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Diabetes Insipida y Sindrome de Secrecion Inadecuada de Adh
Diabetes Insipida y Sindrome de Secrecion Inadecuada de Adh
Keywords: Abstract
- Vasopressin Diseases of the neurohypophysis: diabetes insipidus and syndrome
- Diabetes insipidus of inappropriate antidiuretic hormone secretion
- Polyuria Diabetes Insipidus. Is a clinical disorder defined by an hypotonic polyuria because of an incapacity to
- Polydipsia concentrate the urine.
- Hyponatraemia Diagnosis. A careful anamnesis and the water deprivation test are the most important tools for a correct
diagnostic.
Treatment. For central diabetes insispidus, desmopressin could be the treatment. For nephrogenic
diabetes insipidus or dipsogenic, other considerations need to be considered.
Syndrome of Inappropriate Antidiuretic Hormone Secretion. Is the most important cause of
hyponatremia in the clinical practice.
Pathogenesis. Many causes have been described, but the most important to consider are tumors,
pulmonary diseases, central nervous system disturbances and drugs.
Diagnosis. Diagnosis of exclusión is the key point, based on anamnesis, physicial examination and a
correct differential diagnostic procedure.
*Correspondencia Treatment. Treatment of the hyponatremia depending on clinical severity and its duration; and the original
Correo electrónico: nuria.gil@hgvillalba.es cause, as a definitive treatment.
en la patología neurohipofisaria de mayor relevancia clínica, Enfermedades vasculares (síndrome de Sheehan, aneurismas, hemorragia
subaracnoidea)
centrándonos por tanto en la diabetes insípida (DI) y en el Hipofisitis (autoinmune, linfocítica)
síndrome de secreción inadecuada de la hormona antidiuré- Idiopática
tica (SIADH). Gestacional
DIN
Congénitas
Diabetes insípida Hereditaria (recesiva ligada a X o AD)
Adquiridas
La DI es un síndrome clínico caracterizado por una poliuria ERC (poliquistosis renal, uropatía obstructiva)
hipotónica debida a una incapacidad para concentrar la ori- Enfermedades metabólicas (hipercalcemia, hipocaliemia)
na. Diuresis mayores de 40 ml/kg en adultos o 100 ml/kg en Fármacos (litio, demeclociclina)
niños son sugestivos de DI. Según la etiología se identifica: Diuresis osmótica (manitol, glucosa)
a) DI central causada por secreción insuficiente de AVP; Amiloidosis
b) DI nefrogénica causada por una resistencia renal a una
DID
secreción apropiada de AVP y c) DI dipsógena causada por
Ingesta hídrica compulsiva
una ingesta excesiva de líquidos por una sensación anormal
Enfermedades esquizoafectivas (por ejemplo, esquizofrenia)
de sed. Craneofaringiomas/quiste de la bolsa de Ruthke´s
Sarcoidosis
AD: autosómica dominante; DIC: diabetes insípida central; DID: diabetes insípida dipsógena;
Etiopatogenia DIN: diabetes insípida nefrogénica; ERC: enfermedad renal crónica; TCE: traumatismo
craneoencefálico. Adaptada de Jameson JL5, et al.
La acción de esta enzima también puede desenmascarar una tro de la sed, generalmente por sarcoidosis hipotalámica o
forma parcial de DI central parcial no diagnosticada previa- craneofaringioma, en estos casos las técnicas de imagen sue-
mente, por lo que debe ser considerado el estudio en dichos len ser normales.
casos. Generalmente remite 2-3 semanas después del parto5.
Las formas familiares son extremadamente raras. Con
más frecuencia se presentan de forma autosómica dominante Manifestaciones clínicas
(AD), causada por mutaciones en el gen de AVP que conlleva
una acumulación de la proteína precursora de AVP en las La presentación clínica de la DI consiste en poliuria, nicturia
células secretoras, desencadenando un proceso de autofagia, y polidipsia de distinta gravedad, con preferencia por las be-
y provocando un desarrollo progresivo de la DI11. El síndro- bidas frías y emisión de una orina diluida (clásicamente defi-
me de Wolfram o DIDMOAD se presenta de forma autosó- nida como incolora, inodora e insípida). En situaciones en
mica recesiva (AR), con una neurodegeneración progresiva que el paciente no cubre los requerimientos hídricos se pro-
asociada con diabetes mellitus (DM), atrofia óptica y sordera duce deshidratación e hipernatremia progresiva y sus conse-
neurosensorial entre otras manifestaciones; clásicamente se cuencias sobre el SNC, disminución del nivel de conciencia
diagnosticaba DIC en un tercio de los casos, sin embargo y convulsiones. Es conveniente que estos pacientes lleven
estudios dirigidos sugieren alteración de la secreción de AVP pulseras o medallas indicando su enfermedad para que sea
prácticamente en todos los pacientes afectos12. tenido en cuenta en caso de atención médica por accidente o
enfermedad aguda. En casos graves, en los que se retrasa el
Diabetes insípida nefrogénica diagnóstico y no se instaura un tratamiento adecuado, pue-
La DI nefrogénica (DIN) se produce por una resistencia re- den llegar a producirse complicaciones urológicas, como dis-
nal al efecto antidiurético de la AVP, desarrollándose poliuria tensión vesical o hidronefrosis. En la DIN también pueden
hipotónica. presentarse calcificaciones intracraneales, retraso mental y
La terapia con litio es la causa más común, presentándo- del crecimiento.
se en el 30% de los pacientes que lo reciben de forma cróni-
ca. Parece que el mecanismo subyacente consiste en una in-
terferencia en la cascada de respuesta a AVP, disminuyendo Diagnóstico y diagnóstico diferencial
la expresión renal de aquoporina 213. Usualmente revierte de
forma lenta con la suspensión del tratamiento, pero puede Es fundamental una historia clínica detallada. Cuadros como
ser permanente si se produce una nefritis intersticial por li- poliuria sin nicturia orientan a DID, la poliaquiuria de escaso
tio. La hipocalemia, hipercalcemia y DM con control inefi- volumen orienta a prostatismo, infecciones urinarias o a pa-
ciente producen un cuadro adquirido que se corrige con la tología vesical; el uso de litio, diuréticos o de otros fármacos
normalización de los mismos. El mecanismo subyacente pro- también pueden orientarnos en el cuadro. Cuadros de inicio
bablemente sea similar al del litio. brusco sugieren DIC, mientras que formas de presentación
De entre las formas familiares, la DIN familiar AR ligada progresivas son más típicas de DIN o DID.
a X es la más frecuente, provocada por mutaciones sobre el El primer paso debe dirigirse a confirmar que el paciente
receptor V2, donde se han descrito más de 200 mutaciones. es realmente poliúrico, hasta en un 15% de los pacientes de-
Las que se asocian a pérdida completa de la función se pre- rivados por poliuria se descarta la misma5. Una diuresis me-
sentan en la infancia, mientras que las mutaciones con pérdi- nor de 3 litros descarta el cuadro de DI. Ambulatoriamente,
das parciales pueden presentarse de forma progresiva, pu- un análisis básico que incluya osmolaridad plasmática, gluce-
diendo producirse el diagnóstico en la edad adulta. Se ha mia, electrólitos (incluyendo calcio plasmático), osmolaridad
descrito una forma AR en relación con mutaciones del gen urinaria y electrólitos en orina sirve fundamentalmente para
AQP2 que afectan al dominio transmembrana del canal de descartar otros cuadros etiológicos (hipocalemia, hipercalce-
agua. También se ha descrito una forma AD, causada por mu- mia o DM mal controlada); descartados los anteriores, rara
taciones en la región carboxiterminal del dominio intracelular vez excluyen un cuadro de DI salvo si la osmolaridad urinaria
de AQP25,14. excede 600 mOsm/kg16. La osmolaridad plasmática en el lí-
mite bajo orienta hacia DID, mientras que valores elevados
Diabetes insípida dipsógena lo hacen a DIC y DIN.
La DI dipsógena (DID) está causada por una excesiva inges- Una revisión sobre la bibliografía publicada en cuanto al
ta de fluidos que lleva a una disminución de la Osmpl por diagnóstico de los pacientes con poliuria puso de manifiesto
debajo del umbral de secreción de AVP, presentando una la falta de consenso sobre la prueba a emplear y los puntos
diuresis hipotónica15. La situación mantenida puede modifi- de corte para hacer el diagnóstico diferencial14. A continua-
car el umbral de secreción de AVP y la sensibilidad, por lo ción hacemos referencia a lo más clásico y generalmente más
que puede ser difícil de diferenciar, especialmente con for- aceptado.
mas parciales de DIC. Algunas están presentes en cuadros En la mayoría de los pacientes será necesaria la realización
psiquiátricos (20% de pacientes con esquizofrenia tienen de una prueba de deshidratación. El paciente debe permane-
DID). Si a estos pacientes se les administran medicamentos cer sin aporte hídrico desde unas horas antes de iniciar la prue-
que favorecen un SIADH, presentan con alta probabilidad ba (menos cuanto mayor sea la poliuria) y durante toda la
cuadros de hiponatremia, habitualmente grave. Rara vez el prueba. Se debe medir cada hora o dos horas el volumen y
origen es secundario a una afectación hipotalámica del cen- osmolaridad urinarias, la natremia, Osmpl y AVP (si se dispone)
cada 2 horas. Cuando la osmolaridad urinaria permanece esta- idiopática. Considerar el origen autoinmune descartando la
ble dos o tres muestras consecutivas (inferior a 600 mOsm/kg) coexistencia de otras como la autoinmunidad tiroidea, gástri-
y la plasmática sigue aumentando o es mayor de 295-300 ca, etc. En los casos con diagnóstico de DIC idiopática se
mOsm/kg o [Na+] es mayor de 145-150 mmol/l se considera debe repetir la RM porque algunos tumores paraselares
la prueba como positiva. A continuación se administra vaso- como el germinoma pueden presentar DI antes de ser radio-
presina (5 UI s.c.) o desmopresina (10 mcg intranasal o 4 mcg lógicamente detectables5.
im o iv) y se monitoriza el volumen y osmolaridad urinarios
durante las siguientes dos horas, finalizando entonces. La
prueba se suspenderá considerándose negativa si se alcanza Tratamiento
una osmolaridad urinaria mayor de 600 mosm/kg16.
En la DIC la osmolaridad urinaria va aumentando du- El tratamiento de elección para la DIC es la desmopresina,
rante la prueba gracias a la AVP residual, pero no alcanza un análogo sintético de la AVP, con mínima actividad preso-
600 mosm/kg, al administrar desmopresina la osmolaridad ra, y el doble de actividad antidiurética. De forma ambula-
urinaria aumenta notablemente; 15-50% en formas parcia- toria puede ser administrada tanto por vía intranasal (en
les, 100-800% en completas. En la DIN la osmolaridad uri- forma de gotas o aerosol) como oral (bucodispersables o
naria no alcanza 600 mosm/kg y tras la administración de comprimidos gastrorresistentes), en régimen de 2-3 dosis
desmopresina no modifica la osmolaridad urinaria o al me- diarias. El objetivo del tratamiento es controlar los sínto-
nos el incremento es menor del 45%. En la DID el paciente mas, evitando un número de nicturias elevadas que provo-
puede concentrar la orina, aunque no suele sobrepasar los quen un sueño poco reparador, la poliuria diurna y la sed
500-600 mOsm/kg, dado que la polidipsia mantenida mini- continua. La complicación principal es la hiponatremia di-
miza el gradiente osmótico de la médula adrenal, la adminis- lucional, por lo que se debe buscar la mínima dosis eficaz,
tración de desmopresina no tiene efecto significativo sobre la indicándole al paciente la necesidad de evitar periodos pro-
osmolaridad. En algunos pacientes con DIC la prueba puede longados de anuria. La omisión del tratamiento una vez por
ser equívoca, ya que son hipersensibles a la AVP por sobreex- semana para provocar una situación de poliuria puede servir
presión del receptor y pueden concentrar prácticamente al de herramienta para prevenir la intoxicación hídrica. La de-
máximo la orina al final de la prueba, de forma que la admi- terminación de electrólitos de forma regular permite asegu-
nistración de desmopresina no modifique la osmolalidad uri- rar el adecuado manejo. En pacientes que tienen alterado el
naria, simulando una DID16. centro de la sed existe una especial dificultad para el manejo,
A la hora de interpretar los valores de concentración de pues se pierde uno de los feedback indispensables para la ti-
AVP tenemos que tener en cuenta que los ensayos comercia- tulación de dosis.
lizados disponibles son poco sensibles, especialmente para En los casos de DIN secundaria a trastorno metabólico
valores menores de 3 pg/ml. La AVP se une de forma impor- debe centrarse el manejo en mantener una adecuada hidrata-
tante a las plaquetas, por lo que si no se procesa adecuada- ción hasta solucionar el trastorno subyacente. En los casos de
mente la muestra puede dar valores falsamente elevados o DIN persistente o de origen familiar se puede considerar el
disminuidos. La AVP es inestable en plasma, incluso a tem- uso de hidroclorotiazida, antiinflamatorios no esteroideos y
peraturas menores de –20ºC. Con todo esto, si se produce un la restricción de sal en la dieta. El uso de desmopresina tam-
incremento en la concentración de AVP junto con el incre- bién puede ser considerado.
mento de Osmpl se puede descartar la DIC. Si se producen En los casos de DID, el único tratamiento racional es la
incrementos de la osmolalidad urinaria en respuesta a incre- reducción del volumen hídrico ingerido. Está contraindicado
mentos de AVP, se puede excluir la DIN16. el uso de desmopresina, pues tienen un alto riesgo de desa-
Se puede considerar la administración de salino hipertó- rrollar hiponatremia.
nico (0,05 ml/kg/minuto) durante no más de 2 horas para
inducir una Osmpl elevada, viendo la respuesta en concen-
tración de AVP a la misma. No se ha demostrado su superio- Síndrome de secreción inadecuada
ridad frente a la realización de una prueba de deshidratación, de la hormona antidiurética
por lo que su empleo se limita a situaciones en que esté con-
traindicada, los resultados de la prueba hayan sido equívocos La hiponatremia, definida por una [Na+] por debajo de
y se disponga de determinación de AVP. 135 mmol/l, es la alteración hidrolectrolítica más frecuente
La copeptina es un marcador estable de secreción de en la práctica clínica17-20; en torno a un 30% de los pacientes
AVP. Sin previa deprivación hídrica, una determinación basal hospitalizados pueden presentarla19,21, siendo la población
de copeptina mayor de 21,4 picomol/l diferencia la DIN del anciana el mayor grupo de riesgo en nuestro medio, y el
resto de DI con una sensibilidad y especificidad del 100%, SIADH la causa más frecuente de hiponatremia20 por cual-
haciendo innecesaria la prueba de deshidratación16. Pendien- quier etiología. Dada su frecuencia, su amplio espectro etio-
te de validar otros puntos de corte con funcionalidades diag- patogénico, sus repercusiones clínicas y económicas19, la
nósticas. dificultad para conocer su fisiopatología y la falta de unifor-
Una vez confirmado el diagnóstico de DIC es obligatorio midad en su tratamiento hacen que el SIADH sea un reto
realizar una resonancia magnética (RM) hipotálamo-hipo- diario para el médico convencional, necesitándose más es-
fisaria para descartar lesiones estructurales. En caso de no fuerzos para extender un abordaje más sencillo, accesible,
presentar una lesión se considera el diagnóstico de DIC eficaz, eficiente e individualizado siempre que sea posible.
Etiopatogenia TABLA 2
Etiología del síndrome de secreción inadecuada de hormona antidiurética
(SIADH)
Como anteriormente hemos descrito, en condiciones fisioló-
gicas la AVP disminuye su secreción, incluso suprimiéndose, Tumores
en respuesta al descenso en la osmolalidad. En el SIADH Carcinoma de células pequeñas, mesotelioma, cáncer de páncreas, cáncer gástrico,
cáncer duodenal, cáncer de endometrio, cáncer ureteral, cáncer de vejiga, cáncer
existe una limitación en la capacidad renal de excretar agua de próstata, timoma, linfoma, leucemia, cáncer orofaríngeo, sarcoma de Ewing
libre, debido a una alteración en la acción de la AVP en los Enfermedades pulmonares
receptores V2 del túbulo colector de la nefrona con el resul- Neumonías (especialmente Legionella y Mycoplasma), abscesos, empiema,
tado de un exceso de agua en el cuerpo, pero no una dismi- tuberculosis, aspergillosis, infecciones relacionadas con el VIH, fibrosis quística,
vasculitis, ventilación con presión positiva
nución de solutos como podría parecer20. Incluso con el ex-
ceso de agua total, estos pacientes mantienen la sed a pesar Patología del SNC
de la baja osmolalidad, lo cual acentúa la hiponatremia. Cirugías, traumatismos, tumores cerebrales, accidentes cerebrovasculares,
trombosis seno cavernoso, abscesos, hidrocefalia, hematoma subdural, hemorragia
Se han descrito diferentes mecanismos fisiopatológicos subaracnoidea, vasculitis, meningitis, encefalitis, fiebre manchada de las Montañas
Rocosas, malaria, sida, esclerosis múltiple, síndrome de Guillen-Barré, delirium
por los que se altera la capacidad de regular la Osm pl18,19,22,23 tremens, porfiria aguda intermitente, síndrome de Shy-Drager
y, a pesar de los avances logrados en este sentido en los últi- Fármacos
mos diez años, aún no somos capaces de explicar algunas de ADT, IMAO, IRSS, venlafaxina, fenotiazidas,clorpropramida, carbamacepina,
las situaciones que en la práctica clínica llevan al SIADH. oxcarbamacepina, valproato sódico, lamotrigina, clofibrato, ISRR, ciclofosfamida,
ifosfamida, vincristina, vinplastina, melfalán, metrotrexate, interferón, IBP, nicotina,
De los mecanismos descritos, el más frecuente se debe a la narcóticos, levetiracepam, haloperidol, AINE, MDMA, análogos de AVP
secreción ectópica de AVP de forma aleatoria e independien- (desmopresina, oxitocina, vasopresina), amiodarona, quinolonas
de edema cerebral, se presentarán con agitación, alucinacio- lalidad efectiva, pero sí ocupan volumen, haciendo disminuir
nes, incontinencia, estupor, etc., llegando en los casos más falsamente los niveles de sodio en las determinaciones de la-
graves a crisis comiciales, coma, herniación del tronco ence- boratorio. Esto hay que tenerlo en cuenta, por ejemplo, en
fálico por aumento de la presión intracraneal, hipoxia y, fi- situaciones de hipertrigliceridemia o en el tratamiento con
nalmente, la muerte. gammaglobulinas. En estos casos la Osmpl está conservada.
Desde que en el año 1967, Bartter y Schwartz describie- En otras ocasiones pueden coexistir en plasma, junto con
ran por primera vez los dos primeros casos de SIADH, se el sodio, otros solutos que sí sean osmóticamente efectivos,
creía que una hiponatremia leve era una situación de benig- favoreciendo el paso del agua del espacio intracelular al ex-
nidad que cursaba de forma asintomática sin mayores reper- tracelular. Esto sucede por ejemplo con la glucosa, el mani-
cusiones, y sobre la cual no se hacían muchos esfuerzos por tol, los contrastes iodados o la glicina utilizada en irrigacio-
optimizar su abordaje. Hasta que, a principios de este siglo, nes de ciertas cirugías. En estos casos la [Na+] disminuye
empezaron a publicarse nuevos artículos relacionando la hi- pero la osmolalidad plasmática o bien se mantiene o, en todo
ponatremia leve con un mayor déficit de atención, de memo- caso, aumenta dando lugar a una hiponatremia iso o hiperos-
ria, alteraciones en la marcha, riesgo de caídas, osteoporosis, molal. En los casos de hiperglucemia se puede tener en cuen-
prolongación de la estancia media hospitalaria y un mayor ta que por cada 100 mg/dl de glucosa el sodio desciende
número de reingresos, llegando a ser definida como factor de entre 1,6 y 2,4 mmol/l19.
riesgo independiente de mortalidad21,22. Estos hallazgos han Tras confirmar que estamos ante una hiponatremia hi-
supuesto un aumento de los esfuerzos por mejorar y unificar posmolar real, el siguiente paso es conocer la situación de
el abordaje no solo de la hiponatremia grave, sino también de volemia del paciente, descartando situaciones de hiper o hi-
los cuadros más leves. povolemia, las cuales excluyen el SIADH; ante una situación
de hiper o hipovolemia habrá que esperar, en todo caso, has-
ta la restauración de la volemia para replantear el diagnósti-
Diagnóstico y diagnóstico diferencial co19. Las herramientas que nos dan esta información serán la
anamnesis y la exploración física, con las limitaciones propias
El diagnóstico del SIADH es siempre de exclusión y queda de las mismas. Una historia de pérdidas digestivas, de utiliza-
definido, aún hoy en día, por los criterios diagnósticos que ción de diuréticos, síntomas como el ortostatismo o signos
Bartter y Schwartz describieron por primera vez en el año como la taquicardia, la sequedad de piel y mucosas o cifras
196719 con la presencia de una Osmpl menor de 275 mOsm/kg, bajas de tensión arterial orientan hacia una situación de de-
una concentración inapropiada de orina definida por una pleción de volumen. Sin embargo, la aparición de disnea,
Osm en orina mayor de 100 mOsm/kg, en un paciente clí- ortopnea, edemas o ascitis nos indicarán una situación de
nicamente normovolémico que presenta una elevación de la sobrecarga de volumen, pudiendo solicitarse una radiografía
natriuresis con una ingesta de sodio normal en la dieta de tórax para descartar datos de insuficiencia cardiaca y, en
([Na+] orina superior a 40 mmol/l) y tras haber excluido un casos de dudas, valorar la determinación de la presión venosa
hipotiroidismo y un déficit de glucocorticoides. Para facili- central. Si con todo ello aún no es posible esclarecer la vole-
tar y unificar el manejo en nuestro entorno, se recogen en la mia, recordar que la infusión de suero salino puede ayudar a
tabla 3 los criterios diagnósticos editados en las últimas reco- distinguir entre un paciente con hiponatremia hipovolémica
mendaciones españolas de manejo de SIADH20. y otro con hiponatremia normovolémica, respondiendo en el
La primera entidad a descartar en el procedimiento diag- primer caso con un aumento de los niveles de sodio y dismi-
nóstico del SIADH ante un paciente con hiponatremia son las nuyendo los de urea, y sin respuesta en los niveles de sodio o
pseudohiponatremias. Estas aparecen cuando existe en plasma muy moderada en el segundo. Una situación particular don-
un nivel aumentado de determinados solutos, como los lípidos de esta situación aparece es en el llamado síndrome cerebral
o las proteínas, que no alteran la tonicidad del plasma u osmo- pierde sal18,26,27, que ocurre en casos de patología del SNC,
más frecuentemente en la hemorragia subaracnoidea. En
este síndrome aparece hiponatremia, pero con la diferencia
TABLA 3 de que existe una situación de depleción de volumen al con-
Definiciones principales del síndrome de secreción inadecuada trario que en el SIADH. En estos casos, la mejor opción in-
de hormona antidiurética (SIADH)
dicada por distintos autores para diferenciarlos sin poner en
Hiponatremia con normovolemia clínica riesgo la situación del paciente al empeorar el contexto de
Descartado volumen circulante eficaz bajo (tensión arterial normal, depleción de volumen es la infusión de suero salino al 0,9%
no ortostatismo, no ascitis, ni edemas)
y ver la respuesta en la natremia; optar por la restricción hí-
No toma de diuréticos
drica podría tener una repercusión negativa en un paciente
No insuficiencia adrenal, no hipotiroidismo, no insuficiencia renal
con hemorragia subaracnoidea,
No situaciones de estímulo fisiológico de la vasopresina (dolor...)
Una vez diagnosticado un paciente con una hiponatre-
Con
mia verdadera y normovolémica, habría que descartar otras
*[Na+] pl< 135 mosm/l
etiologías que también cursan del mismo modo y no se de-
Osmpl < 275 mOsm/kg de agua
ben al SIADH. Estas son: el hipotiroidismo grave, pues un
Osm orina > 100 mOsm/kg de agua
[Na+] orina > 40 mmol/l en condiciones de suficiente aporte de sodio y proteínas
hipotiroidismo leve o subclínico no justifica por sí mismo
una situación de hiponatremia, y el déficit de glucocorticoi-
[Na+] pl: concentración plasmática de sodio; [Na+] orina: concentración urinaria de sodio;
Osm orina: osmolalidad en orina; Osmpl: osmolalidad plasmática. Adaptada de Runkle I, et al20. des. En este caso, también utilizaremos las herramientas ha-
bituales de anamnesis y exploración, pudiéndonos ayudar de bral, que en la mayoría de los casos afectan a una localización
una determinación bioquímica de TSH y de cortisol plasmá- pontina y clínicamente se presentan como una cuadraparesia
tico basal, ante una alta sospecha clínica de insuficiencia su- espástica y parálisis pseudobulbar; en un 10% de los casos
prarrenal puede iniciarse un tratamiento empírico como en puede afectar a una localización extrapontina que cursaría
otros casos; también podría valorarse realizar una prueba de con ataxia, alteraciones del comportamientos y del movi-
estimulación con ACTH. Otras situaciones que se presentan miento, como distonías y parkinsonismos. Este síndrome
con una hiponatremia normovolémica y no corresponden a suele aparecer a los 2-3 días de la corrección de la natremia
un SIADH aparecen, por ejemplo, cuando se administra de y el pronóstico es variable, aunque la mayoría de los pacien-
forma inapropiada una reposición hídrica hipotónica tras las tes tendrán déficits neurológicos permanentes18.
intervenciones quirúrgicas o cuando se aumenta en exceso la
ingesta hídrica ante un ejercicio extenuante, como sucede en ¿Qué hacer ante una hiponatremia aguda y/o clínicamente
los corredores de maratones. grave en el SIADH?
Ante la dificultad, en ocasiones, de diferenciar una situa- Estos casos se presentarán con una clínica neurológica flori-
ción de hipovolemia o de normovolemia en pacientes con da y, en general, se correlacionan con niveles de sodio por
hiponatremia, estudios más recientes incorporan elementos debajo de 125-120 mOsm/l, la actuación debe ser urgente y
como la copeptina o la excreción fraccional (EF) de ácido encaminada al aumento de la natremia para evitar la apari-
úrico19 como herramientas de apoyo en el diagnóstico dife- ción de edema cerebral, herniación, posibilidad de fallecer o
rencial, pero a día de hoy aún ninguna de las dos está exten- secuelas neurológicas permanentes. Se recomienda un au-
dida en la práctica clínica actual y, aunque la EF de ácido mento inicial de 4-6 mOsm/l para alcanzar una situación
úrico parece que puede aportar valor en el proceso diagnós- clínica de mayor seguridad, pues estos aumentos se han rela-
tico, se precisan mayores estudios hoy en día. cionado con un nivel de disminución del edema cerebral de
Además del diagnóstico certero del SIADH, no podemos aproximadamente de un 50%, suficiente en general para salir
olvidar el estudio paralelo de diagnóstico etiológico del mis- de la situación de urgencia vital. Las causas de SIADH que
mo para llegar a la causa origen de la hiponatremia e iniciar tienden a presentarse de este modo son, principalmente, la
su tratamiento en cuanto nos sea posible, pues será el único patología intracraneal aguda, tumores o determinados cua-
tratamiento definitivo del SIADH. Para ello habrá que des- dros psiquiátricos.
cartar la utilización de fármacos inductores del SIADH o Para resolver esta situación el tratamiento indicado es la
consumo de MDMA, buscar razonablemente la existencia de utilización de suero salino hipertónico al 3% (SSH), en infu-
un tumor no diagnosticado, una patología pulmonar o del sión continua o en bolo. En esta situación de urgencia, cada
SNC. vez se recomienda menos el uso de fórmulas matemáticas
que complican un procedimiento que ha de ser rápido y efi-
caz20. Optando por instaurar ritmos fijos de infusión en fun-
Manejo terapéutico ción únicamente de la gravedad clínica neurológica, utilizan-
do, por ejemplo, una infusión de SSH a una velocidad de
El primer paso para poder prescribir el tratamiento adecua- 0,5 mmol/hora o 1 mmol/hora en situaciones más modera-
do ante una hiponatremia es haber hecho un diagnóstico das y o de 2 mmol/hora en casos de coma, estupor, crisis
certero del origen de la misma y, en el caso del SIADH, tam- comiciales o distrés respiratorio19,20. Otra opción puede ser la
bién de su causa subyacente. De este modo podremos corre- administración de bolos repetidos de 100 ml de SSH, sepa-
gir eficazmente, y sin secuelas, tanto la hiponatremia como la rados 10 minutos entre ellos, que pueden repetirse un máxi-
causa origen y perpetuante de la misma. mo de tres veces hasta lograr una mejoría de la situación
El segundo punto importante es saber distinguir una si- clínica de gravedad. Situaciones de especial cuidado por el
tuación que precisa una actuación urgente por una hipona- riesgo mayor de gravedad neurológica son los niños y las
tremia grave de la que no, la cual viene determinada princi- mujeres en edad fértil19,20. En ambos casos deben monitori-
palmente por el cuadro clínico neurológico; siendo este zarse los niveles de sodio durante todo el proceso de correc-
expresión de la situación de edema cerebral existente y que ción, siendo obligada una primera determinación a las 2 ho-
varía en función de los mecanismos de adaptación a la hipo- ras del inicio del tratamiento. Ajustando posteriormente el
natremia que cada individuo sea capaz de poner en marcha. tratamiento en función de los niveles de natremia y pudiendo
Por ello, es fundamental tratar de conocer el tiempo de ins- seguir los distintos algoritmos terapéuticos para el manejo de
tauración de la hiponatremia y evitar la aparición del llamado la hiponatremia por cualquier causa, como el aconsejado
síndrome desmielinizante osmolar (SDO)20, derivado de una para estos casos por las recomendaciones españolas20.
corrección demasiado rápida de la natremia, sobre todo en
pacientes que han tenido tiempo de generar un mecanismo ¿Qué hacer ante una hiponatremia crónica y/o clínicamente
adaptativo ante el edema cerebral como son los de mayor leve-moderada en el SIADH?
tiempo de evolución. También tienen un mayor riesgo de Estos pacientes presentarán habitualmente una sintomatolo-
SDO y hay que extremar la precaución en aquellos casos de gía más larvada, propia de una hiponatremia más evoluciona-
historia clínica de alcoholismo, en pacientes con desnutri- da en el tiempo y con una [Na+] posiblemente por encima de
ción grave y niños o mujeres jóvenes y delgadas. El SDO 120-125 mosm/l. En estos casos, aunque el objetivo final si-
tiene un diagnóstico clínico, aunque pueden encontrarse ha- gue siendo restaurar los niveles de sodio, lo prioritario, antes
llazgos característicos en la resonancia magnética (RM) cere- que la rapidez en la instauración del tratamiento, será una
✔
18. Smith DM, McKenna K, Thompson CJ. Hyponatraemia. Clin Endocri-
nol. 2000;52:667-78.
✔
24. t Spasovski G, Vanholder R, Allolio B, Annane D, Ball S, Bichet D,
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