sentía era más difícil.

Habían pasado dos semanas desde mi ruptura y yo todavía no encontraba el valor para decirle a
mi compañera de equipo lo que estaba pasando en mi cabeza. En realidad, no quería decirle
porque ella parecía estar feliz con Ariana. Su vida había sido un desastre y yo no podía arruinar su
felicidad, ¿Verdad? Por supuesto, también estaba el hecho de que tenía miedo de que ella ya no
se sintiera de la misma forma. Esa posibilidad era más que probable y yo era un cobarde. No
quería que me dijera que era demasiado tarde. ¿Tal vez ellas terminarían en algún momento?
Odiaba la idea de ser una rompe-hogares. Pero la alternativa de esperar no era demasiado
atractiva tampoco.

Tenía que esperar el momento adecuado...si alguna vez hubo tal cosa.

********************************************************************************

171
Arreglé mi maleta y mis cosas, la práctica había terminado y ya estaba duchada antes de agarrar
mi bolso. Justo cuando estaba a punto de salir, escuché a Camila hablar por teléfono
agitadamente.

"¿Qué quieres decir con enferma? ¿Tiene fiebre? No, no hagas eso. Volveré a casa de inmediato.
Sí, gracias. Adiós."

A pesar de que sólo había oído un fragmento de la conversación no me atreví a salir de los
vestidores sin antes dirigirme a mi compañera de equipo. No habíamos hablado desde hace
mucho y eso fue en parte culpa mía, pero había estado tan estresada acerca de cómo manejar la
situación.

"¿Camila? ¿Está todo bien?" pregunté preocupada y vi cuán angustiada estaba la más joven.

"Mi niñera acaba de llamar. Al parecer, Lara ha estado vomitando y no deja de llorar", la voz de
Camila se llenó con miedo mientras intentaba echar su ropa en el bolso. "Tengo que ir a casa de
inmediato."

"Puedo llevarte si quieres", le ofrecí y noté sus manos temblorosas.

"No tienes que hacer eso. Estoy segura de que alguien más vive más cerca que podría-"

"Camila", la interrumpí con dulzura y cogí sus dos muñecas suavemente para hacer que se
detuviera por un segundo. "Toma una respiración profunda", le dije y, finalmente, vi los ojos
marrones que se encontraron con los míos durante más de una mirada frenética. Ella exhaló con
fuerza y sus hombros se relajaron al menos un poco.

"Lo siento, es que ella nunca se ha enfermado antes y tengo que llegar donde ella", la de ojos
marrones explicó más serena.

"Muy bien, entonces voy a llevarte. Insisto porque quiero asegurarme de que ella está bien
también", le contesté, mientras sus rasgos faciales se suavizaron.

"Ok", suspiró ella y yo regañadientes le solté las muñecas. No era el momento adecuado para
decirle en el lío que estaba con mis sentimientos por ella, eso era seguro. Así que me concentré en
ayudarla y ser un buen amigo. Por no hablar de que estaba realmente preocupada por Lara. Al ver
la ansiedad de la joven madre aceleró mi pulso al instante. La llevé en mi auto y conduje tan
rápido como pude sin ponernos en peligro, por supuesto.

Al llegar a su departamento, yo llevaba el bolso de Camila porque ella lo había olvidado por
completo en su prisa por salir de mi coche. Corrí tras ella y la vi entrar a través de la puerta. Un
escalofrío recorrió mi espalda cuando escuché a Lara llorando desde el pasillo. Su llanto sonó tan
intenso y lleno de dolor que me revolvió el estómago. A toda prisa siguiendo a Camila dentro, vi a
la mujer de más edad quien era la niña sosteniendo a la niña de tres años antes de pasársela a
Camila.

172
Lara estaba llorando histéricamente y me sentí completamente abrumada, pero quería hacer algo
para ayudar.

"Está bien, bebé", Camila susurró con dulzura mientras mecía a su hija en sus brazos.

"Mi...panza duele...mucho", la pequeña de ojos color avellana sollozaba incontrolablemente.


Camila le pagó a la niñera y la mujer mayor se fue cuando encontré algo de compostura, para al
menos, dejar el bolso de mi compañera de equipo.

"Ok, vamos a ver", Camila puso su mano en la frente de Lara. "Estás ardiendo. Creo que tenemos
que ir a ver al Dr. Philips, ¿Bien cariño? Ella hará que te sientas mejor, lo prometo."

"Deja que te lleve", de repente solté y aparentemente le recordé que no estaba sola. "No tienes
un auto, ¿Verdad? No te puedo dejar tomar el autobús cuando Lara se siente tan mal."

"Gracias", ella no protestó ahora lo cual era un alivio. Lara todavía no me reconocía, pero eso no
me estaba preocupando. Lo que me preocupaba era lo preocupada que estaba Camila.
Probablemente no era nada malo, pero la joven madre parecía llena de pánico. Ella estaba
buscando su bolso y parecía completamente desorientada cuando me decidí a intervenir de
nuevo.

"Vamos, déjame sostener a Lara por un momento y así puedes buscar tu tarjeta de seguro o lo que
sea que estás buscando", le dije y abrí los brazos. Hubo un segundo de vacilación, ya que ella no
quería soltar a Lara, eso era comprensible, pero tenía que calmarse un poco. La pequeña niña de
pelo marrón claro estaba en mis brazos ahora, ella seguía llorando. Le froté la espalda
confortablemente y la dejé descansar contra mi pecho hasta que su mamá estuvo lista para irnos.

Todo lo que transcurrió después fue como un borrón. Las llevé al pediatra y me senté en la sala de
espera como una madre. Era extraño...pero agradable. Por supuesto las circunstancias no eran las
ideales con Lara enferma pero un hombre mayor se sentó conmigo y me preguntó si estaba
esperando a mi hijo también. Decidí simplemente asentir a pesar de que no era verdad. En cierto
modo, definitivamente estaba metida en su familia y esa mentira no causaría ningún daño.

Pero me encontré conduciendo a casa con Camila y una muy agotada Lara alrededor de una hora
más tarde. Lara tenía gripe estomacal. Eso explicaba los calambres estomacales, náuseas y fiebre.
El medicamento por lo menos había aliviado el dolor del niño. Ella estaba exhausta y ninguna de
nosotras hablamos en el camino. Cuando estuvimos de vuelta en su departamento, no sé por qué
subí de nuevo, pero lo hice. Camila arropó a Lara mientras yo miraba por alguna razón.

"Te voy a hacer un poco de sopa, cariño. ¿O quieres dormir primero?", preguntó la madre soltera y
acarició el pelo de Lara.

"Tengo hambre", la voz aguda confesó.

"Ok, entonces déjame hacer algo realmente rápido."

173
"No quiero estar sola. Mi panza todavía me duele un poco", dijo Lara en voz baja y se centró por
primera vez en mí. "¿Puede Lauren quedarse conmigo?"

Ambos pares de ojos se posaron en mí y sonreí al instante.

"Claro, pequeña", le respondí, sin titubear para calmar a las dos. Poco a poco me acerqué a ellas,
Camila se levantó y reclamé su asiento en el borde de la cama antes que ella se fuera. Puse mi
mano sobre el estómago de Lara y le acaricié la zona adolorida con dulzura que estaba cubierta
con una manta suave y esponjosa. Era la primera vez que veía su habitación y me di cuenta de una
gran cantidad de imágenes aparentemente que ella había colgado en la pared.

"Puedes acostarte a mi lado", Lara ofreció sorprendentemente y yo no estaba segura de si eso


estaba bien. No sólo temía que la cama pequeña no pudiera resistirme pero no habíamos estado
cerca desde hace un tiempo. Lo último que quería era que Camila pensara que estaba
sobrepasando los límites. "Por favor", la niña añadió suplicante y no pude negarme a su deseo por
más tiempo. Sacándome mis zapatillas de deporte, no fue fácil caber en el pequeño espacio en su
cama pero nos las arreglamos para hacerlo. Estaba más allá que encariñada ya que ella quiso
compartir su pequeño espacio conmigo a pesar de que probablemente estaba cansada.

"¿Te sientes mejor?", le pregunté con cuidado y la vi asentir.

"Se siente mejor cuando tocas mi panza", respondió ella, y puse mi mano sobre su estómago.
Sonreí antes de continuar con mi masaje suave para aliviar su dolor. Ella era sin duda la cosa más
adorable del planeta. Moviendo mi mano en círculos suaves, su respiración se tranquilizó antes de
cerrar los ojos.

"¿Me puedes cantar algo?" preguntó ella de repente.

"Um, no puedo cantar", respondí simplemente y me sorprendió lo autoconsciente que me sentía


en torno a un niño pequeño.

"¿Por qué?"

"No, quiero decir...técnicamente puedo cantar, pero no sueno muy agradable", traté de explicar y
la vi abrir los ojos de nuevo para mirarme.

"Por favor. Mamá siempre me canta cuando me voy a dormir", dijo con un mohín la niña de tres
años.

"¿Lo hace?" estaba realmente sorprendida.

"Sí, y ella tiene muy buena voz", ella hizo saber con orgullo en su pequeña voz.

"Ni siquiera conozco canciones de cunas", confesé.

174
"Canta lo que quieras", respondió Lara y tragué con dificultad. Ella era persistente, pero no quería
decepcionarla.

"Bueno, entonces voy a tratar de cantar lo que sea", le susurré sumida en las pensamientos y seguí
acariciándole el estómago. ¿Cómo era posible que no se me viniera ninguna canción a la cabeza en
este momento? La primera canción que se me vino a la cabeza parecía tan estúpida, pero no podía
pensar en otra cosa. Aclarando mi garganta con suavidad, estaba desconcertada de lo nerviosa
que estaba. Mi corazón latía demasiado rápido pero la tensión disminuyó tan pronto como
empecé a cantar en voz baja. No había ninguna necesidad de que alguien nos oyera y Lara estaba
a pocos centímetros de distancia.

"Waited for your call, for the moon(Esperaba tu llamada, y por la luna)

To realese me from the longest afternoon(Para liberarme de la tarde más larga)

I've re-arranged parts of my living room (He reorganizado partes de mi sala de estar)

But time is hard to kill since I meet you(Pero el tiempo es difícil de matar desde que te conocí)

Looking at the cars that drive on by(Mirando a los autos que pasan)

While spring is making promises outside(Mientras que la primavera está haciendo promesas ahí
fuera)

Red cars are quite rare I realice (Los autos rojos son bastante raros, me doy cuenta)

Then I wonder wich color you like(Entonces me pregunto que color te gusta)

Seven little numbers(Siete pequeños números)

Baby, they could be a start(Nene, podrían ser un comienzo)

Seven little numbers(Siete pequeños números)

Baby, I know yours by heart(Nene, conozco los tuyos de memoria)

Woo-oh, oh-oh, all the pretty things that we could do(Todas las cosas bonitas que podríamos
hacer)

Woo-oh, oh-oh, I feel you in every heart beat(Te siento en cada latido del corazón

Woo-oh, oh-oh, were you ever in a dream that could come true(Fueron alguna vez en un sueño
que podría hacerse realidad)

These numbers could be lucky for you(Estos números podrían traerte suerte)

175
Watch the sky change to a darkened blue(Miro el cielo cambiar a un azul más oscuro)

I can't think of another thing to do(No puedo pensar en otra cosa que hacer)

And every song just makes me think of you(Y todas las canciones me hacen pensar en ti)

Because the singer sounds as if she was longing(Porque la cantante suena como si estuviera
nostálgica)

As if she wants longing, too(Como si también estuviera nostálgica)

[Chorus][Coro]

I read you name on every wall, on every wall - tell me(Leo tu nombre en cada pared, cada pared,
dime,)

Is there a cure for me at all, for me at all - tell me(Hay una cura total para mí, para mí, dime,)

I read your name on every wall, on every wall - tell me(Leo tu nombre en cada pared, cada pared,
dime,)

Is there a cure for me at all, for me at all(Hay una cura total para mí, para mí)"

Eso fue todo lo que canté antes de parar en seco. Me di cuenta que Camila estaba de pie en la
puerta y me miraba fijamente. Hasta ahora sólo había mirado a Lara para asegurarme que estaba
bien cantando en un susurro. Mierda, fue mi primer pensamiento; seguido de una sensación de
horror y vergüenza. En retrospectiva, me di cuenta de la verdad de la letra, aunque yo no había
elegido esa canción conscientemente. Eso sólo ocurrió. No se podía negar que en mi final esas
palabras, o el tema de la canción, tenían una conexión con todo lo que estaba experimentando
cada vez que estaba cerca de la joven que me estaba mirando...todas las cosas bonitas que
podríamos ser eso resonaba en mi cabeza.

Estaba tan preocupada por haber sido pillada que no me di cuenta que Lara se había quedado
dormida. Mis ojos estaban clavados en los de chocolate-marrón. No importa cuánto lo intentara,
no podía leerlos. ¿Ella estaba encariñada? ¿Sorprendida? ¿O simplemente horrorizada? No tenía ni
idea. De lo que estaba seguro era de la sensación de calor en mis mejillas.

"Eso fue muy bueno", Camila sonrió y trate de actuar indiferente cuando internamente mi pulso
estaba por las nubes. Finalmente rompí el contacto visual y dejé caer mi mirada para ver a la niña
pequeña durmiendo tranquilamente. Por lo menos mi canto no le había hecho temblar, pero sí
descansar. Como no quería despertarla, me moví con mucho cuidado y me las arreglé para salir de
la cama sutilmente.

"No estoy segura de cómo se durmió conmigo chillando pero-", hablé con auto-desaprobación
mientas me aproximaba a mi compañera de equipo que todavía estaba apoyada contra el marco.

176
"Yo tampoco, para ser honesta", se burló de mí con esa firme sonrisa que me hizo saber que
estaba bromeando.

"Bueno, gracias", me reí y me apoyé en el otro lado de la estructura de madera, así estábamos
frente a frente. "Le canto a tu hija para que se quede dormida y todo lo que consigo son insultos."

"Con toda seriedad, Lauren", Camila cambió el tono de nuestra conversación y sus expresiones
faciales eran más sinceras. "Gracias por lo de hoy. No sólo por llevarnos, pero...fue bueno tener a
alguien como presencia de tranquilidad allí. Yo estuve a punto de perder los estribos."

"Lo sé", respondí con una sonrisa suave. "Te he visto enojada o nerviosa en el campo, pero estabas
en otro nivel de ansiedad hoy. Me alegro de que no fuera algo más grave y haber ayudado."

"Lo has hecho y no puedo agradecerte lo suficiente", el centrocampista izquierda me dedicó una
suave sonrisa que hizo que mi corazón se agitara por la perfección.

"No tienes que darme las gracias. De un modo extraño...como que lo disfruté", dudé un poco con
mi respuesta.

"¿Cómo es eso?" mi compañera parecía intrigada pero confundida al mismo tiempo.

"Ha pasado un tiempo desde que pasamos un rato juntas...he extrañado..." te he extrañado a ti
dije en mi cabeza, pero sentí un nudo en mi garganta. No era tan difícil de decir, ¿Verdad? "He
extrañado a Lara", le dije en su lugar y suspiré internamente. ¿Cómo se supone que le iba a decir
cómo me sentía si ni siquiera podía admitir que la extrañaba?

"Sí, ha sido un tiempo", Camila estuvo de acuerdo, pero esquivó mis ojos. "Hemos estado bastante
ocupadas, supongo. De todos modos, ¿Cómo está Emily?"

Mi corazón dejó de latir en mis entrañas. Ella todavía no tenía idea de que había terminado con
Emily, hace dos semanas, y tal vez este era el momento adecuado para decírselo. Después de
todo, ella me estaba preguntando por Emily y yo no había dicho nada impulsivamente sólo por el
bien de ella.

"Um, en realidad-", empecé, pero fui interrumpida por el sonido de la puerta. Apenas unos
segundos más tardes Ariana entró con su juego de llaves al parecer. El órgano de bombeo tomó
otra inmersión. La otra mujer joven con el pelo más claro parecía sorprendida de verme y yo me
tensé al instante.

"Hey", saludó con dudas antes de dirigirse a Camila. "Te he estado llamando todo el día. ¿Está
todo bien?"

"Lo siento, mi teléfono murió y fue un día agitado", dijo Camila en tono de disculpa y vi a Ariana
inclinarse. Por supuesto no tenía idea de lo que se sentía tener el corazón retenido entre un
montón de agujas, pero me imaginaba que se sentía igual-el pequeño beso entre ambas parecía

177
tan de costumbre y perfectamente cómodo que mis niveles de celos llegaron a un máximo
histórico. Tomé una respiración muy profunda para parecer imperturbable.

"Lara tiene gripe estomacal y Lauren me ayudó a llevarla al doctor", la más joven explicó y sentí a
Ariana mirándome.

"Eso fue muy amable de tu parte. ¿Lara está bien?" la novia de mi compañera preguntó
preocupada.

"Sí, ella estará bien. No te preocupes", la otra jugadora de fútbol apaciguó y sentía que los celos
eran cada vez peores con el paso de los segundos. "Lo siento, Lauren. ¿Qué decías de Emily?"

Estuve congelada por un momento. Cuando vi a las dos y ver cómo realmente eran felices y
unidas, no me atreví a decir la verdad por alguna razón.

"Emily está muy bien", le dije sencillamente pero fingí una sonrisa lo mejor que pude.

"Eso es bueno de escuchar", Camila asintió suavemente. "Asumo que ¿Estará en la final de los
play-offs ya que ella vive en New York?"

"No, ella está...fuera de la ciudad en algún asunto de modelaje", estaba mintiendo totalmente y
me odiaba aún más por ello. ¡¿Por qué tan sólo no le dije la verdad, por la mierda?! Nos
enfrentaríamos contra Western New York Flash para el juego final de mañana. Era todo o nada. El
campeonato estaba tan cerca y tenía que ganar ese juego sí o sí. Después de todo, tanto Camila y
yo habíamos contribuido mucho para llegar a los play-offs. Una victoria más y lo tendríamos en la
bolsa.

"Oh, eso es muy malo. Pero estoy segura que te apoya en espíritu", mi compañera quería
animarme mientras que yo sólo quería irme en este momento.

"Sí, quizá", murmuré incomprensiblemente. "Pero me tengo que ir. Nos vemos pronto entonces."

"Ok, te acompaño a la puerta", Camila ofreció cortésmente.

"No, está bien. Conozco la salida. Cuídate, Ariana", añadí tan amable como pude antes de
empujarme a mí misma fuera del marco de la puerta.

"Tú también", Ariana correspondió.

"Adiós", Camila suspiró mientras le di una última mirada a Lara. Mi maldito corazón nunca se
había sentido tan desgarrado. Parecía que había demasiadas emociones que trataban de
obstaculizar ese espacio que estaba a punto de estallar. Suspirando en voz muy baja, me alejé y
salí del departamento.

El tiempo definitivamente no estaba de mi lado cuando se trataba de Camila.

********************************************************************************

178
Esto era todo. Habíamos luchado toda la temporada para este momento. Un partido final y había
una victoria que nos separaba del título de campeón. Con sólo minutos por jugarse el último
partido, el marcador estaba a 1-1.

Había anotado muy temprano en el juego, pero nuestros adversarios nos habían empatado en el
segundo tiempo. Ya era hora de concentrarse. Todo el duro trabajo que habíamos hecho tenía que
servir. Western Flash estaba atacando con furia en los últimos diez minutos, y estábamos tratando
de defender nuestros traseros.

Pero luego me las arreglé para robar el balón para nuestro equipo y está era nuestra oportunidad
para un contraataque. Corriendo como loca, Camila y yo nos cruzamos e intercambiamos
posiciones. Yo estaba corriendo por el lado izquierda con el balón sin esfuerzo aferrándose a mis
pies en la increíblemente rápida corrida. El defensor estaba justo detrás de mí, pero yo sabía que
mi compañera de equipo se había posicionado a la perfección. Mirando hacia arriba por sólo una
fracción de segundo, Camila casi había alcanzado el punto de penalti. Fue entonces cuando di un
impecable pase cronometrado para ella.

Todo sucedió en cámara lenta, sino también en alta velocidad. Todo lo que vi fue a la
centrocampista izquierda arrastrando el balón al fondo de la malla. El contraataque fue manual y
perfecto que sumó un punto para la temporada en la que Camila y yo habíamos mostrado un gran
rendimiento.

Antes de darme cuenta, mi compañera de equipo de ojos marrones estaba corriendo hacia mí y
me aplastó con un abrazo más fuerte del mundo. Envolviendo mis brazos alrededor de su cintura
mientras que los suyos estaban alrededor de mi cuello, sentí cada centímetro de su cuerpo contra
el mío. Yo nunca celebrara tanto durante un partido; por lo general. Ser capaz de permanecer en
el modo de juego era algo que me enorgullecía pero este momento significaba más que el
campeonato. Fue la gota que derramó el vaso. Ya no se podía negar más; la amaba.

Enterrando mí cara en el hueco de su cuello, todos los jugadores formaron un círculo alrededor de
nosotras en este momento, pero ninguna de nosotras nos dejamos ir. Me recordó a nuestra
victoria en el campeonato de la Sub-17 en Costa Rica. Nuestros papeles se habían invertido donde
yo le estaba dando la ayuda para ganar la final. Ese fue el comienzo de nuestra montaña rusa y era
extraño pensar que estábamos aún en la vida del otro, después de todo lo que había sucedido. Eso
tenía que significar algo, ¿Verdad?

Nuestro abrazo tuvo que terminar en algún momento, pero el partido terminó a sólo unos
minutos después. Ahora todo el mundo estaba celebrando y yo tuve problemas para mantenerme.
El siguiente par de horas pasó por mi mente en una bruma. Era demasiado para procesar. En
realidad habíamos ganado el campeonato. Por supuesto que todos queríamos celebrar y
decidimos salir después del partido. New York era el lugar para hacerlo, después de todo.

Kristie se perdió antes de haber llegado al club, pero no me importó. Era bien merecido pero
quería brindar con una cierta compañera de equipo que había anotado el gol decisivo. Camila no

179
estaba por ningún lado, pero yo ya había conseguido dos tragos para nosotras. Les pregunté a
algunas personas donde estaba y me revelaron que ya había regresado al hotel. Estaba más que
sorprendida. Ella era la súper estrella de esta temporada y la heroína de esta noche. Si alguien se
merecía un trago era ella.

Conociéndola, tenía sentido que no estuviera con nosotros celebrando. Por mucho que Camila
había cambiado, seguía siendo la adolescente introvertida en el fondo de su corazón. Por no
hablar que tenía una hija enferma en casa y probablemente estaba muy preocupada otra vez.

No pasó mucho tiempo para que lo decidiera y estaba de regreso al hotel después de media hora.
Al llegar a mi habitación, abrí el mini bar y mezclé dos tragos de vodka y limonada. Si Camila no iba
a ir al club para conseguir su bebida, entonces se la llevaría. Evidentemente nerviosa, estaba de
pie delante de su puerta y toqué suavemente. ¿Y si ella estaba durmiendo? Mi sospecha no fue
confirmada por suerte cuando la vi abrir.

"¿Lauren?" dijo muy sorprendida, pero sonrió de la manera que hizo a mi corazón aletear. "¿Qué
estás haciendo?" ella casi sonrió y miró las copas en mis manos.

"Mira, ganamos el campeonato y...de verdad hay una sola persona con la que quiero tomar esta
noche", le dije son sinceridad y el alcohol en mi sistema me estaba ayudando a relajarme.
Definitivamente no estaba borracha, pero un poco achispada y por lo tanto más valiente.

"No tenías que hacer eso", respondió Camila y le di un primer vistazo. Llevaba pantalones cortos y
una camiseta sin mangas que probablemente usaba para dormir.

"Bueno, yo quería. Sólo una bebida y te dejaré dormir, es una promesa", hice mi mejor sonrisa que
había encantado a muchas chicas en el pasado, a pesar de que sólo estaba interesada en la
encantadora chica que estaba delante de mí en este momento.

"Ok, adelante", la más joven aceptó mi oferta y la seguí adentro. Sus maletas ya estaban listas, y
supuse que estaba ansiosa por volver a Lara.

"¿Lara está mejor?" le pregunté sinceramente antes de entregarle la copa.

"Sí. Acabo de hablar con Ariana y al parecer ella se está recuperando muy rápido", me informó,
aunque el nombre de su novia provocó un dolor punzante en mi pecho una vez más.

"Entonces tenemos una razón más parar celebrar", estaba concentrada en tener por lo menos un
momento con ella antes de que la temporada terminara. Me di cuenta que ya no nos íbamos a ver
todos los días en la práctica. Todavía estaba USWNT y los bootcamps pero eso no comenzaría en
corto plazo tampoco. No iba a verla por un tiempo si no hacia un esfuerzo para por lo menos ser
su amiga de nuevo. Durante los últimos meses nos habíamos alejados por elección. Sin embargo,
ella siempre había estado allí. Ahora que me enfrenté con la realidad de estar separadas sin otra
opción, le dio calambres a mi corazón.

180
"Muy bien, entonces, ¿Por qué estamos brindando?" ella levantó su copa y me miró
inquisitivamente.

"Por nosotras", solté y la vi levantar las cejas con sorpresa. "Quiero decir, hemos recorrido un
largo camino. Es surrealista pensar eso a veces. Y para ser honesta, yo nunca habría pensado que
estaríamos aquí...juntas en un sentido", seguí adelante mientras mi pulso se aceleraba
rápidamente.

"A partir desde las categorías inferiores y ahora las dos estamos en el equipo femenino...y
acabamos de ganar el campeonato de la liga. Tienes que admitir que es bastante impresionante."

Sus labios formaron una sonrisa que haría a cualquier persona débil y no pude contenerme pero
me pasó lo mismo.

"No es por alardear de nuestra propia corona pero jugamos una buena temporada, o la mitad de
la temporada en mi caso", ella estuvo de acuerdo y asentí inmediatamente.

"Exactamente. Así que, esto es por nosotras", acerqué mi copa y dejé tintinear la mía con la de ella
mientras no dejaba de mirarla.

"Por nosotras", confirmó antes de que ambas diéramos un gran sorbo. No era muy fuerte, porque
no quería que ella pensara que estaba tratando de emborracharla o algo así. ¿Qué es exactamente
lo que quería?

Tomando otro gran trago, el líquido del vaso ya se había ido. Vi los ojos de Camila agrandándose
pero no aparté la mirada. Por alguna razón no podía. Lo sentí: esa tensión-atracción entre
nosotras, que hizo que todo mi cuerpo temblara por la expectación y nervios. Fue justo esa
sensación, que nunca había sentido con Emily y me aseguró que había tomado la decisión correcta
al terminar con mi ahora ex novia.

Dios, ella estaba tan cerca. Todo lo que tenía que hacer era dar un paso y me gustaría haber sido
capaz de hacer lo que mi corazón me decía. Al parecer Camila se congeló. Había un poco de
nerviosismo detectable en las esferas cafés. Su sonrisa se había ido. Tenía el aspecto de un ciervo
en los faros mientras mis ojos esmeraldas perforaban los de ella.

Se sentía extrañamente familiar estar con ella allí. La última vez que había estado en New York, en
el mismo hotel, habíamos dormido juntas. El mero recuerdo de esa noche tenía dando vueltas mi
cabeza ahora. Hubiera sido una mentira decir que no quería que sucediera de nuevo. Yo no estaba
anhelando el sexo. Si había aprendido algo de haber estado con la chica más joven, era que había
mucho más que algo físico en ello. Pero yo ni siquiera estaba anhelando eso. Yo quería más. La
quería a ella de todas las formas y no sólo por una noche.

Inhalando profundamente, di un paso hacia ella y tomé su copa de las manos, colocando ambas
suavemente en una mesa al lado de nosotras. Toda su postura cambió y pareció endurecerse.
Hubiera dado todo por saber lo que estaba pasando en su cabeza. Era todo o nada en este punto.

181
De pie justo en frente de ella, exhalé en silencio y la vi tragar. Ninguna protesta. Nuestros rostros a
pocos centímetros de distancia, ya no podía aguantar más, y me fui inclinando lentamente. Mis
ojos se cerraron y ese momento antes del beso real era lo peor. Inconscientemente me preparé
para que me alejara.

No lo hizo.

En cambio, me encontré besando los labios suaves con ternura. Su respiración era inestable y casi
podía sentir su lucha interior. Ella correspondió ligeramente, pero sólo lo suficiente para saber que
no la estaba forzando de ninguna manera. Su labio inferior temblaba entre los míos y lo capturé de
nuevo con la misma cantidad de afecto. Desplacé una mano en su cintura, dejé que la otra vagara
por su mejilla y tomé su rostro con cariño. Fue indescriptible lo que sentí. Cada centímetro de mi
piel ardía mientras mi mente estaba en blanco. En todo lo que estaba centrado era en la joven que
estaba correspondiendo el beso.

Sus manos agarraron mi pollera y sentí que temblaron ligeramente antes de agarrar el tejido con
más fuerza. La resistencia se estaba desmoronando y eso me hizo más valiente, separando mis
labios y dejando que mi lengua saboreara su labio inferior. Camila exhaló laboriosamente de lo
que parecía ser su lucha interna. Inclinando la cabeza hacia un lado, mi mano se movió a la parte
posterior de su cuello y demostré una cierta dominancia que era natural para mí. Sus labios se
abrieron por fin un poco y no perdí tiempo para explorar el calor de su boca con mi lengua.

Tirando de ella más cerca, nuestras caderas se tocaron y mi compañera de equipo se quedó sin
aliento. Yo estaba fuera de la razón por ahora y toda la tensión acumulada estaba a punto de
liberarse. Mi boca abandonó la de ella porque quería saborear cada centímetro de su piel suave.
Besé desde su mandíbula hasta su oreja, me detuve allí para chupar el sensible lóbulo de su oreja.
La muchacha delgada gimió de manera reprimida y alimentó mi fuego con ese sonido. Planté un
par de besos húmedos en su cuello y saboreé el aroma de su champú. Ella ya estaba jadeando
cuando mi mano se deslizó por debajo de su blusa y comencé a acariciar arriba abajo por su
columna vertebral.

"No, detente", dijo la voz entrecortada de la nada y me empujó. Por supuesto que me detuve y
sentí a mi corazón palpitante en el pecho. "Yo...no puedo hacer esto. Tienes que irte", Camila
exigió con voz temblorosa.

"¿Y si no quiero?" respondí también sin aliento debido a mi 'trabajo' en su cuello.

"Por favor, Lauren, hemos pasado por esto y no podemos permitir que esto vuelva a suceder-"

"Camila-", quería interrumpirla y decirle que no se trataba de una cosa de una sola noche esta vez,
pero ella se alejó a toda prisa.

"Fuera", sonaba a punto de llorar y abrió la puerta. Mi corazón cayó en picada. "!Ahora!"

182
"Escúchame, por favor", intenté una vez más y me acerqué a ella para ver sus ojos llenos de
lágrimas.

Suspirando con fuerza, no podía obligarla a que me escuchara. Pasando mi mano llena de
frustración por mi pelo, cumplí su deseo y pasé por delante de ella para salir de su habitación. La
puerta se cerró después de un milisegundo y me dejó de pie en la parte exterior. No era así como
había planeado las cosas. No estaba segura de si debería lamentar haberla besado o no. O esto era
un fin o un nuevo comienzo.

Fuera lo que fuera, claramente Camila no podía tomar esa decisión y debía de por lo menos darle
tiempo para tomar esa decisión. Pero me prometí a mí misma no dejarla ir de nuevo.

********************************************************************************

Una semana había pasado desde nuestra victoria en el campeonato de New York. No había oído
de Camila desde entonces. Eso no era demasiado sorprendente teniendo en cuenta nuestro último
encuentro, pero me estaba empezando a preocupar. Ella todavía no tenía ni idea lo que yo quería
y lo mucho que me preocupaba por ella. En su mente, probablemente yo estaba en busca de otra
cosa. Mi idea inicial de darle tiempo resultó ser una tortura. Y ahora que la temporada de fútbol
había terminado, no podía dejar de pensar en ella.

Finalmente decidí hacer algo al respecto y fui a su departamento. En una mano, tenía un dibujo
para Lara ya que le habían gustado mis dibujos antes. Subiendo por las escaleras del complejo de
departamentos, alcancé el apartamento de Camila, pero vi un montón de trabajadores allí. Ellos
estaban limpiando y vi a un hombre mayor escribiendo un par de cosas. ¿Qué demonios estaba
pasando?

"Disculpe", me acerqué al hombre a toda prisa. "¿Podría decirme qué está pasando? Quiero decir,
mi amiga vive aquí. Su nombre es Camila Cabello."

"La señorita Cabello no vive aquí. Su contrato terminó y me dijo que se iba de la ciudad, así que
estamos aquí para sacar sus cosas fuera", el hombre de pelo gris respondió y dejé el caer el
cuaderno de dibujo.

"Dejar la ciudad...que.... ¿Le dijo algo?" balbuceé y recogí el objeto del suelo.

"Se fue hace unos veinte minutos para ir al aeropuerto. Creo que dijo algo acerca de Francia."

La cabeza me daba vueltas. ¿Francia? ¡¿Francia?! Sin una palabra más corrí de vuelta a mi coche y
no podía pensar en este momento. Fue puramente instintivo y nada estaba realmente establecido
todavía, pero necesitaba llegar al aeropuerto. Había tantas cosas que corrían por mi mente, pero
nada profundo. Todo era una bruma. Mi único objetivo era llegar a tiempo para que ella no se
marchara-posiblemente para siempre esta vez.

183
Corrí desde el estacionamiento hacia el destino de abordo y rastreé todos los vuelos. Había un
vuelo a París que abordaría pronto. No pude ver otros destinos franceses y oré para que ese fuera
el indicado. En cuanto llegué, me di cuenta que no iba a ser capaz de pasar la zona sin un ticket.
Rápidamente en busca de cualquier cajero, encontré a uno en línea y le dije que me diera un
billete. La mujer me miró sorprendida y me instó a nombre un destino. Puse el nombre de mi
ciudad natal Miami y finalmente conseguí el billete que necesitaba.

Corriendo como una verdadera loca, me sorprendí a mí misma con la rapidez con la que hice mi
camino a través de las grandes multitudes de personas. Unos metros delante de mí, la vi.
Definitivamente era ella. Estaba sosteniendo la mano de Lara.

"!Camila!", grité sin preocuparme de nada más y me di cuenta que estaba en la fila para subir al
avión. Se dio la vuelta y me quedé sin aliento cuando llegué a ella. Una parte de mí no podía creer
que en realidad lo había logrado. Pero no había alivio en este momento porque todavía ¡Ella
estaba a punto de abandonar el país de mierda!

"Lauren, ¿Qué estás haciendo aquí?" preguntó perpleja, pero se acercó y dejó su lugar en la fila,
por ahora.

"Yo podría...hacerte la misma pregunta", jadeé y empecé a calmarme lo suficiente para hablar.
"¿Qué está pasando? Estaba en tu departamento y me dijeron que ¿Te ibas a Francia?"

"Firmé un contrato con Paris Saint German", Camila reveló y destrozó mi corazón en pedazos.

"No", respiré inadvertidamente y sentí las lágrimas hinchando mis ojos. "¿Por qué no me lo
dijiste?"

"No le dije a nadie en el equipo, pero creo que va a ser una gran experiencia", respondió con total
naturalidad.

"Pero yo no soy más que otra compañera de equipo", solté y no podía mantenerlo por más
tiempo. "Y tú lo sabes. Después de lo sucedido en New York la semana pasada, ¡No puedes
simplemente actuar de esa manera! Ni siquiera tuve la oportunidad de decirte lo que está
pasando."

"Fue un error, Lauren. No tienes que explicarme nada", dijo, pero sacudí la cabeza con
vehemencia, cerca de la explosión. "Estás con Emily y-"

"No estoy con ella", espeté más fuerte que antes y tuve un tiempo difícil para mantener la
compostura porque había otras personas que estaban detrás de la fila para abordar el avión.

"¿Qué?"

"Terminé con ella hace tres semanas", le confesé y mi pecho subía y bajaba de la angustia por la
que estaba pasando internamente. "Quería decírtelo pero estabas feliz y no quería arruinarlo por
complicar las cosas. Pero no estoy imaginando esto, Camila. Cuando nos besamos en New York...se

184
sintió bien. Sé que también lo sentiste. Y nunca me he sentido así por nadie más. Rompí con Emily
porque nunca sentí con ella lo que siento por ti", mi voz temblaba con desesperación y ansiedad
cuando finalmente confesé mis sentimientos.

"No deberías haberlo hecho", Camila susurró pero detecté lágrimas en sus ojos, al parecer ella
continuaba haciendo estragos en mi corazón. Cogí su mano y la sostuve con firmeza.

"No te puedes ir, por favor", le supliqué y mi propia voz se quebró al final.

"Lauren, no-", suspiró y respiró hondo para esconder su propio dolor.

"Te amo", esas dos palabras que nunca le había dicho a nadie salieron de mis labios con un leve
sollozo. Los orbes marrones se agrandaron y se encontraron con los míos. Ella me miró a los ojos,
buscando sinceridad y verdad en ellos y, por tanto, en mis palabras. Mis dedos se cerraron
alrededor de los suyos con firmeza instintiva. Los segundos pasaban como horas en que sus ojos se
movían frenéticamente entre los míos con un brillo vítreo que los cubría. Las dos estábamos a
punto de echarnos a llorar, pero tal vez por razones diferentes.

"Ya es demasiado tarde", Camila susurró y sentí la primera lágrima rodando por mi mejilla.

"No...Te amo", repetí con fuerza aun en la desesperación. "Estoy enamorada de ti y lo he estado
desde que tenía 17 años. Sé que he sido una cobarde por esperar tanto tiempo. Pero esto no
puede terminar así", le dije con voz temblorosa y no pude evitar que mis labios temblaran. "Por
favor, Camila. Estoy suplicando para que me des una oportunidad", seguí y la vi limpiándose sus
lágrimas mientras que yo dejé correr las mías despreocupadamente.

"Lauren, lo siento", susurró ella cargada de emoción y soltó su mano de la mía.

Se había acabado. En realidad había llegado demasiado tarde. No había nadie a quien culpar sino a
mí misma.

No pude decir más. Confesar mi amor por ella era todo lo que tenía. No había nada más que dar. Y
no fue suficiente. Dejé caer los ojos al suelo, yo estaba luchando con mis propios sentimientos que
había embotellado tan magistralmente. Sentía que estaba a punto de romperme y el dolor
agonizante en mi pecho se sentía tan real. No era agujas pinchando, pero era un gran cuchillo
pegado allí mientras Camila había hecho su golpe mortal.

De repente, sentí dos manos ahuecando mi cara suavemente y levantando mi cabeza para
juntarme con un par de labios temblorosos. Apretando los ojos, más lágrimas cayeron de ellos
mientras trataba de saborear el último momento de Camila besándome. No quería saber lo que
significaba. Si se trataba de lástima o una despedida, todas las opciones posibles dolían como el
infierno. Puse mis manos sobre las de ella que todavía estaban ahuecando mi cara antes que
ninguna de las dos pudo mantener el beso debido a nuestra respiración inestable.

Ella me soltó rápidamente y se volvió para reclamar su lugar en la fila.

185
"Lara", me sequé las lágrimas con rapidez cuando vi a la pequeña niña de ojos color avellana. Se
acercó a mí después que Camila le permitió hacerlo. Me agaché y abrí mi cuaderno, sacando el
dibujo para ella. Estaba doblado para que no lo pudiera ver. "Toma, ábrelo más tarde. Lo hice para
ti. Tú...no puedes olvidarte de mí de esa manera", hice mi mejor esfuerzo para no parecer
demasiado triste.

El dibujo mostraba una versión de dibujos animados de Lara jugando fútbol. La caricatura llevaba
el jersey 'Mini CC7' que le había regalado, mientras un montón de otros chicos estaban tratando
de quitarle la pelota. Nunca habría pensado que sería un regalo de despedida, pero lo era ahora.
Me mató pensar que no sería capaz de oír su risa adorable cuando me decía panqueques.

"No llores, panqueques. Te echaré de menos también", Lara palmeó suavemente mi cara y eso fue
aún peor. Sonreí con valentía y tragué mis lágrimas con dureza. Sus pequeños brazos se pusieron
alrededor de mi cuello para darme un abrazo y froté suavemente su espalda. No quería dejarla ir,
pero Camila la llamó porque tenían que irse. Ella se apartó y besó mi mejilla una vez más antes de
agitar su mano y corrió hacia su madre.

Su madre: la joven mujer y yo intercambiamos una última mirada rápida antes de que ella agarrara
a su hija y abordaran al avión a París. Las miré por un momento hasta que se fueron. Por unos
instantes me quedé allí en la negación antes de que la devastación me golpeara. Mis esfuerzos
fueron en vano. Ya era demasiado tarde, la voz de Camila hizo eco en mi cabeza.

Todo este tiempo había esperado el momento adecuado sin darme cuenta que no había tal cosa.

=================

Capitulo 12
Me desperté bruscamente por alguien golpeando mi puerta. Mis ojos se abrieron perezosamente
y tardé unos segundos para darme cuenta de lo que estaba pasando. Acostada en el sofá, me
sequé un poco de saliva cayéndose de mi boca. Asqueroso, me dije a mí misma, pero no podría
importarme menos en este punto. En lo primero que me centré fue en una de las botellas de
cerveza en la mesa de café en frente de mí. Tomé un buen trago de la bebida por completo antes
que golpes continuaran.

"Mierda", murmuré y me levanté de mala gana. Arrastrando los pies hacia la puerta principal, abrí
y vi a Luis y Kristie como responsables del ruido. Sin una decir una palabra, me di vuelta otra vez y
me dirigí de nuevo al sofá que había sido mi 'hogar' por las últimas dos semanas.

186
"Hey, me alegro de verte también, Lauren", dijo Luis lleno de ironía cuando me había seguido
hasta la sala de estar. "Estoy muy bien, gracias por preguntar."

"¿Qué quieres?" le pregunté conmovedoramente mientras mis amigos más cercanos se sentaron
conmigo.

"Esto es una intervención, ok", Kristie respondió y rodé mis ojos al instante. "No has salido de tu
departamento en dos semanas. No hay manera de que puedas vivir en base a pizza y cerveza
siempre. Tuviste un tiempo para revolcarte, pero ya es hora de levantarse."

"Estoy bien aquí, gracias", le respondí con indiferencia y tomé la botella de cerveza en frente de
mí.

"Eso eso...asqueroso", la rubia regañó, así que tomé un sorbo extra grande. Incluso Luis sabía todo
lo concerniente a Camila y su abandono hace dos semanas. Cuando la vi irse, estaba atrapada en
el modo de negación, arrepentimiento y casi depresión. No podía creer que ella se había ido. La
temporada de fútbol había terminado y no tenía nada que hacer excepto que repetir de nuevo ese
momento en el aeropuerto una y otra vez en mi cabeza. Ella me dijo que ya era demasiado tarde y
el último beso fueron las imágenes vívidas.

"Vamos a ir a ese restaurante al que siempre vas dónde está esa camarera grosera... ¿Cómo se
llama?... Ally. Te compraré un desayuno real", Luis sugirió pero fui superada una vez más por otro
recuerdo.

"Ahí es dónde llevé a Camila y Lara la primera vez que nos encontramos aquí en Boston. Esa es la
razón por la que Lara me decía panqueques", recordé y suspiré en voz alta.

"Lo entendemos, ¿Ok? Tienes el corazón roto y todo te recuerda a Camila ahora pero eso sólo
significa que tienes que hacer nuevos recuerdos", Kristie trató de motivarme.

"Exactamente", Luis estuvo de acuerdo, por supuesto, y se acercó más a lo que parecía a la
emoción. "Hay una fiesta en cada de mi amiga esta noche y hay un montón hermandades de
chicas de diferentes universidades. Vamos, Lauren", me dio un codazo y me miró a los ojos
lentamente. "Sólo tienes que salir con las chicas como en los viejos tiempos."

"Realmente no estoy de humor", me negué a su propuesta, aunque yo sabía que él tenía buenas
intenciones.

"No seas tan terca. Sólo necesitas una noche de fiesta para recordar lo que hay allí afuera", el
brasileño siguió su camino. "Y Lexi va a estar allí también. Ella me preguntó si ibas y me dijo que
está súper excéntrica desde la última vez que salieron. ¿Por qué no dejas que te distraiga?"

"No quiero follar con una chica al azar en una fiesta, Luis", respondí con más fuerza, pero
frustrada, al mismo tiempo. Él suspiró y hubo silencio durante unos segundos. "Y además, ¡Lexi es
una lunática de mierda! Hay una diferencia entre ser excéntrica y realmente aterradora", añadí
bromeando acerca de una de mis últimas aventuras y vi a mis dos amigos sonriendo un poco.

187
"Mira, agradezco que estén tratando de animarme, pero...no tengo ganas de salir. Todo lo que
hago es seguir pensando en Camila y el hecho de que he arruinado mis posibilidades."

"Entonces, ¿Qué estás haciendo aquí todavía?" Luis preguntó y elevé una ceja.

"¿Qué quieres decir?"

"Camila no se ha ido para siempre, no está muerta", dije el de ojos marrones y sonrió dulcemente.
"Si realmente sientes algo fuerte por ella, entonces ¡Consigue un billete de avión y ve a visitarla!"

"¿No hablas en serio?" estaba desconcertada con su sugerencia.

"¿Por qué no? Estás fuera de la temporada de todos modos. ¿Qué tienes que perder? Estás hecha
un desastre y todavía es una posibilidad que ella haya dicho 'No' porque estaba a punto de salir
del país", él remarcó. "Si ella dice que se acabó una vez que estés allá, por lo menos tendrás un
cierre. Entonces vas a comprar un costoso y maldito vino francés, te emborracharás, volarás de
vuelta a casa y yo te recogeré en el aeropuerto y te llevaré al dormitorio de Lexi así ella te pueda
sacar la tristeza, o cualquier otra mierda que ella te hizo", añadió con una sonrisa.

Intercambié miradas con Kristie que se encogió de hombros, pero también sonreía. Estaban
hablando en serio. El solo pensamiento de hacer algo tan dramático fue la causa que mi cabeza
girara por los posibles resultados. Pero Luis tenía razón. Yo no tenía nada que perder en este
punto. Ella se había ido y yo tenía que hacer mi mayor esfuerzo si quería alguna posibilidad. Si ella
se negaba entonces volvería a mi departamento y probablemente no lo dejaría por los próximos
dos meses. Por ahora me estaba quedando sin opciones, por lo que un viaje a París parecía ser mi
última oportunidad.

Camila's POV

Mis nervios me estaban matando cuando abrí la laptop y respiré hondo. Era la primera vez que
Ariana había accedido a hablar conmigo, excepto por el intercambio de mensajes de texto en las
últimas semanas. Ser capaz de verla, aunque fuera sólo a través de webcam, era un paso hacia la
dirección correcta.

Estar en París era muy extraño y tuve un tiempo difícil para acostumbrarme al hecho de que ahora
estaba viviendo aquí. Gracias a Dios que no estaba sola. Mi mejor amiga jugaba para el club de
fútbol de París hace dos años. Dinah tenía a su familia en Francia y estaba viviendo con su
hermana, su cuñado y su sobrino. Lara y yo nos estábamos quedando en su gran casa y la verdad
es que era tranquilizador tenerlos cera. Al parecer, el sentimiento era mutuo porque me rogaron
para que me quedara por todo el tiempo posible pero insistí que no quería ser una carga para ellos
y que encontraría un departamento tan pronto como pudiera. Por el momento me alegraba estar
con ellos y quien sabe, quizá me quedaría con ellos más tiempo si realmente no les importaba.

188
Pero eso no era asunto mío, tan pronto como vi el rostro de Ariana en la pantalla. Nuestra
situación no era la mejor, pero quería ver hacia donde nuestra conversación nos dejaría.

Camila: Hey, es bueno verte.

Ariana: Hola, me alegro de verte.

C: ¿Cómo estás?

A: Un poco cansada, pero nada fuera de lo común. ¿Cómo va todo?

C: Ajustando las cosas. Pero estoy tratando de usar el tiempo antes que empiece la temporada
para facilitar las cosas.

A: ¿Cómo le va a Lara con la mudanza?

C: ¡Sorprendentemente bien! Ello lo está haciendo mucho mejor que yo, para ser honesta. Creo
que todo tiene mucho que ver con el sobrino de Dinah que está aquí. Es como si por fin tiene un
hermano lo cual es lindo.

A: Eso suena bien. Me alegra saber que ella está bien.

C: Sí, pero ¿Qué hay de tu reunión con el sello discográfico? ¿Cómo te fue?

A: Me ha ido mejor de lo que esperaba. Voy a volar a Los Angeles la próxima semana para conocer
a algunos ejecutivos de allí. Si los impresiono lo suficiente, entonces firmaré contrato.

C: ¡Oh, Dios mío! Eso es increíble, Ariana. Estoy...tan feliz por ti, no sé ni qué decir.

A: Gracias. Nada está decidido todavía, pero estoy trabajando para hacer las canciones perfectas
hasta la próxima semana.

C: Yo sé que lo vas a hacer muy bien. De verdad te mereces esto. Pero... ¿Te mudarás a Los
Angeles si firmas contrato?

A: Sí. Quiero decir...no hay nada más que me retenga en Boston.

Oí a la chica más vieja suspirar bajo y tragué suavemente. Escuchar sobre su posible contrato con
un sello discográfico era verdaderamente increíble. Sabiendo lo mucho que ella había trabajado,
eso era una gran noticia y nadie se lo merecía más que ella. Ella siempre tarareaba alguna nueva
canción, mientras trabajábamos en el restaurante juntas. O ella le cantaba canciones de cuna a
Lara después de actuar en las tiendas de cafés. Aunque, esos tiempos habían quedado atrás.

Por mucho que amara y apreciara todo lo que el fútbol me había dado en estos últimos meses, me
sorprendí a mí misma extrañando esos tiempos más fáciles. Siempre tenía que recordarme lo
mucho que había luchado durante ese tiempo y que mi nostalgia estaba creando cierta imagen
falsa. Sin embargo, había una cosa que realmente echaba de menos de aquellos tiempos; y era

189
tener a Ariana alrededor. Sus últimas palabras sonaron casi derrotadas y la pequeña charla había
terminado.

C: Te echo de menos.

Dije y sentí mi pulso acelerado, porque no sabía si ella iba a decir lo mismo. Después de todo, ella
había estado muy enojada después de que yo le había contado sobre el beso entre Lauren y yo en
New York. Las cosas se complicaron desde eso por decir lo menos.

A: Bueno, yo estaría mintiendo si dijera que no te echo de menos. Es sólo que...todo es tan jodido
ahora.

C: Yo sé que metí la pata y lo siento mucho.

A: Sé que lo sientes. Y yo creo que fue Lauren quien inició, pero...no puedo...

C: No puedes confiar en mí.

Terminé la frase, porque sabía que ella se sentía de esa manera. Y tenía toda la razón para sentirse
así.

A: Yo confío en ti...pero no con ella.

C: Y lo entiendo muy bien, créeme. Pero Lauren ya no es parte de mi vida. Y no creo que vaya a
verla pronto. Realmente me hubiera gustado tratar de resolver las cosas.

A: Hay tantas cosas pasando en mi cabeza. No puedo decidir ahora. Pero entiendo perfectamente
si tú no quieres esperar a que tome una decisión.

C: Si existe la posibilidad de que me perdones entonces voy a esperar. Te lo mereces.

Vi una pequeña sonrisa, finalmente, que apareció en los labios de la cantante y sus rasgos faciales
se suavizaron. El alivio se apoderó de mí, porque no todo estaba perdido. O eso era lo que
esperaba.

A: Bien, entonces te llamaré pronto. Dale a Lara un beso de mi parte.

C: Lo haré. Hasta pronto. Adiós.

A: Adiós.

Apagando la cámara web, caí hacia atrás en el suave cojín del sofá. Me regañé una vez más por
haberme involucrado con Lauren cuando yo había tenido una maravillosa y solidaria novia. Si no
me hubiera dado por vencida ante la tentación del beso de aquella noche, Ariana y yo habríamos
hecho las cosas funcionar incluso a larga distancia como lo habíamos planeado antes. Ella había
sido mi apoyo en mi decisión de venir a Francia porque sabía lo mucho que quería hacerlo. Y yo

190
había arruinado todo por quedar atrapada de nuevo en las arenas movedizas de mis sentimientos
por mi compañera de equipo, ex compañera, con ojos esmeralda.

Estaba sola, porque todos los demás se habían ido a comer, mientras que yo quise quedarme para
tener una charla tranquila con Ariana. Dinah y su familia me estaban ayudando mucho con Lara y
mi hija se había encariñado con ellos al instante. Así que no estaba preocupada por dejarla con
ellos.

Sólo que ahora me aburriría. Justo cuando me disponía a utilizar el control remoto, oí el sonido del
timbre. Yo no esperaba a nadie, pero me dirigí a la puerta rápidamente. Cuando abrí la puerta, el
control remoto se me cayó y sentí como si alguien me estuvieran jugando una cruel broma.

"Bonjour", la voz insegura de la joven me saludó.

"Esto no puede estar pasando en este momento", dije entre dientes y miré a los familiares ojos
esmeraldas.

Lauren's POV

"Bonjour."

¿Bonjour? ¡¿De verdad, Lauren?! Mis rodillas temblaron cuando miré a Camila abriendo la puerta.
Yo había volado horas para verla y ¿Eso fue lo mejor que se me ocurrió?

Quería pegarme a mí misma pero en frente de ella no era una opción. Ella me miraba como si yo
estuviera loca. Pero estaba aquí ahora y no había vuelta atrás. Mi corazón estaba a punto de
estallar, al parecer, pero no podía entender lo que Camila estaba murmurando en voz baja. Fruncí
mis cejas antes que ella hablara.

"¿Qué...? ¿Qué estás haciendo aquí?", obviamente la chica confundida preguntó. Sentí mis palmas
sudar como si yo fuera el chico en una comedia romántica preguntándole a la chica de sus sueños
por una cita. Eso no era incorrecto en realidad.

"Eso es uhm...una muy buena pregunta", me estanqué porque no podía entender nada al parecer.
Mi mente se había quedado en blanco tan pronto como ella había desparecido. "Tenía la
sensación que me preguntarías eso... y también pensé que tenía una respuesta, pero ahora que
estás mirando como si me escapé de un manicomio, no puedo recordar la respuesta. De hecho, tal
vez debería ir a revisar los alrededores y ver si tienen algunos lugares disponibles-"

"Lauren, estás divagando", Camila me interrumpió y finalmente empecé a respirar de nuevo.

191
"Lo sé, lo siento. Pero estoy desfasada como el infierno y no he comido lo cual no ayuda en
absoluto", traté de explicar y exhalé profundamente para calmarme. "Y yo podría tener más
sentido una vez que haya cenado. ¿Hay alguna posibilidad de que...te unas a mí? Así podemos
hablar. Y te prometo que haré todo lo posible para ser más razonable."

La confusión en el rostro de la joven pareció disolverse lentamente pero hubo una vacilación
obvia. Mis piernas estaban a punto de ceder cuando me la imaginé dándome un portazo en la
cara.

"Yo no..." dijo, insegura y me miró como si estuviera viendo a un fantasma. "Sólo dame un minuto.
Ya vuelvo."

"Está bien", respiré llena de alivio y la vi desaparecer. El primer paso de que ella no me ignorara
estaba listo. Pero las próximas horas podrían posiblemente determinar el resto de mi relación con
la persona por la cual estaba enamorada. Si esto no era presión entonces ¡Yo no sabía que era!

Usé esos pocos minutos de espera para recuperar la compostura. Esta era mi última oportunidad y
tenía que hacerla valer. No sería capaz de hacerme razonable si seguía siendo un desastre. Así que
me dije a mí misma que tenía que aguantar y recordar que tenía unas cualidades encantadoras.
Independientemente de si iba a ser capaz de relajarme lo suficiente para comportarme
normalmente era la gran pregunta.

Durante los últimos treinta minutos, Camila y yo mantuvimos una pequeña charla. Estábamos
hablando, pero en realidad no nos decíamos nada. Ni siquiera podía recordar lo que realmente
discutimos. Pero me había enterado que vivía con Dinah y algunos de sus parientes lo que explico
un poco su decisión de venir a Francia. Estábamos casualmente paseando y habíamos comprado
algunos falafel en el camino. Conseguir algo para llenar el estómago sin duda había ayudado. Pero
habíamos terminado de comer y nos paramos en la mitad del camino en un pequeño puente con
una vista increíble.

Camila se detuvo y miró hacia el agua debajo de nosotras. Me puse a su lado y observé la increíble
vista de mí alrededor.

"¿Por qué has venido aquí, Lauren?" Camila rompió nuestro silencio y la voz ronca sonaba un poco
ansiosa.

"Vine a verte", le contesté en voz baja y reuní todo mi valor para no aguantar más. "Y para decirte
todo lo que te dije en el aeropuerto. No podía dejar de pensar en lo que había pasado y lo que tú
dijiste-"

"¿Por qué me besaste en New York?" de repente me interrumpió y se volvió hacia mí


rápidamente.

"Uhm... ¿No es obvio?", le pregunté con cuidado, pero también confundida por su repentina
urgencia.

192
"¿Por sexo?"

"¿Qué? No", protesté al instante. "¿Por qué dices eso?"

"¿Por qué digo eso?", repitió con aparentemente más ira. "Llegaste a mi habitación del hotel por
la noche, me diste una bebida alcohólica y empezaste a besarme sin ninguna explicación. Tengo
derecho de pensar eso, ¿No? Especialmente teniendo en cuenta la última vez que estuvimos en
New York juntas y tú querías divertirte."

"No se trataba de eso", intervine de forma rápida y reconocí el mismo dolor en sus ojos que había
revuelto mi estómago después de haber dormido juntas, y el recuerdo de mis duras palabras. "No
estaba tratando de seducirte o nada, lo juro. Mis sentimientos me estaban agobiando, pero no fue
sobre sexo."

"Eso es un poco difícil de creer", Camila susurró y bajó la mirada con un suspiro.

"Sé que mi historial es malo, pero tampoco se trató de eso la primera vez en New York. Eso no fue
sólo por diversión...fue la mejor noche de mi vida", le confesé y vi los orbes marrones reuniéndose
con los míos. "Nunca me había sentido tan conectada con alguien. Me asusté, porque yo estaba
convencida que iba a salir lastimada de nuevo. Por lo tanto, te hice daño. Pero eso no me hizo
sentir mejor. Todo lo contrario, y yo no quería perderte. Intenté tanto ser tu amiga después y
estuvimos bien después de un tiempo. Pero cuánto más tiempo pasaba contigo, más difícil se hizo
pasar por alto que yo quería algo más que una amistad. Lo que siento por ti es incomparable. Es la
razón por la que terminé con Emily. Sabía que eras feliz con Ariana y yo no quería arruinar tu
felicidad de nuevo. Pero desde que te besé, no puedo dejar de desear que sea yo la que te debe
hacerte feliz."

Mi pulso estaba por las nubes cuando básicamente había dado todo. No tenía otra opción que ser
brutalmente honesta. Si ella no se sentía de la misma manera, yo estaba jodida. Pero era mi turno
de ser vulnerable, incluso si eso significaba arriesgarme a salir dañada nuevamente. Camila parecía
abrumada y apartó la mirada de nuevo. Su cabeza se sacudía de manera sutil.

"Si no podíamos hacer las cosas cuando vivíamos en la misma ciudad, ¿Qué te hace pensar que
vamos a funcionar cuando estamos a miles de kilómetros de distancia?" cuestionó en voz baja
llena de dudas.

"Para empezar, estoy plenamente consciente que estoy enamorada de ti", seguí adelante con mi
enfoque de entregarle mi corazón en bandeja de plata y vi que sus ojos se abrieron ligeramente.
"Y no quiero ocultarlo o negarlo por más tiempo. Quiero intentarlo."

La otra morena parecía tan confundida y los orbes marrones se conectaron con los míos una vez
más.

"Y tengo algo de experiencia con la larga distancia, ya sabes", probé otro ángulo y sonreí
suavemente. "No es por ser arrogante, pero tengo excelentes habilidades, conozco los mejores

193
servicios de paquetería o de entrega para el envío de flores y regalos, a pesar de que tendría que
ver si hacen envíos al extranjero, en este caso", el rostro de la joven se quebró lentamente y
mostró una pequeña sonrisa que hizo que mi corazón se agitara. "Mi sexting-game tendría que
trabajarlo un poco, pero estoy dispuesta a aprender si tomas placer en eso", añadí con una sonrisa
grande y finalmente la oí reír en voz baja.

"Esto sería mucho más fácil si no fueras condenadamente encantadora", ella inclinó ligeramente la
cabeza y suspiró ruidosamente.

Aproveché el momento y tomé su mano. Tiernamente me aferré a sus dedos delgados, la vi tragar
pesadamente.

"Te dije que nuestro estilo de vida puedo llegar fácilmente a ser solitario", hablé con cuidado, pero
me aseguré de mirar profundamente sus cálidos ojos que me causaban tantas mariposas en el
estómago. "Y hasta cierto punto me he acostumbrado a la sensación de extrañar a las personas.
Pero nunca he echado de menos a alguien como te he echado de menos en estas últimas dos
semanas", casi estaba susurrando ahora y quería saber desesperadamente que estaba pensando
Camila.

"No puedo darte la respuesta que estás buscando, Lauren", ella respondió con voz suave. "No te
puedo dar un respuesta en este momento", agregó mientras exhalaba profundamente.

"No tengo derecho a preguntar, pero ¿Sigues viendo a Ariana?" le pregunté, pero aferré su mano
en la mía.

"Es complicado en estos momentos. Le hice daño...y mucho", Camila lamentó claramente sus
acciones.

"Pero tú quieres estar con ella", supuse y le acaricié el dorso de la mano con el pulgar.

"Confío en ella", mi ex compañera respondió. "La ironía es que ella no confía en mí."

"Yo confío en ti", intervine y apreté su mano sutilmente para enfatizar mis palabras. "Pero estoy
adivinando que ese sentimiento no es mutuo", concluí con una sonrisa un poco triste.

"Lo siento", ella básicamente confirmó su desconfianza en mí, pero sonó genuinamente
avergonzada.

"Por lo tanto, confías en Ariana, pero ella no confía en ti por mi culpa. Yo confío en ti pero tú
confías en mí. Eso es...todo el lío que hicimos", traté de bromear a pesar que mi corazón estaba
sufriendo calambres de dolor.

"Supongo que sí", ella se rió sorprendentemente y yo lo único que quería hacer era besar esos
perfectos labios que tenían una sonrisa tímida.

194
Pero está bien. No voy a darme por vencida tan fácilmente", le dije con confianza y la vi levantar
las cejas con sorpresa.

"Lauren, no-", trató de protestar, pero yo no quería escucharla.

"Vamos a seguir caminando", la interrumpí y solté su mano de mala gana comenzando a caminar
por delante. "Estoy segura de que hay más que ver y si estoy aquí, creo que podría hacerlo mucho
mejor."

La joven parecía no estar segura y bastante aturdida antes de que la viera asintiendo la cabeza en
acuerdo. Yo no había hecho todo el camino a Francia para que ella se negara tan fácilmente. Tal
vez me estaba estableciendo en la mayor angustia, pero no quería darme por vencida. Por lo
tanto, seguimos caminando y Camila me mostró alrededor aunque admitió no conocerlo por
completo aún.

Se estaba haciendo muy tarde, pero las calles aún estaban llenas de gente y pude ver una animada
ciudad justo cuando el sol comenzaba a ponerse. Había una pequeña multitud reunida en una
plaza de la ciudad. La música llegó a mis oídos y me acerqué para ver lo que estaba sucediendo allí.
Al ver el pequeño grupo de hombres de edad avanzada, que tocaban Chansons maravillosas con
sus instrumentos, fue el epítome de lo que me imaginé de París. Camila se unió a mí y me di
cuenta que la más joven cruzó sus brazos frotándolos suavemente.

Sin ninguna duda, me saqué la chaqueta y se la ofrecí. Ella protesto al principio, pero rodé mis ojos
y no participé de la discusión. Su sonrisa calentaba mi corazón y yo esperaba que al menos mi
chaqueta calentara su cuerpo. Todos aplaudieron a nuestro alrededor antes de que el hombre
siguiera con otra canción. Yo no era un genio de la música como Camila, pero fui capaz de
reconocer la versión instrumental de 'La Vie En Rose'.

Tal vez tenía un problema en mi cabeza, pero mi cerebro no estaba funcionando con la razón.
Instintivamente agarré la mano de Camila y la llevé al centro del espacio abierto entre la banda y
la multitud de espectadores.

"!Lauren! ¿Qué estás haciendo?" la de ojos marrones preguntó con voz de pánico pero respiró
hondo y trató de parecer imperturbable. Me di vuelta para mirarla, envolví mi brazo alrededor de
ella para sostenerla por la espalda y me aferré a su mano, lo que nos llevó a una perfecta posición
de baile. Los ojos de Camila estaban muy amplios y en estado de shock, y tenía que admitir que se
veía adorable cuando estaba tan nerviosa.

"Vamos, estos franceses han visto cosas más extrañas que dos mujeres bailando juntas en
público", quería calmarla, aunque mi corazón latía como loco.

"Por las miradas que estamos recibiendo, no estoy tan segura", respondió ella antes de que
empezara a mover suavemente con la música. Esto estaba completamente fuera de mí. Yo me reí
histéricamente ante estas escenas de películas cursis y todos los gentos románticos que parecían

195
tan poco realistas. Y ahora yo era protagonista de mi propia telenovela cursi. Para mí sorpresa,
otras parejas comenzaron a unirse después de sólo unos segundos.

"Mira, no es tan malo", le dije y quería que la más joven se relajara un poco.

"Yo no puedo bailar", Camila se ruborizó.

"Todo el mundo puede bailar", estuve en desacuerdo inmediatamente y ella me lanzó una mirada
que me hizo sonreír.

"Sólo las personas que realmente saben bailar dicen eso", argumento y me pisó casi probando su
punto. "!Lo siento! Ves, por favor, detengamos antes que te lesione o algo y así arriesgo tu carrera
como futbolista."

"¿Te puedes relajar?" reí en voz baja con cariño y no tenía la intención de detenerme por ningún
motivo. "Sólo toma un respiración profunda y sígueme."

Ella hizo lo que le dije. La oí exhalar profundamente y la tensión de su cuerpo disminuyó


gradualmente. Su delgado cuerpo parecía encajar con el mío mientras me concentré en mantener
el ritmo y la melodía de nuestros pasos. No era consciente, pero estábamos una pulgada más
cerca, lentamente pero sin pausa. Pronto, sentí su respiración golpeando mi oído en intervalos
irregulares y la piel de gallina comenzó a extenderse por todas partes. No podía ver su rostro
porque estábamos bailando muy cerca pero no me importó. Sintiendo como nuestras cinturas casi
se tocaban y su barbilla casi apoyada en mi hombro era más de lo que podía haber esperado al
inicio de esta idea arriesgada.

Si no hubiera sido tan evidente antes, este era otro momento que me demostró lo mucho que
quería estar con ella. Dejé mi mano vagar por su espalda para envolver su cintura. Su blusa
entallada revelaba bastante piel y mi chaqueta corta también. Mis dedos tocaron la piel expuesta
y al instante sentí a Camila temblar. O era a causa de mis manos o la esperanza no se había
perdido después de todo. Mis sentidos estaban en sobrecarga. El olor de su champú, la suave
sensación de su piel, su respiración inestable cerca de mi oído, todo fue registrado lo cual hizo que
mis sinapsis se disparara a un ritmo rápido.

"¿Puedo preguntarte algo, Camila?" mi voz era tranquila, ya que estábamos tan cerca y no quería
arruinar la intimidad del momento.

"Sí", respondió en un susurro.

"Ese día que fui a verte y me enteré de que estabas embarazada, cuando estaba a punto de irme
me dijiste que parara", dije en voz baja y recordé ese momento como si fuera ayer. "Parecía como
si hubieras querido decir algo, pero no lo hiciste. ¿Te acuerdas de lo que era?"

"Sí, lo recuerdo", dije al cabo de un momento de silencio.

"¿Pero no me lo vas a decir?" adiviné por su indecisión por admitir que sí lo recordaba.

196
"No creo que sea buena idea decírtelo", suspiró ella insegura mientras nuestros cuerpos se habían
adaptados a movimientos de balanceos sin esfuerzo a la música.

"Realmente me gustaría saber", expresé mi curiosidad e inhalé el aroma afrutado de su champú.


Mi cabeza se inclinó ligeramente y apoyé mi sien contra la de ella con suavidad. Ella suspiró en
silencio como respuesta y sentí sus dedos agarrando mis hombros con fuerza. Más segundos de
silencio pasaron y ya había renunciado cuando su voz muy baja apareció que casi no la escuché.

"Quería preguntarte si te hubiera importado si la llamaba Lauren."

Mi corazón dio un vuelco cuando escuché eso y dejé de moverme por sólo un segundo, pero luego
seguí moviéndome. Durante años me había preguntado qué era lo que me había querido decir
antes de haber subido al taxi. Siempre estuvo esa voz en mi cabeza que me dijo que lo que sea que
me haya querido era algo más significativo de lo que probablemente era. Al oír la respuesta real
fue mucho más de lo que jamás podría haber esperado.

"¿Me estás diciendo que querías nombrar a tu hija después de mí?" mi propia voz temblaba
sutilmente y no estaba segura de porque mis ojos se sintieron húmedos, de repente.

"Creo que de algún modo lo hice...sin ser demasiado obvia", Camila susurró vacilante y la
provisionalidad era palpable.

Me aparté lo suficiente para mirarla. Ella esquivó mi mirada y todo su cuerpo se tensó de nuevo.
Mi pecho subía y bajaba mientras que mi mano apretó la suya. Cada fibra de mi cuerpo quería
tomar ese hermoso rostro y besarla sin sentido después de haber escuchado eso. Pero también
me inmovilicé por la abrumadora naturaleza de mis sentimientos por ella. Dejando lentamente de
lado nuestros dedos entrelazados, utilicé mi mano libre para dejarla en su mejilla.

"Camila", suspiré y acaricié desde el mentón hasta la barbilla, levantándola con ternura para que
ella me mirara. Habíamos dejado de movernos a causa de la intensidad del momento. Lo que no
me di cuenta es que todos los demás habían dejado de bailar y aplaudían debido al final de la
canción. El ruido brusco y fuerte de alrededor de nosotras causó a la joven saltar antes que se
reencontrara con mi mirada.

Por un lado estaba decepcionada que el momento haya terminado. Y por el otro lado estaba más
optimista que antes después de haber oído lo que había dicho acerca del nombre de Lara.

"Tengo que regresar. Lara probablemente está en casa y no quiero que se preocupe ya que es
tarde", dijo Camila a toda prisa y sólo pude asentir antes que ella comenzara a caminar. Había
tantas cosas que estaban pasando por mi cabeza, pero ninguna de las dos habló en todo el
camino. Ella había nombrado a Lara después de mí, eso seguía resonando en mí cabeza. Todavía
no podía creerlo y probablemente tomaría un poco más de tiempo que el camino de regreso para
que esa pieza de información la pudiera procesar.

197
Camila se paró frente a la puerta y tenía las llaves en la mano antes de que se diera vuelta para
mirarme.

"¿Cuánto tiempo te vas a quedar?" ella rompió el silencio, pero evitó mirarme.

"¿Por qué? ¿Quieres que me vaya?", le respondí con una risa amigable, pero no estaba realmente
bromeando. Ella no respondió, pero siguió mirando el suelo de madera del porche. "No me voy a
quedar por mucho tiempo. Pero esperaba que pudiera ver a Lara mientras estoy aquí. ¿Hay alguna
posibilidad de que pueda salir un rato con ella mañana?" la más joven se movió nerviosamente
después de mi pregunta. "Si no quieres que la lleve a otro lugar, podría pasar el rato con ella aquí,
si no te sientes cómoda. Pero te prometo que cuidaré de ella."

"No, sé que lo harás", respondió rápidamente y tomó una respiración profunda. "Estoy segura de
que le encantará verte. Ven alrededor de las dos, para que puedas venir a buscarla."

"Muy bien, eso es perfecto", sonreí con alegría ante la idea de ver a Lara. "Gracias."

"Buenas noches, Lauren", Camila se dio vuelta a toda prisa y desapareció detrás de la puerta antes
de que tuviera la oportunidad de decir algo más. Pero no estaba desanimada. Podría haber sido
mucho peor. Algo de esperanza definitivamente había allí, me dije a mí misma.

Toqué el timbre de la casa francesa por segunda vez. Los nervios todavía estaban allí, pero no era
un desastre emocional como ayer. Sabía que estaba a punto de ver a Lara y probablemente a
Camila también. Mi corazón saltó de emoción cuando la puerta se abrió y mi ex compañera de
equipo de Boston apareció.

La noche anterior había sido bastante accidentada y yo había analizado cada detalle hasta que me
había quedado dormida. Pero hoy era un nuevo día y quería seguir adelante a como había dejado
las cosas. Salir con Lara estaba en la cima de mi lista. Mi mirada se centró en Camila cuando la
saludé, pero me distraje rápidamente por una voz aguada.

"!Panqueques!" la niña de tres años casi gritó desde el pasillo y me agaché al instante cuando la vi
corriendo hacia mí.

"Ven aquí", exigí completamente encariñada por su reacción y sentí su pequeño cuerpo aplastar el
mío con un abrazo.

"¿Cómo estás?" le pregunté al mismo tiempo que me separaba, pero dejé un beso en su mejilla.
"¿Me extrañaste?"

"Sí", asintió frenéticamente y se mordió el labio inferior como Camila.

"¿Quieres saber lo que tengo planeado para nosotras, o quieres que sea una sorpresa?"

"Quiero saber", ella gritó llena de entusiasmo, iluminándose sus ojos color avellana.

198
"Ok, encontré un lugar que tiene que ver con la comida americana y adivina lo que tienen en el
menú: Panqueques", revelé y sonreí ampliamente porque los ojos de la pequeña estaban a punto
de salirse de sus órbitas. "Pensé que podríamos ir allí y comer algo. Pero primero, vamos a ir un
parque que queda cerca y jugar fútbol. ¿Suena bien?"

En lugar de obtener una respuesta verbal, Lara envolvió sus brazos alrededor de mi cuello de
nuevo. Sonreí satisfecha con la respuesta y la tomé en brazos.

"Bueno, mira a quién el gato ha traído"

Levanté mi mirada para encontrarme con Dinah que apareció junto a Camila con una sonrisa
maliciosa en los labios. Habíamos jugado juntas en las categorías inferiores, pero esa fue la última
vez que la vi. Había cambiado mucho físicamente y casi no la reconocí porque se veía más grande.

"Hey", me reí levemente y la abracé con un brazo ya que el otro Lara lo estaba ocupando. "Wow,
¡Te ves muy bien! Ha pasado tanto tiempo. ¿Cómo estás?"

"Estoy bien. Viviendo el sueño aquí, ¿Sabes? Te ves bastante bien también. Maldita sea, ¡Estás en
forma! Mira esos brazos", la más joven de la ex Sub-17 comentó con una sonrisa.

"Bueno, voy a practicar un poco con Lara en el parque ahora", dije con los ojos un poco azorados y
me encontré con los de Camila por primera vez. "¿Quieres ir con nosotras?"

"No, tengo algunas cosas que hacer, pero diviértanse ustedes dos", respondió con indiferencia y
no tan frenéticamente como la noche anterior.

"Pero yo caminaré contigo porque voy hacia la misma dirección", Dinah intervino y yo asentí
rápidamente como me di cuenta que Lara estaba jugando con algunos de mis mechones de pelo.

"Entonces, nos vemos tarde", Camila se despidió de su hija e intercambiamos miradas por un
momento antes de irme junto a Lara y Dinah. La chica tongana y yo tuvimos un montón de tiempo
para ponernos al día y disfruté de su compañía inmensamente. Habló acerca de la vida en Francia
durante las dos últimas temporadas y cómo había cambiado su vida. Casi llegando al parque, Lara
vio una pequeña zona de juegos y me rogó para hacer una parada allí. Por supuesto que no me
negué a sus deseos y nos detuvimos para que pudiera jugar. La miré todo el tiempo, pera también
escuché a Dinah.

"¿Cómo Camila y Lara van con la mudanza?", le pregunté con cuidado porque no quería
entrometerme.

"Bien. A todos nos gusta tenerlas aquí. Cómo no te podría gustar ¿Verdad?"

"Sí, Lara es increíblemente adorable", estuve de acuerdo, pero abstuve de hablar de Camila ya que
no estaba segura de si quería cruzar la línea.

199
"Tengo que admitir que no sabías cuán metida estabas, chica", Dinah dijo de pronto y la miré con
confusión. "Quiero decir, venir aquí es un declaración bastante grande."

No pude evitar sonreír antes las palabras de la chica más joven, pero suspiré después.

"Sé que es tu mejor amiga y no vas a traicionar su confianza al decirme algo que se supone que no
debo saber, pero... ¿Me estoy engañando a mí misma estando aquí?" traté de conseguir una
pequeña pista de lo que Camila podría estar pensando.

"Honestamente, no lo sé", Dinah sonaba auténtica y se encogió de hombros. "Camila ha pasado


por muchas cosas; creciendo en un hogar con represión, la pérdida de su hermana, quedar
embarazada y luego casarse, para después divorciarse, ser botada a la calle por sus padres...quiero
decir, algunas personas no luchan tanto en su vida, pero esa chica sólo tiene 20 años de edad. Si te
decepcionas muy a menudo, construyes una pared alrededor. Yo crecí con ella, pero a veces no sé
lo que está pasando con ella tampoco. Ella no es fácil de leer, incluso para mí. Sé que puede
parecer fría o inaccesible a veces, pero ella es una buena persona."

"No tienes que defenderla, Dinah", dije en voz baja y le sonreí. "No estoy enojada para nada con
ella siendo cautelosa conmigo. Yo también la decepcioné. Y yo sé que ella tiene un buen corazón y
que lo está resguardando con todo lo que tiene. A veces veo pequeñas grietas en esa pared y
obtengo una visión de esa alma maravillosamente vulnerable. Eso es exactamente lo que quiero,
pero no estoy segura si seré capaz de conseguirlo."

"Lo que Camila quiere más que nada es seguridad y estabilidad", Dinah añadió mientras las
mirábamos a Lara. "Si ella no está cien por ciento segura de que alguien le pueda ofrecer eso, ella
no va a dejarlos entrar."

"Lo sé", asentí con un pequeño suspiro.

"Escucha, tengo que irme. Pero fue bueno verte", dijo la otra jugadora de fútbol, y me abrazó con
fuerza.

"Fue bueno verte también. Y gracias por hablar conmigo", le contesté con sinceridad antes de que
se fuera. Ella no me había dicho algo que no hubiera sabido antes, pero sin duda me recordó lo
mucho que Camila había luchado, y por qué ella era tan cuidadosa y aparentemente confusa a
veces. Por ahora, quería centrarme en Lara y me acerqué a ella porque se había sentado en el
columpio y necesitaba un pequeño empujón.

Ariana: ¡¿Qué quieres decir con que Lauren está en París?!

Camila: Ella llegó ayer de la nada. No tenía ni idea que iba a venir

A: ¿Y después qué? ¿Ella se presentó en tu casa y luego?

200
C: Nada. Fuimos a dar un paseo, ya que ella quería hablar, pero no pasó nada, lo prometo.

A: ¿Por qué quieres hablar con ella después de todo lo que pasó?

C: ¿Qué se supone que debía hacer? ¿Cerrarle de golpe la puerta en la cara?

A: No lo sé. Todo lo que sí sé es que ella tiene ese extraño control sobre ti y siento como si
estuviera tratando de manipularte.

C: No creo que ella este tratando de hacer eso.

A: Yo sí lo creo. Francamente me estoy hartando un poco. A ambas les di una oportunidad y fue
todo perfectamente cordial, ya que tú querías ser su amiga. Pero tú terminaste besándola...otra
vez. ¡Perdóname si no me gusta la idea de ustedes dos juntas en la ciudad del amor!

C: Bueno, eso lo entiendo. Pero, ¿Qué quieres que haga entonces?

A: Si tú realmente quieres que funcionemos, necesito que dejes de hablar con ella. No quiero ser
una perra al respecto, pero no puedo darte otra oportunidad a menos de que seas capaz de dejar
todo. De lo contrario no seré capaz de confiar en ti.

C: Realmente no tengo una elección, ¿Verdad?

A: Sí, tienes una. Es ella o yo. Y creo que es hora que finalmente hagas una decisión.

"¿Podemos hacer esto otra vez mañana?"

Miré a la pequeña niña que sostenía mi mano y saltaba emocionada en nuestro camino de regreso
a su nuevo hogar. Lara y yo habíamos pasado las últimas horas juntas y no podía recordar alguna
vez en que haya estado tan feliz. Su genuina alegría por las cosas más pequeñas era realmente
contagioso. Ya sea cuando fingía caerme mientras jugábamos fútbol, o manchar mi cara con
panqueques, ella se rió y se rió de todo corazón una y otra vez. No había nada más gratificante que
ese sonido. Pero nuestro tiempo juntas tenía que llegar a su fin y ya habíamos llegado a la puerta
principal.

"No lo sé. Vamos a tener que preguntarle a tu mamá", contesté con honestidad, ya que la decisión
no estaba en mis manos. Llamando a la puerta de madera, Camila abrió rápidamente y sonrió
cortésmente.

"Mami, ¿Lauren puede venir mañana?" Lara no perdió tiempo y tiró de la pierna de su madre.

"No, Lauren tiene que irse a casa, cariño. Dile adiós, ¿Ok?"

Mi corazón se hundió.

201
Me concentré en los orbes marrones pero me desviaban la mirada. Al ver la decepción en los ojos
de Lara fue peor que el dolor que sentí por las palabras de Camila. Esto no era bueno. Pero tuve
que aguantar por la pequeña y me agaché para quedar a su nivel.

"Adiós Lauren", susurró y odié la tristeza en su voz.

"Adiós, pequeña. Te voy a echar de menos", quería que ella lo supiera y la abracé casi en
aturdimiento. Mi cerebro no comprendía totalmente que no iba a volver a verla; o por lo menos
por un tiempo.

"Te voy a extrañar demasiado", murmuró contra mi hombro mientras yo le frotaba la espalda de
una manera de costumbre. "Gracias por los panqueques", dijo la chica de ojos color avellana quien
rompió mi corazón con su gratitud.

"No, te doy las gracias por pasar tiempo conmigo", insistí y respiré hondo. Los diminutos labios
dieron un beso en mi mejilla antes de que ella se apartara. Tenía un gran nudo en la garganta
mientras la veía irse. Necesité de unos segundos para recuperar mi compostura y ponerme de pie
para enfrentar a Camila. Ella se veía...casi dolida. Me preparé porque sabía que esto no iba a
terminar bien.

"Lauren, tienes que volver a Boston", la voz de Camila no era tan firme como ella evidentemente
quería.

"Yo podría quedarme unos días más-"

"No, no puedes", interrumpió mi oferta y rápidamente negó con la cabeza. "No quiero que lo
hagas."

"Wow", respiré en una mezcla de sorpresa y angustia porque eso dolió. Ella no estaba andando
por las ramas en este momento. Mi corazón se rompió después de ese maravilloso rato con Lara.
Toda la felicidad que había llenado a lo largo de la tarde el órgano de bombeo fue abruptamente
remecido con dureza por Camila quien lo perforó y desinfló.

"Lo siento", se disculpó mientras yo estaba haciendo mi mejor esfuerzo para no perder la cabeza.
"No estoy tratando de hacerte daño, pero nunca debiste haber venido aquí en primer lugar. Lo
que dije en el aeropuerto era cierto; llegaste demasiado tarde."

"Pero también me besaste en el aeropuerto", argumenté y no quería detenerme si esta era mi


última oportunidad de tener esta conversación con ella.

"Fue para decir adiós", su respuesta arrancó mi corazón y sentí las lágrimas hinchando mis ojos en
contra de mi voluntad.

"Entonces, ¿Por qué me besaste en New York? O ¿Por qué me dijiste que nombraste a Lara
después de mí anoche?" me desesperé más con una voz temblorosa. "Si realmente es demasiado
tarde y no hay otra oportunidad para nosotras, entonces, ¿Por qué no me miras?" dije en otro

202
acto de desesperación, le tomé la mano, como lo había hecho tantas veces durante nuestros
últimos encuentros. "Camila-"

"Lauren, por favor, no puedes hacer esto", suplicó y detecté alguna humedad alrededor de los
orbes marrones también. "Tienes que aceptar mi decisión."

"Pero entonces, ¿Por qué casi estás llorando?" le pregunté frenéticamente y traté de sostener su
mirada.

"Porque no quiero hacerte daño", susurró con una sonrisa triste. "Pero por favor, no vuelvas a
llamarme o a venir. No quiero que hagas esto más difícil de lo que ya es." sentí como si esto era la
repetición de nuestro momento en el aeropuerto, sólo que este era el final y definitivo. Ella no se
iba del país y tuvo que decirme que esto había terminado; en realidad había terminado.

"No quiero que luches por mí, Lauren. Quiero que me dejes ir", su voz se quebró ahora y yo no era
capaz de formar palabras en este punto. ¿Qué más había que decir de todos modos?

Simbólicamente dejé ir su mano para cumplir con su deseo, aparentemente estaba bañada en
lágrimas y oculté el hecho de que estaba temblando mucho. Le di una última mirada, ella parecía
estar a punto de llorar, pero yo estaba fuera de la profundidad para entender por qué. Hice lo que
ella quería después de todo.

Detecté una sola lágrima que cayó por los ojos marrones antes de que se alejara a toda prisa y
desapareciera en su nuevo hogar, y me dejara de pie en el porche sola.

=================

Capitulo 13

Camila's POV

Ver a Ariana en la pantalla de mi ordenador portátil se había convertido en una rutina por ahora.
No teníamos ninguna otra opción de vernos el uno al otro desde que me había mudado a París
hace dos meses. Con toda la distancia entre nosotras, esas pequeñas conversaciones eran
importantes pero no tan frecuentes como solían ser al principio. Hablábamos sobre los
acontecimientos del día y tratábamos de seguir el ritmo de vida del otro, pero me hubiera gustado
que nuestra separación física no estuviera tomando un gran peaje en mí.

Estaba haciendo mi mayor esfuerzo para ser positiva, aunque, sobre todo porque mañana iba a
volar a los Estados Unidos para el campo de entrenamiento de USWNT. Pero mis esperanzas de
ver mi novia estaban a punto de ser aplastadas.

203
Ariana: Tengo una mala noticia.

Camila: Bueno...

A: No voy a ser capaz de verte durante el campo de entrenamiento. Hay un par de reuniones
importantes con el sello discográfico y unos nuevos productores. No podré salir de LA en absoluto
mientras estés aquí. Lo siento mucho.

C: Estoy feliz por las cosas que están empezando con tu música. Pero estoy un poco triste porque
no nos vamos a ver. Quiero decir, voy a estar en San Diego que no está demasiado lejos de Los
Angeles. ¿Estás segura que no puedes conseguir un día libre por lo menos?

No quería ser demasiado insistente pero estaba ciertamente molesta con Ariana ya que no podía
hacer más de un esfuerzo. No nos habíamos visto casi en tres meses y ahora que iba a estar en el
mismo país, incluso en el mismo estado, ella estaba demasiado ocupada.

A: No lo creo a menos que algo se suspenda a último minuto.

C: Eso es una mierda, pero no puedo cambiarlo obviamente.

A: ¿Aunque estás emocionada de estar de vuelta en EE.UU?

C: Estaba emocionada de verte pero aparte de eso, no realmente para ser honesta.

A: ¿Estás nerviosa porque Lauren estará allí también?

C: No. No hemos hablado lo que no debería ser un problema.

A: ¿No crees que ella vaya a probar algo de nuevo?

C: Mira, ¿Podríamos no hablar de ella? Hiciste tu punto muy claro e hice lo que me pediste.
¿Puedes por favor dejarlo?

A: ¿Por qué estás tan furiosa?

C: No estoy furiosa. Sólo estoy un poco harta porque siempre la traes de nuevo sin ninguna razón.

A: Sólo estaba preguntando-

C: ¡Entonces no preguntes!

Silencio. Tomé una respiración profunda y pasé la mano por mi pelo, porque mi pulso estaba
acelerado por la ira y frustración.

A: De acuerdo, lo siento. Tienes razón. No tengo derecho de desconfiar en este punto.

C: Vamos a hablar de otra cosa.

204
Nos mantuvimos hablando unos minutos más antes de desconectarme porque se estaba haciendo
tarde. Cerré mi portátil, caí sobre el colchón y suspiré en voz alta. No estaba segura de por qué
estaba tan molesta. No ver a Ariana fue sin duda uno de los factores. Pero que haya mencionado a
Lauren fue otro.

No había hablado con la chica de ojos verdes desde que había dejado París hace dos meses.
Durante dos semanas me llamó y me envió un mensaje de texto cada día, aunque yo le había
pedido que no mantuviéramos contacto en nuestra última conversación. Había puesto todo de mí
para no hacer caso de sus súplicas desesperadas hasta que ella se detuvo.

Cogí el teléfono y lo desbloqueé escribiendo el código. A pesar de que yo no había respondido


ninguno de sus mensajes, no me había dado el coraje para eliminarlos tampoco. Me desplacé al
azar a través de la abundancia de mensajes de textos, los leí en orden y casi no podía creer la
cantidad que eran. La mayoría de ellos fueron escritos en estado de embriaguez, como ella lo
había afirmado a menudo.

L: Te echo de menos. Por favor, sólo llámame.

L: Puedo estar un poco borracha ahora. En realidad no he estado sobria desde que volví, pero
maldita sea ¡Te amo! Tú eres tan terca, una pieza de trabajo. ¿Puedes llamarme?

L: ¿Lara todavía lleva el jersey que le di?

L: No sé lo que me has hecho, pero estoy empezando a odiarlo.

L: Los atardeceres aquí son una decepción después de haber visto la puesta de sol en París. O tal
vez fue el hecho de que estábamos bailando y que me hayas dicho que nombraste a Lara después
de mí lo que lo hizo especial.

L: No me vas a llamar, ¿Verdad?

L: Sé lo patética que soy pero tomaste la decisión equivocada. Estoy rogando que por lo menos me
des otra oportunidad.

L: Kristie se llevó mi teléfono lejos pero le di un puñetazo en el estómago para recuperarlo. Lo que
prueba mi amor, ¿Verdad? Sólo para que pueda seguir enviándote mensajes borracha.

L: No creo que nunca haya extrañado la presencia de alguien antes. Tú puedes extrañar pequeñas
cosas y yo también. Echo de menos la forma en que tu pelo huele; la manera en que tu mandíbula
se mueve cuando hablas; la forma en que tu cabeza se inclina cuando estás confundida; la forma
en que te muerdes el labio cuando estás nerviosa o ansiosa; la forma en que tus cejas se elevan
cuando estás siendo sarcástica; la forma en tus ojos rezuman todo lo que sientes sin querer
decirlo; la forma en que tu respiración se detiene en la parte posterior de tu garganta cuando te
toco; la forma en que tu labio inferior encaja perfectamente entre los míos; la forma en que tu
cuerpo temblaba bajo el mío cuando hacíamos el amor; la forma en me miras cuando estoy con
Lara. Pero esas son las cosas grandes. Si tuviera que hablar de las cosas pequeñas, podría

205
decírtelas toda la noche. Sobre todo echo de menos tu presencia. Ni siquiera sé cómo describirlo,
porque no es visible como las anteriores cosas. Es algo que sentí sabiendo que te iba a ver no
importante cuán complicadas estaban las cosas. Y estoy más que confundida sobre si debería estar
aliviada o devastada. Todo lo que sé es que no quiero seguir cayendo. Por favor, llámame. Te
amo...no sé de qué otra manera decirlo más.

L: Lo entiendo. Terminamos. Bueno, en realidad nunca empezamos. Y te estoy dando todo lo que
quieres. Es obvio que hiciste tu elección y tengo que aceptarlo. Sigo pensando que es la
equivocada, pero ese no es mi asunto. Ella no puede, posiblemente, amarte de la forma en que yo
lo hago. Nadie puede. Y eso me mata porque no voy a tener la oportunidad de demostrarte lo
mucho que me preocupo por ti y Lara.

L: Me rindo.

L: Esto queda en tus manos.

Leer esos últimos mensajes causó una angustia inexplicable porque sentí la cantidad de daño que
Lauren había experimentado. Sabiendo que yo era la responsable de infligir tanto dolor en ella me
estaba matando. El último mensaje de texto fue enviado hace seis semanas. En este punto yo
estaba completamente insegura sobre qué esperar cuando la viera en el campo de entrenamiento
mañana. Ariana había tenido razón. Estaba nerviosa por ver a Lauren, aunque no quería admitirlo.

Pero no había marcha atrás. Yo había hecho mi elección y ahora tenía que enfrentar las
consecuencias.

Estar en el campo de entrenamiento de USWNT todavía me ponía de nervios. Después de todo,


era sólo mi segunda convocatoria y no tenía la experiencia que otros tenían. Hice lo mejor que
pude para encajar, ser humilde, pero también ambiciosa. Sin embargo, esta vez estaba por mi
cuenta. Lara se había quedado en París porque no quería que ella viajara tanto por sólo unos
pocos días. Ariana no iba a venir de todos modos, así que no tenía una razón para traer a mi hija. Y
se estaba adaptando muy bien a Francia, así que trate de mantener una cierta continuidad por
ella.

Definitivamente era una sensación diferente estar sola. No había ninguna familiaridad ahora.
Debería haber sido reconfortante estar de vuelta en los Estados Unidos, pero fue más abrumador
de lo que esperaba. El único otro factor familiar se había ido también: Lauren.

Mi compañera de equipo en el plano internacional no había dicho una sola palabra desde que
habíamos llegado esta mañana. De hecho, ni siquiera me había mirada a excepción de en el
campo. Por supuesto, ella estaba haciendo lo que yo quería y no tenía derecho de quejarme.
Tener un vínculo con las otras jugadoras fue mi prioridad y lo logré un poco. Un gran grupo de

206
chicas querían ir a comer a la ciudad después de la práctica. Me invitaron a ir. Lo que no sabía era
que Lauren había ido también.

Aún así, nos ignoramos mutuamente como si nunca hubiéramos hecho algo. Ella y Normani
estaban muy juntas de todos modos. No fue hasta que había llegado al pequeño restaurante que
las chicas habían elegido, que no pude contenerme más.

Estaba escaneando el menú y traté de decidir qué comer. Todo se veía delicioso y después de esos
regimientos de prácticas físicamente exigentes, tenía permitido comer un poco de pizza, ¿Verdad?

Bueno yo tampoco era una gran comedora de todos modos. Podría haber aprendido algunas cosas
de Lauren, quién parecía ser muy exigente con su dieta saludable, aunque rara vez la veía comer
algo.

Miré cuidadosamente hacia arriba, la centrocampista se sentó al otro lado de la mesa justo en el
final. Tenía miedo de ser atrapada mirándola, pero los orbes esmeraldas estaban centrados en
algo completamente distinto. Los labios rosados estaban formando una pequeña sonrisa y yo
inmediatamente seguí su mirada para ver lo que sostenía su atención; o quién. Tragué saliva con
dureza cuando me di cuenta que una de las camareras que estaban en el otro extremo era la
receptora de la miradas de Lauren.

Era ridículo estar celosa, pero había esa sensación molesta en la boca de mi estómago mientras las
observaba. Tomé una respiración profunda e hice mi mejor esfuerzo para ignorarlo. Pero, por
supuesto, la camarera que Lauren había ojeado se acercó a nuestra mesa y quiso tomar nuestra
orden. Mientras todo el mundo pedía, seguía mirando a Lauren que descaradamente estaba
mirando a la camarera de pelo rizado junto a ella al final de la mesa hasta que llegó su turno.

Aparentemente Lauren tenía un buen ojo; ¡Absolutamente deslumbrante! Primero fue Emily y
ahora la chica misteriosa con un bloc de notas. Se veían muy diferentes, pero no podía decidir
quién me intimidaba más por su apariencia impecable. Leyendo la etiqueta de su nombre,
Stephanie tenía la piel caramelo, cabello castaño claro, labios perfectamente gruesos que
coincidían con sus rasgos faciales femeninos y un par de ojos que rivalizaban con los de Lauren.

"Me quedo con la salada de atún y una Coca-Cola light", dijo Lauren mientras la camarera escribía
y luego tomó su menú. "Eres preciosa, por cierto", añadió con la cantidad justa de encanto y de
confianza, pero con una sonrisa brillante destacando que estaba siendo genuina.

"Oh, gracias", la chica casi con piel oscura respondió con una risita de sorpresa.

"Es probable que lo escuches todo el tiempo pero tus ojos son como, increíblemente hermosos.
¿Son verdes...o gris...?" la de pelo oscuro con ojos esmeralda siguió su camino.

"Cambian de color a veces, pero sobre todo son verdes", la camarera respondió obviamente
nerviosa desde que sus mejillas estaban ruborizadas. "Sin embargo, tus ojos son muy bonitos
también. Nunca he visto chicas alrededor. ¿Todas son nuevas en la ciudad?"

207
"No, sólo estamos aquí por unos pocos días", Lauren había logrado entablar una conversación
informal sin ninguna dificultad. "¿Qué hay acerca de ti? ¿Asumo que vives aquí?"

"Sí, vivo aquí", la camarera confirmó y literalmente podía notar la gran tensión lo cual causó una
sensación aún más preocupante que el dolor en mi pecho.

"Bueno, tal vez ¿Podrías darme tu número y así me puedas mostrar los alrededores de la ciudad
alguna vez?" mi compañera sonrió encantadoramente y todo lo relacionado con su enfoque
parecía sin esfuerzo y casi magistral. Ella no era engreída pero sí confiada; en un punto, pero aún
linda y auténtica...y odié cada segundo de eso.

"¿Tus amigas no te van a echar de menos?" el objeto de deseo de Lauren inclinó la cabeza
juguetonamente mientras nos señalaba.

"No son mis amigas. Sólo salgo con ellas porque siento pena por ellas", la centrocampista esbozó
una sonrisa de broma en el momento justo para hacer reír a la camarera y demostrar lo buena que
era en esto.

"Que generosas eres", el coqueteo siguió su camino, mientras yo pensaba que mi cabeza iba a
explotar.

"¿Qué puedo decir?", Lauren se encogió de hombros. "Soy muy generosa."

Esas últimas palabras fueron tan sugerentes, mezcladas con esa expresión hambrienta en sus ojos
y sonrisa diabólica lo que hizo que quisiera golpear a la chica que estaba teniendo la atención por
parte de Lauren. No tenía ningún derecho a sentirme de esa manera, pero no pude evitarlo. Se
sabía que Lauren tenía una reputación de ser una seductora y hacer queun montón de chicas se
cuestionaran su sexualidad. Pero al ver su 'trabajo' en vivo era otra cosa. Por no hablar de que
había tenido una muestra de la 'generosidad' de Lauren por mí misma. La sola idea hizo que mis
mejillas ardieran.

Stephanie vaciló unos segundos, se mordió el labio, pero luego escribió su número en otro
pequeño trozo de papel. Colocándoselo delante de Lauren, mi compañera sonrió ampliamente,
pero casi con timidez, al mismo tiempo, lo cual fue la cosa más eficaz hasta el momento, porque
sentí mariposas en el estómago.

"Mi turno terminara en unos pocos minutos. Pero llámame más tarde."

"Lo haré", Lauren sonrió y vio como la camarera se alejaba, centrándose en las otras chicas que
estaban un poco más lejos.

"Eres increíble", Normani negó con la cabeza y era obvio que no era la única en la mesa que había
escuchado el coqueteo de Lauren.

"Lo sé", la de ojos verdes rió entre dientes y se metió el teléfono en el bolsillo de sus pantalones.
Los orbes claros se levantaron y se encontraron con mi mirada por primera vez. Fue sólo un

208
segundo antes que mirara hacia otro lado. Cuanto más tiempo pasábamos juntas, más difícil era
ignorar lo mucho que me hubiera gustado no haber arruinado todo. Pero después de todo lo que
habíamos pasado no podía esperar a que ella fuera mi amiga.

Me encontré despierta hasta muy tarde esa noche. Todas las nuevas impresiones del día
mantenían mi cerebro ocupado al parecer-muy ocupado porque no podía dormir, aunque mi
cuerpo estaba exhausto por el primer día del campo de entrenamiento. Con un libro en la mano,
traté de leer para cansarme a propósito y esperé encontrar un poco de descanso. Necesitaba
dormir antes de la próxima práctica, pero algo me estaba molestando.

De repente, escuché un ruido. Era una voz. ¿Alguien estaba gritando? Dejando a un lado el libro
por un momento, mis ojos se abrieron de golpe cuando me di cuenta de lo que mis oídos estaban
escuchando eran: ¡Gemidos!

La habitación del hotel junto a la mía era ocupada por Lauren. Había sido elegida al azar. Y lo que
escuché sin duda venía desde el otro lado de la pared detrás de mí.

"!Dios mío!"

La voz no era familiar pero no tenía idea de quién podría ser. Imágenes de la camarera
estéticamente perfecta infiltraron mi cerebro.

"Sí... Oh Dios mío, ¡LAUREN!"

Mi cabeza iba explotar cuando los verdaderos gritos de placer fueron aumentado en volumen y
frecuencia. O esta Stephanie-era una chillona o Lauren era muy buena. Bueno, Lauren era muy
buena lo cual lo sabía por experiencia a pesar de que había sido más reservada. Este era el karma,
¿Verdad? Probablemente por el momento cuando Lauren me había pillado a mí en el baño con
Ariana; o simplemente era por todo el daño que había últimamente.

Sin embargo, el castigo era insoportable. Mis mejillas se fueron enrojeciendo con la sombra más
profunda antes de que agarrara mis auriculares y pusiera un poco de música para no escuchar.
Una vez más, no tenía derecho a estar molesta o preocupada de cualquier forma. Pero sabiendo lo
que Lauren estaba haciendo en el otro lado del muro era exasperante ¿Estaba celosa porque no
había visto a mi propia novia en tres meses y estaba privada de la intimidad? ¿O estaba celosa de
que no era yo la que estuviera gritando en este momento? Ese último pensamiento era tan
inquietante y aterrador en un sentido que no le hice caso rápidamente.

Mi corazón latía con fuerza y ahora realmente no podía dormir en absoluto. Suspiré con
frustración y me quedé mirando el techo, escuchando la melodía y la letra llenando mis oídos en
lugar de los ruidos anteriores.

209
"I don't know your face no more (Ya no reconozco tu rostro)

Or feel your touch that I adore(O sentir tu tacto que adoro)

I don't know your face no more(Ya no reconozco tu rostro)

It's just a place I'm looking for(Es sólo un sitio que estoy buscando)

We might as well be strangers in another town(Podríamos ser extraños en otro pueblo)

We might as well be living in a different world(Podríamos estar viviendo en un mundo diferente)

We might as well (3x)(Podríamos)

I don't you thoughts these days(No conozco tus pensamientos últimamente)

We're strangers in an empty space(Somos extraños en un espacio vacío)

I don't understand your heart(No comprendo tu corazón)

It's easier to be apart(Es más fácil estar separados)

We might as well be strangers in another town(Podríamos ser extraños en otro pueblo)

We might as well be living in another time(Podríamos estar viviendo en diferentes épocas)

We might as well(Podríamos)

We might as well(Podríamos)

For all I know of you now (3x)Por todo lo que sé de ti ahora)

For all I know(Por todo lo que sé)"

Después de un buen rato, finalmente me quedé dormida. Pero no duró por mucho tiempo ya que
alguien llamaba a mi puerta. Echando un vistazo a mí alrededor, era muy temprano. Me tenía que
levantar temprano para la práctica de todos modos, ¡Pero no a las 5am! ¿Quién era el disturbio
que inquietó mi sueño difícil de alcanzar? Me estiré rápidamente, me dirigí a la puerta y me froté
los ojos adormilada.

"Sorpresa", Ariana sonrió ampliamente cuando me di cuenta de que esto no era un sueño.
Probablemente estaba cansada, pero mi alegría no fue tan indomable como yo esperaba. Mi novia
había hecho el esfuerzo para venir a verme, así que debería estar en la luna, ¿No?

"Hey", le dije con voz ronca y di un paso hacia adelante, cruzando mis brazos alrededor de su
cuello. Planté un gran beso en sus labios, tratando de mejorar mis sentimientos y funcionó. En
realidad los sentimientos de sus suaves labios contra loa míos, me llenaron de una mejor

210
apreciación de verla después de todo. Nuestro momento fue interrumpido por otra puerta que se
abrió.

Miré a mi lado y vi a Stephanie, la camarera de ayer, saliendo de la habitación de Lauren. Por


supuesto, Lauren la siguió y mi corazón cayó en picada por alguna razón. Los ojos verdes familiares
miraron a mí y a Ariana pero rápidamente se centraron en su conquista de nuevo. Mi compañera
de equipo besó a la joven que, obviamente, había disfrutado de ella anoche. Fue sólo un pequeño
beso en los labios y oí un ronco 'Adiós' antes que lograra apartar los ojos de la pareja. Stephanie
camino avergonzada y quería fulminarla con la mirada pero me encontré con ella sonriéndome
con timidez en su lugar. ¡Quería matarla!

La puerta de Lauren se cerró de nuevo antes de que pudiera tomar otro vistazo.

Había una sensación horrible en la boca de mi estómago de nuevo. Tomé una respiración
profunda, agarré a Ariana y la arrastré a mi habitación del hotel.

"Cami-", fue todo lo que la otra morena logró decir antes que la interrumpiera al atacar su boca
con la mía. Hambrienta de besarla, la llevé a mi cama y la empujé en ella. Sin ninguna duda, me
senté a horcajadas sobre las caderas estrechas y vi su expresión de sorpresa. Me quité la camisa y
la tiré a algún lugar antes de juntarnos de nuevo y desesperadamente presionar mis labios contra
los suyos. No se podía negar que había extrañado estar cerca de ella. Pero también quería olvidar
esa sensación desagradable de los celos, aunque no me lo admitía a mí misma por completo.

"Whoa, tranquila allí", Ariana se quedó sin aliento cuando casi le arranqué su blusa abierta. Pero
no tenía la intención de facilitar en absoluto. Yo por lo general no era dominante pero necesitaba
de esto ahora mismo. Mis manos tantearon su camino hacia sus pantalones y abrí el pequeño
botón antes que Ariana me detuviera.

"Camila, ¿Qué te pasa?" preguntó y yo suspiré con frustración.

"Nada. No te he visto en tres meses así que...te deseo", traté de sonar seductora y convincente al
mismo tiempo que bajaba la cremallera.

"Por mucho que me gustaría creer que estás emocionada por verme, tengo la sensación de que es
otra cosa que tu acabas de ver", la más vieja sacó mi mano de sus jeans.

"¿Y qué es eso?" mi voz mostró lo molesta que estaba inadvertidamente.

"Lauren con la otra chica", Ariana se apoyó en sus codos.

"Oh, Dios mío", me quejé y sacudí la cabeza. "¿Estamos allí de nuevo? ¡Tal vez debería estar celosa
porque hablas más de ella que de mí!"

"Sólo dime que estoy equivocada y dejaré el asunto."

211
"!Nunca lo vas a dejar!", le dije con rabia, pero estaba más enfadada conmigo misma en este
punto. "¿Qué más quieres de mí? La corté completamente de mi vida e hice todo esto tan torpe,
¡Sólo para que no te sintieras insegura! Ella no me ha hecho nada, aparte de ser una gran amiga
para mí y Lara, para ser honesta. A cambio le hice daño muchas veces y ni siquiera puedo hacer lo
correcto."

"¿Por qué vas a querer hacer lo correcto?" la cantante sonaba igual de enojada.

"!Porque me preocupo de ella!" casi grité sin ningún control sobre mis palabras. "El hecho de que
deje de hablar con alguien, no significa que voy a dejar de preocuparme por ellos."

"Estás haciendo que suene como si yo fuera la mala de todo esto", argumentó Ariana claramente
molesta. "!No hubiera planteado un ultimátum si no me hubieras dado motivos para estar
preocupada!"

"!Y me disculpé cien veces por ello! Ella es parte de mi vida profesional, te guste o no. Estoy
haciendo lo que me pediste, pero sinceramente estoy harta, si ni siquiera lo reconoces y la sigues
trayendo de vuelta todo el tiempo. Entonces yo también podría comenzar a hablar con ella de
nuevo", disparé de vuelta y esta pelea, era como mucho, la más fea que habíamos tenido.

"Sí, tal vez deberías hacer eso", dijo entre dientes y me empujó fuera de su regazo para levantarse.

"¿Qué se supone que significa eso?"

"Eso significa que puedes hacer lo que te dé la gana, Camila", Ariana se abotonó la blusa mientras
yo estaba sentada en la cama.

"¿En serio estás haciendo esto ahora?" tomé la gravedad del argumento como me calmé un poco.

"¿Por qué no te vas al lado y dejas que Lauren te consuele?" Ariana escupió repentinamente y
alimentó mi ira, una vez más.

"Si no confías en mí, esto no va a funcionar y lo sabes", traté de componerme después de la


veracidad y doloroso último comentario.

"Nunca va a funcionar, ya que realmente no quieres estar conmigo", sonaba más triste ahora.

"Sí, quiero estar contigo", no estuve de acuerdo rápidamente.

"No, no quieres. Tú te estableciste por mí", dijo Ariana derrotada y me miró. Por alguna razón, no
podía discutir en este momento. Tragué saliva con dificultad y dejé que esas palabras se
hundieran, además, ella no estaba en lo correcto, ¿Verdad? Ariana era hermosa, talentosa,
cuidadosa y la única que había sido mi amiga cuando yo no había tenido nada. ¿Cómo no podría
querer estar con ella? Ella se dio la vuelta y quiso marcharse antes que yo saltara de la cama.

"Ariana, espera-"

212
"Ni siquiera trates de negarlo. La mirada que me diste me lo dijo todo", la chica más baja suspiró y
vi sus ojos llorosos como la alcancé para bloquear la puerta.

"No quiero perderte", mi propia voz estaba cargada de emoción ahora, porque esto era lo último
que había esperado que sucediera.

"Bueno, esta vez no es tu elección", Ariana respondió y pasó junto a mí y esta vez la dejé pasar. El
sonido de la puerta cerrándose, dio inicio a las primeras lágrimas rodando por mis mejillas. Enterré
mi cara en mis manos y quise suprimir estos sentimientos.

Yo sólo no había perdido a Lauren si no a Ariana también. Y ahora no estaba segura de que dolía
más.

Los próximos días del campamento fueron muy duros. La ruptura estaba pesando sobre mí y era
difícil no pensar en ello. Afortunadamente la práctica era el momento para distraerse y
únicamente centrarse en el fútbol. Yo todavía estaba evitando a Lauren ya que no estaba
preparada para hacer frente a la posibilidad de haber hecho la elección equivocada. Tener
contacto con mis otros compañeros era importante y mantenían mi mente alejada de Ariana y el
hecho de que estaba extrañando a Lara como una loca.

Afortunadamente había arreglado una pequeña charla con ella y Dinah en el último día. Incluso si
mañana iba a volver a Francia, quería ver a mi hija. Hablar con ella a través de webcam me levantó
el ánimo de inmediato. Ella estaba sentada en el regazo de Dinah y hablamos de cosas aleatorias
hasta que ella se refirió a algo que aceleró mi pulso.

Lara: ¿Lauren está allí?

Camila: Ella no está conmigo ahora, pero está en algún lugar del hotel.

L: ¿Puedo hablar con ella?

C: No creo que tenga tiempo, cariño.

L: ¿Por qué ella ya no me quiere?

Mi corazón se rompió en ese instante. Lara estaba presionando sus labios con fuerza y evito mirar
la pantalla. Ella estaba molesta y con prontitud tuve ese sentimiento de culpabilidad.

C: Ella te quiere mucho, eso lo sé. Pero está muy ocupada y vive muy lejos.

L: Tú ahora también estás muy lejos, como Ari a veces. ¿Por qué no puedo hablar con Lauren
entonces?

A veces me asustaba lo inteligente que era Lara para su edad. Ella veía las cosas tan rápido y yo no
quería mentirle. Al mismo tiempo, no quería molestarla tampoco.

213
C: Voy a preguntarle si tiene tiempo para que podamos hablar en la noche de nuevo.

L: ¡Hurra!

C: No puedo prometerte nada, bebé.

L: De acuerdo, pero ¿Puedes decirle que quiero mostrarle algo?

C: ¿Qué cosa?

L: Es una sorpresa.

C: Muy bien, se lo diré. Me tengo que ir ahora, pero ya hablaremos más tarde. Recuérdale a Dinah
hacer una video llamada esta noche porque sabes que a ella se le olvida todo.

Lara soltó una risita mientras Dinah protestó antes de desconectarse.

¿Cómo demonios se suponía que le iba a pedir a Lauren hablar con mi hija después de todo lo que
le había hecho pasar? Era nuestro último día y no habíamos intercambiado una sola palabra. Y eso
no cambió a pesar de que la vi en la práctica. Tenía miedo de estar más allá de la creencia. Ella
estaba más decidida que nunca a ignorarme lo que no estaba haciendo las cosas más fáciles. No es
que me merecía que las cosas fueran fáciles en este punto.

Me acobardé. Durante todo el día había tratado de acercarme a ella, pero no pude. El temor a su
reacción me retuvo hasta que la vi en el gimnasio y como estaba trabajando en solitario. Tomando
una respiración profunda, sabía que esta era la mejor oportunidad para hacer esto. Entré y vi a mi
compañera de equipo usando la prensa de piernas. Sus músculos no necesitaban ningún
entrenamiento en mi opinión, porque se veían perfectamente tonificados ya. Pero sabía lo
dedicada que era ella.

Mi pulso se fue por las nubes, tan pronto como ella me vio y detuvo sus movimientos. Me tragué
el nudo de la garganta antes de que me fuera a ahogar. Los ojos verdes penetrantes me
desarmaron sin vacilar.

Me quedé allí como un completo idiota y, básicamente, sólo la miraba mientras ella me observaba
con escepticismo.

"Hey", me las arreglé para decir después de unos momentos de silencio incómodo, pero no
conseguí una respuesta. En cambio, Lauren se levantó y reveló que llevaba sólo un sujetador
deportivo y unos pantalones cortos. No fue intencional, pero no pude evitarlo. La piel de marfil
brillaba levemente debido a la fina capa de sudor que cubría su cuerpo. Sus músculos abdominales
estaban contraídos y abultados más visible de lo normal. Al verla limpiar su estómago con una
toalla me hizo chasquear de nuevo a la realidad.

"¿Cómo estás?", le pregunté con cautela y vi a Lauren reír suavemente con incredulidad mientras
sacudía la cabeza.

214
"En serio, vete a la mierda", respondió ella, sorprendentemente dura y cogió su botella de agua
para beber un sorbo.

"Muy bien, veía eso venir", murmuré para mí misma y exhalé con fuerza. "Lauren, no sé cómo
decir esto, así que sólo voy a soltarlo."

"Realmente no podría importarme menos lo que haces", suspiró molesta.

"Quería preguntarte si podrías hablar con Lara", le dije a pesar de sus palabras de antes y vi los
orbes esmeraldas centrados en mí. "Vamos a hablar a las nueve esta noche a través de webcam y
ella quiere hablar contigo."

"No tienes vergüenza", Lauren respondió y la cantidad de desprecio en sus ojos estaba revolviendo
mi estómago.

"Sé que no tengo el derecho-"

"!Tienes absolutamente toda la razón!" la voz de la chica mayor se hizo más fuerte y furiosa. "Has
perdido todo el derecho de tenerme en tu propia vida o en la de Lara cuando elegiste a otra
persona repetidamente. Yo no hice esa decisión, tú lo hiciste. Y ahora tienes que vivir con ello."

"Tienes razón y yo no hubiera preguntando si se tratara de otra persona. Pero ella...te echa de
menos y yo no quería decepcionarla a menos de que lo hubiera intentado", respondí con
honestidad y con la esperanza de que ella lo reconsiderara. "Ella dijo que te dijera que te tiene una
sorpresa."

"No lo entiendes, ¿Verdad?" Lauren casi se burló y lo dejó salir. "¿Por qué debería hacerlo? ¿Para
recordarme a mí misma que, supuestamente, la nombraste después de mí? Es suficiente verte
aquí, pero no puedo hablar con tu hija y pretender que no rompiste mi corazón por millonésima
vez. Incluso si llegué demasiado tarde y no me amas ¿Era realmente necesario alejarme de esa
manera? Quiero decir, pensé que habíamos avanzado y por lo menos podríamos preservar algún
tipo de amistad pero ni siquiera me hablaste después que me fui de París. ¿Pero ahora se supone
que debo hablar con Lara? ¡Estoy siendo remecida por tus cambios de humor!"

"Tuve que alejarte", dije muy agitada ahora también.

"¿Por qué?"

"Debido a que Ariana no confiaría en mí a menos que dejara de habar contigo", le confesé a pesar
de que sabía que no era justo culpar a mi ex novia por las elecciones que había hecho.

"Bueno, entonces vuelve donde tu preciosa novia y deja que ella hable con Lara", Lauren escupió y
me di cuenta que estaba apretando su puño.

215
"Rompimos", admití y Lauren me dio una mirada que nunca había visto antes. En todas las veces
que la había lastimado, cuando éramos más jóvenes y ahora hasta hace poco, nada era cercano al
dolor que vi en sus ojos esta vez.

"¿Así que yo soy tu premio de consolación?" su voz temblaba antes que apretara su mandíbula lo
que significaba que estaba a punto de llorar.

"No, no es así", intervine con más desesperación y me sentí muy mal que ella pensara eso.

"!Vete a la mierda, Camila!", dijo entre dientes con paso inseguro y agarró su toalla para alejarse.
Fue instintivo, pero no podía dejarla ir creyendo eso.

"Lauren, eso no es cierto lo juro", cogí su muñeca y me aferré a ella para que no pudiera pasar por
delante de mí.

"Suéltame", la más vieja exigió pero sentí mis dedos aferrándose con más fuerza por alguna razón.

"No hasta que me creas", estaba más que exasperada porque con todas las cosas que yo le había
hecho, no podía dejar que ella creyera que era 'mi premio de consolación' ahora también.

"Estabas besando a Ariana hace apenas unos días en el pasillo delante de mí. Ni siquiera me
miraste antes, pero ahora que ya no estás con ella, ¿Se supone que debo ser tu amiga de nuevo?
¿Estás mal de la cabeza?" la ira volvió a su voz.

"¿Cómo te puedes enojar porque la estaba besando delante de ti, cuando te acostaste con una
extraña en una habitación al lado de la mía?" le respondí, aunque no quería.

"No estoy saliendo con alguien, ¡Así que puedo hacer lo que quiera! ¿Por qué te importa? ¡No
estamos juntas y nunca lo estuvimos! Eres una gran hipócrita. ¡Lo siento por no ser célibe después
de que me rechazaste DE NUEVO!"

"No te estoy pidiendo que seas célibe", argumenté y esta pelea era aún peor que la de mi ruptura
con Ariana.

"Entonces, ¿Qué quieres de mí, Camila?" Lauren preguntó con tanta desesperación mientras mi
corazón latía sin control. "¿Tienes alguna idea de lo difícil que ha sido superar lo que pasó entre
nosotras? No podía hacer nada cuando regresé de París porque tú destrozaste lo que quedaba de
mi corazón. Lo que estoy haciendo para solucionarlo no es tu asunto para juzgar. Quizás te estabas
riendo de mis mensajes de texto y llamadas pero nunca me había sentido tan destrozada. Bebí
durante dos semanas seguidas hasta que tuve intoxicación por alcohol y Kristie me dio un pasaje
de la realidad. Ya era hora de seguir adelante y darse cuenta de que ni siquiera tú puedes sentir
este inconsolable fin. Por lo tanto, no; no voy a hablar con Lara y no te dejaré volver porque no
puedo soportar otro desengaño, lo que sería inevitable. Y si tienes alguna simpatía por mí en
absoluto detrás de ese exterior inaccesible, soltarás mi mano ahora mismo y me dejarás ir en paz."

216
Me invadieron tantas sensaciones como también me quedé congelada. Dejé ir su mano, nos
miramos a los ojos con una mirada más rápida. Ella suspiró en voz baja, probablemente con alivio
antes de que se diera vuelta y se alejara.

Por primera vez, me di cuenta de lo mucho que la había lastimado. Sí, tuve mis razones y nunca
había sido mi intención hacerlo, pero eso no le quitaba el dolor. No había consuelo para ella en
este momento y el daño que le había hecho no tenía arreglo. Llegar a captar esa realidad fue
brutal, pero probablemente me lo merecía.

Estaba absolutamente temiendo la conversación con Dinah y Lara. Por lo general, no podía esperar
para hablar con mi hija, pero sabiendo que tendría que decirle que Lauren no hablaría con ella
pesaba sobre mí. Una parte de mí quería simplemente no conectarme, pero entonces ellas se
preocuparían. Abriendo mi ordenador portátil y ver a mi vieja amiga con Lara en su regazo me
causó algunos sentimientos ambivalentes de alegría y miedo. Acabábamos de saludarnos cuando
oí un golpe en la puerta.

Rápidamente disculpándome, esperaba que alguien del equipo de entrenadores estuviera fuera.
Tal vez nuestra hora para irnos mañana por la mañana había cambiado. Al abrir la puerta, me
quedé boquiabierta cuando vi a Lauren allí de pie. Después de nuestra conversación en el
gimnasio, ella era última persona que había sospechado que apareciera. Ni siquiera podía hablar.

"¿Es demasiado tarde para hablar con Lara?" su voz sonaba nerviosa pero parecía más tranquila
que antes.

"No, por supuesto que no", casi balbuceé, porque todavía estaba en shock. Dejé entrar a mi
compañera de equipo y aproveché los pocos segundos para recuperar mi compostura. Se acercó a
la cama y se sentó en ella, sosteniendo el portátil. Su rostro se iluminó de inmediato e hizo que mi
corazón se agitara.

Lara: ¡Panqueques!

Oí la voz aguda chillar por los altavoces mientras caminaba hacia la cama lentamente.

Lauren: Hola, pequeña. ¿Cómo estás?

Lara: Bien. ¿Y tú?

Lauren: Estoy bien también, gracias.

Era conmovedor ver a la chica de ojos verdes sonreír con cariño cada vez que Lara hablaba con
ella; incluso si era sólo a través de webcam. Reclamé un asiento detrás de Lauren en la cama, pero
me aseguré de mantener distancia. Aún así, podía ver la pantalla y por lo tanto sus dos caras en
ella.

217
Lauren: ¿Te vas más grande y fuerte? ¿Has estado practicando y haciendo ejercicio?

Lara: Juego fútbol todos los días, así voy a llegar a ser tan buena como tú y mamá.

Lauren: Eso es bueno. Recuerda lo que te dije; tienes que practicar con los dos pies, porque no
mucha gente puede hacer eso. Tu mamá puede y es por eso que es tan buena.

Lara: Lo sé. Mamá dice que soy buena con el pie izquierdo como ella.

Lauren: Genial, estoy contenta de escuchar eso.

Lara: ¿Lauren?

Lauren: ¿Sí?

Lara: ¿Por qué ya no quieres hablar conmigo?

Noté que la chica mayor se tensó un poco, y por primera vez la sonrisa en su rostro se suavizó.

Lauren: Siempre quiero hablar contigo. Pero estoy muy ocupada con un montón de cosas.

Lara: ¿No puedes venir a visitarnos de nuevo?

Lauren: No puedo, pequeña. Pero no tiene nada que ver contigo, ¡Te lo prometo!

Lara: Bueno...es que...te echo de menos.

Lauren: Yo también te echo de menos. Pero por favor, no estés triste. Porque entonces yo también
estaré triste y eso no es bueno para nosotras. Quiero que seas feliz.

Era obvio que Lara estaba molesta y odiaba ver eso más que nada. Para mi sorpresa, Lauren
parecía tan preocupada por los sentimientos de mi hija como yo.

Lara: Yo también quiero que seas feliz.

Lauren: Entonces tienes que sonreír ahora porque eso me hace más feliz que cualquier otra cosa
en el mundo.

Lara: ¿En serio?

Lauren: Sí, de verdad. ¡Eso me hace aún más feliz que comer panqueques!

Lara: No, eso es imposible.

Lauren: Bueno, tal vez, pero es cercano a un segundo lugar.

¿Por qué Lauren era tan buena con los niños? Eso no era justo en absoluto. Mi corazón se
hinchaba, aleteando y estaba haciendo otro tipo de cosas que no debía cuando escuchaba a Lara
reír constantemente.

218
Lara: Tengo una sorpresa para ti.

Lauren: ¿Qué es?

Lara: Aquí, dibujé esto para ti.

Tuve que concentrarme estrechamente en la pantalla para distinguir el papel que mi hija estaba
sosteniendo con orgullo.

Lauren: ¡Eso es increíble!

Lara: Esta soy yo y el fondo estás tú y mamá mirándome. Eso es una pelota.

Lauren: Puedo ver eso. Tienes mucho talento. ¿Son esas otras cosas alrededor pelotas de fútbol
también?

Lara: No, esos son panqueques, ¡Por supuesto!

Lauren: Duh, claro. Lo siento, debí haberlo sabido. ¿Sabes qué? Tengo algo para ti también. Se lo
entregaré a tu mamá y ella te lo llevará, ¿De acuerdo?

Lara ¡Yay! ¿Qué es?

Lauren: Eso también es una sorpresa. Espero que te guste. Pero tengo que irme ahora, porque se
hace tarde.

Lara: De acuerdo.

Lauren: Estoy segura de que nos volveremos a ver cuándo vengas con tu mamá a otros campos de
entrenamiento, ¿De acuerdo? Así que no te pongas triste si no hablamos hasta entonces. Te
quiero, lo sabes ¿Verdad?

Lara: Yo también te quiero.

Lauren: Buenas noches, pequeña.

Lara: Buenas noches, panqueques.

Ambas se despidieron una a la otra antes que Lauren se levantara de la cama y así yo también
volviera a la realidad. Nada me afectó más que ver a mi compañera de equipo tener una unión sin
esfuerzo con Lara. Su conexión me asustaba mucho.

Hasta ese momento no me había dado cuenta de lo mucho que eso había influido en mi relación
con Lauren. Pero fue en parte la razón por la que había estado indecisa de darle una oportunidad.
¿Qué pasa si Lauren y yo en realidad hubiéramos tenido una relación y luego nos separábamos?
No sólo mi corazón quedaría en ruinas, el de Lara también. Si mi hija ya estaba unida a Lauren ya,
tenía miedo de lo que pasaría si su vínculo se intensificaba. Pero ahora me sorprendí a mí misma
lamentando por no haber tomado un riesgo cuando yo había tenido la oportunidad.

219
Caminé con Lauren hacia la puerta en silencio hasta que ella me entregó un pequeño folleto.
Probablemente era el regalo para Lara. Miré hacia arriba y me encontré con los ojos más
hermosos que jamás había visto; no sólo por su color excepcional, sino también por su expresión y
profundidad.

"Gracias por hacer esto, Lauren", dije sinceramente.

"Lo hice por ella no por ti", respondió ella con calma, lo cual era mejor que nuestra lucha de gritos
de antes.

"Lo sé, pero igual", presioné y la vi asentir.

"Y lo siento por-"

"No vamos a entrar en esto otra vez, por favor", ella me cortó, pero no estaba tratando de ser
grosera. "Yo sólo quería hablar con Lara y que le puedas dar esto por mí. Vamos a dejar las cosas
así."

"Está bien", estuve de acuerdo, porque no quería otra confrontación.

"Buenas noches", dijo Lauren rápidamente.

"Buenas noches", correspondí y la vi caminar de regreso a su habitación antes de reclamar mi


lugar en la cama para hablar con Lara. La niña estaba tan alegre, después de haber hablado con
Lauren y eso sólo hizo que mi corazón soltara. Siguió rogándome para que le dijera cuál era el
regalo sorpresa, pero no iba a estropearlo.

Más tarde esa noche, cuando estaba a punto de ir a dormir, no pude contener mi propia
curiosidad más y tomé el librito que Lauren me había dado. Lo abrí y leí el título: 'Las aventuras de
Mini CC7'

Tragué una vez más, cuando me di cuenta de que Lauren básicamente había creado un pequeño
cómic para y sobre Lara. Esto no era algo que ella había hecho en unos pocos días. Le debe haber
tomado un tiempo para hacer los meticulosos dibujos detalladamente que contaban una historia.

Suspirando profundamente, me estaba empezando a dar cuenta de que hacer la elección segura
no siempre era la decisión correcta.

=================

220
Capitulo 14

Desde que Lauren me había entregado el cómic para Lara, lo había leído en un estimado de veinte
veces. Ni siquiera podía recordar cuando me había dormido porque había estado muy absorbida
en la historia que rodeaba a mi hija quien era un súper héroe jugando fútbol. Cuántas más veces
miraba los dibujos que capturaban la historia, más me daba cuenta de lo horrible que había
tratado a Lauren. Tal vez ella tenía razón y lo mejor que podía hacer por ella era dejarla en paz
después de todo por lo que le había pasado por mi culpa.

A la mañana siguiente era el momento para nuestra partida. Todo el equipo se dirigía al
aeropuerto y luego nos iríamos por caminos separados. Llegué al vestíbulo y vi a Lauren con
Normani. Se estaban riendo de algo en el iPad de Normani mientras yo trataba de mantener un
perfil bajo.

Eso fue difícil de hacer cuando vi a Ariana entrar en el vestíbulo del hotel. No habíamos hablado
desde nuestra pelea de hace unos días y, por lo tanto, desde nuestra ruptura asumí. Estaba más
que sorprendida de verla. Afortunadamente no todo el mundo estaba en la planta baja, así que
teníamos un poco de tiempo para nosotras. La chica baja se me acercó rápidamente y yo estaba
completamente congelada.

"No puedo dejar que te vayas así", Ariana explicó y me di cuenta que Lauren nos miraba por el
rabillo de mi ojo. "No fue mi intención que las cosas estallaran, lo siento."

"No eran mi intención pelear contigo tampoco", le contesté en voz baja a pesar de que era posible
que Lauren nos estuviera oyendo debido a la distancia.

"Tenías razón. Te juzgué mal porque estaba celosa aunque no me has dado ninguna razón para
desconfiar de ti últimamente", la castaña clara siguió su camino, mientras que mi cabeza daba
vueltas. "No quiero tirar lo que tenemos a un lado por una acalorada discusión si todavía quieres
estar conmigo. Y no tocaré el tema nunca más, lo prometo."

Ariana sonaba esperanzada y nerviosa al mismo tiempo. Mi corazón latía tan rápido que me
sorprendió. Debería estar en la luna con la perspectiva de volver a estar juntas. Pero no lo estaba.
Algo había cambiado.

"Creo que es mejor si nos quedamos como amigas", le dije con cautela ya que la cara de mi ex
novia se cayó.

"Oh", suspiró ella ya que al parecer no esperaba esa respuesta. "Oh", repitió ella y me sentí
horrible por defraudar a otra persona que me importaba.

"Lo siento mucho", susurré y respiré hondo. "No quiero lastimarte más de lo que ya lo estoy
haciendo. Eso es al parecer la única cosa que he estado haciendo últimamente."

"¿Qué ha cambiado?" preguntó ella simplemente y me miró fijamente.

221
"Eres una persona increíble", respondí con sinceridad. "Siempre has estado ahí para mí. Sobre
todo en aquellos momentos en los que nadie estaba y te quiero por eso-"

"Pero no estás enamorada de mí", me interrumpió y tomó las palabras de mi boca. Tal vez no
había sido tan directa pero ella había puesto el dedo en la cabeza. Me había decidido por ella a
pesar de la duda.

"No", confirmé en un susurro, y la chica más mayor exhaló con fuerza.

"Se honesta conmigo", suplicó. "¿Estás enamorada de ella?"

Sabía de lo que ella estaba hablando sin llegar a mencionar su nombre. Mis ojos casi se lanzaron a
Lauren de nuevo, pero no podía mirar a mi compañera de equipo o responder la pregunta.

"Bueno, supongo que he estado en lo cierto", Ariana estaba claramente molesta después de mi
silencio.

"No, no sé lo que siento. Todo es tan confuso", le confesé más frustrada, pero no quería que
pensara que todo lo que había pasado entre nosotras había sido una mentira. Yo realmente me
preocupaba por ella, pero eso no era suficiente para sostener una relación simplemente porque
era cómodo.

"Probablemente no debería decir esto, pero ella te va a hacer daño otra vez", la cantante me
advirtió. "Y para entonces no voy a estar ahí para recoger los pedazos."

Yo sabía que ella estaba enojada y apenada conmigo más que con Lauren. Aún así, sus palabras me
asustaron. La verdad era que yo le había estado haciendo daño a la otra futbolista mucho más que
ella a mí. Pero la idea de nosotras tratando de estar juntas y caer era el pensamiento más
aterrador hasta el momento. Nadie más estaba debajo de mi piel que la hermosa morena de ojos
color esmeralda. Sólo podía imaginar lo mucho que dolería si la perdía para siempre.

¿Pero no lo había hecho ya?

Le pedí disculpas una vez más a Ariana antes de que ella me dejara sola con mis pensamientos. Por
una fracción de segundo mi mirada se encontró con la de Lauren, pero ella estaba decidida a
ignorarme y yo tenía demasiado miedo de hacer un movimiento. Antes de darme cuenta, estaba
de vuelta en mi camino a Francia, mientras que Lauren se dirigía a Boston. Pensé que la distancia
disminuiría el pensamiento constante de ella.

No lo hizo.

Durante tres semanas me las había arreglado para seguir como si nada hubiera cambiado. Estaba
de vuelta de París y continué donde había dejado las cosas. Sólo había algo diferente. No podía
pasar por alto de que había estado increíblemente mal por lo que le había hecho a Lauren.

222
Mi mala conciencia me estaba comiendo viva. Tanto así, que incluso Dinah lo había notado y me
había animado a hacer algo que me estaba causando un gran dolor de cabeza ahora. A pesar de
que esa idea me asustó como la mierda, yo había hecho algo que nunca habría considerado antes.

Estaba de vuelta en Boston. Volar horas para ver a Lauren sin que ella lo supiera era arriesgado.
Había una posibilidad de que ella no quisiera hablar conmigo; una posibilidad bastante grande en
realidad teniendo en cuenta mi último intento. Pero tenía que intentarlo, ¿Qué otra cosa podía
hacer? Obviamente, no me creyó cuando traté de hablar con ella durante el campeonato. Eso se
sentía como si yo estuviera siendo oportunista pero volver a mi anterior casa se sentía igual de
intimidante y emocionante.

Como yo había estado en el departamento de Lauren antes, sabía mi camino y llegué al edificio de
piedra rojiza y sin ningún problema. La dificultad era tocar el timbre. Había estado de pie en frente
de su puerta durante casi quince minutos. Una parte de mí no podía creer que realmente estaba
allí. Echarse para atrás ahora no era una opción. Después de unas cuantas respiraciones,
finalmente llamé al timbre.

Inhalando profundamente, mis ojos se centraron en la apertura de la puerta, pero aterrizaron en


Kristie. La rubia me miró sorprendida.

"Hey", mi ex compañera de equipo dijo claramente sorprendida.

"Hola", le respondí con una pequeña sonrisa antes de que el incómodo silencio siguiera. "¿Está
Lauren allí?"

"Um, sí, claro", balbuceó. "Lo siento, sólo estaba sorprendida. Es bueno verte." Kristie me dio un
abrazo lo cual me hizo sentir más cómoda antes de alejarse. "Voy a salir a comprar algo de comer
para que puedan...hablar", dijo ella, pero vi preocupación en sus ojos. "Sabes que te quiero,
¿Verdad? Pero si le haces daño de nuevo, voy a tener que matarte."

A pesar de que yo sabía que estaba bromeando, había un poco de sinceridad detrás de esa
declaración. Era claramente evidente que ella estaba preocupada por su amiga, pero lo entendía.
En realidad, eso me hizo como ella incluso más y ella era una buena amiga de Lauren. Si tan sólo
podría decir eso sobre mí.

"Me parece justo", le respondí con una sonrisa amable y la vi hacer lo mismo.

"Vamos adentro, ella está en la sala de estar. Nos vemos más tarde", Kristie me hizo saber antes
de salir del departamento. Poco a poco haciendo mi camino hacia la sala de estar, oí la voz de
Lauren y sentí mi pulso acelerarse al instante.

"¿Kristie? ¿Quién llamaba a la pu-"

Lauren estaba de pie delante del sofá, pero dejó caer un libro de su mano, dejando a media la
frase cuando me vio. Si Kristie había parecido sorprendida

223
cuando me vio, Lauren se veía profundamente conmocionada. Pero yo también estaba
sorprendida de mí misma. Mis ojos recorrieron inadvertidamente a la chica más vieja. Llevaba un
suéter de gran tamaño, un pantalón corto que parecía un short pero era apenas visible gracias al
chaleco de puntos. Tenía el pelo recogido en un moño desordenado y un par de gafas negras con
borde lo cual me dejó más perpleja.

Se veía tan esponjosa y linda y... ¡Doméstica! A veces realmente me olvidaba que ella era también
una estudiante universitaria. Mi corazón latía con violencia cuando empecé a soñar despierta por
sólo unos momentos; desayunar con ella mientras se veía de esa manera y abrazarla con la suave
tela de su jersey...pero puse fin a esos pensamientos y me recordé a mí misma por qué estaba
aquí.

"Lo siento, Kristie me dejó entrar. ¿Es un mal momento?", le pregunté con cuidado ya que la otra
morena parecía estar recuperándose de su sorpresa.

"No, sólo estoy estudiando", explicó y ahora me di cuenta de la cantidad de carpetas y libros
desparramados en toda la sala. "Pero estaré haciendo eso por toda la semana así que todo estará
bien, supongo. Sólo iba a hacer un poco de café, ¿Quieres uno?"

Era obvio que Lauren estaba nerviosa porque hablaba mucho más rápido que de costumbre, pero
al menos no me estaba echando. Todo lo contrario, limpió el sofá de todo el material de estudio y
me ofreció un asiento.

"Eso estaría bien, gracias", acepté y la vi caminar a toda prisa hacia la cocina americana. "Sin cre-"

"Sin crema y azúcar, lo sé", la nativa de Miami reveló que sabía cómo tomaba mi café y eso hizo
que mi corazón aleteara por alguna razón. Me senté en el sofá y miré alrededor del departamento.
"Se ve muy diferente aquí."

"Sí, reordené casi todo el departamento", Lauren confirmó antes de unirse a mí otra vez con dos
cafés en sus manos. "Pensé que necesitaba un cambio", agregó mientras me entregaba una taza
de las bebidas calientes. Algunas mujeres se cortaban el pelo cuando comenzaban un nuevo
capítulo; los estudiantes de arquitectura renovaban sus departamentos al parecer.

"Bueno, se ve increíble. Quiero decir, antes se veía asombroso también", divagué un poco y me
hice más consciente de mis propios nervios. "¿Cómo va el estudio?" traté de hacer una pequeña
charla y tomé un sorbo de mi café.

"No he dormido en 48 horas, así que va muy bien", dijo con una sonrisa suave y finalmente me las
arreglé para mirarla. Mi corazón saltó una vez más. Ella estaba tan cerca ahora, sentada a mi lado.
Su sonrisa se desvaneció lentamente cuando ninguna de las dos habló. El silencio se hizo más
incómodo como Lauren empujó sus gafas y los hizo asentarse en la parte superior de su cabello.
Sus ojos verdes se encontraron con mi mirada con cuidado, pero desvió la mirada rápidamente y
finalmente me decidí a hablar. Yo no era alguien que hablaba de sus sentimientos y nunca lo había

224
sido. Pero si quería tener algún tipo de relación con Lauren, tenía que ser honesta y abrirme;
aunque fuera difícil.

"Probablemente estés hartas de mis disculpas por ahora, pero estoy tan increíblemente
arrepentida, Lauren", exhalé para frenar mi pulso. "Nunca quise hacerte daño. E incluso si no hubo
intención, lo hice y por eso estoy arrepentida. Por lo que más me arrepiento es haberte alejado."
Sus ojos se conectaron con los míos cuando escuchó eso. "Hemos tenido nuestros problemas en el
comienzo, pero siempre has sido una amiga increíble para mí y Lara después de todo. Y yo no lo
aprecié. Debería hacer luchado más por nuestra amistad cuando Ariana dijo que tenía que dejar
de hablar contigo. Tenías razón en lo que dijiste hace unas semanas. Incluso si no quería estar
contigo, podría haber al menos intentado ser tu amiga o no haberte alejado completamente. Lo
debería haber intentado. Eso habría sido lo menos que podía haber hecho después de todo por lo
que habíamos pasado."

La chica mayor fue difícil de leer, mientras yo hablaba. Ella no parecía molesta o enojada en
absoluto. Sus ojos se encontraron con los míos de vez en cuando por un momento, pero no había
nada sospechoso en ellos. Su facilidad y falta de emoción lo hizo peor de alguna manera. Ella
parecía haberlo superado y eso dolió más de lo que esperaba.

"Soy consciente de eso", Lauren respondió con calma pero sonaba sincera. "Y sé que no hiciste
esas cosas para hacerme daño a propósito."

"No estoy tratando de hacer excusas", seguí adelante con la esperanza de conseguir más de una
reacción de su parte. "Nunca me di cuenta plenamente de lo mucho que te había hecho daño
hasta hace poco. Estaba tan absorta en mi propio dolor que no vi el tuyo", las palabras de repente
fluían fuera de mí a pesar de que nunca había tenido mucho interés en hablar sin rodeos acerca de
mis emociones. "No fue justo de mi parte porque las experiencias que me hicieron cerrarme no
tienen nada que ver contigo. Pero hice que pagaras por ellas; cuando éramos más jóvenes y ahora
de nuevo."

Aún así, la de ojos verdes se mantuvo casi estoica pero no me estaba mirando. O ella lo había
superado o era más difícil mantener una fachada fría. Tenía le esperanza de lo último y me di
cuenta que esto era probablemente mi última oportunidad de ser honesta con ella. Así que tuve
que sacar todo.

"Odiaría pensar que te he hecho daño a un punto en el que realmente te hubiera cambiado", le
confesé y las imágenes del pasado empezaron a infiltrarse en mi cerebro. "Recuerdo cómo eras
cuando éramos más jóvenes", mi voz se suavizó sin saber lo nostálgica que se transformó. "La
forma en que me mirabas en aquel entonces...nadie nunca me ha mirado así de nuevo. Se sentía
tan...puro y pusiste tu corazón en la mano lo cual me volvía extremadamente loca, pero también
confiaba en ti. Eras gentil y cuidadosa. Sólo espero que no-"

"¿Hayas destruido ese lado de mí?" de pronto terminó la frase y nuestros ojos se encontraron
abruptamente lo cual me sorprendió que me interrumpiera.

225
"Algo así", estuve de acuerdo en voz baja.

"Bueno, lo hiciste", respondió ella, y mi corazón se llevó la mayor inmersión a pesar de que ella no
sonó dura. "Pero tenía que suceder en algún momento. Hubiera sido otra persona si no lo
hubieras hecho, probablemente. Yo era joven, ingenua y bastante inocente para ser honesta.
Quiero decir, fuiste la segunda persona que besé y no tenía idea de que ya estabas teniendo
relaciones sexuales en ese momento", la más vieja habló del asunto con total naturalidad y odiaba
lo defensiva y aparentemente cansada que parecía; eso era irónico, ya que yo jugaba usualmente
esa parte y yo la estaba culpando por actuar así ahora. "Me caí duro pero aprendí mi lección. Y
aprendí de nuevo ahora. Si le das a alguien tu todo y ellos no te quieren, entonces uno se queda
sin nada. Para mí no es una mala cosa haber aprendido a tomar decisiones más inteligentes."

Sus palabras me recordaron mucho a mí misma. Era mi filosofía jugar a lo seguro, después de
todo. Recordando lo que pensé las últimas semanas, no podía guardar silencio.

"Hacer la opción ideal o segura no necesariamente significa que sea la decisión correcta", le
respondí en un susurro y vi una pequeña grieta en su interior. Su ceja izquierda se elevó
levemente, pero luego volvió a su expresión indescifrable.

"Tal vez", suspiró. "Pero es la única opción que estoy dispuesta a hacer."

Asentí con la cabeza comprensivamente porque esto era obra mía. La pelea entre nosotras en la
fiesta de la playa en Miami apareció en mi cabeza. Ella lo había dicho por si misma: la había roto. Y
para hacerlo peor aún, lo había hecho de nuevo. No había alivio o perdón porque el daño que
había hecho era irreversible. Y probablemente no merecía ninguna absolución.

"Mira, no tendrías que haber venido aquí", añadió cuando me quedé callada. "No voy a guardar
rencor y no quiero pelear más. Podemos ser cordiales cuando nos veamos en el campo de
entrenamiento y esas cosas, pero...no puedo ser tu amiga, Camila. Tú tienes una nueva vida y yo
estoy centrada en la mía. Tenías razón en que probablemente hubo razón por la que no
funcionamos, aunque las dos estábamos viviendo en Boston. Es hora de seguir adelante. Hay
demasiada historia en este punto."

Tragando el nudo de la garganta, asentí de nuevo. Ahora no estaba segura de lo que había
esperado al venir aquí. Esto se sintió el final. No hubo gritos y pelea; había tensión y sentimientos
abrumadores. Esto realmente había terminado, ¿No?

"Entiendo", le dije después de un rato, pero saqué algo de mi bolso. Le entregué a Lauren el papel,
parecía sorprendida pero finalmente sonrió al darse cuenta que estaba sosteniendo el dibujo de
Lara. "Tenía que darte esto por ella. Ella tiene el tuyo, pero tú nunca obtuviste el de ella, así que
pensé traerlo conmigo."

"Gracias", Lauren sonrió más cariñosamente.

226
"Gracias por escucharme", le respondí y me di cuenta de lo encariñada que se veía cuando sus ojos
se centraron en el dibujo. "¿Pero desde cuando llevas gafas?" le pregunté porque realmente
estaba curiosa y no quería otra ronda de un silencio incómodo.

"Sólo los uso cuando tengo que leer mucho y mi ojos se tensan", la centrocampista explicó y de
alguna manera el dibujo había roto el hilo un poco más de lo que parecía. Al menos Lauren mostró
alguna emoción más auténtica esta vez sonrojándose ligeramente. "Me veo nerd, lo sé."

"Primero, el cómic y ahora los lentes", no pude contenerme, pero volví a nuestros viejos y
patrones y la molesté. "Parece que no eres tan genial como te crees que eres."

"Me gusta ser una perdedora y no hacer nada en realidad", ella sonrió levemente y la memoria de
mis ensoñaciones acerca de su look doméstico regresó.

"Oh, ¿En serio? Pensé que eras ¿Una mujer grande en la campus y la alma de la fiesta?"

"Me estoy haciendo vieja, supongo", la chica de moño desordenado se encogió de hombros.

"Parece que sí porque tienes una cana allí", señalé un lugar de su cabeza y sus ojos se abrieron a lo
ancho.

"!Dios mío! ¡¿Dónde?!" ella casi se volvió loca y me empecé a reír por lo que se dio cuenta de que
había estado bromeando. Su puño chocó con mi antebrazo cuando me dio un puñetazo. "!Ay!"

"!Eres una idiota! Mierda me asustaste mucho", Lauren se rió ligeramente ofendida pero sobre
todo aliviada.

"Lo siento, no pude resistirme", admití y vi una sonrisa de oreja a oreja. Las mariposas en mi
estómago estaban fuera de control. Esta era la Lauren que había conocido y por la cual me había
enamorado en los equipos juveniles. Suspiré suavemente y sentí mis ojos mirar esos labios
deseables antes que ella aclarara la garganta.

"Debo volver a estudiar", Lauren me volvió a la realidad.

"Sí, por supuesto. No quiero retenerte", le dije, pero era mentira. Hubiera querido más que nada
mantenerla alejada de sus estudios. Pero lanzarme a besarla y comenzar una sesión con la
estudiante con look nerd no era una opción. Me sorprendí a mí misma por la necesidad de querer
tener una oportunidad con ella. Eso se volvía más evidente cada vez que la veía. Lástima que yo
había arruinado todas mis posibilidades.

Lauren me acompañó hasta la puerta y hubo otro momento incómodo porque ninguna de las dos
sabía cómo decir adiós. Era demasiado cobarde para abrazarla porque sus brazos estaban
cruzados. No hacía falta ser un experto en lenguaje corporal para saber que estaba a la defensiva y
se estaba protegiendo a sí misma, literalmente.

227
"Bueno, te veré en dos semanas en el partido contra Inglaterra", toqué en el hecho de que íbamos
estar juntas para USWNT de nuevo pronto.

"Sí", Lauren simplemente murmuró y parecía un poco más nerviosa ahora. Yo estaba muy tentada
a inclinarme y darle un beso en la mejilla, al menos, pero no pude. El miedo al rechazo era
demasiado fuerte.

"Muy bien, nos vemos pronto", le contesté en vez e intenté mi mejor esfuerzo para no parecer
derrotada, en lo cual fracasé miserablemente.

"Nos vemos entonces. Que tengas un buen vuelo", la chica más mayor deseó sinceramente y
sonrió suavemente. "Y...dale a Lara un beso de mi parte como un agradecimiento por el dibujo",
añadió mientras sus mejillas se fueron enrojeciendo sutilmente.

"Lo haré", no pude evitar sonreír. "Adiós."

"Adiós."

Caminé por el pasillo y tenía que admitir a mí misma que mi último intento había traído algo de
claridad. No era el final que quería, pero lo sentí como un cierre. El hecho de que iba a verla de
nuevo en dos semanas me preocupaba sin embargo. Si la quería ver tanto después de haberla
visto por unos pocos minutos, no tenía idea de lo que pasaría después de un día o dos.

Definitivamente había una batalla entre mi corazón y mi cabeza que me decían cosas
completamente contradictorias. ¿Seguir luchando por ella cuando me había dicho que debíamos
seguir adelante? O ¿Cumplir su deseo y aceptar que nuestro viaje en montaña rusa había llegado a
su fin?

Tenía dos semanas para averiguarlo hasta que nuestros caminos se cruzaran de nuevo.

Lauren's POV

Entré en el vestíbulo del hotel y estaba más enojada que de lo posible. Mi vuelo se había atrasado
y había llegado tarde para reunirme con el equipo. La práctica probablemente había empezado
hace unos minutos cuando me precipité en la entrada con mi bolso. No era el campo de
entrenamiento en esta ocasión, pero era un partido amistoso contra Inglaterra mañana que me
convocó la reunión de USWNT. Un día de la práctica de ante mano no era mucho, pero la
programación era difícil de hacer con tantos jugadores.

Mi enojo pareció desvanecerse en un instante cuando escuché una voz familiar, de tono alto.

"!Panqueques!"

228
De pie en el mostrador de la recepción, no era otro que Camila con Lara. La niña pequeña gritó
llena de emoción y comenzó a correr hacia mí antes que tuviera la posibilidad de pensar. Pero no
podía negar ese sentimiento cálido extendiéndose por todo mi cuerpo en cuando me agaché y
sentí como me aplastaba en mis brazos abiertos.

"Hola, pequeña", la saludé con una gran sonrisa y tuve que dejar de lado mi equipaje para frotar
suavemente su espalda. Ella básicamente estaba saltando y me encontré riendo con cariño ante su
genuina alegría de verme. Sus brazos todavía estaban doblados alrededor de mi cuello después de
más de unos pocos segundos. "¿No me vas a dejar ir?", le pregunté sin dejar de sonreír.

"No", rió y yo asentí ligeramente.

"Muy bien, entonces vamos a levantarte", le dije y la recogí sin esfuerzo por lo que ella estaba
descansando en un solo brazo. De esta manera podía concentrarme en ella más intensamente y
los orbes color avellana brillaban. No pude resistirme, pero le aparté el pelo de color marrón claro
de la cara. "Tu cabello está tan largo. Aunque se ve bastante bien" me di cuenta del pequeño
cambio.

"Quiero que sea tan largo como el tuyo", Lara respondió y me había envuelto alrededor de su
dedo sin perder tiempo.

"¿Te gusta mi pelo?", le pregunté y sacudí la cabeza con cuidado porque no podía creer lo rápido
que había cambiado mi estado de ánimo. La niña asintió con la cabeza y de repente me palmeó la
cara con la mano. "¿Te gusta mi cara también?" añadí con una sonrisa y fingí que quería morder su
dedo que estaba en mi mejilla. Ella se echó hacia atrás y chilló.

"Mamá dice que no hay que morder" Lara se rió pero elevé mi ceja juguetonamente.

"No tengo que escuchar a tu mamá, pero está bien, entonces no te voy a morder. Pero ¿Qué pasa
con las...cosquillas?" cuestioné y sus ojos se abrieron. Al parecer, ella era cosquillosa y no perdí
tiempo para hacerle cosquillas a su estómago, pero me aseguré de mantenerla firme con mi otro
brazo. Lara estaba riendo y resoplando fuertemente después de unos pocos segundos.

"Nooooo....panque-..." ella imploró entre un ataque de risa.

"¿Qué? Tú dijiste no morder y nada acerca de las cosquillas", dije con timidez, pero detuve para
que pudiera respirar.

"¿Podemos jugar juntas?" Lara hizo sus intenciones claras y no me había dado cuenta que Camila
se había acercado hacia nosotras hasta que la joven madre tomó la palabra.

"Lauren necesita registrarse primero, cariño", dijo Camila y se veía un poco incómoda. Tragué
fuertemente porque no estaba segura de cómo actuar a su alrededor. Las cosas eran tan
increíblemente complicadas entre nosotras.

229
"Lo siento, ella puede ser un poco molesta", la otra jugadora de fútbol se disculpó por el
comportamiento de su hija, pero negué con la cabeza de inmediato.

"No, está bien", respondí con calma pero puse a Lara abajo. "Pero tengo que hacer el ingreso,
porque se me está haciendo tarde."

"Sí, nosotras también en realidad", Camila reveló y me uní a ella en la recepción para conseguir mi
llave. Asumí que Normani me había reservado como su compañera de cuarto y le dije a la mujer
de la recepción mi nombre. Camila hizo lo mismo.

"Cabello y Jauregui...sí, tienen la habitación 107", la recepcionista sonrió ampliamente cuando mis
cejas se fruncieron.

"¿Quién de nosotras?" le pregunté confundida.

"Ambas. Ustedes son las últimas personas del grupo en llegar y por lo tanto comparten la última
habitación."

Mi mandíbula casi se cayó cuando tomé la llave y miré a Camila para obtener un vistazo. ¡¿Me
gustaría ser su maldita compañera de cuarto?! Esa era la última cosa que necesitaba. Había sido
una tortura estar cerca de ella después de lo que pasó en París, pero yo había estado bien cada vez
que ella no estaba en la foto. Estar cerca de ella era otra historia. Haciendo caso omiso de ella no
era tan fácil como lo hice ver.

Era sólo por dos noches, me dije. ¿Entonces por qué mi corazón estaba a punto de estallar cuando
simplemente pensé en dormir en la misma habitación? No tenía más remedio que actuar fría
cuando sentí a Camila mirándome. Despreocupadamente asintiendo, hice el mejor esfuerzo que
pude para mantener mi fachada imperturbable. Claro, estaba siguiendo adelante pero eso no era
una cuestión de semanas. Haría falta de tiempo para eso y tal vez esta era la prueba definitiva.

Por suerte teníamos quedarnos prisa por la práctica y no nos hablamos el uno al otro. En cambio,
pusimos nuestras maletas en la habitación y corrimos hacia la cancha de fútbol. Una vez que
llegué allí, fui capaz de concentrarme; sobre todo en el juego y luego en Normani. Regañé a mi
amiga más cercana por no haberme reservado como su compañera de cuarto, pero no fue su
culpa. Nos pasamos todo el día en el campo de todos modos y mañana era el partido. No había
mucho tiempo de inactividad, así que esperaba que no fuera demasiado difícil vivir con mi
compañera de equipo con quien había compartido un tumultuoso pasado.

Tal como lo esperaba, volvimos al hotel bastante tarde. Y me aseguré de pasar la mayor parte de
mi tiempo con Normani antes de regresar a mi habitación del hotel. Camila y Lara no estaban allí,
lo cual era sorprendente, pero un alivio al mismo tiempo. Fui al baño a cambiarme y abrí la puerta.

230
"!Mierda!" exclamé cuando vi a mi compañera de equipo, vistiendo sólo un par de bragas luego de
que aparentemente acaba de haber salido de la ducha. Al cerrar la puerta rápidamente, mi
corazón se sentía como si estuviera a punto de salirse de mi pecho. ¿Cómo fue eso de entrar al
baño cuando Camila estaba allí?

"Yo...lo siento", dije de pie fuera de la puerta ahora, y mi voz estaba temblorosa. ¿Por qué no le
puso seguro a la puerta? Por un momento casi pensé que lo había hecho a propósito, pero eso era
ridículo. La imagen de mi compañera de equipo casi desnuda me estaba causando palpitaciones en
el corazón. ¡Jesucristo, había olvidado lo innegablemente caliente que ella era cuando esto tenía
que suceder! Traté de no pensar en lo que quería hacer con ese cuerpo delgado y perfecto...pero
eso fue difícil.

La puerta se abrió de repente, pero Camila estaba envuelta en una toalla grande ahora.

"Está bien, me olvidé de poner pestillo lo siento", la más joven sonrió tímidamente mientras Lara
salió corriendo entrando a la habitación. Las mejillas de Camila estaban sonrojadas, pero tal vez
era por el vapor caliente de la ducha. "Quiero decir, no es nada que no hayas visto antes", añadió
con una risita y yo estaba a punto de perder los estribos. ¡¿Podría por favor no morderse el labio
inferior?! "¿Está bien si miras a Lara por un momento mientras me arreglo?"

"No hay problema", me las arreglé para no tartamudear y aclaré la garganta.

"Gracias", suspiró ella antes de cerrar la puerta del baño.

"Dios mío", murmuré en voz baja y tomé una respiración profunda, exhalando con fuerza justo
después. Mi pulso estaba relativamente cerca al igual que cuando corría por todo el campo de
fútbol.

Decidí cambiarme en la habitación ya que Camila estaba ocupando el cuarto de baño y me puse mi
pantalón corto y una camisa de Boston Breakers. Lara estaba sentada en mi cama y me miró
expectante. No había manera de que no pudiera sonreír y me uní a ella en el colchón. Levanté mis
cejas con sorpresa cuando la niña de tres años de edad, se acurrucó en mí en vez de pedirme que
jugáramos como habitualmente lo hacía.

"¿Estás cansada, pequeña?", le pregunté en silencio y sentí su pequeña cabeza asintiendo en mi


costado. Así que me acosté en la cama con ella, pero apoyé mi cabeza en las almohadas. Lara se
acurrucó a mi lado y se ajustó para estar cómoda, con la cabeza apoyada en mi clavícula mientras
yo tenía mi brazo alrededor de ella. ¡Ella era tan increíblemente pequeña! ¿Cómo alguien puede
ser tan pequeño?

231
"¿Puedes cantar para mí otra vez?", preguntó de repente.

"¿No puedo hacer otra cosa?" traté de desviar porque no quería cantar en absoluto. Eso siempre
se sentía tan extraño para mí.

"Mami a veces me lee libros", Lara ofreció otra opción que de buen grado acepté.

"Eso lo puedo hacer", le respondí y tomé mi iPad que estaba en la mesita de noche. Ni en un
millón de años habría terminaría buscando en Google historias para dormir pero me gustó si
estaba haciendo honesta conmigo.

"¿Lauren?" la voz dormida regresó antes que encontrara algo adecuado.

"¿Sí?

"Quiero que tú y mamá sean amigas."

Ahí mi ritmo cardíaco aumentó. Tragué ligeramente ante esas palabras dichas con un toque de
tristeza que me mató.

"Somos amigas", quería calmarla, aunque eso no era necesariamente la verdad.

"Pero nunca te puedo ver."

"Vivimos muy lejos ahora. Eso hace más difícil que nos podamos ver. ¿Entiendes?", le respondí y
no estaba segura si ella captaría la idea de separación por la distancia.

"Creo que sí", respondió ella, y suspiró. "Te echo de menos."

"Yo también te extraño", correspondí seria. Ahora yo era la que suspiraba porque odiaba ponerla
triste más que a cualquier otra cosa. Era extremadamente difícil controlar mi relación con Lara y
Camila, al mismo tiempo. Quería ser amble sin ser realmente amigas. ¿Cómo era eso posible?
Sobre todo cuando no podía quitarme esa imagen de ¡Mi compañera de equipo en tan sólo su
ropa interior!

"Puedes leer ahora", Lara interrumpió mis pensamientos que estaban yendo a un lugar peligroso.
Me agaché un poco y coloqué un tierno beso en su frente. Mi brazo derecho todavía estaba
envuelto alrededor de ella pero usaba mi mano para acariciar suavemente su pelo sedoso cuando
comencé a leer una historia que había encontrado en línea. No pasó mucho tiempo para que Lara
se quedara dormida y oí su respiración constante pero seguí leyendo por alguna razón.

Siempre había sido buena con los niños pero nunca había sabido lo mucho que podía congeniar
con ellos hasta que Lara se había convertido inesperadamente en una parte de mi vida. La idea de
ser mamá nunca había estado en mi mente. Yo no siquiera había pensado en estar en una relación
comprometida hasta hace unos meses. Pero ahí estaba yo, leyendo cuantos para dormir a una
niña que me importaba más de lo que pensé posible. Claro, ella no era mi hija y yo no era su
madre. Pero a veces, y eso asustó la mierda de mí, me hubiera gustado serlo.

232
Estaba terminando ese aterrador pensamiento, miré hacia arriba y vi a Camila de pie al otro lado
de la habitación. No estaba segura de cuánto tiempo había estado allí de pie, pero ella obviamente
estaba lista para irse a la cama ahora. ¡¿Por qué demonios llevaba puesto casi nada?!
Técnicamente llevaba un par de pantalones cortos ajustados, pero que apenas cubrían su infame
trasero. El tamaño de su trasero regordete era nada menos que espectacular y la tela ajustada lo
demostraba perfectamente. Su pollera abrazaba su cuerpo con fuerza, haciendo su increíblemente
atractivo cuerpo más sorprendente de lo habitual.

"¿Está dormida?"

El susurro bajo de mi compañera de equipo hizo romper de nuevos mis pensamientos impuros. Mi
pulso estaba sobrepasando el techo una vez más cuando ella se acercó.

"Uhm...sí", respiré lentamente y me lamí los labios de manera subliminal.

"Siento haber tardado tanto tiempo. Ahora me encargo de ella", la menor dijo en voz baja y había
llegado al borde de mi cama.

"No", me escuché protestar cuando ella llegó a su hija. "Quiero decir, no tienes que hacerlo...ella
puede dormir aquí si no quieres despertarla", traté de explicar mi objeción casualmente pero las
cejas levantadas de Camila estaban indicando su sorpresa. Su rostro se suavizó rápidamente.

"Está bien", ella estuvo de acuerdo e hice mi mayor esfuerzo para no mirarla. Me sentí muy
expuesta con ella de pie en el borde de mi cama y viéndome lo cariñosa que yo era con su hija. No
era lo que yo quería que viera. Se suponía que nosotras no debíamos estar así de cerca.

Hablando de cercanía; Camila hizo que mi corazón dejara de latir cuando inesperadamente se
agachó y mis ojos se abrieron. Mis labios se abrieron en estado de shock antes que me diera
cuenta de lo que estaba haciendo. La joven madre besó la frente de Lara de la misma manera que
yo lo había hecho antes. Ella se apartó sólo mínimamente y me miró. Mierda, ¡Estaba cerca!

Sentí mi propio exceso de velocidad de mi respiración cuando su cara estaba centímetros de la


mía. No era consciente, pero mi mirada cayó a sus labios carnosos por un segundo. Casi sentía su
aliento en mis labios y tragué saliva. Decir que no era tentador inclinarse y cerrar la distancia
habría sido una mentira. Estábamos solas y mis pensamientos no eran tan racionales como lo
habían sido viniendo aquí. Sentí una cierta parte de mí querer aprovechar el momento y sólo
seguir mis deseos.

Mirando hacia arriba, vi los orbes marrones centrándose en mi boca y la química entre nosotras se
volvió demasiado intensa para mi gusto. La cantidad de tensión sexual era insondable en ese
momento.

Sentí el pequeño diablo en mi hombro diciéndome que cediera. Nadie tenía que saberlo. Sólo
nosotras dos y podríamos hacer uso el hecho de ser compañeras de habitación por la noche. Ella
se iría de regreso a Francia de todos modos y tal vez sólo necesitaba sacarlo de mi sistema.

233
Excepto que no estábamos muy solas: Lara se movió ligeramente en mis brazos y me di cuenta de
lo que estaba haciendo. Buscando apresuradamente distancia, oí a Camila suspirar antes de que se
alejara y pasara una mano por su pelo. Sin decir una palabra camino de regreso a su propia cama.

Mi corazón latía de forma errática y suprimí todos los sentimientos no deseados tratando de
alejarlos. Era difícil, pero no imposible. No había pasado tanto tiempo tratando de bloquear a
Camila, para volver a mis patrones en un día. Eso tomó cada onza de restricción pero no dije o hice
nada hasta que me quedé dormida después de algún tiempo.

Aunque era un partido amistoso contra Inglaterra, nada sobre el partido era muy amable. La
cantidad de tackles y faltas era una locura. Teníamos una ventaja de 1-0 a nuestro favor y
quedaban sólo quince minutos por jugar.

Era la primera tapa de Camila tras ser subtitulada en la segunda mitad. En su forma típica, había
anotado sólo minutos después y no sólo obtuvo su primera tapada y su primer gol para la USWNT,
también nos había dado ventaja. Definitivamente estaba orgulloso de ella y el hecho de que yo la
había ayudado a su meta fue casi una segunda naturaleza. Era bueno ver que nuestro juego no
había perdido su eficacia a pesar de que estábamos jugando para diferentes clubes ahora. Hubo
un rápido abrazo para celebrar, pero nada más. No quería hacer las cosas más complicadas
después del intenso momento que habíamos compartido la noche anterior.

Me centré en el juego. Mi jugador oponente me estaba dando el infierno sin embargo. Siguió
dándome un codazo sutil y eso fue un absoluto dolor en el trasero. La próxima vez ella se quejó
con el árbitro sobre nosotras jugando brusco, lo cual era ridículamente inexacto, tuvo la audacia
de decir que sus compañeras de equipo podrían hacerse daño por nuestro juego peligroso.

"¿Sabes qué es más peligroso y podría lastimar a alguien? Darme codazos durante todo el juego",
no pude mantener mi boca cerrada ya cuando estábamos de pie cerca uno del otro, mientras se
preparaba el tiro libre para Inglaterra.

"Tú, cállate de una puta vez", la rubia en disputa dijo inesperadamente y me miró con tal desdén
que sentí el enojo venir.

"¿Me lo acabas de decir a mí?", le pregunté mientras caminaba hacia ella con mis ojos verdes
centrándose con atención en los de ella.

"!Te dije que cerraras la puta boca! No es mi problema si no entiendes inglés, sucia mexicana!"

Me quedé de piedra. Incluso demasiado aturdida para argumentar que mi origen era cubano, pero
algo me dijo que no le importaba de todos modos. Nunca antes había sido insultada a ese nivel.
Estaba de pie a pocos centímetros de su rostro y esto era el momento que finalmente podría
golpear a alguien en la cara. La cantidad de adrenalina corriendo por mi cuerpo fue superada por

234
ira en este punto. Era normal climatizarse a veces, pero los comentarios despectivos como ese
eran inapropiados; no sólo en el campo sino en general.

Antes de que tuviera tiempo de reaccionar, alguien me empujó a un lado y vi a Camila empujar al
jugador Inglés casi brutalmente lo que hizo que aterrizara en la hierba. Fue instintivo, pero agarré
la cintura de Camila y la detuve porque parecía que iba a saltar sobre la otra. Esto se sentía
extrañamente familiar a lo que mi compañera de equipo había sido como cuando era un
adolescente. Pero esta vez ella vino a mi defensa aparentemente.

En cuestión de segundos, casi todos los jugadores estaba ahora a nuestro alrededor y esto era un
gran lío porque todo el mundo trataba de mediar y calmar la situación. Yo estaba concentrada
exclusivamente en Camila sin embargo. Ella incluso estaba tratando de luchar para conseguir paso
e increpar de nuevo al jugador opuesto.

"!Suéltame, Lauren! ¡¿No has oído lo que ha dicho?!" la más joven estaba furiosa.

"Cálmate, Camz", se me escapó ya que no la había llamado así desde los equipos juveniles. Su viejo
temperamento hizo que los viejos hábitos reaparecieran junto a él. Por lo menos ahora estaba
mirándome mientras sostenía sus muñecas. "No lo merece, déjalo ir."

La situación se calmó lentamente y fui hacia el árbitro, tratando de explicar que Camila había sido
contrariada, pero no ayudó. La morena tuvo una tarjeta roja por conducta violenta y dejó el
campo a toda prisa, con la cabeza hacia abajo. Toda mi argumentación me trajo una tarjeta
amarilla a mí misma y me di por vencida. Ver a mi compañera de equipo ser expulsada por
defenderme fue lo peor. Tratando de concentrarme en el juego fue más que difícil, pero no las
arreglamos para mantener la ventaja 1-0 que Camila nos había dado. Eso no fue un consuelo para
mí en absoluto.

Después de haber dejado el campo temprano, Camila ya se había duchado y se dirigió al bus
cuando llegué al vestuario. Iba a mi lugar cuando unos reporteros me llamaron. Al principio no
quise decir nada, pero sentí una cierta responsabilidad de dejar las cosas claras. Probablemente no
era buena idea porque estaba increíblemente enojada todavía.

Periodista: Lauren, fue un juego duro pero lograron ganar con sólo diez jugadores. ¿Cuáles son tus
pensamientos?

Lauren: Fue duro. Inglaterra jugó bien y se defendió como un loco. Fue difícil romperlos y no
creamos tantas oportunidades como queríamos. Ese era mi trabajo, pero yo no estaba sirviendo
mucho por desgracia. Pero, por suerte un pase fue suficiente para Camila para sacarnos el triunfo
con su objetivo.

P: Hablando de eso, Camila Cabello tiene ahora su primer partido, primer gol y también primera
tarjeta roja en un juego. Ella te dejó con sólo diez personas en el campo. ¿Cómo crees que se
siente?

235
L: Yo no soy Camila, así que no puedo hablar en su nombre, pero estoy segura de que está molesta
por haber sido expulsada. Ella es una teamplayer y sé que se va a castigar a sí misma por habernos
dejado sin un jugador, pero no me puedo quejar por ello.

P: Pero no es la primera vez que hemos visto eso de ella. Ella recibió una tarjeta roja, mientras
estaba jugando contigo en Boston por un ataque familiar. ¿No te parece que es un patrón y debe
ser castigada?

L: Una vez más, yo no soy ella, así que no quiero decir demasiado, pero lo que ocurrió allí fue...ni
siquiera sé si quiero hablar sobre eso ¡Porque me molesta seriamente! Hubo una discusión entre
mí y una de las jugadoras inglesas. Las cosas se calentaron y me insultaron por motivos raciales.
Ser hispano no es algo por lo que Camila y yo nos avergonzamos pero desafortunadamente el
racismo y el prejuicio es todavía muy frecuente, no sólo en nuestra sociedad sino en todo el
mundo. Lo que se dijo en el campo fue despreciable, pobre de espíritu deportivo y definitivamente
voy hablar con la federación para asegurarme que Camila no reciba una suspensión severa. No
apruebo la conducta violenta en el campo y no defiendo lo que hizo, pero los insultos raciales
duelen peor que un empujón.

Todo el mundo se quedó en silencio por un momento y no tenía idea de lo climatizada que me
había puesto hasta que me di cuenta que mi corazón latía fuerte y mi pecho subía y bajaba
pesadamente. Los periodistas estaban ahora aún más curiosos pero les agradecí rápidamente y
entré al autobús. Busqué a Camila pero ella estaba sentada sola en la parte de atrás con Lara.
Como no quería interrumpir, me senté junto a Normani.

Al llegar al hotel, vi como Lara se marchó con algunos otros jugadores. Ella quería pasar tiempo
con ellos, al parecer, o Camila necesitaba un poco de tiempo de reflexión sobre sí misma. No había
hablado con ella desde el incidente en el campo y la seguí hacia nuestra habitación. Todo su
comportamiento era una réplica exacta de lo que había sido como 'CC7' hace unos años. Estaba
enfadada todavía pero trató de ocultarlo.

"Camila, ¿Estás bien?" no pude contenerme a mí misma, pero me preocupé cuando cerré la puerta
de nuestra habitación detrás de nosotras.

"¿Qué piensas?" pasaba sus manos por el pelo, mientras caminaba por la habitación.

"No lo sé. Pareces molesta", respondí con cuidado.

"¿Cómo puedes estar tan bien con esto, Lauren? ¡Lo que te dijeron ahí fue enfermo! No puedo
creer que no te hayas levantado por sí misma", dijo la menor agitadamente.

"No se trata de levantarme por mí misma. Pero no puedes ir por ahí empujando y empujando a la
gente, Camila. Estoy de acuerdo que fue un desastre hacer eso, pero tú no tienes que hacer esto",
me estaba empezando a frustrar también.

"¿Así que ahora es mi culpa defenderte?", sonó herida pero su voz estaba llena de ira.

236
"No, no es eso lo que estoy diciendo", argumenté rápidamente.

"Seguro que sonó como eso", replicó ella.

"!Nunca te pedí que lo hicieras!" mi voz se elevó también.

"!¿Así que es mi culpa?!" Camila gritó casi con incredulidad.

"!No! ¡Deja de gritarme por amor de Dios!" grité irónicamene de vuelta.

"!¿Por qué mierda si quiera estamos peleando?!"

"!No lo sé!"

Las dos nos quedamos en silencio y suspiré jadeé antes nuestra pequeña pelea a gritos, mientras
nos mirábamos el uno al otro. ¿Por qué demonios estábamos discutiendo?

"Mira, lo siento", dije cada vez más tranquila. "Entiendo por qué hiciste lo que hiciste. Pero estoy
molesta porque podrías haber quedado mal por algo que no necesitaba suceder. Sólo estaba
cuidando tu espalda. Sin embargo, apareciste a defenderme. Intenté hacerlo lo mismo por ti con
los periodistas y voy a hablar con la federación con respecto a tu suspensión. Pero...gracias, ¿De
acuerdo?"

Tomé una respiración profunda y vi a la otra jugadora relajarse también. Sus ojos aún estaban
enfocados en mí sin embargo. Tanto así, que mi nerviosismo comenzó a crecer. Ella dio un paso en
mi dirección sin romper nuestro contacto visual. Pude ver las ruedas girando en su cabeza. Había
algo que estaba meditando.

"Sí de verdad quieres agradecérmelo, puedes quitarte la ropa."

¿Dijo qué? Estaba bastante segura de mis ojos se salieron de sus órbitas por un momento cuando
oí las palabras inesperadas de Camila.

"¿Qué?", le pregunté con una risa suave que estaba llena de inseguridad y shock. Ella estaba
bromeando, ¿Verdad?

"Sé que no quieres una relación o algún compromiso", la de ojos marrones continuó acercándose
haciendo que mi corazón se acelerara. "Y estoy de acuerdo con eso. Pero no nos engañemos. Yo sé
que tú quieres y yo también. ¿Por qué estamos peleando contra lo que es inevitable? Quiero decir,
la tensión entre nosotras puede ser liberada tan fácilmente", su voz era apenas un susurro
mientras estaba de pie justo en frente de mí. "Sin ataduras", ella dijo descascarillada y sentí sus
manos colocándose en mi cintura. "Estamos aquí solas...sólo tú y yo", mi cerebro estaba en
sobrecarga. "Vi la forma en que mi miraste cuando entraste en el baño y luego, cuando casi te
bese ayer por la noche", sus dedos agarraron el dobladillo de mi pollera.

"Tú...no puedes estar hablando en serio", yo tartamudeaba y tuve un tiempo difícil creyendo que
esto era la realidad. Todos mis esfuerzos para ser fría e indiferente eran en vano en este instante.

237
"¿Me estás diciendo que no has pensado en ello?"

"¿Algo así como...amigos con derechos?", le pregunté con un ligero temblor.

"Llámalo como quieras", susurró y había sólo unos centímetros entre nuestros labios. "De esta
manera nadie se hará daño y aún así obtendremos lo que queremos."

¡¿Quién era la verdadera seductora aquí?! Nunca había estado en conflicto, pero realmente no
había tiempo para analizar. Camila se acercaba y yo sabía que una vez que nos besáramos,
ninguna de nosotras sería capaz de parar. Yo había tenido algunas relaciones en el pasado sin
cadenas. La pregunta era si iba a ser capaz de hacer eso con ella. La idea era tentadora, sin duda.
Sentir sus manos pastoreando mis costados mientras olía su aroma familiar no ayudaba en
absoluto.

Ella estaba cada vez más cerca y tenía que tomar una decisión rápidamente...

=================

Capitulo 15
Camila's POV

Esto era todo. Mi último disparo. Era la última idea desesperada que tuve para sostener cualquier
tipo de relación con la morena de pie en frente de mí.

Proponerle que fuéramos amigos con beneficios podría ser la mejor o la peor que idea que había
tenido. Todo lo que sabía en este momento era que ya no podía soportar más la tensión. La
deseaba más de lo que había deseado nunca a nadie. Estar alrededor de ella y compartir un cuarto
era una tortura total después de nuestra última conversación en Boston. Una parte de mí quería
dejarla ir, por su bien. Otra parte de mí quería aferrarse para siempre, por mi bien. Resultó que
estaba siendo egoísta, una vez más.

Pero no importa la guay que parecía Lauren, había pequeños momentos en los que había
encontrado una esperanza de que podría haber una oportunidad para nosotras. Dormir con ella
era bastante drástico, pero tal vez lo relacionado con la intimidad sería obligarla a entrar en
contacto con sentimientos no resueltos que posiblemente estaban enterrados en algún lugar en el
fondo. ¡Por no hablar de que en serio quería dormir con ella! Se sentía como si las anteojeras se
habían caído en las últimas semanas. No se podía negar en lo que mucho que me sentía atraída
por ella en todas las formas posibles.

En realidad, sentía como si estuviera siendo arrojada de vuelta al pasado. Antes, cuando habíamos
estado en el equipo juvenil, Lauren me había confundido más allá de la creencia. Había estado

238
luchando contra mis sentimientos por ella a cualquier precio y esto se sentía similar. Y qué si
intentábamos ser informales de nuevo, sólo que esta vez no me daría por rendida sino que daría lo
mejor de mí para usarlo como base para algo más.

Bajo cualquier otra circunstancia probablemente no habría actuado por mis deseos, pero después
de otra pelea, esto era completamente inútil, porque las dos estábamos tratando de proteger a la
otra. No iba a sobrevivir otra noche en esta habitación del hotel con la cantidad de tensión entre
nosotras. Esa era la razón por la que siempre peleábamos, ¿No? Para liberar parte de la
electricidad que cobraron nuestros sistemas por así decirlo. O al menos esperaba que esa fuera la
razón ya que no podía soportar la idea que en realidad no nos gustábamos. Estaba segura como el
infierno que ella me gustaba. La cuestión era cómo Lauren reaccionaría ante mi oferta inesperada.

Ella parecía sorprendida lo que era comprensible. Pero lo más importante para mí era la
disminución de su fachada imperturbable. Comencé a ganar un poco más de esperanza de que ella
no estaba por encima de nosotras como ella quizá quería yo creyera. Ella no estaba protestando
mucho. La incredulidad era más evidente en su rostro, esa hermosa cara con esos labios
cualificados que estaban tan cerca de mí por ahora.

Yo estaba cada vez más cerca y forcé una decisión.

Antes de que me diera cuenta, mis labios estaban sobre los de ella. Presionándolos suavemente
uno contra el otro, sentí un poco de miedo por el lado de Lauren, pero traté de disminuir
añadiendo más presión. Ella exhaló fuertemente por la nariz y la resistencia se estaba
desmoronando. Se sentía como si se hubieran invertido los papeles y yo era la que estaba
seduciendo a la chica mayor. Mis manos estaban agarrando el dobladillo de su pollera con fuerza
antes de que el beso suave terminara.

En lugar de alejarme, abrí los ojos por un segundo y vi que los de ella seguían cerrados.
Acercándome de nuevo, capturé su labio superior entre los míos con más asertividad y la sentí
devolver el beso. Mi corazón latía como loco en cuanto ella correspondió. No pasó mucho tiempo
para romper las últimas barreras porque chupó suavemente mi labio inferior. Dios, odiaba y
amaba al mismo tiempo el gran besador que ella era.

Sus labios se movían al unísono con los míos, aplicando la cantidad justa de presión, deslizando su
lengua sensualmente sobre mi labio inferior para burlarse de mí ante de que sus ambas manos
ahuecaran mi cara. Eso fue, sin duda, algo que siempre había querido. La forma en que sus dedos
se pusieron perfectamente en mis mejillas y mostró el difícil equilibrio entre la dominación y el
cariño era algo que me derretía cada vez que ella hacia eso. Su lengua trazó mi labio inferior una
vez más y esta vez ella ladeó la cabeza para deslizar el hábil músculo en mi boca. Di un grito
ahogado en silencio, Lauren aprovechó el momento y exploró el interior de mi boca por un
momento rápido. Seguía bochornosa como ella no estaba empujando su lengua en mi garganta al
igual que otras personas lo harían, pero acarició la mía desafiante.

239
Tenía que aprovechar el impulso y comencé suavemente a guiarla hacia mi cama retrocediendo.
Por desgracia, tropecé con algunos de los juguetes de Lara, pero Lauren me cogió justo a tiempo
por el agarre de mi cintura. Ella se rió y sorprendentemente parecía divertida ante mi torpeza en
lugar de enojarse por haber arruinado el momento. Aliviada, me senté en el borde de la cama,
agarré su pollera una vez más y la atraje hacia mí.

Una vez más, ella tomó mi cara con ambas manos mientras se inclinó por la cintura para besarme.
Mi atracción se hizo más urgente, porque ella no se había unido a la cama, estaba de pie entre mis
piernas y yo estaba perdiendo la paciencia. El volante central sonrió contra mis labios al darse
cuenta de mi necesidad de más. Al parecer, decidió ceder y ambas nos posamos en la cama
conmigo debajo de ella. Nuestros labios se mantenían conectados en todo momento y por alguna
razón los nervios me estaban pateando.

Las manos de Lauren se movían lentamente, pero a sabiendas, trazando mis lados y empujando mi
pollera para acariciar la piel de mi cintura. Fue involuntario, pero el primer gemido se escapó de
mis labios a pesar de que fue amortiguado por los labios lascivos contra los míos. Ella me besaba
profundamente, sensualmente, burlonamente en donde yo pensaba que mi cabeza iba a explotar.
Mi cuerpo empezó a temblar sin que ella realmente hiciera mucho. La forma en que reaccionaba
ante ella era completamente diferente a cualquier otra persona. No podía controlarlo y eso me
asustó.

Mis labios fueron finalmente liberados, así que fui capaz de tomar un respiro cuando la chica
mayor se trasladó más abajo. Dejó un rastro de besos apasionados en mi cuello mientras yo me
agarraba de las sábanas. Se suponía que esto no debía sentirse tan intenso. Nada se suponía que
debía ser así. Estaba tan fuera de mis cabales y tenía miedo de decepcionarla cuando fuera mi
turno. Cada vez me ahogaba más en mis pensamientos, no me había dado cuenta de que la otra
chica iba aún por más ahora.

Empujó mi camisa, dejando al descubierto mi estómago y los lados antes que los labios hinchados
continuaran su búsqueda. Contuve un gemido. Utilizando sólo la punta de la lengua, trazó mis
músculos abdominales antes de que procediera en mi otro lado. Los senderos húmedos por toda
mi piel caliente me causaron piel de gallina en todas partes. Era vergonzoso lo excitada que estaba
en este momento sin que ella me haya tocado realmente en cualquier lugar íntimo. El temor a no
poder corresponder de la misma manera estaba resurgiendo con más fuerza.

De repente, Lauren se detuvo. Antes de que tuviera la oportunidad de mirar hacia abajo, los ojos
esmeraldas se cernían sobre mí y vi la preocupación en ellos.

"¿Estás bien?" preguntó mi compañera de equipo y parecía alarmada.

"Sí, por supuesto", el temblor de mi voz me sorprendió incluso a mí misma.

"¿Estás segura? Estás toda...tensa", comentó Lauren en voz baja y sin reproche. Su mano rozó un
poco de pelo que estaba delante de mí, y ese simple gesto hizo que mi corazón aleteara, al igual
que su preocupación por mi bienestar en este acalorado momento.

240
"No es nada", traté de desviar, pero yo sabía que ella sospechaba algo.

"Si no quieres seguir adelante con esto entonces entiendo", dijo ella con cuidado mientras
acariciaba mi mejilla con su pulgar.

"No es eso", suspiré con frustración ya que yo no era la mejor mentirosa. "Simplemente
estoy...intimidada."

"¿Intimidada?" repitió inquisitivamente. "¿Por qué?"

"Porque tú eres mucho mejor en estas cosas que yo y temo que no pueda... 'beneficiarte' mucho",
admití y escuché su risa ligeramente en mi elección de palabras. "No te rías de mí", la regañé con
un mohín.

"No me estoy riendo de ti, te lo prometo. Fue sólo gracioso la forma en que lo dijiste", la otra
latina replicó rápidamente pero en realidad me encantaba ver su risa más que nada. "Pero tú te
acuerdas de lo que hemos hecho antes, ¿Verdad? Tú has estado saliendo con Ariana, así que no
creo que tengas nada de qué preocuparte."

"Es sólo que..." suspiré aún más fuerte y rodé los ojos a mí misma por ser tan estúpida. Este no era
mi plan de ser seductora.

"Sólo tienes que decírmelo, no te voy a juzgar", Lauren susurró suavemente y siguió acariciando el
lado de mi cara. Hace un momento me di cuenta de lo cómodas que estábamos. Ella estaba siendo
demasiado afectuosa ya que esto se trataba sólo de sexo, ¿Verdad?

La tierna mirada en sus ojos verdes me estaba dando palpitaciones en el corazón. Su cuerpo
descansaba en el mío como nunca hubiéramos hecho nada y estaba tan hipnotizada por sus
suaves toques y miradas.

"Yo no...quiero decir, es tan vergonzoso...um...bueno, ni siquiera he usado nada más que mis
manos para darle placer a otra mujer aún", solté al final y mis mejillas estaban encendidas con la
profunda sombra roja.

"¿Eso es todo?" Lauren preguntó con una sonrisa mientras yo asentía. "¿Por qué eso tendría que
importar? Quiero decir, ¿Crees que me esperaba algo más de ti?" su voz se suavizó.

"¿No lo haces?"

"No", ella negó con la cabeza y parecía casi ofendida por mis palabras. "No quiero que hagas algo
con lo cual te sientas incómoda. Y lo entiendo perfectamente. Es una cosa muy íntima para ti,
hacer eso y entiendo si no lo haces por cualquiera. Y, además, yo no soy alguien que intimida
cuando se trata de esas cosas. Alguna vez yo también fui una flor tardía."

"¿En serio?" le pregunté con curiosidad a pesar de que ella había mencionado antes de que yo
había sido la segunda persona que había besado en aquel entonces. Ella asintió con la cabeza,

241
pero trazó mi cuello con sus dedos tiernamente. "¿Qué edad tenías cuando tuviste tu primera
vez?"

"Casi 19", Lauren respondió con indiferencia y eso fue sin duda más tarde que la mía.

"¿Cómo fue?" no podía dejar de ser entrometida y la intimidad del momento era algo que nunca
había experimentado antes. Nosotras no estábamos siendo íntimas en el sentido físico, pero al
estar tan cerca y hablar de asuntos personales me hacía enamorarme de ella más y más a cada
minuto.

"No creo que quieras oír la historia", la morena abrió mucho los ojos.

"¿Fue malo? ¿O fue bueno?"

"No, simplemente no fue tan convencional...", la de ojos verdes respondió vagamente antes de
empezar a acariciar sus brazos con ambas manos, sólo usando mis dedos. Inmediatamente sentí la
piel de gallina en su piel suave. Esto era mucho más de lo que esperaba que pasara con mi oferta.

"Ahora estoy intrigada", le dije y levanté mis cejas.

"Creo que no sentirías mejor si te digo", siguió desviando.

"Me gustaría saber. Y te prometo que no voy a enloquecer", le respondí, aunque esa promesa no
era cierta.

"Bueno, yo todavía era una estudiante de primer año en la universidad y no me importaba nada
más acerca de que no fuera el fútbol", ella comenzó a contar la historia mientras la miraba
fijamente por encima de mí. "No habían muchas chicas que estuvieran fuera del closet y que me
interesaran, salvo por esta chica. Ella era un poco mayor y todo el mundo sabía que era lesbiana.
Pero tenía una novia desde la secundaria. Conocí a ambas y nos pusimos a hablar en una fiesta.
Ambas estaban muy relajadas y me invitaron a su casa unos días más tarde y...las
cosas...sucedieron."

Mi boca se abrió ligeramente. Lauren se encontró con mi mirada y sus mejillas estaban sofocadas
ahora.

"¿Me estás diciendo que en tu primera vez, fuiste seducida por una pareja de lesbianas en un
trío?", le pregunté asombrada.

"Si lo pones así, eso suena-"

"Al igual que una porno", interrumpí y la oí reír.

"No fue de tan mala calidad. Más bien fue...educativo", añadió con la sonrisa más astuta y tragué
saliva.

242
"Tenías razón. Definitivamente estoy más que intimidada ahora", le confesé y me arrepentí de
haberle hecho esa pregunta antes de querer disfrutar nuestra intimidad. De repente, Lauren me
dio un beso, tiernamente como si estuviera tratando de calmarme. Esto no era acerca de ser
amigas con beneficios. ¡No podía serlo! La calidad amorosa de ese beso iba más allá de los que
habíamos intercambiado antes. Me quedé helada y mi corazón palpitaba salvajemente. Una de sus
manos estaba en mi mejilla; puse la mía sobre la suya hasta que ella se retiró.

Por el amor de Dios, la forma en que me sonreía suavemente me estaba matando de la mejor
manera posible. Había funcionado, no estaba pensando en su experiencia previa en absoluto
ahora. Sin embargo, sus expresiones faciales se hicieron más pensativas y sentí que había algo en
su mente. Tomó un momento de sus círculos de rastreo en mi clavícula antes de que hablar de
nuevo.

"¿Tu primera vez fue con Austin?", preguntó en voz baja y asentí para confirmar. Lauren inhaló
profundamente y se mordió el labio por un momento como si estuviera tratando de contenerse
para hablar. "¿Él fue...? ¿Por lo menos fue amable contigo?"

Cualquiera que haya sido la duda que se había producido antes de mis sentimientos por ella, se
habían ido tan pronto como esas palabras salieron de sus labios. ¿Cómo diablos había sido tan
tonta para haberla dejado ir? Su voz estaba tan llena de afecto, inseguridad, preocupación y tantas
otras cosas que mi corazón dio un vuelco. Ella no podía preguntarme esto y no sentir algo por mí
también. ¿Por qué le importaría como mi ex marido me había tratado cuando lo único que ella
quería era echar un polvo?

Sentí como si esto era el regreso de la Lauren que había conocido en el campamento. Al recordar
nuestra conversación de hace dos semanas, ella había dicho que yo había destruido ese lado
tierno. No estaba de acuerdo ahora, porque esta era la forma que me miraba en ese entonces.
Todo lo que esperaba, era que Lauren estaba usando el ser amigas con beneficios como excusa
porque sentía algo por mí, aunque no estaba dispuesta a admitirlo.

Estuve en un trance por un momento antes que me dije a mí misma que debía responder.

"Lo fue", susurré para aliviar su malestar y ella parecía aliviada.

"¿Cuántos años tenías?" su voz era suave.

"15", admití con un suspiro aunque no hubo juicio evidente en el rostro de Lauren. "Éramos
jóvenes. Sé que era demasiado joven. No porque quedé embarazada un año más tarde, pero
habían sucedido tantas cosas que pensé que iba a ser un escape...algo para ocupar mi mente lejos
de mis padres, Sofi y el constante apego con Austin."

"¿Te arrepientes?" la otra parecía preocupada de nuevo.

"No", le dije al instante. "No tendría a Lara si las cosas no hubieran sucedido de esa manera. Y no
la cambiaría por nada, ni siquiera si eso significaría borrar las malas experiencias."

243
"Puedo entender eso. Ella es bastante adorable", Lauren sonrió.

"Ella te ama", sólo decía la verdad y no pude mantener la boca cerrada. "Y no puedo culparla."

La chica con el par de ojos más fascinantes se había bloqueado y se sorprendió al escuchar eso. Yo
quería seguir adelante, decirle lo que sentía, pero sabía que no iba a reaccionar bien. Si yo supiera
que ella no iba a correr, le hubiera confesado que estaba loca por ella una vez más. Pero ella no
estaba dispuesta a escuchar eso. No después de lo ocurrido recientemente. Sus palabras en
Boston estaban repitiéndose en mi cabeza; no estaba dispuesta a hacer una elección arriesgada.
Así que tenía que ser paciente y por lo menos esperar a que las cosas progresaran antes de soltar
el gatillo.

"¿Alguna vez has visto 'El paciente inglés'?" Lauren preguntó fuera de contexto.

"No", le contesté.

"Hay una escena en la que el chico pregunta que como se llama el hueco que está en la base de la
garganta de la mujer", la voz ligeramente ronca susurró mientras rastreaba el área exactamente
mencionada con sus dedos. Mi corazón estaba a punto de explotar. "Siempre se me olvida como
se llama...aunque es tan sexy", añadió en un murmuro y parecía completamente enfocada en el
acto.

"Odio lo encantadora que eres", me mordí el labio y eso fue en la parte exacta. Me encantaba
estar en el extremo, pero odiaba saber que no estaba recibiendo exclusivamente ese lado de ella;
al menos no por ahora.

"¿Sí?", se rió y bajó la cabeza. Los labios gruesos se conectaron con la parte inferior de mi garganta
mientras su lengua llenó el área hueca rápidamente en un movimiento apacible. Mis caderas se
resistieron en contra de mi voluntad y suspiré de placer. Jesucristo, ella no estaba jugando limpio.
"Camila, no quiero que hagas algo con lo que no estás bien. Si has cambiado de opinión acerca de
esto, entonces estoy-"

Sus palabras eran ambles y todo, pero estaba más segura que antes de que quería hacer esto. Así
que la interrumpí con un beso apasionado.

"Cállate", murmuré contra sus labios y sentí las comisuras de sus labios formar una sonrisa. Nos
instalamos de nuevo en un ritmo de besos lentos, mientras que ninguna de las dos nos
apresuramos a dar el siguiente paso. Estaba más nerviosa con cada beso sin embargo. Así que tiré
del dobladillo de su camisa y comencé a tirarla hacia arriba. La chica más alta levantó su cuerpo
del mío, así fui capaz de quitársela. Se sentó, tomó mis manos y me guió a hacer lo mismo. Ahora
ella era la que me estaba sacando la parte de arriba.

Antes de que pudiera echarme para atrás de nuevo, Lauren envolvió sus brazos alrededor de mi
torso y comenzó a besar mi cuello. Cerrando mis ojos de pura felicidad, también noté una gran
sensación punzante en mis regiones más bajas. La chica mayor estaba chupando el lóbulo de mi

244
oreja como crucé mis brazos alrededor de su cuello. No me había dado cuenta ella había
desabrochado mi sujetador y estaba lentamente deslizando los tirantes por mi hombro. Retirando
mis brazos alrededor de mi cuello, el tejido de encaje aterrizó en algún lugar del suelo
rápidamente.

Ahora ella me empujó sobre la cama y sus labios comenzaron a explorar la zona recién expuesta.
Me estaba mordiendo el labio para reprimir cualquier gemido ya que no quería parecer tan fácil.
Eso fue más difícil cuando sus manos se unieron. Las palmas cálidas apenas me tocaban antes de
ahuecar suavemente mis pechos. Siempre había sido consciente de su tamaño más bien pequeño,
pero mi compañera parecía disfrutarlo. Tenía, sin duda, los labios más suaves que jamás había
sentido y estaban besando cada centímetro de mi pecho desnudo. Mis ojos rodaron cuando su
lengua experta se deslizó sobre mi pezón erecto.

"Dios", dejé salir sin aliento y agarré la nuca de Lauren para aferrarme. La chica más vieja aplicó un
poco de succión en el brote tenso y mis caderas se sacudieron de nuevo. Básicamente estaba
temblando de excitación y esto apenas había comenzado. Ella se movió hacia mi otro pecho y
apreté mis manos en los mechones oscuros. Abrí los ojos, miré hacia abajo y ella al parecer
recogió mi mirada. Encontrarme con los confusos, ojos verdes fue la peor decisión porque me
encendí aún más por esos orbes diabólicamente atractivos.

"Joder, eres tan sexy Camila", ella descascarilló y masajeó mi pecho. Jadeé suavemente ante su
masaje, pero también por su sensual voz y palabras. Cada vez se hacía más evidente por qué la
nativa de Miami tenía una cierta reputación. ¡¿Quién sería capaz de resistirse a ella?! El hecho de
que ella sonaba sincera y tan sexy era casi demasiado. Quería arrancarle la ropa, pero no había
terminado al parecer. Podría haber sido minutos u horas en que ella se focalizó exclusivamente en
mi parte superior del cuerpo.

La tensión por debajo de mi cintura era una tortura.

"Lauren...por favor", no podía creer que le estaba rogando por más, pero estaba desesperada.

Sentí sus labios chocar inesperadamente contra los míos después de haber sido privada de ellos
por un tiempo. Hambrienta respondiendo a sus besos, rasguñé sus hombros sin darme cuenta. Sus
caderas de repente empujaron contra mi centro con hormigueo y lancé un gemido aún más fuerte.

"Me estás volviendo loca", Lauren jadeó ante mi reacción.

"Mira quien...está hablando", casi me reí y jadeé, porque no había manera en el infierno que ella
se sintiera tan excitada como yo.

"Te deseo tanto", susurró y noté su voz temblorosa.

"Maldita sea entonces hazlo", estaba a punto de perder los estribos si no hacía algo acerca de la
tensión que sentía.

245
"Quiero probarte hasta que creas que vas a explotar", la voz rasposa respiraba contra mi oído y
clavé mis uñas en sus hombros. "Entonces voy a parar y te besaré sólo en los labios, saboreando el
dulce sabor y dejaré que te calmes para comenzar todo de nuevo", continuó y mordió el lóbulo de
mi oreja. "Voy a hacer que te vengas con tanta fuerza, Camila..."

"!Mami!"

Lauren casi se cayó de la cama cuando la voz de tono alto de Lara apareció. Sólo oí a Normani
decir 'Adiós' desde la puerta antes de desaparecer dejando a mi hija, a quien le había dado la llave.
Gracias a Dios, Normani no había entrado, pero oí suaves pasos acercándose rápidamente. Tiré de
la manta sobre Lauren y mi cuerpo justo a tiempo como Lara llegó a la zona del dormitorio.

"¿Qué están haciendo?" Lara rió cuando nos vio en la cama, pero no perdió el tiempo para
reunirse con nosotras.

"Estamos...um...en realidad...nosotras", tartamudeé sin aliento mientras mi corazón todavía latía.

"Estábamos jugando a las escondidas", Lauren me ayudó y me miró por el rabillo. Su cabello era
un desastre, sus mejillas estaban sonrojadas, los labios hinchados y había líneas rojas sobre todo
sus hombros. Afortunadamente Lara no tenía idea de lo que podría significar eso, pero la más
mayor se veía tan prolija.

"¿Y te escondías en la cama? Eso es tan fácil", la niña de tres años, se rió y la emoción era visible
ya que Lauren y yo habíamos jugado juntas. Jesús, claramente habíamos estado 'jugando'.

"Lo sé, ¿Verdad?" Lauren intervino. "¿Qué te parece si todas jugamos juntas? Ve a ocultarte y
nosotras vamos a buscarte. Probablemente eres mucho mejor por eso tendremos que hacerlo
juntas. Una de nosotras nunca va a ser capaz de encontrarte de otra manera."

"Está bien, ¡Cierra los ojos!" Lara estaba entusiasta y saltó de la cama mientras yo cerré los ojos.
Una vez más, mi compañera de equipo resultó ser muy hábil en el manejo de mi hija. Nada me
afectó más que ver su amistad genuina. Tragué el nudo de mi garganta, pero oí la apertura de la
puerta del baño. Obviamente Lara se había escondido allí. Lauren y yo apresuradamente salimos
de la cama y buscamos nuestra ropa. Sólo faltaba su camisa mientras que yo debía ponerme el
sujetador.

Durante la siguiente media hora, fingimos como si nada hubiera pasado y jugamos con Lara. Ella
estaba en la luna sobre nosotras tres por pasar tiempo de calidad con nosotras.

"Panqueques, ¿Me puedes enseñar a dibujar como tú?", preguntó la niña pequeña mientras las
veía sentadas en la cama de Lauren. Estaba haciendo las maletas para guardar el resto de nuestras
cosas y la chica mayor había estado dibujando. No pasó mucho tiempo para que a Lara le invadiera
la curiosidad y se había unido a la estudiante de arquitectura.

246
"Ya sabes, dibujar es como el fútbol", la de ojos verdes explicó en voz baja. "Cuánto más se
practica y más mayor te haces, más cosas puedes hacer. Creo que eres muy buena para ser tan
pequeña. Cuando tenía tres años, yo no podía hacer eso."

"¿En serio?" Lara sonrió ampliamente.

"Sí, absolutamente", Lauren asintió y mi corazón se hinchaba por su conversación. "Pero aquí,
vamos a intentar algo", agregó y dejó que Lara se sentara en su regazo. El cuaderno de dibujo
ahora estaba en el regazo de mi hija antes de que mi compañera de equipo hiciera a Lara sostener
un lápiz. Envolviendo la mano grande alrededor de la pequeña, ella comenzó a guiar sus dedos.
Era obvio que Lauren era la que estaba dibujando, pero hizo que Lara sintiera que ella lo estaba
haciendo. "Mira, puedes hacerlo. Esa es la forma más rápida de dibujar un conejo. Si practicas, irás
mejorando rápidamente."

"Voy a practicar ahora mismo", la castaña clara chilló y empezó a mover sus dedos por ella misma.

"Eso es bueno", Lauren instruyó y no había dejado de sonreír en ningún momento. De repente
levantó la vista y me miró a los ojos. Casi se me cae la percha de las manos, pero traté de
mantener la calma. Intercambiando una pequeña sonrisa, ella se centró de nuevo en Lara y tomé
una respiración profunda. La idea de que esto fuera una opción real para mi futuro me estaba
abrumando con alegría. Pero también sabía que había un montón de trabajo que debía hacer.

La mañana siguiente llegó demasiado rápido. En cuanto a mi despertador, había sólo unos pocos
minutos para que sonora y así tendríamos que estar listas para ir al aeropuerto. Lara estaba
durmiendo pacíficamente y decidí levantarme. Haciendo poco a poco mi camino al baño, me di
cuenta que las luces estaban encendidas.

Lauren estaba de pie delante del espejo con la puerta medio abierta. Ella estaba lista al parecer y
aparentemente era una persona mañanera. Nunca había entendido como ella se alistaba y
levantaba tan rápido.

"Oh, hola, ¿Te desperté?" preguntó la morena y sonaba apologética.

"No, tenemos que estar listas en media hora de todos modos", le contesté soñolienta y le di una
mirada rápida. Llevaba un par pantalones negros ajustados y una simple camiseta blanca, pero aún
así se veía tan malditamente atractiva. No podía ser tan sexy a las seis de la mañana.

"Bueno, el baño es todo tuyo. Estoy lista de todos modos", Lauren sonrió educadamente y quiso
pasar por mi lado, pero nos sorprendí a ambas cuando nuestros labios se conectaron. Fue
instintivo, pero no pude evitarlo. No después de la noche pasada. Y teníamos un acuerdo por lo
que mi afecto no era inapropiado, ¿No?

247
La otra morena parecía aturdida y devolvió el beso sólo suavemente antes de alejarse.

"Um, no creo que debamos hacer esto en este momento", dijo Lauren y sentí mi corazón con
calambres. "Es sólo que con Lara aquí, no quiero que se confunda. Ella no entendería lo que está
pasando y no quiero que salga lastimada por una idea equivocada."

Wow, eso dolió. Sabía que era mi culpa, pero fue doloroso escuchar a Lauren reforzar que no
estábamos realmente juntas, simplemente éramos amigas con beneficios. Por un lado, estaba
agradecida de que ella estuviera tomando en cuenta los sentimientos de mi hija. Por otra parte,
estaba decepcionada que nuestro encuentro íntimo no haya derribado más paredes. Pero estaba
decidida y no me rendiría tan fácilmente esta vez.

"No, tienes razón", dije tan casualmente como vi a la otra chica asentir. El reloj de alarma de al
lado de mi cama comenzó a zumbar y Lauren se ofreció para apagarlo. Ella salió del baño y la
realidad comenzaba a surgir.

Nos íbamos hoy. Durante todo el camino al aeropuerto, no pude dejar de pensar en la noche
anterior. Seguí repitiendo los pequeños momentos en mi cabeza y antes de darme cuenta, ya era
hora de decir adiós. Mi vuelo de regreso a París saldría pronto y me faltaba una persona por
abrazar.

Me abofeteó la idea de que no estaba segura de cuando vería a Lauren de nuevo. Mi suspensión
podría ser más larga de lo que quería, lo que significaba que no iba a estar con el equipo en los
próximos partidos. Esa idea me estaba comiendo viva. Podrían pasar meses para poder reunirme
con mi 'amiga con beneficios'. Tragué saliva pesadamente y miré a Lara que estaba abrazando a
Lauren.

"Sigue practicando en ese conejito, ¿De acuerdo?" Lauren dio varios besos suaves en la mejilla de
la pequeña quién se reía.

"Lo haré", la niña de tres años estuvo de acuerdo y ver sus pequeños brazos alrededor del cuello
del centrocampista era más que adorable. "¿Todavía me quieres visitar?"

"Me encantaría, pequeña, pero eso es un poco complicado", la belleza de pelo oscuro respondió.

"Está bien, pero tal vez mami te puede enviar fotos de los conejitos", Lara era persistente y me uní
a Lauren en su risita.

"Sí, eso es una gran idea. No puedo esperar a verlos", dio otro beso en su mejilla antes de que
Lauren se pusiera de pie. Era mi turno y no tenía idea de qué hacer. Poco a poco acercándome,
puse mis brazos alrededor de ella, sin pensar demasiado ya que eso nunca ayudaba.
Afortunadamente sentí a la chica mayor abrazarme también. Cerré los ojos por un rápido segundo
y aspiré el aroma distintivo. Todo en mí no quería dejarla ir.

248
"Que tengas un buen vuelo", Lauren susurró y comenzó a liberarme de su abrazo. Siendo audaz, o
tal vez estúpida, di un suave beso en su mejilla antes de soltarla. Vi la auténtica sorpresa en sus
ojos y una de sus cejas estaba levantada.

"Igualmente. Y definitivamente te enviaré algunas fotos", le dije son una sonrisa y su ceja se elevó
aún más porque lo había dicho tan sugestivamente. No había ninguna razón por la que no podía
ser coqueta. ¿Había un manual sobre qué cosas los amigos con derechos tenían permitido hacer?
No lo creo, e incluso si lo hubiera, estaba dispuesta a romper todas las reglas para que todo
funcionara entre nosotras más allá de nuestra situación actual.

"Está bien", rió suavemente, sin saber si estaba hablando en serio o no.

"Y puedes visitarnos en cualquier momento, si lo deseas, por supuesto", tuve que agregar y vi que
sus rasgos faciales se suavizaron.

"Gracias", respondió simplemente y estaba segura de que no iba a volar a París sólo para un
encuentro. Aunque valía la pena intentarlo.

"Nos vemos pronto", le dije de mala gana y le di una última mirada antes de darme prisa con Lara
para alcanzar nuestro vuelo.

"Sí, nos vemos pronto"

Todavía me pesaba mucho el hecho de que no sabía cuándo sería nuestro próximo encuentro. Por
lo menos el consuelo era que no nos estábamos ignorando. Fue un pequeño paso, pero estaba
más que dispuesta a hacer lo que fuera necesario para hacer las cosas bien de una vez por todas.

=================

Capitulo 16
Sólo habían pasado un par de días desde que había regresado a París, pero mi mente estaba
ocupada exclusivamente con una cosa o una persona para ser más específica: Lauren.

Desde nuestro momento muy íntimo de casi dormir juntas, no podía dejar de preguntarme
constantemente lo que ella estaba haciendo. Sabía que tenía que tomar las cosas con calma. Ella
no iba a reaccionar bien si la sofocaba por hablarle por así decirlo. Había muchas dudas sobre ella
al final y nosotras sólo habíamos acordado a ser amigas con beneficios.

Así que tomó un poco de moderación para no mandarle un mensaje de texto inmediatamente
cuando llegué a casa. Después de unos pocos días parecía razonable preguntarle casualmente
cómo estaba. El mensaje de texto fue enviado hace pocas horas pero no había recibido ninguna
respuesta. Había estado revisando mi teléfono como una loca, pero era tarde y me di por vencida
en esperar una respuesta. ¿Había hecho algo mal? ¿No estábamos autorizadas a comunicarnos
excepto en el aspecto físico? Eso parecía un poco drástico.

249
No fue hasta la mañana siguiente que el dispositivo en mi mesita de noche sonó. Tomando de
forma instantánea mi iPhone, vi el nombre de Lauren en la pantalla con un mensaje entrante. Mi
corazón palpitaba por algo tan simple. Mirando la hora, me di cuenta que eran las doce de la
noche en Boston. Estaba disfrutando de un domingo perezoso en la cama ya que Lara había salido
con Dinah y su sobrino.

Tomando una respiración profunda, esperé una cantidad segura de tiempo antes de que decidiera
responder. No quería parecer desesperada pero aún así interesada. Dios, salir era tan difícil...
¡Aunque no estábamos saliendo!

Lauren: Hey, lo siento. Olvidé mi teléfono en casa y acabo de volver. Estoy bien. ¿Qué hay de ti?
¿Llegaste bien?

Camila: No te preocupes. Sí, todo está bien con nosotras también. ¿No son las doce de la noche
allá?

L: Estaba en una fiesta.

C: Ah, ¿Te has divertido?

L: Estuvo bien. ¿Qué estás haciendo?

C: Nada. Estaba leyendo.

L: ¿Qué llevas puesto?

Mis cejas se alzaron cuando recibí su mensaje, pero no pude evitar una sonrisita. Tenía una idea
de lo que estaba pasando y quería ver si mi sospecha se confirmaría preguntando de una forma
muy directa.

C: ¿Estás borracha?

L: Ja, me pillaste. Tal vez un poco...pero todavía quiero saber.

C: Confía en mí, tu fantasía de lo que podría estar usando sólo puede ser mejor de lo que en
realidad estoy usando.

L: Envíame una foto.

C: Oh, bueno...eres exigente.

L: Me prometiste unas fotos en el aeropuerto.

C: Te prometí las fotos de los dibujos de Lara.

L: Eso no fue lo que dijiste. Vamos.

C: Me veo como una mierda. Sólo he estado en la cama y aún no me he arreglado.

250
L: ¿Y qué? Quiero ver tu cara bonita.

C: Estoy segura de que eso es todo lo que quieres ver.

L: Un desnudo estaría bien también.

C: Eres increíble.

L: Eso es lo que ella dijo.

Su clara intoxicación traía todo este coqueteo y lo sabía. Pero era una cosa buena en mi libro. Eso
era sin duda una mejora de donde habíamos estado antes de nuestro nuevo acuerdo. En el
espíritu de hacer un esfuerzo, tomé mi teléfono y decidí sacar una selfie rápida. Traté de parecer
tonta ya que era nuestra forma de hacer bromas y estaba pretendiendo estar molesta. En realidad
disfrutaba cada segundo de ella.

C: Ahí tienes :/ te lo advertí.

https://31.media.tumblr.com/2e02d39a97eddae74bc9ecd40ac9dcea/tumblr_n2s2y0zYhT1tvnk4jo
4_400.png

L: ¡¿De qué estás hablando?! ¡Te ves tan sexy! Ugh...

C: Tu turno entonces.

L: Estoy desnuda.

C: Muy divertido.

L: No, lo digo en serio.

C: Sólo estás jodiendo.

L: Confía en mí, me gustaría hacerlo ;)

C: Bueno.

L: Gracias. Estoy orgullosa de que todavía puedo hacer bromas o incluso escribir en este punto.

C: Estoy esperando esa foto.

Un momento pasó hasta que realmente recibí un archivo. Mi mandíbula cayó cuando lo abrí y
encontré la selfie que Lauren me había enviado.

Tragué saliva suavemente cuando vi al volante central realmente en la cama y apenas vestida.
¡Como si no fuera suficiente! (
https://38.media.tumblr.com/64f0fbc811d5bb5b18c2375907cc2ea1/tumblr_n7h7figuga1s0sl85o3
_500.jpg )

251
C: Ok, escucha. No puedes hacer eso.

L: ¿Hacer qué?

C: ¡Enviarme una foto una foto viéndote ASÍ cuando yo te envíe una con aspecto de vagabunda!

L: Envíame una desnuda y estaremos a mano.

C: ¿Por qué estás tan caliente? ¿No había chicas sexys en la fiesta?

Estaba entrando en un territorio peligroso, ya que los celos eran una bandera roja cuando se
suponía que debíamos ser casuales. Pero mis dedos estaban escribiendo sin pensar.

L: Es posible.

C: ¿No tuviste suerte?

L: Quién dice que soy la única desnuda en mi cama ahora mismo.

Mi corazón se hundió. Pasó de revolotear sin control y un latido irregular, a detenerse y


aparentemente romperse en apenas unos segundos. El pensamiento de la morena estando con
otra persona no debería molestarme tanto, pero su respuesta despreocupada hizo que estuviera a
punto de quebrarme antes de que ella enviara el siguiente mensaje rápidamente para que así no
estuviera en condiciones de responder.

L: ¡Es broma! Jaja.

Suspiré con fuerza y ¡Quería estrangularla! Sin embargo, eso es algo que podría pasar y tenía que
prepararme.

C: Parece que tu encanto no funciona todo el tiempo.

L: No estaba tratando de echar un polvo. Kristie, Luis y yo estábamos con un grupo de personas.
Fue divertido.

C: Me alegro que te hayas divertido :)

L: Sin embargo, realmente debería descansar. Gracias por la foto de nuevo.

C: Bien, entonces ve a descansar un poco. No hay problema, valió la pena tener una tuya a cambio.

L: Ten una buena noche, bebé.

¡¿BEBÉ?! Casi se me cayó el teléfono.

C: Tú también. Dulces sueños :x

Enviando el último mensaje, caí hacia atrás y dejé que mi cabeza golpeara la almohada. Casi chillé
como una maldita estudiante de secundaria que acaba de ser invitada al baile por su amor

252
platónico. Era vergonzoso lo feliz que estaba ya que Lauren estaba simplemente mostrando su
encanto propio, coqueteando conmigo. Seguí releyendo toda nuestra conversación y sentí que mi
corazón saltó en mi pecho cuando llegué a su último mensaje. Bebé, repetí y traté de imaginar
cómo sonaría eso viniendo de ella.

Tenía que calmarme y tratar de no ser embestida tan rápido. De lo contrario, estaría jodida.

Mi alegría no fue de larga permanencia. Más tarde ese día, mi teléfono sonó otra vez y estaba muy
emocionada de ver otro mensaje de Lauren. Hasta que leí el contenido.

Lauren: Hey, lo siento mucho por lo de antes. Me desperté y leí todo lo que te envié. Eso fue
totalmente fuera de contexto y no quiero cruzar barreras. Eso no es una excusa, pero estaba
borracha y, obviamente, no estaba pensando con claridad. La última cosa que quiero hacer es
darte señales mixtas. Después de todo, estamos en algo casual y no exclusivo. Lo siento por tomar
las cosas demasiado lejos.

La sensación inicial fue dolor. Pero entonces me acordé de que este era el momento para ponerse
a trabajar. No podía esperar a que ella ejecutara algo después de unos mensajes de texto
coquetos. No después de todo lo que habíamos pasado. Así que me aguanté e hice lo mejor que
pude para responder con calma.

C: No tienes que pedir disculpas. No lo estaba tomando tan en serio porque habías dicho que
estabas borracha. No te preocupes. Pero no veo qué hay de malo en nuestra conversación. Vamos
a divertirnos con ella. Eso es sobre lo que nuestro acuerdo se trata, después de todo. Todavía
estoy contenta de haber recibido esa foto de ti ;)

L: Me alivia escuchar eso. Me gustó tu foto también.

C: Horquilla esternal.

L: ???

C: El hueco en la base de la garganta de una mujer.

L: ¡OH! ¿Viste 'El paciente inglés'?

C: No, sólo lo busqué en Google.

L: Menos mal jaja gracias sin embargo.

C: ¿Qué harás hoy?

L: Curar mi resaca y luego salir con unos amigos.

C: Suena divertido. ¿Alguien que yo conozca?

L: No, me encontré con algunas chicas anochey me enviaron un mensaje para que saliéramos.

253
Nunca sabía si Lauren estaba diciendo esas cosas porque estaba tratando de hacer hincapié en
que no éramos exclusivas, o si quería darme celos. De hecho, nunca había sido una persona celosa
con Austin ni con Ariana. Con Lauren por el contrario, estaba echando humo ante la posibilidad de
que ella saliera con un grupo de chicas que ella había ceñido alrededor de su dedo rápidamente.

C: Ya sabes, hablaba en serio sobre lo que dije en el aeropuerto. Puedes venir y visitar en cualquier
momento si lo deseas.

L: ¿Es esto una booty-call? :D (booty-call es cuando llamas a alguien para tener sexo)

C: Tal vez.

L: Suena tentador, pero no estoy segura de que sea una buena idea.

C: Lara estaría sobre la luna si te ve y sin duda podríamos tener un 'beneficiador' tiempo a solas.

L: Probablemente nos volveremos a ver pronto ya que queda poco para las eliminatorias de la
Copa Mundial :)

Un fuerte suspiro se escapó de mis labios, porque ella definitivamente no me estaba haciendo las
cosas fáciles. No podía volar a Boston porque entonces de seguro se asustaría. Y las clasificatorias
no estaban exactamente a la vuelta de la esquina. Tenía una suspensión de un partido debido a
que Lauren me defendió ante la federación, pero aún así, me perdería el partido en dos semanas
más. Así que la próxima vez que viera a Lauren sería en cuatro semanas, probablemente, y eso se
sentía como una eternidad.

C: Sí, eso es cierto. Sin embargo, la oferta sigue en pie.

L: Eso es bueno de saber, gracias. Tengo que irme. Hablamos pronto.

C: Diviértete esta noche.

L: Dale a Lara un beso de mi parte. Adiós.

C: Lo haré. Adiós.

Me había convertido en una loca. No sólo no fui capaz de dejar de pensar en Lauren, ahora había
cometido el error de acosarla por los medios de comunicación social. Nunca había sabido cómo
eran los medios de Twitter e Instagram, pero sabía que Lauren estaba involucrada con ellos. Al
principio, había sido extremadamente detallada en la búsqueda de su cuenta de Twitter. Eso no
había sido tan malo. Su cuenta estaba sobre todo relacionada con el fútbol o incluso con cosas
arquitectónicas.

Pasé cerca de dos horas haciendo eso, pero me agravé más allá de la creencia cuando fui a su
cuenta de Instagram. Era una representación de la vida universitaria de Lauren opuesta a su vida

254
profesional. Nunca entendí como podía ser una deportista profesional tan dedicada, pero todavía
estar metida en tantas fiestas. No era que no sabía que tenía una reputación, pero la distancia lo
hizo peor. Ella estaba tan lejos y no tenía idea de lo que estaba haciendo.

Las fotos en su cuenta sugirieron que ella definitivamente no estaba sola. Había perdido la cuenta
de cuántas chicas posaban con Lauren en total. Parecía como si tuviera un montón de amigos. Ella
era muy sociable y siempre había sido así, pero esto no era normal, ¿Verdad? O tal vez no tenía
idea de cómo era la experiencia universitaria. O estaba comportándome como...un monstruo
celoso.

Suspirando profundamente, fui a través de las imágenes de nuevo. Esas chicas parecían
supermodelos y no tenía ni idea de lo que estaba haciendo mi compañera rodeada de esas
perfectas criaturas; así que ella era uno de ellos. No sólo era impecable en persona, ¡También era
fotogénica como la mierda! No podía tomarse si quiera una mala foto a pesar de que estaba
claramente intoxicada en un montón de ellas.

Pero lo peor eran los comentarios de las chicas, o lo que dejaban en las fotos de Lauren.

"!Qué noche! Vamos a tener que hacer eso otra vez ;)"

"Nunca voy a ser capaz de tomar otro body-shot y no pensar en Lauren. ¡Eso fue una mierda
sexy!"

"Hey ojos sexy, salgamos pronto."

"Maldita chica, mira a ese bombón xxx"

Y esos no eran los más sugestivos. No me atreví a leer aquellos de nuevo, ya que indicaban
claramente que Lauren era nada más que otro celibato. Por supuesto, la mayoría de esos
comentarios eran antes de haber llegado a su vida de nuevo. Al ver sus más recientes fotos vi una
con un grupo de chicas con las cuales había estado saliendo, así que había una alta probabilidad de
que mis miedos se hayan hecho realidad.

"¿Todavía la estás acosando?" Dinah de repente apareció de la nada y cerré mi laptop


rápidamente.

"No la estoy acosando", dije débilmente.

"Sí, claro", mi mejor amiga se burló y se sentó a mi lado en el sofá. Ella sabía todo, cada detalle, de
hecho, porque confiaba en ella.

"¿Cómo voy a competir con todas esas chicas que la rodean cuando estoy aquí?" suspiré con
frustración.

"Tienes que demostrarle lo que se está perdiendo. Esas chicas no se comparan contigo, Mila. Pero
tienes razón. Ella tiene que venir y visitarte", mi amiga de la infancia estuvo de acuerdo.

255
"¿Qué sugieres?"

"Digo que pongas tu sexy cara y tomamos algunas fotos calientes así ella va a venir aquí muy
rápido", Dinah respondió con una sonrisa y rodé mis ojos.

"Nunca debí haberte dicho sobre nuestros mensajes de texto", mis mejillas se enrojecieron al
instante.

"!No estoy bromeando! Quiero decir, su trato se basa en salir y ella no va a venir aquí a menos que
realmente quiera hacerlo...por ti, supongo", la más joven parecía estar hablando en serio.

"!No voy a enviarle desnudos, Dinah!"

"Esas son tan baratas de todos modos", respondió ella sin duda. "Hay que dejar algunas cosas para
la imaginación. Déjala con ganas de más por lo que ella moverá su trasero para ver el resto."

"¿Hablas en serio?", le pregunté todavía incrédula ante la sugerencia de mi amiga.

"¿Tienes una mejor idea?"

No la tenía. Y ese era el problema. Estaba realmente empezando a considerar su propuesta, lo que
me asustó aún más en cuánto al poder Lauren tenía sobre mí.

"Busca un poco de lencería y ponte sexy con ella", Dinah chisteó sus dedos y me eché a reír.

"Sí, porque tengo tanta lencería y me sentiría tan cómoda haciendo eso", estaba tratando de
discutir cuando mi resistencia estaba empezando a desmoronarse.

"Vamos a ir a comprar algunas cosas y entonces te ayudaré a tomar algunas fotos", ella se ofreció
y tragué con dificultad.

"¿En serio?"

"Has estado deprimida desde que tuviste esa pelea con Lauren", la defensora explicó su
razonamiento. "Pero ahora tienes ese raro trato de sexo andando-"

"No lo llames así. Somos amigas con beneficios, ok", me ofendí ligeramente cuando no había
ninguna diferencia en realidad.

"Está bien, desde ese entonces has estado en un mejor estado de ánimo y puedo ver que
realmente quieres que esto funcione. Por lo tanto, te voy a ayudar porque seamos sinceras...lo
necesitas", Dinah bromeó y señaló mi vestimenta. Llevaba un par de pantalones de chándal y un
jersey muy viejo.

"!Tienes que prometerme que no te vas a reír de mí!", dije apremiante.

"Nuh uh, ¡Te estoy haciendo un favor! No tienes derecho a hacer reglas", ella resopló. "No te
preocupes, ella no sabrá lo que viene."

256
La diabólica sonrisa en la cara de mi amiga alivió mi incomodidad de alguna manera.

"Oh, ¿Qué diablos? He hecho de una idiota de mí misma muchas veces, esto no marcara una gran
diferencia", exhalé y vi a Dinah aplaudiendo con entusiasmo.

No estaba segura de si me arrepentiría de esto, pero estaba dispuesta a hacer lo que fuera para
mejorar mi relación con Lauren.

Camila: Creo que tengo algo que podría hacerte reconsiderar visitarme.

Lauren: Hola a ti también :D bueno, ¿Qué es?

C: Esto podría ser todo tuyo si vienes...

Mi corazón latía con fuerza cuando le envíe la foto que me había tomado con Dinah. Nunca en un
millón de años habría pensado hacer algo como esto, pero Lauren me hizo hacer un montón de
cosas que no había considerado antes. Posando en ropa interior, mientras que apenas cubría a mí
misma con una blusa blanca era otra cosa en esa extensa lista. Esto podría ser el intento más
vergonzoso de conseguir su atención, sin embargo, podría tener la oportunidad de verla. [Algo así
es la foto,
quizás:https://31.media.tumblr.com/40fb5d68cb046d185caa89bec8c1d032/tumblr_inline_n8gsjy
r1zi1rigp7e.jpg]

L: ¡MIERDA!

L: ¡Estoy reservando un vuelo ahora mismo!

L: Maldito infierno, Camila.

C: Lo digo en serio, Lauren.

L: No puedo creer que hayas hecho eso. Literalmente, escupí mi café en el desayuno con mis
padres. Quizás piensan que estoy loca y tal vez lo estoy. ¿Esto es real?

C: No estás loca. Pero sí quiero que me visites.

L: ¿Estás segura de que es una buena idea?

C: Puedes pasar algún tiempo con Lara y podemos pasar el rato también. Esto se llama "Amigos"
con beneficios después de todo.

L: Si estás bien con eso, entonces definitivamente iré a mirar algunos vuelos. No tengo un partido
este fin de semana.

C: Este fin de semana suena perfecto. La hermana de Dinah trabaja para una compañía aérea y
estoy segura de que te puede conseguir un vuelo. Sólo tienes que decir 'Sí' y me ocuparé de todo.

257
L: Mierda sí :D

C: Yay :)

L: Ahora no puedo esperar.

C: Pervertida.

L: Dice la que me envía fotos así -.-

C: Sólo porque sabía que te iba a gustar eso, por lo tanto, tú eres la pervertida.

L: No puedo dejar de mirar. Wow, no tienes idea de lo fascinante que eres, ¿Verdad?

Sentí mis mejillas arder y de repente noté a Dinah entrar en la habitación. Sus cejas se levantaron
inquisitivamente y le di un pulgar hacia arriba. Ella sólo articuló 'Te lo dije' y me guiñó un ojo antes
de irse de nuevo. Reorientándome en el último mensaje, mi corazón palpitaba porque sus últimas
palabras parecían genuinas y no tan descaradamente coquetas.

C: Ya verás lo real muy pronto y entonces podrás decidir si sigo siendo fascinante.

L: No necesito visitarte para saber eso. Pero voy a ir de todos modos sólo para asegurarme ;)

C: Entonces no quiero retenerte del desayuno con tus padres. Te enviaré todos los detalles
posibles sobre el vuelo más tarde, cuando haya hablado con la hermana de Dinah.

L: Todavía puedo verlo por mí misma. No tienes que hacer eso.

C: Pero quiero.

L: Está bien, entonces voy a esperar las instrucciones :)

C: Diviértete :)

L: Tú también.

L: Y... ¡Maldita sea!

C: Cállate, eso es suficiente.

L: No lo creo, pero tengo que parar porque mis padres están enojados porque sólo estoy mirando
mi teléfono.

C: Te mandaré un mensaje más tarde.

L: No puedo esperar.

258
Estaba paseándome por el salón durante la última media hora. El día que Lauren venía visitar
finalmente estaba aquí y yo era un desastre. Cambiarme mi vestimenta cinco veces no fue
suficiente, pero me había duchado dos veces y seguía pensando sobre lo que debía decir o hacer
una vez que ella estuviera aquí. Sólo se alojaría durante dos días, pero era más de lo que había
previsto antes de mi 'sexy selfie'.

Miré el reloj, eché un último vistazo en el espejo y respiré profundamente. Los jeans ajustados
negros que acentuando mis piernas delgadas y un suéter rojo muy ajustado para parecer atractiva
a pesar que de afuera helaba. Puesto que había algo de nieve y hielo, no podía llevar tacones y
decidí ir por un calzado más formal. Quería mostrarle los alrededores a Lauren y caminar con
tacones podría ser peligroso en este tiempo.

El timbre sonó y mi corazón se detuvo por un segundo.

Tomé otra respiración profunda necesaria ante de dirigirme a la puerta. Al abrir, una cantidad
insondable de calidez se hizo cargo de mi cuerpo cuando vi a Lauren sonriendo suavemente. No
pude contenerme a darle un vistazo rápido: botas de combate negras, jeans azules muy ajustados
y una chaqueta verde oliva lo que la hacía parecer muy informal pero elegante. Un pañuelo negro
y un beanie se añadían a su apariencia impecable.

Como si eso no fuera suficiente, ni siquiera había llegado a su cara todavía. Encontrándome con
sus ojos verdes cautivadores y ver los labios rojos en persona otra vez mi pulso ya estaba por las
nubes.

"Hey", ella me sacó de mis pensamientos.

"Hola, adelante. Probablemente te estás congelando", le dije al instante y la dejé entrar.


Intercambiamos un abrazo y aspiré el aroma distintivo que había echado mucho de menos.
"¿Cómo estuvo tu vuelo?"

"Bien, hubo un poco de retraso debido al mal tiempo por eso llegué tarde", la chica mayor explicó
pero yo había asumido que eso había pasado.

"Eso no es un problema. Me alegro de que estés aquí", admití con una sonrisa grande y ella
correspondió.

"¿Cuál es el plan para hoy?", preguntó ella con curiosidad y se quitó la gorrita tejida por un
momento para arreglar su cabello alisado.

"Pensé que podríamos dar un paseo por la ciudad. Te mostraré algunos de mis lugares favoritos y
podemos cenar algo ante de que nos vayamos...de vuelta al hotel, quizá", agregué tímidamente
mientras que Lauren sonrió.

"Suena perfecto", respondió, y me mordí el labio sin saberlo. Estaba claro lo que esta noche
implicaría, después de todo, eso era lo que nuestro acuerdo trataba, pero tenía un par de horas

259
para recordarle a Lauren lo buenas que éramos juntas a pesar del aspecto físico. Sin embargo, esa
parte de la noche me había emocionado también.

"!Panqueques!" oí chillar a Lara cuando corrió hacia nosotras.

"Hey, pequeña", Lauren sonrió y se acercó a ella, cogiéndole entre sus brazos a mitad de camino
para abrazarla. El plan era que ellas pasaran el rato mañana. Hoy sólo se trataba de Lauren y yo.
Pero, por supuesto, Lara no podía esperar para saludar y no me importó en absoluto verlas
interactuar. La forma en que Lauren besó la mejilla de mi hija de una forma tan natural me
derritió.

"Tienes que venir a mi habitación. Quiero mostrarte algo", la niña no perdió tiempo y quería toda
la atención de mi compañera de equipo.

"¿Está bien?" Lauren me miró y asentí inmediatamente. Siguiéndolas, estaban teniendo una
conversación acerca de las habilidades para el fútbol de Lara, así como su dibujo. Llegamos a la
habitación de mi hija y Lara le mostró su práctica en los dibujos de conejitos. Lauren le había dado
instrucciones de cómo hacerlos y en realidad yo había visto un gran avance.

"Wow, estos son mucho mejor. Eres muy talentosa", la de ojos verdes la felicitó y Lara no dejaba
de abrazar a Lauren todo el tiempo, con ganas de mantenerla cerca al parecer. "¿Esa es tu
guitarra?" la más vieja señaló el instrumento que estaba en el otro lado de la habitación.

"No, es de mamá", Lara explicó rápidamente.

"¿Tocas la guitarra?" Lauren se dirigió a mí notablemente sorprendida.

"Un poco", respondí con indiferencia.

"Ella es muy buena y puede cantar también", la pequeña intervino y vi como las cejas de Lauren se
elevaron.

"Bueno, entonces ella tiene que tocar algo para nosotras, ¿No?" la belleza de pelo oscuro se
encontró de nuevo con mi mirada y tragué saliva.

"No canto delante de nadie...excepto para Lara. Ella acaba de decir que soy buena, porque es mi
hija y la soborno con comida y afecto", traté de bromear, pero ella ya se había sentado en la cama
y me miró expectante.

"Confío en su juicio y tengo curiosidad para ser honesta", la otra futbolista respondió y yo nunca
habría pensado en hacer esto para alguien más. Con ella, tenía que hacer lo que pudiera, ¿Verdad?
Así que me acerqué y tomé la guitarra. Saqué una silla y me senté con el instrumento en mi
regazo. Para Lara cantaba canciones para niños, pero esto no era para ella. Había una canción que
estuvo pegada en mi cabeza durante días. Y sabía por qué, pero cantarla podría ser un riesgo. Pero
todo el fin de semana era un riesgo por lo que, ¿Por qué no empezar con uno?

260
Empecé a tocar lentamente y me tomé un par de segundos para acostumbrarme antes de que
comenzara a cantar.

"We're not, no we're not friends, nor have we ever been. (No somos, no, no somos amigos, nunca
lo hemos sido)

We just try to keep those secrets in a lie,(Sólo tratamos de mantener esos secretos en una
mentira)

And if they find out, will it all go wrong?(Y si ellos se enteran, ¿Irá todo mal?)

And Heaven knows, no one wants it to.(Y el cielo sabe, que nadie va a querer eso)

So I could take the back road(Así que podría irme por otro camino)

But your eyes will lead me straight back home.(Pero tus ojos me guiarán de vuelta a casa)

And if you know me like I know you(Y si tú me conoces como yo te conozco)

You should love me, you should know.(Deberías amarme, deberías saber)

Friends just sleep in another bed,(Que los amigos duermen en camas separadas)

And friends don't treat me like you do.(Y los amigos no se tratan como tú lo haces)

Well I know that there's a limit to everything(Sé que hay un límite para todo)

But my friends won't love me like you.(Pero mis amigos no me amarán como tú lo haces)

No, my friends won't love me like you.(No, mis amigos no me amarán como tú lo haces)

We're not friends, we could be anything.(No somos amigos, podríamos ser lo que sea)

If we try to keep those secrets safe.(Si tratamos de mantener esos secretos a salvo)

No one will find out if it all went wrong.(Nadie lo sabrá si todo saliera mal)

They'll never know that we've been through.(Ellos nunca sabrán por lo que hemos pasado)

[Chorus]

But then again, if we're not friends,(Pero luego otra vez, si no somos amigos)

Someone else might love you too(Alguien más podría amarte también)

And then again, if we're not friends,(Y luego otra vez, si no somos amigos)

There'd be nothing I could do, and that's why(No habría nada que pudiera hacer, y eso es por qué)

Friends should sleep in other beds.(Los amigos deberían dormir en camas separadas)

261
And friends shouldn't kiss me like you do.(Y los amigos no deberían besarse como tú me besas)

And I know that there's a limit to everything.(Y sé que hay un límite para todo)

But my friends won't love me like you.(Pero mis amigos no me amarían como tú lo haces)

No, my friends won't love me like you do.(No, mis amigos no me amarían como tú lo haces)

Oh, my friends will never love me like you.(Oh, mis amigos nunca me amarían como tú lo haces)"

A lo largo de la canción, no me concentré en otra cosa que no fuera la guitarra. No podía mirarla
porque eso probablemente me jodería. La último nota sonó y finalmente me atreví a mirar a los
ojos a mi amiga.

Los orbes verdes exudaban misterio más de lo que me hubiera gustado en este momento. No
podía leer lo que estaba pensando o sintiendo. Ella parecía sorprendida, pero también preocupada
y encariñada...era una mezcla de cosas muy confusas. Sus ojos definitivamente estaban más
amplios que de lo habitual antes de que rompiéramos nuestra mirada fija y ella aplaudiera junto
con Lara.

"Te dije que era buena", la niña castaña clara dijo llena de orgullo que me hizo sonrojar.

"Ella no es sólo buena si no también increíble", añadió Lauren con aprecio. "Eso fue increíble,
Camila. No tenía idea de que tenías otro talento como ese, además del fútbol."

"No es nada", cada vez estaba más nerviosa y me levanté para dejar la guitarra de nuevo en su
lugar. "¿Estás lista para ir?"

"Sí, vamos", Lauren estuvo de acuerdo y dejó otro beso en la frente de Lara. "Te veré mañana,
pequeña."

"Adiós, diviértanse", saludó con la mano mi hija e intercambiamos una mirada rápida con Lauren.

"Vamos a divertirnos", la más vieja rió entre dientes y casi le di una palmada en el brazo, pero
sonreí para no parecer sospechosa.

Estaba nerviosa de que Lauren estuviera solamente interesada por el final de la noche, pero
estaba decidida a hacerlo no sólo por eso.

Pasamos un par de horas sólo paseando por la ciudad y hablando. Mi miedo de no llevarnos bien y
simplemente tener encuentros fue disminuyendo poco a poco. Era tan natural volver a ser amigas,
o lo que fuera que éramos. Hablábamos de las cosas más insignificantes, pero nunca nos
aburrimos. Para alguien que no era una persona de piel como yo, eso era muy raro. Siempre que
no habláramos, no era algo incómodo.

262
Había estado investigando un montón de lugares en la ciudad que tuvieran un significado
arquitectónico. Ella estaba interesada en esas cosas y aunque yo no lo estaba, traté de hacer un
esfuerzo para atender a sus intereses. Yo hablaba acerca de algunos puntos de referencia como si
tuviera una idea de lo que estaba diciendo. Cuando en realidad sólo estaba repitiendo lo que había
leído en internet. Lauren sonrió aquí y allá y supuse que probablemente estaba confundiendo las
cosas o lo que estaba hablando era una absoluta tontería. Ella fue suficientemente amable para no
decir algo desalentador.

Se estaba haciendo tarde y el sol se ponía temprano a finales de enero. Deberíamos volver al hotel
pronto, supuse. Vi una gran pista de hielo al aire libre y al instante miré a la chica mayor que
estaba a mi lado.

"¿Quieres ir?", le pregunté y la vi seguir mi dedo que estaba apuntando a la pista de hielo.

"¿A patinar?" cuestionó desconcertada.

"Sí, ¿Por qué no? Vamos, será divertido", quería motivarla y de alguna manera tratar de atrasar la
llegada al hotel.

"Soy bastante buena en realidad. Así que no estoy segura de que quieras hacer eso", Lauren sonrió
ligeramente.

"No todo es una competencia", rodé mis ojos e instintivamente agarré su mano.

"Por favor."

"Está bien, pero no digas que no te lo advertí cuando estés molesta porque soy mejor que tú",
bromeó y parecía como si no le importara que estuviera sosteniendo su mano.

"Quién dijo que no era tan buena como tú lo eres", le respondí desafiante para ver esa ceja
enarcarse de esa manera atractiva.

"¿Crees que puedes vencerme?" inclinó la cabeza y sonrió genuinamente de oreja a oreja.

"Nunca lo sabremos si no vamos", le dije. Las dos vivíamos vida como adultas en el fútbol y éramos
deportistas profesionales. Lauren tenía una vida universitaria que compensar, pero yo era una
madre y tenía tantas responsabilidades que la mayoría de la gente de mi edad no tenía. No es que
me arrepentía de tener a Lara en absoluto, pero a veces quería ser espontánea y realmente actuar
como una veinteañera.

"Muy bien, entonces vamos", Lauren estuvo de acuerdo pero dejo ir mi mano antes de acercarse a
la pista de hielo.

Unos minutos más tarde, habíamos negociado nuestros patines de hielo y nos encontrábamos en
la superficie helada acristalada. Mi compañera era de hecho bastante buena pero yo también lo

263
era. Nos habíamos acostumbrados a patinar y a las personas de nuestro alrededor hasta que las
cosas terminaron siendo una competencia después de todo.

"¿Quieres correr?" Lauren desafió, ya que estábamos patinando lado a lado.

"¿Una vuelta?" no dudé porque me sentía bastante segura de que podría ganarle.

"Lo tienes", la estudiante universitaria asintió y retrocedimos un poco antes de que las dos
comenzáramos a patinar mucho más rápido que antes. La velocidad era una cosa, pero el
obstáculo más difícil era toda la gente alrededor. Tratar de pasar entre ellos era más difícil que ir
rápido.

No pude dejar de reír cuando estábamos básicamente codo a codo todo el tiempo. La vuelta
estaba casi terminada y le di un codazo a Lauren muy sutilmente. Fue suficiente para que perdiera
el equilibrio y cayera sobre su trasero, pero nada muy peligroso. Dándome la vuelta cuando había
ganado, estallé en carcajadas porque Lauren me dio esa mirada cuando no esta impresionada en
absoluto.

"Eres una maldita tramposa", se quejó y se mantuvo sentada en la superficie blanca, mientras
hacía un mohín.

"No tengo ni idea de lo que estás hablando", jugué a la inocente entre ataques de risa, pero me
acerqué a ella lentamente.

"Sabías que iba a ganar por eso me empujaste."

"Yo no hice tal cosa", fingí estar ofendida por tal acusación.

"Por supuesto que no", el rostro de Lauren no pudo mantener la apariencia molesta y demostró
que ella también lo estaba disfrutando. "Al igual que CC7 que nunca ha empujado a alguien, ¿No?"

"No tengo idea de quién es esa persona CC7 pero suena violenta", le dije y me encantó la suave
sonrisa en esos labios perfectos.

"Ella es una cabeza loca molesta, eso es seguro", la más vieja se burló, pero extendió las manos.
"¿Por lo menos me vas a ayudarme a levantarme?"

"Creo que puedo hacer eso", tomé sus manos entre las mías así ella fue capaz de ponerse de pie.
Antes de que supiera lo que estaba pasando, Lauren me empujó contra la baranda que rodeaba la
pista lo que me sorprendió por decirlo menos, y sentí que mi corazón comenzaba a acelerarse. Ella
estaba de pie a pocos centímetros de mí, apretándome contra la superficie dura detrás de mí
mientras que sus ojos perforaban los míos. Tragué inadvertidamente y sentí la tensión entre
nosotras subiendo.

No estaba segura de lo que era aceptable en nuestra situación actual y por lo tanto me había
contenido cuando todo lo que quería hacer era besarla desde que había llegado. Mis ojos cayeron

264
a sus labios y quería probar el lápiz labial rojo en ellos más que nada. Mordiéndome mi labio
inferior, sentí sus manos apoyadas en mi cintura y decidí ser valiente. Levanté mis brazos y los
doblé alrededor del cuello de la otra chica para tirar de ella más cerca. Cerré los ojos y sentí los
expertos labios besando los míos justo después.

Con un suspiro de placer, no podría creer lo bien que se sentía. Sus labios estaban atrapando mi
labio inferior expertamente mientras me olvidaba de todo lo que nos rodeaba. Todo era borroso
cuando Lauren empezó a chupar mi labio y tiró de él con suavidad. Sus caderas casi tocando las
mías, quería más de eso que contenía esa sensación al estar cerca de ella.

Su mano se deslizó por debajo de mi chaqueta y tocó la piel de mi cintura cuando me estremecí
involuntariamente.

"Frío", jadeé contra sus labios con una pequeña risa.

"Lo siento",se disculpó y retiró sus dedos fríos. Dejó un suave beso en mis labios antes de alejarse
para mirarme. Ahí estaba otra vez: esa expresión tierna en los orbes verdes que no debía haber
debido a nuestro acuerdo. Nadie me miraba así. Ni siquiera los ojos de Austin o de Ariana
rezumaban esa cantidad de afecto cuando había salido con ellos. Pasé mis dedos por su cuello y
me sentí paralizada por su mirada.

"Yo..." de repente abrí mis ojos y ¡Casi solté las dos palabras que no podía decir en absoluto! No si
quería tomar las cosas con calma. Confesar mis sentimientos y decirle que la amaba no era una
opción. Me sorprendió lo cerca que estuve para decirlo después de que habíamos estado reunidas
sólo durante unas horas.

"¿Sí?", preguntó un poco divertida que no haya terminado mi sentencia.

"Yo...um...creo que deberíamos ir a cenar", hablé con voz temblorosa todavía porque la cercanía
me había paralizado.

"¿Por qué no nos saltamos la cena y volvemos al hotel?", Lauren sugirió pero no parecía tan
obviamente coqueta como antes. Vi más cariño lo que era un paso importante.

"No has comido en todo el día. ¿No tienes hambre?" estaba preocupada porque yo había comido
en el camino y ella no lo había hecho.

"Cuántos chistes inapropiados de 'comer' podría hacer en este momento", se rió entre dientes
antes de que la golpeara en su hombro.

"!Oh Dios mío, Lauren!" reí y sentí mis mejillas ardiendo. Ella se unió a mi risa y parecía más feliz
por el momento.

"Eres tan linda cuando estás nerviosa", Lauren sonrió y me sorprendí al sentirla acariciar mi cuello
de repente. La piel de gallina

265
se estaba extendiendo por todo mi cuerpo y apreté mis brazos alrededor de su cuello una vez más.
La intimidad que compartimos fue lo que me dio la esperanza de que no sólo teníamos
encuentros. Sino también teníamos momentos como estos. Dando un suave beso en mi cuello,
exhalé en voz alta y no me pude resistir más.

"Bueno, vamos a olvidarnos de la cena y vamos al hotel", estuve de acuerdo y vi a Lauren alejarse.
Ella me besó en los labios una última vez antes de soltarme.

Mi corazón latía con fuerza y bombeaba violentamente en mi pecho mientras que Lauren giró la
llave de la habitación del hotel. No se suponía que debía sentirme tan nerviosa. De alguna manera
sentí mis rodillas temblorosas cuando la seguí adentro. Se sentía extraño sabiendo lo que
sucedería tan descaradamente.

Abrí la cremallera de mi chaqueta y de repente sentí a Lauren quitármela mientras estaba de pie
detrás de mí. ¡Ella era tan malditamente encantadora! Un gesto tan simple como sacarme mi
chaqueta me tuvo aún más angustiada. Ella dio un suave beso en mi hombro, aunque la piel
estaba cubierta. Tomé una respiración profunda y le di las gracias por tomar mi chaqueta y
colgarla.

"¿Quieres algo de beber? Puedo abrir el mini-bar si quieres. O puedo ir abajo y conseguir algo
más" Lauren ofreció cuando se unió a mí en el dormitorio de la habitación del hotel.

"Me gustaría un poco de agua si eso está bien", respondí y usé todo de mí para tener un poco más
de tiempo para calmarme.

"Claro, iré abajo, porque no creo que tenga otra botella", la más vieja explicó y se me acercó. Era
la primera vez que veía lo que llevaba puesto debajo de su chaqueta y suéter. La T-shirt negra de
Rolling Stones se acentuaba a su cintura y la hacía parecer aún más fuera de mi alcance de lo que
ya estaba. Fue inesperado pero me besó suavemente en los labios antes de alejarse. "Ponte
cómoda. Ya vuelvo."

"Está bien", respiré y asentí antes de que ella se fuera. La puerta se cerró y empecé a caminar
como lo había hecho en casa antes de que ella hubiera llegado. Sabía que esto iba a pasar, pero no
estaba preparada todavía. ¿Cómo era eso posible?

Mis pensamientos fueron interrumpidos por un sonido de zumbido. Era el teléfono de Lauren en la
cómoda junto a mí. No debía y lo sabía. Pero mis celos parecían estar fuera de control cuando se
trataba de mi futbolista compatriota. Poco a poco cada vez más cerca del dispositivo, vi el mensaje
de entrada que se mostraba sin tener que abrirlo:

Brittany: Hey. ¡Lo de anoche fue increíble! ¿Alguna posibilidad de que podamos repetirlo el
próximo fin de semana? ;)

266
Todo lo que había sentido al leer los comentarios de las fotos de Instagram de Lauren, no era nada
comparado con lo que sentía ahora. Había salido con otra persona. Anoche. Y ahora ella tendría
sexo conmigo como si no fuera la gran cosa. Ese fue nuestro acuerdo, pero la realidad de no ser
exclusiva era mucho más difícil de hacer frente a los hechos. Sentí las lágrimas hinchar mis ojos,
pero esa no era su culpa. Ella había sido más que clara sobre sus intenciones. Yo había sido la que
la había estado presionando para venir aquí. Ahora entendía su vacilación.

Supéralo, Camila. Eso fue lo que me dije a mí misma, porque esto no debería ser una sorpresa. Eso
no significaba que no había la oportunidad de ser exclusivas en algún momento. Me quité los
zapatos y escuché la puerta abrirse de nuevo. Volviendo rápidamente a la cama, estaba tratando
de parecer impertérrita cuando Lauren regresó.

"Aquí tienes", me saludó con una sonrisa y me entregó una pequeña botella de agua.

"Gracias", respondí, tomé un gran trago de la botella como la otra morena se quitó las botas y se
acomodó a mi lado en la cama.

"El día de hoy ha sido muy divertido, Camila", Lauren habló y tuve un tiempo difícil en mirarla por
alguna razón. "Gracias por mostrarme-"

Eso fue todo lo que ella fue capaz de decir ante de que apretara mis labios contra los de ella.
Estuvo aturdida y no reaccionó por un momento pero seguí besándola con ferocidad y tirando de
ella encima de mí. Ahora ella siguió mis instrucciones y se acomodó entre mis piernas mientras
correspondía con la misma pasión. Tenía que olvidar ese maldito mensaje de texto. ¿Había una
manera mejor que tener sexo con alguien tan magistral en ese departamento? Probablemente no.

Por no hablar de que quería demostrar que yo era la mejor opción para ella. Esa Brittany no podía
tener la conexión que yo tenía con Lauren. Atacándola con mi boca sin duda no era mi enfoque
habitual pero estaba desesperada. La idea de que ella había hecho lo mismo con otra persona
hace menos de 24 horas era desgarrador. Sentí mis ojos hincharse de nuevo, aunque me esforcé
mucho para contenerme.

Fue un déja-vu cuando Lauren se detuvo de repente y me miró llena de preocupación. Lo mismo
había sucedido la última vez que habíamos estado en esta situación. Sólo que esta vez no estaba
intimidada, si no con el corazón roto.

"¿Qué...qué pasa?" la de ojos verdes parecía muy preocupada, mientras que su voz estaba sin
alienta y casi con pánico.

"Nada", negué con la cabeza y traté de tirar de ella hacia abajo por el dobladillo de su camisa.

"Nada está bien, estás llorando", se dio cuenta de mi mirada vidriosa en mis ojos.

Simplemente no lo entendía. ¡¿Por qué me estaba mirando de esa manera cuando no éramos más
que compañeras de sexo?! Una vez más, la ternura en sus ojos me emocionó y la sentí acariciar mi
mejilla con cariño a la espera de mi respuesta.

267
"Yo..." empecé de nuevo y estaba a punto de hacer lo que casi había hecho en la pista de hielo. La
primera lágrima cayó de mis ojos y rodó por el lado de mi cara. Tenía vergüenza ahora porque
nunca lloraba delante de otras personas. Pero yo había llorado a menudo delante de ella. Ella
debía pensar que era un caso mental ahora.

"Camila por favor", susurró y se veía tan desesperada. "No me gusta verte llorar. ¿Qué es? ¿No
quieres hacer esto? Lo entiendo, de verdad", la chica mayor enfatizó mientras yo negué con la
cabeza. "Entonces, ¿Qué paso? Cuéntame", seguía presionando sin ser dominante. "Me puedes
decir lo que sea, ya lo sabes ¿Verdad?" su pulgar limpió la pista mojada que mis lágrimas habían
dejado.

No podía decirle eso, ¿Podía? Mi cabeza estaba luchando contra mi corazón en este momento.
¿Confesar lo que sentía o no? Esa era la pregunta. Los orbes verdes me observaban con atención,
tratando de comprender lo que había sucedido en el tiempo que había estado ausente.

"Nunca debimos haber hecho esto. Ahora me siento como si te he estado presionando a que
hagas algo que nunca querías en primer lugar", Lauren comenzó a culparse a sí misma y me di
cuenta de cómo estaba horrorizada ante la idea de forzarme.

"No, no es eso. Lo prometo", respondí sin dudar esta vez porque no podía dejar que pensara eso.

"Lo siento-"

"Deja de pedir perdón, no hiciste nada malo", sacudí mi cabeza aún más confundida y hundí mi
cara en mis manos antes de que realmente empezara a llorar. Eso era lo último que quería que
sucediera, pero no pude evitar el dolor punzante en mi pecho que hizo mi corazón doler. Lauren
puso sus brazos alrededor de mí lo mejor que podía en nuestra posición y acarició mi cuello como
antes.

"Está bien, Camila. Sea lo que sea, estoy aquí para ti", susurró tiernamente y empeoró las cosas sin
saberlo.

"Yo..." ese fue mi tercer intento, pero mi voz estaba temblando y todavía no tenía idea si debía
decirlo o no...

=================

268
Capitulo 17
*CONTENIDO EXPLÍCITO*

"Yo..." ese fue mi tercer intento, pero mi voz estaba temblando y todavía no tenía idea si debía
decirlo o no.

Sentir su cálida respiración en mi cuello, y la forma en que me abrazaba con tanta fuerza para
consolarme me estaba confundiendo más que nada. ¿Era todo parte del acuerdo? Nunca estaba
segura si a Lauren en realidad le gustaba, o si sólo era otra conquista en su extensa lista. No es que
me importara que fuera sexualmente experta, pero me hizo preguntarme si mis esperanzas eran
puras tonterías.

No podía decirle lo que sentía, pero estaba empezando a calmarme.

"¿Tú...si quiera te gusto?" eso se escapó de mis labios y Lauren se apartó al instante para mirarme.

"Por supuesto que me gustas", respondió ella sorprendida que le preguntara una cosa así. "Eso es
una locura, ¿Por qué no me gustarías?"

"No sé", suspiré con frustración y cerré los ojos por un momento.

"Camila, está bien si no estás segura de esto", Lauren seguía siendo considerada, lo cual estaba
agravando las cosas en este punto.

"Quiero poner en práctica otra regla para nuestro acuerdo", solté y vi a la chica mayor enarcar una
ceja.

"Está bien, ¿Cuál es la nueva regla?", preguntó ella con calma.

"Tenemos que ser completamente honestas. Incluso si eso puede herir los sentimientos del otro",
le dije asertivamente como pude en esta situación.

"Muy bien, creo que la honestidad se gana", dijo cumpliendo mi deseo, y comenzó a acariciar mi
mejilla con el dorso de su mano.

"Entonces contéstame completamente honesta ahora: ¿Qué hiciste anoche?" no pude dejarlo
pasar a pesar de que mi voz estaba tranquila e insegura ahora.

"Estudié", Lauren respondió con una expresión de desconcierto en su rostro. Las lágrimas
empezaron a hinchar mis ojos una vez más porque ella estaba obviamente mintiendo de acuerdo
con el mensaje de texto que había leído.

"¿Qué estudiaste?" seguí adelante con la esperanza de descubrir su mentira.

269
"¿Qué tiene que ver eso? ¿Y por qué me estás interrogando?", ella estaba más que confundida al
parecer.

"Simplemente sé honesta", presioné.

"Estoy siendo honesta", se defendió y retiró su mano de mi cara. "Tengo un gran examen
próximamente e invité a Brittany. Ella está en mi clase de 'Arquitectura Tecnológica y Materiales' y
nos las arreglamos para contribuirnos, intercambiando material, esa fue la mejor sesión de estudio
que he tenido. Necesitaba hacer eso para venir aquí. De lo contrario, me habría tenido que quedar
en casa para estudiar."

Recordando el mensaje de texto de Brittany, me di cuenta que había saltado a las suposiciones.
Por la forma en que Lauren habló y me miró supuse que estaba siendo sincera. Así que esa había
sido su 'noche increíble'. Y por eso Brittany quería repetirlo el próximo fin de semana. Me sentí
como la mayor idiota por hacer una suposición precipitada. Lauren parecía un poco enojada
porque la había estado presionando tanto, y tenía todas las razones para estarlo. Ella había hecho
un esfuerzo para visitarme, aprendiendo la materia antes de tiempo, por lo que así podríamos
pasar tiempo juntas.

Aquí estaba yo haciéndola sentir mal por algo que ni siquiera había hecho.

"Lo siento", me disculpé y respiré hondo. "No sé lo que está pasando conmigo."

"Está bien, pero por favor no llores, porque eso es lo último que quería que sucediera", su voz se
suavizó de nuevo y asentí suavemente. Sabía lo que ella quería que sucediera, y ahora que estaba
segura de que no había salido con otra persona, no había razón para que no lo hiciéramos.
Limpiando las últimas gotas saladas de mi cara, traté de volver al estado de ánimo adecuado por
así decirlo.

"Te diré algo", Lauren habló. "¿Por qué no llamamos servicio a la habitación, puedes pedir lo que
quieras para comer y vemos una película?"

Mis ojos se abrieron cuando escuché su propuesta. ¿No se suponía que teníamos que tener sexo
como amigas con beneficios? Ese era el punto, ¿No?

"Pero...eso no es a lo que has venido", le dije en un susurro y llena de sorpresa. Lauren sonrió
suavemente y se inclinó. Sus labios besaron tiernamente los míos, haciendo que mi corazón se
agitara una vez más. Fue suave y rápido pero absolutamente significativo para mí.

"Así que, ¿Qué quieres comer?" se sentó y de repente sentí frío sin su cálido cuerpo descansando
sobre el mío.

"No lo sé. Simplemente pide lo que quieras", le contesté todavía asombrada por su cambio de
planes.

270
"Está bien, entonces ¿Por qué no eliges una película mientras yo los llamo? El control remoto está
ahí, pero no encargues ninguna porno en mi tarjeta de crédito", incluso Lauren bromeó y se bajó
de la cama. Asentí con la cabeza para mostrar que estaba de acuerdo antes de que ella llamara
para pedir la cena.

No estaba segura de cómo sucedió, pero terminamos comiendo un poco de pasta, o yo lo hice
porque Lauren dijo que no tenía hambre, y ahora estábamos acurrucadas en la cama viendo un
documental sobre animales. Era la única cosa en la televisión que no estaba en francés. Mi
atención no estaba en la película. Escuché la respiración constante de la chica mayor, mientras mi
cabeza descansaba sobre su pecho. Su brazo estaba envuelto alrededor de mí, y sus caricias
suaves en mi antebrazo me estaban causando escalofríos constantes.

Este no era el resultado que había planeado, ni que esperaba. La habitación estaba a oscuras y
sólo estaba alumbrada por la pantalla del televisor. Ella no había dicho nada en mucho rato, y me
pregunté si se había quedado dormida. Había sido un largo día después de todo.

"¿Lauren? ¿Estás despierta?", le susurré con cuidado.

"Sí", respondió al igual de bajo y mi corazón comenzó a bombear más rápido de nuevo. Levanté la
cabeza de su pecho y me encontré con su mirada. Ella sonrió suavemente y sentí como si
estuviéramos en la categoría Sub-17 en el campamento de entrenamiento. "¿Quieres dormir?",
preguntó y negué con la cabeza ligeramente.

"No, esa es la última cosa que quiero hacer en este momento", le respondí con honestidad y la vi
levantar las cejas. Acercándome, me mojé los labios porque así no iban a estar agrietados cuando
me reuní con los de ella. Nuestras bocas persistentes contra el uno al otro por un momento dulce,
separé mis labios y apliqué más presión para profundizar el beso. La mano de Lauren agarró mi
brazo con más fuerza, y no podía negar que quería llevar a cabo el propósito inicial de nuestro
acuerdo.

Me ajusté ligeramente sentándome a horcajadas en el regazo de la chica mayor sin romper


nuestro beso.

"Camila", jadeó con voz temblorosa. "¿Estás segura?" la otra morena buscó aceptación para ir más
allá, y no podía culparla después de toda la confusión que la debo haber hecho pasar.

"Sí", le respondí de forma sencilla pero honesta antes de continuar nuestro beso. Había algo en la
forma que Lauren me besaba, que hizo de todo mi cuerpo un cosquilleo. Era lento y tan sensual,
que quería arrancarle la ropa, pero también nunca detenerme al mismo tiempo. Tenía la cabeza
inclinada levemente mientras sus labios rojos capturaban los míos. Cada movimiento parecía
experto y tenía mi cabeza dando vueltas. Ella se burlaba de mí cepillando su lengua en mi labio
inferior, y cuando trataba de encontrarme con la suya, ella se alejaba para crear más tensión.

No estaba segura de cuánta tensión podría soportar en este punto. No era un secreto, que ella era
experta en los juegos previos. Y eso era definitivamente nuevo para mí. Pero toda la tensión

271
acumulada de nuestros encuentros anteriores tenía que explotar. Quería que eso sucediera tarde
o temprano. Mis caderas se movían contra las de ella sin que me diera cuenta. Todo lo que sentía,
eran sus manos acariciando arriba y abajo por mi espina dorsal en un ritmo desesperadamente
lento que coincidía con sus besos.

La idea de decirle que dejara de burlarse cruzó por mi mente. Sin embargo, mi cerebro se redujo a
papilla cuando Lauren comenzó a besar mi cuello, deslizando sus manos debajo de mi camiseta.
Liberando inmediatamente un gemido tranquila, esta vez no me avergoncé. Tuve que aceptar el
hecho de que estaba disfrutando de su trabajo y mucho, ¿Por qué no demostrárselo? Sus dientes
rasparon mi cuello antes de que su lengua trazara la irritada piel con dulzura. La succión suave en
mis puntos más sensibles me hizo suprimir desesperadamente un gemido más fuerte. Los sonidos
ahogados parecían motivarla aún más sin embargo.

Finalmente levantó mi camiseta y con mucho gusto me la quité. No esperé y le quité la suya
también. Lauren estaba inclinándose, y yo sabía que quería continuar con su reclamo en la parte
superior de mi cuerpo, pero yo la anhelaba más de lo que había anhelado a cualquier otra
persona. Así llegué alrededor de su torso y desabroché el sujetador. El tejido negro se unió a
nuestras camisetas en el suelo.

Empujando suavemente su espalda en la cama, quería tomar un poco de control y empecé a


acariciar sus pechos suaves. Mis labios trataron de emular lo que ella había hecho en mi cuello y
sentí como se retorcía debajo de mí. Me gustó la idea de que probablemente no había esperado
que me hiciera cargo. Eso alimentó mi fuego. Tomando uno de sus pechos, me gustó la forma en
que eran más grandes que los míos, pero eran perfectos proporcionalmente para su cuerpo.
Sintiendo su excitación, fui más allá y besé el camino por el centro de la parte superior de su
cuerpo.

Mis manos se enredaron en sus vaqueros y logré abrirlos. Ella levantó sus caderas del colchón y se
los quité junto con sus calcetines. Su risa mientras lo hice hizo que mi corazón saltara en mi pecho.
Eso me aseguró que quería probar algo nuevo. La centrocampista se sentó, ahuecando mi cara con
ambas manos en un beso apasionado, pero yo tenía otros planes. Colando mi mano en su pecho,
la empujé hacia abajo y vi su expresión de sorpresa.

Tragué ligeramente, pero luego decidí seguir por su cuerpo. Sus ojos se abrieron y no pude evitar
sonreír. Por alguna razón, no estaba nerviosa en absoluto. Sabía que ella era la persona con la que
quería compartir este tipo de intimidad, y quité la última pieza de ropa que llevaba. Besando el
interior de sus muslos, su piel era tan sedosa como el resto, y disfruté como sus piernas temblaron
como respuesta.

"Camila...no tienes que hacerlo", la voz de Lauren negó con excitación, y eso fue el último
empujón que necesitaba. En lugar de responder, di un suave beso en la parte de su cuerpo más
íntima.

272
"Oh Dios", Lauren suspiró y me sorprendió la forma en que ya estaba en el límite. Al parecer, yo no
era la única que había estado tratando con un poco de privación.

Aunque no tenía la experiencia en la realización de un acto tan íntimo, claramente recordaba lo


que Lauren había hecho en New York, y traté de hacer lo que me había gustado. Empecé lento, y
me dejé sentirme cómoda al besar la zona recién explorada. Sus fuertes reacciones de jadeos y
agarrando las sábanas eran increíblemente gratificante. Ella tomó una de mis manos y entrelazó
nuestros dedos antes de comprimirlos en el colchón.

Yendo un paso más allá, cepillé sus pliegues húmedos con mi lengua. Lauren soltó un gemido
desde el fondo de su garganta, y echó la cabeza hacia atrás. Repetí mi movimiento, usando más
presión y un ritmo más rápido. Su mano libre vagó a mi pelo. Comenzó a acariciarlo suavemente,
pero se convirtió más en un intento desesperado con el tiempo.

Probablemente no se dio cuenta, pero su mano sobre mi cabeza me guió a los lugares correctos.
No fue contundente y presumiblemente subconsciente en su extremo. Aprecié cada instrucción o
ayuda, y seguí su guía. Para mi sorpresa, en realidad me gustó mucho. Nunca había sido muy
dominante, y en cierta manera estaba siendo sumisa, pero estaba más activa que de costumbre.
La recompensa, en la forma de verla llegar, valió la pena.

Nunca hubiera esperado que sucediera tan pronto, pero el cuerpo de Lauren estalló en unos
graves espasmos. Ella apretó los dedos entrelazados más fuerte que antes. Abrí los ojos para ver a
mi compañera de equipo con la respiración inestable, y todavía temblando de lujuria.

"Oh...Dios mío", la más vieja se quedó sin aliento y miró hacia abajo para encontrarse con mi
mirada. "Ven aquí", jadeó y me levantó. Nuestros labios se encontraron uno al otro, y sentí una
fina capa de sudor en su cuerpo al instalarme en la parte superior de ella. Estaba sin aliento, y dejé
que se calmara, intercambiando besos suaves y ligeros toques en el ínterin.

"Eso fue increíble", ella me felicitó y me hizo sonrojar furiosamente en respuesta. "Pero ahora es
mi turno", la de ojos verdes añadió seductoramente y me puso en mi espalda.

Haber ido primero fue una bendición. Ahora tenía la oportunidad de estar más relajada y sin
presiones de tener que seguirla. Lauren se cernía sobre mí, y sentía como si estuviera tratando de
hipnotizarme. Tal vez lo estaba haciendo. Los orbes esmeraldas me miraban como si yo fuera su
presa, a punto de ser devorada. Mis propios sentimientos de lujuria regresaron rápidamente
simplemente por la forma en que me miraba. Tragué saliva antes de que ella comenzara a besar
mi cuello.

Su lengua trazó toda la longitud de mi cuello lo que me estaba volviendo loca. Para empeorar las
cosas, la otra chica había presionado su cuerpo tan fuertemente contra el mío que yo era capaz de
sentir cada centímetro de nuestros cuerpos tocándose. La pálida piel de mi compañera de equipo
se sentía caliente, y un poco sudorosa, pero no de una manera asquerosa. De repente mordió mi
cuello, y sabía que dejaría una marca. Gracias a Dios, no sería sospechoso si llevaba un cuello de
tortuga y bufandas la próxima semana - las que necesitaría.

273
Lauren me mordió varias veces después, y chupó con ferocidad mi piel casi con dolor. Estaba cerca
de sacarle su cabello. Mis manos se enredaron en las hebras oscuras, antes de que usara una para
agarrar su hombro. Necesitaba más. La estudiante universitaria tuvo misericordia de mí, y me
quitó el sujetador por lo menos. No perdió tiempo antes de avanzar hacia abajo, dedicando toda
su atención a mi pecho expuesto. Sus dedos apenas rozaban mi estómago, dando vueltas
alrededor de mi ombligo, cuando inesperadamente chupó mi pezón.

Mi espalda se arqueó al instante, y sentí su lengua vacilante contra el capullo endurecido en el


calor de su boca. Ahora, ¡Estaba realmente preocupada de arrancarle el pelo! La espera me estaba
matando.

"Lauren...no puedo", odiaba mostrar lo necesitada que estaba, pero no podía aguantar más. "Por
favor."

Movió su mano más abajo. Hábilmente desabrochando, y luego bajando el cierre de mis
pantalones, asumí que los sacaría. Pero deslizó su mano dentro sin tomarse la molestia de perder
más tiempo. Por lo cual estaba agradecida. Sus dedos viajaron en el especio confinado,
encontrando su destino. La palpitación entre mis piernas era insoportable, y sabía que no iba a
durar mucho.

Tan pronto como su dedo medio corrió arriba y abajo por la tela de mi ropa interior, casi lo perdí.
Las dos nos dimos cuenta de la mancha de humedad en ellos, y mis mejillas se encendieron en una
profunda sombra roja.

"Wow", comentó Lauren entre medio todavía besando mis pechos.

"Lauren", gemí sin querer y sentí mis piernas temblar. Una ola de calor incomparable se hizo cargo
y todo era borroso. Mis caderas se sacudieron hacia arriba, y todo mi cuerpo se estremecía como
nunca antes. Tal vez fue era la espera que conducía a ella, o la privación de antes, pero el pináculo
de lujuria era el más intenso. Se sentía como si me hubiera desmayado por un momento, antes de
sentir a la belleza de pelo oscuro besarme en los labios.

"Jesucristo", Lauren sonrió después de dejar unos suaves besos en mi mejilla. "¿Estás bien?", casi
rió, pero sonaba un poco preocupada en realidad.

"¿Eso crees?" yo jadeaba y la vi sonreír.

"Bien, porque no he terminado todavía", respondió y apenas me estaba recuperándome cuando


quitó el resto de mi ropa. La vi establecerse entre mis piernas, y me mordí el labio inferior por la
visual. Esos ojos verdes serían mi muerte. Al ver cuán hinchado sus labios estaban, me tenían
temblando en este momento.

La más vieja empezó a dibujar círculos en mi muslo interno, utilizando sólo la punta de la lengua,
por supuesto. Cuando estuvo a punto de llegar a mi centro, saltó mi parte más íntima, y se fue
hacia el otro muslo. Habiendo llegado a mi clímax, eso debería haber sido suficiente, pero de

274
alguna manera todavía estaba en la cima. Lauren mordió la fina piel de mi muslo. El pequeño dolor
causó algo sorprendentemente excitante. Una mordedura-marca en mi muslo era definitivamente
nuevo y tentador.

Besando con dulzura la piel de al medio, me retorcí ante la anticipación y cometí el error de mirar
hacia abajo. Encontrándome con los ojos verdes llenos de deseo que tenían mis niveles de lujuria
casi carnal por las nubes. No pude seguir el ritmo de nuestro contacto visual por mucho tiempo.
Mis ojos su pusieron en la parte de atrás de mi cabeza cuando Lauren movió el músculo liso, junto
a mi centro de hormigueo. Me había ido una vez más. Dondequiera que ella había aprendido a
hacer eso, no me importaba. Todo lo que quería era más.

Ella pareció entender y siguió su camino en un ritmo constante, pero lento lo cual me frustraba
más allá de la creencia. Agarrando su pelo de nuevo, no había manera de que pudiera detenerse
por mucho tiempo. Mi respiración se enganchó en la parte superior de mi garganta, como Lauren
recubrió su lengua con su propia saliva, y lo distribuyó por todos mis pliegues ya húmedos.

"Oh Dios mío", exhalé con una mezcla de lujuria y vergüenza, ya que lo estaba disfrutando mucho.
El par de labios dotados se separaron, y lo siguiente que supe, fue su lengua rodeando mi entrada.
Jesús, ¡Ella no estaba jugando esta noche! No pasó mucho tiempo hasta que el músculo fuerte
había entrado en mí, y ahogué un grito con mi mano. Eso fue todo. Sentí que la otra ola me
aplastaba, y me llevó a un lugar que no sabía que existía. Las manos de Lauren se aferraron a mis
piernas que temblaban violentamente.

Resoplando y jadeando, nunca me había sentido tan agotada cuando ni siquiera estaba haciendo
todo el trabajo. Mis ojos se abrieron cuando me di cuenta que la otra chica no estaba rendida. Una
vez más, no había tiempo para recuperarse. Me di cuenta que Lauren estaba creando
continuamente ruidos obscenos que sonaban casi como sorber. Ese sólo pensamiento me hizo
sonrojar. En realidad escucharla, estaba por encima y más allá de lo que jamás hubiera esperado
experimentar.

Pero eso no fue suficiente. Volvió a colocar su lengua con dos dedos, hundiéndose fácilmente en
mi interior y me hizo cuestionarme si iba a sobrevivir esta noche. Tocando hábilmente los lugares
correctos con sus dedos, ella se encrespaba hacia arriba, y comenzó a chupar el bulto sensible de
nervios que me tuvo chillando al instante-

"!Mierda!", exclamé más fuerte que antes, y cogí las sábanas en la desesperación. Su ritmo se
aceleró demasiado lento para mi gusto, pero finalmente empujó sus dedos a un ritmo perfecto
para hacerme llegar a otro clímax. Uno más fuerte aún. Mi cuerpo no era de mi propiedad más. O
al menos eso parecía. No tenía control sobre mis reacciones. Lauren movió sus dedos muy
lentamente para dejarme ir en mi orgasmo pero estaba apenas consciente.

275
Retrocediendo ligeramente, sentí que la experimentada de nosotras besó mi estómago e hizo su
camino por mi cuerpo. Abrí mis ojos parar encontrarla mirándome con un cantidad insondable de
ternura en sus ojos una vez más. Su mano limpió el sudor de mi frente y mejillas, cuando me di
cuenta que era la única cubierta de la capa pegajosa de sudor ahora. A ella no pareció importarle y
descansó su cuerpo perfectamente tonificado sobre el mío. El calor que irradiaba su piel era una
sensación maravillosa la que sentía.

Lauren sacudió un poco el pelo de mi cara y reunió nuestros labios en un suave beso. Me
emocioné. Esto era lo que yo quería. El pensamiento de nuestra noche en New York me asustó. ¿Y
si ella quería que me fuera ahora que ya lo habíamos hecho? Al igual cuando había salido de mi
habitación del hotel esa noche. Al menos no me hizo sentir no deseada por ahora. Siguió
besándome suavemente, acariciando mi cuerpo con sus dedos y sosteniéndome por mi cintura.

El tiempo pasaba y no tenía ni idea de cuánto fue hasta que ella se apartó. Oh Dios, ¡Quería
decirlo! ¡Te amo, idiota! Pero sabía que no podía. Todavía no.

Mi compañera de equipo de USWNT se sentó y tenía miedo de me pidiera que me fuera. En


cambio, ella cogió las mantas y las puso sobre nosotras antes de colocarse a mi lado. Mi corazón
palpitaba fuera de control cuando su voz ronca preguntó: "¿Es contra las reglas si duermes aquí?"

Había un nudo en mi garganta del tamaño de un balón de fútbol. ¿Por qué? ¿Por qué me pregunta
eso? ¿No era obvio? ¡¿No se le pasaba por la mente que estaba enamorada de su trasero ciego?!

"Lo siento, eso fue fuera de contexto-" dijo claramente insegura Lauren después de que yo no
había dicho nada durante un rato.

"No, no", salté a toda prisa. "Creo que eso está perfectamente dentro de las reglas", le respondí y
me di cuenta de la sonrisa contenida en su rostro.

"Bien", susurró.

"Sí", respiré y admiré sus rasgos faciales impecables que se mostraban frente a mí. Ambas junto a
la otra, y mirándonos, no me di cuenta de lo cerca que estábamos. La intimidad de este momento
era posiblemente mayor que el sexo de antes. Simplemente mirándonos a los ojos tenía mi
corazón cerca de una explosión.

"¿Cuál es el plan para mañana?", preguntó en un susurro. De repente, mi corazón no estaba cerca
de explotar, si no de romperse. La comprensión de que ella se iba a ir mañana me golpeó como
una tonelada de ladrillos. Se suponía que debía estar agradecida de lo que había logrado en dos
días, pero ahora no podía negar que deseaba que se quedara más tiempo - o incluso para siempre
si tuviera que decir algo.

"Bueno Lara está emocionada por pasar tiempo contigo, pero puedes elegir la actividad que ella
dijo", repetí lo que mi hija había dicho y sonrió ante el acuerdo.

276
"Esto puede sonar extraño, pero ¿Tiene permitido ir a la pista de hielo?" Lauren preguntó y me
sorprendió escuchar eso.

"Oh, ahora quieres ir allí", me burlé ligeramente.

"Fue muy divertido", respondió en voz baja y me dio otra de las sonrisas suaves que me mataban.

"Ella casi tiene cuatro, así que creo podrías intentarlo. No estoy segura de que en realidad pueda
patinar, pero si ella quiere, tiene permitido hacer eso desde los tres años" me abstuve de la burla
en este momento.

"Está bien, entonces le preguntaré", ella tomó una respiración profunda.

"Hablando de eso", de mala gana me senté. "Tengo que mandarle un mensaje de texto a Dinah
para decirle que no voy a volver a casa. No quiero que Lara se preocupe."

Busqué mis jeans, porque mi teléfono estaba en el bolsillo. Encontrando la prenda en el extremo
de la cama, me incliné por lo que estaba en cuatro patas sin darme cuenta de que todavía estaba
desnuda, hasta que Lauren me golpeó por detrás a la ligera.

"!Lauren!" la regañé y me senté para oírla reír.

"¿Qué? Tu trasero es infame y no me pude contener", ella sonrió de la manera más astuta posible
mientras me reuní a ella bajo las sábanas.

"No es como si el tuyo fuera pequeño", me burlé tratando de ocultar el hecho de que estaba
nerviosa y le escribí un mensaje a Dinah.

"Aunque el tuyo es más caliente", Lauren siguió su camino y le di una palmada en el hombro.

"!Ay!"

"Deja de hablar de mi trasero, por favor", no pude reprimir una risita. "No soy un pedazo de carne,
sabes."

"Sólo te estoy dando un cumplido", argumentó, pero mi teléfono sonó y vi la respuesta de Dinah.

Dinah: Está todo bien, diviértete ;) Lara ya está dormida. Sigue haciendo lo tuyo. ¡Todo lo
relacionado con tijeras en el campo debe pagar!

"¿Qué?" Lauren preguntó divertida porque mis mejillas estaban probablemente en fuego.

"Nada", puse mi teléfono lejos y volví a mi lado, frente a ella.

"Así que acerca de tu trasero", Lauren seguía bromeando y quise golpear su brazo, pero esta vez
ella me agarró la muñeca.

277
"Eres tan violenta, bebé", dijo, y mi corazón se detuvo. Bebé. Al parecer, no fui la única que se dio
cuenta, porque sus parpados se agitaron por un momento. El ligero pánico en su expresión facial
dura me hizo saber que tenía que tomar las cosas con calma. Si estaba tan nerviosa acerca de un
apodo, entonces no podía pensar en una confesión de amor. Sin embargo, quería que ella
estuviera tranquila y cómoda, así los cosas no serían incómodas. Por lo tanto fingí estar
imperturbable, cuando en realidad quería saltar de alegría.

"Si dejas de tomarme el pelo así, no tendría que ser violenta", respondí relativamente normal.

"Oh, quiero algo físico", ella volvió a su táctica habitual de ser coqueta.

"Necesito un poco de descanso, cariño", respondí con ese apodo, pero lo dije casualmente para
que ella no se sintiera extraña, ojalá.

"¿Por cuánto tiempo estamos hablando? ¿10 minutos, 30 minutos?" sus labios formaron otra
sonrisa.

"Eres un caso aparte", sacudí mi cabeza, pero reí suavemente.

"Ugh, no puedo mantener mis manos lejos de ti", Lauren suspiró lo que sonaba como una
verdadera frustración, pero también de placer. Ella se acercó más, así había sólo unas pulgadas de
distancia ente nosotras, deslizó una de sus piernas tonificadas entre las mías, y me recordó al
mensaje de Dinah por alguna razón. Me sonrojé por millonésima vez, a pesar de que el gesto de
Lauren no era necesariamente sexual porque aparentemente buscó cercanía pura. Su brazo ahora
estaba envuelto alrededor de mi cintura, y podía sentir sus dedos dibujando patrones sobre mi
espalda baja.

"Abrazarnos está bien, ¿Verdad?" la chica de mis sueños susurró de forma insegura, antes que me
inclinara y besara los labios suaves, una vez más para confirmar. Era increíble lo cómoda que me
sentía junto a ella. Por lo general, no era una persona de abrazos, o incluso una persona sexual,
pero quería pasar los próximos días en la cama con ella, si pudiera. Oír su respiración, oler ese
aroma característico de su champú, sentir sus brazos alrededor de mí, y como besaba mis labios
con todo el cariño que tenía para ofrecerme.

"Eres un buen besador", murmuré contra sus labios y era completamente cierto.

"Tú también lo eres", respondió en un susurró, antes de atrapar mis labios entre los de ella otra
vez. Apartándose, los ojos verdes miraron hacia abajo y de repente se abrieron. "Mierda, tu
cuello", Lauren se quedó sin aliento.

"¿Qué pasa con él?" me alarmé al principio.

"Hay unas graves marcas que hay que cubrir", ella rozó las mordeduras con el dedo y parecía tan
engreída.

"Me lo imaginé cuando empezaste a comerme", le lancé una mirada de desaprobación juguetona.

278
"Oh, ¿En serio? No te oí quejarte", se rió y luego echó la cabeza hacia atrás. "Oh Lauren...Oh Dios",
ella imitó mis gemidos de una manera totalmente exagerada, antes de que pusiera mi mano en su
boca para que dejara de burlarse de mí.

"Cállate, ¡Eres imposible!", estaba riendo, cuando me quería morir de vergüenza al mismo tiempo.
Esta vez, ella mordió mi mano cubriendo su boca. "!Ay! ¿Quién la violenta ahora?"

Ella agarró mi muñeca y se liberó con facilidad, continuando su acto de mis gemidos. Se convirtió
en un ataque de risa en ambos extremos, mientras que luchábamos por el sartén por el mango,
literalmente. De alguna manera, terminé a horcajadas en sus caderas, y tenía sus ambas muñecas
en mis manos ahora. Se veía tan adorable mientras se reía incontrolablemente por debajo de mí.
Mi adoración provocó un momento fuera de foco, y Lauren aprovechó la oportunidad.

La liberación de sus manos, detuvo la batalla, pero tomó mi cara y me besó. Literalmente riendo
en el beso sentía mi corazón palpitar con más fuerza que antes. Mis brazos se cruzaron alrededor
de su cintura. Suspirando profundamente en placer, repetí su gesto de antes, y le acaricie el cuello
ahora. Ella puso su brazo alrededor de mí también, y simplemente me abrazó. Se sentía de otro
mundo y nada como la perfección.

Si tuviera la capacidad de crear el momento perfecto, habría sido éste.

No estaba segura de cuánto tiempo pasó, pero permanecí en ese abrazo íntimo por un tiempo
antes de que Lauren se acostara, manteniendo nuestra posición, por lo que yo estaba
descansando cómodamente en su pecho.

"¿Está bien si nos vamos a dormir? Estoy derrotada", Lauren admitió, pero eso era comprensible
después de un largo día.

"Por supuesto", respiré y levanté las cobijas para que nos calentáramos. Bueno, el cuerpo de
Lauren era muy cálido, pero la habitación no lo era necesariamente. Lo último que quería era que
cualquiera de nosotras se enfermara.

"Buenas noches", dijo la voz baja suavemente y me besó en la cien. Ella había hecho esto en el
campo de entrenamiento, e incluso después, cuando me estaba consolando. El regreso de ese
gesto me hizo sonreír ampliamente.

"Buenas noches", susurré y la abracé aún más cerca. Inhalando profundamente, por un lado,
quería dormir porque estaba cansada. Por otro lado, no quería dormir porque ella se iría al día
siguiente.

Tratando de evitar el pensamiento, me dije que debía concentrarme en lo positivo. Este primer día
había sido absolutamente perfecto. Otro día como éste, y tal vez haríamos un poco más de
progreso.

Por ahora, estaba disfrutando de nuestros cuerpos en reposo y en realidad de pasar la noche
juntas.

279
Capitulo 18
CONTENIDO EXPLÍCITO.

Lauren's POV

La habitación todavía estaba relativamente oscura debido a las cortinas cerradas. Apenas podía
ver, pero fue suficiente para admirar a la morena a mi lado. Camila estaba durmiendo
pacíficamente, su respiración constante, sus características faciales relajadas y todo en ella parecía
absolutamente impecable. Parecía más joven - mucho más joven de lo habitual. Se sentía como
estar de vuelta al equipo Sub-17 con ella porque realmente se veía de dieciséis en este momento.

Estaba despierta desde hace más de media hora, únicamente mirando a la más joven y
reproduciendo lo que había sucedido el día anterior. Una parte de mí todavía no podía creer que
había volado a París para verla. Parecía una idea loca, teniendo en cuenta que no éramos una
pareja real. Recordando mi shock inicial cuando Camila había propuesto ser informales en ello, no
había sido capaz de resistirme a esa oferta. No se podía negar que teníamos una cierta atracción
entre sí. Pero estaba más que segura, que yo no estaba interesada en tener una relación con nadie
en este momento.

El dolor de lo que había sucedido la última vez que había estado en París todavía estaba muy
presente. La perdoné, pero nunca olvidaría aquel desengaño. No revivirlo era mi nueva prioridad.
Traté lo mejor que pude en tener cuidado con mis acciones o palabras, pero a veces tuve un desliz.
Era tan fácil ser casual, y cariñosa con ella, de una manera que probablemente no estaba dentro
de los reinos de una disposición normal como amigas con derechos. Sin embargo, nada acerca de
nosotras era normal.

Mientras que Camila estuviera bien con la forma en que las cosas eran; no quería preocuparme
demasiado. Podríamos disfrutar de nuestro tiempo juntas, pero no dejar que los compromisos o
problemas de desconfianza se interpusieran en el camino. Sonaba casi demasiado bueno para ser
verdad. Pero yo no la había presionado para nada, y le había preguntado en repetidas ocasiones si
estaba bien con ello. En este punto, era su responsabilidad, así que, tenía que confiar en su juicio
de que las cosas no podrían ir mal.

Hasta ahora todo ha ido bien; excepto la más joven de nosotras llorando anoche. Todavía no
estaba segura de por qué había estado tan emocional. Me asustaba pensar que no estaba
preparada para esto, después de todo. Ser cuidadosa y considerada era todo lo que podía hacer,
sin embargo. Por supuesto, no estaba completamente desinteresada. No era como si estuviera
haciendo esto sólo por ella. Mis propios sentimientos hacia ella no se habían ido. Y acepté que
posiblemente nunca desaparecerían completamente. Actuando sobre ellos fue tan satisfactorio
para mí como lo fue para ella, sobre todo, sin ataduras.

280
La noche anterior había sido absolutamente increíble. Después de nuestro primer encuentro
sexual en New York, me había convencido de que nada sería mejor, pero me había equivocado.
¡Tanto! La memoria fresca de sentir a Camila temblar, oyendo su gemido, verla desmoronarse en
la lujuria era casi demasiado para manejar. Nuestra química no era sólo en el campo.

No pude contenerme, pero muy suavemente acaricié su hombro al descubierto. Su piel era cálida
y sedosa. Sonriendo dulcemente, vi todas las marcas de mordedura en su cuello. Ella tendría
dificultades para cubrirlas, pero no había sido capaz de detenerme anoche. Una parte de mí quería
inclinarse y besar la piel magullada pero permanecí inmóvil, sólo acariciando suavemente con mis
dedos contra su clavícula.

Unos pocos minutos pasaron antes de que finalmente decidiera salir de la cama. No era tan
temprano de todos modos. Cogí algo de ropa nueva de mi bolso y me dirigí a la ducha. El agua
caliente se sintió celestial y definitivamente estaba despierta. Empecé a vestirme y a ponerme algo
de maquillaje sutil cuando oí que la puerta se abría. Mirando aún el gran espejo del baño, vi el
reflejo de Camila de pie en la puerta. Ella sólo estaba cubierta con las sábanas blancas de la cama
lo que parecía que estuviera vistiendo una toga.

"Lo siento, ¿Te desperté?", le pregunté inmediatamente y me di vuelta para mirarla.

"Tenía que levantarme de todos modos, es bueno que tú ya lo hayas hecho", respondió con un
bostezo leve y se rascó la cabeza. Se veía adorable y aún mucho más joven que sentí mi corazón
revolotear un poco.

"Sí, probablemente deberíamos volver", estuve de acuerdo. "Estoy segura de que Lara está
esperando con impaciencia", agregué con una sonrisa y vi a Camila haciendo lo mismo. "Vienes
conmigo y Lara, ¿Verdad?"

Los ojos marrones emanaban genuina sorpresa después de mis palabras y no estaba segura de por
qué. ¿Fue un error de mi parte preguntar?

"No realmente", dijo en voz baja y sonaba arrepentida.

"Tengo un juego hoy y por eso te propuse que pasáramos el rato el primer día. Supuse que querías
estar a solas con Lara."

"Oh" asentí con la cabeza y traté de sonar indiferente. "Eso tiene sentido. No sabía que tenías un
juego, pero eso fue un buen plan."

"¿Ya terminaste con la ducha?", preguntó completamente fuera de contexto.

"Sí, sólo me cepillaré mi pelo ahora", le contesté mientras ella entró al baño. Mi mirada la siguió, y
sentí mis ojos abrirse de par en par como la más joven de repente dejó caer las sábanas, dejando
al descubierto su cuerpo completamente desnudo, aunque solo fuera su parte trasera, y luego
entró a la ducha. Tragué saliva, pero luego sonreí para mis adentros. Jesús, era tan jodidamente

281
atractiva. La tentación de unirme a ella en la ducha estaba allí, pero me decidí a centrarme en
secar mi pelo en su lugar.

Sin embargo, la silueta de la morena detrás del vidrio esmerilado con vapor era difícil de ignorar.
Justo cuando terminé de arreglar mi pelo, el agua de la ducha se detuvo.

"¿Lauren? ¿Me puedes pasar una toalla?" Camila se asomó de la ducha con una sonrisa y le
correspondí.

"Claro", me dirigí hacia el otro lado del gran cuarto del baño antes de caminar hacia ella,
entregándole el tejido esponjoso.

"Te ves bien", la de ojos marrones piropeó antes de morderse el labio inferior, y no me pude
aguantar, pero me incliné. Ella cerró los ojos tan pronto como me vio hacerlo y nuestros labios se
encontraron un segundo después. Pude probar un poco de agua en sus labios, pero no nos
importó en absoluto. Era suave y dulce, pero me dejó con ganas de más mientras ella se alejaba.

"Buenos días", susurró con una sonrisa aún más grande.

"Buenos días", respiré, intercambiando las palabras que no habíamos intercambiado antes.

Camila envolvió la toalla alrededor de su cuerpo y luego salió de la ducha. Ya que estaba lista y
preparada para ir, me fui al otro cuarto y comencé a empacar mis cosas. Después de pasar el día
con Lara, tendría que volver y luego coger mi vuelo de la tarde. Lo mejor era hacerlo todo ahora,
así tendría más tiempo para la pequeña.

Tan pronto como Camila estuvo lista para ir, me reuní con ella en la puerta y vi las marcas de
mordeduras en su cuello otra vez.

"Aquí", le dije, y me quite la bufanda para ponerla alrededor de su cuello. "La necesitas más que
yo", agregué con una sonrisa.

"Eso es lo menos que puedes hacer después de ser la responsable", bromeó Camila y quería besar
esa cara sonriente. Oh qué demonios, teníamos permitido besarnos. Ser la iniciadora no era nuevo
para mí a pesar de que ella había sido la que empezó con el acuerdo en primer lugar; y eso nos
lleva a la noche anterior. Así que no me preocupe por cruzar una línea a menos que ella me dijera
que no lo hiciera.

Capturando sus labios entre los míos, la oí gemir de placer y envolví mis brazos alrededor de su
cintura. Su menudo cuerpo contra el mío era familiar y emocionante aún. La centrocampista
izquierda devolvió el beso con pasión y profundicé el beso dejando que mi lengua se encontrara
con la de ella. Empujándola contra la pared con cuidado, me estaba empezando a olvidar que
debíamos irnos.

Pero oí el teléfono de Camila sonar y rompimos nuestro beso.

282
"Es Dinah", explicó y suspiró. "Realmente tenemos que irnos o de lo contrario voy a llegar tarde
para el juego."

"Está bien, entonces vamos", dije soltándola.

Lo último que quería era que ella se metiera en problemas. Asimismo, no podía esperar para
reunirme con su hija.

Dinah y Camila se habían ido al estadio por su juego, mientras que yo estaba ahora con Lara.
Estaba sosteniendo a la niña de tres años de edad, en mis brazos y caminamos por París durante
algún rato. Por supuesto, la había llevado al lugar donde servían panqueques primero. Ese era
nuestro pequeño ritual y me encantó tenerlo. Limpiándole constantemente la cara porque se
estaba manchando con jarabe de chocolate me tenía sonriendo hasta que mis mejillas
comenzaron a doler. Su entusiasmo por las cosas simples era contagioso.

El clima frío no me molestaba en absoluto, porque estaba sosteniendo el cuerpo pequeño entre
mis brazos. Eso por sí solo creó un poco de calor. El tiempo parecía volar antes de llegar a la pista
de hielo de ayer.

"¿Alguna vez has ido de patinaje sobre hielo?", le pregunté a la niña, quien estaba mirando
curiosamente a la gente sobre hielo.

"No", murmuró con incertidumbre.

"¿Quieres probar?" vi un poco de duda en sus ojos.

"No sé", susurró Lara y parecía un poco asustada. "¿Qué pasa si me caigo?"

"No lo harás porque voy a tomar tu mano todo el tiempo y te atraparé. Pero no tenemos que
hacerlo. Vamos a hacer otra cosa", le sugerí rápidamente porque no quería que ella hiciera algo a
lo que le tenía miedo.

"No, quiero probar", de repente se opuso. "Pero tienes que atraparme si me caigo."

"Lo haré, te lo prometo", sellé la promesa con un pequeño beso en la mejilla. "Sin embargo, ¿Estás
segura? Podemos hacer algo totalmente distinto si quieres."

"Parece divertido", ella mantuvo sus ojos en los patinadores y asentí suavemente.

Así que nos dirigimos a la pista de hielo y pedí prestado un par de patines para mí, y unos más
pequeños para Lara. Me había puestos los míos primero y ahora estaba arrodillada frente a la niña
de tres años de edad. Desatando los cordones de sus zapatos, sacándoselos y metiendo sus
pequeños pies en los patines se sentía tan natural. Estaba casi lista con los patines de hielo,
cuando oí la voz aguda decir algo que hizo que mi corazón se detuviera.

283
"¿Mami?"

Miré hacia arriba en estado de shock y me encontré con los orbes avellanas que pertenecían a la
niña que me llamó mami. Mi pulso estaba por las nubes, y había una mezcla de alegría y absoluto
pánico que me estaba superando.

"Panqueques", se corrigió a sí misma sin saber que me había dado un ataque al corazón.

"¿Sí, pequeña?" traté de sonar compuesta cuando mi mente estaba corriendo rampantemente
con las posibles razones por las que ella me había llamado así.

"¿Podemos hacer esto de nuevo mañana?"

"Tengo que irme a casa hoy, lo siento", dije sinceramente disculpándome y me encontré con sus
ojos.

"¿Por qué no puedes quedarte con mamá y yo?" ella siguió su camino y mi preocupación de que
podríamos estar confundiendo a Lara con nuestro acuerdo iba en aumento.

"Eso es difícil de explicar, pero vivo muy lejos y necesito de mucho tiempo para venir aquí. Es por
eso que no puedo venir a visitar tan a menudo. Sin embargo, vamos a vernos en los campos de
entrenamiento y juegos, si tu mami te lleva con ella", traté de darle algún tipo de consuelo. "Y
tienes a Dinah aquí. Ella es una muy buena amiga también y probablemente mucho más divertida
de lo que soy yo."

"Tía Dinah es divertida", Lara se rió y ese sonido me calentó el corazón ya. "Pero tú me haces muy
feliz", continuó y me emocionó escuchar esas palabras modestas pero significativas. "Y haces a
mami muy feliz. Cuando estás aquí ella siempre sonríe."

Me estremecí por la pequeña diciendo esas cosas. Su percepción era excepcional, y me sorprendió
escuchar cómo notaba los cambios en el estado de ánimo de Camila cuando yo estaba alrededor.
Era preocupante, halagador y un montón de otras emociones que no pude distinguir antes de
responder.

"Bueno, me haces muy feliz también. Y siempre seré tu amiga, ¿De acuerdo?" quería calmarla y la
vi asintiendo. Ella extendió sus brazos y entendí que quería un abrazo. Obviamente cumplí con su
deseo y envolví mi brazo alrededor de su pequeño cuerpo.

Al menos terminamos nuestra conversación en un buen punto y luego fuimos a tener un poco de
diversión.

Lara lo estaba haciendo excepcionalmente bien en el hielo. Yo le había instruido algunos


movimientos simples para que pudiera patinar un poco conmigo atrayéndola lentamente. Después
de un rato ella estaba radiante, riendo y riendo sin parar. Ese fue el mejor premio de todos. En un
momento me caí de trasero a propósito sólo para hacerla reír. La ruidosa niña de tres años,
chillando de risa, tenía a todo el mundo alrededor de nosotras mirándonos con cariño. Me di

284
cuenta de que probablemente estaban pensando que era mi hija. Me acordé de Lara llamándome
'Mami' antes, pero yo me había convencido en la idea de que se trató de un desliz, nada más.

Al salir de la pista de hielo, Lara se veía agotada y yo la llevaba entre mis brazos cuando habló.

"¿Podemos ir a ver a mami y Dinah al juego?"

Levanté una ceja y vi la mirada suplicante en sus ojos. ¿Cómo iba a decir 'No' ante eso? De esa
manera sería capaz de ver a Dinah y Camila en acción para el club parisino.

Sólo quedaban veinte minutos para el final, cuando Lara y yo llegamos al estadio. Me sorprendió
lo profesional que todo era. A pesar de que hacía frío, había un montón de gente mirando y tomé
asiento con Lara en mi regazo.

París tenía una ventaja de 1-0 contra Montpellier. Ver a Camila con la camiseta azul marino
definitivamente hizo valer la pena haber venido. Ella era una de las favoritas aquí también. Cada
vez que mostraba algunos trucos, la gente a mi alrededor aplaudía o jadeaba con admiración.
Algunas cosas nunca cambiarían. Y estaba orgullosa de que haya logrado mantener una carrera en
el extranjero. Sí, eso me había roto el corazón. Pero estaba feliz de verla tener éxito haciendo algo
que amaba.

Estaba reajustando la gorrita de Lara para asegurarme que no se congelara cuando la vi saludando.
Mirando hacia arriba, encontré a Camila quien nos había visto. Una rápida sonrisa apareció en sus
labios antes de que ella se centrara en el juego de nuevo. Mi corazón latió erráticamente en cosa
de segundos.

Tal vez era pura especulación, pero parecía que Camila se motivó aún más sabiendo que la
estábamos viendo. Ella estaba obligada a anotar y terminó haciéndolo cerca del final. Aplaudí
junto a todos los demás y Lara chilló con todos sus pulmones. Fue una manera perfecta para
terminar el día. La idea de irme me estaba pesando, sin embargo. No quería encariñarme pero no
podía negar que me gustaba a dónde estábamos por el momento.

Después de que el juego había terminado, Lara y yo fuimos autorizadas para ir a ver a las
jugadoras en el vestuario. La niña castaña clara corrió hacia su madre cuando entramos en el
interior del pasillo.

"Hola cariño, ¿Cómo estuvo tu día?" Camila saludó a su hija con un beso en los labios después de
agacharse.

"!Estuvo tan divertido! Lauren y yo fuimos de patinaje sobre hielo", la voz emocionada comenzó
como me acerqué a ella lentamente. "Y comimos panqueques antes de eso. ¡La próxima vez todas
tenemos que ir juntas!"

285
"Eso suena divertido. Sin embargo, te ves un poco congelada, cariño", la joven madre sonaba
preocupada. "Por qué no te vas dentro del vestuario, para calentarte un poco y te quedas con
Dinah hasta que te voy a buscar, ¿De acuerdo? Quiero hablar con Lauren solo por un momento."

"Sí, está bien", Lara asintió sin objeción y desapareció detrás de la puerta que Camila había
abierto. Escuché a todas las jugadoras saludar a la pequeña pero sus voces francesas disminuyeron
con el cierre de la puerta. Mis ojos se centraron en Camila y estaba curiosa por saber sobre qué
quería hablar conmigo. Estaba un poco nerviosa, pero mantuve la calma.

De repente, Camila me agarró la mano y me arrastró con ella. Abrió otra puerta del vestidor, vacío,
y me llevó dentro. Antes de que fuera capaz de pronunciar una sola palabra, sentí un par de
suaves labios chocando contra los míos. Necesité de un momento para recuperar la compostura,
pero luego decidí corresponder su afecto. Aunque no estaba segura de qué venía esto, me gustó
mucho la pasión de la joven.

"Bueno, hola a ti también", me quedé sin aliento con un sonrisa tomando un respiro.

"No hay tiempo para bromas", se mordió el labio inferior y me empujó hacia abajo, así quedé
sentada en uno de los bancos. Tragué saliva mientras ella se sentó sobre mí de inmediato y vi la
determinación en sus ojos. "Ya que te vas, creo que deberíamos utilizar el tiempo sabiamente",
agregó y sentí mi corazón rebotando en mi pecho. ¿Hablaba en serio?

"¿Quieres...'beneficiar' en este momento? ¿Aquí?" no pude ocultar mi asombro y noté sus mejillas
con rubor después de mis palabras.

"Considéralo mi regalo de despedida", ella dijo mucho más seductora ahora.

Sus manos ahuecaron mi cara y nos volvimos a besar. No podía dejar de sentirme emocionada por
su valor recién descubierto - y la racha dominante. Sin embargo, todavía quería tener la sartén por
el mango. Mordiendo su labio inferior, ella respiró pesadamente mientras mordí la piel delicada.
Por un segundo, estuve preocupada por rompérsela, pero no lo hice. Dulcemente dejando mi
lengua rastrear su labio hinchado ya tenía a la joven retorciéndose. Sus manos estaban agarrando
mi cuello desesperadamente como sus caderas se estaban moviendo contra las mías.

"Vete a la mierda", se escapó de mis labios cuando ella empujó sus caderas contra mi centro que
palpitaba con fuerza. "Eres tan jodidamente maravillosa", le susurré sinceramente pero llena de
lujuria. "Ya que yo soy la que se va, quiero ser yo la que te da un regalo de despedida", enfaticé en
un susurro apenas audible contra sus labios, y deslicé mi mano por debajo de la cintura de sus
pantalones cortos.

"Oh Dios mío", Camila echó la cabeza hacia atrás con el primer gemido cuando hice mi camino
hasta el lugar correcto. Empecé haciendo círculos sobre el nudo sensible que tenía chillando a la
chica. Su cuerpo se tensó ante la excitación. Usé mi mano libre para levantar su camiseta y
exponer su sujetador deportivo. Sería difícil de sacárselo, así que simplemente bajé la tela para
que sus pechos turgentes se mostraran, sin tener que quitárselo.

286
Me incliné e ignoré mi enfoque habitual de burlarme de ella por un rato. No teníamos mucho
tiempo y por lo tanto, estaba decidida a hacer esto rápido, pero eficaz. Encerrando el pezón con
mis labios, ella se retorció en mi regazo antes de que pasara mi lengua por el brote endurecido.
Apliqué más presión y chupé con fuerza. Repitiendo una y otra vez en ambas partes fue todo lo
que tuve que hacer para sentir la primera humedad de ahí abajo.

Extendiendo lentamente mis piernas, extendí las suyas con las mías ya que sus piernas me estaban
abrazando. Así, fui capaz de deslizar mi mano más abajo de sus bragas hasta que llegué a su
entrada. Sondeando suavemente con mi dedo medio, sus piernas temblaron de nuevo por la
espera. Como no quería perder tiempo, entré en el calor húmedo con dos dedos y escuché a la
otra chica respirar trabajosamente. Comenzando en un ritmo constante, aceleré gradualmente
escuchando su respiración transformarse en una serie de gemidos tranquilos.

Camila agarró la parte posterior de mi cabeza, y me quitó de su pecho para besarme. Su


respiración era tan inestable, sin embargo, no pudimos sostener un beso de verdad. Terminamos
inclinadas contra la frente de la otra. Tenerla básicamente gimiendo en silencio contra mi boca
era, lejos, la cosa más excitante hasta el momento. Sus párpados revoloteaban y sus ojos se
cerraron cuando me di cuenta que estaba cerca.

Decidí ir a un nivel superior y usé mi pulgar para frotar el nudo sensible en un movimiento circular
sin dejar que mis otros dos dedos dejaran de moverse.

"Yo...no puedo", la más joven jadeaba y metí mis dedos tan profundamente como me fue posible
para empujarla hacia el borde.

"Vente por mí, bebé", mi cabeza estaba nadando en una piscina de lujuria y solté lo que estaba
sintiendo gracias al calor del momento.

Un segundo después, la otra morena rompió en una serie de espasmos y suspiró con satisfacción
cuando estuvo lista. Todos sus músculos temblaron mientras la voz ronca jadeaba sin control. Vi
todas sus reacciones. Era tan increíblemente caliente verla así. Sus ojos firmemente cerrados; la
hermosa chica fue completamente superada por la lujuria y eso era difícil de pasar por alto.

Ella tragó con dificultad mientras yo retiré mi mano de sus pantalones cortos y le froté la espalda
en su lugar. Me encantó la forma intensa de sus pináculos de lujuria. Era obvio que necesitaba de
unos minutos para calmarse y besé su mejilla con cariño mientras ella seguía temblando
ligeramente en mis brazos. Su cabeza se inclinó por lo que fue capaz de darme un beso. Incluso sus
labios temblaban y no tuve ningún problema con el afecto suave; todo lo contrario.

La jugadora parisina respiró muy hondo y me miró, su mirada no era de anhelo ya pero si tierna y
casi insegura. Le sonreí para tranquilizarla y noté las comisuras de sus labios elevarse en
respuesta.

Su mano trazó el centro de mi torso y aterrizó en mis pantalones. Abrió el botón y bajó la
cremallera aunque realmente no esperaba nada a cambio.

287
"!¿MILA?!"

La voz de Dinah hizo eco fuera y ambas nos estremecimos.

"Hey, ¿Dónde estás?" la polinesia siguió su camino fuera y era obvio que teníamos que parar.

"Lo siento mu-", Camila quería disculparse pero apreté mi dedo índice sobre sus labios para
hacerla callar.

"No te atrevas", le dije con una sonrisa y no quería que se sintiera mal. Desde luego, yo no me
sentía mal. En su lugar di un último beso en sus labios y luego abroché mis vaqueros, así
podríamos reunirnos con Dinah y Lara fuera. Camila se ajustó su ropa, antes de salir del vestidor.

Habíamos llegado a la casa de las tres personas que estaban conmigo. Dinah caminaba adelante,
mientras que yo estaba sosteniendo la mano de Lara. Camila sostenía la otra. Ella estaba usando
nuestras manos para 'columpiarse' en vez de caminar. Ni a su madre ni a mi nos importó. Pero
llegó el momento de decir adiós.

Dinah abrió la puerta y Lara estaba tratando de tirarme hacia dentro cuando me detuve.

"Vamos arriba, así podemos jugar", sonrió ampliamente y odié esta parte.

"No puedo, ¿Recuerdas? Tengo que ir a casa", le dije con cuidado y vi su sonrisa desvanecerse
rápidamente.

"No, vamos arriba", su voz sonó casi enojada como nunca había escuchado antes. Comenzó a tirar
mi mano y sentí un nudo en la garganta mientras permanecí inmóvil.

"Cariño, Lauren tiene que irse, pero ya la veremos de nuevo pronto, ¿De acuerdo?", Camila
intervino suavemente.

"Noooo", Lara se quejó y las lágrimas ya estaban empezando a rodar por sus mejillas. Mi corazón
pesaba, y no me atreví a liberar mi mano de la de ella, a pesar de que probablemente debía
hacerlo.

"Lara, por favor", la joven madre le rogó a su hija que estaba más angustiada con el paso de los
segundos.

"!Yo quiero que se quede!" la pequeña pataleó, ella por lo general tenía un buen comportamiento
por lo que me sorprendí con su reacción. Sabiendo que yo era la responsable de su llanto fue el
peor de lo sentimientos. De repente soltó mi mano, pero me agarró la pierna. Ahora mi corazón
tomó la mayor inmersión y al instante se cayó.

288
"Pequeña, deja de llorar por favor", le rogué desesperadamente y estaba a punto de llorar
también. "Te veré pronto, lo prometo", le acaricié el pelo con dulzura, por lo que su llanto fue más
histérico que me estaba enviando escalofríos por mi espina dorsal.

"No te vayas", sollozó y me sentí como una idiota sin corazón por no ser capaz de cumplir su
deseo.

"Lara, ven aquí", Dinah intervino y ella tenía mucha experiencia con los niños pequeños también.
Por lo que yo sabía, provenía de una familia muy grande. La polinesia desenredó a Lara de mi
pierna y la levantó en sus brazos. Los gritos frenéticos de Lara no disminuían pero Dinah se
despidió, poco antes de tomar a la niña de tres años hacia el interior para distender la situación.
Mirando a la futbolista frotar la espalda de la niña, y tratando de calmarla, me agitó mucho.

"Lo siento mucho, Lauren", Camila interrumpió mis pensamientos y casi me había olvidado de que
estaba allí. "Ella por lo general no es así y probablemente está muy cansada", mi compañera de
equipo internacional quería apaciguarme, pero me sentí como una mierda.

"No es tu culpa", le contesté, y definitivamente me arrepentí por llevar las cosas tan lejos.

"Tampoco es la tuya", la más joven respondió de inmediato y apremiante.

"Sólo dile por favor que...lo siento", estaba teniendo problemas para concentrarme en otra cosa
que no fuera sus gritos de Lara todavía audibles a la distancia.

"No tienes que pedir disculpas pero debo ir adentro y calmarla", Camila respondió pero me miró
llena de preocupación.

"Sí, tengo que irme de todos modos", dije apresuradamente y di un paso hacia atrás. Estaba
demasiado confundida y no quería hacer las cosas más complicadas besándola y posiblemente con
Lara mirándonos. "Fue...um...agradable. Quiero decir, no por el llanto de Lara, pero sí por el resto
del día."

"Lauren, está bien", dijo el centrocampista izquierdo con dulzura y aparentemente vio que estaba
nerviosa.

"Me tengo que ir pero ya nos veremos dentro de tres semanas luego de las Eliminatorias", mi voz
estaba un poco febril.

"Exactamente, y pase un buen rato, también. No puedo esperar a verte", su voz era suave y llena
de sinceridad, pero no podía manejarlo en este momento.

"Hasta pronto entonces, adiós", solté y retrocedí más.

"Adiós", Camila parecía un poco decepcionada de que no la haya besado o abrazado, pero luego se
dio vuelta para ir a ver a su hija.

289
Suspiré profundamente y huí de la escena. Todo había sido tan perfecto. Pero tal vez me estuve
engañando a mí misma creyendo que Camila y yo jamás podríamos ser casuales, teniendo en
cuenta nuestra historia y que había una niña involucrada.

Durante todo el camino de vuelta a casa, estuve meditando sobre cómo manejar la situación a
partir de ahora. Tres semanas para nuestro próximo encuentro no era mucho, pero tenía que
encontrar una solución.

Estaba desempacando los artículos más necesarios del bolso. Otra habitación de hotel, otra
reunión para USWNT y puse mi ropa cuidadosamente en la cama para tener todo ordenado.

Normani ya estaba abajo porque quería ponerse al día con las otras chicas. La primera ronda de
práctica iba a comenzar en una hora, y todo el mundo debería de haber llegado ya. La decisión de
ser compañera de cuarto con Normani otra vez había sido mi elección. Era lo más adecuado en mi
opinión después de lo que había sucedido en París hace tres semanas. La idea de compartir
habitación con Camila y Lara por segunda vez no era ni siquiera una opción.

Estaba tratando de hacer lo mejor para todos los involucrados. Era obvio que Lara se había
apegado mucho a mí y no quería hacerle daño. Acercándola cada vez más, sólo para alejarme de
nuevo no era justo para ella. Así que estaba más distante con respecto a mi 'amiga con derechos'
últimamente. Habíamos intercambiado mensajes de texto, pero yo le había dicho que estaba muy
ocupada con los exámenes, y que necesitaba un poco de tiempo para estudiar. Lo que era verdad,
pero sino también una excusa para evitarla.

Acomodando mis zapatillas de fútbol, sentí un zumbido en mi bolsillo y saqué mi teléfono. La


pantalla mostró que mi hermana menor estaba llamando.

Lauren: ¡Hola Tay! ¿Qué pasa?

Taylor: Lauren, sé que estás en el campo, pero estoy totalmente asustada.

Me alarmé de inmediato cuando escuché la voz temblorosa de mi hermana en el otro extremo de


la línea.

L: ¿Qué pasó? ¿Estás bien?

T: No soy yo. Es mamá. Se suponía que debía visitarla hoy, pero cuando llegué, ella estaba
completamente fuera de sí. Papá se ha ido a otro viaje de negocios y creo que a ella se le olvidó
que iba a ir. Estaba tratando de encubrirlo, pero...ella definitivamente no estaba allí, si sabes lo
que quiero decir.

L: ¿Qué hizo?

290
T: Hablamos al principio, pero luego fui a la cocina y vi un montón de botellas vacías de vodka en la
basura. Yo no quería Lauren, pero la enfrenté al respecto y ¡Ella enloqueció completamente! Me
gritó y básicamente me echó. No creo que alguna vez haya estado tan mal.

L: Cálmate, ¿De acuerdo? Todo va a estar bien. Sólo...déjala que se calme. ¿Cuándo sucedió esto?

T: Ahora mismo, todavía estoy de pie fuera de la casa. Tengo miedo de que vaya a hacer algo
estúpido.

L: No lo hará, confía en mí.

T: ¿Cómo lo sabes?

L: Porque lo sé, ¿De acuerdo? Ella se sentirá mal en unos pocos minutos y es probable que te
llame, llorando y pidiendo disculpas.

T: No quiero dejarla así.

L: Escucha, sólo tienes que esperar durante media hora o algo así, y si ella no te ha llamado para
ese entonces, me llamas de nuevo y se me ocurrirá algo.

T: Siento que es mi culpa porque la enfrenté sobre eso y tú siempre me dijiste que no debía
hacerlo.

L: No es tu culpa, Tay. Te dije que no te involucraras por tu propio bien.

T: Esto es tan jodido. Ella probablemente ni siquiera está tomando su medicación.

L: Yo me preocuparé de ella. Pero, por favor, cálmate y no te preocupes demasiado. Te prometo


que me ocuparé de todo.

T: Lo siento por molestarte con esto, pero no sabía a quién más llamar.

L: Es bueno que me hayas llamado. Pero hay alguien en mi puerta ahora mismo.

T: Está bien, te llamo en media hora.

L: Bueno, te quiero.

T: Yo también te quiero, adiós.

L: Adiós.

Mi mente daba vueltas, mi corazón palpitaba y tenía dolor de cabeza. Esta era la última noticia
que necesitaba ahora mismo, pero no podía hacer nada al respecto. El llamado a mi puerta reforzó
mi dolor de cabeza, pero me preguntaba quién podría ser. No tuve tiempo para procesar la
información que me había dado mi hermana antes de abrir la puerta de la habitación.

291
"Hey", dijo Camila con una sonrisa y quería gritar. ¿Cómo si las cosas ya no estuvieran
complicadas? "¿Puedo entrar?"

Abrí la puerta sin contestar y caminé dentro con ella siguiéndome.

"Tenía la esperanza de que compartiéramos habitación de nuevo", la joven habló con cuidado y
tuve un tiempo difícil para incluso concentrarme en lo que estaba diciendo. Este era el peor
momento posible. ¿O tal vez era el mejor? Un poco de distracción no haría daño, ¿Verdad?

Me acerqué y me quité la camiseta antes de llegar a ella. Sus ojos se abrieron pero no me
preocupé por su asombro y la besé con rudeza. Ella se quedó sin aliento por la sorpresa y empecé
a tirar hacia arriba su camiseta sin dudarlo.

"Lauren...¿Estás bien?", Camila murmuró mientras yo atacaba sus labios con los míos.

"Perfecto", mentí y sentí que se le tensó el cuerpo cuando traté de sacarle su camiseta.

"Estás temblando", ella se apartó y me miró llena de preocupación, mientras yo no me daba


cuenta que tenía razón.

"Estoy emocionada de verte", le dije y traté desesperadamente de reunirme con sus labios
después de haber sacado con éxito su parte superior.

"¿Qué está pasando?" la de ojos marrones puso su mano en mi mejilla y me sorprendí por ese
tierno gesto.

"Nada", respondí y atrapé sus labios entre los míos, pero ella se retiró otra vez, haciéndome
suspirar con frustración.

"Espera, esto se siente raro", susurró.

"Por supuesto", respondí con rabia aunque mi ira no era por ella. "Si tú quieres hacerlo, siempre lo
hacemos, pero la única vez que yo realmente quiero, tú no quieres."

"No es así", ella no estaba de acuerdo y me miró con tanta intensidad que temía que viera a través
de mí.

"!¿Vamos a echar un polvo o no?!"

Tan pronto como esas palabras duras dejaron mis labios, el silencio se hizo presente. Sólo oía
nuestra respiración, mientras que nos mirábamos. El espacio entre nosotras no era mucho, pero
me sentía tan fuera de él, como si estuviera a un millón de millas de distancia. Sus ojos emanaban
que estaba herida, pero no podía manejar cualquier caos emocional en este momento.

Recogí mi camiseta y me la puse cuando vi a Camila haciendo lo mismo, pero se acercó


simultáneamente.

292
"¿Lauren?" la cantidad de preocupación en esa sencilla manera de decir mi nombre, me hacía
sentir incómoda porque no quería desmoronarme frente a ella.

"Sólo vete, ¿De acuerdo? No quiero hacer esto ahora", traté de caminar lejos, pero Camila me
agarró la muñeca.

"Nunca te había visto así, ¿Qué pasó? Me estás asustando", su voz temblaba y sentí un gran nudo
en la garganta, las lágrimas empezaron a llenar mis ojos.

"Déjame en paz", dije en una mezcla de desesperación y furia.

"!No!" ella se opuso con vehemencia y siguió tratando que la mirara. "Siempre has estado ahí para
mí así que, ¿Por qué no me dejas hacer lo mismo por una vez?"

"Porque no es asunto tuyo", mi voz temblaba ya y sentí la primera gota salada rodar por mi
mejilla. Odiaba llorar más que nada porque no era débil.

"No tienes que alejarme. Quiero estar ahí para ti", suplicó exasperada antes de que liberara mi
muñeca de su agarre y me apoyé con la pared.

"Si no quieres follar entonces vete", estaba haciendo mi mejor esfuerzo para hacerle daño para
que así no se diera cuenta que yo era la dañada.

"No me voy a ir hasta que me digas por qué estás tan angustiada", la más joven no estaba
retrocediendo, pero cada vez estaba más cerca de nuevo.

Mi resistencia se estaba desmoronando, porque no podía detener las lágrimas, aunque estaba
tratando muy duro para aguantarlas. Enterré mi cara en mis manos, avergonzada de que ella me
estuviera viendo así. El primer sollozó salió de mis labios, pero sentí a Camila abrazarme y tratando
de tirarme hacia sus brazos. Estaba luchando contra el impulso de ceder y resistí la tentación de
quebrarme en este momento.

Sentí mis rodillas ceder y poco a poco empecé a deslizarme por la pared con Camila aferrada a mí.
Sentada en el suelo, sentí cada músculo de mi cuerpo tensarse, luchando contra la sensación de
ceder.

"Estoy aquí para ti", la voz ronca suspiró y la sentí besar mi cabello. "Sólo déjate caer. Te voy a
atrapar, te lo prometo", agregó y finalmente saqué mis manos de mi cara. En cambio, las puse en
sus brazos que me sujetaban firmemente, y conseguí ponerme a su lado. Enterré mi cara en el
hueco de su cuello, lo que era mucho más reconfortante que las palmas de mis manos.

Mis dedos agarraron la piel suave de su antebrazo cuando hice lo que ella quería; caí y dejé que
me atrapara.

=================

293
Capitulo 19
No tenía conciencia del tiempo. Podría haber sido segundos, minutos u horas que Camila se sentó
en el suelo conmigo. Ella no estaba diciendo nada a excepción de unas pocas palabras de consuelo
diciendo que ella estaba ahí para mí. Dejarlo ir fue muy difícil al principio, pero en un cierto punto
no fui capaz de mantenerlo más tiempo.

A Camila no parecía importarle que estuviera empapando su camiseta con mis lágrimas. Sus
delgados brazos estaban envueltos apretadamente alrededor de mí mientras yo sollozaba en
silencio. Era muy agotador ahogar mis sollozos, y sentí mi pecho agitarse laboriosamente con cada
respiración. No podía recordar haber llorado tanto alguna vez, pero estaba llorando lágrimas
retenidas. El dolor y la tristeza que se había acumulado durante muchos años parecían aplastarme,
haciéndome incapaz de detenerme aunque me sentía humillada.

Poco a poco recuperando la compostura, tomé un par de respiraciones muy profundas e inhalé el
aroma del champú de la centrocampista izquierda inadvertidamente. La familiaridad de ese olor
me tranquilizó aún más. Cerré los ojos y me volví más consciente de mi entorno de nuevo lo que
me llenó de una gran vergüenza. No era así como quería que alguien me viera; especialmente no
Camila que tenía sus propios problemas familiares.

Me aparté y rápidamente sequé las últimas lágrimas de mi cara, decidida a no encontrarme con
los orbes marrones que sabía que estaban centrados en mí.

"Yo...lo siento mucho", mi voz estaba ronca y casi se quebró.

"¿Por qué?" la otra morena preguntó en voz baja y rozó el costado de mi cara con su mano.

"Por esto...no sé qué me pasó", mantuve mis ojos fijos en el suelo, haciendo caso omiso de su
afecto, con la esperanza de calmarme.

"No tienes que pedir disculpas en absoluto", sonaba genuina pero sacudí la cabeza al instante.

"Esto es vergonzoso", me burlé amargamente y tragué con dificultad.

"No, no lo es", Camila no estuvo de acuerdo con más severidad y dejó caer su mano para ponerla
sobre la mía.

"Debería salir a la calle y dar un paseo o algo así", mis instintos me dijeron que debía escapar de la
situación, pero la más joven apretó mi mano con firmeza.

"No te vayas, por favor", suplicó. "Está bien, de verdad. No tienes que estar avergonzada. Me he
desmoronado delante de ti un par de veces, y no me acuerdo que tú hayas pensado que eso haya
sido vergonzoso. ¿Por qué habría de pensar eso de ti, entonces?"

"Debido a que esta no soy yo", argumenté y finalmente miré hacia un lado para mirarla a los ojos.

294
"¿No eres tú?" cuestionó cuidadosamente.

"No soy débil", enfaticé y la vi levantar las cejas ligeramente.

"Nadie te dijo que lo eras", su mano entrelazó nuestros dedos mientras hablaba en voz baja. "Pero
incluso si lo fueras, no hay nada de malo en necesitar un poco de ayuda a veces."

"Yo no soy la que necesita ayuda", suspiré profundamente y recordé lo que había causado mi
ruptura en primer lugar.

"Entonces, ¿Quién la necesita?" la voz ronca era cauta pero preocupada.

"No te lo puedo decir", le respondí y negué con la cabeza otra vez.

"¿Por qué?"

"Porque no se lo he dicho a nadie...nunca", le respondí en un susurro y no era consciente de que


no estábamos evitando nuestros ojos por un solo segundo.

"Me puedes contar", sugirió con delicadeza, sin ser demasiado apremiante.

"Tú...jamás me miraras de la misma manera", me deslicé por completo y respondí demasiado


honestamente para mi gusto.

"No te atrevas siquiera a pensar que te juzgaría", el tono de Camila era tierno pero con intención.
"¿De verdad crees que yo tengo derecho a juzgar a alguien? Quiero decir, quedé embarazada, me
casé, me divorcié y luego mis padres me corrieron antes de alcanzar la edad legal para beber", ella
sonrió muy sutilmente para que me sintiera mejor y funcionó.

"No sabría por dónde empezar", le susurré de forma insegura.

"¿Por qué no me dices por qué estabas tan nerviosa antes?" los ojos marrones expresivos
mantenían contacto con los míos y rezumaban tanto afecto que no me pude contener, pero confíe
en ella. Abrí la boca para decir algo, pero no salió nada. Mi corazón latía más rápido con cada
momento que pasaba. Sentí un nudo en la garganta; como si hubiera algo bloqueándome de
hablar. Hablar de mi familia no era difícil. Decir la verdad sobre mi familia sí lo era.

"Está bien", Camila susurró alentándome y suspiré profundamente.

"Mi hermana me llamó antes que llegaras", empecé y la vi asintiendo suavemente. "Ella fue a ver a
mi madre y..." mi voz se quebró lo que me enfureció más allá de la creencia.

"Tómate tu tiempo", la de ojos marrones me tranquilizó después de que no seguí mi sentencia.

"Mi mamá...tiene algunos problemas", traté de encontrar las palabras correctas, como si hubiera
una manera 'correcta' para describirlo. "Desde que tengo uso de razón, ha luchado contra la
depresión. A veces era mejor y otras veces peor. Por supuesto, ahora sé que tiene una nfermedad,

295
pero cuando era más joven...no podía entender por qué era tan distante todo el
tiempo...desapegada y sin amor", el nudo de mi garganta creció con esa última palabra. Miré hacia
arriba y vi los ojos de Camila brillando con lágrimas. Por alguna extraña razón, su sincera empatía
me ayudó a seguir hablando.

"Cuando yo era adolescente, ella comenzó a beber. No era malo al principio, pero me preocupaba
porque aumentaba sus cambios de humor. Pasó de ser bastante fría todo el tiempo, a estar
enojada y arremetida con regularidad", las palabras fluyeron de mí sin pensar en absoluto en este
punto. "Recuerdo esa vez cuando estaba en el supermercado con. Ella había escrito la lista de
compras, pero su caligrafía no era legible, porque había estado bebiendo mucho ese día. Se
suponía que debía leerla pero no podía descifrarla. Ella comenzó a gritarme, maldiciéndome y
haciendo una escena delante de un montón de gente. Dos chicas con las que iba a la escuela lo
vieron, y yo estaba mortificada. No sabes lo que fue asistir a una prestigiosa escuela privada con
una beca académica. Yo era uno de los niños más pobres de allí; si hubieran sabido que mi mamá
era una borracha, todo se habría convertido en una pesadilla. No es que me importara demasiado
lo que pensaran de mí, pero no quería que eso interfiriera con mis ambiciones con el fútbol."

Aspiré y sentí su pulgar acariciando el dorso de mi mano.

"Así que hice todo lo posible para mantenerlo en secreto. Al menos, hasta que tuve la oportunidad
de salir de allí", admití. "Por encima de todo, quería proteger a mis hermanos. Eran demasiado
jóvenes para entender eso, y sabía que se vieron afectados por la forma en que nuestra madre
estaba actuando. Traté de protegerlos del dolor y me hice cargo de ellos. Mi mamá comenzó a
recibir un poco de ayuda durante mi último año y es por eso que sentí que estaba bien ir a la
universidad, y dejar a Taylor y Chris atrás. Pero no pasó mucho tiempo hasta que ella volvió a sus
viejas costumbres. Y desde entonces...me siento tan increíblemente culpable por haberlos dejado
con ella", mis ojos se llenaron de lágrimas de nuevo, pero una vez más me las tragué duramente.

"Ellos se mudaron con mis abuelos porque no podían aguantar más. Taylor visitó a mamá hoy y al
parecer ella había estado bebiendo otra vez, a pesar de que prometió que estaba sobria desde
hace meses hasta ahora. Ni siquiera estoy sorprendida, porque creo que he renunciado a la idea
de que mi madre se va a convertir en la persona que yo quería que ella fuera. Pero ellos no lo
entienden y no quiero que..."

"No quieres que pasen por lo que tú tuviste que pasar", Camila pronto terminó la frase y dio en el
clavo. "Porque sabes lo mucho que duele. No tener un progenitor afectuoso; que te decepcionen
una y otra vez; sentir que es tu culpa porque no te aman; que básicamente matarías por ellos,
pero no obtienes nada a cambio. No quieres que se sientan no amados como tú te sentiste."

Las primeras gotas saladas rodaron por mi rostro mientras escuchaba su voz llena de razón,
comprensión y afecto. No estaba segura de por qué, pero ella estaba a punto de llorar también.

"Lo siento, no era mi intención hacerte sentir mal", la joven madre susurró alarmada que yo
estuviera llorando otra vez.

296
"No", respiré y pensé que mi corazón iba a salirse de mi pecho. "Yo...sólo....nunca me he sentido
así de comprendida", le confesé y observé a Camila sonriendo a través de sus lágrimas ahora. Ella
utilizó su mano libre y limpió los rastros húmedos de lágrimas de mis mejillas.

"Estoy sorprendida, pero también todo tiene mucho sentido ahora", ella habló en voz baja.

"¿Cómo?" pregunté confundida.

"Las cosas que te hacen ser como eres, no vinieron a ti por accidente", comenzó en voz baja.
"Cuidas de las personas, Lauren. Tal vez sea parte de tu naturaleza, de tu ser, sino sobre todo es lo
que has aprendido. Te preocupas de tu madre, tu hermana, tu hermano, tus compañeras de
equipo y últimamente me has cuidado a mí y Lara. No te lo tomes a mal. Me encanta ese lado de
ti. Sin embargo, a veces me gustaría que dejaras que la gente se ocupara de ti, en retorno.

Porque te lo mereces, y no hay nada de malo en pedir ayuda. Eso no significa que te estás
convirtiendo en tu madre. Eso no significa que eres débil. Simplemente significa que la gente
quiere que te sientas amada de la misma manera que tú haces que se sientan amados."

Estaba completa y absolutamente conmovida hasta la médula. Camila, la chica que había sido la
peor comunicadora que jamás había conocido, ahora estaba hablando de una parte de mí que yo
no había encontrado una manera de comunicarme conmigo misma. Agarré su mano casi con
desesperación entre la mía. Sentí como si ella me vio - cada parte de mí, e incluso las partes que
mantuve ocultas de la mayoría de la gente. El hecho de que ella no me miraba de forma diferente,
por el contrario, en realidad, sus ojos se llenaron con más cariño que antes, tenía mi corazón en un
precipicio.

"No sé qué decir", admití mi confusión, pero la comisura de los labios de la otra chica se levantó
lentamente.

"No tienes que hacerlo", ella respondió con otro apretón de mano. "Estoy feliz de que me hayas
mostrado todo lo que tienes. Y espero que sepas que puedes hablar conmigo sobre cualquier cosa,
en cualquier momento y esto se quedará entre nosotras. Pero hay una cosa más que quiero
saber."

"¿Qué?"

"¿Puedo besarte, por favor?" preguntó Camila casi con timidez e hizo que mi corazón aleteara de
manera incontrolable. Era tan increíblemente entrañable la forma en que ella preguntó y suplicó
por mi permiso para algo tan simple como un beso; algo que no me importaría compartir después
de una conversación tan significativa; algo que nunca me importaría para ser honesta.

Asentí con la cabeza suavemente y me incliné. La menor de nosotras rozó su lengua por los labios,
mojándolos con anticipación como yo hice lo mismo. Mis ojos se detuvieron en los de ella
mientras cerrábamos la distancia entre nosotras. Me perdí en la profunda sombra de color
marrón, hasta que desaparecieron detrás de sus párpados cerrados, por lo que admiré fueron sus

297
pestañas naturalmente largas por un momento, cerrando los ojos en el último segundo antes del
beso.

Por ahora habíamos compartido muchos besos pero este era uno de mis favoritos.

Capturé su labio inferior suavemente entre los míos. La forma en que nuestros labios parecían
encajar perfectamente parecía ser agravante pero no se sentía tan cómodo. Ninguna de nosotras
estaba aplicando mucha presión, pero sólo saboreando el momento de compartir un tierno beso.
No hubo necesidad de profundizar el beso, ya que nuestra conversación había superado todas las
definiciones de profundidad para mí. No me preocupé de profundizar el beso después de esa
profunda-conversación.

Liberando su mano, tomé su mejilla afectuosamente antes de alejarme. Vi a la de ojos marrones


crecer en ansiedad por alguna razón. No hablamos sino simplemente nos miramos profundamente
a los ojos del otro para dejar que todo se hundiera. La más joven parecía tensa y me di cuenta que
su respiración se aceleró. Ella parecía nerviosa y no tenía ni idea de por qué.

"Lauren..." ella habló en voz baja.

"¿Sí?", me quedé más tranquila por ahora mientras ella parecía incómoda.

"Yo..." ella tragó saliva y tuve la sensación de que iba a confesar algo. Sin embargo, no sabía qué.

"Dilo", la animé ya que ella había hecho lo mismo por mí.

"Estoy asustada....ya que arruinará todo si lo digo ahora", admitió su inseguridad y yo estaba
desconcertada.

"Eso es muy poco probable", me las arreglé para sonreír suavemente.

"Yo te-", fue todo lo que dijo antes de que sintiera mi teléfono zumbar en mis jeans. Las dos nos
sobresaltamos, y normalmente no atendería, pero sabía que Taylor iba a llamarme si habían
noticias de mi madre. Camila suspiró en silencio y le di una mirada de disculpa antes de sacar mi
teléfono. De hecho, era Taylor.

"Tengo que tomar esto", expliqué y Camila asintió rápidamente. A pesar de que mis rodillas se
sentían todavía temblorosas, me levanté y acepté la llamada entrante de mi hermana.

Lauren: Hey, ¿Estás bien?

Taylor: Sí, estoy bien. Tenías razón. Mamá me llamó y se disculpó.

L: Ok, bien.

T: ¿Cómo sabías que iba a hacer eso?

L: Eso no es importante.

298
T: Ella te ha hecho esto antes, ¿Verdad?

L: No importa, Tay. Lo que importa es que ya no estás preocupada.

T: No tienes que protegerme todo el tiempo, ya sabes.

L: Sí, lo tengo que hacer. Es parte del 'código de honor de la hermana mayor'. ¿Estás todavía en
casa?

T: No, sólo me fui. Me voy a casa, aunque todavía estoy un poco asustada.

L: No lo estés. Yo me ocuparé de ella, te lo prometo.

T: ¿Cómo? Estás en el campo y tienes que concentrarse en eso. Sólo dime qué harías tú y lo haré.

L: ¡De ninguna manera! Por favor, sólo confía en mí. ¿No siempre he cuidado de ti antes?

T: Lo has hecho pero quizás pueda hacer algo para ayudar.

L: Eso está bien, sólo necesito que te asegures de que lo estás haciendo bien.

T: Lo estoy. Esto es simplemente abrumador.

L: Lo sé. ¿Todo lo demás está bien? ¿La escuela y esas cosas?

T: Sí, todo está bien.

L: ¿Cómo está Chris?

T: Está muy bien. No te preocupes tanto por nosotros.

L: Lo intentaré. Pero me tengo que ir ahora. La práctica comienza en pocos minutos y tengo que
estar lista. ¿Segura de que todo está bien?

T: Sí, Lauren. Tendrás un ataque al corazón un día si sigues estresándote mucho y me sentiré
culpable.

L: Entonces es mejor que mantengas ese GPA para que puedas ir a la escuela de derecho como lo
planeaste, para pagar esas facturas médicas. (GPA es el promedio de notas general)

T: Como si no tuvieras suficiente dinero.

L: Buen punto. Muy bien, me tengo que ir.

T: Bien, gracias de nuevo. Te quiero.

L: Yo también te quiero. Y da un beso de mi parte a todos.

T: Lo haré. Adiós.

299
L: Adiós.

Colgué y volví a respirar hondo. Dándome vuelta, vi a Camila de pie y me encontré con sus ojos
cuando terminé.

"Lo siento, tenía que tomar la llamada", me disculpé por interrumpir nuestra conversación de
antes.

"Por supuesto, no te preocupes", dijo casualmente. "¿Está todo bien con ella?"

"Creo que sí. Pero tengo que ocuparme de algunas cosas antes de que comience la práctica", le
expliqué vagamente.

"¿De tu mamá?" preguntó Camila cuidadosamente.

"Sí, tengo que asegurarme de que no se salga de control completamente", le respondí con una
susurro. "Hay algunas personas a las que tengo que llamar. Esperemos que puedan intervenir."

"Claro, te daré un poco de privacidad", respondió cortésmente y quiso pasar por mi lado cuando le
bloqueé el camino por un momento. Sus ojos se abrieron con sorpresa, pero no quería que se
sintiera despreciada después de lo que acababa de hacer por mí.

"Pero te interrumpí antes de tomar la llamada", le recordé y vi la ansiedad volver a los orbes
marrones. "¿Qué querías decir?"

"Puede esperar", dijo en voz baja y me rozó el brazo sutilmente con la mano. "Tal vez podamos
hablar después de la práctica. Preocúpate de tu madre primero para que puedas estar bien."

"¿Lara está aquí?" me había olvidado completamente de pregunta acerca de su hija gracias a la
locura.

"No, quise que se quedara en París", dijo Camila y no podía evitar la sensación de que tenía algo
que ver conmigo, y lo horrible que Lara había tomado mi partida la última vez. "Ella está en
Disneyland con Dinah y todos los demás. Así que se está divirtiendo."

"Estoy segura de que lo está", reiteré al estar aliviada y decepcionada al mismo tiempo de no ver a
la pequeña esta vez.

"Nos vemos más tarde", la joven madre me sonrió antes de salir de mi habitación del hotel.

Definitivamente el viaje había tomado un giro inesperado. Sin embargo, estaba muy agradecida
con Camila por 'atraparme', y me sentí comprendida. Pero no tenía mucho tiempo para volver a
reproducir lo que había pasado porque tenía que hacerme cargo de los asuntos de mi familia
recién surgidos una vez más.

Así que empecé a llamar a los números familiares que pertenecían a las personas que serían
capaces de ayudar a mi madre a volver a la realidad.

300
-

La práctica fue dura. No necesariamente físicamente, sino mentalmente. No pude concentrarme


en otra cosa que no fuera en mi mamá. A pesar de que había hablado con varias personas, como
con su terapeuta, y a pesar de que todo ellos se ofrecieron a ayudar, sentí la falta de
concentración. Estaba haciendo errores innecesarios y al parecer se notaba.

Camila me estuvo observando a lo largo de la práctica e incluso Normani me preguntó si me sentía


bien. Negué, como siempre. No quedaba mucho de la práctica de todos modos, así que estaba casi
terminada. Todos en el equipo se reunieron alrededor de un gran círculo, mientras que nuestro
entrenador hablaba. Por lo general siempre estaba en la parte frontal, pero hoy de pie fuera. Con
los brazos cruzados, todavía escuchaba lo que mis entrenadores decían antes de sentir algo
realmente inesperado.

¡Había una mano en mi trasero! Mis ojos se abrieron de golpe cuando me di cuenta quien estaba
tocándome descaradamente. Camila estaba de pie a mi lado, también en el exterior así que nadie
vio, y tenía, obviamente, sus propias formas de animarme. Mirando a mi lado, me di cuenta que se
estaba mordiendo su labio inferior, lo que me hizo sonreír.

"¿Qué crees que estás haciendo?", le susurré apenas audible.

"Shhh", la más joven puso su dedo índice de su otra mano en sus labios para hacerme callar.

"Increíble", reí en voz baja y no podía negar que me hizo sonreír por primera vez durante toda la
práctica. Los ojos marrones se centraron intensamente en nuestro entrenador y ella no se inmutó
en absoluto. Su cara de póquer era impecable. La mano que estaba sobre mi trasero, lo apretó con
firmeza y casi grité. Normani, que estaba de pie frente a mí, se dio vuelta y me miró
inquisitivamente. Fingí que nada pasaba así que ella se dio vuelta.

"Vas a pagar por esto", le murmuré a Camila que se encontró con mi mirada por un momento.

"No puedo esperar", respondió ella con aire de suficiencia y me dio otro apretón.

El resto de la práctica no fue tan mala, pero no podía olvidar ese momento de mi compañera de
equipo siendo tan 'descarada'. Después de la ducha, Normani me preguntó si quería unirme a ella
y algunas de las otras chicas para cenar. Me negué e intercambié una mirada con Camila a quien le
preguntó a continuación. Ella también se negó cortésmente y sabíamos lo que eso significaba.
Teníamos mi habitación para nosotras durante la noche. Aunque nuestro acuerdo era bastante
claro, y esa parte también era tentadora, me acordé de Camila queriendo decirme algo. Tal vez lo
iba a averiguar por el final de la noche.

Pero primero, nos fuimos a mi habitación y ella caminó hasta la cómoda. Mi teléfono estaba
conectado a la estación de acoplamiento que siempre traía conmigo.

301
"¿Puedo poner un poco de música?" Camila preguntó, y no me sorprendí con esa pregunta ya que
ella era una enorme amante de la música.

"Claro, adelante", le respondí y me senté en el borde la cama, admirando sus curvas sin pudor.

"!Oh, Dios mío!", de repente exclamó al pasar por mi iPod.

"¿Qué?" casi me levanté, pero ella empezó a reír.

"Eres una pervertida", ella se rió y no tenía idea de lo que estaba pasando. "¿Qué es esta lista de
reproducción, Lauren?"

"Oh", mi cara empezó a arder, dándome cuenta de lo que probablemente estaba hablando.

"!Realmente tienes una 'sex-playlist'!" Camila dejó escapar y me hizo sonrojar aún más.

"No, no la tengo", me defendí débilmente pero ella levantó sus cejas sugestivamente.

"Oh, ¿De verdad?" la otra morena se burló y empezó a enumerar los títulos: "Sexo de cumpleaños,
Cama, Agradable & Lento-"

"Bien, bien, conozco la lista", hice un puchero porque ella me estaba dejando al descubierto.

"Me encanta esa canción", murmuró y de repente puso una canción de la lista. Enarqué una ceja
mientras el bajo llenó la habitación.

"Oh, no, no, no, no, no...

When you feel it in your body(Cuando lo sientes en tu cuerpo)

You found somebody who makes you change your ways(Encontraste a alguien que te hace
cambiar de rumbo)

Like hanging with your crew(Como andar con tus amigos)

Said you act like you're ready(Dijiste que actúas cuando estás lista)

But you don't really know(Pero realmente no sabes)

And everything in your past - you wanna let it go(Y todo en tu pasado - quieres dejarlo ir)

I've been there, done it, fucked around(He estado allí, lo he hecho, la he jodido)

After all that - this is what I found(Después de todo eso - esto es lo que encontré)

Nobody wants to be alone(Nadie quiere estar solo)

If you're touched by the words in this song(Si las palabras de esta canción te llegaron)

302
Then baby... (Entonces bebé...)

U got, u got it bad(Estás, estás mal)

When you're on the phone(Cuando estás en el teléfono)

Hang up and you call right back(Cuelgas y vuelves a llamar)

U got, u got it bad(Estás, estás mal)

If you miss a day without your friend(Si te pierdes de un día sin tu amigo)

Your whole life's off track(Toda tu vida se apaga)

You know you got it bad when you're stuck in the house(Sabes que estás mal cuando te quedas en
casa)

You don't wanna have fun(No quieres divertirte)

It's all you think about(Es en todo lo que piensas)

U got it bad when you're out with someone(Estás mal cuando sales con alguien)

But you keep on thinkin' bout somebody else(Pero sigues pensando en alguien más)

U got it bad(Estás mal)"

Nerviosa, mirando a la otra jugadora de fútbol, la oí cantar en voz muy baja a lo largo de la canción
todavía pasando por la lista. Al parecer, no se dio cuenta de que la estaba escuchando. Su voz era
apenas audible con la música, pero traté de concentrarme en ella. Me pilló observándola,
inclinando la cabeza hacia un lado y luego se mordió el labio. Dejando a un lado el dispositivo, mi
corazón dio un vuelco porque su voz se hizo más fuerte cuando comenzó a caminar hacia mí.

Mierda, su voz era perfecta. Su interpretación de una canción de Ed Sheeran en París había sido
poco menos que increíble, pero la melodía lenta y sensual de esta canción parecía favorecer su
tono. Tragué saliva con fuerza y subconscientemente agarré las sábanas de la cama que estaba
sentada.

"When you say that you love 'em (Cuando dices que lo amas)

And you really know(Y realmente sabes)

Everything that used matter, don't matter no more(Todo lo que solía importar, ya no importa
más)"

Ella ya había llegado y estaba de pie justo en frente de mí, sin dejar de cantar mientras la miraba
con asombro.

303
"Like my money, all my cars (Como mi dinero, todos mis autos)

(You can have it all back)(Puedes tener todo de vuelta)"

Camila levantó una de sus piernas y tenía una idea de lo que iba a hacer.

"Flowers, cards and candy(Flores, tarjetas y dulces)

(I do it just cause I'm...)(Lo hago sólo porque soy...)

Y ella lo hizo. La chica con voz muy sexy estaba a horcajadas de mí y dándome palpitaciones al
corazón al hacerlo.

"Said I'm fortunate to have you girl(Dije que soy afortunado de tenerte chica)

I want you to know(Quiero que sepas)

I really adore you(Que realmente te adoro)"

Sus ambas manos corrieron por mi cabello y me hizo mirarla tirando de mi cabeza hacia atrás
suavemente.

"All my people who know what's going on (Toda mi gente sabe lo que está pasando)

Look at your mate, help me sing my song(Mira a tu compañera, ayúdame a cantar mi canción)"

Centró sus ojos en los míos antes de modificar las letras para que pudieran encajar, pero todavía
cantando tan seductoramente que sinceramente estaba a punto de enloquecer.

"Tell her I'm your woman, you're my girl(Dile que soy tu mujer, tú eres mi chica)

I'm gonna tell it to the whole wide world(Voy a decírselo a todo el ancho mundo)

Lauren say I'm your girl, you're my woman(Lauren di que soy tu chica, tú eres mi mujer)

Promise to love you the best I can(Prometo amarte lo mejor que pueda)"

Con esa última línea, sus labios se estrellaron con los míos y sentí como si hubiera juegos
artificiales.

Sentí un hormigueo y a punto de desmayarme, gimiendo de placer cuando ella apretó su cuerpo
contra el mío, sus manos agarrando mi pelo y besándome apasionadamente. Jesucristo, no tenía
control de mi cabeza, corazón o cuerpo en este momento. Correspondí el beso y envolví mis
brazos alrededor de su cintura, cerrando la distancia entre nosotras, así sentí sus caderas tocando
mi abdomen.

304
Sin embargo, por mucho que quería seguir adelante, todavía estaba curiosa por saber sobre qué
quería hablar conmigo. Por no hablar de que me sentía culpable por haberla hecho esperar. Si
íbamos a empezar a hacer esto, la conversación probablemente nunca sucedería.

"Espera-", murmuré en el beso y tuve a Camila mirándome muy sorprendida.

"¿Qué pasa?", preguntó con incertidumbre.

"Nada", traté de calmarla y le froté la espalda suavemente. "Sólo sigo preguntándome que querías
decirme antes" allí estaba otra vez: esa mirada ansiosa en sus ojos. ¿Qué demonios estaba
pasando? "Te ves como un ciervo en las luces cada vez que lo menciono. ¿Está todo bien? Estoy
empezando a preocuparme."

"¿Quieres hablar? ¿Ahora?" su voz estaba llena de asombro.

"¿Por qué eso es tan confuso?" no entendía su reacción.

"¿De verdad no lo entiendes?" ella suspiró con lo que parecía con frustración y de repente se bajó
de mi regazo, dando unos pasos hacia atrás.

"No, al parecer no", le dije aún más confusa.

"Quieres hablar cuando se supone que debemos estar haciendo algo completamente diferente
ahora", enfatizó, pero yo estaba perdida.

"Me siento mal porque te interrumpí antes", le expliqué mi razonamiento y la vi sacudiendo la


cabeza.

"Pero ¿Por qué? Quiero decir, si sólo estamos saliendo ocasionalmente", Camila soltó y mi pulso
se aceleró al instante.

"Tú misma lo has dicho: se llama amigos con beneficios, después de todo", le contesté en mi mejor
intento por parecer imperturbable.

"¿Y no crees que es posible que hayamos cruzado algunas líneas en ese departamento?" ella me
ponía más nerviosa con cada pregunta.

"¿Esto tiene que ver con lo que pasó en París con Lara?", le respondí con una pregunta a mí
misma. "Porque si es así, entonces estoy de acuerdo que he cruzado algunos límites. Nunca debí
haberme involucrado tanto. Ella, obviamente, no entiende nuestro acuerdo."

"Ni yo, para ser honesta", dijo Camila de repente y tragué una vez más.

"Pensé que fui bastante clara que no estaba interesada en una relación-"

"¿Pero no estamos teniendo una y simplemente no llamándola de esa manera?" la de ojos


marrones me interrumpió para hacer que mi corazón se detuviera.

305
"¿Qué?" le dije con incredulidad y fruncí las cejas.

"Lauren, no me tratas como si fuera una chica con la que sólo tienes sexo y viceversa", ella sonaba
un poco insegura. "Nuestro acuerdo está basado en el sexo, pero la mayoría de las veces no eres
buena cumpliéndolo. Cada vez que estaba nerviosa o me sentía cohibida, prescindías por
completo nuestro trato y me tratabas como...si significaba algo más estar conmigo, incluso si no
íbamos a tener relaciones sexuales. Quiero decir, esto ahora mismo... ¡Ejemplo de ello! Quieres
hablar cuando trato de cumplir nuestro acuerdo. ¿Estoy loca por pensar que podría haber algo
más en juego?"

"No sé qué decir", me había tomado por sorpresa con su repentino control.

"Dime la verdad", mi compañera de equipo declaró. "¿Esto es sólo sobre sexo para ti?"

"Esto se trata de...no tener apego ni ataduras", desvié de la mejor manera que pude.

"Pero hay ataduras y apego", argumentó con otro suspiro. "Vuelas a París, formas un lazo con mi
hija, te abres conmigo acerca de tu familia y...me miras de la forma que solías mirarme cuando
éramos más jóvenes."

"Y en aquel entonces no significaba nada para ti", disparé el primer tiro porque me sentía a la
defensiva y abrumada. "!Tú fuiste la que sugeriste esto en primer lugar!"

"Porque sentí que te alejabas y no sabía de qué otra manera mantenerte cerca", confesó pero me
enojé por alguna razón.

"¿Qué estás diciendo?¿Que tú...?"

"Te amo", Camila suspiró y vi la ansiedad disolverse. Eso era lo que había querido decir. Me sentía
extrañamente insensible ante sus palabras, tratando de bloquear porque no podía ser cierto
después de todo lo que habíamos pasado.

"¿Así que toda esta cosa era un plan? Tú, básicamente, has estado mintiendo todo este tiempo",
sentí mi corazón cerca de la explosión, pero me mantuve fría en el exterior.

"No..." enterró el rostro entre sus manos y se pasó una mano por el pelo. "Cometí un error. Uno
enorme cuando fuiste a París y yo elegí a Ariana. Hice una elección segura, pero no fue la correcta.
Cuando me di cuenta de lo que había hecho, tú estabas siguiendo adelante y yo quería tener algún
tipo de conexión, así que lo usé como un trampolín para algo más."

"¿Y cómo iba yo a saber eso?" le respondí frustrada. "Tú tenías una agenda, una segunda
intención, pero me hiciste creer que estábamos en la misma página. ¿Cómo esperas que reaccione
ahora?"

"¿Por qué estás tan enojada?" la voz de Camila era inestable.

"!Porque me has engañado!"

306
"!Yo no te engañé! No es como si te haya puesto una pistola en la cabeza. Podrías haber dicho
'No', pero tú estás tratando de distraer la atención de la cuestión real", la otra jugadora sugirió.

"¿Cuál es?"

"Que tienes sentimientos por mí y actúas sobre ellos", su pecho subía y bajaba en gran medida
como el mío. "Tal vez tenía algún motivo oculto, pero con la misma facilidad podría decir que tú
me hiciste creer que había una posibilidad de más."

"¿Ahora es mi culpa?" me burlé.

"No es culpa de nadie, maldita sea", maldijo y respiró hondo. "No quiero señalar con el dedo,
Lauren. Pero no se puede negar que has sido excesivamente cariñosa conmigo que no tiene nada
que ver con ser amigas con beneficios."

"Te pregunté todo el tiempo si estabas bien con todo lo que estábamos haciendo y tú aceptaste",
hice mi argumento.

"¿Estás diciendo que en realidad esto fue sólo sobre sexo?" detecté la primera resignación en su
voz.

"Estoy diciendo que no puedo estar contigo", le respondí vagamente.

"¿Por qué no puedes responder a esa simple pregunta, Lauren?" su voz temblaba y tuve
dificultades para combatir mi instinto de querer consolarla. "¿Tienes sentimientos por mí?"
mantuve silencio y la tensión entre nosotras alcanzó proporciones desconocidas. "!Respóndeme!"

"!Por supuesto que los tengo!" de repente grité y vi sus ojos muy abiertos. "Siempre voy a tener
algún tipo de conexión contigo, ¡¿Eres feliz ahora?!"

"¿Entonces cuál es el problema?" el tono de Camila se suavizó mientras se acercó a mí de nuevo.

"El problema es que no quiero tener una relación seria con nadie en este momento."

"Literalmente, nada cambiaría si le diéramos una oportunidad real y lo llamamos como lo que es",
ella se acercó y se sentó a mi lado en la cama. Su mano buscó la mía. "Estamos actuando como
una pareja ya, así que por qué no hacerlo oficial ya que ninguna de nosotras está durmiendo con
otras personas-"

"Yo lo estoy", corté y la miré a los ojos. Su rostro se ensombreció. En realidad vi sus ojos cambiar
de esperanza a la derrota en una fracción de segundo. Revolvió mi propio estómago al ver esa
reacción de auténtica angustia.

"Te acostaste con alguien más", repitió en un susurro.

"Pensé que las reglas eran claras y no tenía ni idea de que sentías lo mismo por mí", vi su mano
retirándose de la mía. Ella trató de recomponerse, pero sentí su decepción.

307
"Me siento como una idiota ahora", ella negó con la cabeza y parecía enfadada consigo misma.
"Tienes razón. Debería haber sido honesta desde el principio. Nos habría ahorrado un montón de
tiempo y angustia." No le respondí, me mantuve quieta y luché contra el impulso de decir la
verdad que yo sólo conocía. "¿Tú realmente no quieres estar conmigo?" su voz sonaba tan
vulnerable y nuestros ojos se encontraron, una vez más.

"No creo que pueda darte lo que quieres, Camila", me las arreglé para responder sin tener que
responder su pregunta.

"Yo sólo te quiero", susurró y tomó mi mano entre las suyas, después de todo. "No me importa si
te acostaste con alguien más, mientras tanto, si estás dispuesta a darme una oportunidad
ahora...lo estás haciendo de nuevo."

"¿Qué?" le pregunté perpleja por su última frase.

"Estás mirándome como..."

"Como si te amo", tuve el mayo desliz y quise golpearme.

"¿Lo haces?" la más joven ganó esperanza después de mi slip épico.

"¿Y si el amor no es suficiente?", sentí mis paredes desmoronándose porque me acordé de estar
con ella sentada así hace unas horas, y diciéndole lo que jamás le había dicho a alguien.

"Lo es", presionó. "Podemos trabajar en todo lo demás pero por favor no hagas de esto más difícil
para mí, Lauren. Sólo tienes que responder una pregunta: ¿Me amas?"

Oh, mierda, eso hizo eco en mi cabeza. No sólo la había regiamente jodido admitiendo mis
sentimientos, también le había mentido al decirle que había dormido con alguien más. ¿Por qué?
Esa era una muy buena pregunta. ¿Estaba probándola en secreto? ¿Para ver cuál era su reacción si
fuera a meter la pata? Sean cuales fuesen mis propios motivos, los de ella me estaban tirando a un
bucle lleno ya y yo estaba ocupada repasando lo que acababa de admitir.

Yo estaba rota. Esto se sentía como si fuera el punto decisivo de nuestra relación. Si la iba a alejar,
no había manera para nosotras de volver a intentarlo. Demasiado ya había pasado. ¿Estaba
dispuesta a hacer eso? Aunque la idea de darnos una oportunidad asustaba la mierda de mí, la
otra opción era real y dejarla ir de manera irrevocable era tan aterrador.

Mi cabeza daba vueltas y yo iba y venía con forma de responder...

=================

308
Capitulo 20

Mi cabeza daba vueltas y yo iba y venía con la forma de responder. Pero después de desviar tanta
preguntas, llegué a un punto en que ya no pude contener la verdad.

"Tengo miedo", admití, sinceramente, a pesar de que una vez más no estaba respondiendo a su
pregunta.

"¿De qué?", preguntó Camila suavemente y entrelazó nuestros dedos como lo hizo hace algunas
horas, cuando habíamos hablado de mis asuntos familiares.

"De ti", susurré y miré a mi lado, en la búsqueda de los orbes marrones que se agrandaron, pero
se encontraron con los míos en la confusión. "Tengo miedo de la cantidad de poder que ya tienes
sobre mí. Nadie tiene la capacidad de hacerme tanto daño como tú lo haces", respiré con
sinceridad y noté sus expresiones faciales tornándose ansiosas. "Pero también nadie tiene la
capacidad de hacerme tan feliz como tú lo haces. Por encima de todo, tengo miedo de lo que
pasaría si intentamos esto y no funciona. Entonces te perdería por completo."

"Me vas a perder por completo al no darnos una oportunidad real", comentó e hizo un buen
punto. "No podemos seguir haciendo esto, Lauren. O le damos a esto un tiro, o terminamos para
siempre. Seguimos dando vuelta en círculos y, básicamente, aterrizamos donde estábamos hace
cuatro años. Esta vez podemos cambiar el resultado y no dejar que termine después de ser
'casual'. Obviamente, tienes que estar dispuesta a hacer eso sin embargo."

Dejé que sus palabras penetraran y sonaban tan razonables. También confirmaron lo que había
pensado antes. Este era un momento crucial para nosotras; tal vez el más crucial hasta el
momento. Respiré profundo y me sentí más tranquila que antes. Mi ira se había desvanecido, así
que era capaz de ser más racional y serena.

"Mentí", dije en voz baja y me encontré con los ojos cafés de nuevo. "No me acuesto con nadie
más."

"Pero..." Camila balbuceó claramente atónica. "¿Por qué mentirías sobre eso?"

"No sé", suspiré frustrada y tiré mi cabeza hacia atrás por un momento. "Tal vez...pensé, que así
entonces no ibas a querer estar conmigo, y por lo tanto no tendría que tomar una decisión."

"Eso encajaría con el tema de ser tan evasiva hoy", la más joven habló por mi tendencia a evitar
casi todas las cuestiones importantes que ella había preguntado. Ella se mordió el labio inferior, y
sabía que estaba esperándome para que finalmente diera la respuesta que decidiría nuestro
destino. Tener ese poder no era tan atractivo como pensé que sería. Después de que ella me había
pedido irme de París la primera vez, habría dado todo para tener una oportunidad como esta. Esos
recuerdos de haber tenido el corazón roto desconsoladamente todavía estaban frescos en mi
mente. Las heridas no estaban curadas totalmente, pero no se podía negar a una simple verdad de
la que yo no podía hablar.

309
Inhalando profundamente, liberé mi mente de todo el bagaje acumulado y me centré en el
presente. Al mirarla de nuevo, mi corazón estaba latiendo fuera de mi pecho, pero quería ser tan
honesta. El miedo me estaba frenando, pero sentí la resistencia desmoronarse. Simplemente
sostuvimos la mirada del otro por unos segundos más antes de encontrar el valor para decirle la
verdad:

"Te amo", le dije más firme de lo que esperaba. Mi voz no era inestable o insegura, sino decidida y
clara. Reforzándola con sinceridad detrás de esas dos palabras sencillas incluso para mí. Se sentía
bien, decirlas y sentir un peso menos en mis hombros.

"¿En serio?" la voz de Camila, por otro lado temblaba y estaba cargada de emoción.

"Sí, de verdad", confirmé con una sonrisa sutil y exhalé con fuerza. "Por supuesto, lo hago. Tenías
razón antes. Nunca te traté como a cualquier chica con las que he salido. No pude...porque una
parte de mí nunca dejó de amarte, aunque me hubiera gustado a veces."

"No te haré daño, te lo prometo", ella apretó y acarició mi mano.

"No digas eso", negué con la cabeza, pero mantuve con calma. "Nunca se sabe lo que va a pasar,
pero ese es el riesgo que tendremos que tomar."

"¿Estás dispuesta a tomarlo?" la centrocampista izquierda cuestionó nerviosamente.

"Tendremos que discutir algunas cosas", respondí, pero acaricié el dorso de su mano con mi
pulgar.

"¿Como Lara?" asumió cuidadosamente.

"Entre otras cosas", afirmé y no podía apartar mis ojos de ella. "No quiero que salga lastimada si
esto termina mal."

"Tampoco yo", Camila estuvo de acuerdo. "Pero ¿Por qué siempre estás esperando lo peor? Si
rompemos, entonces será difícil para todas nosotras. Lo que estamos olvidando es lo feliz que
estará cuando de que tú te conviertas en una parte de su vida - una de carácter permanente."

No pude evitar sonreír ante la idea de la pequeña niña emocionada de verme más a menudo. ¿Lo
iba a estar?

"¿Qué pasa con el hecho de que tú vives en París y yo en Boston?" quería cubrir esos temas si ella
hablaba en serio acerca de nosotras. "Las dos estamos obligadas por contrato a nuestros equipos
para el resto de la temporada y la próxima."

"Lo hemos hecho trabajar antes sin siquiera ser una pareja", argumentó y realmente me encantó
cuán determinada estaba de luchar por nosotras. "Por supuesto que será difícil no te voy a mentir.
Preferiría estar más cerca también, pero tenemos que hacer un esfuerzo para que funcione.

310
Además, vamos a vernos cada dos semanas ahora con el inicio de las Clasificaciones, luego están
los campeonatos. Tendremos tiempo para nosotras y te visitaré también, si quieres por supuesto."

"¿Estarías dispuesta a volver a Estados Unidos después de que se termine el contrato?" me oí


preguntar y vi sus cejas levantarse junto a las comisuras de su boca.

"Me gustaría volver en un latido de corazón si pudiera", susurró en voz baja, pero suspiró
profundamente después. "Pero todavía no puedo."

"Lo sé y entiendo", le respondí con sinceridad. "Preguntaba...en el futuro, tal vez."

"Por supuesto que me gustaría volver a ti tan pronto como pueda", la otra morena enfatizó e hizo
mi corazón aletear.

"Camila, estamos hablando de enormes compromisos aquí", quería asegurarme de que estábamos
en la misma página. "Tu hija, relación de larga distancia y los planes de futuro son cosas
importantes. ¿Estás realmente dispuesta a dar ese paso?"

"Absolutamente", respondió ella sin dudarlo y sentí mi pulso acelerarse de nuevo

"Está bien, entonces tengo que confesar otra mentira", exhalé y la vi tragar pesadamente.

"Está bien", dijo humildemente.

"¿Recuerdas cuando estábamos en Miami en las vacaciones de primavera?" empecé y la vi


asintiendo ligeramente. "Yo te dije acerca de esa inalcanzable persona-"

"La chica de ensueño", Camila interrumpió y al instante sabía de lo que estaba hablando. Todo su
lenguaje corporal cambió, y supuse que era porque ella se acordó de la conversación y de yo
diciéndole que Emily era la chica ideal para mí.

"Exactamente", asentí y levanté mi mano mi mano libre para acariciar su mejilla con el dorso de mi
mano por un segundo rápido. "Tú eres mi chica de ensueño, Camila", agregué otra confesión en la
lista de esta noche, su rostro se iluminó, haciéndolo digno inmediatamente. "Y tú siempre lo has
sido. Así que tal vez es por eso que estoy muerta de miedo de conseguir lo inalcanzable. Tienes
que tener paciencia conmigo, ¿De acuerdo? Porque realmente siento que me vuelvo loca cuando
estoy cerca de ti a veces. Pero tienes que recordar que ese es el por qué."

Los orbes marrones brillaban de una manera que no los había visto irradiar en todo el día. Sus
perfectos labios formaron una sonrisa mientras que sus mejillas estaban un poco sonrojadas. Dios,
¡Era tan linda! ¡¿Cómo demonios ella quería estar conmigo de todas las personas del mundo?!

"Tú eres la mía también", ella respiró claramente agitada.

311
"Lo sé", le susurré suavemente. "Me lo dijiste cuando te desmayaste esa noche en Miami", le dije
y vi su sonrisa suavizarse.

"¿Significa que estás lista para darle a esto un intento real?" la más joven sonaba mucho más
esperanzadora en esta ocasión.

"Depende", sonreí mientras ella ladeó la cabeza inquisitivamente.

"¿De qué?"

"En cuanto a si ¿Quieres o no ser mi novia?" sonreí ampliamente y no pude dejar la oportunidad
de preguntarle oficialmente.

"¿Por qué siempre tienes que hacer eso?" su labio inferior estaba torturado nuevamente por sus
dientes.

"¿Hacer qué?" jugué a la inocente, pero no podía borrar esa sonrisa de mi cara.

"!Ser tan condenadamente encantadora y adorable al mismo tiempo! Es muy molesto", mi


compañera de equipo se burlaba de mí con claridad.

"¿Supongo que eso significa que no vas a ser mi novia entonces? Quiero decir, si soy tan molesta",
me encogí de hombros para mantener nuestras bromas.

"Eres la persona más irritantemente adorable que he conocido", Camila rió entre dientes.

"Irritantemente adorable", repetí y casi me reí en voz alta. "De hecho, me gusta eso."

"Bueno, en realidad tú me gustas", ella apretó los labios tímidamente.

"¿Eso es un 'Sí', entonces?" sonreí de oreja a oreja por ahora.

"No sé, vuelve a preguntarme", se inclinó mientras yo enarqué una ceja.

"Y yo soy la molesta", me burlé pero cumplí su deseo, después de todo. "¿Camila?"

"¿Sí?", la futbolista profesional murmuró, cerrando al mismo tiempo la distancia entre nosotras
poco a poco.

"¿Quieres ser mi novia?" repetí en un susurro ahora y también empecé a inclinarme.

La respuesta era obvia después de todo lo que habíamos discutido. Camila se limitó a sentir con
rapidez ante de cerrar sus ojos. Yo hice lo mismo y finalmente sentí los labios más suaves que
jamás había besado contra los míos de nuevo. Con un suspiro de placer, llevé mi mano a su rostro
y tomé su mejilla despacio. Presionando suavemente mis labios contra los de ella, sellamos
nuestro nuevo acuerdo por así decirlo.

312
Alejándome un poco, tracé su labio inferior con mi pulgar y miré profundamente a los ojos
marrones expresivos en los que me perdía seguidamente. Me sentía tan increíblemente
afortunada. Me di cuenta de que esto era real. Estábamos juntas. Ella era mía - no de una manera
posesiva o degradante; ella era mía como yo era suya.

"Dios, te amo", solté completamente desinhibida ahora y no pude contenerme después de la


supresión de mis sentimientos por tanto tiempo.

"Te amo, también", susurró ella y sentí su aliento caliente contra mi pulgar.

Ahuecando su cara en mis dos manos, conecté nuestras bocas en un beso más apasionado. Chupé
su labio inferior y oí a la menor suspirar. Sus manos acariciaron mis lados y se establecieron en mis
muslos. Trazando lentamente su labio inferior con mi lengua, ella abrió los labios y me dio permiso
para profundizar el beso. Dejé una mano vagar más abajo y la puse en la parte posterior de su
cuello, tirando de ella más cerca como deslicé mi lengua en su boca.

Camila gimió y yo estaba a punto de perder el control. Pero por una vez, no quería dejarme guiar
por mi lujuria. Los delgados dedos de mi compañera de equipo habían viajado a la cintura de mis
pantalones cortos y estaba a punto de bajarlos.

"Espera", me quedé sin aliento y la agarré de su muñeca para detenerla. Ella parecía asustada y
más que sorprendida lo que me pareció entrañable.

"¿Por qué sonríes así?" ella se había percatado de mi cariño, pero todavía parecía confundida.

"Vamos a no hacer esto ahora", dije en voz baja. Mis dedos alrededor de su muñeca se aflojaron y
deslizaron entre los suyos, entrelazándolos con ternura. Levanté nuestras manos entrelazadas un
poco, pero también las incliné para besar el dorso de su mano cariñosamente. "Sé que esto va a
sonar raro, pero si hacemos esto ahora, será como si nada hubiera cambiado. Prefiero hacer algo
más para solidificar nuestro nuevo acuerdo o compromiso si lo quieres."

Me encontré con los orbes de chocolate lentamente y parecía sorprendida. Frunciendo las cejas
ligeramente, me reí en voz baja ante su reacción.

"No pongas esa cara, Jesús", le dije, pero sentí mis mejillas sonrojarse.

"Lo siento, no esperaba eso para ser honesta", admitió, pero sonrió genuinamente. "Quién habría
pensado que la oh-tan-genial Lauren sería tan romántica."

"Tú me haces serlo", reí tratando de encubrir que estaba bastante nerviosa.

"Es bueno saberlo", se mordió el labio inferior. "Entonces, ¿Qué sugieres que hagamos en su
lugar?"

"No es tan tarde, así que podríamos salir", le propuse.

313
"Como, ¿Una cita?" Camila levantó las cejas y, obviamente, disfrutaba viéndome tan nerviosa.

"Estoy empezando a tener la sensación de que te estás burlando de mí", hice un puchero en
broma, pero sentí a la jugadora parisina de repente subirse arriba de mí. Levantando mi ceja,
liberé mi mano para acariciar su espalda.

"Aw, mi pobre Lolo", bromeó de nuevo, pero me burlé de ese nuevo apodo y arrugué mi cara con
disgusto.

"¿Lolo?" Repetí con escepticismo.

"¿No es bueno?" la de ojos marrones se rió y envolvió sus brazos alrededor de mi cuello.

"No es bueno", comprobé pero casi gemí cuando ella se acercó más a mi regazo y empujó sus
caderas contra las mías. ¡Maldita tomadora de pelo!

"Tú, literalmente, eres la única persona que me llama 'Camz' así que así llegué a darte un apodo
también", argumentó Camila como yo continuamente la acariciaba desde los hombros hasta la
cintura.

"Aunque eso es un buen apodo", me defendí e inesperadamente agarré su trasero la próxima vez
que mis manos viajaron por su espalda. Ella gritó de sorpresa.

"Bien, entonces voy a tratar de pensar en uno diferente", la otra morena suspiró más de placer
que frustración cuando apreté la tela de sus pantalones cortos de fútbol cubriendo su trasero.
"¿Qué es esa obsesión que tienes con mi trasero?"

"!Tú fuiste la que me tocó durante la práctica! Además... ¿Has visto esa cosa?" quería devolvérselo
por haberme puesto nerviosa. ¡Sin embargo, yo amaba sus curvas!

"Pervertida" regañó pero sólo alimentó mi fuego, así que le di un pequeño golpe que resultó ser
mucho más fuerte de lo que quería. "!Lauren!"

"Oh mierda, lo siento", pedí disculpas, pero no pude controlar mi risa.

"Ouch, eso realmente dolió. Eso va a dejar una marca", fue ella la que hizo pucheros ahora y
acaricié la adolorida zona con dulzura.

"No quise ser tan violenta, lo juro", traté de apaciguar.

"Sí, claro", ella sonrió.

"Esa fue una venganza por burlarte de mí cuando estaba tratando de ser toda linda", le dije.

"No seas malhumorada", susurró ella y trazó mis clavículas con sus manos. "Te lo recompensaré",
la más joven descascarilló y se inclinó pero me alejé juguetonamente. Ella no se dio por vencida sin
embargo y en su lugar dio pequeños besos a lo largo de mi mandíbula. Tuve un rato difícil para

314
parecer imperturbable cuando ella hizo eso, pero traté lo mejor que pude para mantener la sartén
por el mango.

"¿Te sientes mejor?" su voz grave respiró seductoramente.

"Un poco", seguí mi fachada pero ¡Quería tirarla a la cama ahora mismo!

"¿Y ahora?" Camila preguntó y besó un punto muy sensible de mi cuello. Me estremecí sin querer
y agarré el dobladillo de su camiseta. Sus labios eran tan malditamente suaves y llenos que con
cada contacto con mi piel sentí una felicidad absoluta; especialmente cuando ella los estaba
usando lascivamente como ahora. Mis ojos se cerraron porque ella pasó su lengua por el punto
delicado antes de chupar de él con dulzura.

"A la mierda", no me pude contener, pero envolví mis brazos alrededor de su cintura y cambié
nuestras posiciones en un movimiento rápido; inmovilizándola en la cama mientras me cernía
sobre ella apoyada en mis rodillas.

"Dios, me gusta cuando eres ruda", la chica debajo de mí jadeaba con la sonrisa más astuta
todavía.

"No estás haciendo esto fácil para mí", admití y la tentación de, básicamente, abalanzarme sobre
ella era más fuerte que antes, cuando era tan sumisa por voluntad.

"Ah, ¿Sí?" sus piernas abrazaron mi cintura y me atrajo hacia abajo hasta que nuestras caderas se
tocaron. "Realmente me deseas tanto, ¿Verdad?" ella mostró un lado que yo no había visto antes.

"Sí y no" tragué fuertemente porque quería dejar en claro que todavía estaba dispuesta a no hacer
esto sobre sexo.

"Te gusta cuando soy obediente, ¿Eh?" ella hizo mis mejillas sonrojarse y me estaba empezando a
dar cuenta de que ella todavía estaba tratando de provocarme. Bueno, dos pueden jugar ese
juego.

"Sí, me gusta", cambié de marcha y le sujeté las muñecas hacia abajo sobre el colchón. Ella era la
que estaba tragando ahora. "Ten cuidado con lo que deseas, porque voy a tener que darte una
lección, si estás siendo tan traviesa."

Tuve que poner mi mejor cara de póker durante esa última frase, porque estaba a punto de
estallar en carcajadas. El rostro de Camila se sonrojó con una profunda sombra roja exponiéndola
como no ser tan imperturbable. No podía hacerlo. Antes de darme cuenta, estaba riendo y revelé
que no estaba hablando en serio.

"Apestas", Camila golpeó mi hombro y al parecer lo entendió al instante.

315
"¿De verdad crees que me iba a ir por 'Cincuenta sombras' contigo?" Me senté entre un ataque de
risa.

"¿Leíste 'Cincuentas sombras de Grey'?", preguntó antes de sentarse también.

"No", sacudí la cabeza.

"No te creo considerando tu 'sex playlist' que todavía está sonando en el fondo", mi compañera de
equipo respondió y yo rodé mis ojos.

"Nah, no entiendo la histeria, para ser honesta", le dije con sinceridad y me encogí de hombros.

"Por supuesto, muy corriente para 'señorita muy genial para la escuela'", la burla continuó.

"¿Lo has leído?" Le pregunté en vez y noté sus mejillas enrojecerse. "Oh mi Dios, ¡Tú totalmente lo
hiciste!"

"!No! Dinah lo compró y lo vi en la casa por lo que podría haberlo tomado y haber leído algunos
párrafos", Camila murmuró.

"Entonces debiste haber disfrutado mucho de mí 'azote' justo ahora", reí y ella me golpeó en el
hombro. "!Ay! Tal vez tú deberías hacer el castigo si estás tan violenta ya", seguí adelante.

"Detenteee", se quejó extremadamente tímida y puso su mejor puchero que no me pude resistir.

"Está bien, voy a parar", solté una última risa pero me incliné para darle un beso rápido. "Entonces
vamos a la ciudad antes de que sea demasiado tarde."

"Está bien, me voy a ir a mi habitación a cambiarme", la menor estuvo de acuerdo y sonrió


complacida.

"Nos vemos abajo en el vestíbulo entonces", le dije antes de que ella asintiera con la cabeza,
plantó un beso más en mis labios y luego se levantó. Suspirando contenta, la vi alejarse y no tuve
miedo de mirar sus curvas infames.

La puerta se cerró y todo estaba empezando a hundirse. ¿Qué diablos sucedió? Una parte de mí
quería asustarme, pero la parte más grande de mí estaba en éxtasis. No quería pensar demasiado
en todo eso porque sólo iba a terminar volviéndome loca. Esto era bueno. ¡Mejor que bueno! El
temor de ser herida de nuevo, probablemente disminuirá con el tiempo. Hasta entonces, quería
disfrutar el poco tiempo que tenía con mi compañera...mi novia. Sonreí cuando lo dije en mi
cabeza.

Pero tenía que levantarme y arreglarme también. Todavía hacia bastante frío fuera, considerando
que era febrero y North Carolina no era exactamente como Florida. Obviamente, no quería salir
con mi traje de pista, pero busqué algo casual para llevar.

316
Mi par favorito de jeans ajustados negros que estaban un poco rasgados en mi rodilla derecha,
pero en realidad eso me gustó. Parecía como si fuera a propósito de todos modos. Opté por una
camiseta blanca y añadí mi chaqueta de cuero de dos tonos que acababa de comprar. Las mangas
eran negro clásico, me encantó el color burdeos en el resto de la tela. Me puse un par vans negras,
un poco de maquillaje, y acentué mis labios utilizando un lápiz de labios del mismo color burdeos
de mi chaqueta. Mi pelo era un poquito un desastre después de la práctica y no me lo había
secado después de la ducha. Utilicé un spray de pelo para domarlo lo mejor que pude, por lo que
las ondas naturales estaban un poco decente.

Dándome una última mirada en el espejo, me puse mi reloj de oro rosa y me di cuenta de que me
quedaban veinte minutos. Corrí escaleras abajo y me sentí en las nubes ya. Mi mandíbula cayó
cuando llegué al vestíbulo y vi a Camila.

La primera cosa que noté, fueron los skinny jeans de color azul claro que era extremadamente
bajo la cintura, pero hicieron que su menuda figura se viera diabólicamente sexy. Llevaba un
suéter manga-larga muy apretado, beige que era bastante corto y revelaba algunas partes de su
estómago en combinación con esos jeans. Me sorprendió sobre todo ver que llevaba botines
negros. Ellos no eran tan altos, pero le añadieron otro nivel a la ya criatura magnífica
esperándome.

No me di cuenta que la estaba mirando fijamente hasta que llegué a la chica más joven, y no tenía
ni idea de lo que estaba pasando. Jesús, ella me había hipnotizado completamente por un
momento al parecer.

"Estás babeando", Camila se echó a reír, pero vi que ella estaba nerviosa y trató de cubrirlo.

"¿Me puedes culpar?" Sonreí y le di otra mirada antes de encontrarme con sus ojos.

"Yo podría decir lo mismo. Te ves muy sexy. Me encanta la chaqueta", dijo ella sincera y estaba
sorprendida por lo tímida que parecía estar ahora. Parecía que ella estaba nerviosa, casi, lo que
era irónico, considerando que ella había tenido relaciones más serias que yo.

"Está bien, vamos a explorar lo que Charlotte tiene para ofrecer", quería aliviar su tensión y la vi
asentir con la cabeza.

Salimos del hotel y empezamos sin rumbo vagando fuera. Ninguna de las dos hablaba mucho, pero
no era incómodo. Nos llevábamos diferentes impresiones de la ciudad, mientras que la gran
cantidad de avistamientos de arquitectura me llamó la atención. Terminé tomando algunas fotos
de algunos edificios que encontré inspiradores. A mi compañera no parecía importarle y mantuvo
una conversación informal.

Me fijé que ella jugaba con sus manos mucho y eso era un claro signo de los nervios. Así que en un
momento dado, cogí su mano izquierda con mi derecha entrelazando nuestros dedos. Su cabeza
se volvió con sorpresa pero seguí caminando como si nada hubiera sucedido. Tomarse de las
manos estaba definitivamente bien ahora y quería hacer las cosas sencillas para que ella se

317
sintiera más cómoda. Al oír su suspiro, sonaba como si estuviera aliviada y su mano se relajó en la
mía. Nunca habría pensado que ella estaría tan ansiosa después de nuestra larga conversación e
incluso con las bromas en mi habitación del hotel antes.

Girando mi cabeza, vi su perfil impecable y quería estar más cerca. Sostener su mano ya me estaba
llenando de una gran alegría, pero quería más de alguna manera. Di un paso más cerca, mantuve
los dedos entrelazados, pero puse mi brazo alrededor de su hombro, tirando de ella a mi lado para
que su brazo izquierda estuviera básicamente sobre su pecho por nuestras manos entrelazadas.
Haciendo todo esto en un movimiento rápido, mientras seguí caminando, fue inesperadamente
fácil.

Ella miró de reojo, me miró y sonrió con tanta dulzura que mi corazón estaba a punto de explotar.
No pude contenerme, pero besé su mejilla con ternura. La de ojos marrones arrugó la nariz como
yo lo hice antes. Su cabeza se inclinó más y sentí sus suaves labios besando los míos
inmediatamente después. Fue rápido y suave pero malditamente perfecto. Estaba cayendo más
fuerte por ella con cada minuto, si es que eso era posible en este momento. La tensión en su
cuerpo se desvaneció mientras se inclinaba sobre mí ligeramente y disfruté de nuestra química
natural inmensamente.

Después de los nervios iniciales, caminamos por un rato antes de que el teléfono de Camila
comenzara a zumbar. Sacó el dispositivo y sonrió ampliamente.

"Es Dinah", explicó y se detuvo. "Ella está tratando de hacer una FaceTime", continuó y la liberé
del abrazo para que fuera capaz de aceptar el llamado. En lugar de Dinah, escuché y vi a otra
persona apareciendo en su iPhone, pero estaba fuera de mi alcance para ver.

Lara: ¡Mami!

Camila: ¡Hola cariño! Qué agradable sorpresa. ¿Cómo estás?

Lara: Estamos en Disneyland y ¡Es muuuy divertido!

Camila: Apuesto. Así que, ¿Estás pasando un buen rato?

Lara: Sí, pero la tía Dinah no. Se siente enferma.

Camila: Oh, no, ¿Qué pasó?

Lara: Ella quiso ir a esa montaña rusa realmente aterradora. Le dije que no, pero ahora está en el
baño.

Camila: Bueno, fue lindo que la previnieras, cariño.

Lara: Me siento mal por ella porque ni siquiera pudo terminar su helado.

Camila: Es lamentable, tienes razón. Pero ¿Todavía te estás divirtiendo?

318
Lara: ¡Totalmente! Pero la próxima vez tienes que venir con nosotros, mamá.

Camila: Lo haré, lo prometo.

Lara: Mami, ¿Lauren está allí?

Camila se quedó inmóvil por un momento y supuse que no estaba segura si yo quería unirme.

Su hija y el vínculo que compartía con ella había sido una de mis mayores preocupaciones.
Observando su interacción me hizo olvidar de mis temores muy rápido sin embargo. Tomé el
teléfono de las manos de Camila y vi a Lara saltar cuando aparecí en la pantalla.

Lara: ¡Panqueques!

Lauren: Hola a ti. No dejes caer el teléfono, pequeña.

Reí con cariño por el aparente entusiasmo de la más joven.

Lara: Lo siento, ¡Estoy tan feliz de verte!

Lauren: Estoy tan feliz de verte, también. ¿Cómo va Disneyland?

Lara: Es muy divertido. No puedo subirme a todos los juegos porque soy demasiado pequeña, pero
quizás la próxima vez. ¿Quieres venir la próxima vez?

Lauren: Um...veré lo que puedo hacer. Pero tal vez pueda hacer que algo suceda.

Lara: ¡Tienes que venir para mi cumpleaños!

Lauren: ¿Me estás invitando?

Lara: ¡Sí!

Lauren: ¿Cuándo es? Tal vez pueda arreglar algo.

De repente, Camila tocó mi hombro y sacudió la cabeza ligeramente.

"Su cumpleaños es en tres días", susurró y suspiró. Definitivamente no sería capaz de arreglar algo
para entonces y al parecer Camila no quería que pusiera demasiadas esperanzas sobre Lara.

Lauren: Pequeña, me temo que no voy a poder ir a tu cumpleaños, pero te lo voy a recompensar
cuando nos veamos de nuevo, ¿De acuerdo?

Lara: ¿Por qué no puedes venir?

Lauren: Tengo que ir a la universidad y dar algunas pruebas realmente importantes. Si pudiera,
preferiría pasar el día contigo y comer panqueques todo el tiempo, créeme.

Lara: Está bien.

319
La decepción en su voz me mató.

Lauren: No estés triste, por favor. Te voy a llamar y hablaremos y nos veremos así, ¿De acuerdo?

La pequeña pronto a tener cuatro años asintió débilmente, y mi corazón se acalambró. Ella apretó
los labios al igual que Camila cuando estaba molesta o nerviosa. Hablando de ella, Camila tomó el
teléfono y lo sostuvo así que ambas estábamos en la pantalla. Al ver eso, Lara volvió a sonreír y yo
también por la reacción de la pequeña.

Camila: Cariño, voy a estar de vuelta mañana y luego vamos a hablar de tu fiesta de cumpleaños. Y
Lauren te llamará para que sean capaces de hablar, ¿De acuerdo? Va a ser genial, te lo prometo.

Lara: Sí, está bien. Te echo de menos.

Camila: Te extraño más.

Lara: Y yo también te echo de menos, panqueques.

Mi corazón dio un vuelco, ya que no esperaba eso por alguna razón.

Lauren: Te echo de menos también. Disfruta de Disneyland y de tu cumpleaños sin embargo.


Quiero que seas feliz, ¿Recuerdas? Me siento muy mal por ponerte triste a veces.

Lara: No, de verdad que está bien. ¿Te estás divirtiendo con mami?

Casi me eché a reír cuando intercambié una mirada rápida con Camila.

Lauren: Sí, en realidad me estoy divirtiendo.

Lara ¡Yay! Tú y mamá se ven felices.

Lara: Lo somos.

Sentí la mano de Camila acariciando mi espalda con ternura y estaba tentada a darle un beso, pero
era demasiado pronto para que Lara viera eso. Debíamos tomar las cosas con calma y dejar que
todo el mundo se sintiera cómodo en primer lugar; aunque la niña parecía una gran defensora de
nosotras ya.

Otra voz apareció y la reconocí como la de Dinah. La cara familiar se unió a Lara en la pantalla.

Dinah: Bueno, bueno. ¿A quién tenemos aquí?

Lauren: Hey Dinah.

Camila: ¿Estás bien? Lara dijo que te sentías enferma.

Dinah: Estoy bien ahora. ¡Pero definitivamente no voy a montar esa cosa otra vez!

Lauren: Eso es lo que ella dijo.

320
Fue no intencional y apenas salido, pero a veces tenía una congelación en el cerebro y las bromas
inapropiadas simplemente dejaban mis labios. Camila y Dinah me miraron en estado de shock,
pero luego se echaron a reír.

Lara: ¿Qué es tan gracioso? ¡Quiero reírme también!

Dinah: Bueno-

Camila: ¡DINAH!

Dinah: Oh mi Dios, cálmate. No iba a decir algo realmente. Jesús, pareces un poco nerviosa.
¿Lauren no se encargó de eso?

Tanto yo como Camila nos sonrojamos antes el comentario mientras Dinah sonrió con aire de
suficiencia. No podía dejar que se saliera con la suya y seguí el juego. Lara no entendería nada de
todos modos.

Lauren: No todavía.

Dinah: ¡Oohoo!

Camila: Bueno, eso es suficiente.

Dinah: Y en esa nota, es el momento de decir adiós. Tírales un beso, Lara.

Lara: ¡Adiós mami! ¡Adiós Lauren! Las quiero.

Camila: Yo también te quiero. Hasta pronto, cariño.

Lauren: Adiós, pequeña. También te quiero.

Dinah: Diviértanse ustedes dos.

La polinesia hizo un guiño insinuante y puso fin a la llamada antes de que cualquiera de nosotras
pudiera decir una palabra. Reí ligeramente como Camila guardó su teléfono, pero luego de la nada
me dio un beso. Sus brazos se envolvieron mi cuello y la presión de sus labios y cuerpo casi me
empujaron al borde.

"Wow, ¿Qué fue eso?" Di un grito ahogado cuando ella se apartó.

"Por tratar a Lara en la forma que lo haces", respondió, con una sonrisa plasmada en su rostro.
"Nunca he visto a nadie ser tan buena con ella excepto por Dinah tal vez. Pero incluso eso es
diferente."

"Es algo...fácil para ser honesta", admití porque realmente era sin esfuerzo. "Quiero decir, ¿Cómo
no amarla?"

321
"Tal vez, pero...ni siquiera sé cómo describirlo, cuando veo a las dos interactuando", la voz de la
joven se suavizó.

"Eso está bien, puedes darme otro beso en lugar de un adjetivo", ofrecí con una sonrisa y recibí lo
que quería. Colocando mis manos en su cintura, la abracé con fuerza y honestamente podía
quedarme así para siempre. Ella había estado en lo cierto. Esto no era muy diferente de cómo nos
relacionábamos ahora que antes de ser formal. Sólo que ahora significaba más y no había la
preocupación por traspasar límites.

Después de intercambiar algunos besos, seguimos caminando hasta que vi una tienda de artículos
deportivos.

"Vamos, entremos y miremos su alrededor", arrastré a la otra morena mientras sostenía su mano.

"Lo que sólo deseas es comprar otro par de zapatillas de fútbol", ella había dado en el clavo pero
me siguió al interior. "¿No tienes suficientes por ahora? ¿Cuántos pares tienes?"

"Honestamente....no tengo ni idea", reí ligeramente, pero ya estaba viendo los productos nuevos.
"Oh Dios mío, mira eso. ¡Estos son geniales!" cogí un par de zapatillas de oro, mientras Camila
negó con la cabeza.

"Esos son los nuevos Nike Hypervenom Phantom Premium FG Golden F907", un asistente de
ventas masculino explicó y aparentemente se había dado cuento de mi afán. "Ellos son nuevos y el
mejor par de zapatillas que puede poseer."

"Estoy, literalmente, enamorada de ellos en este momento", comenté y vi a Camila rodar los ojos.
"Mierda, mira eso", descubrí un par de zapatillas de fútbol muy pequeñas para niños. Era la misma
pareja que estaba sosteniendo pero en versión pequeña. "!Lara y yo podríamos tener un juego de
zapatillas! Sería un regalo de cumpleaños genial, ¿No?" yo no paraba y estaba casi sorprendida de
mi propio zumbido.

"Lauren, no tienes que hacer eso", la otra jugadora dijo con calma. "Estoy segura que agradecería
cualquier regalo."

"Eso sería personal y genial al mismo tiempo, sin embargo", murmuré y ya había tomado la
decisión de comprarlos cuando los había visto por primera vez.

"Entonces esas serían sus primeras zapatillas de fútbol", la joven madre reveló.

"Bueno, eso es todo entonces", le dije rápidamente. "Me los llevaré. Ambos", le dije al vendedor
que estaba claramente feliz de hacer una venta tan fácil, pero cara. Diciéndole mi número de
zapato, Camila intervino con el de Lara lo que lo hizo perfecto. El rubio desapareció para
conseguirlos para nosotras.

"Tú, literalmente, te ves como un niño en una tienda de dulces", Camila sonrió divertida por mi
entusiasmo.

322
"Me gusta regalonearme a veces, pero no hay mejor que dar regalos a otras personas", le contesté
con sinceridad. Por mucho que me gustaran las botas nuevas para mí, estaba mucho más
entusiasmado acerca de Lara recibiendo el par idéntico. Me acerqué a mi novia a partir de hoy y
crucé los brazos alrededor de su cintura. "Está bien que le esté haciendo un regalo, ¿Verdad?"

"Por supuesto", ella asintió con la cabeza al instante y acarició mis brazos con las palmas de sus
manos. "Admítelo, estás haciendo esto porque te dije lo mucho que me llega cuando tienes un
vínculo con ella", bromeó y enarqué una ceja.

"Todo esto es parte de mi malvado plan para hacer que estés hasta los talones por mí", mis labios
formaron otra sonrisa. "¿Cómo lo estoy haciendo hasta ahora?"

"Meh", Camila se encogió de hombros para burlarse de mí con su indiferencia juguetona.

"Que bueno, ¿Eh?" reí, pero, obviamente, sabía que estaba bromeando. Su fachada se rompió
rápidamente mientras se inclinaba.

"De hecho eso realmente...me enciende", la centrocampista izquierda descascarilló


seductoramente y se mordió el labio inferior.

"Sólo estás tratando de ponerme nerviosa de nuevo", supuse, pero sentí su mano deslizarse por
debajo de mi chaqueta y camiseta para acariciar la delicada piel de mi estómago.

"Tal vez un poco", admitió tímidamente. "Pero también es la verdad."

"Interesante", dije con aire de suficiencia, pero me agaché para encontrar sus labios.
Conectándolos con los míos, por millonésima vez hoy al parecer; todavía parecía tan emocionante
como la primera vez hace más de cuatro años.

Por desgracia, no duro mucho tiempo porque escuché a alguien aclarando su garganta. Era el
asistente de ventas con las zapatillas que había traído de la bodega. De mala gana dejando de lado
a Camila, lo seguí para terminar mi compra.

Al salir de la tienda, tomé la mano de Camila en una manera aparentemente ya acostumbrada.

"Me muero de hambre. ¿Quieres comer algo?" Camila reveló y miré a mi alrededor para haber si
había algunos restaurantes.

"No tengo hambre pero podemos mirar alrededor si quieres conseguir algo", le ofrecí.

"¿Cómo no tienes hambre?" su voz era de asombro.

"Me haré un batido de proteínas en el hotel", le expliqué mi rutina de todas las noches.

"Incluso has comido en el almuerzo porque yo no vi", el tono de la joven cambió a preocupación.

"¿Y quién eres tú? ¿La policía de los alimentos?" Contesté con una sonrisa.

323
"Lo digo en serio, Lauren", me di cuenta de su verdadera preocupación ahora. "Casi nunca veo que
comes y haces ejercicio más de la mitad del equipo combinado."

"Me tomo muy en serio esas cosas, eso lo sabes", traté de explicar. "Es algo más que los 90
minutos en el campo que cuentan. Ser un deportista profesional es un estilo de vida y la dieta o
hacer ejercicio para mantenerse en forma es, obviamente, parte de ella. No veo por qué te
preocupas. ¿Tú no ves lo que comes?"

"Bueno, lo intento y a veces no, pero, sinceramente, no hago dieta para nada", admitió mientras
caminábamos de regreso al hotel.

"Tienes suerte entonces, debido que nosotros los mortales, no tenemos una velocidad
sobrehumana y metabolismo, tenemos que ser un poco más disciplinados", quería aliviar su
preocupación con una pequeña broma.

"La disciplina es una cosa, pero ese comportamiento meticuloso parece casi...compulsivo-"

"¿Qué estás tratando de decir, Camila?" me fui agitando porque ella estaba haciendo esto una
cosa muy importante por ninguna razón en absoluto.

"Nada, no quise molestarte", ella se había percatado de mi irritación y trató de dar marcha atrás.

"Suena como si me estás acusando de algo y, sinceramente, no me gusta", expresé mi opinión y la


sentí envolviendo su brazo alrededor de mi cintura para abrazarme.

"Lo siento", se disculpó y suspiró profundamente mientras yo correspondí su abrazo. "Exageré,


tienes razón. Siempre he sabido que eres tan dedicada y confío en que estás haciendo todo lo
necesario de una manera saludable. No te enfades conmigo, por favor."

"No lo estoy", sacudí mi cabeza y besé su frente con cariño. "Me sentí un poco emboscada."

"No va a suceder de nuevo", Camila se relajó en mis brazos y lo dejó así.

Caminando de regreso, encontramos una pequeña pizzería y la centrocampista consiguió una gran
porción antes de llegar al hotel. Al entrar en el vestíbulo, me solté de su mano y recibí una mirada
de sorpresa de ella a cambio.

"Hay una cosa más que quería hablar", le dije con vacilación.

"No quieres decirles a los otros compañeros de equipo acerca de nosotras", básicamente leyó mi
mente y me dejó sin palabras. "Está bien. Estoy de acuerdo en que no deberíamos hacerlo una
gran cosa hasta que las cosas sean más estables. No queremos parecer poco profesional, ¿No?"

"¿Cómo...sabías eso?" Cuestioné genuinamente desconcertada como hicimos nuestro camino a


través del pasillo.

"Porque te conozco mejor de lo que piensas", ella me guiñó un ojo con una sonrisa adorable.

324
"¿Realmente no importa si esperamos para decirles?"

"No, creo que es mejor así por ahora", me sentí aliviada al escuchar eso. "Pero eso significa que no
voy a volver a tu habitación, entonces, ¿No? Asumo que Normani está de vuelta."

"Probablemente", asentí. "Pero yo hablaba en serio antes. Tal vez no es una cosa mala si no...ya
sabes hacemos eso por una vez. Tuve un buen rato con eso. No hay necesidad de apresurarse.
Sostener tu mano, hablar con Lara y besarte cada vez que quiero es perfecto", dije en voz baja,
pero con sinceridad y noté como se detenía frente a una de las habitaciones, suponiendo que era
la suya.

"Basta ya", estuvo a punto de gemir.

"¿Qué?" Me reí ligeramente.

"Mientras más romántica te pones, más ganas tengo de saltar sobre tus huesos", susurró para que
nadie pudiera escuchar, teniendo en cuenta nuestros compañeras de equipo que estaban
ocupando las habitaciones de todo el piso.

"Lástima que el día de San Valentín se acerca y no vamos a poder vernos", comenté ya que la
festividad estaba a unos pocos días.

"Definitivamente vamos a hacer algo el año que viene", dijo Camila con confianza de que habría
un próximo años para nosotras, lo que hizo mi corazón saltar en mi pecho. "Pase un buen rato
también."

"Bueno, me alegro", correspondí con una suave sonrisa y miré a mi alrededor de que no había
nadie allí. Inclinándome rápidamente, besé sus labios no tanto como me hubiera gustado, pero no
quería que ninguna de mis compañeras nos pillara. "Buenas noches", respiré suavemente y mi
corazón se agitó ante la vista de sus cariñosos ojos marrones.

"Buenas noches", ella habló en voz baja, así y me dio un último beso en los labios antes de
desaparecer en su habitación.

Tomé una respiración profunda y mis mejillas dolían por sonreír como una idiota hasta que llegué
a mi habitación. Normani no había regresado después de todo, pero aún así estaba contenta con
la decisión de no dormir con Camila esta noche. Se sentía como si hice lo que había que hacer. Me
senté en mi cama y recordé mi conversación con ella antes. Luego también me acordé lo que
había traído todo esto. La memoria de la llamada desesperada de mi hermana y las cuestiones de
mi madre pusieron freno a mi estado de ánimo al instante.

Hasta ahora, me había olvidado por completo de ella y eso era muy inusual. La pura felicidad de
estar con Camila había consumido mi ansiedad de lo contrario todo lo relacionado con mi madre
me habría consumido. Esos altoparlantes de cuán fuerte eran mis sentimientos por mi compañera
en realidad lo hicieron.

325
Los pensamientos de los problemas de mi familia estaban empezando a pasar factura otra vez.
Una vez más, respiré profundamente para desacelerar mi pulso y me levanté. Decidí ir a la cama,
para tratar de leer y distraerme. Teníamos un partido importante mañana, pero eso no estuvo en
todo el día en mi mente lo que me asustó un poco.

Mañana era un nuevo día. Ojalá tendría buenas noticias de mi madre para así poder concentrarme
en la evolución positiva de mi vida...como fin a la consecución de mi inalcanzable chica de
ensueño.

=================

Capitulo 21
Siempre era una de las primeras personas en levantarse en la mañana. Y así lo era Normani, por
eso me gustaba alojarme junto a ella, entre otras cosas. No tenía que preocuparme de despertarla
y podía disfrutar de mis madrugadas con ella.

Hoy era diferente, sin embargo. El estrés y la ansiedad del día anterior habían tomado un peaje
grande en mí más de lo esperado. Todavía estaba en la cama y me sentí completamente fuera
cuando oí a dos personas hablando en la habitación.

"¿Ella todavía está dormida?" Reconocí la voz asombrada de Camila como me desperté de mi
sueño.

"Sí, tal vez está un poco enferma o algo así", respondió Normani pero empecé a refregarme mis
ojos y me senté en mi cama.

"Estoy despierta", mi voz se quebró como lo hacía a veces en la mañana. Ambas me miraron y me
estiré suavemente para deshacerse la tensión de mi cuerpo.

"Buenos días", Camila sonrió y mi corazón la instante revoloteó en la realización de lo que había
pasado ayer.

"Buenos días", suspiré pero traté de ser sutil ya que no quería que ninguna de nuestras
compañeras se enteraran todavía.

"Creo que iré abajo para desayunar así ustedes dos pueden tener una sesión", Normani de
repente soltó. Bueno, mucho para nuestro plan de mantenerlo en secreto.

"¿Qué?" la más joven de la sala casi se ahogó. "Pensé...que no querías decirle a nadie", Camila,
obviamente, supuso que le había contado a Normani.

"Ella no lo hizo", mi amiga se rió mientras miraba nuestras expresiones conmocionadas. "Siempre
sentí que había algo entre ustedes y cuando ambas declinaron la cena de anoche para 'quedarse'"
ella usó sus dedos como comillas mientras me sonrojé. "Fue bastante obvio."

326
"¿Para ti o para todos?", le pregunté inmediatamente, ya que no me importaba realmente si
Normani sabía.

"No, creo que sólo fui yo. Los otros no tienen ni idea y no planeo decírselos", la centrocampista
defensiva explicó como exhalé con alivio.

"Gracias Mani", respondí con aprecio antes que Camila repitiera mis palabras de agradecimiento.

"No hay problema. Las veré en el desayuno", nos guiñó un ojo y salió de la habitación poco
después.

Tomando una respiración profunda, pasé mi mano por el pelo desordenado y vi a Camila acercarse
a la cama lentamente. Se veía tan hermosa con la chaqueta chándal roja del equipo. No pude
contenerme, pero todavía temía de su belleza cada vez que la veía. No estaba siendo superficial,
pero estaba agradecida por el hecho de que ella encendía todos mis sentidos. Cuando se sentó,
sentí su mano tiernamente acariciando mi mejilla, lo que fue inesperado pero aún más
reconfortante.

"¿Cómo te sientes?" La más joven preguntó claramente preocupada. "Te ves agotada."

"Me siento ansiosa", admití.

"¿Por el juego?"

"Por eso también", suspiré en voz baja y no quería ser tan negativa pero mis ruedas comenzaron a
girar de nuevo.

"¿Recibiste alguna noticia de tu mamá?" La izquierda centrocampista entendió de lo que estaba


hablando sin que yo tuviera que decirlo.

"No, todavía no", respondí con sinceridad. "Eso es probablemente el por qué me siento tan en el
borde."

La mano que estaba en mi mejilla hace segundos ya estaba llegando a mi barbilla. Ella se inclinó y
yo sabía lo que estaba haciendo, pero tiré un poco hacia atrás. Su expresión de horror me hizo
darme cuenta que probablemente ella tenía miedo de esto sería una nueva ronda de ida y vuelta.

"No me he cepillado mis dientes aún", le expliqué mi duda con una pequeña risa y vi su tensión
disolverse con una risita.

"Entonces voy a tener que elegir un lugar diferente, supongo", Camila descascarilló
seductoramente y levanté una ceja, sorprendida. Tomó sólo unos momentos antes de que ella
pusiera sus ojos en el nuevo objetivo y tragué como sus labios carnosos plantaron un beso en mi
cuello. Esperaba que ella se retirara después del pequeño beso pero no lo hizo. En cambio, sentí
los suaves labios repartiendo besos y dejando que su lengua cepillara la piel sensible. La siguiente
aspiración que ella creó con su boca fue verdaderamente inesperado para tan temprano en la

327
mañana. "Tal vez..." ella respiró antes de chupar en un lugar diferente. "Puedo hacer algo para
sacarte del borde", su voz era tan entrecortada que mi corazón dio un vuelco.

"Tú estás... ¿No estás hablando en serio?", le susurré con voz temblorosa, pero sentí su mano
errante en mi muslo.

"Te lo debo después de lo que hiciste en el camarín en París", mi compañera de equipo respondió
en voz baja pero mordisqueó el lóbulo de mi oreja.

"Por una vez..." Contuve el aliento, porque mi oreja era probablemente el punto más débil para
mí. "...por una vez no se trata de una competición, bebé. No voy a llevar la cuenta."

"Sólo porque tú estás ganando", su pequeña risa justo debajo de mi oreja fue celestial.

Bajo cualquier otra circunstancia, me hubiera encantado cada minuto de esto, pero me sentía tan
fuera de sí aún. Mi cabeza no estaba en ella, aunque se sentía tan bien estar finalmente con ella.
Camila suspiró suavemente y apoyó su frente contra mi oreja ahora.

"No estás en el estado de ánimo, ¿No?" Detectó mi duda, pero no quería que se molestara o
tuviera una idea equivocada.

"No es eso, pero me siento tan tensa en este momento que parece que no puedo relajarme lo
suficiente para disfrutar. ¿Tiene eso sentido?" Le pregunté insegura pero busqué su mirada.

"Lo tiene. Sólo quiero hacer algo para que te sientas mejor, supongo", sus labios formaron una
sonrisa triste y odiaba ver ese dejo de decepción.

"Ya lo estás haciendo estando aquí", le dije sinceramente y tracé la línea de su mandíbula con mi
dedo índice. Su sonrisa se ensanchó un poco y cerró la distancia esta vez con un beso en los labios.
Con un suspiro de pura felicidad, no había pasado ni doce horas desde nuestro último beso, pero
sentía mariposas invadiendo mi estómago causando caos absoluto. Era suave pero perfecto.
Encontrándome con los ojos marrones después, nuevamente reafirmé lo mucho que me había
enamorado de ella.

"Sí....realmente necesitas cepillarte los dientes", Camila entonces dijo y eché la cabeza hacia atrás
en una gran carcajada.

"Te odio ahora mismo", yo estaba bromeando con claridad y sacudí la cabeza.

"Bueno, me encanta verte reír, así que mi misión está cumplida", la joven madre reveló con aire de
suficiencia aún dulcemente. ¿Cómo hacia eso? ¿Ser tan linda pero sexy al mismo tiempo?

"Está bien, quizá, sólo quizá, te amo...un poco", fruncí los labios en un pequeño puchero para ver a
la otra chica mordiéndose el labio inferior.

328
"Puedo amarte también...sólo un poquito", ella correspondió y cogí su mano para entrelazar
nuestros dedos. Aspiré profundamente y puse mi brazo alrededor de ella, al igual que ayer,
mientras caminábamos, con aún nuestras manos entrelazadas. Acercándola más hacia mi costado,
me encantó lo bien que nuestros cuerpos parecían encajar entre sí. Su cabeza descansaba
cómodamente en el hueco de mi cuello y sentí su aliento cálido en mi piel. Cerré los ojos y suspiré
con fuerza esta vez.

"¿Qué pasa?" ella lo captó.

"¿Puedo ser honesta?", le dije en un susurro.

"Siempre."

"Esto ya es mucho más difícil que antes", traté de explicar lo que sentía en el momento. "Quiero
decir, tuve una relación a larga distancia antes pero esto es tan diferente. Ni siquiera te has ido
todavía, pero no puedo soportar la idea de marcharnos después del partido. Ahora que sé lo que
se siente, estar juntas...salir o incluso estar abrazadas así...no quiero que termine."

"Confía en mí, me siento de la misma manera", la otra morena confesó en voz baja. "Pero sé que
vamos a hacer que funcione. Mientras sigamos siendo honestas, no veo cualquier otra cosa que se
interponga en medio de nosotras."

"Tienes razón", asentí sutilmente. "Simplemente es una mierda."

"Lo sé."

Nos quedamos en nuestro abrazo por un rato antes de que ella se apartara y asumí que quería que
me preparara para el desayuno.

"Aunque, hay algo que tengo que decirte", la voz de Camila se llenó de nerviosismo, de repente,
mientras me miraba. "Austin estará en la fiesta de cumpleaños de Lara pasado mañana."

"Oh."

¿Oh? ¡¿De verdad, Lauren?! ¿Esa fue mi respuesta cuando ella reveló que su ex marido, también
conocido como el padre de su hija, también conocido como el primer amor de su vida estaba
haciendo otra aparición en su vida?

"Sabes que no hay nada de qué preocuparse", sonaba un poco alarmada por mi reacción atónita.
"Pero él es el padre de Lara y no lo puedo mantenerlo exactamente fuera de mi vida, porque eso
sería injusto para Lara-"

"Lo entiendo", interrumpí y apreté su mano con comprensión. "No te preocupes, entiendo y tienes
toda la razón. No tienes que explicar. Sólo estoy...celosa de que él va a estar allí y yo no", admití
honestamente porque tenía que quedarme en Boston por la universidad.

329
"Vas a estar allí, porque voy a arreglar una vídeo-llamada para que puedas hablar con ella, te lo
prometo", la madre soltera sólo quería hacerme sentir mejor y volví a asentir.

"Él seguro no será capaz de derrotar mi regalo", reí entre dientes e hice referencia a las zapatillas
de fútbol Golden que había comprado para Lara el día anterior.

"No, no lo hará", Camila sonrió contenta de que estuviera bien con Austin estando allí y dio otro
rápido beso en mis labios. "Pero es hora del desayuno y no queremos parecer sospechosas por
llegar tarde."

La noticia de Austin y la ansiedad en curso de mi madre realmente habían trastornado mi


estómago. Yo tenía un estómago nervioso, para empezar, y cada vez que trataba con esos
sentimientos desagradables, perdía mi apetito como ahora. Pero Camila había estado tan
preocupada acerca de mis hábitos alimenticios que ya no quería que se preocupara más. Así que
me decidí a comer por lo menos un poco en el desayuno para evitar cuestionamientos y
preocupaciones innecesarias.

Fue lejos el peor juego que había jugada para la USWNT hasta ahora. Había perdido todos los
balones y no era capaz de encontrar mi ritmo. Por lo general, era mi trabajo ser estructuradora y
creativa pero hoy no fui capaz de hacerlo bien. El hecho de que había estado tan angustiada
estaba causando que estuviera fuera de foco en el terreno de juego también y eso me frustraba
más allá de la creencia.

Por suerte mis compañeras de equipo lo compensaron y estábamos a la cabeza, pero eso no se
debió a mí. Había pasado una hora del partido de clasificación antes de que viera al árbitro soplar
su silbato dando el signo de realizar una sustitución. Miré a un lado y vi a Camila de pie allí. El
cuarto árbitro levantó los números pertenecientes a los jugadores que estaban a punto de ser
reemplazados: 10 y 7. Yo iba fuera y Camila entraba.

Lo había visto venir porque jugué horrible. Con la cabeza gacha, sólo quería salir del campo tan
pronto como fuera posible. Camila aplaudía aunque realmente no lo merecía. Nuestro entrenador
haría algunos cambios tácticos ya que no jugábamos en las mismas posiciones, pero fui sin duda la
jugadora más débil del equipo hoy. Tenía sentido si me quería fuera. Sentí a Normani dándome un
palmadita alentadora en la parte posterior de mi espalda.

Llegando a las líneas laterales, ni siquiera podía mirar a mi novia porque estaba muy enojada
conmigo misma. Intercambiamos un rápido abrazo antes de que ella corriera a la cancha y recibió
algunos aplausos. Ella era uno de los jugadores más prometedores y después de mi mal
desempeño; cualquiera era mejor para cambiar. Me entregaron una botella de agua y una
chaqueta. Tomando unos sorbos mientras pasaba a todo el mundo por la banca, tiré la botella al

330
suelo y me senté al final. Puse la chaqueta sobre mi cabeza y quería ocultar mi frustración, pero
fracasé miserablemente con mi pequeño arrebato.

Camila anotó sólo unos minutos más tarde. Por supuesto, la animé y estaba muy feliz por ella.
Pero la decepción de mi propio juego pesaba sobre mí; sobre todo porque todavía no tenía
noticias de mi madre o nadie había llegado hasta ella. Mi cabeza era un desastre. Así que evité a
todo el mundo después del partido y le dije a Camila que necesitaba de unos minutos para
calmarme. La felicité inmediatamente, pero luego me fui por mi propia cuenta.

No podríamos ser tan sospechosas alrededor de los otros compañeros de equipo y antes de darme
cuenta, estábamos descendiendo del autobús y ya en el aeropuerto. Todo el mundo estaba
diciendo adiós y me enfadé aún más porque no podía hacer lo que quería hacer. Simplemente
quería abrazar y besar a Camila como adiós pero todo el mundo estaba mirando, era imposible
tener un momento para nosotras. Sólo un simple abrazo intercambiamos antes de que la viera
caminar lejos para volar de regreso a París.

"Joder", murmuré y negué con la cabeza.

Así no era como quería que terminara, pero al menos estábamos finalmente listas para darle a
nuestra relación una oportunidad.

No tenía idea de por qué estaba tan nerviosa, pero lo estaba. Sentada frente a mi portátil, estaba
esperando a dos personas que aparecieran en mi pantalla. Era el cumpleaños de Lara y la hora
para nuestro vídeo chat. Durante todo el día no había sido capaz de pensar en otra cosa. Camila y
yo habíamos dejado las cosas un poco desagradables hace dos días, pero habíamos hablado y todo
estaba bien ahora. Ella entendió que había tenido un mal día y eso fue todo. Ahora estaba
emocionada de ver a su hija y a ella.

Mis labios inmediatamente formaron una gran sonrisa como la pantalla previamente en blanco se
presentó con la imagen de Camila y Lara. Dios, se veían tan lindas. La ahora niña de cuatro años de
edad, estaba sentada en el regazo de su madre y llevaba un pequeño lazo en el pelo castaño claro.
De hecho, la mayor llevaba uno igual en el pelo más oscuro y de inmediato estaba encariñada por
sus looks idénticos.

Lara: ¡Panqueques!

Lauren: Hola, pequeña. ¡Feliz cumpleaños!

Lara: Gracias. ¡Tengo cuatro ahora!

331
Lauren: Lo sé. ¿Cómo se siente?

Lara: ¡Genial! Tengo tantos regalos y un montón de pastel.

Lauren: Suena perfecto. Me alegro de que te estés divirtiendo. Lo siento mucho por no poder estar
allí.

Lara: Está bien. Pero tienes que venir muy pronto porque te extraño.

Lauren: Voy a tratar de ir lo más pronto que pueda.

Vi a la niña pequeña con alegría por el momento antes de ver a Camila besar el cabello de Lara
cariñosamente mientras nos escuchaba.

Lauren: Hola a ti también, por cierto.

Camila: Hey, es bueno verte.

Lauren: Sí, lo mismo digo. Te ves linda con ese moño. Me gusta en ambas.

Lara: Mami los compró como parte de mi regalo.

Lauren: ¿Has abierto el mío ya?

Lara: ¡Sí! Aquí, mira.

La niña luchó para ponerse de pie en el regazo de su madre, pero luego mostró las zapatillas de
fútbol Golden que llevaba. Mi corazón saltó de alegría al ver que el rostro de la pequeña se había
iluminado. Ella se sentó de nuevo con Camila abrazándola todo el tiempo con seguridad.

Lauren: Entonces, ¿Eso significa que te gustaron?

Lara: Sí, voy a usarlos todos los días.

Lauren: Sabes, tengo los mismo en realidad. Y hoy me los puse por primera vez también para
practicar.

Lara: ¿En serio?

Lauren: Sí, le voy a enviar una foto a tu mamá si quieres.

Lara: Bueno.

Lauren: ¿Qué más has recibido?

Lara: Tengo un montón de ropa y juguetes. Y este koala de peluche. Es mi favorito.

Ella mostró el animal de peluche y lo abrazó con fuerza.

332
Lauren: ¿Tiene un nombre?

Lara: No.

Lauren: Encontrarás uno bueno porque eres la mejor para poner apodos, ¿Verdad?

Lara: Tal vez le preguntaré a papi que nombre debe tener porque él me lo dio.

Antes de que tuviera la oportunidad de pensar realmente, oí una voz masculina que apareció fuera
de pantalla que obviamente le pertenecía al padre de la niña.

Austin: Ahí estás, niña bonita. ¿Qué estás haciendo?

Lara: Estoy hablando con Panqueques.

Austin: ¿Hablando con Panqueques? ¿Eso es una especie de vídeo juego?

Lara: Noooo, esa es Panqueques.

La voz se hizo más fuerte y esperaba que él no se acercara a ellas, pero mi corazón cayó en picada
cuando se puso al lado de ellas. Lara estaba apuntándome y riendo, pero sentí un dolor sordo en
el pecho. Era una estupidez, pero la imagen de ellos tres me mató. Eran una familia - una unidad
por su cuenta, incluso si era sólo biológicamente; aunque eso no era verdad, ya sea porque no
estaban juntos ya, así que eso era demasiado emocional. Y yo no tenía parte en eso.

Mis pensamientos fueron interrumpidos bruscamente como Austin me miró por un momento,
pero rápidamente miró a Camila.

Austin: ¿Ustedes dos son una cosa ahora?

Camila: Austin, para.

Austin: ¿Por qué? Creo que debo saber lo que está pasando ya que todos lo saben al parecer.

Camila: Podemos hablar de esto más tarde, por favor.

Austin: Debería haber sabido que caerías por esto después de que empezaste a jugar
profesionalmente.

Camila: Bueno, creo que eso es suficiente.

Austin: Si afecta a mi hija, y obviamente lo hace porque está hablando con ella, entonces tengo
derecho a saber.

Lara: Papi, ¿Por qué estás enojado?

333
Afortunadamente, la pequeña interrumpió lo que podría haberse convertido en una pelea y vi a
Austin calmarse. Él le acarició el pelo a su hija y la besó en la mejilla. El dolor en mi pecho estaba
empeorando con cada segundo.

Austin: No estoy enojado, bebé. Lo siento. Este no es el momento para estar enojado por nadie.
Pero estoy un poco triste porque siempre te extraño mucho y ahora que estoy aquí, quiero pasar
cada segundo contigo. ¿Qué te parece si comemos un poco más de pastel y jugamos después?

Lara: ¡Yay! Realmente quiero. ¿Está bien si me voy, Panqueques?

Lauren: Por supuesto. Diviértete, pequeña. Y feliz cumpleaños de nuevo.

Lara: Adiós Panqueques.

Austin: Sí...adiós Panqueques.

Esas últimas frases definitivamente estuvieron acompañadas con un tono de burla y con una
mirada en mi dirección antes que Austin tomara a Lara. Oí la puerta cerrarse y Camila suspiró
ruidosamente. Ella se había quedado atrás y me miró con más atención ahora, arreglando la cama
porque lo que ella estaba más cerca.

C: ¡Lo siento mucho! Él es un idiota a veces.

L: No, él tiene razón.

C: ¿De qué estás hablando?

L: Él está celoso de que ocupe su tiempo con su hija y entiendo eso. Estoy muy celosa de que no
puedo estar allí.

C: Vas a estar allí para otros momentos importantes.

L: Sí, lo sé. Aún así, en cierto modo entiendo por qué está tan ansioso de pasar tiempo con ella.

C: Tal vez. Pero él no tiene que iniciar una pelea frente a Lara.

L: Eso es cierto.

C: No hablemos más de él, por favor. ¿Cómo estás?

L: Muy bien, supongo.

C: ¿Has oído hablar de tu mamá?

L: Está de vuelta en sus medicinas. Su terapeuta me llamó antes del vídeo chat. Así que eso es
bueno por ahora, pero nunca se sabe cuánto tiempo dura.

C: Te ves muy cansada.

334
L: Te ves muy hermosa.

C: Lauren.

L: ¿Sí, querida?

C: Estoy hablando en serio.

L: Yo también, te ves increíble.

C: Y te agradezco por ser tan encantadora, pero estoy preocupada. ¿Sigues estudiando tanto?

C: Lamentablemente sí. Tuve que tirar todo la otra noche. Este semestre está pateando mi trasero,
pero sólo quedan dos exámenes para la próxima semana. Esos son los más difíciles y quiero
hacerlo bien.

C: Estoy reconsiderando seriamente si ir a la universidad después de ver con lo que tienes que
lidiar.

L: Tú eres mucho más inteligente que yo, así que estoy segura de que no tendrías que estudiar
tanto.

C: Y estamos de vuelta a ser encantadora.

L: No puedo contenerme. Si no consigo verte entonces lo menos que puedo hacer es darte algunos
elogios.

C: Te extraño tanto. Es una locura que sólo han pasado dos días desde que nos vimos y ya te
extraño muchísimo.

L: Lo mismo digo. Y en dos días es el Día de San Valentín que no vamos a pasar juntas tampoco.

C: Tal vez te enviaré algunas fotos para compensarlo.

L: Oohh, ¡Ahora estamos hablando!

C: ¿Qué tal una con mi cara cubierta de chocolate y llorando mientras veo una película ñoña?
Suena como una selfie sexy, ¿Eh?

L: Me parece súper sexy, siempre y cuando tú estés en la imagen.

C: Tienes una respuesta para todo, ¿No? ¿Hay una clase que tomaste en la universidad en seducir
chicas?

L: Nunca tomaría esa clase; me gustaría enseñar esa clase.

C: Bueno, no eres humilde.

335
Estuve a punto de contestar cuando escuché a Lara llamando a su mamá. Camila suspiró
suavemente y me miró.

L: Está bien, vete. No quiero que piense que estoy manteniendo a su mamá lejos de ella en su
cumpleaños.

C: Ella nunca pensaría eso.

L: Aún así, debería volver a estudiar de todos modos.

C: Te mandaré un mensaje más tarde, ¿De acuerdo? Te amo.

L: Yo también te amo.

C: Adiós.

L: Adiós bebé.

Otros dos días habían pasado desde el cumpleaños de Lara. Era el día de San Valentín y estaba
sentada en casa, estudiando como una idiota mientras todos los demás estaban divirtiéndose; tal
vez no todos, pero sí los que estaban en una relación. Camila y yo nos habíamos enviado mensajes
de texto temprano y estábamos debatiendo si queríamos hablar por Skype más tarde. No estaba
segura de si quería porque me hacía extrañarla aún más.

El timbre sonó y asumí que era Kristie. Ella tenía una cita y probablemente se estaba volviendo
loca. Al menos ella había declinado pero dudaba de esa opción. Dejé caer mi libro y me acerqué a
la puerta. Otro golpe y me pregunté por qué la persona en el otro lado de la puerta estaba tan
impaciente.

"Jodido Jesúcris-", fue todo lo que murmuré antes de abrir la puerta y ver a Camila de pie en el
pasillo.

"Sorpresa", ella sonrió y me quedé muy sorprendida; realmente conmocionada por lo que no era
capaz de procesar en estos momentos.

"Qué...hola", balbuceé, pero luego sonreí cuando me di cuenta que esto era la realidad y no un
sueño.

"Feliz Día de San Valentín", Camila dejó caer su bolso y dio unos pasos hacia adelante. Puso sus
brazos alrededor de mi cuello y al instante puse los míos alrededor de su cintura. Sentí sus labios
chocando contra los míos con más pasión de que lo esperaba, pero correspondí con entusiasmo.
Apretando mi agarre alrededor de ella, nuestros cuerpos estaban presionados uno contra el otro y
suspiré de puro placer.

336
"Feliz Día de San Valentín", contesté un poco sin aliento, pero feliz. "No puedo creer que estés
aquí."

"Es, literalmente, sólo por hoy, porque tengo que volar de vuelta mañana temprano, pero no
podía soportar estar lejos hoy", susurró contra mis labios y los capturó en otro beso que fue más
domesticado ahora.

"Dios, deberías haber dicho algo sin embargo. No podré conseguir ninguna reserva para cenar en
cualquier lugar", entré en pánico porque quería que ella tuviera una gran noche.

"¿En serio estás enojada porque quería sorprenderte?" sus cejas se levantaron en una sonrisa y
negué con la cabeza rápidamente.

"No, por supuesto que no", di otro beso en sus labios para calmarla. "Hubiera deseado haber
hecho esto de una manera especial."

"Ya es especial. Puedo tener una cena de lujo cualquier otro día, pero ¿Sabes lo que no puedo
hacer cualquier otro día? Esto", respiró lentamente y me besó con tal ferocidad que me sentí
mareada después. Simplemente me quede allí como un ciervo en las altas luces como su boca
devoró la mía. Mis dedos agarraron la tela de su chaqueta antes de que ella se apartara.

"Buen punto", le respondí con una sonrisa y la vi sonriendo ampliamente. "Pero vamos a instalarte
aquí primero."

La dejé ir de mala gana, pero recogí su pequeño bolso de noche para llevarlo dentro.

"¿Estabas estudiando?", preguntó como entramos en la sala de estar y ella vio las carpetas y libros
repartidos en todas partes.

"Patético, pero sí", respondí con un gesto.

"¿Cuánto estudio crees que te queda?"

"Bebé, no voy a estudiar si tú estás aquí", intervine y la miré confundida.

"Pero no quiero destruir tu plan o algo así", la duda era visible en su rostro.

"Me queda una hora pero puedo hacer eso después de que te hayas ido", le expliqué con calma
como Camila se quitó la chaqueta y zapatos.

"Está bien, ya que probablemente no podamos conseguir una cena de todos modos; ¿Por qué no
nos quedamos, estudias por una hora y luego vemos que podemos hacer?"

"No puedes estar hablando en serio", estaba más sorprendida por su propuesta.

"¿Por qué no?"

337
"Porque volaste miles de kilómetros ¿Para poder verme estudiar?" levanté una ceja.

"Es sólo una hora y luego eres toda mía", la más joven rió una vez más. "Además, me gusta cuando
eres tan estudiosa. El hecho de que eres tan nerd y doméstica a veces es extremadamente sexy."

"¿En serio?"

"En serio", ella asintió con la cabeza y se mordió el labio inferior.

"Muy bien", me encogí de hombros ligeramente. "Si eso es lo que quieres, entonces voy a
terminar, pero tienes que pensar en lo que haremos después, ¿De acuerdo?"

"Suena perfecto", la otra morena estuvo de acuerdo.

Terminamos acurrucadas en la cama poco después y nunca había disfrutado estudiar tanto. Estaba
sentada con la espalda contra la cabecera de mi cama, mientras Camila estaba básicamente
recostada encima de mí, o en mi regazo. Su cabeza descansaba en mi pecho, el resto de su
delgado cuerpo estaba entre mis piernas. Estaba leyendo mis notas y la más joven había tomado
un libro mío para matar el tiempo. Era altamente distractor al principio tenerla tan cerca, pero
quería terminar mis estudios tan pronto como fuera posible y contenerme.

La hora había pasado más rápido de lo que pensaba y no pude controlarme más. Mi mano que
había acariciado perezosamente sus brazos ahora había vagado hacia otro lugar. Levantando el
dobladillo de su camiseta rápidamente, sentí la suave piel de su estómago bajo mis dedos.

"Lauren", la voz ronca regañó. "Se supone que debes estar estudiando."

"Lo estoy", le respondí con indiferencia.

"Oh ¿En serio? ¿Qué estás estudiando?" La más joven desafió.

"T-"

"No te atrevas a decir 'Tú' ahora", ella se rió, pero me interrumpió antes que pudiera decirlo.

"Qué tal...superficies inmaculadas suaves", claramente me había referido a su piel. "...y


perfectamente estructurados exhibidas", agregué y tracé los músculos abdominales sutiles de mi
novia. "Todo arquitectónicamente hablando, por supuesto."

"Por supuesto", la voz de Camila no era tan firme como antes.

"No, pero sinceramente, la hora terminó y estoy lista", le expliqué y la vi lanzar su libro lejos,
dándose la vuelta para que pudiera verla sonreír ampliamente.

"En ese caso", susurró y se inclinó para besarme. Me tomó la cara con las dos manos. A punto de
profundizar el beso, ella se apartó y estaba un poco sorprendida porque ella había estado tan
ansiosa de ser afectuosa antes. "Tengo una idea de lo que podemos hacer. Dijiste que no había

338
reservas en cualquier lugar, probablemente, ¿Verdad? Entonces, ¿Por qué no vamos a la cafetería
donde nos llevaste por primera vez a mí y Lara?"

"¿Hablas en serio?" Casi me reí porque parecía bastante decepcionante para la fecha del Día de
San Valentín.

"Sí, ese fue el comienzo de nuestra montaña rusa básicamente", la otra morena mostró otra
sonrisa. "Por lo tanto, tiene un valor sentimental y estoy bastante segura de que vamos a tener
una mesa."

"Eso me parece tan...no sé. Quería hacer algo especial para ti", puse un poco mala cara.

"¿Podrías parar?" Se mordió el labio inferior y utilizó su pulgar para forma una sonrisa en mis
labios en lugar de un puchero. "¿Cuántas veces tengo que decirte que esto ya es perfecto?"

"Entonces, ¿Déjame al menos darte mi regalo ahora?" Quería negociar, pero vi sus ojos
agrandarse.

"¿Me tienes un regalo?"

"¿Por qué eso es tan impactante?" No podía dejar de reír en voz baja.

"!Porque no tengo uno!" Ella casi chilló. "Supuse que no tendrías uno porque no sabías que iba a
venir. No conseguí uno para que no te sintieras mal."

"Que estés aquí ya es el mejor regalo del mundo", le dije con sinceridad pero ella suspiró
ruidosamente.

"Ugh, ahora me siento como una idiota", Camila murmuró.

"No lo eres. Puedes compensármelo comprando panqueques en el restaurante", sonreí y, por lo


tanto, estaba de acuerdo con su sugerencia de antes. Pero me levanté y cogí la caja de mi armario.
El objeto blanco tenía una cinta roja en él y lo puse en el regazo de Camila antes de sentarme en el
colchón de nuevo.

"Quiero ser la persona más buena y no aceptarlo, pero soy demasiado curiosa", la izquierda-
centrocampista finalmente sonrió también y empezó a abrir el regalo.

"No es nada grande, pero pensé que sería apropiado", estaba más nerviosa de lo que pensaba
cuando ella desenvolvió las zapatillas de fútbol Golden que hacían juego con las mías y las de Lara.
Quizás Austin sería parte de su familia para siempre y no podía cambiar eso. Pero por lo menos
podría unirnos con algo pequeño. No compartíamos ADN pero por lo menos era un comienzo. La
sonrisa sincera en el rostro de mi novia valió la pena.

"Esto es realmente dulce, gracias", la de ojos marrones se inclinó y me besó.

339
"Mira más de cerca", dije después de alejarme y sus cejas se levantaron.

Tomando una mirada más cerca, vio el toque personal que había añadido. En estos días una gran
cantidad de jugadores grababan sus zapatillas de fútbol con cualquier cosa que tenía un cierto
significado para ellos. Ambos zapatos de Camila tenías las fechas en el exterior y al instante
reconoció la primera.

"Ese es el cumpleaños de Lara", su voz tenía cariño y tomé una respiración profunda, porque la
siguiente me tenía preocupada. Ojeando la bota izquierda, su rostro cambió al instante. Toda su
expresión de antes se desvaneció en un segundo antes de que ella tragara. "Es...cómo....ese es el
cumpleaños de Sofi", la voz estaba cargada de emoción y sonaba ahogada.

"Pensé que esa iba a ser la mejor opción, porque sé que la amabas tanto", le respondí en un
susurro, con el temor de enojarla. "Y la elegí en el lado izquierdo porque la llevas en tu corazón
siempre y de esa manera...es sólo otra forma de llevarla contigo, supongo."

Camila estaba callada. Sus ojos marrones estaban fijos en los números negros bordados en la tela
de oro. Esto era todo. Había metido la pata; sobrepasado mis límites. Mi pulso se aceleraba y sentí
como si mi corazón iba a salirse de mi pecho en cualquier momento. Su pulgar rozó la fecha, vi sus
ojos llenarse de lágrimas. ¡Mierda!

"Camila...lo siento", traté de controlar los daños. "No debería haber hecho eso. No era mi
lugar...quiero decir, ni siquiera la conocí por desgracia, así que cómo iba a saber lo que ella
significa para ti...esto jodió todo y no quise molestarte, honestamente", yo divagaba antes que ella
levantó la mano y estableció que debía callar. Ella respiró profundo y finalmente encontró mi
mirada. La mirada vidriosa en sus ojos me rompió el corazón y en serio quería golpearme.

"Te amo", de repente ella habló con tanto afecto y sinceridad que realmente estaba asombrada.

"¿En serio?" Solté y la vi reír suavemente a través de sus lágrimas.

"¿Cómo no hacerlo?", Respondió ella y tomó mi mano.

"Gracias a Dios", exhalé con alivio. "Por un momento realmente pensé que había jodido todo."

"Tuviste este regalo todo el tiempo y ¿No pensaste que era especial?" ella negó con la cabeza
mientras entrelazaba nuestros dedos.

"No lo sé", respondí humildemente y sentí que me sonrojaba. "Esto suena raro pero es la primera
vez que en realidad tengo una novia en el Día de San Valentín. Tú probablemente tuviste muchos
con Austin cuando eras más joven y él te compró flores y todas esas cosas, pero nunca he tenido
eso así que...como que quería que fuera memorable."

"A veces, sabes exactamente lo que estás haciendo cuando eres coqueta y encantadora", dijo
Camila en voz baja. "Otras veces no tienes idea de lo adorable que puedes ser completamente sin
intención."

340
"¿Crees que soy adorable?" Traté de disimular que estaba nerviosa con una gran sonrisa.

"La más adorable", asintió sutilmente y apretó mi mano. "Pero tengo una pregunta."

"Dispara", dije sin dudarlo.

"¿Quieres ser mi Valentín, Lauren?", logró que el tinte rojo de mi cara fuera más prominente.
"Porque me sentiría honrada de ser tu primer San Valentín."

"¿Y yo soy la encantadora?" Bromeé, pero su sonrisa hizo que mi corazón aleteara como loco.

"¿Significa que 'Sí'?"

"No lo sé. Pregúntame de nuevo", le susurré, pero cerré la distancia entre nosotras. Básicamente
estaba recreando el momento en que yo le había preguntado si quería ser mi novia y ella al
parecer lo entendió ya que su sonrisa se hizo más amplia.

"¿Quieres ser mi San Valentín?", repitió y le contesté al besar sus maravillosos labios con tanto
cariño y amor como me fue humanamente posible para aceptar. Mis sentimientos estaban por
todo el lugar porque todo esto era tan inesperado, pero perfecto en todos los sentidos. El hecho
de que no había terminado aún y todavía teníamos un poco de tiempo para nosotras tenía mi
corazón latiendo con violencia.

Si esto era sólo la primera hora, entonces no podía esperar por el resto de la noche.

=================

Capitulo 22
Contenido explícito.

Camila's POV

Lauren había aceptado ir a la cafetería como había sugerido antes. Tal vez no fue su primera
opción para cenar en San Valentín, pero pensé que era apropiado. ¿Quién necesitaba de una cena
de lujo después del regalo que ella me había hecho? La memoria de yo desenvolviendo las
zapatillas de fútbol grabadas me puso la piel de gallina.

341
Miré a Lauren que conducía mientras yo estaba en silencio escuchando la música en el coche. Los
ojos verdes penetrantes estaban concentrados en las calles y suspiré sin saberlo, admirando su
perfil impecable. Cuando la había encontrado de nuevo en la ciudad, no había esperado que fuera
así de...dulce. Por supuesto, que la había conocido antes en la Sub-17, pero ella había cambiado
tanto que yo no había tenido ninguna expectativa real después de nuestros primeros meses
turbulentos en Boston juntas. ¿Quién hubiera sabido que la seductora sería una novia tan reflexiva
y sincera?

"¿Qué estás mirando?" Lauren volvió la cabeza hacia un lado y sonrió suavemente, al parecer
había notado mi mirada fija flagrante.

"Admiro la vista", sonreí y vi como su ceja se levantaba de esa manera suya.

"Suena como algo que yo diría", respondió ella, pero miró hacia delante de nuevo para prestar
atención al tráfico.

"Bueno, estoy aprendiendo algunas cosas", no pude contenerme, pero me mordí el labio inferior
cuando la vi haciendo las tareas más simples, como conducir un coche. ¡Ella era tan...sexy!

"Tal vez debería dar clases en cómo seducir a las chicas", la mayor bromeó y arregló algunos
mechones de pelo.

"Lo siento, eso nunca va a pasar", respondí al instante y sacudí la cabeza. "Sólo tienes permitido
dar clases particulares a mí."

"Debería haber sabido que eras el tipo de chica celosa", Lauren rió con picardía.

"¿Qué te hace decir eso?" Fruncí el ceño con curiosidad.

"Porque eres tan mandona", dijo sin dudarlo y casi me quedé sin aliento.

"!No soy mandona!" no estaba segura de por qué estaba tan sorprendida de escuchar eso, pero
fue inesperado.

"Sí, ¡Lo eres!" La otra morena rió levemente y miró otra vez. "No es una cosa mala. Me gusta que
seas tan centrada, y que sepas lo que quieres."

"¿Estás diciendo que llevo los pantalones en esto?" Reí ahora también.

"Tengo esta teoría", comenzó y enderezó su postura.

"Ahora estoy intrigada", la vi sonreír ampliamente.

"Ya sabes lo que dicen que hay todos esos tipos de lesbianas: marimacho, femenina, lipstick blab
bla", asentí mientras comenzaba y me preguntaba dónde iba esto. "En mi experiencia-"

342
"Y Dios sabe que tienes mucho de eso", tuve que interrumpir y vi sus ojos abriéndose
juguetonamente antes de que ella me tomara la mano y dio un pequeño beso en la parte posterior
de esta.

"Lo que quise decir es que las más tranquilas son siempre las mandonas", la centrocampista siguió.
"Como, esa pareja de lesbianas que estaban en la universidad que eran extremadamente cliché
por fuera. Una de ellas era más bien masculino y 'butchy' si se quiere decir. Y su novia era
extremadamente femenina y tranquila. Todo el mundo pensaba que los papales eran tan obvios,
pero yo me juntaba mucho con ellas y ¡La chica femme llevaba los pantalones totalmente! Ella
totalmente era de temer."

"Espera", fruncí mis cejas y traté de contener la risa, por lo que iba a decir. "¿Estás llamándote a ti
misma 'Butch'?" fracasé en mi intento y me reí en voz alta. Eso era ridículo porque ella siempre se
arreglaba mucho más que yo la mayor parte del tiempo.

"No", Lauren se unió a mi risa y echó la cabeza hacia atrás un poco. "No todas las relaciones son
tan estereotipadas y no me gustan esas categorías de todos modos. Eso fue sólo un ejemplo de
cómo la aparentemente dominante no es la que lleva los pantalones necesariamente. Todo es
cuestión de equilibrio realmente. Las dos somos muy femeninas, creo. Aunque tu podrías ser
lipstick", la sonrisa en su rostro volvía.

"Por favor", me burlé. "Te vi en el cumpleaños de Kristie. Tú eras la que llevaba ese vestido,
tacones y los labios pintados de rojo. Y yo...bueno, vamos a decir que tuve problemas para
centrarme en otra cosa realmente", admití tímidamente.

"Oh, ¿Sí?" Lauren sonrió y se detuvo en un semáforo en rojo, mirándome de nuevo. "¿Te gustó
eso?"

"Sí, me gustó", me mordí el labio inferior y las imágenes de aquella noche infiltraron mi cerebro,
haciendo mis mejillas sonrojar sutilmente. "Tal vez...deberías hacerlo más a menudo."

"Tal vez debería", estuvo de acuerdo y tragué saliva ante la vista de los orbes verdes penetrando
los míos. "Posiblemente para nuestra lección privada."

"Suena bien", traté de no sonrojarme más y agarré el cuello de su chaqueta de cuero para
acercarla.

"¿Ves? Mandona", murmuró ella, pero no quería discutir ahora y simplemente estrellé mis labios
contra los de ella. Por desgracia, sólo duró un segundo, porque el coche detrás de nosotras estaba
tocando la bocina ya que las luces se habían reverdecido.

"Ugh", Lauren gimió pero se apartó para evitar el bloqueo de los otros autos. Volví a escuchar su
música y me sorprendió encontrar tantas canciones de hip hop que su iPod tocaba. Su gusto era
muy ecléctico, como lo era el mío y asentí con la cabeza cuando comenzó 'Connect' de Drake.

343
"Me encanta esa canción", murmuré y miré por la ventana.

"¿Vas a ser 'matona' ahora conmigo?" Lauren se burlaba de mí una vez más mientras que yo
seguía juguetona y fui con eso.

"No tienes ni idea de lo turbio que era el primer barrio donde viví en Boston", le respondí lo que
era verdad.

"¿Recibiste alguna familiaridad con la cultura de allí?" Mi compañera de equipo siguió con las
bromas.

"Tuve que hacerlo debido a unas cuentas personas", estaba sobre todo tratando de hacerla reír.
"Pero luego tuve un poco de respeto entre la población."

"Eres una idiota a veces", la fachada de mi novia se quebró cuando rió más fuerte que antes. Mi
corazón saltó de alegría en mi pecho ante el sonido.

"Cuidado con lo que dices, chica. ¿O quieres ser la siguiente en la lista de esta chola?", tuve éxito
en hacer un acento latino que tuvo a Lauren casi muriendo de la risa ahora.

"No tenía ni idea de que fueras así de entrañable...o tonta", dijo la de ojos verdes sin aliento.

"Bruh, eso es suficiente", me estaba divirtiendo y tomé su gorra de Boston Breakers que estaba en
su tablero para ponerlo.

Para 'probar' a mí misma, empecé a cantar y subí el volumen. Meneaba la cabeza y hacia todo tipo
de movimientos ridículos que había visto que los raperos hacían, empecé a rapear junto a la voz
masculina que sonaba a través de los altavoces. Me gustaba cantar y los que habían escuchado mi
voz les gustaba, pero el rap era un poco diferente. Aún así, pensé que estaba bien y que era sólo
para hacer reír a Lauren de todos modos.

"Isn't it amazing how you talk all this shit and we still lack communication

How beautiful our kids will be, girl, I don't need convincing

How every conversation starts with this time will be different

Oh the idea is fun, oh the idea is fun

[Hook:]

Swanging, eyes closed just swanging

Same city, same friends if you're looking for me

Same city, same friends if you're looking

344
I'll be here just swanging

Don't talk to me like I'm famous

And don't asume cause I don't respect assumptions babe

I'm just tryna connect with somethin' babe

Swangin"

Me quebré después de eso porque ya no podía contener la risa más. El hecho de que la estábamos
pasando tan bien era todo lo que importaba. Lauren dijo que sus mejillas dolían de tanto sonreír y
eso hizo que la ridiculez valiera la pena.

Llegamos al restaurante poco después y tomamos un asiento. No estaba muy lleno, pera había una
cara conocida; la camarera era la misma de la primera vez que había estado aquí con Lauren. Su
nombre era Ally y se acercó a nosotras con el mayor ceño. La chica con el bloc de notas miró
fijamente a Lauren.

"¿No eres algún tipo de deportista profesional?" la chica de pelo claro le preguntó a Lauren y yo
observaba en silencio.

"Uhm, sí", la chica sentada frente a mí respondió vacilante.

"¿Y aquí es donde traes a tu cita el Día de San Valentín?" dijo Ally y la cara de Lauren cayó al
instante mientras me miraba.

"!Lo ves! Te dije que deberíamos haber ido a otro sitio", dijo la de ojos verdes con un mohín y
suspiré profundamente.

"No, esto es genial", traté de apaciguar y miré a la camarera. "En realidad, fue mi idea venir aquí."

"Sin ánimo de ofender, pero deberías mirar las cosas más en alto cuando estas saliendo con una
deportista profesional", la camarera se encontró con mi mirada.

"Me temo que así no soy yo", le respondí cortésmente y sonreí sin revelar que yo también era una.

"Muy bien, eso es justo", Ally se encogió de hombros. "Espera...has estado aquí antes, ¿No?"

"Sí, pero eso fue hace un tiempo. Con Lauren y mi hija pequeña si eso ayuda. Y derramé el café,
por supuesto", agregué, pero la chica ojos marrones miró a Lauren con sorpresa.

"Nunca traes a una chica dos veces", espetó y los ojos de Lauren se agrandaron.

"Por Dios, que manera de arruinar mi juego", la morena regresó. "Es una buena cosa entonces
porque ella no es sólo otra chica, es mi novia", una verdadera sonrisa apareció en sus labios.

345
"Mira quien finalmente se ha comprometido", Ally bromeó y sabía que era común que bromearan
entre ellas como Lauren me había hablado de aquello. "Podrías haber hecho algo mejor que esto,
sin embargo. Vamos."

"Estás trabajando en el Día de San Valentín, por lo que no debes juzgar", replicó Lauren todavía
bromeando.

"Me voy en unos pocos minutos y mi cita me llevará a un restaurante real, con comida real y un
poco de champán al final", la camarera reveló mucho para la desgracia de Lauren.

"Me siento tan mal ahora", murmuró mi compañera de equipo en otro suspiro.

"Vamos a ordenar tu pedido ya que me voy pronto."

"Creo que deberíamos comer panqueques", solté y Lauren casi rió de nuevo.

"¿En serio, Camila?" Al menos ella estaba sonriendo ahora.

"Es lindo", protesté ante su pregunta.

"Si tú lo dices, mandona-con-pantalones", ella me dio otro apodo y rodé mis ojos juguetonamente.
"Entonces quiero panqueques con jarabe extra y dos Coca-Colas."

Ally dejó nuestra mesa y tomé la mano de Lauren en la mesa, entrelazando nuestros dedos.

"No te atrevas a castigarte de nuevo sobre venir aquí", no quería que ella se sintiera mal después
de las burlas de Ally.

"Sé que no debería, pero todavía deseo poder haber hecho algo más."

"Ni siquiera voy a encontrarte la razón porque todo esto es perfecto para mí", le apreté la mano y
la sentí haciendo lo mismo. "Gracias por el regalo de nuevo. Estaba un poco conmocionada antes."

"Eso está bien. Ahora todas tenemos los mismo zapatos y somos una triple amenaza", Lauren
acarició el dorso de mi mano con su pulgar. "¿Cómo está Lara?"

"Está muy bien. Pero estaba un poco triste cuando le dije que vendría a verte", le confesé y respiré
hondo. "Pero voy a traerla para el próximo partido de clasificación para que las dos puedan verse
de nuevo."

"Eso es bueno de escuchar. Echo de menos a ese pequeño nugget", la mediocampista central
expresó llena de cariño. "¿Cómo fue el resto de su cumpleaños? ¿Acaso Austin te dio un mal
rato?"

"No, estuvo bien. De hecho, mejoró su comportamiento después. Era importante para Lara y creo
que él entiende eso por ahora", le expliqué con calma. "No estuvo muy involucrado cuando me
mudé a Boston y eso fue duro para ella. Creo que está tratando de compensárselo ahora."

346
"Estoy feliz por ella entonces", dijo la mayor.

"Sabes que no hay nada más que eso, ¿Verdad?" me alarmé un poco porque Lauren
parecía...triste.

"Por supuesto", respondió de inmediato y forzó una pequeña sonrisa.

"Él estaba allí sólo por ella y eso no tiene nada que ver conmigo-"

"Bebé", me interrumpió y le dio otro apretón a mi mano. "Está bien, lo prometo. Lo entiendo y no
tienes que preocuparte."

A pesar de que parecía sincera, había ese dejo de tristeza en sus ojos cuando había mencionado a
Austin y Lara, eso me molestó. No quería que ella tuviera una impresión equivocada, pero ella me
dijo que estaba bien y no quería hacer una gran cosa de eso.

Ally se acercó con nuestra orden y de repente puso una botella de champán en la mesa. Lauren y
yo miramos hacia arriba con sorpresa.

"De esta manera pueden tener una copa más tarde y tener por lo menos algo lujoso", explicó la
camarera.

"Así que puedes ser adorable, después de todo", Lauren rió entre dientes.

"No sé de qué estás hablando ya que siempre soy adorable", replicó ella.

"No voy a estar en desacuerdo porque quiero quedarme el champán", mi novia respondió con
indiferencia.

"Inteligente", Ally reconoció con una sonrisa ahora. "Un cliente me lo dio, pero pensé que la
podrías necesitar más que yo."

Ambas les agradecimos a Ally después de eso y le deseamos una buena noche ya que se iría con
sus cita. Lauren quería sentarse cerca y tiró de la silla a mi lado así estábamos una al lado de la
otra. Tal vez yo era la mandona y ella era la dócil después de todo. No importa cuáles eran los
papeles, lo disfruté enormemente. Compartimos panqueques y hablamos de todo y nada. Le hablé
de Dinah y de cómo ella se había torcido el tobillo en la última práctica. Ella estuvo un poco
deprimida después, pero estar cerca de su familia y amigos le levantó mucho el ánimo.

Terminamos nuestro plato y estaba tomando mi último sorbo de Coca-cola cuando sentí algo
pegajoso en mi oído. Mis ojos se abrieron y casi me atraganté con mi bebida cuando me di cuenta
que Lauren había mojado su dedo con jarabe, y untó una pequeña porción en mi lóbulo de la
oreja. Sabiendo lo que iba a hacer, sentí su lengua recogiendo la sustancia con habilidad. Tragué
fuertemente cuando sus labios se cerraron alrededor del lóbulo de mi oreja y lo chupó
ligeramente. Su mano estaba corriendo hasta mi muslo y cerré los ojos sin querer.

347
Tan pronto como su mano llegó a la parte interna de mi muslo, me acordé de nuestro momento
en New York antes de haber dormido juntas por primera vez. No hacía falta decir que estaba
quemando el recuerdo. Sus dientes rasparon la zona sensible y le agarré la mano antes de que
llegara a territorio peligroso. Sosteniendo su muñeca en un apretón débil, reuní mis pensamientos
por un momento y respiré hondo.

"Eres mala", reí, pero di un grito ahogado ya que chupó el lóbulo de mi oreja una vez más.

"¿Me puedes culpar por estar emocionada?" descascarilló y me estremecí ante su voz rasposa. No,
no la podía culpar en absoluto, ya que estaba experimentando la privación peor que yo...si eso era
posible.

"Tú fuiste la que no estaba de humor el fin de semana", argumenté con una sonrisa.

"Oh, pero estoy de humor esta noche", respondió en otro tono lascivo ronco que fue suficiente
para mí.

"Entonces vamos", le susurré y sentí sus labios formando una sonrisa en mi oído.

"Su deseo es mi comando, mandona", dijo Lauren mientras me tiró y no estaba en derecho para
protestar en esta ocasión.

Pagó con una generosa propina e hicimos nuestro camino de regreso a su casa. Mi corazón estaba
latiendo fuera de control en anticipación de lo que estaba por venir. Al llegar al elegante
departamento, nos sacamos nuestros zapatos y nos deshicimos de nuestras chaquetas antes de
que yo no quisiera dudar más y me fui directo a su dormitorio.

Sabía que ella iba a seguirme y me eché una mirada en el espejo grande de su habitación para
refrescarme un poco.

Lauren estaba caminando hacia un lado diferente de la habitación. Escuché como la música
llenaba el cuarto un poco después y sonreí de oreja a oreja al escuchar otra canción de Drake
sonando. ¿No es esta su sex-playlist?, me pregunté internamente pero no tenía tiempo para dar
seguida a ese pensamiento. Sentí un par de brazos familiares abrazándome por detrás enviándole
todo tipo de escalofríos a mi cuerpo. Sentirla tan cerca, mi corazón se paró de golpe cuando sus
labios encontraron mi oreja de nuevo.

"It's not me and you(Ya no es tú y yo)

It's not me. It's you(No soy yo. Eres tú)

You're reckless and you know it(Tú eres imprudente y lo sabes)

They don't love you like I do(Ellos no te aman como yo lo hago)

Say you're moving on, well, I guess that's just the motion"

348
"Escuchaba esa canción todo el tiempo cuando estábamos en la Sub-17 y todo ese caos empezó",
confesó Lauren y la miré en el espejo, besando mi oreja.

"Tal vez tú eres más 'matona' que yo, después de todo", me reí y la vi sonriendo. Ella se
balanceaba suavemente con el ritmo y me adapté al ritmo mientras sus caderas presionándose
contra las mías. Sus brazos me estaban afirmando muy bien y los tracé con mis dedos. Sus
movimientos eran cada vez más fuertes por lo que me estaba meciendo en sus brazos con la
música. Dios, ¿Cómo era tan cariñosa pero sexy a la vez?

Mi respiración se enganchó en la parte posterior de mi garganta, cuando escuché a la voz ronca de


repente cantar o rapear junto con sus labios aún cerca de mi oído, pero justo por encima de un
susurro.

"Looking back on it at least my pride is intact(Mirando al pasado, por lo menos mí orgullo está
intacto)

'Cause we said no strings attached(Porque dijimos 'Sin compromisos')

And I still got tied up in that(Y sigo comprometido con eso)

Every thing that I write is either for her or about her(Todo lo que escribo es para ella o sobre ella)

So I'm with her even when I'm here without her(Así que estoy con ella incluso cuando no estoy
con ella)

And she know it(Y ella lo sabe)

The girl that I want to save is like a danger to my health(La chica a la que quiero proteger es como
un peligro para mi salud)

Try being with somebody that want to be somebody else(Trato de estar con alguien que quiere
estar con alguien más)

I always thought she was perfect when she was being herself(Siempre pensé que ella era perfecta
cuando actuaba como ella misma)

Don't even know how to help(Ni siquiera sé cómo ayudar)"

Con la última sílaba la más vieja dio un beso apasionado en mi cuello y no pude reprimir el gemido
que escapó de mis labios. Al instante me di la vuelta y crucé los brazos alrededor de su cuello.
Nuestros labios se encontraron finalmente en un beso lento, pero sensual. Sus manos se movían
arriba y abajo por mis costados mientras yo me aferraba a ella desesperadamente. Separando mis
labios, traté de explorar el interior de su boca, pero ella me estaba tomando el pelo al no dejarme
hacerlo. Continuando rozando mi lengua contra su labio inferior y pidiendo permiso, ella no estaba
cediendo.

349
En cambio, ella se apartó y agarró mis dos manos. Nos llevó a la cama y esta era la primera vez que
realmente estaba allí. Instalándome en el gran colchón, sentí mi cabeza golpeando con las
almohadas suaves hasta que Lauren se unió a mí y me senté para conectar nuestros labios una vez
más. Me empujó hacia abajo con ella encima de mí. Suspiré de placer mientras su cuerpo se
instaló sobre el mío. Al abrir los ojos por un momento, saqué los mechones oscuros de su cara y
admiré cada característica. Los orbes verdes mirándome directamente a los ojos me daban
palpitaciones en el corazón.

"Eres tan hermosa", se me escapó, pero no estaba avergonzada ya que ella me piropeaba todo el
tiempo. Su sonrisa nerviosa sólo amplificó la sensación de mariposas en mi estómago.

"Tú eres muy guapa", respondió, y lo peor era que ella realmente lo creía cuando ella era tan
guapísima. Puse mi mano en la parte posterior de su cuello y la atraje hacia mí. Nuestras bocas se
conectaron en otro beso apasionado, dejé mi mano vagar entre nuestros cuerpos y traté de abrir
el botón de sus pantalones. La chica mayor en la parte superior rompió nuestro beso de repente.

"Vamos a tomarnos nuestro tiempo, bebé", susurró tiernamente y retiré mi mano lentamente.
"No hay necesidad de apresurarse. Quiero que esto sea especial", ella continuó haciendo que mi
corazón saltara por todo el lugar, que tenía miedo de tener algún problema cardíaco en el futuro.
Su mano acariciaba mi mejilla suavemente mientras ella hablaba. "Esta es la primera vez que
estamos haciendo esto donde estamos oficialmente juntas. ¿Está bien si sólo lo disfrutamos?",
preguntó un poco insegura, aparentemente con miedo de haber herido mis sentimientos.

"No, es perfecto. Sólo...nos llevó bastante tiempo, después de todo", le respondí con una sonrisa
amable que ella correspondió.

"Lo importante es que estamos aquí ahora", Lauren sopló. "Feliz Día de San Valentín, bebé", su
sonrisa se ensanchó.

"Feliz Día de San Valentín, mi amor", me mordí el labio inferior y ella levantó su ceja.

"¿Mi amor? ¿Ese es tu apodo para mí?", preguntó ella y sus mejillas se sonrojaron un poco.

"¿Te gusta?" yo misma estaba nerviosa por relevarlo.

"Me encanta", asintió sutilmente. "A veces me olvido cuán sexy el español suena; especialmente
viniendo de ti."

"Pues, cállate y bésame finalmente", le pedí que se callara y me besara en español.

"Mandón", dijo hablando español antes de seguir mi orden. No podía creer lo increíblemente
amable que ella era una vez más. Aquí estaba yo; lista para arrancarle la ropa y ella quería llevar
las cosas con calma para que lo recordáramos como algo especial. Sinceramente, me preguntaba
por qué merecía estar con ella. Tal vez no lo hacía, pero no iba a dejarla ir otra vez, eso era seguro.

350
Esta vez Lauren estaba profundizando el beso. Su lengua rozó la mía con rapidez antes de que
nuestros labios siguieran con ella chupando mi labio inferior. No tenía sentido del tiempo en este
momento. Podría haber sido minutos u horas en mi cabeza, como habíamos intercambiado beso
tras beso hasta que ninguna de las dos tenía nada de aire para respirar. Mis manos vagaban por
debajo de su camisa tomando cada detalle de su piel inmaculada. La superficie de marfil se sentía
tan cálida y suave, sin embargo, sentía los músculos tonificados sutilmente debajo de la piel suave.

Tomando un respiro rápido, se sentó por un momento y se quitó la camiseta, relevando un


sujetador negro. Ella tomó mi camisa para sacarla y yo no llevaba sujetador lo que causó una
sonrisa boba en la chica mayor por un momento. Volviendo hacia abajo, retomamos donde lo
habíamos dejado siendo cuidadosas y cariñosa con la otra. Sentí una mano y luego dando caricias
circulares a mi pecho, apenas dejando que las puntas de sus dedos tocaran mi piel para crear más
expectación. Sus ojos me miraban como ahuecó mi pecho suavemente. Me sentí cohibida ya que
ella estaba mejor 'equipada' en la zona del pecho.

"Son pequeños, lo sé", traté de sonreír, pero terminé mordiéndome el labio inferior porque ella
estaba mirando la pequeña masa de cerca. Los orbes verdes se dispararon al instante para
mirarme a los ojos.

"Deja de hacer eso. Son perfectos", presionó llena de convicción aún cariñosamente. "Los amo al
igual que todo lo relacionado contigo", su mano se mantuvo masajeando suavemente antes de
que su dedo índice señalara un punto en el lado de mi pecho. "Me encanta ese pequeño lunar de
ahí, por ejemplo, también", la más vieja continuó y no pude evitar sonreír. "¿Quieres saber lo que
más me gusta sin embargo?"

"No arruines el romanticismo diciendo mi culo ahora" bromeé para encubrir lo nerviosa que
estaba cuando ella decía o hacia esas cosas.

"Tu sonrisa", dijo ella no reconociendo mi intento de distraerla. "Leí esta cita en Internet donde se
dice que las personas más tristes sonríen de manera más brillante. Siempre me recuerda a ti."

Mi corazón se sentía como si estuviera realmente a punto de explotar. Ella siempre había visto
algo en esa fachada fría y arrogante cuando éramos más jóvenes. No lo entendía en ese entonces
por qué le gustaba. El hecho de que ella sabía que yo había estado triste y no sólo enojada
reforzaba que ella me conocía mejor de lo que pensé. Me emocioné, pero traté de decir lo único
que repetía en mi cabeza.

"Te amo", le susurré llena de sinceridad.

"Yo también te amo", Lauren respondió sin vacilar y se inclinó para besarme. Sus labios estaban un
poco más urgentes que antes. Ella inclinó la cabeza separando nuestros labios al mismo tiempo,
nuestras lenguas se tocaron suavemente a un ritmo lento pero sensual. Encontré el broche de su
sujetador y logré abrirlo con bastante rapidez, sacando la tela negra sin prisa. Aterrizó en el
montón de nuestras camisas en algún lugar del suelo.

351
Lauren presionó la parte superior de su cuerpo desnudo contra el mío y gemí en el beso. No fue a
propósito, pero rasguñé su espalda más o menos, dejando algunas marcas atrás. Sus labios se
posaron en mi cuello y tiré la cabeza hacia atrás porque ella sabía que ese lugar me volvía loca. Ella
usó ese conocimiento sin piedad y chupó las zonas sensibles justo debajo de mi oreja y mi punto
de pulso. Aunque ella todavía no había ido lejos, sin embargo, sentí un latido entre mis piernas.

Tomé una respiración profunda, porque la chica mayor se deslizó más abajo y sabía lo que venía. A
pesar de que me sentía tan cohibida acerca de ellos, Lauren parecía tener una debilidad por mis
pechos y siempre terminaba acariciándolos, masajeando o besándolos ampliamente. Se sentía
celestial olvidarme de mis inseguridades y simplemente disfrutar de la chica experta que estaba
dándome tanto placer. Su lengua rodeó mi pezón erecto sin descanso antes de que se rindiera y
lamió el capullo endurecido.

"Dios", murmuré porque ya estaba en el borde. Tomando el pelo grueso entre mis manos, miré
hacia abajo y vi sus labios hinchados chupando la zona sensible. Apreté mi puño en su pelo
mientras ella pasaba su lengua contra mi pezón en el interior de su boca. Mi boca se secó, porque
ella vagó al otro lado para hacer lo mismo y lo único que yo podía hacer era mirar. No iba a durar
ni un minuto más hasta que ella en realidad llegara a la parte punzante de mi cuerpo.

Una vez más, era difícil decir cuánto tiempo pasó hasta que mi compañera se detuvo gentilmente
en volverme absolutamente loca. Abrió mis jeans y sin esfuerzo los deslizó por mis piernas, con mi
ropa interior junto a ellos. Casi volviendo a lo mismo, me senté antes que ella pudiera y
desabroché sus vaqueros. Ella sonrió un poco y me incliné para besar su clavícula mientras bajaba
su cremallera. En lugar de sacar sus pantalones, me distraje con la exploración de su pecho sólo
con mi boca. Mis manos acariciaban sus costados, mientras que las de ella corrían arriba y debajo
de mi espina dorsal.

Estaba feliz de poder corresponder y traté de emular lo que ella había hecho hace unos
momentos. Y al parecer no lo estaba haciendo nada de mal ya que Lauren respiraba pesadamente.
Ella besó mi cien, pero gimió sorprendida cuando suavemente le mordí el pezón. No demasiado
fuerte, porque no quería hacerle daño, obviamente, pero su reacción me motivó a seguir adelante.
Su respiración se detuvo varias veces como me hice cargos de sus suaves pechos. Eran sin duda
más grande que los míos, pero tan perfectamente dimensionados y formados.

Estaba en el medio de la succión de su piel cuando ella me alejó y estrelló sus labios con los míos.
Mientras intercambiamos el beso, le quité los pantalones y ropa interior, antes de que ella me
empujara hacia abajo. Pero me sentí con poder y di la vuelta sobre su espalda, así que ahora yo
estaba en la parte superior. La amplia sonrisa en su rostro hizo que mi corazón aleteara
incontrolablemente y me coloqué sobre su cuerpo sin especio en el medio.

Nos mantuvimos besando y acariciándonos entre sí. Al principio, no estaba muy consciente de que
estaba a horcajadas sobre su pierna, pero subconscientemente había comenzado a moverme
hacia arriba y hacia abajo sobre ella. La sensación de su piel sedosa frotando contra la parte de mi
cuerpo más íntima estaba por encima de todo. Debo haber tocado un sitio realmente bueno

352
porque me retorcí de repente. También me di cuenta de lo que estaba pasando y desconecté
nuestros besos constantes. Estaba un poco avergonzada de que había llegado tan lejos, nunca lo
había hecho antes.

"Está bien", susurró Lauren y al instante comprendió lo que estaba pasando. Ella puso su mano en
mi espalda baja y la otra en el muslo, animándome a seguir adelante. Sentí como doblaba mi
rodilla un poco, así mi muslo también estaba presionando su centro. Por un segundo, dudé pero
encontrándome con los ojos verdes llenos de nada más que amor y afecto, quería compartir este
tipo de intimidad con ella.

Cambiando un poco, la más experimentada también apoyó su pierna muy sutilmente, pero sentí el
cambio instantáneo cuando me moví. Poco a poco subiendo y bajando en su tonificado muslo, la vi
disfrutando mucho ahora también. Cada vez que presionaba contra ella, hubo una reacción en el
otro extremo. Sentí que me quemaba y tomé mi tiempo, estableciendo un ritmo lento para
acostumbrarme, sino también para evitar que esto no terminara en cuestión de segundos.

Enterrando mi cara en el hueco de su cuello, no podía concentrarme en besarla más porque todos
mis sentidos estaban ya en sobrecarga. Gemí en voz baja contra su cuello. Una de sus manos
estaba acariciando continuamente mi espalda, mientras que la otra estaba en mi trasero. Ella
apretó la carne brutalmente y gemí más fuerte que antes. Su gusto por mi trasero no era ningún
secreto, pero esto era otra manera de demostrarlo.

Al hacerlo, ella aceleró el ritmo y sentí que estaba tan cerca como yo. Eso era sorprendente, pero
un alivio al mismo tiempo. Mis caderas comenzaron a moverse más frenéticamente y la otra
morena maldijo como me estaba frotando contra su muslo sin ningún tipo de restricción ya. La
fricción de nuestros cuerpos sudorosos se estaba sumando a mi lujuria, pero la sensación más
destacada fue la tensión de mis músculos. Sentí la humedad en la pierna de Lauren mientras
seguía frotando el nudo de nervios en él. Si yo no hubiera estado tan excitada, me habría dado
vergüenza pero no podía parar ahora. Unos segundos más y mi cuerpo convulsionó en éxtasis
total.

"Mierda, Camila", la voz de Lauren estaba sin aliento, pero la sentí sosteniéndome cerca y llegar al
clímax conmigo. Ambas estábamos temblando incontrolablemente y nunca había experimentado
esa cantidad de intimidad que compartí con ella. Era imposible describir cuán gratificante era
tener a la persona que amas en todos los sentidos. El hecho de que yo era capaz de dejarme ir sin
inhibiciones y probar cosas nuevas, significó mucho. Y valió la pena, obviamente.

Nuestros cuerpos temblorosos apenas calmándose era una prueba de nuestro alto momento. Yo
resoplaba laboriosamente en el hueco de su cuello aún cuando tratábamos de calmarlos. Sus
dedos se movían suavemente por mi espalda como había colapsado encima de ella. A ella no
parecía importarle, aunque finalmente recogí fuerzas para levantar la cabeza y mirarla a los ojos.
El esfuerzo de mi cuerpo era una cosa, pero las emociones que sentí cuando me miró a loso ojos
otra vez, eran indescriptibles.

353
La ternura de los orbes esmeraldas crearon un nudo en mi garganta y su mano libre apartó el pelo
de mi frente sudorosa. Se veía tan feliz y sabía que yo sentía lo mismo. No había palabras
necesarias y simplemente me incliné para besar sus labios suavemente. Ella puso sus brazos
alrededor de mí y me abrazó fuertemente para crear aún más cercanía; haciéndolo más íntimo si
eso era posible. Saboreé cada segundo y casi sentí ganas de llorar porque estaba muy feliz.

"Te amo", susurró contra mis labios y yo quería decir lo mismo, pero su boca estaba pegada a la
mía de nuevo.

"Yo...te amo...también", me las arreglé para murmurar e hice a las dos reír. Aflojó su agarre y me
dejó descansar a su lado. Seguía abrazándola y no quería renunciar a la calidez que irradiaba ella.
Ella se sentó por un momento y puso las frazadas sobre nosotras antes de volver a retomar
nuestra posición. Con un brazo a mi alrededor, nuestras cabezas estaban descansando
cómodamente. La suya en la almohada, la mía en su hombro.

Estaba claro que las dos estábamos agotadas y posiblemente emocionalmente abrumadas.
Necesitaríamos de unos momentos para dejar que todo se hundiera y tampoco había apuro para
quedarse dormido o entablar una conversación.

Simplemente estábamos deleitándonos de las consecuencias de nuestro juego de amor en la


satisfacción.

Por no hablar de que no quería dormirme para que el momento durara más. Tendría que irme
mañana por la mañana y nos veríamos por unas cuantas semanas. Ese pensamiento sólo estaba
aplastando mi corazón y tracé unos pequeños patrones en su hombro que no estaba descansando.
Me di cuenta de la respiración de Lauren estaba convirtiéndose en estable. Y no pasó mucho
tiempo antes de que su pecho debajo de mí comenzara a subir y bajar a un ritmo lento.

Sabiendo que ella se había quedado dormida, levanté mi cabeza con cuidado y vi la expresión
pacífica en su rostro. Dios, ella seguía siendo increíblemente hermosa con el cabello desordenado
y el maquillaje de sus ojos parcialmente corrido. Tomé consuelo en que estaba compartiendo su
cama por primera vez en la que ella usualmente dormía sola. Mi dedo índice apenas la tocó, pero
trazó sus rasgos faciales. Los ojos verdes cautivadores no eran visibles, pero me acordé de los
felices que se habían visto durante todo el día.

A veces realmente me preguntaba si Lauren se sentía sola. Sabía que ella era una mariposa social
en la universidad y todos en el equipo la amaban. Pero ella vivía en este gran departamento y sólo
había escuchado que Kristie y Luis la visitaban. Tal vez era su lugar sagrado y lo entendía. Aún así,
no podía imaginar la vida sin Lara y estar sola. Sé que yo era la excepción más grande porque la
mayoría de la gente de mi edad como Lauren, vivían por su cuenta y descubrían lo que ellos
querían.

No pude evitar la sensación de que la chica mayor enmascaraba sus propios sentimientos a veces.
A pesar de que era muy abierta acerca de sus sentimientos por mí, ella no hablaba mucho acerca
de cualquier otra cosa que no fuera la universidad. Tal vez era la parte más grande de su vida junto

354
al fútbol, pero el problema acerca de su madre había desatado esos pensamientos en mi primer
lugar. Suspirando profundamente, no quería preocuparme, pero deseaba poder ayudarla de la
forma en que ella me ayudó. Sin embargo, no podía obligarla a decirme todo lo que pasaba en esa
linda cabecita.

Así que decidí dejarlo ser y me acurruqué a su lado otra vez, quedándome dormida unos minutos
después.

Parpadeé rápidamente cuando escuché un sonido molesto que me despertaba de mi sueño. Al


principio, supuse que era un reloj de alarma, pero me di cuenta que era un zumbido de un
teléfono en la mesita de luz. Me tomó un segundo para entender lo que estaba pasando. Entonces
sentí que algo se movía y volví a la realidad, porque Lauren se estaba moviendo al lado de mí. Ella
gimió en voz alta, pero se inclinó para agarrar su teléfono.

"Joder", murmuró en voz muy ronca y me refregué los ojos adormilada.

No estaba segura de lo que estaba pasando, pero Lauren se levantó de la cama y tomó la llamada.

"Hola Taylor, ¿Qué pasa?", fue todo lo que oí como la chica mayor desapareció en el cuarto de
baño. Probablemente estaba tratando de ser considerada para no despertarme, pero estaba más
que despierta. Tenía la esperanza de que las dos hermanas sólo se estuvieran poniendo al día,
pero algo en mi interior me decía que no por eso su hermana menor había llamado. Lauren salió
del cuarto del baño llevando una camisa holgada a los pocos minutos después.

"Lo siento, traté de no despertarte", la otra morena explicó, pero al instante me di cuenta que su
actitud había cambiado.

"No, está bien. Tengo que alistarme de todos modos. ¿Está todo bien?"

"Tengo que ir a Miami la próxima semana para hacerme cargo de algunas cosas", la voz de Lauren
era evasiva y me senté para observarla con más atención.

"¿Eso tiene que ver con tu mamá?", le pregunté con cautela.

"Sí", la mediocampista central suspiró y se frotó las sienes. "Al parecer, se está negando a tomar
sus medicinas otra vez y con la única persona que quiere hablar es conmigo."

"No lo tomes a mal, pero no puedes poner tu vida en suspenso cada vez que ella te necesita", le
dije tan suavemente cómo fue posible, pero vi a la chica mayor tensarse.

"Eso no va a ser un problema. Tenemos unos días de descanso la próxima semana en Breakers así
que iré luego", explicó la de ojos verdes.

355
"Está bien, sólo...quiero que sepas que estoy aquí para ayudar", le contesté en voz baja.

"Lo sé", mi compañera de equipo respondió con una pequeña sonrisa, pero ella estaba en algún
lugar de su mente y yo lo sabía.

Lauren entonces reveló que tenía clases temprano y tenía que irse luego. No fue un problema
porque yo tenía que prepararme para mi vuelo. Nos turnamos para ducharnos e hice lo mejor para
ser tan apremiante. Lauren estaba apagada. Completamente fuera y yo quería ser comprensiva.
Hasta que ella estuviera completamente lista para abrirse, iba a ser paciente.

Ella me llevó al aeropuerto y mientras nos decíamos adiós, vi a la chica mayor casi rompiendo en
lágrimas pero luchó con fuerza para no hacerlo. Me rompió el corazón en mil pedazos, ya que eso
reforzaba mi miedo de que estuviera sola - o al menos estar a solas con sus problemas. Tal vez
quería compartir esa parte de su vida, pero no estaba lista todavía. La única cosa que podía hacer
era besarla y abrazarla tanto como pude repitiéndole que la amaba. Ella hizo lo mismo y nos
prometimos abrir un champán para el próximo Día de San Valentín.

Había pasado una semana desde el Día de San Valentín. Lauren y yo estábamos de vuelta a los
mensajes de texto todos los días y nos llamábamos siempre que podíamos. Las cosas todavía iban
bien, aunque su viaje a Miami me tenía preocupada. Ella había ido ayer y no había sabido nada de
ella desde entonces. Le estaba dando su espacio para hacer frente a los problemas de su familia,
pero estaba aliviada de tener un vídeo-chat con ella hoy.

Estaba emocionada y un poco nerviosa cuando la pantalla de mi portátil mostró algo en


movimiento. Aunque, mi corazón se hundió cuando vi a Lauren. Se veía como un desastre, como
un sexy desastre después de una larga fiesta para ser más específica.

Camila: Oh mi Dios. ¿Qué pasó?

Lauren: Fue una noche interesante, vamos a decirlo así.

C: Estoy asumiendo que la reunión con tu madre no estuvo bien.

L: Fue maravillosa. Nos gritamos una a la otra, básicamente, le dije que se fuera a la mierda al
final.

C: Lauren, lo siento.

L: Me siento como un gran pedazo de mierda.

C: Intentaste ayudarla, de eso estoy segura. Pero no puedes ayudar a alguien que no lo quiere.

L: Sí, bueno...realmente no tengo otra opción.

356
C: Sí, la tienes. Puedes aceptar que tu madre es un adulto que necesita hacer frente a sus
problemas por ella misma.

L: Suena bien en teoría, pero no puedo hacer eso. Tengo que arreglar esto.

C: ¿Qué pasó después de tu encuentro con ella?

L: Me encontré con mi vieja amiga Natalia. Todos iban a salir y espontáneamente decidí unirme a
ellos para desahogarme, supongo. Siempre me olvidan los fuertes que son las fiestas en Miami, sin
embargo.

C: ¿Qué quieres decir?

L: No te asustes, pero me desperté esta mañana y...he encontrado algo.

C: Okaaaaay

Vi como Lauren se levantó de su asiento y de repente se levantó la sudadera. ¿Qué demonios


estaba haciendo? ¿Estaba tratando de ser sexy en cámara? Pero entonces lo vi: un tatuaje en la
cadera. Mi mandíbula cayó cuando leí la letra pequeña.

C: ¡¿Panqueques?!

No estaba segura de si reír o llorar cuando Lauren se sentó de nuevo.

L: No tengo ni idea de cómo lo conseguí.

C: Esto es una broma, ¿Verdad? Me estás haciendo una travesura.

L: No, lo juro por Dios que es real.

C: ¿Y no tienes ningún recuerdo de cómo lo conseguiste?

L: Lo último que recuerdo es estar en un club nocturno, pero todo lo demás se ha borrado
totalmente.

C: ¿Alguna vez te has borrado así?

L: Algunas veces, pero nunca me he despertado con un puto tatuaje.

Estaba en una pérdida de palabras. Aunque sabía que Lauren le gustaba salir, esta era la primera
vez que estaba realmente preocupada por su excesivo consumo de alcohol cuando ella salía. Sería
una historia diferente si fuera sólo yo, pero siempre consideraba a Lara. Ella estaba ante todo, no
importa qué. No estaba segura de si quería ese tipo de comportamiento alrededor de mi hija.

L: Te ves molesta.

C: Estoy en estado de shock.

357
L: No es tan malo. Siempre quise tener uno y esto no estaba planeado, pero es muy pequeño y
está oculto.

C: ¿Te lo hiciste porque pensaste que Lara le gustaría?

L: No estaba pensando en absoluto, probablemente.

C: Entonces, tal vez deberías considerar la posibilidad de no beber tanto.

No quería ser dura porque ella estaba pasando por un montón pero eso salió bastante frustrado.

L: Bebé, no es la gran cosa.

C: Probablemente deberías descansar un poco.

L: Estoy bien.

C: Todavía estás borracha y realmente necesitas dormir. Hablaremos más tarde cuando estés
sobria.

L: Todavía tengo la sensación de que estás enojada conmigo.

C: No, pero estoy preocupada por ti y creo que es mejor si duermes un poco.

L: Sinceramente, no quiero molestarte.

C: Lo sé y entiendo que estás pasando por un montón de cosas en estos momentos. Por favor,
sólo...llámame más tarde, ¿De acuerdo?

L: Lo haré. Te amo.

C: Yo también te amo.

Apagué la cámara y enterré mi cara en mis manos. Sacudiendo la cabeza un poco, no podía creer
lo imprudente que era la chica mayor a veces. ¿Cómo podía ser tan atenta y delicada, pero tan
increíblemente desconsiderada al mismo tiempo? Miré el reloj, tenía otro vídeo-chat pronto. O
Lara lo tenía. Austin iba a hablar con ella en una hora y necesitaba de ese tiempo para
recuperarme.

Austin: Muy bien, niña bonita. Hablaré contigo muy pronto.

Lara: Te amo, papi.

A: Yo también te amo. ¿Puedes decirle a tu mami que quiero hablar con ellas a solas un momento?

358
Yo estaba sentada a unos pasos de distancia, pero oí a la voz masculina preguntando por mí. Lara
asintió y se bajó de su asiento, y me dijo que debía hablar con él. Salió de la habitación y me
pregunté qué quería discutir. Me senté delante de la pantalla y lo miré expectante.

A: Hola, ¿Cómo estás?

C: Bien. ¿Cómo estás tú?

A: Perfecto. Yo uhm...sólo quería decir que lo siento.

C: ¿Por qué?

A: Por mi comportamiento la semana pasada...acerca de Lauren.

C: Eso es lo primero.

A: Estoy tratando aquí, Mila.

C: Bien, lo siento sigue.

A: Me sorprendió porque no me lo dijiste y me sentí un poco celoso. Pero sé que no estuvo bien -
sobre todo delante de Lara. Así que, lo siento.

C: Estoy sinceramente sorprendida al escuchar eso, pero gracias. Disculpas aceptadas.

A: Por extraño que sea, quiero que seamos amigos. No sólo por Lara, aunque eso sería muy bueno
si nos llevamos mejor, pero también porque todavía me preocupo por ti. Después de todo, salimos
por un largo tiempo y fuiste una gran parte de mi vida. La he jodido mucho, pero estoy tratando
de ser un mejor papá y me encantaría por nosotros ser al menos amigos.

Mirando al joven en la pantalla con escepticismo, estaba realmente sorprendida por sus palabras.
Él por lo general no usaba su tono suave, pero tenía que admitir que estaba siendo un gran padre
últimamente. Lo menos que podía hacer era aceptar su oferta de paz.

C: No sé lo que quieres, Austin. Siempre he sido calmada, pero no estoy segura de cómo podemos
ser amigos ¿Después de todo lo que pasó?

A: ¿Por qué no me dices por qué tienes tu 'cara preocupada'?

C: ¿Mi qué?

A: Tu 'cara preocupada'. ¿Crees que no puedo leerte después de tanto tiempo? Venga. Dame un
poco más de crédito.

C: No quieres saber el porqué, confía en mí.

A: Pruébame.

359
C: No creo que sea buena idea.

A: ¿Se trata de Lauren?

C: Entonces no quieres oír hablar de eso.

A: Tal vez no sea mi tema favorito, pero voy a tratar si eso significa demostrarte que estoy
hablando en serio.

Suspiré en silencio y mordí mi labio inferior. Él era probablemente la última persona con la que
debería hablar de esto, pero sentía una sensación de familiaridad cuando se estaba comportando
así. Me recordó por qué solía gustarme después de todo. Compartíamos un pasado y no estaba en
condiciones de juzgar después de todo lo que él me había hecho pasar.

C: Ella está lidiando con algunos problemas familiares, pero no se abre conmigo.

A: Suena familiar.

C: ¿Qué quieres decir?

A: ¿Crees que no me frustraba contigo cuando estábamos saliendo? La razón por la que nos
separábamos todo el tiempo era porque tú me alejabas. Nunca pude ver a través de ti.

C: Tal vez. Pero yo no actuaba como ella.

A: ¿Actuando de qué manera?

C: Ella sólo tiende a salir y beber cuando las cosas se ponen difíciles.

A: Irónico porque terminaste conmigo por salir demasiado de fiesta en la universidad.

C: Terminé contigo porque me engañaste, Austin.

A: Muy bien, eso es justo.

Pero, ¿Cómo sabes que ella no está haciendo lo mismo?

C: Sé que ella no lo hace. No es ese tipo de persona.

A: ¿Incluso cuando bebe más allá de la creencia?

C: Ella no haría eso. Eso no es lo que me preocupa.

A: ¿Qué es entonces?

C: Entiendo que ella es una universitaria y tiene la libertad para hacer lo que quiera. Pero yo no lo
soy. Me gusta quedarme en casa y ver los dibujos animados con Lara en la noche en lugar de ir de
fiesta. Me pregunto si...viviéramos en la misma ciudad, si Lauren quisiera vivir esa vida. Ella no

360
tiene por qué, pero no me gusta ese comportamiento alrededor de Lara. Tal vez la distancia nos
está haciendo un favor, en realidad. ¿Tiene sentido?

A: Totalmente.

C: Entonces, ¿Por qué me siento tan mierda diciéndolo?

A: Porque te preocupas por ella.

C: La amo.

A: Y te creo; por lo que probablemente deberías hablar con ella sobre eso. ¿O ya lo hiciste?

C: No, esto es un poco reciente. Recién estamos juntas y no quiero correr el riesgo de entrar en
una gran pelea.

A: Odio decírtelo, pero si no te ocupas de eso, será un problema mucho más grande más adelante.

C: ¿Cuándo llegaste a ser tan sabio?

A: Confía en mí, esto es difícil. Prefiero estar hablando de otra cosa pero también entiendo el lado
de Lauren, supongo. A veces sólo actúas, porque no sabes cómo actuar de otra manera para hacer
frente a las cosas. Debes darle la oportunidad de por lo menos saber lo que está pasando para que
ella pueda hacer un cambio...o no.

Sus palabras definitivamente resonaron en mí. No era justo tener todas estas dudas y no hacer
más que escucharlas. Ella merecía saberlo, aunque no quería ser una carga más para ella. Me
gustaría tener un poco de tiempo para averiguar cómo iba a manejar la situación pero sin duda me
sentí mejor después de hablar con Austin.

A: Entonces, ¿Cómo lo hice?

C: Bastante bien, en realidad. Podría considerar la oferta de amistad.

A: Bueno, entonces mi trabajo está hecho...a menos que quieras hablar un poco más.

C: No, tengo que pensar un poco. Pero gracias.

A: No hay problema. Hablaremos pronto.

C: Muy bien. Adiós.

A: Adiós.

Apagando la cámara por segunda vez hoy, todavía sentía un montón de emociones encontradas.
Pero no me sentía tan mal ya. Nunca habría esperado palabras de sabiduría provenientes de mi ex
marido, pero quería hacer un esfuerzo para ser más vocal sobre mis sentimientos. Por difícil que
era, valía la pena reparar la primera grieta en mi relación con Lauren.

361
Capitulo 23

Lauren's POV

El día anterior

Mis manos temblaban ligeramente después de haber tocado el timbre. Desde luego no debería
estar tan nerviosa al volver a casa, pero lo estaba. La constante sensación en mi estómago no
desaparecía. Algo iba a suceder y probablemente no iba a ser bueno.

Había tomado la decisión de venir a Miami y arreglar lo que estaba pasando con mi mamá. Al
parecer, ella se negaba a tomar sus medicamentos y le dijo a su terapeuta que yo era la única con
la que quería hablar. Recordé a Camila diciéndome que no podía poner mi vida en suspenso
cuando nos habíamos visto la semana pasada. Pero eso fue exactamente lo que hice. Dejé todo
para ayudar a mi familia. Eso es lo que tenía que hacer, ¿Verdad?

Los exámenes cruciales habían terminado y tenía unos días de descanso de los Breakers lo que era
bueno. Parecía una obviedad venir aquí. ¿Entonces por qué estaba tan jodidamente nerviosa?

Unos momentos pasaron y toqué el timbre de nuevo antes de que se abriera la puerta principal. La
sorpresa en la cara de mi madre era evidente. No le había dicho acerca de mi visita porque quería
ver en qué condición estaba realmente sin tener tiempo de ocultar nada.

"!Lauren!", Exclamó en una mezcla de sorpresa y alegría.

"Hola mamá", le contesté en voz baja y vi sus brazos estirándose para abrazarme. Dando un paso
adelante, dejé que me abrazara y correspondí la ligera presión de su cuerpo.

"Estoy tan feliz de verte. ¿Por qué no dijiste nada? Hubiera cocinado algo o preparado un día
divertido para nosotras", dijo la mujer mayor y me soltó.

Lo olí inmediatamente. El alcohol en su aliento era tan fuerte que arrugué mi nariz casi. Ese no era
el olor de una bebida por la tarde. Más como una botella de vodka. Puse una cara feliz y traté de
mantener la calma mientras entré a la casa diciéndole que había sido una decisión espontánea de
venir. El extraño surtido de sentimientos me abrumó cuando estuve dentro. A pesar de que era mi
casa y el lugar donde había crecido, había muchos recuerdos dolorosos.

Tratando de ignorar las emociones que surgían, me senté en la sala de estar con mi madre e
hicimos una conversación informal durante unos minutos. Por un segundo pensé en relevar acerca
de Camila pero negué al instante. Este no era el momento adecuado. Tenía que llegar al punto.

362
"Mamá, Taylor me llamó", comencé con cuidado mientras la miraba al otro lado del sillón. "Y tu
terapeuta también. Dijeron que te niegas a tomar tus medicamentos."

"Estoy bien. Ya no necesito más esas pastillas. Mírame, ¿No te parezco bien?" Mi madre sonrió
ampliamente, pero su aspecto era todo menos bien.

"Ese no es el punto. Tú puedes estar bien ahora, pero eso puede cambiar mientras más evites tu
medicación", razoné.

"Tú siempre estás tan preocupada por mí, pero me puedo cuidar sola", su voz cambió a la
defensiva y sentí mi propia frustración construyéndose.

"Bueno, tal vez puedes o tal vez no puedes", le respondí y ella cruzó los brazos delante de su
pecho.

"¿Qué se supone que significa eso?"

"Que...que todos necesitamos un poco de ayuda a veces. Y hemos tenido esta discusión muchas
veces, mamá. Estuviste de acuerdo en ir a terapia, tomar tus medicinas y estar sobria. Obviamente
no estás haciendo nada de eso y no veo cómo es eso de cuidarte por ti sola", mi propia voz
comenzó a temblar por alguna razón.

"!Estoy sobria!" Ella se opuso fuertemente y suspiré profundamente.

"No me mientas, por favor", fue todo lo que pude responder.

"No te estoy mintiendo, cariño", su voz cambió para persuadir pero sabía que esta era su
estrategia para hacerme sentir mal.

"Sí, lo estás. Puedo oler el alcohol en tu aliento", dije en voz baja y no la miré para que no se
sintiera avergonzada probablemente.

"Fue sólo una copa antes de la cena, pero nada importante", mi madre siguió negando, lo que hizo
crecer mi impaciencia.

"No soy tonta", de repente solté. "Taylor me dijo cómo encontró botellas aquí y la echaste. Has
estado bebiendo de nuevo desde hace un tiempo y no tomar tu medicación no es una opción."

"Eso es todo lo que te importa, ¿No?" La mujer mayor parecía enojada también. "Vienes aquí para
'arreglarme', peor luego desapareces de nuevo."

"¿Qué quieres que haga? ¿Quedarme?"

"Te mudaste al otro lado del país para alejarte de tu familia, y ahora ¡Solamente vienes a darme
lecciones! No finjas que estás haciendo esto por cualquier otra razón que por obligación", los
ataques comenzaron y realmente sentí mi corazón con calambres por esas acusaciones.

363
"No es como si me estás dando razones para querer verte", disparé de nuevo con furia.

"Por supuesto, es mi culpa. Todo es mi culpa. Tú no me amas, Lauren. Tú no amas a ninguno de


nosotros o no nos habrías dejado...me dejaste", no podía creer lo que mis propios oídos estaban
escuchando.

"¿Es eso lo que piensas? ¿Qué yo no te amo?" Hablé en un temblor por ahora, mientras mis ojos
se llenaron de lágrimas.

"Piensas que eres tan genial y poderosa. Mejor que todos nosotros, especialmente yo. ¡Pero tú no
eres mi madre, Lauren! Yo soy tu madre, no al revés."

"Entonces actúa jodidamente así", escupí en voz alta y vi sus ojos muy abiertos. "¿Crees que me
gusta verte así? ¡Yo no tendría que darte ninguna lección si juntaras toda tu mierda por una vez!
¿Yo no te amo? ¡Tú no me amas! Esa es la verdad. Nunca lo hiciste. Yo te cuidé más de lo que tú
nunca te hiciste cargo de mí. Así que no puedes decirme ahora que eres mi madre cuando nunca
has hecho nada parecido a eso."

"¿Cómo te atreves a decir eso?" Ella se levantó de su sillón, herida y sus ojos ardiendo en ira.
"!Eres una puta desagradecida!" Las palabras se arrastraron y finalmente relevó lo que sabía desde
el principio; sólo sabía que ella no podía ocultar su estado de embriaguez al estar tan molesto.

"Y tú eres una borracha", sentí las lágrimas calientes correr por mi cara, porque no quería esto,
pero me sentía impotente y tomé represalias.

"Tal vez lo soy pero no creas que no te estás convirtiendo en lo mismo", sus palabras me hicieron
mirarla a los ojos al instante.

"Nunca voy a ser como tú", dije entre dientes.

"¿Estás segura de eso, Lauren? Sé que te gusta ir de fiesta y tomar unas copas, ¿No? Así es como
empezó para mí también."

"Qué he hecho para que me trates así, ¿Eh?" Sentí quebrarme y me levanté de mi asiento. "¿Crees
que no te amo? Me gustaría que estuvieras bien. Jodidamente lo quiero. Porque entonces no me
importaría una mierda y te aseguro que no vendría a verte. Pero lo hago. Mierda, te amo y no
quiero que te hagas esto. Te estás matando y nos haces mirarlo, ¿No te das cuenta? Todo lo que
quiero es que te mejores y...Dios, ni siquiera sé...toma un interés en mí si no puedes amarme. ¿Es
mucho pedir?"

Mi pecho subía y bajaba y no me había dado cuenta de que estaba llorando por esas últimas
frases. Encontrándome con los orbes familiares y ver cuán dilatados estaban, un escalofrío corrió
por mi espalda. Ella parecía tan fría y sin amor. Me trajo muchos recuerdos buscándola cuando era
niña y adolescente, y siendo negada de su afecto y amor. Todo lo que realmente quería era que se
preocupara; por mí, por ella y nuestra familia.

364
"Vete."

La estocada final a mi corazón fue la más dolorosa. Lo había dejado todo ahí, pero no fue
suficiente. Mi enfoque habitual era muy diferente de este encuentro pero estaba obligada a
explotar en algún momento, ¿Verdad?

"Mamá, necesitas ayuda-"

"No quiero tu puta ayuda, Lauren", ella me interrumpió gritando ahora y estaba sorprendida por
su reacción brusca.

"¿Y qué? ¿Se supone que tengo que dejarte aquí para que puedas beber hasta la muerte? No
puedo hacer eso", intenté una vez más con la razón.

"Tendrás que hacerlo porque quiero que te vayas. ¡Ahora!" La mujer mayor pasó junto a mí y la
seguí rápidamente por el pasillo. Casi tirándome mi bolso, ella abrió la puerta y tenía miedo que
me corriera físicamente ahora.

"Vamos a calmarnos y hablar de esto", quería apaciguar pero ella sacudió la cabeza con
vehemencia.

"No hay nada más que decir. No quiero volver a verte, ¿Me oyes? La única razón por la que vienes
es para hacerme sentir mal y no puedo aguantar más."

"¿Y crees que puedo manejarlo? Si tuvieras alguna idea de cuántas veces he llorado hasta
quedarme dormida por tu culpa y tus decisiones egoístas", mi enojo regresó.

"Ahí lo tienes de nuevo. Soy un monstruo, lo entiendo", el hecho de que ella puso los ojos en
blanco fue como el cuchillo retorciéndose en mi pecho. "Si soy un monstruo entonces tú eres una
excusa patética de hija."

"Vete a la mierda", le dije con tanto desprecio que me asusté mientras mi voz temblaba
severamente. "Si quieres suicidarte de esta forma entonces sigue adelante porque no voy a tratar
de salvarte nunca más."

"Sal de aquí", me dio un último empujón y me encontré mirando la puerta cerrada.

Tomando una respiración profunda, rápidamente me sequé las lágrimas que estaban cayendo
continuamente de mis ojos en este momento. Me di la vuelta y empecé a caminar a pesar de que
mis piernas se sentían como gelatina. Nunca antes me había sentido con tanta rabia. Una parte de
mí quería volver y decirle lo mucho que la despreciaba por hacerme sentir tan mal. Otra parte de
mí quería volver y pedir disculpas para así poder arreglarlo. En lugar de resolver el problema, había
creado un lío mayor ahora.

365
Mi primer instinto fue llamar a la persona que yo sabía que iba a hacerme sentir mejor. Busqué a
través de mis contactos y discutía sobre si debía o no llamar a Camila. No estaba en mi interés
traerla en mi drama, pero no sabía quién más entendería. Nadie más lo sabía. Tal vez debería
volver al hotel primero y refrescarme, pensé. Para entonces ya me habría calmado. Si la llamaba
ahora, sólo iba a estar llorando en el teléfono.

"¿Lauren?"

Rápidamente volví la cabeza y vi a un SUV detenerse justo a mi lado. Apareciendo por la ventana
era mi vieja amiga Natalia.

"Hola", hice mi mejor esfuerzo para parecer normal, lo que era difícil de hacer.

"Mierda, ¿Qué te ha pasado? ¿Estás bien?"

Bueno, mucho para ocultar mi estado emocional.

"Yo uhm...tuve una pelea con alguien", estaba siendo evasiva.

"¿Suena como si necesitaras una noche de fiesta? Nos dirigimos a la casa de un amigo en este
momento para una cena de previa antes de irnos al club. A todo el mundo le encantaría verte."

"Me veo como una mierda", me burlé.

"Vamos a arreglar esto antes de llegar. Vamos, súbete. Será divertido y libera tu mente de las
cosas", la de ojos marrones sonrió y yo sabía que tenía razón.

Miré mi teléfono de nuevo, viendo la imagen de contacto de Camila y su cara feliz en ella me hizo
decidir no molestarla. Por lo menos no ahora. En vez entré al SUV negro y escuché un montón de
chicas rugientes que estaban espontáneas. Esperaba que fuera una noche salvaje, pero terminó
siendo más de lo que había negociado.

Terminando mi vídeo-chat con Camila, tuve un mal presentimiento. Ella parecía molesta. No
esperaba que se asustara acerca de mi salvaje noche, pero ahora me sentía más mierda. Suspiré
con frustración y sacudí la cabeza. Apenas recordar lo que había sucedido la noche anterior no
ayudó tampoco. El hecho de que me había borrado por completo donde ni siquiera recordaba
haber conseguido un tatuaje definitivamente no era mi momento de mayor orgullo.

Seguía mirando la pantalla de mi ordenador portátil a pesar de que la cara familiar no estaba allí.
Era evidente que estaba preocupada y me lamentaba haberla emboscado con todo. Hubiera sido
más prudente esperar hasta vernos; o por lo menos hasta que hubiera estado completamente
sobria. Pero eso era un buen lugar para empezar. Decidí recuperarme y llamarla más tarde de
nuevo.

366
Una taza de café fue una necesidad y continué tomando una larga ducha. Eso por sí solo hizo
maravillas. Tuve que tener cuidado con el tatuaje, aunque era muy pequeño. Lo último que
necesitaba era que se inflamara o algo así.

Los recuerdos de la noche anterior se habían ido. Pero me acordaba de todo lo anterior, por
desgracia. La pelea con mi mamá todavía estaba pesando sobre mí y no podía negar que había
tratado de ahogar mis penas en el alcohol; lo que era irónico ya que ella me había acusado de
convertirme en ella en ese sentido. Pero no quería pensar en eso. Lo que quería centrarme era en
la reparación de la pequeña grieta que había percibido entre Camila y yo.

Había tomado los primeros pasos curando mi resaca y me veía como una persona normal otra vez.
Sentándome en el escritorio, intenté llamar a mi novia. Rápidamente arreglé unos mechones de
pelo y me aseguré de no parecer un desastre ya. Para mi sorpresa, Camila aceptó la llamada muy
rápidamente. Aunque habíamos hablado hace apenas unas horas, mi corazón todavía saltaba en
mi pecho cada vez que la veía.

Lauren: Hey, eso fue rápido.

Camila: Estaba reservando boletos para mí y Lara en línea.

L: ¿Ella viene para el próximo partido de clasificación?

C: Sí, ella está muy emocionada ya que no te ha visto a ti y los otros hace un tiempo.

L: Eso es genial. No puedo esperar a verla. Y a ti por supuesto.

C: Te ves mucho mejor.

L: Me siento mucho mejor.

C: Me alegro y no puedo esperar a verte también.

L: Escucha, siento lo antes. No debería haberte abrumado con todo eso. Confía en mí, la última
cosa que quiero es añadir más drama a tu vida o molestarte.

C: No me molestas, de verdad. Pero me preocupé cuando me dijiste que no tienes ningún


recuerdo de la noche entera.

L: No para hacer excusas, pero esa pelea con mi madre fue la más fea y no sabía cómo hacer
frente. Fue una coincidencia que me encontrara con algunos viejos amigos. Sé que debería haber
tratado eso de manera más responsable, pero no pude en ese momento. Lo siento si estás
preocupada. No tienes que estarlo, te lo prometo.

C: ¿Sigues pensando en volver a verla?

L: Lo hice pero pensé en lo que dijiste y tal vez tienes razón.

367
C: ¿Qué quieres decir?

L: Que no puedo poner mi vida en suspenso por ella. Me mato para hacer felices a todos, pero ella
ni siquiera lo aprecia. En cambio, ella me acusa de ser desagradecida y condescendiente.

C: ¿Ella dijo eso?

L: Creo que dijo 'puta desagradecida' y 'patética excusa para una hija', si no recuerdo mal.

Sonreí un poco para ocultar el hecho de lo hirientes que eran esas palabras en realidad.
Encontrándome con los orbes marrones, aunque fuera a través de video chat, al instante vi la
cantidad de empatía y afecto que rezumaba de ellos. Por un momento parecía como si ella estaba
desmoronándose y mi garganta se sentía constreñida.

C: No puedo creer que ella haya dicho esas cosas. Tú eres exactamente lo opuesto, Lauren. Nunca
he conocido a alguien más solidario que tú. Sabes que ella está equivocada, ¿Verdad?

L: Ella estaba borracha por lo que probablemente no lo decía en serio.

C: Eso no es una excusa. No siempre. Si le dijera esas cosas horribles a Lara estando borracha,
¿Qué dirías? Eso es inaceptable, ¿Verdad?

L: Sí, pero tú y mi mamá no tienen nada en común. En realidad tú eres una mamá.

Mi voz se quebró ligeramente al final y aclaré la garganta para ocultar mis emociones poniendo lo
mejor de mí.

C: Lo siento mucho. Y lo siento por hacerte sentir mal pensando que yo estaba molesta. El hecho
de estás hablando sobre esto conmigo es todo lo que quería. Y no tienes idea de lo mucho que
deseo abrazarte en este momento.

L: Eso sería bueno.

C: Te amo, mi amor.

La gran sonrisa en el rostro de Camila con el apodo en español me hizo sentir mejor de inmediato.
Mi corazón latía y correspondí la sonrisa.

L: Yo también te amo.

C: No quiero que te sientas sola en esto. Estoy aquí para hablar o lo que sea que tú necesites.

L: Un desnudo ayudaría.

Las carcajadas de mi novia me llenaron de tanta alegría y tuve que participar. Ella sonreía de oreja
a oreja, pero también estaba sonrojada un poco. Ella era la cosa más adorable, me dije a mí
misma. Sentí mariposas en mi estómago y esos nudos de nervios que había sentido antes.

368
C: Eres una pervertida, ¿Lo sabías?

L: ¿Pensé que querías que te diera clases particulares en seducir a chicas? Esta es tu primera
misión.

C: ¿No es inapropiado hacerlo con la maestra?

L: Tú eres mi estudiante especial.

C: Tienes suerte que Lara está con Dinah en este momento o podría aparecer en un segundo si
escucha tu voz.

L: ¿Así que estás sola en este momento?

C: ¿Por qué lo preguntas?

L: Por nada.

La sonrisa en mi cara hizo a la otra jugadora elevar las cejas, pero ella continuó con una pregunta
que no habría esperado.

C: ¿Me puedes mostrar el tatuaje de nuevo? Estaba tan sorprendida que casi no recuerdo haberlo
visto.

L: Claro.

Me levanté de la silla del escritorio del hotel y levanté mi sudadera con cuello en V de color negro.
Exponiendo la piel con tinta, vi a Camila acercarse a su propia pantalla y mirando fijamente las
letras.

C: Por lo menos está bien escrito.

Su sonrisa desapareció en una fracción de segundo cuando se dio cuenta que me quité la camiseta
completamente. La forma en que sus ojos marrones se abrieron sonreí aún más. Sentada atrás
hacia abajo, vio el sujetador push-up de color rojo que llevaba puesto y su boca cayó un poco
abierta. El color de la tela de encaje igualó el de sus mejillas.

C: ¿Qué...qué estás haciendo?

L: ¿Te gusta el tatuaje?

C: Uhm...sí, claro.

Su tartamudez era tan entrañable y me reí de sus orbes oscuros que estaba centrados en mi
escote en vez de mi cara. Me recosté en la silla y presenté mi parte superior del cuerpo casi
desnudo casualmente.

369
L: ¿Crees que debería conseguir otro? Tal vez... ¿Aquí?

Mi dedo índice trazó mi clavícula y Camila tragó saliva con dificultad.

C: No lo...sé. Si quieres. Pero debes estar sobria la próxima vez.

L: Hmm. ¿Qué tal un poco más abajo? Digamos aquí.

Había movido mi mano derecha por encima de pecho, pero la joven no estaba respondiendo en
este momento. Ella simplemente levantó la vista y se encontró con mi mirada, dándose cuenta
que le estaba tomando el pelo. Empecé a tocar la correa de mi sujetador antes de que ella hablara.

C: Lauren, no creo...uhm...esto es un poco arriesgado, ¿No te parece?

L: Dijiste que estabas sola y yo también. ¿Por qué no te quitas la camiseta, bebé? Te ves un poco
acalorada.

C: No creo que pueda.

L: ¿Por qué no? Sólo soy yo, bebé.

C: ¿Qué pasa si Lara llega a casa antes de lo esperado?

L: Cierra la puerta.

C: ¿Y después qué? Yo sólo... ¿Me saco mi camiseta?

L: Eso sería un buen comienzo.

Al ver lo nerviosa que Camila estaba me dio aún más motivación para seguir adelante. No estaba
segura si ella lo haría, pero no me opondría a condimentar nuestro vídeo chat. Tendríamos que
esperar dentro de dos semanas para el próximo partido de USWNT para vernos en persona. Lara
estaría allí lo que significaba no tiempo a solas probablemente. ¿Por qué no aprovechar la
oportunidad si Camila estaba cómoda con eso?

Ella estaba mordiéndose el labio inferior con nerviosismo, obviamente contemplando su próximo
movimiento mientras yo esperaba pacientemente.

C: Es injusto lo sexy que eres.

L: ¿Eso crees?

C: No te hagas la tonta. Sabes exactamente lo que estás haciendo mirándome así.

L: Creo que tú eres más sexy. Pero sigues mordiéndote tu labio inferior, voy a perderlo porque no
puedo dejar de pensar que yo quiero ser la que te lo muerda.

370
C: Dios, realmente eres una seductora.

L: No has visto nada todavía. Cierra la puerta y te mostraré lo seductora que puedo ser.

Yo iba con fuerza ahora y elevé una ceja con expectación pero ella parecía indecisa todavía. Su
pecho se movía más laboriosamente y sabía que ella estaba emocionada pero aún cautelosa. No la
empujaría a hacer algo que ella no quería, pero era muy divertido mostrar mis otros lados ya que
ella me llamó romántica y adorable. Esas no eran las cosas por la que era conocida antes. Mientras
estaba feliz de compartir esos lados blandos con ella, era también tentador ver cómo ella
reaccionaba siendo más juguetona.

C: ¿No vas a enloquecer si no puedo hacerlo?

L: No, por supuesto que no.

C: Me siento rara y tímida.

L: Eso está bien. Fue sólo una idea.

C: Me gustaría mucho más ver todo eso en persona.

L: Estoy de acuerdo con eso.

C: Tal vez...reuniré el coraje enviándote una foto cuando me sienta más cómoda.

L: No tienes que hacer eso. Sólo estoy siendo un poco juguetona. No me gustaría que te sintieras
incómoda.

C: Está bien, pero lo intentaré.

L: Tratar está bien. Pero si no te apetece, envíame una foto independientemente. No me importa
lo que estés usando o no, sólo quiero tener tantas fotos de mi sexy novia como sea posible.

C: ¿Entonces supongo que fallé en la primera asignación?

L: Me lo puedes compensar la próxima vez, pero te daré eso en persona.

C: Me parece bien.

L: No tienes ni idea de lo mucho que quiero besarte ahora.

C: No tanto como yo quiero besarte.

L: Estas próximas dos semanas van a ser una tortura, pero no puedo esperar a verte y también a
Lara.

C: Lo mismo digo. ¿Te sientes mejor ahora?

371
L: Por supuesto. Gracias por escuchar y animarme.

C: En cualquier momento.

L: Debo dejarte. Como no voy a tratar de ver a mi mamá de nuevo, iré a ver a mis abuelos y
hermanos en su lugar.

C: Esa es una buena idea. Diviértete y mándame un mensaje más tarde.

L: Lo haré. Dale a Lara un beso de mi parte. Te amo.

C: Yo también te amo.

L: Ten una buena noche, bebé. Adiós.

C: Tú también. Adiós.

Ella me lanzó un beso antes de apagar la cámara y me dejó con un sensación se hormigueo en el
estómago. Estaba tan ridículamente enamorada de ella que no pude dejar de sonreír durante al
menos dos minutos. Era increíble lo que una persona podía hacerle a mi corazón; mi mamá lo
había roto ayer y Camila lo había arreglado de nuevo hoy. Tal vez no del todo, pero eso era
imposible; pero por lo menos hasta un punto donde no me sentía devastada. No podía esperar a
verla de nuevo, eso era seguro. Afortunadamente las cosas seguirían en el camino que estaban
fortaleciendo nuestra relación.

Había llegado el momento para el partido de la eliminatoria sudamericana. Por supuesto que
estaba entusiasmada por el juego, pero estaba aún más feliz de ver a mi novia y a su adorable hija.

Estaba desempacando en mi habitación, Normani estaba haciendo lo mismo mientras que la


izquierda centrocampista no había llegado aún. Al parecer, su vuelo se había retrasado y era
complicado llegar a Utah desde París.

La expectación me estaba matando, pero traté de no perder la cabeza. La práctica comenzaría


pronto y supuse que la vería allí. Pero entonces oí un golpe en la puerta que hizo que mi corazón
se detuviera. Intercambiando una mirada rápida con Normani, ella sonrió.

"Me pregunto quién podría ser", dijo mi compañera de equipo en broma pero no podía esperar y
corrí hacia la puerta del hotel.

"!Panqueques!" Fue lo primero que escuché cuando vi la imagen divina de Camila sosteniendo a
Lara. Santo Dios, tendría un ataque al corazón uno de estos días porque estaba tan feliz de verlas.
La niña de cuatro años de edad, extendió sus brazos y señaló que debería sostenerla; que con

372
mucho gusto lo hice. Esos pequeños brazos envueltos alrededor de mi cuello mientras me
abrazaba causaron todo tipo de sensaciones maravillosas.

"Te he echado mucho de menos, pequeña", le dije con sinceridad y me encontré con los ojos de
Camila que parecían brillar cada vez que me relacionaba con su hija.

"Te he echado de menos", Lara respondió y las dejé a ambas entrar, Camila dando un abrazo a
Normani mientras yo me concentraba en la niña de mis brazos.

"Te ves más alta cada vez que te veo. ¿Cómo es eso posible? ¿Con qué tu mami te está
alimentando, eh?" Sonreí y a veces de verdad me preguntaba cómo Lara era tan increíblemente
inteligente para su edad. Bueno, en realidad no era tan sorprendente teniendo en cuenta quién
era su madre, pero era inusual aún.

"No lo sé. Cosas aburridas", Lara sonrió y me reí por alguna razón.

"No muchos panqueques como te gustaría, ¿Verdad?" dije y ella asintió con la cabeza
frenéticamente. Su expresión preciosa me tenía encariñada y la besé en la mejilla para ver su
sonrisa ampliarse.

"Oye Lara, ¿No me vas a abrazar también?" Normani puso mala cara, pero Lara se apresuró a
difundir el amor al parecer y se encontró en los brazos de mi compañera de cuarto a los pocos
segundos. Miré a Camila de nuevo y ni siquiera nos habíamos abrazado en este punto aunque me
moría de ganas de estar cerca de ella.

"Uhm...Camila, quería mostrarte algo en el cuarto de baño muy rápido", yo no estaba siendo
discreta en absoluto, pero Normani ya lo sabía y al menos tenía que besar a la chica de mis sueños
antes de la práctica.

"Claro", la jugadora parisina dijo con una sonrisa, pero me siguió hasta el cuarto de baño mientras
Normani mantenía a Lara distraída. Cerré la puerta con cuidado, pero antes de que pudiera dar la
vuelta totalmente, Camila me empujó contra la puerta y me besó apasionadamente. Me recordó
al primer beso que habíamos compartido en Costa Rica cuando ella básicamente me había
asaltado con sus labios. Esto era parecido, pero correspondí igual de entusiasmada.

"Lo siento", Camila se rió contra mis labios y mi corazón se agitó al oír el sonido.

"No hay razón para pedir disculpas", le contesté, pero tomé su cara con mis manos para besarla de
nuevo.

Esta vez más suave y significativo. Sus manos trazaron mis brazos y la oí suspirar. Abrí los ojos y
bloqueé con los de ella por un segundo antes de presionar mis labios contra los suyos una vez
más. Chupando suavemente su labio inferior, la más joven agarró la piel de mi brazo y dejé mi
mano vagar a la parte posterior de su cuello. Sentía la urgencia en su extremo y en el mío. Ella
había extrañado esto de igual manera y me atrajo hacia ella, inclinando mi cabeza para morder su
labio inferior.

373
"Dios", Camila suspiró y miró profundamente a mis ojos. "Eres demasiado bueno para ser verdad.
" Estaba realmente sorprendida por esas palabras y nerviosa de lo sincera que ella parecía ser.

"Estoy completamente en desacuerdo con eso", murmuré y dio otro beso rápido en sus labios.

"Por mucho que me encantaría mostrarte lo mucho que te he echado de menos, tenemos que ir",
la más joven me dio un último beso, pero luego dejó ir así Lara no estaría intrigada.

Y la práctica estaba a punto de comenzar también. Abrí la puerta de nuevo y no pude contenerme,
pero toqué su trasero rápidamente para burlarme de ella. Camila gritó de sorpresa y se dio la
vuelta para mirarme juguetonamente.

"Obtienes una A+ en eso", dije en voz baja, y ella se rió esta vez antes de reunirnos con Normani y
Lara.

El resto del día había ido perfectamente. La práctica fue buena, así como la reunión después de
ella. Estuvimos hablando de estrategias, tácticas y todos los detalles importantes para ganar el
partido de mañana. Era el partido de vuelta y teníamos una ventaja de 2-0, pero estábamos en el
set invicto en las eliminatorias.

Teníamos la noche libre y nadie quería hacer algo muy loco, por el partido que se venía. Pero el
hotel era aburrido. Había una persona que no podía manejar el aburrimiento en absoluto: Dinah.
La polinesia había sido convocada por primera vez en mucho tiempo y fue una gran adición. No
sólo para el equipo, sino para Camila que parecía estar más a gusto con su mejor amiga estando
allí.

Lara estaba hospedada en el hotel con otra niña y la mamá de la niña que también era jugadora en
el equipo. Courtney se había ofrecido a cuidar a las niñas, mientras que Camila salió con un
pequeño grupo de nosotras. Había sido idea de Dinah y terminamos en un bar de karaoke. Sin
alcohol involucrado, por supuesto, todo el mundo parecía tímido para subir al escenario.

Camila y yo había encontrado pequeños momentos secretos para sostener manos o darnos un
beso cuando nadie estaba viendo, pero todavía estábamos escondiendo nuestra relación. Aunque
Dinah y Normani sabían, las otras chicas con nosotras no lo hacían. Queríamos mantenerlo así y
era extrañamente emocionante ser tan reservada.

Antes de que supiera lo que estaba pasando, Dinah se había tomado el escenario y sabía que tenía
algo en la manga por la mirada en su rostro.

"!Mila, es tu turno! Trae tu culo aquí. Escogí la canción perfecta."

"Oh Dios", Camila murmuró, muy consciente de que su mejor amiga estaba avergonzándola o
haciendo esto muy entretenido; o probablemente ambas cosas.

374
"No me hagas arrastrarte hasta aquí, chica.

Tienes una voz asesina, no seas tímida ahora", Dinah alentó y aplaudí fuerte con todo el mundo
como mi novia se subió al escenario. Ella estaba a punto de tomar el micrófono porque la canción
estaba por comenzar, pero Dinah hizo un último comentario que casi me hizo ahogarme con mi
soda.

"Esto es para ti, Austin", dijo Dinah y la expresión de Camila no tenía precio.

El horror en su rostro debe haber sido igualado al mío antes de oír la canción de partida. La
reconocí al instante y al parecer lo hizo Camila porque ella rió levemente pero aún avergonzada.

"No puedo creer esto", murmuró, pero luego miró el monitor para empezar a cantar.

[Intro:]

"Oh, you broke my heart(Oh, rompiste mi corazón)

I told you I was weak for love(Te dije que era débil en el amor)

But then you went around(Pero entonces te diste la vuelta)

And did what you wanted to do(E hiciste todo lo que querías hacer)

And now I'm crying, I'm crying(Y ahora estoy llorando, llorando)

Ella estaba vacilante al principio, pero a la multitud le encantó la selección de la canción y se dejó
ir. La voz de Camila no era de este mundo y no lo estaba mostrando todavía, pero todos en la
barra la animaban desde que Dinah le había dado una dedicatoria personal.

[Verse 1:]

"Ooh, it seemed like everything was going fine(Ooh, parecía que todo iba bien)

I found the love that I thought was gonna last(Encontré un amor que pensé que iba a durar)

Then I accidentally saw a few things in your cell(Entonces accidentalmente vi un par de cosas en tu
celular)

I even LOL'd, man, I should've know(Incluso me reí mucho, hombre, debí haber sabido)

Why, why you're doing what you do(Por qué, por qué estás haciendo lo que haces)

You, you might as well just tell the honest truth(Tú, tú podrías también decir la pura verdad)

See, I'm not really down with this(Mira, no estoy realmente mal con esto)

375
This ain't no texting shit(Esto no es ninguna mierda de mensaje de texto)

Know I got no biz,(Sé que no tengo ningún negocio)

But it is what it is(Pero es lo que es)"

[Pre-Chorus:]

"I don't really have much to say(Realmente no tengo mucho que decir)

I was over it the second that I saw her name(Ya lo estaba superando el segundo que vi su
nombre)"

Tan pronto como el coro comenzó, todo el mundo empezó a cantar, Dinah más fuerte, mientras
que Camila, finalmente, se había soltado. Tenía la piel de gallina porque ella golpeó cada jodida
nota y sonaba mejor que la original en mi opinión.

[Chorus:]

"I got two, ooh, ooh letters for you(Teng dos, ooh, ooh letras para ti)

One of them's F and the other one's U(Una de ella es F y la otra es U)

'Cause what you gotta do, is go get yourself a clue(Porque lo tienes que hacer, es ir y encontrar las
pistas)

Only two, ooh ooh letters to choose(Sólo dos, ooh ooh letras para escoger)

One of them's F and the other one's U(Una de ellas es F y la otra U)

SMH, I'm pressing send on you(Sacudiendo mi cabeza (SMH), estoy presionando enviar)"

El segundo verso fue entregadamente mucho más lúdico ahora y la izquierda-centrocampista


comenzó en realidad a actuar y dejarse llevar. No es de extrañar que Dinah hubiera elegido esa
canción, puesto que tenía una verdad evidente para Camila.

[Verse 2:]

"Oh, I know what's been going on(Oh, sé lo que está pasando)

Don't even try to act like Mr Super Nonchalant(Ni si quieres trates de actuar como Señor Súper
desentendido)

What makes you think I'll stick around(¿Qué te hace pensar que seguiría aquí?

I'm not stupid as you sound(No soy tan estúpida como tú suenas)

376
And you sound really dumb right now(Y suenas realmente tonto ahora mismo)

From A to Z, ooh(De la A a la Z, ooh)

I got a lot of nasty things flowing up in my head(Tengo varias cosas desagradables flotando en mi
cabeza)

But none of them are worth my time(Pero ninguna de ellas vale mi tiempo)

You're note ven worth this rhyme(Ni siquiera eres digno de esta rima)

And I don't, I don't give a flying(Y no, no me importa un carajo)"

El resto de la canción era una fiesta y Camila tenía a todo el mundo a sus pies al final. La ovación
era un eufemismo ya que todo el bar se estaba volviendo loco. Lo podía entender porque ella
tenía un talento natural y parecía completamente inconsciente de ello. Ella y Dinah
intercambiaron algunos 'jabs' antes que Camila se sentara de nuevo. Las mejillas de la joven madre
estaban en llamas, pero su sonrisa era radiante.

No estaba segura cómo sentirme acerca de la dedicación de Dinah a Austin, pero era obvio que no
era una gran fan del ex marido de Camila. Sabiendo que había engañado a la otra Latina
repetidamente no contribuyó a mi gusto por él tampoco, pero hice mi mayor esfuerzo ya que él
era el padre de Lara y por lo tanto parte de sus vidas.

Como si alguien hubiera escuchado mi monologo interior, el teléfono de Camila vibró en la mesa,
mientras todo el mundo estaba charlando. El nombre parpadeando en la pantalla fue tan irónico:
Austin.

Pero no fue el nombre de Austin que causó dolor en mi corazón. Fue la imagen apareciendo con él
(https://40.media.tumblr.com/39a030c644af5c07c2cc2b0ccbeb6984/tumblr_n89gp8JaSf1td8nb7
o2_1280.jpg ) Obviamente, era una foto antigua de él y Lara más bebé, pero no pude evitar el
pequeño dolor en mi pecho. Siempre pensé que había aceptado no ser realmente parte de su
familia, pero algo así pasó. No quería ser celosa, pero ¿Por qué la llamaba? Probablemente para
hablar de su hija, me recordé a mí misma. Su hija.

No era consciente de que estaba mirando el teléfono hasta que miré hacia arriba y me encontré
con los orbes marrones llenos de preocupación. Ella sentía que algo estaba mal, pero sólo sonreí lo
mejor que pude ya que no quería más drama.

"Incómodo", dijo Dinah e hizo a todos en nuestra mesa reír porque habían visto que Austin estaba
llamando después de aquella actuación.

"Sólo voy a tomar esto muy rápido. Ya vuelvo", Camila se disculpó y le dio a mi muslo un pequeño
apretón debajo de la mesa antes de pararse. Hubiera sido una mentira decir que no estaba
molesta de que ella tomara la llamada. Pero tal vez era importante. ¿Por qué iban a estar
hablando si Lara no estaba aquí, sin embargo?

377
"No te preocupes, mi amor", de repente oí a Dinah que había tomado el asiento de Camila junto a
mí y sonrió ampliamente.

"¿Qué...qué?", balbuceé porque ella utilizó el apodo de Camila mientras que la sangre corría en
mis mejillas.

"Así que, ¿Qué vas a cantar para tu 'bebé', eh?" la más joven se estaba burlando de mí y no podía
creer que Camila le había contado todo. De una manera extraña me hizo sentir mejor, aunque, a
sabiendas de que mi novia estaba compartiendo esas cosas positivas con su mejor amiga a quien
no le gustaba la persona con la que Camila estaba hablando en estos momentos.

"No creo que vaya a cantar", le relevé pero Dinah negó con la cabeza.

"!Tienes que hacerlo! Es por eso que estamos aquí. Podría escoger una canción para ti", la
emoción en la voz de la parisina era alarmante.

"No, entonces creo que prefiero elegir una yo misma", le dije y la vi haciendo pucheros.

"Lo que sea", respondió ella, pero sonrió después para hacerme saber que se estaba divirtiendo.
"Pero tienes que cantar, ¿De acuerdo?"

"Está bien, lo intentaré", suspiré y miré la gran selección de canciones que estaban disponibles

Era difícil concentrarse porque no dejaba de preguntarme lo que Camila estaba hablando con
Austin desde hace unos minutos. Decirle que Lara no estaba aquí le tomaría diez segundos. Odiaba
mis celos más que nada y nunca habían sido tan fuertes como con la joven morena.

"Tienes un minuto más o yo escogeré una canción para ti, chica", Dinah me trajo de vuelta a la
realidad.

"Creo que la encontré", le dije y tomé la decisión espontánea yendo con mi instinto cuando
descubrí la canción...

=================

378
Capitulo 24
*ADVERTENCIA: Tigger Warning*

"Creo que la encontré", le dije y tomé la decisión espontánea yendo con mi instinto cuando
descubrí la canción...

Sabía que nunca sería capaz de derrotar al espectáculo que Camila acababa de dar. Su voz era una
locura y yo no estaba tratando de superarla por cualquier medio. Eso sería inútil. Escogí una
canción fácil y bastante linda. Si hubiéramos estado solas, habría elegido algo más romántico,
probablemente, pero tenía un poco de miedo de mis compañeras pillándonos.

Desde que Camila estaba todavía afuera, fui al escenario y tenía todo listo. Mi corazón latió
cuando vi cuán lleno el bar de karaoke en realidad estaba. Todos los ojos expectantes ahora se
centraron en mí; tragué saliva pesadamente al tomar el micrófono. Fue entonces cuando vi a mi
novia tomar su asiento y sonriendo por la sorpresa de verme en el pequeño escenario. Ella
aplaudió alentadoramente y alivió mi tensión un poco.

"Aquí va", murmuré apenas audible y escuché la música comenzando.

[Semisonic - Secret Smile]

Era una canción tan vieja que dudaba de que mucha gente la conociera, pero me encantaba. Por
supuesto, pensé en la chica de ojos marrones mirándome al elegir esa pieza particular de música.
En el Día de San Valentín, yo le había dicho acerca de mi fascinación por su sonrisa y esto parecía
apropiado. Esperaba que ella entendiera que se la estaba dedicando a ella, sin tener que
exponernos. Era personal después de todo. Intercambiamos una rápida mirada con Camila y ella
pareció darse cuenta de ello. Siendo la gran amante de la música que ella era, al parecer, conocía
la canción tan pronto como sonó y mostró esa perfecta sonrisa cuando nuestros ojos se
encontraron brevemente.

"Nobody knows it but you've got a secret smile(Nadie lo sabe, pero tienes una sonrisa secreta)

And you use it only for me(Y la usas sólo para mí)

Nobody knows it but you've got a secret smile(Nadie lo sabe, pero tienes una sonrisa secreta)

And you use it only for me(Y la usas sólo para mí)

So use it and prove it(Así que úsala y pruébalo)

Remove this whirling sadness(Elimina esta tristeza gigante)

I'm losing, I'm bluesing(Estoy perdiendo, estoy triste)

But you can save me from madness(Pero tú puedes salvarme de la locura)"

379
Después del primer obstáculo de cantar realmente delante de extraños, aflojé un poco y a la gente
parecía gustarle también. Mi plan fue un éxito, ya que no era una canción para deslumbrar o
cantar a pleno pulmón; fue muy divertido, pero significativo para mí todavía. La parte más difícil
fue no mirar constantemente a Camila. Lo hice un par de veces, pero hice un esfuerzo consciente
para mirar a las otras chicas del equipo también.

"Nobody knows it but you've got a secret smile(Nadie lo sabe, pero tienes una sonrisa secreta)

And you use it only for me(Y la usas sólo para mí)

Nobody knows it but you've got a secret smile(Nadie lo sabe, pero tienes una sonrisa secreta)

And you use it only for me(Y la usas sólo para mí)

So save me I'm waiting(Así que sálvame, estoy esperando)

I'm needing, hear me pleading(Estoy en necesidad, escúchame suplicando)

And soothe me, improve me(Y cálmame, mejórame)

I'm grieving, I'm barely believing now, now(Estoy afligido, apenas puedo creer ahora, ahora)

When you're flying around and around the world(Cuando estás volando alrededor y alrededor del
mundo)

And I'm laying alonely(Y estoy tendido solo)

I know there's something sacred and free reserved(Sé que hay algo sagrado y reservado

And received by me only(Y recibido sólo por mí)"

A veces realmente sentía que había una sonrisa muy especial que Camila utilizaba cuando
estábamos solas. Todas sus sonrisas eran especiales, pero había una que llegaba a sus ojos
haciendo que mi corazón aleteara de manera incontrolable.

Terminé recibiendo una buena cantidad de aplausos y rápidamente abandoné el escenario para
unirme al resto de los jugadores de fútbol. Todas ellas me aplaudieron mientras Dinah sonrió con
complicidad. Mi atención se centró en Camila como me senté a su lado, encontrándome con esa
sonrisa especial adornando sus labios. Eso hizo que mi corazón saltara en mi pecho y estaba
consciente de que ella desesperadamente quería besarme. Yo quería hacer lo mismo, pero eso no
era una opción ahora.

En su lugar, su mano agarró la mía por debajo de la mesa mientras las otras debatían quién debía
ir a continuación. Aproveché el momento y me incliné para susurrarle al oído a Camila.

380
"¿Está todo bien?" Le pregunté porque ella había estado hablando con Austin y quería asegurarme
de que nada malo había pasado.

"Sí, todo está bien", aseguró Camila y también se inclinó, su cálido aliento rozando mi oreja y
causándome piel de gallina. Le acaricié el dorso de la mano con mi pulgar con ternura. Si decía que
no pasaba nada entonces tenía que creerle, ya que no quería ningún tipo de celos surgiendo entre
nosotras. "Estuviste muy bien allá arriba", agregó y yo negué con la cabeza.

"No, tú tiraste la casa abajo", argumenté.

"Mi canción fue más alegre, pero me encantó la que elegiste", la más joven confesó y se mordió el
labio inferior.

"¿En serio?", Le pregunté en voz baja sintiendo que apretaba mi mano suavemente.

"Sí", confirmó y la tentación de cerrar la brecha entre nuestros labios me estaba matando.

"Tenía la esperanza de que te gustara", le relevé y los orbes marrones cayeron en mis labios por
un segundo. Esta vez ella no contestó, pero siguió mordiéndose el labio inferior. La tensión era tan
evidente entre nosotras y de verdad me arrepentía de no decirle al equipo acerca de nosotras. Las
cosas aún estaban frescas entre nosotras y queríamos esperar. ¿Por cuánto tiempo sin embargo?
¿Cuándo íbamos a estar cómodas? No sólo para ellos, ¿Sino también para Lara? Tan emocionante
como estar a escondidas era, eso estaba empezando a molestarme ya que no podía ser cariñosa
con ella cuando no nos habíamos visto en un par de semanas.

Por difícil que eso era, nos las arreglamos para mantener un perfil bajo por el resto de la noche. En
nuestro camino de regreso al hotel, Normani apareció a mi lado mientras Camila estaba
caminando adelante con Dinah y las otras.

"Bueno así que esto es lo que va a pasar", Normani comenzó en voz baja. "Me iré a la habitación
de Dinah y Camila porque Dinah quiere mostrarme algo de música nueva que descargó. Esto
significa que nuestra habitación será tuya por digamos...media hora porque estoy cansada y
quiero irme a la cama. Pero como soy una buena amiga, no voy a decir nada más. Cómo decides
utilizar esa media hora es cosa tuya, créeme que no quiero detalles, pero si Camila llega a estar
ahí, entonces no me interpondré en el camino. ¿Entendido?"

No estaba segura de cómo reaccionar ante una afirmación tan contundente, pero mis mejillas
estaban definitivamente poniéndose un poco rojas.

"Lo tengo", simplemente respondí y vi a mi amiga cercana asintiendo. "Gracias Mani. Eres
realmente la mejor", añadí más cariñosamente y puse mi brazo alrededor de ella para abrazarla a
la ligera.

"Sólo invítame a la boda un día", bromeó como casi me ahogué.

381
"Whoa, espera. Es un poco pronto para eso", reí, pero sentí que mi corazón latir más rápido, por
alguna razón.

"Tal vez sea así", la chica mayor se encogió de hombros. "Pero es tan obvio cuán enamoradas
están una de la otra que es casi enfermizo."

"¿Casi?" Sonreí.

"Sí, casi", la defensiva-centrocampista me empujó suavemente por lo que mi brazo cayó de sus
hombros.

"Bueno, si eres una gran fan entonces puedo darte algunos detalles", me estaba burlando de ella
porque a las dos nos gustaba dejar en ridículo a la otra a veces.

"Oh Dios, ¡No! Ni siquiera quiero pensar demasiado acerca de lo que haces en tu habitación", el
rostro de Normani mostró cierto disgusto juguetón pero rápidamente volvió a sonreír.

"Me parece justo", correspondí su sonrisa, pero estaba muy contenta de tener un tiempo a solas
con mi novia. No estaba segura de cómo la íbamos a pasar, pero yo tenía una necesidad
desesperada de algunos besos al menos. El camino de vuelta al hotel se convirtió en el más largo.
Mientras Dinah y Normani desaparecieron en una habitación, las otras chicas volvieron a las suyas.
Eso dejó a Camila y a mí en el pasillo. Le sonreí a la más joven que no sabía acerca de mi arreglo
con mi compañera de cuarto.

"¿Qué está pasando?" Camila preguntó con la sonrisa más linda cuando le había agarrado la mano
y tiré de ella a mi habitación.

"Tenemos treinta minutos antes de que Normani regrese", revelé antes de cerrar la puerta de la
habitación detrás de nosotras.

"Oh Dios mío", la otra morena rió. "¿Qué le dijiste a Normani que íbamos hacer para que
necesitáramos una habitación? Ella va a pensar que somos unas absolutas pervertidas."

"Yo no le pedí, ella se ofreció", le expliqué y la seguí a la habitación.

"Sí, claro", mi novia se burló y obviamente no me creía.

"Te juro que no le dije que nos diera la habitación. Soy completamente inocente", la sonrisa en mi
cara se transformó en una mueca.

"¿Tú eres inocente? Eso es un poco difícil de creer. ¿O tengo que recordarte el momento en que
trataste de tener relaciones sexuales por Skype conmigo?" Camila soltó y abrí la boca de una
manera exagerada.

"Yo no hice tal cosa", mis ojos se centraron en los de ella mientras me acercaba.

382
"Oh ¿En serio? ¿Por qué te sacaste la camiseta entonces y me pediste que hiciera lo mismo?",
Preguntó con picardía.

"Por mucho que me encanten nuestras bromas, bebé", finalmente llegué a la chica menor y puse
mis brazos alrededor de su cintura. "No quiero hablar más. Joder, necesito besarte ahora mismo",
le susurré para ver su cara suavizarse.

"Ok", ella sólo respiró y sentí sus brazos plegarse en mi cuello antes de inclinarme. El momento en
que nuestros labios se tocaban era mágico cada vez. Era imposible de describir, pero era natural y
cómodo; pero excitante y nuevo cada vez. Había sólo una ligera presión en ambos lados. Dejando
mis labios contra las suyos durante varios segundos para crear más tensión, me aparté
mínimamente para encerrar el inferior con mayor fuerza.

El bajo suspiro de Camila era la recompensa que buscaba. Su mano se enredó en mi cabello y sentí
su cuerpo cada vez más cerca así que no había espacio entre nosotras. Tan pronto como su torso
se pegó al mío, moví mi mano para trazar su espalda lentamente. La más joven me sorprendió
tomando mi labio inferior entre sus dientes. No me pude contener, y jadeé. Su risita suave hizo
que mi corazón dejara de latir ya que ella estaba tan contenta de haberme sorprendido.

Incliné mis rodillas sutilmente y de repente agarré sus muslos para levantarla. La centrocampista
izquierda rompió nuestro beso riendo, pero al instante comprendió lo que estaba haciendo. Sus
largas piernas envolvieron mi cintura y no tuve dificultad llevándola a la cama un par de metros de
distancia. Ella me besó en las mejillas de una manera tan cariñosa que tenía miedo que mis rodillas
pandearan por un momento. Nadie me había tratado así. Sólo podía esperar eso por la forma en
que ella me amaba al igual que yo a ella.

Sentada en el borde de la cama, ella todavía a horcajadas de mí y tomé su cara con mis dos manos
para mirarla. Bloqueando nuestros ojos en una mirada intensa, mi corazón estaba a punto de
estallar con todo tipo de emociones. Los ojos marrones conmovedores me estaban mirando en mi
esencia y mientras que por lo general yo tenía miedo de lo que podrían ver, sabía que sólo veía lo
hipnotizada que estaba por ella en esa instancia. Mis manos cayeron lentamente a su rostro para
admirar toda su belleza.

"¿Es posible amar tanto a alguien que te hace cuestionar como has existido sin ellos?", le susurré
en un aparentemente completo aturdimiento causado por su perfección.

"Yo me pregunto lo mismo", Camila habló igual de tranquilamente y parecía tocada por mis
palabras honestas. Sus finos dedos acariciaron mi mejilla con cariño e incliné mi cabeza para besar
la palma de su mano. Dejé un rastro de suaves besos por su muñeca y antebrazo hasta que
inesperadamente ella presionó sus labios contra mi cien. Yo había hecho lo mismo con ella un par
de veces pero se sentía increíblemente especial tenerla correspondiendo el cariño. Sus suaves
labios se sentían celestiales, ya que estaban colando besos en el lado de mi cara.

"Te amo", murmuré contra la suave piel de su brazo antes de enfrentarme a ella de nuevo.

383
"Yo también te amo", la voz de la joven madre estaba llena de emoción. "Eres mi chica de
ensueño, después de todo", continuó y me hizo sonreír ampliamente.

"Fuiste mía mucho antes de que yo fuera la tuya", le dije y acaricié su espalda.

"Me tomó un tiempo entender lo que estaba pasando en mi cabeza. Pero aún eras mi sueño
adolescente por así decirlo", sus labios se fruncieron ligeramente.

"¿Sueño adolescente?" Hice referencia a la canción de Katy Perry y vi sus mejillas ruborizarse.

"No te burles de mí", ella hizo un mohín.

"No lo estoy. Tal vez eso es vergonzoso, pero en realidad me encanta esa canción", admití y besé
sus labios una vez más para que dejara de poner mala cara. Se veía demasiado adorable haciendo
eso para resistirme. Apartándome, el puchero fue reemplazado con una sonrisa y tuve la
necesidad de hacer algo extremadamente cursi. Si alguien me hubiera dicho que iba a hacer esto
en un momento de mi vida, nunca le habría creído. Sin embargo, allí estaba yo, a punto de
continuar donde lo habíamos dejado en el bar karaoke.

Comencé a cantar 'Teenage Dream', pero en una versión más lenta para que fuera más romántico.

Los ojos de Camila se abrieron, pero había un brillo en ellos que me hizo seguir adelante. La
canción en el bar había sido menos íntima y quería compensarlo dándole una presentación
privada. Sostuve su mirada durante un rato, pero era difícil cantar cuando ella me miraba con
tanta atención. Así que me centré en golpear las notas correctas aunque ella lo estaba
complicando mediante la ejecución de sus dedos por mi cuello. Mi voz temblaba ligeramente
hasta que terminé de cantar.

Poco a poco mirando hacia arriba otra vez, me encontré con los orbes cafés que parecían estar un
poco vidriosos. Definitivamente no estaba tratando de hacerla llorar, pero sabía que ella
probablemente se agitó. Inclinándose hacia adelante, me dio un beso en el lugar que yo había
hablado antes: el hueco en la base de la garganta. Aunque nunca recordaba cómo se llamaba,
asumí que ella recordaba mi gusto. Sus manos ahuecaron mi cara esta vez para enfrentarme a ella.

"No sé cómo lo haces, pero me haces caer por ti mucho más cada vez que te veo", Camila susurró
sinceramente así mi garganta se sentía restringida.

"Sólo estoy tratando de hacerte sentir una fracción de lo que siento por ti", respondí del mismo
modo genuino para oírla suspirar.

384
"¿Realmente sientes que me amas más de lo que yo te amo?" Preguntó un poco preocupada, pero
pasó sus dedos por mi cuello de nuevo.

"No, quiero decir...Nunca realmente sé lo que sientes", dije en voz baja. "Todo lo que sé es que es
difícil imaginar a alguien más sentirse de la manera que yo lo hago porque es tan indescriptible."

"Yo siento lo mismo, Lauren", la morena sonrió suavemente. "Confía en mí."

"Ok, entonces lo haré", mi voz era apenas un murmullo en este punto antes de que besara sus
labios. Sus manos todavía en mi cuello, crucé mis brazos alrededor de su cintura y la atraje hacia
mí. Mis labios dejaron los de ella sólo para explorar más de su piel sin manchas. Terminé besando
toda su línea de la mandíbula de un lado a otro mientras ella incluso reía cuando golpeaba un
punto delicado, o gemía cuando golpeaba uno sensible. Ambas reacciones eran más que
satisfactoria. La punta de su nariz fue la siguiente antes de que diera un último beso en su frente.

Me hubiera alejado, pero Camila apretó su boca contra la mía con tanta pasión, que no tuve otra
opción que corresponder. Sus manos se dirigieron más hacia abajo y levantó el dobladillo de mi
camiseta. Las yemas de los dedos cálidos rozaron mi estómago y lados, agarrando la piel firme más
o menos como si estuviera tratando de encontrar algo a que aferrarse. Afortunadamente el
tatuaje había sanado muy bien por lo que sus manos sin saberlo tocaron la piel entintada lo que
no dolió en absoluto. Un gemido escapó de mis labios y la más joven aprovechó la oportunidad
para deslizar su lengua en mi boca abierta. La tensión entre nosotras estaba empezando a entrar
en erupción y la sorprendí chupando ligeramente su lengua. El gemido vibrando en su garganta
sonó tan sexy.

"Me estás volviendo jodidamente loca", jadeé después de que habíamos estado teniendo una
sesión por un tiempo y la sentí agarrando mi cintura con dureza. En lugar de responder, ella
empezó a chupar mi cuello, por lo que lo perdí por completo. Sus labios eran tan increíblemente
suaves y plenos, que la sensación de ellos en mi cuello era inigualable. No pude contenerme, pero
agarré su trasero a través de la gruesa tela de sus pantalones. Sentí sus labios formando una
sonrisa por un segundo antes que con impaciencia chupara el lóbulo de mi oreja.

"Joder", le susurré, porque ese era un condenado punto sensible para mí. Su lengua se burló de mi
piel, pero estaba a punto de perderlo.

"Mierda", oí a Camila diciendo de repente con decepción y seguí su mirada. "¿Cómo demonios
hemos estado besándonos por tanto tiempo? Normani va a regresar en cualquier momento",
añadió mientras miraba el reloj. Ella estaba en lo cierto. Al parecer nos habíamos perdido en una a
la otra más de lo que incluso podríamos haber esperado. Aunque me hubiera gustado más
intimidad, estaba muy contenta con haber pasado un tiempo como este. Eso era lo que más
echaba de menos después de todo.

"Está bien", le contesté un poco sin aliento. "Creo que hemos utilizado bien el tiempo, ¿No crees?"

385
"Por supuesto, pero...Me hubiera gustado un poco más", dijo sugestivamente y tiró de la cintura
de mis vaqueros, casi desabrochando el botón de apertura.

Quería responder, pero oí la apertura de la puerta. Camila saltó de mi regazo y ambas sabíamos
que mi compañera de cuarto se estaba acercando. No había sorpresa. Intercambié un pequeño
beso con Camila para decir buenas noches, pero nuestro tiempo a solas había llegado a su final
muy pronto.

Mañana había un partido importante y quería centrarme en eso. Tal vez tendríamos otra
oportunidad de pasar algún tiempo juntas antes de irnos, pero por ahora, mi mentalidad tenía que
cambiar y recordar que estaba aquí para hacer mi trabajo.

El viaje en autobús al estadio era por lo general el primer paso para conseguir tu cabeza en el
juego. Todo era acerca de la rutina y todo el mundo tenía su propia versión de enfoque. Yo ya
estaba en mi asiento y esperé a Normani para tomar el de ella a mi lado. Mirando hacia arriba, la
vi caminando hacia mí, pero luego me pasó. ¿Qué demonios? ¿Estaba enojada o algo así?
Dándome la vuelta para mirarla, ella se sentó junto a Dinah y antes de saber lo que estaba
pasando, Camila estaba sentada a mi lado.

"Hey", sonrió suavemente y me di cuenta de una Lara adormilada en su regazo.

"Hola", le dije un poco sorprendida.

"Normani quería sentarse junto a Dinah y me pidió que tomara su asiento habitual", explicó
Camila y ajustó sus audífonos. "Espero que eso esté bien."

"Por supuesto", respondí rápidamente y asentí. ¡Normani era en verdad la mejor wing-woman en
esta tierra!

No estábamos solas pero me encantó tenerla a mi lado, no obstante. El ritual de Camila previo al
juego era escuchar música y eso no había cambiado. Ella había cerrado los ojos y parecía estar en
su propio mundo. Puse mi cuaderno de dibujo abajo y miré por la ventana, repitiendo nuestras
estrategias de juego.

De repente, sentí un nuevo peso sobre mi regazo y vi a Lara arrastrándose para sentarse en mis
muslos. Ella no estaba dormida, después de todo y me miró expectante. Los ojos color avellana
eran irresistibles y estaba más que dispuesta a romper mi rutina antes del juego para hacer lo que
ella quería.

"¿Qué estás dibujando?", preguntó la voz aguda y señaló el pequeño lienzo.

"Nada especial, pequeña", admití desde que usualmente dibujaba en los viajes de autobús. "¿Has
estado practicando el dibujo de conejito?"

386
"Sí, es muy bueno ahora", la emoción en su voz era evidente.

"Bueno, entonces, tengo que verlo", mis labios formaron una sonrisa mientras le entregué el lápiz
y sostuve el bloc para ella. Lara se mordió el labio inferior al igual que su madre lo hacía y parecía
ansiosa por empezar. Ya estaba encariñada y besé el lado de su cara suavemente para animarla.
Inclinando la cabeza, Camila nos miró por un momento y me premió con la 'sonrisa especial' que
tanto amaba, antes de centrarse en la música de sus auriculares de nuevo.

"Wow, eso realmente es mucho mejor que antes", le dije con sinceridad porque ella estaba
mejorando cada vez.

"¿Sí?" la niña cuestionó con alegría.

"Totalmente", afirmé y la vi haciendo intentos después de eso que me impresionaba aún más. No
tuve problemas para complementarla para construir su confianza. Ella me pasó el lápiz después de
un tiempo y dibujé unos pocos animales de la mejor manera que pude.

"¿Por qué mamá te besó?"

La punta del lápiz se rompió porque me esforcé demasiado en la superficie. Mi corazón dio un
vuelco, se me secó la boca y no tenía idea de lo que Lara estaba hablando. ¿Cuándo nos vio
besándonos? Habíamos sido tan cuidadosas, ¿No es así? Busqué apoyo, pero los ojos de Camila
estaban cerrados y ella no estaba escuchando en absoluto. Afortunadamente los otros de nuestro
alrededor tenían audífonos también.

"Uh, ¿Qué quieres decir?" Traté de pescar para obtener más información.

"Ella te dio un beso en la boca y mamá siempre dice que besar en la boca es especial", su manera
de redactar las cosas me hizo sonreír por un momento.

"¿Cuándo ella hizo eso?"

"Cuando nos despedimos en el aeropuerto", reveló Lara y me recordó el momento que fue hace
mucho tiempo. ¿Cómo pudo siquiera recordar eso? Ese era el punto. Lo cierto era que Camila me
había dicho adiós antes de abordar el avión con destino a Francia por primera vez. Ninguna de
nosotras había pensado en Lara en ese estado emocional, creyendo que no nos íbamos a ver de
nuevo, tal vez nunca. Ahora me enfrentaba a explicar esto a la niña de cuatro años, cuando no
tenía ni idea de cómo hacerlo.

"Bueno, uhm...verás...tu madre tiene razón. Besar en los labios es muy especial y sólo se hace
cuando alguien te gusta mucho", mi intento era patético y traté de estar tranquila.

"Me gustan mucho mis amigos...pero no les doy besos en la boca", la niña argumentó.

"Cierto", tragué saliva.

"Ya no besas a mi mami en la boca. ¿Ella no te gusta?"

387
Oh Dios, ¡Esta niña iba a ser mi muerte! Ella se movió ligeramente en mi regazo como los ojos
curiosos encontraron los míos.

"No, me gusta", intervine como me rasqué la cabeza en confusión total.

"No entiendo", dijo Lara con buena razón, ya que no estaba teniendo mucho sentido.

"Tal vez deberías preguntarle a tu mamá acerca de esto más tarde", me acobardé porque estaba
cagada de miedo de decir algo equivocado y molestar a Camila.

Por suerte, la conversación terminó ahí y la niña de pelo claro me abrazó para disfrutar el resto del
viaje en silencio. Seguí repitiendo sus palabras en mi cabeza, pero era crucial concentrarse en el
juego.

Después de haberla jodido completamente en el último partido, quería compensar esta vez. Para
mi sorpresa, Camila y yo estábamos compartiendo este momento y eso se añadió a mi fuego.
Nuestro adversario no era el más fuerte de todos modos y el partido de vuelta era mucho más fácil
que el primero. El hecho de que yo estaba jugando un buen partido tenía algo que ver con eso, por
supuesto.

Pasar las pelotas adecuadas en el momento preciso era en lo que tenía que enfocarme. Funcionó a
la perfección con una compañera brillante en el lado izquierdo: Camila era mucho mejor cada vez
que jugaba. Su estancia en París definitivamente estaba dando sus frutos y estaba en shock de lo
rápido que ella era. Ninguna de las otras jugadoras tenía alguna posibilidad de mantenerse al día
con su velocidad.

Corriendo por el lado izquierdo, entró en la caja de 18 yardas mientras yo estaba en posición
central justo fuera de ella. Levantó la cabeza por una fracción de segundo antes de pasarme el
balón. Yo estaba sin marcar y decidí parar el balón durante un segundo con un pie, conseguí mi pie
derecho lista para chutear el balón en la esquina superior derecha. Aunque el portero intentó
atraparlo, la pelota fue insalvable con el giro que había puesto en él.

La multitud aplaudió y sentí a mis compañeras de equipo aplastarme con sus abrazos. Mi novia fue
la primera, sus ojos brillaban con tanto orgullo antes de envolver mi cintura con sus brazos. Ese gol
fue casi el epítome de lo bien que estábamos trabajando entre nosotras ahora mismo; dentro y
fuera del campo. Estaba seriamente tentada a besarla, pero me detuve a tiempo.

Para el resto del juego, Camila y yo jugamos con nuestros corazones y dimos una actuación
impresionante. Desafortunadamente ella no anotó, pero ayudó con otro gol para Normani. No se
trataba de marcar, pero me hubiera gustado que ella consiguiera el acta del partido también.

Terminamos con una victoria de 3-0. Eso fue muy satisfactorio y me quedé contenta con mi
rendimiento después de haber tenido un juego tan horrible la última vez. Todo después del juego
era una rutina. Hacer prensa era agradable cada vez que ganábamos así que di un par de

388
entrevistas y me quedé un tiempo afuera para firmar autógrafos. Era importante compensar a los
fans y la gente había sido genial. Todos los jugadores firmaron un montón de jerseys, posaron para
las fotos, pero mis ojos se remontaron en la chica que llevaba el número siete en la espalda.

Camila se veía radiante y tan malditamente atractiva incluso ahora. El rojo se veía diabólicamente
bien en ella y la camiseta se le pegaba a su piel, lo que acentuaba sus curvas. Ajustó su cinta y se
tomó selfies con los fans que, obviamente, la amaban. No tanto como yo la amaba, pero sentí un
poco de decepción que teníamos que volver al hotel a hacer las maletas. Teníamos que ir al
aeropuerto poco después y dudaba que tuviéramos más tiempo a solas.

Suspiré en silencio, pero la miré, siempre y cuando podía.

Camila's POV

Mis maletas estaban llenas y estaba lista para salir del hotel e ir al aeropuerto. El tiempo había
pasado volando y no podía creer que estaba a punto de regresar a París. Por mucho que me
encantaba la vida que había construido allí, algo faltaba: la morena dueña de mi corazón.

Estábamos en buenos términos después de un pequeño problema de hace unas semanas. Mis
dudas y temores se habían disuelto rápidamente y habíamos sido capaces de arreglar las cosas,
aunque estábamos tan lejos. La distancia no lo hizo fácil, pero habíamos trabajado duro para
mantenernos en contacto. Yo estaba más feliz desde hace mucho tiempo después de haberla
visto. Por desgracia nuestro tiempo estaba terminando demasiado pronto.

Miré hacia arriba y vi a Lara mirándome fijamente mientras tomaba las maletas para irnos.

"¿Qué pasa, cariño?" Le pregunté preocupada.

"¿Por qué besaste a Lauren en la boca?" Dijo claramente confundida mi hija y yo estaba
desconcertada. Ella no tuvo que explicar. Inmediatamente supe de lo que estaba hablando. Besar
a Lauren en el aeropuerto había sido instintivo en ese entonces, pero siempre me había
preguntado por qué Lara nunca lo había mencionado. Con el tiempo yo había asumido que lo
había olvidado. Tomando una respiración profunda, me senté a su lado en la cama y le acaricié el
pelo suavemente.

"Cuando besas a alguien, entonces tú quieres que esa persona sepa cuánto te gusta", comencé
con una voz suave y quería ser honesta. La mayor parte del tiempo, iba con mi instinto sobre cómo
manejar esas situaciones. Después de todo, no tenía la experiencia en la crianza de un niño, pero
ser genuina fue una prioridad y traté de ir con la corriente. "Al igual que, cuando te beso en la
mejilla, por ejemplo. Pero besar a alguien en los labios es aún más que eso. Eso significa que tú y
esa persona tienen algo especial."

"¿Por qué no puedo besar a Panqueques en los labios, entonces?" Lara preguntó y me reí
ligeramente.

389
"Bueno, hay una gran diferencia entre gustarte alguien y estar enamorado de alguien. ¿Sabes lo
que eso significa?" no sabía cómo redactar correctamente. "Mira, yo te amo mucho. Y amo a
Lauren mucho. Pero también estoy enamorada de ella, lo que significa que tengo un montón de
sentimientos por ella que significan más que amistad."

"¿Cómo?"

"Al igual que...quiero tomarle la mano todo el tiempo o incluso darle un beso en los labios a veces.
Ella me hace muy feliz", mi corazón latía muy rápido ya que estaba tomando un gran paso en
admitirle esto a ella. "Un día lo comprenderás mejor, cariño. Lo prometo."

"¿Cómo tú y papá?" Su pregunta me tiró para un circuito. Sin embargo, Austin había sido la única
persona que había besado delante de Lara y ella también había visto fotos. Tal vez era más fácil
para ella entenderlo así.

"Sí", asentí ligeramente. "Papá y yo también estábamos enamorados. Todavía nos queremos y
somos buenos amigos. Pero no nos besamos más, ¿Verdad?"

"Cierto", Lara asentía ahora. "Porque quieres besar a Panqueques ahora."

"Sí", no pude ocultar una amplia sonrisa cuando ella dijo eso. Se veía tan concentrada y vi las
pequeñas ruedas dando vuelta en su cabeza, tratando de entender la idea compleja y abstracta
del amor. "Eso... ¿Eso está bien contigo?" Mi voz no era firme esta vez. Nunca habíamos tenido
esta conversación con Ariana, y decirle a mi hija acerca de estar en una relación con Lauren era un
riesgo. Un riesgo que estaba dispuesta a tomar en este punto, sin embargo.

"Seguro", la niña dijo con indiferencia y suspiré de alivio. "Me gusta también. Pero yo no quiero
darle un beso en la boca, pero tú sí."

"Gracias", reí y la besé en la frente. "Eres la mejor, ¿Lo sabías? Y me alegro de que te guste,
porque ella te ama."

Di otro beso en su sien y mejilla antes de oír un golpe en la puerta que me dio a saber que nos
íbamos. Entrando en el pasillo, Normani me miró confundida.

"¿Lauren no está contigo?"

"No", respondí y sacudí la cabeza. "¿No estaba contigo?"

"No la he visto hace mucho rato, así que pensé que podría haber venido a verte", la defensiva
centrocampista explicó su desconcierto. "Por lo general, ella es una de las primeras personas en
estar lista. Aquí, toma la llave. Esperaré y cuidaré a Lara mientras la vas a buscar."

"Muy bien", estuve de acuerdo y tomé la lleva de la habitación de Normani. Al abrir la puerta, vi la
maleta de Lauren abierta pero no llena. ¿Ella no había empacado? Eso era sin duda inusual.

"¿Lauren?"

390
Entré en la habitación y vi la puerta del baño abierta. Pero no era lo único que estaba abierto; el
mini-bar había sido utilizado. Las pequeñas botellas de licor fuerte faltaban y tuve una muy mala
sensación. Haciendo mi camino al baño, descubrí a Lauren sentada en el suelo: con las rodillas
arriba, frente apoyada en los muslos y sollozos escapando de sus labios. Las botellas vacías de
vodka estaban repartidas por todo el azulejo.

"¿Lauren?" pregunté con cuidado y su cabeza se levantó para enfrentarme. Mi corazón cayó en
picada cuando vi sus ojos hinchados y las lágrimas seguían cayendo de ellos. "¿Qué pasó?" quería
agacharme, pero la chica mayor se puso de pie torpemente, claramente borracha lo que no fue
una sorpresa después de ver las botellas de alcohol vacías.

Pero en lugar de contestar, Lauren me dio la espalda y siguió moviendo la cabeza. Ella realmente
estaba empezando a asustarme. Tenía una inclinación de lo que podría ser, pero no quería
presionarla. Tomando un paso más en dirección a ella, puse mi mano en su hombro y traté de
volverla para que me mirara a la cara. Un sollozo más fuerte llenó la habitación y mi corazón
empezó a doler.

"Lauren, mírame", le supliqué, pero ella estaba completamente fuera de sí. Fue una lucha, pero
me las arreglé para conseguir que se diera vuelta. El aspecto de devastación en su rostro envió un
escalofrío por mi espalda. "¿Qué está pasando? Por favor, habla conmigo."

"Yo soy...lo peor", la voz tensa exhaló.

"¿Qué? ¿Por qué?" Traté de entender y quería acariciarle la mejilla, pero ella no me dejó.

"Soy la responsable de esto...debería haber hecho más", se tambaleó y puse un mano en su cadera
para apoyarla.

"¿Responsable de qué?" Le pregunté desesperada y odiaba verla tan destruida. Nunca antes había
visto a alguien en este estado. Los peores escenarios posibles corrían por mi cabeza y me preparé
para lo que iba a decir.

"Mi mamá...ella...trató de suicidarse", Lauren sollozó y sentí la última parte de su fachada


desmoronarse. Mis propios ojos se hincharon con lágrimas cuando escuché al amor de mi vida
explicando la razón de su ruptura. Me sorprendió, por supuesto. Pero una parte de mí sabía que
los problemas de su madre volverían a aparecer. Nunca habría deseado que esto sucediera sin
embargo. Los ojos verdes están tan dolidos y casi secos de la cantidad de llanto que
probablemente había tenido. Todo lo que quería era ayudar pero me congelé por un momento.

"Lo siento mucho", le susurré sinceramente y limpié los rasgos húmedos de sus mejillas.

"¿Sabes lo que le dije? La última cosa...la puta cosa que le dije fue...que ya no iba a salvarla si ella
decidía quitarse la vida", confesó Lauren enfocar sus ojos en este punto. Los orbes esmeraldas se
lanzaron frenéticamente y mi pulso estaba por las nubes al ver a alguien que me importaba en tal
agonía.

391
"Esto no es tu culpa", le dije con cautela, pero Lauren rió amargamente y di un paso hacia atrás.

"¿No escuchaste lo que acabo de decir?", ella me miró y sabía que no podía tomar en serio si ella
terminaba enojándose conmigo, reemplazando su rabia. "!YO HICE ESTO!" De repente gritó
mientras su voz se quebró al final. Sentí las gotas calientes correr por mi cara ahora.

"Lauren, por favor, para", le supliqué porque me mató verla culparse a sí misma. Ella estaba
apretando la mandíbula y traté de acercarme.

"!Aléjate de mí!", ella seguía gritando en un aturdimiento completo del alcohol, el dolor y la ira.
"No soy buena para ti... ¡No soy buena para ninguna persona! Me odio a mí misma, Camila...Joder,
¡Me odio!" las palabras resonaron en el baño y me sentía como si estuvieran apuñalando mi
corazón con un millón de agujas sólo testigos de su dolor.

"Te amo, por favor no me alejes", mi voz temblaba como me di cuenta de Lauren mirando a su
propio reflejo en el espejo del baño.

Fue una fracción de segundo, un acto en el calor del momento, como Lauren golpeó el espejo con
toda su fuerza. El sonido de la rotura del vidrio me encogió. Mis ojos se cerraron por un segundo.
Como volví a abrirlos, Lauren estaba jadeando fuera de control y observó su mano ensangrentada.
Los dedos le temblaban y me quedé petrificada. Se veía muy mal y estuve a punto de correr hacia
ella cuando vi sus expresiones faciales cambiar.

Cada color había desaparecido de su rostro. Tenía miedo de que ella se desmayara por la sangre,
pero sus orbes esmeraldas no se fijaron en su mano ya. Ella estaba mirando más allá de mí con
horror absoluto. Rápidamente me di la vuelta y la rotura del cristal no era nada comparado con mi
propia rotura del corazón en ese momento.

Lara estaba de pie en la puerta; completamente inmóvil. Sus grandes ojos se llenaron de lágrimas
y temor genuino. Hace poco le había dicho que estaba enamorada de la persona que golpeaba
espejos y la asustaba. Esta era una auténtica pesadilla.

Normani apareció justo detrás de ella y parecía muy sorprendida. Fue instintivo pero corrí hacia
Lara y la tomé en brazos. Sabiendo que probablemente Normani cuidaría a Lauren, no podía
quedarme un segundo más. Mi hija empezó a llorar en cuanto la abracé y eché una última mirada
a Lauren. Ella parecía más angustiada ahora que antes. Sabía que esto la había herido y ella nunca
hubiera querido que Lara viera eso. Pero no podía aguantar más. Mi primera prioridad era y
siempre sería la pequeña niña quitándola de la situación tan rápido como fuera posible.

=================

392
Capitulo 25

Lauren's POV

Se sentía como un sueño - o una pesadilla más adecuadamente. Acababa de regresar del hospital y
ahora estaba de vuelta a la habitación del hotel, empacando mis cosas. Bajo cualquier otra
circunstancia, estaba segura de que el hotel me hubiera corrido desde que había destrozado su
cuarto de baño. Al explicar la situación de mi familia que provocó la crisis, Normani había
conseguido su piedad al parecer. Tenía la oportunidad de quedarme una noche más y también mi
amiga cercana.

No sólo Normani me había llevado al hospital, ella había estado allí todo el tiempo, mientras que
yo conseguía puntos de satura en mi mano y un IV para recuperar la sobriedad. Ella era una buena
amiga y estaba segura que no la merecía. El vendaje en mi mano me estaba molestando.
Afortunadamente, tenía una alta tolerancia al dolor y las puntadas no me molestaban. Era
incómodo, pero el dolor no era demasiado malo. No era nada comparado con el dolor que sentí
cuando me acordé de lo que había pasado en el baño hace unas horas.

La mirada de miedo en los ojos de Lara se había incrustado para siempre en mi cerebro. Enviaba
un escalofrío por mi espalda cada vez que me acordaba de ella. Mi pulso se iba por las nubes, una
vez más, como mi mente vagaba a la memoria fresca de yo gritándole a Camila y quebrarme
completamente frente a ella. Con todo lo ocurrido, había logrado meter la pata en la única cosa
buena en mi vida. No había ninguna duda en mi mente que no iba a saber de Camila en un tiempo;
y con razón. No me hablaría a mí misma si yo estuviera en su posición.

Oí un golpe en la puerta y supuse que era Normani que había traído la cena para nosotras. Mi
corazón se dejó caer cuando vi los orbes marrones familiares encontrarse con mi mirada. ¿Esto era
la vida real?

"H-hey", tartamudeaba claramente sorprendida de ver a Camila de pie delante de mí.

"Hey", respondió ella en voz baja. "¿Puedo entrar?"

"Claro", asentí después de darme cuenta de que estaba bloqueando el camino con mi mirada fija
flagrante y no movimiento. "Pensé que todo el mundo se había ido."

"Dinah y yo reprogramamos nuestros vuelos", la más joven me informó mientras entrabamos a la


habitación. "Queríamos asegurarnos de que estuvieras bien."

Me quedé muy sorprendida. Sentada en el borde mi cama, la otra morena sacó una silla y tomó
asiento frente a mí. Estaba demasiado conmovida para hablar y sólo vi que sus ojos cayeron a mi
mano lesionada. No era consciente, pero me tensé al instante. La realidad de lo que ella había
visto antes estaba empezando a hundirse.

393
"¿Cómo está tu mano?" Su voz sonó ronca por un momento, pero todavía suave.

"Está bien. Con unos pocos puntos de satura", respondí con indiferencia porque me importaba
una mierda mi mano ahora mismo.

"¿Te duele?"

"En realidad no", respondí vagamente y me sentí tan increíblemente vulnerable bajo su mirada
escrutadora. La preocupación era claramente evidente y un largo momento de silencio incómodo
siguió. Nerviosa, moviendo mi pierna, finalmente reuní el valor para hablar. "No sé qué decir para
ser honesta. No hay nada que posiblemente pueda decir para explicarte cuánto lo siento. Estoy
tan avergonzada...Apenas puedo mirarte."

"Sé que nunca quisiste que esto sucediera", el tono de Camila era gentil y me animó a seguir
adelante.

"No tienes que decirme, pero... ¿Cómo está Lara?", le pregunté con cuidado y nuestros ojos se
encontraron por un segundo.

"Ella simplemente se quedó dormida", la madre soltera se frotó la sien en breve. "Dinah está con
ella en estos momentos."

"Ella me odia ahora", concluí con voz tranquila y miré al suelo, avergonzada.

"No, por supuesto que no", respondió Camila pero suspiró con desesperación. "Pero tengo que
admitir que está muy conmocionada."

"Ella me tiene miedo, ¿Verdad?" Mi voz temblaba simplemente pronunciando esas palabras. La
centrocampista izquierda vaciló con su respuesta y la miré para ver su reacción. No tenía que
decirlo. Sabía que con sólo mirarla yo tenía razón.

"Un poco", la otra jugadora de fútbol confesó y bajé mi cabeza rápidamente, enterrando mi cara
entre las manos.

"Oh Dios", suspiré profundamente. El dolor punzante en el pecho era insoportable. Me había
prometido a mí misma que no iba a llorar delante de ella nunca más, pero la confirmación real de
Lara temiéndome trajo lágrimas a mis ojos. Era difícil mantener mi entereza en este punto, pero se
lo debía a Camila después de lo que la había hecho pasar hoy.

Para mi sorpresa, sentí sus dedos delgados envolver mi muñeca y sacar mi mano de la cara. Ella
entrelazó nuestros dedos en un gesto de compasión y eso una vez más me recordó por qué la
amaba tanto. Desafortunadamente, tenía la sensación de que eso no importaría ya más.

"Lo siento mucho. Nunca quise involúcrate en esto; especialmente no a Lara", tenía que por lo
menos tratar de disculparme.

394
"Lo sé", suspiró ella, pero no me miró esta vez. "¿Vas a Miami para ver a tu mamá?" El cambio de
tema fue rápido, pero negué con la cabeza.

"Ella no quiere verme", le dije.

"Tú no sabes eso", Camila intervino, suponiendo que era la culpa la que hablaba.

"En realidad, lo hago", le revelé y vi sus orbes marrones regresar a mis verdes. "Taylor me dijo que
mi mamá no quiere ver a nadie...especialmente no a mí."

"Lamento escuchar eso", la jugadora parisina ofreció sinceramente. "Y siento que estés pasando
por todo esto. Pero tienes que saber que esto no es tu culpa."

"Lo sé", murmuré.

"¿Lo haces?" Camila prensó sorprendentemente y enfocó sus ojos con más atención en los míos.
"Las cosas que dijiste antes...no puedes culparte, Lauren. No es saludable. El hecho de que tú
dijiste que te odiabas a ti misma...me preocupa mucho."

"Estaba borracha", me encogí de hombros, porque apenas recordaba de lo que grité en aquel
deslumbramiento.

"Lo decías de verdad", instó y rompimos contacto visual como tragué. "Y no te puedo decir lo
mucho que me duele saber eso. Porque sé que no voy a ser capaz de solucionar este problema.
Pero quiero que sepas que siempre estaré ahí para ti, Lauren. Tú has estado allí para mí y Lara y
quiero hacer lo mismo, no importa lo que pase. No te abandonaré y necesito que sepas eso."

Eso sonaba muy parecido a una ruptura. "Seguiremos siendo amigas." La humedad volvió a mis
ojos a pesar de que estaba luchando con fuerza.

"Sólo tienes que decirlo", dije en voz baja y me tragué un sollozo casi escapado de mi garganta.
"Terminamos, ¿No es así?"

La de ojos marrones estaba luchando contra sus propias lágrimas ahora. Mi corazón estaba a
punto de salirse de mi pecho y me preparé para ser destrozada. Inconscientemente estaba
sosteniendo su mano en la mía, estaba segura de que iba a ser el fin para nosotras.

"No sé, Lauren", dijo Camila por encima de un susurro. "Te amo. Y eso no va a desaparecer. Pero
Lara es mi primera prioridad y siempre lo será. No puedo ser egoísta estando contigo si tenerte
cerca, posiblemente, le molesta", la primera lágrima rodó por mi mejilla, pero ella rápidamente la
limpió. "Mírame. Sé que nunca intencionalmente nos harías daño. El problema es que tú te
conviertes impredecible cuando bebes."

Al escuchar a la única persona que amaba con todo mi corazón utilizar esa palabra, impredecible,
mi corazón se rompió en mil pedazos. Era una palabra que yo a menudo utilizaba con el

395
comportamiento de mi madre cuando estaba borracha. Y ahora yo estaba alejando a la gente que
me amaba y se preocupaba por mí con mi comportamiento incalculable.

"La última vez que mi vi a mi mamá; ella me dijo que me estaba volviendo igual que ella. Y por
primera vez, tengo miedo hasta la muerte de que ella podría haber estado en lo cierto", admití con
una voz temblorosa y no pude reprimir el llanto otra vez.

"Lauren", la más joven respiró empáticamente y de repente se sentó a mi lado en la cama. Sentí
sus brazos alrededor de mí, tirándome a su lado y dejando soltar las lágrimas que no había llorado
antes. "Está bien...estoy aquí", susurró y me acordé de las palabras que habían cambiado tanto
para mí. Déjate caer y voy a atraparte. Esas palabras hicieron eco en mi cabeza cuando sentí su
mano frotando mi espalda y brazo con dulzura. Ella no se movió y me consoló hasta que me había
recompuesto.

Ligeramente liberando a mí misma de su abrazo, no pude contenerme, pero presioné mis labios
contra los suyos. Probablemente tenía sabor a lágrimas saladas. Agarrando su hombro en plena
desesperación, no estaba dispuesta a dejar ir. El beso era urgente y mostraba lo desesperada que
estaba.

"No puedo", la voz de Camila estaba temblando y me di cuenta que estaba luchando contra sus
propios instintos de ceder.

"Camila por favor", le rogué con exasperación y miré profundamente a los ojos cálidos marrones
antes de reunir nuestros labios de nuevo. Ella jadeaba y la besé con ferocidad, como si estuviera
tratando de demostrar un punto. Aunque ella me devolvió el beso y parecía tentada a dejarlo ir, lo
duda no se iba en su extremo. A tan sólo unos segundos más tarde, ella se apartó por completo.

"No, esto es...", balbuceó sin aliento. "Esto no va a mejorar las cosas para ti. Por mucho que te
deseo, esto se siente mal."

"¿Estás rompiendo conmigo?" Fue todo lo que pude decir.

"Necesito un poco de tiempo para resolver las cosas con Lara", Camila contestó en voz baja y
claramente luchó con su decisión también.

"No me dejes, Camila...por favor", estaba más allá que desesperada en este momento y,
posiblemente, patética, pero no podía soportar la idea de perder a ella y Lara.

"Voy a estar allí para ti, te lo prometo", ella me trató de tranquilizar. "Y haré todo lo que está en
mi poder para ayudarte a través de esto, pero creo que necesitas más ayuda que eso."

"¿Cómo qué? ¿Un psiquiatra?" Solté.

"No hay vergüenza en hablar con alguien neutral y calificado para ayudarte a lidiar con todo", la
morena sugirió.

396
"Ok, entonces lo haré", me apresuré a aceptar cualquier cosa si eso significaba que no se diera por
rendida. "Si prometes que no me ignoraras después de que nos vayamos."

El recuerdo de lo que había pasado después de mi visita sorpresa en París era uno de los más
dolorosos. Por supuesto, ella había estado saliendo con Ariana en el momento pero su rechazo
había dejado algunas cicatrices. Las noches que pasé borracha enviándole mensajes de texto,
llamándola y buscándola sin obtener una sola respuesta era la última cosa que quería volver a
pasar.

"No lo haré", limpió otra lágrima de mi mejilla. "Pero tienes que hacer esto por ti, Lauren. No por
mí."

Justo cuando estuve a punto de contestar, oí el zumbido de su teléfono. Sacó el dispositivo y


suspiró ligeramente.

"Es Dinah. Lara se despertó y está preguntando por mí", explicó Camila y me sentí asentir. "Me
tengo que ir", añadió más tranquila. Me sentí paralizada, incapaz de decir algo porque había tanto
que quería que ella supiera; pero también parecía si eso no iba a hacerla cambiar de opinión.
Tomé una respiración profunda y la vi inclinarse. Ella me besó en la mejilla con ternura y cerré los
ojos para saborear el breve momento antes de que ella se levantara y comenzó a caminar hacia la
puerta.

"¿Camila?" De repente espeté.

"¿Sí?" Se dio la vuelta con una mirada inquisitiva.

"Podrías...uhm...decirle a Lara que....lo siento", no estaba segura de que más decirle a la niña de
cuatro años, pero era necesario intentarlo.

"Ya lo hice", Camila reveló con una pequeña sonrisa. "Pero se lo diré de nuevo, lo prometo."

"Gracias", le dije sinceramente.

"Te llamaré pronto", dijo antes de salir de la habitación y lo único que podía hacer era esperar a
que ella lo hiciera.

Mi pierna temblaba como loca. Sólo había estado sentada en la oficina bastante grande durante
unos dos minutos, pero mi instinto me dijo que corriera. Dr. Lombard estaba haciendo un poco de
té para nosotras y la primera impresión de la psicóloga había sido buena. No tenía ni idea de qué
juzgar cuando se trataba de una terapeuta pero yo la había elegido porque había trabajado con
deportistas profesionales antes.

397
La mujer pelirroja volvió a la habitación con dos tazas de té. Colocándola frente de mí, le di las
gracias educadamente antes de que ella tomara asiento enfrente de mí. No parecía tan formal
como lo que esperaba. Para ser sincera, tenía una vibra hippie alrededor, pero eso era
extrañamente calmante. No me hacía sentir como si yo fuera su paciente y ella era mi terapeuta.
Tomando un pequeño sorbo de la bebida caliente, no estaba segura sobre cómo iniciar desde que
habíamos intercambiado bromas antes.

"No sé qué decir", admití con una risa nerviosa.

"Bueno, no tienes que decir nada, pero haría mi trabajo más fácil", trató de aliviar mi tensión con
un poco de broma. "¿Por qué no empiezas por decirme lo que te hizo decidir verme?"

"Ok", murmuré y puse mis manos en mi regazo; una de ellas aún vendada. "Hubo un accidente...y
alguien sugirió que podría ver a alguien como tú."

"Eso es muy vago, pero un comienzo", la mujer con gafas siguió sonriendo y esta vez lo hice
también. "Cuéntame un poco sobre ti, así tengo una idea mejor de quién es Lauren Jauregui."

Asintiendo, empecé a hablar de fútbol y de la universidad en su mayoría. Aquellos eran,


obviamente, las cosas más importantes en mi vida y no tenía problemas en hablar sobre mis
estudios y ocupación. La mujer tomó notas pero escuchó con atención. Pasó el tiempo y tal vez
esto no era tan difícil después de todo, pensé.

"Parece que tu vida está muy complicada con una carácter profesional", Dr. Lombard evaluó.
"¿Qué tal tu vida personal? ¿Familia, amigos o compañero incluso?"

"Mi familia vive en Miami, así que no los veo mucho desde que me mudé a Boston", le respondí y
vacilé en entrar en más detalles. "Tengo un montón de amigos en la universidad. Dos de mis
mejores amigos los conocí ahí, Kristie y Luis. Y hay también una compañera en el equipo nacional
con quién tengo una gran amistad. Su nombre es Normani pero vive en Texas."

"¿Estás en una relación en este momento?"

"Um...no lo sé, para ser honesta", admití con otra risa nerviosa.

"Eso suena fascinante", la mujer sonrió. "Por lo general, la gente sabe si están en una relación o
no. ¿Puedo preguntar por qué no estás segura?"

"El incidente del que hablé involucra a mi novia... o mi ex novia, ni siquiera sé", tragué saliva ante
la sola idea de que yo y Camila habíamos terminado. No habíamos hablado desde la ruptura hace
unos días. Ella me había enviado mensajes de texto varias veces y nos manteníamos en contacto,
pero era incómodo ya que ni sabía realmente qué decir.

"¿Me puedes contar un poco sobre ella y su relación?"

398
"Su nombre es Camila", exhalé en voz alta. "Ella es hermosa, inteligente, divertida y he estado
profundamente enamorada de ella desde que tenía dieciséis años", sonreí sin saberlo. "Ella es
también una jugadora de fútbol profesional y nos conocimos en el equipo juvenil. Hemos tenido
un viaje lleno de baches hasta aquí. Ella vive en París ahora y no nos vemos mucho. La mayoría de
las veces es gracias a lo relacionado con el fútbol porque jugamos en el equipo nacional. Pero
finalmente estábamos juntas y las cosas iban muy bien...hasta que me las arreglé para arruinar eso
por supuesto."

"¿Qué te hace pensar que has saboteado tu relación?", la de pelo rojo cuestionó con curiosidad.

"Tener una crisis épica que incluye romper un espejo en frente de ella y su hija de cuatro años de
edad, sin duda no ayuda a la relación", espeté, pero no había ningún juicio en los ojos de la mujer.

"No veo cómo eso podría ser perjudicial. Ella tiene una hija, ¿Dijiste? ¿Es Camila mayor que tú?"

"No, en realidad es un poco más joven que yo. Ella quedó embarazada a una edad temprana", le
expliqué; todavía no había juicio.

"Volviendo a lo que tú llamas una crisis épica; ¿Cuál fue la razón de ello?"

"Es una historia bastante complicada", traté de evitar hablar de mi mamá, aunque sabía que
debería hacerlo.

"Para historias complicadas es que estoy aquí", la terapeuta animó suavemente.

"Bueno...debería haber mencionado que mi situación familiar no es la mejor", me senté con la


espalda recta y me sentí un poco más ansiosa. "Mi madre ha sido alcohólica desde hace varios
años y eso ha tomado bastante peaje en mi relación con ella. La semana pasada, recibí una
llamada de mi hermana diciéndome que mi madre trató...de...quitarse su vida", Dr. Lombard
enarcó las cejas por primera vez. "Fue después de un partido de fútbol y perdí los estribos. Lo
siguiente que sé, es que estaba borracha y le grité a Camila que me dejara sola...y esas cosas de
boxeo."

"Primero que nada, siento oír lo de tu madre", ofreció genuinamente. "Lo que me parece
interesante es que dijiste que tu madre es una alcohólica, y estoy asumiendo que ella no está
sobria por lo que me dijiste. Sin embargo, tu primera reacción después de enterarte de su intento
de suicidio fue emborracharte."

Tragué saliva. Fuertemente.

"No soy una alcohólica", dije apremiante.

"No he dicho eso o quise decir eso y me disculpo si he sido demasiado fuerte", la mujer apaciguó
inmediatamente. "Si en algún momento te sientes incómoda con una pregunta o tema, por favor
dímelo."

399
"Ok", estuve de acuerdo y aclaré la garganta.

"¿La lesión en la mano es debido al incidente del espejo?"

"Sí", le respondí honestamente.

"¿Esto sucede a menudo? ¿Cuándo te enojas mucho contigo misma?" ella me confundió con esa
pregunta por alguna razón.

"No lo creo", dije insegura. "No soy una persona enojona, creo. Por lo general, soy todo lo
contrario."

"Pareces muy tranquila y serena en verdad", la psicóloga confirmó mi propia evaluación. "¿Dirías
que eres más estricta contigo misma que otras personas?"

"Oh, sí", asentí.

"Y cuando no superas tus propias expectativas, ¿Te enfadas contigo misma?", reformuló la
pregunta anterior y comprendí que perdí el énfasis más importante. No se trataba de la ira. Se
trataba de la ira contra mí misma.

"Sí", admití en voz baja.

"Esta es una pregunta difícil para algunas personas, por lo que quiero que me digas si no te sientes
cómoda respondiendo: ¿Alguna vez te has dañado a ti misma antes del incidente del espejo?"

Mi pulso se estaba acelerando rápidamente pero me apresuré a interponer.

"No", le dije y miré la mano vendada en confusión. "Nunca me he hecho nada en ese sentido. Y no
soy una persona violenta, realmente no lo soy. Nunca he estado en una pelea o algo así."

"Lauren, no estoy tratando de decir que eres algo", el tono de la mujer era tranquilizador.
"Simplemente estoy tratando de llegar a conocerte. Pero también tengo que ser honesta contigo."

"Muy bien", me removí en el asiento.

"Emborracharse a un punto donde estás dispuesta a romper un espejo con tu propia mano, es un
acto de violencia", la terapeuta habló lentamente pero con suavidad. "Es un acto de violencia
contra uno mismo. Estar enojado no significa necesariamente que vas alrededor golpeando
personas. Hay un comportamiento llamado auto agresión y viene en muchas formas. No estoy
diciendo que estás sufriendo de este comportamiento en particular, pero esa noche, mostraste
algunos signos de ello. Y por lo que he reunido hasta ahora acerca de tu familia, tienes toda la
razón para estar enojada. ¿Está bien de mi parte decirlo?"

Me quedé anonadada. ¿Cómo en la tierra había visto a través de mí con tanta rapidez? Sí, estaba
muy enojada conmigo misma la mayor parte del tiempo. Me acordé de tantas instancias cuando
era joven, donde me sentía tan enojada que había golpeado mis almohadas a un punto de

400
agotamiento total. Una vez, había roto una pared, pero les había dicho a todos que fue una lesión
de fútbol.

"Sí, está bien decirlo", le contesté después de unos segundos de silencio.

"Eso no es nada de qué avergonzarse. A menudo se asocia con las personas que se ocupan de una
gran cantidad de responsabilidad y por lo tanto la culpa", la mujer clavó una vez más. "¿Podría ser
preciso en tu caso?"

"Muchísimo", no podía evitarlo pero casi reír porque ella estaba casi en el lugar.

"Es bueno saber que no he perdido mi borde entonces", bromeó ella claramente desde los
diplomas en la pared que eran indicadores evidentes de que ella era muy buena en lo que hacía.

Continuamos hablando de temas más ligeros durante el tiempo restante, pero me sorprendió en
lo positivo que había sido el primer encuentro. Tal vez no era tan malo después de todo y Camila
había tenido razón en su consejo. En cuanto a mi teléfono, vi un mensaje de texto de la morena:

"Hey. ¿Quieres hablar por Skype después? Estoy libre esta tarde :)"

No había ninguna duda en mi respuesta y no podía esperar. Con suerte, esto sería un paso más en
la dirección correcta.

Sesión de Skype más tarde ese día.

Lauren: Hey, es bueno 'verte'.

Camila: Hola, encantada de 'verte' también.

L: ¿Cómo estás?

C: Bien. Sólo asentando de nuevo en las cosas por ahora. ¿Cómo estás?

L: Lo mismo, supongo.

C: ¿Qué es lo que has hecho hoy?

L: Tuve mi primera sesión de terapia en realidad.

C: ¿En serio? Eso fue rápido.

L: O muy retrasada. Depende de cómo se mire, probablemente.

C: ¿Supongo que fue bien entonces?

401
L: Sí. Mejor de lo que esperaba para ser honesta. Dr. Lombard parece muy agradable y sólo había
oído cosas buenas acerca de ella. Así que, quería hacerlo tan pronto como fuera posible antes de
querer acobardarme.

C: Estoy feliz de escuchar eso.

L: Tomar tu consejo no es una mala cosa, supongo.

C: No me des crédito por eso, Lauren. Tú fuiste la que la contacto y realmente fuiste a verla. Estoy
muy orgullosa de ti.

L: Gracias. Estoy un poco orgullosa de mí también, tengo que admitir. Fue perspicaz y no tan
incómodo como lo había imaginado.

C: ¿Cómo está tu mano?

L: Mucho mejor. Apenas duele y yo debería estar de vuelta a la normalidad pronto.

C: ¿Estás de vuelta en la práctica?

L: No, todavía no. Me dieron la semana libre para tratar...con todo.

C: ¿Has hablado con tu madre?

L: No, y no planeo hacerlo. Le envié un mensaje pero ella no respondió. Me terapeuta me dijo que
debía concentrarme en mí primero.

C: Ella parece una mujer inteligente.

L: Estás diciendo eso porque tú has dicho exactamente lo mismo. Deja de tocar tu propia corona.

C: Estás tremendamente de buen humor. Lo amo.

L: Bueno, yo te amo.

Fue instintivo y sólo salía cuando nos estábamos tomando el pelo. Casi me encogí con lo que dije,
con tanta indiferencia como si nada hubiera sucedido. A punto de cambiar de tema rápidamente,
Camila correspondió después de unos segundos.

C: Yo también te amo.

Mi corazón dio un vuelco y sabía que no debía sorprenderme ya que ella me había dicho esas
palabras hace unos días, pero estaba tan sorprendida como ella las había dicho primero. La joven
me sonrió sutilmente. Pero quería darle tiempo y resolver las cosas sin emboscarla.

L: No quiero entrometerme, pero... ¿Cómo está Lara?

C: Ella está bien. Estar de vuelta en casa definitivamente ayuda y creo que se recuperará pronto.

402
L: ¿Ella ha estado diferente?

C: No diferente, pero un poco más tranquila. No quiero presionarla, así que sólo estoy siendo
paciente.

L: Lo siento mucho por-

C: Ya basta. Ya hemos pasado por esto. Sé que te sientes culpable, pero lo estás haciendo bien
ahora y no quiero que te preocupes por nosotras.

L: Pero lo hago. Tengo que limpiar el desastre que hice.

C: Dale un poco de tiempo. Estoy segura de que va entrar en razón. Gracias por la secuela del
cómic por cierto.

L: ¿Lo tienes?

C: Sí, estaba en el correo hoy.

L: ¿Se lo has dado a Lara o estás esperando?

C: Mañana se lo daré.

L: No se lo des si piensas que no está lista. No quiero empeorar las cosas.

C: Ok, voy a ver cuándo es el momento adecuado.

L: ¿Tienes planes para el fin de semana?

C: No, tengo una maratón de películas Dinsey con Lara y Dinah pero nada además de eso. ¿Qué
hay de ti?

L: Me voy a quedar en casa y traté de relajarme.

C: Bueno, ¿No somos el alma de la fiesta?

L: Lo sé, ¿Verdad?

C: Aunque debo dejarte. Es tarde por allí y has tenido un día ajetreado. Sólo quería chequearte
para ver cómo estabas.

L: Ok, pero estoy muy contenta de que hayas decidido hacerlo.

C: Yo también.

L: Diviértete mañana y disfruta el resto de la noche.

C: Lo haré. Y mantenme informada de cómo van las cosas. Siempre estoy aquí si quieres hablar.

403
L: Gracias. Ten una buena noche.

C: Tú también. Adiós.

L: Adiós.

Camila's POV

Habían pasado cuatro semanas desde ese horrible incidente en el baño del hotel. Decirle a Lauren
que necesitaba tiempo para manejar las cosas con mi hija había sido una de las cosas más difíciles
que he tenido que hacer. Después de todo lo que habíamos vivido, yo no hubiera estado segura de
si volveríamos a sobrevivir a esto.

Pero Lauren estaba haciendo un gran esfuerzo para mejorar nuestra situación. Nos manteníamos
en contacto con regularidad, nos enviábamos mensajes de texto y Skyping siempre que podíamos.
Aunque no estábamos hablando de nuestro estado civil, nos estábamos acercando mientras ella
comenzó a abrirse. La chica mayor estaba tomando sus sesiones de terapia muy en serio y me
sentía eufórica de que estaba compartiendo cada parte de ella conmigo ahora.

A veces era difícil escucharla hablar acerca de sus problemas porque no podía entender cómo
estaba lidiando con tantas inseguridades. Todo lo que quería decirle constantemente es que ella
era perfecta para mí. Pero eso estaba fuera de los límites por ahora probablemente no sería útil de
todas formas.

Tan abierta como Lauren había estado, Lara había decidido no hablar conmigo sobre el incidente.
Siempre que traté de hacerle frente, ella parecía incómoda y me detenía. Desde que Austin y yo
habíamos estado estrechamente cerca últimamente, había hablado con él acerca de todo.
Sorprendentemente, era un apoyo y un buen amigo. Parecía estar en un muy buen lugar. Su nuevo
trabajo era en un banco prestigioso que incluyó un viaje de negocios a París y había pasado el fin
de semana con Lara.

Después de dejarla, le había ofrecido una copa de vino y terminamos hablando en el sofá. Él me
dijo sobre el fin de semana con nuestra hija y yo estaba feliz de escuchar su diversión. Sin
embargo, él cambió de tema antes de salir para el aeropuerto.

"¿Cómo va la situación de Lauren?"

"Todavía está muy en el aire", suspiré y me sentí culpable por el estancamiento de la belleza de
ojos verdes.

"¿No crees que ya hubieran arreglado la situación si realmente tienen sentimientos tan fuertes por
la otro?" Austin expresó escépticamente.

404
"No se trata de hacer las paces. No estoy enojada con ella. Ella está en un lugar muy difícil y
entiendo por qué arremetió. Pero Lara no quiere hablar conmigo sobre esto y no quiero forzarlo",
reiteré mi manera de manejar la situación.

"Lo entiendo", se encogió de hombros. "Y he estado apoyándote en esto, pero tengo que admitir
que no soy fan de Lauren...en absoluto."

"Sin ánimo de ofender, pero tú no la conoces", me sentía protectora incluso si las cosas estaban
complicadas en este momento.

"¿Qué pasa si los papeles se invirtieran? ¿Y si mi novia se hubiera emborrachado, gritado y roto un
vidrio delante de Lara? ¡Me habrías matado! Y a la novia", mi ex marido estaba mucho más
agresivo esta noche que en las semanas anteriores.

"¿Por qué el cambio repentino? Te dije estas cosas en confianza y parecías bien con ello hasta esta
noche", me confundí más y busqué su mirada.

"No creo que ella sea la adecuada para ti", dijo sin rodeos.

"Nadie es probablemente adecuado para mí, porque seamos sinceros, no soy exactamente una
carga fácil", quería aligerar el ambiente.

"Soy más adecuado que ella", Austin sugirió de repente y estaba aturdida. En cuestión de
segundos, se inclinó y sentí sus labios rozando los míos. Fue una reacción instintiva en
corresponder en una fracción de segundo, pero inmediatamente me aparté después.

"Austin, esto...es....lo siento", tartamudeé atónita ante su movimiento. "Pensé que estábamos en
la misma página. Ya hemos pasado por esto muchas veces y sabes que no funcionamos como algo
más que amigos."

"Wow...habla acerca de darle esperanza a alguien", se burló.

"No te he dado esperanzas", protesté rápidamente. "Tú fuiste el que quería que fuéramos amigos
y te di una oportunidad. Después de todo lo que hemos estado hablando, sabes que amo a Lauren
y a nadie más."

"Oh Dios mío, Camila", el más viejo suspiró frustrado. "¿Eres realmente tan ciega? ¡Ella está
jodida! Y no las vas a arreglar. ¿Crees que me gustó hablar de esa psicópata contigo desde hace
semanas?"

"No te atrevas a llamarla así", le susurré con ira.

"Pensé que recuperarías tus sentidos, pero no me dejas otra opción entonces", dijo y se levantó
del sofá. Sacó una carta de la parte interior de su chaqueta y la dejó caer sobre la mesa de café
como Dinah entró.

"¿Qué pasa?", Preguntó la polinesia, sintiendo la tensión.

405
"Me voy", Austin pasó junto a mí y me dejó más perpleja que antes. La puerta principal se cerró
detrás de él. Dinah se acercó a mí y se sentó en el sillón al lado del sofá. Mis ojos estaban fijos en
el sobre delante de mí. Había un sello en él. La carta era de un bufete de abogados y sentí mi
corazón latiendo fuera de control.

Me tomó unos momentos antes de abrir el sobre y leer la carta en él. Mi corazón se llevó la mayor
inmersión de toda mi vida. Sabía que cada color había desaparecido de mi cara. Mis dedos
comenzaron a temblar como seguí leyendo el contenido, haciendo mi estómago revolverse.

"¿Mila? ¿Qué está pasando? Me estás asustando", Dinah sonaba alarmada.

"Austin me está demandando por la custodia exclusiva de Lara", le susurré con voz temblorosa.

"!Voy a matar a ese hijo de puta!" Dinah reveló y se paró de su asiento.

Estaba demasiado ocupada re-leyendo la carta para prestarle atención a mi mejor amiga. Al darse
cuenta de mi verdadero shock, se sentó a mi lado y frotó mi espalda.

"Esto es increíble", murmuré y ahogué un sollozo. "Él está diciendo que soy descuidada con Lara
debido a mi carrera exigente, moviéndola desde un lugar a otro e interrumpiendo su oportunidad
de echar raíces", parafraseé algunas partes de la amplia gama de acusaciones mientras Dinah
seguía murmurando sus planes de asesinatos en voz baja.

"Nunca debí haber confiado en él", mi garganta se sentía en fuego por alguna razón, como si
estuviera tenido un reflujo ácido por leer.

"No podrías haber visto esto venir", Dinah intentó apaciguar.

"Él está usando eso contra mí ahora", sacudí la cabeza con incredulidad. "Incluso hacia Lauren.
Dice que estoy teniendo una relación tóxica que pone en peligro la seguridad de Lara. Está
llamando a Lauren emocionalmente inestable, violenta y destructiva con un problema de abuso de
alcohol", no podía procesar las denuncias formuladas por alguien con quien me había abierto.

"Ese pedazo de mierda no alejará a Lara", mi mejor amiga me dijo llena de convicción.

"No estoy tan segura, Dinah", respiré con desesperación. "En el papel, él tiene un muy buen caso."

"No digas eso, Mila. Él no ha estado allí durante años y ahora la quiere sólo para él. Al diablo con
eso", su enojo era evidente, pero no podía compartir esa emoción. Me sentía absolutamente
devastada.

"¿Qué pasa si él tiene la oportunidad, sin embargo? No está totalmente equivocado, incluso si la
mayoría es una mierda, ya sabes. Y si...el juez piensa que soy una mala madre", la primera lágrima
cayó y aterrizó en el papel que estaba sosteniendo. "O piensa que Lauren no es buena para Lara.
No puedo correr ese riesgo, Dinah."

"¿Qué vas a hacer?", preguntó preocupada.

406
"Creo que...tengo que acabar con ello, ¿no?"

=================

Capitulo 26
Contenido explícito.

Lauren's POV

Estaba sentada en la parte posterior del noble restaurante con Kristie a mi lado y Luis opuesto de
ella. Mis dos amigos cercanos estaban hojeando el menú mientras que yo ya sabía lo que quería.
No era mi primera vez en el establecimiento de alta gama. New York era un lugar lleno de
recuerdos y estaba segura de que había algunos nuevos por hacer.

Mañana era el comienzo de un campo de entrenamiento de cuatro días con USWNT. Era el
período más largo como el equipo desde hace tiempo. Pero esos campos eran necesarios para
conseguir que todos estuviéramos en la misma página. El hecho de que todas mis compañeras de
equipo estaban llegando a New York era una bendición porque no necesité viajar mucho desde
Boston.

Luis y Kristie se habían ofrecido a venir un día antes conmigo. Habíamos andado por la ciudad
durante todo el día y queríamos terminar la noche con una buena comida como yo había sugerido
venir aquí.

"¿Estás emocionada por mañana?" Luis preguntó y tomó un sorbo de su bebida que él ya había
ordenado antes de la comida.

"Emocionada y nerviosa", admití con honestidad.

"¿Cuánto tiempo ha pasado desde que has hablado con Camila?" La voz masculina cuestionó en
voz baja.

"Depende que como definas hablar, supongo", suspiré profundamente y bebí de mi agua. "No nos
hemos visto desde el incidente y de eso han pasado seis semanas. Al principio nos enviábamos
mensajes y hablábamos por Skype mucho y ella fue un gran apoyo en todo. Pero últimamente ella
parece distante."

"Tal vez está tratando de resolver las cosas antes de verte mañana", Luis ofreció palabras amables,
pero yo no estaba tan segura.

407
"No sé", sacudí la cabeza en señal de frustración. "Tengo este mal presentimiento porque ella me
está evitando a toda costa. Siempre que quiero arreglar algo, ella cancela a última hora. Sé que no
debo ser paranoica, pero la última vez que hablamos por Skype, ella mencionó que Austin iba a
París y no hemos hablado desde entonces a excepción de mensajes de texto."

"¿Crees que él tiene algo que ver con esto?" Kristie ahora intervino.

"Probablemente no", exhalé en voz alta. "Sólo estoy buscando una excusa, así no tengo que
culparme a mí misma por estropear todo y asustar a su hija."

"No lo digas de esa manera", la rubia me apretó el brazo con suavidad. "Al igual que Luis dijo, tal
vez Camila está trabajando las cosas con Lara y ella te dirá sobre eso en persona mañana. No
puedes decirme que no estás contenta de verla después de seis semanas."

"Lo estoy", mis labios formaron una sonrisa vacilante.

"Todo va a estar bien", añadió Kristie antes que Luis casi se atragantara con su bebida.

"Mierda", jadeó y sus ojos estaban fijos en algo detrás de nosotros. "No, no mires ahora", su
advertencia llegó a mis oídos un poco demasiado tarde.

Dándome la vuelta, vi ni más ni menos que a Emily acercándose a la sección de comedor. Mis ojos
se abrieron con sorpresa a pesar de que probablemente no deberían hacerlo. La razón por la que
conocía el restaurante era debido a mi ex novia. Ella me había traído aquí dos veces cuando la
había venido a visitar. Aún así, sentí mi pulso acelerado como la mujer de pelo claro al instante me
vio.

Ella sonrió y saludó. No quería ser grosera ya que nuestra separación había sido amistosa, después
de todo. Levantándome de mi asiento, la más vieja se trasladó hacia nuestra mesa y no pude
contenerme, pero le di un vistazo por un momento. Ella era impresionante, pero ¿Eso era una cosa
nueva? El vestido corto era simple pero elegante y acentuaba sus largas piernas. Vi una gran
cantidad de clientes echándole un vistazo en su camino, lo que no era demasiado sorprendente,
ya que había visto esa reacción mucho cuando habíamos estado saliendo.

"Hola, ¿Cómo estás?" Emily seguía sonriendo de oreja a oreja antes de abrazarnos brevemente.

"Estoy bien, gracias. ¿Cómo estás?" No pude resistirme pero reciproqué su cálida sonrisa porque
ella parecía tan genuinamente feliz y cómoda.

"Genial", asintió. "Excepto que mi agente declinó para la cena, pero todavía tengo hambre así que
decidí comer de todos modos."

"Oh...quiero decir, puedes unirte a nosotros", solté y vi sus cejas perfectamente depiladas elevarse
un poco. "Si lo deseas", añadí más insegura.

"No quiero interrumpir", la modelo vaciló pero Kristie apareció de repente a mi lado.

408
"Hola, es tan bueno verte de nuevo", Emily sonrió y abrazó a mi amiga antes de dirigirse a Luis con
una gran sonrisa también. A pesar de que sólo habíamos salido durante unos meses, mi antiguo
crush de secundaria siempre había hecho un esfuerzo para llegar a conocer a mis amigos y pasar el
rato con ellos. Eso, obviamente, contribuyó a convencerla a sentarse con nosotros - con éxito
porque Emily se rindió y se sentó junto a Luis, saludándolo correctamente con un beso en la
mejilla, antes de centrarse en mí.

"¿Qué te trae a New York?", Preguntó ella con curiosidad.

"Tengo un campo de entrenamiento aquí mañana", expliqué y me sentí extrañamente a gusto


hablando con ella.

"Así que el fútbol sigue estando bien, supongo", la rubia opuesta a mí dijo antes que yo asintiera
suavemente. "¿Cómo va la universidad?"

"Ya he terminado con los exámenes por ahora así que eso es muy bueno", le sonreí.

"Apuesto", la otra nativa de Miami respondió.

"Es agotador a veces, pero creo que lo estoy haciendo bien hasta el momento", me encogí de
hombros con humildad. "¿Qué va contigo? Dado que tenías que juntarte con tu agente, ¿Lo tomo
que todavía estás modelando a tiempo completo?"

"Sí, las cosas han estado muy locas últimamente", la modelo confirmó y tenía la atención de todos
en la mesa. "Por alguna razón...las cosas han tenido tanto éxito en los últimos meses, pero no me
puedo quejar. Hice este increíble comercial de jeans dos semanas atrás-"

"¿El de Diesel?" interrumpí y Emily parecía atónita.

"Sí, ¿Cómo sabes eso?" Intercambió miradas desconcertadas con mis amigos.

"Hablaste de eso hace un tiempo", recordé inmediatamente.

"Pero habías dicho que habían elegido a alguien más."

"Cierto, pero terminaron no gustándole la modelo y comenzaron de nuevo con el proceso", la


egresada de la NYU elaboró. "No puedo creer que te acuerdes de eso sin embargo", se rió,
aparentemente impresionada.

"Bueno, hablaste de ello durante semanas", recordé claramente y oí a nuestro camarero


acercándose detrás de mí. Él estaba listo para tomar nuestro pedido y los cuatro de nosotros había
hecho nuestra elección para entonces. Yo era la única que bebía agua, mientras que los otros tres
habían ido por el vino.

"No puedes beber porque estás en entrenamiento, ¿Verdad?" Preguntó Emily con indiferencia.
"¿O una bebida está bien?"

409
"Um...estoy tratando de no beber en absoluto", le dije con firmeza y noté a mis amigos sonriendo
con orgullo.

"Eso es probablemente lo mejor de todos modos", mi ex novia estuvo de acuerdo. "Desearía tener
esa fuerza de voluntad. Pero si alguien la tiene, eres tú."

"¿Qué te hace decir eso?" Casi me burlé.

"Siempre has sido muy dedicada y si fijas tu mente en algo tiendes a hacerlo", la rubia respondió
casualmente.

"Acabo de tener algunas experiencias muy malas últimamente, así que creo que es lo mejor para
mí por lo menos. Quiero evitar cometer más errores", me abrí un poco.

"Lamento escuchar eso", expresó Emily con simpatía.

"Está bien", le sonreí y no quería que la conversación fuera demasiado grave.

El tiempo voló y todo el mundo parecía tener un montón de diversión. Se sentía familiar estar
rodeada de mis amigos de la universidad y ex novia ya que habíamos estado así antes. Aunque no
quería, empecé a notar como las cosas habían sido fáciles entre Emily y yo. Reconocía que no la
había amado de la misma forma que a Camila pero habíamos tenido un buen rato y empecé a
preguntarme cuando las cosas habían sido complicadas.

La cena había terminado. Luis y Kristie se despidieron porque se dirigirían de regreso a Boston,
dejando a Emily y yo atrás. No estaba segura de qué hacer, comenzamos a pasear y mantuvimos
una conversación informal. No me di cuenta que habíamos terminado por fuera de su
departamento en el Upper East Side hasta que ella se detuvo. Levanté la mirada y vi a la mujer
realmente hermosa sonriendo tímidamente por primera vez esta noche.

"Bueno, gracias por la cena. Tuve un buen rato", dijo.

"Yo también", respondí con una sonrisa también, pero sentí que mi corazón bombeaba más
rápido.

"¿Tú...quieres ir arriba?" la más vieja ofreció mientras noté una risa nerviosa escapar de los labios
de color rosa. "Quiero decir...para hablar o simplemente pasar el rato."

Por mucho que me gustaba la compañía de Emily, sabía que no podía hacer eso. Incluso si sólo
estábamos hablando, me sentía extraña hacerlo a espaldas de Camila cuando las cosas estaban
tan desordenadas ya.

"Me encantaría, pero tengo que levantarme muy temprano para el entrenamiento de mañana. Así
que debo regresar al hotel", no mentí, pero dejé de lado la parte de que no quería causar más
problemas entre Camila y yo.

410
"Por supuesto", parecía satisfecha con esa respuesta. "Si quieres pasar el rato cuando estés en la
ciudad, no tengas miedo de llamar o algo así. Fue divertido, después de todo."

"Realmente lo fue", estuve de acuerdo con una sonrisa más grande. "Deberíamos hacerlo de
nuevo algún día."

"Cuenta conmigo", dijo Emily en voz baja y hubo un momento de silencio antes de que ella se
inclinara, besando mi mejilla al despedirse. "Buenas noches", su cálido aliento se quedó contra mis
mejillas encendidas mientras se alejaba.

"Buenas noches", correspondí y la vi alejarse en el interior del edificio de departamentos.

Suspirando profundamente, sabía que no había hecho nada malo. Aún así, me sentía más
confundida que antes después de mi encuentro con la modelo. Sin saber dónde Camila y yo
estábamos me estaba volviendo loca. ¿Ella era mi novia o no? Sabía que yo quería que ella lo
fuera, pero no estaba segura de lo que quería la otra morena en este punto. Las cosas nunca
habían sido sencillas entre nosotras pero encontrarme con Emily reforzó que tal vez no deberían
ser así de complicadas.

Nerviosa en mi habitación, sabía que las otras jugadoras probablemente ya habían llegado ya.
Escuché toda la conmoción fuera causada por las mujeres consiguiendo sus habitaciones.
Considerando todas las cosas, tenía la sensación que no me alojaría con Camila. Ya había pasado la
noche aquí después de dejar a Emily. Ahora tenía curiosidad por ver quién se uniría a mí.

Al oír la puerta abrirse, vi a Normani caminando a través con sus maletas. Estaba feliz de verla,
pero también decepcionada que no era Camila. Sin embargo, estaba más que agradecida por tener
una gran amiga como Normani y ayudé a la chica mayor a instalarse. Charlamos un poco porque
teníamos algo de tiempo antes que empezara nuestra primera práctica. No había visto a Camila. Si
no sabía que ella me estaba evitando antes, lo sabía ahora.

No estaba segura si debía buscar a Camila en este punto, decidí salir y ver quién más había llegado
ya. El pasillo estaba lleno con un montón de gente cuando vi a tres caras conocidas. Camila, Dinah
y Lara aparentemente acababan de llegar. Dinah estaba abriendo la puerta del hotel, mientras que
Camila estaba sosteniendo a la niña de cuatro años en sus brazos, que estaba al parecer dormida.
Ellas estaban en el pasillo y yo parecía estar congelada.

Para entonces Camila miró a su lado y se encontró con mi mirada. Tragué saliva pesadamente
antes de ver una leve sonrisa en los labios de la más joven. Levanté la mano para saludar, ella
asintió con la cabeza y desapareció en su habitación. La incertidumbre de la situación me estaba
matando. Me molestó hasta el punto en que decidí volver a mi propia habitación mientras que
Normani se había ido.

411
Pasó algún tiempo hasta que oí un golpe en la puerta. Rápidamente levantándome, corrí hacia ella
para encontrar que mis esperanzas no fueron aplastadas en esta ocasión. Camila estaba de pie en
el pasillo con lo que parecía una sonrisa nerviosa en los labios.

"Hey, adelante", ofrecí al instante y ella entró.

La incomodidad era horrible, porque ninguna tenía una idea de cómo comportarse en la situación.
Nos abrazamos por un momento antes de que Camila se sentara en la cama conmigo a unos
metros de distancia.

"¿Cómo estás?", le pregunté en voz baja.

"Un poco cansada después de un largo vuelo", la otra futbolista admitió y me di cuenta de los
círculos oscuros bajo sus ojos. "Pero está bien. ¿Cómo estás?"

"Bien", le contesté rápidamente y respiré hondo para calmar mis nervios. "No estaba segura si
debía ir a tu habitación o...que era apropiado."

"Puedes venir", dijo Camila, pero algo parecía mal. Ella apenas me miraba a los ojos y seguía
mordiéndose el labio inferior, lo cual era una clara señal de tensión. Por un lado, odiaba la rareza
entre nosotras, pero por otro lado, tenía miedo de hablar tan luego.

"Te extrañé", le confesé sinceramente y los orbes marrones se encontraron con mi mirada ahora.
La lucha dentro de la joven madre era evidente y comencé a temer lo peor. Ella no contestaba y
sentí como mi corazón estaba a punto de ser destruido de nuevo. "Supongo que entonces tú no
me extrañaste", añadí justo por encima de un susurro.

"Por supuesto que sí", respondió ella sorprendida, pero suspiró ruidosamente.

"Está bien, entonces... ¿Qué está pasando?" no podía ignorar el tema, después de todo. "Porque
siento como que me has estado evitando durante las dos últimas semanas. ¿Estoy siendo
demasiado fastidiosa?"

"Sólo hay un par de cosas que debo resolver", la respuesta era tan vaga que no ofreció consuelo,
porque ella me había dado esa respuesta muchas veces antes.

"Sé eso", dije en voz baja, pero me acerqué a ella lentamente. "Pero han sido seis semanas,
Camila. Y quiero darte tiempo y espacio, de verdad. Sólo dime qué hacer. ¿Qué puedo hacer para
ayudar a resolver eso?", le pregunté con una voz suave, porque no quería forzar nada. "¿Quieres
que hable con Lara? Por lo menos podría intentarlo y tal vez conseguir un poco de nuestra
confianza de nuevo."

"Lauren", Camila exhaló claramente desesperada y puso su rostro entre las manos. "Sólo estás
haciendo esto más difícil."

412
"¿Estoy haciéndolo más difícil?" estaba confundida ahora, pero ella levantó la vista y se encontró
con mis ojos antes de darme cuenta de todo. Mi corazón de hundió. "Estoy haciéndolo más difícil
para que termines conmigo."

Silencio.

"Wow", respiré y traté de contener las lágrimas al instante llenando mis ojos. "Realmente la
jodí...pero pensé que tal vez podía arreglarlo. ¿No crees que podría...puedo arreglar esto de
alguna manera?" Más silencio en el extremo de Camila. Ella estaba decidida a no mirarme y mi
desesperación crecía. "Sé que he cometido un error. Pero estoy tratando de mejorar como
persona y puedo ser paciente, si eso es lo que quieres-"

"Por favor, para", Camila se levantó de pronto y su voz temblaba. Ella había mantenido la cabeza
baja de manera que no había notado la mirada vidriosa en sus ojos también. "Quiero esto mucho
menos que tú."

"Entonces no lo hagas", prácticamente estaba rogando antes de pronunciar algo que no estaba
destinado a ser dicho.

"Dijiste que me atraparías", mi voz estaba cargada de emoción. Los ojos marrones se dispararon y
vi la culpa en ellos. "Dijiste que no me dejarías si me dejaba caer", las lágrimas tenían ardiendo mis
ojos.

"Lo sé", susurró. "Y lo siento mucho."

"¿No estás dispuesta a darme una oportunidad para probarme a mí misma? ¿Por qué siempre me
dejas tan rápido?" Me comencé a enojar por alguna razón cuando vi que ella en realidad no diría
nada. "No entiendo lo que pasó que te hizo cambiar de opinión en las últimas dos semanas."

"No te puedo decir, ¡¿Está bien?!" Camila de repente replicó y me tomó por sorpresa.

"!Porque no quiero empujarte hacia el borde! Es mejor quedarme fuera de tu vida y así puedes
trabajar en ti misma y sin más complicaciones", la más joven parecía frustrada con ella misma.

"La única razón por la que esto es complicado es porque lo estamos haciendo complicado", dije
más severamente. "¿Qué podría ser peor empujándome sobre el borde que romper conmigo? Eso
es lo peor que se pueda imaginar. Sólo dime lo que pasó."

"Realmente no puedo", ella negó con la cabeza y me puso furiosa con su terquedad.

"¿Pasó algo entre Austin y tú o algo así?" de repente estallé y estaba sorprendida de mis propias
palabras que se dijeron por la ira, sin pensar que en realidad ella haría algo como eso.

"¿Qué? ¡No! ¿Por qué...por qué dices eso?" la jugadora parisina sonaba...nerviosa. Espera; ¿Estaba
en el camino correcto?

413
"Debido a que algo cambió después que dijiste que él iría a visitar", le expliqué mi pregunta
inesperada. "Así que si no me engañaste entonces ¿Qué es la cosa tan horrible que no puedes
decirme? Me estabas volviendo jodidamente loca, ¿Lo sabías?"

"Ahí tienes el por qué deberías dejarme ir", Camila respiró.

"No puedo", respondí sin dudarlo y di un paso más cerca ahora. "!Por el amor de Dios, Camila! ¿Es
que no lo entiendes? Te quiero más que a nada en este maldito planeta. Desearía poder dejarte ir
así mi corazón no se sentiría como si estuviera siendo arrancado a jirones de nuevo. Pero no
puedo. No después de todo lo que hemos pasado. Confía en mí, he intentado dejarte ir varias
veces, pero aquí estoy, volviendo cada vez. No importa cuán patético parece. Pero estoy aquí en el
límite", estaba fuera de la razón en este punto y acababa de hablar con el corazón.

Vi la primera lágrima rodando por la mejilla de la joven y rápidamente la limpié con mi pulgar.
Tomando su mano en la mía, puse la otra en su barbilla y la levanté un poco por lo que tuvo que
mirarme a los ojos.

"Te amo", reiteré genuinamente al verla tragar. "Sin embargo, no puedo obligarte a estar
conmigo. Pero la única forma en que vamos a terminar con esto es que me mires a los ojos y me
digas la verdad."

Camila parecía petrificada y sin saber cómo manejar mi enfoque. Puse su mano sobre mi corazón y
dejé que sintiera como latía violentamente contra su palma. "Vas a romper esa cosa frágil de allí",
le susurré desesperadamente en referencia al órgano de bombeo de sangre y mantuve mis ojos
fijos en los de ella. "Pero voy a tratar con él si me dices la verdad...por favor."

Pasaron unos segundos que parecieron horas.

"Austin me está demandando por la custodia exclusiva de Lara", la más joven finalmente habló e
hizo lo que le pregunté sosteniendo mi mirada. "Él está diciendo que soy descuidada y que tengo
una relación con alguien que es emocionalmente inestable, con problemas de alcoholismo que
pone en peligro la seguridad de Lara."

Y con eso mis manos cayeron de mi pecho y su cara. Fuera de toda la razón que yo había llegado
en mi cabeza, esto era más allá de lo que jamás podría haber imaginado. Sentí como si alguien me
hubiera dado un puñetazo en el estómago. Y en comparación con todas las cosas dolorosas que
había experimentado hasta ahora, este era uno de los peores sentimientos que jamás había
experimentado. Ni siquiera sentía mi corazón roto; eso requería que sintiera el latido de mi
corazón en este momento. Me sentía casi adormecida debido al shock.

"Esa es la verdad", Camila casi se quedó sin aliento por tragar un sollozo. "¿Estás contenta ahora?
Porque te aseguro que yo no."

Su voz sonaba enojada y traté de dar un paso lejos de ella cuando sorprendentemente se aferró a
mi suéter, agarrando los lados de la tela para mantenerme cerca.

414
"Te amo", dijo luchando por mantener la compostura. "Nunca quise que esto sucediera. Quiero
ayudarte y estar allí para ti, porque sé que me necesitas. Pero Lara me necesita también...y yo
necesito a ambas. No sé qué más hacer."

"Camila, yo no...", traté de decir algo, pero me quedé sin palabras, incapaz de comprender
plenamente lo que ella acababa de decirme.

"Lo odio", la otra morena negó con la cabeza antes de tirar de mi suéter más firmemente. "Lo odio
por hacerme elegir", su voz temblaba en una mezcla de furia, dolor y desesperación pura.

En la angustia, no tenía control sobre qué hacer o qué decir. Se sentía surrealista. El momento
estaba tan cargado de emoción y de repente estalló cuando sentí un par de labios temblorosos
besando los míos. Apretando los ojos cerrados, luché con tantos sentimientos diferentes, mientras
que con la tensión construida. No fui capaz de contenerme de reciprocar su beso. Había pasado
tanto tiempo desde que había sentido la sensación familiar de la persona que amaba
demostrándome ese afecto. Sin saber si estaba bien o mal, me rendí y crucé los brazos alrededor
de su cintura.

Aunque había un elemento de familiaridad al besarla, esto era cualquier cosa menos normal. Sus
labios estaban desesperados como los tiernos dedos estaban enganchados en mis costados. Toda
la tensión acumulada ahora estaba empezando a estallar. Sentí sus manos tirando de mi jersey y
fue instintivo levantar los brazos para que pudiera quitármelo.

Las dos estábamos jadeando, obviamente desesperadas por algún tipo de conexión después de la
conversación desgarradora. Estábamos arrancándonos esencialmente la ropa de la otra hasta que
sólo nuestra ropa interior fue dejada. Camila caminaba hacia atrás, sosteniéndome en un férreo
control cuando llegamos a mi cama y le quité las bragas en un movimiento rápido. Colocando las
manos en sus hombros, la empujé para que se sentara en el borde de la cama mientras ella se
quitó el sostén.

Doblando las rodillas, comencé a besarle el cuello apasionadamente. La centrocampista izquierda


jadeó y entrelazó sus dedos en mi cabello mientras yo chupaba los puntos que yo sabía que ella
amaba. A pesar de que yo era una gran partidaria de los juegos previos por lo general, las cosas
estaban tan calientes que era consciente que ninguna de las dos estaba con ánimo de mucha
expectación. Viajando más abajo, dejé un rastro de besos húmedos por su parte superior del
cuerpo antes de volver hacia arriba con mi lengua.

"Oh Dios", Camila casi gruñó en un tono ronco.

Palmeando sus ambos pechos con las manos, empujé sus piernas para abrirlas con las mías hasta
que me encontré de rodilla frente a ella. Mirando hacia arriba, sus pupilas estaban dilatadas y
llenas de lujuria, la imagen de yo en mis rodillas parecía ser atractiva para ella. No perdí más
tiempo y bajé la cabeza en su regazo. Conectando mis brazos por debajo de sus piernas, la tiré más
cerca hacia el borde de la cama, así tenía un mejor acceso.

415
Y con eso empecé a besar la parte más íntima de su cuerpo. Su respiración era errática y pude
sentir todo su cuerpo temblando antes de realmente haber empezado. Dejando mis manos
acariciar su estómago y lados, separé mis labios y usé golpes constantes de mi lengua para
explorar la zona más húmeda. No esperaba que ella estuviera tan despierta, pero disfrutaba de sus
reacciones fuertes.

Para mi sorpresa, su mano me agarró del pelo con firmeza para mostrar un lado más dominante.
Era emocionante verla totalmente desenfrenada. La pesada respiración se transformó en una serie
de jadeos cuando pasé la punta de la lengua en el calor húmedo.

"Mierda", gimió con voz temblorosa y me empujó suavemente antes de establecer un ritmo
constante de invadir el acogedor calor con mi lengua. Abrí los ojos para mirar hacia arriba y casi lo
perdí ante la mera vista. La cabeza de la más joven echada hacia atrás, con una mano en mi pelo,
la otra agarrando las sábanas por lo que sus nudillos se habían blanqueado. Su pecho se movía sin
control y me encendía verla en un estado de lujuria como aquel.

Decidí no llevar las cosas más allá y me concentré en lo que estaba haciendo. Removiendo mi
lengua, me moví más arriba y encerré el haz de nervios sensibles con mis labios. Los dedos
delgados agarraron la parte posterior de mi cabeza con desesperación y sentí crispar sus piernas.
Camila jadeaba pesadamente y sus músculos se tensaron, así que sabía que estaba muy cerca.
Chupando la protuberancia tensa, ella gimió en voz alta y me impresionó moviendo sus caderas,
empujándome en su centro. Por supuesto que seguí adelante hasta que la otra morena cabalgó su
aparentemente orgasmo intenso.

Antes de que tuviera tiempo para recuperarme, sentí la mano sobre mi cabeza tirando de mí hacia
arriba en la cama. Camila me empujó hacia abajo y se instaló en la parte superior de mí con las
cubiertas sobre nosotras. Ella era tan rápida que no estaba segura de lo que estaba pasando, pero
mi ropa interior había desaparecido. Me tomó unos segundos darme cuenta de que ella me
besaba con devoción desconocida. Sus labios eran implacables antes de sentir su mano viajando
por mi cuerpo.

Estaba más allá que de desesperada por alguna liberación en este momento, la reiterada razón de
la repentina explosión de lujuria. Y la otra futbolista no dudo tampoco. Dos delgados dedos
entraron en mí fácilmente, utilizando un ritmo constante para concluir la tensión que sentía en
todo mi cuerpo. Utilicé mis propias manos para acariciar su espalda, los hombros y costados. No
había nada más satisfactorio que sentir la piel suave bajo mis dedos y ocasionalmente agarrándole
su trasero.

"Camila", soplé contra sus labios que devoraban los míos sin parar. No podía aguantar mucho más,
y no era capaz de corresponder a sus besos por mi respiración irregular. Ella pareció entender y
hundió su cara en el hueco de mi cuello, mordiendo inesperadamente la piel sensible. "Puto
infierno", maldije con una mezcla de excitación y sorpresa. Sus dedos se aceleraron y yo estaba
lista. El alivio se apoderó de mí después de una serie de espasmos que había conseguido lo mejor
de mi cuerpo.

416
La más joven retiró sus dedos y cayó encima de mí. Su aliento caliente se estrelló contra la piel de
mi cuello, produciendo piel de gallina por todas partes. Me mantuve acariciando su espalda con
ternura durante varios minutos mientras que ninguna de las dos habló. Ambas necesitábamos un
tiempo para digerir lo que acababa de suceder. Calmándose, sus dejos dibujaron patrones al azar
en mi hombro.

Por mucho que me gustaba la intimidad y ternura entre nosotras, no podía ignorar lo que la joven
me había dicho antes. Las ruedas estaban empezando a encenderse de nuevo en mi cabeza.
Camila se movió en mis brazos y se sentó junto a mí, su peso ahora distribuido uniformemente
entre el colchón y yo. Lentamente girando mi cabeza, encontré los ojos marrones mirando hacia
arriba para encontrarse con mi mirada. Unos segundos pasaron y simplemente nos miramos en la
incertidumbre de lo que pensaba el otro.

"Supongo..." mi voz era un poco ronca y aclaré la garganta con suavidad. "Supongo, no entiendo
cómo Austin tiene todo ese conocimiento para usarlo en contra tuya", le dije y Camila tragó saliva.
"¿Tú le contaste?", le pregunté en voz baja y ella asintió, obviamente, con sentimiento de culpa.
"¿Todo?" otro asentimiento que fue seguido por un suspiro alto por mi parte.

"Fue un error", ella habló con cuidado.

"¿Por qué le has dicho todas esas cosas personales de mí?" genuinamente pregunté.

"Parecía ser un gran apoyo y pensaba que él estaba siendo sincero. No quería mantenerlo alejado
de nada relacionado a Lara y terminé diciéndole demasiado. Lo siento mucho, créeme", Camila
presionó y yo le creía. "Nunca tuve la intención de romper tu confianza y sé que probablemente
estás muy enojada conmigo."

"Como enojada que estoy contigo por contarle, estoy más enojada conmigo misma por siquiera
ponerte en esta situación", admití.

"No es tu culpa", dijo ella y me quedé en silencio otra vez.

Aunque quería estar molesta con Camila ya que había hablado de mis problemas personales con
su ex marido, no podía. Había mucho más en mi mente. Me quedé mirando el techo y traté de
darle sentido a todo, partiendo desde el hecho de estar con la persona que amaba intensamente.
Ella se mantuvo silencio por un tiempo, pero no pudo aguantar mucho más tiempo.

"¿Qué estás pensando?" la voz ronca preguntó en voz baja antes de volver a centrarme en sus
ojos.

"Estoy pensando que...voy a tener que dejarte ir", le relevé lentamente a pesar de que rompía mi
corazón decirlo. "No es lo que quiero, pero yo hice esto. Y ahora tengo que lidiar con las
consecuencias de mis acciones. Si todavía Lara no habla contigo acerca de eso, entonces
obviamente hay algo mal. Por mucho que quiero culpar a Austin, tengo que aceptar mi parte en

417
esto. Nunca me lo perdonaría si soy la razón por la que vas a perder a Lara. Y sé que no estás
considerando esa oportunidad."

El silencio se produjo una vez más. Vi a Camila luchar contra sus instintos y el deseo de salvar
nuestra relación, pero se contuvo. El temor de perder a su hija superaba todo lo demás y yo
entendía su razonamiento. En lugar de responder, ella me abrazó y me agarró con fuerza sabiendo
que probablemente sería la última vez.

Después de un encuentro muy emotivo con Camila, fue difícil concentrarse en el propósito inicial
de estar en New York. La práctica fue complicada para todos, pero especialmente difícil cuando
tenías al amor de tu vida contigo; el amor de tu vida que había terminado contigo, pero aún así
tuviste sexo con ella hace unas horas.

Mis esfuerzos para concentrarme dieron frutos después de un tiempo sin embargo. Estaba de
vuelta en el modo de juego y quería entregar un buen desempeño frente a los entrenadores. La
última cosa que necesitaba era ser cortada del equipo por tocarme la barriga. Camila y yo ni
siquiera nos mirábamos, pero eso era lo mejor por ahora.

Las largas horas de práctica llegaron a su fin y todo el mundo se dirigía a las duchas cuando me di
cuenta de algo alarmante: Lara estaba de pie cerca de la valla que rodeaba el campo. Pero no
estaba sola. Fue instintivo, pero el hombre que la acompañaba era completamente desconocido
para mí. Él estaba en el otro lado de la cerca, pero estaban de pie justo al lado de la entrada, que
estaba abierta.

Mirando el alrededor, no vi a Camila. Antes de la práctica, yo sólo había compartido un leve saludo
con la pequeña. Definitivamente extrañaba los días en que ella corría hacia mí, pero las cosas
habían cambiado. A medida que mis ojos se dirigieron de nuevo a Lara, mi pulso se fue por las
nubes. El hombre de la chaqueta negra le tendió la mano y parecía como si quería llevarse a Lara
con él. Estaba de pie junto a la entrada ahora y sentí mi cuerpo reaccionar al instante,
acercándome a ellos a toda prisa.

"!Hey! ¿Qué está pasando?" quería gritar, pero también tenía miedo de asustar a Lara aún más. De
cerca, el desconocido parecía perfectamente arreglado y no amenazante. Él debía tener unos
treinta años, pero su expresión facial tenía un poco de miedo a pesar de que estaba sonriendo
cortésmente.

"Oh, nada", dijo casualmente. "Estábamos hablando."

"Sólo hablando", repetí y me paré al lado de Lara protectoramente. "¿Siempre hablas con niños de
cuatro años que no conoces?" La ira en mi voz salió a la superficie.

"No hay razón para enojarse", él estaba tratando de parecer imperturbable, pero me di cuenta de
sus nervios. "La vi parada sola y quería ayudar en caso de que estuviera perdida o algo así."

418
"Eso no es verdad", la voz aguda de pronto intervino y la vi acercándose a mi pierna, tocando
suavemente mis pantalones cortos. "Él me llamó y me preguntó si vi a un perro. Lo perdió."

Mi sangre hervía en este punto. ¿De verdad este tipo hablaba malditamente en serio? Quería
golpearlo.

"Un perro perdido... ¿En serio?" Casi repliqué lo que puso al hombre más incómodo.

"¿De todos modos, quién eres tú? Por lo que sé también eres un extraño", el hombre mayor
estaba a la defensiva, pero ahora comenzó a caminar hacia atrás. "Me iré de aquí, porque no hice
nada malo."

"Tienes suerte de que no voy a llamar a la policía", le dije con furia, pero no quería causar una gran
escena en frente de la niña. ¿O debería hacerlo?

Estaba totalmente confundida sobre cómo reaccionar debido a mi relación tensa con Lara. Por lo
general, la habría tomado entre mis brazos para llevarla lejos, pero tenía miedo de su reacción. A
medida que el extraño se alejó, me arrodillé para estar al nivel del niño y la vi llena de
preocupación.

"¿Estás bien? ¿El hombre te hizo algo malo?", le pregunté inmediatamente.

"No", respondió ella, y negó con la cabeza. "Perdió a su perro y me sentí mal. Pero no quería ir a
buscarlo con él. Mamá dice que no debo hacer eso."

"Por supuesto pero probablemente también dice que no debes hablar con extraños", asumí y la
niña de cuatro años miró hacia abajo.

"Sí", asintió sintiéndose claramente culpable y consciente de que había hecho algo malo. "No le
digas a mami, por favor. Ella se va a enojar conmigo."

"Ella no se va a enojar, pero se preocupara mucho", traté de razonar y olvidé de que esta era la
primera vez que hablábamos en semanas. "Es peligroso hablar con gente que no conoces y creo
que ese era un hombre malo. Tu mami tiene razón en esas cosas."

"Pero mami también dice que debo ser amable con todos", la de ojos color avellana argumentó
tímidamente.

"Eso es cierto, pero no debes hablar con extraños. Es más importante estar a salvo. Si tu mamá
está alrededor puedes ser amable con todos, pero no debes estar a solas con desconocidos.
¿Dónde está tu mami de todos modos?", pregunté.

"Ella me dijo que debería ir dentro de los vestidores, pero entonces el hombre dijo que me
acercara", explicó con cautela.

"Así que no fuiste dentro y te acercaste a él", concluí y ella asintió ligeramente de nuevo.

419
"Lo siento", la niña lanzó mansamente.

"Lo sé, pequeña", accidentalmente utilicé su apodo, pero vi sus labios formando una suave
sonrisa. "Pero tienes que decirle a tu mami-" fui interrumpida por Dinah corriendo hacia nosotras.

"!Lara! ¿Dónde estás? Tu madre se estaba volviendo loca", la polinesia estaba sin aliento y parecía
aliviada que yo estaba con la niña. "Será mejor que tu pequeño trasero esté en el vestuario en
estos momentos", Dinah mandó a Lara con una pequeña sonrisa.

"Está bien", Lara estuvo de acuerdo y comenzó a caminar hacia los vestidores. Mis ojos estaban
fijos en ella, aunque sabía que era una estupidez ya que sólo había unos pocos pies de distancia
entre nosotras y la puerta. Pero la experiencia de hace un rato me había alarmado y aún estaba
reacia viéndola entrar con seguridad. A mitad de camino, de repente se dio la vuelta para
mirarme, sin embargo.

"Le diré a mamá", me dijo y no podía dejar de sentir mi corazón llenándose con orgullo de que me
había escuchado después de todo. De esa manera yo no tenía que decirle a Camila. "Adiós,
panqueques", añadió Lara e hizo que mi corazón se acelerara de nuevo mientras se dio la vuelta y
corrió hacia la puerta ahora.

La sonrisa en mi rostro era evidente, per la voz de Dinah llamó mi atención.

"Yo soy parte de tu lado", la otra jugadora de fútbol me confundió con sus palabras. "Austin
estaría muerto si Camila no me hubiera detenido", Dinah rió. "He enviado a algunos de mis primos
a darle una paliza al menos."

"Eso no sería sospechoso para nada de que estaba recibiendo una paliza por un grupo de
polinesios tras demandar a Camila", bromeé aunque sabía que ella estaba bromeando. ¿O no lo
estaba? Todo lo que sabía era que me sentía un poco mejor sabiendo que ella apoyaba mi relación
con su mejor amiga, aunque había terminado.

"Si, bueno, quiero darle una paliza por ese beso", Dinah resopló pero mi corazón cayó.

"¿Cuál beso?", le pregunté sin dudarlo pero los ojos de la joven se abrieron. Esa reacción lo decía
todo. Como si el día no había sido emocionalmente devastador, este fue el golpe mortal.

"No es lo que parece-", la defensora trató de hacer control de los daños, pero era obvio que ella
me había dicho accidentalmente algo que Camila no.

"No quiero oírlo", interrumpí y me di la vuelta, pero Dinah me agarró del brazo con desesperación.

"No, escucha-"

"Suéltame", le susurré y di un fuerte tirón de mi brazo de su agarre. La oí llamarme un par de


veces, pero estaba decidida a no escuchar o volver.

Esto fue todo.

420
En mi cabeza había únicamente un pensamiento: ¿Dónde estaba el bar más cercano?

=================

Capitulo 27

Durante treinta minutos había estado mirando el claro licor frente a mí. El trago de tequila era tan
pequeño en tamaño pero muy grande en términos de importancia. Encontrar un bar después de
que había entrado a la ciudad no había sido difícil. Tampoco había sido conseguir alcohol. Pero
ahora que tenía el vaso en frente de mí, no podía permitirme beber. Varias veces había hecho un
intento de beber, pero cada vez que mis manos tocaron el cristal, terminé arrepintiéndome.

Había tantas cosas en mi cabeza. Había tomado algunas decisiones precipitadas en un estado
molesto, pero no las estaba siguiendo - por lo menos no todavía.

Las palabras de Dinah seguían haciendo eco en mi cabeza. Camila y Austin se había besado. Y lo
que era aún peor, era el hecho de que mi novia, o ex novia a partir de hoy, no me lo había dicho.
En mi mente eso significaba que había algo que ella estaba escondiendo que estaba más allá de
ese simple beso. Pensando en ello, mis ojos se centraron en la copa de nuevo. Aún así, no quería
beber. No podía. Me sentí físicamente enferma ante la idea de consumir la sustancia.

Así que mi mente seguía vagando. Me acordé de mi terapeuta y todo el trabajo duro que yo había
hecho para mejorar. ¿Realmente había sido todo por Camila? ¿Para qué así ella me diera una
oportunidad? Si ese era el caso, habría estado borracha por ahora. Me di cuenta de que había
mejorado mi situación debido a Camila, pero no exclusivamente por ella. Esa realización se sintió
sorprendentemente bien. Eso significaba que no la necesitaba tanto como había pensado. Todavía
la quería. Sin embargo, era satisfactorio saber que mis esfuerzos no habían sido en vano.

"Lauren", oí una voz familiar y me volví en el taburete de la barra.

Emily se acercaba a mí con un aspecto confuso en su rostro. En mi ira, le había enviado mensajes
de texto a la rubia para juntarnos en el bar. Casi se me había olvidado después de todo lo
melancólico pero me sorprendí al ver que en realidad había aceptado mi oferta.

"Hey", le dije claramente nerviosa.

"Tengo que admitir que me sorprendió saber de ti", Emily se detuvo a mi lado. "Y estoy aún más
sorprendida de encontrarte aquí", el desconcierto era evidente en su voz. "¿Pensé que no querías
beber?"

421
"No", le contesté, pero ella levantó las cejas e hizo un gesto hacia la copa del mostrador. "Lo he
ordenado cuando llegué. De alguna manera no puedo hacerlo...", admití como las facciones de la
otra chica se suavizaron.

"Eso es bueno", sonrió suavemente. "Por lo tanto, ¿Eso significa que esto no es un borracho
booty-call?"

"No", respondí rápidamente, mientras mis mejillas se sonrojaban con una sombra roja profunda.

"¿Una sobria?"

"No...no lo sé...uhm", lo único que pude hacer fue balbucear antes de escuchar a Emily reír.

"Relájate, sólo estoy jugando contigo", la modelo alivió mi tensión y se las arregló para hacerme
sonreír por un momento. "Vamos, salgamos de aquí. Puesto que tienes claro que no tienes
intención de beber, y yo tampoco, no hay ninguna razón para estar aquí."

El tono suave de su voz me convenció para hacer lo que debería haber hecho hace treinta
minutos. Alejé el vaso hacia al fregadero antes de pagar para salir. De todas las victorias que había
experimentado en mi vida, este se sentía como la más grande hasta el momento. No podía
recordar haberme sentido tan orgullosa de mí misma. Y no estaba relacionado con el fútbol, mis
estudios u otro más que simplemente ser una mejor versión de lo que era.

Miré hacia arriba y vi a Emily sonriendo alentadoramente. Salimos del bar inmediatamente y
todavía no estaba segura de su razonamiento de incluso venir a verme.

"Lo siento por los mensajes de texto y arrastrarte en este lío", me disculpé sinceramente mientras
caminábamos por las calles de vuelta a mi hotel.

"No lo sientas. Estaba feliz de tener noticias de ti", la chica un poco más alta dijo casualmente.

"No sé por qué estás siendo tan amble conmigo, para ser honesta", le confesé y miré hacia el lado
para ver su reacción.

"¿Por qué no habría de serlo? No es como si me hubieras hecho algo horrible", se encontró con mi
mirada y los labios color rosa formaron una suave sonrisa. "No funcionamos y hay dos personas
que tienen la culpa en eso. El hecho de que tú terminaste la relación no significa que yo no hice las
cosas mal."

"No lo hiciste", le respondí instintivamente. "Tú eras la novia perfecta."

"No", ella negó con la cabeza con una pequeña risa. "Quiero decir...si eso fuera cierto, todavía
estaríamos juntas."

"Hubieron otros factores que jugaron en nuestra relación para que no funcionara-"

422
"¿Te refieres a Camila?" Emily hizo que mi corazón diera un golpe con esa interrupción
contundente. De hecho, me detuve un segundo antes de seguir con el ritmo de nuevo.

"¿Tú sabías?", le pregunté con cuidado.

"No al principio", la chica de pelo más claro parecía en paz con eso y siguió hablando. "Me dijiste
que sólo había sido una noche y te creí. En su mayor parte, pensé que no estabas lista para una
relación a causas de tus problemas de compromiso. Después de un tiempo, me di cuenta de que
no te podías enamorar de mí, porque ya estabas enamorada de alguien más. Y no se necesitó
mucho para saber quién era esa persona. Poco después que tuve esa sospecha, terminamos y
estuve bien con ello. Pensé que era lo correcto de hacer antes de que alguna de las dos hubiera
hecho algo realmente doloroso."

"Al igual que... ¿Engañar?"

"Claro, entre otras cosas", estaba completamente cautivada por la madurez de la chica mayor. "Es
por eso que estoy siendo amable contigo, Lauren. Por supuesto que me dolió cuando terminamos,
pero yo sabía que tus intenciones siempre habían sido buenas. Nunca dudé de eso y sigo creyendo
en ti por esa razón."

Estaba en una pérdida de palabras, porque no podía creer lo genuina y sincera que ella estaba
siendo. Me tiró por un tobogán que ella creyera en mí más que la persona por la cual me había
dado por vencida en nuestra relación.

"No sé qué decir", le dije con sinceridad.

"Wow, dejé a la encantadora Lauren sin habla", bromeó y no me pude contener pero reí en voz
baja. "Eso sí que es un logro."

"Todavía no entiendo por qué piensas que podrías haber hecho algo malo, sin embargo."

"No importa", simplemente se encogió de hombros. "La retrospección es 20/20. Siempre sentí que
tenías mucho peso en tus hombros. Nunca hablabas de tu familia y yo podría haberte animado
más para abrirte, supongo. Pero estaba demasiado asustada y no hablé."

"No es tu culpa de que soy un desastre con enormes problemas de confianza, Emily", traté de
aliviar la situación y ella sonrió.

"Lo sé, pero...uno piensa en esas cosas después de romper con alguien. Lo podrías haber hecho
mejor así lo hacías la próxima vez", ella dijo sabiamente.

"¿Has...estado con alguien más desde entonces?" mi voz se hizo más tranquila por alguna razón.

"No, realmente no", la ex animadora dijo. "Sólo un par de citas pero nada demasiado serio. ¿Qué
pasa contigo? ¿Lo hiciste funcionar con Camila?"

423
"No tenemos que hablar de eso", me pareció que era desconsiderado hablar con ella acerca de
Camila cuando ella sabía que mi compañera de equipo había sido la razón de nuestra ruptura.

"No me importa pero entiendo si no quieres", ella seguía siendo perfectamente comprensiva
como llegamos al hotel donde se alojaba el equipo.

"Estamos aquí en realidad", le revelé y me paré enfrente de ella delante del gran edificio.

"Pues bien", sus ojos se encontraron con los míos y me sentí mucho más cómoda después de
nuestra charla.

"Gracias por todo", le dije con sinceridad.

"No tienes que agradecerme-"

"Sí, tengo", no estaba de acuerdo e interrumpí suavemente. "Tal vez crees que no fue una gran
cosa lo que hiciste, pero para mí lo es. Así que, déjame al menos agradecértelo."

"De nada", contestó amablemente. Durante unos segundos ninguna de las dos habló, pero no era
un incómodo silencio. Se sentía agradable no tener que hablar y simplemente disfrutar el
momento que acabábamos de compartir.

"No funcionó", de repente solté y la vi frunciendo las cejas con confusión. "Camila y yo, quiero
decir. Tratamos pero también rompimos. Así que, estoy bastante segura de que yo soy el factor
para que las relaciones se arruinen."

"Casi se me olvidaba lo dura que eres contigo misma todo el tiempo", ella sonrió y yo no tenía más
remedio que corresponder.

"!Lauren!"

Rápidamente me di la vuelta para ver a Camila aproximándonos a un ritmo rápido. Mi pulso se


aceleró al instante cuando me encontré con mis dos ex novias. Camila parecía estar sin aliento y yo
estaba muy confundida sobre lo que estaba pasando. La más joven me alcanzó, pero de repente se
detuvo en seco. Sus ojos se abrieron como platos al ver a la persona que estaba detrás de mí.

"Hola Camila", Emily rompió el silencio ahora muy incómodo con su voz suave. Camila parecía
congelada y yo estaba tan desorientada sobre cómo manejar la situación. "¿Cómo estás?"

"Um...Estoy bien", la izquierda-centrocampista estaba respirando pesadamente y me pregunté el


por qué. "¿Cómo estás?"

"Estoy muy bien, gracias", lo cordial fue intercambiado y la de ojos marrones parecía recuperarse
de su sorpresa.

"¿Estás bien?" Camila se centró en mí y yo enarqué una ceja.

424
"Sí, estoy bien", sólo ahora recordaba lo que había pasado antes de mi caminata con Emily.

"Dinah dijo que desapareciste y yo estaba...todos estábamos muy preocupados", ella tragó saliva.
"Te busqué, pero al parecer estabas en buenas manos."

Hubo un pequeño intercambio de miradas entre Emily y Camila y yo tenía miedo de que mi
corazón se saliera de mi pecho en este momento. La tensión se hizo evidente y tenía que hacer
algo al respecto.

"Estoy bien, de verdad. No hay razón para preocuparse. Emily y yo tuvimos una buena charla y ella
se ofreció a encaminarme de regreso al hotel", le dije la verdad, que pareció aliviar a la otra
jugadora de fútbol. No era como si ella se lo merecía. ¿No fue ella la que rompió conmigo? No
tenía razón para justificarme y me enojé por alguna razón.

"Me alegro de que estés bien", dijo Camila y yo sabía que probablemente había estado
preocupada de que había volado de la manija de nuevo. "Realmente me gustaría hablar contigo
acerca de lo que antes te dijo Dinah."

"No tenemos que hacerlo", dije de mala gana y los orbes marrones parecían desesperados por
explicar, pero no quería oírlo. No cambiaría nada de todos modos.

"Probablemente debería irme", Emily de repente interrumpió y me sentí mal por ella de tener que
ser testigo de este drama.

"No, espera, no tienes que hacerlo", traté de suavizar las cosas, pero la modelo sonrió
comprensivamente.

"En realidad, debo. Tengo una reunión con mi agente y ya estoy tarde. Llámame si quieres salir.
Pero fue bueno verte", la sentí que dio un ligero apretón en mi brazo antes de centrarse en
Camila. "A ti también Camila. Adiós."

La rubia hizo una salida rápida, lo que me enfureció aún más debido a que lo última cosa que
quería era que ella se sintiera despreciada después de haber estado allí para mí.

"Lauren, ¿Podrías por favor permitirme explicarte?" oí la voz de la joven suplicante.

"¿Por qué? Terminamos y no tienes que justificarte", le respondí.

"No es lo que piensas qué es", argumentó.

"Realmente me importa una mierda", no pude reprimir mis sentimientos y entré al vestíbulo del
hotel con ella detrás de mí.

"Y tienes toda la razón para estar enojada-"

425
"Entonces déjame estar jodidamente enojada, Camila", espeté de nuevo. "No quiero oírlo. No
ahora y tal vez nunca. Sólo déjame. Estuve dispuesta a dejarte ir así que por favor, simplemente
has lo mismo."

Estaba vez ella no respondió mientras me alejé y caminé de vuelta a mi habitación.

Me tiré en la cama y seguí mirando el techo por un buen rato hasta que escuché el zumbido de mi
teléfono. Era un mensaje de texto y lo abrí al instante.

"El corazón es una cosa frágil. Es por eso que lo protegemos con tanto vigor, regalándolo rara vez,
y por qué significa muchísimo cuando lo hacemos. Algunos corazones son más frágiles que otros.
Más puros, de alguna manera. Al igual que un mundo de cristal...incluso la forma en que se rompe
es hermosa." Siempre me encantó esta cita y en realidad me recuerda a ti. Pero no te preocupes,
Lauren. Incluso tu corazón se va a reparar con el tiempo. No te rindas - Emily.

El primer día del campo de entrenamiento había sido más que difícil de lo que me hubiera
gustado. Gracias a Dios, el segundo había sido bastante fácil. Estuve practicando duro y traté de
concentrarme en el por qué estaba aquí. Al parecer, Camila estaba haciendo lo mismo. Ignorarnos
era una habilidad que habíamos dominado en el tiempo. La sesión de entrenamiento había
terminado y me acerqué a las líneas laterales para conseguir algo de beber. Tragando un sorbo de
agua fresca, de repente sentí algo tirando de mis pantalones cortos.

Dejé la botella y vi a Lara de pie junto a mí. Los grandes ojos de color avellana miraban hacia arriba
y sus pequeñas manos habían sido las que tiraban de mis pantalones cortos para llamar mi
atención.

"Hola", dije en voz baja y la verdad sorprendida de ver que se haya acercado a mí. "¿Está todo
bien?", le pregunté un poco preocupada y ella negó con la cabeza. Inmediatamente me agaché
para estar en su nivel. "¿Qué pasa?"

"¿Sigues enojada con mami?" la voz aguda preguntó simultáneamente haciendo mi corazón
perder un latido.

"No, no estoy enojada con ella", le mentí, pero lo hice para no herir los sentimientos de la niña.

"¿Estás enojada conmigo?", preguntó ella con timidez.

"No, por supuesto que no. Nunca podría estar enojada contigo, pequeña", respondí con una
sonrisa, pero me sentí muy culpable por ella incluso preguntando eso.

"¿Por qué...le gritaste a mami entonces?" la de ojos avellana continuó y mi pulso estaba
aumentando. ¿Ella estaba hablando conmigo sobre eso? ¿Sobre el incidente que ella no había

426
hablado con Camila? Todo lo que podía hacer era ser tan genuina como fuera posible. No tenía ni
idea de cómo manejar a un niño pero seguí mis instintos como siempre lo había hecho.

"No estaba enojada con tu mamá, te lo prometo", le dije apremiante y me aseguré de mirarla a los
ojos. "En realidad, estaba más triste que enojada realmente. Pero a veces, cuando te pones
realmente, realmente triste puedes enojarte también. Y luego haces y dices cosas que no quieres.
Nunca quise gritarle a tu mamá. Fue una muy mala cosa que hice."

"Me asustaste", sus ojos cayeron al suelo por un momento y también lo hizo mi corazón.

"Lo sé", suspiré claramente con la culpabilidad montada. "Y lo siento mucho por asustarte. Esa es
la última cosa que quería hacer. Yo...te quiero mucho, pequeña. Me comprometo a nunca hacer
eso otra vez."

Lara miró de nuevo y sus pequeños labios formaron una sonrisa.

"Yo también te quiero, panqueques", su sonrisa se convirtió en una mueca y correspondí de la


misma manera. Antes de darme cuenta, el pequeño cuerpo acortó la distancia entre nosotras
abrazándome. Dios, casi se me llenaron los ojos de lágrimas mientras sus brazos se cruzaron
alrededor de mi cuello. Con dulzura le froté la espalda antes de que ella se apartara.

"Así que, ¿Somos amigas de nuevo?", le pregunté con una sonrisa.

"Yo...um...podemos ser amigas, pero..." Lara vaciló y parecía nerviosa por alguna razón.

"¿Qué pasa? Me lo puedes decir", animé suavemente.

"Siempre quise que te convirtieras en mi otra mami", confesó y mi mandíbula cayó.

Me acordé de la vez que en realidad me había llamado mamá en la pista de patinaje sobre hielo.
En aquel entonces yo había pensado que había sido un error. Pero ahora estaba absolutamente
sorprendida al oír esa confesión. Ahora mis ojos se llenaron de lágrimas, sin duda, aunque luché
duro. Era incapaz de hablar.

"Mamá está muy triste. Creo que ella te extraña", la niña continuó haciendo mi corazón explotar
en mi pecho. "¿Puedes hacerla feliz otra vez? ella dijo que la haces feliz y quiere besarte en la
boca."

Esta vez no pude contenerme de reír a través de mis lágrimas porque su redacción era tan
adorable. Obviamente ellas habían hablado sobre 'la cosa de beso en la boca' también. Me
destrozó escuchar que Camila hablaba en serio acerca de nosotras; lo que hacía todo más confuso
del por qué ella besó a Austin entonces.

"Creo que tu mami no me necesita para ser feliz. Ella te tiene a ti para eso y estoy segura de que
volverá pronto a la normalidad", sólo podía imaginar que la batalla por la custodia estaba pesando
en gran medida sobre la izquierda-centrocampista. Pero ese ya no era mi lugar.

427
Lara quiso decir algo, pero oí a Camila llamándola desde lejos. La más pequeña suspiró
profundamente, pero traté de sonreír lo mejor que pude.

"Anda", le dije con un guiño. "No quieres que se preocupe de nuevo, ¿Verdad?"

"No", respondió mansamente. "Adiós Panqueques."

"Adiós", respiré y la vi alejarse. Poniéndome de pie, vi a Camila hacer contacto visual conmigo por
un momento, pero agarró la mano de su hija para desaparecer en el vestidor.

La cabeza en serio me daba vueltas...o mis emociones con mayor precisión. Durante mucho
tiempo, había querido más que nada estar con Camila y Lara. Pero ahora que todo había
cambiado, Lara tenía que decir algo tan brutalmente desgarrador que hizo mi corazón romperse
de nuevo.

A pesar de que había empezado tan lleno de drama, los otros días habían sido muy profesionales.
Camila y yo mantuvimos nuestra distancia y sólo nos comunicábamos en el campo. La realidad de
estar separadas una vez comenzaba a pesar. Ella se iría a Francia y yo tenía que concentrarme en
mí.

Nuestra última práctica había terminado y había pensado bastante. Pero estaba contenta con las
decisiones desde que estaba en New York. Era el momento de dejar algunas cosas atrás y
finalmente seguir adelante. Cerrando mi maleta, la habitación del hotel estaba vacía porque
Normani se había marchado antes. Tenía que coger mi avión de regreso a Boston en una hora
cuando oí que alguien tocaba.

Me acerqué a la puerta y estaba sin duda sorprendida de ver a Camila.

"Sólo dame cinco minutos, por favor", dijo sin dudarlo y tomé una respiración profunda. Mi ira se
había disuelto en los últimos dos días, así que la dejé entrar. La última vez que había hecho eso,
habíamos terminado en una situación bastante desordenada. Esta vez decidí permanecer tan lejos
de la cama como fuera posible. Me apoyé en uno de los muebles, mientras que la más joven se
sentó en el borde de la cama.

"Camila, realmente no tienes que explicar", traté de calmar pero ella rápidamente me
interrumpió.

"Pero quiero", presionó y aspiró profundamente. "Antes de que Austin me dijera que me estaba
demandando por la custodia exclusiva, él me besó. Fue una fracción de segundo antes de que lo
empujara lejos. Yo estaba aturdida y desconcertada por completo, tienes que creerme. Él me
acusó de darle esperanzas lo que es una mierda. Cuando le dije que no me interesaba porque
estaba enamorada...de ti", su voz se volvió inestable en esa parte. "Sacó la carta de su abogado y
se fue. Eso es todo lo que pasó. No te engañé o algo cercano a eso. Tal vez no importe más, pero
no puedo dejar que te vayas sin decirte la verdad."

428
Me quedé en silencio y la observé con atención. Ella estaba siendo honesta, eso era obvio. ¿Me
sentía mejor? Sí. Sin embargo, eso todavía no cambiaba nuestra situación, ¿Verdad?

"Gracias por decirme la verdad", le contesté en voz baja. "Me sorprendió que me lo ocultaras, sin
embargo."

"No quería poner las cosas peor de la que ya eran. Estuvo mal, eso lo sé ahora. Debería habértelo
dicho", ella parecía entender su culpa. "Lo siento, Lauren."

"Está bien", suspiré y pasé una mano por el pelo en una ligera desesperación.

"Lo siento por todo esto", ella se mantenía disculpándose y parecía tener un nudo en la garganta.

"No es como si quisiste que esto sucediera. No tienes que pedir disculpas por algo sobre lo que no
tenías control", le dije.

"Tal vez", susurró.

"No tienes que preocuparte por mí, Camila", dije genuinamente. "Estoy bien. Estuve a punto de
hacer algo de lo que me hubiera arrepentido pero no lo hice."

"Quieres decir, ¿Beber?"

"Sí", admití. "Estuve en el bar, pero no pude hacerlo. Tal vez haya esperanza para mí todavía",
traté de bromear un poco, pero ella parecía preocupada todavía.

"Por supuesto que existe", su voz era suave. "Estuve muy asustada dque te hubiera empujado al
límite."

"Entonces, habría sido mi elección beber todavía", traté de hacer mi punto. "Tú no eres
responsable de mi comportamiento."

"¿Tú...te encontraste con Emily por accidente?" Camila preguntó cuidadosamente.

"No", negué con la cabeza. "Le envié un mensaje para que se juntara conmigo en el bar."

El rostro de la más joven se puso tenso y la vi tragar pesadamente.

"No sabía que todavía eran cercanas", mi compañera de equipo esclareció preocupada por algo y
no estaba segura de cómo responder.

"No lo hemos sido, pero nos encontramos hace unos días", quería seguir siendo lo más honesta
posible. "Aún estamos en buenos términos, pero eso es todo."

"Por lo tanto, ¿No estás considerando volver con ella?", espetó de repente y levanté las cejas con
sorpresa.

429
"Camila, rompiste conmigo hace tres días", negué con la cabeza en ligera incredulidad. "¿De
verdad crees que voy a estar con alguien más tan rápido?"

"No, no me refería en esa forma", ella estaba deseosa de apaciguar. "Quiero decir, podría
entender si quieres porque ella parece...perfecta."

"No es como si debieras saber esto ahora, pero siempre pensé que no había alguien más perfecto
para mí que tú", le confesé y nuestros ojos se encontraron en una mirada más larga. "Me llevará
algún tiempo superarnos. Eventualmente lo haré, pero definitivamente no ahora y probablemente
no por un tiempo."

"Lauren, sé que no debería decir esto tampoco, pero tal vez podamos arreglar las cosas después
del juicio", la voz de Camila se volvió en una mezcla extraña de esperanza y desesperación.

"No lo creo", le contesté en voz baja. "Sin ánimo de ofender, pero es obvio que no pudimos hacer
que esto funcionara todo este tiempo. ¿Por qué sería diferente después del juicio?"

"Austin se trasladó a New York a causa de su trabajo y ya le ofrecí regresar a Boston si cancelaba el
caso", la otra morena reveló. "Él sería capaz de ver a Lara con más frecuencia. Debido a esas
circunstancias, hablé con la gente de PSG y están dispuestos a terminar mi contrato un año antes.
Lo que significa, que podría estar de vuelta en Boston en un par de semanas."

"¿Por qué no me lo dijiste antes?" estaba realmente sorprendida por la noticia.

"Debido a que Austin no ha aceptado mi oferta", suspiró. "Pero si gana...voy a volver aquí
independientemente. No podría quedarme en París cuando Lara está aquí. Así que tal vez, el juicio
no es tan malo para nosotras."

"Creo que te estás olvidando de algo", argumenté. "No estás dispuesta a decirle al juez que
estamos saliendo por lo que he hecho. Hipotéticamente hablando, ganas, volvemos a estar juntas
y entonces, ¿Qué? Austin volverá a la corte y probablemente, obtendría la custodia porque tú
mentiste antes."

Los orbes marrones parecían perder su última gota de esperanza y odiaba ver eso. Por mucho que
quería estar con Camila, tenía que admitir a mí misma que no tuvimos una oportunidad de hacer
que funcionara. Había mucho en nuestro camino.

"Parecías tan ansiosa por hacer que funcionara hace unos días", Camila susurró claramente
molesta. "Ahora parece que te has rendido ante cualquier esperanza para nosotras."

"Y tú parecías firme en no darme la oportunidad de hacer las cosas bien", sentí mi pulso
acelerándose. "Sentí como si no creyeras en mí. Y debido a eso dejé de creer en nosotras."

Aquellas palabras la golpearon con fuerza. Se mordió el labio inferior y me sentí muy mal por
haber dicho esas cosas, pero era la verdad. Sus ojos cayeron a sus manos que estaban tocando a
tientas nerviosamente sus pantalones.

430
"No puedo decir que te culpo por pensar en eso", ella habló después de unos segundos de silencio.
"Y lo único que puedo decir es que no lo haría, ¿no? Yo te abandoné...o no te atrapé como tú lo
dijiste."

Ahora yo era la única en silencio. No quería hacerle daño, pero yo misma estaba herida. Estar de
acuerdo con ella en este momento no sería beneficioso para ninguna de nosotras.

"¿Tienes alguna idea de cuándo será el juicio?", cambié el tema ya que sentía que ninguna de las
dos tenía nada más que decir.

"Mañana."

"¿Mañana?" Repetí en estado de shock. "Pero...eso es muy pronto."

"Sí, bueno, ya que estoy en New York de todos modos tiene sentido", explicó Camila.

"¿El juicio es aquí?" cuestioné todavía sorprendida.

"Sí", asintió débilmente. "Te dije que Austin se trasladó aquí."

"¿Estás nerviosa?", le espeté por alguna razón. Que pregunta más estúpida, me dije a mí misma
después.

"No quiero estarlo, pero tengo mucho miedo", la más joven admitió en un profundo suspiro. "La
idea de que todo mi mundo podría cambiar mañana no es fácil de entender. Y ni siquiera he
hablado con Lara al respecto. Ella piensa que no vamos a quedar unos días más por diversión."

"Ella va a estar bien. Y estoy bastante segura de que no tienes que preocuparte. Cualquier juez
estaría loco si aleja a Lara de ti", le dije sinceramente e intercambiamos una sonrisa de nuevo.

"Gracias", respondió ella en voz baja.

"¿Tienes a alguien que cuide de Lara mientras estás en la corte?"

"Dinah se quedará también", mi compañera de equipo elaboró y eso tenía sentido.

"Lara y yo arreglamos las cosas", no podía no hablar con la madre de la niña acerca del reciente
arreglo.

"Lo sé. Ella me lo dijo", la sonrisa de Camila brilló junto con la mía. "Estuve muy feliz de escuchar
eso."

"Sí, no me lo esperaba en absoluto", le dije.

"Hablando de Lara; quería darte las gracias por lo que hiciste antes", su voz se volvió más seria de
nuevo. "También me dijo acerca de ese tipo raro y no sé cómo darte las gracias."

"No tienes que darme las gracias. Cualquiera hubiera hecho eso", le aseguré.

431
"¿Tienes una descripción de él o algo así? Me gustaría informarle a la policía porque-"

"Ya lo hice", la interrumpí con suavidad. "Fue lo primero que hice después de que me fui de la
práctica con dirección al bar."

"Por supuesto que lo hiciste", el tono de Camila rezumaba afecto y empecé a perderme en la
sombra cálida de color marrón de sus ojos.

"¿Vas a estar bien mañana?" tuve que preguntar. No importa la cantidad de mierda que había
entre nosotras, nunca cambiaría el hecho de que me preocupaba por ella. Una gran parte de mí
todavía quería protegerla aunque me decía a mí misma no hacerlo.

"No tengo permitido preocuparme por ti así que tampoco tienes permitido preocuparte por mí",
intentó ser graciosa, pero sólo aumentó mi preocupación con su actitud evasiva.

"Camila-"

"Voy a estar bien, Lauren", cortó y se levantó de la cama. "Pero no quiero retenerte por más
tiempo. Probablemente estabas a punto de irte."

Mis instintos me decían que debía quedarme para el juicio. O por lo menos decirle a Camila que
me llamara si algo salía mal. Sin embargo, no podía hacerlo. No sin contradecir todo lo que yo
había dicho acerca de seguir adelante. Así que sólo asentí con la cabeza y la acompañé a la puerta.
Deteniéndome, Camila se dio la vuelta y sorprendió a mi sistema con una mirada intensa.

"Lo siento por hacerte creer que no creo en ti", espetó. "Tenía que decir eso."

"Disculpa aceptada", le dije con suavidad, sin poder apartar los ojos de ella.

"Te veré en el próximo partido de clasificación", dijo, y mi corazón se redujo con el conocimiento
del que yo solamente sabía en este momento. No mostrando ninguna reacción, ella no pareció
darse cuenta de mi tensión, pero abrió la puerta.

"Buena suerte mañana", me las arreglé para decir mientras ella caminaba hacia el pasillo.

"Gracias", su respuesta fue casual, pero agradecida. "Que tengas un buen viaje a casa."

"Gracias", asentí antes de que ella se fuera.

Suspirando profundamente, descansé mi frente con la puerta de madera después de cerrarla. No


estábamos juntas, pero no podía negar que estaba preocupada por ella. ¿Y si en realidad Austin
ganaba la batalla por la custodia? ¿Cómo reaccionaría Camila? ¿Ella podría sobrevivir sin Lara?
¿Ella de verdad se mudaría Boston, entonces? ¿Y eso no sería una buena cosa para nosotras en
realidad como ella había dicho?

Antes de que mi cabeza fuera a otro alboroto, agarré mi maleta y metí mis últimas cosas. Tenía
que irme de New York tan pronto como fuera posible ya que este lugar estaba lleno de

432
demasiados recuerdos de Camila y yo. La tentación de quedarme sólo crecía con cada minuto que
pasaba.

=================

Capítulo 28 (FINAL).

Ya lo había hecho. Irme de New York. A pesar de que la tentación de quedarme por el juicio había
sido enorme, estaba de vuelta en mi apartamento desde hace unas horas después de tener una
conversación con Camila. Regresar a casa se sentía bien...y horrible al mismo tiempo. Porque sabía
que no la volvería a ver.

Afortunadamente Kristie y Luis habían acordado venir y tener una noche de cine para distraerme.
Mis amigos cercanos ya estaban sentados en el sofá discutiendo sobre qué película ver. Me senté
al lado de Kristie y no podía importarme menos lo que iban a decidir. Mientras ellos discutían,
miré mi teléfono y vi que un nuevo vídeo había sido subido al canal de USWNT en Youtube.

Tragué saliva ante el título: "Talento oculto de Camila"

La miniatura mostraba a mi ex novia sentada en un piano y mi corazón comenzó a bombear rápido


ante la vista. Era muy consciente de que no debía hacer clic en el vídeo. Eso sólo causaría más
confusión en mi cabeza. Tomando una respiración profunda, oí la voz de Kristie de repente.

"¿Lauren? ¿Hola? ¿Qué estás haciendo? Necesitas decidir lo que vamos a ver y es mejor que
escojas mi elección", dijo la rubia, pero todavía estaba centrada en la pequeña pantalla en mi
mano. Agarré el Tablet que estaba conectado al televisor grande de la mano de mi amiga. Ella
asumió que estaba navegando a través de la lista de películas, pero tenía otros planes. Busqué el
vídeo que había encontrado en mi teléfono e hice clic en él, por lo que apareció en el televisor de
pantalla plana, la voz de Camila llenando la habitación ahora en silencio.

"Hola todo el mundo. Soy Camila Cabello y este es mi talento oculto."

Mi pulsó se aceleró el segundo que empecé a ver el segmento más nuevo. Reconocí su ropa. Debió
haber sido grabado en el hotel de New York esos dos últimos días. En lugar de preguntarme
cuando había sido filmado, traté de concentrarme en la joven mujer que aparecía en la pantalla.

"En realidad, no creo que sea un talento pero Dinah me hizo hacer esto", rió nerviosamente. "No
suelo cantar delante de nadie, pero pensé en compartir esto con ustedes. La semana que viene
alguien más tiene que compartir un talento oculto con ustedes pero yo voy primero. No toco el
piano muy bien, y mi voz no es la mejor, pero lo intentaré. Por favor, no sean demasiado duros
conmigo."

433
No puedo evitar sonreír ante lo nerviosa que se veía. Los ojos marrones dejaron de mirar a la
cámara y se centraron en el teclado delante de ella. Yo había visto el piano en el vestíbulo del
hotel y confirmó mi idea principal que había hecho esto sólo hace unos días.

"Esta es en realidad una canción que escribí yo misma. La escribí hace mucho tiempo...cerca del
tiempo que estuve en la selección Sub-17", reveló y mi corazón dio un vuelco. Me di cuenta de que
Kristie y Luis estaban mirándome preocupados, pero me mantuve tranquila...hasta que Camila
comenzó a cantar.

"What if I said I'd break your heart (¿Qué pasa si digo que voy a romper tu corazón?)

What if I said I have problems that made me, me? (¿Qué pasa si digo que tengo problemas que
me hacen ser, yo?

What if I knew I would just rip you mind apart (¿Qué pasa si yo sabía que sólo destruiría tu
mente?)

Would you let me out? (¿Me dejarías salir?)

[Chrorus:]

You ought to know where I'm coming from (Debes saber de dónde yo vengo)

How I was alone when I burned my house (Cómo estaba solo cuando quemé mi casa)

And all of the pieces were torn and thrown (Y todas las piezas fueron arrancadas y arrojadas)

You should know where I'm coming from (Deberías saber de dónde yo vengo)

[Verse 2:]

What if I said I was just too young? (¿Qué pasa si digo que yo era demasiado joven?)

What if I said I was built on bricks of carelessness and crumbs (¿Qué pasa si digo que fui construida
en ladrillos de descuido y migas?)

What if I said I'd be gone before I could come (¿Qué pasa si digo que me iré antes de que pudiera
venir?)

[Chorus]

[Bridge:]

Your sought out ways(Tus formas de buscar)

My own, my own(Mi propio, mi propio)

But your turn me away from my low blows(Pero tú me alejabas de mis golpes bajos)

434
Oh, you should've known (Oh, pero tú deberías haber sabido)"

El vídeo se detuvo y estaba congelada. Sentí las lágrimas rodando por mis mejillas de las cuales no
me había dado cuenta hasta que vi mi entorno de nuevo. Limpiando rápidamente las gotas
calientes con mi mano, ya era demasiado tarde porque mis amigos lo habían visto. Kristie me
agarró la mano y Luis estaba sentado junto a mí antes de que pudiera protestar. Su mano frotó mi
espalda confortablemente y eso me desgarró aún más.

"Está bien", dijo él en voz baja.

"Sí, estamos aquí para ti", Kristie estuvo de acuerdo y por primera vez no me sentí avergonzada de
mostrar un lado más vulnerable ante mis amigos.

"Todavía la amo...", no pude ocultar un pequeño sollozo en medio.

"Lo sabemos", el brasileño continuó en voz baja antes que nos quedáramos en silencio por un
momento.

"¿Creen que estoy loca por querer estar ahí para el juicio de custodia?", les pregunté tímidamente.

"No, en absoluto", Kristie negó con la cabeza. "Debes hacer lo que crees que es mejor para ti. Tal
vez...puedes resolver las cosas, después de todo."

"No sé", suspiré con desesperación.

"Escucha, si quieres ir, entonces deberías", Luis animó. "Incluso si no quieres estar con Camila en
este momento, puedes todavía apoyarla si eso es lo que tu corazón te dice que hagas."

"¿Estás siendo sabio conmigo otra vez?" me reí ligeramente al verlo sonriendo.

"Tal vez", él rió entre dientes. "O tal vez...puedes conseguir una clausura de otra manera."

Tragué con dificultad. Clausura, repetí en mi cabeza. Podría ser lo justo que necesitaba, ¿No? Pero
la pregunta más importante era: ¿Estaba preparada para ello?

Camila's POV

Mis palmas estaban sudando locamente. La gran sala del tribunal me hacía sentir como si
estuviera en un mundo diferente. Me recordó a los programas de televisión o películas, no mi
propia vida. Pero no tenía opción. Tenía que mantenerme firme hasta que esto terminara y
esperar el mejor resultado.

Mi abogada se mantuvo asegurándome de que sólo había una pequeña posibilidad de que un
padre soltero se le concediera la custodia exclusiva, pero estaba nerviosa más allá de la creencia.

435
Estando inquieta en mi asiento, oí la puerta abrirse y entró Austin con su abogado. No podía decir
quién se veía más idiota en sus trajes elegantes. Tal vez sólo estaba albergando mala vibra contra
él a causa de todo este juicio, pero estaba enojada con él. Sólo se encontró con mi mirada por un
segundo antes de que tomara asiento.

Aspiré profundamente antes que se abriera otra puerta y el juez entró. Todos nos pusimos de pie y
un montón de abogados mantuvieron una charla que no pude seguir. En mi cabeza, estaba
horrorizada ante la sencilla idea de que podía perder a Lara en cuestión de minutos. Le di unas
palmaditas a mi blusa y chaqueta para asegurar de verme apropiada.

Pero ya era hora: Austin fue el primero en sentarse en el estrado y declarar bajo juramento como
su abogado preguntó primero.

"¿Cómo describiría su relación con su hija?"

"Buena. Nos llevamos muy bien. Trato de verla todo lo que puedo, pero es sólo que nunca hay
tiempo suficiente."

"¿Por qué usted no puede pasar mucho tiempo con ella?"

"Su madre decidió mudarse a Francia el año pasado y llevarse a Lara con ella."

"¿Acaso la Señora Cabello le preguntó antes de mudarse?"

"No. Ella no me preguntó. Ella simplemente me lo dijo cuándo todo ya estaba hecho."

"Por lo tanto, se trasladó hacia otro país, otro continente, ¿Sin consultarle?"

"Sí. Y esa no es la primera vez que lo hace. También se mudó de California a Boston antes de eso y
no le dijo a nadie."

"Como si te importó", de repente murmuré bajo mi aliento y llamé la atención de todo el mundo.
Aclaré la garganta y traté de controlar mi ira. Es un maldito idiota, seguí repitiendo internamente.
¿Por qué me estaba haciendo esto? ¿Y por qué él se veía tan seguro de sí mismo? Sabía que Austin
tenía un cierto encanto y me sorprendí a mí misma pensando que tal vez un juez varón hubiera
sido mejor. Era estúpida pensar eso, pero estaba preocupada por cada detalle.

"¿Cree usted que es la decisión correcta para Lara estar viviendo en Francia?", su abogado
continuó.

"No veo como esa puede ser la decisión correcta para un niño, siendo constantemente arrancado
de su hogar. Ella necesita un poco de estabilidad y un hogar seguro donde pueda crecer sin tener
que preocuparse donde tiene que ir ahora."

"¿Podría darle un hogar estable a su hija?"

"Sí, he estado viviendo en New York desde hace un tiempo y no planeo irme en el corto plazo."

436
"¿Es capaz de hacerse cargo de ella económicamente?"

"Absolutamente. Trabajo en Wall Street y tengo un ingreso estable."

"¿Cree usted que la señora Cabello está haciendo lo que es mejor para su hija en todo momento?"

"No."

Gilipollas, repetí en mi cabeza.

"¿Por qué?"

"No me opongo a que Camila persiga sus sueños y que tenga una carrera exitosa, pero...mi sueño
es estar con mi hija."

"Nada más."

Había cerrado los puños con tanta fuerza en este punto que mis nudillos estaban blancos. Una
cosa era leer las acusaciones en el papel, pero una cosa completamente distinta era oírlas desde
Austin personalmente. No podía entender cómo fui tan inocente en confiarle todo. Con cada
sílaba que decía, mi estómago se revolvía.

Mi abogada se levantó y se acercó a Austin lentamente. Ella era una de las mejores que había
podido encontrar en tan poco tiempo, pero tenía curiosidad de verla en acción. La mujer de pelo
rojo tenía reputación de ser brutal a veces, pero necesitaba eso si iba a pelear en contra de Austin
y su arrogante abogado.

"Sr. Mahone, ¿Cuál es su relación con mi cliente?" Mi abogada, la señora Neal, comenzó su línea
de preguntas.

"Ella es la madre de mi hija y ex esposa."

"¿Estaban casados?"

"Sí."

"¿Quién pidió el divorcio?"

"Camila lo hizo."

"¿Sobre qué base?"

"!Protesto! ¿Pertinencia?" El abogado de Austin interfirió al instante.

"Su señoría, estoy simplemente tratando de establecer la relación de los padres del niño y, por
tanto, dinámica familiar", la mujer con traje gris contrarrestó.

"Anulado. Responda la pregunta Sr. Mahone", el juez se puso de lado de nosotros.

437
"Yo...fui infiel durante nuestro matrimonio."

"Por lo tanto, ¿Usted engañó a la madre de su hija por la cual supuestamente se preocupa tanto?"

"!Protesto!"

"Objeción sostenida", el juez se puso de lado de Austin en este momento. "Por lo menos
mantenga todo pacifico, abogada."

"No estaba listo para ser un padre en ese momento y me asusté", mi ex marido explicó ante el
interrogatorio.

"¿Qué edad tenía usted cuando nació su hija?"

"Sólo dieciocho años."

"Usted era un adulto."

"Técnicamente, sí."

"No técnicamente. Legalmente usted era un adulto, Sr. Mahone. ¿Y cuál era la edad de mi
cliente?"

"Diecisiete", Austin suspiró claramente incómodo.

"Veo. Usted era un adulto, pero mi clienta era menor de edad cuando ambos se convirtieron en
padres. Aun así, usted no estaba listo. ¿No hubiera sido más razonable para el adulto en la relación
ser el responsable?"

"Cometí un error-"

"¿Convertirse en padre?" Mi abogada siguió atacando.

"!No! yo estaba...sólo..."

"Usted fue el egoísta, Sr. Mahone. Y ahora intenta culpar sus propias deficiencias en el pasado de
mi cliente. La verdad es que usted decidió no ser un padre porque estaba demasiado ocupado
siendo joven y estúpido. Pero ahora quiere jugar a las casitas. Mi cliente no hizo elección de
participar en la vida de su hija de tres años después del nacimiento de Lara. Ella hizo su elección el
momento en que se enteró de que estaba embarazada. Su acusación contra mi cliente de no
cuidar a su hija parece muy descabellado teniendo en cuenta que estaba cuidando de su hija hasta
que usted se dignara a razonar, Sr. Mahone."

"Eso es suficiente, abogada. Usted ha hecho su punto", el juez interfirió porque la abogada había
sacado toda su ira contra Austin al parecer. Ella era sin duda brutal...pero me gustó en este caso.

438
"Yo sé que metí la pata en el pasado. Pero es por eso que quiero hacer las paces con Lara. Sí, fui
egoísta e irresponsable, pero al menos estoy tratando de ser un mejor padre ahora. Todo lo que
necesito es una oportunidad para demostrarlo", declaró Austin desesperadamente.

"Nada más, su señoría."

Y con eso, la primera parte había terminado. La parte más difícil aún estaba sin embargo. Tenía
que tomar una posición diferente. Tomando una respiración muy profunda, me puse de pie y
caminé hacia el lado del juez. Como terminé de tomar el juramento, mi corazón se detuvo.

En el fondo de la sala, vi a Lauren sentada en uno de los bancos vacíos. Tragué saliva con
dificultad. ¿Cuánto tiempo había estado allí? ¿Qué demonios estaba haciendo aquí en primer
lugar?

Sentí la sangre corriendo por mis venas a alta velocidad como la mujer de cabello oscuro sonrió
débilmente. Necesité de un segundo para calmarme y concentrarme en mi abogada que
comenzaba a interrogarme.

"Sra. Cabello, ¿Diría que Lara es una niña feliz?"

"Sí, definitivamente."

"¿Ha visto cambios que sugieren que es infeliz desde que se mudó a París?"

"No. Creo que eso le ha beneficiado. Vivimos con mi mejor amiga, que es como una hermana para
mí y una tía para Lara y su familia. Así que, creo que Lara jamás ha estado rodeada de tanta
familia", repetía la verdad.

"Hemos escuchado las acusaciones de su ex marido. ¿Pero no es cierto que usted renunció a sus
sueños de convertirse en una deportista profesional cuando estaba embarazada?"

"Sí, eso es cierto."

"¿Y cuál fue la razón por la cual comenzó a jugar de nuevo?"

"Quería mantener a mi hija y ofrecerle la vida que se merecía."

"¿Es justo decir, que su decisión de convertirse en una deportista profesional se hizo más
beneficioso para su hija?"

"Sí. Mi primera prioridad ha sido y siempre será mi hija. Trabajé en un montón de trabajos antes
de empezar a jugar fútbol y tenía menos tiempo para ella, en ese entonces, de lo que tengo ahora.
Además, no veo como ser un modelo a seguir para mi hija, haciendo lo que me gusta y tener éxito,
es nocivo de cualquier manera. En todo caso, espero animarla a hacer lo mismo una vez que ella
sea mayor", me sentí más a gusto a medida que hablaba.

439
"El Sr. Mahone mencionó que usted se mudó de casa a una edad temprana. ¿Cuál fue su
razonamiento para hacer eso?"

"Yo no tuve mucha opción. Mis padres me echaron y Austin no se preocupaba mucho de mí o Lara
en ese punto, lo que limitaba mis opciones. Decidí que sería mejor empezar de nuevo lejos de toda
la negatividad que nos rodeaba en ese entonces."

"¿Su hija nunca le dijo que prefería vivir con su padre?"

"No."

"¿Cree que su ex marido sería capaz de cuidar a su hija?"

"No lo sé. No es que no creo en su amor por ella, pero...en mi experiencia él no es el más
responsable."

"¿Cree que él sería capaz de cuidar mejor de ella que usted? Porque eso es lo que el juez tiene que
decidir al final."

"No, creo que nadie podría hacerlo. Lo digo de todo corazón", respondí de forma convincente.

"Gracias, Sra. Cabello. No hay más preguntas."

Mis ojos se posaron en el fondo de la sala por un breve momento antes de tener que prepararme
para las preguntas del abogado de Austin. Él ya tenía esa sonrisita de suficiencia en su rostro lo
que puso más furiosa y nerviosa a la vez.

"Mi cliente ha admitido sus errores en el pasado, cuando se trata acerca de su matrimonio y de su
relación con su hija. ¿Alguna vez él ha sido físicamente abusivo?", preguntó el hombre y me
sorprendió que él siquiera sugiriera tal cosa.

"No."

"¿Alguna vez él ha sido emocionalmente abusivo con respecto a su hija?"

"No, y yo nunca lo he acusado de cualquiera de esas cosas."

"¿Alguna vez él ha puesto en peligro su seguridad o la ha dañado de alguna manera?"

"No, excepto por el dolor que le causó al no estar allí por un tiempo", me enojé y tiré un pequeño
comentario para demostrar que Austin no era un santo, sólo porque él no era abusivo.

"¿Alguna vez usted ha hecho alguna de esas cosas?"

"No, por supuesto que no."

"Así que usted no permitiría ese comportamiento en torno a su hija, ¿Verdad?"

440
"Sí."

"¿Qué pasa con la relación lésbica que usted tiene con una de sus compañeras de equipo, Lauren
Jauregui?"

Mis ojos se abrieron por un momento y tomó todo mi sistema de retención para no mirar a mi
compañera de equipo sentada en la parte posterior.

"¿Mi relación lésbica?" casi me burlé porque lo había dicho con tanto desdén. "No veo como eso
podría perjudicar a Lara en absoluto."

"Tal vez no. Pero ¿Y si esa compañera suya era violenta y mostró signos de alcoholismo? ¿No es
cierto que usted ha estado involucrada con alguien que tiene un problema con la bebida y que
destrozó una habitación de hotel con su hija presente?"

"Eso fue un muy desafortunado incidente. Lara nunca debió estar allí cuando-" , quise explicar,
pero fui interrumpida por el hombre de pelo gris con traje.

"Hubiera estado bien si Lara no lo hubiera visto, ¿Entonces?"

"Eso no es lo que quise decir."

"¿Qué quiere decir, entonces?"

"Mi novia, en ese entonces, ama a Lara pero ella no estaba en su sano juicio ese día", me puse más
ansiosa porque me acorraló.

"Porque ella estaba severamente intoxicada."

"Hubieron circunstancias que condujeron a su crisis pero fue una sola vez."

"!Protesto! todo esto es decir-oír, su señoría", la señora Neal intervino.

"Sra. Cabello le dijo a mi cliente que la Señorita Jauregui estaba llorando, gritando y fue tan lejos
que rompió un espejo, mientras que la niña vio todo. ¿Eso es correcto?" El abogado de Austin
preguntaba sin cesar.

"Responda la pregunta, Sra. Cabello", el juez me exhortó.

"Sí, pero-"

"¿Ese comportamiento es más tolerable que el de mi cliente estando ausente cuando él estuvo en
un mal lugar? ¿Usted prefiere mantener a alguien lejos cuando no pueden ser un padre
responsable?"

"Usted está torciendo todo esto. Lauren también mantenía su distancia e incluso terminé las cosas
con ella."

441
"Debido a que mi cliente la demandó. ¿Hubiera roto con su novia si el Señor Mahone no la hubiera
traído aquí?"

"No estoy segura...", tartamudeé obviamente angustiada por el hombre de voz áspera lanzando
acusaciones contra mí.

"¿Usted no está segura de haber puesto la seguridad de Lara por encima de la necesidad egoísta
de una relación? Eso suena muy contradictorio con lo que ha dicho todo el tiempo aquí en la
corte, Sra. Cabello. Ya sea usted está mintiendo ahora o ya ha mentido antes."

"Objeción, su señoría. ¡Él está tratando de intimidar a mi cliente!" Mi abogada salió a mi defensa y
parecía estresada.

"Objeción denegada. Pero tómelo con calma, abogado."

"No tengo más preguntas de todos modos, su señoría."

Mi corazón estaba latiendo con fuerza en mi pecho. Esto no había resultado tan bien como
esperaba. Incluso me temblaban las piernas cuando me levanté de la silla con regreso a mi
asiento.

"¿Puedo decir algo?"

Me detuve a mitad de camino cuando vi a Lauren acercándose a nosotros pidiendo la palabra.


¿Qué demonios estaba haciendo? Parecía tranquila pero nerviosa al mismo tiempo. Traté de
encontrarme con los ojos verdes familiares pero ellos estaban enfocados en el juez. Así que seguí
caminando y me senté al lado de mi abogada.

"¿Y quién es usted?", preguntó el juez.

"Soy Lauren Jauregui. Camila, quiero decir la ex novia de la señorita Cabello", la voz de Lauren
estaba temblando después de todo y mostró lo difícil que esto era probablemente para ella.

"Su señoría, esto no es relevante para el caso y exijo que ella no esté involucrada en el caso", el
abogado de Austin dijo molesto.

"Fue el abogado del Señor Mahone quien mencionó la relación de mi clienta, por lo que sería justo
oírla hablar", mi propia abogada trató de dejar a Lauren decir lo que pensaba.

"!Ella sólo está tratando de influir en la decisión!", exclamó el hombre con desesperación.

"Cálmese, abogado. No hay un jurado aquí y todos estamos aquí para decidir lo que es mejor para
un niño. Si la mujer puede ayudar a determinar eso, tendrá que hablar. Por favor, tome asiento."

Y era aún más surrealista ahora que Lauren estaba involucrada. La más vieja se acercó al lado de
nosotros y me di cuenta de lo arreglada que se veía. Llevaba una blusa blanca elegante, una falda

442
lápiz negro y una chaqueta a juego con los zapatos de tacón. Si no hubiera estado tan preocupada
por el juicio, podría haber admirado su atuendo por un momento.

"Sra. Jauregui, ¿Qué es lo que quiere decir que nos podría ayudar?"

"Todo lo que se ha dicho de mí aquí es cierto", Lauren comenzó sorprendentemente y tragó saliva.
"He estado tratando con algunos problemas en el pasado, pero nunca quise que Camila o Lara
sufrieran a causa de ellos. Todo lo contrario, quiero que sean felices y por eso Camila y yo
decidimos darnos un tiempo. Me di cuenta de que yo no le podía ofrecer lo que se merecía. Y sí, el
hecho de que Austin la demandó por la custodia exclusiva desempeñó un papel en la decisión,
pero estoy segura de que hubiéramos llegado a lo mismo si las cosas no hubieran cambiado."

"¿Así que usted admite haber puesto en peligro la seguridad de su hija?", el juez preguntó
lentamente.

"No, nunca lo hice. Pero mostré algunos comportamientos que no debería haber visto. No soy una
alcohólica, ni una delincuente violenta. El incidente que fue descrito sólo se produjo debido a unos
asuntos familiares. Ese día, me enteré de que mi madre trató de quitarse la vida. Por lo tanto,
estoy muy consciente de que he cometido un error por emborracharme y estar fuera de sí pero no
estaba en el lugar correcto. Ahora lo estoy, estoy tratando de mejorar mi persona y hacer frente a
esas situaciones con mayor madurez."

"¿Diría usted que la Sra. Cabello es una buena madre, entonces?"

"Ella es la mejor madre que he conocido en mi vida", la de ojos verdes respondió con voz fuerte y
mi corazón saltó de alegría en mi pecho. "Las acusaciones que se hacen aquí son completamente
falsas. Sé de experiencia propia lo que es tener una madre que es negligente. Y Camila no podría
estar más lejos de eso. Ella siempre está ocupándose de su hija y le ama más de lo que incluso
podría explicar en palabras. Puedo decir esto: Si yo hubiera tenido una madre como Camila, nunca
hubiera roto ningún espejo."

"¿Y qué sucedería si el tribunal le otorga la custodia a la señora Cabello con la condición de que
usted tiene que permanecer lejos de su hija?"

"Entonces voy a respetar la decisión de mantenerme alejada por supuesto. Pero Camila y yo ya no
estamos juntas de todos modos lo que no será un problema", ella se mantuvo con calma aunque
me di cuenta de un poco de tristeza en su voz.

"Realmente tengo que decir esto", la nativa de Miami habló de nuevo. "La razón por la que
estamos aquí es para determinar lo que es mejor para Lara. Y yo no veo cómo alejarla de su
madre, que no ha hecho otra cosa que amarla y cuidarla, sería el mejor interés de nadie a
excepción de Austin. Entiendo su necesidad de recuperar el tiempo perdido, pero la única manera
de que Lara pudiera sufrir sería alejándola de Camila...porque en mi opinión, la mejor opción es
estar cerca de ella."

443
Esta vez no pude ocultar una sonrisa, pero sentí un par de lágrimas en mis ojos mientras decía esas
últimas palabras. Su sinceridad era tangible y pareció impresionar al juez.

"Gracias, Sra. Jauregui. Puede volver ahora y tendré que tomar una decisión", la mujer que
decidiría dijo después de un momento de silencio.

Los quince minutos más largos de mi vida habían comenzado.

Lauren's POV

"!Lauren! ¡Espera!"

Estaba caminando por los grandes pasillos de la corte cuando oí a Camila gritarme. Fue una
reacción natural que mi corazón latiera más rápido. Me di la vuelta y esperé a que me alcanzara.
La gran sonrisa en su rostro era contagiosa, pero me sorprendí un poco cuando sentí que me
aplastó con un abrazo entusiasta.

"Whoa, cálmate. Estoy usando tacones y podría caerme", reí suavemente pero obviamente estaba
encariñada por su reacción.

"Lo siento, estoy tan feliz y aliviada", la joven madre exhaló después de que le habían concedido la
custodia de su hija y me liberó de su abrazo.

"Bueno, estoy feliz de que las cosas hayan salido de esa manera", estuve de acuerdo y me encantó
ver los ojos marrones brillando en la dicha.

"No sé cómo darte las gracias, Lauren", su voz se hizo más sincera. "Lo que dijiste allí claramente
salvó mi trasero."

"No, no", no estaba de acuerdo en esta ocasión y sacudí la cabeza. "Nunca hubieras estado en esa
situación si no hubiera sido por mí, así que sentí que era justo decir algo."

"Estoy feliz de que lo hubieras hecho. Y estoy feliz de que hayas venido", admitió más
tímidamente.

"Yo también", le dije y sonreí sinceramente.

"¿Por qué no vienes al hotel y te compro la cena?

Siento que te debo mucho más, pero tal vez eso es un comienzo", la de ojos marrones parecía un
poco ansiosa.

"Eso está bien. Tengo que coger el tren de regreso a Boston", respondí con calma. "Pero disfruta la
victoria con Lara y Dinah. Estoy segura de que estarán felices de tener una gran cena contigo."

444
"Podría comprarle a Lara algunos Panqueques", Camila sonrió y no pude contenerme de reír. La
linda sonrisa en su rostro hizo mis rodillas débiles.

"Eso suena como una buena manera de celebrar", reí.

"¿Segura que no quieres venir con nosotras? El juez no dijo nada acerca de que permanecieras
lejos de nosotras", la más joven repitió la decisión, pero no se trataba de eso.

"Sí, estoy segura", no dejaba de sonreír para hacerle saber de qué todavía estaba muy contenta
por ellas.

"Bueno, entonces te veré en tres semanas para el próximo partido de clasificación", asumió y mi
corazón se dejó caer.

"En realidad..." dudé y no estaba segura de si era el momento adecuado para decirlo, pero lo hice
de todos modos. "Dejé el equipo nacional."

"!¿Qué?!" exclamó Camila en un shock flagrante.

"Hablé con todo el mundo antes de que el campamento de entrenamiento hubiera terminado.
Ayer fue mi último día con el equipo nacional", revelé y vi la confusión en su rostro.

"Pero...eso es...el fútbol es tu vida", tartamudeó desconcertada.

"Eso es exactamente por lo cual lo voy a dejar", respondí en voz baja. "Tengo que hacer esto.
Todavía hay algunos problemas con los que tengo que trabajar y no creo poder hacerlo cuando
mantengo este estilo de vida."

"Lauren, esto no se debe por...mí....o nosotras, ¿Verdad?", preguntó ella con cuidado, pero negué
con la cabeza ligeramente.

"No", traté de calmar su preocupación. "No estoy haciendo esto por nadie más que yo. Tú misma
lo dijiste allí; la razón por la que comenzaste a jugar otra vez fue a causa de Lara. Esa es tu vida. Tú
tienes una vida fuera del fútbol. Y yo quiero eso. Tengo que encontrar la manera de ser feliz
conmigo misma sin buscar la aprobación de todo el mundo - ya sea de los entrenadores, fans, mis
compañeras de equipo e incluso la tuya. Nunca seré completamente feliz hasta que haya
aprendido de que estoy tratando secretamente de compensar ya que mi madre nunca me
reconoció o aprobó."

Camila parecía aturdida. Ella estaba visiblemente alterada y tenía una inclinación por la que ella no
quería que renunciara. Aunque después de mi explicación, ella luchó para expresarse.

"Una parte de mí está increíblemente orgullosa de ti", dijo en voz baja. "Y otra parte de mí tiene el
corazón roto."

Sentí un pequeño nudo en la garganta cuando oí el temblor sutil en su voz.

445
"Hay algo más que quería decir", admití lentamente. "Nunca fue tu responsabilidad atraparme",
los ojos marrones me miraban fijamente ahora. "Soy yo quién es responsable de mis propias
decisiones. Tengo que aprender a que está bien caer, pero también hay que levantarse de nuevo.
Sin el uso de nuestra relación, los logros de fútbol, beber, fiesta o acostarme con chicas al azar
para arreglar lo que estaba roto desde mucho antes. No quiero que te sientas culpable, Camila. Tú
me has hecho más feliz que nadie. Y es sólo por ti que comencé a conseguir ayuda en primer
lugar."

"Me has hecho feliz también, Lauren", ella correspondió como su voz estaba llena de emoción.
"No quiero que pienses que me arrepiento de algo; porque honestamente no lo hago. Yo lo haría
todo de nuevo."

"Yo también", le contesté con sinceridad.

"Lauren", suspiró con desesperación y sus ojos se encontraron frenéticamente con los míos. "Si
me pides que vuelva, lo haré."

Aunque mi corazón estaba a punto de estallar fuera de mi pecho, me sentí en conflicto sobre
cómo manejar su oferta.

"No puedo pedirte que hagas eso", dije en voz baja.

"Entonces no lo hagas", la centrocampista ofreció. "Ya hablé con PSG y puedo volver después de
que esta temporada termine en unas semanas si quiero."

"No creo que sea una buena idea", no quería hacerle daño, pero vi su rostro cayendo ligeramente.
"Tengo que concentrarme en mí primero. Tengo un año más de universidad y voy a jugar otro año
con Boston para seguir adelante con mi contrato. Pero, ¿Quién sabe lo que voy hacer después de
eso? No quiero que vuelvas a mí porque no podría estar aquí por mucho tiempo", traté de hablar
tan suavemente cómo fue posible y sentí mis propios ojos llenos de lágrimas por alguna razón.

"Entiendo", ella asintió con la cabeza y se mordió el labio inferior de esa manera típica de ella.
"Quién hubiera pensado hace todos estos años, que me gustaría volver a jugar y tú renunciarías",
la sonrisa triste en su rostro le dio un calambre a mi corazón.

"Un poco irónico. Supongo que nuestra historia ha dado un giro completo", sonreí lo mejor que
pude.

"Aún a riesgo de sonar patética, pero... ¿No hay alguna manera de que haya un nosotros a
futuro?" preguntó Camila con un poco de esperanza.

"No lo sé", le susurré suavemente. "Todo lo que sé es que no puedo ser la persona que necesitas
en este momento. Si quiero darle a esto una oportunidad, entonces quiero que sea perfecto,
Camila. Y no estoy allí todavía."

"Entonces voy a tener que aceptar tu decisión", asintió con su cabeza la derrota.

446
"Sé que has intentado muy duro para hacer que esto funcione y yo también", quería asegurarme
de que no estuviera tan triste. "Pero por ahora, tenemos que enfrentar el hecho de que nuestro
mejor no fue lo suficientemente bueno...al menos no ahora", había una sola lágrima por su mejilla
y odiaba verla llorar más que nada. Cogí su mano y la apreté suavemente. "Eso no cambia el hecho
de que aún te amo", añadí para verla sonreír un poco. "O que una parte de mí siempre lo hará."

"Todavía te amo", susurró, lo que causó piel de gallina en todo mi cuerpo. "Sé que estás haciendo
lo correcto y realmente me siento orgullosa de ti. Te estás convirtiendo en la persona que siempre
supe que podrías ser. Pero lo para que lo sepas, siempre fuiste perfecta todo el tiempo."

"Las dos sabemos que eso no es verdad", mis labios formaron una sonrisa aún más amplia.

Camila miró las manos entrelazadas y de repente sonrió antes mirarme a los ojos.

"¿No más LJ10 entonces?", hizo referencia a lo que yo había dicho hace años después de descubrir
de que ella había renunciado debido a su embarazo. Sólo yo la llamaba "CC7" y ella estaba usando
la abreviatura de mi nombre y número ahora. Recordé el momento como si haya sido ayer. Y al
parecer ella también. Me acordé de lo devastada que me había sentido al pensar que ella nunca
había tenido sentimientos por mí. Ahora que sabía mejor, estaba segura de que estábamos
haciendo la elección correcta.

"Al menos no por ahora", le dije con un pequeño suspiro.

Definitivamente fue un deja-vu, pero sentí algo que no había sentido en nuestro adiós de ese
entonces: un sentido de cierre, pero esperanza que quizás podríamos encontrarnos en el camino
de la otra como ya lo habíamos hecho antes.

"Cuídate, Lauren", Camila dijo a punto de llorar, pero puso una sonrisa valiente.

"Tú también", le respondí en un susurro antes de inclinarme hacia adelante y dar un suave beso en
su mejilla. El profundo suspiro final fue audible pero se soltó de mi mano. Me costó mucho de mí
de lo que había pensado dar la vuelta y alejarme del amor indiscutible de mi vida.

Con cada paso que daba se sentía un poco más fácil, sin embargo. No me atreví a mirar hacia atrás
hasta que había llegado al final de las escaleras. Camila aún estaba de pie en el mismo lugar y me
di un último saludo al que correspondí. En mi cabeza había sólo un pensamiento:

No había sido el momento para CC7 y LJ10 - pero quién iba a decir que el tiempo de Lauren y
Camila aún no estaba por venir.

FIN.

PDF POR BOSSOFMYMIND

447

También podría gustarte