Estrategias de negociación ganar-ganar para reconstruir una

relación
Aquí hay algunas estrategias de negociación de ganar-ganar que otros han
utilizado para reunir a las contrapartes negociadoras, incluso después de un
largo y polémico período de silencio.

Cuando los negociadores se reúnen después de un período de desconfianza

mutua, puede ser difícil para cada parte reconciliar sus quejas con la otra. Aquí hay
algunas estrategias de negociación de ganar-ganar que otros han utilizado para
reunir a las contrapartes negociadoras, incluso después de un largo y polémico
período de silencio.
El 17 de diciembre de 2014, el mundo fue tomado por sorpresa por el anuncio de
que Estados Unidos iba a abrir negociaciones con Cuba con el objetivo de
restablecer las relaciones diplomáticas plenas entre las dos naciones distanciadas
desde hace mucho tiempo. Otro giro sorpresa a la historia: el Papa Francisco fue
el principal instigador y mediador de la inesperada distensión.

Negociaciones entre el Vaticano y Cuba

Un momento crucial en las negociaciones de alto secreto, que se desarrollaron

durante el último año y medio, se produjo cuando el presidente de Estados Unidos,
Barack Obama, visitó el Vaticano en marzo de 2014. Según los informes, el Papa
Francisco presionó a Obama para forjar una nueva era en las relaciones entre
Estados Unidos y Cuba, informa CNN. Según Obama, el Papa estaba
particularmente preocupado por la difícil situación de Alan Gross, un contratista
estadounidense que cumplía una condena de 15 años de cárcel en Cuba por tratar
de llevar servicios de Internet a Cuba.
Tácticas de negociación para crear una situación de negociación en la que
todos salgan ganando
El Papa siguió la reunión privada con cartas tanto al presidente Obama como al
presidente cubano Raúl Castro, instándolos a trabajar arduamente para restaurar
las relaciones. En octubre de 2014, el Vaticano fue sede de conversaciones entre
las delegaciones de Estados Unidos y Cuba. En esa reunión, las dos partes
analizaron los detalles de la liberación de Gross y los elementos de la nueva
política comercial de Estados Unidos hacia Cuba, según CNN.
Gross fue liberado y voló a casa a los Estados Unidos el 17 de diciembre de 2014.
Como parte del acuerdo más amplio, Estados Unidos liberó a tres espías cubanos
a cambio de que un oficial de inteligencia cubano estuviera detenido en Cuba. Los
funcionarios de los Estados Unidos se esforzaron por insistir en que Gross no era
parte del intercambio de prisioneros.
Muchos políticos republicanos condenaron la perspectiva de la normalización con
Cuba, diciendo que apuntalaría económicamente al régimen de Castro y no

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abordaría las cuestiones apremiantes de los derechos humanos y la democracia
en Cuba.
Pero para el Papa Francisco, el acuerdo anunciado parecía ser un claro acuerdo
de ganar-ganar. El secretario de Estado del Vaticano emitió un comunicado
expresando las "cálidas felicitaciones del Papa por la decisión histórica" de
establecer relaciones diplomáticas.
Roles en la mesa de negociación: ¿El Papa Francisco como mediador ideal?
Tanto el régimen de Castro como la administración Obama vieron al Papa
Francisco, nacido en Argentina, el primer jefe de la Iglesia Católica Romana de
América Latina, como su mediador ideal. Muchos de los principales asesores del
Papa tienen experiencia en América Latina y una comprensión especial de la
situación en Cuba.
Hablando del papel del Papa, un alto funcionario estadounidense le dijo al New
York Times que las negociaciones eran "menos una cuestión de romper algún
atasco sustantivo, sino más la confianza de tener una parte externa en la que
pudiéramos confiar".
El Vaticano ha tenido una historia de interés en Cuba. Francisco y los papas
anteriores han estado preocupados por el impacto de las sanciones económicas
de larga data de Estados Unidos contra Cuba, creyendo que causan sufrimiento a
los cubanos comunes y aíslan al gobierno cubano de una manera que corta la
posibilidad de la diplomacia. El Vaticano se ha "centrado en la condición humana,
en lugar de los intereses seculares" en Cuba, dijo a CNN Francis Rooney, ex
embajador de Estados Unidos en el Vaticano.
Sin embargo, la Iglesia Católica también ha tenido un interés personal en Cuba.
Después de que Fidel Castro llegó al poder en 1959 y, en 1961, declaró a Cuba un
estado socialista, miles de sacerdotes y monjas católicos fueron encarcelados y
enviados al exilio. En la década de 1990, Castro aflojó las reglas sobre la religión,
cambiando la nación de oficialmente atea a secular. En 1998, San Juan Pablo II,
que se crió en la Polonia comunista, visitó Cuba y anunció la apertura del primer
nuevo seminario que se construyó allí desde la revolución.
Hoy en día, se cree que alrededor del 60-70% de la población cubana es católica,
sin embargo, el culto está restringido. El país tiene menos de 200 sacerdotes, dijo
el arzobispo Thomas Wenski de Miami al Huffington Post. Algunos observadores
ahora especulan que los líderes de Cuba permitirán que el Vaticano envíe más
sacerdotes y monjas al país, y que una de las paradas en el viaje planeado del
Papa Francisco a América Latina este año será Cuba.