Está en la página 1de 9

Eusebio de Cesarea

Eusebio de Cesarea (c. 263-30 de mayo de 339,1 2​ ​


probablemente en Cesarea de Palestina), también Eusebio de Cesarea
conocido como Eusebius Pamphili (Eusebio
Panfilio, o literalmente, ‘Eusebio, amigo de
Pánfilo’), fue obispo de Cesarea, exégeta y asimismo
conocido como el padre de la historia de la Iglesia
porque sus escritos están entre los primeros relatos
de la historia del cristianismo primitivo. También
recopiló sobre los Juegos Olímpicos.3 ​ Sus
contemporáneos también le denominan Eusebio de
Palestina.4 ​

Su nombre está unido a una curiosa creencia sobre


una supuesta correspondencia entre Jesucristo y
Abgaro (rey de Edesa). Eusebio habría encontrado
las cartas, e inclusive las copió para su Historia
eclesiástica.
Información personal
Nacimiento c. 265 o años 270juliano
Índice Cesarea Marítima (Imperio
romano)
Biografía
Fallecimiento Mayo de 339
Obras Cesarea Marítima (Imperio
Obras que versan la crítica bíblica romano)
La Crónica Religión Cristianismo ortodoxo
La Historia de la Iglesia Educación
Obras históricas menores
Alumno de Doroteo de Tiro
Apologías y obras dogmáticas
Información profesional
Obras exegéticas y otras
Ocupación Teólogo, sacerdote, historiador
Comentarios concernientes a Eusebio de la Iglesia, escritor e
Su doctrina historiador
Excelencia y limitaciones Cargos Obispo católico
Véase también ocupados Obispo
Notas Obras
La Historia de la Iglesia
Referencias notables
Bibliografía
Enlaces externos

Biografía
La fecha y el lugar exacto de su nacimiento son inciertos y se sabe poco de su juventud. Conoció al
presbítero Doroteo en Antioquía y, probablemente, recibió de él instrucción exegética. En el año 296,
estando en Palestina, vio a Constantino I, que visitaba la provincia con Diocleciano. Estuvo en Cesarea
cuando Agapio era obispo del lugar. Se hizo amigo de Pánfilo, con quien estudió la Biblia, con la ayuda de
la Hexapla de Orígenes y de los comentarios compilados por Pánfilo, en la tentativa de escribir una versión
crítica del Antiguo Testamento.

En el año 307, Pánfilo fue encarcelado, pero Eusebio continuó el proyecto que con él había comenzado. El
resultado fue una apología de Orígenes, terminada por Eusebio después de la muerte de Pánfilo, que fue
enviada a los mártires en las minas de Faeno, en Egipto. Parece que, después se retiró hacia Tiro y más
tarde hacia Egipto, donde padeció la persecución por primera vez. La acusación de que obtuvo su libertad
sacrificando a los dioses paganos parece no tener fundamento.

Se vuelve a mencionar a Eusebio como obispo de Cesarea. Sucedió a Agapio, después de 313, aunque no
se sabe la fecha exacta. Se sabe poco de los primeros tiempos de su obispado. No obstante, con el inicio de
la controversia del arrianismo, toma súbitamente un lugar destacado. Arrio le pidió protección. Según una
carta que Eusebio escribió a Alejandro de Alejandría, es evidente que no negó refugio al presbítero
exiliado. Cuando el Primer Concilio de Nicea se reunió en el 325, tuvo cierto protagonismo. No era un
líder nato, ni tampoco un pensador profundo, pero como hombre bastante instruido el autor y famoso
Eusebio, cayó en la gracia del emperador, y acabó por sobresalir entre los más de 300 miembros que se
reunieron en el Concilio. Tomó una posición moderada en la controversia, y presentó el símbolo (credo)
bautismal de Cesarea que acabó por convertirse en la base del Credo de Nicea. Al final del Concilio,
Eusebio suscribió sus decretos.

La controversia arriana continuó a pesar de la realización del Concilio y Eusebio se mantuvo involucrado
en la cuestión. Por ejemplo, entró en disputa con Eustaquio de Antioquía, que se oponía a la creciente
aceptación de las teorías de Orígenes, y en especial porque este había expuesto una exégesis alegórica de
las escrituras, lo que interpretaba como el origen teológico del arrianismo. Eusebio, como admirador de
Orígenes, fue reprendido por Eustaquio, quien le acusó de alejarse de la fe de Nicea. Eusebio respondió
acusando a Eustaquio de seguir las ideas del sabelismo. Eustaquio fue acusado, condenado y depuesto en
un sínodo en Antioquía. Gran parte del pueblo de Antioquía se rebeló en contra de esta decisión
eclesiástica, mientras que los que estaban en contra de Eustaquio proponían que se nombrase a Eusebio
como nuevo obispo. Este por su parte, rechazó la oferta.

Después de que Eustaquio fuese depuesto, sus seguidores se volvieron contra Atanasio de Alejandría, un
oponente mucho más peligroso. En el 334, Atanasio fue conminado a comparecer frente a un sínodo en
Cesarea, aunque no compareció. Al año siguiente, se convocó otro sínodo en Tiro, presidido por Eusebio.
Atanasio, previendo el resultado, se dirigió a Constantinopla, donde presentó su causa al emperador.
Constantino convocó a los obispos para su corte, entre los cuales estaba Eusebio. Atanasio fue condenado
al exilio a finales del 335. En ese mismo sínodo, otro oponente fue atacado con éxito. Marcelo de Ancira
hacía mucho que luchaba contra los eusebianos, protestando contra la rehabilitación de Arrio. Acusado de
sabelianismo, fue depuesto en el 336. Constantino murió al año siguiente. Eusebio no le sobrevivió mucho
tiempo. Murió (probablemente en Cesarea), en 340, o más tarde, siendo probable que haya muerto el 30 de
mayo de 339.

Obras
De la extensa actividad literaria de Eusebio una parte relativamente grande perduró. Aunque era
considerado sospechoso de arrianismo, sus escritos resultaban indispensables, debido a que Eusebio solía
emplear citas textuales de obras que no sobrevivieron a su época, como las de Hegesipo de Jerusalén.
Las obras literarias de Eusebio reflejan el curso de su vida. Al
principio se dedicó a la crítica de los textos bíblicos, bajo la
influencia de Pánfilo y probablemente de Doroteo, de la escuela de
Antioquía. Con las persecuciones de Diocleciano y de Galerio,
dirigió su interés hacia los mártires (tanto los de su época, como los
anteriores). Ese interés lo llevó a escribir, prácticamente, una
historia de la Iglesia y, también una historia universal, que, según el
punto de vista de Eusebio, sería apenas la base para la historia
eclesiástica. Nótese que para Eusebio, la Iglesia aparece como el
motor de la Historia de la Humanidad.

Con las controversias arrianas, el interés de Eusebio pasó a las


cuestiones dogmáticas. La cristiandad era finalmente reconocida
por el Estado. Eso trajo, no obstante, nuevos problemas. Apologías Tablas de concordancia de los
diferentes de las anteriores se volvían necesarias. Por fin, Eusebio, Evangelios, por Eusebio de Cesarea.
en su papel de teólogo de la corte imperial, escribe panegíricos
hiperbólicos dedicados al emperador cristiano. A todas estas
actividades, ha de acrecentar muchos otros textos de naturaleza diversa, en la que resalta su
correspondencia, más allá de trabajos exegéticos donde se incluyen comentarios y tratados sobre
arqueología bíblica que se extienden durante todo el período de su vida literaria, dando fe de aquello por lo
que Eusebio vendría a ser reconocido por casi todos, independientemente de la opinión teológica que
profesasen: su larga erudición.

Obras que versan la crítica bíblica

Pánfilo y Eusebio se ocuparon juntos de la lectura crítica de las Escrituras tal como eran presentadas en la
versión de la Biblia llamada la Septuaginta. Se dedicaron al estudio del Antiguo Testamento y
especialmente el Nuevo Testamento. Efectivamente, parece que uno de los manuscritos de la Septuaginta
preparado por Orígenes, habría sido trabajado y revisado por los dos según San Jerónimo.

Para facilitar la búsqueda de los textos evangélicos, Eusebio dividió la versión de las Escrituras que tenía en
su poder en párrafos que remetían en una tabla sinóptica, para así encontrar los versículos que se referían
mutuamente.

La Crónica

Las dos grandes obras históricas de Eusebio son la Crónica y la Historia de la Iglesia. La primera (en
griego, Pantodape historia, o sea, Historia Universal) está dividida en dos partes. La primera parte (en
griego: Chronographia, o sea Anales o cronología) pretende ser un compendio de historia universal,
organizada según las diversas naciones, recogiendo las fuentes históricas que Eusebio pesquisó
arduamente. La segunda parte (en griego, Chronikoi kanones, o sea, Cánones cronológicos) intenta
establecer sincronismos de los documentos históricos en columnas paralelas. Es uno de los ejemplos más
antiguos de lo que es frecuente, hoy en día, en las obras de referencia, como enciclopedias, donde las tablas
cronológicas eusebianas son un instrumento de trabajo y consulta.

El trabajo original, completo, está perdido. Pudo, sin embargo, ser reconstruido a partir de los extractos
copiados (epítomes), con incansable diligencia, por los cronólogos de la escuela bizantina, especialmente
Jorge Sincelo, el Monje. Las tablas cronológicas de la segunda parte fueron preservadas totalmente en una
traducción hecha por San Jerónimo, y las dos partes existen también en una traducción en armenio, aunque
su valor es discutible debido a las alteraciones respecto al original que podrían haber sido hechas por los
traductores. La Crónica, tal como la conocemos, se extiende hasta el año 325 y fue escrita antes de la
Historia de la Iglesia.

La Historia de la Iglesia

En su Historia de la Iglesia o Historia eclesiástica (en griego, Θεοφάνεια, lit. Manifestación (o visión) de
Dios), Eusebio trató, de acuerdo con sus propias palabras, (I, i.1), de presentar la historia de la Iglesia desde
los apóstoles (historia conocida como "Hechos de los Apóstoles") hasta sus días, teniendo en cuenta los
siguientes aspectos:

1. la sucesión de los obispos en los sínodos principales;


2. la historia de los Doctores de la Iglesia;
3. la historia de las herejías;
4. la historia de los judíos;
5. las relaciones con los paganos;
6. el martirologio.

Agrupó su material de acuerdo con los reinados de los emperadores, presentándolo tal como lo encontró en
sus fuentes. El contenido consistía en:

Libro I: introducción detallada sobre Jesucristo.


Libro II: la historia de la época apostólica, desde la caída de Jerusalén hasta Tito.
Libro III: la época después de Trajano
Libros IV y V: el siglo ii
Libro VI: el período de Septimio Severo a Decio
Libro VII y VIII: historial de las persecuciones bajo el reinado de Diocleciano
Libro IX: Historia de la victoria de Constantino I sobre Majencio en el Occidente y sobre
Maximino en el Oriente.
Libro X: El restablecimiento de las congregaciones y la rebelión y conquista de Licinio.

Tal como se conserva, la obra se concluyó antes de la muerte de Crispo, en julio del 326, y desde el Libro
X que se dedicaba a Paulino de Tiro que murió antes del 325, al final del 323 o en el 324. Este trabajo es
realmente impresionante para la investigación que exigía y debió haberle ocupado por varios años. Su
martirologio fue uno de los estudios preparatorios para su obra.

La autenticidad de la Historia de la Iglesia de Eusebio no ha sido cuestionada. Los descubrimientos


recientes van revelando la forma responsable, cuidada e inteligente en que las bibliotecas de Cesarea y
Jerusalén eran administradas.

En uno de los pasajes de su obra, Eusebio declara que las calamidades sufridas por el pueblo judío se
debían al papel que estos jugaron en la muerte de Jesús. Este pasaje ha sido usado a lo largo de la historia,
para atacar tanto a judíos como a cristianos:

desde ese tiempo que las rebeliones, guerras y conspiraciones dañosas los siguió, a cada uno,
en rápida sucesión, incesantemente, en las ciudades, en toda Judea, hasta que el sitio de
Vespasiano los aplastó. Fue así que la venganza divina se cumplió para con los judíos por los
crímenes que osaron perpetrar contra Cristo.
Eusebio de Cesarea, Historia de la Iglesia: Libro II, Capítulo 6: «Las desventuras que
sucedieron a los judíos después de la injuria cometida contra Cristo». (Ver enlace original de
CBN.org en la bibliografía).
Obras históricas menores

Antes de compilar su historia de la Iglesia, Eusebio trabajó en el martirologio del período primitivo y una
biografía de Pánfilo. El martirologio no fue conservado en su totalidad, aunque se conserva todas sus
partes. Contiene:

(1) una epístola de la congregación de Esmirna concerniente el martirio de Policarpo


(2) el martirio de Pionio;
(3) los martirios de Carpo, Papilo y Agatónica;
(4) el martirologio de las congregaciones de Vienne y Lyon (actual Francia);
(5) el martirio de Apolonio.

De la vida de Pánfilo sobrevive apenas un fragmento. Una obra sobre los mártires de Palestina fue hecho
después del 311. Un gran número de fragmentos se encuentran diseminados por varios catálogos de
leyendas, todavía por compilar. La vida de Constantino fue compilada después de la muerte del emperador
y la elección de su hijo como uno de los augustos (coemperadores romanos) en el 337.
Es más un
panegírico, repleto de retórica, que una biografía, aunque tiene un gran valor histórico por los documentos
que incorpora.

Apologías y obras dogmáticas

Entre las obras de carácter apologético o dogmático pertenecen:

(1) La "Apología de Orígenes", cuyos primeros cinco


libros pudieron haber sido escritos al oír Pánfilo, en la
prisión, asistido por Eusebio, según las palabras de
Focio. Eusebio escribió el sexto libro después de la
muerte de Pánfilo. Existe actualmente una traducción en
latín del primer libro, hecha por Rufino.
(2) Un tratado contra Hierocles de Alejandría
(gobernador romano y filósofo neoplatónico), en el cual
Eusebio rebatió la glorificación de Apolonio de Tiana
hecha por Hiérocles. El trabajo se llamaba "Discurso de
Amor a la Verdad" (en griego, Philalethes logos);
(3) y (4) dos obras importantes, relacionadas la una con
la otra, conocidas por los nombres en latín Praeparatio
evangelica y Demonstratio evangelica, la primera trata
de demostrar la excelencia del cristianismo sobre todas
las religiones y filosofías paganas. La Demonstratio
consistía originalmente de veinte libros de los cuales han
Edición de 1470 de la
sido preservados diez completamente, además de un
Preparación evangélica,
fragmento del décimo-quinto libro. Eusebio consideraba
obra de Nicolas Jenson.
su obra como una introducción a la cristiandad para los
paganos. El trabajo fue completado probablemente antes
del 311.
(5) en otro texto, con origen en el período de las persecuciones, entitulado "Extractos
Proféticos" (Eklogai prophetikai), discute en cuatro libros los textos mesiánicos de las
Escrituras.
(6) el tratado "De la Manifestación Divina" (Peri theophaneias), escrito ya posteriormente
a estos, trata de la encarnación del Logos Divino, siendo, en varios aspectos, idéntico a
su Demonstratio evangelica. De esta obra sólo quedan fragmentos.
(7) el polémico tratado "Contra Marcelo", escrito alrededor del 337;
(8) un suplemento al trabajo anterior, intitulado "De la Teología de la Iglesia", donde
defiende la doctrina nicena del Logos, contra el partido de Atanasio.

Un gran número de escritos que pertenecen a esta categoría, están completamente perdidos hasta la fecha.

Obras exegéticas y otras

De las obras exegéticas de Eusebio no nos llegó nada en su forma original. Los llamados "comentarios" se
basaban en manuscritos posteriores copiados de esa serie de escritos. Una obra más completa, de naturaleza
exegética, preservado apenas en fragmentos, se intitula "Sobre las Diferencias de los Evangelios" y fue
escrito con el deseo de armonizar las contradicciones en los relatos de los diferentes evangelistas. Fue
también con propósitos exegéticos que Eusebio escribió sus tratados de arqueología bíblica:

(1) una obra sobre los equivalentes en griego de los nombres de familia hebreos.
(2) una descripción de la antigua Judea, con una relación de la distribución de las diez
tribus.
(3) un plano de Jerusalén y del Templo de Salomón.

Estos tres tratados están perdidos. Una obra intitulada "Sobre los Nombres de los Lugares en las Sagradas
Escrituras" sobrevivió hasta nuestros días.

Aun así, se debe hacer mención de los discursos y sermones, algunos de los cuales han sido preservados
hasta hoy día. Por ejemplo, un sermón para la congregación de la iglesia de Tiro, y un discurso (el
Triakontaeterikós) para el trigésimo aniversario del reinado de Constantino I en 336 donde se retrata al
emperador como rey cristiano ideal, en consonancia con el mensaje de su posterior Vita Constantini.5 ​ De
las cartas de Eusebio, quedan apenas algunos fragmentos.

Comentarios concernientes a Eusebio

Su doctrina

Del punto de vista dogmático, Eusebio se apoya totalmente en Orígenes. Tal como este teólogo, partió de la
idea fundamental de la soberanía absoluta (monarquía) de Dios. Dios es la causa de todos los seres. Pero
no es, meramente, una causa; en Él, todo lo bueno está incluido; de Él, toda la Vida se origina; y es el
origen de toda Virtud. Es el Dios Supremo, al cual, Cristo está sujeto como Dios segundo (secundario).
Dios envió a Cristo al mundo para que este participase de las gracias incluidas en la esencia divina. Cristo
es la única criatura realmente buena, poseyendo la imagen de Dios, y siendo un rayo de luz eterna; esta
comparación con el rayo de luz es, no obstante, de tal forma limitada que Eusebio necesita enfatizar
expresamente la auto-existencia de Jesús.

Eusebio trata, así, de enfatizar la diferencia de las Personas de la Trinidad, manteniendo la subordinación de
Jesús a Dios (Eusebio nunca aplica a Jesús el término theos) porque, según él, todo lo que está defendido
por otra parte es sospechoso de politeísmo o de sabelismo. Cree que Jesús es una criatura de Dios cuya
generación (creación) ocurrió antes del Tiempo. Jesús es, por su actividad, el órgano de Dios, el creador de
la vida, el principio de todas las revelaciones divinas, que, en su carácter absoluto está entronizado sobre
toda la creación. Este Logos Divino asumió un cuerpo humano sin que su ser fuese en ninguna manera
alterado. La relación del Espíritu Santo con la Santísima Trinidad es explicada por Eusebio en términos
similares a relación entre el Padre y el Hijo. Nada de lo que es presentado en esta doctrina es original de
Eusebio, remitiendo casi todo al sistema teológico de Orígenes. La falta de originalidad de Eusebio se
revela en el hecho de que nunca presentó sus propias ideas de forma sistemática.
Excelencia y limitaciones

En su época fue justamente considerado como el más instruido de sus contemporáneos. Una lista de los
documentos que usó para su Historia de la Iglesia bastaría para percibir la magnitud del trabajo hecho para
organizar y analizar todo ese acervo de material. No obstante, el conocimiento de Eusebio no se puede
comparar con el de Orígenes. Este último fue un espíritu productivo, mientras que Eusebio fue un
compilador de escritos. Eusebio se distingue, no obstante, por el cuidado con el que elaboró su obra. Un
hombre como él, sin duda alguna, se encontraba en una época en que las naciones bárbaras comenzaron a
invadir en masa a la Iglesia. En el período que siguió, nadie lo alcanzó en erudición. Los historiógrafos
eclesiásticos fueron capaces de copiarlo, pero no superaron su puesto.

Edward Gibbon, historiador que abordó las causas de la caída del Imperio Romano, señaló que la actitud
de Eusebio de Cesarea al redactar su Historia Eclesiástica no era la de un historiador (tal como se concibe
este oficio en términos modernos), sino la de un panegirista que, voluntariamente, excluye todos los
aspectos que pudieran desacreditar a la Iglesia y sólo narra los positivos.6 ​ Ya Focio, en el siglo  ix, había
definido la Vida de Constantino como un panegírico en cuatro libros (encomiastiké tetrábiblos).7 ​ Un siglo
después que Gibbon, el también historiador Jacob Burckhardt calificaba a Eusebio como «el más
repugnante de los panegiristas, que mentía a mansalva».8 ​

Véase también
Escuela teológica de Alejandría
Cánones eusebianos

Notas
Este artículo fue traducido del artículo portugués de Wikipedia, que a su vez se basa en
un artículo de la Wikipedia en inglés que fue escrito basándose en el artículo de la Schaff-
Herzog Encyclopedia of Religion. Se han hecho modificaciones adaptadas al lector
hispanohablante de Wikipedia en español.

Referencias
1. Eusebio de Cesarea. Historia Eclesiástica, 2010, p. X y XXIX.
2. Sotomayor, Manuel; y Fernández Urbiña, Manuel (coord.): Historia del cristianismo: I. El
mundo antiguo (pág. 366). Granada (España): Editorial Trotta, y Universidad de Granada, 2.ª
edición, 2005.
3. «Eusebius: Chronicle (2) - translation» (http://www.attalus.org/translate/eusebius2.html).
www.attalus.org. Consultado el 30 de enero de 2022.
4. Eusebio de Cesarea, 1994, p. 15.
5. Eusebio de Cesarea, 1994, pp. 87-88.
6. Kuhn, Alvin Boyd: Who Is This King of Glory?: A Critical Study of the Christos-Messiah
Tradition. San Diego (California): Book Tree, 2007; pág. 139.
7. Eusebio de Cesarea, 1994, p. 8.
8. Eusebio de Cesarea, 1994, pp. 8-9.

Bibliografía
Eusebio de Cesarea (1994). Vida de Constantino. Madrid: Editorial Gredos. ISBN 978-84-249-
1639-8.
Eusebio de Cesarea (2010). Historia eclesiástica. Madrid: Biblioteca de autores cristianos.
ISBN 978-84-220-1480-5.
Ayán Calvo, Juan José (1992). Didaché. Fuentes Patrísticas 3. Editorial Ciudad Nueva.
ISBN 84-86987-42-3.

Enlaces externos
Wikimedia Commons alberga una categoría multimedia sobre Eusebio de Cesarea.

Patrología. Quasten. (http://www.holytrinitymission.org/books/spanish/patrologia_j_quasten_


1.htm#_Toc23391214)
Padres de la Iglesia Antes y Después de Nicea (http://www.ccel.org/fathers2/NPNF2-01/TO
C.htm) Historia Eclessiastica y Vita Constantini en inglés.
Padres de la Iglesia (http://www.tertullian.org/fathers) Praeparatio Evangelica, Demonstratio
Evangelica, Theophania y Contra Hieroclem.
Benedicto XVI presenta a Eusebio de Cesarea (https://web.archive.org/web/200706171012
44/http://www.zenit.org/article-23988?l=spanish)

Eusebio de Cesarea (http://www.hs-augsburg.de/~harsch/graeca/Chronologia/S_post04/Eu


sebios/eus_intr.html) en el sitio (http://www.hs-augsburg.de/~harsch/augustana.html) de la
Bibliotheca Augustana (Augsburgo).
EUSEBIO DE CESAREA.
Traducciones (https://en.wikisource.org/wiki/Author:Eusebius_of_Caesarea) al inglés,
en Wikisource.
Textos de Eusebio de Cesarea (http://remacle.org/bloodwolf/historiens/eusebe/index.ht
m) en el sitio de Philippe Remacle; algunos son bilingües (griego - francés).
Philippe Remacle (1944 - 2011): helenista y latinista belga de expresión francesa.
Textos (https://el.wikisource.org/wiki/%CE%A3%CF%85%CE%B3%CE%B3%CF%81%
CE%B1%CF%86%CE%AD%CE%B1%CF%82:%CE%95%CF%85%CF%83%CE%A
D%CE%B2%CE%B9%CE%BF%CF%82_%CE%BF_%CE%9A%CE%B1%CE%B9%C
F%83%CE%B1%CF%81%CE%B5%CE%AF%CE%B1%CF%82) en griego, en
Wikisource.
Historia Eclesiástica (Ἐκκλησιαστικὴ ἱστορία).
Traducción parcial al español (http://escrituras.tripod.com/Textos/HistEcl00.htm)
(Libros I, II y III).
Traducciones al inglés (https://en.wikisource.org/wiki/Ecclesiastical_History_(Eusebi
us)), en Wikisource.
Texto (http://remacle.org/bloodwolf/historiens/eusebe/index.htm#HIS) en el sitio (htt
p://remacle.org/) de Ph. Remacle, con partes bilingües (griego - francés); trad. de
Émile Grapin. Ed. en 1905, en París.
Texto griego (http://www.perseus.tufts.edu/hopper/text;jsessionid=A76E1B71D34
3A086F48C67C818BB89BF?doc=Perseus%3atext%3a2008.01.0640), con
índice electrónico y enlaces, en el Proyecto Perseus; empleando el rótulo activo
"load", que se halla en la parte superior derecha, se obtiene ayuda en inglés con
el vocabulario griego del texto.
Texto griego (http://www.hs-augsburg.de/~harsch/graeca/Chronologia/S_post04/
Eusebios/eus_hi00.html) en el sitio de la Bibliotheca Augustana.
Texto griego (https://el.wikisource.org/wiki/%CE%95%CE%BA%CE%BA%CE%
BB%CE%B7%CF%83%CE%B9%CE%B1%CF%83%CF%84%CE%B9%CE%B
A%CE%AE_%CE%99%CF%83%CF%84%CE%BF%CF%81%CE%AF%CE%B
1_(%CE%95%CF%85%CF%83%CE%AD%CE%B2%CE%B9%CE%BF%CF%
85_%CE%9A%CE%B1%CE%B9%CF%83%CE%B1%CF%81%CE%B5%CE%
AF%CE%B1%CF%82)) en Wikisource.

Obtenido de «https://es.wikipedia.org/w/index.php?title=Eusebio_de_Cesarea&oldid=141878684»

Esta página se editó por última vez el 23 feb 2022 a las 17:37.

El texto está disponible bajo la Licencia Creative Commons Atribución Compartir Igual 3.0;
pueden aplicarse
cláusulas adicionales. Al usar este sitio, usted acepta nuestros términos de uso y nuestra política de privacidad.
Wikipedia® es una marca registrada de la Fundación Wikimedia, Inc., una organización sin ánimo de lucro.

También podría gustarte