Está en la página 1de 14

Clase 4: Aproximaciones para una clasificación

El mundo ficcional como primer acercamiento


A lo largo de los años quienes se dedican al estudio y a la critica literaria han
presentado diferentes clasificaciones. Depende las corrientes, clasificaban los
textos narrativos según su estructura, sus personajes, los espacios en que
transcurrían los hechos, el efecto que se quería causar en el lector, etc.

Ninguna clasificación está acabada en si misma, pero sirve como acercamiento


más profundo conocer aquellos rasgos que priman en cada género.

Desde el área adoptamos el siguiente criterio en torno al contenido, pues


existe taI riqueza en la producción literaria que asimilarlos sería un
reduccionismo. Por lo tanto, haremos una primera clasificación basada en:

 Construcción del mundo ficcional y los temas

1. Construcción del mundo ficcional y tema

De acuerda con el tema o contenido los cuentos estarían comprendidos en dos


grandes grupos, según la forma de construcción del mundo ficcional:
REALISTAS y NO REALISTAS.

Los no realistas son siempre los cuentos maravillosos, fantásticos, de ciencia


ficción y del absurdo.

Tanto los realistas como los no realistas, pueden ser además clasificados por
su tema, como aparece a continuación:

HUMOR

CUENTOS REALISTAS AMOR

ANIMALES

NATURALEZA

SUSPENSO

POLICIAL
CUENTOS NO
FOLKLÓRICOS
REALISTAS
AVENTURAS

PSICOLÓGICOS
Veremos a continuación algunas clasificaciones en mayor profundidad:

El cuento maravilloso

Origen: Las comunidades primitivas preparaban a cada uno de sus


miembros para enfrentar las etapas nuevas que se dan en la vida.
Sus enseñanzas y principios se dirigían principalmente a la juventud,
para enfrentar con éxito las dificultades o peligros de la vida en
vísperas de su alejamiento del hogar y en su enfrentamiento con
problemas como el amor, la fidelidad, la justicia, las fuerzas
desconocidas. Uno de los recursos, junto a la magia y la hechicería,
eran los relatos que les señalaban las posibles soluciones. Luego,
estas narraciones perdieron su condición de rito secreto y
comenzaron a transmitirse oralmente a modo de enseñanza práctica.
Se conserva en la comunidad, sobre todo en las tradiciones orales
campesinas. Por eso es fácil encontrar variantes, hasta de los cuentos
más conocidos, en regiones diferentes.

Definición: El cuento maravilloso es un relato construido sobre la


base de un conjunto reiterado de situaciones humanas y de
soluciones posibles para explicar aspectos de la vida. Incluye además
hechos extraordinarios que causan nuestra maravilla o admiración
por su lógica especial dentro del marco de lo irreal.

Características: En la actualidad entendemos por cuento


maravilloso el relato que recurre a la magia y a la hechicería,
perfectamente aceptadas en el curso de la narración para explicar
hechos de la vida que son de difícil solución o comprensión. A veces
se llega inclusive a personificar fuerzas de la naturaleza.

 Indeterminación temporal y espacial. La fórmula inicial del


cuento no es cuestionada sino aceptada por el lector: "Había
una vez…”, “En un país muy lejano...”

- El espacio del cuento maravilloso genérico, indeterminado,


absoluto: una comarca, la aldea, un pueblo muy lejano.

- Los hechos están colocados fuera del tiempo y siguen una lógica
especial que no es cuestionada por el lector aunque no mantenga la
relación causa-efecto.

 Se da en algunos relatos una metamorfosis o un mimetismo


con el mundo de las plantas y de los animales por mágico
mandato, porque el lector no pone límites a lo maravilloso ni a
la oscilación entre lo real e irreal.
 En las situaciones que plantea el cuento maravilloso se da un
cambio gradual ascendente o descendente. Esta progresión
está marcada por una serie de pruebas que debe superar el
protagonista, ya con su propio ingenio, ya con ayuda de
personajes mágicos (hadas madrinas, ángeles guardianes,
etc.). Si son vencidas, permiten el ascenso y una solución
óptima; en caso contrario se produce un retroceso y el
consecuente castigo. Por lo general predomina una graduación
ascendente que responde a una actitud optimista y de
esperanza en el género humano. Este proceso simboliza la vida
con sus alternativas buenas y malas, y la renovada esperanza
del hombre de llegar a feliz término en cada una de sus
empresas.
 Contraposición del bien y el mal, en hechos, tamaño, o en las
características psicológicas de los personajes:

Hadas / Brujas

Duendes, gnomos, enanitos / Gigantes, ogros

Maldad, la fuerza bruta / Bondad, mansedumbre

Ambición, capricho / Generosidad, afabilidad

 Los objetos mágicos más comunes son varitas, talismanes,


elixires, ungüentos, plumas, anillos, piedras, etc., que son
benéficos para el personaje noble y perjudiciales para el
malvado.
 Predomina el ritmo ternario (tres hijos, tres pruebas. tres días,
la tercera vez) porque es más fácil de captar por la gente
simple y los niños. Esto se ve tanto en los episodios como en el
número de los personajes.
 Desenlace feliz, rápido y de muy fácil comprensión, casi
siempre con el casamiento de la protagonista con un rico
mercader o un apuesto príncipe que presupone en el cuento
maravilloso tradicional, la recompensa a los buenos y
generosos, y el castigo a los malos y egoístas.
 En este tipo de relato lo ético no se expresa como moraleja
sino fuertemente entrelazado con el desarrollo total del cuento,
lo que hace que la narración valga por sí misma, como un
pasatiempo, y no tenga una justificación didáctica como la tuvo
en sus comienzos.

Las hadas:

Aunque a lxs niñxs no les interesen ni su origen, ni su simbolismo


diremos que la palabra hada deriva del latín fata y ésta a su vez de
una raíz griega que significa lo que brilla. Su concepción corpórea
está dada por un ser fantástico con forma de mujer a quien se le
atribuían poderes mágicos y de adivinación. Estos seres desempeñan
importante papel en casi todas las leyendas de la Edad Media,
destacándose entre otras Melusina, Viviana y la Dama Blanca.
Originarias de Oriente y de origen pagano, fueron los persas -
espirituales, sutiles y voluptuosos- quienes las transmitieron a los
árabes y éstos a los españoles.

Caracteres:

- Constituyen una sociedad libre, de ahí que hasta sus características


no sean universales.

- Aman y gustan ser amadas.

- Tienen poder a través de talismanes, piedras preciosas y armas


encantadas.

- Sus citas son en lugares de buen gusto: la límpida fuente, un claro


del bosque, o una gruta bañada por la plácida luz de la luna.

- Sus apariciones son oportunas y utilizan la metamorfosis o el


mimetismo.

- Sus costumbres son ejemplares.

- Otorgan dones y virtudes aunque suelen ser caprichosas, egoístas y


maliciosas pero sin llegar a la maldad o a la perfidia.

Las brujas:

El término "bruja", quizás de origen prerromano, designa a la mujer


que, según la creencia vulgar, hace cosas extraordinarias por tener
pacto con el demonio, mediante la magia y la superchería.

En literatura las brujas han sido caracterizadas como mujeres arpías,


crueles y feas, de extrema delgadez y nariz ganchuda, que visten
amplias túnicas oscuras con tocado cónico del mismo color.

Las hadas, con quienes están en continua pugna, neutralizan


generalmente sus sorpresivas apariciones y temidos maleficios.

El cuento fantástico

Definición: Es el relato que suma, entrelaza hechos reales con


elementos extraños e inexplicables, ante los cuales se vacila entre
una explicación natural o sobrenatural, y deja al lector sumido en la
incertidumbre.

Características: El cuento fantástico utiliza como punto de partida


los misterios que plantean el hombre y su mundo y que no han tenido
una explicación clara y certera: el tiempo, el espacio, los sueños, las
dimensiones, la muerte…

El autor del cuento fantástico elige uno de esos misterios como tema,
pero sin intención de resolverlo, sino que, valiéndose de la ausencia
de respuestas y de su imaginación, logra crear la incertidumbre. Es
por eso que, partiendo de elementos reales y cotidianos -a veces en
forma gradual y otras abruptamente- anula la realidad y nos traslada
al ámbito de lo misterioso y de lo inexplicable. La incertidumbre
proviene entonces de un elemento primordial, base fundamental de
todo cuento fantástico: la vacilación entre una explicación natural o
una sobrenatural de los acontecimientos

La incertidumbre que cunde entre los personajes y en el lector mismo


respecto a la factibilidad de los hechos, situados súbitamente frente a
lo inexplicable, es lo que otorga al cuento fantástico su carácter de
tal. La incredulidad absoluta del hecho acaecido o la fe
absoluta en él dejaría desvirtuada toda explicación fantástica.

Teniendo como punto de partida un acontecimiento extraño se


produce la vacilación tanto en el narrador como en los personajes y el
lector:

 La vacilación en el narrador: la ambigüedad que provoca


vacilación se logra con distintos procedimientos utilizados con
frecuencia:

 Uso de la primera persona para dar testimonio de los


acontecimientos. El hecho de que nos afirme que él los
presenció resta posibilidades a la falsedad, pero como este
relato es inusitado, provoca la duda en el lector.
 Determinados tiempos verbales -el pretérito imperfecto, por
ejemplo- para descartar toda certidumbre (yo pensaba que...
en lugar de yo pensé que...).
 Con la misma finalidad se vale de ciertas locuciones (tal vez
alguien llama... ·en lugar de llama...).

 La vacilación en el lector: consiste en la duda que surge en


el lector al tratar de explicar si son naturales o sobrenaturales
las causas del fenómeno extraño. Por dos caminos el lector
intenta resolver su vacilación: o admite que el acontecimiento
puede darse en una realidad inusitada o lo acepta como
producto de la imaginación o de la ilusión. De esta manera, el
lector se convierte muchas veces en un personaje más que,
poseído por los sentimientos de temor o terror, asiste junto a
los demás personajes a la ruptura del orden establecido. Esta
irrupción de lo inexplicable en su mundo cotidiano sólo se
justifica por las características específicas de este tipo de
cuento.
 La vacilación en los personajes: esta vacilación entre el
mundo racional y los acontecimientos sobrenaturales no sólo es
sentida por el lector sino que también puede ser vivida por el o
los personajes hasta convertirse en muchos casos en uno de los
temas de la obra.

Tratamiento de la materia fantástica: Son prácticamente


innumerables los medios de que se valen los autores de narraciones
fantásticas una vez que han entrado en el proceso mental por el cual
liberan su imaginación. Invaden tiempo, espacio, personajes o
situaciones y, en ocasiones, todo a la vez.

Cuando el personaje es presa de las fuerzas sobrenaturales, si es un


ser humano puede sufrir, entre otros, el fenómeno de la
metamorfosis; si es cualquier elemento de la realidad -animales,
objetos, muerte, espíritu- se animiza y adquiere características
propias del hombre.

Si la invasión de lo fantástico se realiza por medio del tiempo y del


espacio, se producen traslados en el espacio o en el tiempo -ya al
pasado como al futuro- anacronismos parciales, retroceso en la
propia historia, detención del tiempo, desajustes entre el tiempo
cronológico y el tiempo interior, multiplicación en el tiempo, ruptura
de las leyes físicas, transmutación, la transposición o fusión de
mundos.

Otro tema predilecto de los autores de cuentos fantásticos es la


interrelación entre el sueño y la realidad: sueño dentro de otro
sueño, conciencia de que se está soñando, sueños comunes a varias
personas; en todos los casos, con un elemento que, luego en la
vigilia, deja un rastro: por ejemplo, un objeto material presente en el
sueño y presente en la vigilia.

Otros temas muy frecuentados por la literatura fantástica son el


hombre lobo; el vampiro; el pacto con el demonio; el alma en pena
que exige para su reposo el cumplimiento de determinada acción; la
muerte personificada que aparece en medio de los vivos, la magia, el
trastrueque de vida y muerte.

La función de lo fantástico: El escritor busca así que el lector se


pregunte acerca de la factibilidad de los sucesos; por eso elabora un
relato verosímil, con la irrupción de lo extraño e inexplicable en el
mundo cotidiano del lector. Éste es el medio de producir
la perplejidad y el suspenso, fuente de curiosidad, desazón y, a
veces, miedo para el lector.

Diferencia con el cuento maravilloso: En el cuento maravilloso la


vacilación ante la realidad de un hecho no existe, ya que las leyes de
la naturaleza son otras. Los elementos sobrenaturales no provocan
ninguna reacción particular ni en los personajes ni en el lector. No
hay una exigencia por parte de éste sobre la explicación de los
hechos sucedidos y no se pretende una solución razonable. Lector y
autor aceptan de antemano la vigencia de una ficción.

El cuento realista

El hombre siempre testimonió y reflejó en sus expresiones de arte la


realidad circundante.

El realismo como posición estética recién se configura a fines del


siglo XIX. Se origina en la observación de las tradiciones y
costumbres de los pueblos y, por ser una manifestación objetiva de la
realidad, se expresa preferentemente en las formas de la narrativa,
como la novela y el cuento.

Sin embargo, el modo o técnica de representación de la realidad ha


evolucionado a través de los tiempos. El realismo literario del siglo
XIX consideraba el arte como espejo de lo cotidiano, partía de la
observación directa del mundo en torno e intentaba reflejarlo
objetivamente en su obra. Por ello sus temas eran la rutina trivial de
la existencia del hombre, y el recurso predilecto la descripción. Hay
que destacar, sin embargo, que la copia fiel de la realidad es
imposible por la multiplicidad y complejidad de la misma. El artista
debía entonces seleccionar algunos elementos que volcaba en su
obra; el resultado era la descripción de un mundo distinto del
originalmente observado.

Pare el arte contemporáneo, la única realidad que el artista llega a


conocer con cierta profundidad es su propio yo. De este modo el
mundo visto a través de la subjetividad del escritor se transforma aun
en las cosas más convencionales. El artista no falsifica la realidad
pero al proyectarla en su obra corno un juego de espejos el resultado
es una visión prismática y deformante de la misma. Es por ello que el
arte actual aparece como irreal, cuando en verdad no sólo pretende
describir la realidad con mayor exactitud, sino también iluminarla y
revelar sus estratos más profundos.

En conclusión: hoy la literatura no refleja solamente la realidad


externa y visible, la física, sino también la invisible, infinita, Que
supera lo puramente físico, de dimensión metafísica.
Definición

El cuento realista es, por lo tanto, una presentación seria y a veces


trágica de la realidad. Generalmente el autor parte de la observación
directa de su contorno y lo refleja en sus obras con verosimilitud.

Caracteres

Temática: En el cuento realista el autor se propone dar una idea


cabal y verdadera del mundo que lo rodea en todos sus aspectos:
material, moral, económico, político y religioso. Por ello, la
realidad hombre en su esencia y existencia, y la descripción del
medio en que éste se desarrolla como individuo o como ser social, es
la materia literaria de este tipo de relato.

En el afán de testimoniar la realidad inmediata, las obras resultan a


menudo vastos cuadros sobre la vida, las creencias, el lenguaje y las
tradiciones del hombre contemporáneo. En estos casos, la anécdota
se diluye o es solamente un pretexto para la descripción de
caracteres y de costumbres.

Narrador: El escritor realista trata de narrar los hechos con


objetividad y para lograrlo se vale de la observación directa. Por lo
general utiliza la tercera persona gramatical y adopta la posición de
narrador testigo u omnisciente.

Espacio y tiempo: Como recurso de verosimilitud describe


minuciosa y detalladamente el escenario en que vive el hombre y, en
mayor medida que en otras clases de cuentos, incorpora el contorno
humano con el objeto de sugerir una atmósfera o de crear un clima
de realidad.

El espacio dilecto es el ámbito de la burguesía urbana y el ambiente


rural. En ocasiones, el autor se detiene en la observación de los
aspectos más vulgares de la sociedad con una intención de denuncia,
o para presentar una tesis.

El desarrollo del tiempo de la acción es lineal y cronológico. Con el fin


de precisar los hechos narrados y dotarlos de realismo, las fechas son
indicadas con exactitud (meses, años, días, horas o minutos). Incluso
algunos relatos aparecen desarrollados en un momento histórico
determinado. La historia presentada es preferentemente la inmediata
o contemporánea al escritor. En estos casos el plano histórico se
conjuga e integra con el plano de la invención. El ofrecer hitos
temporales precisos permite al autor exponer los hechos en orden
lógico y sucesivo y, de este modo, acentuar la verosimilitud de la
ficción.
Personajes Los personajes aparecen caracterizados con una técnica
tipificadora o genérica. El tipo, síntesis de virtudes y defectos
fácilmente reconocibles, facilita al escritor explicitar una doctrina
moral o social a través de su conducta.

Lenguaje: Como recurso de verosimilitud el narrador realista


reproduce el lenguaje de los personajes: habla local, modismos,
formas coloquiales. Es asimismo importante la mayor inclusión de
diálogos como procedimiento para la caracterización de los
personajes y su presentación objetiva.

El Cuento Policial

Origen: Desde fines del siglo XVIII se observan dos actitudes


opuestas para resolver las situaciones de la vida humana. En una de
ellas, la racionalista, predomina la razón que explica, mediante la
lógica, los hechos. En la otra, la irracionalista, los sentimientos, la
intuición y las emociones prevalecen sobre cualquier otra
interpretación.

El relato policial, cuento y novela, nace como una expresión de este


enfrentamiento y, al mismo tiempo, como consecuencia de una
realidad histórica: la formación de las grandes ciudades y el deseo y
búsqueda de justicia. Ingresan así, en la literatura, nuevos
personajes y ambientes que son netamente urbanos, entre ellos la
policía y los cuerpos de seguridad, que se organizaron
sistemáticamente a principios del siglo XIX, favorecidos por la
investigación científica.

Lo policial, una especie muy heterogénea, se alimenta de fantasía,


crímenes, fugas, búsquedas y persecuciones y, por sobre todo,
plantea un enigma que debe ser resuelto por la lógica.

Edgar Allan Poe, con Los crímenes de la calle Morgue, es el creador


de esta forma narrativa que desde sus comienzos se difunde con
rapidez por su eficacia comunicativa. Resulta ser, así, un relato muy
popular como la novela de folletín. Esta circunstancia hace que como
forma literaria no fuera tan respetada frente a otras consideradas
más valiosas. Sin embargo, el relato policial exige del escritor,
además del dominio técnico, un ordenamiento riguroso de la trama:
debe crear hechos y vincularlos con lógica interior

El detective Sherlock Holmes, el médico Watson, de Arthur Conan


Doyle, y el padre Brown, de Chesterton, figuran entre los
personajes más conocidos de la narrativa policial. Otros autores
difundidos son: Agatha Christie y Graham Greene. En Argentina se
destacan Jorge L. Borges, Adolfo Bioy Casares, Maria A. Bosco,
Manuel Peyrou, Marco Denevi, y Abel Mateo.

Evolución: En la evolución de la narrativa policial distinguimos tres


momentos:

 El interés se centra en el argumento: la trama es rigurosa y los


misterios o enigmas deben ser aclarados en forma deductiva.
Esta modalidad se cultivó hasta 1930.
 El centro de interés se desplaza hacia la explicación psicológica
de los hechos y del comportamiento de los personajes.
 En las últimas décadas, el relato policial es más realista y
violento: los delitos tienen razones concretas, los personajes
son tan actuales que nos sorprenden, al igual que las armas
científicamente fabricadas; la trama entremezcla intriga,
violencia, sexo y espionaje.

Una variante de la narrativa policial, a partir de la Segunda Guerra


Mundial, trata el espionaje como tema obligado.

Elementos caracterizadores

Personajes: Se presentan en una perspectiva antitética: el policía, el


detective, el inspector; el asesino y el espía, o sea los buenos y los
malos. Por lo general son tipos, tienen caracteres bien definidos y no
evolucionan a lo largo del relato.

Estructura: Habitualmente es un relato que se hace al revés de la


narrativa tradicional. Al comienzo se presenta el enigma que debe ser
resuelto al final. El tiempo para aclarar el misterio procede en dos
sentidos: mientras avanza la investigación, futuro, se revela el
enigma, pasado.

Pero hay que tener en cuenta que a este relato precede una etapa
previa de organización: cuando el escritor imagina o fragua esa
historia sigue un orden cronológico o lineal (comienzo, desarrollo y
desenlace). Al escribirla invierte los resultados y los presenta al
comienzo.

Ambiente: Por lo general es urbano. En los primeros relatos el


crimen ocurría en espacios interiores, en cuartos cerrados. En la
actualidad, la violencia se desata en las calles, ante la sorpresa o
indiferencia de los posibles testigos.

Trama: La acción brinda el mayor suspenso. Deja siempre un hilo o


eslabón por resolver. Con rigor deductivo, el investigador y el lector
desentrañan el enigma al reunir esos hilos en el desenlace.
Al principio se proponen varias soluciones fáciles, a primera vista
tentadoras, que sin embargo resultan falsas. Hay una solución
inesperada, a la cual sólo se llega al final. Para la solución del enigma
se desecha todo elemento sobrenatural o inexplicable. Es un relato
hecho para que el lector participe en desentrañar el misterio; ingresa
en el mismo como un investigador más.

Definición: El relato policial es aquel que, por medio de la deducción


lógica, identifica al autor de un delito y revela sus móviles.

El cuento de ciencia-ficción

El término: El término ciencia-ficción fue creado por Hugo


Gernsback en 1929. En castellano es traducción literal del
inglés, science-fiction. Algunos estudiosos consideran más
adecuada la denominación ficción o narración científica. Otros la
llaman literatura de anticipación. A pesar de ello ha prevalecido la
forma ciencia-ficción.

Si observamos este sustantivo compuesto resulta evidente la


unificación de dos palabras que apuntan a significados que de alguna
manera se contraponen. La ciencia, con su rigor, objetividad y
experimentación, y la ficción, que implica fantasía e imaginación.

La ciencia y la técnica intervienen porque el escritor incluye en su


narración los últimos avances científicos (cohetes, robots,
computadoras) y proyecta las posibilidades de esos inventos
organizando, con la imaginación, una ficción en el futuro o en el
pasado.

Origen: En nuestro siglo esta forma narrativa se delimita con nitidez.


Pero ya en Luciano de Samosata, autor griego del siglo II d. de C., se
encuentran algunos rasgos que permiten considerarlo un precursor.

Sin ninguna duda, Julio Verne es un destacado antecedente de la


narración científica. En De la Tierra a la Luna, Alrededor de la
Luna y 20.000 leguas de viaje submarino, entre otras obras, anticipó
en un siglo lo que hoy es una realidad.

También H. G. Wells, novelista inglés, con su obra La guerra


de los mundos introdujo un tema fundamental de la ciencia-ficción: la
posibilidad de vida en Marte y el viaje de los marcianos a nuestro
planeta.
Los autores más difundidos de este tipo de relato son: Isaac Asimov,
Karel Chapek (que utilizó por primera vez la palabra robot), Aldous
Huxley, Ray Bradbury, Paul Anderson, Van Vogt, Italo Calvino.

Entre los escritores argentinos, el más destacado es Adolfo Bioy


Casares.

Temática: El tema más habitual es la aventura espacial, con naves


interplanetarias, armas insólitas, monstruos de otros mundos y
galaxias, velocidades supersónicas, ruptura del tiempo convencional,
pluralidad de mundos, robots, materia y antimateria.

Actualmente se han difundido otros temas, como los últimos


adelantos biológicos y estudios de organismos unicelulares.

Al avanzar tan rápidamente la investigación científica, que es la base


de esta narración, muchos relatos de ciencia-ficción dejan de ser
anticipaciones porque la técnica los concreta en la realidad. Sólo por
la fantasía, el otro ingrediente indispensable, se revitaliza esta forma,
a pesar de la reiteración temática, y logra originalidad plena.

Personajes: Pueden ser:

 humanos: tripulantes de naves espaciales, científicos,


superhombres, humanoides, cavernícolas;
 seres de otros mundos: selenitas, marcianos, venusinos,
habitantes de estrellas y galaxias;
 mecánicos: robots, computadoras y máquinas que reemplazan
al hombre.

Tiempo y espacio: Están presentados en dimensiones distintas de


las habituales. Por ejemplo, el túnel del tiempo es un recurso ya
clásico para avanzar o retroceder en los siglos. También la dimensión
desconocida, los espacios paralelos, el espacio gamma, la
multiplicación infinita.

Trama Los adelantos científicos y técnicos son el punto de partida


para organizar un relato ficticio (que sigue el curso lineal de la
narración tradicional). El desarrollo lógico permite un desenlace
verosímil.

Intención: Aunque anticipe situaciones del futuro, no es ése el


objetivo fundamental que persigue el autor de ciencia-ficción.

La narración científica denuncia deformaciones de la conducta


humana, poniendo de relieve que el exceso de tecnicismo llevará a la
destrucción del hombre. Más que señalar el posible destino futuro de
la humanidad, interesa que el lector reflexione sobre sí mismo y
sobre su condición actual de vida.

Definición El relato de ciencia-ficción es aquel que aúna el rigor


científico con la fantasía, para presentar una perspectiva
insospechada del hombre y de su ámbito vital.

El Cuento de Terror

La narrativa de terror es un género que se viene consolidando desde


mucho tiempo. Elvio Gandolfo en uno de sus textos dice " El terror es
un género resbaladizo, esquivo. Alguien dijo que la ciencia ficción es
una visión social, y el terror o lo fantástico una visión privada." El
terror puede tocar las fibras más sensibles de las personas que leen.
Dice Lovecraft en "El horror en la literatura": " El miedo es una de las
emociones más antiguas y poderosas de la humanidad, y el miedo
más antiguo y poderoso es el temor a lo desconocido."

Los orígenes de este género se remontan al ámbito de la literatura


gótica del siglo XVIII. Sus precursores fueron Ann Radcliffe y Horace
Walpone. En estas novelas primaban ambientes lúgubres en castillos,
en donde lo macabro y la muerte aparecían fuertemente
acompañados por profundas emociones y un marcado
sentimentalismo.

Muchos cuentos de terror presentan mundos realistas y verosímiles,


en donde irrumpe la a aparición de uno o varios elementos que
trastocan y movilizan a los personajes. Esta aparición o cambio en la
realidad no siempre pertenece al ámbito de lo sobrenatural y tiene
como finalidad generar susto y miedo en quienes leen.

Es necesario que el ambiente ficcional genere terror. Quienes


escriben este género tiene la difícil tarea de crear atmosferas
terroríficas necesarias para crear ambientes de suspenso que generen
miedo. Muchos de estos lugares creados son oscuros e inhóspitos,
pueblos sin habitantes, casas abandonadas, castillos lúgubres,
cementerios, espacios cerrados y oscuros.

Los personajes que suelen aparecer en este género a quienes


nombraremos como agentes de terror son:
 Fantasmas y apariciones: Espíritus que aparecen, traen
mensajes a los vivos, etc.
 Zombis- Muertos vivos: Regresan del mundo subterráneo para
provocar temor.
 Vampiros: Seres míticos que viven en la noche y se alimentan
de sangre.
 Asesinos y Personas trastornadas: Representan el mal y
aterrorizan y buscan realizar daños severos.
 Otros seres como: Monstruos, mutantes, experimentos que
salen mal.

El miedo como efecto de lectura se logra apelando a los temores más


profundos de las personas, como decía Lovecraft, a lo desconocido, lo
sobrenatural y lo que no tiene explicación. Según Stephen King: "Una
buena manera de reconocer las fisuras que separan lo consciente de
lo inconsciente es tener claro que lo que nos asusta probablemente
asuste a otros. Un psicólogo se apresuraría a estampar la palabra
fobia sobre todo el asunto; pero yo creo que hay una mejor palabra
para bautizar todo el asunto.

Joseph Stefano (...) agrupó todos estos miedos en un grupo al que


dio en llamar los diez ositos:

LOS DIEZ OSITOS:

1- Miedo a la oscuridad.
2- Miedo a esas cosas gelatinosas.
3- Miedo a las deformidades físicas.
4- Miedo a las serpientes.
5- Miedo a las ratas.
6- Miedo a los lugares cerrados.
7- Miedo a los insectos (especialmente arañas y cucarachas).
8- Miedo a la muerte.
9- Miedo a los otros. (paranoia).
10- Miedo por los otros

Todo ser humano puede armar, con cada uno de estos elementos, su
propio cóctel de miedos personales. Para el narrador, la combinación
de ellos en la ficción, es la forma de permitirle al relato fantástico que
pueda hacer cumplir en el lector la catarsis y la proyección
psicológicas."

También podría gustarte