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Más de 100 años de la Revolución Rusa y contando

Autores: Germán Jiménez y Simón Beltrán


Editorial

El Internacional se enorgullece de exponer distintas perspectivas frente al mismo tema y con distintos
autores de toda índole. Durante el desarrollo de la revista, se intentan tener en cuenta los diferentes
aspectos de cada ideología política y su impacto frente a las naciones afectadas.
El Internacional abarca también distintos temas desde la influencia cinematográfica del comunismo
hasta conflictos actuales como es la guerra de Rusia y Ucrania que incitan al lector a crear su propia
opinión de una manera más objetiva e informada por todos los lados. Por medio de los artículos
presentes, se intenta analizar la influencia diaria de cada uno de los modelos sobre todo en los
representantes de estos: Rusia y Estados Unidos.
Esta edición se enfoca en la Revolución Rusa y la Unión Soviética porque a pesar de que se considere
ya un evento pasado, sigue silenciosamente influenciando nuestros días. Considerando el contexto
histórico en el que el comunismo nunca había logrado expresarse de manera nacional y estatal, estos
dos eventos surgieron como un golpe directo al mundo entero, el cual se basaba completamente en un
sistema capitalista injusto, pero que había funcionado por siglos para traer progreso a la humanidad.
Sin embargo, no es prudente decir que el capitalismo es el modelo que deberíamos seguir, pues tiene
fallas muy evidentes que crearon la fundamentación teórica y el esparcimiento global del sistema
comunista. También es claro que el comunismo no ha funcionado en la práctica y que no funciona en
un sistema distinto.
En el caso del capitalismo, se puede destacar el rápido desarrollo que genera la competición y a su vez
el poder que genera, basando este mismo crecimiento en la opresión de las clases sociales con menor
acceso a la educación o en general acceso a ciertos bienes básicos que les permitan crecer más allá de
los límites creados por los miembros de la alcurnia que buscan únicamente, controlar dicho poder
representado en la mano de obra. En el caso del modelo comunista, se tendría que detallar cómo es que
este aunque elimina notoriamente la brecha social o en general los beneficios que hacen a una clase de
personas más alta que otras, no permite una libertad de pensamiento completamente abierta que
permita a su vez, un avance general más rápido en torno a la tecnología y/o economía, enfocando más
precisamente su desarrollo en el ámbito social, modelo en el que se busca hacer de todos los habitantes
y pertenecientes de la nación, personas preparadas con base en los ideales dictaminados por el Estado.
Teniendo en cuenta dichas perspectivas, se puede llegar a la conclusión de que cada modelo aporta
beneficios significativos para el propio desarrollo general de un país estableciendo cada uno como un
paso para la autonomía definitiva entre los individuos de una nación, dejándonos únicamente a la
espera de lograr concretar un híbrido que pueda fusionar distintos aspectos de ambos modelos, los
cuales se pueden ver abarcados en la revista. La tarea del lector es definir cuáles son estos aspectos que
considera serían beneficiosos, el lector ya tiene sus fichas, falta que haga su jugada.

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