DISCURSO UNDECIMO

A QUIEN CORRESPONDERA
LA REALIZACION
DE ESTE PLAN EDUCATIVO

Para nuestro objetivo, el plan de la nueva educa-

ción nacional alemana ha sido ya suficientemente des-
crito. La cuestión que ahora se nos plantea es la si-
guiente: quién debe dirigir la realización de este plan,
con quién se puede contar para ello, y con quién he
mos contado?
Hemos presentado esta educación como la cuestión
más importante y hoy día la única urgente que tiene
planteado el amor patrio alemán, y, siguiendo esta li-
nea, queremos ante todo introducir en el mundo la
retormay la transformación de todo el género humano.
Cro ese amor a la patria debe entusiasmar en primer
hugar el estado alemán, dondequiera que haya ale
e s que gobernar, ocupar un lugar preeminente y
1a fuerza impulsora en todas sus decisiones. El
Cstado sería entonces hacia el que en primer ugar
amoS que dirigir nuestras miradas expectantes.
2as
Colmará éste nuestras cesperanzas? 2Qué esperan-
podemos poner en él de acuerdo con el pasado
sino a
irando a ningún
toda Alemania? estado en particular,
En la noderna la educación no ha artido
propiame Europa me
te del Estado, sino de aquel poder del que
los Esta
d O s las más de las veces habían recibido a su
 GOI7LIRB FICHI DISCURSOSA LA NACION ALEMANA 191
190 JOHANN

el suyo: del reino celeste-espiritual de la de educación pública y con sus más serios
vez
sl un
Iglesia.
componente
clase
favor de ella. Pero en cuanto vieron con
Esta no se consideraba a misma de fuerzos en
que el ámbito
comunidad terrena, sino mas Dien una colonia del claridad lo primero y comprendieron
limita mundo
cielo aquf en la tierra, completamente extraña a ella
de influencta
de inluencia del Estado
del
obvio
se al visible,
que aquella preocupación
enviada a conquistar ciudadanos para este eato que
resultarles
tuvo
y
externo en cualquier parte donde pudiese establecer. or la
salvación eterna de sus súbditos no podfa correr
se;sueducación pretendía unicamente que el hombre
P o

que el que isiera salvarse tenfa que

Bu Cargo y
no se condenase en el otro mundo, sino que por en arreglárselas por su cuenta para lograrlo. Desde enton-
cima de todo se salvase. ces consideraron que
haclan más que suficiente dejando
Con la Reforma, este poder de la Iglesia, que por los centros e instituciones proceden-
en lo sucesivo que
su primer
lo demís continuó considerándose exactamente lo mis. res de tiempos más pladosos se dedicasen a suficientes
mo que antes, se unió con
el poder terrenal con el objetivo y, aunque no tuesen apropiadosnoy se conside
muchas veces incluso en distinto0s,
que hasta ahora había estado para unos tiempos totalmente
contribuir a su mantenimiento, aho-
lucha; ésta fue la diferencia que en este aspecto se raron obligados a

siguió de aquel hecho. Por tanto, permaneció el anti. rrando en otros objetivos, ni autorizados a poner lo
sobre la esencia de la educación. Incluso nuevo y útil en el lugar
de lo caduco e inútil; y a todas
guo concepto sentido la respuesta era siem-
en los tiempos más modernos y hasta hoy mismo se
este
las propuestas en
ha considerado la formación de las clases más pudien. pre la misma: el Estado
no tiene dinero para esos
tes como un asunto particular de los padres, que ellos ines. Si alguna vez se hizo una excepción a esta

podían organizar a su gusto, orientando a sus hijos regla fue siempre en beneficio de aquellos cen

normalmente para que algún día les fuesen útiles; la tros docentes superiores que dan prestigio a su en
única educación pública, la del pueblo, era una educa torno y proporcionan gloria a sus protectores; pero la
ción centrada exclusivamente en la salvación eterna; educación de esa clase social, la del pueblo, que cons
lo fundamental era enseñar poco de doctrina cris.
un
tituye la auténtica base del género humano y de la
se pudiera, también escri cual se nutre constantemente la educación superior,
tiana, leer y, en caso de que
bir, pero todo en razón del Cristianismo. Cualquier que a su vez debe repercutir continuamente sobre ella,
otro aspecto del desarrollo de la persona humana en permaneció desatendida, y desde la Reforma hasta
era

abandonado al influjo casual y ciego de la sociedad
la que ellos crecfan y a la vida misma. Hasta los cen
tros para la educación erudita estaban pensados pre
terentemente para la formación de clérigos; en esto
nuestros dfas se encuentra en creciente decadencia.
Para poder
esperar algo más del Estacdo en tavor
de nuestra causa en el futuro y a partir de este mis
mo momento, serfa necesario que éste cambiase el

consistfa la facultad principal de la que las demás for concepto fundamental del objetivo de la educación,
únicamente un complemento y que la mayorla e parece ha tenido hasta ahora, por otro totalmente
maban
sólo reciblan los que hablan sido alejado distinto; que se diese cuenta de que tuvo toda la ra
de las veces
de la primera.
Mientras los gobernantes no tenían una idea clara
Zon al despreocuparse de la aalvación eterna de sus
conciudadanos, ya que para esta salvación no se ne
de su propia misión y estaban incluso poseldos de cesita ninguna formación especial ni debe existir un
de lo5
aquella inquietud por su propia salvación y lacelo mejante seminario para el cielo como es la Iglesta,
demás, se podía contar, plenamente con su Cuyopoder, en último término, le ha sido transtertdo
 GOTTLIEB FICHTE DISCURSOS A LA NACION ALEMANA 193
192 JOHANN

al Estado, pues solamente

sirve
de estorbo a cualauien lard cualquier sentimiento egofsta. El Estado Do-
otro

educación sólida y debe ser relevada de su servicio: dré lamarlos y ponerlos

en
pie de guerra siempre que
la vida en la siera y puede estar seguro de que ningún enemigo
que, por el contrario, la educación para Otra partede la atención y de los
tierra es imprescindible, y que de la educación esen. los
derrotará. gas
sl misma fácilmente estados sabiamente gobernados se
dedicaba has-
cial para esta vida surgira por tos en
de economia nacional en el
educación para el cielo. Parece que hasta ahoro ahora a la mejora 1a
la ta
sentido más amplio y en todos sus sectores; pero aquí,
el Estado, cuanto más ilustrado creyó ser, tantoo más máe
verdadero ob- debido a la indocilidad y torpeza de las clases bajas,
seguro se sentia de poder Conseguir su
sólo mediante el ejercicio del poder sin parte de esta atención y de estos gastos han sido en
no obtuvo gran éxito. Mediante
ninguna clase de religión
ni ética por parte de sus vanó y la empresa
una población tra-
ciudadanos, y de que, en cuanto a éstas, ellos, dentro
nuestra educacion,
el
Estado recibe
actuar como pudie juventud
acostumbrada desde su a reflexio
de sus posibilidades, tenían que bajadora
de las nuevas experiencias habrá sobre sus asuntos, y que tiene capacidad e inclina-
nar
sen. Esperemos que
aprendido por lo menos que no puede actuar así y que, ción a valerse por si misma; y si además el Estado
ética, ha lle sabe ayudarles de forma conveniente, le entenderán a
precisamente por la talta de religión y se
la actualidad encuentra. la más mínima insinuación y aceptarán agradecidos su
gado al estado en que en

En cuanto a sus dudas sobre la capacidad de sufra enseñanza. Todos los sectores de la economía alcan-
educación nacional, habría que zarán en corto espacio de tiempo y sin gran estuerzo
gar los gastos de
una
se ha visto antes, de
atenderá una prosperidad como jamás
convencerle de que él con este único gasto tal manera que si el Estado se pusiese a calcular y
a casi todos los
demás de la forma más económica, y
convertirá procurase de paso conocer el verdadero valor de
las
de que, en cuanto acepte éste, pronto
se

Hasta ahora la mayor cosas, advertiría que ese desembolso inicial le ha-
en su único gasto importante.
del Estado se habían empleado bría proporcionado crecidos intereses. Hasta ahora
parte de los ingresos el Estado ha tenido que hacer mucho por las institu-
en el mantenimiento de ejércitos regulares; ya hemos
visto el resultado de la utilización de
estos ingresos; judiciales y policiales y, sin embargo, nunca
ciones

es sufciente; penetrar más profundamente en las cau- pudo bastante; las penitenciarías y retormato-
hacer
de la organiza- rios le han causado muchos gastos, y en cuanto, por
sas especíhcas de este resultado a partir ültimo, a las instituciones benéicas, cuanto mas se gas
dentro de nuestros
ción de tales ejércitos no entra
taba ellas mayores gastos exigían, pareciendo en
en
en su
planes. Por el contrario, el estado que implante
territorio la educación nacional propuesta por
nosotros, Conjunto más bien instituciones para producir pobres.
a par- En un Estado que implantase la nueva educación, las
no ningún ejército especial, sino quese haya
necesitará
primeras se reducirían notablemente, las últimas des-
juvenil
tir del momento en que una generación
un ejército
como no
parecerlan por completo. Una disciplína a tiempo,
tormado en ella, tendrá en ellos de
Se ha visto Cada individuo estará perfectamente
nunca.
agura contra posteriores disciplinas y mejoras por
en
utilización de su sí desagradables;
en cuanto a los no
pobres, existen
entrenado para cualquier posible absoluto pueblo educado de este modo.
en un
de esfuerzo y 1a*
fuerza corporal y soportar todo tipointuición directa
Que el Estado y todos sus consejeros no teman en-
tiga, su espíritu formado en la del
ac
rentarse con su auténtica situación real y reconocerla;
ánimo vivirá el amor al todoanu otro
asistira siempre; en su
que Comprenda animosamente que no le queda
cual es miembro, al Estado y a la patria, amor
194 JOHANN GOTTLIEB FICHTE DISCURSOS A LA NACION ALEMANA 195

campo de acción en que poder actuar y decidir como si se enteran de que alguien
de sus periódicos espera
un Estado auténtico, originariae independientemente tan grandes
de la educación.
cosas

la consideración de la lejanía del resultado

que el de la educación de las generaciones futuras Que es
erado no haga al Estado y a sus consejeros negligen-
que si no quiere permanecer totalmente inactivo, ya
e n el comienzo de esta tarea. Si de entre las múl
tan solo puede hacer esto, a pesar de lo cual este mné.
rito se le concederá integro y sin envidias. Ya antes ples y plejísimas causas que han ocasionado
bemos partido del supuesto previo de nuestra incapa
nuestro actual destino, se quisiese separar aquello
imputable única y exclusivamente a los gobiernos, se
idad para ofrecer resistencia alguna, como algo evi
vería que éstos, comprometidos ante los demás
dente y aceptado por la generalidad. Cómo podremos a pensar
en el tuturo y Ppreverlo, ante el embate
justificar la continuación de nuestra indigna existen
de los grandes acontecimientos de la época han inten-
cia ante los reproches de cobardía y de amor indigna
tado solamente salir del apuro inmediato de la mejor
a la vida que se nos hacen? Unicamente decidiéndo. manera posible. En cuanto
al futuro, no han contado

nos a no vivir para nosotros

mismos y levándolo a la
con su realidad presente, sino que esperaban algún
práctica; convirtiéndonos en simiente de una descen- tortuito que deberla cortar el hilo
acontecimiento
dencia digna y queriendo subsistir solamente por ella constante de las causas y los efectos. Pero tales espe
ranzas son engañosas. Una vez que se ha permitido
hasta que la hayamos conseguido. Si se nos priva de
aquel primer objetivo vital, qué otra cosa podríamos la entrada en una época de una tuerza impulsora, ésta
hacer? Nos elaborarán nuestra Constitución, nos indi- continúa impulsando y completa su camino, y una vez
carán nuestras alianzas y el empleo de nuestros ejérci- que se ha cometido la primera negligencia, la reflexión,
unos tribunales, e inclu- al llegar demasiado tarde, no puede detenerla. Por de
tos, nos prestarán un código y
so se nos a privar
legará del derecho de ejercer la pronto, nuestro destino nos ha relevado del primer
tendremos que caso, de considerar simplemente el presente; el pre-
Justicia; en un futuro próximo no
sente ya no nos pertenece. Y no queramos mantener
preocuparnos por estas cosas. En lo que no se ha pen-
sólo lo segundo, esperar un futuro mejor procedente
sado ha sido en la educación nacional; si buscamos
una
ésta! Es de de algún otro sitio que no seamos nosotros mismos.
tarea en qué ocuparnos, jemprendamos

esperar que nadie nos molestará. Tengo

la esperanza
en esta
quizá me equivoque, pero, dado que sólo
esperanza puedo vivir, no puedo por eso dejar de es
convencer
perar, tengo la esperanza, digo, de poder única-
a algunos alemanes y hacerles comprender que
mente la educación puede salvarnos de los males que
la
nos oprimen. Cuento de manera especial con que
necesidad nos ha predispuesto mejor para prestar at
ción y reflexionar seriamente. El extranjero dispone
de esperar que
otros consuelos y otros medios; no es
el preste atención a esta idea, si es que alguna
vez
ega a conocerla, ni que la crea; más bien espero quc
se convertirá en fuente de diversión para los lectores
Ciertamente que a ninguno de nosotros, que necesita
mos para vivir algo más que el alimento, le puede
consolar el presente del deber de vivir; la esperanza
de un futuro mejor es el único elemento en el cual
todavía podemos respirar. Pero solamente el soñador
puede basar esta esperanza en otra cosa que en aque
llo que él mismo pueda colocar en el presente para
desarrollo del futuro. Permítannos aquellos que go-
elbiernan
de tener de ellos tan buena opinión como entre
OSOtros tenemos los unos de los otros y comol0s
ellos
mejores puedan tener de sí mismos; colóquense
l a cabeza de esa tarea del todo clara también para
OSOtros, para que veamos surgir ante nosotros niis
 LLICD FIGHIE

DISCURSOS A LA NACION ALEMANA 197

mos aquello
que borrará de nuestra
güenza causada ante nuestros memoria la ves lo que se
refiere a nuestto objetivo y habría que la-
alemán. pios al
ver
ojos mentar que la decisión sobre este asunto les corres-
Si el Estado acepta la tarea
nombre
diese a ellos. Pero esperemos que se encuentren y sean
neralizará esta educación por que se le
da la propone, ge consultados estadistas que se hayan educado a sí mis-

territorio para todos sus Ciudadanos superficie de su mos sobre todo mediante un profundo y sólido estudio
cepción; y es únicamente para esta tuturos sin ex de la filosofía y la ciencia en general, estadistas que
neral para lo que necesitamos al implantación ge se tomen en. serio sus obligaciones, que posean un
Estado, ya que para
comienzos y tanteos aislados aqui y allá, sería concepto firme del hombre y su destino, que sean
te el suficien. capaces de entender el presente y de comprender lo
patrimonio de personas particulares benevolen- que en estos momentos la Humanidad propiamente
tes. Ahora bien, no es de
esperar que los padres, en necesita de forma inexorable. Si éstos hubiesen com-
general, esten dispuestos a separarse de sus hijos y prendido por sí mismos, a partir de aquellas conside
confiarlos a esta nueva educación de la cual sería raciones preliminares, que solamente la educación pue-
fícil darles una idea, sino que, di.
según la experiencia de salvarnos de la barbarie y el salvajismo que de
anterior, hay que contar con todo que el que crea te- forma persistente nos amenazan, si tuvieran presente
ner posibilidad de alimentar a sus hijos en casa, se la imagen de nueva especie humana
la que surgiría
opondrá a la educación pública y sobre todo a una gracias a esa educación, si estuviesen vivamente con
educación pública que les separará tan radicalmente vencidos de la inetabilidad y certeza de los medios
y durante tan largo tiempo. En tales casos estamos propuestos, entonces podria esperarse de ellos que a
ya acostumbrados a la falta de colaboración de los esta- la vez comprendiesen que el Estado, como regente
distas, quienes rechazarán la proposición alegando que supremo de los asuntos humanos y como tutor de los
el Estado no tiene derecho a utilizar la fuerza para menores, únicamente responsable ante Dios y su con-
este propÓsito. Al pretender esperar hasta que los ciencia, tiene pertecto derecho a obligar a estos últi
hombres en general tengan buena voluntad, a lo cual mos a su salvación. Dónde hay actualmente un Esta-
por otra parte no se puede llegar sin la educación, do que dude si tiene derecho a
a hacer
obligar a sus súbditos
están protegidos frente a toda reforma y pueden con la guerra y a separar a los hijos de sus padres
fiar en que todo continuará como antes hasta el fin de este fin, tanto si uno de los
dos, o los dos, lo quie
los días. Siempre que hagan esto los que, o bien con- ren, como si no lo
quieren? Y, sin embargo, esta coacC
sideran la educación como un lujo superfluo en rela Ción paraadoptar un tipo de vida duradero en
contra
de la
C1ón con el cual hay que arreglarse lo más económl- propia voluntad, es mucho más peligroso y,
camente posible, o bien ven en nuestra proposicion tre
cuentemente, da los peores resultados para el estado
moral y para la salud
Solamente un nuevoexperimento atrevido con la hu y vida de los afectados; por el
manidad, experimento que puede salir bien mal,
o hay contrario, la obligación de que nosotros hablemos, una
que alabar su escrupulosidad; en
cuanto a aquellos que Vez terminada la educación, devuelve toda la libertad
pública y es personal y solamente
admiran el estado actual de la educación puede traer las más saludables
entusiasmados por la perfección a la que
ésta ha cOnsecuencias. Ciertamente que antes el alistamiento
tán en
a0 ara el servicio militar se había dejado al libre
legado bajo su dirección, no se puede pensar
albe-
algo que todavía no
cono
ario de cada cual, pero, viendo
Soluto que vayan a aceptar
conjunto, no hay nada que
hacer e Ciente para el objetivo perseguido,
que esto no era su-
no se tuvo incon-
cen; con éstos, en

.. IRO, v
AcCADZAS HASIA A Y
198 JOHANN GOTTLIEB FICHTE
DISCURSOS A LA NA CION ALEMANA 199
veniente alguno en hacerlo
obligatorio, por la el vehículo único del simbolismo que
razón de que seneill.
el asunto era bastante
importante losmaestros,
común para todos los alemanes.
tan
odo esto, es
nosotros y la necesidad nos obligó a ello. para
,
Si erra penetra
puede imaginar
cómo y a bas de qué transfor-
ocasión nos diesemos cuenta de nuestra No se

el asunto nos pareciese 1gualmente necesidad naciones

estos medios culturales en conjunto, espe-
tensión que le hemos dado al plan,
ma

irresolución desapareceria por si sola,importante, toda esa

cialmente en
ya que la coac verter en cualquier lengua del extranjero
ción solamente se necesitaria en la ce Dodrían
v desaparecería en las
primera generación de tal manera que no pareciese una cosa extraña y
siguientes que ya han pasado traducida, sino algo interno y derivado de la propia
por esta educación; incluso se levantaría aquella obli. vida de la lengua. Para todos los alemanes esta dif
gatoriedad del servicio militar, pues todos los así edu. cultad está superada
de igual manera; para ellos la
cados están igualmente dispues tos a ir a las armas por cuestión está ya punto y
a no les queda más que em-
la patria. Si, para no provocar demasiado revuelo al prenderla.
principio, se quiere limitar la obligatoriedad de la Es una suerte que todavía haya estados alemanes
educación nacional pública de la misma manera que diferentes e independientes unos deLo que a
otros.
antes se había limitado la del servicio militar y liberar menudo ha significado desventaja
una para nosotros
de ella a los estamentos que ya estaban liberados de quizá pueda redundar en nuestro beneficio en esta im-
imitación de la ma-
este último, no se habrían de producir resultados ne portante tarea nacional. Quizá la
gativos de importancia. Además, de entre los excep- el atán de superarse unos estados a otros, pue-
yoría y
tuados habrá padres comprensivos que conharán da conseguir lo que la tranquila autosuficiencia del
luntariamente sus hijos a esta educación; de esta estado único no hubiese logrado; pues está claro que
manera sólo un pequeño grupo de niños de padres aquel de entre los estados alemanes que sea el prime
ro en comenzar esto, será el primero también en ganar
incomprensivos, cantidad insignificante si se la com-
la mis- la consideración, el amor y el agradecimiento de el
para con el todo, puede que siga creciendo en
ma forma que hasta ahora y llegue hasta esa nueva todo para con él, y que él aparecerá como el benefac-
sim- tor supremo y verdadero fundador de la nación. Esti-
época mejor que queremos conseguir sirviendo es- mulará a los otros, les
plemente como recuerdo curioso del pasado y para dará un ejemplo aleccionador
timular a la nueva época a un conocimiento más vivo
y se convertirá en su modelo; eliminará las irresolu-
ciones en las cuales los otros se estancaron; de su
de su gran suerte.
Ahora bien, si esta educación debe ser educación
seno saldrán los libros de texto y los primeros maes
nacional de los alemanes por antonomasia y si la gran tros que Iuego serán prestados a los demás; y quien
mayoria de los que hablan alemán, en modo alguno e siga en segundo lugar logrará la segunda tama
los ciudadanos de este o aquel estado alemán deter- Como testimonio alentador de que el sentido por lo
minado, ha de aparecer como una nueva especie
nu-
más elevado todavía no ha muerto por completo entre
mana, entonces todos los estados alemanes,
cada uno 0s alemanes, tenemos el hecho de que hasta ahora
de todos los varios pueblos y estados alemanes han luchado entre si
por si mismo e independientemente por la gloria de una cultura
La lengua en la quc superior: unos tienen una
más, deben emprender esta tarea. atención sobre esta nayor libertad de prensa y una mayor despreocupación
primeramente se ha llamado la
la que se conciben v seguirán concibien por la opinión tradicional, otras escuelas y universida
cuestión, en
des
mejor dotadas, otros fama y méritos ancestrales,
aose los medios auxiliares, la lengua en que se ejer
200 JOHANN GOTTLIEB FICHTE
DISCURSOS A LA NACION ALEMANA 201
otros han alegado otros méritos, hasta el
punto de surgir, después de veinticinco años, esa es-
no se ha podido decidir la que pod
querella. Se hará en
sión presente. Solamente aquels tormación la oca
ces

necie mejor que necesitamOs; y quien conffe en poder

que aspir vivir para entonces podra verla con sus propios ojos.
y se atreve generalizarse y a abarcar sin excepción
a
a Pero si, también tenemos que contar
con esta po-
todos los hombres es un componente real de la alemanes existentes
está segura de sí misma. vidav estados
sibilidad, entre todos los ni uno
Cualquier otra es un
ingre en la actualidad
no hubiese solo que tuviese en-
diente extraño que se añade sólo como adorno
y consejeros un hombre que fuese capaz de com-
quue tres sus
ni siquiera leva con conciencia
se
verdaderamente prender todo lo expuesto anteriormente y de llegar a
buena. En esta ocasión se hará visible dónde, por impresionarse por ello, un estado en el que la mayo-

ejemplo, la formación de la cual uno se vanagloria se ría de los consejeros

no se opusiera por lo menos a

encuentra solamente en unas pocas personas de la entonces esta tarea recaeria sobre personas
uno así,
clase media, las cuales la manihestan en escritos, cosa particulares bienintencionadas y sería de desear que
que los hombres de todos los estados alemanes tie ellas empezasen con la nueva educación propuesta.
los gran-
nen que demostrar; y donde, por el contrario, ha lle- Y aquí estoy pensando en primer lugar en
terratenientes podrían erigir en sus propieda-
8ado hasta los estamentos superiores que aconsejan des que
al Estado. Se verá también cómo hay que juzgar el des dichos centros educativos para los hijos de sus
celo mostrado aquí y allá en la creación y en el fiorec servidores. Para Alemania constituye una gloria y una
miento de instituciones docentes superiores, y si éste se distinción honrosa ante las demás naciones de la nue-
va Europa el que en la citada
clase siempre ha habido
basaba únicamente en el amor a la formación humana tomado
que abarcaría con el mismo afán los demás aspectos aquí y allá muchos que han como asunto muy

serio el cuidar de la en_eñanza y formación de los ni-

de la misma ante todo sus fundamentos básicos, o
ños que viven en sus propiedades, y que para ello em
simplemente en el ansia de destacar y quizá en
mez-
prendian con gusto lo mejor de lo que sabían. Es de
quinas especulaciones financieras.
primero en llevar a esperar que éstos ahora también estarían dispuestos
El estado alemán que sea el esto la mayor gloria,
a informarse sobre la totalidad de lo que se les ofrece
cabo este proyecto tendrá por alemán no estara
y a realizar lo grandioso y eficaz con el mismo agrado
dije. Pero, además, este Estado con que hasta ahora hicieron algo más pequeño e in-
solo mucho tiempo, sino que, sin duda alguna, en muchos lugares puede haber
por
imitadores. Lo
completo. Sin duda
encontrará enseguida seguidores e im contribuido a ello la idea de que incluso para ellos mis-
Aunque por ninguna ora
no sea
portante es empezar.
de lo que tiene mos sería más ventajoso tener súbditos cultos que in
razón, el honor, los celos, el afán tener
cultos. Donde el Estado, al eliminar la relación de
otro y, si es posible, tenerlo mejor,
impulsará a uno
servidumbre, ha eliminado este impulso, gue consi
También se harán mas
tras otro a seguir el ejemplo. anteriormentehic dere más seriamente aún su deber ineludible de no
evidentes las consideraciones que
viva contemplación sobre a Suprimir al mismo tiempo lo único bueno que para
mos y mantuvimos en actualidad los bienintencionados iba unidoa esta relación; y qu
Estado quizá en la no deje de hacer en este caso lo
que de todos modos
propia ventaja del y que
dudosas.
a algunos podrían parecerles enseguida y desde c8 Su obligación, una vez gue ha dispensado de ella a
SIse pudiese esperat que en
todos los los que la hacían voluntariamente en su lugar. En
serios cuanto a las ciudades, dirigimos además nuestra mira-
sehicieran preparativos
momento
cabo este plan, enton
estados alemanes para llevar a
U i n DESUE ALILAIN,
 GOTTLIEB FICHTE
202 JOHANN
da a las asociaciones de ciudadanos hien
voluntarias
intencionados formadas con este fin. Por lo que he
podido ver, ninguna presión de la necesidad 0e
po-
dido arrancar de los corazones alemanes la inclinación
a la caridad. Pero debido a las numerosas deficienciae
en nuestras instituciones, que podian reunirse bajo el
común denominador de la educación abandonada. esta
caridad raramente ayuda a la necesidad, sino que más
bien parece aumentarla. jOjalá esta acertada inclina.
ción se dirija por fin con preterencia a la obra de ca-
ridad que pone término a toda necesidad y posterior.
mente a toda beneficencia: a la caritativa obra de la
educación! Pero además necesitamos y contamos con
una obra de caridad y un sacriDcio de otra clase que
no consiste en dar, sino en obrar y trabajar. Que los
eruditos que se están formando, a quienes su situación
se lo permita, dediquen el tiempo que les queda entre
la universidad y su trabajo en un cargo público a la
tarea de instruirse en la forma de enseñanza de estos
centros, e incluso que enseñen en ellos. Aparte de que
con ello harán un gran servicio al todo, puede además
asegurárseles que ellos mismos obtendrán de ello el
máximo provecho. Todos los conocimientos adquiri
dos en las enseñanzas universitarias normales, general-
mente tan faltos de vida, adquirirán claridad y vitali
dad en el elemento de la intuición general con que
ahora entran contacto; aprenderán a transmitirlos
en
y a utilizarlos hábilmente, ya que en el niño se halla
toda la plenitud inocente y abierta de la Humanidad;
adquirirán un tesoro de auténtico conocimiento del
hombre, único conocimiento que merece tal denom
les iniciará en el gran arte de la vida y la
nación; se
actividad, para la que la escuela superior no da, por
regla general, ninguna instruccióón.
Estado no se preocupa de la tarea que se le
SI el
Orece, tanto mayor gloria corresponderá a las perso
nas particulares que la emprenden. Lejos de nosotro
está el adelantarnos al futuro con conjeturas o el
Ciar el tono de la duda y la desconfianza; hemos
DISCURSOS A LA NACION ALEMANA
203
olado con claridad a dónde se dirigen nuestros deseos;
permítasenos señalar únicamente que si de verdad
Pe
sucediera que el Estado y los príncipes dejasen este
asunto en manos de personas articulares, correspon
deria al proceso de desartollo y de formación ale
manas, ya antes senalado y documentado con ejemplos,
el cual continuarfa siendo el mismo hasta el final. En
este caso el Estado, en su momento, seguiría su ejem-
plo, primero como un individuo aislado que quiere
contribuir con la parte que le corresponde, hasta que
más tarde se da cuenta de que él no es una parte,
sino el todo, y que el cuidar del todo no es para él
tanto un deber como un derecho. A partir de ese mo
mento desaparecen todos los estuerzos individuales de
las personas particulares y se subordinan al plan ge
neral del Estado.
Si el asunto toma este camino, la proyectada refor-
ma de nuestra especie avanzará sólo muy lentamente,
sin una panorámica irme y segura y sin posible apre-
ciación del conjunto. ¡Pero que nadie desista por ello
de empezar! Está en la naturaleza de la cuestión mis-
ma el que nunca pueda decaer, sino que una vez pues-
ta en marcha continúa viviendo por sí misma y se va
extendiendo cada vez más. Todo el que haya pasado
por esta educación se convertirá en testimonio y pro-
pagador celoso de la misma; como pago por la ense
nanza recibida se convertirá el mismo
en educador
conseguirá tantos alumnos como pueda, los cuales al
gun día serán educadores también; y esto continuará
necesariamente así hasta que abarque a la totalidad
sin excepción.
En el caso de que el Estado no se ocupe de esta
tarea, las iniciativas privadas han de contar con
los
padres de alguna manera pudientes no coniarán
Sus
hijos a esta educación. Dirfjanse entonces con toda
confanza y en nombre de Dios a los pobres huérta-
nos, a los que vagabundean por las calles en la mayor
unseria,
a todos aquellos
a adultos
quienes los re han
H O y despreciado. Así como hasta ahora, de ma*
 204 JOHANN GOTTLIEB FICHTE DISCURSOS A LA NACION ALEMANA 205

nera especial en aquellos estados alemanes en los que
la piedad de sus antepasadoshabla aumentado nota
blemente y dotado con esplendidez los centros docen.
tes públicos, muchos padres confiaron sus hijosa su
enseñanza porque alli recibian al mismo tiempo un
sustento, cosa que no ocurría en ningún otro oficio,
así también, obligados por la necesidad, invirtamos el
orden de las cosas y demos pan a aquellos a quienes
nadie se lo da, a fin de que jJunto con el pan reciban
al mismo tiempo la formación del espíritu. ¡No tema
mos que la pobreza y el embrutecimiento de su estado
interior pueda ser perjudicial para nuestro objetivo!
iArranquémosles por completo y de repente de su es
tado y llevémosles a un mundo totalmente nuevo!;
no dejemos en ellos nada que pueda recordarles lo
antiguo; se olvidarán hasta de sí mismos y exis-
tirán como seres recién creados. Nuestro reglamento
interno y nuestro sistema pedagógico deberán cuidar
de que en esta tabla rasa y limpia se grabe sólo
lo bueno. Será un testimonio aleccionador de nuestra
falta de medios, ello facilitaría la conservación del
esorado. La mayoría está aqul con la intención de
aprender; a cambio pueden durante algún tiempo apli-
car lo aprendido en beneficio del centro donde lo
aprendieron sin compensación alguna.
Además este centro necesita un local, mobiliario im
prescindible y una extensión suticiente de terreno, Es
obvio que cuando en el desarrollo posterior de estos
centros se encuentre en ellos una cantidad relativa-
mente considerable de jóvenes en esa edad en que,
seeún la organización anterior, ganan como criados no
sólo un sus tento, sino además un salario anual, éstos
podrán ocuparse de los más jóvenes; unido a una
necesaria laboriosidad y sabia economía, imprescindi-
bles en cualquier caso, hará que estos centros en su
mayoría puedan sostenerse por sí mismos. De momen-
to, y mientras no existan estos educandos, las institu-
ciones pueden necesitar de mayores ayudas. Es de es-
perar que se estará más dispuesto a prestar ayudas
cuyo fin se ve cercano. Una economía que perjudique
nuestro objetivo está muy lejos de nuestro pensa-

para la posteridad si justamente aquellos que

miento, y antes de consentir esto es mucho mejor no
época
ella había rechazado, y precisamente por este rechazo,
L
hacer nada.
Y por eso pienso que, con un poco de buena vo-
consiguen el privilegio de iniciar una especie humana luntad, no hay en la realización de este plan ningún
formación vivi-
mejor, si precisamente éstos levan la obstáculo que no pueda fácilmente ser superado con
ficadora a los hijos de aquellos que no querian estar
a su lado, y si se convierten en predecesores de
nues la unión de unos cuantos que encaminen todas sus
salvadores tuerzas hacia este único objetivo.
tros futuros héroes, sabios, legisladores y
de la Humanidad.
Para la primera fundación se necesitan ante todo
de Pes
maestros y educadores competentes. La escuela
talozzi ha formado ya tales hombres y está siempre
1a
dispuesta a formar más. Al principio se centrara
atención en que cada establecimiento de este tipo Se
considere a sí mismo como un seminario de educaao
funciones se
res y que en torno a los profesores en
reunan algunos jóvenes que aprendan a ensenar

practiquen al mismo tiempo para con la práctica apre

vez mejor. Además, en el caso de que
der cada contra a
tos centros tuviesen que luchar al principio