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ACTUALIZACIÓN

Enfermedades de la neurohipófisis: diabetes


insípida y síndrome de secreción inadecuada
de la hormona antidiurética
N. Gil-Fournier*a, L. García-Valdecasasa y J. Álvarez Hernándezb
a
Servicio de Endocrinología y Nutrición. Hospital General de Villalba. Villalba. Madrid. España. bServicio de Endocrinología y Nutrición.
Hospital Universitario Príncipe de Asturias. Alcalá de Henares. Madrid. España.

Palabras Clave: Resumen


- Vasopresina Diabetes Insípida. Enfermedad caracterizada por un cuadro de poliuria hipotónica debido a una incapa-
- Diabetes insípida cidad para concentrar la orina.
- Poliuria Etiopatogenia. El origen puede ser central, nefrogénico o dipsógeno.
- Polidipsia Diagnóstico diferencial. Una cuidada anamnesis y el test de deshidratación son las herramientas más
importantes para llegar al diagnóstico certero.
- SIADH
Tratamiento. En el caso de un origen central, la desmopresina será el tratamiento de elección. Para un
- Hiponatremia origen nefrogénico o dipsógeno, habrá que tener en cuenta otras consideraciones.
Síndrome de secreción inadecuada de hormona antidiurética. Es la causa más frecuente de hiponatre-
mia en la práctica clínica habitual.
Etiopatogenia. Son numerosas, pero las más importantes en nuestro medio son los tumores, enfermeda-
des pulmonares, alteraciones del sistema nervioso central y las inducidas por fármacos.
Diagnóstico. Es de exclusión, por lo tanto la anamnesis, la exploración física y solo un correcto diagnós-
tico diferencial siguiendo todos los pasos nos llevarán al mismo.
Tratamiento. El de la hiponatremia en sí, dependiendo de la gravedad clínica del paciente y el tiempo de
evolución de la hiponatremia, y el de la causa originaria, como tratamiento definitivo.

Keywords: Abstract
- Vasopressin Diseases of the neurohypophysis: diabetes insipidus and syndrome
- Diabetes insipidus of inappropriate antidiuretic hormone secretion
- Polyuria Diabetes Insipidus. Is a clinical disorder defined by an hypotonic polyuria because of an incapacity to
- Polydipsia concentrate the urine.

- SIADH Pathogenesis. The causes can be central, nephrogenic or dipsogenic.

- Hyponatraemia Diagnosis. A careful anamnesis and the water deprivation test are the most important tools for a correct
diagnostic.
Treatment. For central diabetes insispidus, desmopressin could be the treatment. For nephrogenic
diabetes insipidus or dipsogenic, other considerations need to be considered.
Syndrome of Inappropriate Antidiuretic Hormone Secretion. Is the most important cause of
hyponatremia in the clinical practice.
Pathogenesis. Many causes have been described, but the most important to consider are tumors,
pulmonary diseases, central nervous system disturbances and drugs.
Diagnosis. Diagnosis of exclusión is the key point, based on anamnesis, physicial examination and a
correct differential diagnostic procedure.
*Correspondencia Treatment. Treatment of the hyponatremia depending on clinical severity and its duration; and the original
Correo electrónico: nuria.gil@hgvillalba.es cause, as a definitive treatment.

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ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS (III)

Introducción directo débil para la hormona adrenocorticotropa o cortico-


tropina (ACTH), acción que parece más bien sinérgica con
Utilizamos el término neuroendocrinología para referirnos la hormona liberadora de corticotropina (CRH) hipotalámica.
al campo de la endocrinología que estudia la fisiopatología y La secreción de AVP responde fundamentalmente a
las enfermedades que derivan de la disfunción de los meca- cambios en la osmolaridad plasmática (Osmpl) y en menor
nismos regulatorios, síntesis o secreción de las hormonas medida de presión, otros procesos que estimulan la secre-
hipotálamo-hipofisarias y la repercusión clínica de estas alte- ción, pero de menor potencia, son la náusea, la cirugía abdo-
raciones. La neurohipófisis está situada en la parte posterior minal y la hipoglucemia.
de la hipófisis, y está constituida por tejido nervioso, formada Las células especializadas en la detección de cambios os-
únicamente por los axones distales que provienen de las neu- móticos en el plasma se sitúan en los órganos circunventri-
ronas magnocelulares del hipotálamo. Las hormonas sinteti- culares del hipotálamo anterior. Cambios en la Osmpl trans-
zadas en la hipófisis posterior son la oxitocina y la arginina- miten la información, vía núcleo mediano, al núcleo
vasopresina (AVP) u hormona antidiurética (ADH). De ellas, supraóptico y paraventricular, induciendo la producción de
aún a día de hoy, la que tiene una mayor repercusión patoló- AVP y su liberación. El estímulo principal es la concentra-
gica es la AVP, sobre la cual centraremos este trabajo. Todavía ción de sodio en plasma ([Na+]), pues variaciones en la con-
no ha podido ser bien definida la fisiología de la oxitocina en centración de urea y glucosa no producen cambios tan im-
los seres humanos por la importante variabilidad en su secre- portantes en la secreción de AVP4.
ción y funciones en distintos mamíferos, pero su papel fun- En la figura 1 comprobamos cómo existe una relación
damental está en la contracción uterina en el parto y en la directa entre la Osmpl y la concentración de AVP plasmática,
estimulación de la lactancia. expresada por la ecuación pAVP = 0,43 (pOsm-284)6. Una de
La AVP tiene una estructura polipeptídica compuesta las características de esta relación es el umbral de secreción
por nueve aminoácidos, sintetizada fundamentalmente por de AVP, presente en 284 mOsm/kg. Valores por debajo in-
las neuronas magnocelulares de los núcleos paraventricular y hiben la secreción de AVP, produciéndose una poliuria hipo-
supraóptico del hipotálamo anterior. Dichas neuronas tienen tónica que revierte la situación. A partir de dicho umbral,
proyecciones axonales hasta la hipófisis posterior, desde don- conforme aumenta la Osmpl va haciéndose mayor la concen-
de secretan la hormona al sistema circulatorio para ejercer su tración de AVP, produciendo un incremento progresivo de la
acción endocrina. También se ha descrito la presencia de concentración en la orina y evitando la progresiva deshidra-
neuronas productoras de vasopresina a otros niveles del sis- tación. El umbral para la sensación de sed es el mismo que
tema nervioso central (SNC), teniendo un efecto neuro- para la secreción de AVP6. Tanto el umbral de secreción
transmisor y/o neuromodulador. como la sensibilidad a la AVP tienen una importante variabi-
Tanto el gen que codifica para AVP como el que lo hace lidad interindividual, de manera que parece genéticamente
para oxitocina se localizan en el cromosoma 20, ambas guardan determinada, pero sí que pudiera tener un patrón reproduci-
una gran similitud estructural y son secretadas en la neuro- ble en el mismo individuo. Hay situaciones que modifican la
hipófisis. El gen de AVP transcribe para pre-pro-AVP-NPII, relación como en la gestación, en la que se produce una dis-
un precursor compuesto por AVP-neurofisina II-copeptina. minución del umbral de secreción pero no una modificación
Una vez procesado y activada la despolarización neuronal se en la sensibilidad (con la característica hiponatremia fisioló-
libera por exocitosis al torrente sanguíneo la AVP, la neuro-
fisina II y la copeptina.
La vasopresina ejerce su función activando los receptores
específicos V1-3, receptores de 7 dominios transmembrana
acoplados a proteínas G. El receptor V1 está presente en el 20
músculo liso, hígado, plaquetas y en el SNC; tiene una míni-
ma acción presora a nivel sistémico a concentraciones habi-
16
tuales1. Pero tiene un mayor efecto vasoconstrictor a nivel
esplácnico, renal y hepático2, por lo que se considera su uso
pAVP (pmol/L)

para el tratamiento de la hemorragia secundaria a varices 12


esofágicas. En concentraciones supra fisiológicas sí se ha
comprobado una importante acción presora a nivel sistémi- 8
co, por lo que se ha desarrollado un análogo altamente selec-
tivo para tratar a pacientes con sepsis3. El receptor V2 se
4
expresa fundamentalmente a nivel renal en la membrana ba-
socelular del túbulo contorneado distal y túbulos colectores.
LD
La unión al receptor estimula el reclutamiento de aquopori-
280 300 320
nas (canales selectivos de agua), lo que permite la reabsor-
ción tubular de agua y la concentración de la orina. Efectos pOsm (mOsmol/kg)
extrarrenales del V2 incluyen la liberación de factor VII por
los hepatocitos y de factor de von Willebrand por el endote- Fig. 1. Respuesta de la arginina-vasopresina plasmática a incrementos en la
lio vascular. El receptor V3 está presente en las células corti- Osmpl (pOsm) inducida por la infusión de suero salino hipertónico en adultos
jóvenes. Tomada de Jameson JL, et al5.
cotropas de la hipófisis anterior, siendo la AVP un secretagogo

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ENFERMEDADES DE LA NEUROHIPÓFISIS: DIABETES INSÍPIDA Y SÍNDROME DE SECRECIÓN INADECUADA
DE LA HORMONA ANTIDIURÉTICA

gica del embarazo). Otro ejemplo se encuentra en el enveje- TABLA 1


Causas de la diabetes insípida
cimiento, produciéndose una caída en el umbral de la sed, un
incremento en las concentraciones de AVP y una respuesta DIC
más elevada de secreción de la misma. Congénitas
Los barorreceptores están situados en la aurícula, el seno Hereditaria (ligada a X o AD)
carotideo y el cayado aórtico. Al contrario que con los cam- DIDMOAD
bios en la osmolaridad, en los que pequeñas modificaciones Adquiridas
inducen importantes cambios en la secreción de AVP, se pre- Cirugía hipofisaria
cisan importantes caídas en la presión (en torno a 20-30%) Tumores (craneofaringioma, germinoma, pinealoma, metástasis)
para que se produzca un efecto compensatorio significativo TCE
AVP mediado. Granulomas (tuberculosis, sarcoidosis, histiocitosis X)
El objetivo de esta revisión es realizar una actualización Infecciones (encefalitis, meningitis)

en la patología neurohipofisaria de mayor relevancia clínica, Enfermedades vasculares (síndrome de Sheehan, aneurismas, hemorragia
subaracnoidea)
centrándonos por tanto en la diabetes insípida (DI) y en el Hipofisitis (autoinmune, linfocítica)
síndrome de secreción inadecuada de la hormona antidiuré- Idiopática
tica (SIADH). Gestacional

DIN
Congénitas
Diabetes insípida Hereditaria (recesiva ligada a X o AD)
Adquiridas
La DI es un síndrome clínico caracterizado por una poliuria ERC (poliquistosis renal, uropatía obstructiva)
hipotónica debida a una incapacidad para concentrar la ori- Enfermedades metabólicas (hipercalcemia, hipocaliemia)
na. Diuresis mayores de 40 ml/kg en adultos o 100 ml/kg en Fármacos (litio, demeclociclina)
niños son sugestivos de DI. Según la etiología se identifica: Diuresis osmótica (manitol, glucosa)
a) DI central causada por secreción insuficiente de AVP; Amiloidosis
b) DI nefrogénica causada por una resistencia renal a una
DID
secreción apropiada de AVP y c) DI dipsógena causada por
Ingesta hídrica compulsiva
una ingesta excesiva de líquidos por una sensación anormal
Enfermedades esquizoafectivas (por ejemplo, esquizofrenia)
de sed. Craneofaringiomas/quiste de la bolsa de Ruthke´s
Sarcoidosis
AD: autosómica dominante; DIC: diabetes insípida central; DID: diabetes insípida dipsógena;
Etiopatogenia DIN: diabetes insípida nefrogénica; ERC: enfermedad renal crónica; TCE: traumatismo
craneoencefálico. Adaptada de Jameson JL5, et al.

Diabetes insípida central


La diabetes insípida central (DIC) se presenta con una pre- siendo la cirugía sobre una lesión hipofisaria la más frecuen-
valencia estimada en la población general de 1/25.000, sien- te. Se presenta con una frecuencia de 18-30% en este tipo de
do mucho más frecuente en pacientes sometidos a algunos cirugías5, y es aún más frecuente cuando se trata de una ciru-
tipos de neurocirugía (especialmente hipofisaria)5. gía sobre un craneofaringioma7. Suele darse en los primeros
Aparece cuando una secreción insuficiente de AVP es in- 2 días posquirúrgicos, con resolución espontánea en los si-
capaz de prevenir una diuresis hipotónica, presentándose el guientes 2-5 días. La incidencia de DI permanente tras una
paciente con poliuria y nicturia. Para su desarrollo debe ha- cirugía transesfenoidal se estima en un 1-8%5.
ber al menos una pérdida del 80% de las neuronas secretoras. Los adenomas hipofisarios rara vez producen DI per se,
Puede deberse a daño en los centros supraóptico y paraven- en los casos en que se presente una lesión hipofisaria con DI
tricular del hipotálamo, de los osmorreceptores o del tracto se debe considerar como más probables el craneofaringioma,
supraótico hipofisario; las lesiones por debajo de la eminen- un granuloma, una hipofisitis, un depósito metastásico o
cia media o en la propia neurohipófisis solo suelen producir neoplasias primarias en dicha localización.
poliuria transitoria, ya que se mantiene intacta la capacidad La infundíbulo-hipofisitis es otra causa relativamente
de síntesis y la ADH es liberada a los capilares de la eminen- frecuente8, presentándose hasta en un 30% de los pacientes
cia media. En la mayoría de los casos, el centro de la sed está adultos afectos de histiocitosis de Langerhans5.
intacto, respondiendo el paciente con una ingesta hídrica La DI idiopática, que clásicamente suponía el 30-50% de
apropiada para mantener la volemia y natremia; excepciones las DI, está bajando en incidencia conforme mejoran las téc-
a esta situación son que esté también afectado el centro de la nicas de imagen, se ha estimado que hasta un tercio de las
sed (generalmente por lesiones en el hipotálamo anterior, anteriormente etiquetadas como DI idiopáticas presentan
cerca del tercer ventrículo) o haya una incapacidad para te- anticuerpos dirigidos contra células secretoras de AVP.
ner acceso a agua libre (pacientes con disminución del estado Traumatismos craneoencefálicos graves pueden provocar
de consciencia, dependientes…). El déficit de AVP puede ser una DI transitoria hasta en el 20% de los casos9, se estima
total o parcial. una persistencia de la misma de solo el 7%10.
En la tabla 1 se resumen las causas más comunes de DI. En el embarazo se puede presentar una DI limitada al
La mayoría de estas son adquiridas durante la edad adulta, mismo secundaria a la acción de la vasopresinasa placentaria.

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ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS (III)

La acción de esta enzima también puede desenmascarar una tro de la sed, generalmente por sarcoidosis hipotalámica o
forma parcial de DI central parcial no diagnosticada previa- craneofaringioma, en estos casos las técnicas de imagen sue-
mente, por lo que debe ser considerado el estudio en dichos len ser normales.
casos. Generalmente remite 2-3 semanas después del parto5.
Las formas familiares son extremadamente raras. Con
más frecuencia se presentan de forma autosómica dominante Manifestaciones clínicas
(AD), causada por mutaciones en el gen de AVP que conlleva
una acumulación de la proteína precursora de AVP en las La presentación clínica de la DI consiste en poliuria, nicturia
células secretoras, desencadenando un proceso de autofagia, y polidipsia de distinta gravedad, con preferencia por las be-
y provocando un desarrollo progresivo de la DI11. El síndro- bidas frías y emisión de una orina diluida (clásicamente defi-
me de Wolfram o DIDMOAD se presenta de forma autosó- nida como incolora, inodora e insípida). En situaciones en
mica recesiva (AR), con una neurodegeneración progresiva que el paciente no cubre los requerimientos hídricos se pro-
asociada con diabetes mellitus (DM), atrofia óptica y sordera duce deshidratación e hipernatremia progresiva y sus conse-
neurosensorial entre otras manifestaciones; clásicamente se cuencias sobre el SNC, disminución del nivel de conciencia
diagnosticaba DIC en un tercio de los casos, sin embargo y convulsiones. Es conveniente que estos pacientes lleven
estudios dirigidos sugieren alteración de la secreción de AVP pulseras o medallas indicando su enfermedad para que sea
prácticamente en todos los pacientes afectos12. tenido en cuenta en caso de atención médica por accidente o
enfermedad aguda. En casos graves, en los que se retrasa el
Diabetes insípida nefrogénica diagnóstico y no se instaura un tratamiento adecuado, pue-
La DI nefrogénica (DIN) se produce por una resistencia re- den llegar a producirse complicaciones urológicas, como dis-
nal al efecto antidiurético de la AVP, desarrollándose poliuria tensión vesical o hidronefrosis. En la DIN también pueden
hipotónica. presentarse calcificaciones intracraneales, retraso mental y
La terapia con litio es la causa más común, presentándo- del crecimiento.
se en el 30% de los pacientes que lo reciben de forma cróni-
ca. Parece que el mecanismo subyacente consiste en una in-
terferencia en la cascada de respuesta a AVP, disminuyendo Diagnóstico y diagnóstico diferencial
la expresión renal de aquoporina 213. Usualmente revierte de
forma lenta con la suspensión del tratamiento, pero puede Es fundamental una historia clínica detallada. Cuadros como
ser permanente si se produce una nefritis intersticial por li- poliuria sin nicturia orientan a DID, la poliaquiuria de escaso
tio. La hipocalemia, hipercalcemia y DM con control inefi- volumen orienta a prostatismo, infecciones urinarias o a pa-
ciente producen un cuadro adquirido que se corrige con la tología vesical; el uso de litio, diuréticos o de otros fármacos
normalización de los mismos. El mecanismo subyacente pro- también pueden orientarnos en el cuadro. Cuadros de inicio
bablemente sea similar al del litio. brusco sugieren DIC, mientras que formas de presentación
De entre las formas familiares, la DIN familiar AR ligada progresivas son más típicas de DIN o DID.
a X es la más frecuente, provocada por mutaciones sobre el El primer paso debe dirigirse a confirmar que el paciente
receptor V2, donde se han descrito más de 200 mutaciones. es realmente poliúrico, hasta en un 15% de los pacientes de-
Las que se asocian a pérdida completa de la función se pre- rivados por poliuria se descarta la misma5. Una diuresis me-
sentan en la infancia, mientras que las mutaciones con pérdi- nor de 3 litros descarta el cuadro de DI. Ambulatoriamente,
das parciales pueden presentarse de forma progresiva, pu- un análisis básico que incluya osmolaridad plasmática, gluce-
diendo producirse el diagnóstico en la edad adulta. Se ha mia, electrólitos (incluyendo calcio plasmático), osmolaridad
descrito una forma AR en relación con mutaciones del gen urinaria y electrólitos en orina sirve fundamentalmente para
AQP2 que afectan al dominio transmembrana del canal de descartar otros cuadros etiológicos (hipocalemia, hipercalce-
agua. También se ha descrito una forma AD, causada por mu- mia o DM mal controlada); descartados los anteriores, rara
taciones en la región carboxiterminal del dominio intracelular vez excluyen un cuadro de DI salvo si la osmolaridad urinaria
de AQP25,14. excede 600 mOsm/kg16. La osmolaridad plasmática en el lí-
mite bajo orienta hacia DID, mientras que valores elevados
Diabetes insípida dipsógena lo hacen a DIC y DIN.
La DI dipsógena (DID) está causada por una excesiva inges- Una revisión sobre la bibliografía publicada en cuanto al
ta de fluidos que lleva a una disminución de la Osmpl por diagnóstico de los pacientes con poliuria puso de manifiesto
debajo del umbral de secreción de AVP, presentando una la falta de consenso sobre la prueba a emplear y los puntos
diuresis hipotónica15. La situación mantenida puede modifi- de corte para hacer el diagnóstico diferencial14. A continua-
car el umbral de secreción de AVP y la sensibilidad, por lo ción hacemos referencia a lo más clásico y generalmente más
que puede ser difícil de diferenciar, especialmente con for- aceptado.
mas parciales de DIC. Algunas están presentes en cuadros En la mayoría de los pacientes será necesaria la realización
psiquiátricos (20% de pacientes con esquizofrenia tienen de una prueba de deshidratación. El paciente debe permane-
DID). Si a estos pacientes se les administran medicamentos cer sin aporte hídrico desde unas horas antes de iniciar la prue-
que favorecen un SIADH, presentan con alta probabilidad ba (menos cuanto mayor sea la poliuria) y durante toda la
cuadros de hiponatremia, habitualmente grave. Rara vez el prueba. Se debe medir cada hora o dos horas el volumen y
origen es secundario a una afectación hipotalámica del cen- osmolaridad urinarias, la natremia, Osmpl y AVP (si se dispone)

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ENFERMEDADES DE LA NEUROHIPÓFISIS: DIABETES INSÍPIDA Y SÍNDROME DE SECRECIÓN INADECUADA
DE LA HORMONA ANTIDIURÉTICA

cada 2 horas. Cuando la osmolaridad urinaria permanece esta- idiopática. Considerar el origen autoinmune descartando la
ble dos o tres muestras consecutivas (inferior a 600 mOsm/kg) coexistencia de otras como la autoinmunidad tiroidea, gástri-
y la plasmática sigue aumentando o es mayor de 295-300 ca, etc. En los casos con diagnóstico de DIC idiopática se
mOsm/kg o [Na+] es mayor de 145-150 mmol/l se considera debe repetir la RM porque algunos tumores paraselares
la prueba como positiva. A continuación se administra vaso- como el germinoma pueden presentar DI antes de ser radio-
presina (5 UI s.c.) o desmopresina (10 mcg intranasal o 4 mcg lógicamente detectables5.
im o iv) y se monitoriza el volumen y osmolaridad urinarios
durante las siguientes dos horas, finalizando entonces. La
prueba se suspenderá considerándose negativa si se alcanza Tratamiento
una osmolaridad urinaria mayor de 600 mosm/kg16.
En la DIC la osmolaridad urinaria va aumentando du- El tratamiento de elección para la DIC es la desmopresina,
rante la prueba gracias a la AVP residual, pero no alcanza un análogo sintético de la AVP, con mínima actividad preso-
600 mosm/kg, al administrar desmopresina la osmolaridad ra, y el doble de actividad antidiurética. De forma ambula-
urinaria aumenta notablemente; 15-50% en formas parcia- toria puede ser administrada tanto por vía intranasal (en
les, 100-800% en completas. En la DIN la osmolaridad uri- forma de gotas o aerosol) como oral (bucodispersables o
naria no alcanza 600 mosm/kg y tras la administración de comprimidos gastrorresistentes), en régimen de 2-3 dosis
desmopresina no modifica la osmolaridad urinaria o al me- diarias. El objetivo del tratamiento es controlar los sínto-
nos el incremento es menor del 45%. En la DID el paciente mas, evitando un número de nicturias elevadas que provo-
puede concentrar la orina, aunque no suele sobrepasar los quen un sueño poco reparador, la poliuria diurna y la sed
500-600 mOsm/kg, dado que la polidipsia mantenida mini- continua. La complicación principal es la hiponatremia di-
miza el gradiente osmótico de la médula adrenal, la adminis- lucional, por lo que se debe buscar la mínima dosis eficaz,
tración de desmopresina no tiene efecto significativo sobre la indicándole al paciente la necesidad de evitar periodos pro-
osmolaridad. En algunos pacientes con DIC la prueba puede longados de anuria. La omisión del tratamiento una vez por
ser equívoca, ya que son hipersensibles a la AVP por sobreex- semana para provocar una situación de poliuria puede servir
presión del receptor y pueden concentrar prácticamente al de herramienta para prevenir la intoxicación hídrica. La de-
máximo la orina al final de la prueba, de forma que la admi- terminación de electrólitos de forma regular permite asegu-
nistración de desmopresina no modifique la osmolalidad uri- rar el adecuado manejo. En pacientes que tienen alterado el
naria, simulando una DID16. centro de la sed existe una especial dificultad para el manejo,
A la hora de interpretar los valores de concentración de pues se pierde uno de los feedback indispensables para la ti-
AVP tenemos que tener en cuenta que los ensayos comercia- tulación de dosis.
lizados disponibles son poco sensibles, especialmente para En los casos de DIN secundaria a trastorno metabólico
valores menores de 3 pg/ml. La AVP se une de forma impor- debe centrarse el manejo en mantener una adecuada hidrata-
tante a las plaquetas, por lo que si no se procesa adecuada- ción hasta solucionar el trastorno subyacente. En los casos de
mente la muestra puede dar valores falsamente elevados o DIN persistente o de origen familiar se puede considerar el
disminuidos. La AVP es inestable en plasma, incluso a tem- uso de hidroclorotiazida, antiinflamatorios no esteroideos y
peraturas menores de –20ºC. Con todo esto, si se produce un la restricción de sal en la dieta. El uso de desmopresina tam-
incremento en la concentración de AVP junto con el incre- bién puede ser considerado.
mento de Osmpl se puede descartar la DIC. Si se producen En los casos de DID, el único tratamiento racional es la
incrementos de la osmolalidad urinaria en respuesta a incre- reducción del volumen hídrico ingerido. Está contraindicado
mentos de AVP, se puede excluir la DIN16. el uso de desmopresina, pues tienen un alto riesgo de desa-
Se puede considerar la administración de salino hipertó- rrollar hiponatremia.
nico (0,05 ml/kg/minuto) durante no más de 2 horas para
inducir una Osmpl elevada, viendo la respuesta en concen-
tración de AVP a la misma. No se ha demostrado su superio- Síndrome de secreción inadecuada
ridad frente a la realización de una prueba de deshidratación, de la hormona antidiurética
por lo que su empleo se limita a situaciones en que esté con-
traindicada, los resultados de la prueba hayan sido equívocos La hiponatremia, definida por una [Na+] por debajo de
y se disponga de determinación de AVP. 135 mmol/l, es la alteración hidrolectrolítica más frecuente
La copeptina es un marcador estable de secreción de en la práctica clínica17-20; en torno a un 30% de los pacientes
AVP. Sin previa deprivación hídrica, una determinación basal hospitalizados pueden presentarla19,21, siendo la población
de copeptina mayor de 21,4 picomol/l diferencia la DIN del anciana el mayor grupo de riesgo en nuestro medio, y el
resto de DI con una sensibilidad y especificidad del 100%, SIADH la causa más frecuente de hiponatremia20 por cual-
haciendo innecesaria la prueba de deshidratación16. Pendien- quier etiología. Dada su frecuencia, su amplio espectro etio-
te de validar otros puntos de corte con funcionalidades diag- patogénico, sus repercusiones clínicas y económicas19, la
nósticas. dificultad para conocer su fisiopatología y la falta de unifor-
Una vez confirmado el diagnóstico de DIC es obligatorio midad en su tratamiento hacen que el SIADH sea un reto
realizar una resonancia magnética (RM) hipotálamo-hipo- diario para el médico convencional, necesitándose más es-
fisaria para descartar lesiones estructurales. En caso de no fuerzos para extender un abordaje más sencillo, accesible,
presentar una lesión se considera el diagnóstico de DIC eficaz, eficiente e individualizado siempre que sea posible.

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ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS (III)

Etiopatogenia TABLA 2
Etiología del síndrome de secreción inadecuada de hormona antidiurética
(SIADH)
Como anteriormente hemos descrito, en condiciones fisioló-
gicas la AVP disminuye su secreción, incluso suprimiéndose, Tumores
en respuesta al descenso en la osmolalidad. En el SIADH Carcinoma de células pequeñas, mesotelioma, cáncer de páncreas, cáncer gástrico,
cáncer duodenal, cáncer de endometrio, cáncer ureteral, cáncer de vejiga, cáncer
existe una limitación en la capacidad renal de excretar agua de próstata, timoma, linfoma, leucemia, cáncer orofaríngeo, sarcoma de Ewing
libre, debido a una alteración en la acción de la AVP en los Enfermedades pulmonares
receptores V2 del túbulo colector de la nefrona con el resul- Neumonías (especialmente Legionella y Mycoplasma), abscesos, empiema,
tado de un exceso de agua en el cuerpo, pero no una dismi- tuberculosis, aspergillosis, infecciones relacionadas con el VIH, fibrosis quística,
vasculitis, ventilación con presión positiva
nución de solutos como podría parecer20. Incluso con el ex-
ceso de agua total, estos pacientes mantienen la sed a pesar Patología del SNC

de la baja osmolalidad, lo cual acentúa la hiponatremia. Cirugías, traumatismos, tumores cerebrales, accidentes cerebrovasculares,
trombosis seno cavernoso, abscesos, hidrocefalia, hematoma subdural, hemorragia
Se han descrito diferentes mecanismos fisiopatológicos subaracnoidea, vasculitis, meningitis, encefalitis, fiebre manchada de las Montañas
Rocosas, malaria, sida, esclerosis múltiple, síndrome de Guillen-Barré, delirium
por los que se altera la capacidad de regular la Osm pl18,19,22,23 tremens, porfiria aguda intermitente, síndrome de Shy-Drager
y, a pesar de los avances logrados en este sentido en los últi- Fármacos
mos diez años, aún no somos capaces de explicar algunas de ADT, IMAO, IRSS, venlafaxina, fenotiazidas,clorpropramida, carbamacepina,
las situaciones que en la práctica clínica llevan al SIADH. oxcarbamacepina, valproato sódico, lamotrigina, clofibrato, ISRR, ciclofosfamida,
ifosfamida, vincristina, vinplastina, melfalán, metrotrexate, interferón, IBP, nicotina,
De los mecanismos descritos, el más frecuente se debe a la narcóticos, levetiracepam, haloperidol, AINE, MDMA, análogos de AVP
secreción ectópica de AVP de forma aleatoria e independien- (desmopresina, oxitocina, vasopresina), amiodarona, quinolonas

te del mecanismo osmorregulador fisiológico, como sucede Otras


en los tumores. Este mecanismo podría llegar a justificar un Tras cirugías torácicas o abdominales, genéticas (mutaciones en el gen del receptor
V2 de la vasopresina), idiopáticas, transitorias (ejercicio extenuante, anestesia
40% de los casos de SIADH, aunque algunos autores afir- general, dolor…)
man que podría ser el mecanismo original hasta en un 60- ADT: antidepresivos tricíclicos; AINE: antiinflamatorios no esteroideos; AVP: arginina-vasopresina;
70% de los casos18,22. Otro de los mecanismos descritos es el IBP: inhibidores de la bomba de protones; IMAO: inhibidores de la monoaminooxidasa;
IRSS: inhibidores de la recaptación de serotonina; MDMA: 3,4 metilenedioximetaamfetamina;
llamado reset-osmostat, donde se produce un desplazamiento sida: síndrome de la inmunodeficiencia adquirida; SNC: sistema nervioso central; VIH: virus
de la inmunodeficiencia humana.
del umbral regulador, manteniéndose una secreción depen- Actualizada de Robinson AG, et al17, Smith DM, et al18, Ellison H, et al23, Spasovski G, et al25.
diente de la osmolalidad plasmática con una respuesta nor-
mal a la misma, pero necesitándose alcanzar unos niveles de
osmolalidad menores para llegar a disminuir la síntesis de Clínica
vasopresina y, por lo tanto, suele ser menos frecuente que
den hiponatremias graves. Un tercer mecanismo se da cuan- La hiponatremia puede tener una expresión clínica muy va-
do, aun manteniendo una respuesta dependiente de la osmo- riada, fundamentalmente neurológica, en función de la situa-
lalidad y con unos valores normales de AVP, esta no es capaz ción de edema cerebral que produce la hipoosmolalidad y la
de suprimirse por completo cuando es necesario. Por último, adaptación al mismo en cada caso. Por lo tanto, será deter-
y en un porcentaje muy pequeño de casos de población in- minante el tiempo de la instauración de la hiponatremia, la
fantil, se han descubierto, en estudios recientes, dos mutacio- capacidad adaptativa del individuo a la nueva situación y los
nes genéticas del receptor V2 que produce una activación y niveles de [Na+] per se. Así, tendremos pacientes con una
antidiuresis, en la ausencia del ligando del receptor V2 de la evolución más progresiva que presentarán cuadros clínicos
AVP. Estos pacientes cumplen todos los criterios clínicos del leves gracias a los mecanismos adaptativos celulares, y otros
SIADH, excepto que los niveles de AVP son indetectables19. que con los mismos niveles de sodio pero con una instaura-
Esta entidad se denomina en la actualidad por sus siglas en ción más brusca de la hiponatremia puedan encontrarse
inglés NSIAD (Nephrogenic Syndrome of Inappropriate Anti- en una situación clínica de mayor gravedad. Se considera, en
diuresis)19 y tiene un diagnóstico de exclusión. general, que las hiponatremias de perfil temporal agudo son
Las causas del SIADH las dividiremos en las producidas aquellas que aparecen con menos de 48 horas de evolución y
por: tumores, enfermedades pulmonares, alteraciones del las hiponatremias crónicas se definen con más de 48 horas de
SNC, inducidas por fármacos y otras, como las hereditarias, evolución; esta división nos ayudará a un mejor manejo del
transitorias o idiopáticas17,18,23,24. En la tabla 2 encontramos paciente.
agrupados la variedad de etiologías y los fármacos relaciona- Por lo tanto, la clínica correspondiente a un cuadro de
dos con la aparición de SIADH. Su frecuencia también de- gravedad leve generalmente ocurre en pacientes donde la
penderá de la prevalencia de la enfermedad subyacente de- instauración ha sido progresiva en el tiempo y con [Na+]
pendiendo del entorno donde trabajemos. Aunque la causa entre 135-130 mmol/l; estas formas leves pueden presen-
tumoral es una de las más frecuentes, en nuestro medio pro- tarse con cefalea, déficit de atención, alteraciones en la mar-
bablemente sean las neumonías y el SIADH inducido por cha y en la memoria, bradipsiquia, mareos o incluso disgeusia.
fármacos otras de las etiologías más comunes halladas en la En los cuadros clínicos moderados, que suelen correspon-
práctica clínica, especialmente en la población geriátrica ins- der con [Na+] entre 125-130 mmol/l, pueden aparecer ade-
titucionalizada. Asimismo, hay que tener especial cuidado más náuseas, vómitos, desorientación, somnolencia o con-
con el manejo de la hiponatremia en las unidades de neuro- fusión. Y en casos de mayor gravedad, normalmente rela-
cirugía, especialmente en pacientes con hemorragia subarac- cionados con niveles de [Na+] entre 115-125 mmol/l o con
noidea o tras cirugías hipofisarias25. descensos bruscos de la natremia que inducen a la aparición

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ENFERMEDADES DE LA NEUROHIPÓFISIS: DIABETES INSÍPIDA Y SÍNDROME DE SECRECIÓN INADECUADA
DE LA HORMONA ANTIDIURÉTICA

de edema cerebral, se presentarán con agitación, alucinacio- lalidad efectiva, pero sí ocupan volumen, haciendo disminuir
nes, incontinencia, estupor, etc., llegando en los casos más falsamente los niveles de sodio en las determinaciones de la-
graves a crisis comiciales, coma, herniación del tronco ence- boratorio. Esto hay que tenerlo en cuenta, por ejemplo, en
fálico por aumento de la presión intracraneal, hipoxia y, fi- situaciones de hipertrigliceridemia o en el tratamiento con
nalmente, la muerte. gammaglobulinas. En estos casos la Osmpl está conservada.
Desde que en el año 1967, Bartter y Schwartz describie- En otras ocasiones pueden coexistir en plasma, junto con
ran por primera vez los dos primeros casos de SIADH, se el sodio, otros solutos que sí sean osmóticamente efectivos,
creía que una hiponatremia leve era una situación de benig- favoreciendo el paso del agua del espacio intracelular al ex-
nidad que cursaba de forma asintomática sin mayores reper- tracelular. Esto sucede por ejemplo con la glucosa, el mani-
cusiones, y sobre la cual no se hacían muchos esfuerzos por tol, los contrastes iodados o la glicina utilizada en irrigacio-
optimizar su abordaje. Hasta que, a principios de este siglo, nes de ciertas cirugías. En estos casos la [Na+] disminuye
empezaron a publicarse nuevos artículos relacionando la hi- pero la osmolalidad plasmática o bien se mantiene o, en todo
ponatremia leve con un mayor déficit de atención, de memo- caso, aumenta dando lugar a una hiponatremia iso o hiperos-
ria, alteraciones en la marcha, riesgo de caídas, osteoporosis, molal. En los casos de hiperglucemia se puede tener en cuen-
prolongación de la estancia media hospitalaria y un mayor ta que por cada 100 mg/dl de glucosa el sodio desciende
número de reingresos, llegando a ser definida como factor de entre 1,6 y 2,4 mmol/l19.
riesgo independiente de mortalidad21,22. Estos hallazgos han Tras confirmar que estamos ante una hiponatremia hi-
supuesto un aumento de los esfuerzos por mejorar y unificar posmolar real, el siguiente paso es conocer la situación de
el abordaje no solo de la hiponatremia grave, sino también de volemia del paciente, descartando situaciones de hiper o hi-
los cuadros más leves. povolemia, las cuales excluyen el SIADH; ante una situación
de hiper o hipovolemia habrá que esperar, en todo caso, has-
ta la restauración de la volemia para replantear el diagnósti-
Diagnóstico y diagnóstico diferencial co19. Las herramientas que nos dan esta información serán la
anamnesis y la exploración física, con las limitaciones propias
El diagnóstico del SIADH es siempre de exclusión y queda de las mismas. Una historia de pérdidas digestivas, de utiliza-
definido, aún hoy en día, por los criterios diagnósticos que ción de diuréticos, síntomas como el ortostatismo o signos
Bartter y Schwartz describieron por primera vez en el año como la taquicardia, la sequedad de piel y mucosas o cifras
196719 con la presencia de una Osmpl menor de 275 mOsm/kg, bajas de tensión arterial orientan hacia una situación de de-
una concentración inapropiada de orina definida por una pleción de volumen. Sin embargo, la aparición de disnea,
Osm en orina mayor de 100 mOsm/kg, en un paciente clí- ortopnea, edemas o ascitis nos indicarán una situación de
nicamente normovolémico que presenta una elevación de la sobrecarga de volumen, pudiendo solicitarse una radiografía
natriuresis con una ingesta de sodio normal en la dieta de tórax para descartar datos de insuficiencia cardiaca y, en
([Na+] orina superior a 40 mmol/l) y tras haber excluido un casos de dudas, valorar la determinación de la presión venosa
hipotiroidismo y un déficit de glucocorticoides. Para facili- central. Si con todo ello aún no es posible esclarecer la vole-
tar y unificar el manejo en nuestro entorno, se recogen en la mia, recordar que la infusión de suero salino puede ayudar a
tabla 3 los criterios diagnósticos editados en las últimas reco- distinguir entre un paciente con hiponatremia hipovolémica
mendaciones españolas de manejo de SIADH20. y otro con hiponatremia normovolémica, respondiendo en el
La primera entidad a descartar en el procedimiento diag- primer caso con un aumento de los niveles de sodio y dismi-
nóstico del SIADH ante un paciente con hiponatremia son las nuyendo los de urea, y sin respuesta en los niveles de sodio o
pseudohiponatremias. Estas aparecen cuando existe en plasma muy moderada en el segundo. Una situación particular don-
un nivel aumentado de determinados solutos, como los lípidos de esta situación aparece es en el llamado síndrome cerebral
o las proteínas, que no alteran la tonicidad del plasma u osmo- pierde sal18,26,27, que ocurre en casos de patología del SNC,
más frecuentemente en la hemorragia subaracnoidea. En
este síndrome aparece hiponatremia, pero con la diferencia
TABLA 3 de que existe una situación de depleción de volumen al con-
Definiciones principales del síndrome de secreción inadecuada trario que en el SIADH. En estos casos, la mejor opción in-
de hormona antidiurética (SIADH)
dicada por distintos autores para diferenciarlos sin poner en
Hiponatremia con normovolemia clínica riesgo la situación del paciente al empeorar el contexto de
Descartado volumen circulante eficaz bajo (tensión arterial normal, depleción de volumen es la infusión de suero salino al 0,9%
no ortostatismo, no ascitis, ni edemas)
y ver la respuesta en la natremia; optar por la restricción hí-
No toma de diuréticos
drica podría tener una repercusión negativa en un paciente
No insuficiencia adrenal, no hipotiroidismo, no insuficiencia renal
con hemorragia subaracnoidea,
No situaciones de estímulo fisiológico de la vasopresina (dolor...)
Una vez diagnosticado un paciente con una hiponatre-
Con
mia verdadera y normovolémica, habría que descartar otras
*[Na+] pl< 135 mosm/l
etiologías que también cursan del mismo modo y no se de-
Osmpl < 275 mOsm/kg de agua
ben al SIADH. Estas son: el hipotiroidismo grave, pues un
Osm orina > 100 mOsm/kg de agua
[Na+] orina > 40 mmol/l en condiciones de suficiente aporte de sodio y proteínas
hipotiroidismo leve o subclínico no justifica por sí mismo
una situación de hiponatremia, y el déficit de glucocorticoi-
[Na+] pl: concentración plasmática de sodio; [Na+] orina: concentración urinaria de sodio;
Osm orina: osmolalidad en orina; Osmpl: osmolalidad plasmática. Adaptada de Runkle I, et al20. des. En este caso, también utilizaremos las herramientas ha-

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ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS (III)

bituales de anamnesis y exploración, pudiéndonos ayudar de bral, que en la mayoría de los casos afectan a una localización
una determinación bioquímica de TSH y de cortisol plasmá- pontina y clínicamente se presentan como una cuadraparesia
tico basal, ante una alta sospecha clínica de insuficiencia su- espástica y parálisis pseudobulbar; en un 10% de los casos
prarrenal puede iniciarse un tratamiento empírico como en puede afectar a una localización extrapontina que cursaría
otros casos; también podría valorarse realizar una prueba de con ataxia, alteraciones del comportamientos y del movi-
estimulación con ACTH. Otras situaciones que se presentan miento, como distonías y parkinsonismos. Este síndrome
con una hiponatremia normovolémica y no corresponden a suele aparecer a los 2-3 días de la corrección de la natremia
un SIADH aparecen, por ejemplo, cuando se administra de y el pronóstico es variable, aunque la mayoría de los pacien-
forma inapropiada una reposición hídrica hipotónica tras las tes tendrán déficits neurológicos permanentes18.
intervenciones quirúrgicas o cuando se aumenta en exceso la
ingesta hídrica ante un ejercicio extenuante, como sucede en ¿Qué hacer ante una hiponatremia aguda y/o clínicamente
los corredores de maratones. grave en el SIADH?
Ante la dificultad, en ocasiones, de diferenciar una situa- Estos casos se presentarán con una clínica neurológica flori-
ción de hipovolemia o de normovolemia en pacientes con da y, en general, se correlacionan con niveles de sodio por
hiponatremia, estudios más recientes incorporan elementos debajo de 125-120 mOsm/l, la actuación debe ser urgente y
como la copeptina o la excreción fraccional (EF) de ácido encaminada al aumento de la natremia para evitar la apari-
úrico19 como herramientas de apoyo en el diagnóstico dife- ción de edema cerebral, herniación, posibilidad de fallecer o
rencial, pero a día de hoy aún ninguna de las dos está exten- secuelas neurológicas permanentes. Se recomienda un au-
dida en la práctica clínica actual y, aunque la EF de ácido mento inicial de 4-6 mOsm/l para alcanzar una situación
úrico parece que puede aportar valor en el proceso diagnós- clínica de mayor seguridad, pues estos aumentos se han rela-
tico, se precisan mayores estudios hoy en día. cionado con un nivel de disminución del edema cerebral de
Además del diagnóstico certero del SIADH, no podemos aproximadamente de un 50%, suficiente en general para salir
olvidar el estudio paralelo de diagnóstico etiológico del mis- de la situación de urgencia vital. Las causas de SIADH que
mo para llegar a la causa origen de la hiponatremia e iniciar tienden a presentarse de este modo son, principalmente, la
su tratamiento en cuanto nos sea posible, pues será el único patología intracraneal aguda, tumores o determinados cua-
tratamiento definitivo del SIADH. Para ello habrá que des- dros psiquiátricos.
cartar la utilización de fármacos inductores del SIADH o Para resolver esta situación el tratamiento indicado es la
consumo de MDMA, buscar razonablemente la existencia de utilización de suero salino hipertónico al 3% (SSH), en infu-
un tumor no diagnosticado, una patología pulmonar o del sión continua o en bolo. En esta situación de urgencia, cada
SNC. vez se recomienda menos el uso de fórmulas matemáticas
que complican un procedimiento que ha de ser rápido y efi-
caz20. Optando por instaurar ritmos fijos de infusión en fun-
Manejo terapéutico ción únicamente de la gravedad clínica neurológica, utilizan-
do, por ejemplo, una infusión de SSH a una velocidad de
El primer paso para poder prescribir el tratamiento adecua- 0,5 mmol/hora o 1 mmol/hora en situaciones más modera-
do ante una hiponatremia es haber hecho un diagnóstico das y o de 2 mmol/hora en casos de coma, estupor, crisis
certero del origen de la misma y, en el caso del SIADH, tam- comiciales o distrés respiratorio19,20. Otra opción puede ser la
bién de su causa subyacente. De este modo podremos corre- administración de bolos repetidos de 100 ml de SSH, sepa-
gir eficazmente, y sin secuelas, tanto la hiponatremia como la rados 10 minutos entre ellos, que pueden repetirse un máxi-
causa origen y perpetuante de la misma. mo de tres veces hasta lograr una mejoría de la situación
El segundo punto importante es saber distinguir una si- clínica de gravedad. Situaciones de especial cuidado por el
tuación que precisa una actuación urgente por una hipona- riesgo mayor de gravedad neurológica son los niños y las
tremia grave de la que no, la cual viene determinada princi- mujeres en edad fértil19,20. En ambos casos deben monitori-
palmente por el cuadro clínico neurológico; siendo este zarse los niveles de sodio durante todo el proceso de correc-
expresión de la situación de edema cerebral existente y que ción, siendo obligada una primera determinación a las 2 ho-
varía en función de los mecanismos de adaptación a la hipo- ras del inicio del tratamiento. Ajustando posteriormente el
natremia que cada individuo sea capaz de poner en marcha. tratamiento en función de los niveles de natremia y pudiendo
Por ello, es fundamental tratar de conocer el tiempo de ins- seguir los distintos algoritmos terapéuticos para el manejo de
tauración de la hiponatremia y evitar la aparición del llamado la hiponatremia por cualquier causa, como el aconsejado
síndrome desmielinizante osmolar (SDO)20, derivado de una para estos casos por las recomendaciones españolas20.
corrección demasiado rápida de la natremia, sobre todo en
pacientes que han tenido tiempo de generar un mecanismo ¿Qué hacer ante una hiponatremia crónica y/o clínicamente
adaptativo ante el edema cerebral como son los de mayor leve-moderada en el SIADH?
tiempo de evolución. También tienen un mayor riesgo de Estos pacientes presentarán habitualmente una sintomatolo-
SDO y hay que extremar la precaución en aquellos casos de gía más larvada, propia de una hiponatremia más evoluciona-
historia clínica de alcoholismo, en pacientes con desnutri- da en el tiempo y con una [Na+] posiblemente por encima de
ción grave y niños o mujeres jóvenes y delgadas. El SDO 120-125 mosm/l. En estos casos, aunque el objetivo final si-
tiene un diagnóstico clínico, aunque pueden encontrarse ha- gue siendo restaurar los niveles de sodio, lo prioritario, antes
llazgos característicos en la resonancia magnética (RM) cere- que la rapidez en la instauración del tratamiento, será una

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ENFERMEDADES DE LA NEUROHIPÓFISIS: DIABETES INSÍPIDA Y SÍNDROME DE SECRECIÓN INADECUADA
DE LA HORMONA ANTIDIURÉTICA

TABLA 4 Para valorar correctamente estos parámetros y para que el


Recomendaciones en los objetivos de corrección de natremia en mosm/l
a las 24 y a las 48 horas del inicio del tratamiento manejo con restricción hídrica sea eficaz, hay que confirmar
que las dietas pautadas sean normo sódicas y no haya restric-
Límite mínimo Objetivo máximo ción proteica. En caso de no respuesta, o una mala tolerancia
Riesgo de desarrollar SDO 24 h 48 h a la restricción, deberá plantearse un tratamiento alternativo.
Normal 6-8 10-12 18
Alto 4-6 8 14-16 Antagonistas de los receptores V2 de la vasopresina
SDO: síndrome dosmielinizante osmolar Estos nuevos fármacos, antagonistas de los receptores 2 de
la vasopresina, están específicamente diseñados para tratar
eficazmente la hiponatremia por SIADH, pues actúan blo-
corrección de la natremia a un ritmo controlado con el fin de queando el receptor V2 de la vasopresina en el túbulo colec-
evitar el SDO. Para ayudar a marcar un ritmo apropiado de tor de la nefrona, evitando la reabsorción de agua desde el
corrección nos ayudaremos de los límites mínimos recomen- túbulo colector y sin afectar la excreción de solutos como sí
dados de corrección y los objetivos máximos a alcanzar en ocurre con los diuréticos. Debido a esto se convierten en
24 o 48 horas, recogidos en la tabla 4 en función del riesgo fármacos eficaces para aumentar la natremia, con menores
de desarrollar SDO19,20. Siguiendo estos límites y monitori- efectos secundarios, mejor tolerancia que los derivados de la
zando periódicamente los niveles de sodio cada 6-8 horas restricción hídrica pero más costosos. En nuestro medio,
podemos conseguir un tratamiento correcto. la Agencia Europea del Medicamento ha autorizado única-
Dentro del arsenal terapéutico disponible para la correc- mente uno de ellos, tolvaptán, que actúa bloqueando de for-
ción de la natremia en el SIADH, nos centraremos en los más ma selectiva el receptor 2, indicado en el tratamiento de la
recomendados hoy en día y en nuestro entorno, donde la res- hiponatremia normo e hipervolémica leve o moderada; en
tricción hídrica continúa siendo un tratamiento válido, pero caso de utilizar tolvaptán es necesario, por lo tanto, excluir
han aparecido nuevos fármacos eficaces como la familia de los una situación de hipovolemia, por el perjuicio que pudieran
vaptanes o la urea y otros fármacos, clásicamente utilizados en tener en esa situación. Los efectos secundarios de los vapta-
el SIADH, como la demeclociclina o el litio, están actualmen- nes descritos con más frecuencia son la sensación de sed o
te en desuso en nuestro medio. Recordar que el suero salino de boca seca. Estos fármacos no deben ser utilizados junto
isotónico, aunque se continúe utilizando en la práctica clíni- con otras formas de manejo de la hiponatremia, como pue-
ca21, no es un tratamiento recomendado ante una hiponatre- den ser la restricción hídrica, o justo tras la infusión de sue-
mia por SIADH, pero puede utilizarse para diferenciar una ro hipertónico, pues podrían acelerar la corrección de sodio
hiponatremia normovolémica de una hipovolémica, como y favorecer la aparición del SDO. Tampoco están indicados
ocurre por ejemplo en el síndrome cerebral pierde sal y en en la corrección de hiponatremias graves y sintomáticas, y
otros casos de duda. Tampoco es un tratamiento etiológico en caso de ser utilizados en pacientes con hiponatremias
dirigido para el SIADH furosemida, aunque en casos puntua- graves pero oligosintomáticos, deberán utilizarse con pre-
les, sobre todo en ancianos, puede ayudarnos, o en pacientes caución y una monitorización más estrecha, pues aún no
donde exista riesgo de insuficiencia cardiaca puede añadirse al existen datos de seguridad a este nivel. La dosis eficaz de
tratamiento de forma profiláctica, calculando en estos casos un tolvaptán al iniciar el tratamiento es de 15 g al día, el inicio
menor objetivo de corrección de la natremia (entre 4-5 de su administración ha de ser intrahospitalario y los niveles
mmol/l) por el riesgo de sobrecorrección26. de sodio también deben monitorizarse cada 6-8 horas
aproximadamente. Podrán suspenderse, siempre de forma
Restricción hídrica progresiva, en casos donde se resuelva la hiponatremia y la
Ha sido tradicionalmente el tratamiento de primera elección causa subyacente de la misma, realizando controles semana-
hasta hoy en día. A la hora de restringir los líquidos hay que les tras su suspensión. Su principal limitación podríamos
tener en cuenta todos los aportes de agua, incluidos los deri- decir que está en su coste; sin embargo, su utilización se
vados de alimentos, medicaciones, nutrición enteral o paren- relaciona con disminuciones de la estancia media hospitala-
teral, recomendándose restringir la ingesta hídrica en 500 ml ria19,21, por lo que se necesitan estudios de coste-eficacia de
por debajo del volumen de diuresis media diaria del pacien- estos fármacos.
te19. Para valorar la respuesta eficaz a esta medida, normal-
mente son necesarios varios días; en las recomendaciones Urea
editadas por el panel de expertos19 se proponen los siguientes La urea ha demostrado ser una alternativa eficaz en la co-
parámetros orientativos para decidir cuándo no hay respues- rrección de niveles de sodio, aunque en estudios aún poco
ta a la restricción hídrica: potentes y en casos muy determinados, pero parece tener un
1. Osmolalidad en orina alta (mayor de 500 mOsm/kg de futuro prometedor y que, en cualquier caso, amplía el redu-
H2O). cido armamento terapéutico disponible para estos pacientes.
2. Que la suma del sodio y de potasio en orina sean ma- Los estudios de eficacia publicados principalmente se han
yores que el sodio en plasma. desarrollado en pacientes con SIADH secundario a hemo-
3. Que la diuresis en 24 horas sea menor de 1.500 ml. rragia subaracnoidea, en pacientes críticos y también en ni-
4. Que el aumento de sodio plasmático sea menor de 2 en ños con NSIAD. También se han llevado a cabo estudios
24-48 horas con una restricción menor de 1 litro de agua al comparativos con tolvaptán en pacientes con hiponatremia
día. crónica, en los que parecen tener una eficacia similar. La

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ENFERMEDADES ENDOCRINOLÓGICAS Y METABÓLICAS (III)

principal limitación de este fármaco es su malograda palata- Responsabilidades éticas


bilidad, por eso se recomienda ser disuelta en zumo de na-
ranja u otras bebidas de sabor fuerte. La urea en dosis de
Protección de personas y animales. Los autores declaran
15-60 g al día se considera efectiva, ha de titularse semanal-
que para esta investigación no se han realizado experimentos
mente, aumentando 15 g al día hasta alcanzar la normaliza-
en seres humanos ni en animales.
ción de los valores de sodio, en general se utiliza en dosis de
15 g cada 12 horas. Durante el tratamiento con urea, tam-
Confidencialidad de los datos. Los autores declaran que en
bién se permite al paciente ser menos estricto con la restric-
este artículo no aparecen datos de pacientes.
ción hídrica, lo que mejora la adherencia terapéutica19.
Derecho a la privacidad y consentimiento informado.
Tratamiento de la causa subyacente como tratamiento
Los autores declaran que en este artículo no aparecen datos
definitivo de la hiponatremia
de pacientes.
Aunque parezca una obviedad, no hay que olvidar tratar des-
de el principio la causa original del SIADH siempre que sea
posible23,27: valorando la retirada de determinados fármacos, Bibliografía
tratando adecuadamente el dolor, las neumonías, enfermeda-
des del SNC o los tumores productores de AVP. t Importante tt Muy importante
✔ Metaanálisis ✔ Artículo de revisión
Adenda ✔ Ensayo clínico controlado ✔ Guía de práctica clínica
✔ Epidemiología
En el último artículo publicado por Verbalis21 realizado so-
bre el estudio observacional, multicéntrico y basado en el ✔
1. Montani JP, Liard JF, Schoun J, Möhring J. Hemodynamic effects of exo-
genous and endogenous vasopressin at low plasma concentrations in
registro de datos denominado Hyponatremia Registry de pa- conscious dogs. Circ Res. 1980;47:346-55.
cientes con hiponatremia, se analizan un total de 1.524 adul- ✔
2. Altura BM, Altura BT. Actions of vasopressin, oxytocin, and synthethic
analogs on vascular smooth muscle. Fed Proc. 1984;43:80-6.
tos en los que la hiponatremia es secundaria a un diagnóstico
clínico de SIADH. Esta aportación nos tiene que hacer re-

3. Morelli A, Rocco M, Conti G, Orecchioni A, De Gaetano A, Cortese G,
et al. Effects of terlipressin on systemic and regional haemodynamics in
catecholamine-treated patients. Intensive Care Med. 2004;30(4):597-
flexionar acerca del manejo que hacemos en nuestra práctica 604.
clínica habitual con estos pacientes. Dado que, a pesar de lo ✔
4. t Zerbe RL, Robertson GL. Osmoregulation of thirst and vaso-
pressin secretion in human subjects: effect of various solutes. Am J
referido en esta actualización, la línea de manejo más fre- Physiol. 1983;244:E607-E614.
cuente y con diferencia tanto en Estados Unidos como en ✔
5. t Jameson JL, De Groot LJ. Endocrinology: adult and pediatric.
6th ed. Phyladelphia: Saunders, and affiliated of Elsevier Inc; 2010.
Europa es, por orden de frecuencia, la restricción hídrica Chapter 21.
(48%), el suero salino isotónico (27%, a pesar de que como ✔
6. Thompson CJ, Bland J, Burd J, Baylis PH. The osmotic thresholds for
thirst and vasopressin release are similar in a healthy man. Clin Sci. 1986;
hemos visto se desaconseja su uso en estos pacientes salvo en
71:651-6.
casos de duda al diagnóstico de normovolemia), el suero hi-
pertónico (6%), tolvaptán (13%) y, por último, en un 11% de

7. t Smith D, Finucane F, Phillips J, Baylis PH, Finucane J, Tormey
W, et al. Abnormal regulation of thirst and vasopressin secretion
following surgery for craniopharyngioma. Clin Endocrinol. 2004;61:
los casos los pacientes no recibieron ningún tratamiento es- 273-9.
pecífico para corregir la hiponatremia. También describe ✔
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physitis as a cause of central diabetes insipidus. N Engl J Med. 1993;329:
cómo en menos del 50% de los pacientes no se determinaron 683-9.
los parámetros bioquímicos necesarios para un diagnóstico ✔
9. t Agha A, Rogers B, Mylotte D, Taleb F, Tormey W, Phillips J, et
al. Neuroendocrine dysfunction in the acute phase of traumatic bra-
de certeza de SIADH. in injury. Clin Endocrinol. 2004;60:584-91.
Posiblemente estemos en un punto donde a pesar de los ✔
10. t Agha A, Thornton E, O’Kelly P, Tormey W, Phillips J, Thompson
CJ. Posterior pituitary dysfunction following traumatic brain injury.
esfuerzos realizados en los últimos años por los grandes ex- J Clin Endocrinol Metab. 2004;89:5987-92.
pertos en el manejo de la hiponatremia, las recomendaciones 11. Ito M, Jameson JL, Ito M. Molecular basis of autosomal dominant neu-
rohypophyseal diabetes insipidus: cellular toxicity caused by the accumu-
no llegan a la práctica clínica habitual; pudiendo ser que aún lation of mutant vasopressin precursors within the endoplasmic reticu-
haga falta tiempo y más medios para conseguirlo, así como lum. J Clin Invest. 1997;99:2897-905.
reflexionar sobre por qué los clínicos continuamos sin reali- ✔
12. Thompson CJ, Charlton J, Walford S, Baird J, Hearnshaw J, McCulloch
A, et al. Vasopressin secretion in the DIDMOAD (Wolfram) syndrome.
zar un manejo correcto. Continuar participando con nuevos Q J Med. 1989;71:333-45.
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Lithium-induced down regulation of aquaporin-2 water channel expres-
mentando el esfuerzo por individualizar los tratamientos se- sion in rat kidney medulla. J Clin Invest. 1995;1838-45.
gún el contexto, ayudará a continuar mejorando nuestra ✔
14. tt Fenske W, Aliolo B. Current state and future perspectives in
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aportación como médicos. nol Metab. 2012;97:3426-37.
15. tt McKenna K, Thompson C. Osmoregulation in clinical disor-
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