Está en la página 1de 7

Problemática de la teoría tridimensional

En las ciencias sociales, se plantea, en principio, el problema de si po- seen la estructura


de saber idéntica a la de las ciencias de la naturaleza. K. R. Popper defiende la postura
de la unidad del método científico, “los métodos no dependen del ideal metodológico,
sino de la cosa” (Mardones et al., s/f: 104). Esto es, el objeto define al método, ya que el
método de las ciencias sociales reside en ensayar posibles soluciones para sus
problemas, el cual consiste en la prolongación a todo el campo de investigación del
método del ensayo y del error. El conocimiento no empieza con percepciones u ob-
servaciones, o con la recopilación de datos o de hechos, sino con problemas, no hay
conocimiento sin problemas, ni problemas sin conocimientos. “Es necesario unir
conocimiento e interés, teoría y praxis (totalidad) si se quiere comprender los porqués
del conocimiento y de la sociedad en la que se desa- rrolla” (Mardones, s/f: 104).

Se debe conservar esa tríada en el derecho, sin separarla, pues cualquier norma incluye
una situación de hecho y un orden de valores; así, cuando la sociología jurídica estudia
al derecho, como un hecho social, este hecho im- plica referencias esenciales a normas y
a valores; y cuando se trata de enfatizar el problema de los valores jurídicos, ya sea en el
terreno filosófico o en el em- pírico-positivo, se otorga una referencia primordial a la
situación de hecho que en dichos valores deben incluir, así y por último la esencia
normativa que el instrumento debe poseer para su realización o aplicabilidad en el
terreno fáctico. “En realidad, viene a afirmar la naturaleza esencialmente triádica del
derecho, de tal suerte que a ningún especialista le sea lícito aislar absoluta- mente, uno
de los factores para hacerlo objeto de cualquier investigación de orden filosófico,
sociológico o histórico” (Reale, 1997: 69-70). Al encontrase el derecho constituido por
tres elementos que lo integran, científicamente no es posible realizar estudios de esa
índole a la luz de los hechos, o solamente con el elemento norma o bien con el
ingrediente valor, porque al hacerlo de esa manera se desvirtúa tanto a la teoría que nos
ocupa como a la propia na- turaleza de la dimensión del derecho en su esencia.

Reale (1997, 143) afirma que el tridimensionalismo empieza a surgir para superar la
crisis determinada por una comprensión multifacética y contradictoria del derecho. En
otros términos, las diferentes visiones del derecho y sus continuas crisis obedecieron a
las crisis fecundas que operaron en la problemática del hombre. Y el problema del
hombre dejó de ser un tema referido solamente al “yo” que piensa, para pasar a ser un
“yo” necesariamente comprendido y comprensible en la finitud y en la relatividad de su
mundo (Reale 1997, 139-140).
Así, la Teoría Tridimensional habría impulsado un intento de paradigma desde que
postuló la inexistencia de antinomia entre la filosofía del derecho, la ciencia del derecho
y la sociología del derecho (aunque a ciencia cierta, nos parece que tal antinomia jamás
habría existido).
POSICION DEL TRIDIMENCIONALISMO JURIDICO CONCRETO

Por otro lado, como toda vida es tridimensional, porque siempre implica el
hecho de una acción subordinada a la medid O norma resultante de un
valor religioso (moral estética, etc.), surgió un cuarto problema, que es
saber cómo la tridimensionalidad jurídica se distingue de las demás que
constituyen el complejo y multiforme dominio de la experiencia ética.

Por cierto, la ley es solo para todos los que la estudian. Esta es una
condición necesaria para que los diversos peritos mantengan un contacto
permanente, brinden y complementen sus respectivas investigaciones;
pero esto no significa que, en un sentido propio, las personas puedan Una
sola ciencia jurídica, a menos que a la palabra "ciencia" se le dé la
connotación general de "conocimiento" o "saber", puede dividirse en
múltiples "métodos". Conocer, en función de varios "objetos" cognitivos,
la experiencia del derecho lo hace lógicamente posible.

Sus orígenes en 1940, integración de hecho, valor y norma

Las tridimensionalitas, en general, aceptan o no esta calificación,


se han limitado a afirmar el carácter normativo factico-axiológico
del derecho, sin extraer de esta aproximación al problema todas las
consecuencias implícitas en él y que, a mi juicio, son de gran
importancia. para la Ciencia del Derecho. No solo para aclarar y
determinar mejor viejos problemas, sino para plantear nuevas
preguntas, demandadas por las coyunturas sociales históricas de
nuestro tiempo. En el sentido auténtico del término, representa, por
tanto, la conciencia de todas las implicaciones que dicha
verificación establece para cualquier tipo de investigación sobre el
derecho y sus consecuentes correlaciones en los diferentes niveles
de la Ciencia del Derecho, la Sociología del Derecho o la Filosofía
del Derecho.
La teoría tridimensional en el auténtico sentido del término,
representa, por tanto, la conciencia de todas las implicaciones que
dicha verificación establece para cualquier género de
investigación sobre el derecho y sus consecuentes correlaciones
en los distintos planos de la Ciencia del Derecho, la Sociología
jurídica o filosofía del derecho.

En realidad, afirma el carácter triádico esencial del derecho, de tal


manera que no es lícito a ningún especialista aislar, en absoluto,
uno de los factores para convertirlo en objeto de cualquier
investigación de carácter filosófico, sociológico o histórico.
Aunque hay, por supuesto, algunos problemas

Confrontación de otras formas de trimensionalismo


especifico

A pesar del inmenso escenario en el que se desenvuelve y


desarrolla la experiencia jurídica, ha existido la tentación de
presentarla de forma unitaria y abarcadora, subordinándola a
los esquemas de una sola ciencia.
La unidad de derecho es una unidad de proceso, esencialmente
dialéctica e histórica, no solo una aglutinación diferente de
factores en el comportamiento humano, como si este pudiera
ser un comportamiento jurídico abstraído de dichos tres
elementos (hecho, valor y norma), que son lo que la hace
pensable como conducta y, más aún, como conducta legal. Es
decir, no se puede pensar, en definitiva, en la conducta jurídica
como una especie de mansión donde se alojan tres personajes,
ya que o la conducta es una implicación de esos tres factores y
se confunden con ellos, o no es más que una abstracción falaz.:
una actividad inconcebible desprovista de significado y
contenido.
Cuando hablamos de conducta jurídica, entonces, no debemos
pensar en algo sustancial o “sustantivo”, capaz de recibir el
sello externo de un sentido axiológico o de una pauta
normativa: por el contrario, solo hay conducta jurídica en la
medida y para la medida en que la experiencia social dota de
dicho significado y dicha directriz.

La experiencia Jurídica como estructura tridimensional

Como ves, la teoría jurídica y estatal tridimensional, tal como


la vengo desarrollando desde 1940, aunque no utilicé este
término en su momento, se diferencia de las demás de
carácter general o específico porque es concreta y dinámica.

a) El hecho, el valor y la norma están siempre presentes y


correlacionados en todo enunciado de la vida jurídica, ya sea
del filósofo, del sociólogo jurídico o del jurista como tal.
Mientras que en el tridimensionalismo genérico o abstracto
correspondería al estudio de los valores para el filósofo, lo
sociológico al hecho y el jurista a la norma (la
tridimensionalidad como requisito esencial del derecho)

b) La conexión entre estos tres elementos es de carácter


funcional y dialéctico, ya que entre hecho y valor existe la
"polaridad de implicación", cuya tensión se traduce en el
momento normativo, y se muestra así como solución
superadora e integradora dentro de la circunstancia de los
límites de lugar y tiempo (especificación histórica del proceso
legal en una dialéctica de complementariedad)

Aun cuando la teoria tridimensional de todo el mundo


juridico ya estuve delineada en ambas obras mencionadas de
1940, la inicial presentación del derecho como “una realidad
bidimensional”, se debería al producido de que no había
llegado aún a una conclusión que sería el punto decisivo en
la evolución de mi pensamiento.

Ha sido analizando la llamada “teoria de los objetos”, a la luz


de las categorías de ser y debería ser, e tratando una síntesis
superadora, como intuí la inviabilidad de avanzar asumiendo
la tesis de Sheler o de Hartmann sobre los valores como
“objetos ideales”.
Teoria Tridimensionales. (s. f.). Teoria tridimensionales. Recuperado 23 de septiembre
de 2021, de
https://enriquedussel.com/txt/Textos_200_Obras/Filosofos_Brasil/Teoria_tridimenciona
l_derecho-Miguel_Reale.pdf

Reale, M. (2017, 28 febrero). POSICIÓN DEL TRIDIMENSIONALISMO JURíDICO


CONCRETO*. studylib.es. https://studylib.es/doc/6765507/posici%C3%B3n-del-
tridimensionalismo-jur%C3%ADdico-concreto-

DERECHO Y CAMBIO SOCIAL. (s. f.). Derecho y Cambio social. Recuperado 24 de


septiembre de 2021, de
https://www.derechoycambiosocial.com/revista016/tridimensionalidad%20del
%20derecho.htm

Reale, M. (2016, 27 julio). Situación actual de la teoría tridimensional del Derecho |

Anales de la Cátedra Francisco Suárez. Situación actual de la teoría

tridimensional del Derecho.

https://revistaseug.ugr.es/index.php/acfs/article/view/5170

También podría gustarte