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“ABILIA OCAMPO”
MONOGRAFÍA
“Analizamos la crueldad y explicamos los hechos importantes
e identificamos el contexto histórico del proceso bélico de la
Guerra del pacífico, además, las condiciones socioeconómicas
de los países implicados”
Rioja – Perú
ÍNDICE
INTRODUCCIÓN:
Pág.
INTRODUCCIÓN 03
CONTENIDO TEMÁTICO 04
4.2 Postconflicto
CONCLUSIONES 17
RECOMENDACIONES 19
FUENTES DE INFORMACIÓN 20
ANEXOS 21
INTRODUCCIÓN
CONTENIDO TEMÁTICO
https://es.wikipedia.org/wiki/Econom%C3%ADa_en_la_guerra_del_Pac%C3%ADfico
ESTADO SOCIAL
También tuvo un enorme influjo en el ámbito social, pues generó una sostenida migración de la
población chilena a los nuevos territorios incorporados, cuya industria salitrera demandó gran
cantidad de mano de obra. Esto facilitó la chilenización del espacio, pero, al mismo tiempo,
propició el surgimiento de clases proletarizadas que sentaron las bases de movimientos sociales,
políticos y reivindicatorios de derechos sociales y laborales, comúnmente vulnerados. Fue la raíz
de la "cuestión social" de las tres primeras décadas del siglo XX.
https://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-printer-100610.html
CAPÍTULO 2: INICIO DE LA GUERRA
La guerra del Pacífico fue un conflicto armado acontecido entre 1879 y 1884 que
enfrentó a Chile contra los aliados Bolivia y Perú. Fue desarrollada en el océano
Pacífico, en el desierto de Atacama y en las serranías y valles peruanos.
En febrero de 1878, Bolivia estableció un nuevo impuesto a la empresa
chilena Compañía de Salitres y Ferrocarril de Antofagasta (CSFA), violando
el tratado de límites de 1874 que prohibía nuevos impuestos o el aumento de
estos. Chile protestó y solicitó someter el pleito a un arbitraje, pero el gobierno
boliviano, presidido por Hilarión Daza, consideraba el asunto como interno y sujeto
a la jurisdicción de las cortes bolivianas. Chile insistió y le advirtió que no se
consideraría ligado al tratado limítrofe de 1874 si Bolivia no suspendía el impuesto.
Por el contrario, Daza rescindió la licencia a la compañía chilena, embargó sus
bienes y los puso a remate. El día del remate, el 14 de febrero de 1879, las fuerzas
militares chilenas ocuparon la ciudad boliviana de Antofagasta, mayoritariamente
habitada por chilenos, y avanzaron en pocos días hasta el paralelo. La zona entre
el río Loa y el paralelo permaneció bajo soberanía boliviana.
Perú, que había firmado con Bolivia un Tratado de Alianza Defensiva de carácter
secreto en 1873, ordenó preparar sus fuerzas militares y simultáneamente envió un
diplomático a Chile para mediar. Ante el avance chileno en territorio disputado,
Bolivia se declaró en estado de guerra contra Chile el 1 de marzo de 1879. Tras la
negativa de Perú a permanecer neutral, Chile declaró la guerra a ambos aliados el
5 de abril. El 6 de abril, Perú declaró el casus foederis, es decir, la entrada en vigor
de la alianza secreta con Bolivia.
Aunque el impuesto de los diez centavos y el tratado de 1873 aparecen a primera
vista como los detonantes del conflicto, las causas fundamentales de la guerra
fueron profundas y complejas. Entre ellas los historiadores señalan la vaguedad de
las fronteras coloniales, el interés por el negocio del salitre y la tensión producida
por las diferencias entre el progreso de Chile y la inestabilidad política y económica
de los aliados.
Los territorios disputados, así como las zonas aledañas, se ubican en el desierto
de Atacama, y en aquel tiempo tenían acceso expedito solo por mar. En los
primeros seis meses, Chile logró la supremacía naval, indispensable para
conquistar las zonas costeras del desierto. Antes de fines de 1879 ocupó la
provincia peruana de Tarapacá y, a comienzos de 1880, la zona de Tacna y Arica,
tras lo cual Bolivia abandonó militarmente la guerra. Luego, en enero de 1881, tras
vencer en las batallas de San Juan y Chorrillos y Miraflores al ejército peruano, las
fuerzas chilenas ocuparon Lima. Después de estas campañas, la guerra entre
Chile y Perú continuó por dos años más entre los remanentes del ejército,
guerrillas y montoneros peruanos contra las fuerzas chilenas de ocupación, hasta
la firma del Tratado de Ancón en 1883, en la que Perú, entre otras cosas, cedió
perpetuamente el departamento de Tarapacá y le fueron retenidas temporalmente
las provincias de Arica y Tacna
Al año siguiente se firmó el Pacto de Tregua entre Bolivia y Chile de 1884, que
puso fin al estado de guerra entre ambos países. Por su omisión en el tratado,
Bolivia aceptó la anexión chilena de la franja. Bolivia aceptó la ocupación militar
chilena de la zona entre el río Loa y el paralelo, pero su soberanía quedó en
disputa y fue resuelta a favor de Chile en el Tratado de 1904 entre Chile y Bolivia.
Mediante el Tratado de Lima de 1929, Tacna fue devuelta a Perú y Arica fue
cedida a Chile.
https://es.wikipedia.org/wiki/Guerra_del_Pac%C3%ADfico
Bolivia pensó que debería aliarse con el Perú, por tanto "en 1873 la cancillería de La Paz creyó
conveniente firmar un tratado de alianza defensivo con el Perú, en respuesta a una expedición de
Quintín Quevedo, armada y financiada en Valparaíso en contra del gobierno boliviano. Como
apreciamos las revueltas en contra de Daza estaban orientadas desde Chile, como las revueltas
y conflictos Internos que se dan dentro de un país donde se disputan varios la presidencia. El
tratado "secreto" peruano-boliviano "se firmó en Lima el 6 de febrero de 1873, poniéndose
especial énfasis en que el tratado era estrictamente defensivo y obligaba a los firmantes "a
defenderse de toda agresión exterior. Esto puede parecer algo con poco sentido para los
gobernantes ilustres, pues Bolivia carecía de marina de guerra y el Perú apenas tenía un barco
blindado, y en cuanto a infantería no poseían las armas más modernas, así que se juntaron, más
ambos países eran débiles.
https://es.scribd.com/document/434000909/Monografia-Guerra-Del-Pacifico
CAPÍTULO 3: CAMPAÑAS
En un intento por dominar la vía marítima, la escuadra chilena -al mando del
contralmirante Juan Williams Rebolledo- bloqueó Iquique, principal puerto
salitrero del Perú. Poco después se dirigió al puerto de Callao para sorprender
a la escuadra peruana. En Iquique quedaron dos barcos de madera, bastante
viejos, para sostener el bloqueo: la Esmeralda y la Covadonga. La primera
estaba al mando de Arturo Prat y la segunda, de Carlos Condell.
Sin embargo, el Huáscar incursionó en aguas del norte y atacó los puertos de
Antofagasta, Caldera, Coquimbo, Taltal y Tocopilla. Una de las acciones más
importantes fue la captura del transporte chileno Rímac, el 23 de julio de 1879,
que llevaba material de guerra y 240 carabineros pertenecientes al regimiento
de caballería de Yungay.
Esto no hizo más que confirmar las grandes habilidades de Miguel Grau. Ante
esto, la ciudadanía comenzó a protestar y exigió un cambio en la dirección de
la guerra. Galvarino Riveros fue nombrado jefe de la escuadra, y Juan José
Latorre tomó el mando del Cochrane, reparado en Valparaíso.
Ante la imposibilidad de comenzar una campaña terrestre e invadir el sur de
Perú, se llegó a la conclusión de que la única forma de lograrlo era hundiendo
al Huáscar.
En la mañana del 8 de octubre, las naves peruanas fueron avistadas desde
Antofagasta; frente a Angamos, en Mejillones, se toparon con una división de la
escuadra chilena. Luego, el Huáscar quedó entregado al ataque del Cochrane;
Latorre le disparó sin parar y Grau cayó en uno de los primeros tiros. Lo mismo
ocurrió con los jefes que lo suceden en el mando.
El Huáscar, reparado en Valparaíso, pasó a ser una de las naves más
poderosas de la escuadra chilena.
CAPÍTULO 4: Finalización de la guerra
Tratado de Ancón
Tratado de Ancón Ocurrió el 20 de octubre de 1883, en el balneario de Ancón,
a las afueras de Lima. Fue el tratado de paz que elaboró la entonces dirigencia
política y social del Perú para terminar con la ocupación chilena de Lima, en los
días finales de la Guerra del Pacífico (1879-1883). El documento, que llevaría
el nombre oficial de ‘Tratado de Paz y Amistad entre las Repúblicas del Perú
y Chile’, tenía 14 artículos y fue firmado por el diplomático peruano José
Antonio de Lavalle, y su similar chileno, el embajador Jovino Novoa. El cual fue
acordado
Los artículos 1°, 2°, 11°, 13° y 14° restablecen la paz (art. 1) y las leyes
mercantiles vigentes antes de la guerra (art. 11), ceden a Chile perpetua e
incondicionalmente la provincia de Tarapacá (art. 2), reconocen la validez de
los actos administrativos y judiciales chilenos ocurridos durante la ocupación
militar del Perú (art. 13) y por último, ordenan el intercambio de ratificaciones
del tratado antes de 160 días (art. 14).
El artículo 3° fue el más polémico y estipulaba que el territorio de las provincias
de Arica y Tacna continuará poseído por Chile durante 10 años tras los cuales
un plebiscito decidiría a que país querían pertenecer los habitantes. El país
ganador debía pagar $10.000.000 al otro. El plebiscito no se realizó y el statu
quo permaneció hasta 1929 cuando Tacna fue devuelta al Perú y Arica quedó
como territorio chileno. Según algunos historiadores chilenos (Bulnes III), el
"espíritu" del artículo era una cesión encubierta (para salvar el honor del
gobierno de Iglesias) de ambas provincias a Chile y destinadas a ser
entregadas a Bolivia cuando se firmara la paz con el país del altiplano. Esta
interpretación es negada por J. Basadre18 o por Cárlos Paz Soldan.19
Los artículos 4° al 10° se ocupan de las consecuencias económicas del cambio
de propiedad de los depósitos de guano y salitre. Chile debía destinar el 50%
de las ganancias de la venta de guano desde depósitos ya conocidos al pago
de la deuda peruana. Las ganancias obtenidas de depósitos desconocidos
antes del tratado serían totalmente para Chile (art. 4), esto era válido para
cualquier forma de contrato de venta (art. 7). Perú y Chile debían acordar
precios y cantidades de venta para impedir una competencia dañina (art. 5), los
acreedores debían hacer calificar sus títulos por las autoridades chilenas (art.
6) y no se reconocerían otros títulos de deuda (art. 8). Las Islas Lobos de
Afuera quedarían bajo administración y explotación chilena mientras hubiesen
depósitos de guano explotables y el 50% de las ganancias debían ser
entregadas al Perú (art. 9 y 10).
El artículo 12° estableció tribunales arbitrales que determinaron las
indemnizaciones a pagar a los ciudadanos chilenos expulsados de Perú cuyas
bienes habían sido embargados al inicio de la guerra.
Consecuencias políticas:
La derrota en la guerra del Pacífico generó inestabilidad política en Bolivia y
Perú. En este país, estalló una guerra civil que enfrentó a los partidarios de los
caudillos militares Miguel Iglesias y Andrés Cáceres, quienes se acusaban
mutuamente por la responsabilidad de la derrota en la guerra.
Consecuencias socio-económicas:
Fuentes: https://enciclopediadehistoria.com/guerra-del-pacifico/
Finalizada la guerra con Chile, el Perú debió encarar una serie de problemas
que venían desde antes del estallido del conflicto. El principal de ellos era
precisamente la deuda externa con los acreedores británicos. Estos, una vez
firmada la paz de Ancón, exigieron al gobierno peruano la cancelación de la
deuda. El Perú se hallaba en una encrucijada: no contaba con los recursos
necesarios para hacer ese pago; y al mismo tiempo, requería urgentemente de
capitales para reactivar su economía de exportación, sin la cual era imposible
cumplir con el pago de su deuda. Esta ascendía a cerca de 37 millones de
libras esterlinas, cuya amortización anual exigía un pago de cerca de dos
millones y medio de libras, suma que para el país era entonces imposible de
reunir.
FUENTES:
https://es.wikipedia.org/wiki/Reconstrucción_Nacional
CONCLUSIONES
RECOMENDACIONES
FUENTES DE INFORMACIÓN
ANEXOS