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1. Introducción 3

2. Revisemos nuestra manera de pensar 5

3. Consideraciones fundamentales en el estudio de Dios 7

4. Herramientas de Defensa 13

5. Definiendo Conceptos 17

6. Errores Básicos 19

7. Como responder a la evolución 22

8. Otras Sectas y Corrientes doctrinales 26

9. Sectas y su apologética respectiva 36

10. Consejos para Enseñar Apologética 40

11. Bibliografía 42


Kerigma publicaciones
Impreso en Colombia
2021 Primera Edición

© Lic. Obed Sanabria J.

PEDAGOGÍA APOLOGÉTICA | Th. Obed Sanabria J.


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Introducción
Principios para enseñar a niños, adolescentes y jóvenes a defender la Fe

…adoren a Cristo como el Señor de su vida. Y, si alguien les pregunta acerca de la


esperanza cristiana que tienen, estén siempre preparados para dar una explicación.
Pero háganlo con humildad y respeto. Mantengan siempre limpia la conciencia. Entonces,
si la gente habla en contra de ustedes será avergonzada al ver la vida recta que llevan
porque pertenecen a Cristo.
1Pe 3:15, 16

La sociedad en la que vivimos en la actualidad se ha mostrado cada vez más hostil al


cristianismo. Es común hoy en día encontrar maestros que retan la creencia en Dios a sus
estudiantes aún desde la primaria.
Así que un aspecto fundamental en la formación y el discipulado de nuestros niños y
jóvenes es el de prepararlos, como dice el apóstol Pedro en su carta, para dar una
explicación o dar defensa de su fe. Así que, se hace imprescindible que nuestros estudiantes
bíblicos tengan la preparación adecuada.
Los críticos de hoy no permiten que se ignoren sus objeciones contra el cristianismo. Por
ello, el cristiano reflexivo debe tomarlos en serio. Los apologistas deben esforzarse por dar
buenas respuestas. Muchos jóvenes cristianos salen al mundo sin saber por qué creen lo
que creen. No tardan mucho tiempo en cuestionar una fe que nunca ofreció respuestas
bien razonadas. Si van a la universidad, serán instruidos en los llamados puntos de vista
“académicos” que son contrarios a la fe cristiana. Si se encuentran fuera de las aulas, sus
amigos no cristianos y los medios de comunicación hablarán de estas opiniones
“académicas” como hechos innegables.
El nacimiento de la Iglesia Cristiana, según lo describe el Nuevo testamento, está
relacionada con la enseñanza de los apóstoles. Cristo antes de partir encomienda a los
apóstoles la tarea de hacer discípulos, enseñando todo lo que habían visto y aprendido de
Él (Mr. 16:15; Mt. 28:19,20).

Cuando analizamos las cartas de los apóstoles vemos en ellas que su contenido no se trata
sencillamente de exposición sino también de corrección y refutación de conceptos
erróneos. Algunos de los conceptos y prácticas errados que se confrontan son, por
ejemplo: en cuanto a la resurrección (1 Cor. 15:12-17), la ley mosaica y la circuncisión (Gal.
4:8-11; 5:2-6) entre otros.

Es así como la iglesia se vio confrontada desde un principio con personas y grupos dentro
de ella que ponían en tela de juicio algunos elementos de la proclamación del evangelio.
Ya durante el período apostólico hubo confrontación con judaizantes, que insistían en el

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cumplimiento de la ley de Moisés por parte de todos los cristianos (Hch.15:15) y con los
docetistas que negaban la realidad de la encarnación de Cristo (1ª Jn. 4:1-3).

Tales problemas no desaparecieron al final de la edad apostólica, sino que las nuevas
generaciones de cristianos vieron surgir nuevos movimientos, tales como los gnósticos, los
marcionistas y los montanistas, entre otros. Siendo que tales grupos cuestionaban la
enseñanza de la iglesia, era menester confrontarlos y darles razones porque la iglesia
consideraba herejes a los que se apartaban de esta enseñanza. Cada herejía ha sido para
la iglesia un desafío y un estímulo para volver a la Palabra de Dios para indagar en cuanto
a la doctrina sana, la “ortodoxia”, o sea, la enseñanza recta.

Además, la iglesia tenía que confrontar los cuestionamientos de los estaban fuera de ella,
los judíos y gentiles, para quienes la fe cristiana resultaba una mezcolanza extraña, digna
de burla y desprecio. Frente a tales cuestionamientos, la teología cristiana procuraba
demostrar la coherencia y la lógica interna de la fe cristiana.

No era una tarea sin peligro, siendo que los intentos de demostrar la coherencia de la fe
cristiana, así como los argumentos usados contra la herejía, siempre podían ajustarse
demasiado a la lógica y el pensamiento corriente del mundo circundante. Los teólogos no
siempre lograban, ni logran todavía, mostrar que la coherencia de la de cristiana se da de
acuerdo a una lógica intrínseca a la revelación; y no siempre lograban, ni logran todavía,
librarse de los esquemas impuestos por la cultura y la filosofía vigente.

De ahí que una parte importante en el discipulado y en la tarea teológica sea justamente la
de evaluar hasta qué punto nuestra predicación y nuestra teología se conforman realmente
a la Palabra de Dios, y hasta qué punto incorporan más bien presuposiciones culturales e
intelectuales que rigen en el mundo a nuestro derredor.

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1. REVISEMOS NUESTRA MANERA DE


PENSAR
“No vivan ya según los criterios del tiempo presente;
al contrario, cambien su manera de pensar
para que así cambie su manera de vivir
y lleguen a conocer la voluntad de Dios...”
(Romanos 121:2 V.P.)

La vida de una persona es el resultado de sus propias convicciones. Todo individuo tiene
una ideología que orienta su vida, la cual afecta su manera de pensar y por ende su manera
de vivir y de ver el mundo que lo rodea

El apóstol Pablo señala la importancia de establecer una manera de pensar según los
criterios de Dios, desechando la influencia del mundo actual. De acuerdo al Nuevo
Testamento ser cristiano es un asunto de “arrepentimiento” o “conversión”. Jesús afirmó:
“Arrepentios, porque el reino de los cielos se ha acercado” (Mateo 4:17)

El término “arrepentimiento” ha sido muy maltratado en nuestro lenguaje religioso


dándole el significado de “hacer penitencia” o sentirse mal por el pecado, es decir
abandonar algún vicio nocivo. Pero el término no significa eso exclusivamente. La palabra
griega usada por la Escritura para arrepentimiento o conversión es “metanoia” la cual
significa “un cambio de mentalidad, cambio de mente, de entendimiento”.

Aunque se espera la transformación en la vida de la persona, el concepto implica un paso


previo, como lo menciona el apóstol Pablo “transformados por medio de la renovación de
vuestro entendimiento” (RV) Es decir que llegamos a ser cristianos cuando reconocemos
que nuestra concepción de la vida es inadecuada reconociendo que el único apoyo real,
válido y objetivo es el de Dios mismo. Ser cristiano significa, además, reconocer en la
revelación especial de Dios, la Biblia, una óptica que nos permite ver la realidad tal como
es, sin distorsiones o limitaciones humanas, brindándonos una nueva estructura para
nuestra vida.

Cuando Jesús habló del gran mandamiento que resume toda la Ley, dice: "Amarás al Señor
tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus
fuerzas". Marcos 12:30. Al comparar este texto con Dt.6:4,5 se observará que Jesús destaca
de manera especial “la mente”. Amar a Dios con todo lo que somos y tenemos incluye
explícitamente amar a Dios con la mente.

Ser un buen cristiano involucra amar a Dios con la mente, es pensar y hablar de él en una
forma que exprese nuestro amor y nuestra sumisión a él. Es sujetar no sólo nuestras
acciones sino también nuestras ideas, nuestras presuposiciones, nuestros conceptos, a él.
Es ser renovados en nuestro entendimiento; es acabar con los antiguos esquemas de

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pensamiento y aprender a pensar en Dios de forma digna, en una forma que corresponde
a su palabra. Esto implica un cambio en mis valores, en mis presuposiciones y prejuicios,
en mi “cosmovisión”, es decir en mi manera de ver el mundo y la vida en general.

Cuando se menciona la palabra teología, muchos la tienden a relacionarla con personas


ancianas de mucho conocimiento que se centran en sus razonamientos o en grandes tomos
extensos y aburridos. Este concepto lo expresa un graffiti que alguien escribió: “Teólogo
es aquel que entiende a Dios, pero que sólo Dios lo entiende a él”

Es tal vez por esto que la Iglesia en la actualidad no le ha prestado la importancia debida al
quehacer teológico. Hoy los temas que más interesan a la iglesia son la prosperidad y el
Iglecrecimiento, entre otros.

Todos los cristianos de una manera u otra hacemos teología, pues hablamos de Dios al
cantar, predicar y compartir con otros. Lo preocupante es cómo lo hacemos y que bases
tenemos. Es relevante recordar que la tarea de profundización en nuestro conocimiento
de Dios es un deber que nos corresponde a los cristianos. Un teólogo escribió:

“La Teología es para todos. Ciertamente toda persona necesita ser un teólogo. En realidad
toda persona es un teólogo – de una u otra clase.
Y aquí está el problema. No hay nada malo en ser un teólogo aficionado o un teólogo
profesional, pero si es malo ser un teólogo descuidado. Por lo tanto todos deben estudiar
teología.”1

Tengamos presente que el buen


quehacer teológico no es algo opcional,
sino que se hace necesario para seguir
fiel a la enseñanza apostólica

1
RYRIE, Charles C. Teología Básica. Unilit: Miami U.S.A., 1993 p. 7

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2. CONSIDERACIONES FUNDAMENTALES EN EL
ESTUDIO DE DIOS
Tener una visión clara de quien es Dios y de lo que significa ser cristiano, es
imprescindible en nuestra defensa de la fe. Aunque llama la atención estudiar las
sectas o grupos que distorsionan o niegan la fe cristiana, debemos en primer lugar
reafirmar nuestros pasos.

1. Dos presupuestos básicos para un estudio Objetivo de Dios


La ciencia moderna que se ha venido desarrollando a partir del siglo 17 es una ciencia
empírica. En ella se considera que la base de todo conocimiento es la observación. Lo
positivo de este acercamiento es que valora el conocimiento objetivo.

Un estudio objetivo significa que todo conocimiento debe ajustarse a la naturaleza del
objeto que estamos estudiando. El sujeto, es decir el investigador, no puede imponer sus
conceptos al objeto, sino que el objeto mismo determina la forma que se da a conocer.

Ejemplo:
Si uno quiere estudiar a un delfín esto requerirá de: un
barco, un equipo de buceo, etc.
Pero si uno quiere investigar a un águila necesitaría: Una
carpa, una cámara con un buen lente, un equipo de
alpinismo, etc.

Como vemos las herramientas de investigación para estos animales son diferentes. Sería
ridículo pretender estudiar a un águila con un equipo de buceo. Esto nos enseña que la
metodología debe adaptarse a la naturaleza del objeto y no viceversa.

Por otro lado, si alguien nos pide que hagamos un estudio de un “hipogifante”
encontraríamos una tarea sumamente difícil. Primero porque nunca hemos visto uno. Un
objeto sólo se puede conocer en la medida que se da a conocer. Sólo si tenemos un
ejemplar a la vista podemos hacer la investigación. Sólo en la medida que el objeto se nos
manifiesta, o se revela, podemos conocerlo.

El teísmo cristiano está basado en la revelación divina, no en intuiciones humanas. Los


cristianos no creen en el único Dios verdadero como resultado de su intuición o sentido
común. Sabemos de Dios sólo porque Él ha determinado revelarse a sí mismo a la
humanidad. El escritor de Hebreos afirma que Dios ha «hablado muchas veces y de muchas
maneras en otro tiempo a los padres por los profetas» (Hebreos 1.1) Ryrie escribe:

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“El conocimiento de Dios difiere de todo otro conocimiento en el que el hombre


sólo puede tener este conocimiento hasta el punto en que Dios lo revele. Si Dios
no hubiera iniciado la revelación de Sí mismo, no habría forma de que el hombre
lo conociera a Él. Por lo tanto, el ser humano tiene que ponerse bajo Dios, que es
el objeto de su conocimiento. En otros empeños eruditos, el ser humano a
menudo se coloca a sí mismo sobre el objeto de su investigación, pero no es así
en el estudio de Dios.”2

Todo lo anterior nos lleva a tener en cuenta dos presupuestos:

a. Si nuestro conocimiento de Dios ha de ser objetivo, Dios mismo debe determinar


cómo lo hemos de Conocer
b. Podemos conocer a Dios sólo en la medida que Él se nos da a conocer. La teología
siempre presupone una auto revelación de Dios. Sin tal revelación es imposible
conocer a Dios.

2. Conociendo a Dios
Así como la posibilidad de conocer a otra persona se da
en el hecho de que ambos somos personas conscientes.
De la misma manera, la posibilidad de una revelación de
Dios al hombre se da porque Dios hizo al hombre a su
Imagen y Semejanza. Dios nos hizo de tal manera que
pudiéramos captar su revelación y tener una
comunicación con Él. Lo que no pasaría si quisiéramos comunicarnos con una hormiguita,
ya que no hay una base de semejanza entre nosotros y las hormigas.

Para el conocimiento de Dios también se hace imprescindible la obra del espíritu Santo. El
Espíritu Santo, Dios mismo, es quien nos ilumina y nos da fe en Cristo.

El término “conocer”, lo usamos en un sentido doble. Por una parte, el conocimiento se


refiere, en nuestro lenguaje, al hecho común de saber algo o tener cierta información. En
la Biblia este término tiene un sentido más amplio y más personal. Este es el mismo
término que tanto en el griego como en el hebreo es usado, por ejemplo, para las
relaciones íntimas entre un hombre y una mujer (Gen. 4:1; Lc. 1:34).

2
RYRIE, Ob. Cit. p. 29

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El conocimiento de Dios que nos brinda el Espíritu Santo no excluye un elemento


intelectual, pero se refiere en primer lugar a la relación personal e íntima que el Espíritu
Santo establece entre el creyente y Dios. Así que el conocimiento de Dios presupone una
relación personal con Él. No se trata de un conocimiento meramente abstracto, académico
o neutral. Dicho conocimiento presupone entonces, la fe personal del teólogo.

Cuando Pablo habla de "la excelencia del conocimiento de Cristo Jesús" (Fil.3:8), está
hablando de este tipo de conocimiento especial, “relacional” y personal. Al decir que
teología es el estudio que nos ha de llevar a un conocimiento mayor de Dios, estamos
hablando de este tipo de conocimiento. Como dijo Aquino, la teología conduce a Dios. Ella
no tiene como propósito damos una cantidad de información en cuanto a Dios, sino
profundizar y ampliar nuestra relación personal, vivida con Él. Si nuestro estudio no nos
lleva a un amor más profundo, más sentido, de Él, hay algo que anda mal con nuestra
teología.

Calvino expresa que “Todo conocimiento correcto de Dios nace de la obediencia”3. Ese
por esto que el conocimiento de Dios es una relación comprometedora y transformadora.
A su vez Paul Enns señala:

“Quizás la más grande tragedia sería si delinear la doctrina ortodoxa sin haber
entrado en el compañerismo personal con él a quien las doctrinas testifican. Es
concebible que un lector ha aventurado este lejano en este volumen sin saber
la realidad de nueva vida personalmente en Cristo. Saber la doctrina
propiamente debe significar un cambio apropiado en la vida de uno.”4

Por otra parte, debemos tener en cuenta que la Biblia es la base para nuestro conocimiento
de Dios. Ya hemos afirmado anteriormente que sólo podemos conocer a Dios en la medida
que Él se da a conocer. Dios ha dejado su Palabra, la cual es el registro inspirado de su
revelación a través de los siglos, culminando en la encarnación de su Hijo Jesucristo. Así
que la Biblia ocupa un lugar central en el quehacer teológico como fuente, norma y criterio
de la teología.

Como conclusión cabe resaltar que: en nuestro conocimiento de Dios, la obra del Espíritu
Santo, la Biblia y la Fe del Teólogo en su relación con Él, juega un papel importante.

Para Conocer a Dios necesito la Obra del Espíritu


Santo, La Biblia y mi fe en Él. El escritor de
Hebreos nos dice “es necesario que el que se
acerca a Dios crea que le hay y que es
galardonador de los que le buscan” Hb. 11:6
2.1. Dios es un ser trascendente como personal.

3
Calvino, Institución De la Fe Cristiana. I.6.2/3
4
ENNS, Paul, The Moody Handbook of Theology, Chicago, Ill.: Moody Press. 1996.

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Él es trascendente (separado del universo como creador y sustentador del mismo) y, sin
embargo, inmanente, como presente y accesible a la humanidad en todas partes. Es decir,
que podemos conocer a Dios, el creador del universo, a través de su Palabra, la naturaleza
y la comunión con Él, porque Él mismo ha posibilitado dicho conocimiento.

2.2. El conocimiento de Dios presupone una auto-revelación de Él mismo a nosotros.

Conocemos a Dios en la medida que Él mismo se da a conocer. El teísmo cristiano está


basado en la revelación divina, no en intuiciones humanas. Los cristianos no creen en el
único Dios verdadero como resultado de su intuición o sentido común. Sabemos de Dios
sólo porque Él ha determinado revelarse a sí mismo a la humanidad. El escritor de Hebreos
afirma que Dios ha “hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los
padres por los profetas” (Hebreos 1.1)

2.3. La Biblia es la Palabra de Dios para el hombre y la fuente de autoridad doctrinal.

La Fe Cristiana tiene su Fundamento en la Biblia. Ella nos profundiza en nuestro


conocimiento de Dios pues parte de Él mismo.

Dios ha dejado su Palabra, la cual es el registro inspirado de su revelación a través de los


siglos, culminando en la encarnación de su Hijo Jesucristo. Así que la Biblia ocupa un lugar
central en el quehacer teológico como fuente, norma y criterio de la teología.

2.4 . Dios principio de todas las cosas

La Escritura nos muestra que Dios es el principio de todas las cosas. La Biblia, en su relato
de la creación inicia con la afirmación: “En el principio Dios creo...” Este relato parecer ser
un “anti-mito”, un contraste explícito con los relatos mitológicos corrientes en las culturas
y religiones vecinas de Israel. Tanto en Egipto como en Mesopotamia, los relatos
mitológicos que tratan del origen del mundo empiezan por explicar de dónde provienen
los mismos dioses. En ellos vemos que la cosmogonía (nacimiento del universo) es a la vez
teogonía (nacimiento de los dioses) en estos relatos. En la Biblia no encontramos
especulación alguna con respecto al origen de Dios.

La Biblia no ofrece ninguna demostración racional de la existencia de Dios; más bien señala
su incuestionable realidad. “Yo soy Jehová, y ninguno más hay; no hay Dios fuera de mí”
(IS. 45:5; cf Ro. 11:36). Su existencia y su auto revelación son las presunciones
fundamentales de la religión bíblica.5

Por otra parte, el concepto bíblico de Dios como creador incluye su continua e interrumpida
sustentación y renovación del mundo. Esto se expresa en la idea de “sostener” (Hb. 1:3,
pheron, lit. “llevar”) Esta verdad se ve implícita en participios hebreos usados en la obra

5
MILNE, Bruce. Conoceréis la Verdad, Manual de la Fe Cristiana. Logoi: Miami, EE.UU. p. 41

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creadora de Dios (Job 9:8,9; Salmo 104:2s; Isaías 42:5; 44:24; 45:18. Según la gramática
hebrea el participio activo hebreo indica a una persona o cosa concebida como en el
ejercicio continuo e interrumpido de una actividad. Así que esto nos muestra el Dios de
amor que creó en un principio el universo sigue hoy en día sustentándolo y cuidándolo.

2.5. Dios no es Contingente

Su existencia no depende de otra cosa o persona fuera de sí mismo. Dios no es contingente


como son las cosas creadas.

2.6. Dios es Eterno

Cuando hablamos de la eternidad de Dios nos referimos al hecho de que no hay límites de
tiempo en Dios. Él trasciende el orden temporal. En él no hay antes ni después, sino sólo
un tiempo presente.

2.7. Dios es Inmutable

Cuando hablamos de la inmutabilidad de Dios, queremos decir que Dios no está sujeto al
ciclo continuo de nacimiento y decadencia que caracteriza al mundo creacional.

La creación es contingente, es creado por Dios, no llegó a existir por sí solo. Dios no es
contingente, su existencia no se explica por referencia a otro ser. La creación es un
universo, de tiempo y espacio, pero este tiempo y espacio son creados por Dios, no forman
parte de Dios mismo. No hay tiempo y espacio en Dios. De la misma manera, y justamente
por ser un universo de tiempo y espacio, este mundo se caracteriza por ser historia, por un
devenir, un llegar a ser y un pasar. Este cambio constante, este flujo, no es parte de la
realidad de Dios.

2.8. Dios es Uno y Trino a la vez

La Biblia, tanto en el AT como en NT afirma la unidad de Dios


“Oye, Israel: Jehová, nuestro Dios, Jehová uno es” (esto es no hay otro como Él)
(Deuteronomio 6:4)

Pero a su vez la Escritura nos muestra la pluralidad en Dios. En el relato de la creación que
encontramos en Génesis 1 Dios dice: “Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a
nuestra semejanza" (vs. 26) y luego el texto dice: "Y creó Dios al hombre a su imagen, a
imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó" (vs. 27)

Aquí hay dos elementos sorpresivos: En primer lugar, el plural que se usa en el vs. 26
cuando Dios expresa su intención de crear al hombre ("hagamos... nuestra") y en segundo
lugar el hecho del hombre ser creado "varón y hembra"- el cambio de singular a plural ("lo
creó... los creó"). El Antiguo Testamento muestra que el término crear se usa
exclusivamente con respecto a Dios. Según la Biblia es sólo Dios quien crea. Luego no

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podemos argumentar que las palabras de Dios aquí incluyen a los ángeles en el trabajo de
la creación. Lo mismo se confirma cuando reconocemos que la Biblia nunca dice que el
hombre fue creado a imagen de ángeles. "Nuestra imagen" se refiere siempre a la imagen
de Dios. (Gn. 5:1 9:6).

Con base en el texto tenemos que afirmar que existe, de alguna manera, una pluralidad en
Dios y que esta pluralidad se refleja en la pluralidad del ser humano como varón y hembra.
Es como imagen de Dios que el hombre se presenta, no como individuo, sino como persona
- en relación como varón y hembra. Dios es un "nosotros" y ahora el hombre creado a su
imagen es un “nosotros”. Dios es persona-en relación, y ahora el hombre es persona-en
relación.

Claro que esta no es la única indicación en el AT de una pluralidad en Dios. la misma forma
de hablar de Gn. 1:26 lo encontramos de nuevo en 3:22 (“uno de nosotros) en 11:7
("descendamos y confundamos”) y otra vez en Is. 6:8 (“...quién irá por nosotros?”).

Reconocemos que el término “Trinidad” no es usado en el NT y nos sirve más bien como
una abreviatura para resumir toda la enseñanza del NT sobre la relación entre Padre, Hijo
y Espíritu Santo. Pero es preciso observar que el tema de esta relación es central en el N.T.
En el A.T. la preocupación central es afirmar la unidad de Dios frente a la pluralidad de
dioses entre los vecinos de Israel (Dt. 6:4). Esta preocupación no desaparece en el NT, pero
allí se incluye a la persona de Cristo (y del Espíritu Santo) en esta unidad.

El Evangelio de Juan tiene esa temática central de cómo decir a la vez que Cristo "era con
Dios" y que “era Dios” (Jn.1:1) y muestra cuántas veces Jesús enfatiza esta unidad. Jesús
apenas hace las obras del Padre: “No puede el Hijo hacer nada por si mismo, sino lo que ve
hacer al Padre; porque todo lo que el Padre hace, también lo hace el Hijo igualmente"
(Jn.5:19). Y de esta manera las obras que hace el Hijo llegan a ser el indicio más importante
para captar su verdadera identidad: 'Creedme que yo soy en el Padre y el Padre en mí de
otra manera creedme par las mismas abras" (Jn.14: 1) Jesús afirma que El es uno con el
Padre (Jn.10: 30).

Y a la vez observamos en este evangelio que el Espíritu Santo no tiene un ministerio aparte
de Cristo, sino que su ministerio es justamente recordarles a los discípulos todo lo que Jesús
ha dicho (Jn.14:26). El Espíritu glorifica a Cristo: “El me glorificará”, porque tomará de lo
mío y os lo hará saber” (Jn.16:14). El Espíritu que ha de morar "con" y "en" los discípulos
(14:17) es la manera como el Padre y el Hijo hacen morada en el creyente (14:23). Allí
observamos la unidad que existe entre el Espíritu, el Padre y el Hijo. Justamente por la
insistencia en la unidad, el lenguaje del NT puede a veces resultar confuso. Pablo en Ro
8:9-11 identifica el "Espíritu de Dios" Con el "Espíritu de Cristo". Dice primero que el Espíritu
de Dios “mora en vosotros”. Luego dice que “Cristo está en vosotros” y termina diciendo
otra vez que es el Espíritu “que mora en Vosotros”.

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3. Herramientas de Defensa
Amados, por el gran deseo que tenía de escribiros
acerca de nuestra común salvación,
me ha sido necesario escribiros para exhortaros
a que contendáis ardientemente por la fe
que ha sido una vez dada a los santos
Judas 3

Como vimos al principio, la iglesia desde un comienzo se vio enfrentada a conceptos


erróneos que buscaron distorsionar el mensaje de la Fe. Por esta razón gran parte de la
labor de la iglesia estuvo enfocada en reafirmar la fe y confrontar a los grupos heréticos.

En cierto sentido podemos decir que la iglesia empezó a hacer teología sin darse cuenta.
Ella no era, en un principio, resultado de una decisión consciente, sino que se dio por las
mismas circunstancias dentro de las cuales desempeñó su llamado a proclamar el
Evangelio. Eran necesidades concretas que impulsaban a la iglesia en su tarea teológica.

En este pasaje Judas pone de relieve la relación importante entre la doctrina correcta y la
fe verdadera. Enseña que no debe comprometerse la verdad de la Biblia, ya que ésta nos
da datos verídicos acerca de Jesús y la salvación. La Biblia es inspirada por Dios y nunca se
le debe tergiversar ni cambiar. Cuando se le tergiversa, llegamos a confundir lo correcto
con lo erróneo y perdemos la visión del único camino que nos conduce a la vida eterna.

Por tal razón la iglesia necesita estar capacitada, preparada y bien cimentada para ofrecer
una respuesta sólida y contundente a los conceptos que promulgan los grupos herejes de
hoy en día. Esta labor se conoce como Apologética.

La apologética es un discurso argumentativo sistemático den defensa de algo. Como por


ejemplo una doctrina.6 Es la justificación de los propios argumentos y convicciones. De
forma general se entiende como el hecho de responder a aquél que pide una explicación.
Es una opción por el diálogo.

Este término aparece por primera vez en la historia cuando el cristianismo comienza a ser
conocido y criticado. Un grupo de fieles comienza a explicar el sentido de su fe y a
responder a los ataques y críticas que reciben desde otras confesiones. A estos autores se
les llama apologetas y constituyen la primera generación de cristianos que recurren a la
Escritura como fundamento de la defensa de sus creencias. Tertuliano, autor de
Apologético; san Justino y su Diálogo con Trifón; Taciano con su Discurso a los griegos y así

6
CARLSON, Ron, DECKER Ed. Hechos breves acerca de Falsas enseñanzas. Bogotá: Compartir. P. 1

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también algunos autores anónimos (Carta a Diogneto), son algunos de los principales
apologetas de la historia.7

Se ha tenido el concepto que el cristianismo es sólo un acto de Fe imperceptible, pero la


escritura nos muestra que nuestra relación con Dios involucra la mente o la razón. Cuando
Jesús habló del gran mandamiento que resume toda la Ley, dice: “Amarás al Señor tu Dios
con todo tu corazón y con toda tu alma, y con toda tu mente y con todas tus fuerzas”.
Marcos 12:30. Al comparar este texto con Dt.6:4,5 se observará que Jesús destaca de
manera especial “la mente”. Amar a Dios con todo lo que somos y tenemos incluye
explícitamente amar a Dios con la mente.

Es en este aspecto, la apologética busca responder a las herejías no simplemente de una


manera espiritual y subjetiva sino también de una manera lógica y coordinada. Además
podemos usar recursos de análisis critico como lo muestra el siguiente relato:

Un escéptico en materia de religión le dijo cierto día a una señora: -Antes creía
en Dios, pero ahora desde que emprendí el estudio de la filosofía y las matemáticas,
estoy convencido de que Dios es un vocablo hueco. -
-Bien, - dijo la señora, -es cierto que no he estudiado esas materias, pero puesto
que usted si lo ha hecho, dígame: ¿De dónde proviene este huevo? -
-De una gallina, por supuesto- respondió el joven.
- ¿Y de dónde vino la gallina? -
-De un huevo naturalmente-
Luego la Señora le preguntó: - ¿Me podría decir
que existió primero, la gallina o el huevo? -
-La gallina, naturalmente, - respondió el joven.
-Luego entonces debe haber habido una gallina sin
que hubiera tenido que nacer de un huevo-
- ¡Oh, no,! Debería haber dicho que el huevo
existió primero-
-Luego usted dice que existió un huevo sin que fuera puesto por una gallina-
El joven vaciló –Este... bueno... me parece que la gallina nació primero-
-Bien- dijo la señora, - ¿Quién hizo la primera gallina de la cual proceden todas las
demás?
- ¿Qué me quiere decir con todo esto? - declaró el joven.
-Simplemente que aquel que creó el primer huevo o gallina es el que creó el
mundo. Sin Dios no se puede explicar ni aún la existencia de un huevo o gallina, no
obstante, lo cual usted quiere que yo crea que puede explicar la existencia de todo
el mundo sin Él-

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También podemos usar recursos científicos que afirma la fe como lo presenta el siguiente
fragmento:

El Señor A. J. Pace dibujante de la revista “Sunday School Times” nos cuenta con
respecto a una entrevista con el extinto Wilsan J. Bentley, experto en
microfotografía (fotografía que se obtiene de la imagen microscópica). Durante
más de 30 años este hombre había tomado fotografías de cristales de nieve, y
después de haber fotografiado a miles de estas formas cristalinas, había observado
tres hechos notables a saber: primero: que jamás había encontrado dos iguales;
segundo que cada uno de ellos tiene hermosa forma, y tercero que invariablemente
tiene seis puntas. Cuando se le preguntó a que atribuía esta simetría contestó:
“Naturalmente nadie lo sabe, sino Dios. Pero he aquí mi teoría. Como Ud.
sabrá, los cristales de nieve se forman del vapor de agua a temperaturas por debajo
del grado de congelación, y el agua se compone de tres moléculas, dos de
hidrógeno y una de oxígeno. Ahora bien, cada una de las moléculas está cargada
de electricidad positiva y negativa, la tendencia de las cuales es polarizarse en lados
opuestos. Como Ud. ve el número tres figuras desde el principio en la cuestión”.
“¿Cómo se pueden explicar esos curiosos puntos y lazos, esas curvas elegantes,
esos bordes delicadamente biselados, todos ellos agrupados alrededor del centro
en perfecta simetría?” -preguntó el señor Pace. Se encogió de hombros y
respondió: “Sólo el Artista que los diseñó sabe cómo se hacen”.
Su declaración de que “el número tres figuras desde el principio en la cuestión”
me dejó pensando. ¿No será acaso que el Dios trino y uno que ha diseñado toda la
hermosura de la creación ha puesto el sello de la trinidad en estas frágiles estrellas
de cristales de nieve, de la misma manera que el artista estampa su firma en una
obra maestra? Al examinar uno de estos cristales de nieve, uno observa al instante
que el principio prevalente que subraya la estructura del copo de nieve es el del
hexágono o polígono de seis lados. Ahora bien, el hexágono es una figura única en
la geometría en el sentido de que el lado del hexágono regular inscripto en el círculo
es igual al radio de dicho círculo. En otras palabras, tenemos seis triángulos
equiláteros perfectos, situados alrededor de un núcleo, y todos los ángulos son de
sesenta grados. Cada triángulo constituye la tercera parte de toda el área a cada
lado de la línea recta, que podríamos denominar diámetro. ¡Qué símbolo más
apropiado del Dios trino, y uno es el triángulo! Se observa aquí unidad, un
triángulo, mas son tres líneas, cada una de ellas esencial para la integridad del todo.
La curiosidad me impulsó a examinar las referencias en la Biblia que contenía el
vocablo “nieve” y descubrí con alegría ese significado que podríamos llamar triple
inherente aquí también. Por ejemplo, existen 21 (número divisible por tres)
referencias en las que figura el sustantivo “nieve” en el Antiguo Testamento y 3 en
el Nuevo Testamento o sea un total de 24. Luego hallé 3 referencias que se refieren
a la lepra, asignándosele la blancura de la nieve. Tres veces se compara la limpieza
del pecado con la nieve. Hallé tres más que nos hablaban de vestiduras “blancas
como la nieve”. Tres veces el Hijo de Dios es comparado en su apariencia a la nieve,
pero ¡cuál no sería mi asombra al descubrir que el vocablo hebreo para designar a

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la nieve está compuesto enteramente de tres! Es un hecho, aunque no


generalmente sabido que, al no poseer numerales, tanto los griegos como los
hebreos empleaban las letras del alfabeto en lugar de números. Una mirada ligera
de un hebreo al vocablo sheleg que significa “nieve” sería todo lo necesario para
ver que significa 333 lo mismo que nieve. La consonante hebrea que representa al
sonido “SH” equivale a 300, la segunda consonante, “L” equivale a 30, y la tercera,
“G” a 3. Súmelos y tendrá 333, o sea tres dígitos de tres. Curioso, ¿no es verdad?
(Recuérdese que el hebreo original carecía de vocales.) Mas, ¿por qué no podemos
esperar exactitud matemática en un libro que tiene inspiración plenaria y tan
maravilloso como el mundo que ha hecho Dios?
De Dios se dice lo siguiente: “El hace grandes cosas, que nosotros no
entendemos. Porque a la nieve dice: Desciende a la tierra” Job 37:5,6. He tratado
durante dos días de dibujar, según el modelo divino, seis cristales de nieve con
lapicera y tinta, y estoy terriblemente fatigado. ¡Con qué facilidad que él lo hace!
“Le dice a la nieve” Habla y es hecho. Trátese de imaginar cuántos millones de
billones de cristales de nieve pueden caer en una hectárea de terreno en una hora,
e imagínese si puede la sorprendente verdad de que cada uno de esos cristales
tiene individualidad o personalidad propia, y un diseño que no se repite ni repetirá
en tormenta alguna. “Más maravillosa es la ciencia que mi capacidad; alta es, no
puedo comprenderla.” Salmo 139:6. ¿Cómo puede una persona dada a la reflexión,
en presencia de tales diseños, multiplicado por innumerables variaciones, dudar de
la existencia y obra de un Diseñador, cuya capacidad está medida sólo por el
infinito? Un Dios que puede hacer esto, puede hacerlo todo, aún crear y modelar
nuestras vidas, y convertirlas en creaciones bellas y simétricas.

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4. DEFINIENDO CONCEPTOS
Para el desarrollo del presente curso es necesario tener en
claro algunos conceptos. Algunas palabras se explicarán en las
notas de pie de página con el fin de una mejor comprensión de
las sectas, sin embargo, queremos aclarar de antemano las más
relevantes. Entre ellas tenemos:

4.1. Secta

En este manual catalogamos con el término “secta” a los grupos religiosos apartados de la
sana doctrina cristiana. El significado usual de “secta” y “sectario” implica desviación, y la
pertenencia a una secta se percibe como un signo de inadaptación, posiblemente motivado
por una necesidad psicológica o emocional.

4.2. Doctrina

Es el sistema de creencias que forma parte de cada religión. Aunque la palabra a veces se
utiliza para nombrar y caracterizar cada sistema como un todo (por ejemplo, la doctrina
cristiana), se suele utilizar para hacer hincapié en aspectos particulares de la creencia (así
la doctrina judeocristiana de la creación o la doctrina budista de la reencarnación) Las
creencias particulares constituyen un conjunto más o menos coherente, y es en el contexto
del todo donde cada doctrina habría de ser entendida y evaluada. La palabra latina doctrina
significa 'enseñanza' y las creencias religiosas son a menudo formuladas por primera vez
de una forma concreta en el proceso de instruir a iniciados.

Aunque en algunas religiones las doctrinas no han sido formuladas con precisión, en otras
muchas han sido objeto de fuertes controversias, hasta el punto de llegar a dividir la
comunidad de creyentes; la mayoría de las religiones del mundo presentan en realidad
divisiones doctrinales. Cuando una autoridad religiosa propone una expresión de una
doctrina que excluye a otras posibles, se conoce como dogma.

4.3. Mito – Mitología


(Del griego mythos, que significa palabra, relato, designio, mensaje.) El Mito Es una
narración que describe y retrata, en lenguaje simbólico, el origen de los elementos y
supuestos básicos de una civilización; difieren de los cuentos de hadas y de los tradicionales
en el tiempo narrativo, ya que se desarrollan en un tiempo anterior al nacimiento del
mundo convencional. Por otro lado, como los mitos hablan de dioses y procesos
sobrenaturales, se les relaciona con la religión, y dado que su naturaleza es la de explicar
la cosmología, son elementos fundamentales para comprender la vida individual y cultural
de un pueblo.

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La mitología, por su parte es el conjunto de mitos de un pueblo o civilización. Generalmente


se utiliza el término para referirse a las creencias de la civilización grecorromana, pero
también se utiliza para referirse al conjunto literario de las creencias relacionadas con las
diversas divinidades y seres sobrenaturales.

4.4. Fetichismo

(Del portugués feitco y este del latín factitius.) Es la Veneración de objetos naturales o
artificiales a los que se les atribuyen poderes sobrenaturales. Los fetiches pueden ser
árboles, estatuas o utensilios. El nombre lo utilizaron por primera vez los portugueses en
África Occidental.

4.5. Sincretismo

El sincretismo en su esencia procura conciliar distintas doctrinas. En el ambiente religioso


se refiere a la presencia de elementos o creencias diferentes o de diverso origen dentro de
una misma religión o secta.

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5.Errores Básicos
En esta lección miraremos algunos de los errores básicos en los que
tiene a caer los grupos heréticos.

5.1. El Ateismo.

El ateísmo es la negación de la existencia de Dios. Según muchos estudiosos, la mayoría de


los ateos son casi siempre agnósticos8 o partidarios de la secularización de la sociedad. En
épocas recientes, el marxismo leninismo9, basado en un llamado “materialismo dialéctico”,
ha promovido un “ateísmo científico” que ha ido perdiendo fuerza y ha sido desechado en
la práctica por la mayoría de los partidarios de esa ideología.

Se hace generalmente una distinción entre “ateos dogmáticos”, “escépticos” y “ateos


prácticos”. Ateo dogmático es aquel que ha adoptado la creencia que Dios no existe como
manera de pensar y de ver el mundo, estos afirman aferrase a la creencia intelectual que
Dios no existe. El ateo escéptico es el que le cuesta creer en las verdades de Dios y de la
Biblia, no cree en los milagros y todo lo mira desde su óptica materialista. Y el Ateo práctico
que es el que vive como si Dios no existiera.

La Escritura nos muestra que hay hombres que dicen en su corazón “no hay Dios”(Sal. 14:1),
siendo necios al no querer ver las evidencias de su existencia aún en ellos mismos. Más
que hacer una profesión de ateísmo, el necio niega o pone en duda que Dios intervenga
activamente en los asuntos humanos. La consecuencia inmediata de esta negación práctica
de Dios es una conducta perversa. Según esto podemos afirmar que el ateismo se basa en
la necedad del hombre frente al reconocimiento de Dios. El Apóstol Pablo expresa:

La ira de Dios se revela desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los
hombres que detienen con injusticia la verdad, 19porque lo que de Dios se conoce
les es manifiesto, pues Dios se lo manifestó: 20Lo invisible de él, su eterno poder y
su deidad, se hace claramente visible desde la creación del mundo y se puede
discernir por medio de las cosas hechas. Por lo tanto, no tienen excusa (Romanos
1:18-20)

8
Agnosticismo, doctrina que afirma que la existencia de Dios y otros seres espirituales no es ni segura ni
imposible. Esta doctrina no niega la existencia de Dios, pero si niega la posibilidad de conocerlo.
9
El leninismo es un movimiento fundado por Lenin, un revolucionario y teórico político ruso quien dio origen
a la Unión Soviética. Este movimiento supuso una interpretación de la ideología marxista, a la que aportó un
concepto básico: la importancia de un partido revolucionario que asuma la dirección de la lucha. La fusión de
ideologías marxistas y leninistas da como resultado el marxismo-leninismo.

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5.2. Panteísmo

Esta es una creencia filosófica religiosa y se trata generalmente de una teoría que identifica
a Dios con el mundo o universo. Esta palabra está formada de dos vocablos griegos que
significan “todo es Dios”.

Los panteístas creen que la totalidad del universo es el único Dios. Los árboles, las piedras,
la tierra, el agua, los pájaros, los reptiles y otros animales, y el hombre, todos son, según el
panteísmo, o parte de Dios. Para ellos, Dios vive y se expresa a sí mismo por medio de estas
substancias y fuerzas, de la misma manera que el alma se expresa por medio del cuerpo.

Existen formas diversas de panteísmo, incluyendo un panteísmo claramente ateísta.


Algunos identifican a Dios como única realidad verdadera y al mundo como realidad
subordinada, una manifestación o “proceso” de Dios. Otros entienden el mundo como la
única realidad y a Dios como una especie de alma de este mundo.

El panteísmo confunde a Dios con la naturaleza. Es decir,


confunde al Creador de todo con todo lo creado. El poema
no es el poeta, así como el arte no es el artista, o así como
la música no es el músico, de la misma manera la creación
no es Dios, ella sólo es una manifestación de la obra de
Dios.

5.3. Deísmo

El deísmo admite que hay un Dios personal, que creó al mundo; pero insiste que después
de la creación lo dejó para que se gobernara por las leyes naturales. En otras palabras, le
dio cuerda al mundo, como si fuera un reloj y luego lo dejó que marchara sin intervención
de su parte. De ahí que no sea posible la revelación de Dios o milagro alguno.

En contraste a la afirmación deísta, el concepto bíblico de Dios como creador incluye su


continua e interrumpida sustentación y renovación del mundo. Esto se expresa en la idea
de “sostener” (Hb. 1:3, pheron, lit. “llevar”) Esta verdad se ve implícita en participios
hebreos usados en la obra creadora de Dios (Job 9:8,9; Salmo 104:2s; Isaías 42:5; 44:24;
45:18. Según la gramática hebrea el participio activo hebreo indica a una persona o cosa
concebida como en el ejercicio continuo e interrumpido de una actividad. Así que esto nos
muestra el Dios de amor que creó en un principio el universo sigue hoy en día
sustentándolo y cuidándolo.

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5.4. Dualismo

Es la creencia en dos poderes divinos opuestos. El dualismo es una filosofía occidental,


que afirma la teoría según la cual el universo sólo se explica como un todo formado por dos
elementos distintos y entre sí irreductibles. El dualismo también posee un aspecto ético
que descansa en el reconocimiento de los principios independientes y opuestos del bien y
el mal. Sus ejemplos más claros se hallan en el zoroastrismo y en el maniqueísmo.

En contraste a lo anterior la Escritura resalta la soberanía de Dios por encima de cualquier


poder o espíritu, pues todo fue creado por medio de Él y para Él. Colosenses 1:15-17
señala:

“Cristo es la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación,


porque en él fueron creadas todas las cosas, las que hay en los cielos y las que
hay en la tierra, visibles e invisibles; sean tronos, sean dominios, sean
principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y para él. Y él
es antes que todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten.”

Recuerda las palabras


del apóstol Pablo el cual
nos enseña ¡Que si Dios
está a nuestro favor,
nadie podrá estar
contra nosotros¡, pues
nada ni nadie podrá
separarnos del amor que
Dios nos ha mostrado en
Cristo Jesús nuestro
Señor!

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6. Cómo responder a La Evolución


Al hablar de “evolución” los biólogos quieren decir que, con el paso del tiempo, el
cambio en las frecuencias génicas de las poblaciones produce nuevas especies a lo
largo de generaciones. Charles Darwin denominó este fenómeno descendencia con
modificación, un proceso lento que suele obrar a lo largo de cientos, miles y hasta
millones de años.

La palabra evolución tiene cuatro significados que suelen confundirse y deberían


mantenerse separados y distintos:
1) El proceso general del cambio en poblaciones y especies,
2) El “progreso” desde formas de vida inferiores a otras superiores, un concepto
que ha quedado desacreditado;
3) La historia concreta del “arbusto ramificado” de la vida y el origen de grupos
diversos o filogenias, interpretado a partir del registro fósil y los estudios
bioquímicos, y
4) El mecanismo, o “motor”, de la evolución, para el que Darwin y Wallace
propusieron la “selección natural”.

Apologética Cristiana

Esta teoría basa sus afirmaciones en la especulación y el tiempo, para el cual


necesitan millones de años a fin de justificar lo que no pueden demostrar. Por otro
lado, deben reconocer que tuvo que haber algo no creado que dio origen a lo
creado, y es así que recurren al deísmo (Dios creó ese primer elemento, pero
después desapareció o lo dejó todo a la evolución natural). Por otra parte, los
famosos “eslabones perdidos” o “agujeros” son cosas absurdas a las que recurren
para explicar sus procesos. En otras palabras, hay que tener más fe para creer en la
evolución que para creer en Dios mismo.

La evolución además nos presenta algunos problemas inconclusos. En primer lugar


¿De dónde surgen los valores morales y anti-morales en ese proceso de evolución?
Si la evolución enseña que la gente no es más que animales evolucionados, entonces
¿por qué, no vivir como tales? Por otro lado, si es cierto que en la evolución se da
la “supervivencia de los más aptos”, ¿esto realmente justifica la violencia en la
humanidad? ¿No son los embarazos fuera del vínculo matrimonial de las jóvenes y

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las enfermedades transmitidas sexualmente, incluyendo el SIDA, los resultados


lógicos del hombre que vive como un animal, sin ninguna base moral?

En segundo lugar, la evolución inicia y termina con una premisa totalmente ilógica:
¡La nada, más el azar, es igual a todo! La pregunta que se debe responder es: ¿Qué
creó la materia y la energía necesarios para crear el universo? El evolucionista no
tiene ninguna evidencia científica, así que dice: “Usted debe asumir por fe que de
alguna forma esto sucedió”.

Uno de los problemas de los evolucionistas es que hacer con la “biogénesis” el cual
es el axioma básico de la biología. Biogénesis quiere decir que la vida tan sólo surge
de la vida. Cualquier científico tiene que afirmar que no se puede generar vida a
partir de la materia inorgánica. Así que la evolución a partir de la materia inorgánica
es sencillamente un pensamiento descabellado y NECIO.

En tercer lugar, no se han encontrado registros fósiles de las evoluciones graduales.


Charles Darwin creía que, si la evolución fuese verdadera, él encontraría la evidencia
en el registro de fósiles. Algo que nunca pasó. Por esta razón las premisas se
reducen a “dibujitos” que pretenden demostrar lo que no han encontrado
verídicamente. La revista Newsweek de marzo 29, 1982, llevaba como título en la
portada: “Misterios de la Evolución” Contenía la siguiente afirmación:

“...una vergüenza profesional para paleontólogos: Su inhabilidad de


encontrar los fósiles de formas transicionales entre las especies, los llamados
“eslabones perdidos”.
Darwin y la mayoría de aquellos que le siguieron, creían que el trabajo de la
evolución era lento, gradual y continuo y que un linaje completo de ancestros,
cambiando imperceptiblemente de uno a otro, podrían en teoría ser
reconstruidos para todos los animales vivos. En la práctica, Darwin aceptaba,
que el registro de los fósiles era demasiado defectuoso para demostrar aquellos
cambios graduales, aunque él estaba confiado en que podrían eventualmente
surgir. Sin embargo, un siglo de excavaciones desde entonces tan sólo ha hecho
que brillen aún más por su ausencia...”

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El Hinduismo, Budismo y El Islamismo

EL HINDUÍSMO

Es la mezcla de creencias de los habitantes de


India desde tiempos remotos. Entre ellas están
la trasmigración, la ubicación de las personas en
castas sociales durante toda su vida (según su
conducta en vidas anteriores); la meta definitiva
de la liberación de una cadena de nacimientos y
del mundo fenoménico; reverencia a la clase sacerdotal o “brahmin”; culto y
veneración de la vaca.

“Sanata Dharma", como la llaman, se considera la religión eterna de los hindúes,


basada en principios eternos derivados de la doctrina de los escritos sagrados
conocidos como Vedas o “sabiduría divina”. Entre los Vedas están los Brahmanas y
las Upanishads, así como una serie de epopeyas. Pero no existe un sistema basado
en credos ni en jerarquías eclesiásticas aceptadas por todos.

El culto consiste en una amalgama de ceremonias y ritos dirigidos por los brahmanes
y celebrados en el contexto del sistema de castas. Es a partir de la confrontación
con el BUDISMO, surgido en su territorio, que aparecen líderes importantes y
compiladores de los que se poseen datos apreciables, como los casos de Nabhaji,
Kumarila, Sankara, Ramanuja, Madhva, Ramananda y otros.

Los hindúes rinden culto a una serie de divinidades; su religión es politeísta, pero la
mayoría de las deidades mencionadas en los himnos védicos no son objeto de
veneración frecuente en la actualidad. Brahma o “lo Absoluto” es el espíritu
universal supremo. No recibe un culto directo como otros dioses, pero es objeto de
meditación de sabios y videntes. Tienen una tríada divina o trimurti integrada por
Brahma, espíritu supremo y creador; Vishnú, el conservador; y Siva el destructor.
Muchas deidades son simplemente locales y se les atribuyen poderes milagrosos.

Existe también un hinduismo filosófico cuya metafísica es compleja. Además de


varios sistemas filosóficos, el hinduismo consiste de varias sectas que casi siempre
se toleran. Prevalece cierto grado de SINCRETISMO, pero no existe un dios adorado

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por todos. En el ámbito popular, la Sociedad Teosófica y sus líderes se encargaron


de difundir ideas y prácticas del hinduismo en Occidente.10

EL BUDISMO

Budismo, es una religión fundada en el noreste de la India a partir de las enseñanzas


y doctrinas impartidas durante los siglos VI y V a.C. por Siddhartha Gautama, más
conocido como Buda o El Iluminado.

Pese a que en sus orígenes surgió como un movimiento monástico dentro de la


tradición brahmánica dominante en aquel tiempo, el budismo se desarrolló pronto
en otro sentido y adquirió características propias. Buda no sólo rechazaba algunos
aspectos muy importantes de la filosofía del hinduismo, sino que también desafió la
autoridad de sus líderes, no aceptó la validez de las escrituras védicas y se manifestó
en contra del culto sacrificial basado en dichos textos. Además, Buda abrió su
movimiento a personas de todas las castas, rechazando abiertamente la idea de que
los asuntos espirituales de las personas estuvieran determinados por la clase social
en la que nacen

Algunos prefieren referirse al budismo como la condición de discípulo del buda, “el
despierto” o “iluminado”. Los seguidores de buda llegaron a convertir sus creencias
en una de las más grandes religiones en la historia. Se basa en las cuatro visiones de
Buda: un hombre enfermo, un anciano, un muerto y un asceta itinerante.

Convencido de la inevitabilidad del sufrimiento y de la muerte, Buda afirmó haber


alcanzado la iluminación que había buscado para ser liberado de su inevitable
reencarnación. La iluminación ocurrió bajo un árbol en Bodh Gaya en 528 a.C., tras
la cual se convirtió en el buda, “el despierto” o “iluminado”.

El budismo proclama cuatro nobles verdades: toda la existencia implica sufrimiento


o frustración; el sufrimiento es hijo del deseo; el sufrimiento puede ser destruido o
aniquilado si se elimina el control ejercido por los deseos y un “óctuple sendero”
necesario para llegar a la meta. Este a su vez se divide en las siguientes categorías:
conducta moral (conversación recta, acciones rectas, ganarse la vida rectamente);
disciplina mental (esfuerzo recto, atención recta a la realidad, concentración recta)
y sabiduría intuitiva (enfoques rectos de la realidad e intenciones rectas).

10
RAMOS, Marcos Antonio, Nuevo Diccionario de Religiones Denominaciones y Sectas, (Nashville, TN /
Miami, FL: Editorial Caribe Inc., Thomas Nelson, Inc.) 2000, c1998.

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Buda se comunicó en forma bastante diferente a la utilizada en las escrituras


hindúes o Upanisads. El canon de las escrituras clásicas del budismo, o Tripitaka, se
escribió en pali, un dialecto del sánscrito. Su redacción escrita se llevó a cabo siglos
después de la muerte de Buda.

Los seguidores de Buda no lograron extenderse tan rápidamente al principio, como


otras religiones, pero el budismo empezó a ejercer cierta influencia desde su
fundación. Después de un período en el que se limitó al norte de la India, su
extensión a otras regiones se inició en el siglo III a.C., cuando el rey indio Asoka se
inclinó al budismo y trató de promoverlo en otros países. Hoy cuenta con millones
de adherentes en China, Japón, Corea, Birmania, Tailandia, Indochina y otros países.

En el budismo existe una rama conservadora llamada Hinayana o Theravada o “el


camino de los ancianos”, la cual es fuerte en Ceilán y es conocida también como
“budismo del sur”. El MAHAYANA o “grande vehículo”, que solo ofrece salvación, es
fuerte en Tíbet, Japón y China, y se conoce como “budismo del norte”. También
debe mencionarse el Tantrayana del Tíbet.

Apologética Cristiana (para el Hinduismo y el Budismo)

La premisa básica del hinduismo es el monismo11 y el panteísmo, donde “todo es


uno”, “todo es Dios”, y “todo es impersonal”. Estos conceptos no aportan nada al
valor y significado humano, pues si las estrellas son el dios impersonal, las nubes son
el dios impersonal, el polvo es el dios impersonal cada persona es el dios impersonal,
cuando alguien se muere ¿a qué se vuelve igual?, pues el polvo mismo es
supuestamente “dios”.

Históricamente este ha sido el problema de la India. El hinduismo nunca ha podido


levantar el nivel de la naturaleza al nivel de la humanidad. La ideología hinduista
siempre lleva a devaluar a los hombres y mujeres hasta el nivel más bajo de la
naturaleza. Y no sólo esto, sino que tiende a volver a las personas seres
impersonales como la naturaleza volviendo todo un nudo o vacío impersonal. En
últimas el concepto que se maneja de Dios es “el todo” y a la vez nada en particular
llegando a ser un círculo impersonal e ilógico. Es decir cada ser humano y cada
elemento de la naturaleza es solo como una gota de agua en el océano impersonal,
el cual según los hindúes se llama “dios”, pues todos comparten la misma sustancia.

Esto genera una crisis de identidad y personalidad. Primero hay una pérdida de
emociones y valores como el amor, y la compasión, pues el universo impersonal

11
Monismo (del griego, monos, ‘único’) es la doctrina según la cual la realidad última está compuesta en su
totalidad por una sustancia.

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nunca ha sido amado por nadie ni se ha interesado por nadie. En este esquema de
pensamiento no hay ninguna base para el amor ni la compasión humana en un
universo impersonal. Por esta razón en las culturas hindú y budista no se construyen
hospitales, ni colegios; pues no hay ninguna base para el valor humano.

Por otra parte, no hay ninguna base para la moralidad, pues “si todo es uno” “y todo
es impersonal” no existe diferencia entre el bien y el mal, entre lo correcto y lo
incorrecto, es decir no hay lugar al concepto de pecado. Así que, según esta
creencia, no hay diferencia entre amar o matar

Por último, un universo impersonal elimina la voluntad humana, pues según esta
corriente, la posición de una persona en la vida es el resultado del Karma12 en una
vida pasada. Por lo tanto, el fatalismo predomina en países como la India.

Según el hinduismo y el budismo, el hombre está atrapado en un ciclo sin fin de


renacimientos vez tras vez, buscando purgarse o purificar a sí mismo el Karma para
trascender este mundo físico de la ilusión. Por esto no se mata una vaca en la India
ya que podía ser la tía o tío reencarnado de alguien. Esta es la misma razón por el
cual no se matan las ratas, comiéndose ellas casi una cuarta parte de la cosecha total
de granos.

Lo primero que invalida el concepto de la reencarnación es el hecho acerca de la


personalidad de Dios. Dios es un ser personal que nos creó como seres personales
y se ha revelado a nosotros para que podamos tener una relación personal con Él.

Por otro lado, si la reencarnación fuese cierta habría dos consecuencias lógicas que
se dieran: En primer lugar si la reencarnación busca la purificación del Karma, esto
daría como resultado una humanidad cada vez más “purificada”, pero la realidad
nos muestra que los hombres se degeneran más y más en su vida pecaminosa a
través de la historia. En segundo lugar, tendríamos un problema matemático, pues
si los mismos que mueren son los mismos que reencarnan (sin contar las
reencarnaciones de animales) tendrían que ser el mismo número, o sea la población
mundial tendría que ser la misma para justificar la reencarnación, lo cual no es
cierto, pues la población siempre va en aumento.

Ahora, la Escritura nos da un juicio después de la muerte y no una reencarnación:


“...está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto el
juicio” (Hebreos 9:27)

12
El Karma es la enseñanza hindú que dice que las acciones en la vida de una persona determina su destino
en el próximo ciclo de la vida.

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EL ISLAMISMO.

(Del árabe, islam, que significa obediencia, sumisión, resignación.)


Esta creencia se dio luego de la prédica de Mahoma en el siglo VII, una de las más
grandes e influyentes religiones en la historia de la humanidad. Los “muslimes” (la
palabra muslim quiere decir sumiso a Dios) o creyentes, es decir, los musulmanes,
la han extendido en numerosos países mediante actividades de proselitismo o por
inmigración.

Mahoma estuvo bajo la influencia de las antiguas religiones de Arabia, del


CRISTIANISMO (en la versión de iglesias orientales) y el JUDAÍSMO. Su actividad en
Medina y La Meca le convirtió en un personaje polémico y por algún tiempo tuvo
que abandonar La Meca y radicarse en Medina (huida conocida como La Hégira).

Para los musulmanes su religión ha sido la misma siempre. Dios, llamado por ellos
Alá, la había recordado a los hombres mediante profetas como Adán, Noé,
Abraham, Moisés y Jesús y sobre todo mediante Mahoma, el último de los profetas,
“el Apóstol de Alá”. Una declaración constante es la de “No hay más Dios que Alá y
Mahoma es su profeta”. El Corán, o escrituras sagradas de los musulmanes, afirma
que Jesús anunció la venida de Mahoma, pero las escrituras cristianas fueron
falsificadas para ocultarlo.

Los musulmanes son monoteístas. También creen en ángeles y arcángeles y en una


vida futura. Los monoteístas que vivan de acuerdo a sus convicciones: musulmanes,
judíos, cristianos, sabeos, etc., serán admitidos al paraíso. Los muslimes son
circuncidados, deben abstenerse de bebidas alcohólicas y de carne de cerdo, hacer
varias oraciones al día y peregrinar al menos una vez en la vida a La Meca, a cuyo
peregrinaje llaman hadj.

El derecho islámico se basa en El Corán y en la tradición y se conoce como shari’a.


Los más estrictos exigen que la legislación de los países de mayoría musulmana se
base en el derecho islámico.

Algunas sectas musulmanas han apelado a una especie de guerra santa para
derrotar a sus enemigos o extender la influencia del Islam. Un caso conspicuo es el
del Irán de los ayatolas en el siglo veinte y el de un famoso “mahdi” o supuesto
mesías en Sudán en el siglo pasado.

El Islam se ha extendido por numerosas naciones de Occidente, pero su mayor


crecimiento se ha producido en el África negra. Los bastiones tradicionales del Islam
son los países árabes, el norte de India, Pakistán, África del Norte, Egipto, Irán, Irak,

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Turquía, Indonesia, etc. Hasta el siglo XV varios reinos de la península Ibérica


estuvieron bajo control musulmán.

Entre las sectas musulmanas están los kharijitas (ortodoxos fanáticos), los
mutazalitas (más liberales), y sobre todo las grandes divisiones entre “CHIITAS” y
“SUNNITAS”. Los mahometanos están divididos desde el siglo VII en estas dos sectas
principales: los “sunnitas” que niegan los derechos al califato de Alí, cuarto sucesor
de Mahoma, y los “chiitas” que lo apoyan y consideran que solo Mahoma es superior
a él.

Apologética Cristiana

El Islamismo contiene rasgos agnósticos, pues enseñan que Dios está tan
supremamente por encima del hombre en todo aspecto que casi es virtualmente
imposible conocer y que Él enviará al paraíso o al infierno como Él decida.
Por otro lado enseña que Jesús era sólo un mensajero de Dios, no el Hijo de Dios.
Los musulmanes niegan que Él es el Dios todopoderosos que vino en la carne. Pero
la Biblia nos enseña:
En el principio era el Verbo, el Verbo estaba con Dios y el Verbo era Dios. Este estaba en
el principio con Dios. Todas las cosas por medio de él fueron hechas, y sin él nada de lo
que ha sido hecho fue hecho. En él estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres...
Y el Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros lleno de gracia y de verdad; y vimos su
gloria, gloria como del unigénito del Padre.
(Juan 1:1-4,14)
Amados, no creáis a todo espíritu, sino probad los espíritus si son de Dios, porque
muchos falsos profetas han salido por el mundo. 2En esto conoced el Espíritu de Dios:
todo espíritu que confiesa que Jesucristo ha venido en carne, es de Dios; 3y todo espíritu
que no confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios; y este es el espíritu del
Anticristo, el cual vosotros habéis oído que viene, y que ahora ya está en el mundo.
(1 Juan 4:1-3)

Para los musulmanes que niegan que Jesús es la revelación final y definitiva de Dios,
la Biblia señala:
Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres
por los profetas, 2en estos últimos días nos ha hablado por el Hijo, a quien constituyó
heredero de todo y por quien asimismo hizo el universo. 3Él, que es el resplandor de su
gloria, la imagen misma de su sustancia y quien sustenta todas las cosas con la palabra
de su poder, habiendo efectuado la purificación de nuestros pecados por medio de sí
mismo, se sentó a la diestra de la Majestad en las alturas, 4hecho tanto superior a los
ángeles cuanto que heredó más excelente nombre que ellos.
(Hebreos 1:1-3)

Para los musulmanes Alá es imposible de conocer e imposible de abordar. La


carencia principal de esta doctrina es el amor de Dios. El musulmán ortodoxo

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no puede decir que Dios es amor, así que no pueden concebir como Dios se hace
amigo de las personas como Abraham (Isaías 41:8) y habla con ellos (Génesis
18:22). La Escritura nos enseña que Dios desea que le conozcamos, además nos
muestra que es nos ama de tal manera que dio a su Hijo por nosotros:
Así ha dicho Jehová: «No se alabe el sabio en su sabiduría, ni en su valentía se alabe el
valiente, ni el rico se alabe en sus riquezas. Mas alábese en esto el que haya de alabarse:
en entenderme y conocerme, que yo soy Jehová, que hago misericordia, juicio y justicia
en la tierra, porque estas cosas me agradan,
dice Jehová».
(Jeremías 9:23,24)
De tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel
que en él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna. 17Dios no envió a su Hijo al mundo
para condenar al mundo, sino para que el mundo sea salvo por él.
(Juan 3:16,17)

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Los Testigos de Jehová


Esta es una secta estadounidense. Desde su sede en Brooklin, Nueva York, y mediante la
publicación de las revistas Atalaya y Despertad, los Testigos de Jehová se han extendido
por todo el mundo. El origen de la secta se encuentra en las ideas de C.T. Russell que inició
ese movimiento en la década de 1870. Esta secta se organizó, en 1884, con el nombre de
Watch Tower Society (Sociedad del Atalaya) Luego, en 1914, fundaron la Asociación
Internacional de Estudiantes de la Biblia. Uno de sus primeros líderes fue J.F. Rutherford,
quien reemplazaría a Russell en la dirección. A su vez Nathan Knorr dirigió el grupo a la
muerte de Rutherford. En 1931, adoptaron definitivamente el nombre actual de Testigos
de Jehová.

Los miembros o “proclamadores” deben dedicar gran parte de su tiempo a la “publicación”


o “proclamación” de las buenas nuevas del Reino de Jehová.

Presentan algunas características del Arrianismo13 en su cristología. Jesús fue, según ellos,
un hombre que murió para rescatar a los descendientes de Adán de la muerte física, y al
resucitar fue exaltado por encima de los ángeles. Su creencia en el Espíritu Santo (aunque
no son trinitarios), se limita a considerarle la “fuerza activa de Jehová”. Anunciaron el fin
del mundo para 1914, lo cual justifican con variadas interpretaciones. Esperan el fin del
mundo en cualquier momento, aunque solo ciento cuarenta y cuatro mil “ungidos” irán al
cielo. Los demás Testigos de Jehová (únicos en salvarse) habitarán la tierra nueva. No creen
en la inmortalidad del alma, sino solo en la resurrección.

No prestan servicio militar, sino obediencia absoluta a la organización “teocrática”, es decir,


a la corporación religiosa a la que pertenecen. Consideran a la Iglesia Católica como la “gran
ramera”, y a los protestantes y evangélicos como los hijos de la misma. El mundo religioso,
aparte de ellos, es “Babilonia la grande”.

Apologética Cristiana
Los testigos de Jehová tienen las siguientes consideraciones:
 Ellos han aceptado la organización como el profeta de Dios y como el único caminal
de verdad de Dios
 Creen que rechazar la organización es rechazar a Dios mismo.

13
ARRIANISMO: Herejía creada por Arrio (ca. 256–336) quien era presbítero de la iglesia de Alejandría. En su
doctrina aceptó de cierta forma la divinidad de Cristo, pero afirmó que la Segunda Persona de la Trinidad no
es coeterna con el Padre, la Primera Persona, sino que fue engendrada y no existía con anterioridad a ese
hecho. Para Arrio, el Hijo de Dios no era eterno sino creado por el Padre como instrumento para crear el
mundo y, por lo tanto, no era Dios por naturaleza, sino una criatura que recibió la alta dignidad de Hijo de
Dios ya que fue “engendrado”, debido a que el Padre, en su preconocimiento, sabía de su condición de justo
y de su fidelidad incondicional. El Concilio de Nicea (325 d.C.) condenó las doctrinas arrianas, pero la
controversia arriana se prolongó mucho.

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 Creen que sólo la organización puede interpretar la Biblia


 Creen que la revista Torre del vigía contiene la verdad de Dios dirigida por Él, a
través de la organización.

Conflictos con el Cristianismo:


 Creen que Jesús fue un ser creado – una criatura
 Que Jesús es el arcángel Miguel.
 Que Jesús no resucitó en cuerpo sino como un ser espiritual.
 Que Jesús regresó invisiblemente en 1914, (secretamente a la Organización)
 Que Jesús era tan solo un hombre que estuvo en la tierra, no “el Verbo hecho carne”
 Que el Espíritu Santo es tan solo una fuerza activa, no la persona de Dios
 Que el infierno es simplemente una tumba
 Que las puertas del cielo están abiertas tan sólo a 144.000 personas.
 Que la mayoría de Testigos deben permanecer en la tierra.
 Que la Salvación se logra sólo mediante la organización.
 Que la salvación puede ser retenida sólo mediante obras enérgicas para la
organización hasta el fin, cuando alguien entonces podrá merecerse la vida eterna
en un paraíso terrenal.
 Que Jesús no debe recibir adoración, sino sólo honor como la primera creación de
Jehová

Negaciones esenciales:
 La Trinidad
 La Deidad de Cristo
 La Resurrección física de Cristo
 El Espíritu Santo como persona
 La promesa del cielo para aquellos que creen
 La necesidad del nuevo nacimiento para todos los creyentes.

La Verdad Bíblica:
1. Dios existe en una Tri-unidad de tres personas eternas y co-iguales. (Mirar la Lección 1
- Página 8, sobre la Tri-unidad de Dios)

2. Jesús no es menos que Dios encarnado.


Mirad que nadie os engañe por medio de filosofías y huecas sutilezas basadas en
las tradiciones de los hombres, conforme a los elementos del mundo, y no según
Cristo. Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la divinidad,
(Colosences 2:8,9)

3. El Espíritu Santo es una persona


Miremos algunas de las evidencias bíblicas de su personalidad:
A. Se usan pronombres personales en relación con Él (Juan 16:14 y Efesios
1:14), a pesar del hecho de la palabra griega: espíritu: es de género neutro, el
pronombre demostrativo ekenios, “ese”, es usado por Juan (16:13-14) para
referirse al Espíritu Santo: “pero cuando venga el Espíritu de verdad, El (ese) os
guiará a toda la verdad…. El (ese) me glorificará….”. San Pablo en Efesios (1: 13-

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14), usa un pronombre relativo masculino para referirse al Espíritu Santo


“…fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, quien (masc.) es las arras
de nuestra herencia…”.
B. Características personales le son adjudicadas. La definición de una
persona es: “uno que posee inteligencia, emoción o sentimiento y voluntad. El
Espíritu Santo posee inteligencia: (1 Corintios 2: 10-12). Aún más la palabra de
sabiduría y la palabra de conocimiento son dones dados por el Espíritu Santo (1
Corintios 12:8). El Espíritu Santo posee emoción y sentimiento: El Espíritu Santo
ama, (Santiago 4:5) y es angustiado (Efesios 4:30). El Espíritu Santo posee
voluntad (1 Corintios 12:11).
C. Acciones personales le son atribuidos al Espíritu Santo: El habla
(Hechos 13:2), El testifica (Juan 15:26). El enseña (Juan 14:26). El intercede
(Romanos 8: 26-27). El guía (Juan 16:13). El manda y ordena (Hechos 13:2). El
obra milagros (Hechos 8: 39).
D. Reacciones personales le son adjudicadas al Espíritu Santo. Puede ser
turbado y angustiado (Efesios 4:30). Puede ser tentado (Hechos 5:3). El puede ser
resistido (Hechos 7:51). Se le puede mentir (Hechos 5:3), se le puede calumniar,
difamar, insultar, hablar en contra, ultrajar y entristecer (Marcos 3: 29-30 y
Hebreos 10:29).
E. El Espíritu Santo mantiene relaciones personales:
1. Con el Padre: Mateo 28:19, en la fórmula bautismal.
2. Con el Cristo: Juan 16:14, “... Tomará lo mío y os lo hará saber.”
3. Con los creyentes: Hechos 15:28. Los apóstoles buscaban la voluntad y el
complacer al Espíritu Santo, en la formación del sistema de la iglesia local. Que el
Espíritu Santo tiene una identidad separada del Padre y del Hijo dentro de la
Trinidad puede verse claramente en el último discurso de Jesús registrado en el
libro de Juan, en el hace referencia a la venida del Espíritu Santo a quien llama
Otro Consolador (Juan 14:16).14

4. Jesús fue y debe ser adorado


Entonces los que estaban en la barca se acercaron y lo adoraron, diciendo: —
Verdaderamente eres Hijo de Dios. (Mateo 14:33)

Haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo Jesús: Él,
siendo en forma de Dios, no estimó el ser igual a Dios como cosa a que aferrarse,
sino que se despojó a sí mismo, tomó la forma de siervo y se hizo semejante a los
hombres. Mas aún, hallándose en la condición de hombre, se humilló a sí mismo,
haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz. Por eso Dios también lo
exaltó sobre todas las cosas y le dio un nombre que es sobre todo nombre, para
que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, en
la tierra y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para
gloria de Dios Padre.
(Filipenses 2:5-11)

14
SANABRIA, Obed. Neumatologìa., Manual de Teología 4, Bucaramanga: Kerigma, 2003, p.5,6

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La Nueva Era
Este es un nombre genérico de diferentes movimientos y sectas. Este nombre procede de
Alice Bailey, seguidora de la teósofa Elena Blavatsky, conocida como «Madame Blavatsky»

En la Nueva Era predominan elementos pelagianos15, ya que generalmente se enseña que


el hombre puede salvarse por sus propios méritos. Más importante todavía, rechazan las
enseñanzas tradicionales acerca del pecado.

Sin embargo, el estudio de la Nueva Era obliga a tener en cuenta no solo elementos de
nuevo pelagianismo, sino también de ocultismo, ideas esotéricas, espiritismo, cibernética,
ecología, ficción científica, Rosacruces, Magia, Teosofía, las cuales se presentan en forma
sincrética mediante la vulgarización de ideas extraídas de antiguas y nuevas religiones, así
como de todo tipo de literaturas científicas o seudocientíficas. Por supuesto que, al estudiar
una variedad tan grande de probables influencias, no debe generalizarse.

Sus críticos señalan en muchos de estos grupos la ausencia de principios éticos demasiado
definidos, así como ciertas pretensiones de conocimiento científico que parecen atraer a
personas desilusionadas por movimientos religiosos tradicionales o ansiosos de reconciliar
algún grado de fe religiosa con los nuevos descubrimientos.

Apologética Cristiana

La Nueva Era tiene su base en la misma esencia de la tentación en el Edén. Miremos el


pasaje de Génesis 3:1-6:
Pero la serpiente era más astuta que todos los animales del campo que Jehová
Dios había hecho, y dijo a la mujer: —¿Conque Dios os ha dicho: “No comáis de
ningún árbol del huerto”? 2La mujer respondió a la serpiente: —Del fruto de los
árboles del huerto podemos comer, 3pero del fruto del árbol que está en medio
del huerto dijo Dios: “No comeréis de él, ni lo tocaréis, para que no muráis”.
4
Entonces la serpiente dijo a la mujer: —No moriréis. 5Pero Dios sabe que el día
que comáis de él serán abiertos vuestros ojos y seréis como Dios, conocedores
del bien y el mal.
6
Al ver la mujer que el árbol era bueno para comer, agradable a los ojos y
deseable para alcanzar la sabiduría, tomó de su fruto y comió; y dio también a su
marido, el cual comió al igual que ella.

15
Pelagianismo: Movimiento considerado herético. Se origina con Pelagio, monje y teólogo británico (siglos
IV y V). Negaban el pecado original. Creían que los humanos pueden producir, por cuenta propia y sin el
auxilio de la gracia, las buenas obras mencionadas en las Escrituras.

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Al igual que la promesa de la serpiente, la Nueva Era enseña que:


 La Palabra de Dios no es completamente digna de confianza (ver los versículos 1,4,5)
 El hombre no tiene que morir (v. 4)
 El hombre se puede convertir en un dios (v. 5)
 El hombre puede evolucionar a través de un conocimiento misterioso (v. 6)

El fenómeno de la Nueva Era se ha extendido por todo el mundo convirtiéndose en una de


las filosofías más preocupantes que pudieran haber existido, puesto que atrae a cristianos
y no cristianos. La meta de este fenómeno es hacer creer que todos los problemas de la
vida humana, sus vacíos y frustraciones tienen alivio en las enseñanzas de la Nueva Era

La Escritura nos enseña que lo único que puede llenar el vacío del hombre es la presencia
de Dios. Hasta que el hombre se convierta de sus caminos y entre en comunión con Dios a
través de Jesucristo, estarán perdidos en sus vanas filosofías y mentiras, creadas por la
Nueva Era.

El apóstol Pablo dijo:


La palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto
es, a nosotros, es poder de Dios, 19pues está escrito: «Destruiré la sabiduría de los
sabios y frustraré la inteligencia de los inteligentes». 20¿Dónde está el sabio?
¿Dónde está el escriba? ¿Dónde está el que discute asuntos de este mundo?
¿Acaso no ha enloquecido Dios la sabiduría del mundo? 21Puesto que el mundo,
mediante su sabiduría, no reconoció a Dios a través de las obras que manifiestan
su sabiduría, agradó a Dios salvar a los creyentes por la locura de la predicación.
22
Los judíos piden señales y los griegos buscan sabiduría, 23pero nosotros
predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero, y para
los gentiles locura. 24En cambio para los llamados, tanto judíos como griegos,
Cristo es poder y sabiduría de Dios, 25porque lo insensato de Dios es más sabio
que los hombres, y lo débil de Dios es más fuerte que los hombres.
(1 Corintios 1:18-25)

Estas cosas habló Jesús, y levantando los ojos al cielo, dijo: —Padre, la hora ha
llegado: glorifica a tu Hijo, para que también tu Hijo te glorifique a ti, 2pues le has
dado potestad sobre toda carne para que dé vida eterna a todos los que le diste.
3
Y esta es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a
Jesucristo, a quien has enviado.
(Juan 17:1-3)

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El Catolicismo y los Adventistas


IGLESIA CATÓLICA, APÓSTOLICA Y ROMANA
Esta nombre se debe distinguir de la iglesia católica antigua, pues los anglicanos, muchos
protestantes históricos, los ortodoxos y los viejos católicos se consideran a sí mismos como
una continuación de la Iglesia Católica Antigua, y hacen una distinción entre esta y el
catolicismo romano, es decir, el gran sector que fue aceptando la jurisdicción romana o
papal. Aunque los católicos romanos también se consideran una continuación de la Iglesia
Católica Antigua o simplemente de la Iglesia Antigua.

De acuerdo con la tradición de esta iglesia, Jesucristo la fundó y el apóstol Pedro fue su
primer papa (título que se le da a la cabeza visible de la iglesia).

Los cristianos del período posterior a la iglesia primitiva empezaron a identificarse en


numerosas regiones como católicos o miembros de la Iglesia Católica o Universal, para
distinguirse de varios grupos considerados heréticos. Algunos historiadores seculares y casi
todos los historiadores protestantes entienden que esta iglesia surgió como resultado de
la evolución de la Iglesia Católica Antigua hacia una organización centralizada con sede en
Roma. Lo anterior tiene relación con el proceso de oficialización del cristianismo en los
siglos IV y V, iniciado con Constantino (que lo favoreció) y llevado hasta sus últimas
consecuencias por sus sucesores (que lo convirtieron en religión oficial del imperio).
Algunos mencionan al papa León I como el que consolidó el poder de la sede romana en el
siglo V, mientras otros prefieren el pontificado de Gregorio I (siglos VI y VII) como período
que indica el inicio del catolicismo romano en la forma que actualmente se conoce, pero
esto es discutible.

Los católicos romanos aceptan siete sacramentos, la intercesión de la virgen María y de los
santos, el purgatorio (estado intermedio entre el cielo y el infierno), el celibato sacerdotal
(por lo menos en su rito latino u occidental, predominante en la iglesia), la existencia de
órdenes monásticas de hombres y mujeres, el carácter sacerdotal del ministerio de la
iglesia y hacen énfasis en el sacrificio de la misa. Aceptan veintiún concilios ecuménicos o
de toda la iglesia, el primero de ellos es el de Nicea (325 d.C.).

La iglesia está organizada en forma jerárquica con el papa a la cabeza y las diócesis
gobernadas por obispos (algunos de ellos se les denominan arzobispos). El papa es elegido
por un colegio de prelados llamados cardenales y se le considera infalible desde 1870. La
Ciudad del Vaticano (situada en una de las colinas de Roma) es considerada como la Santa
Sede por los católicos y mantiene relaciones con la mayoría de las naciones.

El catolicismo está extendido por casi todo el mundo y prevalece en la mayor parte de
Europa y en Iberoamérica. Actualmente crece en forma significativa en varias naciones del

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Tercer Mundo, pero ha perdido fuerza en Europa e Iberoamérica. Ha mejorado sus


relaciones con las iglesias orientales u ortodoxas y con algunas denominaciones
protestantes históricas.

Además del rito latino hay varios ritos orientales. Las iglesias orientales o ritos que han ido
aceptando la jurisdicción romana se les llama UNIATOS16. Desde el Concilio Vaticano II,
iniciado en 1963, se han introducido numerosos cambios en la iglesia, incluyendo la
celebración de la misa en lengua vernácula (anteriormente se celebraba en latín).

Apologética Cristiana
Tradiciones no Bíblicas
 La base de la iglesia es Pedro, a quien se conoce como el primer Papa
 La creencia en el Purgatorio después de la muerte para purgar los pecados de la persona
 Las oraciones de María y los santos muertos para que medien a nuestro favor.
 Las imágenes ante las cuales se arrodillan y rezan
 Confesión ante un sacerdote para obtener la absolución de pecados
 La misa y los sacramentos son necesarios para salvación
 La salvación se logra solamente a través de la iglesia católica romana
 La Eucaristía de la Misa y la transubstanciación, la enseñanza que el pan y el vino se
convierten literalmente en la carne y la sangre de Cristo en la Comunión.
 La penitencia y la venta de indulgencias.
 La veneración y adoración de María.
 El agua bendita
 La canonización de los santos fallecidos
 El celibato del sacerdocio.
 El rosario
 La Tradición está por encima de la Biblia

Con respecto a las mediaciones la Escritura nos muestra que:


Jesús le dijo: —Yo soy el camino, la verdad y la vida; nadie viene al Padre sino por mí.
(Juan 14:6)

Y en ningún otro hay salvación, porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a
los hombres, en que podamos ser salvos.
(Hechos 4:12)

16
Uniatos, son ritos católicos orientales. Iglesias de la parte oriental del antiguo Imperio Romano que,
independientemente de mantener una serie de normas propias, sobre todo en aspectos litúrgicos y
administrativos, aceptan la jurisdicción universal del Papa.

En el sector uniato es posible encontrar prácticas como el bautismo por inmersión, la comunión con pan y
vino, el matrimonio del clero, etc. Entre sus ritos los hay parecidos a los de ciertas iglesias orientales alejadas
de la comunión con Roma como coptas, armenias, caldeas, bizantinas (griega, rumana, rusa), maronitas (del
Líbano, Siria, etc.), alejandrinas, antioqueñas, etc.

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Con respecto a las imágenes, curiosamente un libro que más enseña en contra de esto
claramente es el libro de la sabiduría, considerado por los cristianos como “apócrifo” y
aceptado por la Iglesia Católica. Miremos un fragmento de este libro:

El culto a los ídolos


10
¡Pero qué desgraciados son los que llaman dioses a cosas hechas por los
hombres, a objetos de oro y plata, artísticamente trabajados, a figuras de
animales, a una piedra sin valor, tallada hace mucho por un escultor, pues ponen
su esperanza en cosas muertas!
11
Pongamos por ejemplo un carpintero: corta un árbol fácil de manejar, con
habilidad le quita toda la corteza, lo labra con cuidado y hace un objeto útil para
las necesidades ordinarias; 12 la madera que le sobra la usa para preparar toda
la comida que quiere. 13 Y lo que queda todavía, un palo torcido y nudoso,
que no sirve para nada,
lo toma, lo labra, simplemente por pasar el tiempo, y lo modela, con habilidad y
sin esfuerzo, hasta sacar la imagen de un hombre 14 o lograr el parecido de un
animal despreciable. Lo cubre luego con pintura roja, tapando así todas las
imperfecciones; 15 y le hace entonces un nicho conveniente, lo coloca en la
pared y lo sujeta con un clavo.
16
Tiene que tomar precauciones para que no se caiga, porque sabe que el ídolo
mismo no puede valerse: no es más que una imagen, y necesita ayuda.17 Y a
pesar de todo, le pide por sus bienes de fortuna, por su esposa y por sus hijos; no
le da vergüenza dirigir la palabra a un objeto que no tiene vida. Para pedir la
salud, acude a un ser que no la tiene; 18 para pedir la vida, acude a un ser
muerto; para conseguir protección, recurre al más incapaz; para pedir buen viaje,
a un ser que ni siquiera puede andar; 19 para tener éxito en sus negocios,
actividades y trabajos, pide ayuda a quien no tiene la menor fuerza en sus manos.
Capitulo 14
...7 ¡Bendita la madera que se usa rectamente! 8¡Maldita la madera de la que se
hace un ídolo! ¡Maldito el ídolo y el que lo hace: este por haberlo fabricado y aquel
porque, siendo cosa que se pudre, fue llamado dios!
9
Dios aborrece tanto al malo como al mal que hace;10 y, tanto la obra como el que
la hace, serán castigados. 11 Por eso, Dios destruirá también a los ídolos de los
paganos,
porque, aunque eran cosas creadas por Dios, fueron convertidas en cosas
detestables,
un peligro para la vida de los hombres y una trampa para los pies de los incautos.
Origen del culto a los ídolos 12 De la invención de los ídolos se siguió la
inmoralidad;
fue algo que destruyó la vida.13 Los ídolos no existían desde el principio, ni
existirán siempre. 14 Vinieron al mundo por la superstición de los hombres, y por
eso Dios ha decretado que pronto desaparezcan.

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LOS ADVENTISTAS DEL SÉPTIMO DÍA

Denominación fundada por seguidores de William Miller y otros “cristianos”. Esperaban la


inminente Segunda Venida de Cristo. Empezó a formarse en 1844, pero debido a las
predicciones incumplidas de Miller, se organizó oficial y definitivamente en 1863. Su
nombre revela el énfasis tanto en la Segunda Venida como en la observancia del sábado o
séptimo día, práctica que tomaron de los «BAUTISTAS DEL SÉPTIMO DÍA» y otros
creyentes. Entre sus fundadores estuvieron Joseph Bates y Elena Harmon White. A esta
dama, de origen metodista, se le atribuye una inspiración especial como autora de libros
fundamentales para la denominación, entre ellos se encuentran El camino a Cristo, El
Deseado de todas las gentes, y muchos otros.

Según los adventistas, la inmortalidad solo se otorga a los justos en ocasión del regreso de
Cristo. Afirman que los muertos están en inconsciencia total. También insisten en la
purificación del santuario celestial, debido a que se inició una obra de juicio en l844 que
durará hasta concluir el tiempo de la gracia. La mayoría de las otras doctrinas son parecidas
a las de los cristianos evangélicos. Bautizan por inmersión y solamente a creyentes con
suficiente edad. Practican un estilo de vida conservador, rechazan las bebidas alcohólicas,
el tabaco, el baile, el café y las comidas que pueden dañar la salud. Enfatizan mucho el
cuidado corporal y favorecen una dieta vegetariana.

Cada iglesia local elige a ciertos dirigentes (ancianos, diáconos, etc.) y juntas que forman
parte de conferencias regionales gobernadas por una directiva. Estas conferencias crean
uniones. Estas, a su vez, forman las numerosas divisiones que integran la Asociación
General, de carácter mundial. Los pastores están sujetos no solo a la iglesia local sino a la
denominación. Los adventistas promueven la educación, la salud, así como la distribución
de Biblias y literatura. Su revista más conocida es El Centinela y El Heraldo de la Salud. Esta
iglesia se extiende por todo el mundo.

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CONSEJOS PARA ENSEÑAR APOLOGÉTICA


Finalmente miremos cuatro consejos útiles enseñar apologética a nuestros niños
adolescentes y jóvenes.

1. LLEVE A SUS ESTUDIANTES A UN ENCUENTRO PERSONAL CON JESÚS


Si te preguntara: imagina que nunca en la vida he comido huevo ¿Puedes decirme a qué
sabe el huevo? Seguramente encontrarías muy difícil dar esta respuesta. Lo lógico sería
primero darme a probarlo y con eso sería más fácil entender su sabor.
Lo mismo pasa en la fe. No puedo explicar lo que primero no he probado en mi vida. La fe
en Dios no es un asunto meramente intelectual, es relacional, Dios nos invita a que le
conozcamos a través de la experiencia personal y vívida.
Cuando un niño experimenta la presencia de Dios en su vida, éste es el argumento más
fuerte que lo ayudará a crecer en su fe en Dios, en compañía del estudio de Su palabra.

2. LA EDUCACIÓN APOLOGÉTICA DEBE SER DE ACUERDO A LA EDAD DEL ALUMNO.


Jesús hizo esta advertencia en Mateo 18:5-6,
“Y el que reciba a un niño como este en Mi nombre, me recibe a Mí. Pero al que haga
pecar a uno de estos pequeñitos que creen en Mí, mejor le sería que le colgaran al cuello
una piedra de molino de las que mueve un asno, y que se ahogara en lo profundo del mar.”
(Mateo 18:5-6 NBLA)
En la medida que los niños van creciendo van desarrollando su razonamiento abstracto, así
que es importante enseñarles a cómo defender su fe, acordes a lo que él pueda manejar o
entender.

3. DESARROLLE UN PLAN SISTEMÁTICO APOLOGÉTICO


Es importante, empezar con las verdades fundamentales, en cuanto a Dios y Su palabra.
Enseñe a sus estudiantes a pensar. El Señor Jesús nos enseñó que el amor a Dios incluye
nuestra manera de pensar. Un enfoque educativo debe utilizar un método que demuestre
que se pueden formular argumentos consecutivos sólidos y válidos desde cero hasta la
verdad absoluta del cristianismo. Es importante que cada docente bíblico cristiano
elaborare objetivos, estructure temarios y utilice técnicas de enseñanza creativas.

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4. RECONOCER NUESTRAS LIMITACIONES


Si yo te preguntara ¿Conoces el mar?, podrías decir que sí, si alguna vez has visitado una
playa. Sin embargo, puedes decirme, ¿qué porcentaje del tamaño total del mar, conoces?
A lo cual tenemos que reconocer que no llegaría ni al uno por ciento. Entonces, como
podemos decir que conocemos el mar, si nuestro conocimiento es tan limitado del mismo.
Lo mismo pasa con nuestro estudio de Dios. Debemos reconocer que nuestro
conocimiento de Dios es limitado por mi capacidad humana. Así que tratar de explicar
todos los aspectos de la deidad sería utópico.
Por otra parte, la apologética solo puede mostrar que el cristianismo es verdadero en sus
afirmaciones centrales como “la verdad es absoluta”, “Dios existe”, “Dios resucitó a Jesús
de entre los muertos” y “la Biblia es la Palabra de Dios”.
No puede hacer que alguien crea en Cristo. Eso tiene que ver con su voluntad y con la obra
del Espíritu Santo. La doctrina basada únicamente en las Escrituras debe ser aceptada como
mandato de Dios y de Su palabra.
En esta tarea de afianzamiento de la fe es importante vincular a los padres de cada
estudiante.

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