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La ley 189-11 establece un procedimiento abreviado de embargo inmobiliario para acreedores hipotecarios con el fin de impulsar el mercado hipotecario y de viviendas de bajo costo en la República Dominicana. Sin embargo, existe controversia sobre si solo los acreedores de créditos provenientes de fideicomisos pueden utilizar este procedimiento o si cualquier acreedor hipotecario puede hacerlo. Mientras algunas cortes sostienen la primera postura, la Suprema Corte de Justicia concluyó que cualquier acreedor que h
La ley 189-11 establece un procedimiento abreviado de embargo inmobiliario para acreedores hipotecarios con el fin de impulsar el mercado hipotecario y de viviendas de bajo costo en la República Dominicana. Sin embargo, existe controversia sobre si solo los acreedores de créditos provenientes de fideicomisos pueden utilizar este procedimiento o si cualquier acreedor hipotecario puede hacerlo. Mientras algunas cortes sostienen la primera postura, la Suprema Corte de Justicia concluyó que cualquier acreedor que h
La ley 189-11 establece un procedimiento abreviado de embargo inmobiliario para acreedores hipotecarios con el fin de impulsar el mercado hipotecario y de viviendas de bajo costo en la República Dominicana. Sin embargo, existe controversia sobre si solo los acreedores de créditos provenientes de fideicomisos pueden utilizar este procedimiento o si cualquier acreedor hipotecario puede hacerlo. Mientras algunas cortes sostienen la primera postura, la Suprema Corte de Justicia concluyó que cualquier acreedor que h
La Ley 189-11 sobre el Desarrollo del Mercado Hipotecario y el Fideicomiso en la
Repú blica Dominicana, surge con la finalidad de impulsar el crecimiento de mú ltiples sectores del país, especialmente el sector construcció n, econó mico y financiero, incorporando al ordenamiento jurídico dominicano la figura del fideicomiso, así como otros nuevos instrumentos de valores. Con la promulgació n de esta ley, el Estado dominicano sienta las bases para incentivar proyectos habitacionales de bajo costos mediante la participació n del sector privado y la utilizació n de los fondos de pensiones creados por la Ley de Seguridad Social, al tiempo que fomenta el ahorro en la població n para la obtenció n de su primera vivienda, en aras de proveer a miles de familias el acceso a una vivienda digna y así aportar soluciones a uno de los problemas sociales de mayor relevancia que afecta a la sociedad dominicana, el déficit habitacional. De la mano con estas innovaciones, a fin de reducir los riesgos y garantizar los créditos otorgados por las instituciones de intermediació n financiera, la ley consagra en sus artículos del 149 al 171 un procedimiento especial de ejecució n inmobiliaria para acreedores hipotecarios. A pesar de que la ley 189-11, en el artículo 149, establece que respecto a este tipo de ejecució n inmobiliaria “podrá n optar cualesquiera tipos de acreedores hipotecarios, […] sin importar el tipo de la acreencia garantizada”, el referido embargo abreviado ha generado mucha controversia en el á mbito jurídico, específicamente sobre la cuestió n de si exclusivamente pueden beneficiarse de este procedimiento expedito y sumario, los acreedores cuyos créditos provengan de una fiducia, o si, por el contrario, puede ser utilizado por todo acreedor hipotecario sin importar la naturaleza del crédito que origine la ejecució n inmobiliaria. A propó sito de la referida polémica en cuanto a la aplicació n de esta ley, es menester destacar que la postura formalista es la que sostiene la tesis de que se trata de una ley especial que beneficia a un sector específico y, por ende, los artículos que consagran la ejecució n inmobiliaria deben ser interpretados en armonía con el objetivo principal del legislador, que es incentivar el mercado hipotecario de viviendas econó micas a través del fideicomiso. Por lo que, todo crédito cuya génesis no sea el negocio de la fiducia, no está amparado por el procedimiento abreviado consagrado en esta ley.
Al respecto, la Tercera Sala de la Cá mara Civil y Comercial del Juzgado de Primera
Instancia del Distrito Judicial de Santiago, con motivo de una demanda incidental en nulidad de embargo inmobiliario, ha juzgado que una entidad financiera puede utilizar este procedimiento de embargo abreviado, siempre y cuando “sea autorizada por la Superintendencia de Bancos para realizar este tipo de contratos; el contrato debe ser realizado al amparo de la referida ley y el objeto del contrato debe ser para la adquisició n de viviendas de bajo costo, con fondos destinados a esos fines, de conformidad con el espíritu de la ley, pues en caso contrario, dicha entidad financiera deberá llevar su procedimiento de embargo inmobiliario al amparo de la Ley 6186 sobre Fomento Agrícola, de fecha 12 de febrero del añ o 1963 …”.1.-
Contrario a lo expuesto, se encuentra la posició n extensiva, segú n la cual el referido
procedimiento de embargo abreviado es aplicable a la ejecució n de cualquier hipoteca convencional, indistintamente del crédito que origine la misma, toda vez que, el espíritu legislativo de la referida normativa legal es, precisamente, crear herramientas que faciliten el desarrollo del mercado hipotecario, así como también, simplificar los procedimientos de ejecució n inmobiliaria. Por consiguiente, todo lo que contribuya a la dinamizació n del mercado hipotecario y de valores se encuentra dentro del á mbito de aplicació n de dicha ley, sin importar que verse sobre un fideicomiso o no. En vista del debate y de la confusió n que han creado los artículos sobre el procedimiento de ejecució n abreviado, la Suprema Corte de Justicia, como era de esperarse, con miras a solucionar, de una vez y por todas, la ambigü edad en la redacció n de los artículos del 149 al 172 de la ley, se pronunció al respecto concluyendo que “… el procedimiento especial de ejecució n inmobiliaria puede ser utilizado por todo acreedor que haya constituido una hipoteca convencional, indistintamente del tipo o naturaleza de la acreencia garantizada, y ha de ser aplicado en todos los embargos inmobiliarios que se instrumenten a causa de la ejecució n de una hipoteca convencional”.2.- Si bien es cierto que la anterior motivació n fue muy genérica, pues la Suprema Corte de Justicia apenas transcribió los artículos 149 y 150, y se basó , como sostiene la Primera Sala, en el mandato expreso de los citados artículos de la normativa legal, no menos cierto es que saludamos dicha decisió n por desvelar el sentido exacto y cabal de esta norma jurídica, primordialmente por proveer al ordenamiento jurídico dominicano de la solució n má s justa y adecuada a la realidad social, preservando incalculables derechos y garantías que consolidan nuestro Estado Democrá tico.
1.- Sentencia Civil nú m. 367-2018- SINC-00017, de fecha 16 de marzo de 2018, emitida
por la Tercera Sala de la Cá mara Civil y Comercial del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Judicial de Santiago. Pá g. Nú m. 15. 2.- Sentencia nú mero 1226, de fecha 28 de junio de 2017, emitida por la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia. http://poderjudicial.gob.do/Reportepdf/reporte2011- 5038.pdf
Problemática actual de los productos financieros complejos: Especial referencia a la nulidad por incumplimiento contractual del empresario. A la luz de la jurisprudencia del TS y el TJUE