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Ud. forma parte de un grupo de profesionales que desea postular a fondos estatales para
desarrollar un proyecto que permita estudiar si ha ocurrido un aumento de cáncer a la piel en
relación a la exposición a radiación UV, para ello le han encargado que escriba el marco teórico
biológico del proyecto, el cual no puede exceder más de 5 páginas.
Esta sección debe contener la exposición general del problema y su relevancia como objeto de
investigación. Debe incluir una descripción de lo que es la radiación UV, qué daños puede
producir a nivel celular, qué consecuencias puede traer ese daño, cómo se relaciona con el
cáncer y justificar bien la importancia de realizar el estudio.
Introducción
En el año 2016 el cáncer en Chile fue la segunda causa de muerte luego de las enfermedades
del sistema circulatorio. En cuanto a las proyecciones de mortalidad, cada año mueren más
personas por cáncer y se espera que hacia el año 2023, el cáncer sea la primera causa de
muerte en el país (Ministerio de Salud [MINSAL], 2018) El cáncer primario de piel es el más
frecuente de todos los cánceres y va aumentando la incidencia a pesar de que su prevención
es muy fácil.
Los rayos UV son los rayos invisibles que forman parte de la energía que viene del sol. La
radiación ultravioleta que llega a la superficie de la Tierra se compone de dos tipos de rayos
que se llaman UVA y UVB. Esta proviene también de lámparas solares y camillas de bronceado.
Es posible que a su exposición produzca daños en la piel, envejecimiento prematuro, cause
melanoma y otros tipos de cáncer de piel. También causa problemas en los ojos y el sistema
inmunitario. Los especialistas de la piel recomiendan que las personas usen filtros solares que
protejan la piel de ambas clases de radiación ultravioleta. En el campo de la medicina, la
radiación ultravioleta también proviene de lámparas o rayos láser especiales y se usa para
tratar ciertas afecciones de la piel como soriasis, vitiligo y tumores de la piel causados por el
linfoma cutáneo de células T. También se llama radiación UV. (Instituto Nacional del Cáncer
[NIH], 2018).
La mayoría de los casos de cáncer de piel son provocados por la exposición excesiva a los rayos
ultravioleta (UV) del sol, las camas bronceadoras o las lámparas solares. Los rayos UV pueden
causar daño a las células de la piel. A corto plazo, este daño puede provocar una quemadura
solar. Con el tiempo, el daño de los rayos UV se acumula, causando cambios en la textura de la
piel, envejecimiento prematuro de la piel y, a veces, cáncer de piel. Los rayos UV también se
han vinculado a afecciones de los ojos, como cataratas. (Centros para el Control y la
Prevención de Enfemerdades [CDC], 2022)
El cáncer se origina cuando las células del cuerpo comienzan a crecer sin control. Las células de
casi cualquier parte del cuerpo pueden convertirse en cáncer y pueden entonces extenderse a
otras áreas del cuerpo.
En Chile se registran anualmente unos 40 mil nuevos casos de cáncer de piel, lo que lo sitúa en
el tercer lugar entre los cánceres que más afectan a los chilenos. Y en la última década se han
contabilizado más de 2 mil muertes asociadas a esta enfermedad.
Si agrega que la esperanza de vida de la población seguirá aumentando en los próximos años,
es probable que estos números también continúen aumentando. Esto significa que el área de
la salud enfrenta enormes desafíos y una gran responsabilidad con cada uno de los pacientes.
Muchas personas creen que los rayos UV de las camas bronceadoras no son perjudiciales, pero
esto no es cierto. Las lámparas solares emiten UVA, y también rayos UVB comúnmente. Tanto
los rayos UVA como los UVB pueden causar daños a la piel a largo plazo y pueden contribuir al
cáncer de piel. El uso de camas bronceadoras ha sido asociado con un mayor riesgo de
melanoma, especialmente si se comenzó a usar estas camas antes de los 30 años de edad. La
mayoría de los médicos y organizaciones de la salud no recomienda el uso de las camas
bronceadoras ni las lámparas de sol.
Las lámparas UV pequeñas también se utilizan en los salones de uñas (o en casa) para secar
algunos tipos de esmalte de uñas. Estas lámparas emiten rayos UVA. La cantidad emitida es
mucho menor que la de las camas de bronceado, y se cree que el riesgo de cáncer de piel de
estas lámparas es bajo. Aun así, para estar seguros, algunos grupos de expertos recomiendan
aplicar protector solar a las manos antes de usar una de estas lámparas. ( American Cancer
Society, 2019).
Los rayos ultravioleta (UV) son sin duda una causa principal de melanoma. Los rayos UV
pueden dañar el ADN en las células de la piel. Algunas veces este daño afecta a ciertos genes
que controlan la manera en que las células crecen y se dividen. Si estos genes ya no funcionan
adecuadamente, las células afectadas pueden convertirse en células cancerosas. (American
Cancer Society, 2019).
La mayor parte de los rayos UV procede de la luz solar, pero cierta cantidad puede proceder de
fuentes artificiales, tales como las camas bronceadoras. Algunos daños en el ADN causados por
la exposición a los rayos UV pueden ocurrir en los pocos años antes de que aparezca el cáncer,
aunque gran parte de él podría deberse a exposiciones que ocurrieron muchos años antes. Los
niños y los jóvenes a menudo se exponen excesivamente a la intensa luz solar que quizá no dé
lugar a un cáncer hasta dentro de muchos años, o incluso décadas más tarde. (American
Cancer Society, 2019).
El término de cáncer de piel incluye tumores de diversa estirpe celular y diferente agresividad
y pronóstico. Así, tenemos: (Cabrera Morales, C. M., & López-Nevot, M. A., 2006)
Carcinoma basocelular.
Carcinoma espinocelular o epidermoide.
Melanoma maligno.
Adenocarcinoma de glándulas sebáceas.
Sarcomas y linfomas.
Número estimado de casos incidentes y defunciones Chile, ambos sexos, todas las edades
(melanoma de la piel) Fuente: International Agency for Research on Cancer, 2020
Incidencia de cáncer según tipo en Chile
Aunque el melanoma es poco común entre los tipos de cáncer de piel, se clasifica como una de
las enfermedades más peligrosas debido a su alta probabilidad de diseminarse a otras partes
del cuerpo y su rápido crecimiento. De ahí la importancia de la detección temprana y la de
realizar estudios que muestren datos duros con respecto al cáncer de piel, ya que al ser
detectada en una etapa inicial puede tener un tratamiento precoz y permitir prácticamente la
curación de la mayoría de los casos y, por lo tanto, una disminución de los casos mortales que
provoca.
La mayoría de los casos de melanoma (y otros tipos de cáncer de piel) se pueden prevenir. La
mejor manera de reducir el número de cánceres de piel, así como el dolor y el número de
muertes debido a esta enfermedad, consiste en educar al público, especialmente a los padres,
sobre los factores de riesgo y las señales de advertencia. (American Cancer Society, 2019).
Dado lo anterior es importante mejorar los medios de prevención primaria relacionados con la
protección de la piel, concientizar a la población para que cuide su piel y consulte al médico
cuando corresponde, pero uno de los puntos más importantes para la detección temprana y
para conocer el panorama de los casos de cáncer de piel en el país, es que se inyecten recursos
para fomentar la formación de profesional en los centros asistenciales (por ejemplo: médicos
no dermatólogos para la detección de tumores sospechosos en la piel), perfeccionar los
métodos diagnósticos e implantar nuevas tecnologías como la teledermatología para una
derivación oportuna.
Referencias bibliográficas
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04_152&key=total&sex=0&cancer=39&type=0&statistic=5&prevalence=0&population
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