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HERIBERTO RIASCOS JIMENEZ – 1857563

ÉTICA, MORAL Y FE PÚBLICA

LA AMENAZA DE LOS CONTADORES ÉTICOS

En cuanto a la profesión contable se trata, ha estado en una constante evolución partiendo desde
épocas en las que la contabilidad comenzó siendo una necesidad de los pobladores para hacer
seguimiento a sus negocios, para ahora ser la práctica global que utilizan los países para llevar la
economía de su población. Es probable que hacer la transición de la contaduría pública a ser una
práctica profesional conlleva a abandonar muchos lineamientos que estaban ya establecidos para
ampliar significativamente lo que ofrece la profesión contable.

Así pues, la ética en la contabilidad le da la facultad al contador de permanecer independiente ante


las situaciones que se presentan en su ambiente laboral y esta le permite ser objetivos en la
información que proveen. Sin embargo, existe un argumento solido sobre la contabilidad sirve al
capitalismo dependiendo de la función que este desarrolle en la compañía. Es decir, el capitalismo
crea las circunstancias en los que el profesional debe actuar de una forma particular velando por los
intereses de los patronos que se someten al capitalismo.

Luego, entra en juego el poder que ejerce este mecanismo económico ante la sociedad partiendo de
que el poder lo ejecutan individuos particulares que asumen el control sobre otras personas que no
lo tienen, haciéndolo de estos, subordinados en la noción empresarial.

No obstante, el poder no siempre ha sido símbolo de opresión, el filósofo Foucault encuentra unos
aspectos positivos y formativos del poder. Básicamente consiste en la manera en la que se puede
incentivar al sujeto por medio de discursos específicos, de generar carácter y construir el ser
capaces de ejecutar sus actividades siendo regulados por los entes superiores.

Por otra parte, un elemento de la ética que hace al profesional integro es la autodisciplina, siendo
esta la fuerza motivadora para la disciplina proviene del sujeto que desde voluntad propia regula su
comportamiento ante cualquier situación de tal modo que actúe como se espera de un profesional
ético. Dicho comportamiento a su vez genera que el contador mantenga una posición moral en la
economía y busque maximizar la eficiencia de sus actividades con el fin de generar riqueza en las
corporaciones.

De manera que la formación universitaria juega un rol fundamental a la hora de inculcar los
principios éticos a los estudiantes; si bien es cierto, las compañías en reiteradas ocasiones usan el
poder como mecanismo de opresión para que los subordinados se dediquen a cumplir ordenes sin
cuestionar sobre la actividad que esta ejerciendo, la amenaza de los contadores éticos es que el
mismo tiene la potestad de actuar en relación como lo dice la norma. Siendo esta la responsable de
generar en el profesional contable el carácter para determinar sus propias decisiones siguiendo los
lineamientos del estado para así dar fe pública de la actividad que se está ejerciendo.

HERIBERTO RIASCOS JIMENEZ – 1857563


ÉTICA, MORAL Y FE PÚBLICA

LA RESPONSABILIDAD ÉTICA DEL CONTADOR PÚBLICO

Antes de examinar la responsabilidad ética del contador público, es pertinente conocer lo que trata
la conducta ética.

«El contador público deberá abstenerse de realizar cualquier acto que pueda afectar
negativamente la buena reputación o repercutir en alguna forma en descrédito de la profesión,
tomando en cuenta que, por la función social que implica el ejercicio de su profesión, está obligado
a sujetar su conducta pública y privada a los más elevados preceptos de la moral universal» .
Artículo 37.10 de la ley 43 de 1990

Dicho esto, en un mundo de constante crecimiento global y administrativo, la implementación de la


ética en la práctica contable es de vital importancia. Puesto que, por casos desafortunados de
personas inherentes a la responsabilidad que implica la profesión, han hecho mal uso de la
confianza que brinda el estado de ser veedores de fe pública en una compañía. No obstante, algunos
contadores están dejando de lado sus rasgos morales y tienden de ejercer la profesión de una manera
inapropiada. Así mismo, la firma del profesional contable por naturaleza tiene gran credibilidad en
los estados financieros o cuando procede a firmar una certificación, de esta manera se entiende la
gran importancia que tiene la ética en el ambiente empresarial.

Del mismo modo, la ética se hace cada vez más fuerte siendo protegida por la filosofía dado que
ésta estudia la moral y la razón del ser humano. Así pues, al relacionar ambos conceptos y llevarlo
al entorno práctico, el contador público puede realizar su actividad contable teniendo como base
fundamental la transparencia y siguiendo los principios contables que nos rige la junta central de
contadores.

Por otro lado, existen unos valores y principios que deben ser seguidos a cabalidad para realizar la
práctica contable:

<<Integridad, objetividad, independencia, responsabilidad, confidencialidad, observancia, de las


disposiciones normativas, competencia y actualización profesional, difusión y colaboración,
respeto entre colegas y conducta ética>>. Artículo 37 de la ley 43 de 1990.

Acorde con lo mencionado, al profesional contable implementar todos los principios y enseñanzas
éticas, se presume que es una persona portadora de buena fe, partiendo de que está protegido por la
norma y se rige por las buenas prácticas en las que en ella están establecidas. Sin embargo, al tener
dicha responsabilidad puede beneficiar o perjudicar a una entidad o un ente en específico, razón por
la cual se enfatiza en el transcurso de su formación personal ser un profesional integro en todos los
aspectos en los que al contador le compete.

Es necesario recalcar que, al estar en el ámbito económico, el contador público está muy expuesto a
temas de corrupción por personas que velan por sus intereses personas y usan la firma del
profesional contable (teniendo credibilidad) para fundamentar que la situación financiera que se está
presentando es totalmente verídica. Siendo así expuesta esta problemática, se implementan entes
regulatorios que permitan reportar cualquier riesgo de fraude en la que este siendo vulnerado los
intereses integrales del contador.
En vista de que el contador público en su ejercicio profesional está en mira de tantos escenarios, al
pensar en ser un profesional integral incursionando en áreas más allá de lo contable, se logra que el
estudiante tenga un panorama amplío al momento de la toma de decisiones. Al comprender la
responsabilidad social que implica realizar un trabajo libre de situaciones erróneas, haces evidencia
que la confianza pública que ha sido depositada en la profesión contable está siendo bien
representada por los contadores.

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