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CASO PRÁCTICO 3-2
Analizar la tipicidad en el supuesto siguiente (delito de lesiones, arts. 147, 152 CP).
La primera condición que debe cumplir una conducta para ser calificada como
antijurídica es que sea una conducta típica.
Los elementos que integran cualquier tipo penal son la conducta típica (comportamiento
activo u omisivo) los sujetos y el objeto, el tiempo y lugar de perpetración del delito.
En cuanto a los sujeto podríamos decir que el tipo penal supone la presencia de un
sujeto activo (aquel que realiza el tipo) que en este caso seria Antonio y de un sujeto
pasivo (titular del bien jurídico atacado) .
El objeto material y jurídico del delito: el primero es sobre el que recae físicamente la
acción típica y el segundo equivale al bien jurídico y constituye la base de la estructura
e interpretación de los tipos penales.
Según la conducta típica y el resultado, podemos clasificar este supuesto como un delito
de resultado, ya que la acción de Antonio (sujeto activo), de forzar al menor (sujeto
pasivo) a comer constituye en sí misma una clase de “resultado” por las secuelas que le
produjo, siendo estas un efecto del impulso de la voluntad .
Por otro lado, la forma de actuar de Berta se podría catalogar como delito de omisión,
ya que omite realizar una determinada producción de un bien jurídico o que no impida
la producción de un resultado típico estando obligado a ello. Pues siendo testigo de la
acción no actuó en consecuencia para protección del menor.
Por otro lado , podríamos añadir que por parte del sujeto activo ( Antonio ) existe la
relación de causalidad e imputación objetiva ya que a consecuencias de las acciones
producidas por él , el niño sufre un ataque peligroso .
En este caso en concreto , Antonio al forzar a su hijo puede llegar a darse cuenta de que
puede llegar a provocarle determinados daños a su hijo menor .
1. El que, por cualquier medio o procedimiento, causare a otro una lesión que
menoscabe su integridad corporal o su salud física o mental, será castigado, como reo
del delito de lesiones con la pena de prisión de tres meses a tres años o multa de seis a
doce meses, siempre que la lesión requiera objetivamente para su sanidad, además de
una primera asistencia facultativa, tratamiento médico o quirúrgico. La simple
vigilancia o seguimiento facultativo del curso de la lesión no se considerará tratamiento
médico.
1. El que por imprudencia grave causare alguna de las lesiones previstas en los artículos
anteriores será castigado, en atención al riesgo creado y el resultado producido:
1.º Con la pena de prisión de tres a seis meses o multa de seis a dieciocho meses, si se
tratare de las lesiones del apartado 1 del artículo