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JUAN ALEXIS PARI EMNDOZA JHUL JESÚS DE LA PEÑA ALFARO

USURPACIÓN DE FUNCIONES
INTRODUCCIÓN

Este delito es constituido por una conducta en una modalidad de usurpación de un cargo diferente esta es manifestada
cuando el funcionario o servidor público ejerce, dolosamente una función que no se le atribuye dentro de la
administración de publica, usurpando un cargo diferente al suyo, que es atribuido a otro servidor o funcionario público.

DESARROLLO

El delito de usurpación de funciones se encuentra regulado en el artículo 361 del código penal.

Según Guillermo Cabanellas la usurpación es la arrogación de personalidad a título calidad, facultades o circunstancias
de que se carece. Es decir, cualquier ejercicio ilegal o injusto de un derecho, con desdén para su titular o con despojo del
mismo. Mientras que la usurpación de atribuciones es el delito consistente en arrogarse potestades que pertenecen a
una autoridad o un funcionario público, con la consiguiente simulación de un cargo. Lo que nos da un concepto más
concreto para ver la consistencia de este delito en la normatividad para un análisis de cómo se verifica y reconoce este
delito.

Para considerar que se haya cometido este delito, en primer lugar, debe verificarse que se haya usurpado la
competencia y las atribuciones asignadas normativamente a las conductas establecidas por nuestro código penal en el
artículo 361 por ejemplo a la función de administración pública o la facultad de dar órdenes a militares o policiales y
demás. Analizando si se ha afectado de una manera el correcto funcionamiento de estas. Siendo necesario que
efectivamente estemos ante la relación de este delito de usurpación de funciones, tendría que constituirse, que el sujeto
activo, en su acción funcionarial quiera usurpar funciones que no le confieren, alcanzando a producir el resultado de una
conducta no atribuida a su función.

Cabe resaltar que el sujeto activo haya concurrido a ejercer actos propios de una autoridad o funcionario público, la
asunción del agente se centra cuando este ejerce esa función pública y lo haya manifestado oralmente o dando a
expresar engañosamente a una persona o a una colectividad. Dando a ver en el sujeto activo la antijuricidad de su
conducta, esa voluntad inconsistente de su actuar en esto valorando todos los supuestos establecidos en norma.

CONCLUSIÓN

Este delito protege el buen funcionamiento de la administración pública, llevando a interesarnos la garantía de esta
como legalidad de la función pública, por que esta se centra en la sociedad, es de donde nace, ya que de esta dependen
sujetos que pertenecen a la sociedad y son amparados por esta entonces se busca que se tomen legalmente decisiones
correctas y ejercidas por los mismos sujetos a quienes se les confirió esta atribución, siendo erróneo la falta de
legitimación que un sujeto presente una falsa atribución no conferida a su función sean estos los supuestos del artículo
361 establecido por nuestro código penal.

BIBLIOGRAFÍA

Ángel lópez García-molins, Diccionario de sinónimos y antónimos de la lengua española. Editorial


Alfredo Ortells S.L., 1986.

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