ÁGORA

ALEJANDRO AMENÁBAR

Ágora es una película que nos muestra fielmente la sociedad del Egipto del siglo IV.
En este momento histórico, la ciudad de Alejandría está dominada política y
económicamente por el Imperio Romano. En sus calles conviven peligrosamente
ciudadanos paganos y cristianos.
Observamos que los paganos, o politeístas, luchan por mantener la sabiduría del
Mundo Antiguo gracias a la figura de Hipatia. Es una brillante astrónoma, hija del
gobernador de la ciudad. Entre sus discípulos se encuentra Orestes, que lucha por
conseguir su corazón además de su sabiduría. El esclavo de Hipatia, Davo, también
siente un secreto amor por ella.
El imparable ascenso de los cristianos se hace patente en su creciente influencia
sobre la sociedad. En ambos bandos hay ciudadanos tolerantes, que intentan convivir
con los demás haciendo gala del uso de la razón, ya que un enfrentamiento sólo puede
tener consecuencias desastrosas para todos. Pero también hay un gran sector social,
tanto pagano como cristiano, que día a día va fraguando el odio hacia los contrarios y el
deseo de opresión.
Cuando los cristianos llevan a cabo las ofensas contra los dioses paganos, insultando
y destruyendo sus estatuas, los politeístas, todavía en el poder, llevan a cabo
represiones. Finalmente estalla un violento enfrentamiento religioso.
Cuando los cristianos llegan al poder, desde el mismo centro de gobierno del
Imperio Romano, los paganos son reprimidos. La masa social ataca la legendaria
biblioteca de Alejandría, destruyendo casi toda la memoria cultural del Mundo Antiguo.
Los paganos, entre ellos Hipatia y sus discípulos, se ven obligados a huir para salvar
sus vidas, e intentan llevarse algunos documentos.
Davo se debate entre continuar al lado de Hipatia o unirse a los cristianos y
deshacerse de su condición de esclavo. Finalmente decide quedarse en la ciudad a las
órdenes de los jefes sociales cristianos.

Pasados los años, muerto el padre de Hipatia, Orestes forma parte del gobierno de la
ciudad y se ha convertido al cristianismo. Hipatia permanece a su lado, pero fiel a su
creencia: la ciencia.
Con el avance político y cultural del cristianismo, cada vez va quedando menos de
la sociedad típica de la Antigüedad. Con la conversión de los paganos y la destrucción
de sus documentos de erudición, casi han desaparecido sus creencias, sus
descubrimientos astronómicos, su arte y su estructura social.
Hacia el final de la película, los gobernantes cristianos denuncian la participación de
Hipatia en las decisiones políticas, en calidad de consejera de Orestes. El obispo desafía
a Orestes a cesar su protección sobre Hipatia, y demostrar así que no se ha convertido al
cristianismo por interés político. Tras una ligera vacilación, el egipcio no renuncia a ella
y, en consecuencia, es asesinado. Sin la presencia de Orestes, Hipatia corre un gran
peligro, y es condenada a morir lapidada. Pero Davo, al servicio de las órdenes
cristianas, ha asesina degollándola, para evitarle el sufrimiento y la humillación de la
lapidación. Aun así, su cuerpo es mutilado y exhibido por la ciudad, para enseñar a los
demás que no se deben cuestionar las leyes y creencias cristianas.
REFLEXIÓN

Esta película lleva a la reflexión sobre la eterna lucha entre culturas para dominarse
unas a otras, lo que va marcando sin duda la evolución histórica de la Humanidad.
Bien es verdad que encuentro una importante carga subjetiva en contra del
cristianismo, pues la película pone de manifiesto la violencia y la intolerancia que les
lleva al dominio de las demás culturas y religiones en todo el mundo (pensemos por
ejemplo en la opresión del Islam en nuestra Península). Esto se debe a que la religión
cristiana se auto consideraba única y necesariamente universal, por lo que había que
eliminar a las demás.
Pero esto ocurre con la mayoría de las religiones, pues a lo largo de la historia ha
habido un sin número de guerras santas, jihad, etc, cada una bajo el lema de un dios
diferente. Por eso, aunque son los cristianos los que destruyen la Biblioteca de
Alejandría, creo que de haber estado cambiadas las tornas, los paganos habrían actuado
igual.

En lo que se refiere a la educación, el método de enseñanza de Hipatia, ya en el

siglo IV, era tremendamente eficaz. En las escenas en que la egipcia está con sus
discípulos, se ve claramente que llegan a sus conclusiones por medio de la razón. No
hay nadie que esté aprendiendo nada de memoria o copiando apuntes, sino que Hipatia
hace preguntas y los demás responden lo que ellos creen. Luego, ella hace otras
preguntas para que sus discípulos entiendan por qué su primera respuesta era errónea, y
así sucesivamente, hasta que entienden todo. Este método tiene su origen en el modelo
de enseñanza que utilizaba el griego Sócrates, casi ocho siglos antes: la mayéutica.
Sócrates nunca exponía sus conocimientos magistralmente, sino que hacía preguntas y
dejaba que el alumno dedujera los conocimientos a partir de las premisas que ya sabía.

Creo que en el ámbito docente, muchas metodologías que se utilizan actualmente

deberían mirar atrás, a la época de la razón de la Antigüedad, y replantearse los
principios y valores que van a seguir en los distintos procesos de enseñanza-aprendizaje.