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Atención Primaria. R.J. Romero de Castilla Gil et al.–Adolescentes y fuentes de información de sexualidad:
Vol. 27. Núm. 1. Enero 2001 preferencias y utilidad percibida
Personas y métodos Figura 1. Información recibida en el centro educativo sobre distintos temas.
Se diseñó un estudio observacional, des-
criptivo transversal o de prevalencia. lescentes, y el lugar donde preferirían reci-
La población diana la constituyó la totali- xuales: 161 varones (44,4%; IC, 39,2-
bir la educación sexual. Por último, nos pa-
dad de los alumnos escolarizados en los reció de interés estimar cuántos adolescen- 49,5) creen que la información recibi-
cursos: segundo de Bachillerato Unificado tes conocen campañas de prevención de en- da en el centro es mucha o bastante,
Polivalente (BUP), cuarto de Enseñanza fermedades de transmisión sexual en este frente a 127 mujeres (21,5%; IC,
Secundaria Obligatoria (ESO), Curso de grupo etario y quiénes conocen centros de 18,2-24,8) de mujeres que piensan
Orientación Universitaria (COU), segun- orientación familiar o educación sexual. igual (χ2 = 4,96; p = 0,025).
do de Bachillerato creado por la Ley de Según el tipo de centro, sólo encon-
Ordenación General del Sistema Educati- tramos diferencias cuando los alum-
vo (LOGSE) y segundo curso de segundo Análisis
nos valoran la información recibida
grado de Formación Profesional (FP) en la Se procedió a la codificación y posterior
provincia de Córdoba. El total de indivi- sobre las enfermedades de transmi-
procesamiento, y el tratamiento estadísti-
duos de esta población, obtenida según lis- co constó de los siguientes apartados: sión sexual (ETS); así, los alumnos de
tados oficiales proporcionados por la Dele- centros privados valoran ésta como
gación de la Consejería de Educación, fue 1. Depuración de los datos, desechándose mucha o bastante en un 22,8%, por-
de 7.853 alumnos. los cuestionarios con aportaciones mani- centaje que se eleva al 30,2% en cen-
El tipo de muestreo fue aleatorio, polietá- fiestamente contradictorias o con notables tros públicos (n = 952; χ2 = 3,9; p =
pico. La unidad primaria fue el aula del omisiones de respuesta. Corrección de los 0,048).
colegio. errores en la codificación de datos me- La valoración realizada por los alum-
Para la obtención de datos se empleó un diante análisis de valores fuera de línea nos acerca de la información recibida
cuestionario estructurado, precodificado, (outliers). Como consecuencia, se anularon
autocumplimentado por el alumno, garan- no varía cuando se distribuye en fun-
7 cuestionarios, procesándose 955.
tizando el anonimato. Se elaboró basándo- 2. Análisis descriptivo de los datos, me- ción de los habitantes del lugar de
se en otros previamente validados7,8. diante el cálculo de los índices univarian- residencia.
La encuesta fue pasada a los participantes tes (medidas de tendencia central y de dis-
en horas de clase en coordinación con el persión para variables cuantitativas: me- Personas accesibles
profesor, y el mismo día a toda la muestra dia, desviación estándar [DE]; frecuencias
del centro para evitar sesgos de respuesta. absolutas y relativas en porcentaje para Cuando exploramos con quién creen
Se distribuyeron los cuestionarios a todos las variables cualitativas). los adolescentes que pueden hablar
los alumnos presentes en el aula, con el fin 3. Estadística inferencial, con cálculo de abiertamente de sexualidad, obtene-
de mantener la confidencialidad y evitar estimaciones puntuales y con intervalo de
sesgos de selección (que fueran los más mos los siguientes resultados (tabla 1)
confianza (IC) del 95% para las variables
motivados con el tema o los más informa- principales, y aplicación de tests de hipó- El tipo de centro sólo se asocia a dife-
dos los que contestaran). Previamente a la tesis para variables cualitativas (χ2 de rencias significativas cuando se trata
distribución del cuadernillo, se realizó una Pearson con corrección de Yates o prueba de hablar con amigos/as. En los cen-
presentación del encuestador y del tema. exacta de Fisher cuando fue necesario). tros privados, 147 alumnos (86,5%)
El número total de encuestas recogidas manifiestan poder hablar abierta-
ascendió a 962. mente de sexualidad con sus amigos.
El cuestionario estudió la percepción que Resultados
Este porcentaje en los centros públi-
tienen nuestros adolescentes de la infor-
cos es del 91,8% (n = 703) (χ2 = 4,69;
mación que han recibido en su centro de
estudios sobre temas de interés en educa- Información recibida en el centro p = 0,03).
ción sexual. También exploramos con
quién pueden hablar abiertamente de se- Es valorada por los alumnos como se Fuentes fundamentales
xualidad, sus fuentes fundamentales de in- muestra en la figura 1. y su utilidad
formación de sexualidad y a cuál de esas La distribución según el género sólo
fuentes atribuyen mayor utilidad. Obtuvi- arroja diferencias significativas para Los alumnos identifican como sus
mos las instancias predilectas por los ado- la información sobre relaciones se- fuentes informativas fundamentales
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Vol. 27. Núm. 1. Enero 2001 preferencias y utilidad percibida
TABLA 1. Personas con las que los adolescentes piensan que pueden hablar La forma en la que preferirían reci-
abiertamente de sexualidad. bir la educación sexual se encuentra
Sí No Total dividida; así, a algo más del 48% de
n (%) n (%) n la muestra les daría igual recibirla
de forma individual o grupal, mien-
Padre 157 (17,4) 747 (82,6) 904
tras que un 38% preferiría recibirla
Madre 280 (30,6) 635 (69,4) 915 por grupos.
Hermanos 367 (40,5) 540 (59,5) 907
Amigos 850 (90,8) 86 (9,2) 936 Discusión
Pareja 704 (80,5) 170 (19,5) 874
La información recibida en los cen-
Profesores 167 (18,7) 725 (81,3) 892 tros educativos, a juicio de los alum-
Médicos 453 (50,5) 444 (49,5) 897 nos, se focaliza en torno al sida, aun-
Sacerdote 79 (8,9) 807 (91,1) 886 que incluso en este tema sólo el 56%
Con nadie 37 cree que tal información sea bastan-
te o mucha. Si bien no creemos rea-
lista en nuestro entorno defender la
tesis de que la educación sexual ten-
ga la consideración de cualquier
30 asignatura, sí nos inclinamos a pen-
sar que esta creencia de los educan-
26% dos debe ser tenida en cuenta en el
25 24%
diseño de las temas transversales de
los currículos docentes.
20 18% Las campañas de prevención de ETS
Porcentaje
14 48
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15
12% cial por muchos autores, y estos re-
sultados parecen sugerir que esta in-
10 9% fluencia está facilitada por su accesi-
7% bilidad, a pesar de preferir otras
5% fuentes que encuentran más recóndi-
5 4%
tas. La repercusión puede traducirse
en errores sobre el propio riesgo, que
0 suele ser minimizado por el adoles-
os
cente, y actitudes poco favorables ha-
tas res igo
s os dre /TV d re
vis so dic Ma ne an Pa cia el uso de preservativos, si los
Re rof
e Am Mé Ci rm
P He amigos están poco o mal informa-
dos5,14-16. Esto es favorecido por una
percepción baja de la posibilidad de
Figura 3. Percepción de la utilidad de la información recibida. enfermar entre el grupo de allegados,
común entre los jóvenes17. Pero un
entrenamiento adecuado de los com-
pañeros, según algún trabajo, puede
40 ser una herramienta adecuada para
la toma de conductas menos nocivas.
35 34% 33% Esta es la base de los programas edu-
cativos one-on-one o peers-education
30
en países anglosajones18-20. En el
Porcentaje
49 15
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Vol. 27. Núm. 1. Enero 2001 preferencias y utilidad percibida
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dres, dificultad de negociar la angus- sus hijos sobre sexualidad de forma villa: Junta de Andalucía, Consejería de
tia y demandas de aquellos preser- creciente durante la última década. Salud, 1993.
vando la intimidad del adolescente, Esta demanda es recogida cada vez 9. Feigenbaum R, Weinstein E, Rosen E.
falta de tiempo para dedicar a la en- más frecuentemente, con fines co- College student´s sexual attitudes and
trevista, ausencia de programas con merciales, en publicaciones periódi- behaviors: implications for sexuality
directrices explícitas y difícil compe- cas a las que, en ausencia de fuentes educations. J Am Coll Health 1995; 44:
tencia con temas más tradicional- oficiales, cada vez más recurren los 112-118.
10. Forrest JD, Silverman J. What public
mente aceptados, como la educación padres24. Existen estudios que en-
school teachers teach about preventing
en factores de riesgo cardiovascu- cuentran la comunicación con las fi- pregnancy, AIDS and sexually transmit-
lar22. Pero también los jóvenes de- guras parentales como un factor de ted diseases. Fam Plann Perspect 1989;
mandan información, y prefieren que protección contra conductas de ries- 21: 65-72.
el médico inicie la discusión, hecho go sexual25-27, y también que aque- 11. Majer LS, Santelli JS, Coyle K. Adoles-
que no es frecuente23. llos que intentan aumentar sus for- cent reproductive health: roles for school
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