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Ensayo

Una visión global del desarrollo del infante desde su individualidad

Desde la fecundación el Infante empieza primero a desarrollarse de forma física

mediante la división de células pasando posteriormente a procesos más complejos de los

cuales el niño poco a poco empezará a ser consciente. De este modo, si los progenitores

desean su nacimiento se formará un vínculo muy fuerte donde primará el amor y el respeto de

la vida que se está formando, a partir de esto, el Infante empezará a crecer como individuo

con sus propias particularidades, así como también con sus propias experiencias en primera

instancia desde el útero y después fuera de él. Una vez fuera del útero el bebé creará sus

propias experiencias a partir de la relación con su entorno y con sus cuidadores principales.

En una siguiente etapa el Infante creará conciencia de suyo de su individualidad y de su

pertenencia dentro de los dentro de la sociedad.

Como menciona (Verny y Weintraub, 1992), una vez en el útero el feto puede ver,

oír, sentir incluso formarse una conciencia de su vida en el vientre y el nacimiento lo cual es

determinante en la personalidad de cada individuo y en sus actitudes, en su libro “Programa

para los Nueve Meses” se indica que cuando los padres están relajados eliminan la

producción de las hormonas del estrés cómo ladran la adrenalina y la noradrenalina, las

cuales pueden atravesar la placentaria y afectar al niño los sentimientos de paz armonía y y

comunión familiar que tanto necesita en ese momento para poder formarse, sentirse amado y

esperado, todo esto creará una armonización intrauterina. Además, ciertos ejercicios

prenatales ayudarán a iniciar una forma de comunicación con el feto, haciendo que éste tenga

la certeza que sus padres ya lo conocían, lo amaban y aceptaban antes de nacer.


Gracias a los estudios científicos se ha conseguido comprobar que en el cuarto mes

después de la concepción el niño ya tiene desarrollados el sentido del gusto y tacto por lo

tanto si se le acarician los labios succiona el líquido amniótico, del mismo modo el bebé ya

puede percibir la luz y si es muy fuerte podría incluso protegerse los ojos. En el siguiente mes

el bebé reaccionará ante los ruidos fuertes cubriéndose los oídos. Por lo tanto, antes de que el

niño nazca tendrá la capacidad de recordar y percibir los sonidos del habla y reconocer un

relato que se haya oído repetidas veces y también la voz de las caricias que el bebé recibe de

sus progenitores generarán confianza y seguridad lo cual ayudará positivamente en su

desarrollo. De este modo aquellas mujeres quienes querían a sus bebés desde su concepción

tienen embarazos más fáciles e hijos sanos por el contrario quienes no querían a sus bebés

tuvieron problemas médicos, bebes prematuros o de bajo peso.

En este sentido, podemos comprender que es bebé ya es una persona consciente de sí

mismo, racional, con capacidad de discernimiento, dotado de sensibilidad e inteligencia, es

un individuo con ganas de socializar desde el momento de su concepción. Sin embargo, es

importante que los progenitores le den esa confianza ese ambiente seguro donde ellos quieran

estar desde el útero has el momento de alumbramiento, el bebé al escuchar las voces de sus

padres o con la música relaciona su existencia con el mundo exterior, con sus caricias puede

en cierto modo conectar sus sentidos sentir la presencia de otro, Todo esto supone el

nacimiento de bebés sanos, quizá por un esfuerzo en disfrutar la vida y querer compartirla

con su entorno. De este modo, los padres pueden ayudar en este proceso realizando diferentes

actividad que permitan un ambiente armónica dentro del útero por ejemplo ejercicios de

armonización para calmar al bebe cuando algo le parezca extraño, escritura de un diario que

le perimirá a la madre poder conectarse con ese momento tan especial con su bebé, diálogo

con la pareja, estimulación verbal para que el bebé pueda iniciarse con el lenguaje es decir
cualquier actividad que pueda relajar y permita hacer sentir a gusto a la mamá y por

consiguiente al bebe, actividades para poder desarrollar sus sensopercepciones.

Continuando con el desarrollo infantil en su siguiente etapa, según (Chokler, 2010),

los niños van alcanzando autonomía a través de instrumentos de crianza, programas de

educación medios de información y de la formación académica de profesionales. Todo esto

depende en qué clase de individuo autónomo quiero hacer crecer libre con confianza en sí

mismo y en su entorno, en sus propias capacidades y estrategias para una resolución de

conflictos un ser abierto, sensible, empático, comunicativo y solidario o por el contrario

alguien que siempre siga las reglas establecidas por su entorno sean estas positivas o no y sea

sumiso, temeroso del castigo y siempre esperando un premio, un ser competitivo que siempre

rivaliza para ser el primero y que esper un reconocimiento. Por lo tanto, la función de los

adultos y profesionales es respetar al niño desde que es un bebé y a su derecho a ser tratado

como una persona partiendo de su singularidad, sin embargo, dentro de algunas propuestas de

crianza que vivimos actualmente se realizan prácticas que no respetan las características

madurativas y psicológicas de cada niño como sujeto y crean niños demasiado dependientes

que no reconocen al niño como persona. La motricidad y la sensorialidad constituyen la base

de la existencia del bebé y de sus relaciones con el entorno y representaciones de sí mismo y

el mundo, el bebé desde su sensorio motricidad y autonomía, aunque pequeña aún precaria e

inestable se desarrolla desde el inicio de la vida, de tal manera se reconoce que para el bebé

es indispensable el adulto como una guía y sostén para satisfacer sus necesidades como un

nexo entre el mundo social de la cultura y del lenguaje, conociendo que el bebé es un sujeto

de reacción desde la más temprana edad la cual implica una operación sobre el medio entre el

sujeto y él.

Un bebé qué a cierta edad a determinada edad donde la media de los niños ya puede

desarrollar las actividades de determinada edad según lo establecido por los médicos y la
sociedad es obligado por sus cuidadores a realizarlas de manera forzada, no natural

delimitando al bebé a emprender la actividad por su propia cuenta y llevarla hasta su

culminación impidiendo así darle significado a su esquema sensoriomotor y mental sin pensar

que cada bebé es único, así como cada persona es única. El conocimiento detallado de la

actividad del bebé aporta un gran significado sobre la variabilidad de estrategias individuales

en la que el bebé desarrolla corporal y psíquicamente en cada una de las etapas de su

desarrollo, de esta forma se auto construye intelectual, práctica y socialmente acompañado y

guiado de la mano de sus cuidadores. En este sentido, autonomía significa que es capaz de

actuar a partir de su propia iniciativa e independencia, es biológica, funcionaria, emocional, y

primitivamente madura para la acción que se han determinado a desarrollar, actúa

cuestionándose y sorprendiéndose ante sus experiencias, se va formulando preguntas

recuerdo sus actos, es capaz de recibir disponer y procesar información para organizar

determinado proyecto, pero al forzar a que el niño utilice recursos que aún no posee para los

cuales no está maduro ni física, ni psicológicamente, se está acelera su maduración además la

obstaculiza y obliga a utilizar esquemas inapropiados.

Durante el juego el niño se alimenta de diferentes experiencias que despiertan sus

sentidos y de los cuidados de los padres se nutre de interacción y comunicación social, en ese

momento, el bebé reconoce gestos y actividades que se repiten en la vida cotidiana lo cual lo

entrena de cierto modo ara convivir dentro de la sociedad, construyendo así sus puntos de

referencia y orientación en el espacio, por lo tanto, el respeto por la persona por una duración

neuropsicológica por su individualidad y derecho a ser actor de su propio desarrollo y no por

parte de otros individuos, permitiéndose desarrollar como sujeto competente de acuerdo a su

nivel con iniciativas.

En el siguiente nivel de desarrollo del infante, el niño buscará conocer su

individualidad y lo hará con alegría. De acuerdo con (Lacan, 1949), en esta etapa el niño se
encuentra por primera vez con la habilidad y capacidad para percibir su imago corporal

completa en el espejo aquí se desarrollaría el yo como instancia psíquica. Cuando un niño se

da cuenta de que es su imagen la que se refleja por primera vez en el espejo, celebra la

aparición de su imagen con un gesto de emoción, alegría y sorpresa, para Lacan esto es

interpretado como la identificación del niño con su imagen, esa frente al espejo y de forma

completa, ya no verá sólo partes de su cuerpo sino ya el todo de sí mismo. En el momento en

el que el niño se reconoce en el espejo es cuando por primera vez reconoce su rostro

conjuntamente con su cuerpo. Cuando el niño aún no se reconoce, las partes de su cuerpo que

puede observar no constituyen una unidad y son percibidos como objetos separados hasta su

experiencia frente al espejo.

Investigaciones antropológicas y psicológicas experimentales han demostrado que

reconocerse en el espejo era una característica que es solo desarrollaban los humano, el

experimento del espejo demostraba que a la mayoría de los animales no mostraban ningún

interés por su reflejo excepto algunas especies como los primates. No obstante, actualmente,

se ha demostrado que, al utilizar nuevas situaciones experimentales derivadas de la prueba

del espejo, han podido ir agregando una lista de otros animales, como los cerdos, los delfines

las urracas y los elefantes. Sin embargo, para Lacan el reconocimiento de propia imagen del

niño ocurre con ayuda de y en relación a un otro semejante. Con quien él tiene a lado suyo al

que ya reconoció antes y frente a él es como se asimila este proceso El proceso que se pone

en marcha aquí es el de la identificación con la imagen del semejante como forma total, lo

que permitiría una «unificación imaginaria. Por lo tanto, para que se produzca el

reconocimiento del espejo son necesarios dos procesos: primero, la suficiente maduración de

las áreas del cerebro especializadas en la percepción y procesamiento de la información

visual., segundo, Que exista un semejante que le sirva de estímulo, en este aspecto aquí, es

decir, otro quien será su modelo de imagen, de este modo, el otro será el configurador de la
imago corporal al modela al infante. Al percibir su imagen en el espejo el niño ya no se

angustia por la ausencia de la madre para regocijarse reflejad de cuerpo entero en el espejo,

es decir como un individuo independiente de su madre o padre. Así el estadio del espejo

revela la configuración del yo del sujeto.

En este sentido, vemos al niño, que a pesar de tener una conciencia antes del

experimento del espejo no puede reconocerse totalmente como individuo independiente es

decir no se conoce totalmente, conoce o que les gusta, lo que le enoja pero aún no sabe cómo

luce ni como es percibido por los demás, por lo tanto, cuando es consciente de que el reflejo

frene al espejo es suyo es para él como un logro, como si hubiera estado esperando mucho

tiempo para conocerse a cuando sucede eso por fin se siente en cierto modo completo, sin

embargo, para que suceda esto se necesitara una segunda persona, otro con el que pueda

relacionar este descubrimiento.

Con todo esto, se puede observar al niño que desde su concepción quiere e intenta ser

conocido por sus padres, por quiénes le rodean y lucha por su independencia cada vez con

más determinación, los cuidadores deben por lo tanto brindar la confianza necesaria para que

el infante se desarrolle desde sus capacidades y limitantes, desde sus propias experiencias.
Referencias

Chokler, M. (2010). El concepto de autonomía en el desarrollo infantil temprano,

coherencia entre teoría y práctica. Aula de infantil, 53, 9-13.

Lacan, J. (1949). El estadio del espejo como formador de la función del yo [je] tal

como se nos revela en la experiencia psicoanalítica. Escritos i, 1.

Verny, T., & Weintraub, P. (1992). El vínculo afectivo con el niño que va a nacer:

programa de nueve meses para tranquilizar, estimular y comunicarse con su bebé. Urano.

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