Está en la página 1de 8

Epopeya de la Vendée

RECOMENDACIÓN: YO HAGO UNA LECTURA MUY SUOERFICIAL, LA IDEA ES LEER EL LIBRO

Para empezar, lo que vamos a ver es la guerra de la Vendée. Se habla de guerra porque un levantamiento
estratégicamente pensado, al ataque político- religioso tradicional (derribar el altar y el trono) que inicia
con la revolución cultural hubo una respuesta integra de toda una región, por Dios y por el rey.
Se habla de 5 guerras de la Vendée que se extienden del siglo XVIII al siglo XIX. Nosotros veremos,
principalmente la primera de estas guerras por ser la que mejor refleja el espíritu de la Vendée, y en las
que aparecen los hombres que darán sentido plenario a la gesta. También algo de la Segunda.
1° GUERRA
Antecedentes:
Ante todo hay que tener en cuenta ciertas cosas para comprender porque hubo un levantamiento en esta
zona. No es posible comprender tal reacción sin ver la cosmovisión que allí reinaba.
La zona del levantamiento, implico……
Se cree que una de las causas y tal vez la principal, fue la evangelización que San Luis María realizó allí. La
gran mayoría de las parroquias insurrectas fueron evangelizadas por el Santo o los padres de las
instituciones que él había fundado. Esto tuvo lugar practicamente durante todo el siglo XVIII.
Cuando el Santo llega a la zona del oeste se siente muy dolido al ver la vida de tibieza. Algo parecido
sucedía con los fieles de la zona.
Indiferencia en materia religiosa largos tiempo en Francia
Así San Luis María predicaba con gran oratoria principalmente la devoción al Sagrado Corazón, a la Santa
Eucaristía, el amor a la cruz (de hecho fundó una cofradía que se llamaba “amigos de la Cruz”) y sobretodo
el amor a la Santisima Virgen y el rezo del Rosario, a tal punto que decía que a Cristo se debía llegar por
ella, y la renovación de las promesas del Bautismo.
Por otra parte fundó la Compañía de María, constituida por sacerdotes tenía como misión recorrer las
parroquias bajo la custodia de María Santísima, enseñando el catecismo a los pobres aldeanos. Además
vivían en pobreza estricta confiados en la divina Providencia. Las Hermanas de la Sabiduría. Todo esto
contribuyó a que la obra que él comenzó, se consolidase posteriormente, así hasta llegar al año 1789. Para
ese entonces los padres de esta zona eran en su mayoría los de la Compañía.
Inculcó en los nativos del oeste de Francia el espíritu de sacrificio y de renuncia desde el campesino más
humilde hasta el noble del castillo. Cuando llegó el momento de la Constitución civil del clero la respuesta
inmediata aquí fue simplemente “no podemos”, sin mucho análisis del tema.
Leva: 12 de julio de 1792. Comienzan los problemas en la zona de la vendée
Por Dios y por el Rey
Pro Deo
La Vendée fue ante todo una respuesta al ataque feroz que se hacía a la religión, fue la defensa de la fe la
razón principal. Esto era algo que no cabía en la cabeza de los revolucionarios, ellos sabían que había
motivos religiosos pero asignaban tal rebelión a motivos socio-económicos.
Tratóse, pues, de una guerra teológica. Un capítulo más de aquella pugna entre las dos ciudades que señala
San Agustín: por un lado la impiedad, el sacrilegio, y la masacre; del otro los mártires, sean los que mueren
empuñando un arma, sea las mujeres y niños masacrados.
Durante tres años vemos constantes ataques a la Iglesia por el lado “legal”. La confiscación de los bienes
del clero, la supresión de las órdenes religiosas y votos monásticos, la Constitución civil para el clero que
exigía juramento, en el 1792 el exilio de sacerdotes. Todo esto cayo muy mal en Francia pero si bien otras
zonas se limitaron a protestar, aquí en la Vendée llegó a la confrontación bélica. Hay que comprender que
esto no fue sino el broche final. Durante estos años hubo protestas muy fuertes, acompañadas de
peregrinaciones y procesiones a Santuarios pidiendo el cese de tales injusticias, aunque hubo
manifestaciones violentas arrojando piedras a guardias que cerraban Iglesias y autoridades que venían a
poner curas constitucionales.
Tanto más edifico a los vendeanos el espíritu con el que los sacerdotes refractarios encararon la situación
“si los republicanos supiesen cuan contento estoy de ser perseguido por una buena causa”
Cuando los vendeanos conquistaban un lugar lo primero que hacían era derribar el árbol de la libertad y
reabrir la Iglesias para que los buenos sacerdotes (refractarios) les celebrasen misa.
Iconico: Un vendeano que defiende el Calvario ( cruces que hacía poer san Luis Maria en distintas zonas del
campo para que los campesinos, al verla, recordasen a Cristo crucificado). Pag 82
El lema de La Rochejaquelain era pro aris, rege, focis. Tal era la divisa que se grababa en letras de oro en la
bandera blanca de combate.
Pro rege
Hemos dicho en algún momento que para el francés el rey era un padre que se había comprometido en su
consagración a cuidar de su pueblo, era el descendiente de Clodoveo. Los últimos siglos en Francia, a pesar
de ciertos desmanes, no habían padecido la tiranía. Por ello el amor al rey no se vió traicionado.
Por otra parte había un fundamento religioso en el amor y reverencia que se tributaba al rey: era vicario de
Cristo en el poder temporal, de aquí que cualquier poder usurpador los obligaba a combatir en conciencia.
De todos modos debe quedar en claro que el motivo fundamental de la guerra fue religioso. El vendeano
quería que le devolvieran su culto, sus sacerdotes.
Ejercito católico y real
Ante todo conviene dejar en claro que el levantamiento tuvo su iniciativa en el pueblo. El pueblo era
sencillo, laborioso y piadoso. No estaba corrompido por la literatura disolvente del siglo XVIII, algo
semejante dígase de la nobleza, no se hallaba contaminada por la frivolidad y prodigalidad de la época. En
esta pureza de costumbres y fe realizarán los actos más heroicos.
Cuando se dice pueblo se hace referencia al labriego, al artesano, incluso a algunos comerciantes. Ellos
querían ir pero necesitaban jefes que los guiasen fue así que recurrieron al noble.
Descripción del noble: Por otra parte la nobleza de aquella zona era muy distinta a la del resto de Francia,
estaba muy enraizada en su tierra, lo que le merecía un respeto generalizado. Vivía para su gente, familia,
campesinos, daban asilo en sus castillos a los pobres de la zona. En verdad que traía el recuerdo de la
nobleza de otros tiempos. Lejos de ella el boato que había en versalles, lo mismo se diga de los castillos, el
noble salía a la par de su criado, pag 91
Las poblaciones vendeanas se dividían en dos grupos porque no todos podían enrolarse en las filas para el
combate. Entonces había un sector no combatiente, que se dedicaba a atender los sembrados, levantar las
cosechas, y atender los animales. Además eran los encargados de dar aviso cuando se avecinaba el peligro.
En este sentido los molinos de los campos tenían un papel importante: funcionaban como torres de
vigilancia y como instrumentos para enviar mensajes con sus aletas. Había en este sector mujeres y niños
disfrazados de mendigos muchas veces que hacía de espías
El segundo grupo estaba constituido por los combatientes de armas, que comenzaban desde la edad de 13
años. El ejército contaba con un jefe, con un segundo comandante, y con varios generales que respondían
al comandante.
Composición: Cuando el enemigo se ponía en marcha, la población entraba en estado de alerta. Entonces
los capitanes mandaban tocar la campana a rebato, los campesinos dejaban su arado, tomaban la guadaña
o fusil, unas raciones de pan para varios días y se despedía de su familia. Luego se reunían en el punto
convemido previamente. En menos de 24 horas había un ejército formado.
Este ejército contaba con una gran sección de infantería, y una pequeña de caballería. Si bien esto último
se convertía más en un obstáculo que en una ventaja porque el terreno era muy complejo (la Vendée era
una zona en ese momento cargada de matorrales y pantanos, lo cual hacía muy dificultoso su tránsito. Esto
fue de gran ventaja para el vendeano que sabía escabullirse fácilmente.)
Las armas fueron en un principio guadañas, maquinas de podar, bastones, y algún fusil de caza. Solo con las
victorias fueron incorporando armas de fuego del bando contrario.
Se calcula que el ejército de la primera guerra estuvo constituido de 60.000 a 100.000 miembros, no es fácil
de determinar.
El ejercito de los blancos (así se hacían llamar por ser el color del rey) no tenía una vestimenta propia.
Generalmente usaban bombachas, una chaqueta de tela y un cinturón de lana. Además un estandarte con
la imagen del Sagrado Corazón o de la Virgen y las palabras “Dios y el Rey”
Cuando avanzaban por los campos y hallaban una cruz se detenían y arrodillaban para reza. Un dpia un jefe
quiso reprender a los soldados porque se perdía tiempo valioso, Lescure le dijo déjalos se hacen más
fuertes.
Otra vez se hallaban ante fuerzas superiores, decían ¡adelante, avancemos al cielo! Y se abalanzaban sobre
los batallones contentos de su rápido martirio.
Llevaban dos pistolas en la cintura, en la espalda colgaban el fusil, y el sable colgaba de una cuerda. Entre
ellos estaba prohibido la embriaguez, así como el juego y la riña. Aunque esto no les quitaba sus momentos
de baile y eutrapelia incluso en los momentos más oscuros. En general eran caballeros con los prisioneros.
Cuando terminaba la batalla todos eran atendidos amigos y enemigos.
El gran motor de todas sus acciones era el factor moral. Fruto de sus convicciones y de su espíritu
sobrenatural. Cuando se les pregunta ba a que tenían miedo decían solo a ofender a Nuestro Señor. En las
noches se juntaban las diversas secciones para la oración
A diferencia de los republicanos solian ser más valientes en la batallas y más benévolos en las victorias.
Cuando la batalla terminaba retornaban a sus hogares, allí los esperaban sus mujeres con el bebe en brazo
y una cosecha por levantar. Ellos no olvidaban sus tareas del campo (el vendeano era muy arraigado a su
tierra-edad media)
Espíritu católico:
Cada jefe tenía un sacerdote asesor, de hecho el mismo Papa nombró a un obispo Mons. Dol como asesor
ordinario de todo el ejército del oeste.
Un ejemplo de tantos es que todo los soldados se reunían en casa del noble luego de alguna batalla para
rezar el rosario de rodillas junto a sus jefes. Era una práctica que ejercitaban por lo general 3 veces al día.
Después de su primera derrota Cathelineau ordeno penitencias y oraciones públicas. Volvían al combate
cantando el Vexilla Regis.
Los vendeano conocían aquel mensaje del Sagrado Corazón a santa Margarita María: “Has saber al hijo
mayor del Sagrado Corazón que quiero reinar en su palacio y estar pintado en sus estandartes y grabado
en sus armas a fin de que quede victorioso de todos los enemigos de la Iglesia ”. Luis XIV no lo hizo. Pues
bien ellos cosieron la imagen del Sagrado Corazón sobre sus camisas.
En cuanto a los sacerdotes iban a las batallas pero no combatían, solo estaban para asistir espiritualmente,
administrar los sacramentos.
No todos los soldados eran ejemplares. Hubo pillajes y crueldades porque se exacerbaban al ver los
salvajismos cometidos por el adversario. Por lo general trataban de practicar la misericordia. Cuando
ocupaban una ciudad, se convertia en prisión de los azules. Para agosto del 93 había alrededor de 60000
prisioneros. Que hacer con ellos? Se les hacía jurar que no volverían a combatir y luego se los rapaba para
identificarlos.
Por otro lado es cierto que hubo jefes duros como Charette y stofflet a tal punto que sus huestes no
siempre dieron muestras de caridad con los prisioneros. Pero por otro lado esto no fue generalizado y
sistematico como sucedió con los azules. Estos últimos habían diseñado un sistema de terror con
abominaciones de todo tipo. Llegarian los días en que nos sabrían de que otro modo matar para no
aburrirse.
A los combatientes vendeanos los azules lo llamaran Brigands (salteador, pillo, bandido) lógicamente con
objeto de difamarlos por toda Francia. Más los blancos asumieron tal concepto quitándole todo contenido
despectivo y para distinguirse de los azules. ( a la luz de este segundo sentido debe entenderse el concepto
de bandido de la novela de Saint hermine de Rambure)
Dinámica de la guerra (1793)
1° período: En esta primera guerra podemos identificar tres etapas: del 12 de marzo al 29 de junio. Este
período se caracteriza por una expansión de los vendeanos de 10.000 km cuadrados, Todo comenzó con el
ofrecimiento de Cathelineau, hombre de pueblo, quien al enterarse de la arbitrariedad e la leva para
combatir en favor de la revolución, se puso al frente del levantamiento, fue así que conquistaron distintas
comunas repartidas en cuatro semi departamentos. La vendee, Deux Sevres, sur de loire inferior, y el
sudoeste de Maine et Loire. Durante la marcha a Cholet se unió a los soldados un grupo de soldados con
Stofflet a la cabeza, un antiguo soldado. Posteriormente se sumarian los soldados de los nobles
Bonchamps. Lescure y La Rochejaquelein.
Este período cerraría con la primer derrota seria en la ciudad de Nantes, baluarte de las fuerzas
republicanas de la región oeste. A partir de aquí la guerra tomaría otro rumbo.
2° período: 29 de junio a 18 de Octubre. Habrá en este período numerosas victorias y derrotas en ambos
bandos. Aquí aparece un personaje del lado de los azules, Westermann, quien introdujo la política de los
incendios masivos. Así llevarían tanques de combustibles, otro con cierto humo venenoso, a fin de quemar
todo tipo de maleza y los campos y castillos de aquella zona. La Convención había mandado el exterminio
de aquella raza rebelde, había que incendiar todo.
En estas circunstancias Inglaterra ofreció la ayuda a los soldados vendeanos. Recordemos que mucho había
preocupado a Europa la situación trágica por la que paso el rey y su posterior muerte, ahora entendían a
Luis XVII. Así Inglaterra puso su aporte en este punto. Allí se hallaba el Conde de Anjou, hermano de Luis
XVI.
Lamentablemente en el cierre de este período los jefes vendeanos comienzan a desentenderse.
Bonchamps iElbeé han muerto en combate, justo cuando el ejército republicano se estaba
reestructurando, LESCURE SE HALLABA HERIDO DE GRAVEDAD. fue entonces cuando los vendeanos
deciden aliarse con los chuanes, que se hallan en gran Bretaña.
3° período: Del 18 de octubre hasta el 23 de diciembre. Faltaba un jefe a la cabeza y le pidieron a Lescure
que tomara el lugar: Pero este se hallaba gravemente herido por lo que sugirió a La Rochejaquelein. Porese
entonces La Rochejaquelein tenía 21 años, no quería saber nada con comandar un ejército, sobre todo por
su edad. Sin embargo fue elegido por unanimidad.
Entonces se resolvió ir hacia el norte en lo que se conoció como viraje hacia el noroeste. La idea era
producir un levantamiento general en Bretaña, a la par que tenían ór objeto llegar a la zona de la Mancha
donde esperaban a los barcos Ingleses. El enemigo que era sagaz advirtió la peligrosidad de esta posible
alianza. Por o cual se produjo un ataque en Maguncia (a mitad de camino) con tropas a cargo de
Westermann. En este combate los vendeanos ya co LA Rochejaquelein al mando tendrán un triunfo parcial.
Continuaron su viaje al norte. El punto convenido de encuentro entre los vendeanos y los ingleses fue
granville. Comenzó el combate en esta zona, los vendeanos miraban hacia el mar. Pero nadie aparecía
En fin, no solo que los ingleses no aparecían, sino que Granville se resistía. Después de dos días de asedio y
viento que los ingleses no aparecían, resolvieron abandonar el combate y regresar a sus tierras maldiciendo
a los ingleses.
Lamentablemente desde aquíl el ejercito vendeano ira perdiendo constantemente soldados. Ya con la
resistencia de Granville le quedaban solo 7000 soldados. Ahora la persecución de Westermann que los
atacará mientras ellos tratan de cruzar el Loire los dejara en 2000 de los cuales muchos se hallaran heridos.
La ultima batalla se realizó en Savenay. Westermann se frotaba las manos esperando esta batalla, se
trataba de un combate de cuatro azules contra uno. Fue el 23 de diciembre de 1793.
Capitanes más relevantes:
Cathelineau: Nacido en Pin-en-Mauges. Un hombre de pueblo, conocía muy bien la zona porque siempre la
recorria en su carro haciendo encargos a domicilio. A su vez cantaba en el coro de la parroquia, era un
hombre fe sólida y virtudes. Aborrecía la revolución, por donde pasaba no dejaba de hablar a la gente en
contra de la situación. Pues bien, un día cayo un primo suyo comentándole lo de la leva y que se había
inscripto, Cathelineau calzó su pistola, el rosario a la cintura y se dirigió a la plaza para convocar a los
paisanos. Luego de pasar por la Iglesia y detenerse a rezar partieron para la cruzada, eran unos 28.
También hicieron tocar las campanas a rebato a fin de convocar más gente.
Cuando llegagor a jallais ubicado a unos 7 kilometros ya eran unos 500. Alli agarraron a los republicanos
por sorpresa, luego de que invadieron el pueblo, reabrieron la Iglesia y quitaron el pendón tricolor que allí
flameaba, asi la jornada transcurrió ocupando distintos poblados e incorporando gente. Al finalizar el día
ingresaron en la Iglesia para dar gracias a Dios..
Sin saberlo en otros lugares de la zona se realizaba el mismo levantamiento. Así por ejemplo Stofflet.
Cuando realizaron el sitio de Nantes cayó mortalmente herido, 14 días duro su agonía. Siempre tuvo la
compañía de un sacerdote.
Bonchamps: Fue cadete del ejercito de infantería. Al principio no se mostró hostil a la Revolución pero
pronto captó su perniciosidad. Fue así que en 1793 formo dos tropas de cazadores costeadas de su propio
peculio, lo que fueelnucleo del ejerdito vendeno.
Bonchamps era un hombre de personalidad sugestiva por ello su autoridad era omnímoda ante sus
soldados. Le favorecia el hecho de ser un hombre conocedor: legustaba la música, las matemáticas , el arte,
las ciencias, y su conversación era particularmente amena. Por otra parte ten´´ia una gran habilidad militar.
En una ocasión como los prisioneros eran numerosos, se preguntaron que hacer con ellos. En medio de la
furia porque los azules habían incendiado todo, desonrado alas mujeres y degollado alos hijos, los
vendeanos resolvieron encerrarlos en una Iglesia y hacerlos morir a cañonazos. Llegó a oídos de Bonchamp
semejante decisión, que en ese momento se hallaba gravemente herido en un lecho y dijo “yo he de morir,
la última orden que les doy, no manchéis nuestra causa con una masacre tan horrible, perdonad a los
enemigos”. Así sucedió. De los 5000 prisioneros, 4900 volvieron al combate. Posteriormente se corrió el
rumor de que fue un error tal decisión. Sea lo que fuere, en los jefes estaba bien en claro que se trataba de
una guerra cristiana imperada por la caridad. Algo similar sucedió con su castillo.
Murió bonchamps en una cabaña acompañado de un sacerdotde.
Henri de La Rochejaquelein: Siendo su padre coronel, entró de adolescente en el colegio militar. Participó
como integrante de la guardia personal del rey en el trágico 10 de agosto. Se caracterizaba por su actitud
enérgica y apasionada,lo cual lo hacía intrépido en los combates. Aun así no quiso saber nada cuando lo
eligieron como generalísimo, pero pronto mostró ciertas dotes que ni el conocía, sobre todo la capacidad
de encender los corazones delos soldados. De este hombre son aquellas celebres palabras “si avanzo
seguidme, si retrocedo matadme, si muero vengadme”.
Solía llevar un pañuelo rojo a la cintura domde ponía sus pistolas y otra en el cuello y un sombrero con
plumas blancas. En un combate los azules identificaron a este jefe por los pañuelos rojos que solía llevar.
Los blancos se enteraron y en vísperas del combate le pidieron que no lo usase. Poco caso hizo de ello La
Rochejaquelein por lo que el resto de los soldados optó por usar pañuelos rojos.
Lamentablemente a Henri de La Rochejaquelein le toco ek desenlace de la guerra. En la reunión de jefes
tanto el cmomo Bonchamps no estuvieron de acuerdo en apoyarse en los ingleses. Pero siendo la decisión
final Henri se dirigió a Granville. El resultado ya lo sabemos. Pero Henri no renunció a su cargo.
En una ocasión cayó muerto ante un soldado azul que le dio un disparo en la cabeza y al que él acababa de
hacer gracia. Tenía solo 22 años.
La guerra de la Vendée fue de los más grandes obstáculos que tuvo que enfrentar la revolucón. Fue una
lucha por altos ideales, por la religión y el derecho histórico, sostenida por sencillos labradores, que por
unanimidad y abnegación obtuvieron muchas victorias sobre grandes ejércitos, y que en su misma ruina
mostraron un glorioso heroísmo y en muchos casos intimidaron asus enemigos.
Un genocidio:
La idea de aniquilar la Vendee surgió en abril de 1793. El 1 de agosto la convención voto la destrucción de
la vendée: los bosques debían ser incendiados, los animales incautados, las viviendas confiscadas, las
cosechas segadas. Hasta el nombre sería cambiado después del exterminio de la población, se llamaría La
vengé.
El proceso necrofilico conoció varias etapas. En un principio se recurrió a gases asfixiantes,pero no resulto
demasiado. Luego la guillotina pero era demasiado lenta. Posteriormente se recurrió a los ahogos (tal
proceso consistía en embarcarlos en botes precarios que estaban diseñados para que en las zonas
profundas se desarmasen, así murieron multitudes. Posteriormente seimplemento un sistema de quema
los suficiente como para que los habitantes de la zona se quedasen sin viveres. Los graneros incendiados.
Se arrijaba a los cadáveres en hornos prefabricados para servirse luego de su grasa en los fusiles, o en los
hospitales. Asimismo se arrancaba la piel antes de tirarlos a los hornos a fin de usarla de pantalones.
Las columnas infernales de Tourreau: La mentalidad era esta “todos son culpables por el hecho de ser
vendeanos”. Las columnas de soldados pasaron una y otra vez sobre el suelo vendeano para no dejar nada
en pie. Las mujeres debían ser asesinadas por se rsurcos reproductores de una raza rebelde, los niños
asesinados porque no dejaban de ser un peligro a futuro.
Algunos soldados después de desventrar a las mujeres encintas llevaban a los niños en la punta de sus
bayonetas.
Dato. Estaban habitulmente borrachos tourreau, Huché. El trato dado a las personas en estas
circunstancias fueterrible. A una familia de 5 hijos por negarse a gritar viva la Republica, le cortaron la
lengua, le arrancaron los ojos y las orejas antes de asesinarlos. En otra ocasión los empalaban, los cortaban
en pedazos antes de darles el golpe final. La violación era algo frecuente: la mujer de Pouzages fue el
premio del ejército mayor. En este sentido hay libros enteros de los abusos cometidos en aquellas
ocasiones.
Heroismo: A la par de tales realidades no había respuestas sino heroicas. Si en el resto de Francia
sucedieron cosas grandiosas en este sentido, tanto má en el país de la Vendée. El msmo enemigo quedó
desconcertado, literalmente, hay numerosas cartas en que figuran su decepción.
Pag. 232
Balance general:
De los 815.000 habitantes de la Vendée solo quedaron 117.000, 25 años tardó en volver a ser habitada esta
zona.
Un autor habla de “victoria de los vencidos”, es decir, las consecuencias positivas que sucedieron a la
guerra. Así:
Consecuencias materiales y personales: Sabemos que la destrucción redujo la población a un 15 %.
Además las casas, los campos las iglesias quedaron en gran parte destruidas. Esto trajo una renovación de
las aldeas, en sus rutas, en sus iglesias, en sus hogares. Desde luego que no era una consecuencia queridad
por fue una mejora que siguió necesariamente
Consecuencias sociales: El campesino vendeano se vió necesariamente obligado a salir de su tierra natal,
desarraigarse para empuñar el arma. Ellos eran de alma tosca y medrosa, así se los describe. Pues bien el
combate los puso a prueba. Por otra parte es cierto que la relación del noble con el campesino era muy
cercana, distinta a la del resto de Francia, pero ir al combate como un solo cuerpo contribuyó a forjar la
relación en las generaciones posteriores.
Consecuencias religiosas: Por aquellos años (1793, 1794) las Iglesias estaban cerradas, el domingo
suprimido, los sacerdotes proscriptos. Por la paz de jaunaye (1795) se logró la libertad del culto, las
campanas volvieron a sonar, etc. en toda la zona
Además, sin duda que la fe de los vendeanos se acrisoló. Los padres contarían asus hijos los hechos
heroicos realizados por algún familiar, de hecho, no es de extrañar el gran numero de vocaciones que
siguieron en esta zona como en ninguna otra de Francia.
Se suele decir que la Vendée fue la ultima cruazada que ha tenido la Iglesia, cruzada en que se allá el
espíritu de Cristiandad que hubo alguna vez en la tierra, y que es cruzada que se prolongará en las gestas
de Mexico y de España. Como decían un soldado vendeano que defendía un calvario (cruz),con una
horquilla, que los guardias nacionales querían destruir, cuando ya había recibido 22 heridas. Le decían los
soldados “entrégate”, más eñ respondía “entrégame a mi Dios”.
Esto es aplicable a Mexico y a España

También podría gustarte