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Subdirección académica
Departamento de Ingeniería Industrial
HIGIENE Y SEGURIDAD
INDUSTRIAL
Introducción
Los accidentes y riesgos son dos cosas que siempre estarán presentes en el mundo, esto es debido a
que hay muchos factores externos que no son controlables para el ser humano, sin embargo, hay
distintas formas de prevenir riesgos y accidentes a pesar de los factores anteriormente mencionados.
En la seguridad e higiene lo que se busca más que nada es la prevención de riesgos y/o posibles
accidentes más que nada en el área laboral, sin embargo, los conocimientos adquiridos en esta
asignatura pueden ser de utilidad también, para ser aplicados en el hogar ya que la vivienda de cada
persona no está exenta de causar sufrir algún posible accidente. Hay distintas razones por las cuales
es de utilidad el realizar este tipo de investigaciones, una de las principales es que le otorga los
conocimientos básicos y de importancia al alumno para que pueda desempeñarse en el área laboral,
otra de las razones es que es de suma importancia para la industria que todos los ingenieros tenga n
un conocimiento básico sobre qué tipo de sustancias y químicos son tóxicos altamente peligrosos
para el ser humano y en caso de estar involucrado o en contacto con dichos químicos, que el
ingeniero tenga los conocimientos para saber que hacer en el momento.
En este documento serán abordados distintos temas y esto se debe a que se adjuntarán cuatro
distintas investigaciones que fueron asignadas a lo largo de la unidad.
Toxicología
¿Qué es la Toxicología?
Evidentemente, la medida de este efecto es dosis-dependiente para alguna sustancia, en una dosis lo
suficientemente baja, no tienen efecto, mientras que muchos sino es que, en la mayoría, la
sustancias tienen efectos deletéreos en algunas dosis más altas. Mucho de la toxicología trata de
compuestos exógenos al metabolismo normal de los organismos, estos compuestos se denominan
xenobióticos. Sin embargo, muchos compuestos endógenos incluyendo intermediarios metabólicos
como el glutamato, u hormonas como la tiroxina, son tóxicos cuando son administrados en dosis
más altas a las naturales. Similarmente, los micronutrientes como el selenio, es esencial en una dieta
en bajas concentraciones, pero es frecuentemente tóxico en niveles elevados. Estos efectos están
debidamente incluidos en toxicología, mientras que la generación endógena de altos niveles de
sustancias metabólicas intermedias debidas a enfermedades o defectos metabólicos no lo están, y
los efectos sobre el organismo pueden ser similares.
La Toxicología está directamente relacionada con la medicina y la agricultura, las cuales son dos
disciplinas de la biología aplicada. En medicina, el diagnóstico clínico y el tratamiento del
envenenamiento, así como los efectos tóxicos aumentados de los fármacos, son de gran
importancia. En agricultura es primordial, el desarrollo de biocidas selectivos tales como
insecticidas, herbicidas y fungicidas, y sus efectos secundarios son de gran significancia en la salud
pública. La Toxicología es considerada un área fundamental de las ciencias, porque la adaptación
del organismo al ambiente tóxico tiene implicaciones muy importantes para la ecología y la
evolución. Las herramientas de la química, la bioquímica, y la biología molecular son
fundamentales para la toxicología, tanto que el progreso de la toxicología está directamente
relacionado con el desarrollo de los nuevos métodos en estas ciencias.
A menudo el órgano afectado por el tóxico no se corresponde con el lugar donde se alcanza
la concentración más elevada de la sustancia química. Los órganos que resultan ser más
frecuentemente afectados son el SNC, el aparato circulatorio, el sistema sanguíneo y
hematopoyético, el hígado, los riñones, los pulmones y la piel. El músculo y los huesos son
menos afectados.
Sustancias toxicas
¿Qué es una sustancia tóxica?
Las sustancias químicas peligrosas son aquellas que pueden producir un daño a la salud de las
personas o un perjuicio al medio ambiente. En el año 2005 se calculaba que existían unas 30000
sustancias químicas de uso cotidiano sin conocer ni a medio ni largo plazo los posibles efectos para
la salud.
Algunos de estas sustancias tan peligrosas como las llamadas PBDE o polibromodifeniléteres,
usados como retardantes para el fuego, en pijamas o televisores, el DDT sustancia acumulable en el
cuerpo humano y propuesto en el 2001 por la ONU para su erradicación, el Bisfenol utilizados en
plásticos o el Endosarán presente en pesticidas. El control de estas sustancias se ven comprometidos
por los intereses de las industrias químicas y puestos de trabajo tanto directos como indirectos
relacionados con ellas.
Por sustancia tóxica o veneno se entiende cualquier sustancia que produce efectos nocivos cuando
penetra en el organismo. Esos efectos pueden ser leves (p. ej., dolor de cabeza o náuseas) o graves
(p. ej., convulsiones o coma), en los casos más graves, la persona intoxicada puede morir. Casi
todos los productos químicos pueden actuar como un tóxico si la cantidad presente en el cuerpo es
suficiente. Algunos son nocivos incluso en cantidades muy pequeñas (p. ej., los agentes químicos de
guerra), mientras que otros sólo lo son si la cantidad absorbida es considerable (p. ej., muchos
detergentes de uso doméstico).
¿Qué es la dosis?
Se denomina dosis a la cantidad de una sustancia química que ingresa en el cuerpo en un momento
dado. La dosis capaz de causar una intoxicación recibe el nombre de dosis tóxica.
La cantidad más pequeña que ejerce un efecto nocivo se denomina dosis umbral. Si la cantidad de
producto químico que ingresa en el cuerpo es inferior a la dosis umbral, no se produce intoxicación
e incluso puede haber efectos favorables. Los medicamentos, por ejemplo, ejercen efectos
favorables si se toman en la dosis adecuada, pero pueden producir una intoxicación si la cantidad es
excesiva.
Exposición a sustancias tóxicas
Cuando una persona entra en contacto con una sustancia tóxica se dice que está expuesta. El efecto
de la exposición dependerá de:
a) la duración del contacto,
b) del mecanismo por el que el tóxico ingresa en el cuerpo, y también
c) de la cantidad de sustancia tóxica que el organismo puede eliminar durante ese tiempo.
Por exposición crónica se entiende un contacto que dura días, meses o años. Puede ser continua o
estar interrumpida por intervalos en los que no se produce ese contacto. La exposición que sólo se
produce en el trabajo, por ejemplo, no es continua, aun cuando sea crónica.
La exposición crónica a pequeñas cantidades de una sustancia tóxica puede no dar ningún síntoma o
signo de intoxicación al principio. A veces pasan muchos días o meses antes de que el cuerpo
albergue suficiente cantidad de sustancia química para que haya intoxicación.
Una persona, por ejemplo, puede utilizar a diario un plaguicida, o beber agua contaminada con otra
sustancia tóxica, exponiéndose cada día a una pequeña cantidad; ahora bien, la cantidad del
plaguicida o de la sustancia, puede depositarse en el cuerpo aumentando gradualmente hasta que, al
cabo de muchos días, se convierte en una dosis tóxica. En ese momento es cuando la persona
empieza a sentirse mal.
Cómo ingresan las sustancias tóxicas en el organismo
La sustancia tóxica penetra en el cuerpo siguiendo una vía de exposición o vía de absorción. La
cantidad de tóxico que ingresa en la sangre en un tiempo dado depende de la vía. Si bien la vía oral
o digestiva es la más frecuente en la mayoría de las intoxicaciones, en los casos de emergencias
químicas en la industria, el transporte o como consecuencia del uso de armas químicas, las vías de
ingreso más importantes son la vía inhalatoria o respiratoria y la vía cutánea o dérmica.
• Vía respiratoria (inhalación por la boca o por la nariz)
Las sustancias tóxicas que están en forma de gas, vapor, polvo, humo o gotitas minúsculas
(aerosoles o pulverizaciones) pueden pasar a los pulmones por la boca y la nariz con la respiración.
Solamente llegan al pulmón las partículas que son invisibles por su tamaño; las más grandes quedan
retenidas en la boca, la garganta y la nariz, pudiendo ser ingeridas. Una persona puede intoxicarse
por inhalación cuando se encuentra o ingresa sin la protección adecuada a un espacio confinado
(estación de subte, shopping, sótano, etc.) donde se ha dispersado una sustancia tóxica. Las
sustancias tóxicas que llegan a los pulmones pasan con gran rapidez a los vasos sanguíneos, ya que
los conductos aéreos pulmonares (bronquiolos y alvéolos) tienen una superficie muy extensa,
paredes muy finas y un riego sanguíneo abundante.
• Contacto cutáneo (con líquidos, pulverizaciones o aerosoles)
Las personas pueden sufrir intoxicaciones si se salpican o humedecen la piel o si llevan ropa
empapada por un producto químico.
La piel es una barrera que protege al cuerpo de las sustancias tóxicas. Sin embargo, algunas pueden
atravesarla. Los tóxicos atraviesan con más facilidad la piel húmeda caliente y sudorosa que la fría
y seca; por otra parte, la piel con arañazos o quemaduras ofrece menos resistencia que la piel
intacta.
Los tóxicos que alteran la piel (p. ej., irritantes, cáusticos, vesicantes) la atraviesan con más
facilidad que los que no la dañan. A veces es posible eliminar el veneno de la piel lavándola antes
de que pase al interior del cuerpo, o utilizando soluciones descontaminantes que inactivan a la
sustancia tóxica al tiempo que la retiran de la superficie corporal. En el caso de emergencias
químicas debe tenerse la precaución de contener el agua del lavado para evitar que la misma
contamine el suelo, cursos de agua o materiales que estarán en contacto con otras personas. El agua
se tratará como residuo peligroso.
• Los efectos locales se limitan a la parte del cuerpo que está en contacto con la sustancia química,
es decir la piel, los ojos, las vías respiratorias o los intestinos. Como ejemplo de efectos locales
pueden citarse las erupciones cutáneas, las quemaduras, el lagrimeo y la tos producida por irritación
de la garganta. Muchos tóxicos producen efectos locales, pero también hay otros muchos que no lo
hacen. Más adelante se dan más detalles sobre los efectos locales.
• Los efectos generales o sistémicos son efectos más difusos que aparecen cuando se absorbe una
sustancia tóxica en el organismo. Algunos tóxicos causan a la vez efectos locales y efectos
sistémicos. Siempre que se observen efectos locales tras la exposición a una sustancia química
habrá que investigar si hay también signos o síntomas de intoxicación general.
Efectos locales
En la piel
Las sustancias químicas que atacan a la piel producen en ella enrojecimiento o erupciones, dolor,
hinchazón, ampollas o quemaduras graves. Las quemaduras pueden ser análogas a las causadas por
el fuego. Las sustancias químicas irritantes producen picazón, sensación de quemadura o dolor
cuando entran en contacto por primera vez con la piel, pero no quemaduras si se lava bien la
superficie afectada. En cambio, pueden dar lugar a quemaduras si el contacto es prolongado, por
ejemplo, en el caso de los sujetos que llevan ropa contaminada durante varias horas. Algunas
sustancias químicas irritantes no producen ningún efecto las primeras veces que entran en contacto
con la piel, pero el contacto prolongado da lugar a enrojecimiento o erupciones.
A veces las personas se hacen sensibles a una sustancia química que utilizan con frecuencia. Al
principio no se observa ningún efecto, pero al cabo de semanas o meses pueden sufrir una erupción
cada vez que la utilizan. Las sustancias químicas corrosivas, cáusticas o vesicantes producen muy
pronto quemaduras dolorosas y pueden dar lugar a la aparición de ampollas y un color grisáceo o
parduzco, finalmente pueden causar la destrucción de la piel.
En los ojos
Si entran en contacto con los ojos, las sustancias irritantes o corrosivas pueden provocar un dolor
intenso. A veces se producen rápidamente quemaduras en la superficie ocular, así como reacciones
cicatrízales o incluso ceguera. El paciente puede presentar enrojecimiento ocular y lagrimeo. Las
personas afectadas tienden a mantener los ojos cerrados y soportan mal la luz intensa.
En el intestino
Las sustancias irritantes o corrosivas pueden producir lesiones en la boca y la garganta o en la pared
interna del intestino. Los sujetos afectados presentan dolor abdominal, vómitos y diarrea. En el
material vomitado y en las heces puede haber sangre. En las quemaduras de la garganta puede
aparecer, con gran rapidez, una hinchazón localizada que impida respirar.
En las vías respiratorias y los pulmones
Algunos gases y vapores pueden tener efectos irritantes en la nariz, la garganta y las vías
respiratorias superiores, provocando tos y ahogo. Otros producen lesiones en los pulmones, dando
lugar a que se acumule agua en su interior. Esto puede suceder al poco tiempo de haberse inhalado
la sustancia tóxica o en un plazo de 48 horas. La acumulación de agua en los pulmones impide
respirar normalmente y puede crear una sensación de ahogo en la persona afectada, por lo que habrá
que hospitalizarla lo antes posible. A este estado se le da el nombre de «edema de pulmón.
Algunos de los gases que causan edema de pulmón irritan también los ojos, la nariz, la garganta y
las vías respiratorias superiores, provocando tos y sensación de ahogo. Cuando una persona
empieza a toser y siente que se ahoga, hay que sacarla de la habitación rápidamente para que respire
aire fresco, si es posible. A menudo esta simple medida evita que permanezca demasiado tiempo en
contacto con el gas y sufra una intoxicación.
Algunos gases tóxicos, tales como el monóxido de carbono, no ejercen efecto alguno en la nariz y la
garganta. Los gases tóxicos que no provocan tos ni sensación de ahogo son muy peligrosos porque
los sujetos afectados pueden ignorar que están respirando un veneno.
Un aspecto muy importante es que cuando el sujeto está inconsciente la tráquea no se cierra, por lo
que no hay nada que evite que alimentos, bebidas o vómitos pasen a los pulmones, provocando
obstrucción respiratoria o edema pulmonar. De ahí que sea muy peligroso tratar de administrar
alimentos, bebidas o medicamentos a las personas que estén inconscientes.
Efectos generales
Las sustancias tóxicas pueden ejercer efectos nocivos de muchos modos:
• Causando lesiones en ciertos órganos como el cerebro, los nervios, el corazón, el hígado, los
pulmones, los riñones o la piel. La mayor parte de los tóxicos ejercen un efecto mayor en uno o dos
órganos que en otras partes del cuerpo. A esos órganos más afectados se les denomina “órganos
diana” u “órganos blancos”.
• Bloqueando la transmisión de mensajes entre distintos nervios.
• Impidiendo que el cuerpo funcione normalmente.
Efectos en el feto
Algunas sustancias tóxicas pueden ejercer efectos nocivos en el niño cuando aún se encuentra en el
útero materno. Esto ocurre sobre todo durante el primer trimestre del embarazo, que es cuando
empiezan a formarse el sistema nervioso y los principales órganos. Las partes del niño más
afectadas son los huesos, los ojos, los oídos, la boca y el cerebro. Si las lesiones son muy graves, el
niño deja de crecer y muere. Algunas sustancias tóxicas pueden ser nocivas para el feto y no para la
madre, lo cual plantea un problema importante pues nada advierte a ésta de que su hijo está en
peligro.
ABSORCIÓN
Concepto de absorción
El proceso de absorción comprende los procesos de liberación del fármaco de su forma
farmacéutica, su disolución, la entrada de los fármacos en el organismo desde el lugar de
administración, los mecanismos de transporte y la eliminación presistémica, así como las
características de cada vía de administración, la velocidad y la cantidad con que el fármaco accede a
la circulación sistémica y los factores que pueden alterarla.
Envenenamiento industrial
El envenenamiento industrial se produce bajo dos formas principales:
A) Aguda.
Resulta de una exposición única a una concentración densa de una sustancia tóxica.
B) Crónica.
Los venenos industriales pueden penetrar al cuerpo por ingestión, por inhalación, o por absorción a
través de la piel. El grado de riesgo varía en general con la toxicidad del compuesto, el tiempo de la
exposición, y el método para entrar al cuerpo. Unas dosis pequeñas de los venenos industriales más
comunes pueden resultar más peligrosos al ser inhalados que al ser tragados. Por esta razón una
consideración primordial en el control de la salud industrial se centra en el aire del lugar de trabajo.
No existe una clasificación que con carácter general permita reunir de modo perfecto a todas las
sustancias poseedoras de algún tipo de actividad toxica. Sin embargo, se pueden citar diversos tipos
de sistematización de acuerdo con los diversos criterios que han servido para agruparlos:
Resulta evidente que ninguna de estas clasificaciones simplificadas puede ser aplicable al espectro
completo de los agentes tóxicos. Lo más apropiado es manejar una combinación de algunas de ellas
en función de los propósitos especiales para los que son destinados.
Por otra parte, conviene señalar que aquellos sistemas que se basan a la vez en las propiedades
químicas y biológicas de los agentes tóxicos y las características inherentes a la exposición a las
mismas, son los más adecuados para ser aplicados con fines legislativos o de control.
De acuerdo con la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente (LGEEPA), se
define a los materiales peligrosos como: elementos, substancias, compuestos, residuos o mezclas de
ellos que, independientemente de su estado físico, representen un riesgo para el ambiente, la salud o
los recursos naturales, por sus características corrosivas, reactivas, explosivas, tóxicas o inflamables
(características CRETI) En esta definición queda claro que los residuos peligrosos son considerados
como materiales peligrosos, puesto que los primeros constituyen la fase final de su ciclo de vida de
los segundos. También en esta definición se introduce el concepto de riesgo, diferenciándolo de las
características que hacen peligrosos a los materiales y residuos.
Los agentes químicos pueden encontrase en diferentes formas en el entorno laboral sólido, líquido y
gaseoso determinando en muchos casos la vía de entrada del agente químico.
Cuando hablemos de agentes químicos nos referiremos tanto a sustancias y preparados utilizados en
los procesos productivos de las empresas, como a los residuos generados en los mismos.
Los agentes biológicos pueden provocar enfermedades, infecciones, intoxicaciones, alergias e
incluso cáncer.
Son microorganismos bacterianos o virales, priones, protozoos, levaduras, hongos y todos sus
compuestos. Los riesgos biológicos también incluyen la transmisión de enfermedades entre
humanos (VIH, hepatitis, gripe, etc.) o entre animales y humanos (paludismo, fiebre del dengue,
enfermedad de Weil, etc.).
Los peligros asociados están presentes en la mayoría de las situaciones de trabajo, en particular en
la atención de salud, los servicios personales, la agricultura, las industrias agroalimentarias y en las
actividades en el exterior que pueden sufrir contaminación de manera natural, por ejemplo, con la
presencia de mosquitos.
En la mayoría de los lugares de trabajo, el riesgo de contraer una infección general, como un
resfriado o la gripe, no es mayor que en cualquier otro lugar público y el empleador puede no tener
que adoptar medidas al respecto. No obstante, para reducir las consecuencias de estas
enfermedades, en particular en las personas más vulnerables, así como el ausentismo provocado por
las mismas, una buena práctica pueden ser las campañas de vacunación contra la gripe.
Con todo, algunas personas que trabajan con animales están expuestas a parásitos y otras que
prestan cuidados a personas, que trabajan en laboratorios o que limpian o manipulan materiales de
desecho, pueden estar expuestas a agentes biológicos nocivos. Son agentes que pueden provocar
infecciones, si se respiran o se ingieren, o si penetran en la piel, enfermedades muy graves,
incluidos cánceres, reacciones alérgicas o ser tóxicos (si producen veneno).
Solidos:
Líquidos:
Gaseosos:
• Monóxido de carbono (CO). Una de las formas más tóxicas de la oxidación del
carbono, es un gas incoloro capaz de causar la muerte al inhalarse en grandes
cantidades. Es un gas común en el mundo industrial: es resultado de los motores de
combustión y la quema de hidrocarburos y otras sustancias orgánicas.
· RUIDO INDUSTRIAL:
Ejemplos:
• Ruidos impulsivos existentes en la industria: Estos ruidos, pueden dar lugar a daños
mecánicos tanto en el oído interno como en el ámbito timpánico y de oído medio, que se
traducen en una perdida inmediata de la capacidad auditiva.
MEDIDAS DE CONTROL:
a) Mantenimiento
b) Remplazo de máquinas
c) Sustitución de procesos
Reducción de ruido en su origen. Cabe la posibilidad de fijar las máquinas que más
ruido emiten e instalar el material necesario para evitar vibraciones o focos de ruido.
También se pueden instalar paneles acústicos en la sala para conseguir un rendimiento
sonoro adecuado.
Modificación de procesos productivos para disminuir el ruido. Este punto es quizá
más complicado para las empresas, pero a la hora de cuidar la salud de los trabajadores
no se debería evitar ningún esfuerzo.
Adopción de medidas organizativas para reducir el tiempo de exposición de los
trabajadores a los focos de ruido.
Proporcionar equipos de protección a los trabajadores. En caso de que la
exposición al ruido por parte del trabajador sea inevitable, siempre se le pueden
ofrecer tapones y orejeras para disminuir el ruido al que está expuesto.
Obligaciones de los patrones y obligaciones del trabajador
NOM-011-STPS-2001
Los trabajadores también están obligados a colaborar con la implementación y evaluación del
Programa de Conservación de la Audición, sometiéndose a los exámenes médicos, siguiendo las
medidas tomadas y utilizando el equipo de protección personal auditiva.
• Métodos generales y específicos de prevención y control. Debe incluir los siguientes elementos:
• Evaluación del NSA promedio o del Nivel sonoro continuo equivalente (NSCEA, T) y la
determinación del NER.
• Capacitación y adiestramiento.
• Vigilancia a la salud.
• Control.
EQUIPO DE SEGURIDAD
CLASIFICACIÓN
Tipos especiales: protectores dependientes del nivel, protectores para la reducción activa
del ruido, orejeras de comunicación, cascos anti- ruidos.
Vibración:
La vibración es una oscilación mecánica en torno a una posición de referencia. Es la variación,
normalmente con el tiempo, de la magnitud de una cantidad con respecto a una referencia específica
cuando dicha magnitud se hace alternativamente más grande y pequeña que la referencia. La
vibración es el resultado de fuerzas dinámicas en las máquinas o estructuras que tienen partes en
movimiento o sometidas a acciones variables. Las diferentes partes de la máquina vibrarán con
distintas frecuencias y amplitudes. La vibración puede causar molestias y fatiga. Se dice que un
cuerpo vibra cuando describe un movimiento oscilante sobre una posición de referencia. El número
de veces que un ciclo de movimiento completo tiene lugar durante el período de un segundo se
denomina Frecuencia y se mide en hercios (Hz).
Ejemplos:
Vehículos
- Sedimentación.
- Vibración de estructuras.
- Vibraciones parciales: afectan a una parte del cuerpo, (en manejo de herramientas
manuales), cuyo efecto generalmente es mano-brazo, y cuyos efectos pueden ser:
o Trastornos neurológicos,
- Vibraciones globales: afectan a todo el cuerpo, que son originadas por asientos o
plataformas de trabajo vibrantes, pueden producir:
o Dolores lumbares
o abdominales
Ejemplos:
Guantes de seguridad anti vibraciones: Sirven para amortiguar los múltiples traumas
que se producen en manos, muñecas y codos por trabajar con máquinas con
movimientos continuos oscilando de arriba a abajo o de izquierda a derecha
obligando a realizar sobreesfuerzos de desplazamientos y contención.
Botas: Ayuda disminuir el sentir de las vibraciones ya que ayuda mantener con
firmeza.
Iluminación
La medida de la potencia luminosa que somos capaces de percibir es el flujo luminoso,
cuya unidad es el lumen. El flujo radiante se mide en vatios y es la energía emitida por
unidad de tiempo. Las fuentes de iluminación son diversas, algunas naturales como la luz
del sol y otras artificiales como la luz de una vela, las lamparitas eléctricas o las linternas a
pila.
• Que el personal transite sin peligro por las zonas de paso, las vías de circulación, las
escaleras o los pasillos.
• Fatiga visual
• Molestias oculares, pesadez de ojos, picores, necesidad de frotarse los ojos, somnolencia.
• Trastornos visuales
• Fatiga Mental
2. La luz natural ofrece muchas ventajas con respecto a la claridad, al ahorro energético
y a la sensación de bienestar que otorga a las personas. Sin embargo, hay que tener en
cuenta que varía con el tiempo (hora del día, estación del año, etc.), por lo que siempre
hay que contar con la iluminación artificial, aunque sea de forma complementaria,
recurriendo al uso de bombillas, fluorescentes o lámparas de bajo consumo.
- Colocar las superficies de trabajo entre los puntos de luz y no debajo de ellos: Para
evitar reflejos y deslumbramientos.
Temperatura
La temperatura es una magnitud que mide el nivel térmico o el calor que un cuerpo
posee. Toda sustancia en determinado estado de agregación (sólido, líquido o gas), está
constituida por moléculas que se encuentran en continuo movimiento. La suma de las
energías de todas las moléculas del cuerpo se conoce como energía térmica; y la
temperatura es la medida de esa energía promedio o la propiedad que fija el sentido del
flujo de calor.
Ejemplos:
• El calor que emana el fuego de una hornilla para cocinar los alimentos.
Regular la temperatura corporal suele ser algo común cuando alguien está enfermo, sin
embargo, el monitoreo de la temperatura también tiene muchas aplicaciones en las
empresas, por ejemplo, en las industrias farmacéutica y alimentaria. Estas usan
controladores para medir o detectar el calor de un espacio cerrado y así mantener la
temperatura deseada. La función principal de los controladores de temperatura para las
compañías médicas o farmacéuticas es garantizar la eficacia y seguridad de los
medicamentos, ya que algunos son sensibles a la temperatura, por lo que los
laboratorios requieren de medidas y tecnologías que posibiliten esto.
• Ventilación
• Termostatos
• Calefacción
• Filtros de aire
La temática ambiental está adquiriendo cada vez más importancia en el comercio internacional.
Incluso las empresas que tienen una regulación flexible en sus países de origen están obligadas
a mejorar sus desempeños ambientales si es que desean competir con éxito en el extranjero.
Aunque numerosas organizaciones han tomado medidas de tipo ambiental, éstas no
necesariamente garantizan, interna y externamente, un desempeño ambiental apropiado. Ante la
necesidad de una estandarización internacional, la Organización Mundial para la
Estandarización (ISO) creó la serie de normas ISO 14000, de las cuales ISO 14001 certifica los
sistemas de gestión ambiental de las organizaciones y es la que analizaremos en este
documento.
Las normas de gestión ambiental ISO 14000 sugieren a las empresas una serie de
procedimientos de gestión que les permita asegurar a sus clientes una mejora ambiental
continua de sus productos y servicios. Mientras ISO 14000 es el nombre genérico del conjunto
de normas ambientales de la Organización Mundial para la Estandarización, ISO 14001 se
refiere específicamente al sistema de gestión ambiental, es decir, "a aquella parte del sistema
global de gestión que incluye la estructura organizacional, las actividades de planificación, las
responsabilidades, las prácticas, los procedimientos, los procesos y los recursos para desarrollar,
implementar, lograr, revisar y mantener la política ambiental"
BENEFICIOS EN GENERAL
Que es la certificación:
9 BENEFICIOS PARTICULARES
Queda claro que con un solo documento no es posible prevenir todos los posibles
accidentes y riesgos que hay en el mundo hoy en día, sin embargo, es un comienzo y es
de utilidad para que el alumno, supervisor, practicante, tenga bases para seguir
trabajando y adquiriendo conocimientos en este tipo de temas que son delicados y de
suma importancia no solo en la industria sino en cualquier tipo de trabajo en la
actualidad debido a que la seguridad e higiene siempre será algo primordial y de
implementación en cualquier zona laboral en el mundo.