Está en la página 1de 21

Algunos marcos conceptuales para aplicar en Geografía Económica

Ana María Liberali*

Resumen

El presente artículo tiene como objetivo la enunciación de marcos conceptuales


destinados a su aplicación tanto en la enseñanza como en las investigaciones referentes a la
Geografía Económica.
Existe a nivel mundial y, desde ya en la Argentina, una tendencia a considerar que esta
disciplina sólo puede ser desarrollada a partir de meras estadísticas que, si bien son
imprescindibles en una primera etapa de todo conocimiento científico, no deben carecer de un
marco conceptual que les dé sentido.
Y si bien en este caso no se hace un desarrollo analítico de tales conceptos, se ponen
sobre el tablero formas no convencionales de interpretar la realidad que tienen en común la
adscripción a la teoría marxista.

GEOGRAFÍA ECONÓMICA – MARCOS CONCEPTUALES - MARXISMO

Abstract

The present paper has as objective the enunciation of conceptual frameworks destined to its
application both in the teaching as in the investigations referring to the Economic Geography.
There is a tendency at world level and, from Argentina, to consider that this discipline can only
be developed from mere statistics that, although they are essential in an early stage of all
scientific knowledge, should not lack a conceptual framework that makes sense.

*
Universidad Nacional de Mar del Plata
Co-directora del Grupo de Estudios Regionales
And although in this case an analytical development of such concepts is not done,
unconventional forms of interpreting the reality that have in common the ascription to Marxist
theory are put on the board.

ECONOMIC GEOGRAPHY - CONCEPTUAL FRAMEWORKS - MARXISM

Introducción

El presente artículo tiene como objetivo la enunciación de marcos conceptuales


destinados a su aplicación tanto en la enseñanza como en las investigaciones referentes a la
Geografía Económica.
Existe a nivel mundial y, desde ya en la Argentina, una tendencia a considerar que esta
disciplina sólo puede ser desarrollada a partir de meras estadísticas que, si bien son
imprescindibles en una primera etapa de todo conocimiento científico, no deben carecer de un
marco conceptual que les dé sentido.
Y si bien en este caso no se hace un desarrollo analítico de tales conceptos, se ponen
sobre el tablero formas no convencionales de interpretar la realidad que tienen en común la
adscripción a la teoría marxista.
Los temas a considerar serán el proceso social de producción según Carlos Marx, la
formación social y la formación espacial según Horacio Sormani, las relaciones centro-periferia
según la CEPAL, los modos de producción según Marx y Ernest Laclau, y la supuesta dicotomía
urbano-rural según Henrie Lefebvre.

1. El proceso social de producción

“El entorno material que rodea (al hombre) no es algo directamente dado desde toda
una eternidad y constantemente igual a sí mismo sino el producto de la industria y del estado
social, en el sentido de que es un producto histórico, el resultado de la actividad de toda una
serie de generaciones, cada una de las cuales se encarama sobre los hombros de la anterior,
sigue desarrollando su industria y su intercambio y modifica su organización social con
arreglo a las nuevas necesidades” (Marx, La Ideología Alemana, 1959).
Parecería que la contaminación fuera un fenómeno que el “hombre” como ser biótico,
uno más del ecosistema global, generara sobre la naturaleza prístina sólo por maldad intrínseca,
como fiel descendiente de Caín. Se despoja así al “hombre” de la sociedad, aquel contexto en
el cual le toca vivir y que lo modifica y condiciona a su antojo, por más que intente, a veces,
evadirse. Sin embargo, el lugar social que se ocupará no está desligado del económico, y por
ende, tampoco del “ambiente natural” del cual se podrá disponer. Es así como los aspectos
socio-económicos son en sí mismos inseparables de los físico-ecológicos.
Cada sociedad tiene una organización interna que permite lograr a algunos de sus
miembros, los objetivos más trascendentes e imprescindibles, los de la subsistencia; mientras
que a otros, les otorga beneficios materiales muy superiores, como hiperconsumo de bienes
suntuarios. Así es como una sociedad, a partir del desarrollo de determinado modo de
producción, hace uso y abuso de los elementos provenientes de la naturaleza que tiene a su
alcance. Por lo tanto, la contaminación de la naturaleza o del medio, del ambiente, del hábitat
o como se lo prefiera denominar, dependerá de las necesidades de lograr beneficios económicos
inmediatos a menores costos, por parte de quienes hegemonizan los medios de producción.
Si bien podría llegarse a la conclusión, de que por estar presentes en la corteza terrestre,
todos contaminamos, los beneficios, las responsabilidades y los costos, serán diferentes, tanto
como las desigualdades socio-económicas. Habrá entonces quienes concentrarán los beneficios
y otros que sólo pagarán los costos.
Las manifestaciones geográficas no son más que un espejo de las socio-económicas,
cumpliéndose la misma lógica territorial con absoluta prolijidad.

2. La formación social y la formación espacial

(…) “en el presente estadio del desarrollo capitalista, la influencia de sus


determinaciones sobre las formaciones sociales periféricas no sólo se expresa en particulares
relaciones económicas, sociales o políticas, sino que trae aparejada una exacerbación del
carácter desigual y combinado que se manifiesta en formas de organización del espacio muy
peculiares que difieren frecuentemente de los modelos tradicionales” (Sormani, 2009).
Horacio Sormani hace mención a tres formaciones: social, espacial
y regional. El concepto de formación está haciendo referencia al sentido histórico, dinámico,
cambiante, tanto del espacio como de la sociedad y, por ende, de la región.
FORMACIÓN SOCIAL
FORMACIÓN ESPACIAL
FORMACIÓN REGIONAL

Define a la formación social, como la totalidad que expresa la forma en que, en cada
momento histórico, la sociedad humana ha logrado transformar la naturaleza.
En la organización del espacio se ven reflejadas las relaciones de clase de la sociedad
instalada en un determinado territorio, sea en el arreglo de los mismos objetos espaciales
(catedrales, hospitales, cárceles, fábricas, viviendas, etc.) o en el conjunto de los mismos, desde
las áreas residenciales urbanas hasta los usos del espacio agrícola, las redes de transporte y la
estructura misma del espacio nacional.

ESPACIO SOCIAL: relaciones H_H

“(…) el modo como los hombres producen sus medios de vida depende, ante todo, de la
naturaleza misma de los medios de vida con que se encuentran y que se trata de reproducir”
(…) Es “un determinado modo de vida de los mismos. Tal y como los individuos
manifiestan su vida, así son. Lo que coincide, por consiguiente, con su producción, tanto con
lo que producen como con el modo como producen. Lo que los individuos son, depende, por
tanto, de las condiciones materiales de su producción” (Marx, K.; La Ideología Alemana,
1959).

PRIMERA NATURALEZA

SER HUMANO + NATURALEZA= MATERIA SOCIAL APROPIADA

SER HUMANO + HOMBRES

Los factores naturales no llegan a ser esenciales en tanto elementos constituyentes del
mundo social, a menos que el hombre los incorpore al ámbito de su práctica productiva.
Los mares o tierras bajas que representaban obstáculos para la práctica humana,
actualmente son vías de comunicación y tierras de apropiación agropecuaria, industrial o
residencial.

El ESPACIO SOCIAL es también “UNA SEGUNDA NATURALEZA”


Las condiciones naturales operan del mismo modo
que las capacidades fisiológicas.

DIVISIÓN SOCIAL TERRITORIAL DEL TRABAJO

PROCESO DE SEDENTARIZACIÓN HUMANA


Está condicionado por el medio natural

ASENTAMIENTO HUMANO
Producto del proceso de sedentarización
Se vincula con su actividad productiva
Es el resultado de la división social territorial del trabajo
Unidad dialéctica de relaciones humanas y naturales

Por lo tanto, el ASENTAMIENTO HUMANO está determinado por la CONJUNCIÓN


DE UN SITIO, que es elegido por su aptitud para establecer una residencia permanente, con
aquel otro sitio que brinda las mejores condiciones para el desarrollo de una actividad
productiva.

ASENTAMIENTO HUMANO _ DISTANCIA DIARIA _ LUGAR DE


TRABAJO

El ASENTAMIENTO HUMANO está determinado por la producción material. Y por


ser un HECHO SOCIAL implica ser HISTÓRICO, es decir, dinámico, cambiante.

La DIVISIÓN DEL TRABAJO


implica

DIFERENCIACIÓN ESPACIAL DEL PROCESO PRODUCTIVO


que implica

ASIGNACIÓN DE ROLES A LAS ÁREAS Y REGIONES


que implica

PROCESO DE SEDENTARIZACIÓN HUMANA


que implica

FORMACIÓN DE ASENTAMIENTOS

La FORMACIÓN ESPACIAL es el patrón que en cada etapa histórica asume la


organización territorial de los asentamientos.
La estructura general de los asentamientos puede ser DISPERSA o CONCENTRADA.
Y la estructura interna responderá a los diferentes modos de producción:
-fábrica/taller: síntesis del conjunto de relaciones propias del modo de producción
capitalista;
- “chacra”/explotación agrícola: síntesis de los rasgos comunes a la explotación
mercantil simple;
- “estancia”/explotación ganadera: unidad productiva típica del capitalismo agrario.

Los USOS DEL ESPACIO se modifican históricamente por CAMBIOS DE


PRODUCCIÓN o CAMBIOS TECNOLÓGICOS.

El contacto entre sí de los DIVERSOS ASENTAMIENTOS implica el SOPORTE


para el cambio, la circulación de mercancías, y otras formas de comunicación social.

MOMENTOS ESTRUCTURALES MODIFICADOS HISTÓRICAMENTE

DOMINIO TERRITORIAL:
Es el territorio ocupado efectivamente por una FORMACIÓN SOCIAL que ha
establecido su asiento; y organizado su vida colectiva y defensa.

FORMACIÓN ESPACIAL:
Es el patrón de usos del espacio.

FORMACIÓN SOCIAL + FORMACIÓN ESPACIAL =

=UNIDAD DIALÉCTICA=
=MUDABLE Y CONTRADICTORIA

FORMACIÓN ESPACIAL:
- contradicción entre su carácter natural e histórico: ambos planos de la realidad
que deben captarse en forma conjunta.
AL CAMBIAR LA FORMACIÓN SOCIAL como consecuencia de la práctica
revolucionaria de las masas, la FORMACIÓN ESPACIAL asociada se torna obsoleta pero
algunos elementos no desaparecen totalmente, sino que aun degradados, se reintegran con otros
roles.
REGIÓN: es el conjunto relativamente homogéneo de relaciones sociales de
producción, localizado, asociado a un tipo específico de producción, sea éste agrario, industrial,
forestal o minero que se cumple acorde con un dado patrón de división social territorial del
trabajo más elementos superestructurales.

La REGIÓN es el PRODUCTO
DE LA DIVISIÓN SOCIAL TERRITORIAL DEL TRABAJO

La FORMACIÓN ESPACIAL
es la totalidad que expresa las relaciones entre la sociedad humana y el espacio

La NATURALEZA HISTÓRICAMENTE MODIFICADA


es el medio natural de su práctica productiva
que se organiza con ciertas normas históricamente mudables

RELACIÓN HOMBRE-NATURALEZA

RELACIÓN ENTRE HOMBRES

La NATURALEZA O AMBIENTE NATURAL es el presupuesto de toda actividad humana,


objeto de la producción material mediada y transformada por la actividad social, por lo tanto,
mudable en el presente y en el futuro.

El ENTORNO MATERIAL (NATURALEZA) NO ES CONSTANTEMENTE IGUAL, sino


el RESULTADO DE LA ACTIVIDAD DE TODA UNA SERIE DE GENERACIONES

El MODO DE ORGANIZACIÓN DEL ESPACIO denota CARÁCTER HISTÓRICO que


asume la NATURALEZA MEDIATIZADA por la SOCIEDAD
El ESPACIO es el producto material organizado en función de una actividad estructurada a
partir de un conjunto de relaciones sociales dentro de las cuales se inserta, adquiriendo UNA
FORMA, UNA FUNCIÓN, UNA SIGNIFICACIÓN SOCIAL.

La NATURALEZA SOCIAL tiene distinto carácter en cada etapa histórica. Las fuerzas
productivas de la sociedad (incluidas las naturales), se desarrollan a distinto ritmo (lucha de
clases).

La organización del ESPACIO URBANO O RURAL expresa el carácter de la FORMACIÓN


SOCIAL HISTÓRICA asentada en un determinado TERRITORIO, que va asignando ROLES
a los ASENTAMIENTOS y REGIONES en términos de un ESQUEMA DE DIVISIÓN
SOCIAL TERRITORIAL DEL TRABAJO.

CARÁCTER DUAL DE LA PRODUCCIÓN MATERIAL

RELACIÓN TÉCNICO-
NATURAL RELACIÓN HISTÓRICO-
SOCIAL
Hombre-naturaleza
Hombres-hombres

DIVISIÓN DEL TRABAJO ANTAGONISMO ANTAGONISMO


DIVISIÓN DEL
EN FUNCIÓN DEL MEDIO ENTRE LOS DIVERSOS
ENTRE LAS DIFERENTES TRABAJO EN EL SENO
NATURAL GRUPOS Y CLASES
ÁREAS Y REGIONES DE LA SOCIEDAD
SOCIALES

LA ESPECIALIZACIÓN DEL PROCESO PRODUCTIVO


genera CONTRADICCIÓN DE INTERESES

Las CONDICIONES NATURALES constituyen el soporte físico de una compleja estructura


convertida no solo en VALOR DE USO sino también en un VALOR DE CAMBIO
(mercancía).
La FORMACIÓN ESPACIAL es el patrón de organización territorial, apropiado al proceso
productivo.
SATISFACCIÓN DE LAS NECESIDADES

PRODUCCIÓN (Y DISTRIBUCIÓN)
Y CAMBIO
Son ARTICULACIONES de una TOTALIDAD
MODO DE PRODUCCIÓN DOMINANTE
SEGUNDA NATURALEZA: - nueva dimensión como soporte y como escenario.
ESTRUCTURA ECONÓMICA: - fundamento y razón de ser de la sociedad.
SUPERESTRUCTURA: -relaciones de dominación, jurídicas, políticas, etc. que también
toma al ESPACIO como escenario de estas actividades= consolidación de un dominio
territorial cuyos recursos utiliza en su provecho y defiende (diplomacia y guerras), y
mantener su usufructo o pretendiendo la anexión de otros territorios y grupos sociales a
fin de promover la expansión de sus fuerzas productivas.

CAMBIOS EN LAS ASIGNACIONES DE ROLES REGIONALES obligan a


MODIFICAR o READAPTAR las ESTRUCTURAS PREEXISTENTES.
La MODELACIÓN DEL ESPACIO permite identificar FORMAS DE DOMINACIÓN o
EXPLOTACIÓN (COLONIALISMO INTERNO).

ESPACIO:
Condición originaria
Naturaleza transformada
Lugar de paso de los flujos
Subordinación no siempre lograda: naturaleza adaptada a prácticas humanas ajenas a
ese espacio (SUPERESTRUCTURAL)

Las FORMAS que asume la


ORGANIZACIÓN ESPACIAL DE LA SOCIEDAD deben ligarse al MODO DE
PRODUCCIÓN DOMINANTE dentro de una dada FORMACIÓN SOCIAL.

SISTEMA REGIONAL
ESTRUCTURA INTERNA DE LAS DIFERENTES REGIONES
FORMAS DE
INTERCONEXIÓN

ROL DE CADA
UNO DE LOS
ASENTAMIENTOS

FORMAS DE FORMAS DE
INTERCONEXIÓN INTERCONEXIÓN

R R

CADA ETAPA HISTÓRICA

TERRITORIO OCUPADO EFECTIVAMENTE POR UNA FORMACIÓN SOCIAL

FORMACIÓN ESPACIAL (patrón de usos del espacio)

DOMINIO TERRITORIAL (puede o no coincidir con el espacio nacional)

FORMACIÓN: - designa algún tipo de desarrollo, y proceso, y también el resultado o producto


de ese proceso en la medida que constituye el resultado de acumulaciones del pasado.

FORMACIÓN ESPACIAL: CONTINENTE de un CONTENIDO, de una SUSTANCIA= LA


SOCIEDAD HUMANA que DETERMINÓ su ESTRUCTURA.

FORMACIÓN ESPACIAL: se puede observar en mapas.

“En el presente estadio de desarrollo del capitalismo, la influencia de sus


determinaciones sobre la configuración de las formaciones sociales históricas semi-coloniales,
neocoloniales o dependientes no se limita a las relaciones económico-sociales y político-
ideológicas, sino que trae aparejada una exacerbación de su carácter desigual y combinado
que se expresa en formas de organización del espacio muy particulares, que difieren de los
modelos tradicionales. Este tipo de desarrollo se extiende y ahonda, generalizándose, no sólo
entre los países en los sectores productivos, entre la agricultura y la industria; entre los
diferentes asentamientos humanos y entre las regiones, y en el seno de las clases sociales,
limitando desde el interior de las formaciones sociales históricas las posibilidades de su
crecimiento dentro del marco impuesto por el modo de producción capitalista.
Las disparidades naturales fueron las determinantes del intercambio primitivo y
tuvieron la virtud de ampliar los límites del medio ambiente humano al favorecer,
consiguientemente, el aumento de sus necesidades y su nivel de satisfacción. Pero la
posibilidad del intercambio, cuando éste implica un desplazamiento de personas y de artículos
por la superficie terrestre, también está condicionado por las condiciones naturales que
aparecen entorpeciendo o facilitando tales movimientos, pero exigiendo siempre la utilización
de diferentes dosis de energía humana y de medios materiales para llevarlos a cabo. El grado
de adelanto de las fuerzas productivas determinará, finalmente, si un accidente geográfico o el
simple desplazamiento por el territorio es o no viable y en qué condiciones. Actualmente es
dable reconocer que la moderna tecnología ha transformado ciertos obstáculos naturales en
vías; al facilitar los desplazamientos ha ido reduciendo la importancia de las diferenciaciones
naturales como determinantes de la división del trabajo.
Si la división del trabajo dentro de la sociedad tiende a asignar a diversos organismos
o grupos roles precisos dentro del proceso productivo, lo mismo ocurre en el plano territorial
con las diversas áreas y regiones y, del mismo modo, la producción material se va
diferenciando espacialmente. Así, la división social territorial del trabajo constituye una forma
específica, un momento de la división del trabajo dentro de la sociedad humana en su conjunto,
acarreando no solo una especialización del proceso productivo sino una contradicción de
intereses y un antagonismo entre los diversos grupos y clases sociales y entre las diferentes
áreas y regiones.
Las “condiciones apropiadas” del medio natural son la base de sustentación para el
proceso de sedentarización del hombre. Pero esas “condiciones apropiadas” estarán dadas,
tanto por los caracteres cualitativos y cuantitativos de los recursos naturales existentes en un
sitio dado como por el grado de desarrollo de las fuerzas productivas que permitan
aprovecharlos. Es decir, que serán las condiciones naturales originarias junto con las
condiciones sociales históricamente logradas y apropiadas, las que permitieran a la
comunidad asentarse, adaptando o recreando el territorio a las nuevas necesidades.
Las condiciones naturales que en un momento impusieron una determinación casi
absoluta para la elección de un asentamiento, se convierten con el tiempo en el mero soporte
físico de una compleja estructura producida por el hombre y convertida no solo en un valor de
uso sino también en un valor de cambio, en una mercancía.
El patrón que, en cada etapa asume la organización territorial de esos asentamientos
constituye uno de los elementos de la FORMACIÓN ESPACIAL.
Con la división social territorial del trabajo aparece la circulación y el cambio en el
espacio.
Los usos del espacio se modifican históricamente aun cuando no sea siempre fácil
reconocer esos cambios, ya que pueden poseer un carácter cualitativo, en función del grado de
adaptación y de modelado del espacio que el hombre haya logrado en cada momento de su
desarrollo, y del tipo de relaciones sociales imperantes que permitieron apropiarse de nuevas
fuerzas productivas, utilizándolas en su provecho. Con la diferenciación espacial de la
producción, hay espacios que se asignan a las relaciones de cambio y circulación: puertos,
carreteras, etc.” (Sormani, H., op. cit.).

2.1.Los Momentos Superestructurales

La actividad económica enderezada a la producción de medios materiales constituye la


base que da coherencia y significado al edificio social y la que representa el mayor nexo entre
el hombre y la naturaleza.
La producción une:
- CONDICIONES GEOGRÁFICAS
- POTENCIAL NATURAL
- ACUMULACIONES CULTURALES DEL PASADO
- TERRITORIO

Pero sobre la estructura económica de la sociedad, que es su fundamento y razón de ser


se eleva un edificio jurídico y político: la SUPERESTRUCTURA DE LA SOCIEDAD.
Ésta tiene que ver con la génesis de las formaciones sociales y la correspondiente
apropiación de una porción de la superficie terrestre y la consolidación de un dominio territorial
cuyos recursos utiliza en su provecho por todos los medios posibles (la diplomacia, la guerra).

FORMACIÓN SOCIAL
FORMACIÓN ESPACIAL
UNIDAD DIALÉCTICA por lo tanto mudable y contradictoria,
que expresa las condiciones de desarrollo del proceso de humanización
de la naturaleza.

PERIFERIA CAPITALISTA

Desarrollo desigual y combinado

ENTRE PAÍSES
AL INTERIOR DE CADA PAÍS
DENTRO DE LOS SECTORES PRODUCTIVOS
ENTRE LA AGRICULTURA Y LA INDUSTRIA
ENTRE LOS DIFERENTES ASENTAMIENTOS HUMANOS
ENTRE LAS REGIONES
ENTRE LA CIUDAD Y EL CAMPO
EN EL SENO DE LAS CLASES SOCIALES

3. Las relaciones centro-periferia

Si bien durante más de medio siglo, la CEPAL ha sido la principal fuente mundial de
información y análisis sobre la realidad económica y social de América Latina y el Caribe, y a
través de los diferentes decenios pueden marcarse cuatro rasgos, como el enfoque histórico-
estructuralista, la inserción internacional, el análisis de los condicionantes estructurales internos
(del crecimiento y del progreso técnico, y de las relaciones entre éstos, el empleo y la
distribución del ingreso), y el análisis de las necesidades y posibilidades de acción estatal, la
riqueza del método cepalino reside en haberse basado en la oposición entre “centro” y
“periferia”. A partir de la abstracción teórica generada por Prebisch, el método sirvió para
afirmar que la inserción de América Latina en la economía mundial era a nivel de periferia,
produciendo bienes y servicios con una demanda internacional poco dinámica, y a la vez
importadora de bienes y servicios con una demanda interna en rápida expansión y asimiladora
de patrones de consumo y tecnologías adecuadas para el centro, pero inadecuadas para la
disponibilidad de recursos y los niveles de ingreso de la periferia; además del modo singular de
industrialización, con sus consecuentes diferencias en la forma de introducir el progreso técnico
y crecer, así como la absorción de la fuerza de trabajo y la distribución del ingreso.
A modo de ejemplo de lo que se ha enunciado precedentemente, podríamos considerar
la existencia de periferias de periferias. Un caso paradigmático es el del área algodonera del
Chaco que constituye una periferia dentro del mapa provincial, siendo a la vez el Nordeste en
su conjunto, una periferia de la región pampeana, que a la vez pertenece a un país
latinoamericano periférico a nivel mundial.

4. Los modos de producción

Modo de producción es, según la teoría marxista, el conjunto de las fuerzas productivas
y las relaciones que las personas de una determinada sociedad establecen entre sí para producir
los bienes necesarios para su desarrollo. El término fue utilizado por primera vez en el folleto
inédito La ideología Alemana de Karl Marx y Friedrich Engels.
Este modo de producción no debe considerarse solamente en el sentido de la
reproducción de la existencia física de los individuos. Es más bien, un determinado modo de la
actividad de estos individuos, un determinado modo de manifestar su vida, un determinado
modo de vida… Los individuos son tal y como manifiestan su vida. Lo que son coincide, por
consiguiente, con su producción, tanto con lo que producen como con el modo de cómo
producen. Lo que los individuos son depende, por tanto, de las condiciones materiales de su
producción. Esta producción sólo aparece al multiplicarse la población, y presupone, a su vez,
un trato entre los individuos. La forma de este intercambio se halla condicionada, a su vez, por
la producción (Karl Marx y Friedrich Engels, La ideología alemana, 1845).
Las relaciones de producción que las personas establecen entre sí se expresan,
jurídicamente, en determinadas relaciones de propiedad de los medios de producción.

4.1. Los distintos modos de producción en la teoría marxista

Marx ha propuesto, a modo de esquema, la siguiente sucesión de modos de producción


a través de la historia:
4.1.1. Comunismo primitivo

Por comunismo primitivo, comunidad primitiva, o modo de producción primitivo, se


entiende, en la teoría marxista, una etapa del desarrollo de las formaciones económico-sociales,
de los medios de producción (la tierra y las herramientas rudimentarias) y la distribución
igualitaria de los productos. Es el primero de los modos de producción que Marx definió como
estadios de la evolución de la historia económica.
En el comunismo primitivo los seres humanos estaban organizados en grupos dedicados
a la caza, la pesca y recolección. La actividad productiva humana se basaba en la cooperación
simple. Para Marx, este tipo de asociación cooperativa era una necesidad inexorable debido al
desamparo en que se encontraba el individuo aislado en la naturaleza. Como consecuencia de
su modo de vida, el humano primitivo no concebía la posibilidad de la propiedad privada de la
tierra y de los demás medios de producción; solo algunos instrumentos y bienes le pertenecían
en propiedad personal.
El desarrollo primitivo de las fuerzas productivas no creaba excedente alguno después
de cubrir las necesidades más perentorias, por lo tanto, era imposible la acumulación de bienes.
Como el desarrollo de las fuerzas productivas era insuficiente para que el trabajo excedentario
de unas personas liberara a otras de la necesidad de trabajar, también era imposible la
explotación. Al ser una sociedad basada en el autoconsumo, todas sus relaciones sociales eran
comunitarias, y al no ser una sociedad dividida en clases sociales no era necesario ninguna clase
de Estado para su regulación. Este modo de producción fue sustituido, dependiendo del lugar o
de la época, bien por el modo de producción esclavista o bien por el modo de producción feudal,
ya fuera por desarrollo propio o como resultado de la conquista. La división del trabajo se hacía
de acuerdo a la edad y al sexo, lo cual significa que los niños y las mujeres realizaban trabajos
que su estado físico les permitiera.
Esta forma de vida corresponde al periodo que los prehistoriadores han denominado
Paleolítico, y no fue sino con el desarrollo de la agricultura y la ganadería, realizado durante el
Neolítico que permitió una primera especialización y división social del trabajo. Este es el caso
de los pueblos originarios antes de la opresión ejercida por el hombre blanco.

4.1.2. Modo de producción esclavista


El modo de producción esclavista es propio de un nivel de desarrollo de las fuerzas
productivas netamente preindustrial. El capital es escaso, no habiendo incentivos para la
inversión aunque se amasen inmensas fortunas (se acumulan objetos de lujo, propiedades
inmuebles y esclavos, no interesando los bienes de producción como maquinaria). Tierra y
trabajo son las fuerzas productivas fundamentales.
En el modo de producción esclavista, la fuerza de trabajo está sometida a esclavitud, es
decir: no es propiedad de los trabajadores que por tanto no tienen que ser retribuidos (los
proletarios del modo de producción capitalista poseen al menos su fuerza de trabajo y han de
ser retribuidos con el salario). La reproducción de la fuerza de trabajo queda así como
responsabilidad del propietario del esclavo, que por su propio interés alimenta e incluso
incentiva a la reproducción biológica.
Las relaciones sociales están basadas en la propiedad y el derecho, que convierten a unas
personas en libres y otras en esclavas. El interés en la mejora de la producción corresponde
únicamente al propietario, pues el esclavo no se beneficia ni se perjudica directamente por una
mejor o peor cosecha.
No hay que confundir modo de producción esclavista con esclavitud, que continuó
existiendo y hoy en día reaparece en algunos lugares del mundo. Por otro lado, hay que dejar
claro que distintos modos de producción pueden coexistir al mismo tiempo combinándose en
una formación económico-social concreta.

4.1.3. Modo de producción asiático

En el concepto de despotismo oriental Marx establece que la comunidad misma


representa la primera gran fuerza productiva. Las condiciones objetivas impusieron la unidad
de las comunidades para empresas comunes como las canalizaciones de agua, las vías de
comunicación e intercambio o la guerra para asegurar un territorio para la subsistencia. Esta
unidad en la medida en que se perpetró y se hizo indispensable, apareció distinta y por encima
de las muchas comunidades, convirtiéndose como tal en el verdadero propietario de todo. La
unidad suprema terminó encarnada en el déspota (Faraón, Emperador, Zar, Inca, Rey, tlatoani),
gran padre de numerosas comunidades, al que se liga de una u otra manera con la divinidad. De
esta manera la unidad suprema sistematiza la apropiación del plusproducto, que toma la forma
de tributo o de trabajos colectivos para el déspota y la élite.
4.1.4. Modo de producción feudal

Se trata de un modo de producción característico de la Europa medieval, en que la


actividad central era la agropecuaria con nuevas técnicas y con una relación de servidumbre
hacia los Señores Feudales, quienes eran dueños de las tierras.
Los siervos conceden al Señor trabajo gratuito, retribuciones en especie, que él muchas
veces elige, oro o plata. Esto provoca una mayor acuñación de moneda y el fluir del comercio.
Aparecen las primeras grandes fortunas y los Señores hacen ostentación de sus bienes.
El crecimiento de las tierras labradas es obra en su mayor parte de los campesinos y no
tanto de los Señores. Conforme éstos se habitúan a recibir las retribuciones en moneda o
especie, van abandonando el deseo de acrecentar los latifundios en beneficio de cederlos en
arriendo. El Señor controla muchas veces la venta de materiales y aperos de labranza a sus
campesinos, lo que le garantiza un control importante sobre los siervos. Los campesinos
exigirán, y obtendrán muchas veces, la fijación de una retribución arbitraria al Señor, que
consistirá en una aportación fija y otras variables en función de los resultados de las cosechas
del año.
A partir del siglo X los excedentes facilitan el comercio más allá de las fronteras del
señorío. Las actividades comerciales permiten que surja una incipiente burguesía, los
mercaderes, que en su origen eran campesinos que aprovechaban los tiempos en los que no era
necesario el trabajo de la tierra para comerciar, y que deberán realizar su trabajo pagando
igualmente una parte de sus beneficios en forma de tributos a los Señores. El lujo al que aspiran
los Señores con el incremento de las rentas, favorece la aparición cada vez más frecuente de
artesanos.

4.1.5. Modo de producción capitalista

El modo de producción capitalista es uno de los que Marx definió como estadios de la
evolución de la historia económica caracterizados por un determinado nivel de desarrollo de las
fuerzas productivas y una forma particular de relaciones de producción.
La definición marxista del modo de producción capitalista se centra en el
establecimiento de unas relaciones de producción basadas socialmente en la existencia de
proletarios que no poseen medios de producción ya que pertenecen a los capitalistas, con los
que realizan un contrato de trabajo, mediante el cual venden su fuerza de trabajo, que es la única
propiedad que tienen, a cambio de un salario, como única manera de conseguir los medios
necesarios para su subsistencia. Es el capitalista el que organiza la producción, que en su
aspecto técnico está determinada por un nivel de desarrollo económico propio de la época
industrial, en que el capital ha adquirido el predominio sobre la tierra, que era la fuerza
productiva dominante en los modos de producción anteriores (esclavismo y feudalismo).
La clave de la concepción marxista del capitalismo está en los conceptos de alienación
(el hecho de que el proceso y el producto del trabajo devienen ajenos al trabajador); y de
plusvalía, o sea, el valor incorporado por el trabajador asalariado al producto que excede en
valor al que representa el salario (teoría del valor-trabajo). En esa diferencia de valor estriba
para Marx el beneficio del capitalista, puesto que es éste el que realiza el valor de lo producido
mediante la venta en el mercado, que genera un precio que ha de ser superior al costo de
producción si es que la actividad económica ha sido exitosa.
La apariencia libre del contrato entre capitalistas y trabajador (que según la teoría liberal
habría de ser individual y sin interferencias de negociación colectiva de sindicatos o legislación
protectora del Estado) apenas enmascara la presión a la que está sometido éste por la existencia
de un ejército industrial de reserva, que es como Marx denomina a los desempleados que están
dispuestos a sustituirle. No es original de Marx, sino de Ricardo y otros pensadores liberales,
la idea de que el funcionamiento libre del mercado somete a los salarios a una ley de bronce
que impide que asciendan más allá del límite de la subsistencia. Los proletarios deben de cuidar
ellos mismos de la reproducción de la fuerza de trabajo.
La crítica marxista al capitalismo sostiene que este modo de producción contiene
contradicciones inherentes que provocan las crisis cíclicas. Karl Marx, en su obra El Capital,
fundamenta esta opinión aduciendo que cada vez es más difícil para el capitalista valorizar su
capital. Las relaciones de competencia a las que está sujeto el capitalista, obligan a éste a
implementar de manera constante y creciente nueva y mejor maquinaria para incrementar la
productividad del trabajo y, de esta forma, vender sus mercancías a precio más bajo que sus
competidores directos. De este modo, disminuye el componente "trabajo vivo" (la contratación
de trabajadores) dando lugar a lo que Marx denomina "ejercito industrial de reserva" es decir,
una considerable parte de la clase obrera que queda a la espera de un trabajo. Esta espera forzosa
que impone el capitalismo a la clase obrera, hace que este "ejercito industrial de reserva" se
convierta, por un lado, en una importante masa de pobres e indigentes, y, por otro lado, en causa
de la imposibilidad de que el salario ascienda rápidamente (debido al excedente de oferta de
fuerza de trabajo).
Este es el caso de la agricultura en los países periféricos, donde tanto el ejército
industrial de reserva como la posibilidad de que la fuerza de trabajo sea reemplazada por la
maquinaria, sostienen al salario en valores de mínima subsistencia, por lo cual ingresa en el
proceso todo el grupo familiar. Por otra parte, tanto por agotamiento de los suelos sobre-
explotados como por la variación de los precios en el mercado, hacen que los dueños de los
medios de producción, utilicen agrotóxicos para sostener los márgenes de ganancias.

4.2. Modos de producción según Laclau

Para Ernest Laclau, los modos de producción se definen a partir de cinco preguntas
básicas:
¿Qué se produce?
¿Dónde se produce?
¿Cómo se produce?
¿Quién produce?
¿Para quién se produce?

¿Qué se produce?, estaría refiriéndose al producto central generado, que puede ser
tanto de carácter agropecuario como forestal, pesquero o minero.
¿Dónde se produce?, determinaría el espacio geográfico o territorio.
¿Cómo se produce?, haciendo referencia a cuestiones tecnológicas, que puede ser con
una alta participación de mano de obra con técnicas tradicionales muy rudimentarias, o bien
con tecnología de última generación.
¿Quién produce?, presentándose aquí una doble significación. Por un lado, las
empresas o productores individuales que administran y comercializan, y por otro, los
trabajadores que llevan a cabo la tarea específica en el campo.
¿Para quién se produce?, buscando definir los mercados, que podrían ser tanto de
carácter nacional como internacional.

5. De lo rural a lo urbano
La separación entre el espacio rural y el urbano depende exclusivamente de
delimitaciones arbitrarias, basadas en el tamaño de los municipios o en la participación
porcentual de la población en actividades primarias. Sin embargo, podríamos diferenciar esos
espacios, a partir del valor de la tierra cuando se trata de la expansión de un centro urbano.
Pero en cuanto a los hábitos, actitudes, valores y demandas, como en cuanto a las
estructuras y relaciones de producción, no podemos establecer diferencias en la actualidad.
Mientras que la sociedad industrial se definió como un proceso civilizatorio, uno de
cuyos elementos fundamentales fue la urbanización, lo rural nunca se ha definido, quedando
como residuo de lo que aún no es urbano.
Cuando Henri Lefebvre habla de la urbanización del mundo campesino, quiere decir
que lo urbano ya no está únicamente en las ciudades; y ese proceso que se veía como de
colonización cultural, es en realidad la extensión del núcleo civilizatorio –capitalista e industrial
de los siglos XIX y XX a la totalidad del territorio social.
La urbanización es un proceso indisociable de la revolución industrial y el capitalismo,
de forma que únicamente allí donde las formas de intercambio y de relación no sean de tipo
capitalista, podríamos hablar tal vez de cultura rural, es decir preindustrial, y en ese sentido,
pre-capitalista. Pero según Lefebvre, allí donde triunfan el intercambio de mercancías, el dinero,
la economía monetaria y el individualismo, la comunidad se disuelve, es reemplazada por la
exterioridad recíproca de los individuos y el “libre contrato de trabajo”.
En realidad, esta tesis es de Marx, quien en el Manifiesto Comunista afirma que el
capitalismo “ha sometido el campo a la ciudad”. Y no solo por el mero efecto de la
concentración demográfica, sino también por la ruptura de las relaciones sociales y de
producción tradicionales. Por lo tanto, ¿cuál es el sentido de hablar hoy en día de lo rural y lo
urbano como categorías con vida propia?
Por lo tanto, no mantendremos en este trabajo las ficciones epistemológicas de geografía
rural y geografía urbana, como meras nominaciones al tamaño demográfico. La dicotomía no
nos sirve, y si bien pueden existir gradaciones, no es sencillo determinarlas, y tampoco
necesario. Ya el aislamiento informacional casi no existe, tanto por los medios de comunicación
masivos como por las redes de telefonía e internet.
Lefebvre es consciente de que este proceso en absoluto deja fuera a los supuestos
rurales: "¿El campo?: ya no es más -nada más- que 'los alrededores' de la ciudad, su horizonte,
su límite.” ¿Y las gentes de la aldea? Desde su punto de vista ya no trabajan para los señores
terratenientes. Ahora producen para la ciudad, para el mercado urbano. Y si bien saben que los
negociantes de trigo o madera los explotan, no obstante, encuentran en el mercado el camino
de la libertad. Información, cultura, poder de decisión, son en suma los elementos claves en el
proceso de urbanización.

Sin conclusiones

Por tratarse de un ensayo donde solamente se enuncian diversas teorías, este trabajo
carece de conclusiones. Simplemente se invita a docentes e investigadores a aplicar estos
marcos conceptuales a la enseñanza y a la investigación en Geografía Económica.

BIBLIOGRAFÍA

LACLAU, Ernest (1969) "Modos de producción, sistemas económicos y población excedente.


Aproximación histórica a los casos argentino y chileno", Revista Latinoamericana de Sociología,
Buenos Aires, No 2
LEFEBVRE, Henri (1969), El derecho a la ciudad, Península, Barcelona
----------------------- (1972), La revolución urbana, Alianza, Madrid
----------------------- (1975), De lo rural a lo urbano, Península, Barcelona
MARX, Karl (1973) “El Capital”. Tomo I. Editorial Cartago. Buenos Aires.
---------------- (1959) “La Ideología Alemana”. Pueblos Unidos. Montevideo.
SORMANI. Horacio (1977) “Formación Social y Formación Espacial. Hacia una dialéctica de los
asentamientos humanos” en Estudios Sociales Centroamericanos, Nro 17, San José de Costa Rica.
--------------------------- (2009) “Teoría de las Formaciones Espaciales: un aporte metodológico”, en
Liberali, A. y Gejo, O. (directores) La Argentina como Geografía. Políticas Macroeconómicas y
Sistema Regional (1990-2005). Universidad Nacional de Mar del Plata/ Centro de Estudios
Alexander von Humboldt/ Unión Geográfica de América Latina/ Red Latinoamericana de Estudios
Geográficos de la UGI. Buenos Aires, Argentina; pp.27-58.
www.cepal.org.ar

También podría gustarte