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1. Capítulo 1.

Aspectos generales de la
conciliación en Colombia.

La conciliación es un mecanismo alternativo de solución de conflictos cuyos requisitos,


procedimientos o elementos pueden variar dependiendo del área del derecho en el que
esta se lleve a cabo; en el presente capítulo se abordarán aspectos generales de la
conciliación, sin profundizar sobre los presupuestos exigidos en áreas específicas donde
estas reglas difieren.

Adentrando en la conciliación se encuentra que posee un amplio margen de aplicación,


pues en el artículo 19 de la ley 640 de 2001 se establece que pueden ser conciliables
materias susceptibles de transacción, desistimiento y acuerdo, por lo que, en el marco de
los MASC se presume la existencia de asuntos que por su naturaleza, por prohibiciones
legislativas o jurisprudenciales y por la búsqueda de proteger derechos mínimos,
irrenunciables, ciertos e indiscutibles no son propensos a resolverse a través de esta
herramienta autocompositiva.

En cuanto a su clasificación, esta se presenta de diferentes formas, esta varía


dependiendo del área del derecho en que se utilice; al mismo tiempo puede ser judicial o
extrajudicial, en el primer caso se lleva a cabo dentro de un proceso jurídico y en el
segundo se adelanta por fuera de este. Asimismo, la conciliación extrajudicial según el art
3 de la ley 640 de 2001 puede ser en derecho cuando se lleva a cabo ante conciliadores
de centros de conciliaciones o ante funcionarios en cumplimiento de sus labores; o en
equidad cuando se adelante por medio de conciliadores en equidad. La clasificación
abordada a lo largo de esta investigación es la conciliación extrajudicial en derecho.

Revelo (2019) expresa que la conciliación extrajudicial posee tres características básicas,
las cuales son, la confidencialidad, que se desarrolla como una de las funciones del
conciliador; la voluntariedad, ya que las partes voluntariamente sin ningún tipo de presión
toman las decisiones bajo su libre albedrio; por último se encuentra la autocomposición,
que implica que el conciliador media y propone fórmulas de arreglo pero son las partes
quienes deciden la solución. (Pag.69). del mismo modo, Revelo (2019) expone que este
mecanismo se rige bajo unos principios que buscan garantizar el cumplimiento de sus
fines, estos son, informalidad, buena fe, idoneidad, economía, celeridad y flexibilidad. La
informalidad hace referencia a la ausencia de requisitos rigurosos, la buena fe trata de la
pretensión de hacer lo correcto, la idoneidad alude a la calificación del profesional para
ser conciliador, la economía se refiere a costos bajos, la celeridad se relaciona con la
eficacia del proceso, en cuanto a la flexibilidad se encuentra que esta va ligada a la
adaptación según las necesidades de las partes.

Sumado a lo anterior, este instrumento se compone por procedimientos, intervinientes y


documentos que son necesarios para que tenga validez, por esto, se enunciará
información acerca de los centros de conciliación, conciliadores, funciones de
representantes, actas y constancias.

1.1 Centros de conciliación, conciliadores, apoderados,


actas y constancias

Para que se pueda realizar una audiencia conciliatoria se precisan de unos elementos
básicos que garanticen el desarrollo adecuado del proceso, por esto, es necesario que se
disponga de un lugar idóneo para llevar a cabo los procedimientos, un tercero mediador
que dirija la discusión, al finalizar la sesión se deberá levantar acta conciliatoria,
constancia de no acuerdo o constancia de no comparecencia, en este mecanismo la regla
general es que la presencia de abogados sea opcional, por lo tanto no es indispensables.
Dicho esto se procederá a indicar los lineamientos establecidos para estos elementos.

1.1.1 Centros de conciliación

El art 2.1.2.1. Del decreto 1069 de 2015 determina que los centros de conciliación son
sitios autorizados por el Ministerio de Justicia y del Derecho que prestan apoyo operativo
y administrativo necesario para que los conciliadores lleven a cabo sus funciones
conociendo de los procedimientos de negociación de deudas y convalidación de acuerdos
privados. Estos pueden ser gratuitos cuando pertenecen a consultorios jurídicos de
facultades de derecho o a entidades públicas, también existen centros remunerados
cuando son privados y cobran por sus servicios.

En el capítulo 2 del título 4 del mencionado decreto se plantean las disposiciones relativas
a los centros de conciliación, aquí se establece que las personas jurídicas sin ánimo de
lucro, las entidades públicas y los consultorios jurídicos de las facultades de derecho
podrán solicitar al Ministerio de Justicia y del Derecho la autorización para la creación de
Centros de Conciliación, previo cumplimiento de los requisitos establecidos; la solicitud
deberá contener la información de la ciudad en que prestaran los servicios y de los
recursos necesarios para la dotación, funcionamiento y operación de este. Asimismo, se
deberá anexar a la solicitud certificado de existencia y representación legal, fotografías,
planos, folios o contratos, documentos que comprueben la existencia de capital para
ejecutar los planes y el proyecto de reglamento.

De lo anterior, es importante destacar que el reglamento de los centros de conciliación


debe cumplir con el desarrollo unos presupuestos estipulados por ley, tales
requerimientos son, la estructura administrativa, funciones del director, requisitos de los
conciliadores, procedimientos para la integración de listas de conciliadores, maneras de
designar conciliadores, herramientas de información al público en general y un estatuto
interno de ética.

1.1.2 Conciliadores y apoderados


 Conciliadores en derecho

Son conciliadores todos aquellos particulares que se encuentran adscritos a un centro de


conciliación para administrar justicia de forma transitoria; también lo son, aquellos
funcionarios públicos que en cumplimiento de sus funciones deben llevar a cabo
audiencias conciliatorias, estos pueden ser, procuradores, comisarios, defensores
públicos, personeros, inspectores de trabajo, fiscales, entre otros. Al mismo tiempo hay
particulares que prestan servicios públicos facultados para adelantar estas audiencias,
tales como notarios.
Los conciliadores en derecho deben ser neutrales, imparciales y objetivos, deben
practicar la prudencia garantizando la preservación de los principios de la conciliación,
además de contar con aptitudes y características específicas para desarrollar sus
funciones, con relación a esto, Hoyos (2015) plantea unos postulados que este tercero de
desplegar para que el proceso sea exitoso, estos son, realizar un buen contacto, saber
escuchar, intercambiar, conocer el conflicto, ser orientador y facilitador, no juez de las
partes; hacer énfasis en las personas, propender por una hermenéutica de discurso, En
último lugar, el conciliador debe trabajar las ventajas y renuncias mutuas.

Por último, respecto a las obligaciones del conciliador la ley 640 de 2001 en su art 8
plantea que este debe citar a las partes de conformidad con la ley, hacer concurrir a
quienes deban asistir a la audiencia, ilustrar a los comparecientes sobre el objeto, alcance
y límites de la conciliación, incentivar a las partes para que presenten formulas de arreglo,
formular propuestas de arreglo, levantar el acta de la audiencia de la conciliación y
registrar esta acta conforme a la ley; sumado a esto, debe velar por el no menoscabo de
los derechos ciertos e indiscutibles, así como los mínimos e intransigibles.

 Apoderados
La intervención de representantes judiciales en la audiencia conciliatoria no es
indispensable, es opcional, por lo tanto, serán las partes quienes decidan su
comparecencia, también decidirán sobre el nivel de participación de estos durante el
transcurso de la sesión. Sin embargo, los apoderados solo ejercerán un roll de apoyo y
consultoría explicándole a su representado conceptos o procedimientos de derecho,
beneficios o perjuicios, asimismo podrá indicarle a su cliente formulas de arreglo; esto se
presenta así ya que son las partes quienes directamente deben resolver su conflicto.

1.1.3 Actas y constancias

Al finalizar el proceso conciliatorio se deberá levantar acta conciliatoria, constancia de no


acuerdo o constancia de no comparecencia.
Se elaborará acta conciliatoria cuando las partes lleguen a un acuerdo sobre el conflicto,
es necesario que esta preste merito ejecutivo, por lo tanto, el documento debe contener
una obligación clara, expresa y exigible proveniente del deudor, tal y como lo prevé el art
422 del CGP. Esta acta debe contener fecha en la que se llevó a cabo la conciliación,
nombre y número de cedula tanto de las partes como del conciliador, obligación pactada,
lugar, fecha, cuantía y modo en que debe cumplirse la obligación, asimismo, esta acta
tendrá que ser firmada por las partes y el conciliador. En caso de que alguna de las partes
incumpla lo pactado la otra podrá acudir a un proceso judicial ejecutivo para hacer vales
sus derechos.

En cuanto a la constancia de no acuerdo, como su nombre lo indica, se redactará cuando


las partes no hayan logrado un arreglo sobre el tema del conflicto, esta será firmada
solamente por el conciliador y será prueba de que se agotó el requisito de procedibilidad
en caso de que se pretenda iniciar un proceso donde la conciliación sea un presupuesto.

Acerca de la constancia de no comparecencia, se encuentra que esta se efectuará


cuando alguna o ambas partes no concurran a la audiencia conciliatoria. Esta también se
firmará solo por el conciliador, además, será prueba del agotamiento de requisito de
procedibilidad en los casos que este sea exigido.

Todas las actas y constancias anteriores deberán ser registradas por el conciliador en el
Sistema de Información de Conciliación, Arbitraje y Amigable Composición (SICAAC)
incluyendo la dirección física y electrónica de las personas que asistieron a la audiencia,
así como lo dispone el art 2.2.4.2.7.1. Del decreto 1069 del 2015. De la misma forma, el
art 2.2.4.2.7.6 del mismo decreto establece que esta información deberá ser registrada
en un término no mayor a 5 días a partir del momento en que el centro asuma el caso o
expida la documentación mencionada.

Sumado a lo anterior, en contexto con el art 2.2.4.2.7.6 del decreto 1069 del 2015 y el art
14 de la ley 640 de 2001 los conciliadores también deben registrar las actas conciliatorias
ante el centro de conciliación en el que se encuentran inscritos, este entregará al centro
copia de los antecedentes del trámite, un original del acta de conciliación y una copia a
cada una de las partes. Además, el director del centro de conciliación deberá verificar que
se cumplan los presupuestos establecidos en el art 1 de la ley 640 de 2001.
1.2 La conciliación como alternativa al proceso judicial

Como ya se ha mencionado, la conciliación hace parte de los MASC, estos mecanismos


son alternativos a pleitos o procesos judiciales; es una forma diferente de acceder a la
administración de justicia que cuenta con métodos particulares. Debido a que es un modo
distinto de acceso a la justicia posee aspectos disimiles al proceso judicial, es decir,
aunque el fin es el mismo, se llega a este por otros medios.

En vista de lo anterior, es menester correlacionar estos dos medios jurídicos, con el fin de
lograr un análisis sobre sus disensiones y similitudes.

A continuación se presentará tabla comparativa realizada a la conciliación como


mecanismo alternativo de solución de conflictos y el proceso judicial.

Tabla 1:

Comparación entre los aspectos de la conciliación y los del proceso judicial

Aspectos Conciliación Proceso judicial


Procedimiento Flexible, informal, las Rígido, formal, regulado
partes pactan las reglas por la ley.
con el conciliador.
Intervención del tercero El conciliador dirige el El juez dirige la audiencia,
diálogo, propone fórmulas ostenta autoridad, juzga y
de arreglo, incentiva a las decide.
partes a llegar a un
acuerdo, no tiene poder de
decisión, no puede juzgar.

Tabla 1: (Continuación)
Aspectos Conciliación Proceso judicial
Participación de las partes Las partes tienen la El juez decide la
oportunidad de participar oportunidad, forma y
cada vez que lo consideren tiempo en que deben
pertinente respetando los intervenir las partes.
turnos.
Duración del proceso El proceso conciliatorio El proceso judicial puede
puede perdurar el tiempo extenderse por años,
que las partes lo representando desgaste
consideren pertinente. económico y jurídico.
Comunicación Los intervinientes pueden Las partes se comunican a
comunicarse directamente través del juez, al mismo
dentro o fuera de la tiempo, este se comunica
audiencia conciliatoria. mediante autos.
Asistencia de abogados La asistencia de estos no Generalmente se necesita
es obligatoria, a excepción la asistencia de abogados,
de la conciliación laboral, a excepción de algunos
penal y administrativa que procesos, tales como los
se adelanta ante de mínima cuantía.
funcionarios públicos.
Fuente documental: • Unión Internacional Profesional de Auxiliares del Notariado. (s.f.)
Pág. 7. 1Nota: información complementada.

Para finalizar el presente capítulo, es posible afirmar que la conciliación es el medio


idóneo y accesible para resolver conflictos. Por esto, es un mecanismo que goza de
predilección por parte de los particulares, abogados y funcionarios cuando existen
discrepancias o desavenencias que deban ser solventadas.

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La información expuesta en esta tabla se complementó con algunos principios y características
propias de la conciliación, tales como, la autocomposición, voluntariedad, celeridad, economía,
entre otros.

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