ADRIÁN PÉREZ SERRANO, con la personalidad que tengo plenamente
reconocida en autos del expediente en que promuevo, ante Usted con el debido respeto comparezco para exponer lo siguiente:
Que por medio del presente ocurso y con fundamento en lo dispuesto
por el artículo 1335 del Código de Comercio, vengo a contestar la vista dada respecto del RECURSO DE REVOCACIÓN planteado por la actora en contra del auto de fecha siete de mayo dictado dentro del presente juicio, mismo mediante el cual se desechó de plano el incidente criminal incoado por la misma.
Primeramente refiero que en efecto, el auto de fecha siete de mayo
del dos mil catorce dictado dentro de la tocante causa legal se encuentra indebidamente fundado e indebidamente motivado tal y como a continuación se indica:
a) INDEBIDAMENTE FUNDADO. Lo anterior es así porque el
incidente criminal planteado por la actora fue desechado de plano mediante el acuerdo antes referido, fundándose para ello en lo dispuesto por el artículo 1063 del Código de Comercio y el diverso 57 del Código Federal de Procedimientos Civiles, siendo que este último establece lo siguiente:
Los tribunales no admitirán nunca incidentes, recursos o
promociones notoriamente maliciosos o improcedentes. Los desechará de plano sin necesidad de mandarlos hacer saber a las otras partes ni dar traslado, ni formar artículo.
Ahora bien, lo antes señalado resulta correcto, más sin embargo,
para desechar el incidente incoado por la actora, también se debió traer a colación el artículo 1349 del Código de Comercio y que por ser de interés al asunto transcribo a continuación:
Son incidentes las cuestiones que se promueven en un juicio y
tienen relación inmediata con el negocio principal, por lo que aquellos que no guarden esa relación serán desechados de plano. Así las cosas, si el auto de fecha siete de mayo del dos mil catorce se hubiese fundamentado también en base al artículo antes citado, éste se encontraría debidamente fundado tal y como lo dispone el primer párrafo del artículo 16 de nuestra Carta Magna. b) INDEBIDAMENTE MOTIVADO. Como se desprende de autos, el incidente criminal propuesto por MARÍA ISABEL ZENAIDA ESCALONA HERNÁDEZ fue desechado de plano por ser notoriamente improcedente en razón de que se consideró que éste debió haberse planteado en contra de acciones derivadas de los títulos de crédito que sirvieron de documentos fundatorios de la acción ejercitada por la actora, más sin embargo dicho incidente debió haberse desechado en virtud de que éste no guardaba relación inmediata con el asunto principal ya que fue propuesto en contra del suscrito ADRIÁN PÉREZ SERRANO y de GUSTAVO ALBERTO COYOTZI RODRÍGUEZ, a lo cual debo decir que por cuanto al último de los nombrados, éste no es parte dentro del juicio aquí seguido, además de que no se encuentra autorizado para oír y recibir notificaciones por ninguna de las partes, hecho que hace que dicho incidente resulte notoriamente improcedente por cuanto hace al Señor GUSTAVO ALBERTO COYOTZI RODRÍGUEZ, luego, por cuanto al del libelo debo decir que el incidente criminal del que se habla se debió desechar también porque éste no guarda relación inmediata con el asunto principal en virtud de que en ningún momento el suscrito ADRIÁN PÉREZ SERRANO señalé bien alguno para que sobre el mismo se trabara formal embargo tal y como lo instruyó su Señoría mediante el auto admisorio de fecha veintiocho de octubre del dos mil trece que obra en el tocante expediente, pues así se desprende del despacho número 140/2013 mismo que fue devuelto a esta autoridad por el Juzgado de lo Civil del Distrito Judicial de Zaragoza, con residencia en Zacatelco, Tlaxcala, mismo en el que consta el embargo de la casa marcada con el número dos de la calle Aldama colonia centro de la ciudad de Oaxaca, siendo dable recalcar que el del libelo en ningún momento señale dicho inmueble para el embargo en comento, mas sin en cambio ante ésta Honorable autoridad acudí a dar debida contestación a la demanda instaurada en contra del suscrito siguiendo así el procedimiento dispuesto por el Código de Comercio.
Luego entonces se tiene que si el Señor GUSTAVO ALBERTO
COYOTZI RODRÍGUEZ no es parte dentro del Juicio Ejecutivo Mercantil aquí ventilado y el del libelo ADRIÁN PÉREZ SERRANO en ningún momento señalé bienes a embargar, el incidente criminal incoado por la actora MARÍA ISABEL ZENAIDA ESCALONA HERNÁDEZ resulta ser notoriamente improcedente porque en efecto, éste no guarda relación directa con el negocio principal, por lo que dentro de éste su Señoría sólo debe tomar en cuenta los hechos que la actora aduce en su escrito inicial de demanda y los hechos en que el suscrito demandado fundo mi excepción opuesta desde mi escrito de contestación de demanda, dado que un Juicio Ejecutivo Mercantil es de litis cerrada, tal y como lo dispone el siguiente criterio:
LITIS CERRADA EN EL JUICIO EJECUTIVO MERCANTIL. De
conformidad con el artículo 1327 del Código de Comercio, en el juicio ejecutivo mercantil la litis es cerrada, pues esta disposición claramente establece que "la sentencia se ocupará exclusivamente de las acciones deducidas y de las excepciones opuestas respectivamente en la demanda y en la contestación", disposición de la que se advierte que la litis en el juicio ejecutivo mercantil queda establecida con los hechos en que la actora funda su acción, que expresó en su demanda inicial y aquellos en que la demandada funda sus excepciones y que expuso en el escrito de contestación a la demanda inicial; consecuentemente la litis en el juicio natural queda fijada con los hechos que las partes precisan en sus escritos de demanda inicial y contestación a ésta, y si en éstos la actora no manifestó cuál era el origen de los documentos fundatorios de la acción, y la demandada se concretó a oponer excepciones, sin que ninguna de ellas la haya fundado en que el origen de los pagarés fundatorios de la acción que ejercitó el actor, tuvieran su origen en aportaciones de los socios para un futuro aumento de capital de la ahora quejosa, atento al artículo 1327 del Código de Comercio, este hecho no formó parte de la litis establecida en el juicio natural, por lo que, independientemente de que se hayan ofrecido y aportado pruebas tendientes a demostrar tales hechos, el juzgador no estaba obligado ni a estudiar dicha cuestión ni las pruebas ofrecidas con tal objeto, dado que de los términos del citado precepto legal se evidencia que el juicio ejecutivo mercantil es de litis cerrada. SEGUNDO TRIBUNAL COLEGIADO DEL DÉCIMO SÉPTIMO CIRCUITO. Época: Novena Época, Registro: 195871, Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito, Tipo de Tesis: Jurisprudencia, Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta, Tomo VIII, Julio de 1998, Materia(s): Civil, Tesis: XVII.2o. J/10, Página: 281.
Finalmente, por las razones antes expuestas pido a su Señoría
modifique el auto de fecha siete de mayo del dos mil catorce dictado dentro de la tocante causa legal, mismo que deberá quedar debidamente fundado y motivado para que de manera correcta quede desechado el incidente criminal propuesto por la actora, sin trastocar así el artículo 16 de nuestra Carta Magna.
En consecuencia, dicho auto deberá considerar además del
artículo 1063 del Código de Comercio y el diverso 57 del Código Federal de Procedimientos Civiles, también el artículo 1349 del ya referido Código de Comercio y de motivarlo en base a que dicho incidente criminal no guarda una relación directa con el negocio principal, el cual fue propuesto maliciosamente para retardar la continuación y solución del tocante juicio.
Por lo anteriormente expuesto a Usted Ciudadano Juez,
atentamente pido: UNICO: Tenerme por presente en los términos de este escrito mediante el cual contesto la vista dada respecto del RECURSO DE REVOCACIÓN propuesto por la actora y en el momento oportuno resuelva el mismo.
R E S P E TU O S A M E N T E. Tlaxcala de Xicohténcatl, Tlaxcala, Mayo del dos mil catorce.