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¿Un destino o un hecho?

(MI NOMBRE, EXPEDIENTE)


(FECHA EN QUE LO SUBI, ACTIVIDAD)
(NOMBRE DE LA MATERIA)
(NOMBRE DEL PROFESOR
Introducción
Realmente, no se puede llamar xenofilia a la sensación que suscita refugiados
políticos e inmigrantes negativos en ninguno de los dos países. ahora ya no está
en modo una mentalidad de afecto y amistad hacia el extranjero. Pero tampoco es
un sentimiento de xenofobia, debido a que lo que produce rechazo y aversión no
es que lleguen de fuera, que son de cualquier otra raza o etnia, el extranjero ya no
se preocupa por la realidad de serlo. Molesto, eso sí, que sean negativos, que
lleguen a complicarles la vida a estos que, mal bueno, nos estamos protegiendo a
nosotros mismos, que supuestamente ya no traen recursos, sino problemas. Sin
embargo, no son estas actitudes de rechazo las que queremos tratar en este libro,
sino ese disgusto que subyace y va más allá de muchas de ellas: desde la
aporofobia, el desprecio, el rechazo a quien no puede devolver o al menos
parecerlo. no poder. Y es por eso por lo que está excluido de un mundo construido
sobre el contrato político, económico o social de este mundo de toma y daca, al
que solo pueden acceder aquellos que parecen tener algo interesante que
devolver.
Se nos da entender que tal vez inconscientemente nuestro disgusto hacia todo
persona que no tenga recursos no esta basado en su tez de piel, su etnia o tal de
donde vienen actualmente, el problema se basa que solo vienen a pedir sin dar
nada y tal vez si solo fuera uno pero lamentablemente es un contacto persistente a
lo largo de toda la ciudad, el mayor conflicto que se nos presenta según la lectura
es que no van i piden dinero a los más ricos o no intentan perjudicar a los que mas
tienen sino a los que tal vez no estén en tiempos de escases pero tampoco para
derrochar esos son a los que van y les piden dinero u otras circunstancias son las
victimas de atracos, pocos son los que tienen para regalar hablando
monetariamente pero en concreto esa es la razón que este tipo de personas
algunas veces llegan a recibir un rechazo por parte del resto de la sociedad y no
es por quienes fueron o de donde vinieron sino por el hecho que solo van para
exigir algo y no ofrecen nada a la sociedad visto de una manera muy fría en lo
personal considero que todos aportamos algo a la sociedad lamentablemente no
siempre es positivo.

Una lacra sin nombre


Así ha sucedido con la xenofobia o el racismo, que es tan antiguo como la
humanidad misma y ya tiene un nombre con el que criticarlo. La peculiaridad de
este tipo de fobias es que no son producto de una historia personal de odio hacia
una persona con la que ha tenido una mala experiencia, ni siquiera por su cuenta.
Historia o historia ancestral, pero es algo más extraño. Implica hostilidad hacia
ciertas personas, la mayoría de las cuales no se conocen entre sí porque disfrutan
el rasgo de cierto grupo que la persona que experimenta la fobia encuentra
temeroso o despreciable, o ambos. En todos los casos, quien adopta una actitud
de superioridad hacia el otro considera superior su etnia, raza, orientación sexual
o creencia y por tanto legítima para rechazar al otro. Conocerse cada vez mejor,
hay que reconocer que existe esta forma de discriminación, a la que he dado el
nombre de "aporofobia" a falta de otra mejor, preguntarse por sus causas y buscar
vías viables para superarla, es uno de los quince desafíos de nuestro tiempo. “El
nombre es solo una forma de obtener reconocimiento”.
No hay una referencia exacta de donde se da origen a esta clase de
discriminación hacia un grupo de personas en específico, pero lo que esta claro es
que no proviene solo de un solo persona sino de tal vez de un grupo de sujetos
puestos en situaciones no muy cómodas, lo que a llegado a irse desarrollando no
en un camino de redención y superación sino por uno que solo es poner mas leña
al fuego provocando más discordia entre ambos o mas grupos, en este tipo de
situaciones como en muchos casos esta tanto como la victima que está sujeta a
prejuicios basados en un modelo imaginario que ciertos aspectos pueden cambiar
según el agresor, tanto como a sufrir presión a veces más haya de
psicológicamente incluso física si los “ideales” del agresor son muy claros y del
otro lado el agresor basa su desdén hacia cierto grupo de personas, en ciertos
aspectos lo que mas impacta es que tal vez y en su mayoría estos varíen según el
agresor en cuestión lo que puede provocar preocupación, que de donde proviene
realmente este perjuicio si varia dependiendo de la persona en cuestión entonces
que factores son necesarios para la creación de esta ideología y también por que
varia y no sigue un modelo estricto si el fin es el mismo, juzgar a otro por algo.

Los delitos del odio al pobre


Esta situación de desamparo y vulnerabilidad es en sí misma consecuencia de la
aporofobia, la actitud de desprecio por los pobres, de abandono general. Pero más
que eso, como toda actitud, bajo ciertas condiciones puede llevar a cometer
delitos por acción y no sólo por omisión; en este caso contra personas en una
situación exclusión o amenaza de expulsión. Los incidentes de odio ocurren
cuando hay evidencia de desprecio y maltrato a las personas por su pertenencia a
un grupo en particular, pero este comportamiento no cumple con los requisitos
para ser un delito. Por supuesto, el hecho de que no puedan ser considerados
delitos no los hace menos importantes, y no sólo porque puede degenerar en una
conducta delictiva, pero sobre todo porque el campo de la moral es más amplio
que el del derecho, y tanto la actitud de desprecio hacia los demás como las
acciones en las que se expresa son expresión del mal carácter son, desde una
situación de humillación. Lamentablemente, el discurso de odio es igual de viejo
como humanidad. Consiste en cualquier forma de expresión dirigida a difundir,
incitar, promover o justificar el odio contra determinados grupos sociales desde
una posición de intolerancia.
Estas no son solo el planteamiento del por que personas suelen tener este tipo de
ideologías acerca de un grupo de personas tanto como la victima o agresor sino
ya es cuando el agresor comete algo que incluso la ley lo ve como un crimen, el
decir no es hacer o también dicho un pensamiento no es una acción, el tener en
mente algo y realizarlo son dos cosas que muchas veces no se cumplan y en
estos casos al llegar a tales circunstancias es algo de alarma. Todas estas
situaciones en su mayoría son extremistas, pero lamentablemente en unos casos
el extremista se sale más haya de lo convencional esto puede comparado como
persona le es negada el acceso a ciertos establecimientos por que no se crea que
tenga el capital para adquirir nada en ellos y otra seria tal vez cometer actos de
violencia como golpear o romper sus posesiones de una persona solo por el hecho
de que sean “pobres” monetariamente. El combatir con estas situaciones no es
para nada sencillo no solo para las victimas sino para la comunidad que los rodea,
un claro ejemplo de estos es estados unidos que suele haber disputas continuas
por pequeñes que suelen escalar a grados que muchos quedan estupefactos o tal
vez sin irse a los mas grave seria hacer pequeñas maldades solo por molestar.

El discurso de odio
En principio, porque la libertad de expresión es indudablemente inalienable en una
sociedad abierta para expresarse y escuchar las distintas voces. Ciertas
expresiones pueden estar prohibidas una coartada que es común en los
totalitarismos, una coartada que hemos aprendido ampliamente a lo largo de la
historia y que los que vivimos en países. Pero, en segundo lugar, ¿es cierto que la
libertad tiene límites? de expresión cuando vulnere bienes jurídicos protegidos, y
El discurso de odio puede dañar estos activos. Entonces se convierten en delitos
que deben ser reconocidos y sancionados, no sólo porque la ley tiene una función
punitiva y rehabilitadora, sino sobre todo porque también tiene una función
comunicativa. Especificar lo que una sociedad no acepta porque no está de
acuerdo con sus valores.
Debido al severo impacto que tiene tanto en las personas y comunidades que lo
padecen como en la sociedad en general, prevenir el discurso del odio es
fundamental en las diversas sociedades. Reducir la incidencia del odio en la
sociedad requiere un esfuerzo concertado de los actores sociales, como la
administración pública, los medios de comunicación, el mundo académico, las
empresas, las instituciones, y los ciudadanos en general. Lo cierto es que, a pesar
de que el discurso del odio está tipificado dentro del código corrupto, existen
numerosos elementos que contribuyen a su despliegue o, al menos, a su
impunidad. Este problema debe ser erradicado por que muchas veces
escuchamos que sucedes este tipo de cosas en otro espacios o hacia otras
personas por lo que evitamos involucrarnos debido a que podemos generar un
problema no solo a los afectados previamente nosotros podemos pasar a ser
sujetos del problema, el pensamiento de hacer algo o al menos buscar ayuda no
es lo mismo que realmente actuar y dar ese paso es un problema muy grave en la
actualidad y durante toda la historia humana por básicamente la sociedad que nos
rige a veces no siempre nos respalda de la manera que buscamos, esto tiene un
punto de vista positivo tanto como la victima no es apoyada por su entorno de la
manera que quisiese seria lo negativo pero el agresor muchas veces será juzgado
y marcado de por vida.

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