Comentario de texto

El texto “La naturaleza inacabada” fue escrito en 1987 por Francisco Ayala, un
granadino de familia acomodada. Participó en la guerra civil, ayudando al
gobierno de la república, y en 1939 fue exiliado del país. Tras pasar por
Argentina, Puerto Rico y Estados Unidos, donde publicaba artículos en
periódicos, pudo volver a casa, donde recibió varios premios en honor a sus
textos. Escribió novelas desde los 20 años (su primera novela fue Tragicomedia
de un hombre sin espíritu), pero destacaba por escribir escritos y reflexiones
sociológicas y numerosos ensayos.

La tesis del texto es “la adaptación de una especie a su ambiente es el proceso

principal que mueve y dirige la evolución biológica”, queriéndonos decir que
depende del poder de una especie a adaptarse a las adversidades del medio, su
evolución o supervivencia. El texto está dividido en tres párrafos, el primero
hablándonos de la superioridad adaptativa que tiene la cultura, siendo esta más
rápida que las mutaciones genéticas para transmitir un cambio. En el segundo
nos comenta que la selección natural aún sigue aplicándose en los humanos, y
que nuestras presiones y adaptaciones hace que surjan cambios en esta. En el
tercero nos expone el futuro biológico de los humanos, dejando claro que quien
tiene los objetivos los tienen los humanos, no la selección natural. El texto usa
un vocabulario muy complejo, empleando abundantes tecnicismos relacionados
con las teorías evolucionistas (mutación, genética, etc.)

Este texto nos plantea que las especies se adaptan al medio debido a la
selección, natural, siendo esta una teoría propuesta por Charles Darwin, que
enuncia que las especies no se adaptan al medio, sino que es el propio medio el
que elige cuales sobreviven y cuáles no (por ejemplo, si durante una glaciación,
algunas especies no pueden soportar las bajas temperaturas, se terminará
extinguiendo, quedando solo las que consigan resistir o adaptarse al cambio).
Estas adaptaciones animales se consiguen debido a las mutaciones genéticas,
que se producen en el ADN. Pero los humanos tenemos otro método del que el
resto de seres vivos no disponen: la cultura. Un cambio cultural, como la
invención del fuego, se puede transmitir automáticamente en una generación,
mientras que los cambios genéticos son más lentos. Por ejemplo, con la
invención del móvil, en unos pocos años, ya era algo habitual: en unos años
habíamos conseguido transmitir algo a toda la especie. Las mutaciones son
mucho más lentas, tardando generaciones y generaciones en transmitir una
adaptación al medio. “El ser humano ha adaptado el ambiente a sus genes
mucho más frecuentemente que sus genes al ambiente” dice el texto, resaltando
así la velocidad y efectividad que la adaptación cultural posee, y que es uno de
las principales motivos por los que el ser humano a día de hoy es una especie
que puede estar en muchos tipos de situaciones, incluso habiendo llegado al
espacio exterior: la cultura nos hace mucho más versátiles y nos permite
adaptarnos mucho mejor al medio que cualquier otra especie. Pero esto no
significa que por este motivo ya no podamos extinguirnos: la selección natural
sigue teniendo efecto sobre nosotros, y ahora mismo estamos en un momento
de mucho riesgo, ya que la contaminación está acabando con nuestro planeta, y
esto hará que las condiciones empeoren, y solo las personas que puedan
adaptarse a esta situación podrán sobrevivir. Una de las consecuencias que
puede tener la contaminación es una bajada en el nivel de oxígeno, lo que puede
hacer que las personas con asma o algún tipo de deficiencia en el aparato
respiratorio no puedan sobrevivir, quedando solo las personas que consigan
adaptarse a la bajada de oxígeno. El hombre tendrá que evitar extinguirse o
cargarse el planeta si quiere sobrevivir y seguir cumpliendo con sus objetivos.
Esto es una de los temas más importantes del texto, la presencia de objetivos en
la existencia de la humanidad, mientras que la selección natural no tiene ningún
objetivo, ya que no es un ser con vida ni razón: esta te pone unos impedimentos;
si no eres capaz de superarlos, te extingues. Es como un juez en un juicio,
decide si eres culpable o inocente, o en el caso de la selección natural, decide si
vives o mueres. Pero si la selección natural no tiene objetivos y el ser humano si,
la pregunta es ¿Cuáles son esos objetivos? Pues estos objetivos bajo mi punto
de vista, tienen que ser como la vida misma: primero cumplir con tus
obligaciones, después ya puedes hacer lo que quieras. El primer objetivo del ser
humano debe ser sobrevivir, ya que sin nuestra existencia, no podremos cumplir
ningún tipo de objetivo. A partir de ahí, los seres humanos debemos tratar de
mejorar nuestra calidad de vida en el sentido que queramos, tanto como
individuos, disfrutando de nuestra existencia, tanto como de especie, tratando de
asegurar y mejorar en la medida de los posible nuestra existencia.

En este texto nos damos cuenta de que la cultura es una de las cualidades más
importantes que tiene el ser humano, sino la más importante, ya que nos ha
permitido adaptarnos al medio de una manera más rápida que cualquier otra
especie, además de dejarnos claro que aún somos susceptibles a la selección
natural. En conclusión, tenemos que seguir mejorando nuestra vida, y
asentarnos mejor en este planeta, ya que la selección natural no descansa, y en
cualquier momento podemos extinguirnos, y en ese momento, no habrá vuelta
atrás. Contaminar el planeta nunca ha sido una buena idea, y si seguimos
haciéndolo, llegará un momento en el que no podremos adaptarnos al medio de
ninguna manera, y desapareceremos de la Tierra todas las especies.