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REVISORÍA FISCAL
CONTADURÍA PÚBLICA
19 SEPTIEMBRE DE 2020
PRINCIPIOS ÉTICOS PARA EL EJERCICIO DE LA REVISORÍA FISCAL
INTRODUCCIÓN
Idoneidad
Los cambios normativos, la falta de seguridad jurídica en las disposiciones normativas que
surgen a diario puede conllevar a un desconocimiento de las Leyes aplicadas al marco
normativo de la contabilidad todo esto obliga a las profesiones contables a la necesidad de
estar actualizado, tener un aprendizaje íntegro adecuado con un profesionalismo de rotación
constante del conocimiento a través de las experiencias vividas en el día a día, una
adecuada planeación, preparación y ejecución de las labores en el desarrollo de la revisoría
fiscal.
Objetividad
Una actitud imparcial, sustentar sus acciones y su opinión en la realidad es uno de los
principios que rige la revisoría fiscal y se aplica especialmente cuando se trata de certificar,
dictaminar u opinar sobre los estados financieros de cualquier entidad y está ligado
íntimamente con el principio de la independencia, la capacidad de mantener libre de todo
sesgo para tratar todos los asuntos que queden bajo su análisis y estudio. Considerando el
cometido o capacidad, los profesionales deben proteger la integridad de sus servicios
profesionales y mantener la objetividad en todos sus juicios.
Existen algunos factores de situaciones y prácticas con la objetividad del revisor fiscal
- Están expuestos a situaciones que envuelven la posibilidad de que sobre ellos se
ejerzan presiones que puedan menoscabar la objetividad.
- Debe prevalecer la razonabilidad en el establecimiento de los estándares para
identificar las relaciones que probablemente, o puedan parecerlo, lesionen la
objetividad en el dictamen que emita el revisor fiscal.
- Debe evitarse las relaciones que generen prejuicio, o influencia de otros
- Tienen la obligación de asegurar que el personal o los servicios contratados se
adhiere al principio de la objetividad.
- Nunca deben aceptar dádivas o atenciones que razonablemente puedan considerarse
tienen una influencia significativa o impropia sobre el juicio profesional o aquellos
con que se relaciona y puedan perjudicar su reputación.
Confidencialidad
Los revisores fiscales no siempre deben guardar reserva en los asuntos de su competencia
pues dicha confidencialidad tiene un límite, so pena de ser partícipe de irregularidades, a
nadie se puede obligar ni a ocultar un delito, ni mucho menos puede obligársele a que se
comprometa, a mantener en reserva o por secreto profesional el conocimiento de un delito.
Oportunidad
El control de la fiscalización para que sea eficiente debe aplicarse en lo posible, antes y
durante la ocurrencia de los hechos, pues de no ser así, podría suceder que se ejecuten
operaciones que no se encuentran acordes con las normas preestablecidas, desviando a la
entidad de su objetivo central
Permanencia
Cómo órgano de fiscalización que ejerce vigilancia constante sobre las operaciones
efectuadas por una entidad objeto del examen del revisor fiscal las debe realizar de manera
continua e inspeccionar y corroborar todo proceso llevado a cabo para la toma de
decisiones que se generen en las actividades financieras de la entidad.
Integridad
El revisor fiscal al ejercer el control sobre toda la entidad de manera integral por lo que en
ninguna actividad, área, operación o función debe escapar el control de fiscalización.
Dictamen y atestación
Evidencia
Diligencia profesional
El criterio del revisor fiscal debe ejecutarse en la entidad considerándola como un todo, por
lo que sus acciones deben recaer sobre las transacciones, hechos económicos, operaciones,
áreas, decisiones y políticas de la organización
Tipos de sanciones a los que se exponen cuando actúan como revisor fiscal
De no atender todos los anteriores aspectos podría quedar expuesto al deber de responder
económica, penal y disciplinariamente por “los perjuicios que causen a la sociedad, a sus
asociados, o a terceros por negligencia o dolo en el cumplimiento de sus funciones”, como
lo expresa el artículo 211 del Código de Comercio
“El revisor fiscal que no cumpla sus funciones previstas en la ley, o que las cumpla irregularmente o
en forma negligente, o que falte a la reserva prescrita en el artículo 214, será sancionado con multa
hasta de veinte mil pesos o con suspensión del cargo, de un mes o un año, según la gravedad de la
falta u omisión. En caso de reincidencia se doblarán las sanciones anteriores y podrá imponerse la
interdicción permanente o definitiva para el ejercicio del cargo de revisor fiscal, según la gravedad
de la falta”
INHABILIDADES
según la ley 43 de 1990: “Artículo 47: Cuando un contador público hubiere actuado como
funcionario del Estado y dentro de sus funciones oficiales hubiere propuesto, dictaminado o
fallado en determinado asunto, no podrá recomendar o asesorar personalmente a favor o en
contra de las partes interesadas en el mismo negocio. Esta prohibición se extiende por el
término de seis (6) meses contados a partir de la fecha de su retiro del cargo.
Artículo 48: El contador público no podrá prestar servicios profesionales como asesor,
empleado o contratista a personas naturales o jurídicas a quienes haya auditado o
controlado en su carácter de funcionario público o de revisor fiscal. Esta prohibición se
extiende por el término de un año contado a partir de la fecha de su retiro del cargo.
Artículo 49: El contador público que ejerza cualquiera de las funciones descritas en el
artículo anterior, rehusará recomendar a las personas con las cuales hubiere intervenido, y
no influirá para procurar que el caso sea resuelto favorable o desfavorablemente.
Igualmente, no podrá aceptar dádivas, gratificaciones o comisiones que puedan
comprometer la equidad o independencia de sus actuaciones.
Artículo 50: Cuando un contador público sea requerido para actuar como auditor externo,
revisor fiscal, interventor de cuentas o árbitro en controversia de orden contable, se
abstendrá de aceptar tal designación si tiene, con alguna de las partes, parentesco dentro del
cuarto grado de consanguinidad, primero civil, segundo de afinidad o si median vínculos
económicos, amistad íntima o enemistad grave, intereses comunes o cualquier otra
circunstancia que pueda restarle independencia u objetividad a sus conceptos o actuaciones.
(Resaltado fuera de texto).
Artículo 51: Cuando un contador público haya actuado como empleado de una sociedad
rehusará aceptar cargos o funciones de auditor externo o revisor fiscal de la misma empresa
o de su subsidiaria y/o filiales por lo menos durante seis (6) meses después de haber cesado
en sus funciones”.
2. Quienes estén ligados por matrimonio o parentesco dentro del cuarto grado de
consanguinidad, primero civil o segundo de afinidad, o sean consocios de los
administradores y funcionarios directivos, el cajero, auditor o contador de la misma
sociedad.
Teniendo claro cuáles son las inhabilidades e incompatibilidades en las cuales puede
incurrir un Contador Público, y con el fin de que sus actuaciones estén revestidas de
credibilidad y de confianza pública, el ordenamiento jurídico ha creado un código de ética
cuya fuente normativa se encuentra en el artículo 42 de la mencionada ley, del cual derivan
los diez (10) principios de la ética profesional: Integridad, objetividad, independencia,
responsabilidad, confidencialidad, observancia de las disposiciones normativas,
competencia y actualización profesional, difusión y colaboración, respeto entre colegas y
conducta ética .
En este orden de ideas, las causales de inhabilidad e incompatibilidad del contador público
son taxativas, por lo tanto, su interpretación y aplicación es restringida. Tienen su
fundamento en los principios básicos de la ética profesional, cuyo objeto principal consiste
en evitar posibles riesgos a los que podría verse expuesto el contador público (revisor
fiscal) al ejercer incurso en alguna de las situaciones previstas por la ley como inhabilidad e
incompatibilidad.
No obstante lo anterior, considera éste organismo, que no se configura causal de
inhabilidad o incompatibilidad, cuando un Contador Público ejerce la revisoría fiscal en
una entidad sin ánimo de lucro, hace un crédito con un Banco X, el cual es cancelado con el
descuento de cierta cantidad de sus honorarios por parte de la entidad para la cual presta sus
servicios, ya que no se vislumbra con tal conducta la existencia de intereses comunes o
cualquier otra clase de circunstancia que afecte su independencia y objetividad, garantes de
la credibilidad y aceptación de sus actos.
En los términos anteriores se absuelve la consulta presentada, indicando que sus efectos son
los previstos por el artículo 25 del Código Contencioso Administrativo, no compromete la
responsabilidad de la entidad que la atiende, no es de obligatorio cumplimiento o ejecución,
no constituye acto administrativo y contra ella no procede recurso alguno.
SANCIONES
Conocidas las obligaciones fiscales de los contadores públicos, es conveniente mencionar
las sanciones a que está expuesto este profesional por incumplimiento de sus obligaciones
fiscales.
2. Sanción penal por el delito de falsedad en documento privado y/o por fraude procesal.
Artículo 647 (del Estatuto Tributario).- Sanción por inexactitud. Constituye inexactitud
sancionable en las declaraciones tributarias, la omisión de ingresos, de impuestos generados
por las operaciones gravadas, de bienes o actuaciones susceptibles de gravamen, así como
la inclusión de costos, deducciones, descuentos, exenciones, pasivos, impuestos
descontables, retenciones o anticipos, inexistentes, y, en general, la utilización en las
declaraciones tributarias, o en los informes suministrados a las oficinas de impuestos, de
datos o factores falsos, equivocados, incompletos o desfigurados, de los cuales se derive un
menor impuesto o saldo a pagar o un mayor saldo a favor para el contribuyente o
responsable. Igualmente, constituye inexactitud, el hecho de solicitar compensación o
devolución, sobre sumas a favor que hubieren sido objeto de compensación o devolución
anterior.
No se configura inexactitud, cuando el menor valor a pagar que resulte en las declaraciones
tributarias se derive de errores de apreciación o de diferencias de criterio entre las oficinas
de impuestos y el declarante, relativos a la interpretación del derecho aplicable, siempre
que los hechos y cifras denunciados sean completos y verdaderos.
Artículo 659 (del Estatuto Tributario).- Sanción por violar las normas que rigen la
profesión. Los contadores públicos, auditores o revisores fiscales que lleven o aconsejen
llevar contabilidades, elaboren o expidan certificaciones que no reflejen la realidad
económica de acuerdo con los principios de contabilidad generalmente aceptados, que no
coincidan con los asientos registrados en los libros, o emitan dictámenes u opiniones sin
sujeción a las normas de auditoría generalmente aceptadas, que sirvan de base para la
elaboración de declaraciones tributarias, o para soportar actuaciones ante la administración
tributaria, incurrirán en los términos de la Ley 43 de 1990, en las sanciones de multa,
suspensión o cancelación de su inscripción profesional de acuerdo con la gravedad de la
falta.
Artículo 659-1 (del Estatuto Tributario). - Sanción a sociedades de contadores públicos. Las
sociedades de contadores públicos que ordenen o toleren que los contadores públicos a su
servicio incurran en los hechos descritos en el artículo anterior, serán sancionadas por la
Junta Central de Contadores con multas. La cuantía de la sanción será determinada teniendo
en cuenta la gravedad de la falta cometida por el personal a su servicio y el patrimonio de la
respectiva sociedad.
Se presume que las sociedades de contadores públicos han ordenado o tolerado tales
hechos, cuando no demuestre que, de acuerdo con las normas de auditoría generalmente
aceptadas, ejercen un control de calidad del trabajo de auditoría o cuando en tres o más
ocasiones la sanción del artículo anterior ha recaído en personas que pertenezcan a la
sociedad como auditores, contadores o revisores fiscales. En este evento procederá la
sanción prevista en el artículo anterior.
Conclusiones
Bibliografía
Peña, Bermúdez, Jesús María. Revisoría fiscal: una garantía para la empresa, la sociedad y el
Estado (2a. ed.), Ecoe Ediciones, 2011. ProQuest Ebook Central,
https://ebookcentral.proquest.com/lib/bibliouniminutosp/detail.action?docID=3197413