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Resumen Derecho Civil VII – Contratos, Parte Especial

1. ¿De qué trata este curso?


Este curso trata principalmente sobre las regulaciones específicas del Código Civil (en
adelante CC) respecto a algunos de los contratos más frecuentes.

2. Discusión doctrinaria del derecho de los contratos


Una postura que ha tenido acogida en la jurisprudencia es la de una supuesta
modernización del derecho contractual. Esta postura busca asimilar este derecho al
anglosajón, sin modificar la ley, que en muchos aspectos es completamente distinta a la
noción de contrato, efectos y principios; pero se ha interpretado darles otro sentido y
alcance de manera, muchas veces, forzada.
Podemos señalar el siguiente caso:
- En el common law, la indemnización de perjuicios es la regla general, mientras que
la acción de cumplimiento es excepcional. Los contratos en el derecho anglosajón
no engendran obligaciones.
- En cambio, en el derecho continental tenemos la figura de la obligación. Esta
obligación solo puede destruirse mediante los modos de extinguir las obligaciones.
Aun con pago de indemnización la obligación puede subsistir.
Esta forma de solucionar el tema sobre los efectos de los contratos, y los derechos del
acreedor frente al incumplimiento, mediante la vía que uso la ley, de crear una cuestión
teórica que se llama relación de obligación, que una vez que nace genera la necesidad de
extinguirla con algo, es lo que determina que sea contra el sentido del código que el
acreedor pueda exigir autónomamente una indemnización de perjuicios. E incluso,
condenado que sea el deudor a pagarla, y todavía en el evento que la pague, seguiría viva
esa cosa que dio al nacer el contrato, y se podría incluso exigir el cumplimiento a pesar de
que ya se le pago una indemnización.
Mientras tanto, en el derecho anglosajón se puede ejercer una indemnización de perjuicios
en forma autónoma, porque no hay nada que extinguir. Lo que se puede explicar a través
de la idea o noción de que existe una diferencia entre lo que significa, por una parte, estar
obligado, y lo que por otra parte significa ser responsable.
La indemnización de perjuicios es por esencia el remedio para el incumplimiento en el
derecho anglosajón. En este derecho no se habla de obligaciones, sino de promesas.
A su vez, la concepción anglosajona hace muy tenue la distinción entre responsabilidad
contractual y extracontractual, al borrarse la barrera entre lo que es estar obligado y ser
responsable.

3. Qué es un contrato
- Es una especie de convención, que persigue la creación de derechos y obligaciones.
Se distingue de otras convenciones que modifican o extinguen derechos.
- El contrato existió previo a la regulación legal que se le dio.
- El contrato busca satisfacer necesidades. La representación de una necesidad que
lleva a contratar es la causa del contrato.
- Puede existir contrato sin ley, sin embargo, esta es importante para atribuir efectos
vinculantes y para encontrar soluciones frente al incumplimiento (ej nulidad frente
a vicios del consentimiento).
- Las obligaciones son el vínculo intelectual o teórico que nacen como consecuencia
de la celebración de un contrato.

4. Indemnización de perjuicios ¿Procede de forma autónoma?


En base a la modernización del derecho contractual, se ha buscado permitir la procedencia
autónoma en base a la asimilación de la common law. Sin embargo, la postura de la catedra
es que esta no puede proceder de forma autónoma en nuestro ordenamiento, dada la
diferencia de nuestras tradiciones jurídicas.

5. Solidarismo contractual
Concepto de la doctrina francesa relacionado con la buena fe. Consiste en no satisfacer
únicamente los intereses propios, sino también colaborar activamente para que la
contraparte alcance la satisfacción de sus intereses. Este concepto marca un cambio de
paradigma respecto al concepto de buena fe que consistía en la simple lealtad, es decir
respetar lo pactado.

6. Responsabilidad precontractual
¿Puede una persona retirarse de una negociación o no contratar? Lo que ha dicho la
mayoría de la doctrina, y que tiene también recepción jurisprudencial, es que no es un ilícito
per se el no contratar. Esto mientras la retractación sea de buena fe.
Puede, sin embargo, como ha planteado la doctrina y jurisprudencia, haber casos en que
proceda responsabilidad extracontractual, casos en los que se quiebra la buena fe objetiva,
vale decir, situaciones en que existe una razonable confianza con el futuro cocontratante
de la celebración de un contrato, y esta confianza se ve rota de manera intempestiva e
injustificada.

6.1. Requisitos de procedencia de la responsabilidad precontractual


1) Razonable confianza, debe haber una ruptura de la buena fe objetiva.
2) Ruptura de negociaciones intempestiva e injustificada.
3) Daño.
4) Causalidad entre el daño y la ruptura de la confianza legítima.

6.2. Naturaleza jurídica


Se encuentra a priori en “el límite”, ya que no hay contrato (por tanto, no aplica Art. 1545),
pero tampoco hay propiamente responsabilidad extracontractual.
La doctrina y jurisprudencia mayoritaria considera que es responsabilidad extracontractual,
porque, si bien no se aplica el principio del Art. 2314 de “no dañar al otro”, existe en cambio
un deber de necesidad de buena fe de negociar los términos de un futuro contrato.

6.3. Penalización
Ante la falta de convención en las partes es importante señalar la existencia del interés
positivo y negativo:
- Interés positivo: debe indemnizarse todo lo que eventualmente se habría ganado si
el contrato se hubiera celebrado. No se acepta en materia precontractual.
- Interés negativo: la parte afectada debe quedar en la misma posición de si el
incumplimiento no se hubiese llevado a cabo.
Nuestra jurisprudencia llama a no confundir daño emergente con interés negativo. El
interés negativo es cualquier daño que como relación causal tenga el incumplimiento de la
tratativa preliminar.
Los contratos preparatorios nos permiten evitar esta problemática.
7. Contrato preparatorio
Es un contrato que permite a las partes fijar a futuro la celebración de un contrato definitivo,
que en el presente las partes no tienen la capacidad de hacerlo, ya sea por que siguen en
negociaciones, es incierto económicamente, etc. El principal ejemplo de contrato
preparatorio es el contrato de promesa.
Contrato preparatorio es una clasificación jurisprudencial, pues el Art. 1442 no regula a los
contratos preparativos, sino que regula los contratos accesorios que son parecidos.
Entre los contratos preparatorios podemos señalar:
- Contrato de promesa.
- Contrato de opción.
En los contratos preparatorios pueden pactarse clausulas penales.

8. Contrato de promesa (Art. 1554)


El contrato de promesa es un contrato preparatorio, pero, además, es un contrato definitivo
en sí mismo. Esto significa que, por ejemplo, si uno celebra un contrato de promesa de un
contrato y no se cumple la promesa uno pasa a estar sujeto a la responsabilidad contractual.
La obligación principal del contrato de promesa va a ser una prestación de hacer, que es el
celebrar el contrato definitivo, pero eso no obsta a que subsista per se. Tanto es así que si
el contrato no se celebra se incurre en responsabilidad contractual y puede accionarse el
Art. 1553 (que permite cumplimiento forzado).
El contrato de promesa puede recaer sobre la celebración de cualquier contrato no
prohibido por la ley.
8.1. Requisitos

1) Debe constar por escrito, no requiere escritura pública. Surge el problema de qué
ocurre si el contrato definitivo requiere EP, como en el caso del inmueble. La
doctrina minoritaria y antigua señalaba que era necesario. Sin embargo, hoy en día
la doctrina y jurisprudencia mayoritaria consideran que no debe constar por
escritura publica la promesa esto porque:
• La ley en su enunciado dice que la promesa conste por escrito, y decir que la
promesa conste por escrito es igual a decir que conste por EP significa agregar
una solemnidad que la ley no ha señalado.
• El nº1 habla de la escrituración, y el Art. 1554 nº4 habla de que pueden faltar las
solemnidades que la ley prescribe. Y si nosotros nos viésemos obligados a que la
promesa de compraventa de un bien raíz constare en escritura pública, no
tendría ninguna utilidad el Art. 1554 n°4, porque ya estaríamos agregando la
solemnidad que la ley nos permite que falte.
• Las solemnidades son de derecho estricto, no pudiendo plantearse excepciones
que la ley no ha planteado. Cuando la ley ha querido que una cosa conste por
escritura pública, se habría señalado expresamente.

2) Que el contrato prometido no sea no sea de aquellos que las leyes declaran
ineficaces. Surge la duda de cuando es eficaz el contrato prometido. También surge
la pregunta de si es requisito de forma o de fondo, como también cual es la sanción
de ineficacia.
• Cuando se evalúa la eficacia del contrato prometido: al momento de la
celebración.
o Si en el presente es ineficaz y en el futuro es eficaz. No se puede por
faltar el requisito del número. No es válido.
o Si es eficaz al momento de la celebración, pero ineficaz a futuro. Es
válido, pero no será exigible.
• ¿Requisito de forma o de fondo?: la mayoría cree que la eficacia está pensada
en el fondo. Es decir, que los requisitos de forma del contrato deben concurrir
para el contrato prometido.
• Sanción de ineficacia: Art. 1682, nulidad absoluta (o inexistencia según otro
sector de la doctrina), el requisito esta dado por los requisitos del contrato, no
por la intervención de las partes.
Un ejemplo de un contrato legalmente ineficaz es el sicariato.

3) Sujeto a plazo o condición. Corresponde responder algunas dudas:


• Si pensamos que, dentro de la próxima semana, ¿es un plazo extintivo o
suspensivo? La doctrina mayoritaria considera que es un plazo suspensivo, ya
que así no se generaría la indeterminación que trae la prescripción extintiva.
• ¿Hasta cuándo estamos dispuestos a entender que una condición falló? Parte de
la doctrina cree que no tienen plazo para fallar, otros creen que hay plazos para
agotar las condiciones. Cuando hay certeza que la condición no se cumplirá, sería
para muchos. El problema es cuando no tenemos certeza de que falle la
condición. No hay un plazo para reputar fallida la condición en la ley. Hay otros
indicios de que existe, como el Mensaje, pero solo eso. Lo más común es que las
promesas se pacten con plazos y condiciones. No hay por qué fijar una fecha
determinada, pero una época basta.
4) Que se especifique de tal forma el contrato prometido, que solo falte la tradición
o las solemnidades que la ley prescribe. Es decir, solo debe faltar la tradición o la
solemnidad para la perfección del contrato, y esto genera problemas para los
contratos consensuales, donde surge la pregunta de si se debe volver a consentir.
• La mayoría de la doctrina considera primero que aun cuando existe acuerdo de
voluntades y teniendo plazo, las partes deben dar su voluntad cuando
corresponda.
• Decirle tradición al requisito está mal dicho. Hay contratos reales respecto de los
cuales no hay tradición, sino que mera entrega.
• El numeral cuarto permite cualquier contrato, incluso el consensual, faltando
solo las voluntades del último contrato.
• Hay que distinguir obligaciones del contrato de promesa y del contrato
prometido. Esto es importante para unilaterales y bilaterales.
• La diferencia entre un contrato de promesa y un contrato, ambos con condición
suspensiva, dependen de la redacción.
8.2. Discusiones doctrinales
- ¿Existe promesa bilateral en un contrato unilateral (ej, comodato)?
• Ozuna plantea que no existe la promesa bilateral en un contrato unilateral.
• Abeliuk y Urrutia contestan que estos tipos de contratos generarían algún tipo
de interés al comodante. En estos casos en que existen intereses mutuos
importa que la promesa sea bilateral.
- ¿Qué pasa con la promesa unilateral de celebrar un contrato bilateral? Ej, un
vendedor, que es el promitente, se obligaría por la compraventa en caso de que el
comprador manifieste su voluntad.
Las preguntas anteriores nacen por los requisitos del Art. 1554, los cuales la doctrina por
muchos años interpreto de manera estricta. Alessandri plantea nulidad en el ejemplo
señalado por ineficacia (nº2), también habría nulidad al no cumplirse el requisito del nº3, al
no haber fecha, nº4 por no estar especifico, y el nº5 ya que sería calificado como una
condición meramente potestativa (nula según Art. 1478).
La jurisprudencia por años no reconocía validez a este tipo de figuras.
Claro Solar, por su parte se opuso a la postura de Alessandri:
- Respecto a requisito Art. 1554 nº2, señala que se pasa por alto que si el beneficiario
de la promesa decide celebrar el contrato deberá cumplirse el contrato de promesa,
es eficaz.
- En cuanto a 1554 nº3, veremos más adelante que el problema no tiene que ver con
el cumplimiento, sino que si se puede pactar una condición indeterminada.
- 1554 nº4, se relaciona con el argumento del nº2, señala que el consentimiento
posterior de celebrar el contrato de cv se determina posteriormente al
consentimiento de la promesa.
La jurisprudencia avanzo al reconocimiento de este tipo de figuras (se muestra fallo CS
1962), en este fallo la CS reconoce el cambio de paradigma doctrinario.
Otro tema de discusión es la eficacia del contrato de promesa en casos de compraventa de
inmuebles, en particular ante casos de lesión.
Lesión: vicio objetivo que se presenta en ciertos actos jurídicos, que genera un desequilibrio
entre las partes, el cual se encuentra sancionado por el legislador, caso a caso.
Respecto a la lesión enorme, ¿Qué incidencia tiene en la lesión que la compraventa haya
sido precedida por un contrato de promesa? ¿se puede atacar la promesa misma? La
compraventa a realizarse ¿puede ser atacada por lesión enorme? ¿se obligan las partes a
celebrar este contrato que adolece de lesión enorme?
- Respecto a si se puede atacar la promesa por lesión enorme, puede atacarse en
virtud de su ineficacia Art. 1554 nº2. Se critica al sector doctrinario que apoya esta
postura debido a la sanción de la lesión (nulidad relativa).
• CS 1970, falló que la promesa no puede rescindirse por lesión enorme, esto por
ser dos contratos diferentes la promesa de cv de la cv misma. Esta es la postura
predominante hoy en día.
• Art. 1889 CC: señala supuestos de lesión enorme, a su vez, señala que el justo
precio se refiere a aquel del momento de la celebración de contrato (el de cv).
• Art. 1891 CC: relacionado con acción rescisoria en caso de cv por ejecución
forzada. No habría lesión enorme por ser el contrato celebrado por Ministerio
de Justicia.
• La jurisprudencia al respecto (CS 1949), señala que ventas hechas por el
Ministerio de la Justicia, no son las en que el juez se limita a hacer cumplir un
contrato en las condiciones que los interesados convinieron libremente, sino
aquellas en que el contrato de cv se genera por la justicia (…) Son, en
consecuencia, ventas “hechas por el ministerio de la justicia”, las de remate
público en juicio ejecutivo, la de un remate en pública subasta en juicio de
liquidación y partición, las ventas en pública subasta en los actos de jurisdicción
voluntaria que exigen tal trámite.
• Se discute también casos en que la lesión ocurre por culpa del afectado, quien
se aprovechó, por ejemplo, mediante retrasos imputables por culpa o dolo, para
que se configurare la lesión. Nadie puede beneficiarse de su propio dolo, a su
vez, esta conducta es contraria a la teoría de los actos propios.
• En casos en que el pago (parcial o total) se realiza previo a la celebración del
contrato, se debe determinar si existía la lesión al momento del pago.
- ¿Pueden las partes verse obligadas a celebrar contrato, a sabiendas de la lesión
enorme? La parte obligada a celebrar la CV podría oponerse a la ejecución, esto
mediante imposibilidad jurídica de poder cumplir con la obligación.

9. Contrato de opción
Es un contrato donde solamente una de las personas genera una obligación, mientras que
la otra no se encuentra obligada. Tan así es este contrato que la persona que tiene la
obligación de celebrar el contrato futuro, ni siquiera puede obstar a su cumplimiento
Ejemplo: Uno se obliga con una persona a comprar su computador. Esa persona que celebro
el contrato de opción de compraventa tiene la posibilidad de que llegado el día le puede
decir a la contraparte que acepta, y la contraparte se ve obligada a celebrar el contrato de
compraventa. Pero la contraparte que se obligó no puede obstar a su cumplimiento. Si en
cambio se rechaza, no hay responsabilidad.
El contrato de opción es distinto al contrato general de promesa, que es bilateral y por lo
tanto cualquier contratante puede forzar su cumplimiento.
Teorías que buscan explicar el contrato de opción:
1) Promesa unilateral. Es un contrato de promesa donde solamente una de las partes se
ve obligada.
2) Teoría de la oferta. Solo una de las partes está obligada, con la diferencia respecto de
cuando se acepta o no según el CCom.
Hay un gran problema con este contrato ya que el Art. 1478 dice que las condiciones
meramente potestativas no valen (ej, te voy a vender mi casa si es que quiero). La
jurisprudencia y doctrina señalan que este caso es distinto, porque el contrato de opción
no va a estar sujeto a la voluntad de quien se obliga, sino que a la voluntad del acreedor.
El CC busca impedir que el cumplimiento de la obligación dependa solamente de la voluntad
de quien se obliga; pero el caso del contrato de opción es distinto según la doctrina y la
jurisprudencia, porque aquí una persona le dice a otra “yo te voy a vender mi reloj si tú
quieres”, y por lo tanto el contrato solo se va a celebrar con la mera voluntad del acreedor.

10.Due Diligence
Es un procedimiento (de hecho, las partes suelen llamarlo así en lugar de contrato) que
involucra muchas cosas. Suele aplicarse en la compra de empresas.
Consiste en la realización de determinadas actuaciones de parte de los contratantes
durante el proceso, por ejemplo: el potencial vendedor entregara inventarios de los bienes,
listado de las propiedades, contabilidad, resoluciones administrativas, y en general, todas
las actuaciones relevantes para la toma de la decisión de esa compra. Siempre con la
contrapartida de que a la parte que se le entreguen estos documentos (el potencial
vendedor) de la prohibición de divulgación de estos (cláusula de confidencialidad o NDA).
Para efectos de responsabilidad ¿Es la DD un contrato? La postura minoritaria señala que si
es un contrato, si bien no impone las obligaciones del contrato que ellos quieren celebrar
(compraventa de la empresa), es un contrato completo en sí mismo. Dado que las partes
no están configurando sobre la base de que es un contrato, puede haber múltiples
situaciones que causen daños, en que se va a tener que determinar si ese contrato de DD
cubre esa situación. Ejemplo: A entrega información falsa, y la otra actúa conforme a esta
(confía en base a la información falsa), y esto le produce daños en su patrimonio. En este
caso: ¿Hay responsabilidad contractual por DD, o responsabilidad extracontractual? Al
existir obligaciones, habría responsabilidad contractual.

11.Licitación
La licitación es un mecanismo de selección de la contraparte.
Es un proceso mediante el cual una parte pública o privada manifiesta ya sea al público en
general o a ciertas personas determinadas, su intención de celebrar un contrato (ejemplo:
construcción de un hospital). Y manifiesta, al mismo tiempo de qué forma lo haría técnica y
económica dentro de ciertos parámetros, que son las bases de la licitación. Siguiendo esas
bases, la contraparte podrá efectuar una propuesta (transformándose en oferentes). Y la
mejor oferta va a adjudicarse la licitación, y celebrara el contrato como consecuencia de la
licitación.
¿La ejecución de la licitación puede generar un daño? Si, por ejemplo (caso típico) que no
se escoja la mejor oferta. Que se escoja una oferta que contraviene las bases de la licitación.
También puede haber un daño para el licitante (si los oferentes se coluden). Se pueden
generar daños.
¿El ordenamiento jurídico debe proteger la confianza del afectado? Algunos dicen que no,
otros que si porque hay un interés jurídicamente protegido. No es una mera expectativa de
derecho.
¿Qué responsabilidad habría?
1) Responsabilidad extracontractual: al existir un deber creado por las expectativas
creadas por los actos.
2) Responsabilidad contractual: ¿Existe el Contrato de Licitación? Sería raro que existiera,
porque normalmente se describe a la licitación solo desde un punto de vista material,
como un proceso, no con naturaleza jurídica. Y si se establecen responsabilidades e
indemnizaciones, se ha omitido el análisis de la naturaleza jurídica.
A lo menos en opinión del profesor, por regla general, en una licitación como nosotros
hemos descrito, existe un contrato de licitación, que es distinto al contrato que se quiere
celebrar en el futuro como resultado de la licitación.
En un caso se adjudicó la licitación alguien que hizo todo mal (no era la mejor oferta, no
cumplió con las bases que establecían requisitos técnicos específicos, y era la oferta
económica más cara) en contraposición a quien, si cumplió todo eso mejor y bien, pero que
no se adjudicó la licitación. ¿se cumplió alguna obligación? Si, por la naturaleza, ya que no
se cumplió la obligación de que la adjudicación deberá obtenerla quien ofreció la mejor
oferta, eso está en la naturaleza de ese contrato. A la misma obligación se llega por la buena
fe. Pero el contrato ya se celebró con otro, así que ¿Puedo pedir que lo celebre conmigo?
No hay un vicio del consentimiento, hay un objeto licito, hay una causa licita, no hay nulidad
en derecho privado (en el publico quizás sí).
A lo mejor si es posible exigir el cumplimiento (celebrar el contrato). A lo mejor no, pero
puede pedir indemnización de perjuicios (el daño sería el que no va a celebrar el contrato).
Otra alternativa es dejar sin efecto el contrato celebrado, para que se realice nuevamente
un proceso de licitación o que se adjudique a quien presento la mejor oferta.
Pero en esta situación hay una contraposición: interés del particular dañado, y la certeza
jurídica. Sin embargo, esta situación debe tener una solución.
Esto es sobre un juicio donde se demanda la resolución del contrato celebrado al licitante y
al adjudicatario que no era la mejor oferta. ¿se puede hacer eso? De partida no es parte en
ese contrato. Hay dos alternativas.
1) Pidiendo directamente resolver el contrato mal celebrado, y seguidamente pedir que se
celebre el contrato. La primera solicitud seria por el cumplimiento de una condición
resolutoria ordinaria, que opera de pleno derecho, no sería un derecho que emane de
contrato. Esta condición derivaría de la obligación del contrato de licitación (esta
obligación conlleva esta modalidad).
2) Pedir la resolución por incumplimiento del contrato de licitación. ¿Y qué pasa con el
otro? El contrato licitado no puede existir sin el contrato de licitación ya que es
dependiente de este último. La causa del segundo contrato (el licitado, que se celebra
entre el licitante y el adjudicatario de la licitación) es falsa. Aquí solo se pide la
indemnización de perjuicios.
12.Contrato de Compraventa (Art. 1793)
La compraventa es un contrato en que una de las partes se obliga a dar una cosa y la otra a
pagarla en dinero. Aquélla (que se obliga a dar) se dice vender y ésta (la que está obligada
a pagarla en dinero) comprar. El dinero que el comprador da por la cosa vendida, se llama
precio.

12.1. Elementos de la esencia del contrato de CV:

1) Consentimiento.
2) Cosa vendida.
3) Precio.
Si no se dan estos elementos, según el Art. 1444, no produce efecto alguno, o degenera en
otro distinto. Para que degenere en un contrato diverso, producto la falta de uno de los
requisitos de la esencia de ese contrato, ese contrato diverso debe ser querido por las
partes. Si no produce efecto alguno, será inexistente o nulo.

12.2. Elementos de la naturaleza de la CV (Art. 1837). La obligación de saneamiento es


el elemento de naturaleza de la CV, tiene dos objetos.
1. Saneamiento de la evicción: si el comprador sufre una perturbación en la posesión
pacifica de la cosa, ya que un sujeto ejerce acciones judiciales en su contra (una
acción reivindicatoria, por ejemplo), y si se acogen, el demandado se puede ver
privado de todo o parte del dominio de la cosa que el comprador le compro al
vendedor. Este saneamiento se manifiesta en una obligación de hacer, de
comparecer en juicio a defender al comprador, dependiendo de ciertas
circunstancias. Y si el comprador se ve privado (por el resultado del juicio) de todo
o parte del dominio de la cosa, el vendedor tendrá una obligación, ya no de hacer,
sino de dar una suma de dinero a título de indemnización (con reglas especiales).
Según parte de la doctrina, la obligación de saneamiento de la evicción contiene dos
obligaciones distintas y eventualmente sucesivas entre sí. Estas dos obligaciones
giran en torno al concepto de la evicción.
a. Una obligación de hacer: sería la primera que se hace exigible frente a la
demanda de un tercero, que consiste es el deber del vendedor de concurrir al
juicio para defender al comprador. Si se produce la evicción, puede originarse la
obligación de dar.
b. Una obligación de dar: Indemnización en cantidad de dinero (1847 y ss. regula el
alcance de la indemnización)
La ley impone una carga al comprador que si no se cumple el vendedor no va a ser
responsable de la eventual evicción. Esa carga al comprador consiste en citar de
evicción al vendedor y si no lo hace, aunque el vendedor se haya robado la cosa, este
vendedor no va a responder. Esta citación se regula por el CPC, 584 y ss.
La oportunidad para citar de evicción: no puede ser en la citación a oír sentencia. La
ley dispone que esa citación debe realizarse dentro del plazo para contestar la
demanda y antes de contestarla.

2. Saneamiento de los vicios redhibitorios: la cosa puede venir con un defecto oculto
(debe cumplir ciertos requisitos según el código civil), y generara diversas
obligaciones distintas: si son graves se puede dejar sin efecto contrato, en algunos
casos la rebaja del precio.

12.2.1. Vicios Redhibitorios


Son los vicios que sufre la cosa desconocidos para el comprador y que no tenía por qué
conocer, que menoscaban la utilidad de la misma para el fin natural que está destinado.
Si el vicio cumple con la gravedad señalada por la ley el comprador tiene dos acciones:
- Acción redhibitoria: acción equivalente a la resolutoria en cuanto a su efecto (le
permite al comprador desistir del contrato o dejarlo sin efecto, restituyendo la cosa
defectuosa. Cabe señalar que los requisitos no son los mismos que los de la acción
resolutoria.
- Acción Quanti minoris o estimatoria: acción que pretende conservar la cosa
defectuosa, pero exige una rebaja del precio. Se configura en casos de menor
gravedad. De haberse pagado el precio deberán probarse los requisitos y restituir el
exceso.
Si el vicio no reúne el requisito de gravedad, el código igual protege los derechos del
comprador, pero no permitirá dejar sin efecto el contrato por la acción redhibitoria,
permitiendo únicamente el ejercicio de la acción quanti minoris.
¿Qué pasa con la indemnización de perjuicios? Puede haber lugar a una acción de
indemnización de perjuicios, que se ejerza en conjunto con cualquiera de las acciones
anteriores, exigiendo la ley eso si el requisito de mala fe del vendedor (el vendedor conocía
o debía conocer el vicio de que se trata).
La ley no se refiere a los efectos de los vicios redhibitorios, aunque si señala las
características (calidades como señala la ley) que debe tener la cosa para que se configure
la existencia del vicio.
Puede apreciarse una evolución doctrinal que permite, hoy en día, la configuración de
concurso de acciones. Tradicionalmente se señalaba que los vicios redhibitorios eran
defectos de carácter material. Si empezamos a incluir aspectos no materiales, podemos
configurar un concurso con acciones como la de nulidad por error o incumplimiento en la
obligación de dar.
Art. 1857: Se llama acción redhibitoria la que tiene el comprador para que se rescinda la
venta o se rebaje proporcionalmente el precio por los vicios ocultos de la cosa vendida, raíz
o mueble, llamados redhibitorios.
Art. 1858: Son vicios redhibitorios los que reúnen las calidades siguientes:
1. Haber existido al tiempo de la venta;
2. Ser tales, que por ellos la cosa vendida no sirva para su uso natural, o sólo sirva
imperfectamente, de manera que sea de presumir que conociéndolos el comprador
no la hubiera comprado o la hubiera comprado a mucho menos precio;
3. No haberlos manifestado el vendedor, y ser tales que el comprador haya podido
ignorarlos sin negligencia grave de su parte, o tales que el comprador no haya
podido fácilmente conocerlos en razón de su profesión u oficio.
Art. 1868: Si los vicios ocultos no son de la importancia que se expresa en el número 2.º del
artículo 1858, no tendrá derecho el comprador para la rescisión de la venta sino sólo para
la rebaja del precio.
Art. 1862: “Si la cosa viciosa ha perecido después de perfeccionado el contrato de venta,
no por eso perderá el comprador el derecho que hubiere tenido a la rebaja del precio,
aunque la cosa haya perecido en su poder y por su culpa.
Pero si ha perecido por un efecto del vicio inherente a ella, se seguirán las reglas del artículo
precedente.”
Por tanto, podemos señalar como requisitos del vicio redhibitorio:
1. Haber existido al momento de la venta.
2. Vicio grave.
3. Vicio desconocido por el vendedor.

Art. 1861: Si el vendedor conocía los vicios y no los declaró, o si los vicios eran tales que el
vendedor haya debido conocerlos por razón de su profesión u oficio, será obligado, no sólo
a la restitución o la rebaja del precio, sino a la indemnización de perjuicios; pero si el
vendedor no conocía los vicios ni eran tales que por su profesión u oficio debiera
conocerlos, sólo será obligado a la restitución o la rebaja del precio.
12.3. Obligaciones del vendedor
- Dar o entregar la cosa.
• Respecto a que entendemos por dar esta la discusión entre la doctrina francesa
vs la doctrina del derecho romano (que seguimos nosotros).
• La doctrina francesa señala que dar es la obligación de transferir el dominio.
• La doctrina romanista señala que dar consiste en hacer la tradición, dar la
posesión pacifica de la cosa.
- Conservar la cosa hasta el momento de la tradición.
- Obligaciones de garantía:
• Saneamiento de la evicción.
• Saneamiento de los vicios redhibitorios.

12.4. Venta de cosa ajena


La venta de cosa ajena es válida, sin perjuicio de los derechos del dueño de la cosa vendida
mientras no se extingan por el lapso de tiempo, entonces, ¿Cómo vamos a anular un
contrato bajo esa lógica por incumplimiento de obligación? La venta de cosa ajena da a
entender que se puede vender válidamente algo sin transferir el dominio.
El poseedor de buena fe que adquirió una cosa ajena puede adquirir el dominio por
prescripción adquisitiva.
Bajo la teoría mayoritaria procede saneamiento de evicción. Si se perturba la posesión
pacifica (por acción redhibitoria del dueño legítimo de la cosa), el comprador llama al
vendedor para que le defienda en juicio. Generalmente no suele defender el vendedor de
cosa ajena. Aquí nace la acción de indemnizar perjuicios por la perturbación jurídica de la
posesión pacifica de la cosa (Art. 1489).
En la CV de inmuebles, pese a que el requisito de la tradición es la inscripción en registro de
bienes raíces, existe la obligación de entregar la cosa dentro de la obligación de dar.
Existe una manera de salvar el problema de que no se puede aplicar directamente el Art.
1489. Esto es, modificación del contrato en que se garantice al comprador la transferencia
del dominio y el uso de la cosa sin perturbación del dominio, ya sea gravámenes (hipotecas,
servidumbres, etc.), prohibiciones, etc.
12.5. Venta de cosa propia (spoilers: no vale)
La compra de cosa propia no vale (Art. 1816), pero el inciso final dice que todo lo dicho en
este artículo puede ser modificado expresamente por las partes.
12.6. Aspectos específicos de las obligaciones (de la esencia) de la CV
Cosa vendida: es uno de los objetos del contrato de CV, en particular corresponde a una
cosa que se trata de dar, respecto al Art. 1460 CC > Acto jurídico > objeto.
Precio: Pareciera atender al valor de la cosa misma, pero no. Es una cantidad de dinero que
las partes del contrato de compraventa acuerdan. Una cosa puede valer más o menos, pero
las partes le asignan un valor subjetivo a la cosa, aunque no releje su valor. Este valor
generalmente se respeta excepto en casos como la lesión enorme (CV bienes raíces).
Respecto al acto jurídico, el precio también es un objeto del contrato de CV.
Constituye objeto del contrato de compraventa la cosa y el objeto. A ambos se le aplican
los requisitos de validez del objeto cuando consiste en una cosa:
1) Comercial o enajenable (Arts. 1464 y 1810).
2) Determinado o determinable.
3) Que exista o se espera que exista.
4) Que no sea propia.
Comercial o enajenable: son comerciables aquellas cosas susceptibles de dominio y
posesión por los particulares. Se excluyen los bienes nacionales de uso público y los bienes
que la naturaleza ha hecho comunes a todas las personas. Pero en materia de compraventa
hay una norma especial.
- ¿Se pueden adquirir derechos reales por la compraventa? No, porque por los
contratos no se adquieren derechos reales, sino solo personales. Los contratos en
nuestro sistema jurídico no es un sinónimo de la enajenación.
Determinación de la cosa (Art. 1461, a propósito de las obligaciones)
La cosa tiene que estar especificada, de modo que sepamos a que nos referimos, por
ejemplo, al comprar trigo.
Límite: debe determinarse a lo menos en cuanto a su género. Para no romper la
determinación debe a lo menos cuantificarse el género.
Art. 1461 inc. 1º: “No sólo las cosas que existen pueden ser objetos de una declaración de
voluntad, sino las que se espera que existan; pero es menester que las unas y las otras sean
comerciables, y que estén determinadas, a lo menos, en cuanto a su género.”
Si no hay cantidad de un género, hay un problema de objeto, el acto jurídico carecería de
objeto.
Mi margen de determinación es por lo menos en cuanto al género, pero si debe estar
determinada la cantidad. Ejemplo: 5 tomates.
- Determinable: posibilidad de definir la cantidad al momento del cumplimiento de la
obligación. Se da en casos por ejemplo de compra de cosecha, en que no se sabe la
cantidad hasta el momento de la cosecha. Debe haber reglas para determinarlo en
el contrato.
Art. 1461 inc. 2º: “La cantidad puede ser incierta con tal que el acto o contrato fije reglas o
contenga datos que sirvan para determinarla.”
En este mismo requisito se habla que la cosa tiene que ser singular:
- Singular: Se prohíbe vender o comprar las universalidades (ej, patrimonio), incluso
aunque sea en cuotas. Para vender una universalidad debe individualizarse cada
objeto que la compone. El patrimonio más que no ser singular, es un atributo de la
personalidad que no es enajenable. Un ejemplo más apropiado sería el de un
establecimiento de comercio.
Art. 1811: “Es nula la venta de todos los bienes presentes o futuros o de unos y otros, ya se
venda el total o una cuota; pero será válida la venta de todas las especies, géneros y
cantidades, que se designen por escritura pública, aunque se extienda a cuanto el
vendedor posea o espere adquirir, con tal que no comprenda objetos ilícitos.
Las cosas no comprendidas en esta designación se entenderán que no lo son en la venta:
toda estipulación contraria es nula.”
La sanción de eso es la nulidad absoluta.

Existencia o posibilidad de existencia


Art. 1461: no solo las cosas que existen pueden ser objeto de una declaración de voluntad,
sino que también las cosas que se espera que existan.
Art. 1813: “La venta de cosas que no existen, pero se espera que existan, se entenderá
hecha bajo la condición de existir, salvo que se exprese lo contrario, o que por la naturaleza
del contrato aparezca que se compró la suerte.” (todavía no se perfecciona el contrato de
compraventa)
En las cosas que pueden existir el límite se encuentra en la aleatoriedad.
- Existen casos, como la compra de un departamento en construcción, en que existe
certeza de que vaya a existir. Distinto es el caso de la compra del resultado de una
pesca o cosecha, en que se compra la suerte.
- Mientras más certeza es menos aleatoria, y viceversa.
Suelen pactarse condiciones suspensivas en las cv que recaen sobre cosas futuras.
En las cv de cosas inexistentes, existe falta de causa, por ende, hay nulidad absoluta.
En cosas parcialmente inexistentes, como un auto volador, hay que ver si lo que falta o no
existe es considerable o no, de cierta entidad, que significa que de no haber sido
considerado yo habría contratado en condiciones menos gravosas (que no se catalogan
como vicios redhibitorios.
Si el comprador una cosa que le falta un elemento de cierta entidad, que yo lo consideré
mucho, como el auto al que le falta una puerta (y yo quería un auto completo), ahí el
comprador tiene un derecho alternativo de optar por seguir con el contrato junto con pedir
la rebaja de precio, o desistirse del contrato. Esto no es un vicio redhibitorio.
¿Qué pasa si la cosa deja de existir al momento de perfeccionarse el contrato? ¿de quién es
cargo la perdida de la cosa? La teoría de los riesgos se utiliza cuando se perfecciona el
contrato de compraventa, (antes de hacer la tradición). La cosa perece para el comprador.
Estas normas no responden al principio de “las cosas perecen para su dueño”
12.6.1. Teoría de los riesgos en general
Art. 1550: “El riesgo del cuerpo cierto cuya entrega se deba, es siempre a cargo del
acreedor; salvo que el deudor se constituya en mora de efectuarla, o que se haya
comprometido a entregar una misma cosa a dos o más personas por obligaciones distintas;
en cualquiera de estos casos, será a cargo del deudor el riesgo de la cosa, hasta su entrega.”

12.6.2. Teoría de los riesgos en específico de la compraventa


Art. 1820: “La pérdida, deterioro o mejora de la especie o cuerpo cierto que se vende,
pertenece al comprador, desde el momento de perfeccionarse el contrato, aunque no se
haya entregado la cosa; salvo que se venda bajo condición suspensiva, y que se cumpla la
condición, pues entonces, pereciendo totalmente la especie mientras pende la condición
la pérdida será del vendedor, y la mejora o deterioro pertenecerá al comprador.”

12.7. Regulación especial de requisitos del objeto


Art. 1808: el precio de la venta debe ser determinado por los contratantes (…)
Art. 1809: puede dejarse a criterio de un experto (tasador) determinar el precio de la cosa.
Puede determinarse un precio máximo en caso por ejemplo de que el tasador determine
un precio muy alto. (…)
Ley señala que no se puede determinar el precio por el arbitrio de una de las partes (caso
en que parte vendedora determina el precio de la cosa después de perfeccionada la venta.
No hay acuerdo de voluntad sin determinación del precio).
12.8. Efectos del contrato de CV
Referirse a obligaciones del contrato de CV.

12.9. Efectos del incumplimiento de la obligación de entregar


Ante incumplimiento se puede exigir el cumplimiento de la obligación, indemnización de
perjuicios o condición resolutoria tácita para resolver el contrato.
Art. 1826:
- Contratos producen sus efectos de inmediato por RG.
- Suponiendo que es exigible el cumplimiento, la disposición señala que en caso de
retardo de la entrega (por plazo determinado), por hecho o culpa. Acción resolutoria
por incumplimiento con indemnización de perjuicios.
Parte de la doctrina señala que esta ley es excepcional, pues los factores de imputación solo
son requisitos para la indemnización de perjuicios.

Artículos relevantes
Art. 1546: “Los contratos deben ejecutarse de buena fe, y por consiguiente obligan no sólo
a lo que en ellos se expresa, sino a todas las cosas que emanan precisamente de la
naturaleza de la obligación, o que por la ley o la costumbre pertenecen a ella.”
- Establece la buena fe objetiva, que puede obligar a otras cosas más allá de las
expresadas. Esto mediante la integración contractual realizada por el juez, quien
debe dar una solución cuando la ley no aparezca formulada explícitamente.
Art. 1554: “La promesa de celebrar un contrato no produce obligación alguna; salvo que
concurran las circunstancias siguientes:
1ª. Que la promesa conste por escrito;
2ª. Que el contrato prometido no sea de aquellos que las leyes declaran ineficaces;
3ª. Que la promesa contenga un plazo o condición que fije la época de la celebración del
contrato;
4ª. Que en ella se especifique de tal manera el contrato prometido, que sólo falten para que
sea perfecto, la tradición de la cosa, o las solemnidades que las leyes prescriban.
Concurriendo estas circunstancias habrá lugar a lo prevenido en el artículo precedente.”
- Establece el contrato de promesa.
Art. 1478: “Son nulas las obligaciones contraídas bajo una condición potestativa que
consista en la mera voluntad de la persona que se obliga.
Si la condición consiste en un hecho voluntario de cualquiera de las partes, valdrá.”
Art. 1793: “La compraventa es un contrato en que una de las partes se obliga a dar una cosa
y la otra a pagarla en dinero. Aquélla se dice vender y ésta comprar. El dinero que el
comprador da por la cosa vendida, se llama precio.”
Art. 1808: “El precio de la venta debe ser determinado por los contratantes.
Podrá hacerse esta determinación por cualesquiera medios o indicaciones que lo fijen.
Si se trata de cosas fungibles y se vende al corriente de plaza, se entenderá el del día de la
entrega, a menos de expresarse otra cosa.”
Art. 1809: “Podrá asimismo dejarse el precio al arbitrio de un tercero; y si el tercero no lo
determinare, podrá hacerlo por él cualquiera otra persona en que se convinieren los
contratantes; en caso de no convenirse, no habrá venta.
No podrá dejarse el precio al arbitrio de uno de los contratantes.”
Art. 1815: “La venta de cosa ajena vale, sin perjuicio de los derechos del dueño de la cosa
vendida, mientras no se extingan por el lapso de tiempo.”
Art. 1816: “La compra de cosa propia no vale: el comprador tendrá derecho a que se le
restituya lo que hubiere dado por ella.
Los frutos naturales, pendientes al tiempo de la venta, y todos los frutos tanto naturales
como civiles que después produzca la cosa, pertenecerán al comprador, a menos que se
haya estipulado entregar la cosa al cabo de cierto tiempo o en el evento de cierta condición;
pues en estos casos no pertenecerán los frutos al comprador, sino vencido el plazo, o
cumplida la condición.
Todo lo dicho en este artículo puede ser modificado por estipulaciones expresas de los
contratantes.”
Art. 1826: “El vendedor es obligado a entregar la cosa vendida inmediatamente después
del contrato o a la época prefijada en él.
Si el vendedor por hecho o culpa suya ha retardado la entrega, podrá el comprador a su
arbitrio perseverar en el contrato o desistir de él, y en ambos casos con derecho para ser
indemnizado de los perjuicios según las reglas generales.
Todo lo cual se entiende si el comprador ha pagado o está pronto a pagar el precio íntegro
o ha estipulado pagar a plazo.
Pero si después del contrato hubiere menguado considerablemente la fortuna del
comprador, de modo que el vendedor se halle en peligro inminente de perder el precio, no
se podrá exigir la entrega aunque se haya estipulado plazo para el pago del precio, sino
pagando, o asegurando el pago.”
Art. 1837: “La obligación de saneamiento comprende dos objetos: amparar al comprador
en el dominio y posesión pacífica de la cosa vendida, y responder de los defectos ocultos de
ésta, llamados vicios redhibitorios.”
Art. 1857: “Se llama acción redhibitoria la que tiene el comprador para que se rescinda la
venta o se rebaje proporcionalmente el precio por los vicios ocultos de la cosa vendida, raíz
o mueble, llamados redhibitorios.”
Art. 1858: “Son vicios redhibitorios los que reúnen las calidades siguientes:
1a. Haber existido al tiempo de la venta;
2a. Ser tales, que por ellos la cosa vendida no sirva para su uso natural, o sólo sirva
imperfectamente, de manera que sea de presumir que conociéndolos el comprador no la
hubiera comprado o la hubiera comprado a mucho menos precio;
3a. No haberlos manifestado el vendedor, y ser tales que el comprador haya podido
ignorarlos sin negligencia grave de su parte, o tales que el comprador no haya podido
fácilmente conocerlos en razón de su profesión u oficio.”
Art. 1861: “Si el vendedor conocía los vicios y no los declaró, o si los vicios eran tales que el
vendedor haya debido conocerlos por razón de su profesión u oficio, será obligado, no sólo
a la restitución o la rebaja del precio, sino a la indemnización de perjuicios; pero si el
vendedor no conocía los vicios ni eran tales que por su profesión u oficio debiera
conocerlos, sólo será obligado a la restitución o la rebaja del precio.”
Art. 1862: “Si la cosa viciosa ha perecido después de perfeccionado el contrato de venta, no
por eso perderá el comprador el derecho que hubiere tenido a la rebaja del precio, aunque
la cosa haya perecido en su poder y por su culpa.
Pero si ha perecido por un efecto del vicio inherente a ella, se seguirán las reglas del artículo
precedente.”
Art. 1868: “Si los vicios ocultos no son de la importancia que se expresa en el número 2.º
del artículo 1858, no tendrá derecho el comprador para la rescisión de la venta sino sólo
para la rebaja del precio.”

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