NECESIDADES HUMANAS SEGÚN LA CONVALECENCIA HUMANA (PACIENTES EN

RECUPERACIÓN DE UNA ENFERMEDAD O UNA OPERACIÓN)

El estado de convalecencia se da mientras se está recuperando de una operación o de una

enfermedad, en esté estado hay que cuidar demasiado la alimentación del paciente ya que no
puede alimentarse como normalmente lo hace.

Lleva tiempo recuperar totalmente las funciones normales del cuerpo. Por lo que es muy
importante no solo seguir las recomendaciones médicas sino una dieta adecuada.

Según la patología el médico/nutricionista dará una dieta, la cual deberá ser seguida al pie de
la letra. En el caso de que no se limite o prohíba el consumo de un alimento, se recomienda el
consumo de ciertos alimentos que ayuden a superar más rápido el estado de convalecencia.

 CUÁNDO, CÓMO Y QUÉ COMER EN LA CONVALECENCIA

La alimentación durante este estado debe ser sana, nutritiva, variada, equilibrada y fácil de
digerir. No es recomendable tener prisa en volver a comer como antes.

Las comidas deben estar saborizadas con especias y hierbas, cocinadas al vapor, plancha,
salteado u horno para que mantengan nutrientes y sean fáciles de metabolizar.

 Cuando comer: Una de las herramientas dietéticas más importantes es la

distribución diaria de las comidas. Lo ideal es repartir la dieta en tomas
frecuentes y de poco volumen, cada 2-3 horas aproximadamente. Hacer unas
cinco o seis ingestas al día es uno de los métodos más efectivos para equilibrar
los niveles de azúcar y grasas en la sangre. Además se ofrece al organismo una
disciplina y una seguridad de aporte energético frecuente.
Conviene establecer los horarios de comidas de acuerdo a la toma de la
medicación prescrita según la intervención, ya que hay alimentos que
interaccionan con determinados fármacos, potenciando o inhibiendo su acción
farmacológica.

 Como comer: Comer, masticar y saborear el sabor de los alimentos favorece

gradualmente la digestión y da tiempo a los mecanismos de saciedad del
cerebro.

 Qué comer: Come alimentos de textura suave, bajos en grasas y bajos en fibra.
La cantidad será moderada y se ajustará a la tolerancia del individuo. El plato
de la vajilla de todos los días se puede utilizar como medida.
Las técnicas de cocción más recomendadas son cocer a fuego lento o hervir, al
vapor o al horno, envolver con papel de aluminio y hornear. Los guisos,
estofados y salteados podrán filtrarse a medida que la sensación de
recuperación se haga más evidente. La temperatura de la placa es muy
importante. Debe ser comida gastronómicamente apropiada para la
preparación, pero evita alimentos muy calientes y muy fríos o muy calientes,
ya que pueden causar molestias digestivas. En la cocina, la sazón es el detalle
que da sabor a los platos sencillos. Por ejemplo, la mejorana, el romero, el
tomillo y la albahaca, son hierbas aromáticas y dulces que se pueden utilizar
para este fin. Por otro lado, se debe evitar la pimienta, el chile, las especias
ácidas como el vinagre, el vino utilizado en la cocina. Tampoco se recomienda
la adicción a la sal. Es por esto que también se deben evitar los encurtidos,
encurtidos, encurtidos, ahumados y productos secos, por su altísimo
contenido en sodio.