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Se pueden denotar cuatro diferencias fundamentales para poder distinguir entre lo que es un
embargo retentivo y lo que es una oposición:
Naturaleza de la ejecución
La oposición como tal posee una naturaleza meramente conservatoria, es decir, que solamente
busca evitar la transferencia de bienes y pagos del tercero al deudor. Mientras que el embargo
retentivo, no solamente consta de una fase conservatoria que evita que los bienes sean
transferidos entre tercero y deudor, sino que también consiste en una fase ejecutoria en la que el
acreedor sustraer dichos bienes de las manos de tercero para así solventar la deuda que el deudor
tiene con él.
Para esto podemos retrotraernos a lo decidido por la suprema corte de justicia a partir de las
sentencias número 27 del 27 de enero de 1984, boletín judicial 878 y las sentencias 12 y 27 de
fechas 7 y 14 de septiembre de 1984 respectivamente, del boletín judicial número 886. Dicha
sentencia se establecieron qué: “ciertamente como alegra el recurrente es admitido nuestro
derecho que la mujer demandada o demandante en divorcio puede realizar en virtud del artículo
24 de la ley número 1306 bis de 1937 sobre divorcio además de la fijación de sellos sobre los
bienes de la comunidad otras medidas protectoras como la oposición a la disponibilidad de los
bienes confinados a terceras personas pero está oposición no corresponde exactamente al
embargo retentivo por su carácter esencialmente conservatorio”.
Esto nos da la idea de que a pesar de que el embargo retentivo puede incluir dentro de esta la
oposición al pago o a la entrega de bienes, a menos de que no sea confirmada mediante demanda
en validez, no se concretiza como tal, y qué, de facto, solamente deviene como una oposición al
pago a la entrega de bienes.
Cómo he establecido en los párrafos anteriores, debido a que la oposición no posee una
naturaleza ejecutoria, sino que se relega a lo meramente conservatorio, esto no exige la
transferencia de bienes entre el acreedor de la deuda principal y el tercero deudor del deudor,
sino que se limita a peticionar que dichos bienes que corren a cuenta del deudor por parte del
tercero, no sean entregados al deudor hasta tanto se pueda validar la deuda, o hasta que el deudor
pruebe ante el tercero que dicha deuda no existe. Lo cual nos lleva directamente al siguiente
punto de diferencia.
La oposición, a diferencia del embargo retentivo, no se presenta como una orden, sino más bien
como una solicitud a modo de pretensión por parte del acreedor, para que el tercero se abstenga
de realizar los pagos hasta tanto la situación qué conlleva a dicha posición sea resuelta. Está no
requiere de título ejecutorio alguno o de la autorización por parte de un juez competente para
poder ser reconocido en validez, puesto que, como habíamos establecido anteriormente, no
pretende la extirpación de bienes o pagos, ni requiere que el tercero intervenga de madera
judicial en el proceso, por lo que resulta necesaria la intervención de autoridad alguna, a menos
de que sea prueba en contrario.
Cuadro de diferencias