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¿El ARTE es sinónimo de

Belleza?
Vimos a lo largo del proyecto como los estándares de Belleza y las
concepciones de Estética van cambiando a medida que pasa el tiempo, pero…
el ARTE, Sólo nos transmite belleza?

Recordemos la primer actividad cuando quisimos definir con nuestras palabras y


vivencias que era ARTE para nosotros y donde lo encontrábamos; de este modo lo
asociamos a muchas cosas que en general nos transmitían sentimientos positivos y
hermosos… pero es realmente así todo lo que encontramos en los museos?

Revisemos una de las obras más importantes que se encuentra en el Museo del Prado.
Saturno devorando a su hijo
1819-1823
Autor: Francisco de Goya
Técnica: Óleo sobre revoco trasladado a lienzo
Estilo: Romanticismo
Tamaño: 146 cm × 83 cm
Localización: Museo del Prado, Madrid, España

El cuadro Saturno devorando a su hijo es una de las pinturas al óleo sobre revoco que
formaron parte de la decoración de los muros de la casa que Francisco de Goya adquirió en
1819, llamada la Quinta del Sordo. Saturno ocupaba un lugar a la izquierda de la ventana, en
el muro del lado este, opuesto a la entrada del comedor del piso bajo de la Quinta del Sordo.

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Las pinturas negras son 14 obras de Goya llamadas así por usar pigmentos oscuros y la
técnica de tenebrismo (*)pero también por sus temáticas sombrías.

Y para sombría, esta escena de canibalismo en la que el dios Saturno (Crono), el padre de
Júpiter (Zeus), ingiere a uno de sus hijos pues tenía el temor de que estos lo destronasen
en el futuro (como había echo él con su padre Urano).

Menos mal que Júpiter, otro de sus hijos, se salvó de ser un aperitivo más para Saturno.
Con ayuda de su madre, se escondió, y el padre engañado se tragó una roca envuelta en
pañales sin desconfiar nada. Con el tiempo Júpiter se convertiría en el jefe de los dioses,
y efectivamente destronó a su padre, obligándolo antes a vomitar a sus hermanos (en
otras versiones le cortó directamente el vientre).

Aquí Goya pinta al dios con una terrorífica mirada de locura en su rostro. Está
masticando una masa informe, la del cuerpo sanguinolento de su hijo, al que agarra con
fuerza incrustando sus dedos en la carne. El cuerpo del hijo es ya adulto comparado con
el otro Saturno devorando a su hijo del museo del Prado, aunque el de Rubens parece
una película de Disney comparado con esta barbaridad goyesca.

Saturno está casi tan aterrorizado como nosotros, los espectadores, que al ver esto
podemos indagar más en los más profundos miedos del ser humano.

La obra se puede ver con diversas lecturas: en una histórico-política, quizás Goya puede
estar hablándonos de unos tiempos oscuros en España (Absolutismo, Trienio Liberal,
Década Ominosa…) en los que no faltaron los desordenes sociales, agitación y la
represión política. Quizás Saturno represente al monarca Fernando VII devorando a su
pueblo, o quizás sea el pueblo devorándose a sí mismo, su futuro.

Otra lectura es la representación de los horrores de una enfermedad, el saturnismo


(intoxicación por plomo) que sufría Goya, y que acabó por dejarle sordo. Saturno era el
plomo para los alquimistas.

Por supuesto, muchos seguidores del psicoanálisis, ven en Saturno al perfecto ejemplo de
la relación y conflicto entre padres e hijos.Tengamos en cuenta que la pintura estaba
hecha para decorar su casa, pero tras 70 años el nuevo propietario de la quinta del sordo
los transfirió a lienzos bajo la dirección de Salvador Martínez Cubells, el principal
restaurador de arte del Museo del Prado.

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Es una imagen terrible, violentísima, oscura… en la que los contrastes lumínicos son
creados por manchas de color gruesas, y como ya es habitual en Goya, se adelanta unos
cuantos años a la historia del arte, haciendo directamente arte contemporáneo.
Expresionismo puro mucho antes de las vanguardias. Un arte modernísimo en todos los
aspectos.

Ejemplo Cuadro de Opuestos (Actividad)

-Oscuridad -Paz

-Tensión - Fluidez
-Asombro - Frenesí

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